REVISTA MEDEIVAL 25

NÚMERO 25 / Bimestralwww.revistamedieval.com

SociedadCaMpESiNOS dE ZaMORa

Ecología HistóricaEl valOR dEl

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MaEStRO ECkHaRtEducación

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toledo • Testamento y Exequias de Carlos II de Navarra • Génesis del Amadís de Gaula • los debates apocalípticos

El Tesoro de Orrius • Los cristianos de Al-Andalús

NÚMERO 43 / Bimestralwww.revistamedieval.com

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Otro Mundo Medieval

La Mujer VikingaArte

La Miniatura AltomedievalRománico

La transición del Románico al Gótico

La Batallade Agincourt

www.revistamedieval.com 5

SUMARIO

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ajo el favor de Dios cabalga ahora sir Gawain, recorriendo el reino de Logres, sin un pensamiento que le

distraiga. Durante las largas no-ches, suele descansar a solas y en completo aislamiento, y sin haber tenido ante sí comida que le plaz-ca. Y sin otro amigo en los bosques y montañas que su propio caballo, ni otro compañero de viaje que Dios, llegó al norte de Gales. (Sir Gawain y el Caballero Verde, Tra-

ducción de Francisco Torres Oli-ver, Ed. Siruela. Selección de Lec-turas Medievales 1, Madrid, 1997, p. 17-18.)

El texto, que encabeza este ar-tículo, permite reflexionar sobre la recreación figurada que la propia sociedad medieval realizó sobre el paisaje. Como ha señalado Jacques Le Goff durante la época medieval la percepción del espacio se encon-traba vinculada a representacio-nes basadas en la oposición entre lo alto –el lugar, perfecto, donde

EMILIO MARTÍN GUTIÉRREZ

PROFESOR DE HISTORIA MEDIEVAL

UNIVERSIDAD DE CÁDIZ

[email protected]

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EL

PAISAJE RURAL en el imaginario colectivo

de las sociedades medievales

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6 AGENDA

8 MERCADOS MEDIEVALES

9 NOTICIAS

11 COCINA

12 CONCURSO: LAS 7 MARAVILLAS

14 MÚSICA 16 CINE

18 GENEALOGÍA

19 LIBROS

APOCALIPSIS

20 LOS DEBATES APOCALÍPTICOS EN LA ÉPOCA DEL OBISPO JULIÁN DE TOLEDO

HISTORIA PARA VIAJAR

26 PALMA DE MALLORCA

LITERATURA

34 GÉNESIS DEL AMADÍS DE GAULA

SOCIEDAD

38 CAMPESINOS DE ZAMORA

EDUCACIÓN

46 EL SABER EN TIEMPOS DE PEDRO EL CEREMONIOSO

ECOLOGÍA HISTÓRICA

56 EL VALOR DEL PAISAJE RURAL

PERFILES

66 MAESTRO ECKHART

VIDA Y MUERTE

72 TESTAMENTO Y EXEQUIAS DE CARLOS II DE NAVARRA

CIUDADES PATRIMONIO

84 TOLEDO

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TESTAMENTO Y EXEQUIAS DE

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La documentación nos posibilita ponderar to-dos los aspectos de los últimos días de vida terrena de Carlos II

Evreux, rey de Navarra, verdadero hacedor de intervenciones milita-res y gestor de múltiples alianzas y tratados en su afán de gobernar y mantener efi cazmente su peque-ño reino pirenaico, instalado como cuña entre los tres reinos cada vez más poderosos de la región: Casti-lla, Aragón y Francia.En el presente trabajo nos propo-nemos mostrar cómo queda refl e-jada la muerte en la variada docu-mentación de que se dispone, cómo se manifi esta un hecho tan signifi -cativo no solo del señor de la casa sino, además, del rey en la plenitud

de su poder cuando solo contaba cincuenta y cuatro años.Desde el 18 de diciembre adverti-mos la gravedad de la enfermedad del rey cuando leemos en el regis-tro que su hija María hace ofi ciar una misa para implorar por su sa-lud. Luego, una semana después, el día de Navidad, fue enviado un mensajero a Peñafi el, en el reino de Castilla, donde residía su primogé-nito apriesa con grant quexa al Seinnor Infante por la malaudia, et enfermedad del Seinnor Rey. Al día siguiente -26 de diciembre de 1386-, salía del palacio de Pam-plona un emisario “a medianoche” llevando un mensaje a Judas Levy, uno de los numerosos médicos que atendían al rey. En esa ocasión, la salud de Carlos II se había agrava-

do de manera notoria y corría pe-ligro de muerte. Ante tal estado, no se escatimaron esfuerzos, no solo se encontraban junto a él sus “físicos” (médicos) Juce Orabue-na, Michelco Sento de Olite, Juan Moliner, Juce Marli de Huesca y el “quirúrgico” Martín Guillén, sino que además se había llamado al médico del cardenal de Aragón.Además intervinieron su apoteca-rio, Sancho de Sabalza y el tende-ro lombardo Mono de Casino. Las cuentas nos informan sobre las medicinas utilizadas: sucre rosa-do, aguarrós, tamarindis, prunas, ruibarbo, anís y confi t a los que se agregaba, verjus vert elaborado con perejil. Con el azúcar mezclado con vino se hacía el clareu que se daba a beber al enfermo. Entre sus

DE NAVARRA (1387)

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JAVIER NICOLÁS

HISTORIADOR

unos les fue bien, como San Francisco, a punto de ser inmolado por “de-masiado puntilloso con la palabra de Cristo”, a otros

les fue mal, como a los “buenos hom-bres” cataros, quemados y arrojados de sus castillos y monasterios, o al fi lósofo Giordano Bruno.

Con el Maestro Eckhart pasó algo parecido, y, estando en esa oblicua frontera, la muerte le sor-prendió antes del veredicto de cul-pabilidad sobre sus interpretacio-nes cristianas.

Johann Eckhart o Johannes Eckehart, es, indudablemente uno de los puntales de la mística cris-

tiana de la Edad Media. Y aunque perseguido, su legado no puede dejar incólume a ningún estudio-so del tema, pues su profundidad es demasiado grande como para desdeñarla, y su sinceridad religio-sa, creo, está fuera de toda duda. Como dominico, sustituye al frente de su orden a los franciscanos en

APOCALIPSIS

20 ARQUEOLOGÍA, HISTORIA Y VIAJES SOBRE EL MUNDO MEDIEVAL

n el año 686, Julián, obispo de la ciudad regia de Toledo, escribía lo si-guiente:

“Desde el inicio del mundo hasta los tiempos del nacimiento de Cristo, puesto que fue en cuadragésimo pri-mer año de Octavio César, transcu-rrieron 5325 años. Ciertamente, ya el número de años que restan desde los tiempos del nacimiento de Cristo hasta el presente está a la vista de cada uno, tanto por si quiere saber, como si gusta calcular, asumiendo sin duda los años de acuerdo a la era de la propia encarnación del Señor.”

[Jul. de Tol., De comprobatione sexta aetatis III, X, 105- 112, ed. Hillgar-th].

¿Cómo hace un obispo del siglo VII- por muy importante que haya sido en su momento- para calcular cuándo nació Cristo? ¿De dónde surgen esos “5325 años” que tan resueltamente propone? En principio esta pregunta no es difícil de contestar: siguiendo a grandes rasgos una tradición difundi-da por Eusebio de Cesarea (260- 264? / 339) y retocada en Hispania por Isi-doro de Sevilla (560?- 636); nuestro autor se funda en el relato bíblico, su-mando una por una las generaciones

transcurridas desde la Creación de acuerdo a las narraciones que se ini-cian con el libro del Génesis.

Advirtamos sin embargo las di-mensiones de la tarea encarada: se trata de un trabajo arduo para un su-jeto que desde 679 es nombrado obis-po de la capital del reino visigodo, que trabajó de forma denodada por con-vertir a Toledo en el obispado prin-cipal, que participó en primera fila de los asuntos políticos, que presidió cuatro importantes concilios, y que en sus tiempos libres debatía posiciones doctrinales con el mismísimo papado romano. Según lo que el propio Julián declaraba, asumió sobre sus hombros

AL CALOR DE LA EXPANSIÓN ASOMBROSA DEL ISLAM, SE ACTIVAN EN LAS ÚLTI-

MAS DÉCADAS DEL SIGLO VII LECTURAS QUE INTERPRETAN LA SERIE DE ACONTE-

CIMIENTOS POLÍTICOS Y MILITARES COMO SIGNOS DEL AGOTAMIENTO DEL MUNDO.

A LO LARGO DEL ORBE MEDITERRÁNEO, JUDÍOS Y CRISTIANOS SE PREPARAN PARA

LA LLEGADA INMINENTE DEL MESÍAS LOS PRIMEROS, DEL ANTICRISTO LOS SEGUN-

DOS. EN ESTE CONTEXTO, LA MÁXIMA AUTORIDAD DE LA IGLESIA VISIGODA ENSAYA

UN INTENTO ÚLTIMO POR DEBILITAR ESTAS INTERPRETACIONES RADICALES, A LA

PUERTA DE LA INVASIÓN ÁRABE A LA PENÍNSULA.

ELEONORA DELL’ ELICINE

DOCTORA EN HISTORIA


¿Y cuándo llega el fin del mundo? LOS DEBATES APOCALÍPTICOS EN ÉPOCA DE JULIÁN, OBISPO VISIGODO DE TOLEDO (680- 90)


HISTORIA PARA VIAJAR


TEXTO Y FOTOS ANA VILADERBO

PERIODISTA

o cierto es que la corte del rey Lisuarte no puede ser otra que la del Rey Eduardo I de Inglaterra, que reinó

entre 1272 y 1307. Este Eduardo, Duarte o Lisuarte, tuvo por esposa a la hija de Fernando III El Santo, Doña Leonor de Castilla, hermana de padre de Alfonso X, El Sabio. Ella fue famosísima reina por su ejemplar amor bien correspondido por el Rey Eduardo, y su incansable promoción de las artes y las letras, tanto en la corte de Windsor, como en las Universidades de Oxford y Cambridge. Fomentó obras en idiomas vernáculos, poesía, como el romance del Conde de Ponthieu,

y traducción de obras clásicas como “De Re Militari” de Vegetius, para su esposo y un tratado sobre el Ajedrez, para sí. Después que se casó en el monasterio de Las Huelgas en Burgos, con el entonces Príncipe Eduardo, fueron con ella algunos parientes nobles españoles a Inglaterra. Los sucesos del reinado de Eduardo I son tan notorios, que emparejan admirablemente con muchos hechos de la leyenda de Amadís. Sus guerras son las mismas, contra Gales, Escocia y Francia. Sus justas y torneos, donde Eduardo tuvo fama de ser “la mejor lanza del mundo”, se parecen a los célebres combates singulares y

las batallas concertadas entre opuestas centurias de caballeros en “Amadís de Gaula”. Los personajes de la leyenda de Amadís de Gaula tienen sus gemelos en la corte de Eduardo I. Eleanor, su hija mayor, empata perfectamente con la imagen de la bella Oriana y ambos nombres tienen casi las mismas letras, en distinto orden. Oriana se inspira también en la Princesa de Gales Eleanor de Montfort, quien fuera, tal que Oriana, apresada en medio mar, cerca de la Isla de Scilly por capitanes de navíos del rey Eduardo I, cuando llegaba a casarse con Llywelyn Príncipe de Gales, enemigo del rey.

La famosa Doncella de

ESTE LIBRO MARAVILLOSO SE CONOCIÓ ALREDEDOR DEL AÑO 1300.

MARAVILLOSO, POR SU IMPECABLE ESTILO DE NARRACIÓN SOBRIA, DONDE SE

EQUILIBRAN PERFECTAMENTE LA ACCIÓN, LA PINTURA DE LOS PERSONAJES,

LA ELEGANCIA DEL IDIOMA Y LA MUY FÁCIL LECTURA. LA GRAN PREGUNTA

HA SIDO: ¿QUIÉN LO ESCRIBIÓ? Y ADEMÁS: ¿CUÁLES FUERON LOS VERDADEROS

HECHOS HISTÓRICOS EN QUE SE INSPIRÓ? ÉSTA ÚLTIMA CUESTIÓN OBLIGA A

INVESTIGAR LOS TIEMPOS AQUELLOS.

LITERATURA

GÉNESIS del Amadís de Gaula

SANTIAGO SEVILLA

ESCRITOR

[email protected]



El primer indicio ducumental de Venialbo es la donación que hace Alfonso VII en 1124 de la aldea al monasterio de Santo Tomé.En la imagen, panorámica del pueblo hoy, con la espadaña de la Iglesia de Nuestra Sra. de la Asunción al fondo.


¿CUÁL ES LA MANERA EN QUE UN HISTORIADOR PUEDE ACERCARSE A UNA

COMUNIDAD CAMPESINA? ¿PODEMOS SABER ALGO DE ELLAS? SÍ, INVITEMOS AL

LECTOR A REALIZAR EL RECORRIDO DEL HISTORIADOR RECONSTRUYENDO UNA

ALDEA DEL MEDIOEVO ZAMORANO...

CAMPESINOS de ZAMORA

CARLA CIMINO - SABRINA ORLOWSKI

HISTORIADORAS

a constitución de las co-munidades campesinas es un proceso clave en la formación y consolida-ción del sistema feudal,

acercarnos a la comprensión de sus estructuras, a su organización social interna nos ayuda a comprender este problema global.

Realizaremos un acercamiento a una comunidad campesina pertene-ciente a la aldea de Venialbo, en la zona de infl uencia zamorana, en el transcurso de los siglos XII y XIII.

Los propósitos centrales son explorar el colectivo campesino en el momen-to de su constitución como organi-zación comunal, y analizar en dicho período continuidades y rupturas en un proceso de progresiva defi nición de las relaciones sociales.

Las comunidades campesinas eran reguladas por fueros dados por sus señores. Estos no refl ejan una realidad solidifi cada sino que, más bien, son testigos de las distintas co-rrelaciones de fuerza entre las dos clases constitutivas del sistema feu-

dal: los señores feudales y los campe-sinos tributarios. Los documentos de Venialbo nos abren las puertas a un mundo en proceso de conformación.

La metodología que emplearemos consistirá en la comparación de fue-ros escogidos editados en Fueros y Posturas de Zamora (Tumbos Blan-co y Negro), el Fuero de Zamora y documentos del Tumbo Blanco de Zamora. Venialbo es objeto de la con-cesión de fueros más favorables en relación a fueros contemporáneos y de la misma zona, de ahí que nuestro

SOCIEDAD


ROGER BENITO JULIÀ.HISTORIADOR.

DURANTE EL LARGO REINADO DE PEDRO EL CEREMONIOSO (1336-1387),

SE PRODUJO EN LOS REINOS ARAGONESES UNA REVOLUCIÓN EDUCATIVA:

SE EMPEZARON A CREAR CENTROS NO VINCULADOS ÚNICAMENTE CON

LA IGLESIA QUE HASTA EL MOMENTO HABÍA MONOPOLIZADO EL SABER,

SINO CONJUNTAMENTE CON LOS GOBIERNOS MUNICIPALES.


ROGER BENITO JULIÀ.HISTORIADOR.

EDUCACIÓN

Pedro el Ceremonioso y sus vasaallos.Armorial de Claus Heinem, Heraldo de Gelre, compilado entre 1370 y 1386. Bilioteca Real de Bruselas.


ajo el favor de Dios cabalga ahora sir Gawain, recorriendo el reino de Logres, sin un pensamiento que le

distraiga. Durante las largas no-ches, suele descansar a solas y en completo aislamiento, y sin haber tenido ante sí comida que le plaz-ca. Y sin otro amigo en los bosques y montañas que su propio caballo, ni otro compañero de viaje que Dios, llegó al norte de Gales. (Sir Gawain y el Caballero Verde, Tra-

ducción de Francisco Torres Oli-ver, Ed. Siruela. Selección de Lec-turas Medievales 1, Madrid, 1997, p. 17-18.)

El texto, que encabeza este ar-tículo, permite reflexionar sobre la recreación figurada que la propia sociedad medieval realizó sobre el paisaje. Como ha señalado Jacques Le Goff durante la época medieval la percepción del espacio se encon-traba vinculada a representacio-nes basadas en la oposición entre lo alto –el lugar, perfecto, donde

EMILIO MARTÍN GUTIÉRREZ

PROFESOR DE HISTORIA MEDIEVAL

UNIVERSIDAD DE CÁDIZ

[email protected]

EL PAISAJE RURAL APORTA UNA INFORMACIÓN MUY RICA PARA PROFUNDIZAR EN EL CONOCIMIENTO DE DIVERSAS FACETAS DE LAS SOCIEDADES MEDIEVALES. ÉSTAS FUERON TRANSFORMANDO Y DOTANDO DE CONTENIDO A LOS ESPACIOS CULTIVADOS E INCULTOS EN LAS DIFERENTES ETAPAS EN LAS QUE SOLEMOS

DIVIDIR LA ÉPOCA MEDIEVAL…

ECOLOGÍA HISTÓRICA

EL

PAISAJE RURAL en el imaginario colectivo

de las sociedades medievales


EL

PAISAJE RURAL

66 ARQUEOLOGÍA, HISTORIA Y VIAJES SOBRE EL MUNDO MEDIEVAL66 ARQUEOLOGÍA, HISTORIA Y VIAJES SOBRE EL MUNDO MEDIEVAL


PERFILES

LA TURBULENTA HISTORIA DEL PENSAMIENTO EN LA EDAD MEDIA Y SU RELA-CIÓN CON LA IGLESIA OFICIAL, SE DIERON MUCHOS CASOS DE PENSADORES O RELIGIOSOS QUE ROZARON Y, A VECES, TRASPASARON, LA DELGADA LÍNEA DE

LA INTERPRETACIÓN DE LA PALABRA DE CRISTO…

JAVIER NICOLÁS

HISTORIADOR

unos les fue bien, como San Francisco, a punto de ser inmolado por “de-masiado puntilloso con la palabra de Cristo”, a otros

les fue mal, como a los “buenos hom-bres” cataros, quemados y arrojados de sus castillos y monasterios, o al fi lósofo Giordano Bruno.

Con el Maestro Eckhart pasó algo parecido, y, estando en esa oblicua frontera, la muerte le sor-prendió antes del veredicto de cul-pabilidad sobre sus interpretacio-nes cristianas.

Johann Eckhart o Johannes Eckehart, es, indudablemente uno de los puntales de la mística cris-

tiana de la Edad Media. Y aunque perseguido, su legado no puede dejar incólume a ningún estudio-so del tema, pues su profundidad es demasiado grande como para desdeñarla, y su sinceridad religio-sa, creo, está fuera de toda duda. Como dominico, sustituye al frente de su orden a los franciscanos en


VIDA Y MUERTE


CARLOS II


a documentación nos posibilita ponderar todos los aspectos de los últi-mos días de vida terrena de Carlos II Evreux, rey

de Navarra, verdadero hacedor de intervenciones militares y gestor de múltiples alianzas y tratados en su afán de gobernar y mantener eficaz-mente su pequeño reino pirenaico, instalado como cuña entre los tres reinos cada vez más poderosos de la región: Castilla, Aragón y Francia.

En el presente trabajo nos propo-nemos mostrar cómo queda reflejada la muerte en la variada documen-tación de que se dispone, cómo se manifiesta un hecho tan significativo no solo del señor de la casa sino, además, del rey en la plenitud de su poder cuando solo contaba cincuenta

y cuatro años.Desde el 18 de diciembre adver-

timos la gravedad de la enfermedad del rey cuando leemos en el registro que su hija María hace oficiar una misa para implorar por su salud. Luego, una semana después, el día de Navidad, fue enviado un mensaje-ro a Peñafiel, en el reino de Castilla, donde residía su primogénito apriesa con grant quexa al Seinnor Infan-te por la malaudia, et enfermedad del Seinnor Rey. Al día siguiente -26 de diciembre de 1386-, salía del palacio de Pamplona un emisario “a medianoche” llevando un mensaje a Judas Levy, uno de los numerosos médicos que atendían al rey. En esa ocasión, la salud de Carlos II se había agravado de manera notoria y corría peligro de muerte. Ante tal estado, no

se escatimaron esfuerzos, no solo se encontraban junto a él sus “físicos” (médicos) Juce Orabuena, Michelco Sento de Olite, Juan Moliner, Juce Marli de Huesca y el “quirúrgico” Martín Guillén, sino que además se había llamado al médico del cardenal de Aragón.

Además intervinieron su apoteca-rio, Sancho de Sabalza y el tendero lombardo Mono de Casino. Las cuen-tas nos informan sobre las medicinas utilizadas: sucre rosado, aguarrós, tamarindis, prunas, ruibarbo, anís y confit a los que se agregaba, verjus vert elaborado con perejil. Con el azúcar mezclado con vino se hacía el clareu que se daba a beber al en-fermo. Entre sus alimentos, bajo el nombre de medichines du Roy obser-vamos que se adquirieron 4 pollos y

VIDA Y MUERTE

LOS REGISTROS O ESCROAS DE LOS HOSTALES REALES NAVARROS, POR SU CONFEC-CIÓN MINUCIOSA, CONSTITUYEN UNA VERDADERA E INSUSTITUIBLE ATALAYA PARA OBSERVAR Y APRECIAR DE MANERA DETALLADA TANTO TODOS LOS MOMENTOS DE LA VIDA DE SUS MORADORES COMO LOS PORMENORES DE LA MUERTE DE UN REY COMO CARLOS II, ACAECIDA EL 1 DE ENERO DE 1387. ATALAYA DE OBSERVACIÓN FUNDAMENTAL DE TODOS LOS DETALLES DE LA VIDA Y DE SU CONTRAPARTIDA, LA

MUERTE. LA VIDA Y LA MUERTE, ENTRELAZADAS Y EN PERMANENTE UNIÓN.

NELLY ONGAY

MEDIEVALISTA


CARLOS IIDE NAVARRA (1387)


CIUDADES PATRIMONIO

SITUADA EN UN LUGAR PRIVILEGIADO A ORILLAS DEL RÍO TAJO, LA MILENA-RIA CIUDAD DE TOLEDO –HOY, CAPITAL DE CASTILLA - LA MANCHA- HA SIDO HISTÓRICAMENTE UN PUNTO DE ENCUENTRO DE CULTURAS QUE DURANTE UN IMPORTANTE PERIODO DE LA EDAD MEDIA SE CONVIRTIÓ EN UN EJEM-PLO DE CONVIVENCIA ENTRE CRISTIANOS, MUSULMANES Y JUDÍOS, HECHO

QUE LE HA VALIDO EL APODO DE “CIUDAD DE LAS TRES CULTURAS”.

INMORTALTOLEDO

FERRAN MAGRANÉ

PERIODISTA








TOLEDO



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