LA DIMENSIÓN SOCIAL DE LA

EVANGELIZACIÓN

LAS REPERCUSIONES COMUNITARIAS Y SOCIALES

DEL KERIGMA

Confesión de la fe y compromiso social

El Kerigma tiene un contenido social: Implica Vida Comunitaria y Compromiso

Creo Padre: Nos da la imagen de Dios, la dignidad (imagen de la Trindad, Amor, relación, comunión, libertad)

Creo en el Hijo: Se encarnó, Dio su vida

Creo en el E.S.: Que está en todos/as.

Inseparable el anuncio del evangelio y un efectivo amor fraterno (no solo afectivo) Lo contrario es dañino.

El Reino que nos reclama

El evangelio no invita solo a una relación personal con Dios, o solo a una suma de pequeños gestos a favor de los pobres para tranquilizar la conciencia.

Si Él Reina en nosotros implica que en la vida social se viva la fraternidad, de justicia, de paz, de dignidad, Busquen el Reino de Dios y su justicia y lo demás …

La fe implica un profundo deseo de cambiar el mundo, de dejar valores y un mundo mejor tras nuestro paso (ecología, justicia, postura propositiva)

Este documento se centra en dos aspectos no en toda la doctrina social de la Iglesia para eso tenemos el compendio de Doctrina Social de la Iglesia.

la inclusión social de los Pobres 2. La Paz y el diálogo social.

LA INCLUSIÓN SOCIAL DE LOS POBRES

Unidos a Dios escuchamos un clamor

Somos instrumentos de Dios para la liberación y

promoción de los pobres.

Es la acción de Dios a través de la Historia

La Iglesia guiada por el evangelio de la misericordia y el

amor al hombre escucha ese clamor.

Solidaridad brota de reconocer la función social de la

propiedad privada y la primacía del destino universal de

los bienes. No basta solo un cambio de estructuras sin

nuevas convicciones sin eso con el tiempo esas

estructuras se harán corruptas, pesadas e ineficaces.

Reconocer el derecho de los pueblos, No solo ver

los derechos humanos desde los derechos

individuales o de los pueblos más ricos. La

solidaridad debe permitir a los pueblos llegar a ser

por si mismos artífices de su destino (Problema

cultural)

Escuchemos el clamor de los pobres. Buscamos no

solo un plato de comida, un sustento sino la

prosperidad que implica Educación, Salud y

sobretodo Trabajo con salario justo.

Fidelidad al Evangelio para no correr en vano

El pecado se vence con la misericordia que nos lleva a

estremecernos por el dolor ajeno. No acallemos este

claro mensaje. No nos preocupemos sólo por no caer

en errores doctrinales, sino también por ser fieles a este

camino luminoso de vida y sabiduría. No se diga de los

defensores de la ortodoxia que son pasivos, indulgentes

o cómplices de injusticias intolerables y de los

regímenes que las mantiene.

No siempre podemos expresar toda la belleza el

evangelio pero el signo de la opción por los últimos, los

descartables, los desechables no puede faltar.

Somos duros de corazón y de mente, nos extasiamos

con el consumo y esa alienación dificulta cada vez más

la donación.

El lugar privilegiado de los pobres en el Pueblo de Dios.

El se hizo pobre se encarnó en una humilde muchacha, nació en un pesebre, ofrecieron dos pichones, trabajo con sus manos, fue enviado a anunciar el evangelio de los pobres (Lc4,18) Se identifica con ello Tuve hambre y me disteis……

La opción por los pobres es una categoría teológica. Que lleva a la primacía del ejercicio de la caridad. Quiero una Iglesia Pobre y de los Pobres. Dejémonos evangelizar por ellos, descubrir a Cristo en ellos y recoger en ellos la sabiduría de Dios.

La Iglesia no solo se compromete con acciones o programas de promoción y asistencia. Implica la preocupación por la persona. El amor es contemplativo y estima al otro al pobre como de gran valor eso hace la diferencia entra la opción por los pobres y cualquier ideología que utiliza a los pobres en función de intereses personales o políticos.

No a la discriminación de la atención espiritual de los pobres es la peor de todas.

Nadie excluido de la preocupación por los pobres y de la Justicia Social.

Economía y distribución del ingreso

Resolver las causas estructurales de la pobreza no

puede esperar. Eso es una enfermedad. Lo

asistencial son respuestas pasajeras, o lo tendrían

que ser. Si no se resuelven radicalmente los

problemas de los pobres renunciando a la

autonomía de los mercados y a la especulación

financiera y atacando las estructuras de inequidad.

La Dignidad de la persona y el bien común tienen

que estructurar la política económica, no ser un

apéndice de ella.

Molesta hablar de: Ética, Solidaridad, Distribución

de bienes, Preservar fuentes de trabajo, Dignidad

de los débiles, Dios que pide justicia. O se

manosean esas palabras en los discursos.

No existe la mano invisible del mercado. Se

necesitan de decisiones, programas, mecanismos

para todo lo anterior.

Ora para que existan político s que dialoguen, que

recuperen el valor de la política, que apliquen la

caridad en las macro-relaciones no solo en las

micro. Hace falta una nueva mentalidad política y

económica.

Cuidar la fragilidad

Jesús se identificó con los más pequeños, nosotros

estamos llamados a cuidar a los más frágiles de la

tierra.

Estar cerca de las nuevas formas de pobreza y

fragilidad (sin techo, drogadictos, refugiados,

indígenas, ancianos, inmigrantes) En apertura a

ellos

Realidades como la Trata de personas (Talleres

clandestinos, prostitución, unas niños en

mendicidad) No nos hagamos los distraídos o

nuestras manos estarán preñadas de sangre por

nuestra complicidad cómoda y muda.

En todo ello la mujer es doblemente perjudicada y

a pesar de ello en ellas se dan gestos de heroísmo

cotidiano en defensa y cuidado de la fragilidad de

su familia.

También el niño por nacer, no ridiculizar la defensa

de la Vida en todas sus etapas de la Iglesia. Por

coherencia la Iglesia no cambiará su postura pero

cuidado se ha hecho muy poco por acompañar

adecuadamente a la mujeres haciendo que el

aborto se presente como rápida solución a sus

angustias.

La fragilidad de la creación: El hombre es custodio

no dueño de las demás criaturas. Pequeños y

fuertes como San Francisco cuidemos la fragilidad

del pueblo y del mundo.

EL BIEN COMÚN Y LA PAZ SOCIAL

La paz social no es solo ausencia de violencia,

Tampoco es Paz tranquilizar la conciencia de los

pobres y los ricos ante tanta desiguadad.

La reivindicaciones sociales no se pueden sofocar

bajo el pretexto de un consenso de escritorio o la

paz de la minoría feliz.

Tampoco es solo ausencia de guerra sino la

búsqueda de la justicia querida por Dios. Es hacer

en cada nación ciudadanos responsables y no

masa arrastrada. Se tiene que construir un pueblo

en paz, justicia y fraternidad para ello hay cuatro

principios en relación y tensión:

El tiempo es superior al espacio

El tiempo se relaciona con la plenitud, el espacio con lo límites del momento. Se vive en tensión pero la coyuntura del momento no puede impedir el futuro.

Se tiene que trabajar a largo plazo, no buscar resultados inmediatos. Un pecado de la actividad sociopolítica es dar prioridad al espacio en vez de a los tiempos de los procesos. Priorizar acciones que generan dinamismos nuevos en la sociedad, sin ansiedad pero con convicciones claras y tenacidad. ¿Quiénes son los políticos o actores sociales que buscan eso??? y no resultados fáciles y rápidos para rédito político.

Este criterio es también muy válido para la evangelización. Parábola del trigo y la cizaña.

La unidad prevalece sobre el conflicto

No se puede ignorar o disimular el conflicto. este debe ser asumido pero sin encerarnos en sus límites y perder el horizonte.

Solo de esta manera se puede desarrollar la comunión en las diferencias. Eso es posible para las grandes personas que saben ir más allá de la superficie conflictiva y ven a los demás en su dignidad más profunda. La Unidad es superior al conflicto. La solidaridad nos puede llevar a la unidad pluriforme de genera nueva vida.

No es sincretismo no es absorción de uno al otro, sino la resolución en un plano superior que conserva las polaridades en pugna. A ejemplo de Cristo en Él se une cielo y tierra, Dios y hombre, tiempo y eternidad, carne y espíritu, persona y sociedad. Desde la unidad interior a la auténtica paz social.

El anuncio de la paz no es de paz negociada sino de convicción en la Unidad del Espíritu que de la diversidad puede construir una síntesis, la diversidad reconciliada.

La realidad es más importante que la idea.

La idea, los conceptos son para entender la

realidad, si se desconectan de ella no sirven. La

idea ilustra pero no convoca, no arrastra. Esta

primacía se basa en la encarnación y nos lleva a

valorar la historia de la Iglesia como Historia de

salvación y a valorar la inculturación de la cual

muchos santos son grandes ejemplos cada uno en

su tiempo. También urge a poner en práctica la

Palabra en obras de justicia y caridad, sino

edificaremos sobre arena.

El todo es superior a la parte

Esta la tensión entre lo global y lo local. Se tiene que ver globalmente para no caer en una mezquindad cotidiana, pero a la vez no hay que perder de vista lo local para pisar tierra. No ser ciudadanos de un universalismo abstracto y globalizante (viviendo un mundo que es de otros) Ni un Localismo folclórico que no se interpela y condenado a repetir siempre lo mismo.

El Todo es más que las partes y que la suma de ellas, tenemos que ampliar las miradas, pero si desarraigarse de lo propio. Se trabaja en lo pequeño pero con visión amplia.

El modelo no es una esfera que anula las deferencias, donde todos los puntos son iguales, ni la parcialidad aislada, sino el poliedro en donde confluyen las partes con su originalidad en una unidad. Eso es importante en la acción pastoral y la acción política.

El Evangelio es así nos pide la totalidad la integridad de su mensaje y en su riqueza incorpora a todos con sus características, en especial los pobres, los alejados (Buen pastor).

EL DIÁLOGO SOCIAL COMO CONTRIBUCIÓN A

LA PAZ

La evangelización es diálogo y pide a la Iglesia establecerlo con los Estados, la sociedad (ciencias culturas) y con los otros creyentes. En este diálogo la Iglesia aporta desde sus 2000 años de experiencia con la luz de la fe.

Estados

La Iglesia está abierta a colaborar con autoridades nacionales e internacionales para cuidar el bien universal. Jesucristo nos invita a ser instrumentos de paz. Diseñar una cultura del diálogo en el encuentro y el consenso unida a la búsqueda de una sociedad justa y en el que el sujeto sea el pueblo y su cultura no una élite.

Estado: cuidar y promover el bien común con los principios de subsidiariedad y solidaridad. Buscando en ellos grandes consensos. Eso hoy implica una gran humildad social.

La Iglesia no tiene soluciones para todas las cuestiones, pero junto a las fuerzas sociales acompaña las propuestas que mejor respondan a la dignidad de la persona y el bien común. Ella clarifica los valores fundamentales de la existencia

Dialogo fe razón y ciencias

La Iglesia busca la síntesis entre el uso

responsable de las metodologías propias de las

ciencias empíricas y la filosofía – Teología – fe.

la fe no tema a la razón sino que confía en ella,

ambas no se pueden contradecir. Es un camino

que enriquecerá a la sociedad. Por eso la Iglesia se

alegra del avance de las ciencias. Otro tema es

elevar a categoría de dogma una opinión científica

y extralimitarse en sus afirmaciones eso cierra un

auténtico diálogo.

Diálogo ecuménico

Que todos sean Uno: De eso depende nuestra

credibilidad. La Iglesia también realiza su

catolicidad en los que no están plenamente unidos

a su comunión. Caminar sin recelos y

desconfianzas.

La división es un escándalo sobretodo en África y

Asia. Centrarnos en lo que nos une, tener en

cuenta la jerarquía de verdades nos ayudara en

este camino. Eso no es por diplomacia es el

camino de la evangelización.

No es solo conocerlos mejor a ello sino reconocer

lo que el Espíritu a sembrado en ellos.

Relaciones con el Judaísmo

Compartimos gran paste de de Escritura, es el

pueblo de la Alianza. Con ellos creemos en el único

Dios que actúa en la Historia. El diálogo y la

amistad con ellos es parte de la vida de los

discípulos de Jesús. Dios sigue obrando en ellos y

la Iglesia se enriquece con ellos, sobretodo muchas

convicciones éticas y la preocupación por los

pueblos y la justicia.

Diálogo interreligioso

Actitud de apertura en la verdad y en el amor aun

en medio de las diferencias y dificultades. Es una

condición de la paz en el mundo y por ello un deber

cristiano. El dialogo es primero sobre la vida,

compartir penas y alegrías aprendiendo a aceptar

al diferente, sirviendo juntos a la paz y la justicia

como compromiso ético, escuchándonos

mutuamente en el amor a la verdad. En ello la

Iglesia lleva su anuncio superando cualquier

sincretismo, nos mantenemos firmes en las

convicciones profundas con identidad clara y

gozosa pera abiertos a comprender las del otro.

Evangelización y diálogo se alimentan

mutuamente.

Dialogo con el Islam en especial en países de

tradición cristiana. Es muy importante. El Corán

conserva parte de las tradiciones cristianas Jesús y

María por ejemplo. Es admirable su convicción

religiosa tanto de viejos como de jóvenes. Estar

preparados para el diálogo, acogerlo a los

inmigrantes que nos llegan. des mismo modo

implora la misma libertad para los cristianos que

viven en países musulmanes, evitar el

fundamentalismo y crecer en el afecto a los

verdaderos creyentes del Islam.

La acción de la gracia en los no cristianos, Cristo

asumió a todos. El espíritu les puede hacer crecer

el la verdad superando el inmanentismo ateo o

experiencias solo individuales.

Diálogo social en el contexto de la libertad religiosa

La libertad religiosa es un derecho fundamental.

Pero un sano pluralismo no implica reducirlas a la

sacristía, eso sería discriminación y autoritarismo.

El respeto a la no creencia no puede silenciar las

convicciones religiosas y sus ricas tradiciones. No

caer en desprecios por la cortedad de vista de los

racionalismos.

Estamos también cerca de los no creyentes que

buscan sinceramente la verdad, la bondad y la

belleza, Son nuestros aliados en la defensa de la

dignidad humana, de la convivencia entre los

pueblos. La Iglesia debe estar en esos areópagos.