Suplemento Cultural 09-06-2012

8
El desnudo artístico en Guatemala 48 horas en el bunker de Aníbal López (A-1 53167) Una idea original de Rosauro Carmín Q. Guatemala, 9 de junio de 2012 Suplemento Cultural

description

Suplemento Cultural 09-06-2012

Transcript of Suplemento Cultural 09-06-2012

Page 1: Suplemento Cultural 09-06-2012

El desnudo artístico en Guatemala

48 horas en el bunker de Aníbal López

(A-1 53167)

Una

idea

orig

inal

de

Ros

auro

Car

mín

Q.

Guat

emal

a, 9

de

juni

o de

201

2

Supl

emen

to C

ultu

ral

Page 2: Suplemento Cultural 09-06-2012

D el 28 al 29 de febrero es-tuve en el apartamento de Aníbal Asdrubal Ló-pez Juárez. Llegamos con el escri-

tor Leonel Juracán des-pués de un día lunes de

recuentos de la publicación de una plaquette de poemas. Encontramos a Aníbal y platicamos en la terraza de esa casa donde vive, desde donde se puede ver todo el tejido diario de vendedores informales, mujeres corriendo para el trabajo, en-fermos esperando consulta a plena calle, desde los pequeños restaurantes, mientras se ha hecho tarde para todos. Porque en Guatemala se siente ya el ambiente extraño de los transitorios hundi-mientos económicos, luego de haber perdido el tiempo en esas guerras donde lo único que se lo-gró fue armar un pasado para el presente. Es por eso que me pareció importante visitar a

Aníbal, que antes de artista, es un penseur de una obra que relata un hibrido de tiempo y arte. Acá frente a ese gran edificio, nos tomamos un tiempo para platicar y llegar a algunas conclusiones entre la risa y el marco que representa para él pasar un periodo de transición, además de estar viviendo frente a ese viejo edificio que es hoy el Hospital General. La obra de Aníbal López pude verla completa

en el bar Ex-céntrico, para su serie Revisiones. Una de las primeras sensaciones fue la de no encontrarle un código común con otros expo-nentes, se ve en su obra una individualidad de pensamiento, una línea intersticial donde o todo falla o todo se reanima en una explicación don-de en algunas piezas predomina un gran sentido del humor. En otras piezas el salto hasta las altas propuestas sintéticas y fuera de los patrones, ha-bitáculos genéricos o formatos que así como apa-recen, así se olvidan. Veo en mis notas, una frase encontrada en un periódico “…la gente que se ha ido afuera es tal vez la que logrado documentar su obra, pero por ejemplo yo nunca he visto la obra de Aníbal López, un excelente artista, en ningún catálogo, sólo me han contado, tradición oral que se pierde con el tiempo...” La nota es de un periódico de fecha inexacta. Pero es evidente que de no ser por las revisiones en el Bar Central tampoco yo hubiera podido ver algo de lo que ha hecho. Javier Payeras en una nota sobre arte con-ceptual también lo cita. La exposición la fui a ver con mi mamá, que

aparte de darme un punto de vista virgen sobre el asunto, me pareció interesante que le gustara el video de un hombre vendiendo piedras frente al Palacio Nacional. La anécdota completa es que después de ver cuanta gente se le juntaba a este

horas en el bunker de

2 Suplemento Cultural Nueva Guatemala de la Asunción, 9 de junio de 2012

Aníbal López (A-1 53167), “Antología de la violencia en Guatemala”, 2012.

FOTO LA HORA: ARCHIVO

Aníbal López (A-1 53167), “Una tonelada de libros tirada sobre la Avenida de la Reforma”, 2003, video, 2’26’’.

FOTO LA HORA: ARCHIVO

Aníbal López (A-1 53167), “Listón de plástico negro de 120 mts. de largo x 4 mts. de ancho colgado sobre el puente del Incienso.” Ciudad del Guatemala, 2003, video, 3’4”.

FOTO LA HORA: ARCHIVO

POR LESTER OLIVEROS RAMÍREZ

Desde la portada

personaje en la venta de pomadas, alguien afirmó que “el hombre podría vender hasta piedras”, parece que Aníbal se volteó y dijo “…veamos si de verdad puede vender hasta

piedras…”, le pagó su tiempo y le consiguió un costal de piedras, que, finalmente, como ve uno en el video, terminó vendiendo. Economía informal, es una de las exposiciones donde se ve una pieza:

Se vende se, alquila , se presta se regala, se ve la simplicidad casi Zen del pensamiento. Se debe-ría de hablar de que Aníbal López hace Koanes gráficos. Otra obra que recuerdo es mucho más minimalista y concreta (pero es muy importan-te que se lea con una sonrisa cómplice ante el tiempo, la historia del arte y la actualidad), son las acciones en espacios urbanos punto en movimiento y la distancia entre dos puntos, uno no puede dejar de pensar en todo lo que se puede desprender de una idea así. De eso vienen varios carteles con faltas de ortografía colgados en puntos de la ciudad o la variación de señales de transito en la que hay contextos se-mánticos. Todo éste universo desfragmentador, crea ese otro mundo en donde nada es imposible y todo se piensa en grande, entre la polución de la mañana, nos cuenta el

artista de países como Alemania, España, Bra-sil, México y Argentina, en cada país una ex-posición, gana la Bienal de Venecia una de las más reconocidas por conocedores del mundo del arte, ahí mismo, contándonos de un paseo en limosina por New York. Entonces cantamos un par de versos de Sex Pistols: I am an antichrist/ I am an anarchist/ Don’t know what I want/ But I know how to get it/ I wanna destroy passerby…

Jennifer Paiz, la compañera de Aníbal, de una forma bastante espartana y con mucha filosofía ordena y se dedica a los quehaceres de la casa, es ella quien me cuenta de las carencias en esa casa donde ahora tratan de vivir, sin agua, con vecinos un tanto violentos, y con los tres niños a cargo de los dos. Le digo que se parece mucho a las mujeres de los escritores del Boom, que iban a donde fueran sus esposos, como si ellas también presintieran algo del misterio del arte. En estos días, Aníbal López hace menos ta-

reas por una hinchazón en su pie izquierdo. Sin embargo, con el gran sentido del humor que lo caracteriza, me sigue hablando en broma y en serio de las galerías de arte guatemaltecas. Me nombra la escuela situacionista y he tenido que agotar la enciclopedia y algunas páginas de Internet para encontrarme con Guy Ernest Debord , Malcolm McLaren, el mayo del 68 en Paris, los surrealistas, y encuentro parte de todo este discurso en su intervención en Argentina en donde fundió en concreto varias y quizás muchísimas fotografías de un estudio de ros-tros de guatemaltecos con el mismo nombre: un pensamiento con un soporte ideológico fuerte es hecho: la imagen que llega hasta mí es de un enorme bloque cuadrado de concreto con algu-nas hojas en medio que aún se ven tras la fun-dición y secado del cemento, los rostros están ahora perdidos en esa mole de varias toneladas, indestructible. Hay una estética poética, como en su obra en la

que deja caer desde un puente un rollo de plás-

48 aníbal lópez (a-1 53167)

El pensamiento es lo más veloz que existe, una idea puede superar la velocidad de la luz.Aníbal López

Page 3: Suplemento Cultural 09-06-2012

horas en el bunker de

Suplemento Cultural 3Nueva Guatemala de la Asunción, 9 de jumio de 2012

Aníbal López (A-1 53167), “El sorteo”, 2004, performance. FOTO LA HORA: ARCHIVO

Aníbal López (A-1 53167), “La distancia entre dos puntos”, 2002, performance, Sol del Río Arte Contemporánea, Guatemala.

FOTO LA HORA: ARCHIVO

Aníbal López (A-1 53167), “Lacandon”, 2006, 187 x 153 cm. FOTO LA HORA: ARCHIVO

tico negro que ondea de alguna forma errante a lo largo de esas casas de asentamiento, para la época de Ríos Montt. Puede ser tan provocador como Yves Klein, ante el espectador guatemal-teco, el fluxus de dos puntos a cierta distancia que lograban una línea imaginaria es una de las piezas que en lo personal me parece trascenden-te desde la aparente sencillez y fuerza formal que subyace.

SU CASAYa lo he escrito, vive frente al Hospital General

“fúnebre edificio del que se escapan almas una hora tras otra.” La casa en la que vive Aníbal es una casa hecha para alquilar apartamentos muy pequeños. En las palabras de Jennifer Paiz “no debieran pagar lo que les cobran pues nunca hay agua, y las condiciones son precarias”. Ellos vi-ven en el segundo nivel.Leonel Juracán está sentado sobre un sofá de

diseño, bastante minimalista. Hablamos de la moral y la ética, de algunos programas de tele-visión de los 90´s, de pintores buenos y malos, de escritores como Foucault y grandes magos como Demian Herst o Jeff Koons. Aníbal se va poniendo serio pero no pontifica ninguna res-puesta, ninguna idea precisa, hablamos de artis-tas e intervenciones y happenings. Desde donde estoy puedo ver un cuadro mediano al que Aní-bal llama “un pequeño proyecto” para algo que va desarrollar más adelante. Dice cosas como “hay que pensar en grande, el arte debe pensar-se desde una perspectiva infinita”. El cuadro que ahora veo con una lupa de juguete, se lo ha regalado a su mujer. Ella, bromea diciendo que en lugar de un ramo de rosas, le ha regalado un cuadro con una caja de muerto. Pero Anibal ahora carga a Amadeo y Alicia, sus hijos peque-ños y se ríe, desde sus lentes graduados sus ojos parecieran unos pequeños telescopios. Jennifer parece una adolescente a la par de Aníbal, que la abraza mientras yo me preocupo de que su hija Alicia, de unos 3 años, no se caiga al hacer malabares en una silla. Sentados en aquella salita de la casa vamos

compartiendo como en un salón cultural. La

casa de Aníbal se nos vuelve algo así como una despensa de pensamientos o una alacena de ideas, yo particularmente me preocupo por escuchar cada reflexión y me parece que tienen mucho que ver con el entorno. Dos gatos se pa-sean por las habitaciones. Puma, hace su entrada rompiendo una paleta de vidrio de la ventana. La otra es una gata que entre risas, dudamos si en realidad esta “cargada” o tiene un tumor por-que según todos ha tardado ya mucho en tener a sus gatitos. Nos invitan a desayunar huevos revueltos y

frijoles. Hablamos de la obra. Le pregunto por esa última marcha del ejército de Guatemala (30 de junio) sobre la sexta avenida y los costales de carbón molido por toda la sexta avenida. Me dice que todo lo hizo de madrugada, en estado de excitación y cierto temor, sin embargo, aun-que las personas de limpieza de la municipali-dad intentaron limpiar todos esos diez sacos de carbón, siempre dejaron residuos. Me contó que se tomaron fotos que ahora están valoradas en dólares para compradores internacionales. Ade-más uno de los principales motivos de la obra era poner en evidencia esos lugares clandesti-nos de tierra arrasada en la que hoy en día toda-vía son carboneras de cuerpos calcinados. Me cuenta todo eso y hasta ahora noto sus lentes con nuevos aros Ray Ban, que están sobrepuestos. Para hacer una descripción de la casa de Aníbal

López tengo que decir que hay dos dormitorios y una sala que se divide sin límites precisos en-tre, cocina, sala y comedor. Cerca de la puerta hay un mueble con un televisor en el que los niños ven caricaturas toda la mañana. Al mediodía, Aníbal y su esposa se ponen de

acuerdo para hacer un almuerzo, y terminamos buscando un taxi para ir a traer al colegio a su hija mayor, Daniela.

EN EL TAXISalimos a la calle. Enfrente el ir y venir de

gente. Me doy cuenta que ya pusieron unas gruesas puertas de metal en la entrada del Hos-pital General. Algunos indigentes conservan su posición desde las seis de la mañana, tirados a

media calle a la una de la tarde. Un taxista habla con un señor y al acercarnos le negociamos el viaje. Vamos para la zona dos por una cantidad que equivaldría a un libro o un litro de cerveza y, no es que el juego de palabras sea gratuito, hemos accedido a darle plática al taxista que dice que Aníbal parece pintor.- Si, soy artista, he hecho algunas obras en casi

todo el mundo y todavía soy pobre –dice Aníbal, de buen humor.- Mire usted, yo alguna vez, ya ve que uno sueña con cosas, me gusto eso que me dijo, yo hubiera querido ser cantante –dice el taxista.Llegamos al colegio de su hija de nueve años

y, bajo el sol de finales de febrero, un día martes, pienso que es interesante que la hija de un artista quiera ser pintora también; me cuentan que hace garabatos, dibujos a marcador con su firma y los pega en todo el corredor del segundo nivel de su casa, como si estuviera en una exhibición de arte. Incluso, más adelante me querrá vender uno de sus dibujos, que yo compré con una gracia que sólo puede dar el segundo día de resaca.

EL PRÉSTAMOVeo un video en el que Aníbal López, entrevis-

tado por Emiliano Valdez en las instalaciones de CCE, nos dispara un resumen de sus comienzos. Desde el profesor que le profetiza una vida en el arte, hasta su breve confesión en la pieza que de-nominó “El Préstamo”. El préstamo, ya hablan-do con Aníbal fue más que un momento, todo un performance. En el video explica que era de buscar a un personaje de cierta apariencia y edad; luego, con un arma (prestada y previamente des-

cargada) subieron a este sujeto y le apuntó con el arma y le pidió todo el dinero que llevaba. En un principio el hombre le dio treinta quetzales, luego, al ver la determinación, le entrega algunos billetes de a cien dólares, lo deja ir, y allí empieza el verdadero préstamo. Pues el dinero pagó parte del vino e impresión de volantes. En las palabras de Aníbal “fue increíble que aunque yo lo publi-qué, e hicimos la exhibición, nunca hubo una de-nuncia…, y a pesar de la experiencia, el hecho y las criticas posteriores, todo aquel que bebió vino en esa exposición, terminó siendo cómplice”.

DOCUMENTA (13)El arte de A-1 53161 invita a desaprender el

arte como hasta ahora lo hemos entendido, dejar por un lado los conceptos y empezar a vivirlo en plena vía peatonal urbana de cualquier país del mundo. Su nombre, el nombre con el que firma todos sus cuadros es su número de cédula. Esto ya es una pieza del rompecabezas humano que de una u otra forma encaja y desencaja en ese mapamundi del arte conceptual. Ahora se per-fila para la importante exhibición de arte de todo el mundo en Documenta, Kassel Alemania. La pieza que lleva es un sicario, al que le pagará por hora, el boleto de ida y vuelta. Contendrá la dialéctica de la ira de u n país donde mueren por lo menos 25 personas diarias, y una vida quizás ahora mismo, con un precio de menos de cien quetzales. Por último me recuerda algo “El pensamiento es lo más veloz que existe, una idea puede superar la velocidad de la luz” me dice, mientras comemos un filete de pescado y decimos ¡salud!

Page 4: Suplemento Cultural 09-06-2012

4 Suplemento Cultural “TRIBUNA, NO MOSTRADOR”, Clemente Marroquín RojasDECANO DE LA PRENSA INDEPENDIENTE

Nueva Guatemala de la Asunción, 9 de junio de 2012

POR JUAN B. JUÁREZ

E l Primer Salón del Des-nudo abierto actualmente en la sala de exposiciones de la Escuela Nacional de Artes Plásticas reúne pin-turas y dibujos de artistas

que van desde la Generación del 40 (Graje-da Mena, Dagoberto Vásquez, Juan Antonio Franco) hasta jóvenes creadores de la última promoción ( María Isabel Rosales), y entre esos extremos a “especialistas” reconoci-dos del desnudo como Manolo Gallardo, Ernesto Boesche, César Cartagena, Marvin Olivares, Byron Rodas y a otros cultivado-res ocasionales pero no menos talentosos (Erwin Guillermo, Zipacná de León, Luís Díaz, Luís Robles) de este exigente género artístico que tiene, como el retrato, el paisaje y la naturaleza muerta, reglas muy estrictas que se derivan del concepto de “desnudo artístico” y se refieren a las formas y a los objetivos de la representación del cuerpo hu-mano despojado de sus vestimentas.

Da la impresión de que uno de los ob-jetivos que persigue la muestra es tomarle el pulso al público, de ver cómo reacciona ante unas obras que ponen frente a sus ojos el cuerpo humano no sólo desnudo sino pro-clamando su belleza y reclamando una mi-rada de admiración que, hasta cierto punto, neutraliza el deseo. Así, aunque se puede situar a las obras y a los artistas dentro de una sucesión temporal, evidentemente el criterio que rige en el Primer Salón del Desnudo no es histórico: los grandes nombres que figu-ran en la muestra están más bien en función de señalar que existe entre nosotros una tra-dición del desnudo artístico que tiene nobles y virtuosos cultivadores, como una manera muy precavida de anticiparse a reacciones demasiado viscerales de un público que los organizadores suponen muy conservador.

Y así, con ese criterio, pareciera que de lo que se trata es de conducir al espectador por los caminos excelsos de la tradición hasta las propuestas más audaces de los “desnudis-tas contemporáneos”, que, como si de una competencia se tratara, hacen gala no sólo del dominio de la figura humana y las técni-ca de representación visual sino sobre todo de un atrevimiento (que no es artístico ni liberado de prejuicio sino simplemente una provocación gratuita), que fuerza los límites del pudor, que son también los límites de un desnudo que quiera merecer el calificativo de artístico, que, en como género, es tradi-cional y académico.

Se dirá entonces que el pudor es algo subjetivo que varía de una persona a otra, que está culturalmente e históricamente de-terminado, que varía de una sociedad a otra, de una a otra época, y que justamente y de hecho los hombres y las mujeres de nuestra sociedad y nuestra época se muestran menos renuentes a la hora de mostrar en público

Galería de artistas

El dEsnudo artístico (2)

decide la moda ni el grado de permisividad social, sobre todo si se habla en un contexto que, como el nuestro, está determinado por los intereses del mercado, en una sociedad consumista estimulada por la publicidad y los medios masivos.

Como quiera que sea, a los organizado-res del Primer Salón del Desnudo les faltó discutir a fondo un concepto curatorial de desnudo que rigiera en esta convocatoria y en esta selección de obras, como base para articularlas dentro de una exposición que,

más allá del aplauso por los virtuosismos técnicos y las audacias expresivas de un grupo de artistas, provocara en el público, no un escándalo moral sino una reflexión crítica, una toma de conciencia sobre la per-cepción que como miembros de la cultura guatemalteca tenemos de nuestra corporali-dad. El tema del desnudo artístico en Gua-temala, como se ve, puede ser conflictivo y da para que el Salón del Desnudo pueda ser una experiencia artística y cultural significa-tiva y relevante.

más partes de su cuerpo que, digamos, los hombres y mujeres de la edad media. Y es cierto, pero ese no es el punto: el desnudo artístico está relacionado con el concepto de belleza, de plenitud humana, y por tradi-cional, anticuado y subjetivo que pueda ser ese concepto (véase, por ejemplo, la obra de Zipacná de León incluida en la muestra), su-pone el paso de la existencia marcada por el deseo y el instinto hacia niveles de existen-cia más “espirituales”. No se trata de negar la sensualidad, el erotismo, la provocación voluptuosa sino más bien de contenerlas, controlarlas dentro del concepto de la ple-nitud humana. Así, pues, en el caso del des-nudo artístico, los límites del pudor no los

Page 5: Suplemento Cultural 09-06-2012

Suplemento Cultural 5“TRIBUNA, NO MOSTRADOR”, Clemente Marroquín RojasDECANO DE LA PRENSA INDEPENDIENTE

Nueva Guatemala de la Asunción, 9 de junio de 2012

POR JOSÉ ANTONIO GARCÍA URREA

A propósito de que el Cine Lux será nuevo Centro Cultural, recuerdo que su nombre original es “El Único”, pues se convocó a un concurso para ponerle nombre y la ganadora fue una señora, no recuerdo el nombre.(traté de averi-guarlo en el cine pero no logré comu-nicación), sin duda fanática del dictador Jorge Ubico.

Vi nacer el teatro por razón de que trabajaba en el bufete del abogado Gre-gorio Aguilar Fuentes, sito en el Calle-jón de Córdova, hoy 6a. Avenida “A” y 7a. Avenida, hoy Centro Histórico, por lo que todos los días tenía que pasar por allí cuatro veces diarias.

Durante la construcción se hicieron muchas conjeturas, que será el mejor Teatro de Centro América, aunque esta-ba el Capítol, tan completo que durante el gobierno del doctor Juan José Aréva-lo se presentaron Óperas, lo botaron por envidias foráneas para hacer un montón de cinitos. Se decía que el Lux tendría una embocadura de asbesto para que en caso de incendio se cerrara el escenario y el fuego se ahogaba; también se comen-taba que las paredes tendrían un espacio entre ellas que serviría para almacenar agua, para que en caso de incendio cae-ría en la platea. En ese tiempo yo tenía diez y seis años.

La construcción se fue terminando, y un día empezaron a poner las letras del nombre, pero me llamó la atención que la primeara del final que hicieron fue una X. y me dije: Único no lleva X. después siguió la U hasta completar LUX y lue-go cine.

Este Teatro tuvo mucha actividad teatral, aparte de las películas y era cir-cuito Lux -Pálace. regenteado por don Ricardo Cofiño Ubico, un mecenas para los artistas guatemaltecos, pues cuando alguien no tenía éxito en su espectáculo no le cobraba el alquiler de la sala, fuera del Palace o del Lux. En este Teatro se efectuaba la Huelga de todos los dolores.

Recuerdo algunas anécdotas que es-tán ligados al Teatro. Una mañana un trabajador, estaba pegando un cartel de anuncio de una película en una tabla en el techo de un almacén en frente al cine, precursora de los anuncios aéreos que en la actualidad cubren el paisaje por todos lados, file en tiempo lluvioso, sin duda por eso se pudrió y se rompió la tabla que servía para que el trabajador se parara y fue a caer sobre el pavimento justo en la orilla del banco que sostenía la sombrilla del Policía.

En otra anécdota, una noche después de la función un asistente se durmió y los empleados no revisaron la sala, como es costumbre, o se hicieron los locos con el dormilón, el caso es que cuando desper-tó se ha de haber llevado el gran susto, se acercó a la puerta, que es de vidrio, según testigos, porque se volvió noti-cia, cuando pasaba alguien golpeaba la puerta, calle de por medio estaba un res-taurante. Salió hasta el otro día cuando llegaron los empleados.

el desenlace podría crear nuevas desavenencias.

Una y otra vez, tribuna-les estadounidenses falla-ron en contra de Cuba en un caso en el que está en

juego el derecho de los cubanos a contro-lar el uso la famosa marca Havana Club en los Estados Unidos, que se vende en más de 120 países, pero no en ese.

A mediados de junio, Cuba podría perder toda posibilidad de quitarle la po-sibilidad de usar esa marca a Bacardi, que distribuye una pequeña cantidad de su propio Havana Club en la Florida y dice que planea ofrecerlo en otros estados de la Unión en el futuro.

Cuba está convencida de que le están robando una marca típica de esa nación y acusa a Estados Unidos de apelar a una maniobra legal para impedirle pagar una pequeña suma para renovar la patente. Si la patente expira, los cubanos dicen que podrían tomar represalias contra marcas estadounidenses que hoy están protegi-das en la isla.

“La actitud irrespetuosa de los Esta-dos Unidos al despojar a los legítimos titulares cubanos de la marca Havana Club puede poner en riesgo los derechos marcarios y de patentes de nacionales es-tadounidenses en nuestro país”, advirtió el martes María de los Angeles Sánchez, directora de la oficina de propiedad inte-lectual de la isla. “Cuba se reserva su de-recho en este sentido como país soberano de actuar en el momento apropiado”.

Semejante represalia podría tener un impacto limitado en el corto plazo, ya que la mayoría de los artículos estadounidenses no pueden comercializarse en la isla a raíz de un embargo que rige desde hace medio siglo. Sin embargo, es posible vender algu-nos productos alimenticios y las empresas podrían tener dificultades para recuperar sus derechos a una marca una vez elimina-do el embargo. Por más que las sanciones impidan a Cuba vender Havana Club en los Estados Unidos, la isla tiene los dere-chos sobre la marca desde 1976, cuando la familia cubana que los poseía no los reno-vó dentro del plazo establecido.

Pero los cubanos dicen que no pueden renovarlos desde el 2006 porque la Ofici-na de Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro estadounidense, que hace cumplir el embargo, no le da la licencia necesaria para que se paguen los 200 dólares que requiere ese trámite.

Cuba demandó al gobierno estadouni-dense y perdió. Cuando la Corte Suprema desistió de tomar el caso el 14 de mayo, comenzó un período de 30 días tras el cual la oficina de patentes puede quitarle el derecho a la marca a Cuba.

Esto quiere decir que a partir del 13 de junio, Cuba podría perder el derecho a la marca Havana Club en Estados Unidos.

Pernod Ricard, firma francesa que se asoció con el gobierno cubano para distri-buir el ron en todo el mundo, indicó que la batalla aún no termina.

“Estamos estudiando posible medidas legales y estudiando la decisión”, expre-só Olivia Lagache, consejera general de Havana Club, en una entrevista telefónica desde París. “Seguiremos luchando para mantener esta marca”.

ReportajeDesde mi butaca

La Guerra Fría, Bahía de Cochinos y la Crisis de los Misiles alimentaron la animosidad entre Cuba y Estados Unidos. Ahora, una amarga disputa comercial sobre el ron está a punto de definirse luego de

una década de batallas legales.POR PETER ORSI

Cuba ve peligrar la marCa de Havana Club

el nombre ofi-Cial del lux es “ÚniCo”

Botellas del ron Havana Club. FOTO LA HORA: AP FRAnkLin Reyes

Page 6: Suplemento Cultural 09-06-2012

Colaboraciones

6 Suplemento Cultural Nueva Guatemala de la Asunción, 9 de junio de 2012

¿Tradición versus modernidad en las novelas yukaTekas conTemporáneas?

yuxTaponiendo x-Teya, u puksi’ik’al ko’olel y u yóok´oTilo´ob áak´ab – segunda parTe

C omo sabemos, todas las prácticas discursivas, sean es-tas orales o escritas, son pro-ducidas y recibidas en el con-texto de algún genero oral, literario, o bien de una tradi-

ción (Bakhtin 1986; Foucault 1977), y se en-cuentran amarradas de muchas maneras al mecanismo o medio empleado para comu-nicarlo. En este caso, dos fuerzas discursivas y contextos interactuando en el proceso de darle forma a novelas o cuentos indígenas. Es decir, los dos lenguajes implicados y las particularidades de géneros de origen occi-dental en su forma escrita juegan los papeles de principios ordenadores saturando estas narratividades escritas. Ya que no existe académica o académico, sin importar qué tan fluido hable o maneje algún idioma in-dígena particular, capaz de dominar todos los lenguajes en los cuales esta literatura está siendo producida (tan solo en Guatemala existe ya narrativa escrita en siete idiomas indígenas derivados del maya clásico –fa-milia lingüística mayance—y cuatro más en México; esto quiere decir que tan solo en idiomas de la familia mayance ya tenemos textos contemporáneos en once idiomas y contando), la cuestión acerca de la naturale-za de una semiosis indígena en la literatura siempre acompañará las reflexiones críticas sobre este cuerpo literario. Independiente-mente de lo que pensemos del mismo, este fenómeno ciertamente ha expandido nues-tra definición de lo que entendamos tanto por escritura como por literatura. En pala-bras de Luis Cárcamo-Huechante, siempre representará “…la voluntad de intelectuales nativos de traducir el principio de auto-de-terminación al campo de la producción de conocimiento, y convertirse por lo tanto en agentes en la formulación de conceptos, acercamientos y narrativas en los terrenos lingüístico, cultural, político e histórico (5; mi traducción).”

Estos lenguajes, condenados como se-

En el contexto indicado al final del anterior artículo, articular un texto en el idioma original indígena aun si nadie pudiera leerlo, siempre es importante recordarse de la noción de los “secretos de Rigoberta” que Doris Sommer articuló en los noventa del siglo pasado como resistencia ético-estética de los hablantes indígenas para mantener la comprensión eurocéntrica hegemónica de su mundo íntimo a distancia. Pero aun cuando no exista la intención de mantener “secretos” en el texto original, los lenguajes indígenas codifican sentidos difícilmente traducibles a un idioma europeo, aun cuando el autor escoge transmitir enunciaciones de la forma más clara posible con afanes transculturales en vez de “esconder” información dentro de los confines de su propio idioma.

POR ARTURO ARIAS

cundarios y solo dignos de contener “litera-turas orales” por pensadores eurocéntricos, están felizmente empezando a prosperar de nuevo en sus formas escritas. Al estudiarlos, aun en la traducción obligadamente elabo-rada por sus autores en beneficio de sujetos mestizos como nosotros quienes, herede-ros a su vez de la colonialidad, hemos sido privados de la jouissance del original, les ofrecemos como lectores y críticos nuestra solidaridad en la validación no solo de sus textualidades sino también de las subjetivi-dades cuyos discursos representan, aun si

La preliteratura indígena da inicios con testimonios pictográficos, aunque hoy día ya hay literatura propia en sus idiomas maternos.

FOTO LA HORA: ARCHIVO

como lectores estemos privados de la sedi-mentación de sus significantes. Como ha ar-gumentado Gayatri Spivak, en su inevitable traducción “yace la desaparecida historia de las distinciones” (2003,18; mi traducción) que nos hubiera posibilitado como lecto-res descifrar de manera más rica la esce-nificación de la retórica de sus respectivas colectividades. Nuestras lecturas de esta producción literaria en traducción no son capaces de captar la sutileza de sus procesos hermenéuticos o analíticos que transfor-marían a las otredades lingüísticas en algo

totalmente comprensible, verdades conclusivas exhaustivamente reveladas por lo que son. Por lo tanto al problematizar las literaturas indígenas por medio de los lentes eurocéntricos del castellano, en vez de leer las insalvables diferencias de la otredad en nuestro lenguaje, la meta se convierte en la de traducirnos a nosotros mismos en ese horizonte imaginado de la otredad racializada.

Volvamos a los textos a ser analizados en este artículo. La trama de X-Teya, u puksi’ik’al ko’olel se centra en el asesinato de Emeterio Rivera, el hijo de Teya Martín. En el velorio de Emeterio, le piden a un dirigente sindical, Carlos Casorla, hablar en nombre del sindicato del cual el asesinado había sido dirigente. Luego de un poderoso discurso po-lítico articulando los temas tradicionales heredados del marxismo por parte de los sindicatos indepen-dientes mexicanos, Casorla agrega:

—Es necesario unirse para volver a hacer de los mayas una raza orgullosa de su origen—les decía, a veces con orgullo, a veces con vergüenza, apellidos provenientes del tótem de la fauna o flora.

Los que tienen apellidos como Pech, Utzil, Ca-tzín, May, Che, Ek, Uuh y otros deben llevarlos con orgullo, les decía. Él sabía que el trabajo con los in-dígenas entrañaba una complejidad teórica. Como marxista encontraba muy pocos elementos para comprender, desde la óptica de la lucha de clases, la forma de conducción de estos grupos que, en la mayoría de los casos, padecían una desvalorización étnica que los colocaba en desventaja frente a los demás (350).

Esta cita evidencia la negociación del texto en-tre una perspectiva marxista/sindicalista y un po-tencial empoderamiento indígena por la vía de la decolonialidad. Si leyéramos este fragmento desde una perspectiva indigenista escrita por alguna figu-ra típica de este movimiento, generalmente autores hombres tales como el ecuatoriano Jorge Icaza o el peruano Ciro Alegría, podríamos encontrar este pasaje problemáticamente dogmático si no insul-tante. Pero, ¿qué podemos hacer con este fragmen-to cuando es escrito por una mujer maya yuka-teka en el siglo veintiuno? ¿Por qué es articulada su representación de esta manera? Por un lado, su discursividad, originalmente escrita en maya yuka-teko, se apropia de la retórica marxista/indigenista en un lenguaje en el cual estas palabras nunca antes

Page 7: Suplemento Cultural 09-06-2012

Suplemento Cultural 7Nueva Guatemala de la Asunción, 9 de junio de 2012

fueron enunciadas: “—K’aabet a much’kaba’ex tio’olal beyo’ka

sunake’ex tuka’aten jun péel kuchkabal ku li’is ko’ob u jo’olo’ob tu táan u jel máako’ob — ku ya’alik ti’u jel máako’ob yáan k’iiné ku ya’aliko’ob máas jats’uts’ u k’aababao’ob u jelo’obe’ yéetel u su’talil ku ya’aliko’ob u k’aabao’ob ku táal ichil u káabao’ob baalche’ wa cheo’ob. —Pech, Utzil, Catzin, May, Che’, Ek, Uuh yéetel u jelo’ob k’aabet u bisalo’ob ka’anal jo’olil —ku k’aas k’eyko’ob (178-179).”

Es claramente signo de una transformación epistémica, independientemente de lo indetermi-nada que ésta pueda ser, por virtud del enorme peso del eurocentrismo dentro de la colonialidad. La escritura maya yukateka es una inscripción de la responsabilidad política por parte de Ceh Moo.

La noción de la existencia de un sujeto indí-gena indemne, puro e incontaminado ha sido ro-mantizada y/o idealizada tanto por académicos no-indígenas así como por ideólogos indígenas y/o líderes del despertar de las poblaciones nativas. El argumento de Ceeh Moh va en el sentido opuesto. Al interpelar tanto el marxismo como hacer un re-conocimiento público de la vergüenza sentida por los sujetos indígenas colonializados, ella invoca no solo el predicamento del letrado indígena, inevita-blemente producto de 500 años de colonialidad y contando. Se mueve obligatoriamente y hace eco de los procesos entrelazados de periodización y de espacios compartidos entre los mundos indígenas y mestizos, aun cuando esto sucediera más de acuer-do a lo que Bhabha denominó mímica en The Lo-cation of Culture (1994); es decir, sujetos aparente-

Marisol Ceh Moo, autora de “X-Teya”, propone crear neologismos en idioma maya “para hacerlo más completo.

FOTO LA HORA: ARCHIVO

mente repitiendo performatividades en vez de representarlas. Ceeh Moh nombra una entidad inevitablemente contaminada, po-sicionándose éticamente al hacerlo Su texto evidencia cómo ambas culturas están inser-tas una dentro de la otra, en el sentido de la noción de habitus de Bourdieu. Son un sis-tema simbólico de disposiciones construidas en el imaginario del sujeto como respuesta a las condiciones objetivas que encuentran. Podría muy bien tratarse de un conjunto de heterarquías en el sentido de Kontopoulos, definidas por Grosfoguel como

“Open systems, entanglement of multi-ple and heterogeneous hierarchies…hete-rogenous entanglement of multiple agents’ strategies… multiple, heterogeneous, entan-gled, and complex processes within a single historical reality (101)” En cualquier caso, la conciencia de su historicidad impide que el texto se desvíe hacia una utopía indígena racializada.

Hasta aquí solo hemos examinado una cita. Asimismo, el libro no se titula “Eme-terio” sino “Teya.” El mismo alude a su co-razón de mujer. Teya es el centro de los dos primeros capítulos del texto, el segundo de ellos siendo el más largo del conjunto del texto. Luego el enfoque gira hacia Emeterio durante casi todo el resto de la novela hasta el final, cuando cambia una vez más, hacia Indalecio Uitzil Peba, quien se convertirá en el sucesor político de Emeterio. ¿Por qué en-

tonces el título? En el único artículo académico existien-

do hasta la fecha sobre esta novela, Emilio del Valle Escalante argumenta que la mis-ma es una reconsideración histórica de la importancia de la izquierda marxista. Ope-rando dentro de sus conocidas limitaciones conceptuales, la misma contribuyó al des-pertar de la conciencia indígena hacia fines de la década de los 1970s. Del Valle Escalan-te plantea que esta novela representa el fin del indigenismo (entendido éste en el senti-do de Mariátegui: textos sobre indígenas es-critos por escritores mestizos) “apropiándo-se del… mundo mestizo para establecer… la autoridad de los movimientos por los dere-chos indígenas” (2; mi traducción), e impli-ca, por añadidura, la del Partido Comunista Mexicano, señalando hacia el final del texto una transición hacia el amanecer de un nue-vo período histórico decolonial en el cual por fin la subjetividad indígena se inscribirá dentro de la historia moderna. Del Valle Es-calante agrega un importante contexto his-tórico-cultural acerca de la emergencia de esta literatura:

“En la península yucateca, un momento clave en el proceso de visibilidad de la lite-ratura maya ocurrió en 1982 cuando en un viaje a la Ciudad de México, el autor Yuka-teko José Tec Poot, entonces director de la Unidad Regional de las Culturas Populares de Yucatán, conoció al escritor mexicano Carlos Montemayor. Se pusieron de acuer-do en desarrollar talleres en la ciudad de Mérida para formar nuevas generaciones de escritores mayas y ayudar a los emergentes a mejorar la calidad de sus trabajos literarios (May May, 113). El taller se inició al final del mismo año con veinticuatro miembros que incluyeron, entre otros, a Gerardo Can Pat, Feliciano Sánchez Chan, Santiago Sán-chez Aké, Miguel Ángel May May y María Luisa Góngora Pacheco. Muchos de los que participaron en los talleres no tenían forma-ción literaria ni académica. Eran de manera general promotores culturales, maestros de

Domitila Barrios de Chungara (1932 - 2012) fue una líder obrera y feminista boliviana. De familia humilde dio numerosos testimonios acerca del sufrimiento que tenían los mineros de su país. Inspiró con sus testimonios el libro “Si me permiten hablar...” de Moema Viezzer.

FOTO LA HORA: ARCHIVO

escuela primaria, traductores y activistas políticos (Rosado Avilés and Ortega Aran-go, 122). Cinco años después del primer taller literario, May May y Domínguez Aké iniciaron la revista Uyajal Maya Wiiniko’ob (Despertar Maya), la cual incluyó contribu-ciones literarias de muchos de los que parti-ciparon en el primer taller. La revista publicó cuatro números y, un año después, debido a cambios en las políticas gubernamentales, cambió su nombre a U k’aayil Maya T’aan (La canción del idioma maya). Los autores tenían que publicar tanto en yukateko como en castellano (1-2; mi traducción).”

Sin necesariamente estar en desacuer-do con Del Valle Escalante, prefiero argu-mentar que este texto traza la trayectoria de Emeterio, el hijo de Teya, por tratarse del vástago víctima de los vínculos entre el racismo y el capitalismo que fueron crucia-les para el desarrollo intelectual de Teya. Al mismo tiempo Teya desaparece de la narra-tiva, señalando así una aporía en la cual la comprensión y el conocimiento están blo-queados. Su silencio subalterno paradójica-mente opera como estrategia retórica, una en la cual solo el hombre indígena subalter-nizado que pasa por mestizo está autorizado a ser representado en México con anteriori-dad a 1980. Ceh Moo mide los silencios de la mujer indígena subalterna al re-articular el archivo originario de la militancia comu-nista recubierto a su vez en el subsecuente palimpsesto textual de falsas interpretacio-nes y malas traducciones autorizadas por la izquierda oficial mexicana, fenómeno que también tendría eco en la situación de los maya populares en Guatemala y en los dirigentes indígenas de sindicatos en Amé-rica del Sur tales como Domitila Barrios en Bolivia o bien los líderes de la CONAIE del Ecuador tales como Luis Macas para citar solo algunos ejemplos. Mi lectura por lo tanto enfatiza cómo un discurso marcado por la inflexión del género representa una validación de la militancia política en esta comunidad.

Page 8: Suplemento Cultural 09-06-2012

D os Ferias Internacio-nales del Libro “FIL-GUA y FILCEN” en el año del Oxlajuj Baktún compartirán un mismo espacio en

el Parque de la Industria, del 20 al 29 de julio para promover el hábito de la lectu-ra, y dar a conocer la producción y el de-sarrollo editorial centroamericano y ge-nerar encuentros entre escritores naciona-les e internacionales. La Feria Internacio-nal del Libro en Guatemala -FILGUA- en su novena edición adopta el lema “Hacia el Oxlajuj Baktún”, con el propósito de sensibilizar a la población sobre las ven-tajas de vivir la interculturalidad y abrir espacios para conocer las publicaciones de autores que han trabajado obras litera-rias en sus idiomas originarios.

Como parte de la historia, en el calenda-rio Maya, el Oxlajuj Baktún marca la lle-gada de una nueva era que se repite cada 5,200 años, en el cual la vida se transfor-ma. A través de la de la lectura podemos cambiar nuestra vida, crecer como perso-nas y coadyuvar al desarrollo intelectual de los guatemaltecos. “Queremos que este año sea el inicio de una era de lecto-res” enfatiza el Presidente de la Gremial de Editores de Guatemala, Lic. Gabriel Piloña, quien añade que con esta activi-dad se busca aumentar lectores y también el índice nacional de lectura que es menor del 1%, según datos del Centro Regional para el Fomento del Libro en América

L a historia del periodismo ofrece regularmente es-cenas de represión intole-rables, especialmente en los países subdesarrolla-dos, los que posiblemen-

te, por la adolescencia de sus sociedades no han podido liberarse de la censura de la información, debido a la represión que originan las dictaduras y naturalmente, los grupos de presión que dificultan la realidad de una libre información.

Los medios de comunicación sujetos a presión de gobierno, económicas o político partidistas, pueden convertirse en instru-mento de los intereses de estos grupos que amenazan intervenir la libertad de informa-ción y el derecho de ser informado median-te el terrorismo y la violencia, exponentes de la corrupción. Estas apreciaciones, re-gistradas por la historia, son experiencias que ya hemos vivido en Guatemala y nos permiten demostrar que el periodismo es producto de la vida y la civilización porque satisface la necesidad de la noticia, que mo-ralmente, impone a la profesión del perio-dista el principio de la verdad.

Los expuesto nos conduce a encontrar en el libro “Estudio histórico del periodismo guatemalteco”, homenaje a la Asociación

POR REDACCIÓN LA HORA

POR JAIME BARRIOS PEÑA (+)

Agenda cultural

Presentan las ferias del libro

Revista de libros

“estudio histórico del Periodismo guatemalteco” de catalina barrios y barrios

Desea ganar un libro del “Estu-dio histórico del periodismo gua-temalteco” de Catalina Barrios y Barrios. Diario La Hora y Editorial Universitaria estarán sorteando se-manalmente un libro. Sólo debe escribir un comentario o una ob-servación sobre nuestra sección cultural y/o Suplemento Cultural. Puede enviar su comentario a [email protected] o a las oficinas de La Hora (9ª. calle “A” 1-56 zona 1). Cada semana se in-formará sobre el ganador del libro.

PROMOCIÓNGánese un libro

8 Suplemento Cultural Nueva Guatemala de la Asunción, 9 de junio de 2012

Latina y el Caribe (CERLALC).Este año 2012 Guatemala es el país

anfitrión de la XVI Feria Internacional

de Periodistas de Guatemala (APG) en sus bodas de oro (1947-1997), la realidad de cómo se ha desarrollado en el transcurso de más de siglo y medio el periodismo en Guatemala, en donde cobran vigencia los problemas señalados.

La licenciada Catalina Barrios y Barrios,

juegos de aprendizaje para la población infantil como el maratón de la lectura y el concurso Interescolar de lectura ex-hibición y venta de novedades literarias nacionales y centroamericanas. También se desarrollará una agenda cultural con más de 300 actividades. FILGUA se hace posible año con año gracias al apoyo de entidades públicas y privadas que valoran la lectura como herramienta para el desa-rrollo social.

ra vez es reconocido el valor de la opinión pública, sumando el surgimiento de las gazetas en el siglo X y las subsiguientes publicaciones hasta el siglo XVIII cuando se produce la germinación del periodismo en América.

El punto de partida de este apreciado do-cumento se produce en el año 1541, cuando se escribió en Guatemala el primer reporta-je de Juan Rodríguez Cabrillo, al hacer del conocimiento del público los incidentes de la destrucción de a segunda ciudad capital de Guatemala, durante la Colonia, abar-cando los diferentes períodos, que durante el siglo XI, conforman la vida periodística actual

Rigoberto Bran Azmitia, estimado inte-lectual, valora en su testimonio sobre el libro en referencia, el trabajo de la licencia-da Barrios con las siguientes palabras: “He visto a la licenciada Barrios, por días ente-ros, más o menos durante tres años en la sala de lectura de la Hemeroteca Nacional, al punto de perder contacto con el tiempo. Algunas veces ha sido necesario enterarla del final de la jornada. Antes de salir del edificio, en el periódico que estudia deja la nota “pendiente, no mover, volveré”, pa-labras que autentican su responsabilidad, como autora.

del Libro de Centroamérica -FILCEN-, proyecto realizado como un circuito de ferias internacionales que se desarrollan anualmente y de forma itinerante en las naciones centroamericanas y que en esta oportunidad, por segunda vez, le corres-ponde a nuestro país.

FILGUA genera un espacio para el in-tercambio de ideas a través de foros, con-ferencias y talleres dirigidos a niños jó-venes y adultos además de implementar

autora de esta investigación, que no du-damos facilitará el estudio de la comuni-cación de las diferentes universidades del país, ha logrado con abnegación, constan-cia y disciplina, la creación de una obra, la primea en su género, que contiene la pro-ducción periodística de Guatemala y que inicia con un resumen de los orígenes del periodismo en Roma, cuando por prime-