Rolando Pereda Torres

SINDICALISMO DE FRENTE UNICO

Fuente: PEREDA TORRES, Rolando. Sindicalismo de Frente nico, Editorial Pachactec, Lima, Per, 1990, nico, pp. 29-40; 129-138.

III. EL PARTIDO

Cmo se define al Partido Aprist a Peruano? Como una organizacin poltica de profundo origen nacional y de cuya realidad extrae las lneas matrices de sus principios en defensa de las clases productoras, a las cuales organiza y defiendeen un 'Frente Un co', compuesto por obreros, campesinos, indgenas,

estudiantes e intelectuales de vanguardia, maestros de escuela, clases medias, etc. El partido -expresa Vctor Ral- es el partido de los trabajadores de ciudad y campo, de las clases medias pobres y de nuestra gran raza indgena, olvidada y esclavzad a-". Doctrinariamente, seala Haya, el aprismo es un partido democrtico de izquierd a. Considera a la democracia como una funcin tanto poltica como social. Vale decir, otorga a la concepcin democrtica un contenido funcional. La democracia pura, liberal, exclusi vamente poltica, es la que caracteri za a los Estados en los que solamente se vela por la igualdad nominal de los hombres ante la ley, movidos por un gaseoso ideal de la libertad individual y nacional. El aprismo -y sta es su esencial diferenciacin de los viejos partidos y de las totalitarias y dictatoriales, internacionales comu-

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HAYA DE lA TORRE, V.R.: Aprismc y civilismo (1932), en Construyendo el aprismo, OC, t. Il, p.45.

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ni stas y fascistas- considera a la libertad del hombre como ciuda dano y como trabajador, inseparable de la justicia social. Por tanto, su concepto de un a libre democracia es inherente a la de una democracia econ mica-P. De izquierda, porque en teora y praxis consid era que su existencia est en relacin con la solucin de las principales aspiraciones y necesidades del pueblo productor, histricamente marginado y expoliado por los grupos de poder econmico y las dictaduras que han gobernado al pas. Y porque expresa que su s ln ea s de accin poltica se sustentan en el principio de que hay que defender -la concepcin democrtica del predominio de las mayoras y de sus intereses; ticamente, en la subordinacin del inters individual al inters colectivo-" . Por qu el APRA es la nue va izquierda?

Lo es por ser un movimiento original que insert en su programa la s reivindicaciones de nue stro pueblo, vale decir de su' emancipaci n econmica, poltica y social. Jos Ingenieros, defen sor de la Reforma Un iversitar ia . como Haya, llam al APRA en 1925 la 'Nu eva izqui er da continental'. Expres en sus mltiples conferencias que el APRA en Amrica Latina era: un movimiento original, emancipa do de todo mimetismo o imitacin europea y el primer partido poltico-social qu e por encima de fictici as fronteras nacionales abarcaba en un slo planteamiento doctrinario todos los probl emas econmicos y poltic os de nuestra Am ri ca-P. Respecto de su Plan de cinco puntos manifest , en discurso pronunciado en Pars el 2 de j ulio de 1925, que en vez de extenderse en

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HAYA DE LA TORRE, V.R.: Discu rso all Congreso Nac ional del PAP (20 de agosto de 1931), en OC, t. V, p.43. HAYA DE LA TORRE, V.R.: Acta del 21 de mayo de 1932. El proceso Haya de la T OrTe . OC, t . V, p. 298. HAYA DE LA TORRE, V.R.: . El APRA es la nuev a izquierda del mundo subdesarrollado de Indoamrica dijo Jos Ingenicros- (l 975). En: 130 art culos y una sola idea sobre el APRA, p. 370.

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un ampuloso documento plagado de frases tropicales expresaba en cinco lacnicas lineas todas las reivindicaciones de nuestros pueblos y condensaba en sus profundos postulados una sntesis sin precedentes del ms avanzado ideario continental.". Y, refirindose al carcter de esta izquierda acot: Esta es una nueva .izquierda social, democrtica, revolucionaria e in dita que por primera vez anuncia a nuestros veinte pu eblos su propia emancipacin econmica y social, no copiada de dictados ajenos a su intransferible rea lidad sino descubi erta en la raz y fundamento de su problema histrico.". Setenta aos despus, esto sigue siendo cierto.

Es el APRA un partido nacio nalista?S, nuestro 'Ideario' aprobado en la segunda Convencin Nacio nal de 1944 y refrend ado en elll Congreso del PAP expres que: El Parti do del Pueblo es nacionalista en el ms autnticosentido del vocablo. Fundado por peruanos, hijos y descendientes de peruanos, son peruanos sus afiliados y peruanos sus ideal es y objetivos. Por eso nuestro nacionalismo parte

del principio histrico del destino del Per: centro geogrficode un Contine nte, es tambin el pas foco de todas las gran-

des eta pas de la historia de este lado del Hemisferio. El Per fue el ms grande Imperio de los tiempos precolombinos; elPero fue el primer Virreynato durante el coloniaje, y el Per fue el esce nario en el cual culmin y se decidi la pica lucha americana de la Independencia y fue necesario que sobre

nuestro suelo se sellara la derrota de Espaa en las batallas de Junn y Ayacucho. Este destino del Per como el pas preponderante y que domi na los tres momentos histricos ms ilustres de nuestra historia nos lleva a alentar la ms profun-

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L. cit. L. cit.

32da fe en el futuro de la patria y en su misin extraordinaria en el Hemi sferi o".

El APRA es un partido marxista? El APRA considera al marxismo como su antecedente filosfico, porque adopta como aqul el principio dialctico-hegeliano, segn el cual -no hay verdades etern as en los conocimientos humanos, y que -todo pasa, fluye, deviene, es y debe ser negad o-o En este sentido, siendo el partido una organizacin de esencia nacional, se considera marxi sta desde el punto de vista filosficodialctico, pero enfatiza que marxistamente lo rechaza como dogma, al pretender ser aplicado bajo el mismo enfoque europeo a sociedades que como la nuestra, tienen diferente historia e intensidad econmica. Al marxismo dogmtico e infalible, tal como se expresa en sus mltiples tendencias actuales, el APRA lo recus al aplicar el principio de la negacin hegeliana adoptada por Marx a Marx mismo. Y sostiene que para mantener la perennidad del marxismo hay que negarlo en todo aquello que determine la realidad histrica de Amrica Latina como imperativo. Por ello, Haya de la Torre escribi: -el aprismo fundamenta sus normas de metodizacin filosfica en el enunciado dialctico de la negacin. Reconoce as el principio universal del eterno movimiento, cambio y devenir -avizorado por Herclito y cada da mejor comprobado por los progresos de la ciencia-, como un proceso constante de contradicciones, negaciones y continuidad, pero reconoce tambin en el marxismo una escuela filosfica sujeta a la misma ley por ella descubierta y perfeccionada. En efecto, quien adopte el marxismo como norma filosfica no puede admitir, sin embargo , sus conclusiones doctrinarias como dogmas inflexibles. [...l. Porque, o el marxismo es dogma yerto, inerte cual un dolo, o es devenir vivo y mvil; en este caso queda sujeto tambin, como todo en el universo, a la ley de la negacin de la negacin [' ..l. Desde ese punto de vista no es el

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La Tribuna , 31 de mayo de 1948, p. 7.

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determinismo histrico de Marx una regla que se impone a todas las latitudes-", . Con la tesis aprista del espacio-tiempo histrico, creacin de Vctor Ral, en la que se aplica el principio de la teora espaciotemporal de la relatividad einsteniana a la historia, se niega dialcticamente el absoluto determinismo histrico de Marx y las interpretaciones universalistas dadas por Lenin y sus epgonos. Haya expresa:La aplicacin del relativismo al determinismo histrico plantea justamente un caso de negacin y continuidad dialctica en la Filosoffa de Marx. Ms an, en el relativismo del Tiempo y del Espacio aplicados a la interpretacin marxista de la historia radica, precisamente, el fundamento de la norma filosfica aprista. Ah est la lnea dialctica que une y separa al marxismo ortodoxo del aprsmo'",

En suma, reconociendo la lnea dialctica del marxismo, el APRA interpreta la realidad latinoamericana y peruana, utilizando instrumentos de anlisis manci sta, relativizados de acuerdo a nuestro espacio-tiempo, como la interpretacin econmica de la historia, . la lucha de clases, el imperialismo y el anlisis del capital, con los cuales reafirma su doctrina completa y su mtodo de accin realista.

Son los trabajadores apristas antiplutocrticos y antiimperialistas?S, porque la plutocracia, oligarqua criolla del dinero que explot histricamente al pas en su beneficio, afect con sus medidas antisindicales a todos los peruanos, especialmente a los trabajadores urbanos y rurales quienes se vieron econmica y polticamente relegados a condiciones de marginacin social.

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HAYA DE LA TORRE, V.R.: Sinopsis histrica del eprsns (1935), enEspacio -Tiempo histrico (1948). OC, t. IV, p. 399, 400 Y404. lb., p. 402.

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Antiimp erialistas, porque interpretando la posicin nacionalista de los trabajadores peruanos creen que el Per debe mantener siempre su libertad y soberana, tanto el campo interno como externo; lo que le permitir decidir su propio destino, rechazando toda clase de imperialismo sea europeo, asitico o norteamericano. Es el APRA la organizacin poltica de los obreros, de los pobres? S, porque como lo expres nuestro c. Luis Heysen, el Partido Aprista representa el frente nico nacional del Per provinciano, del Per rebelde y nacionalista en contra de los dspotas que desde la Lima virreynal han tiranizado a la Nacin. S, porque el Partido Apri sta Peruano es el - partido de los pobres del Per y de los ciudadanos honrados, firmem ente resueltos a impeler el veredicto de la justicia social. Siendo el frente nacional de las clases obreras, campesinas y medias; es el frente de las clases oprimidas de la peruanidad en contra de sus clases opresoras y extranjerizantes-P, S, porque la razn de ser de nuestro partido es la defensa irrestricta de las masas trabajadoras, a quienes organiza, sindicaliza y orienta en el logro de sus principales objetivos econmicos y sociales. Promue ve el sindicalismo, el cooperativismo, las empresas de cogestin, las organizaciones campesinas y barriales . Haya de la Torre en este sentido expres claramente que: -la poltica de nuestro gran partido, ha sido poltica de respaldo de todas las re ivindicaciones de los trabajadores y lo sabe muy bien la clase obrera. No hemos participado en esa sutileza alarmista de creer que muchas huelgas ponan en riesgo la tranquilidad pblica. No estoy de acuerdo. Creo que un espritu de cooperacin y solidaridad ha hecho que espontneamente los trabajadores que tenan firm e y clara conciencia de su misin como ciudadanos hayan pedido lo que slo la conciencia y la justicia les impona pedi