i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no...

52
Diciembre 1976 Año XXIX Precio : 2,80 francos franceses -*«* r^ l ^ >^ Una ventana abierta al mundo i Correo ira =. ^^~ ^S M * ^^ ^-^ LOS ESCITAS nómadas y orfebres de las estepas A - * + .<**.*

Transcript of i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no...

Page 1: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Diciembre 1976

Año XXIX

Precio : 2,80francos franceses

-*«*

r^ l ^ >^ Una ventana abierta al mundo

i Correoira=. ^^~ ^S M * ^^ ^-^

LOS ESCITASnómadas y orfebresde las estepas A

-

*

+ .<**.*

Page 2: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

TESOROS

DEL ARTE

MUNDIAL

Grecia

El santo con cabeza de perroNumerosas son las leyendas que se han forjado en torno a San Cristóbal : que debe su nombre(del griego christophoros, « portador de Cristo ») al hecho de haber ayudado al Señor a cruzar unrío; que era un gigante con cabeza de perro que adquirió forma humana después del bautismo;que fue un hombre sumamente hermoso que vivió en el siglo III. Según esta última leyenda, SanCristóbal, continuamente importunado por las mujeres, pidió a Dios que le liberara de semejanteasedio, y el milagro se produjo : en lugar de su bello rostro, las mujeres sólo vieron en adelanteuna cabeza de perro. Y así se le ha representado frecuentemente, como en este fresco pintadoen 1779 por un artista griego en una iglesia bizantina del siglo XIII, en Lindos, pequeña ciudadde la isla de Rodas.

Foto O Hannibal Slides. Atenas

Page 3: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

ElUNES Correo

DICIEMBRE 1976 AÑO XXIX

PUBLICADO EN 15 IDIOMAS

Español Arabe Hebreo

Inglés Japonés Persa

Francés Italiano PortuguésRuso Hindi Neerlandés

Alemán Tamul Turco

Publicación mensual de la UNESCO

(Organización de las Naciones Unidas para laEducación, la Ciencia y la Cultura)

Venta y distribuciónUnesco, Place de Fontenoy, 75700 París

Tarifa de suscripción anual :28 francos.

Tapas para 1 1 números : 24 francos.

Los artículos y fotografías que no llevan el signo © (copy¬right) pueden reproducirse siempre que se "haga constar"De Et CORREO DE LA UNESCO", el número del quehan sido tomados y el nombre del autor. Deberán enviarsea EL CORREO tres ejemplares de la revista o periódicoque Tos publique. Las fotograflas reproducibles serán faci¬litadas por la Redacción a quien las solicite por escrito.Los artículos firmados no expresan forzosamente la opi¬nión de la Unesco o de la Redacción de la revista. En

cambio, los títulos y los pies de fotos son de la incum¬bencia exclusiva de esta última.

Redacción y Administración :

Unesco, Place de Fontenoy, 75700 París

Director y Jefe de Redacción :

Sandy Koffler

Subjefes de Redacción :

René Caloz

Olga Rodel

Redactores Principales :

Español : Francisco Fernández-SantosFrancés : Jane Albert Hesse

Inglés : Ronald FentonRuso : Victor Goliachkov

Alemán : Werner Merkli (Berna)Arabe : Abdel Moneim El Sawi (El Cairo)

Japonés : Kazuo Akao (Tokio)Italiano : Maria Remiddi (Roma)

Hindi : Krishna Gopal (Delhi)Tamul : M. Mohammed Mustafa (Madras)

Hebreo : Alexander Broido (Tel Aviv)

Persa : Fereydun Ardalan (Teherán)Portugués : Benedicto Silva (Río de Janeiro)Neerlandés : Paul Morren (Amberes)Turco : Mefra Telci (Estambul)

Redactores :

Español : Jorge Enrique AdoumFrancés : Philippe OuannèsInglés : Roy Malkin

Ilustración : Anne-Marie Maillard t

Documentación : Christiane Boucher

Composición gráfica : Robert Jacquemin

La correspondencia debe dirigirseal Director de la revista.

2^

S o>

Página

EL MUNDO ESCITA

Una antiquísima culturaen las estepas de Europa y de Asiapor Boris B. Piotrovski

9 UN CRONISTA GRIEGO NOS HABLA DE LOS ESCITAS

La arqueología actual confirmalo que Herodoto escribía hace 2.500 añospor laroslav V. Domanski

15 LA LEYENDA DEL REY TARGUITAOS

EN TRES VASOS ESCITAS

por Dimitri S. Rayevski

17 CUATRO ARQUEÓLOGOS UCRANIANOS PRESENTAN

SUS MAS RECIENTES DESCUBRIMIENTOS

por Ivan Artemienko

17 EL VASO DE ORO DE GAIMANOV

por Vasili Bidzilia

19 LA VIDA COTIDIANA DE LOS ESCITAS

EN EL PECTORAL DE TOLSTAYA MAGUILA

por Boris Mozolevskí

21 ARTEMISA CAZANDO EN LA ESTEPA

por Vita/i Otroschenko

22 ESPLENDOR DEL ARTE ESCITA

Ocho páginas en color

31 PASIRIK, EL PUEBLO CONGELADO DEL ALTAI

por Mariya P. Zavituhina

34 ANIMALES FANTÁSTICOS HACEN CABRIOLAS

EN EL HOMBRE TATUADO DE PASIRIK

Fotos

38 CABALLERÍA SIBERIANA DE ULTRATUMBA

por Mijaíl Gríaznov

42 LOS CHAMANES Y EL VIAJE MÍTICO

AL MUNDO DE LA FABULA

por G. M. Bongard-Levín y E. A. Grantovskí

48 LOS OSETAS. ESCITAS DEL SIGLO XX

por Vasili I. Abaíev

50 LATITUDES Y LONGITUDES

2 TESOROS DEL ARTE MUNDIAL

GRECIA : El santo con cabeza de perro

Nuestra portada

Los jinetes hacen un alto a la sombra de un árbol. Uno de ellos sujetapor la brida a los caballos, mientras el otro descansa tumbado, con lacabeza 'apoyada en el regazo de una mujer sentada. Esta placa de oro,con una escena típica de la vida de los nómadas escitas, tiene unduplicado absolutamente simétrico. La joya, que perteneció a la colec¬ción del zar Pedro el Grande, es sólo una muestra del prodigioso poderde creación de que dieron muestra hace 2.500 años los artistas de lasestepas. A su cultura y su arte, surgidos en un vasto territorio entreEuropa y Asia, dedica este número El Correo de la Unesco.

Page 4: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Este ciervo de oro cincelado

constituye una muestra acabadadel arte zoomórfico puramenteescita. Obra maestra de un

orfebre de la estepa, del siglo VIantes de nuestra era, fue

descubierto en una sepultura deKubán, región del noreste del marNegro. Como dice AlexanderShkurko, arqueólogo soviéticoespecialista en arte escita,« el artista no ha tratado de

reproducir el cuerpo del animalni sus detalles anatómicos. Lo

que ha querido expresar es latensión extraordinaria y lafuerza del animal en el momento

en que se apresta a huir. » Elciervo es uno de los motivos

predilectos del arte escita.

EL MUNDO ESCITA

por

Boris B. Piotrovski

BORIS BORISOVICH PIOTROVSKI,

arqueólogo soviético, es una autoridadinternacional en materia de historia y artede los escitas. Es miembro de las Academias

de Ciencias de la URSS y de la República' Socialista Soviética de Armenia, y directordel Museo del Ermitage de Leningrado, dondese conserva una valiosa colección de arte

escita. Es, además, miembro correspon¬diente de la British Academy, de la AcadémieFrançaise des ' Inscriptions et Belles-Lettresy de la Academia de Ciencias de Baviera.Profesor de historia del antiguo Oriente de laUniversidad de Leningrado, ha publicadoimportantes estudios sobre la historia, lacultura y el arte del antiguo Oriente y delCàucaso.

AL mundo escita sólo lo cono¬

cemos en toda su realidad yextensión desde hace rela¬

tivamente poco. Sin embargo, dispo¬níamos ya, desde hace mucho tiempo,de informaciones sobre los escitas, alos que no cabe incluir entre los pue¬blos olvidados.

En el siglo V antes de nuestra era,Herodoto nos dejó una relación deta¬llada de los escitas cuyo país, segúnsus propias leyendas y las leyendasgriegas sobre su origen, pertenecióantes a los cimerios.

El historiador griego conoció a losescitas del norte del mar Negro, quemantenían relaciones con las colonias

griegas de la región y cuyos kurganeso túmulos funerarios se han conser¬

vado en las estepas hasta nuestrosdías. Sobre las riquezas escondidasbajo esos túmulos circulaban nume¬rosas leyendas, y los buscadores detesoros que los saquearon pudieroncomprobar a menudo que tales leyen¬das respondían a la realidad.

Construyeron los kurganes diversospueblos nómadas de las estepas, perogran parte de ellos son obra de los

Page 5: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Una antiquísima cultura en las estepasde Europa y de Asia

^^

escitas. Los arqueólogos han descu¬bierto en su interior magníficos objetosde arte antiguo. Todavía hoy, losinvestigadores que trabajan en Ucra¬nia siguen anunciando, casi diaria¬mente, nuevos descubrimientos rela¬

tivos a la cultura escita, en particularla que data de los siglos V a III antesde nuestra era.

Las excavaciones se iniciaron en los

kurganes hace mucho. En 1763 seexcavó cerca de lelisavetgrad (actual¬mente Kirovograd), en Ucrania, elkurgán de una rica sepultura de laépoca escita, en la que se encontra

ron numerosos objetos de oro y deplata. Entre ellos figuraban unakínakes de hierro (espada corta delos escitas), en cuya vaina y empu¬ñadura se había grabado criaturasfantásticas y divinidades antropo-mórficas junto a un árbol sagrado,en el estilo del antiguo Oriente.

Esos magníficos objetos pasaron aformar parte de la Kunstkamera, ocolección de arte, creada por Pedroel Grande en 1714. La colección

contenía ya objetos de oro prove¬nientes de los kurganes de Siberia, yposteriormente atribuidos a los

escitas, objetos que habían ofrecidoal zar en 1715 y 1716 el propietariode una fábrica metalúrgica de losUrales, Nikita Demidov, y el goberna¬dor de Tobolsk, Príncipe Gagarin.

En 1 7 1 8 un ucase o decreto guber¬namental ordenaba que en Rusia «serecojan en la tierra y en el agua lasarmas antiguas, las viejas inscrip¬ciones, la vajilla, y todo lo que seaantiguo e insólito ».

En cuanto al origen de « la miste¬riosa y maravillosa colección deantigüedades siberianas de latKunstkamera», como la llamaban r

Page 6: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

los arqueólogos de comienzos delsiglo XIX, sólo pudo establecersecuando se estudió la cultura escita enun vasto territorio.

Los arqueólogos fueron entoncesdescubriendo poco a poco el altogrado de unidad cultural del vastocinturón de estepas, estribaciones ypastizales de altura que, entre losparalelos 40 y 50, se extendía desdeel Danubio, al oeste, hasta la GranMuralla de China, al este.

En la época escita, en ese inmensoterritorio de más de 7.000 kilómetrosde longitud se encontraron los mismosadornos, las mismas espadas cortasde hierro, las mismas puntas de flechatrilobuladas y adornadas de la mismamanera. La vecindad de otras culturas

podía advertirse en la gran difusión delas representaciones animales realiza¬das en el que se ha dado en llamar« estilo zoomórfico escita-siberiano ».

Pero esos vínculos existían yadesde el siglo VIII a. de J. C, en laépoca cimeria que precedió a la de losescitas, como demostraron las exca¬

vaciones realizadas en el kurgán deArzhan, en la República SoviéticaAutónoma de Tuva.

En una sepultura de un jefe seencontraron, a más de algunos obje¬tos semejantes a los descubiertosen Ucrania y Bulgaria, trozos detejidos originarios de Irán cuya anti¬güedad era casi dos siglos superiora la de las alfombras iranias halladas

en los kurganes del Altai.

Así, desde la época cimeria estabandadas las condiciones que favorecíanlos intercambios entre regionesalejadas unas de otras y determinabanun tipo de economía basada en laganadería seminómada, en la cualla cría de caballos revestía importanciaconsiderable porque posibilitaba losdesplazamientos a gran distancia.

Las relaciones entre las tribus

compensaban la escasez de recursosnaturales y, en particular, la escasezde yacimientos de metal en elinmenso territorio donde se difundió

la cultura escita, cuyas obras de artemás notables son justamente de oro,plata y bronce de excelente calidad.

Los yacimientos de oro y de plataeran raros. En cuanto al estaño, quees, junto con el cobre, uno de los doscomponentes esenciales del broncey que existía en Europa central y enBohemia, faltaba completamenteen el territorio que va desde el Danubiohasta el Kazajstán oriental.

.Naturalmente, esas relaciones noeran ni inmediatas ni directas entre

las regiones orientales y occidentalesdel mundo nómada de las estepas.Los rasgos culturales comunes setransmitían y difundían de tribu atribu, sin que pueda saberse conexactitud cuál era el punto de partida.

Piénsese también en la facilidad de

desplazamiento de unas tribus deganaderos tan expertos en la conduc¬ción de manadas de caballos. Siemprecabalgando, siempre bien armados,constituían en todo momento verda

deros destacamentos militares que sedesplazaban sin dificultad y cuyasincursiones guerreras, según Hero-doto, penetraron profundamente enel Asia Anterior.

Los relatos de Herodoto se han

visto confirmados en nuestra épocapor documentos orientales antiguos,en particular por los restos arqueoló¬gicos y los textos asirios. Variastabletas de arcilla conservadas en losarchivos de Nínive dan cuenta de laaparición de los cimerios en el AsiaAnterior ya a mediados del siglo VIIIantes de nuestra era.

Un siglo después los escitas parti¬ciparon en el aniquilamiento deAsiría, según se afirma en la crónicadel rey babilonio Nabopolasar quedescribe los acontecimientos acaeci¬

dos entre los años 61 6 y 609, y en elrelato que el historiador armenioMovsés Jorenatsi, del siglo V denuestra era, hace de la caída deNínive.

En las excavaciones de las forta

lezas de Transcaucasia (Karmir-Blur,cerca de Erivan) y de la parte centralde la antigua Urartu, junto al lago Van(en la Turquía actual), que datan delsiglo Vil antes de Jesucristo, seencontraron adornos de guarniciones,raspadores de hierro y collares deabalorios que confirman los descubri¬mientos hechos en las sepulturasescitas arcaicas de Pridnieprov, enla región del mar Negro.

El llamado «tesoro de Ziwiyé »,descubierto a fines de la SegundaGuerra Mundial, confirma la existencia

de relaciones entre los escitas y elAsia Anterior. Entre los objetos encon¬trados en Ziwiyé que, como se supodespués, no formaban parte deltesoro sino que provenían de unsepulcro de fines del siglo Vil antesde nuestra era, destacan claramente

una serie de piezas en las cuales lasrepresentaciones de estilo orientalantiguo ^ van unidas a elementoscaracterísticos del arte escita.

Los objetos de oro de estilo escita

DOS JINETES

PARA UN CUELLO

Las joyas de los escitasnos ofrecen a menudo

datos sobre (as |costumbres de los 1

nómadas de las estepas. ¡1Los extremos de este *|torques o collar de oro ülrepresentan a dos jinetes §escitas frente a frente. 1Visten caftán y gpantalones largos sujetos Jpor una correa de cuero «

bajo las botas, y |cabalgan a pelo, sin sestribos. El collar entero, Sque pesa unos 260 algramos, fue descubierto ;en 1830 en una sepultura §de Crimea. Data del Asiglo IV antes de JJesucristo y pertenece olal estilo greco-escita de I y}esa época.

w V$F^^^ *»

<"'' ' ffr-

Page 7: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

hallados en Ziwiyé presentan analo¬gías con los descubiertos en loskurganes escitas, entre ellos laespada con empuñadura y vaina deoro encontrada en 1763 en el kurgánde Kirovograd (Ucrania) y una espadadel mismo estilo y un hacha de hierrocon empuñadura de oro de los kur¬ganes de Kelermés (Kubán), exca¬vados en 1902.

En esos objetos, determinados ele¬mentos escitas (como el ciervo tum¬bado) van unidos a otros elementosdel Asia Anterior (árbol sagrado enmedio de las divinidades, animales

fantásticos). Y es perfectamentelegítimo pensar que los mencio¬nados objetos eran imitaciones deobjetos provenientes de Urartu, conelementos de estilo escita puro.

Se ha intentado fechar los orígenesdel arte escita en las campañas de losescitas en el Asia Anterior, perocontradicen tal tesis los objetosescitas y preescitas encontrados enSiberia donde aparecen ya elementos

del « estilo zoomórfico » y que sonanteriores en el tiempo a los objetosde arte descubiertos en Ziwiyé.

En nuestros días la palabra «escita»engloba a un gran número de tribusdeorigen étnico diferente, aunque puedanobservarse rastros iranios tanto en los

nombres propios como en los topó¬nimos.

Pero los arqueólogos han demos¬trado claramente que los primerosmonumentos escitas de la región delmar Negro se hallan vinculados conlas culturas de la estepa del se¬gundo milenio antes de nuestra era.

, A menudo, la palabra « escita »designa sólo a las tribus^ de lasestepas del mar Negro. Aquí la utili¬zamos en su sentido lato, el quedenota la expresión « el mundoescita », es decir un conglomeradode tribus diversas que forman unacomunidad económica y cultural yque ocupan un vasto territorio.

Entre el siglo VI y el II antes denuestra era, florece en las estepas

preuralianas del Don y del Volga unacultura próxima a la de los escitasdel mar Negro; «sauronates » llama¬ban^ los griegos a quienes perte¬necían a esa cultura. Por su conductose estableció el enlace con las tribus

del Kazajstán oriental. Un brillanteejemplo de esa cultura es el que nosofrece el kurgán de Chiliktin, quedata del siglo VI a. de J. C. y dondese encontraron pequeñas placas conciervos tumbados.

A través de las estepas delKazajstán se establecieron una seriede vínculos con la región montañosadel Altai, en Siberia. Los objetos delos kurganes de esta región se hanconservado en buenas condiciones

gracias al suelo permanentementehelado. Los numerosos objetos demadera, hueso, fieltro y metal allíencontrados ponen claramente demanifiesto los lazos que unieron aesta cultura con China, Irán y losescitas.

Las colonias griegas instaladasen las orillas del mar Negro a finesdel siglo Vil antes de nuestra era ejer¬cieron una clara influencia en eldesarrollo de la cultura escita de esa

región.

Pero los escitas con quienes losgriegos entraron en contacto poseíanya una cultura original, y los objetosgriegos de oro fabricados especial¬mente para aquellos se distinguenfácilmente de los objetos escitas pro¬piamente dichos. Gracias a los resul¬tados de las excavaciones conocemos

muy bien ambos tipos de objetos.Las excavaciones con que se inició

el estudio sistemático de las' anti¬güedades escitas fueron las realizadasen 1830 en el kurgán de Kul-Oba,cerca de Kerch. En su tumba de piedrase conservaba una rica sepultura delsiglo IV antes de Jesucristo en la quese descubrieron notables obras de la

joyería griega, entre ellas variosobjetos realizados especialmente paralos escitas.

Fue allí donde apareció un torquesde oro con jinetes escitas en susextremos. Particularmente interesantees un vaso de electro (aleación anti-kgua de plata y oro) allí encontrado, f

Page 8: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

GUERREROS Y LEONES. Una

escena de combate en un

magnífico peine de oro que datadel siglo IV antes de nuestra era,encontrado en el kurgán deSoloja, en el curso inferior delDniéper (Ucrania). Las figurasde los combatientes y de losleones resaltan en ambos lados

del peine, como si se tratara de unaescultura. Los tres guerreros sonescitas, pero el orfebre griego quelabró eí peine introdujo algunoselementos griegos, como elyelmo y la armadura. (Véase elartículo de la página 15)

En su panza se había grabado cuatrogrupos de personajes que ilustrabanel relato mítico griego sobre los orí¬genes del reino escita tal como loscontó Herodoto. Están representa¬dos en el vaso los tres hijos deHeracles (el Targuitaos escita) y deApi, la extraña diosa de cola de ser¬piente. Para decidir quien sube altrono, los tres jóvenes compitenentre sí tratando de tender el arcoque Heracles había dejado a la madre.Sólo el menor, Skithes, logra suintento, mientras los otros dos sehieren al esforzarse en tender el

arco. (Véase el artículo de las páginas15y 16).

En la segunda mitad del siglo XIXse excavaron numerosos kurganesde las estepas de la región del marNegro, Crimea y Cáucaso septen¬trional descubriéndose auténticas

muestras del arte escita y obras quelos artistas griegos ejecutaban paralos escitas. En esos objetos puedenverse motivos característicamente

escitas como la pantera y el ciervotumbado de gran cornamenta. Esposible que esas imágenes fueransímbolos de las tribus; en los kur¬ganes de Kubán, correspondientesal siglo VI antes de nuestra era, sehan descubierto grandes placas deoro con figuras de animales que

servían de adorno en los escudos o

en las aljabas.

Las relaciones que los escitasmantuvieron con sus vecinos occi¬

dentales y meridionales se ponen demanifiesto en los objetos encontradosen los kurganes, por ejemplo enUcrania, donde se han descubierto

a menudo objetos tracios.

En el kurgán de Chertomlik, dondeapareció la célebre ánfora de plataadornada por un friso en relieve configuras de ganaderos escitas (véasefoto a la derecha), se encontrótambién una espada corta de hierrocon empuñadura de oro que es unabella muestra del arte iranio del sigloV antes de Jesucristo. Rematan la

empuñadura dos cabezas de ternero;en el mango hay una escena de caza.

Esta espada es probablemente untrofeo de la guerra entre griegos ypersas o bien entre escitas y persas.La vaina en que se guardaba teníauna placa de oro con una escena decombate contra los persas. La com¬posición recuerda la de la batalla deMaratón que puede verse en lostemplos griegos del siglo V antes denuestra era.

Los objetos iranios aqueménidasnoeran raros en los kurganes escitas.Así, en una de las sepulturas delkurgán de Bliznitsa se descubrió unsello aqueménida de calcedonia, mon¬tado en un anillo de oro, que repre¬senta al rey luchando contra un león,así como un amuleto, la cabeza demayólica del dios egipcio Bes. Esteobjeto egipcio llego quizá a travésde Irán.

Como vemos, en el arte de los

escitas se ponen de manifiesto lasrelaciones que éstos mantenían conpaíses próximos o lejanos que contri¬buyeron al establecimiento de vín¬culos entre la Europa oriental y elLejano Oriente a través de ese largocorredor abierto ya a mediados delprimer milenio antes de Cristo y quehasta el siglo XVI de nuestra era iba aser la famosa Ruta de la Seda queconducía desde la orilla oriental del

mar Mediterráneo hasta el río Hoang-Ho, en China, pasando por Irán, elAsia central y el Turquestán chino.

Todo ello muestra la importanciadel mundo cultural escita en la his¬

toria de la antigüedad.

Boris B. Piotrovski

8

Page 9: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

UN GRAN CRONISTA

GRIEGO NOS HABLA

DE LOS ESCITAS

La arqueología actualconfirma lo queHerodoto escribía

hace 2.500 años

por

laroslav V. Domanski

N ACIDO en la ciudad griega deHalicarnaso, Herodoto fue un

gran viajero. Hacia mediadosdel siglo V antes de nuestra era,siendo aún joven, abandonó su ciudadnatal, y en sus peregrinaciones reco¬rrió todo el mundo coetáneo de laHélade y de Oriente.

Visitó Babilonia y Sicilia, las orillasdel Nilo y Tracia, las islas del marEgeo y las ciudades del Peloponeso,y otros muchos lugares, frecuente¬mente muy alejados unos de otros.

Llegó así hasta Olbia, una de lascolonias griegas más septentrionales,situada en la desembocadura del río

Bug, a orillas del mar Negro.

En la época en que la visitó el granviajero, Olbia tenía ya siglo y mediode existencia. La situación de la ciu¬

dad era floreciente, lo que justificabaplenamente su nombre, que en griegosignifica « feliz ». Pero no era la vidade la ciudad, su presente y su pasado,lo que interesaba especialmente aHerodoto, en general tan ávido deconocimientos.

Lo que despertaba sobre todo suatención eran los anchos espacios dela estepa que se extendían hasta elinfinito a partir de las murallas mismasde Olbia. Allí vivían los escitas, elpueblo que había vencido al rey persaDarío I tras una guerra cruenta y ago¬

radora.

También los griegos habían gue¬rreado contra los persas durante largosaños. Y lo que Herodoto quería narrarera la historia de esas guerras greco-persas, una parte de cuya relación westaría dedicada a los escitas. f

IAROSLAV VITALIEVICH DOMANSKI,;

destacado arqueólogo soviético, es un espe¬cialista en historia antigua de las regionesdel norte del mar Negro. Colaborador cien¬tífico del Museo del Ermitage de Leningrado,ha dirigido durante muchos años las excava¬ciones arqueológicas del valle del Bug(Ucrania).

Page 10: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Atento observador de su contorno,

Herodoto escuchaba en Olbia lo quelos habitantes escitas y griegosle contaban de Escitia. Así, de labiosde personas que habían pasado todasu vida en las estepas y que habíanvisitado las comarcas, próximas oremotas, situadas al norte del mar

Negro, iba recogiendo los más diver¬sos datos sobre aquel mundo tanextraño para los griegos de la Hélade.

Herodoto, ávido de conocimientossobre un mundo que desconocía,tomó nota de todos los hechos, yhasta de las fábulas, que le contabansus numerosos informadores, entreellos el llamado Timnés, hombre de

confianza del rey Ariapeithes.

Mezclando sus propias observa¬ciones y los datos por él recogidos,el historiador griego trazó un cuadroabigarrado de la vida de los escitas.Así se entreveran en su relación lo

pasado y lo presente, lo esencial ylo insignificante, lo auténtico y lofantástico.

Esta imagen que Herodoto fue for¬mándose del mundo escita durantesu estancia en Olbia la encontramos

en la obra que más tarde titularíaHistorias. El infatigable viajero ibaa ser así el primer gran historiadorde la humanidad y su obra el primergran relato histórico.

En ella dedica un lugar destacado,aunque no sea el más importante, alos escitas, uno de los primeros pue¬blos de la antigüedad que vivieron enel territorio actual de la Unión Sovié¬

tica y cuyo nombre haya llegadohasta nosotros.

Herodoto vivió en Olbia hacia el

año 450 antes de nuestra era. Y yaen el 445 recibía un premio en Atenaspor la lectura de algunos fragmentosde su relato.

Pero cedamos la palabra al « padrede la historia » :

« El territorio de los escitas, que esuna llanura, abunda en pastos y enagua; varios ríos lo surcan». «Losescitas no poseen ni ciudades nimurallas construidas, sino que llevansu casa consigo y son excelentesarqueros a caballo. No viven de lalabranza sino de su ganado y llevansu vivienda en su carromato ». Así

describe Herodoto Escitia, sus habi¬

tantes y su forma de vida.

Campamentos en la estepa. Hordasen movimiento : hombres, animales

y carromatos cubiertos en los vastosespacios de « una llanura que seextiende hasta el infinito », entre el

Danubio y el Don sin duda alguna.En los carromatos se amontonan las

mujeres y los niños. Los hombres vana caballo, en campaña. Maestros enel manejo del arco y la lanza, pro¬tegen constantemente carretas yganados.

« En toda la tierra de los escitas

falta completamente la leña. » Enconsecuencia, los escitas tuvieron

que aprender a prescindir de la ma¬dera. Para cocinar la carne utilizaban

10

DOS EN UNO

O EL JURAMENTO

DE FRATERNIDAD

Como en otras muchas joyasescitas, en esta especie debroche de oro del siglo IVantes de nuestra era se nos

muestra una costumbre

típica de los nómadas de lasestepas : el juramento defraternidad. Dos hombres

frente a frente sostienen una

copa en cuyo vino hanmezclado unas gotas de susangre. Gracias a la sutilezadel artista, los dos rostrosde perfil parecen formar unosolo visto de frente, comose advierte más fácilmente

en el detalle ampliado.

FLORA Y

DE ORO

FAU NA

Page 11: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Cabras monteses y moruecos se pasean entre flores y otros motivosvegetales en esta obra maestra de la orfebrería escita de hace2.500 años. Esta evocación de la vida bucólica de los nómadas ensu constante búsqueda de pastos y de agua a través de las estepasconstituye el motivo central de un collar de oro descubierto en 1 868en una sepultura de la Gran Bliznitsa, cerca del mar de Azov.

los huesos del animal. La carne la

ponían en la caldera, los huesosdebajo : « el buey se hierve a sí mis¬mo ». Preparaban también la carneponiéndola a cocer en la panza delanimal.

Otro alimento de los escitas era la

leche de yegua. Bebían tambiéngrandes cantidates de vino impor¬tado. A los griegos les sorprendíaverles beber vino no aguado. « ¡Sír¬veme a la escita!», decían cuandoquerían embriagarse.

Como buenos hijos de la estepa,los escitas eran ganaderos natos,pero seguían dedicándose a la cazade animales salvajes, herencia de unremoto pasado.

«La tierra se muestra propicia alos escitas y. los ríos les prestan suayuda ».j Así ocurre con el Dniéper,« que es el que procura más recursos :proporciona magníficos pastizales deexcelente rendimiento para el ganadoy peces de calidad superior y en grancantidad; su agua es muy agradableal paladar y, allí donde nose siembra,crece con mucho vigor la hierba ».

. Es de observar que, en su estudiode Escitia, Herodoto se interesó sobretodo por los nómadas, si bien no igno¬raba^ la existencia de labradores.Según él, «los escitas poseen enabundancia todo lo que es de primeranecesidad ». Y, sin embargo, su vidaera dura; en sus costumbres mismas

se refleja la crueldad de la época.

El « padre de la historia » nosdescribe esas costumbres, sobre todo

las propias de los guerreros. Entrelos escitas era norma de rigurosocumplimiento el mostrarse implacablecon el enemigo y fiel con el compa¬ñero de armas. El juramento de amis¬tad se sellaba justamente con unritual particular. Los que en él parti¬cipaban vertían gotas de su sangreen una copa de vino, en la quedespués mojaban la espada, variasflechas, el hacha y la jabalina. Trasuna serie de largas ceremonias deencantamiento, los que hacían eljuramento de la sangre, y por él que¬daban ligados, -bebían el contenidode la copa.

Según Herodoto, entre los escitas«no es costumbre erigir estatuas,altares ni templos ». De todos modos,los dioses existían; nuestro histo¬riador los enumera y los compara conlos del panteón griego, lo que nospermite enterarnos del papel que seatribuía a esta o aquella divinidad.

Tenemos así, por ejemplo, Tabiti,la Hestia local, diosa del hogar,Papaios (Zeus), señor del cielo, y sumujer Api (Gaia), diosa de la tierra.Estas eran las tres deidades más

veneradas. Heracles (Hércules) figu¬raba también entre los dioses escitas

con el nombre de Targuitaos, héroede una leyenda sobre el origen delpueblo escita en la que aparece comoel dios y el antepasado fundador.

Se ofrecían en sacrificio animales

domésticos, especialmente caballos,a todos los dioses, sobre todo a Ares,

11

Page 12: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

dios^ de la guerra, el único a quien seerigían altares. Estos presentaban laforma de inmensos túmulos de ramajeen lo alto de los cuales se colocaba

una vieja espada de hierro. A estaespada se sacrificaban animales do¬mésticos y una parte de los prisio¬neros.

Los escitas contaban con numero¬

sos adivinos, que ejercían su artesirviéndose de varitas de sauce quedisponían en el suelo. Cuando el reyestaba enfermo, se convocaba a losadivinos. Estos debían revelar el

nombre de aquel que, habiendo ju¬rado en falso por los dioses del hogarregio, era considerado como la causade la enfermedad del rey. El «cul¬pable » debía morir. En los casosdudosos, se pedía su opinión a otrosadivinos y, si éstos absolvían al acu¬sado, se ejecutaba a los primeros.

Los escitas creían en el Mas Allá,que se representaban como la pro¬longación y la repetición de la vida te¬rrena. La creencia en la inmortalidad

era parte integrante de su vida social.Herodoto describe con todo detalle

los funerales de un rey escita y la vidaque le « preparaban » en el otromundo, semejante a la gue habíallevado durante su tránsito terrenal.

Cuando el soberano moría, seabría en la tierra una gran fosa cua¬drada. Una vez embalsamado, el

cuerpo se colocaba en un carro yasí era transportado de tribu en tribu.Los escitas que salían al encuentrodel difunto se cortaban un trozo de

oreja, se rapaban el pelo, se hacíanincisiones en los brazos, se desgarra¬ban la frente y la nariz y se clavabanflechas en la mano izquierda.

Después la comitiva volvía hacia latumba regia, donde «depositan elcadáver en la cámara funeraria, sobreun lecho de hierba y hojas, clavan enel suelo picas a ambos lados delmuerto y colocan sobre él, de través,trozos de madera que > cubren concañas trenzadas; en el espacio de lacámara que queda libre entierran.

después de estrangularlos, a una delas concubinas del rey, a su copero, aun cocinero, a un palafrenero, a unsirviente, a un portador de mensajes,a varios caballos. Colocan también

una parte de sus otras pertenencias yunas cuantas copas de oro... Hecholo cual, se afanan todos en erigir ungran túmulo, rivalizando en celo paraque sea lo mayor posible. »

Pero^ la ceremonia funeraria noconcluía con ello. Un año después seelegía a cincuenta sirvientes del reya los que se daba muerte, junto concincuenta caballos. A los caballos se

les ataba por la brida a estacas ymedias ruedas de madera y a su lomose sentaba a los jóvenes ejecutadosen memoria del soberano. « Una vez

dispuestos en círculo los extrañosjinetes en torno a la tumba, los escitasse retiran ».

Para todo escita era un deber abso¬

luto cumplir con las costumbres y

con la^ fidelidad debida a los dioses.De ahí que se castigara severamentela apostasía. En Olbia le contaron aHerodoto el trágico destino del reyescita Skiles, hijo del rey Ariapeithesy de una griega. Skiles hablaba yescribía corrientemente el griego. Y« a pesar de ser rey de los escitas,no le placía nada la vida al modoescita ». Poseía el soberano un sun¬

tuoso palacio en Olbia al que iba amenudo y donde vivía una de susmujeres, natural de la ciudad. En Ol¬bia Skiles se vestía a la moda griega,practicaba las costumbres griegas yrealizaba los sacrifios que exigía elritual griego. Había participado in¬cluso en los misterios de Dionisos.

Justamente, los escitas reprobabanlos excesos dionisíacos de los griegos.Y ocurrió que, visitando Olbia, unosescitas vieron a Skiles en pleno éx¬tasis. Resultado de su indignaciónfue la insurrección contra el rey.Este huyó a Tracia; pero, pasadoalgún tiempo, fue entregado a susucesor, quien ordenó que le deca¬pitaran. «Tal es el respeto de los

escitas por sus costumbres y los cas¬tigos que infligen a quienes introdu¬cen practicas extranjeras ».

El relato de Herodoto incluye otrasmuchas informaciones de carácter

histórico, geográfico y etnográfico.

La descripción de la campaña em¬prendida contra los escitas por lospersas de Darío está esmaltada derelatos y de observaciones de granvalor informativo sobre la vida en la

antigüedad. Por ejemplo, son delmáximo interés los datos que Hero¬doto nos ofrece sobre el régimensocial de los escitas.

Pero, a menudo, esos datos nos los

da sólo de pasada, lo que natural¬mente deja más de una vez perplejosa quienes hoy se interesan por suobra y por los escitas. De ahila nece¬sidad de interpretar los materialesque nos ofrece confrontándolos conotras fuentes.

De seguir a Herodoto, cabe pensarque la sociedad escita estaba forma¬da por clanes. Y, sin embargo, elclan había perdido ya por entoncessu significación, aunque los viejosvínculos desempeñaran aún un papelimportante y aunque determinadosactos fueran realizados en común

por todos los miembros de un clan.Y es que, en efecto, la gran familiapatriarcal^ se había convertido en lacélula básica de la sociedad. Esa

organización patriarcal, fundada enla supremacía del hombre y la depen¬dencia de la mujer, es la que justa¬mente transparece en las costum¬bres escitas.

La igualdad de todos los miembrosdel clan fue desapareciendo poco apoco en provecho de la noción dehombre libre. Más o menos ricos,más o menos pobres, los hombreslibres constituían la mayor parte dela población escita. Pero Herodotomenciona también la existencia de

esclavos.

El resto, la minoría, comprendía lanobleza, aristócratas de diverso ran-

EL ARTE EN LA

VIDA COTIDIANA

Foto L. Tarasova

Ediciones de arte Aurora,

Leningrado Fotos A. Bulgakov© Ediciones de arte Aurora, Leningrado

12

Page 13: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

ASI EN LA PAZ COMO EN LA GUERRA

En una sepultura de Ucrania se descubrió hacealgún tiempo el último atavío de un guerreroescita enterrado en el siglo V antes de nuestraera (abajo). El excelente estado de conservaciónen que se encontraban las diversas piezas desu atuendo permitió reconstruir con la mayorprecisión (derecha), las prendas de vestir de losjinetes escitas de hace 2.500 años : el cascocónico con orejeras, la almilla de cuero cubiertade chapas metálicas, el cinturón de placas debronce y la armadura. La mayor parte de estoselementos pueden observarse también en unaestela de piedra de la misma época (izquierda),así como la gran espada, el puñal en su vaina,el ritón o vaso en forma de cuerno, la aljaba paralas flechas y el arco. El atuendo se completabacon unas polainas y unos pantalones metidosen las botas de fieltro con suela plana.

Calderos, cuchillos, pebeteros,lámparas, ánforas, vasos, taburetesy otros muchos objetoscuidadosamente trabajadosdemuestran el refinamiento de la

artesanía escita, puesta al serviciode los utensilios domésticos más

comunes. He aquí tres ejemplos :

1 Lámpara de bronce de seismechas (11 cm de alto).

2 Espejo de bronce (16 cm dediámetro) con mango acanalado yadornado con la figura de un felino.

3 Cazo calado de bronce queservía para retirar la carne hirvientede la marmita. En el extremo hueco

se introducía un mango de madera.

go, los jefes de familias ricas, losmiembros de los círculos más alle¬

gados al rey y los jefes de guerra. Enel vértice de la pirámide jerárquica sesituaba el rey.

La unión de las tribus formaba el

reino escita. Por la época de la cam¬paña de Darío (fines del siglo VI a. deJ. C.) tres reyes reinaban en tres rei¬nos distintos. El reino se dividía a su

vez en « nomos » (regiones) goberna¬dos por un «nómaco», jefe de losejércitos del nomo. Sólo el rey man¬daba sobre el ejército escita en sutotalidad.

El soberano disponía de un poderinmenso al que sólo en raras oca¬siones podía poner límites el consejo.En tiempos de guerra el rey no solodirigía los ejércitos sino que repartíatambién el botín. Cada escita debía

obediencia y servicio al rey, bajo penade muerte en caso de incumplimiento.Como ya hemos indicado, al soberanole seguían al otro mundo sus bienespersonales y un buen número de sir¬vientes y de caballos a los que sedaba muerte con tal motivo.

Antes que nada, el rey escita era unjefe de guerra. Además de pasatiem¬po favorito, la guerra era una fuentede riquezas que incrementaba elpoder de la aristocracia. Imbuidos de

sus tradiciones y costumbres guerre¬ras, los escitas no se separaban jamásde sus armas.

Por la época de la visita de Hero¬doto subsistían aún ciertos principiosdemocráticos, propios del régimen declanes; su materialización eran lasasambleas populares formadas portodos los guerreros, las cuales secelebraban en los nomos y conocíande los asuntos importantes y hastadel destino de los reyes. En una deellas debió de decidirse el trágicodestino de Skiles.

Todo lo que Herodoto describe (sise exceptúan unas cuantas incur¬siones por el pasado) tiene lugar amediados del siglo V antes de nuestraera. Es decir, se trata sólo de unbreve fragmento de la historia de losescitas. En efecto, su existencia co¬mo pueblo va a continuar aún du¬rante varios siglos, con uri total demil años aproximadamente, casitanto como la Roma antigua; y todoese vasto periodo de tiempo estálleno de acontecimientos que a menu¬do desconocemos. Pero, por lo quede ellos sabemos, cabe colegir queel del pueblo escita fue un destinodramático.

En el siglo Vil antes de nuestra era, klos escitas eran el terror de Occi- f

13

Page 14: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

, dente; habían sojuzgado pueblosenteros y participado en la destruc¬ción de Nínive, la capital asiría, en elaño 612 antes de Jesucristo. Pero

en el 339, reinando el rey Ateas,sufrieron una tremenda derrota ante

los ejércitos de Filipo II de Mecedo-nia.

En el siglo VI antes de nuestra era,los escitas defienden victoriosamente

su jibertad frente a los persas deDarío. Pero, a fines del siglo II, pier¬den batalla tras batalla contra los

griegos en Crimea.

En los albores de su historia, llevana cabo expediciones y peregrina¬ciones prodigiosas que les llevanhasta Egipto. En cambio, cuando suhistoria llega al ocaso, se ven ence¬rrados e inmovilizados en un pequeñoterritorio de las estepas de Crimea. Ysi en sus comienzos, y durante si¬glos, llevan una vida nómada, al finalse vuelven cada vez más sedentarios

y acaban por convertirse en agricul¬tores.

Marginados inicialmente de la cul¬tura helénica extranjera, terminancon el tiempo por aproximarse a loshabitantes griegos de las ciudadesdel norte del mar Negro.

A ta par que guerreros crueles quedestruían todo a su paso, los escitaseran grandes aficionados a los obje¬tos artísticos y excelentes artesanos.

Cuando en el siglo III de nuestraera desaparece Escitia, el nombrey el recuerdo de este pueblos sub¬siste. En efecto, los pueblos queocupaban el antiguo territorio escitase hacían pasar por escitas. Y hastalos antiguos eslavos se apropiaron detan temible nombre.

Silencioso durante quince siglos, eldesaparecido pueblo se puso a hablarel idioma de sus monumentos a fines

del siglo XIX y principios del XX.Quedaba de él lo que la ciencia llamauna « antigua cultura material », asaber, toda clase de vestigios de suactividad que esperaban ser desper¬tados de su secular sueño por losexploradores de Escitia.

El estudio de las antigüedades esci¬tas comenzó inmediatamente des¬

pués de la incorporación de los terri¬torios del mar negro a Rusia. Desdeentonces se han estudiado numerosos

monumentos, entre ellos los kurganes(montículos funerarios), de especia-lísima importancia.

A menudo los kurganes son tumbasde jefes o de reyes. En estos túmulosde tierra a veces muy grandes, quecubren tumbas dispuestas frecuente¬mente de manera muy compleja, conaspecto de criptas o catacumbas, sehan encontrado numerosos objetos, yello pese a que ya en la antigüedadvarios fueron saqueados.

Señalemos en primer lugar losobjetos de uso corriente (calderos debronce, piezas de alfarería), las joyas(anillos de oro, brazaletes, collares,colgantes y adornos de oro para elcabello), los adornos de metal para

14

los vestidos (sobre todo cosidos), lasarmas (espadas, hachas, lanzas, fle¬chas, aljabas, vainas, armaduras), losarneses, etc.

Los materiales utilizados para lafabricación de estos objetos, ademásdel oro, el bronce y la arcilla, eran elhierro, la plata, el hueso y la piedra.Unos eran de fabricación local, otrosvenían de fuera : comprados, captu¬rados en una campaña militar, impor¬tados desde muy lejos a través delcomercio o por trueque entre tribus.

Las excavaciones han confirmado

en gran parte las descripciones deHerodoto sobre la vida en las estepas.Pese a ciertas diferencias, lo descu¬

bierto en los kurganes guarda estre¬cha analogía con las descripcionesde los funerales regios. Por ejemplo,los arqueólogos han encontrado losmismos calderos de bronce para co¬cer la carne de que habla Herodoto.Es más, no sólo se ha descubiertocarbón de leña sino también dehuesos.

El descubrimiento en 1830 del kur¬

gán de Kul-Oba, en la península deKerch, marcó el comienzo de unanueva era en el conocimiento de la

historia escita. En el siglo IV antesde nuestra era fueron enterrados tres

hombres en la cripta de piedra delkurgán. Pero los arqueólogos hallarontambién en ella objetos de oro insóli¬tos (un vaso, un torques) y pequeñasplacas cosidas a los vestidos. Estasplacas presentan escenas con diver¬sos personajes, hombres en armas yguerreros aún desconocidos de losinvestigadores, con rasgos, vestidosy tocados que son manifiestamenteajenos a Grecia.

¿A qué pueblos pertenecían es¬tos hombres armados? Del examen

atento de los objetos desenterradosse colige que eran escitas. Tenemos,pues, aquí la auténtica representa¬ción de su apariencia externa, de suarmamento, de su indumentaria y,acaso, de algunas de sus costumbres.Por primera vez comenzaba a levan¬tarse una parte del velo que cubríalos aspectos hasta entonces descono¬cidos de un pueblo de la antigüedad.Tras^ los relatos de Herodoto, al finpodíamos vera los escitas.

El kurgán de Kul-Oba fue el primerode una serie de monumentos en quelos investigadores descubrieron obje¬tos con representaciones de escitas.En 1862, durante las excavaciones

realizadas en el kurgán de Chertomlik,en las estepas del Dniéper, aparecióun ánfora de oro y de plata con unfriso en el que se hallaban representa¬dos varios personajes y caballossemejantes a los ya descubiertos enKul-Oba.

En 1912 y 1913, se descubrieronen el kurgán de Soloja, pertenecienteal mismo grupo de túmulos regiosque el de Chertomlik, una serie deobjetos con escenas de la vida de losescitas, entre ellos un peine de ororematado por tres guerreros en liza.

La perfección estética de estosSIGUE EN LA PAG. 48

por

Dimitri S. Rayevski

DIMITRI SERGUEIEVICH RAYEVSKI,arqueólogo soviético, pertenece al Insti¬tuto de Estudios Orientales de la Acade¬

mia de Ciencias de la URSS. Es autor de

diversos estudios sobre la historia y lacultura de los escitas. Su obra más

reciente, sobre la mitología escita, apare¬cerá próximamente.

Page 15: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

EN los siglos IV y III antes de nues¬tra era, los maestros escitas ylos griegos que residíanen tie¬

rras de los primeros y abastecían a lanobleza local con los bellos productosde su arte ejecutados según los gustosde los usuarios, crearon infinidad de

objetos que hoy nos asombran por lavariedad y riqueza de sus temas ymotivos, i

Un guerrero escita luchando contraun monstruo fantástico; unos cuantosescitas combatiendo entre, sí; unjinete atravesando con su lanza unaliebre; dos arqueros disparando susflechas en direcciones opuestas; unosescitas capturan y maniatan a varioscaballos que pastan en la estepa :estas y otras muchas imágenes recons¬tituyen con veracidad documental ycon gran detalle el aspecto externode la. vida cotidiana de los escitas.

Estas, imágenes, conjugadas conlos datos que nos brindan los autoresantiguos, pueden ayudarnos a recons-

rCR&o¿^MEMM^^^

La leyenda del primer rey escita, Targuitaos, y de sus hijos fuecincelada en la panza de un vaso de plata (dibujo 1 de la página anterior)descubierto al norte de Kubán : el viejo rey conversa con suprimogénito (4), se despide de su segundo hijo (5) que se apresta apartir llevando dos lanzas en la mano derecha. Pero es al benjamín, aúnimberbe, a quien entrega el arco, símbolo del poder (6).

Fotos © Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencias, Moscú

Foto L Tarasova O Museo de Tesoros Históricos de Ucrania, Kiev

E^44¿ajU3

tituir la .mitología escita. He aquíalgunos ejemplos de cómo, graciasa esta conjunción de datos, una seriede imágenes conocidas desde hacetiempo se ponen a hablar y a contar¬nos su secreto.

Herodoto ha conservado para noso¬tros la leyenda escita del primerhombre, al que los escitas llamabanTarguitaos y los colonos griegos delmar Negro, y tras ellos Herodoto,Heracles (por el nombre del héroemítico griego).

A comienzos del decenio de 1950,Boris N. Grakov, uno de los principalesespecialistas soviéticos en materia decultura escita, formuló la intere¬

sante hipótesis de que las múltiplesimágenes en que se representa lalucha de un hombre con una especiede monstruo encontradas en los tú¬

mulos escitas, se refieren precisa¬mente a las hazañas de este héroe,muy populares en Escitia, ya que aTarguitaos, según Herodoto, se leconsideraba antepasado directo delos soberanos locales. Esta hipótesisnos lleva a preguntarnos : ¿no seráposible encontrar en las imágenesescitas un entronque. directo con eltema ?

Según una de las variantes de estaleyenda, Targuitaos-Heracles tenía

tres hijos; para saber cuál de los tresmerecía ser soberano de los escitas,

él les propuso la siguiente prueba :cada uno debía tratar de calzar la

cuerda en el arco paterno y ceñir sucinturón de guerra. Por lo visto, estatarea exigía no pocas fuerzas y habi¬lidad, pues sólo el menor de los her¬manos logró llevarla a buen términoy fue, según la leyenda, el primer reyde los escitas; a los dos mayores seles desterró del país.

La búsqueda de este tema en lasimágenes escitas dio un fructuosocuanto inesperado resultado. Ya acomienzos de nuestro siglo, en elextremo norte del mundo escita, en

un solar arqueológico del curso mediodel río Don, se encontró un pequeñovaso de plata cuyo origen era sin dudaalguna la región del mar Negro. Estetipo de vasos lo empleaban losescitas en las ceremonias religiosas.

En el vaso pueden verse seis figurasmasculinas agrupadas en escenas porpares, y en todas se repite un mismopersonaje. Se trata de un viejo escitade barba y pelo largos. En una de lasescenas aparece conversando con otroescita, pero de ninguno de los detallesde la imagen cabe colegir el conte¬nido de la conversación.

En cambio, otra de las escenas es

más explícita : el mismo personajedespide a un guerrero que, a juzgarpor las dos lanzas que tiene en lamano, se dispone a efectuar un largoviaje. Pero la más importante es latercera escena, en la que el mismopersonaje entrega un arco a su inter¬locutor, mucho más joven que losdemás personajes, a tal punto queaún no luce la tradicional barba escita.

Todos los detalles de la composi¬ción permiten interpretarla como ima¬gen de Targuitaos conversando consus tres hijos. A dos de ellos los des-tierra^ (muestra incluso al guerreroel número « tres » con los dedos,

como recordando que todos los her¬manos fueron sometidos a la prueba),mientras al tercero, el más joven, leentrega su arco como símbolo de lavictoria conseguida en la competicióny como emblema de su poder sobrelos escitas.

Unos años antes, en el solar ar¬queológico de la tumba de Gaimanov(en el territorio de la República Socia¬lista Soviética de Ucrania) se encon¬tró un vaso ornado con una compo¬sición de grupo en la cual un jovenescita recibe también de manos de

un viejo un objeto alargado: Por des¬gracia, esta parte del vaso está muykdeteriorada y la imagen del objeto*

15

Page 16: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

* >1

^h\ ^BPS->£e^=>'~

\3Í

rv* ». I i// tiû

mxy

ty^/^^o^- /

"* ^jä

^ wAÍ^V^s

7 ^5? [ 1S¡!*p¥P$

\ ^*n^Pv *v

El dibujo de la izquierda reproducela faja circular que adorna un vaso deoro y plata (dibujo 2 y foto dela página 17) de unos diez centímetrosde alto, descubierto en Gaimanov

(Ucrania) y que data del siglo IVantes de nuestra era. En la fajagrabada figuran dos guerreros congrandes barbas y cabello hirsuto,vestidos según la moda escita(extremo derecho del dibujo). Haciala izquierda puede verse a un hombrede edad que entrega algo a un joven.Se trata posiblemente de unavariante de la leyenda de Targuitaos.

Foto O Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencias, Moscú

no se ha conservado; pero del conte¬nido de la escena y del aspecto delos personajes se deduce que aquíse representa igualmente el momentoen que Targuitaos entrega su arco alhijo menor. En la cara opuesta delvaso están representados otros dosescitas; según la explicación pro¬puesta, se trataría de los hermanosdel vencedor, desterrados por supadre.

Pasemos ahora al más conocido delos vasos rituales escitas. Fue descu¬

bierto hace ya casi siglo y medio enel montículo de Kul-Oba, en la penín¬sula de Kerch (Crimea). En él'âpa-recen siete escitas entregados a dife¬rentes ocupaciones. Uno de elloscalza la cuerda del arco, es decir,realiza la tarea que Targuitaosseñalara a sus hijos. Ello permitesuponer que se trata del mismo tema.

Pero ¿cómo explicar entonces elcontenido de las otras escenas?

Vemos, por ejemplo, a un escita quevenda la pierna herida de otro; allado, otro personaje tantea algo enla boca de su compatriota con eldedo. El tema resulta inesperado.Pero he aquí la explicación.

El arco escita desarmado tiene unavarilla doblada en dirección con¬traria a la cuerda. Si, como muestra

la imagen del vaso, hay que tender

el arco sin poseer la fuerza ni lahabilidad necesarias, la varilla puedesaltar y, enderezándose, golpear bienla pierna izquierda, bien el maxilarinferior. La fuerza de este resorte

liberado es tal que puede fracturar unhueso, y no digamos hacer saltar undiente. ¿No serían esas las heridasrecibidas por los hijos mayores deTarguitaos, incapaces de salir airososde la prueba ? ¿No será esto lo quequiso contarnos el autor del vaso deKul-Oba?

¿Y cómo imaginaban los escitas eldestino ulterior de los hijos de Tar¬guitaos? Herodoto no dice nada alrespecto, pero el folklore mundialconoce multiples variantes de estaleyenda según la cual la rivalidadentre tres hermanos termina con lavictoria del menor. Las variantes sediferencian entre sí por muchosdetalles, pero, a menudo, tienen.el mismo final : . los hermanosmayores, descontentos con el éxitodel menor, lo matan. Este es, porejemplo, el desenlace del relato delos tres hijos de Feridún, héroe de laantigua epopeya irania, cuya figuranos recuerda por muchos de susaspectos a Targuitaos.

Que el desenlace del mito escitapudo ser más o menos el mismoes algo que nos permiten colegir las

De derecha a izquierda : un guerrero tocado de un gorrovenda la pierna de un herido; otro parece hacer las veces dedentista; el que le sigue tensa un arco, terea habitualde los hijos de Targuitaos; finalmente, dos guerreros parecenconversar, apoyados en sus lanzas. Dibujo tomado de unvaso de electro (aleación de oro y plata) descubierto enKul-Oba, Crimea (dibujo 3 de la página 14).

imágenes del segundo vaso exami¬nado : los dos personajes que, segúnnuestra explicación, representabana los hermanos mayores están fuerte¬mente armados, mientras que elhijo menor y el padre poseen sóloarcos. ¿No habrá querido el artistadejar grabado el momento en quenace en aquéllos el cruel plan devenganza contra su hermano y afortu¬nado rival ?

En otro monumento escita, el

famoso peine de oro del túmulo deSoloja, vemos dos guerreros, uno apie y otro a caballo, combatiendocontra un tercero a quien derrotan.¿No es ésta también una represen¬tación de los hijos de Targuitaos?

En la obra del poeta romanoValerio Flaco (siglo I de nuestra era)que conoció una relación del mitoescita un poco más detallada que lade Herodoto y que incluyó nume¬rosos detalles de ella en su poema« La Argonáutica », encontramos laconfirmación. Entre las informa¬

ciones sin relación alguna con estemito, menciona de pronto la luchaentre dos personajes cuyos nombresrecuerdan los de los hijos del Tar¬guitaos de Herodoto. Y Valerio Flacodescribe esta escena tal como estárepresentada en el peine : ya estámuerto el^ caballo del héroe, élmismo está ya herido, ya le llega lamuerte...

Como vemos, las imágenes permi¬ten unir estre sí los fragmentos delos mitos escitas preservados pordiferentes autores y reconstituir deeste modo un solo relato coherente.

La popularidad de la leyenda deTarguitaos y sus hijos y su frecuenterepresentación en los objetos ritualesno deben sorprendernos tratándosecomo se trata de un mito dinásticollamado a fundamentar el derecho delos soberanos escitas al trono. No

queda, pues, excluido que las exca¬vaciones arqueológicas en los mon¬tículos escitas nos den a conoceren el futuro nuevas representacionesdel tema.

D. S. Rayevski

Page 17: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

1Cuatro arqueólogos ucranianospresentan sus más recientes descubrimientos

EN medio de las estepas de Europaoriental se yerguen las tumbasde los antiguos reyes escitas,

túmulos funerarios a los que se da elnombre de « kurganes regios ». Lafama del oro en ellas enterrado era

tan grande que ya en la antigüedadbuen número de esas tumbas fueron

saqueadas.

En los últimos seis o siete años,por iniciativa del Instituto de Ar¬queología de la Academia de Cien¬cias de Ucrania, se han realizado

por primera^ vez vastas y sistemáti¬cas campañas de excavación, utili¬zando los más modernos métodos yaprovechando la ejecución de losgrandes planes de mejoramiento detierras en el sur de Ucrania.

Las excavaciones efectuadas en los

kurganes de los soberanos escitasrevisten particular interés. En efecto,aunque ya habían sido exploradas enel siglo XIX y a principios del XX y apesar de haber sido saqueadas en laantigüedad, las tumbas conteníanaun riquezas verdaderamente fabu¬losas.

Así, los arqueólogos han descu¬bierto en ellas notables piezas deorfebrería, armas, vajilla de grancalidad artística y un sinnúmero deotros objetos, obras maestras delarte antiguo que han venido a aña¬dirse al patrimonio cultural y artís¬tico de la humanidad.

Muchos de esos kurganes regiosdatan del siglo IV o III antes de laera cristiana. Citemos, entre ellos,

Chertomlik, Soloja, Oguz, Alexan-

dropol, Kosiol, Bolchaia Tsimbalka,Chmiriev, etc, todos situados en las

regiones ucranianas de Dneprope¬trovsk, Zaparozhie y Jerson. Por lariqueza de su contenido debe men¬cionarse también el kurgán de Kul-Oba, cerca de Kerch, en Crimea.

Tres arqueólogos ucranianos pre¬sentan seguidamente algunos de sushallazgos más recientes.

Ivan Artemienko

Director del Instituto

de Arqueología de la Academiade Ciencias de Ucrania

2 - El vaso de oro de Gaimanov

EN 1969-1970, la expedición delInstituto de Arqueología de la

t Academia de Ciencias de laRepública Socialista Soviética deUcrania exploró la Tumba de Gaima¬nov, que ocupa una posición centralentre más de cincuenta tumbas de

guerreros escitas, cerca de la aldea deBalka, en la región de Vasilievski (pro-,vincia de Zaparozhie).

Entre los montículos más peque¬ños (1,5 m de altura), la Tumba deGaimanov se destacaba netamente

por su tamaño (más de 8 m de alturay 80 de diámetro). Las dimensionesexcepcionales del montículo, sucontorno destacándose nítidamente

en el horizonte llano de la estepa y subrillante « krepida » (revestido) depiedra blanca ponen de relieve laimportancia y la grandeza del perso¬naje allí enterrado.

La Tumba de Gaimanov servía de

sepulcro a la familia real escita. Elcuadro del rito funerario descubierto

en el túmulo coincide en muchos

detalles con la descripción que Hero¬doto hace de las prácticas funerariasque solían celebrarse en la inhuma¬ción de los reyes escitas. Encontramosaquí los vasos de plata y oro, atributosdel poder real escita copas, ritones(cuernos para beber), cálices, jarrasestán también allí enterrados losmiembros de la servidumbre de quehabla Herodoto.

La fama de la Tumba de Gaimanov,.considerada como uno de los másk

valiosos monumentos escitas, ser

17

Page 18: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

IECIENTES DESCUBRIMIENTOS (continuada,

y debe no sólo al lujo de la vajilla decomedor y cocina y a los varios milesde joyas encontradas en el lugar,sino, sobre todo, a los objetos descu¬biertos en el escondite de la tumba

norte : vasos rituales de oro y plata,tres copas de madera con placas deoro , sujetas alrededor de la corola,un cáliz de plata, dos ritones conbase de plata, boca y punta de oroen forma de cabeza de carnero yleón, y un jarro y una copa redondade plata, descansando en una bandejade plata sobredorada.

A excepción del gran ritón y lascopas de madera, obra de un artistalocal, los objetos del escondite seajustan al estilo del arte griego delsiglo IV antes de nuestra era y son,al parecer, obra de los maestrosjoyeros del Bosforo.

Entre las obras maestras escitas de

la Tumba de Gaimanov ocupa un lugarde honor el pequeño copón de plataredondeado con dos asas horizon¬

tales planas ornadas con cabezas decarnero. El centro del motivo deco

rativo es un ancho friso en bajo re¬lieve en el que aparecen grabadasseis figuras de guerreros escitas.

Las figuras de los guerreros estánsituadas al fondo de un campo des¬cubierto y pedregoso. Desde el puntode vista de la composición, se adap¬tan maravillosamente a la forma del

vaso : las cuatro figuras que sopor¬tan el peso principal de la escena sepresentan por pares en los anchosplanos abiertos de la copa, mientrasque las otras dos aparecen arrodi¬lladas bajo las asas.

En el centro del friso, dos viejosguerreros ricamente vestidos y pro¬vistos de sus armas de gala conversanentre sí. Los detalles del vestuario

el largo caftán de nesgas triangu¬lares ribeteadas de piel y bordadosen hombros y pecho con extrañasfiligranas, los tocados originales, lasarmas y, sobre todo, los símbolos depoder supremo (maza en el guerrerode la derecha y rebenque de dos colasen el de la izquierda indican quese trata de la élite del pueblo escita,de sus jefes.

En el lado contrario del vaso con¬

versan otros dos guerreros, un viejobarbudo y un joven. Las mismas ro¬pas lujosas, las mismas armas delujo; solo las posturas varían un poco :el joven tiene en la mano derechaun cáliz ritual y alarga la otra, exacta¬mente como el viejo. Bajo un asa dela copa, un joven bebe, de rodillas,de un odre; bajo la otra un viejoguerrero, también de rodillas, ex¬tiende una mano hacia la frente yesconde algo en la otra; a su ladose ve un carcaj con flechas y un arco.

Todas las figuras están sobredora¬das; sólo las manos y rostros estángrabados en plata. Cada, figura sehalla perfectamente individualizada.Debe señalarse que, por primera vezen el arte escita, se nos presenta aquía los dirigentes escitas de más altorango.

Vasili Bidzilia

Colaborador científico principaldel Instituto de Arqueologíade la Academia de Cienciasde Ucrania

Foto (G) Ediciones de Arte, Moscú

18

Page 19: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

3 - La vida

cotidiana de

los escitas en

el pectoralde Tolstaya

Maguila

Este espléndido collar de oro(derecha), en el que el orfebre hacincelado con extraordinaria

minuciosidad algunas escenasbucólicas, constituye un verdaderodocumento sobre la vida cotidianade los escitas. Obsérvese,por ejemplo, la composición centralde la parte superior del collar(detalle a la izquierda), con doshombres arrodillados que cosen conuna especie de aguja curva una pielde cordero. Las botas y lospantalones son típicos del atuendode los jinetes nómadas. Estamagnífica joya greco-escita,proveniente de las costas del marNegro, data de fines del siglo IVantes de nuestra era. Fuedescubierta en Ucrania en la

sepultura de un soberano escita.

Foto O APN. Moscú

EN 1971 se excavó uno de los

más grandes montículos rea¬les de los escitas, Tolstaya Ma¬

guila, en cuyo centro se encontraba latumba del soberano y, al lado, dosfosas para los caballos y tres tumbaspara los ; palafreneros. En el sectorsuroccidental del montículo se abríandos entradas a la cámara mortuoria

secundaria, no saqueada.

En ella se encontró el esqueleto deuna joven escita, seguramente es¬posa del soberano, cuyo atuendo-vestidos, tocado, capa y zapatos-aparecía cubierto de aplicacionesornamentales de oro. De oro también

eran todas sus joyas.

Junto a la mujer, en un sarcófagoguarnecido de alabastro, yacía elcuerpo de un niño muerto despuésque ella e introducido en la cámarasepulcral por una entrada indepen¬diente. El pequeño esqueleto estabatambién enteramente cubierto de

collares, brazaletes, anillos y placasde oro; junto a él había varios atribu¬tos del poder real en miniatura, entre ;ellos preciosos vasos para vino y un :cinturón guarnecido de oro.

Todo se conservaba en su orden

original. En efecto, los primeros quepenetraron en la tumba fueron los

arqueólogos, 2.300 años despuésde la inhumación.

En cambio, la tumba central síhabía sido saqueada. Y, no obstante,fue precisamente allí donde se en¬contraron los objetos regios que ibana hacer mundialmente famosa Tols¬

taya Maguila : una espada revestidade oro, adornos para el látigo y, enparticular, un gran peto ornamental,el pectoral real de oro.

El pectoral pesa 1.150 gramos. Sucampo en media luna está divididopor gruesos pero elegantes cordonesen tres franjas. En el centro de lafranja inferior, tres escenas en queun caballo es despedazado por losgrifos, a continuación la lucha de unjabalí y un ciervo contra leopardos yleones, y, al final, unos perros persi¬guiendo liebres; ante ellos, comoun símbolo eterno de paz y silencio,aparecen dos grillos sentados el unofrente al otro.

El ornamento floral ocupa la placade oro del centro del pectoral. Entrela maravillosa enredadera de vasta¬

gos, palmetas, rosetas y hojas, haycinco figuraste pájaros que producenuna serjsación de mañana soleada ytranquila.

Unida por la franja inferior en un

solo panel, la franja central creauna notable ruptura rítmica entrelos primeros planos de las imágenesesculpidas en las franjas superior einferior, uniendo toda^ la obra en unextenso poema sinfónico sobre lavida y las creencias de la sociedadescita.

La composición de la franja supe¬rior es como un himno a la vida hu¬

mana. En el centro, dos hombres

con el torso desnudo y que handejado a un lado aljabas y arcos,confeccionan ropas de piel. A laizquierda y a la derecha, entre apa¬cibles animales domésticos con sus

crías, dos jóvenes ordeñan ovejas.El cuadro culmina con una bandada

de pájaros que vuelan en direccionescontrarias.

El modelado de las figuras alcanzaaquí el más alto grado de plasticidad.La perfección de las proporciones yla extraordinaria belleza y naturalidadde los movimientos hacen de cada

figura una obra maestra de la escul¬tura. El equilibrio plástico y expresivode la composición, que sin duda po¬see un complejo significado simbó¬lico, es sorprendente.

Pero, independientemente del kcontenido regio, lo que el artista F

19

Page 20: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

continuado,

deseaba, consciente o inconsciente¬mente, era transmitir una visión filo¬sófica de su mundo, de sus sueños yde sus esperanzas. Por primera vez,vemos en los objetos rituales propiosdel rey no escenas de batallas ninobles guerreros sino escenas de unaapacible vida terrenal.

Boris MozolievskiColaborador científicodel Instituto de Arqueologíade la Academia de

Ciencias de Ucrania

SIETE LEONES CONTRA UN CIERVO. En cada uno de los extremos de este

torques de oro siete leones persiguen a un ciervo. La joya perteneció .a una dama escita de alto linaje enterrada con todas sus alhajas hace 2.300 años.El torques fue encontrado en 1971 en la misma tumba que el sorprendentecollar de la página 19.

Foto © Ediciones de Arte. Moscú - Museo de Tesoros Históricos de Ucrania. Kiev

GRIFO. Esta pieza de bronce, rematada por un grifoestilizado (izquierda), data del siglo IV antes de nuestra eray mide 5 cm de altura. Fue descubierta en 1971.

JABALÍ PARA LAS ESTEPAS. Este jabalí de oro, de 5 cmde longitud y 20 gramos de peso, fue descubierto en 1970.Se trata probablemente de una obra de la orfebrería celtadel siglo IV antes de J.C. importada de Europa central.Su presencia en Ucrania da fe de la existencia de intercambiosentre el mundo escita y sus vecinos occidentales.

Foto L Tarasova © Museo de Tesoros Históricos de Ucrania. Kiev

Page 21: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

GUERRERO ESCITA. Este sorprendente retrato de un guerrero escita,con casco y coraza, fue esculpido en piedra calcárea hace 2.500 años(véase también el recuadro de la página 13). De su cinturón penden una espadacorta, una especie de aljaba, un hacha de combate y un puñal. En torno alcuello lleva un torques. Con la mano derecha sujeta un ritón o vaso en formade cuerno. Se supone que la estatua, de dos metros de altura, coronaba untúmulo funerario. Fue descubierta en 1975 no lejos del mar Negro.

Foto © V. Klochko. Kiev

Artemisa

cazando

en la

estepaHACE pocos meses, gracias a un

arduo trabajo pero también aun afortunado azar, I.P. Savov-

ski y Y.V. Boltrik, especialistas enarqueología de la primera edad delhierro que dirigían las excavacionesen un solar arqueológico vecino a laaldea de Giunovka, en la región deKameno-Dnieprovsk (provincia deZaparozhie), descubrieron en el fondode un «dromos» (corredor) la tumbaintacta de un hombre y dos caballos.

El hombre, de unos 25 años, yacíajunto a la pared del corredor. Losmodestos objetos que le acompaña¬ban (un arete de oro, un brazalete dehierro, cuentas de vidrio y unas cuan¬tas flechas) dan fe de una situacióndependiente en la sociedad; segura¬mente el hombre era palafrenero. Elcaballo, junto a la pared de en¬frente, también estaba enjaezado demanera modesta (bocado y otraspiezas de hierro).

En el fondo de este humilde deco¬

rado, los arreos del segundo caballo,enterrado en el centro, sorprendíanpor su magnificencia : cabezada enforma de león, dos quijeras donde unleón despedaza un ciervo, cuatro «fa-laras» (orejeras del casco griego) ador¬nadas con una espira y dos placas sinornamentos, objetos todos estos deplata sobredorada. Coronaba la cabezadel caballo una especie de morriónplano de cuero, pintado de azul, y su¬jeta en él una placa de oro calada.

Se trata de un ornamento escita, derara belleza y originalidad, que datade hace 2.400 años. (Véase en laspáginas centrales, publicada por vezprimera, la foto de esta obra maestrade la orfebrería escita).

El tema ilustrado en esta placa esnuevo para el arte escita : una ama¬zona hiere a un ciervo con sus flechas

bajo un árbol simbólico, cuyo ramajerematan dos grandes flores estilizadasde corolas rojas. Bajo las patas delcaballo y del ciervo, crecen retoñosvegetales. En general, los motivosvegetales dominan toda la composi¬ción : los cuernos del ciervo se ase¬

mejan a las ramas del árbol, la esce¬na está encuadrada en todo su

perímetro por una ancha franja orna¬mental con motivos vegetales. m

21

Page 22: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

RECIENTES DESCUBRIMIENTOS

(continuación)

, Todo el morrión parece un lienzodecorativo en miniatura cuyo efectode colorido se logra por la combina¬ción de dorados, azules y rojos. Elartista « teje » encajes calados, procu¬rando llenar al máximo todos los

espacios libres.

La veracidad de los detalles en la

postura de la amazona y su vestuariono debe ocultarnos el carácter mito¬

lógico de toda la escena. El tema dela muerte del ciervo se repite tresveces en los arreos del caballomuerto : en un caso lo devora el león

(quijeras), en otro lo despedaza ungrifo (placas de oro) y en el tercero lomata un hombre (placa de oro).

La escena de caza tiene lugar enun bosquecillo convencional cuyosárboles y plantas se han estilizado almáximo. Todo ello no puede dejarder recordarnos a la cazadora virgende los griegos. Artemisa. Cuenta elmito que el incauto cazador Acteón seadentró en el bosque sagrado de ladiosa, en el valle del Kiferón, dondela vio .bañarse. En castigo. Artemisaconvirtió a Acteón en ciervo, el cualfue presa de unos cazadores...

; La imagen de la mujer arquera nopodía menos de atraer la atención delos escitas, en cuya religión tuvo lugardurante los siglos V y IV antes deJ. C. un intenso proceso de antropo-morfización de los dioses, de que dafe Herodoto.

De todos modos, la interpretaciónde esta escena de caza que acabamosde dar tiene sólo carácter provisional.Aún está por hacer un análisis com¬pleto del material recientemente des¬cubierto.

Vitali OtroshenkoColaborador científico

del Instituto de Arqueologíade la Academia de Ciencias de Ucrania.

~*x.

Página 23Cabeza de ciervo de oro

(detalle de la foto de lapág. 4) que formabaparte de la ornamentaciónde un escudo de hierro.

La figura completa delciervo mide 31 x 19 cm ypesa unos 634 gramos.Han llegado hasta nosotrosdiferentes versiones escitas

de este animal, en oro o enbronce.

Página 25Pequeño caballo de

hueso (11 cm de largo)cuyas perforaciones servíanpara sujetarlo a una prendade vestir. ' Fue ejecutadoentre el siglo V y el III a. deJ.C. y es una muestra típica

del arte de Tuva, región de Siberia central,próxima a Mongolia, donde abundaban loscaballos, los renos e incluso los camellos

salvajes.

Placa de oro que repre¬senta tres animales carní¬

voros devorando una presa.La joya pertenecía altesoro siberiano del zar

Pedro I el Grande consti¬

tuido a comienzos del sigloXVI 1 1 con obras de arte escita de oro macizo queescaparon de los saqueadores de sepulcros.

Hebilla de oro de cinturón

formada por dos piezas unanimal fantástico y uncaballo al que parece ata¬car originalmente unidaspor una placa de cobre conremaches de plata. Se hanperdido las incrustacionesde piedras de colores. Data

' de hace 2.500 años.

Esta pantera de gruesachapa de oro, seguramenteadorno de un escudo, esuna obra acabada del arte

escita-siberiano del siglo Vilo VI antes de nuestra era

(véase la foto de la pág. 40).Pesa unos 220 gramos.En los circulillos centrales

llevaba seguramente engastadas piedras decolor. Pertenecía al tesoro de Pedro el Grande.

Otro ornamento de escu¬

do : la célebre panteraescita, llamada de Kelermés

por el lugar donde fue des¬cubierta, en el Cáucaso

septentrional. Es de oro conincrustaciones de esmalte yde ámbar y constituye una de las más antiguasrepresentaciones de la fiera curvilínea, temafrecuente en el arte de las estepas del siglo Vily VI a. de J.C. Pesa 735 gramos y tiene 23 cmde longitud.

En este extraño objetode oro y de ámbar delica¬damente calado parece dis¬tinguirse un hocico leoninoy unas cabezas de carnero.Se trata tal vez de un adornode trono. Tiene 19 cm de

largo y data del siglo Vil o VI antes de Cristo.

Páginas en color

ESPLENDOR

DEL ARTE ESCITA

Página 24Diadema de oro, ocalathos (tocado en formade cesto), descubierta en

las estepas de la región delDniéper, a unos 200 km delmar Negro. Los combatesde animales que la adornanson un motivo típicamenteescita, mientras que laejecución, a base de placascaladas (probablemente parapoder coserlas a un soporte

de tejido) y con colgantes, es de estilo griego.

Páginas 28-29Jinetes por excelencia, los escitas cuidabanen sus más mínimos detalles los arreos de

sus cabalgaduras, que los escultores yorfebres embellecían con ríeos adornos, tal

los reproducidos en estas páginas.

Página 28Testera esculpida en cuernode ciervo por un artista delAltai en el siglo V antes denuestra era. En fantástica

combinación, una cabeza

de animal de presa descansasobre dos ocas juntas. Lasgarras, el cuello, las patasy las orejas están repre¬sentados simétricamente,

pero cada motivo conservasus características propias.Este « desdoblamiento » plástico es típico delarte escita.

Página 29Figura con cabeza degrifo

y patas de animal rapaz queadornaba una brida. Es de

plata chapeada de oro.Data de hace unos 2.400

años y fue descubiertaen la región del mar deAzov.

Cabeza de grifo de orofundido y cincelado, delsiglo IV a. de J.C, queadornaba los arreos de

un caballo. Tiene 3,5 cm

de alto y pesa 50 gramos.

Cabeza de un ave de rapiña,de bronce. Data del siglo VIo V antes de nuestra era yproviene de la región deKubán. De los tres casca¬

beles que llevaba engan¬chados se han conservado

dos. En el centro puedeverse una cabra montéstum-

bada. Seguramente ador¬naba la pértiga de un carrolanza.

22

Páginas 26-27En esta doble página puede admi¬rarse, fotografiada y publicada porprimera vez, una frontalera de oroque adornaba la cabeza de un caballo

de las estepas hace unos 2.400 años. naba la pértiga de un carro o el asta de unaEsta obra maestra de la orfebrería

escita, que acaba de ser descubiertaen Ucrania, basta por sí sola paradar una idea del lujo de que serodeaban los jinetes escitas. En ellase representa, de manera estilizada, Reno de bronce, della caza del reno (véase el artículo de siglo IV antes de nuestrala pág. 21). La frontalera, sujeta a un era, en el que el realismosoporte de cuero coloreado, se con- del movimiento se lograserva en el Museo de Tesoros Histó- curiosamente utilizandoricos de Kiev, Ucrania. 14 formas muy estilizadas.

Las fotos núms 2, 4. 5, 9, 10, 1 1, 12, 14 : fotos L. Tarasova O Ediciones de arte Aurora, LeningradoLas fotos núms 1, 3, 6, 7. 8. 13 : fotos Lee Boltin © Metropolitan Museum of Art. Nueva York

Page 23: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

*Ä*

i ft

Page 24: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

-

. - .

24

Page 25: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

25

Page 26: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Êà^

-

v^

Ü

*sJ> **S/

z*r

Page 27: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

»^

\jh"4Í

trn

K

v"fcí

^

Î^'ï

A^/

Page 28: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

28

Page 29: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que
Page 30: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que
Page 31: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

PASIRIK

El pueblo congeladodel Altai

por ManyaP. Zavituhina

MARIYA PAVLOVNA ZAVITUHINA,arqueóloga soviética, es secretaria del Depar¬tamento de Historia de las Culturas Prehis¬

tóricas y conservadora de la sección deantigüedades . siberianas del Museo delErmitage de Leningrado. Durante muchosaños ha dirigido las excavaciones de solaresarqueológicos del período escita en laregión de Krasnoyarsk. Es autora de nume¬rosos estudios sobre arqueología siberiana.

Página en color

o En las tumbas congeladas de Pasirik2 (Siberia) se han encontrado en ,

¡ perfecto estado de conservación.3 vestidos, paños y tapices de más de¿ 2.000 años de antigüedad. Arriba,¡ detalle de. un sudadero para caballo,< de fieltro; abajó, el sudadero completo.c El motivo decorativo, a base de

| Z aplicaciones de fieltro de color,'j° 1 representa a un rebeco atacado£ * por un grifo. A ambos lados del_i § sudadero penden tres colgantess 2 hechos con crines y piel. '£ o (Véase también la pagina 33).

EN la meseta montañosa del Altai,en Siberia, el paisaje es severoy majestuoso. Por sus estepas ypastos de montaña erraban, a

mediados del primer milenio antes denuestra era, las tribus nómadas que.los historiadores han asociado a los

legendarios «grifos guardianes deloro» (Herodoto). Al desplazarse consus enormes hatos de ganado y decaballos dejaban detrás, en las oque¬dades de, las tierras altas, innume¬rables kurganes o túmulos funerarios,cubiertos con piedras y guijarros.

En 1929 dos arqueólogos de Le¬ningrado, S.l. Rudenko y M.P. Griaz-nov (véase el artículo de este últimoen la pág. 38), emprendieron la exca¬vación de un antiguo solar funerario,a 1 .600 metros de altitud, en un lugarllamado Pasirik, en el remoto valle deUlagan (Siberia). Las excavacionesdel primer túmulo funerario, que sehabía convertido en un bloque heladoy en el que aparecieron en buen esta¬do de conservación objetos verda¬deramente perecederos, despertaroninterés en el mundo. Los resultados

de la expedición dirigida por Rudenko,que entre 1947 y 1949 había estudia¬do otros cuatro túmulos helados,fueron sorprendentes. De las tumbascongeladas se extrajeron alfombras,vestidos .y calzado, un carro ceremo¬nial, cuerpos momificados de hombresy mujeres, caballos con ricos arneses,utensilios de todo tipo, instrumentosde música y otros objetos, todos ellosde casi 2.500. años de antigüedad.A partir de entonces, el nombre pococonocido de Pasiriksé hizo famoso.

Las depresiones u oquedades delterreno en las que.se encuentran lostúmulos se sitúan fuera de la zonacuyo suelo permanece helado todo elaño. Pero el clima del alto Altai de¬bido a su baja temperatura mediaanual, a sus largos inviernos casi sinnieve y a sus cortos veranos connoches frías ha dado lugar a la for¬mación de subsuelos permagélidos (opermanentemente helados) bajo losmontículos. Las piedras de éstosprotegían a la tierra del calor delverano permitiendo su congelaciónhasta una profundidad de siete me¬tros, donde la temperatura no eranunca superior a 0 grados. El agua

se helaba a medida que se iba filtran¬do en las tumbas. De este modo secrearon en su interior las condiciones

ideales para la conservación de losobjetos en ellas enterrados.

Los arqueólogos hubieron de en¬frentarse con un problema insólito.A fin de poder estudiar el interior delas tumbas debieron prescindir desus instrumentos habituales pale¬tas, cuchillos y brochas y vertergrandes cantidades de agua calientepara derretir el hielo.

Los -altaicos organizaban ceremo¬nias funerarias de un esplendor excep¬cional, de acuerdo con ciertos ritos ycostumbres similares a los de los

escitas, con quienes estaban empa¬rentados. En el fondo de una conca¬

vidad profunda y espaciosa, cons¬truían una cámara cuyas paredes ytecho, recubiertos de madera, teníandoble espesor. En el piso colocabanlos féretros destinados a acoger elcuerpo embalsamado de los muertos.Decoraban las paredes de la tumbacon colgaduras de fieltro y disponíanen ella los efectos personales de loshombres y mujeres allí enterrados,así como vajilla, alimentos y bebidas.

En el exterior de la cámara funera¬ria colocaban caballos ricamente en¬

jaezados, a los que daban muerte eldía del funeral. Dejaban incluso en ellugar algunas de las herramientasempleadas en la construcción de latumba, tales como palas, picos ymazos de madera, así como carre¬

tillas y escaleras de mano. Luegocubrían cuidadosamente la tumba

con corteza de abedul y hojas dearbusto de «té ahumado» y rellena¬ban el hueco con troncos de alercehasta alcanzar el nivel del suelo.

Finalmente,^ amontonaban tierra enci¬ma y cubrían el montículo con pie¬dras.

Del tipo de los objetos encontradosen las tumbas y de la datación conradiocarbono se deduce que los túmu¬los funerarios fueron construidos en

los siglos V o IV antes de nuestra era.

Gracias a las magníficas praderas yajos inviernos casi sin nieve, losnómadas altaicos disponían durantetodo el año de pastos para sus caba- llíos y sus hatos de ovejas y cabras que F

31

Page 32: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

TESOROS CONGELADOS DE SIBERIA

En las extraordinarias tumbas congeladas de la región siberiana del Altai(siglos VI a IV a. de J. C.) se han encontrado en excelente estadode conservación un sinnúmero de objetos normalmente perecederos graciasa los cuales podemos enterarnos de múltiples detalles sobre losnómadas de las estepas. Abajo, corte vertical de una tumba del vallede Pasirik, donde los arqueólogos soviéticos excavaron en 1929 lasprimeras sepulturas. La cámara sepulcral, con sus paredes ytecho de troncos, se hallaba en el fondo de un hoyo de cinco metros deprofundidad. Con la tierra sacada de éste se hizo un montículo pocoelevado coronado con pilas de piedras (la foto de arriba muestra dos deestas tumbas). El viento invernal penetraba entre las piedras ycon el tiempo una sección ovoide del subsuelo en torno a la tumbaquedó congelada para siempre. Todas las cámaras mortuorias dePasirik fueron saqueadas; los ladrones, después de excavar, se abrieroncamino cortando los troncos (obsérvese en el dibujo el « embudo »de tierra y piedras removidas). El agua se deslizó por la abertura y seheló, preservando así para largos siglos los cuerpos de los jefes,de sus mujeres y caballos y todas sus pertenencias de piel, tejido, cueroy madera, que los saqueadores abandonaron. El otro dibujo muestrauna sepultura de Pasirik con varios caballos enterrados,además de sus arreos y los restos de un carro.

Dibujo t Edición« de arte Aurora. Leningrado

Dibujo <Û Scientific American

les suministraban lo necesario parasatisfacer sus necesidades cotidianas

en materia de alimentación, vestidoy abrigo.

Para aquellos pueblos nómadas elcaballo era el principal medio delocomoción. Además de sus peque¬ños caballos de tiro, criados en laregión, poseían veloces corceles depura sangre, de pelaje dorado o cas¬taño, provenientes del Asia central,a los que tenían en gran aprecio yque llevaban consigo hasta la tumba.

Gracias a las excavaciones reali¬zadas, sabemos cómo solían ensi¬llarlos los antiguos altaicos. La sillapropiamente dicha consistía en doscojines de fieltro blando rellenos depelo de ciervo y sujetos con correasal pecho y a la grupa del animal paraque no resbalaran ni hacia adelanteni hacia atrás. Aún no se conocían los

estribos, que comenzaron a utilizarsemil años más tarde. La brida o ramalestaba formada por una cabezadasujeta a la embocadura del freno, concorreas laterales, otra en el. cuello

del animal y una sola muserola.

Los nómadas del Altai vivían pro¬bablemente en tiendas ligeras y por¬tátiles (yurti), en carromatos cuandose desplazaban y a juzgar por lahabilidad con que construían suscámaras funerarias en casas demadera. Utilizaban vasos de barro

y de madera y zurrones de cuero.

Su vestido consistía en camisas

tejidas con fibras de cáñamo okendir, caftanes de piel o de fieltroy pantalones hechos con trozos decuero suave y flexible. Se poníanmedias de fieltro y altas botas decuero con suela blanda. Completabael atuendo un tocado en forma de

gorro alto con orejeras y un cinturónde cuero con hebilla de plata. Lasmujeres llevaban además jubones depiel de ardilla forrados, con mangasestrechas y adornadas y botas cortasigualmente forradas de piel y consuela blanda.

Como armas de guerra los nóma¬das utilizaban hachas de bronce, ,dagas de hierro y arcos y flechas, yse protegían con escudos estriadoshechos con varillas de madera yrecubiertos de cuero flexible.

Los antiguos habitantes del Altaise agrupaban en clanes o tribus, conclases diferenciadas- de cabecillas ynobles terratenientes. El patriarca,que tenía la doble responsabilidad delganadero y del guerrero, desempe¬ñaba un papel capital en la célulafamiliar, aunque también a la madrese la tenía en gran estima. En cuantoa las concubinas, es probable quesólo existieran en las capas supe¬riores de la sociedad, como la de losterratenientes, entre los cuales la

costumbre exigía que, tras la muertede su amo y señor, la favorita fueraestrangulada para que lo acompa¬ñase a la otra vida.

Aunque los habitantes del altoAltai vivían en lugares apartados,lejos de los antiguos centros de

SIGUE EN LA PAG. 36

32

Page 33: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

BESTIARIO ESCITA

En las tumbas de Pasirik se ha encontrado

gran cantidad de magníficos tejidos, algunosde ellos importados de lugares tan distantescomo Persia y China. Las alfombras y lascolgaduras de fieltro que adornaban lastiendas de los nómadas de la estepa estánteñidas de rojo, azul, amarillo y verde;los colores han conservado hasta hoy susmatices originales. A menudo están cubiertasde dibujos que representan seres humanosy criaturas reales o fantásticas. Una figura,mitad hombre y mitad león, alada y concuernos, adorna este fragmento de unacolgadura de fieltro de Pasirik (1). Lossudaderos de los caballos a los que sesolía enjaezar ricamente antes de enterrarlosjunto con sus propietarios estánprofusamente decorados con escenas decombates entre animales. (Véase la página30). Abajo, cuatro motivos zoomórficosreproducidos de los sudaderos. Se trata desiluetas de cuero recortado, parcialmentecoloreadas y cubiertas con pan de oro u hojade estaño : (2) León de enorme cabeza yfauces abiertas; (3) Aguila-grifo clavandoel pico en el cuello de un león-grifo;(4) Grifo agarrando a un alce con lasgarras; (5) Macho cabrío montés derribadoy herido en la garganta por un tigre. (Véansetambién las páginas 34 y 35). El calado enforma de puntos, comas y mediaslunas quese advierte en el cuerpo del animal obedecea una técnica que empleaban frecuentementelos artistas del Altai para realzar losmúsculos principales y las costillas.1

Foto A. Bulgakov O Ediciones de arte Aurora. Leningrado

Dibujos tomados de Frozen Tombs of Siberia por Serguei I. RudenkoO J. M. Dent and Sons. Londres. 1970.

45

33

Page 34: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

34

Page 35: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Animales

fantásticos

hacen cabriolas

en el hombre

tatuado

de Pasirik

Em

î&a

1 <L-

Jbrí:HM

m\

m

Uno de los descubrimientos másinteresantes y enigmáticos que sehicieron en las tumbas de Pasirik fueel del cuerpo embalsamado de un jefe,de avanzada edad, que había sidocubierto de tatuajes mucho tiempoantes de su muerte. Una multitud deanimales reales o fantásticos quese agazapan, saltan, galopan, hacencabriolas o dan coces cubren losbrazos, el pecho, la espalda y partede una pierna. Para tatuar se empleóun método consistente en punzar lapiel y frotar con hollín las perforaciones.En estas páginas se reproducen nuevede esos animales y una foto (4) de undetalle ampliado del brazo derecho,en el que puede verse un ciervo conpico de águila y largas astas rematadaspor cabezas de pájaros. Los númerosque aparecen en el dibujo (11) querepresenta el cuerpo visto de frenteindican la localización de los tatuajesreproducidos en estas páginas. Desdela parte izquierda del pecho hasta elhombro el tatuaje representa la figurade un grifo cuya cola enrollada terminaen una cabeza de ave o de serpiente (1).Un pez (10) y una fila de cabras 'monteses cubren parte de una pierna.En el fantástico desfile de animalesque va desde la mano derecha hastael hombro podemos ver un asno (5),un monstruo alado con cuerpo defelino (6), un animal carnívoro que

Foto O Ediciones de arte Aurora,

Dibujos tomados deSerguei I. Rudenko

muestra sus colmillos (9) y un machocabrío montés de gran cornamenta (7).Adviértase el extraordinario quiebroque éste hace con sus cuartos traseros,semejante al de la bestia fabulosa (3)que aparece en la parte posterior delbrazo derecho. Los artistas del Altai

solían representar en esta postura alos animales atacados por otros másfuertes. Entre los motivos del brazoizquierdo figuran un animal con laspatas delanteras dobladas (2) y unacriatura quimérica en la que secombinan un ciervo, un águila y unfelino (8). En cuanto al significadodel tatuaje, el arqueólogo soviéticoSerguei I. Rudenko, que realizó lasexcavaciones de los túmulos funerariosde Pasirik, supone en su libro FrozenTombs of Siberia (Las tumbas heladasde Siberia) que puede « indicar unnoble origen o ser un signo de virilidado ambas cosas a la vez », y que losmonstruos retorcidos « tenían algúnsignificado mágico aun nodesentrenado. »

35

Page 36: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Foto © Ediciones de arte Aurora, Leningrado

VIENE DE LA PAG. 32

civilización, muchos de los objetosencontrados en los túmulos funera¬

rios hacen pensar en la existencia deun fuerte tráfico comercial y de comu¬nicaciones con otros pueblos, graciasal cual podían adquirir artículos devalor tales como alfombras, tejidosfinos y ricos arnamentos, así comolos caballos de pura sangre que apre¬ciaban más que cualquier otra cosa.

Los nómadas altaicos ofrecían pro¬bablemente a cambio ganado y caba¬llos de sus propios hatos, ademásde pieles, oro y plata. Gruesas alfom¬bras de gran valor y ropa de lanaconfeccionadas en el estilo caracte¬

rístico del Irán llegaban a través delAsia central hasta el Altai, cuyoshabitantes obtenían también de susvecinos orientales sedas bordadas

que debían de ser de inapreciablevalor, incluso en China.

De todos los tesoros encontrados

en Pasirik, acaso el más importantesea una alfombra gruesa y multicolor,tejida con una técnica especial, encuya superficie casi cuadrada (2 X 2m,aproximadamente) se representan ca¬ballos y jinetes, ciervos pastando,grifos y plantas estilizadas. Estaalfombra, la más antigua del mundoen su género, despierta justa admira¬ción por la habilidad de los tejedoresiranios.

Los estrechos contactos que losnómadas del Altai mantenían con sus

vecinos dieron lugar a matrimpniosmixtos, y aunque los rasgos físicosde los hombres y mujeres enterradosen las tumbas son fundamentalmente

europeos, también pueden advertirseotros de tipo indoeuropeo o mongo¬loïde. Se supone que los altaicos, aligual que los escitas, hablaban diver¬sos 'dialectos emparentados con elidioma iranio.

: El arte de las antiguas tribus delalto Altai es extraordinario por suriqueza y único por su variedad yconstituye un rotundo mentís a lacreencia de que el arte escita selimitaba a la fabricación de objetosde metal, hueso o barro.

Tanto en la selección de los temascómo en la realización de sus obras,los artistas altaicos imitaron el estilozoomórfico de los escitas. La alta

calidad de muchos de sus objetosde uso diario encontrados en las

tumbas, de sus vestidos y de jos ar-neses de sus caballerías demuestra

que los nómadas atribuían gran im¬portancia a la creación artística y quepasaban la vida entera rodeados deobjetos de valor estético.

A decir verdad, el arte brotaba del

alma misma del pueblo. Las repre¬sentaciones de animales y aves,salvajes o domésticos, reales o fan¬tásticos, que aparecen en sus orna¬mentos eran algo más que simplesadornos de vivos colores : en ellas se

ponen de manifiesto el espíritu delpueblo, sus creencias, su manera dever el mundo.

En sus viajes al extranjero los anti¬guos altaicos tomaban lo que juzga¬ban mejor del arte de sus vecinos,añadiéndole luego sus propias mane¬ras e interpretaciones. Introdujeronasí en sus creaciones los grifos yesfinges tomados del Asia occidentaly los dibujos a base de flores de loto,de palmeras y de motivos geomé¬tricos provenientes de los países delOriente Medio y de Egipto.

Es posible que en esta predisposi¬ción para el arte de la población delalto Altai influyera la abundancia delos materiales que tenían a mano. Laganadería les proporcionaba exce-

Foto L. Tarasova © Ediciones de arte Aurora, Leningrado

lente fieltro. Preparaban cueros ypieles de alta calidad. De sus bosquesobtenían madera de cedro y alerce,en la que podían realizar magníficastallas, mientras que el mundo vegetalponía a su disposición la gualda, elíndigo y la rubia y la tierra les pro¬porcionaba tintes minerales como elocre, el colcótar y el cinabrio y can¬tidades prácticamente ilimitadas deoro, plata y otros metales que em¬pleaban abundantemente con finesdecorativos.

Como hemos visto, el caballo era

objeto de extremada atención. Enjae¬zado con sus arreos ceremoniales,

debía de presentar un aspecto magní¬fico. Rodeaba su cabeza una máscara

ornamental de cuero; la cabezada

tenía quijeras de madera tallada recu¬bierta de pan de oro. El cojín izquierdode la silla y su cubierta o shabrack sehallaban adornados con aplicacionesmulticolores, y en la crin y la cola delanimal se cosían fundas de cuero.

Los altaicos adornaban sus ropas ycalzado con trozos de fieltro de color,

piel y cuero, con bordados de lana ygalones enrollados' con cintas deestaño. Sus alfombras de fieltro ysus colgaduras, también con aplica¬ciones, eran obras maestras llenas decolor; con ellas decoraban las paredesy el suelo de sus móviles hogares.Tallaban incluso las patas de maderade sus mesas bajas y plegables dán¬doles forma de tigre.

Pintaban también los zurrones de

cuero y de fieltro en los que conser¬vaban la cera y otros productos y lastalegas en que guardaban el caña¬món y las semillas importadas deculantro, así como sus flechas y susescudos. Probablemente los altaicos

no poseían un solo objeto que un

36

Page 37: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

COCTEL DE GRIFOS

Tanto en el arte nómada de Siberia

como en el del mar Negro esmuy corriente el tema del grifoque da muerte a un venado. Ejemploadmirable es el que se reproduceen la portada posterior. He aquí(primera foto de la izquierda)otra muestra, procedente tambiénde Pasirik. Esta pieza de madera, delsiglo V antes de J.C, mide35 cm de altura. La cresta, las

orejas y las alas del grifo, asícomo las orejas y astas del ciervo,son de cuero grueso. En cadapunta de las astas, una cabeza degallo. A la izquierda, dos grifosgiran en redondo en una frontalera decaballo descubierta en una tumba

de Tuekta (Altai). A la derecha,cabeza de grifo admirablamenteconservada con su pico curvo y susgrandes orejas y astas; provienetambién de Pasirik.

Foto © Ediciones de arte Aurora, Leningrado

artista no hubiera embellecido con

su mano.

Sus imágenes preferidas eran losanimales de rapiña (tigres y lobos)y otros animales salvajes (alces, cier¬vos, cabras monteses y moruecos)cuya representación vivida y realistanos muestra el profundo conoci¬miento que los altaicos tenían de sufauna. No menos impresionantes sonsus animales fabulosos, como los

grifos y los tigres alados, que repetíancon mayor frecuencia que los escitas.

La habilidad artística de que supie¬ron dar tantas muestras ha sobrevi¬

vido hasta hoy, transmitida de genera¬ción en generación desde que nacieraeste arte profundamente popular, quenunca fue un secreto celosamente

guardado por unos pocos maestros.

Los artistas altaicos sobresalieron

siempre en la composición de susobras. Con admirable facilidad ymaestría, los escultores en madera,hueso y cuerno adaptaban el tema ala forma del objeto que decoraban.

alargando o acortando el cuerpo delanimal representado, ensanchando sucabeza, doblando en curvas sus cuar¬

tos delantero y trasero. Además,pasaban sin dificultad de una técnicaa otra, del bajorrelieve al dibujo gra¬bado y a la escultura propiamentedicha.

de los rasgos característicosde^ la escultura altaica es la conjun¬ción de todas estas técnicas y el usode materiales diferentes en la reali¬zación de una sola obra. De estemodo un objeto cualquiera podíaestar al mismo tiempo pintado devivos colores y recubierto con del¬gadas tiras de oro, estaño o plata.

Tal complejidad es particularmentenotoria en una cimera de madera ta¬

llada que representa a un grifo conla cabeza de un ciervo en el pico(véase la portada posterior de estenúmero).

En el arte altaico aparecen fre¬cuentemente escenas en las que ani¬males de presa y grifos se lanzancontra ciervos, alces, moruecos o

cabras monteses. Estas imágenesreflejan posiblemente un periodo enel cual las tribus de pastores gue¬rreaban entre sí. Esa época de luchaarmada dio origen a numerosos hé¬roes, en cuyo honor se componíancanciones y relatos épicos. No es,pues, de extrañar que en las cámarassepulcrales se hayan encontrado tam¬bién instrumentos de música : arpasde muchas cuerdas y tambores.

Hoy día, gracias a las excavacionesde las tumbas congeladas del altoAltai, las obras de los maestros altai¬

cos, tan influidos por el arte escita,ocupan el lugar que les correspondeentre los tesoros del arte mundial.

Mariya P. Zavituhina

ALCES

Cabezas de alces, de madera, quesolían adornar las riendas de los

caballos. Provienen de Pasirik. Las

astas han desaparecido. La figuradel alce ocupa un lugar primordialen el arte de los nómadas del norte.

Foto © The Metropolitan Museum of Art, Nueva York

37

Page 38: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

caballería siberiana

de ultratumbapor M¡jail P. Gríaznov

DURANTE largos siglos las vastasestepas que se extiendendesde el Danubio hasta la

Gran Muralla de China formaban

desde el punto de vista histórico ycultural una sola región. Las nume¬rosas tribus que la habitaban teníandiferentes orígenes étnicos e históri¬cos pero gracias a los estrechoscontactos que entre sí manteníanlograron crear una cultura comúna todas ellas.

Esa cultura se fue formando a

través de una serie de etapas dedesarrollo que se sucedieron demanera idéntica y simultanea a lolargo de todo el cinturón úe lasestepas. El proceso comenzó en elperiodo eneolítico, que marca la tran¬sición entre la edad de piedra y la delos metales, transición que en lasestepas eurasiáticas coincidió conel paso de la economía de subsis¬tencia (caza, pesca y recogida deplantas y frutos alimenticios sil¬vestres) a la economía de produc¬ción, que en este caso se basaba enla ganadería.

Esta uniformidad r del desarrollohistórico se manifestó sobre todo en

la época de los escitas, cuando lapoblación de las estepas optó por lavida nómada, sumamente movediza,lo que permitió establecer intensosintercambios culturales entre las

numerosas tribus.

En los últimos años han comenzado

a emplearse, con creciente frecuencia,expresiones como « culturas de tipoescita-siberiano » y « estilo zoomórficoescita-siberiano », pero es muy pocolo que se sabe sobre la zona asiáticade ese gran mundo cultural. Los espe¬cialistas en historia escita se interesan

principalmente por los monumentosde la región septentrional del marNegro y por los orígenes de las tribus

MIJAIL PETROVICH GRÍAZNOV, miem¬bro del Instituto de Arqueología de la Aca¬demia de Ciencias de la URSS, de Leningrado,

ha dirigido las excavaciones del kurgán deArjan, en Tuva, y de los túmulos funerarios dePasirik, en el Altai. Profesor de arqueologíasiberiana de la Universidad de Leningrado,es autor de numerosas obras, una de ellas

dedicada al primer kurgán descubierto enPasirik

^^^_^

a las que cabe llamar propiamenteescitas.

Hasta hace poco, en toda la polé¬mica sobre el origen de los escitasy del estilo zoomórfico de su arte laúnica premisa indiscutible era que lacultura y el arte escitas aparecieronen el siglo Vil antes de Jesucristo yque se difundieron poco a poco, conligeras modificaciones, hacia Oriente.

Sin embargo, los especialistas co¬nocían también desde hacía tiempounos cuantos notables monumentos

y vestigios de los más antiguos nó¬madas de Siberia, magníficos testi¬monios de su arte original. Citemosentre ellos la riquísima colección deobjetos de oro de Pedro I el Grande,los kurganes o túmulos funerarios dePasirik, en el Altai (véase el artículode la página 31), y las artísticas cer¬cas de piedra de los túmulos fune¬rarios de la cultura Tagar, junto alrío Yenisei.

Por otro lado, en los veinte añosúltimos se han descubierto monu¬

mentos del primer periodo escita enel centro y en el sur de la República^Federativa Soviética de Kazajstán, asícomo en las laderas occidentales delAltai y en la República AutónomaSoviética de Tuva.

Esto nos permite afirmar hoy que

las culturas de tipo escita aparecieron,se desarrollaron y florecieron enOriente simultáneamente con la

cultura de la propia Escitia.

Para muchos especialistas fue unasorpresa cuando en 1971 se descu¬brieron, en diferentes puntos de laregión escita-siberiana, tres magní¬ficos monumentos : el kurgán real dePtichata Maguila, cerca de la ciudadde Varna, en Bulgaria; dos ricastumbas de Visokaya Maguila, junto alDniéper, y el kurgán real de Arzhan,en Tuva. Todos ellos datan de los

siglos VIII o Vil antes de nuestra era,es decir, son anteriores al primerperiodo escita. Sin embargo, lamayoría de los especialistas consi¬deran que los dos primeros monu¬mentos citados pertenecen a unacultura preescita o cimeria.

En cambio, el túmulo funerariode Arzhan corresponde a la culturade tipo escita-siberiano plenamentedesarrollada, pero tampoco perteneceal primer periodo escita sino a unoanterior. Si queremos comprenderla importancia excepcional que tienenesos monumentos para resolver elproblema del origen y la formaciónde las culturas de tipo escita-siberiano,es preciso examinar con mayor detalleel kurgán de Arzhan.

38

Page 39: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Foto L Tarasova © Ediciones de arte Aurora, Leningrado

A los jefes nómadas se les enterrabafrecuentemente con sus caballos,

que a veces sumaban varias decenas.Así ocurrió en la gran tumbade Arzhan (siglo VIII o Vil a. de J. C.)descubierta en las montañas

de Saián, República AutónomaSoviética de Tuva. La foto de la páginaanterior nos muestra las ruinas

de la immensa armazón circular de

madera, de 120 metros de diámetro.

A la izquierda, plano de la tumbacon sus cámaras dispuestas en formaque recuerda un panal. Las pequeñasfiguras equinas indican el sitio dondese enterró a los caballos, a razón

de hasta 30 por cámara. Los restosdel rey y de la reina fueron inhumadoscon gran pompa en la cámara central.Abajo, placa de bronce,obra de un artista nómada, descubiertaen Arzhan, en la que se representaun animal salvaje enroscado.

Se trata de una gran tumba depiedra de 120 metros de diámetro,la mayor de las que se han descu¬bierto en las montañas de Saián.

Bajo el^ montículo de piedras seencontró en magnífico estado deconservación una estructura demadera de enormes dimensiones,única en su género. A ras del suelohay una gran armazón cuadrada demadera de 65 metros de superficie.En torno a ella se despliegan otrossetenta cuadrados dispuestos enradios o círculos concéntricos. El

conjunto forma una plataforma cir¬cular de madera, de unos tres metros

de altura, cubierta por un techocontinuo.

Fue el autor de este artículo quiendirigió la excavación del kurgán deArzhan durante un periodo de cuatroaños. Aunque el túmulo había sidosaqueado más de una vez, incluso enla antigüedad, descubrimos una grancantidad de objetos que nos per¬mitieron formarnos una ¡dea bastante

completa de los magníficos funeralesregios.

Según nuestra reconstitución, mi¬llares de personas se reunieron en el

lugar de[ entierro, talando en sieteu ocho días más de 6.000 troncos de

árboles con los que construyeron laarmazón circular de r madera. Estacomprende varias cámaras. En lacámara central, sobre una especiede colchoneta de crines y colas decaballos, se dispuso una armadurade madera de paredes y techo doblesen la que se colocaron los restosmortales del rey y de la reina ensarcófagos separados, consistentesen troncos vaciados. Los dos perso¬najes regios llevaban magníficos ves¬tidos confeccionados con telas mul¬

ticolores importadas y con pieles degran valor (de marta cebellina y otrosanimales).

La tumba fue saqueada. De todo loque debió de ser un tesoro de objetosde adorno no quedaba prácticamentenada de importancia, excepto una kpequeña chapa dorada y varias hojas r

39

Page 40: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

^ del mismo material, unas pocas cuen¬tas de turquesa, un collar de cuentasy 20 pequeños discos de turquesa,que probablemente se hallaban in¬crustados en grandes chapas doradascon figuras de animales, seguramenterobadas por los saqueadores de se¬pulcros.

Rodeando la cámara central portres de sus lados había ocho troncos

vaciados con los restos mortales deimportantes personajes del séquitodel rey. Todos estos personajes, salvouno, eran ancianos y llevaban suntuo¬sos vestidos de piel o de lana. Sóloen algunos troncos se conservabanobjetos tales como adornos de oro yde turquesa, flechas de bronce y unadaga. En otras cámaras vecinas seencontraron otros cinco sarcófagoscon personajes similares.

En el cuarto lado de la cámara realse había hacinado los cadáveres de

seis caballos. De sus magníficosarreos no quedaban sino unos pocosadornos de la brida y de las correasde la silla, algunos de oro y plata,otros de piedra coloreada o de colmi¬llo de jabalí. A todas luces, estoscaballos pertenecían al rey.

Es de "suponer que numerososnómadas representantes de todas lastribus sujetas a la autoridad del rey,es decir, las que poblaban las estepasmontañosas de lo que hoy es la Repú¬blica de Tuva, asistieron a los fune¬

rales, con regalos apropiados para laocasión. En siete cámaras sucesivas,situadas al este de la cámara central,se enterraron 138 caballos: 30 en

cada una de las tres primerascámaras,15 en cada una de las tres otras ytres en la última.

Los caballos de cada una de las

cámaras -viejos sementales- prove¬nían de una misma tribu y eran ente¬rrados con sus bridas y sus sillas. Seencontraron pocos adornos de arreos,pero han llegado hasta nosotrosalgunas magníficas muestras delestilo zoomórfico escita-siberiano,

como un gran arco de bronce querepresenta un ave de presa y unacabeza de caballo tallada en marfil.

Es de suponer que también partici¬paron en los funerales del rey delega¬ciones de los países vecinos, lascuales depositaron sus presentes enseis cámaras situadas al norte y alnoreste de la cámara central. En cadauna de ellas se enterraron caballos

en número que oscilaba entre dos ydiez.

Los adornos de las bridas de cada

grupo de caballos era de un tipo par¬ticular, diferente al de los demásgrupos. Se encontraron cinco magní¬ficas cimeras de bronce con grandesfiguras de machos cabríos monteses.

En una de las cámaras, junto a loscaballos, se enterró a dos ancianosnotables en sarcófagos de troncosvaciados. Habían llegado allí, sinduda, desde algún lugar distante, afin de acompañar en la muerte al rey,reverenciado no sólo en su propiopaís sino también más allá de sus

fronteras. La participación de repre¬sentantes extranjeros en los funeralesde los grandes jefes nómadas eraprobablemente cosa corriente.

Por ejemplo, un antiguo çpitafio dacuenta de que en el funeral del pri¬mer kagán, o jefe turco-mongol,« lloraban y gemían » personas veni¬das de todos los rincones de la tierra,

incluso de algunas tribus y pueblosno sometidos a los turcos, a saber,

de las costas del Pacífico, de la taigasiberiana y del Asia central. Se diceincluso que estuvieron presentes« avaros », enviados de las estepascosteras del mar Negro, y « rum », dela lejana Bizancio.

Los restos del banquete funeral nospermiten hacernos una ¡dea delnúmero de participantes en laceremonia. En torno al kurgán deArzhan se encontraron las ruinas de

más de 300 pequeños cercados depiedra dispuestos en semicírculo; encada uno de eNos aparecieron frag¬mentos del cráneo y huesos de laparte inferior de las patas de uncaballo.

Se trata, sin duda alguna, de losrestos de los caballos sacrificados,

depositados en el lugar del funeraldespués de haber comido los partici¬pantes su carne y una vez terminado elfestín mortuorio, según un rito suma¬mente difundido entre los nómadas

desde remotos tiempos. Suponiendoque se comieran un caballo en cadauno de los cercados de piedra, en elbanquete debieron participar más de10.000 personas.

La tumba de Arzhan constituye unaprueba evidente de que a las culturasdel primer periodo escita las prece¬dieron otras de tipo escita-siberianoya plenamente desarrolladas. Hayespecialistas que quizás vacilen enfechar los monumentos de las estepascosteras del mar Negro en una etapatemprana de la cultura escita. Encambio, la duda no está permitidaen lo que respecta a los monumen¬tos de la región saiano-altaica. Enesta misma región se han descubiertotambién otros monumentos de

idéntico periodo, de tipo plenamenteescita-siberiano. Entre ellos, los másinteresantes son, con mucho, las lla¬

madas « piedras cervales » o « deciervo ».

Ya en el siglo XIX se habían descu¬bierto algunas de estas piedras nolejos de la tumba de Arzhan. Nosotrosencontramos también un fragmentoen el techo de una de las cámaras

de ésta. Las piedras cervales tienenla forma de una columna circular o

rectangular, a veces la de una losa,y representan en forma estilizada unguerrero con sus armas. Su alturavaría entre 50 centímetros y tresmetros.

En lo alto de la piedra, dondedebería encontrarse el rostro del

guerrero, suelen verse tres peque¬ñas líneas, oblicuas y paralelas. Enlos lados, dos aretes y un poco másabajo un collar o un pendiente. La

El dibujo muestra las cuatro carasde una « piedra cerval » del sigloVIII a. de J. C. desenterrada en las

estepas de Mongolia. Estas piedras,cuyo nombre les viene de las figurasde ciervos en ellas. talladas, sonen realidad retratos estilizados de

guerreros nómadas. El que aquíaparece lleva un collar y pendientesen las orejas. Sus armas, entre ellasuna daga y un hacha pequeña,cuelgan del cinturón. Diversas figurasde ciervos aparecen corriendo entorno a su cuerpo. En Mongolia,en la República Autónoma de Tuva(URSS) y, con pequeñas variantes,en los Urales, se han encontrado ungran número de estas « estatuas »,cuya altura oscila entre 50 cmy tres metros.

parte inferior está rodeada por unaespecie de cinturón del que pendenun arco, una daga, un hacha pequeñay otras armas. En la superficie lisa dela piedra se ven con frecuencia ungran ciervo y, a veces, otros ani¬males. De ahí el nombre de piedrascervales que se les da, aunque nosiempre presenten las piedras figurasde ciervos.

La mayor parte de las piedras sehan encontrado en las estepas deMongolia; también han aparecidomuchas en Tuva. Existen asimismo

cerca del lago Baikal y en la regiónmontañosa del Altai. Hacia el oeste,hasta el sur de los Urales, se han

descubierto sólo algunos ejemplaresaislados; en ellos la figura del gue¬rrero es aún más estilizada; en lasuperficie se han tallado únicamenteun hacha pequeña y una daga, aveces suspendidas de un cinturón.

Es verdad^ que las estelas funera¬rias del Cáucaso septentrional seasemejan mucho a las piedras cer¬vales, pero en ellas la figura del gue¬rrero presenta una variante peculiar.Se observan también otras variantes

a medida que se avanza hacia eloeste; en efecto, se han encontrado

una en Rumania y otra en el kurgánde Ptichata Maguila, en Bulgaria.

La escultura monumental de las

estepas asiáticas y de las próximasal mar Negro, con su representaciónestilizada del guerrero, surgió y se

40

Page 41: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

desarrolló en los comienzos mismosde la cultura nómada escita-siberiana.

La imagen del guerrero evolucionó através de etapas sucesivas práctica¬mente similares en la ancha extensión

de las estepas. Y lo mismo sucediócon el arte zoomórfico escita-sibe¬

riano, el cual, pese a su gran variedad,se desarrolló uniformemente en elvasto territorio que se extiende desdeel Danubio hasta la Gran Muralla deChina.

Son todavía muy pocos los monu¬mentos pertenecientes al periodoinicial de la cultura escita descubiertos

en las estepas de Asia y en la regióndel mar Negro. Y aunque es imposiblepor ahora tener una ¡dea cabal delorigen y formación de las culturas detipo escita-siberiano, pueden extra¬erse algunas conclusiones básicas apartir de los hallazgos de la tumba deArzhan y de los monumentos menosimportantes del Altai.

Por ejemplo, ya no puede afir¬marse que las culturas escita-sibe¬rianas surgidas en el siglo Vil antesde nuestra era o un poco más tardese extendieran a partir de un centroúnico, incluido Oriente. Por otraparte, es evidente que el factor de¬terminante del desarrollo de la pobla¬ción de las estepas en aquella épocafue el paso a una nueva economíabasada en la ganadería nómada, loque impulsó la introducción de nue¬vos métodos agrícolas y de nuevasformas culturales.

Es difícil determinar con precisióncuáles eran los desplazamientos y lascostumbres de cada tribu, pero nocabe duda de que a partir del sigloVIII antes de Jesucristo surgieron yse desarrollaron simultáneamente

culturas similares de tipo escita-siberiano. Dados jos intensos inter¬cambios que, pacíficamente o comoconsecuencia de guerras o incur¬siones de pillaje, tenían lugar entre lastribus, es de suponer que los logrosculturales de una tribu eran despuéscompartidos ampliamente por lasdemás.

Es evidente que las antiguas tribusde las estepas asiáticas crearon cultu¬ras de tipo escita-siberiano en lamisma medida que sus contemporá¬neos los escitas. Es incluso posibleque la contribución que hicierontribus asiáticas como las del Altai yde Tuva a la formación del arte y dela cultura escita-siberiana fuera a

veces más importante que la de lospropios escitas.

Finalmente, cabría preguntarsetambién si la Escitia europea fue enrealidad el centro de irradiación de la

cultura escita-siberiana, como muchosestudiosos han creído hasta ahora.

Después de todo, cabe recordar queEscitia se situaba en la periferia delterritorio escita-siberiano y que suproximidad a la civilización medi¬terránea y sus estrechos contactoscon ella pudieron frenar a veces laoriginalidad creadora de los escitas.

Mijail P. Griaznov

41

Page 42: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

LOS CHAMANES

La fuerza y el movimiento son una característica constantede la infinita variedad de las representaciones del grifo en elarte de las estepas. Aquí, la cabeza del quimérico animal,con la mirada y el pico de un águila, forma la empuñadurade una espada escita del siglo V antes de nuestra era,encontrada en Kubán, al este del mar Negro.

Foto © Ediciones El Pensamiento, Moscú

42

Page 43: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Y EL VIAJE MÍTICO

AL MUNDO DE LA FABULA

por Grigorí M. Bongard-Levin y Edvin A. Grantovski

PROFUNDAMENTE autóctona, lacultura escita fue muy influidapor otros pueblos y, a su vez,

influyó considerablemente en las so¬ciedades antiguas, en el antiguooriente y, en mayor medida, en elamplio mundo tribal de Europa yAsia septentrional.

Sabemos de la cultura escita pormuchas de sus diferentes manifesta¬

ciones, pero de manera muy irregular.La tradición popular era ciertamenterica y variada; y existía sin duda unamplio ciclo de relatos épicos en losque se reflejaba la cultura espiritualdel pueblo. Y, aunque la épica escitano ha llegado hasta nosotros, labúsqueda de sus huellas es posibley se muestra prometedora.

Esta posibilidad está determinadapor los nexos étnicos entre las tribusy los pueblos que vivían en las este¬pas del sur de Rusia en tiemposde los escitas y por los amplioscontactos de éstos con sus vecinos

(desde los habitantes de las regionesboscosas de Eurasia septentrional,cuyos descendientes conservabantodavía no hace mucho sus antiguastradiciones folklóricas, hasta loshelenos del sur con su rica literatura

antigua).

Los^ escritores y filósofos antiguosrecurrían con frecuencia a la figura deAnacarsis, el filósofo escita a quienlos griegos consideraban como unode los « siete sabios » de la anti¬

güedad.

GRIGORI MAXIMOVICH BONGARD-

LEVIN, vicepresidente de la Asociación In¬ternacional de Estudio del Sánscrito, esmiembro del Instituto de Estudios Orientales

de la Academia de Ciencias de la URSS.-

Experto de la Unesco y laureado con elpremio Jawaharlal Nehru, ha participadoen varias conferencias internacionales sobre

los problemas relativos a la cultura y lahistoria del Asia central y de la India. Sulibro De Escitia a la India, escrito en cola¬

boración con Edvin A. Grantovski y publicadoen Moscú en 1974, desarrolla el tema delpresente artículo.

EDVIN ARVIDOVICH GRANTOVSKI,especialista en historia antigua del Irán,del Asia central y de los escitas, perteneceal Instituto de Estudios Orientales de la Aca¬

demia de Ciencias de la URSS. Entre sus

obras destaca Historia de las primeras tribusiranias del Asia central (Moscú, 1970).

Entre los variados datos que laliteratura antigua nos ofrece acercade los escitas, se encuentran refe¬

rencias a reyes de la epopeya, héroeslegendarios, dioses del Panteónescita, seres fantásticos como los

cíclopes-arimaspos y los grifos « guar¬dianes del oro », etc., testimonios

éstos de la existencia de complicadasconcepciones mitológicas y religiosasy de una épica rica y desarrollada.

Ciertos elementos escitas penetra¬ron en los temas de la mitologíahelena, mientras otros rasgos propiosde los personajes míticos griegos emi¬graron hacia el norte escita.

La confirmación del origen escitade los motivos aludidos se encuentra

muy lejos de las zonas de contactoheleno-escita, entre los pueblos deEuropa nororiental y Siberia.

En el folklore de estos pueblosexisten seres humanos con un solo

ojo semejantes a los arimaspos,monstruos alados del tipo de losgrifos « guardianes del oro » y figurassimilares á^ las griegas y dotadas derasgos análogos, como las mujeresvoladoras que habitaban en la oscu¬ridad, gemelas de los Gorgonas, lasaladas hijas del titán Forquia, asícomo un viento frío que, como Bóreas,dios del viento norte en la tradición

griega, vivía en una remota gruta.

¿Pueden ser casuales estas coin-ciaencias en leyendas de tan lejanospaíses como la Hélade y las regionesboscosas del norte de Eurasia, regis¬tradas unas por la antigua tradiciónliteraria y otras descubiertas reciente¬mente por folkloristas y etnógrafoscontemporáneos?

En las estepas de la región entreel Volga y los Urales y en las demás allá de estos mohtes vivían los

isedones, conocidos por los griegosgracias a los relatos escitas y al delgriego Aristeo, que visitó Escitia en elsiglo Vil a. de J. C. y, por lo visto,llegó hasta las tierras de los isedones.

En los bosques cercanos a losUrales, seguramente junto a los ríosKama y Volga, vivían los argipeos.« Aquellos de los escitas que lleganhasta ellos usan siete intérpretes ysiete lenguas », escribe Herodoto.

La existencia en tiempos de losescitas de una ruta comercial quellevaba hasta el sur de los Urales ylos bosques del Volga y el Kama haquedado demostrada gracias a los

hallazgos arqueológicos de objetos« importados » del norte del marNegro a estas regiones.

Los contactos entre los escitas ylas regiones boscosas del Volga yel Ural, desde las que se propagaronlas lenguas ugrofinesas, explican lasmúltiples apropiaciones de palabrasque se observan en dichas lenguas yque se relacionan tanto con la culturamaterial y espiritual como con las-concepciones religiosas y mitológicas.

El nombre que" los indoeuropeosorientales y los escitas daban al diosdel viento (« vata ») y que pasa aformar parte del nombre del vientodel norte en las creencias de los

ugros de más allá de los Urales(« vat »), pertenece a este tipo de apro¬piaciones. Y los detalles de las fábulassobre « el viejo viento del norte » re¬cuerdan mucho las noticias que laliteratura antigua nos da sobre« Bóreas », el que traía el frío a Escitia.

Examinemos ahora los testimonios

arqueológicos. De la zona del Kamaprovienen, por ejemplo, una serie defigurillas rituales en forma mitad deave mitad de animal con cabeza de

lobo o perro. Los « grifos », animalesalados, son también un motivo parti¬cular del arte escita, donde general¬mente presentan los rasgos del águilay del león (u otro felino carnicero). Sinembargo, en algunas de las primerasimágenes escitas de la zona del marNegro (siglos VI y V antes de Cristo)el grifo es un ave-fiera con rasgos deperro; y no es casual que en «Pro¬meteo encadenado », Esquilo, quevivió en la misma época, llame a losgrifos ornitomorfos perros « silen¬ciosos » o « que no ladran » (a diferen¬cia de la antigua representación tradi¬cional en que los grifos se parecena los leones).

Examinemos las sustanciosas noti¬

cias que la literatura antigua nosofrece en relación con la descripción« geográfica » de Escitia y de las tie¬rras que se extienden más allá.

De sur a norte se sitúan las re¬

giones efectivamente habitadas porpueblos reales, incluidos los argipeosy los isedones. Tras ellos, y hasta lasgrandes montañas del norte, cono¬cidas generalmente con el nombre deRip, vivían tribus extraordinarias yseres fantásticos, entre los cuales secontaba a nuestros conocidos losk

arimaspos, grifos, etc. En esa misma f

43

Page 44: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

>zona se situaba la morada de Bóreas.Se trata de regiones desheredadaspor la naturaleza, sumidas en la oscu¬ridad, cubiertas de nieve; reina allíel más riguroso de los inviernos.

Pero más al norte, al otro lado delos montes Rip, cuyas cúspides pare¬cen tocar el cielo con sus cumbres

doradas y alrededor de los cualesgiran el sol y las estrellas, en lasalturas montañosas, más allá aun, aorillas del Mar del Norte, se extiende

un país de clima cálido, libre devientos fríos; un país. que producevariados frutos y en cuyos bosqueshabita un pueblo sagrado y feliz (los« hiperbóreos » de la tradición anti¬gua). El sol sale y se pone una vezal año; un día dura seis meses, desdeel solsticio de primavera hasta el deotoño; los otros seis meses son lanoche. En el transcurso de un día los

habitantes siembran al alba, sieganal mediodía y recolectan los frutos porla tarde.

¿Quiénes trazaron este mapa « geo¬gráfico »? ¿los griegos?, ¿los escitas?¿o bien ambos?

Las montañas Rip podrían corres¬ponder a los montes Urales, y enlas leyendas sobre el oro que con¬tienen y los grifos que lo cuidan sereflejan seguramente las ¡deas sobrela existencia de « minas » de oro en la

región de los Urales, ideas que corro¬boran antiguos trabajos mineros enesa región. Pero la cordillera de losUrales va de sur a norte, mientrasque las montañas Rip se extiendenen latitud por todo el norte del mundoescita.

El Mar del Norte, que se extendíatras los montes Rip, puede ser el ecode lo que los escitas sabían acerca delOcéano Glacial Ártico. Sin embargo,según la tradición, allí se situaba elpais del clima cálido y paradisiaco,es decir, una fantasía más. Pero,como ya se ha dicho, en ese país eldía y la noche dura medio año cadauno, y ello es un rasgo que no puedeinterpretarse sino como el reflejo deun fenómeno real : la alternación de

días y noches polares (a pesar que noduren exactamente medio año cadauno).

Los antepasados de la antiguastribus iranias e hindúes llegaron asus respectivos países desde otrastierras, donde habitaban junto a losantepasados de los escitas compar¬tiendo con ellos la economía, la orga¬nización social, la cultura y la reli¬gion.

Basándose en testimonios parcialesque se han conservado sobre losescitas y su lengua, así como en susparalelos en el sistema indoiranio,los especialistas han establecido losrasgos fundamentales del idioma y delos dialectos escitas, el verdaderosentido de una serie de datos sobre

su sistema social y el carácter de losdioses del panteón escita. Los docu¬mentos indoiranios presentan tam¬bién exactas concordancias con las

ideas escitas sobre el Norte. En el

« Mahabharata » y el « Ramayana »,por ejemplo, encontramos el siguientecuadro geográfico :

Lejos, muy lejos al norte de laIndia, tras montañas, desiertos, paísesy pueblos reales, más allá de fantásti¬cos reinos y tribus, se encuentran las

jnontañas sagradas de Meru; sus do¬radas cumbres alcanzan el cielo ya su alrededor giran los astros.

Tras las montañas de Meru está elMar del Norte, o Blanco o de Leche,

y en sus orillas y en las laderas nortede las montañas vive un pueblo fabu¬loso y feliz, « alejado de todo mal,indiferente a la honra o a la deshonra,

de belleza admirable y lleno de vita¬lidad ».

Allí, tras las montañas de Meru,en cuyas cimas « el sol de cabellos deoro brilla durante medio año»...,« medio año dura el día, medio añola noche» y « una noche y un díajuntos hacen un año ». Estos datos se

complementan con alusiones a lainmóvil estrella polar y al sitio queocupan constelaciones que puedenser vistas sólo muy al norte, más alláde los 55° de latitud. Las informa¬ciones sobre esta inalcanzable tierra

septentrional son « transmitidas », porejemplo, por el ave sagrada Garudaal asceta Galava, antes de llevarlo aese lejano « país de la bienaven¬turanza».

Es importante señalar que los datossobre los «fenómenos polares» queincluyen los textos hindúes datan deuna época en que la astronomíaindia no podía ejercer sobre ellos nin¬guna influencia.

De ahí que los motivos polares delos anales hindúes sólo puedan inter¬pretarse como resultado de las noti¬cias introducidas desde el norte,y el marco épico y mitológico que losrodea en la temprana tradición hindúindica su pertenencia al círculo deleyendas que las tribus hindúes guar¬daron de los tiempos de su vecindadcon los otros pueblos de la mismafamilia.

En el antiguo Avesta iranio (o ZendAvesta), así como en las otras obrasafines de la literatura zoroástrica, seconservan temas míticos análogos,entre ellos el de la feliz morada de

ese sorprendente pueblo que ve saliry ponerse el sol una vez por año. Lamorada feliz está próxima a los paísesfríos (donde hay diez meses de in¬vierno y sólo dos de frío verano), alpie de las grandes montañas del norte.Estas montañas, que alcanzan elcielo, desempeñan el mismo papelastronómico que en las tradicioneshindúes y escitas.

Todo esto permite hablar de unmismo origen en lo que toca a lasleyendas indoiranias relativas a lospaíses del extremo norte y a lastradiciones sobre las remotas tierras

situadas más allá de Escitia.

En este punto concuerdan no yatemas aislados sino toda la serie de

nociones interrelacionadas que pro

vienen de una misma base religiosaarcaica.

En cada una de las tres tradiciones

(india, irania y escita), los temassimilares están dispuestos en unmismo orden; todo el panorama estádirigido hacia el^ norte, y va de lasregiones geográficas reales a lastierras legendarias del Océano delNorte, inalcanzables para los simplesmortales. Los vanos intentos de pene¬trar en ellas terminan con la muerte

del audaz héroe, en cuyo camino seinterponen tribus fantásticas y seressobrehumanos.

En este punto se nos aclara la ubi¬cación « geográfica » de aquellos per¬sonajes que los escitas, y tras elloslos griegos, situaban entre Escitiay las montañas del norte : gorgonas,arimaspos, grifos, etc. Los narradoresépicos hindúes, por ejemplo, advertíanque en las cercanías de las montañasMeru existía una zona desierta ytenebrosa, cuya oscuridad llenaba dehorror al viajero, donde vivían mons¬truos, vampiros, mujeres caníbales ymalignos gigantes.

Sin embargo, en las narraciones dela cálida India casi desaparecen losobstáculos invernales.. En la leyendade los iranios, por el contrario, máspróximos étnica y geográficamente alos escitas, se habla del mortal fríoinvernal que viene de las grandesmontañas del norte y de la muerteque espera a los héroes en sus faldas, .bajo la nieve que aporta el vientohostil. Este era, justamente, el papelque desempeñaba en las leyendasescitas el Viento del Norte, quesoplaba desde las faldas de las mon¬tañas Rip y daba muerte a los viajeros.

Es curioso que el mismo Herodotorepita varias veces que es imposible .llegar hasta las regiones situadas másalia de Escitia, al norte, como conse¬cuencia de la gran cantidad de nievey del frío. También él creía que noestaban habitadas por nadie, pero elnorte de Europa, hasta el Océano Gla¬cial Ártico, estaba habitado ya muchoantes de las épocas preescita y escita,y los mismos escitas situaban allí adiferentes « pueblos », si bien losdotaban de rasgos insólitos.

En las leyendas hindúes e iraniashay todo un ciclo épico de gran im¬portancia relacionado con este tema.Al final de ese ciclo el victorioso rey(Yudhisthira en el « Mahabharata » yCosroes en la epopeya irania) aban¬dona su reino y alcanza con vida elbienaventurado país de las montañasdel norte, mientras que los héroes quelo acompañaban mueren en la nieve,según la leyenda irania. Es la nieve laque, según Herodoto, hace infran¬queable el camino hacia la región alnorte del reino escita.

Otros héroes elegidos y hombresjustos pudieron alcanzar ese país sólodespués de la muerte. Y si es ciertoque había otra manera de visitarlo,aunque no definitivamente, ésta sereservaba únicamente para algunossabios de renombre, sacerdotes y ana-

44

Page 45: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

ARIMASPOS

CONTRA GRIFOS

Según la leyenda, másalia de Escitia vivían

arimaspos y grifos, seresfabulosos que, aunquevecinos, no siemprevivían en buenos

términos. He aquí, comoprueba, estas dosimágenes en que losarimaspos, gigantesprovistos de un solo ojo,se enfrentan con los

grifos, guardianes del orode los escitas. Este

episodio legendario debíade estar muy extendidoen la antigüedad, a juzgarpor la sorprendentesimilitud entre las

escenas aquíreproducidas, una(arriba) tomada de untocado ritual de orodescubierto en el túmulode la Gran Bliznitsa,al este del mar Negro,y la otra (abajo) de unrelieve de sarcófagoencontrado en el sur deItalia. Ambas obras

datan del siglo IV antesde la era cristiana.

Fotos O Ediciones El Pensamiento.Moscú

coretas. Esos maravillosos «viajes»constituían el tema de leyendashindúes (Galava, Narada, Shuca en el« Mahabharata »), iranias (Arda-Virazen las tradiciones zoroástricas) yescitas.

En el mundo antiguo se contaba delescita Abaris que « llegó» del país delos hiperbóreos : « atravesaba ríos,mares y lugares intransitables comosi viajara por el aire» y, al mismotiempo, purificaba las almas, curabalas enfermedades, predecía terre¬motos, apaciguaba vientos y calmabael mar.

Las « noticias » sobre Abaris fueron

conservadas por los pitagóricos quelas introdujeron en el sistema de susconcepciones sobre la transmigra¬ción de las almas; pero las leyendasnacieron seguramente de maneraindependiente. También Herodotoconocía los «viajes» de Abaris, delque contaba que « no comía nada ».Pero el gran historiador griego pre¬firió hablarnos más extensamente de

Aristeo, cuyo cuerpo, según él, yacíaen un lugar mientras él mismo seencontraba en otro, o bien que setransformaba en cuervo para seguira Apolo.

La base de las leyendas sobre

Aristeo eran las tradiciones de la

época de los primeros contactos gre¬co-escitas. La difusión de estas leyen¬das se vio facilitada por la semejanzade^ ciertas concepciones religiosas yprácticas escitas con el culto a Apolo,en el cual Aristeo era un iniciado.

El poema « Arimaspea », que seatribuía a Aristeo, habla de viajesal país del «pueblo bienaventurado »,situado tras las grandes montañas,más allá de Escitia, a orillas delOcéano del Norte. El poema tratade un auténtico viaje por Escitia, delas tribus que la habitaban y de suvida y costumbres. El autor conocíalos temas de los mitos y de la epo¬peya de los escitas y sus vecinos,pero, en lo referente al «vuelo» deAristeo al país del bienaventuradopueblo del norte, según ciertos inves¬tigadores, en él se reflejan las con¬cepciones sobre los « viajes » delalma; concepciones que sin dudaprovienen de los cultos de tipo cha-mánico o de hechicería.

«A menudo, el chamán o hechi¬cero pierde conocimiento durante laceremonia del embrujo », escribe eleminente etnógrafo soviético SergueiTokariov, lo que debe de sugerir alos espectadores la idea del «vuelo»

de su alma; el delirio y las alucina¬ciones del chamán consisten con fre¬

cuencia en visiones de lejanos paísesque visita en sus « peregrinaciones ».El culto a las aves desempeñaba unpapel importante : en forma de pájaro(corrientemente de cuervo) el hechi¬cero o su alma « partían » para unlargo viaje, « sobrevolando » paísesconocidos o míticos.

En la antigüedad el chamanismoestaba muy difundido entre los pue¬blos del norte de Asia y de Europa;y a pesar que la religión de hindúes,iranios y escitas pertenecía a un tipodiferente, en sus concepciones épicasy mitológicas se encuentran elemen¬tos comunes a las imágenes de la« mitología norteña ». Existe. f otrateoría, según la cual en la prácticareligiosa de hindúes, iranios y escitashay rasgos semejantes a los del cha¬manismo del norte, especialmenteel de los ugrofineses.

Los especialistas conocen una seriede datos acerca de los nexos anti:

quisimos existentes entre los ante¬pasados de los antiguos hindúes,iranios y escitas y los ugrofineses;entre otros, como ya señalé ante¬riormente, múltiples concordancias kentre las lenguas de estos pueblos; f

45

Page 46: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

una de ellas es el nombre del pro¬ducto por medio del cual chamanesy sacerdotes alcanzaban el estado deéxtasis religioso requerido por elculto.

Con tal fin se utilizaban diferentes

hierbas, entre ellas el cáñamo, cuyascualidades eran conocidas por losescitas que lo usaban en sus ritosreligiosos.

He aquí lo que Herodoto nos dicerespecto de esta práctica : los escitas« colocan tres pértigas, inclinadas lasunas hacia las otras, que cubren contiras de fieltro, y luego echan piedrascalentadas al rojo en un recipienteque se encuentra entre las varas ylas tijas de fieltro. En sus tierras creceel cáñamo, una planta muy parecidaal lino, pero más gruesa y alta queésta. Esa planta crece en estadosilvestre y también se siembra...Los escitas toman las semillas del

cáñamo, entran bajo las tiras defieltro y allí las echan sobre laspiedras calientes; de estas semillasse levanta tal cantidad de humo yvapor que ningún baño heleno puedesuperarlos. Los escitas se deleitancon ellos y aullan fuertemente ».

Quizá sea esta escena el reflejo deuna ceremonia ritual parecida a lasprácticas chamánicas; los « aullidos »serían en tal caso el canto del servidor

del culto a quien el efecto embria¬gador del humo de las semillas decáñamo ha llevado al éxtasis. Esta

descripción de Herodoto, así comoel carácter ritual de la costumbre

descrita por él, se confirman hoy conel resultado de las excavaciones efec¬

tuadas por el conocido arqueólogosoviético Serguei Rudenko.

En los montículos escitas del Altai

(siglos V y IV a. de J. C), en un sueloperpetuamente congelado, se hanconservado pequeñas tiendas de pér¬tigas o varas atadas en la cúspide(dos de ellas tenían aún la coberturade fieltro y cuero). En uno de losmontículos, bajo una de estas tiendasaparecieron varios recipientes decobre con piedras quemadas y semi¬llas de cáñamo parcialmente carboni¬zadas; un saquito de cuero con semi¬llas de cáñamo colgaba de una de lasvaras. La literatura etnográfica des¬cribe rituales similares efectuados en

yurtas y chumas (tiendas de campañade Jos nómadas del Asia central y¿iberia).

Éxtasis y aves

para el paraísoSegún la mitología escita, en las regionespolares existía un país fabuloso donde eldía y la noche duraban seis meses cada unoy al cual podían llegar solamente los héroes

.y los sabios para gozar allí de felicidadeterna. Tal creencia, de la que dantestimonio numerosos autores griegos yromanos de la antigüedad, guarda estrechaanalogía con las antiguas mitologías oepopeyas de la India y de Persia en lascuales las regiones paradisíacas estánsituadas al norte, entre altas montañas.

¿Cómo podían los sacerdotes, sabios yhéroes alcanzar lugares considerados comoinaccesibles? Según la tradición delchamanismo, difundida a través de lasestepas del Asia, el viaje se efectuabagracias al estado de éxtasis, cuyo secretoguardaban los chamanes o hechiceros.Adivino y curandero, el chamán podíatransformarse en ave (a la izquierda, dibujo

Foto y dibujos O Ediciones El Pensamiento, Moscú.

46

Page 47: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Fotos L Tarasova O Ediciones de arte Aurora, Leningrado.

de un chamán siberiano con un vestido de

mangas en forma de alas) y su almaemprendía el vuelo. Una de las maneras dealcanzar el éxtasis consistía en aspirar elhumo de la cannabis o cáñamo indio. En

Pasirik se han encontrado vestigios de loque fue una « tienda de inhalación » (a laizquierda) : las pértigas o varillas quesostenían la tienda y una especie depebetero donde se echaban los granos decannabis. En la India para viajar a lasregiones paradisíacas se utilizaban las avescelestes como Garuda (arriba a la izquierda :miniatura india del siglo XIX). En la Europaseptentrional y en los Urales el ave fabulosaestá representada en diversos grabados enmetal (página precedente) con laimpronta de rostros humanos en el cuerpo. >Arriba : cisnes de fieltro encontrados en una

tumba de Pasirik; adornaban un carro,posiblemente de origen chino.

También se han conservado datosacerca de la utilización de otras plan¬tas como medio para alcanzar eléxtasis religioso, y en los textosreligiosos de la India e Irán existeuna leyenda del mismo origen sobreel robo de una planta ritual (Som)efectuado en las Grandes Montañas

por el ave Garuda, también llamadaShiena en el « Rig Veda ». En la tradi¬ción irania se le denomina Saena, ymás tarde Simurg : es un ser aladocon rasgos de ave fantástica y defiera con aspecto canino.

Estos monumentos del arte escita

permiten suponer que existían allíleyendas semejantes a las que cir¬culaban por la antigua India sobreGaruda y por el antiguo Irán acercade Simurg. Esta enorme « ave fabu¬losa » formaba también parte de lasfiguras mitológicas de las tribus delos bosques de Europa nororiental,los Urales y las regiones más allá deéstos. De tales lugares provienen ungran número de placas metálicas conrepresentaciones de aves y seres conaspecto de aves, en cuyos cuerposfrecuentemente se ha delineado un

rostro o la figura de un hombre enpie. Las excavaciones han demos¬trado que este tipo de motivos yaexistían allí en la época escita.

Esta exposición de las concordan¬cias con la epopeya indo-irania y lamitología de los vecinos septentrionalesde los escitas, antepasados de lospueblos ugrofineses, demuestra quea través de la literatura antigua hanllegado hasta nuestros días muchosde los rasgos específicos de la mito¬logía y la épica escitas.

En éstas se reflejaba, conjunta¬mente con concepciones legendariase imaginarias, el conocimiento delmundo real que rodeaba a los escitas,cuya mitología, como la de otrospueblos, se caracteriza por la combi¬nación de una embrionaria menta¬lidad científica y de la fantasía.

Los griegos no sólo ensancharonsu horizonte geográfico real graciasa sus contactos con los escitas, sino

que, a través de las concepcionesépicas, mitológicas y cosmológicasde éstos, recibieron, aunque en formasemilegendaria, múltiples datos sobrela remota región de los bosques,sobre el Océano Glacial Ártico ysobre los «fenómenos polares».

Grigori M. Bongard- Leviny Edvin A. Grantovski

47

Page 48: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

por Vasili I. Abaiev

LOS escitas, como pueblo, no desa¬parecieron de la tierra sin dejar

huella. Si observamos el mapa etnográ¬fico del Cáucaso, que como es sabido secaracteriza por la heterogeneidad (másde 40 etnias), veremos que en la partecentral del territorio se sitúa un pequeñopueblo, llamado Osetia en nuestros días.La población alcanza apenas los 400.000habitantes.

Desde hace ya mucho se sabe a cien¬cia cierta que, por su origen, los osetasno se relacionan con los vecinos pueblosdel Cáucaso. Llegaron del norte, de lasestepas del sur de Rusia. Su nombreantiguo, era el de alanos; y los alanos,según testimonia Flavio Josefo (siglo Ide nuestra era), eran una tribu escita quehabitaba junto al Don y el mar de Azov.

En la época del gran éxodo de lospueblos (siglos IV y V después de Jesu¬cristo), parte de los alanos atravesó Eu¬ropa hasta Francia y España.

Los alanos que se quedaron en Europaoriental se dirigieron al pie de los montesdel Cáucaso y formaron un poderosoEstado feudal. Se convirtieron al cristia-

VASILI IVANOVICH ABAIEV, destacado

orientalista soviético, se ha especializado encuestiones relativas a la civilización persa y ala lengua y el folklore de los osetas. Esconsultor científico del Instituto de Lingüís¬tica de la Academia de Ciencias de la URSS

y autor de una monografía sobre la geografíalingüística escito-europea.

LOS OSETAS

ESCITAS DEL SIGLO XXnismo en el siglo X, y la Alania de laEdad Media mantenía estrechas rela¬

ciones con Bizancio, Georgia y Rusia.La invasión de los mongoles y las

conquistas de Tamerlán tuvieron conse¬cuencias catastróficas para los alanos.Parte de ellos murieron en las constantes

guerras; otra parte se trasladó a Hun¬gría, donde durante varios siglos mantu¬vieron su integridad étnica bajo elnombre de «yasos ». Un último sector seunió a las incursiones de los mongolesy terminó diseminándose por tierrasextrañas.

Los alanos que continuaron en el Cáu¬caso quedaron confinados en los estre¬chos valles del centro.

El territorio en que se establecieronrecuerda en cierto modo al que, desde elAltai en oriente hasta el Danubio en

occidente, ocupaban las tribus escito-sármatas del siglo I antes de nuestraera. Todavía en el siglo XVIII los osetashabitaban estrechas gargantas del Cáu¬caso central.

Los osetas actuales son. pues, unareliquia del mundo escita. De todos mo¬dos, nos quedan de su antiguo pasadodos tesoros inapreciables : su lengua ysu épica.

Comencemos por la lengua. Hastanosotros no ha llegado ningún docu¬mento escrito en ninguno de los dialec¬tos escitas, pero en las inscripcionesepigráficas griegas del norte del marNegro, escritas en la época escita, seconservan cientos de nombres propios deescitas y sármatas. Especialistas como el

ruso Vsevolod Miller, el alemán Max

Fasmer y el checo Ladislav Zgüsta, handemostrado que esos nombres puedenexplicarse mejor con la ayuda del osetay, por tanto, pueden considerarse comopropios del antiguo oseta. En esosnombres se disciernen fácilmente pala¬bras de uso corriente en la lengua osetacomo « farm » (felicidad). « aldar » o « ar-dar » (señor), « liman » (amigo), « furt »(hijo), « fida » (padre), « sag » (ciervo),«sar» (cabeza), «stur» (grande), etc.

La lengua oseta nos da también laclave para interpretar muchos topóni¬mos del norte del mar Negro y de lazona del mar Azov, nombres de lugares,ríos, poblaciones, etc. Un ejemplo clá¬sico es el nombre del Don, que precisa¬mente en lengua oseta, y sólo en ella,significa « río ». El mismo fonema « dn »puede reconocerse en los nombres« Dniéper » y « Dniéster ».

En el folklore oseta encontramos otrasreliquias del mundo escita no menosexpresivas. Entre los osetas, como tam¬bién entre otros pueblos del Cáucaso. senarran todavía relatos épicos, cuyoshéroes reciben la denominación generalde « nartos »; y de ahí el nombre de« epopeya narta » que se da a este ciclo.El ya mencionado filólogo ruso VsevolodMiller y el sabio francés contemporáneoGeorges DumezM concluyeron tras unescrupuloso análisis comparativo quemuchos de los temas de la narrativa

narta son fiel reproducción de la vida ylas costumbres de los escitas, tal comolas describieron Herodoto y otros au-

UN CRONISTA GRIEGO NOS HABLA DE LOS ESCITAS

objetos raya a la misma altura que lacalidad de su ejecución técnica. Así,en el peine de oro todos los perso¬najes, todos los detalles, fueron cin¬celados separadamente para despuéssoldarlos y pulirlos. Mechas de ca¬bello, pelos de barba y adornos delos vestidos aparecen trabajados conextrema finura.

No menos notable es el virtuosismo

de que da fe el ánfora de Chertomlikcon su friso. Cada hombre, cada

caballo fue fundido aparte e integradodespués en la composición, la cual sesoldó finalmente al vaso.

Gracias al estudio de estos objetos,los investigadores han podido escla¬recer este o aquel aspecto de la so¬ciedad escita. De tal modo, nos es

hoy posible representarnos el arma¬mento de los escitas, los detalles desu indumentaria, los ornamentos deque se rodeaban.

Estas antiguas obras de joyería delnorte del mar Negro con escenasescitas son distintas de las obras

precedentes. Antes, conociendo losdetalles, nos faltaba el conjunto.Pues bien, esas escenas cinceladas yen relieve nos muestran el conjuntoque faltaba. En ellas vemos también

los objetos descubiertos en otrasexcavaciones y podemos comprenderpara qué servían.

Entre el origen de todos estos ob¬jetos y la cultura antigua en parti¬cular la artesanía griega existe unarelación evidente. Se ejecutaron,efectivamente, en el estilo griego ysegún sus tradiciones. Reconocemosel arte griego en la elocuencia gráficade las técnicas empleadas, en lassoluciones que se dan a los problemasde composición y en sus conven¬ciones características. Igualmentegriegos en su esencia son los detallessecundarios y los motivos ornamen¬tales (palmetas, hojas de acanto,trenzados).

Pero la forma y la función de unaserie de objetos de ese grupo notienen nada que ver con la culturagriega. Los vasos de panza esféricade Kul-Oba son característicos de loscomienzos de la cultura escita; sinduda alguna se utilizaban en las cere¬monias de carácter sagrado. En cuan¬to a los torques y a las placas.cosidasen Jos vestidos, los escitas se losponían en los días ordinarios, alcontrario que los griegos.

En resumen, la mayoría de los ob-

(viene de

la pág. 14)

jetos mencionados son griegos por suejecución pero escitas por su estilo.Los especialistas se muestran uná¬nimes : los personajes representadosson guerreros escitas, combatiendo,vivaqueando, etc.

La vida en tiempos de guerra estáampliamente representada, pero tam¬poco se han olvidado las actividadespropias de tiempos más tranquilos.En un vaso de Chertomlik podemosver a varios escitas capturando ymaniatando caballos. También las

escenas de caza figuran entre lostemas tratados. En una copa de platadel kurgán de Soloja varios escitas acaballo, seguidos por sus perros, dancaza a un león. Este se aferra a la patade un caballo. Un jinete levanta sulanza y otro apunta con su arco.Otros dos guerreros, armados con unarco y una lanza, tratan de darmuerte a una leona fantástica, pro¬vista de cuernos.

Del todo diferentes son las escenas

grabadas en algunas pequeñas placasde oro. En las de Kul-Oba y Chertom¬lik una diosa sentada (los personajesfemeninos son raros en los objetoshallados al norte del mar Negro) sos¬tiene un espejo en la mano. Un escita

48

Page 49: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

RECUERDOS DE LA ESTEPA

EN LA MONTAÑA

Las leyendas y el foklore entero de lososetas pueblo montañés del Cáucaso

constituyen aun hoy día una remi¬niscencia de la antigua Escitia. En lafoto, Dris Tautiev, venerado bardo deOsetia del Norte (URSS), uno de los400.000 descendientes actuales de los

escitas, acompaña su canto tocandola kíatmancha.

tores antiguos. Cosas como el vaso má¬gico del que sólo podían beber los másrenombrados héroes, el culto a la espaday al dios de la guerra, los ritos funerariosde osetas y escitas, etc., aparecen tantoen el folklore oseta como en otrasfuentes históricoartísticas.

Cuando comparárnosla epopeya nartacon monumentos análogos de otrospueblos, resalta su originalidad. La figuracentral es una mujer llamada Satana,y difícil será encontrar en la poesía épico-popular del mundo entero otro personajefemenino de la misma estatura física yde igual fuerza artística.

Satana es el alma de la sociedad nar¬

ta : madre de todo el pueblo, mentoray tutora de Soslán y Batradz, sus héroesprincipales; sabia consejera y poderosaencantadora. Todos los hilos del relato

convergen en ella, y sin su participacióny consejo no puede realizarse nada dig¬no de ser recordado. Se puede concebiral pueblo narto sin cualquiera de sushéroes, pero no sin Satana.

Es a todas luces evidente que un per¬sonaje como éste sólo podía aparecer enuna sociedad donde la mujer tuviera unrango y una posición muy elevados. Esasociedad era, según el testimonio uná¬nime de los autores antiguos, la de lossármatas y los masagetos. « Los sárma-tas son gobernados por mujeres », infor¬ma un autor antiguo. Satana tenía elmismo rango que las reinas escitas uotras heroínas populares como Zarina,Amaga y Tomiris, cuyos nombres nosaporta la tradición antigua. La realidadcaucasiana en que vivían los osetas nopodía crear un personaje femenino comoéste.

El medio natural en que transcurren losepisodios de la epopeya narta tampocotiene nada en común, por lo general,con las montañas y gargantas de laOsetia contemporánea. El escenario delas hazañas y aventuras de los héroesnartos son las estepas y el mar. El viento

de las estepas sopla en los relatos y enellos se siente la infinitud de las planiciesde la antigua Escitia. el galope y los relin¬chos de las manadas de caballos o el

ruido de un grupo de ciervos que correnperseguidos por incansables cazadores.

Los nartos están íntimamente ligados alas fuerzas del agua, cosa natural dadoque su primera heroína es la hija deDombetr, soberano de mares y ríos.Todos estos datos guardan estrecharelación con los elementos de la antigualeyenda escita. El animal preferido deescitas y nartos es el ciervo. En los rela¬tos nartos éste recibe con frecuencia el

nombre de «dieciocho-cuernos »; puesbien, los famosos ciervos de oro escitas

poseen justamente dieciocho puntas enlos cuernos.

Decíamos antes que parte de los ala¬nos, que atravesaron toda Europa en elsiglo IV, se establecieron en territoriofrancés. Por lo visto, allí tampoco per¬dieron esa característica de su alma queGoethe llama « Lust zu fabulieren »

(pasión de tabular). Como han demostra¬do las más recientes investigaciones, enel ciclo del Rey Arturo y los Caballerosde la Tabla Redonda existen pasajes ytemas que recuerdan mucho a los nar¬tos; entre otros, el relato de la muerte

del héroe narto Batradz y el de lamuerte del Rey Arturo concuerdan hastaen los detalles : ambos héroes pidenantes de expirar que sus espadas seanechadas al mar (o lago) y, cuando trasalgunos contratiempos se cumple suvoluntad, el mar se agita terriblementey las olas toman el color de la sangre.

Vemos, pues, cómo el folklore de unpequeño pueblo del Cáucaso, los osetas,nos ha transmitido a través de los sigloslo que no fueron capaces de conservar nicrónicas ni documentos históricos : soni¬

dos e imágenes del original e inimitablemundo de los escitas y sármatas.

Vasili I. Abaiev

sentado ante ella bebe en un ritón(vaso para beber en forma de cuerno).Se trata seguramente de una cere¬monia ritual de comunión con ladiosa, tras la libación de las bebidassagradas.

El ritón y su contenido reaparecenen otras placas provenientes de losmismos kurganes. En ellas dos hom¬bres arrodillados beben en el mismoritón. En esta escena suele verse unaceremonia del juramento por lasangre.

Naturalmente, aún . es largo elcamino que nos queda por recorrerhasta que comprendamos e identifi¬quemos plenamente todas las esce¬nas representadas. Seguramente nose trata sólo de representaciones dela vida y las costumbres escitas sinotambién de un aspecto más complejode esa sociedad : sus creencias, sus

mitos. Hay quien piensa que en esasescenas debe verse la ilustración deacontecimientos mitológicos y deleyendas épicas.

Si se examina atentamente la apa¬riencia exterior de estos « retratos »

de escitas, se observa que, si bien losrasgos son regulares, los rostros son

rudos. Los personajes retratados tie¬nen largos cabellos que les caen hastalos hombros y, en su mayoría, barbay bigote. Se visten con caftanes cru¬zados y sus vestidos están adornadoscon arabescos bordados. Calzan bo¬

tas cortas y flexibles que se sujetanen torno a los tobillos con pequeñascorreas, y se cubren con gorros pun¬tiagudos, a manera de capuchones.

Se les ve a menudo con las armas

en la mano : espadas cortas, arcos yflechas en la aljaba sujeta a la cintura,lanzas, hachas, escudos. A veces el

armamento se completa con cascos ycorazas de metal.

Los artesanos griegos conocíanmuy bien a los escitas. Prueba deello es ese trabajo de cincel con queel orfebre reproduce el menor detallede personajes y escenas.

Estas obras se ejecutaron en gene¬ral durante el siglo IV antes denuestra era, época de apogeo delreino escita en que la riqueza y elpoder de sus reyes alcanzaron sucénit. Por entonces se erigieron en laregión de los rápidos del Dniépermajestuosos kurganes, tumbas de lossoberanos escitas en donde se han

descubierto tantos objetos de losjoyeros griegos que trabajaban parasurtir a la nobleza escita de las obras

que preferían, «a la moda escita».

Otra serie de placas reproducen loque parece ser las efigies de las divi¬nidades escitas de que habla Hero¬doto. Por ejemplo, en una frontalerapara caballo, de oro, figura al parecerla diosa Api, mitad mujer y mitadserpiente. A su vez, a Targuitaos sele representa luchando contra unmonstruo en un adorno de bronce

proveniente del kurgán de Bliznitsa.

Todavía hoy siguen haciéndosedescubrimientos. Muy recientemente,excavando los kurganes de las este¬pas de Ucrania, varios arqueólogosdesenterraron joyas del mismo tipoque las de Kul-Oba, Chertomlik ySoloja.

Son éstos los descubrimientos más

recientes. Pero ^ ¡cuántos objetosdeben hallarse aún enterrados I Gra¬

cias a ellos, cuando aparezcan, podre¬mos leer nuevos episodios, hoy des¬conocidos, de la vida de los escitas.

laroslav V. Domanski

49

Page 50: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

LIBROS RECIBIDOS

Novelistas hispanoamericanosde hoy(El escritor y la crítica)Edición de Juan Loveluck

Taurus Ediciones. Madrid, 1976.

El narrador en la novela

del siglo XIXpor Germán GullónTaurus Ediciones. Madrid, 1976.

La marginación de los locosy el Derechopor Rodrigo BercovitzTaurus Ediciones, Madrid, 1976.

Terminología filosófica. Ipor Theodor W. AdornoTaurus Ediciones. Madrid, 1976.

El cine en pedazospor Jaume PicasGalba Edicions, Barcelona, 1976.

Antología poéticade Luis Felipe VivancoIntroducción y selección deJosé María Valverde.

Alianza Editorial, Madrid, 1976.

Episodios nacionalespor Benito Pérez Galdós6. Zaragoza7. Gerona8. Cádiz

9. Juan Martín el Empecinado10. La batalla de los ArapilesAlianza Editorial. Madrid, 1976.

Los cuadernos de la« Petite Dame » 1

Notas para la historia auténticade André Gide, 1918-1929

por Maria Van RysselbergheAlianza Editorial. Madrid. 1976

Cuentos

por Jacob y Wilhelm Grimm

Vísperaspor Manuel AndújarAlianza Editorial. Madrid, 1976

Samuel Beckett

por Klaus BirkenhauerAlianza Editorial, Madrid, 1976

Introducción al estructuralismo

por Umberto Eco, T. Todorov y otrosAlianza Editorial. Madrid, 1976

La filosofía de Nietzsche

por Eugen FinkAlianza Editorial, Madrid, 1976

La comunicación no verbal

por Flore DavisAlianza Editorial, Madrid, 1 976

Inflación y crisis en laeconomía mundial

(Hechos y teorías)por Luis Angel RojoAlianza Editorial, Madrid, 1976

Cuentos

por Julio Ramón RibeyroCasa de las Americas,La Habana, 1976

Cuentos

por Francisco EspinólaC. de las Americas,La Habana, 1976

Cuentos

por Alfredo Armas AlfonzoC. de las Americas,La Habana, 1976

El cumpleaños de Juan Angelpor Mario BenedettiC. de las Americas,La Habana, 1976

mmm ïïLa gran familia de« El Correo de la Unesco »

La edición rusa de El Correo de la

Unesco, que se publica en Moscú,cumple a fines de diciembre sus veinteaños de existencia. En efecto, fue enenero de 1957 cuando apareció elprimer número de la que iba a ser, almismo tiempo, la primera de las edi¬ciones de la revista impresas fuera dela Sede de la Unesco, París, donde sepublicaban ya las ediciones francesa,española e inglesa. A la rusa le siguieron,en once lenguas más, las siguientes :alemana (Berna, septiembre de 1960),árabe (El Cairo, noviembre de 1960),japonesa (Tokio, abril de 1961), italiana(Roma, enero de 1963), hindi (NuevaDelhi) y tamul (Madras, ambas en juliode 1967), hebrea (Jerusalén, septiembrede 1968), persa (Teherán, mayo de1969), neerlandesa (Amberes) y portu¬guesa (Río de Janeiro, ambas en'octubre de 1972) y turca (Estambul,mayo de 1973). A comienzos de 1977se agregarán a las precedentes dosnuevas ediciones : urdu (Karachi, Pa¬quistán) y catalana (Barcelona), con locual el número de idiomas en que sepublica cada mes El Correo será de 17.Se está estudiando además la posibilidadde publicar una edición en lengua kiswahili,que aparecería en Kenia o en Tanzania.

El « hombre de Burgos »A unos quince kilómetros de la ciudad

de Burgos tuvo lugar el pasado veranouno de los descubrimientos paleonto¬lógicos más importantes de los últimosaños. Un grupo de antropólogos de launiversidad de Madrid encontraron. en

una cueva prehistórica restos (entre ellosuna mandíbula entera) de varios indi¬viduos cuya antigüedad se ha esta¬blecido en unos 200.000 a 250.000

años. Se trata al parecer de pitecán¬tropos evolucionados o de neanderthalesprimitivos. El « hombre de Burgos » es,junto con el de Montmaurin en Franciael más antiguo hombre fósil descubiertohasta ahora en Europa.

ffl lu

Una medalla de la Unesco

sobre CartagoLa Unesco acaba de acuñar una

medalla conmemorativa de su programapara la conservación de Cartago, lo cualpermitirá a personas del mundo enterocontribuir a esta campaña internacional.-La medalla, que reproduce el rostro dela « Dama de Cartago » de un mosaicoromano y el «Jinete de Duimés » de unamoneda cartaginesa, es la más recientede una serie emitida por la Unescoen apoyo de sus campañas interna¬cionales con vistas a preservar ciudadesy monumentos en peligro, como Venecia,Mohenjo Daro y Filae. La medalla sobreCartago, que existe en oro (455 francosfranceses), en plata (135 f) y en bronce

(60 f), puede pedirse directamente alServicio Filatélico de la Unesco, Placede Fontenoy, 75700 París.

Ha muerto Alexander Calder

El escultor norteamericano Alexander

Calder, una de las figuras más desta¬cadas del arte de nuestro siglo XX, fa¬lleció en Nueva York et 1 1 de noviembre

pasado, a la edad de 78 años. Suscélebres «mobiles», o esculturas móviles,que comenzó a crear en 1932, y susmonumentales «stabiles» inmóviles,iniciados a finales de los años 50, le

valieron renombre mundial. Sus^ obrasembellecen numerosos edificios públicos,parques y. jardines de todos los conti-,nentes. Uno de sus « mobiles », de unos

10 metros de altura, titulado Espiral(en la foto), adorna la Casa de laUnesco en París, donde fue instalada en1958.

En comprimidos...

La Organización Mundial de la Saludhar recibido cerca de 83 millones dedólares para eliminar la viruela en elmundo entero, mientras que la fabrica¬ción de un solo bombardero estratégicocuesta 88 millones, según informa unartículo de la revista de las Naciones

Unidas Development Forum, en el quese pone de relieve el desequilibrio dela distribución de los recursos mundiales.

El Instituto de Educación de la Unescode Hamburgo (República Federal de Ale¬mania), que actualmente se ocupa parti¬cularmente de los problemas relativos ala educación permanente, celebra esteaño su 25? aniversario.

En el marco de un proyecto conjuntode la Unesco y del Instituto de Educaciónde Adultos de la Universidad de Ghana,este país acaba de publicar su primerperiódico rural, un quincenario en lenguaewe.

Tras su ratificación por Canadá.Dinamarca, Estados Unidos, Noruegay la URSS, ha entrado en vigor unconvenio internacional que prohibe lacaza y la captura de los osos polares,cuyo número es actualmente inferiora 20.000.

50

Page 51: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Indice de « El Correo de la Unesco» de 1976

Enero

POR LOS SECRETOS CAMINOS DEL CEREBRO. Nuestros dos cerebros(Vadim L. Deglin). El cerebro hambriento (Elie A. Shneour). Los cuatroprimeros meses de la vida. La máquina para explorar el cerebro (JoséM. Rodríguez Delgado). Tesoros del arte mundial : Bajorrelieve asirio(Irak)

Febrero

EN BUSCA DE UNA IDENTIDAD CULTURAL. Frente a las caricaturas,

el rostro auténtico de Oceania (Albert Wendt). La « obra de la mano »,expresión total del hombre (Hamadou Hampaté Ba). Para que el arte africanono sea una pálida copia del occidental (Magdi Wahba). Los hijos de la ballena(Yuri Ritjeu). América Latina : originalidad y destino del continente mestizo(Arturo Uslar Pietri). Tesoros del arte mundial : Retrato del difunto (Ghana).

Novikov). A la intemperie (Joseph B. D'Souza). Urbanismo a la carta (YonaFriedman). Del hogar a la «máquina de vivir». Hong Kong (Dan Behrman).Tesoros del arte mundial : Diosa de la fertilidad (URSS).

Julio

EN EL BICENTENARIO DE LOS ESTADOS UNIDOS. LA PRIMERA

REVOLUCIÓN ANTICOLONIALISTA. La experiencia norteamericana(H. S. Commager). Como ven a su país los norteamericanos (R. W. Winks).Tomás Jefferson y Benjamín Franklin. Sobre la Declaración de Independen¬cia. Tomás Paine, adalid de la Revolución norteamericana (B. Bailyn). Elciudanano Paine (J. Janssens). Una rica herencia de pueblos y culturasdiversos (Y. L. Wong y H. C Shore). Cómo el Estado se convirtió enmecenas (N. Hanks). Una revolución que continúa (W. W. Davenport).Tesoros del arte mundial : El muchacho de la rosa (Estados Unidos).

Marzo

LA UNESCO CUMPLE 30 AÑOS. Los primeros años de la Unesco (JulianHuxley). Julian Huxley (Paulo E. de Berredo Carneiro). Una filosofía parala Unesco (J. Huxley). 50 preguntas sobre la Unesco. La Unesco frente a losgrandes problemas del mundo (Amadou Mahtar M'Bow). Presente y pers¬pectivas de un planeta en crisis. Tesoros del arte mundial : El velo de arenade Nefertiti (Egipto).

Abril

HUMOR SIN FRONTERAS (G. Mikes). Gabrovo, capital búlgara de la risa(Bogomil Guerasimov). Aventuras del planario antifreudiano y del gusanólogometido a humorista (James V. McConnell). Las mil y una historias cómicasde Nasreddin Hodscha (Ivan Sop). El mundo no morirá si se muere de risa(Yuri B. Boriev). Pluma en ristre (Iván Tubau). China, jardín secular de larisa y la sonrisa (Kristofer M. Schipper). Tesoros del arte mundial : Elhombre de piel de arcilla (Ecuador).

Mayo

¡TERREMOTOS!. De la aceptación de la fatalidad a la conjuración del peligro(E.-M. Fournier d'Albe). En China se ha logrado predecir la fecha y el lugarde un seísmo (Dan Behrman). Pagan : cuando las pagodas tiemblan (PierrePichard). El próximo terremoto de San Francisco (Karl V. Steinbrugge).Lo que nos enseña la historia sísmica de la humanidad (Nicholas N. Ambra-seys). Tsunamis (Ronald Fenton) ¿Se hundió la Atlántida en el mar Egeo?Tesoros del arte mundial : Escultura prehistórica (Yugoslavia).

Junio

UN LUGAR DONDE VIVIR (Georges Fradier). Un tercio de la humanidadvive en tugurios (Samuel Chamecki). Como construyen su casa millones dehombres (John F. C Turner). El arquitecto, victima propiciatoria (Félix A.

Agosto-SeptiembreEL PLANETA UNESCO. Treinta años de actividades de la Unesco en todo el

mundo. 68 páginas de historietas ¡lustradas, a todo color, realizadas para« El Correo de la Unesco » por Jean Marie Clément et Safoura Asfia.

Octubre

HACIA UN NUEVO ORDEN ECONÓMICO MUNDIAL. Un sistema eco¬

nómico mundial en provecho de las nuevas naciones (Trygve Bratteli).¿Destruir primero el sistema mundial? (Samir Amin). La edad del cobre (IsaR. Selimjanov). Brancusi (Barbu Brezianu). René Maheu (Paulo E. deBerredo Carneiro). La civilización de lo universal (René Maheu). Un centrocultural internacional (Ph. Ouannès). Tesoros del arte mundial : La muchacha

de los ojos cerrados (Etiopia).

Noviembre

EL MUNDO DEL SONIDO. LOS SONIDOS DEL MUNDO (R. M. Schäfer).Máquinas + pop = demasiados decibelios (I. Bontinck y D. Mark). Enbusca de los sonidos perdidos (D. Lowenthal). Cuando el sonido se hizopalabra (A. A. Leontiev). Esculturas sonoras. Psicoanálisis del sonido (P.Oswald). Tesoros del arte mundial : La sirena en el candelero (Hungría).

Diciembre

LOS ESCITAS (B. B. Piotrovski). Los jinetes de las estepas (I. V. Domanski).Arte y mitos de los escitas (D. S. Raievski). Descubrimientos arqueológicosen Ucrania (I. Artemienko, V. Bidzilia, B. Mozolevski, V. Otroschenko).Esplendor del arte escita (páginas en color). Las tumbas de Pasirik (M. P.Zavituhina). Caballería 'siberiana (M. Griaznov). Mitología 'y folklore escitas(G. M. Bongard-Levin y E. A. Grantovski). Los osetas, herederos de la antiguaEscitia (V. I. Abaiev). Tesoros del arte mundial : El santo con cabeza de perro(Grecia).

Para renovar su suscripción

y pedir otras publicaciones de la UnescoPueden pedirse las publicaciones de la Unesco

en las librerías o directamente al agente gene¬ral de la Organización. Los nombres de los

agentes que no figuren en esta lista se comu¬

nicarán' al que los pida por escrito. Los pagospueden efectuarse en la moneda de cada país.

ANTILLAS HOLANDESAS. C.G.T. Van Dorp &

C°. (Ned. Ant.) N.V. Willemstad, Curaçao. -ARGENTINA. EDILYR, Belgrano 2786-88,Buenos Aires. - REP. FED. DE ALEMANIA.

Todas las publicaciones : Verlag Dokumentation,Possenbacher Strasse 2, 8000 München 71

(Prinz Ludwigshohe). Para «UNESCO KURIER»(edición alemana) únicamente : Colmantstrasse

22. 5300 Bonn. - BOLIVIA. Los Amigos del

Libro, casilla postal 4415. La Paz: Perú 3712

(Esq. España), casilla postal 450, Cochabamba.BRASIL. Fundaçao Getúlio Vargas, Serviço

de Publicacoes, caixa postal 21120, Praia de

Botafogo 188, Rio de Janeiro, G.B. - COLOM¬BIA. Librería Buchholz Galería, avenida Jiménez

de Quesada 8-40, apartado aéreo 53-750, Bogotá;

J. Germán Rodriguez N., calle 17, Nos. 6-59,apartado nacional 83, Girardot, Cundinamarca;

Editorial Losada, calle 18 A Nos. 7-37. apartado

aéreo 5829, apartado nacional 931, Bogotá: ysucursales : Edificio La Ceiba. Oficina 804. Mede-

llín: calle 37 Nos. 1 4-73, oficina 305. Bucaramanga:Edificio Zaccour. oficina 736, Cali. COSTA

RICA. Librería Trejos S.A.. apartado 1313, SanJosé. CUBA. Instituto Cubano del Libro, Centro

de Importación, Obispo 461, La Habana. CHILE.Editorial Universitaria S.A., casilla 10.220,

Santiago. - REPÚBLICA DOMINICANA. Li¬brería Dominicana, calle Mercedes 45-47-49,

apartado de correos 844, Santo Domingo.ECUADOR. Casa de la Cultura Ecuatoriana.

Núcleo del Guayas, Pedro Moncayo y 9 deOctubre, casilla de correo 3542, Guayaquil.Únicamente «El Correo de la Unesco»: RAID

de Publicaciones, casilla 3853, Quito. ELSALVADOR. Librería Cultural Salvadoreña. S.A..

Calle Delgado No. 117, San Salvador. -ESPAÑA. DEISA - Distribuidora de EdicionesIberoamericanas, S.A., calle de Oñate 15,

Madrid 20; Librería Al-Andalus, Roldana, 1 y 3,Sevilla 4. Únicamente « El Correo de la Unesco » :

Ediciones Líber, apartado 17, Ondárroa (Vizcaya).- ESTADOS UNIDOS DE AMERICA. Unipub.P.O. Box 433, Murray Hill Station, Nueva YorkN.Y. 10016. Para « El Correo de la Unesco » : San¬

tillana Publishing Company Inc., 575 LexingtonAvenue, New York, N.Y. 10022. - FILIPINAS.

The Modem Book Co., 926 Rizal Avenue, P.O.

Box 632. Manila. D-404. - FRANCIA. Librairie

de rUnesco. 7-9, place de Fontenoy, 75700 París(C.CP. París 12.598-48). - GUATEMALA. Co¬

misión Nacional de la Unesco. 6a. calle 9.27.

Zona 1, apartado postal 244, Guatemala. JA¬

MAICA. Sangster's Book Stores Ltd., P.O. Box

366; 101, Water Lane, Kingston. MARRUE¬

COS. Librairie «Aux Belles Images», 281, avenueMohammed-V, Rabat. « El Correo de la Unesco »

para el personal docente : Comisión Marroquípara la Unesco, 20, Zenkat Mourabitine, Rabat(C.C.P. 324-45). - MEXICO. CILA (Centro Intera-

mericano de Libros Académicos). Sullivan 31 bis.

México 4, D.F.; SABSA, Servicios a Bibliotecas,

S.A., Insurgentes Sur nos. 1032-401. México 12,D.F. - MOZAMBIQUE. Instituto Nacional do

Livro e do Disco (INLD). Avenida 24 de Julho,

1921, r/c e 1o andar, Maputo. - PARAGUAY.Agencia de Diarios y Revistas, Sra. Nelly A. deGarcía Astillero, Pte. Franco 104, Asunción.

PERU. Editorial Losada Peruana, Jirón Contu-

maza 1050, apartado 472, Lima. - PORTUGAL.

Días & Andrade Ltda.. Livraria Portugal, rua doCarmo 70. Lisboa. - REINO UNIDO. H.M.

Stationery Office, P.O. Box 569, Londres S.E. 1.

- URUGUAY, Editorial Losada Uruguaya S.A.Librería Losada, Maldonado 1092, Montevideo.

VENEZUELA. Librería del Este, Av. Francisco

de Miranda. 52-Edificio Galipán, apartado 60337.Caracas.

51

Page 52: i Correo - UNESDOC Databaseunesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074829so.pdf · « el artista no ha tratado de reproducir el cuerpo del animal ni sus detalles anatómicos. Lo que

Un arte antiquísimo

conservado bajolos hielos de SiberiaUn artista siberiano de las estepas del Altai (al sudoeste del lagoBaikal) esculpió hace 2.500 años en madera esta figura deanimal llena de gracia y de misterio. Se trata de la parte supe¬rior de un grifo ave fabulosa, de medio cuerpo arriba águilay de medio abajo león que sostiene en su pico la cabeza deun ciervo. En su cuello pueden verse, en relieve, otros dosgrifos que atacan a una oca. La cresta, los cuernos y las orejasson de cuero. Esta pieza arqueológica, de 35 cm de alto, fuedescubierta en 1947 en una tumba congelada de Pasirik, en lasmontañas del Altai (véase el artículo de la página 31).

Foto C Ediciones de Arte Aurora, Leningrado