Cultura Aymara: El ayer y hoy de los hijos del sol.
16
-
Upload
cristobal-evens-miranda -
Category
Documents
-
view
313 -
download
10
description
Revista para cátedra de América y Chile Colonial, USACH, 2014.
Transcript of Cultura Aymara: El ayer y hoy de los hijos del sol.
I N D I C E
1. Introducción:
1. Contextualización del pueblo aymara y pequeño relato histórico
2. Desarrollo:
1. Pueblo aymara precolombino y durante la conquista
2. Pueblo aymara durante la época colonial
3. Pueblo aymara y la conformación de los Estados nacionales
4. Pueblo aymara contemporáneo
3. Conclusión:
1. Actualidad y futuro del pueblo aymara.
RELATO HISTÓRICO Y CONTEXTUALIZACIÓN DEL PUEBLO AYMARA
En las páginas de esta revista se buscará establecer a través de un relato la relevancia de la cultura y el pueblo aymara en distintos períodos de la historia, observando su desarrollo a través del tiempo y el espacio. Por pueblo aimara o aymara se entiende el grupo étnico indígena que comparte la lengua aymara. Ubicados desde tiempos precolombinos sobre la región andina y el altiplano sudamericano, se extienden sobre el territorio al occidente de Bolivia, el sur de Perú, el norte de Chile y minoritariamente al noroeste de Argentina. Esta cultura se desarrolló en la región por siglos. De la mano de la producción agroganadera los Qullas, Lupacas, Qanchis, Carangas,
Quillicas, Pacajes, Chichas, entre otros que compartían el lenguaje aimara, fueron desarrollando poco a poco una cultura que hasta nuestros días se encuentra presente.
Mapa: “Los señoríos aymaras”, Extraído
de www.ilcanet.org/ciberaymara/aymara.
Tras largos años de existencia, sus tierras fueron conquistadas por la cultura incaica bajo el reinado del inca Huayna Capac -1438 a 1523-. Aún así el pueblo aymara conservó cierto grado de autonomía, lo cual es ciertamente entendible principalmente debido a que los procesos de conquista realizados por el Imperio Inca distan de gran diferencia a los realizados por españoles. Años más tarde, y junto a la llegada de la conquista española, los aymaras volvieron a verse sometidos frente un pueblo invasor, perdiendo, a diferencia del caso incaico, su autonomía por completo, viéndose forzados a adoptar muchas de las tradiciones y costumbres españolas. Fue luego, y tras la independencia hispanoamericana, que la población aymara se transformó en ciudadana tanto de Bolivia como de Perú, países a los cuales más tarde se unió Chile, a causa de la anexión del territorio ganado luego de la Guerra del Pacífico. De esta manera, al investigar la cultura aymara y su pueblo nos encontramos en presencia de una linealidad histórica proveniente desde tiempos precolombinos hasta nuestra actualidad, en la cual
los aymaras han vivido bajo diferentes condiciones, llegando hoy a ser una cultura viva, y de la cual la historia debe preocuparse en entender los distintos procesos que han permitido esta continuidad.
PUEBLO AYMARA PRECOLOMBINO Y DURANTE LA CONQUISTA
Durante la época precolombina el
pueblo aymara se presenta como
una serie de subgrupos étnicos,
familiarizados por el uso de la
lengua aimara, tales como Qullas,
Lupacas, Qanchis, Chichas, entre
otros. Ubicados en diferentes
lugares dentro de lo que hoy sería
principalmente territorio boliviano
y peruano, vivieron a base de una
economía agroganadera,
sustentada principalmente de la
crianza de camélidos y una
agricultura diversificada -al igual
que la mayor parte de las culturas
indígenas del territorio-.
Ubicados en este escenario se
vieron consumidos por la sombra
de la cultura incaica, la cual en el
reinado de Huayna Capac
conquistaron a los aymara,
haciéndolos parte del
Tahuantinsuyo y denominando su
territorio como Qullasuyo1, uno de
los cuatro suyos, en relación con la
sub-etnia aymara de nombre Qulla.
De esta manera los aymara, dentro
de la organización incaica y como
parte del Tahuantinsuyo,
mantuvieron en gran parte su
autonomía, siendo incluso su
lengua una de las tres principales
en el imperio, aparte del quechua y
la mochina2. Fue bajo esta
autonomía que la cultura aymara
1 Porto, Malibrán; Del Rosario, América. “Los
aymara: oprimidos pero no vencidos”. Ciudad Universitaria, México D.F., 2006, p. 4. Extraído de: http://bit.ly/1dKwAcN el 11/01/14.
2Ibid, p.5.
pudo persistir y no olvidar sus
costumbres, bajo un sometimiento
diferente al español, pero no
menos oscuro por esto.
Mapa: “División territorial del Tahuantinsuyo”, Extraído de www.segundomarb.blogspot.com/2012/09/bases-geograficas-del-tahuantinsuyo.html
Tras el yugo incaico los aymaras se
encontraron con la conquista
española, y comenzaron a vivir
peores condiciones de vida, fueron
obligados a aprender el español, a
convertirse al cristianismo, además
de la existencia de trabajos
forzados.
La conquista del Tahuantinsuyo, y
por ende la de los aymara fue
llevada a cabo por Francisco Pizarro
desde 1532 hasta 1544 cuando fue
asesinado Manco Inca3, hecho que
desencadenó la victoria española.
La cultura europea llegó a romper
el orden social, religioso, político y
económico, dejando a las culturas
precolombinas, y a los aymara
entre ellos, desorientados,
generando disputas tanto de
indígenas con españoles como
entre indígenas. A pesar de esto la
cultura aymara logró perdurar y su
resistencia, proveniente desde
tiempos precolombinos,
trascendería en el tiempo de la
colonia.
3Ibid, p. 6.
EL PUEBLO AYMARA DURANTE LA ÉPOCA COLONIAL
Para entender el proceso posterior
a la conquista es crucial mantener
dos ideas importantes en mente:
1) La invasión española generó
grandes pérdidas de la población
aymara, tanto a nivel humano,
material y principalmente
ideológico; muchas creencias
fueron reemplazadas por el
cristianismo, y aunque algunos
procesos de sincretismo
comenzaron a tomar forma, sin
duda hubo un gran cambio en las
formas de vida de la población, a
pesar de que se mantuvieron
ciertas instituciones que
permitieron llevar de mejor forma
la dominación de este pueblo4.
4Ibid, p.10.
2) La mano de obra aymara, y de
otras poblaciones indígenas,
resultó crucial para el desarrollo
económico colonial; esto es posible
verificarlo en 1545, con el inicio de
los trabajos mineros en Potosí,
reglamentados por la corona, lo
que sin duda no acaba con la
explotación de la población.
Estas situaciones provocaron un
profundo resquemor dentro de la
población aymara, quienes debido
a los constantes atropellos y
situaciones de injusticia
protagonizaron diversos
levantamientos contra el régimen
instaurado por la corona española,
siendo uno de estos el dirigido por
Tupac Katari, quien junto a unos
cincuenta mil aymaras sitiaron la
ciudad de La Paz el 13 de Marzo de
17815, generando una
desabastecimiento en el lugar y
una ocupación que duró por un
año aproximadamente. A pesar de
la posterior derrota, el hecho
demuestra el poderío que
consiguió la población indígena
aymara a finales del período
colonial.
Retrato de Tupac Katari en la Galería de
los Patriotas Latinoamericanos, Buenos
Aires, Argentina. Extraído de:
carlosdmesa.com/2012/02/29/lo-heroes-
que-vos-matais/
5Ibid, p. 14.
Este período dejó profundas
heridas dentro de este grupo
étnico, entre ellas la segregación
racial dentro de la sociedad
boliviana, debido a la separación
de las comunidades indígenas del
resto de la población criolla en
lugares de difícil acceso e incluso
con leyes aplicadas de distinta
forma. A pesar de la delimitación
indígena en reducciones por todo
el territorio andino, esto no logró
quebrar la esencia del pueblo en
sus costumbres y prácticas. Es
importante mencionar que ninguna
política etnocida por parte de las
instituciones coloniales fue llevada
a cabo, lo que pudo permitir una
cierta continuidad en las prácticas
aymara; al fin y al cabo, esta no era
la primera invasión que este
pueblo sufría, y resulta claro que
eso lo tuvieron en claro a la hora
de resistir a la corona española.
PUEBLO AYMARA Y LA CONFORMACIÓN DE LOS ESTADOS NACION
La independencia y la formación de
los nuevos Estados nacionales en
América no fueron sucesos
reveladores y transformadores
para los aymara, como sí lo fueron
para los criollos. Estos cambios en
la práctica no significaron ni un
avance ni un retroceso para el
pueblo aymara, como señalan
varios estudiosos. Lo que sucedió
fue un relevo de poder, pues antes
fueron sometidos al yugo español,
y posteriormente al instaurado por
los nuevos gobernantes criollos6.
El 28 de julio de 1821 fue creada la
República del Perú y el 6 de agosto
6 Ibid p. 16
de 1825 la de Bolivia, las cuales, al
situar sus fronteras no
tomaron en cuenta la realidad
aymara, afectando a sus
comunidades y sus relaciones
sociales. Los aymara fueron
divididos en naciones sin sentido
para ellos, que luego los negarían. 7
Además las falsas promesas de
liberación indígena por parte de los
grupos libertadores se quedaron en
meras palabras, ejemplo de esto es
San Martín que en 1821 prometió
la abolición del tributo indígena y el
trabajo forzado en las minas, pero
en 1829 en Bolivia se restableció el
7 Ibid p. 17
tributo indio y la servidumbre
agraria y doméstica. 8
Retrato de José de San Martín ubicado en
Bruselas, Bélgica. Extraído de
http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Por
trait_of_General_Jos%C3%A9_de_San_Mart
%C3%ADn.jpg
Es iluso creer que los aymara
pudieron tener un rol protagónico
en el movimiento de emancipación,
siendo en la mayoría de las
ocasiones usados tanto por grupos
independentistas como por
defensores de la colonia.
8 Ibídem.
En conclusión los aymara no tenían
nada que perder ni que ganar en la
conformación de los Estados
nacionales, pues su realidad no se
vio afectada en términos
concretos. Pero sin embargo eran
entendidos como un sector
importante dentro del acontecer
local -tanto en Bolivia ó Perú- ya
que tantos grupos pro
emancipación como pro
peninsulares los buscaban para
hacer alianza con ellos.
PUEBLO AYMARA CONTEMPORÁNEO
Luego de un comienzo de siglo en
que el rol de los distintos pueblos
aymara queda supeditado a las
demandas de la ciudadanía mestiza
o de origen europeo, el lugar más
importante en el que ha tenido
influencia el pueblo aymara en el
presente ha sido dentro del Estado
boliviano. Es aquí que existe una
gran relación con la coyuntura
revolucionaria de 1952 en Bolivia,
en la que el Movimiento
Nacionalista Revolucionario (MNR)
y la Central Obrera Boliviana (COB)
lideraron un proceso de
insurrección que llevó a grandes
cambios sociales, entre ellos una
reforma agraria. Sin embargo,
similar a períodos anteriores de la
historia de este pueblo, los aymara
sólo fueron utilizados como una
fuerza que no logró ser partícipe
activa de los cambios que
comenzaron a ocurrir, incluso
utilizando los grupos paramilitares
aymara para reprimir a otros
integrantes de este pueblo que se
mostraron disidentes a las políticas
que mantenía el régimen del MNR9.
Es desde este punto que surge una
nueva forma de comprender la
organización política dentro del 9 Porto, Ibid pp. 27-30.
mundo aymara a finales de los
años sesenta, esto se define en el
katarismo -en honor a Tupac
Katari-, doctrina que comienza a
resaltar la imagen del indígena por
sobre la del campesinado que
había comenzado a invisibilizar las
diferencias étnicas y raciales
específicas del pueblo aymara.
El katarismo logra tener una
incidencia incluso en el sur del
Perú. Es a partir de este
movimiento que surgen nuevas
ideas que se cristalizarán en el
denominado indianismo, que se
define como “una reivindicación de
la identidad indígena, ya no ligada
al Estado u otras instituciones
nacionales, sino como un discurso
que es parte de un amplio
movimiento indígena continental,
elevado por los propios sujetos
indígenas.”10
Esta última idea logra tener un
peso que en sus primeras décadas
no se logra vislumbrar, pero es en
la década del 2000 en que vemos
10
Oliva, María Elena. “La negritud, el indianismo
y sus intelectuales: Aimé Césaire y Fausto Reinaga”. Universidad de Chile. Extraído de: http://bit.ly/1hQRVZm el 11/01/14
que todas estas ideas terminan por
configurar al pueblo aymara como
uno de los actores principales de la
política boliviana, incluso
generando un hecho sin
precedentes en la historia del país:
El año 2006 es elegido como
presidente Evo Morales, siendo el
primer aymara -e indígena- en
llegar a este cargo en la historia del
Bolivia.
Evo Morales, Presidente de Estado de
Bolivia. Extraído de http://www.escara-
qhamacha.com/noticia.php?id_ent=48
Las reivindicaciones que desde su
partido Movimiento Al Socialismo
(MAS) ha reivindicado, dan cuenta
de luchas de muchas décadas por
parte de este pueblo, desde
medidas anti-neoliberales
instauradas por gobiernos
anteriores, como por
renacionalización de hidrocarburos
y otros derechos sociales y
culturales. Este nuevo panorama
promete un futuro bastante
auspicioso en términos
económicos, políticos pero
principalmente lingüísticos y
culturales, los que sin duda son los
ejes articuladores de cualquier
cultura, y que en el caso indígena
son los que se encuentran en
mayor peligro a nivel
Latinoamericano.
ACTUALIDAD Y FUTURO DEL PUEBLO AYMARA
Como se ha mencionado
anteriormente, el pueblo aymara
se conformó como una cultura
acostumbrada a las distintas
invasiones, primero por incas,
luego por españoles y en los
últimos dos siglos por criollos,
mestizos y empresas
transnacionales, por lo que esto ha
sido crucial para construir una
identidad de resistencia, en la que
la cultura y prácticas que datan de
varios siglos han ido de la mano
con los procesos de modernización
de un territorio que no ha tenido
una historia fácil. Sin duda, es en
nuestro presente donde podemos
ver el inicio de una etapa de
estabilidad y progreso para este
pueblo oprimido durante tantos
siglos, pero teniendo claro que
depende de la capacidad política
de las autoridades y de las
personas mismas para que esto
pueda ser una señal real de
esplendor y desarrollo hacia el
futuro de las distintas comunidades
aymara, no sólo de Bolivia, sino
que también de los países
limítrofes que albergan personas
de este origen.
Óleo sobre tela, Grupo de Aymaras.
Extraído de
http://cultural.argenpress.info/2013/07/sum
a-qamana-vivir-bien-no-mejor-la.html
|
