Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

6

Click here to load reader

description

Caracterización del paciente pre y pos qx con enfermedad de parkinson: una perspectiva fisioterapeutica

Transcript of Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

Page 1: Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

CARACTERIZACIÓN DEL PACIENTE PRE Y POSQUIRÚRGICO CON

ENFERMEDAD DE PARKINSON:

UNA PERSPECTIVA FISIOTERAPÉUTICA

Carlos A. Quiroz

INTRODUCCIÓN

La enfermedad de Parkinson es un padecimiento crónico,

progresivo y degenerativo. No solo es una alteración del

movimiento, también afecta el funcionamiento de otros

sistemas corporales. A pesar de los recientes avances para el

estudio de las enfermedades del cerebro, en la enfermedad

de Parkinson idiopatica definida (EPID) el diagnóstico se

sustenta sobre criterios predominantemente clínicos.

Tras la dificultad que implica evaluar a un padecimiento

que presenta tanta variabilidad durante el curso del día en la

presentación de sus síntomas, cada vez se realizan más

estudios que apoyan la necesidad de evaluar al paciente de

una forma especifica e individualizada, como una ayuda

muy importante para el tratamiento y el abordaje

posquirúrgico.

Por este motivo se requiere una fuente lo más precisa

posible para determinar la naturaleza de los síntomas y

signos, con dos propósitos: 1. El diagnóstico específico del

síndrome parkinsoniano desde el punto de vista motor y

funcional, y 2. Sólo un diagnóstico de precisión y confiable

puede permitir el uso de la información con fines

investigativos y dar grandes aportes en rehabilitación y

brindar al individuo una segunda opción en su tratamiento

pre y posquirúrgico.

Los criterios clínicos convencionales para el diagnóstico de

la EPID requieren la Presencia de por lo menos dos de los

siguientes signos cardinales: acinesia, rigidez y temblor de

reposo en dirección prono/supinación.

La acinesia es considerada como una característica esencial

para el diagnóstico, con el objeto de eliminar casos de

temblor esencial. Como el diagnóstico preciso y temprano

tiene ahora implicaciones terapéuticas, se necesita una

aproximación que permita precisar mejor los criterios

clínicos de inclusión y exclusión en el diagnóstico

diferencial de la EPID y de los síndromes parkinsonianos.

La Enfermedad de Parkinson afecta cada vez más la

población de adultos mayores, aunque actualmente ha

habido avances en cuanto a su abordaje (incremento de

pacientes intervenidos quirúrgicamente), esto no resuelve su

condición, puede mejorar algunos síntomas, pero otros

permanecen, perturbando la funcionalidad de estos

pacientes.

Este estudio pretende dar a conocer las características del

paciente evaluado antes y después de la cirugía con el fin de

que su rehabilitación sea mas objetiva y satisfactoria, una

vez hayan sido intervenidos quirúrgicamente, para mejorar

otras características que la cirugía no pudo corregir y

potencializar sus capacidades indemnes.

PACIENTES Y METODOS

La población o universo del estudio son los pacientes con

enfermedad de Parkinson que asistieron a consulta

neurológica en el Centro Medico Imbanaco, y que fueron

candidatos a la neurocirugía funcional estereotaxica,

durante el periodo de Junio del 2003 a Diciembre del 2003,

para obtener esta población se hizo contacto directo con el

Neurocirujano tratante. Se selecciono la muestra, utilizando

un método no probabilístico, intencional y por criterio, de

modo que la muestra cumpla las características especiales

que vamos a establecieron en el proyecto. La muestra

corresponde a una población de adultos mayores con

enfermedad de Parkinson, que han sido intervenidos

quirúrgicamente, a los cuales se les realizo una evaluación

fisioterapéutica completa, la cual arrojo datos importantes

para caracterizarlos, dando a conocer el estado actual del

paciente y las alteraciones que presenta luego de la cirugía y

así se determina los aspectos que se deben tener en cuenta

para un futuro tratamiento. La muestra es de 10 pacientes,

los cuales cumplen con los criterios de inclusión.

El tipo de estudio fue de carácter descriptivo. Se recogió,

analizo e interpreto la información a través de un formato

(Formato de evaluación para caracterización del paciente

pre y posquirúrgico con enfermedad de Parkinson) aplicado

a los pacientes con enfermedad de parkinson antes y

después de la cirugía que fueron intervenidos

quirúrgicamente en el Centro Medico Imbanaco durante el

periodo comprendido entre Junio del 2003 a Diciembre del

2003.

Propuesta del Formato de Evaluación

Características Atributivas

AVD Y ABC

o Vestido ◘ Higiene ◘ Caminar ◘ Voltearse

en cama

Características Motoras

7 Subescalas

o Postura ◘ Marcha ◘ Temblor

o Evaluación Funcional MMSS y MMII

o Distonia Disquinecias

Rigidez

Estadio Hoehn y Yahr

Estos pacientes (10) equivalen a la totalidad de la población

con enfermedad de Parkinson a los cuales se les realizo

neurocirugía funcional estereotaxica en el Centro Medico

Imbanaco en el periodo de Junio del 2003 a Diciembre del

2003, por tanto el tamaño de la muestra fue calculado con

un nivel de significancia estadística del 100%.

Page 2: Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

Los criterios de inclusión para la neurocirugía funcional de

los pacientes candidatos en el Centro Medico Imbanaco, son

determinados por el neurocirujano tratante del mismo

centro.

Refractario a tratamiento medico: (que reciba mejor

esquema terapéutico) a pesar de recibir esquema, este

limitado funcionalmente en AVD y trabajo.

Descartar demencia: Demencia multinfarto (características

similares), que presente depresión, hipotiroidismo.

Expectativas de cirugía reales: mejoría parcial (70%),

requiriendo medicación posquirúrgica.

Enfermedades sistémicas controladas (HTA, DM)

Si cumple con los criterios anteriores (Junta

interdisciplinaria)

RESULTADOS Y ANALISIS

Caracterización del paciente con enfermedad de

parkinson antes y después de ser intervenido

quirúrgicamente.

PACIENTE (EP): 54 Años, Incidencia masculina

AVD Y ABC

Pre - Qx: Gran dificultad y lento (ayuda)

Pos - Qx: leve dificultad, lento

POSTURA

Pre – Qx: Principio de postura simiesca y

estabilidad postural afectada

Pos – Qx: Ligeramente encorvado

estabilidad aun alterada

MARCHA

Pre – Qx: Marcha festinante, lenta, braceo

unilateral, giros lentos, equilibrio

dinámico alterado ocasional.

Pos – Qx: Mejoría pero algo lenta, aun persiste

alteración del equilibrio dinámico

TEMBLOR

Pre- Qx: amplitud, hipomimia, y el habla

levemente comprometida,

(micrografía), aspecto laboral

comprometido.

Pos-Qx: mejoría satisfactoria del temblor y

comunicación oral, persiste un leve

compromiso en otras características

EVALUACIÓN FUNCIONAL MUSCULAR

Pre - Qx: (R) y (R+)

Pos – Qx: (R+) y (B)

DISTONIA

Pre – Qx: Compromete mas los MMSS y

MMII Hemidistonia

Pos – Qx: Mejoría satisfactoria, Focalizada.

DISQUINECIAS

Pre – Qx: Incapacidad estadio varia leve a

incapacitante, de tipo distonia,

duracion 1 – 50 % del día

Pos – Qx: leve incapacidad, duracion 1 – 25 %

del día

RIGIDEZ

Pre – Qx: Discreta a moderada, extremidades,

axial.

Pos – Qx: mejoría representativa (discreta,

detectable).

ESTADIO DE LA ENFERMEDAD

Pre – Qx: Estadio 4.0: incapacitado

gravemente pero aun es capaz de

caminar.

Pos – Qx: Estadio 1.0: Enfermedad de tipo

unilateral (adquiere estas

características)

Después de evaluar las características atributivas de los

pacientes antes y después de ser sometidos a una

Neurocirugía Funcional Estereotaxica en el Centro Medico

Imbanaco durante el periodo junio del 2003 a diciembre del

2003, se puede afirmar que el 100% de la población

pertenecían al sexo masculino, un 20% estaban

representados por sujetos de 48 años, un 20% por sujetos 58

años, la representatividad de los extremos es decir, edad

mayor y edad mínima fue del 20% con edades entre 45 y 71

años. Logramos evidenciar cuatro grupos de escolaridad:

analfabetos, primaria, secundaria y universitaria. El 70% de

la población correspondió a sujetos con educación

secundaria y de pregrado. La representatividad inferior de

estudio, es decir, analfabetos y primaria fue del 30%,

respectivamente. La mayoría de la población estuvo

representada por comerciantes (60%), gráficos (10%),

médicos (10%), electricistas (10%), técnico en

mantenimiento (10%). Los profesionales representaron el

40% de la población, respectivamente. Este agrupamiento

puede estar mostrando un sesgo de selección dado por el

tipo de pacientes que consultan a la institución de donde se

obtuvo la población (tablas 2, 4). En la edad de inicio de la

enfermedad, el 50% estaba representado por sujetos entre

40 y 50 años, un 30% por sujetos entre los 30 y 40 años, y

un 20% por sujetos mayores de 60 años.

El inicio de la enfermedad por criterio de selección fue

unilateral en todos los sujetos, el 60% derecho y el 40%

izquierdo. Ningún sujeto presento manifestaciones en

ambos lados del cuerpo como para considerarse bilaterales

al momento de la evaluación fisioterapéutica. El 50% de la

población continuaba teniendo un compromiso unilateral,

con predominio derecho en el 30% e izquierdo en el 20%, el

50% restante presentaban compromiso bilateral. El

significado fisiopatológico o clínico de esta tendencia a un

predominio derecho excede los objetivos de este estudio.

Todos estos datos coinciden en gran parte con lo informado

en la literatura acerca de las características atributivas de los

pacientes con EPID, con una incidencia pico entre los 69 y

79 años.

Se puede decir que la edad promedio para el padecimiento

de la enfermedad de parkinson y la intervención quirúrgica

de acuerdo a su sintomatología, es de 54 años. Pues este es

el rango de edad en que el paciente asiste a consulta por la

severidad de los síntomas y la inhabilidad motora hace que

el paciente adopte otro recurso para buscar una recuperación

de su capacidad funcional.

Page 3: Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

Con respecto a la evaluación de las características motoras

de los pacientes, antes de la cirugía, se encontró mas del

90% de la población afectada y limitada funcionalmente,

presentando dificultades serias en el autocuidado, e

independencia funcional viéndose por consiguiente,

comprometidas actividades tales como: el vestir, la higiene,

los traslados, dentro de su espacio o el lugar en el cual

habita, el caminar y cambio de posición, lo cual según la

literatura refiere que tanto las condiciones físicas como

motoras del individuo se ven afectadas tras la perdida de los

neurotransmisores encargados de modular la actividad

neuronal de los ganglios basales e impidiendo la ejecución

de forma automática de los movimientos .que es

característico de esta entidad patológica. Entre el 40 y 70%

de estos pacientes después de ser intervenidos

quirúrgicamente presentan una recuperación en sus

actividades de la vida diaria y básicas cotidianas mostrando

que el porcentaje de la población restante equivale a la que

persistió con manifestaciones funcionales patológicas y este

aspecto corrobora lo mencionado en la literatura y los

aportes dados por el neurocirujano del Centro Medico

Imbanaco al afirmar que los pacientes presentaban después

de la cirugía una recuperación del 70% de sus actividades

funcionales. Queremos destacar que no existe información

literaria de las características motoras después de una

Neurocirugía funcional Estereotaxica, virtuoso de nuestro

estudio.

Según lo expuesto acerca de las características posturales y

marcha del Paciente con EPID y reafirmando lo

mencionado en la literatura, antes de la cirugía los pacientes

mostraron un compromiso mayor del 90% que involucraba

todos los componentes estáticos y dinámicos de la postura,

llegando el paciente a comprometerse de tal manera que

podría adoptar posturas tan severas como principio de

“postura simiesca” por consiguiente afectando la marcha.

La estabilidad postural de los pacientes antes de la cirugía

genero la deficiencia de las reacciones de enderezamiento y

equilibrio, evidenciando la incapacidad del paciente para

ejecutar un buen patrón de marcha, involucrando acciones

que son propias y automáticas de esta, como levantarse de

la silla, enderezamiento y ejecución del paso, luego el

desplazamiento realizando giros y braceo teniendo en

cuenta el equilibrio dinámico, que posterior a la cirugía

entre el 50 y 80% de la población seguían muy

comprometidas, a excepción del braceo que mostró una

buena recuperación y solo lo presento un 10%,

cuestionando la eficacia de la cirugía según la literatura .

Al realizar el análisis del temblor se pudo evidenciar que

existen diferencias significativas de las manifestaciones

antes y después de la cirugía. La evaluación del temblor en

los pacientes, enfatizadas en actividades como: expresión

facial, comer, escribir y trabajo, involucraron un alto índice

de la población, superando el 90%, con un 10% de

normalidad de esta, coincidiendo con la información

literaria que expone el temblor como uno de los

padecimientos característicos de la EPID, Por tanto, cada

una de estas variables puede predecir, de manera

independiente y significativa, el estado de gravedad clínica,

pero en un nivel alto.

Los datos posteriores a la cirugía determinan que la

recuperación no fue del todo exitosa, pues se encuentra que

solo entre el 20 y 40% de la población alcanzo el objetivo

principal de la cirugía, la corrección del temblor y

disminución de las disquinecias. Esto lo pudimos evidenciar

pues 4 de los pacientes persistían con un temblor leve y de

amplitud corta en dirección de pronosupinacion lo que

igualmente le dificultaba acciones como escribir, comer, y

trabajar. Según la literatura, refiere de manera anecdótica lo

que se corrobora con la evaluación fisioterapéutica (56).

Un aspecto que consideramos de mucha importancia y que

pocas veces es realizada de una manera apropiada es la

evaluación de la función muscular, pues no existe un

criterio unificado entre el grupo interdisciplinario y no se

tiene en cuenta parámetros específicos como la resistencia,

dirección y amplitud del movimiento, compensaciones,

contracción. Es por esto que se consideró la necesidad de

evaluar al paciente de un modo mas especifico en cuanto a

la capacidad funcional se refiere, hallándose que las

acciones musculares tanto de MMSS como de MMII con

menor índice de recuperación son: en miembros superiores

acciones tales como la abducción, adduccion, rotación

interna y externa de hombro; flexión, extensión, de codo y

muñeca, en miembros inferiores acciones tales como la

abducción de cadera y extensión de rodilla, que presentaron

parámetros de calificación (R, Movimiento completo contra

gravedad sin resistencia) y (R+), Movimiento completo

contra gravedad y resistencia leve) que no son distintivos

para nosotros pues se tuvo en cuenta que los índices de

normalidad en función muscular obtienen una calificación

de (B, Movimiento completo contra gravedad y resistencia

moderada) y (N, Movimiento completo contra gravedad y

resistencia máxima ) y los porcentajes que no superan la

mitad de la población y que persistieran con la misma

calificación.

El análisis hecho muestra que el mayor compromiso

funcional posterior a la cirugía fue en miembros superiores,

rescatando que hubo mejoría significativa en acciones como

flexión y extensión de hombro y dedos. Actualmente no

existe una información literaria de la evaluación funcional

de los pacientes con enfermedad de parkinson que permita

hacer un análisis comparativo.

Alteraciones como: distonias, disquinecias y rigidez

muestran una buena respuesta ante la cirugía, que evidencia

la evaluación. El registro de datos indica que en las

distonias después de la intervención quirúrgica, un 20% de

la población conservo alguna de estas en boca y pierna

derecha. A su vez la distribución que estaba representada en

un 80% en diferentes zonas del cuerpo, con la cirugía

disminuyo en un 30%, encontrándose un 70% focalizada.

Entre tanto las disquinecias mostraron entre un 70 y 100%

de la población total con compromiso antes de la

intervención quirúrgica, posteriormente a esta los 10

pacientes mostraron buena respuesta a las disquinecias

dolorosas, 5 de los 10 pacientes persistieron con

disquinecias incapacitantes, y 7 pacientes con una duración

Page 4: Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

de las disquinecias del 1 al 25% del día. Los posibles tipos

de disquinecias que continuaron aunque en una menor

frecuencia fueron la acatisia, la distonia, y las

fasciculaciones, mientras que las de tipo atetoide, coreica, y

mioclonica fueron corregidas con la intervención

quirúrgica. Las disquinecias y el compromiso motor que

persiste en el paciente corrobora lo mencionado por el

neurocirujano al referir que en algunas ocasiones se necesita

continuar con el tratamiento farmacológico con el cual

puede haber una mejoría a nivel neurológico, pero

aclaramos que el tratamiento farmacológico no ayuda al

paciente a restaurar la movilidad articular, la flexibilidad y

potencia muscular necesarias para una función motora

óptima. La rigidez como otro signo cardinal de la patología,

mostró una mejoría entre el 60 y 70% de la población en

todos los componentes evaluados, con un restante entre un

30 y 40% de la población, que indica la posibilidad de

continuar con un tratamiento fisioterapéutico y evitar

complicaciones posteriores.

Antes de la intervención quirúrgica, El 60% de la población

se encontraban entre los estadios 4 y 5 de Hoehn y Yahr, el

40% de la población restante se encontró entre los estadios

1.5 y 3.0, en el estado pos quirúrgico se obtuvo un 60%

entre los estadios 0.0 y 1.0, el 40% restante se ubico entre

los estadios 1.5 y 3.0. Todos estos datos coinciden con lo

informado en la literatura.

Uno de los problemas básicos en el diagnóstico definitivo y

en la clasificación de la Enfermedad de parkinson es que se

fundamentan en los hallazgos clinico-teoricos. En los

estudios clínicos y epidemiológicos, los pacientes son

clasificados de manera equívoca con relación al diagnóstico

definitivo neuropatológico.

La dificultad mayor se presenta al tratar de diferenciar

clínicamente entre la EPID, y otros síntomas parkinsonianos

donde hay un predominio clínico de la rigidez y la acinesia,

especialmente con extensión cervical y ausencia de temblor,

pero este hallazgo no siempre está presente.

Estas dificultades son las que hacen indispensable para el

fisioterapeuta emplear criterios clínicos de precisión, que

permitan establecer diagnósticos desde un punto de vista

funcional y tratamientos específicos con diversas metas que

brinden confiabilidad.

Para finalizar este capitulo de análisis y discusión se cree

importante realizar una autoevaluación crítica de la

metodología realizada en el estudio:

La fortaleza de este estudio, reside en la importancia de los

resultados obtenidos debido a que la documentación

bibliografica acerca de las características descriptivas del

paciente con enfermedad de parkinson en un estado

posquirúrgico muestra un déficit, lo cual no permite llevar a

cabo un tratamiento objetivo y especifico a los pacientes en

una visión prospectiva, dando un aporte importante a la

población de profesionales de la salud al igual que se le

brinda una nueva oportunidad en los procesos de

rehabilitación a los pacientes con Enfermedad de

Parkinson.

Conocer la realidad de nuestros pacientes, el manejo que

reciben por parte de todos los miembro del equipo

interdisciplinario de salud, es el primer paso para mejorar

los resultados que se obtiene con la cirugía

CONCLUSIONES

Los pacientes con enfermedad de parkinson que fueron

intervenidos quirúrgicamente en el Centro Medico

Imbanaco durante el periodo junio del 2003 a diciembre del

2003, por el neurocirujano tratante, pertenecían al sexo

masculino, la edad promedio para el padecimiento de la

enfermedad de parkinson y la intervención quirúrgica de

acuerdo a su sintomatología, es de 54 años, la población de

este estudio fue representada por las nacionalidades

colombiana y ecuatoriana, el nivel educativo se encontró

entre secundaria y pregrado, con ocupaciones como:

médicos, electricistas, gráficos y técnicos de

mantenimiento, la edad de inicio de la enfermedad, es entre

41 a 50 años, el inicio de la enfermedad por criterio de

selección fue unilateral en todos los sujetos, al momento de

la evaluación la población continuaba teniendo un

compromiso unilateral derecho y bilateral.

El paciente con EPID presenta lentitud al vestirse,

abotonarse e introducir los brazos por las mangas le cuesta

trabajo, después de la cirugía ejecuta mejor la acción

aunque es algo lenta y puede requerir ayuda en ocasiones.

En su higiene es lento y puede necesitar ayuda para

ducharse o bañarse, aunque mejora sus acciones, necesitan

ser supervisadas en el baño. Las actividades como dar

vueltas en la cama y ajustarse la ropa resultan lentas y

torpes presentado gran dificultad y en ocasiones solo

pueden iniciar la acción, después de ser intervenidos aun

están comprometidos aunque en menor proporción, con

leve dificultad. El caminar le representa una dificultad que

puede colocarle ansioso, puede no balancear los brazos y

tienden a arrastrar las piernas y aun después de la cirugía

continua presentando una dificultad leve a moderada debido

al tiempo de evolución de la patología antes de la cirugía y

esto es un buen punto debido a que a pesar de que la cirugía

representa un cambio en la vida del paciente, este viene

comprometido haciendo que los cambios se vean de manera

parcial, por esto, el enfoque del estudio sobre las

características funcionales que persisten limitadas en el

individuo, aunque en menor proporción. La neurocirugía

funcional es una alternativa excelente para mejorar la

sintomatología del paciente con esta entidad patológica, y

una base fundamental para la rehabilitación motora.

La postura característica del paciente con enfermedad de

parkinson hace posible la formación de deformidades

teniendo en cuenta que el paciente presenta alteraciones de

tipo estructurales, pues retomando, el tiempo de evolución

entre los primeros síntomas y el momento de la cirugía es

en promedio de 7 años. La formación de curvatura en la

columna es ligera pero es posible un principio de

espondilitis deformante y su cabeza se inclina hacia delante

hasta 12.5 cm. la recuperación postural tras la cirugía es casi

nula, pues las deformidades persisten y es posible encontrar

Page 5: Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

un principio de flexión en los brazos que no supera aun el

nivel de la cadera y la cabeza aun esta inclinada hacia

delante. La estabilidad postural se ve afectada fácilmente

por un estimulo externo, pues este trastorno hipocinético

provoca la disminución de los reflejos posturales y no

corrige en forma eficiente su centro de gravedad, en algunas

ocasiones tras el estimulo lo recupera sin ayuda o caería si

no fuera sujetado por el evaluador, pero aun después de la

cirugía la estabilidad postural continúa afectada y el

estimulo externo aun afecta la estabilidad del paciente

Asimismo, la marcha carece de reacciones posturales, el

braceo unilateral o bilateral se ve ausente y los brazos

adoptan una flexo adduccion lo cual muestra poca

recuperación tras la cirugía. Los movimientos adecuados de

pelvis y tronco igualmente ausentes, con disminución del

choque del talón y dificultad para liberar la punta del pie en

la fase de balanceo intermedio por tener una flexión de

caderas y rodillas inadecuada, complementada con una

disminución en la longitud de los pasos y la velocidad de la

marcha El inicio de la marcha es lento, tarda algo mas de lo

normal, y sigue lento después de la intervención quirúrgica

pero mejora notablemente. La festinación esta presente casi

todos los días y es causante de caídas pero mejora

notablemente. Ante el cambio de dirección, los giros son

lentos, cautelosos, y difíciles utilizando más de dos fases

para completarlos y la mejoría después de la cirugía es

mínima. El equilibrio dinámico durante la marcha continua

alterado y lo puede corregir con un mínimo apoyo. Para

levantarse de la silla necesita varios intentos y en ocasiones

aun después de la cirugía, necesita algo de apoyo.

La variabilidad del temblor en el paciente parkinsoniano,

depende del estadio y en si a la respuesta farmacológica, no

todos los pacientes toleran en igual medida los

medicamentos. El temblor característico del paciente con

EPID, tiene una amplitud de leve a moderada y puede ser

intermitente, en ocasiones fluctúa entre un 0.5 a 1 cm., de

amplitud con dirección de pronosupinacion, una

característica que diferencia el temblor en reposo del

temblor esencial. Después que el paciente es sometido a una

talamotomia o una palidotomia, el temblor mejora

notoriamente, aunque puede continuar con un temblor de

leve amplitud a moderada. Otra manifestación del paciente

parkinsoniano es la falta de expresión facial donde se ve

comprometida mostrando una hipomimia que puede ser leve

o moderada, ocasionalmente presentan parestesias que no

son muy significativas clínicamente y esporádicamente

muestra los labios separados, luego de la operación aun se

ve comprometida mostrando una leve mejoría. Actividades

esenciales como e comunicarse con otros individuos,

alimentarse y valerse por si mismo, escribir cartas o dar la

firma y laborar sin errores son los deseos del paciente

parkinsoniano, pero se ven afectadas cada día por una

descarga patológica qué inhabilita al individuo para ser

normal, a pesar que la cirugía es una alternativa

directamente favorable para los signos patológicos, muchas

características funcionales aun después de esta, se ven

perturbadas por este mal.

La función muscular de las distintas extremidades se ve

afectada no por factores periféricos pero si por factores

centrales. Una parte anatómica a nivel central como el locus

ceruleus es la encargada de la formación de células

temblorosas que se excitan por la contracción voluntaria o

refleja de los músculos tanto en miembros superiores

(Hombro, codo, muñeca, dedos) como de miembros

inferiores (Cadera, Rodilla, tobillo, subtalar) produciendo

una descarga entre los músculos agonistas y antagonistas.

La función muscular del paciente parkinsoniano se

caracteriza por ser un movimiento completo contra

gravedad sin resistencia (R), en ocasiones con una

resistencia leve (R+), pero después de la cirugía al haber

disminución del temblor, disminuye la contracción de los

músculos antagonistas y agonistas. El paciente manifiesta

mejoría y realiza el movimiento en contra de la gravedad

con un poco mas de resistencia, es notorio aun la

disminución de la fuerza funcional. El temblor continua

siendo unilateral, aunque poco incapacitante.

Generalmente el paciente con Parkinson no presenta

distonias en cuello o boca. En las extremidades se aprecia

una ligera distonia no significativa clínicamente. En

ocasiones se observa una diferencia del predomino del

brazo afectado. El tronco muy pocas veces se ve afectado

por las distonias. La pierna izquierda no presenta distonias o

se aprecia una ligera distonia no significativa clínicamente.

Mientras que la otra extremidad inferior se ve en mayor

proporción afectada con las mismas características. La

distribución de la distonia en el paciente con EPID puede

ser: Focal, Segmentaría braquial o crural, multifocal o de

tipo hemidistonia con mayor tendencia a esta ultima. Al ser

intervenido quirúrgicamente el paciente reduce en un

porcentaje significativo la distribución de las distonias

mejorando la capacidad de participación del individuo y su

independencia funcional.

La duración y la incapacidad de las disquinecias varia

dependiendo del estadio de la patología. La incapacidad

puede ser leve, moderada, grave, y totalmente incapacitante.

La mejoría después de la cirugía es leve o en algunas

ocasiones en igual proporción, generalmente las

disquinecias presentes no van acompañadas de dolor y los

pacientes presentan diferentes tipos de disquinecias con

tendencia a presentar más frecuentemente las distonias. La

incapacidad producida por las disquinecias es parcialmente

corregida aunque persista una leve incapacidad.

La rigidez, un signo cardinal de la enfermedad de

parkinsonismo al ser valorada con el movimiento activo de

las grandes articulaciones es de tipo discreta a moderada en

una o más extremidades mientras la rigidez axial valorada

según el movimiento pasivo es de tipo discreto a intenso

pero se consigue con facilidad el movimiento en toda su

amplitud. La rigidez en MMSS y MMII se clasifica como

una rigidez discreta a moderada que en ocasiones se activa

por movimientos en espejo o de otro tipo. Después de la

cirugía la rigidez valorada con el movimiento activo de las

grandes articulaciones presenta una mejoría demostrativa,

aunque es posible encontrar la de tipo discreta a moderada

Page 6: Evaluacion de cirugia de parkinson en fisioterapia

en una o más extremidades mientras la axial valorada según

el movimiento pasivo presenta una cuantiosa mejoría, pero

aun se encuentra características tipo discreto a intenso, pero

se consigue con facilidad el movimiento en toda su

amplitud. La rigidez en MMSS y MMII mejora

representativamente, aunque se puede encontrar una rigidez

discreta o detectable.

El estadio representativo del paciente según Hoehn y Yahr

en estado prequirúrgico es el 4.0 donde esta incapacitado

gravemente pero aun es capaz de caminar o mantenerse en

pie sin ayuda. Después de la cirugía el paciente en estado

posquirúrgico adquiere características del estadio 1.0 donde

la enfermedad es de tipo unilateral.

El objetivo de la cirugía es claro, buscar la disminución de

los signos y síntomas de la EP. Esto a su vez se convierte en

un elemento importante para el fisioterapeuta, facilitando el

proceso de rehabilitación.

El objetivo de la rehabilitación es básico, no detendrá la

enfermedad pero tratará de mantener al paciente lo más

funcional posible. Buscará lograr en el paciente un cambio

en su actitud, una independencia en sus actividades diarias y

una motivación; por lo tanto manejará los aspectos tanto

físicos, psicológicos como sociales

El diagnostico del paciente con enfermedad de parkinson

cada día se hace mas relevante debido a la homogeneidad

con los síndromes parkinsonianos, es por esta causa que

diagnosticamos a esta población desde el punto de vista

funcional y participativo, y encontramos al paciente antes

de la enfermedad en un estado que restringe muchas de las

capacidades participativas de este, con deficiencias del

funcionamiento. Posterior a la cirugía el grado de

compromiso disminuye pero persisten dificultades motoras

restricciones de la participación debido al severo

compromiso motor que traía antes de la cirugía, sin olvidar

que esta alternativa es un cambio en la vida del paciente. La

CIF agrupa en forma de dominios los componentes de salud

(Ej. Funciones sensoriales, estructuras corporales) y algunos

componentes “relacionados con la salud” de “bienestar”,

(Ej. transporte, educación, trabajo, etc.) no incluidos dentro

del concepto de salud, pero que mantienen una estrecha

relación con él.

Este estudio convierte a nuestro instrumento de evaluación

en una escala bien estructurada, por ello consideramos que

de momento sólo hemos dado un paso adicional hacia la

construcción de un instrumento con una solidez flexible la

cual puede ser reestructurada por grupos de investigación

con objetivos semejantes al nuestro. Este formato esta

basado en datos obtenidos mediante una sistematizada

metodología, que obviamente requiere ser probado y

contrastado con un mayor número de sujetos. También

necesita ser aprobado y comparado con otras escalas

utilizadas y aceptadas ampliamente.

BIBLIOGRAFIA

1. ACERO, Ángela Patricia. Rehabilitación General del

Anciano. Santiago de Cali. Centro Editorial

CATORSE. 1997

2. CARPENTER, Malcolm. Fundamentos de

Neuroanatomía. Buenos Aires, Editorial Panamericana.

1994

3. DOWNIE, Patricia. Neurología para fisioterapeutas.

4ta. Edición. Buenos Aires. Editorial Panamericana.

1999

4. HARRLSON. Principios de Medicina Interna. 14va.

Edición. México D.F. Editorial Mc Graw Hill. 1998

5. MATTHEWS, Garig. Fisiología del Nervio y el

Músculo. 2da. Edición, Madrid, Editorial

Interamericana. 1989

6. NETTER, Frank. Atlas de Anatomía Humana. 2da.

Edición, New Yérsey, Editorial Novartis. 2000

7. OROZCO, Jorge Luis. Carta de la Salud.

PARKINSON, Numero 69. Cali. 2002

8. URIBE, Carlos Santiago. Fundamentos de Medicina.

Neurología. Medellín. Editorial CIB. 1996

9. SHESTACK, Robert. Manual del Fisioterapeuta. 7ª.

Edición México D.F. Editorial EL Manual Moderno.

1999

10. SAMPIERI, Hernández Roberto. Metodología de la

investigación, 1ra edición, editorial MC Graw Hill

1991

11. WATERS, H Cheryl, diagnosis and Management of

Parkinson’s Disease, second Edition , Editorial

Novartis 1999 12. http://members.tripod.com/ccardiel/parkinson-

cirugia.html 13. http://neurologia.rediris.es/congreso-1/conferencias/t-

movimeinto-c5.html 14. www.cnsonline.org 15. www.neuromedonline.org/queescp.html 16. www.parkinson.org