Rev Clin Esp 2-6 Primera Comunicacion Sobre Una Epidemic de Latirismo 1941

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    TOMO IIN M E R O 6 COMU NICACIN SOBRE UNA EPIDEMIA DE LATIRISMO 533PRIMERA COMUNICACIN SOBRE UNAEPIDEMIA DE LATIRISMO

    E. LEY y C. OLIVERAS DE LA RIVAProfesor A. Ctedra Pato-loga quirrgica Facultad deMedicina; Jefe Equipo Qui-rrgico Hospital Discipli-nario de Tallers y AsistenteInstituto Neurolgico Mu-nicipal de Barcelona.

    Asistente Instituto Neurol-gico Municipal y Consul-torio Neurologa de la C-tedra de Patologa General,Facultad de Medicina deBarcelona.

    .El da 2 de abril delcorriente ao, presen-tamos con carcter urgente a la Acade-mia y Laboratorio de Ciencias Mdicas deBarcelona este trabajo, pues dada la gravedadde la dolencia y su extensin en Catalua,creamos necesario que seacudiese rpidamen-te a tratar a los numerosos parapljicos por latirismo que, sin un diagnstico correcto,eran asistidos en nuestros Hospitales o arras-traban su dolencia en los num erosos pueblosafectados.Al dar hoy publicidad a nuestra PrimeraComunicacin en esta autorizada Revista,nos guan dos fines: el primero, ampliar sudivulgacin, ayudando a los com paeros que,como tantos otros aqu en Catalua, se hanvisto imposibilitados de etiquetar estas rarasParaple jias Espsticas, fcilmente confundi-bles con otros procesos, y segundo, rogar laayuda de los mismos para que, con los datosque nos puedan proporcionar en cuanto a sudifusin, evolucin, etc., completar el estu-dio que tenemos en marcha.La Historia Clnica del primer enfermo que es-tudiamos y que sirvi de punto de partida de nues-tro trabajo, es la siguiente:Enfermo L. A. $., de 27 aos de edad, casado, de oficio

    ebanista, visto por primera vez el 21 de marzo de 1939 en elHospital Disciplinario de Tallers (Barcelona).Enfermedad actual. En octubre del ao 1 939 , en plenasalud y sin prdromos de ninguna clase, comenz a notar porlas noches, estando en la cama, calamb res en las pantorrillasy tambin, aunque en forma ms atenuada, en los muslos. Loscalambres se repetan cada noche. As pas siete das y enton-ces observ que al andar arrastraba la punta de los pies,espe-cialmente el derecho, presentando ligero temblor en las manos.Al mes del comienzo de la afeccin aparecieron micciones im-periosas e involuntarias, a chorro (el enfermo las correga re-gulndolas y hacindolas peridicas). Las defecaciones erantambin imperiosas y las deposiciones, en nmero de una odos diarias, eran de consistencia y aspecto normal. Algunasveces estreimiento.La dificultad para la marcha fue en aumento, resultandoque ya, en vez de arrastrar la punta del pie, lo que arrastrabay sobre lo que se apoyaba, era la mitad anterior de la plantadel pie, instaurndose una marcha tipo digitigrada.Pasados cuatro meses, ingres en el Ins titut o NeurolgicoMunicipal , donde slo hay que aadir y sealar que el tem-blor intencional y de grandes oscilaciones lleg a incapacitarlepara afeitarse y comer.Despus de una minuciosa exploracin clnica y exmenescomplementarios, el Profesor encargado del mismo no puedellegar sino a un correcto diagnstico anatmico de lesin delas vas piramidales, sin poder precisar la etiologa, pero incli-nndose con su buen criterio clnico hacia una forma de co-mienzo de la esclerosis mltiple.El enfermo abandon este Hospital a los veinte das de suingreso, y tras una breve estancia en su pueblo, fue admitidoen uno de los Servicios de nuestro Hospital Clnico.(1 ) Comunicacin presentada en la Academia y Lab o-ratorio de Ciencias Mdicas de Barcelona, en su reunin delda 2 de abril de 1941.35

    Desde el punto de vista sintomtico, aqu slo hay que aa-dir que se generalizan los temblores a todo el cuerpo, desenca-denndolos los estmulos ms ligeros, incluso de orden emotivo.Se repiten las exploraciones y exmenes complementarios queconcuerdan en su negatividad con los anteriores; se ensayandiversas teraputicas de carcter anti-infeccioso, Radioterapia,etctera, y el enfermo abandona este Hospital, despus de una.larga estancia sin haber obtenido ninguna mejora y sin que-hicieran tampoco un diagnstico etiolgico, no obstante el he-cho de que la perspicacia clnica del Profesor encargado delServicio le llevara a examinar (sospechando el carcter epid-mico de la afeccin) a dos familiares del enfermo que pade -can el mismo mal, con ligeras variantes en cuanto a su inten-sidad.El enfermo vuelve a su domicilio y a los pocos das ingre^sa en el Hospital Disciplinario de Tallers, donde, llevado deinters por estos enfermos y no obstante .no estar encargadode la Sala, es visto por uno de nosotros el 21 de marzo'de 1941 .Antecedentes familiares. Padre muerto a los 60 aos decardiopata; madre vive sana, de 62 aos; es el menor decuatro hermanos, el primero muerto-de pequeo de causa queignoran, el segundo, de 3 2 aos, vive sano en Olesa, el ter-cero, de 29 aos, tambin sano en Francia. No antecedentesneuropticos en la familia. Esposa de 27 aos, padece unacardiopata y sufre una afeccin semejante a la del enfermo;una hija de 3 aos sana, y una interrupcin de embarazo hacecinco aos. El enfermo. nos refiere que tambin, un cuadosuyo y varios vecinos del pueblo, padecen una enfermedad pa-recida a la suya. Antecedentes personales. - Nacido a trmino, parto nor-mal, desarrollo, primeros pasos, balbuceo y denticin a tiempoy normales. Enfermedades propias de la infancia; no bebedory poco fumador, negando antecedentes venreos.Exploracin. Nos encontramos con un enfermo bien nu-trido, bien musculado, con la piel morena y mucosas rosadas.La exploracin general no neurolgica, result negativa.Exploracin neurolgica. La percusin del crneo, es nor-mal. No alteraciones olfatorias; agudeza visual y campos nor-males. Pupilas iguales, regulares, concntricas que reaccionannormalme nte a la luz y convergencia. Mu sculatura ocular ex- 'trnseca, normal; no hay nistagmus. No alteraciones en el te-,rritorio sensitivo y motor V par; reflejos corneales, presentesy normales. Facial, auditivo y. resto de pares craneales, norma-l e s . Extremidades superiores. T on o muscular y fuerza seg-mentaria normales e iguales en ambas. Reflejos tendinosos,presntese iguales. Ligero temblor intencional que por su am-plitud recuerda el alcohlico. Pruebas de coordinacin de laserie vestbulo-cerebelosa, correctas. Tronco. La explora-cin de la columna no acusa ningn punto doloroso ni defectoseo y la movilidad es normal. Reflejos cutneos abdominalesTT-rr Crem asterino s + / O Extremidades inferiores. Para-paresia espstica,con predo minio de la paresia en los exten -sores con contractura de los grupos flexores. Reflejos patelares,muy vivos: + + + , -f-f- + ; aquilianos: + + + + ; cu-tneos plantares, en flexin dorsal. Auriiento de las zonas re-flexgenas y clonus en ambos pies. Maniobras de BARRE yMlNGAZZINI, revelan rpida claudicacin en ambas extremi-dades. Las pruebas de equilibrio, no pueden realizarse por laacentuada paresia. La marcha, apoyado en dos bastones estpicamente digitigrada. Maniobras de LASSEGE y BRAGARDy puntos de VALLEIX, negativos.Exmenes de sangre

    Hemates 4.600.000Hemoglobina 9 8 %Valor globular . 1 %Leucocitos . . . . . . . . 7 - 5o oPolinucleares neutrfilos . . . . . . 64 /oPolinucleares eosinfils . . . . 1 % . i n f o c i t o s . . ' . . . . . . 2 7 %Monocitos 8 %ndice, refractomtrico . . . . . i>354Viscosidad del suero . . . . 1.78Albm inas totales 7-88 %

    Velocidad de sedimentacin globular:1 hora 32 horas 4 .Media 2,5

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    534 REVISTA CLNICA ESPAOLA 1. junio 1941Seroaglutinacin. Micrococus Mcl i tens is : Nega t iva .R e s u m e n : Aumen to de las protenas y de la viscosidad delplasma.Anlisis de orina. Normal a los anlisis clnicos co-rrientesAnlisis jugo gstrico. A. O H = 1,09; A. T . = 2,75por 100.

    Anlisis L. C . R.Clulas 2Albminas 0,03 %Glucosa 0,07 %Cloruros 0,74 %Reacciones de: Nonne-Apelt, Pandy, Weichbroth, Wasser-mann y Meinicke, negativas.Comentados del caso. Por los resultados dela exploracin clnica que antecede, nos encontr-bamos ante una lesin de las vas piramidales,quepodamos localizar a la altura del noveno segmentodorsal y que tena por los datos anamnsicosun ca-rcter epidmico.Este ltim o p unt o unido a los deexploracin y resultados negativos de los exmenescomplementarios, separaba etiolgicamente el cua-dro de este enfermo del de las: compresiones medu-lares,esclerosis lateral am iotrfica, pataplejia tipoStrumpell, la paraplejia tipo E rb y laesclerosis enplacas,procesos con los cuales y especialmente losdos ltimos, tena muchos puntos de contacto, pero,de los que fue posible separar por los sntomas di-ferenciales y particularmente por suaparicin simul-tnea en. un gran nm ero de enfermos en regionescontiguas, que le daba un carcter particularmenteepidmico.Enfocando el problema etiolgico en este senti-do, nos trasladamos al pueblo de Esparraguera, dedonde es oriundo nuestro enfermo y aun cuandotuvimos que luchar con las naturales dificultadesde explorar y estudiar enfermos en un medio rural atenuadas por la amabilidad y entusistica co-laboracin de los compaeros de aquel pueblo, doc-tores: V A L L S, B A L A G U E R y DURAN, a quienes da-mos una vez ms las gracias, comprobamos: quela enfermedad, tena todos los caracteres de una epi-demia, datando sus comienzos de principios delao 1939.Que el nmero de enfermos era: alrededor de 30en Esparraguera, a los que se podan aadir por sermuy semejantes, segn referencias que nos ofrecanentero crdito, diez casos ms en Olesa; uno enPallej; unos doce en Igualada y quizs ms deveinticinco en Tarrasa.Que la poblacin masculina,era ms afectada quela femenina.Que predominaba en los jvenes, existiendo sloun caso en una mujer de edad avanzada y ningncaso entre los nios.Que los enfermos eran gentes humildes, en sumayora obreros de fbrica, pues incluso dos de lastres mujeres registradas son obreras fabriles, no ha-bindose dado ningn caso entrelas clases acomoda-das, ni entre los campesinos.Seguros pues, de su carcter epidmico, faltabaprecisar el agente causal. Era infeccioso?; caren-cial o txico? E stas fueron nuestras tres- hipte sisde trabajo. Para su determinacin e:tudiamos unprimer grupo de 19 enfermos, practicndoles los.exmenes complementarios de rigor.

    La primera hiptesis,es decir la infecciosa, quizstena a su favor el hecho de que la enfermedadcoincidi con el regreso de los jvenes de las trin-cheras; pero, bien pronto pudimos desecharla, puesno slo no correspodan a ninguna de las formasde las mielitis y encefatomielitis conocidas, sino que,adems, tampoco corresponda al tipo de las neuro-patas que se asocian o son secuela de otras infec-ciones.La fiebre de Malta, con su polimorfa sintomato-loga neurolgica, era muy a tener en cuenta en re-giones como la que era objeto de nuestro estudioen que la melitensis tiene un carcter endmico;pero el hecho de no corresponder su sintomatologaa la de las brucelosis, la rara coincidencia de. que lamayor parte de nuestros enfermos no tomaban le-che, y el resultado negativo de las reacciones serol-gicas, descart fcilmente esta enfermedad.En cuanto a lasegunda hiptesis,a suponerla unaafeccin de tipo carencial, tenamos a su favor elhecho que ya hemos sealado, de presentarse entrelas clases ms humildes y peor alimentadas, el quealgunos enfermos incluso relacionaban las exacer-baciones de su mal con los perodos de mayores di-ficultades econmicas y de peor alimentacin portanto. Pero el estudio cuidadoso de las dietas deestos enfermos si bien en algunos de ellos, como enuna de las que adjuntamos, demostr ser franca-mente deficitarias desde el punto de vistaenergtico,no lo eran desde el punto de vista de su riquezavitamnica. (Vanse cuadros I y II.) Por otra parte.Cuadro I. ANLISIS CENTESIMAL Y CALRICO DEL RGI-MEN DEL ENFERMO NM. I

    Desayuno :Guijas.Aceite oNaranjaLecheComida:

    GuijasAceite oPatatasPltanoEnsaladaPan .Cena:Guijas

    . . .125tocino. 15. . .150. . . 300

    . . . 125tocino. 15. . . 60. . . 100. . . 50. . . 25

    . . . 125Aceiteotocino. 15ArenquePan . . . . 70. . . 25

    Caloras to t

    Prot./o2600,83, 4

    26021,318,826015,58,8

    Lip./o1,799,41,353,6

    1,799,4,62,60,380,20,81,799,47,60,8

    lies tiles.

    Gluci./o49,80, 212,64,8

    29,80, 22022,845449,80,2054

    Calorastotales

    37 5145802 0 18 0 137514555100266 576 637 51451256 571 0

    2.274RGIMEN NORMAL AL PUNTO DE VISTA .CALRICOY VITA-MNICO. El contenido cen tesimal y calrico de este rgimen,as como el del que sigue, se basa en datos no absolutamenteexactos, pues corresponden a los obtenidos por el interrogato-rio de los enfermos.

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    T O M O IINMERO 6 COMUNICACIN SOBRE UNA EPIDEMIA DE LATIRISMO 53 5Cuadro II. ANLISIS CENTESIMAL Y CALRICO DEL R-GIMEN DEL ENFERMO NM. 2

    Desayuno:ManzanaPan .

    Comida:Guijas oAceite oPan .Cena:GuijasAceite o

    judas.tocino.

    tocino.

    100 gr.25

    125 15 25

    125 15

    Prot.

    0,48,8

    2608,8

    260

    Lip.

    0,650,80

    1799,40,8

    1799,4

    Gluci.

    13,354

    29,80,254

    29,80,2

    Calorastotales

    58651233751456558537514552 0

    Caloras, Total. 1.228RGIMEN CARENTE A TODOS PUNTOS DE VISTA. Ca-r en te de v i t aminas y microfactores especficos. Deficiente enmater iales pls t icos . Def iciente en mate r i a l es d inamgenos .

    nuestros enfermos no eran clnicamente unos hipo-vitaminsicos. En todos, faltan aquellos sntomasque tan bien han sido descritos y estudiados du-rante la pasada guerra, entre las poblaciones civilesde la zona no liberada y que con sus polineuritis,aquilias, diarreas, hemorragias, etc., son fcilmentediagnosticares.Dentro de las variedades del interesantsimo sn-dromede LICHTHEIN, ni aun el de RlSIEN, RussEL,BATTEN y COLLIER, con su paraplejia espstica ca-racterstica, poda confundirse y menos aun, el msraro de la forma puramente lateral del sndromeneuroanmico de PIERRE MATHIEU.Nos quedaba, pues, que estudiar en el sentido denuestra tercera hiptesis: La intoxicacin.Aun cuando en su mayora fueran obreros fa-briles, la posibilidad de una intoxicacin profesio-nal fue fcilmente excluida, porque pudimos evi-denciar que pertenecan a los oficios ms diversos yen su mayora tan innocuos como el de carpinteros,preparadores, etc., no existiendo desde luego nin-guna comunidad de trabajo entre ellos.Por tanto, tenamos que estudiar la posibilidadde una intoxicacin de origen alimenticio. Volvi-mos a estudiar las dietas que nos haban servidopara eliminar la etiologa carencial y hubo algo quedesde el primer momento ralt a nuestra vista, ha-ha un alimento que era bsico y comn en las ra-ciones de nuestros enfermos; que incluso, en algu-nos de ellos, haba constituido a temporadas el ali-mento nico y que en otros casos no formaba partede la alimentacin del nico miembro de la fami-lia que haba quedado indemne, por no gustarle, yeste alimento era la guija o muelas o titos o almor-as, en cataln guixas.Forzosamente, por l, tenamos que comenzarnuestro estudio, y al clasificar a esta leguminosa,nos encontramos que perteneca al gnero lathyrusy especie, lathyrus sativus, existiendo hasta 23 es-

    pecies del mismo gnero que se cultivan en Catalu-a, la ms frecuente despus del sativus el ccera, encastellano garbanzo gitano y en cataln guixons;lo que naturalmente, nos dio el diagnstico, puestoque a l se ha atribuido el ser el agente causal deuna paraplejia espasmdica que toma los caracteresde epidemia en pocas de penuria alimenticia, y quese llama, Latirismo mediterrneo.Comparando el cuadro sintomtico de nuestrosenfermos con el descrito en los pocos trabajos pu-blicados sobre esta enfermedad y sin detenernos aexaminar los ms antiguos, que nos haran remon-tar a los primeros siglos de la era cristiana, en quelos botnicos COLUMELAJ y PLINIO- ya habanobservado la toxicidad de esta leguminosa, y menosan, examinar los estudios quizs ms interesantesen otro orden distinto del de la clnica, publicadospor los veterinarios (por ser esta afeccin ms fre-cuente entre los animales, especialmente, el cerdo,el caballo, el carnero, etc.), y concretndonos, porlo tanto, a los ms modernos: la tesis de L. As-TIER* basada en el estudio de una epidemia apare-cida en Argelia en el ao 1882, el de PROUST*pu-blicado en el Boletn de la Academia de Medicinade Francia, con el mismo material; el interesant-simo de JAMES IRVING KIRCK-*, que estudi unaepidemia en la India en el ao 1864; el de CANTA-NI6 que en 1875 fue quien dio a esta enfermedadel nombre de Latirismo; el muy completo de RO-BERT', llamado a Rusia el ao 1910 para estudiaruna epidemia aparecida en aquel pas; los deT R A -BAUD, MOURCHED, KRATER, CHATY y MOUHAR-RAN*, el de LoiSSEL9 sobre otra en Siria el ao1 9 2 7 ; Me . CARRISON l0y H. SCOTTU que estudianel Latirismo en la India donde esta afeccin pareceser endmica. En nuestro pas, el profesor BAUE-LOS ha tenido la oportunidad de observar algu-nos casos espordicos, procedentes de la alta me-seta castellana, haciendo una somera descripcin cl-nica, y J. BEGUIRISTAIN I3 ha publicado un casoanmalo de pelagra para nosotros, sospechoso delatirismo.Segn las descripciones clnicas de PROUST, As-TIER, IRVING y KOBERT, el cuadro es el siguiente:Comienzo brusco, ms raramente lento y progre-sivo, incontinencia prematura de esfnter vesical;temblores violentos generalizados de tipo intencio-nal. Las piernas se vuelven lentas y perezosas; al-gunos dolores vagos de tarde en tarde y poco a pocolos sntomas se instauran en toda su agudeza.

    En el perodo de estado, los fenmenos observa-dos son siempre los mismos. Los trastornos moto-res dominan la escena, representan el sndrome dela paraplejia espasmdica. En los casos de medianaintensidad, la marcha es an posible, pero est muydificultada por la contractura de los diversos seg-mentos de los miembros inferiores; el pie est fija-do en extensin, el taln en el aire, los dedos delpie en flexin dorsal; las rodillas y los muslos es-tn en flexin y adduccn; juntas una con otra.En el estado de reposo se puede percibir contrac-ciones -fibrilares, pero- tan pronto-como el sujetointenta ejecutar un movimiento, aparecen temblo-res violentos; las piernas se agitan como las hojasde un rbol azotado por el viento (PROUST).

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    536 REVISTA CLNICA ESPAOLA I . 0 junio 1941La deambulacin es difcil, la paresia y la con-tractura de todo el miembro inferior reducen al en-

    fermo a no progresar ms que con la ayuda de losmsculos de la pelvis y del tronco; para avanzaruno de los miembros inferiores, proyecta el troncodel lado opuesto, primero hacia adelante, luego ha-cia atrs; el pie se apoya en el suelo por la parteanterior de la planta solamente. Los reflejos rotu-lianos estn exaltados y existe clonus de pie y Ba-binsky.Las extremidades superiores estn siempre indem-nes, presentando solamente un temblor muy pare-cido al de la esclerosis en placas. Los trastornossensitivos son la excepcin.El cuadro clnico de nuestros enfermos es idn-tico al que antecede, en cuanto se refiere a su ca-rcter epidmico; a su forma de comienzo; y a susintomatologa, temblor, parestesias, paraparesi es-pstica, con predominio de flexores que da lugar ala marcha caracterstica; con la afectacin precozde esfnter vesicaly la natural exaltacin de refle-jos ; ausencia de trastornos trficos, evolucin lentay limitacin a los miembros inferiores.Por nuestra parte, y como resultado de nuestrasobservaciones, nosotros hemos de sealar la afecta-cin tambin casi constante del esfnter rectal, ascomo que las parestesias son de tipo constrictivo,como sensacin de atadura de las extremidades, es-pecialmente piernas, menos intensas en muslos ymenos frecuentes an en regin lumbar y en el ca-rcter nocturno de estas parestesias. Tambin (y estono lo hemos encontrado en ninguna de las descrip-ciones que hemos estudiado), tenemos que sea-lar que, en su inmensa mayora, los enfermos pre-sentan modificaciones de su psiquismo, contrastan-do el estado eufrico de los mismos con lo penosode su situacin.Con respecto a ROBERT, que es quizs quien conms medios ha estudiado esta afeccin, coincidimosen la ma yor frecuencia entre el. sexo m asculino yen la edad media de la vida, no habindonos sidotampoco dado observar ningn caso en nios. Asi-mismo coincidimos con este autor, en la accin des-encadenante del fro y la humedad, pues nuestrosenfermos relacionan generalmente la aparicin oexacerbacin de sus dolencias con el otoo o prin-cipios del invierno.El diagnstico, por lo que queda descrito, ha debasarse fundamentalmente en la anamnesis cuida-dosa de estos enfermos, precisando cuidadosamenteel gnero de alimentacin de los mismos y en su ca-rcter epidmico.Las caractersticas clnicas para el diagnsticoson:a) El comienzo brusco sin prdromos.b) Parestesias en forma de sensacin constric-tiva de las pantorrillas, menos acentuadas en losmuslos y raramente en regin lumbar.c) Carcter nocturno d e las mencionadas pa-restesias.d) Afectacin precoz y constante del esfntervesical, con micciones imperiosas e involuntarias,afectacin inconstante del esfnter rectal.e) Paraparesi espstica de carcter progresivo,

    predominando en los grupos extensores y con con-tractura de flexores.f) La marcha, se inicia arrastrando la punta delos pies, ms adelante se instaura la tpica deam bu-lacin decarcter digitigrado; con el taln levan-tado y apoyndose sobre la cara plantar de los de-dos y porcin anterior de la planta del pie, piernasy muslos en semiflexin y adduccin.g) Temblor en las extremidades superiores detipo intencional; a veces,se generalizaa todo elcuer-po , pero tiene marcada preferencia por las m anos.h ) El psiquismo de estos enfermos est ge-neralmente ligeramente alterado, mostrando en sumayora unacierta euforia e indiferencia por su si-tuacin, que contrasta con lo lastimoso de su es-tado.i) Aumento de las protenas y viscosidad delplasma.j) Ausen cia de trastornos sensitivos objetivos.k ) Ausencia de trastornos trficos.1) Ausencia de sntomas neurticos.Al final de este trabajo, acompaamos la casus-tica de 18 enfermos, por cuyas historias clnicas po-drn comprobarse las aseveraciones que anteceden.COMENTARIOS FINALES. A nuestro juicio haycuatro puntos cardinales sobre los que reina unaverdadera confusin:A) Sobre el agente causal; B) Sobre la patoge-nia; C) La Anatoma Patolgica; D) La Tera-putica.A) SOBRE EL AGENTE CAUSAL. Si creemosque se debe insistir sobre el agente causal, es porquehay un barullo etiolgico que podemos resumiras : MEYER I4, cree que el agente responsab le de Vaenfermedad es un hongo parsito habitual del la-thyrus. STOCKMANNI5 afirma que se trata de unglicsdo del propio lathyrus. GUILLAME l6, nosdice que es una saponina (toxalbmina). GOLD-BERGER I7, habla de una substancia fluorescente ; lafluorofila.T E I L L E U X I8, aisla un cido resinoso queresulta activo sobre el conejo. BOURLIER I, haceextractos etreos activos sobre las aves. R E I N S C H2 0,hace extractos alcohlicos que al parecer son de gran

    actividad. ASTIER, habla de un alcaloide voltil.KOBERT, aisla una resina grasienta muy acre y muytxica. PIERRE MARIEE concluye de sus observa-ciones y como resumen de otros trabajos, que el la-thyrus, tiene varios alcaloides activos.Y con tanto embrollo nos preguntamos: cules la substancia verdaderamente responsable de laparaplejia? Para poder aportar luz en este apartado,nosotros hemos preparado digestiones acuosas de laharina de lathyrus Sativus, a pH 4, pH 7 y pH 1o.Por otro lado, hemos hecho digestiones teroal-cohlicas. Con estas digestiones intentamos la re-produccin experimental del sndrome sobre rato-nes blancos.Posteriormente, intentaremos identificar el pro-ducto activo desde el punto de vista qumico (exa-men centesimal, funcional y constitucin).B) SOBRE LA PATOGENIA. Sobre la p ato-genia hemos visto tambin que, entre la escasa lite-ratura que existe, hay n embrollo manifiesto:

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    T O M O IINMERO 6 COMUNICACIN SOBRE UNA EPIDEMIA DE LATIRISMO 7V L E S F. yGOLDBERGER, afirman que es un me-canismo fotodinmico elpunto departida patog-nico.SCHWARZyKOBERT,aseguran quees unpro-ceso quimiotxico de asiento nervioso. JAKSCH ,lo interpreta como una accin carencial asociadaauncoeficiente de masividad,quedenomina pM.Na-turalmente, el exponente masivo sera el alcaloideactivoquedenomina latirina .Con el fin deaportarluz en lamedidadenues-tras fuerzas, llevamos dosrdenes deinvestigacio-nes: ExperimentalesyClnicas.Por lasExperimen-tales, tratamos de dilucidar si el mecanismo escarencial, txico o fotodinmico. Para ello sumi-nistramosaratones blancos del mismo peso, regme-nes idnticos en cuanto avalor calrico.El supuesto agente txico losuministramosdia-riamente al ratn por sondaje gstrico en unos yva endovenosa enotros.Hacemos lotes dispuestosa la luz y otrosen lasombra, todos a 24grados centgrados.(Nopode-mos anticipar resultados porque lasexperienciassehallan slo iniciadas.)Por las clnicashemos empezado por estudiarel metabolismode losenfermos, podemos adelantarqueen laorinade lospacientesseencuentra:

    Aumento delcarbono disoxidadoAumento del cociente . .Aumento del cociente .Normalidad delcociente .

    carbono totalnitrgeno totalcarbono desoxidadocarbono totalnitrgeno ureioo n. amniccnitrgeno totalPor lo que podemos concluir quetales enfermos

    presentan una manifiesta carbonaria disoxidativa.Paralelamente encontramos un potencial Redoxde la orina muy elevado. Ello nosindica un rHbajo y, por tanto, la presencia de substanciasre-ductoras. (No apreciables a los mtodos qumicoscorrientes.)Todo esto concuerda con la Carbonuria y nosindica que lossujetos afectos de paraplejia later-dica eliminan productos disoxidados cidos,de po-tencial Redox elevado y por lo tanto catablitosintermediarios quetraducen un metabolismo gene-ral afectado.Ahora vamos a completar esta sesin haciendoestudios sistemticos debalances, tolerancias, equi-libriosymetabolismo basal.C LAANATOMA PATOLGICA.Sobre estepuntosonpobrsimas las pruebas.Tanslo nossonconocidos los resultados de autopsia de los caba-llos afectos delatirismo, publicados porKOBERT: Degeneracin grasosa y atrfka de losmscu-los tiroaritinoideos y crcoaritenoideos posterior ylateral. Atrofia de las clulas gangionaresdel n-cleodelneumogstricoy de lasmultipolaresde lasastas anterioresde lamedula.Resultados stosque noconcuerdan enabsolutocon la clnica humana. Nos proponemos estudiar

    las lesiones desde este punto devista anatomopato-.lgicoennuestros animales.

    D LATERAPUTICA. Se comprende queslo despusdehabernos orientadoen laEtiologay Patogenia, podremos orientarnosen suTerapu-tica, punto tambin confuso ysobreelcual, apartedelasupresin inmediata delalimento causala losenfermos y la recomendacin, confines profilcti-cos,demoderarsuconsumoen lossanos; nosotroscreemos que estos enfermos se beneficiarn muchocon un tratamiento ricoenvitamina Bxy E.Queda, pues, para unsegundo trabajo, elcomu-nicar los resultados de las investigaciones que te-nemos en marcha, las cuales, apenas iniciadas,noshan dado resultados tan sugestivos y alentadoresquenoshacen abrigar laesperanza decompletardeuna manera definitiva elcuadrodelLatirismo medi-terrneo(1).OBSERVACIN NMERO 2..-J. J. S., de 47 aos de edad.Casado. Natural de Sabadell. Domicilio SanMiguel, 22, Es-parraguera. Oficio, obrero de fbrica (Seccin de carburo) yvisitado el 26 de marzode 1941.Enfermedad actual. El 25 de julio de 1940, infeccinintestinal, con fiebre, cefaleas no muy intensas, sudoraciones

    nocturnas muyprofusas, dur el cuadro 20 das. El mes deseptiembre sereintegra al trabajo completamente restablecido.Coincidiendocon tasprimeras humedades empieza anotarlumbalgias, que le obligaban a interrumpir el trabajo; dura-ron 4 das, pasadosloscuales aparecen edemas fugacesen ma-nosypiernas, que duran tres das,sinfiebrey sindolor.Apa-ricin desensacionesdeataduraenlas pantorrillasdurante tresdas, de carcter nocturno dificultad para la marcha arras-trando la punta de los pies, notando las piernas perezosas;simultneamente micciones imperiosas(que el enfermo las re-gula, peridicamente, para evitarla incontinencia).A losquin-ce das del comienzo de la enfermedad, tembloresde tipo in-tencionalenlasextremidades superiores msmanifiestos en lasmanos aqueja gran dificultad para bajar pendientesyesca-leras.La marcha se ha ido haciendo cada vez mspenosa; alos cinco meses abandona eltrabaj; en lactualidad no pue-de andar ms que con laayuda de dosbastones.Antecedentes familiares:Unahermana, uncuadoy un so-brino padecen afeccin semejante ; por lo dems, sin inters.Antecedentes personales:Sin inters. Rgimen alimenticio delenfermo: Desayuno:pan y una manzana, o chocolate. Comi-da: verdura con patatas o guijas con patatas, ensaladacom-puesta de lechuga, tomate y cebolla. Racin de pan. Cena:guijas conpatatas, una manzana, racinde pan.Exploracin:La exploracin general noneurolgica, esnegativa, en la neu-rolgica, encontramos pares craneales:normales. Extremida-des superiores: ligero temblor intencional de pequea oscila-cin en ambas manos. Tono, fuerza, reflejos y pruebas decoordinacin, correctas y normales. Reflejos cutneos abdomi-nales, presentes los superiores y abolidos los inferiores. Cre-masterinos, D.-dudoso. I.-presente.Extremidades inferiores. Paraplejia espstica, conpredo-minio en grupo de extensores y contractun deflexores.Re-flejos rotulianos muy vivos, aquilianos vivos, cutneos plan-tares en flexin dorsal. Aumento de las zonas refiexgenas.Clonus en ambos pies. Las sensibilidadesson normales entodas susformas.La exploracin de la columna vertebralesnormal.

    COMENTARIO.Este enfermo, que perdi 28 Kgs. depeso, tuvo edemas fugaces. Su rgimen puede estudiarse en elcuadro II. Presenta junto al latirismo fenmenos de insufi-ciencia energtica yprotenica.OBSERVACIN NMERO 3 . G. A. E. Casado, de treintay ocho aos de edad. Domiciliado en Esparraguera. Oficio,pen dealbail. Visto pornosotrosel 26 demarzo de 1941.(1) Agradecemos la valiosa colaboracin denuestroque-rido compaero en el Instituto Neurolgico Municipal, eldoctor R. ROCADEVlALS, a quien debemos los exmenesclnicos de laboratorio yAnatomopatolgicos; yAlosLaboratorios del doctor ESTEVES. A., que hapuestoa nuestra disposicin sus servicios de investigacin y control,que dirigen tcnicos de la mxima competencia.

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    538 REVISTA CLNICA ESPAOLA I. junio1941Enfermedad actual.En febrero de 1940, coincidiendoco nunfuerte enfriamiento, quele ocasion ligera fiebre, sudo-res nocturnos yaccesosde tos, not, durante tas noches, fuer-tescalambres y sensaciones constrictivasenlas pantorrillas,enforma ms atenuada en losmuslos; pas as dos dasencamayal levantarse vio, con gran sorpresa, que las piernas se habanvuelto perezosas, alandararrastraba lapunta de lospies,te-niendo gran dificultad para bajar pendientes y escaleras. Unmes ms tarde, ceden los calambres n octurn os, apareciendomicciones imperiosaseinvoluntariasyligeros temblores de tipointencionalen las extremidades superiores;a veces se genera-lizan a todoelcuerpo, lamarcha se va haciendo cada vez msdifcil, perono ha necesitado nunca bastones. La enfermedadse estabiliza en esta forma, presentndose de tarde en tardelumbalgias.Antecedentes familiares: Sin inters. Antecedentes persona-les: Tambin sininters. Rgimen alimenticio: Desayuno:unplato rebosante deguijas, un vaso devino y un huevo.Co-mida: guijas con patatas, pur de maz, un poco de pan ymedio litro devino. Fru ta. Ce na: pur demaz, un platodeverdura, unvaso de leche, racin depan. Exploracin: En la

    exploracin general nosencontramos con un hidrocele izquier-do , varices en ambas piernas y cicatrices de antiguas lcerasvaricosas.En la exploracin neurolgica, nervios cranealesab-solutamente normales. Extremidades superiores: ligero temblorde pequea oscilacin en ambas manos; por lo dems, norma-lidad. Reflejos cutneos abdominales abolidos. Cremasterinospresentes. Extremidades inferiores: Discreta paraparesia esps-tica, predominante en losgrupo s extensores, reflejos rotu lia-nos muyvivos, aqu ilianos v ivos, cutneos plantares no defi-nidos. Aumento dezona s reflexgenas, c lonus de ambos pies.Sensibilidades normalesen todas susformas: La exploracindela columna vertebral,normal.OBSERVACIN N M ER O 4 . J. S. B , de veintisis aosde edad. Soltero. Natural y domiciliado en Esparraguera, callede Bruch, num. 5. Oficio ebanista. Visto pornosotros el 26de marzo de 1941 .Enfermedad actual.En enero de 1940,not calambresnocturnosen lapiernas, repitindose cada noche, pasados sietedas, dificultad para deambular, arrastrandola punta de lospies, simultneamente afectacin deambos esfnteres, con mic-ciones imperiosas e involuntarias y deposiciones del mismotipo. Durante siete das, disartria, acompaada detemblorge-neralizado, ms marcadoen extremidades superiores,de tipointencional. Durante el verano, comenz a mejorar en formaacentuada, para empeorar denuevo en otoo; ltimamentehanotado ligera mejora.Antecedentes familiares y personales: Reumatismo poliar-ticular depequeo, los dems datos noofrecen inter s. Rgi-men alimenticio: La alimentacin era casi exclusivamente abase de guijas, exceptoen verano, que prescinda de ellas, coin-cidiendo con la mejora clnica. Exploracin: Pares cranealesnormales. Extremidades superiores, normales. Reflejos cutneosabdominales, presentes lossuperiores y abolidos losinferiores.Cremasterinos presentes. Extremidades inferiores: Paraparesia

    espstica muy acentuada. Reflejos rotulianos y aquilianos muyvivos, cutneos plantares en flexin dorsal. Clonus de ambospies. Sensibilidades normalesen todas susformas. La explo-racin de la columna vertebral,normal.OBSERVACIN NMERO 5 . R. C. B., detreinta y nueveaos. Casada. Oficio, tejedora. Natural y domiciliada en Es-parraguera. Vista pornosotrosel 26 demarzo de1 9 4 1 .Enfermedadactual.En octubrede 1940,al ir al trabajo,not que laspiernas le claudicaban y no poda adelantar,te-niendo quesersujetada para evitar la cada. Desde haca cincomeses presentaba incontinencia de orina, a veces tambin deheces. Sensacindecalambresy constriccionesen las piernas,durante la noche. Fue vista en el Hospital deSan Pa blo, dondese le practicaron faradizaciones; sigui empeo rando y quedparapljica, no pudiendo asistir al trabajo. Cambi la alimen-tacin y empez a notar mejora; en la actualidad puedean-dar sola.Antecedentes familiares y personales: Sin inters. Rgi-gimen alimenticio: Desayuno, guijas, raras veces con pan. Co-mida: pur demaz yguijas, a veces pan. Cena: guijas y unvasitodeleche, casi nu nca fru ta. El marido y lahija, que es-taban enfermos de reumatismo y tuberculosis pulmonar,res-pectivamente, no enfermaron y no entraban lasguijas en sualimentacin.Exploracin: En la exploracin general, encontramos unligero edema maleolar. En la exploracin neurolgica, pares

    craneales normales. Extremidades superiores: normales. Refle-jos cutneos abdominales presentes. Extremidades inferiores:Paraparesia espstica, con predominio en los grupos extenso-res. Reflejos rotulianos y aquilianos muy vivos, cutneos plan-taresno definidos. Clonus en ambos pies. Coordinacin yequi-librio normal. Sensibilidades normalesentodas sus formas.Laexploracin de la columna vertebral, normal.OBSERVACIN NMERO 6.J . M. G., de veintiochoaos de edad. Casado. Natural de Chelta (Tarragona).Do-miciliado en Esparraguera, calle Amador, nm. 18. Oficio,obrero de fbrica de perchas. Visto por nosotros en 26 demarzo de1 9 4 1 .Enfermedad actual.En octubre del ao 1939,comenz-a notar, durante las noches, calambres enlas piernas; tambin,aunque menos acentuados,en losmuslos, y a vecesen reginlumbar; pocos das despus, incontinencia de ambos esfnteres,con micciones involuntarias y deposiciones imperiosas; aspas tres meses, apareciendo luego dificultad para la marcha,ms acentuada albajar cuestasy escaleras; seestabiliza la en-fermedad y con ligeras remisiones sigue hasta la fecha.Antecedentes familiaresy personales. Una pedrada de pe-queo en la regin parietal derecha, seguida de estadocon-mocional quedur medra hora ; durante ocho das permaneciobnubilado.El ao 1938, prdida deconocimiento bruscaquedur tres minutos, no sabe explicar si tuvo convulsiones.R:gimen alimenticio: Desayuno: unplato deguijas, o guisantes,,o habas. Comida: un plato deguijas y ensalada de tomates,cebollas y lechuga. Cena: unplato deguijas, un vaso de le-che, racin depan. La esposa vive sana a pesar delmismor-gimen alimenticio.Exploracin: La exploracin general esnegativa. Laexplo-racin neurolgica: Cicatriz en la regin frontoparietal iz-quierda. Pares craneales normales, a excepcin de una hipoeste-sia en territorio del trigmino izquierdo. Extremidades supe-riores, normales. Reflejos cutneos abdominales presenteslossuperiores y abolidos los inferiores. Extremidades inferiores:discretsima paresia, predominando en los grupos extensoresReflejos rotulianos DH\- + ;I + -f;aquilianos presentesynormales, cutneos plantares D flexin dorsal, I en flexinplantar. No hayclonus. P ruebas decoordinacin y equilibrio,normales. Sensibilidad : Adems de loapreciadoen el territoriodel trigmino izquierdo, encontramos unahemiafectacinqueengloba todas lassensibilidades del lado izquierdo detipo cor-tical.Laexploracin de la columna vertebral,normal.COMENTARIO DEL CASO: Este enfermo, ademsde unlati-rismo incipiente, presenta unaepilepsia focal, con pr obab leci-catriz de la circunvolucin postrolndica (pendiente deencfa-log ra ma ) .OBSERVACIN NMERO 7.M .S. S., de veintisiete aosde edad. Casada. Natural de Esparraguera, condomicilioenla misma localidad, calle de Barcelona, nm. 16.Oficio, teje-dora. Vista pornosotrosen 26 demarzo de1 9 4 1 .Enfermedad actual. En octubre del ao 1939, notpa-restesias portodo el cuerpo, pero m s acentuadas enlas pan-

    torrillas, son decarcter nocturno, duran dos meses, apare-ciendo luego dificultad para la marcha, especialmente albajarpendientes yescaleras, con prdida defuerza muy acentuadaenambas piernas..Desdeel comienzo, incontinencia de esfnter ve-sicaly rectal.Ha evolucionado con ligeras remisiones,y de una o a esta parteha mejorado mucho, quedando tan slo ligeradificultad para bajar escaleras y ligera afectacin de esfntervesical.Antecedentes familiaresy personales. Marido y un her-mano, conafeccin semejante. A migdalitis repetidas, reuma tis-mo, actualmente lesin mitroartica.Rgimen alimenticio.Predominantementeabase de guijas.Exploracin: En la exploracin general, nosencontramoscon un doble soploen lapunta y un soplo diastlico en focoartico. Exploracin neurolgica: es prcticamente negativa,aexcepcin de unadiscretsima paresia de lasextremidadesin-feriores, con predominio en los grupos extensores. Reflejospa-telares vivos Aqu ilianos presentes normales. Cutneos planta-res en flexin plantar.

    O BSE RV A CI N N M ER O 8. J. M. R., de dieciocho aosde edad. Soltero. Domiciliado enEsparraguera. N atural deAl-mera. Oficio, hojalatero. Visitado pornosotrosel 26 demar-zo de 1941.Enfermedad actual.En febrero de 1940, not que laspiernas leperdan fuerza duran te la marcha, a veces claudica-ban y caa alsuelo. Durante lanoche, sensacinde calambres

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    TOMO IIN M E R O 6 COMUNICACIN SOBRE UNA EPIDEMIA DE LATIRISMO 539en lasp antorrillas y constriccionesde las mismas. Desde elprincipio de la enfermedad, incontinencia de esfnteres,conpredominio del vesical, que dura tres meses. La dificultadpara la marcha ha ido en aumento, y en la actualidad, slopuede andar muydifcilmente, con la ayuda de dosbastones.Antecedentes familiaresy personales: Tiene unhermanoconafeccin semejante; por lo dems, sin inters. Rgimenali-menticio: Desayuno: Guijas con un poco de pan. Comida:guijasconpatatas, unarenquey la racinde pan.Cena: guijasyde vez en cuando un arenque, a vecesun vasodeleche.Du-rante el verano, mucha fruta.Exploracin: La exploracin general esnegativa. La explo-racin neurolgica. Pares craneales, normales. Extremidadessuperiores: ligero temblor de tipo intencionado. Reflejos cu-tneos abdominales presentes. Cremasterinos presentes. Extre-midades inferiores: Paraparesia espstica muy acentuada, afec-tando con predominancia al grupo de los extensores, contrac-tura de flexores. Reflejos rotulianos muy vivos. Aquilianosvivos. Cutneos plantares en flexin dorsal. Aumento de zo-nas reflexgenas. Clonus en ambos pies. Sensibilidades:Hipe-ralgesia en lasdermatomasL5, Si, S2. La exploracin de lacolumna vertebral,normal. Fondos oculares: normales.

    OBSERVACIN NMERO 9. R . B. F., de cuarenta yocho aos. Casado. Natural y domiciliado en Esparraguera.Oficio, contramaestre. Visto por nosotros en 31 de marzode1941.Enfermedad actual.Hace diez da s, res friado, con mu-cha tos, permanece dos das en cama, al levantarse nota laspiernas pesadas y perezosas, con notable dificultad para bajarescaleras; arrastra ligeramentelapunta de los pies.Antecedentes familiares y personales. Sin inters. Rgi-men alimenticio: Desayuno: naranja o pan conchocolate.Al-muerzo: guijas consardinas o carne, racin de pan. Comida:pur de maz o sopa de arroz, guijas y naranja. Cena: guijascon carne o sardinas y naranja.Exploracin: La exploracin gene-al, normal. Exploracinneurolgica: Discreta paraparesia espstica con predominioenlos grupos extensores. Reflejos rotulianos y aquilianos muyvivos, clonus de ambos pies, reflejos cutneos plantares nodefinidos. El resto, normal.OBSERVACIN NMERO 1 0 . J . E. G., de veintiochoaos de ed?.d. Casado. Natural de Esparraguera, con domici-lio en la misma, calle de Barcelona, nm. 22. Trabaja de

    tintorero. Visto por nosotros en 31 demarzo de 1941.Enfermedad actual.A principios del mes de marzo delpresente ao, not durante las noches dolores en reginlum-bar y constriccionesen laspiernas, sensacin de andar sobreun suelo blando. Pasados doce das, dificultad parala marcha,arrastrandolapunta de lospies, msacentuada al bajar esca-leras; desdeelcomienzo, afectacindeambos esfnteres.Antecedentes familiares y personales.Sin inters. Rgi-men alimenticio: Desayuno: fruta con pan. Comida: purdeguijas con arenque, carne una vez por semana. Cena: idnti-caa la comida.Exploracin: La exploracin general es normal. La explo-racin neurolgica, nos revela un nistagmus en la desviacinizquierda de la mirada. En lasextremidades inferiores,discretaparaparesia espstica, con predominio en los grupos extenso-res. Reflejos patelsres y aquilianos muy vivos. Cutneos plan-tares no definidos. Clonus en ambos pies.Por lo dems,nor-mal. Fondo ojo, normal.OBSERVACIN NMERO I I . J. M. R., de veinte aosde edad. Soltero. Natural de Ase (Tarragona), con domici-lio en Esparraguera, calle del Bruch, num. 15. Visto pornosotros el 31 de marzo de 1941.Oficio, obrero fabril.Enfermedad actual. Hace un ao, calambres nocturnosen laspiernas, durante tres semanas; al mismo tiempo, incon-tinencia de esfnter vesicaly estreimiento pertinaz. Apareceluego un temblor generalizado pero ms acentuadoen lasextremidades superiores, de tipo intencional; como afecta-ba tambin a la musculatura de la fonacin, aparecen dificul-tadesde la palabra. Pasado este perodo, not unaprdidadefuerza en ambas piernas, arrastrandolapunta de lospies,quese fue haciendo progresiva, teniendo que deambular con laayuda de bastones. Desde hacemes y medio, ha notado francamejora, pudiendo andarsinbastones.Antecedentes familiares y personales. Sin inters. Rgi-

    men alimenticio: Desayuno: harina de mazy pan conchoco-late. Comida: un plato deguijascon pan, fruta y vino, a ve-

    ces un poco de carne y fruta. Cena: aproximadamente igualque la comida.Exploracin: Bastante desnutrido (prdida de peso, 28 ki-logramos). Pares craneales normales. Extremidades superio-res, normales. Cutneos abdominales abolidos los inferiores.Cremasterinos abolidos. Extremidades inferiores: paraparesiaespstica, predominante en los grupos extensores. Reflejos ro-tulianos vivos. Aquilianos normales. Cutneos plantares D nodefinidos e I en flexin dorsal. Pruebas de coordinacin yequilibrio, normales. Sensibilidades, normalesen todassus for-mas. Fondos oculares, normales.OBSERVACIN NMERO 12.M . N. R, de treinta aosde edad. Casado. Natural de Almera, domiciliado en Espa-rraguera, de oficio blanqueador. Visto por nosotrosel da 31de marzo de 1941.Enfermedadactual. En noviembre de 1939 tuvo fuerteslumbalgias, micciones imperiosas e involuntarias, lo mismoque las defecaciones; quince das ms tarde not flojedad enambas piernas, arrastrando lapunta de lospies, congrandi-ficultad para bajar escaleras, calambresen ambas piernasdeaparicin nocturna; temblorenlas piernas,queluegose gene-ralizay afecta predominantementea lasmanos, adoptando untipo intencional.La dificultadde la marchase hahechopro-gresiva,en la actualidad slo puede andar con la ayuda de losbastones.Antecedentes familiares y personales.Com o nico d ato

    de inters, un hermanocon la misma afeccin; la esposa vivesana, lo mismoque un hijo de cinco aos. Rgimen alimenti-cio: Desayuno, guijas fritas con pan. Comida: patatas conhabas, rrcin de pan, en ocasiones ciruelas. Cena: guijas y unvaso de leche.Muy a menudo, ensalada a base de tomate,ce-bolla y lechuga. Losdomingos, un poco de carne.Exploracin: Paraplejia espasmdica con predominio enlos grupos extensores. Ligero temblor intencional en ambasmanos; por lo dems, negativa.OBSERVACIN NMERO 13.M . P. R., de cuarenta ysiete aos de edad. Viu do. O ficio, tejedor, domiciliado enEsparraguera. Visto por nosotros el 31 de marzo de 1941.Enfermedad actual. En enero de 1941, al levantarse dela cama, not quelas piernaslastena como perezosas,simul-tneamente micciones imperiosasconincontinencia; con pocasvariacionesha seguido hasta la fecha.Antecedentes familiares y personales.Sin inters. Rgi-

    men alimenticio: Desayuno: guijas cocidas. Comida: guijascon arenque, pltano, racin de pan y un cuarto de litro devino. Cena: sopa de harinas en las que predomina el maz,fruta.Exploracin: discreta paraparesia espasmdica, reflejos ro-tulianos y aquilianos vivos, cutneos plantares no definidos,clonusen ambos pies; el restode la exploracin, negativa.OBSERVACIN NMERO 14 . J. R. B., de veintitrs aosde edad. Soltero. Oficio, blanqueador. Domiciliado en Es-parraguera. Visto por nosotros el 31 de marzo de 1941.Enfermedad actual.En febrero de 1940, tuvo fuertescalambresen ambas piernas,deaparicinnocturna; cuatro dasms tarde, dificultad para la marcha, arrastrandolapunta delos pies; simultneamente aparecieron micciones imperiosas;tembloresenlas manosque a vecessegeneralizaban; la dificul-tad de la marcha se fue haciendo progresiva, no pudiendoandar ms que con la ayuda de dos bastones. Ingres en elmes de mayo en un servicio del Hospital Clnico, dondeper-maneci tres meses, trasladndose ms tarde para practicarunacura hidromineral, a San Hilario, donde apreci una francamejora, regresandodenuevoa su pueblo yempeorando.Antecedentes familiaresy personales:Sin inters. Rgimenalimenticio: Desayuno: guijas y un vaso de leche. Comida:vpur con guijas, patatas con carne, ensalada, fruta. Cena:gui-ja s con arenque, naranja, racin de pan.Exploracin: Paraplejia espasmdica con hiperreflexia, cuteos plantares en flexin dorsal, clonus en ambos pies. Elresto de la exploracin esnegativa, a excepcin de un estra-bismo divergente.OBSERVACIN NMERO 1 5 . M. Ll. M., de sesenta ysiete aos de edad. Viuda. Domiciliada en Esparraguera.Vis-ta por nosotros el 31 de marzo de 1941 .Enfermedadactual.Hace un ao, estando de paseo, notbruscamente gran dificultad para andar, llegando a su casacon grandes apuros. Calambres nocturnos en ambas piernas,

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    '540 REVISTA CLNICA ESPAOLA 1. junio1941micciones imp eriosas involuntarias, lumbalgias detarde en tar-de; conligeras variantes ha evolucionado hasta la fecha.Antecedentes familiares y personales.Sin inters. Rgi-men alimenticio: Desayuno: ensalada de tomate, cebolla y le-chuga, unplato degarbanzos o guijas. Comida y cena, apro-ximadamente lo mismo; racin de pan.Exploracin: Paraparesia espstica conreflejos rotu lian osyaquilianos muyvivos y cutneos plantares nodefinidos,clo-nu s en ambos pies. Por lo dems, negativa.OBSERVACIN NMERO I6.P. S. B., de veintinueveaos de edad. Soltero. Na tural de Montmagastre (Lrida ).Domiciliado en Esplugas deLlobreg at. O ficio, alba il. V istopor nosotrosel i. deabril de 1941.Enfermedad actual.Hace seis semanas, sensacin de frointenso en regin lumbar y artralgias en ambas rodillas;aspas dos das, empezando anotar las piernas perezosas y di-ficultad para deambular, quese haido haciendo progresiva.Alos diez das delcomienzo, micciones imperiosase involunta-riasy calambres enlas pantorillas duranteelda,aveces tem-blor muyintenso en lasextremidades inferiores.Antecedentes familiares y personales.Como nico datodigno demencin, unagonococia maltratada, quehapasadoa la cronicidad. Rgimen alimenticio: Desayuno:col y pata-ta, guijas y unvaso devino. Comida: gran plato de guijascon tocino o carne, almendras, fruta, vino, racin de pan.Cena: colypatatas, unarenqueocarne, pan,unpoco de v ino,fruta. Tres meses antes de caer enferm o, reciben un regalode 150Kgs.de guijas, enviadas desde Igualada, que se lascomen entre l y un hermano suyo, que,segn referencias,inicia unaafeccin semejante.Exploracin: Paraplejia espasmdica, con contractura delos adductores; cutneos abdominales abolidos los inferiores,cremasterinos abolidos, rotulianos y aquilianos muyvivoscutneos plantares en flexin dorsal, clonus en ambos pies.

    OBSERVACIN NMERO 1 7 . J . T . N., de treinta aosde edad. Casado. Natural de Mjico. Domiciliado en Marto-rell. Oficio, jornalero. Visto pornosotrosen el Instituto Neu-rolgico Municipal, el da 1. deabril de 1941.Enfermedad actual.En octubre de 1940, padeci unfuerte enfriamiento portrabajar descalzo sobre b arro. Le apa-recen sbitamente lumbalgias y calambres nocturnos en laspantorritlas,queduran quince d as, pasados loscuales empiezaa notar dificultad para lamarcha, arrastrandolapunta de lospies, y condificultad para bajar' pendientes y Escaleras. E s p o -rdicamente, dificultades en la miccinenforma de retencin.Antecedentes familiares y personales.Sin inters. Rgi-men alimenticio: Desayuno: guijas o habas y unvaso de le-che. Comida: guijas con arenque, ensalada de tomate, cebolla,pltanos. Cena: igual que la comida, msun vaso deleche.Racin depan.Carne losdomingos.Exploracin: Paraparesia espasmdica conpredominioenlos grupos extensores, reflejos rotulianos y aquilianosmuyvivos, cutneos plantares en flexin dorsal, abdominales infe-riores abolidos, cremasterinos presentes, clonus en ambos pies.Po r lo dems, negativa.

    OBSERVACIN NMERO 1 8 . J . S. M., de cuarenta ydos aos deedad. Casado. Na tural de Alicante. Domiciliadoen Vilanova delCam (Ig uala da) . Oficio, ladrillero. Vistoenel Hospital Clnico, el da 29 demarzo de 1941.Enfermedad actual.En elmesdemarzodel ao 1940 yen ocasin de un fuerte enfriam iento, not a dificultades parala marcha, arrastrandolapunta de lospies,con gran dificul-tad para bajar pendientesy escaleras; algunos das mstarde,violentos calambres enlas p antorrillas,de carcter nocturno,ymicciones imperiosase involuntarias. Contina en el trabajohasta hace dosmeses, que se ve obligado aabandonarloporlas dificultades progresivas para l marcha, ingresando enton-cesen unservicio del Hospital Clnico.Antecedentes familiares y personales.Sin inters. Rgi-men alimenticio: Desayuno: guijas cocidas. Comida: garban-zos, o judas, o coles; ensalada delechuga y tomate. Cena:guijas o patatas. Racin depan, tres vecesporsemana; frutaslo melocotonesenlapoca decosecha; medio litro devino;alguna vezconejo.Exploracin: Paraplejia espasmdica con predominio enlos grupos extensores. Cutneos abdominales abolidos los in-feriores, cremasterinos abolidos, rotulianos y aquilianosmuyvivos, discreto clonus en ambos pies, cutneos plantares D enflexin dorsal, I nodefinido. El resto de la exploracin,ne-gativa.

    OBSERVACIN NMERO 19. V. G. V., de diecisiete aosde edad. Domiciliado en Tarr asa. Oficio, hilado r. V istopornosotrosel 30 demarzo de 1941.Enfermedad actual.En elmesdemarzo de1940,sufreuna cada con fuerte contusin en regin parieto-occipitalde-recha y en regin dorsal (sinprdida deconocimiento),queno le incapacit para continuar eltrabajo. Unmes mstarde,la marcha se dificulta porarrastrar lapunta delos piesy poradoptar un tipo vacilante; a veces vrtigos. Al mismo tiempomicciones imperiosasy calambresen ambas piernas. Cuatromeses mstarde guarda cama por haber aumentado lasdifi-cultades de la marcha y hacerse un diagnstico errneodePot t ; la vacilacin en la marcha y los vrtigos, habandes-aparecido. Estuvo seis meses en cama con sobrealimentaciny helioterapa; apreci franja mejora, ingresando luego en elHospital Clnico, dondeha seguido mejorando.Antecedentes familiares y personales.Sin inters. Rgi-men alimenticio: Desayuno: guijas o patatas Com ida: sopade harina demaz, cocidoconcarne, y fruta. Cena: guijasconcoles, arenque o carne, unvaso de leche. Racin de pantresvecesporsemana. Muchas ensaladas.Exploracin : Nistagmus defina oscilacinen la abduccinde la mirada; paraparesia espstica (discreta hipertona) conhiperreflexia, cutneos plantares en flexin dorsal, clonusenambos pies. Nodismetra, no adiadococinesia, no alteracionesde equilibrio: la prueba de la indicacin deBARANY, correc-ta ; nodesviaciones en la marcha con losojos cerrados,notrastornosde la palabra; fondo deojo, normal.Diagnstico: Sndrome laberntico posteonmocionalcom-pensado,asociado allatirismo.NOTA.No se hancopiadolosanlisisdesangre, orina,lquido cefalorraqudeo, etc.,enlas historias clnicas que ante-ceden en. honor a su brevedad; oscilando todas dentro de lascifras normales, exceptoelaumento deprotenas y viscosidadde la sangre.

    BIBLIOGRAFA1 COLUMELA, L. J. M. D e re Rustica trad, espaola Los docelibros de Agricultura J. A l var ez de Sotomayor ; Ed. Mi-guel de Burgos , 1824 Madrid.2 P U N I , C. S. Naturae historiarum libri trad, al cataln,porM. Olivar; Ed. Fundac. B ernt Metge, 1925 Barcelona.3 ASTIER, L. Tes is de L yon ,1883.4 PROUST. Bull . Acd.Med.F r a n c . 1883.5 I R V I N G K I R C K , J. Citado por S A Q U E P E E ; N O U V . Trait deMed.. G-H. ROGER, F. W I D A L ; vol. VI.6 CANTANI. Idem, idem.7 KOBERT. Lehrbuch die Intoxikationen pg. 204 Berl. 1913.8 T R A B A U D , M O U R C H E D , K H A T E R , C H A T Y y M O U H A R R A N . BullAcd. Med. Paris . 107 260-263, 1932.9 LoisSEL. Pres s. Med.41 149-151, 1933.10 Me.CA RRISON. Indian J. M.Res ch . 15 797-800,1928.11 SCOTT, H. I n d ia n J. M.Res ch . 1 51-55, 1930.12 BAUELOS. Tratado de Patologa Mdica. Vol. I.13 BEGUIRISTAIN, J. Rev. Cl in . Esp.1 55 1940.14 MEYER.Zentralblat fr P a th . 5.941,193115 STOCKMANN, TH. Growth and form. 109 114; Cambridge,1917.16 GUILLAUME.Citado porVLES en A ct i on desagents phys iquessu r les organismes , pg.862 ; Par is ,1933.17 GOLDBERGER, L . Les aliments et la vie Paris , Vigot ,1928.18 T E I L L E U X . Citado por KOBERT.19 BouRLiER. Idem , idem .20 REINSCH, SCH. Die Intoxikationen , pg. 458 Ha m b u r go ,1913.21 P. MARIE. Progress Med. 1883.22 JAKSCH, R. v. Di e fr den Arts Wichtigen Vergiftungen undihre Behandlung 3 513.

    Z U S A M M E N F A S S U N GIn dervorliegenden Arbeit wurd en 19 Flle mitParaplgie durch Lathyrismus untersucht. Sie wur-den von denAutoren gelegentlich einer Epidem ieim Bajo Llobregat untersucht und diagnostiziert.Es werden vergleichende Studien desklinischenBildesmitden frheren Beschreibungen aus IndienAlgerien, Russland undSyrien angestellt.Zum Schluss wird einProgram m gegeben,da*vo n denUntersuchern zurAufklrung der konfu-sen Pathogenese des Lathyrismus aufgestellt wurde.Die Ergebnisse werden Gegenstand einer spterenVerffentlichung sein. Jetzt begngt mansichda-mit, aufdieExistenz desLathyrismus in Katalo-

  • 8/13/2019 Rev Clin Esp 2-6 Primera Comunicacion Sobre Una Epidemic de Latirismo 1941

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    TOMO IIN M E R O 6 FARMACOLOGA DE CENTROS RESPIRATORIOS 541nien aufmerksam zumachenund dieKollegenzu rMitarbeit aufzufordern, um so das Studium berAusbreitung Morbiditt usw. dergenannten Epide-mie*inSpanien zuvervollstndigen.

    R S U M Dansce prsent travail on tudie dix-neuf cas deparaplgies par latirisme correspondants une pi-dmie tudie etdiagnostique par lesauteurs dansla regiondu BasLlobregat.On fait une tude comparative du cadre clini-que avec celui desdescriptions antrieures del'Inde,de l'Algrie,de laRussieet de laSyrie.Enfin, on expose le programme des investiga-tions mis enmarchepar lesauteurs pour l'clairci-sementde la confuse etiopatognie dulatirisme;selimitant dans le prsent ouvrage mettre sur sesgardes auprs de l'existence du latirisme en Cata-logne, comme aussi demander la collaborationdeleurs collgues pour complter l'tude de la diffu-

    sion, de la morbidit, etc., de la dite pidmie enEspagne.

    ESTUDIO SOBRE ALGUNOS PUNTOSDELA FARMACOLOGA DECENTROSRESPIRATORIOSB. LORENZO VELAZQUEZ

    Catedrtico deFarmacologa; Facultad deMedicinade ZaragozaI. FARMACOLOGA DE LAS ACCIONESDEPRIMENTES

    Desde los hallazgos de LEGALLOIS, quien po rprimeravez alcomienzo delsiglo XIXdescribi laexistencia decentro: respiratorios ', hasta lostraba-jos ms recientesde laescuela deBARCROFT (1934-1939), hapasado ms de unsiglo y todava no sesabe, nianatmica, nifisiolgicamente,el captulocompleto nipreciso de estos centros vitales.LEGALLOIS en su memoria a la Academia deCiencias, deca: existe unazona muy circunscritaen la medula oblongada, la cual est situada a pe-quea distancia delagujero occipital yhacia el ori-gende los nervios neumogstricos, queparece regirlos movimientos respiratorios .Despus, con tcnicas imprecisas, se van suce-diendo los trabajos deFLOURENS (1843 a i860)que pretende localizar en un nudo vital todo elsiologismo de la direccin nerviosa. Luego, GADy ARNHEIM(1892 a 1894), defienden desde mediosde trabajo independientes y sin relacin entre s,que larespiracinno sesurpendecon la destruccinde zonas muy limitadas del bulbo, sino que hayque extender estas destrucciones a zonas ms am-plias superiores (no bien precisadas siempre por losautores).Si enlugardeacudira lasdestruccionesdeciertas zonas seemplean las excitaciones de tal ocual parte del sistema nervioso, como hacen LAN -GENDORF, KRONECKER,etc., afinesdelsiglo pasa-

    doycomienzosdeste,sellegaaadmitir laexisten-cia de centros diferentes para lainspiracin y parala espiracin. Junto conestas localizaciones bulba-res de los centros respiratorios, todos estos fisilo-gos eran partidarios de admitir, aunsolamente, attulo hipottico, otros centros superiores que pu-dieran influir sobre la zona bulbar y regular desdemayor altura tan importante funcin.Trabajos ms recientes (ZELIONY, DUSSERDEBARENNE) no admiten centros corticales necesa-rios a esta funcin, ya que laextirpacin enperrosde loshemisferios cerebrales no altera visiblementela respiracin. Despus de lostrabajos ya ms re-cientes deLUMSDEN (1923), TEREGULOW (1928),HENDERSON (1930), etc.,parece poderse aceptar,que lo fundamental para la regulacin vital de larespiracin son loscentros bulbares, siendo secunda-rios todos los quepuedan encontrarse enzonassu-periores.Las aportaciones todava msrecientes deB A R -CROFTy sus discpulos (1934-39), hacenque en elestado actual de nuestros conocimientos pueda re-sumirse as esta cuestin :En losmamferos superiores, y, portanto en elhombre,hay en la base de la cisterna cerebelo-me-dular, parte altade lacara posterior del bulbo raqu-deo, unos grupos celulares quepueden considerarsecomo centros respiratorios.Uno, elms importante,que regula la inspiracin; sta se desarrollara enforma de loquese hallamado gasping ,o sea mo-vimientos profundos inspiratorios, llevando la par-ticipacin de losmsculos inspiratoriosalmximumy provocando una perturbadora hiperventilacin,si no fuese porque este centro nspiratorio principalrecibe impulsos sensitivos originados a lolargodelaparato respiratorio quefrenan el gasping hastadejarlo en su funcin normal. Otro centro, el querige la fase espiratoria de la respiracin, seramssecundario,ya questa es,engran parte, pasiva.No eseste momento deentraren elamplio temadel funcionamiento fisiolgico deestos centrosres-piratorios; hemos dereferirnos principalmente a susmodalidades deestmulo farmacolgico. Loscentrosrespiratorios, trabajan tanto por acciones directassobre los mismos, como poraccin refleja porest-mulos que a ellos lleguen de otros rganos o cen-tros. Entre stos parecen ser elreno carotdeo y zo-nas cardioarticas sensiblesde loshasta ahora acep-tados como principales, segn seviene sospechandoya desde FRANCOIS FRANK (1892), queexcitandoel nervio depresor produca alteraciones respirato-rias y, confirmado y ampliado posteriormente portrabajos deHEYMANS, HERING, BUCKAERT, etc.

    Farmacolgicamente hemos sido losprimerosenutilizar la vasuboccipital enanimales delaborato-rio (perro de preferencia) paraelestudiode laaccinsistemticade losfrmacos queactan directamentesobre estos cuerpos.En el primer trabajo publicadopor la D R A . P-REZ CARNICERO*, qued demostrada la gran sensi-bilidadde losmedicamentos anestsicos localesde loscentros respiratorio?. Inyecciones poresta va sub-occipital decantidades muypequeas dealgunosdeestos anestsicos (percana), bastan para producir