Edema de Glotis
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Edema de glotis
En el siguiente artículo, nos dedicaremos a profundizar el tema específico
de la edema de glotis. Como sabemos, la glotis es el orificio que se encuentra
en el orificio de la laringe, por donde entra el aire hacia la tráquea. Cuando
estamos respirando, en el momento de la inhalación, la glotis se abre de manera
normal.
Específicamente, está ubicada en donde se encuentran las cuerdas vocales. En
dicha zona, además se encuentran la comisura anterior y la comisura posterior. Lo
que puede suceder con la glotis, es una obstrucción del tipo mecánica,
aumentando notablemente el tamaño del mismo e impidiendo el paso del aire. Se
dice que es lo más temido en cuanto a las alergias ya que al obstruirse la vía área
en pocos minutos, podría provocar un paro cardio respiratorio.
Lo que se debe tener en cuenta del edema de
glotis es que no en todos los pacientes es provocado por la misma
causa, algunos padecen distintos tipos de alergias, conduciendo al paciente a un
estado de asfixia de nivel sumamente grave. Por eso es que el tratamiento a cada
paciente, dependerá de la causa que lo haya desencadenado. Se puede recurrir a
dos tipos de tratamientos, el homeopático o el tradicional.
Lo que difiere el tradicional del homeopático es que generalmente se emplea
con remedio que equilibra al organismo del paciente,realizando un efecto
instantáneo de desinflamación en la zona de la glotis. Otra de las razones, por las
que también se puede generar un edema de glotis es inflamaciones, lesiones o
inhalación de gases tóxicos. Obviamente que es probable que no en todos los
casos suceda y se desencadene el edema, pero para estar seguros bastará
solamente con conocer todo lo que pueda llegar a generarnos una alergia aguda,
ya que es una emergencia respiratoria no menor, que podría llevarnos a la muerte
si es que no la evitemos o la tratamos de inmediato. Lo que sí debemos tener bien
en claro, es que no en todos los casos el edema de glotis puede conducir a la
muerte.
Niveles de gravedad
Hay tres niveles de gravedad bien
definidos: Cuando no presenta gravedad alguna, el doctor nos recetará unos
medicamentos adecuados para ello y enseguida cesará la inflamación y el edema
de glotis. En el segundo caso, puede resultar más severo, comprometiéndose el
paso del aire y generando una sensación de ahogo. Para este caso, lo más indicado
será implementar adrenalina en aerosol, vía bucal.
En última instancia el edema puede generar compromiso vital, tornándose mucho
más grave que los dos casos anteriores, generando una necesidad de solución casi
fugaz. En este caso, se empleará adrenalina, antihistamínicos y corticoides. Si el
edema se torna cada vez más complicado y no mejora en lo absoluto, se deberá
recurrir a una traqueotomía.La traqueotomía es una intervención quirúrgica en la
cual, se realiza una abertura en el cuello, dentro de la tráquea. Por ese orificio se
colocará una especie de tubo de pequeño tamaño para generar otra vía aérea,
quitando todo tipo de secreciones que puedan estar presentes dentro de los
pulmones. Para ello, será necesario recurrir a una anestesia general.
Si se torna más grave, no será lo más conveniente por eso es que en ese caso lo
mejor sería aplicar anestesia local para que el dolor o las molestias se reduzcan
durante el proceso. Al realizar esto, el cirujano lo que deberá hacer será realizar
además de un orificio en el cuello en sí, en la tráquea, donde posteriormente
ubicará el pequeño tubito y lo más probable es que el cuello comience a sangrar,
por eso es que rápidamente se deberá color vendas para reducir el sangrado.
Los médicos que realicen estos procedimientos tan delicados, son
exclusivamente cirujanos. Son muchas las razones ante las cuales se puede
recurrir a este método como por ejemplo, obstrucción en las vías respiratorias,
impedimento en cuanto a la respiración por sí solos, cáncer de cuello que afecta la
respiración y por supuesto, el edema de glotis. Puede sonar realmente
impresionante pero no preocupemos, los médicos recurren a la traqueotomía como
última instancia. Por lo pronto será necesario tomar nuestros recaudos y recurrir e
inmediato a nuestro médico de cabecera.
Algunos datos interesantes a tener en cuenta: Ante una emergencia, al
momento de la obstrucción de las vías aéreas, será necesario que tengamos en
cuenta algunas cuestiones que son clave en estos momentos. Jamás debemos
permitir que el paciente se siente, lo que sí debemos hacer es colocar su cabeza
hacia abajo, dando unos pequeños golpes secos en la espalda, pudiendo llegar a
generar tos. La obstrucción de vías aéreas puede ser total o parcial, por eso es que
antes de que la parcial, se convierta en total, se deben tomar ciertos recaudos y en
el caso de la total, lo mejor será recurrir a este método, mientras llamamos de
urgencia a una ambulancia.
Quemaduras
Las quemaduras son lesiones causadas por la prolongada exposición de la piel a los rayos del sol, contacto con llamas, gases, elevadas temperaturas, sustancias químicas o la
corriente eléctrica. De acuerdo a la profundidad de la lesión, las quemaduras se pueden clasificar en tres tipos: primer grado, segundo grado y tercer grado.
Quemaduras de primer grado
Son las quemaduras menos graves. Se caracterizan por un enrojecimiento de la piel, hinchazón y mucho ardor. Cuando este tipo de quemaduras es producida por la prolongada exposición a los rayos solares en la playa o la montaña, se le llama insolación.
En estos casos se recomienda aplicar frío sobre la parte afectada, colocando pañitos o bolsas de hielo. También se recomienda colocar una crema hidratante y consumir abundante agua para mantenerse hidratado. El ardor se va calmando poco a poco, la piel va perdiendo el color rojo y disminuye el escozor. Posteriormente la piel se oscurece y su superficie se va desprendiendo en numerosas y pequeñas escamillas.
Cuando la quemadura es por insolación, se debe trasladar a la víctima a un lugar fresco y protegido del sol, aflojarle la ropa, aplicar compresas de agua fría en la cabeza y el cuerpo y hacer que ingiera agua. Si la víctima pierde el conocimiento, debe mantenerse en posición horizontal con las piernas más elevadas que el resto del cuerpo, se le debe proveer de atención médica inmediata.
Si la quemadura es producida por calor, como por vapor de agua al abrir una olla de agua caliente del radiador de carro al abrirle la tapa, la región afectada se debe cubrir con una gasa estéril impregnada de una pomada o vaselina. Si la quemadura es muy extensa, debe vendarse para evitar el enfriamiento.
Si la quemadura es producida por una sustancia química como el limpiador de hornos, se debe lavar la herida con abundante agua para neutralizar el efecto de la sustancia que produjo la quemadura. Si la quemadura fue producida por un ácido, como los que se utilizan en el laboratorio, debe lavarse la herida con una solución de bicarbonato de sodio y agua, luego debe buscarse asistencia médica.
Quemaduras de segundo grado
En este tipo de quemaduras, además del enrojecimiento y mucho ardor, aparecen ampollas llenas de agua, pudiendo ser superficiales o profundas. Cuando se rompen las ampollas eliminan un líquido claro quedando al descubierto la dermis, se deben tomar precauciones para impedir el contagio con gérmenes y evitar una infección que empeoraría el estado del paciente.
Cuando las ampollas permanecen cerradas, deben limpiarse con alcohol para evitar una infección. Pero, si pasa el tiempo y no se rompen, deben romperse con mucho cuidado con un objeto como una aguja desinfectada y limpiar frecuentemente con alcohol o agua oxigenada la parte afectada, colocarle una pomada que contenga antibiótico u otra que indique el médico, y cubrirla con gasa o vendas.
En este tipo de quemaduras, a pesar que la piel sufre lesiones se regenera completamente, quedando igual a la de las zonas no quemadas. Generalmente no quedan marcas de la quemadura sufrida.
Al tratar este tipo de quemaduras se procede de la siguiente manera:
Retirar las prendas de vestir que estén cubriendo las quemaduras, pero sin desprender las partes que están adheridas.
Colocar sobre el área afectada una gasa impregnada de una solución de bicarbonato de sodio y agua.
Nunca debe usarse algodón, ya que pueden quedar partes de él en la herida y se puede infectar.
Suministrar medio vaso de agua cada 15 minutos.
Acostar a la persona con la cabeza más elevada que el cuerpo y cubrirlo para evitar enfriamiento.
Trasladarlo a un hospital o al centro de salud más cercano.
Quemaduras de tercer grado
Este tipo de quemaduras es la más grave, ya que lesiona permanentemente los tejidos superficiales y profundos, pudiendo llegar al hueso y producir la carbonización de un miembro o de todo el cuerpo. El tejido quemado degenera a causa de la violenta deshidratación. Las cicatrices pueden provocar deformaciones y dañar los tejidos adyacentes, limitan los movimientos y pueden ocasionar el cáncer de la piel.
Para curar una quemadura de tercer grado y hacer que desaparezcan las cicatrices, se requiere eliminar una parte del tejido afectado y realizar injertos de piel, tomada de otras regiones del cuerpo. Cuando las quemaduras se han producido en una extremidad y afecta una zona de flexión, como la parte posterior de la rodilla, es aconsejable fijar de nuevo el tejido y mantener la extremidad en flexión.
Cuiando sucede este tipo de quemaduras, como precaución debe aplicarse la inyección antitetánica. Como se observa las quemaduras de tercer grado sólo puede ser atendida por un médico, las medidas de primeros auxilios consisten en trasladar a la víctima con prontitud para que sea atendida por un especialista.
Los primeros auxilios
Lo primero que se debe hacerse es tratar de controlar el dolor y prevenir una infección, para ello se debe:
Aplicar hielo o agua fría. Colocar una gasa estéril y vendar suavemente la parte afectada. Es muy importante, que el paciente tome mucha agua para mantenerse hidratado.
En caso de quemaduras graves, es necesario:
Retirar al paciente del fuego y colocarlo en un lugar seguro y no muy frío. Aplicar a las heridas tiras de tela limpias empapadas en bicarbonato de sodio. Llevar a la persona accidentada a un puesto asistencial de inmediato
Existen tres niveles de quemaduras:
Quemaduras de primer grado: afectan sólo la capa exterior de la piel y causan dolor,
enrojecimiento e inflamación.
Quemaduras de segundo grado (espesor parcial): afectan tanto la capa externa como la
capa subyacente de la piel, produciendo dolor, enrojecimiento, inflamación y ampollas.
Quemaduras de tercer grado (espesor completo): se extienden hasta tejidos más
profundos, produciendo una piel de coloración blanquecina, oscura o carbonizada que
puede estar entumecida.
Consideraciones generales
Antes de administrar los primeros auxilios, evalúe la extensión de las quemaduras de la persona y
trate de determinar la profundidad de la parte más seria de la quemadura; luego, trate toda la
quemadura como corresponde. En caso de duda, trátela como si fuera una quemadura grave.
Al administrar los primeros auxilios antes de recibir ayuda médica profesional, se puede ayudar a
disminuir la gravedad de la quemadura. La atención médica oportuna para quemaduras graves
puede ayudar a evitar la cicatrización, discapacidad y deformaciones. Las quemaduras en la cara,
las manos, los pies y los genitales pueden ser particularmente graves.
Los niños menores de 4 años y los adultos de más de 60 años tienen una mayor probabilidad de
complicaciones y muerte a causa de quemaduras graves.
En caso de un incendio, usted y otras personas que estén allí están en riesgo de intoxicación por
monóxido de carbono. Cualquier persona con dolor de cabeza, entumecimiento, debilidad o dolor
torácico debe ser examinada.
Causas
Las quemaduras pueden ser causadas por calor seco (como el fuego), por calor húmedo (como
vapor o líquidos calientes), por radiación, fricción, objetos calientes, el sol, electricidad o sustancias
químicas.
Las quemaduras térmicas son las más comunes y ocurren cuando metales calientes, líquidos
hirvientes, vapor o llamas entran en contacto con la piel. Suelen ser producto de incendios,
accidentes automovilísticos, juegos con fósforos, gasolina mal almacenada, calentadores y mal
funcionamiento de equipos eléctricos. Entre otras causas, se puede mencionar el mal manejo de
petardos y los accidentes en la cocina, como puede suceder cuando un niño se sube a una estufa
o toma una plancha caliente.
Las quemaduras de las vías respiratorias pueden ser causadas por inhalación de humo, vapor, aire
sobrecalentado o vapores tóxicos, a menudo en espacios poco ventilados.
En algunas ocasiones, se hace seguimiento a las quemaduras en los niños en búsqueda de
maltrato por parte de los padres.
Síntomas
Ampollas
Dolor (el grado de éste no está relacionado con la gravedad de la quemadura, ya que las
quemaduras más graves pueden ser indoloras)
Peladuras en la piel
Enrojecimiento de la piel
Shock : se debe observar si hay palidez y piel fría y húmeda, debilidad, labios y uñas
azulados y disminución de la capacidad de estar alerta
Inflamación
Piel blanca o carbonizada
Los síntomas de una quemadura en las vías respiratorias son:
Boca carbonizada, labios quemados
Quemaduras en la cabeza, cara o cuello
Sibilancias
Cambio en la voz
Dificultad al respirar, tos
Pelos de la nariz o de las cejas chamuscados
Moco oscuro o con manchas de carbón
Primeros auxilios
PARA QUEMADURAS MENORES:
1. Si no hay rupturas en la piel, deje correr agua fría sobre el área de la quemadura o sumerja el
área en agua fría, pero no helada, durante por lo menos cinco minutos. Una toalla limpia, húmeda y
fría también ayuda a reducir el dolor.
2. Calme y bríndele confianza a la persona.
3. Luego de lavar o remojar en agua por varios minutos, cubra la quemadura con un vendaje estéril
o con un trozo de tela limpio.
4. Proteja la quemadura de presiones o fricciones.
5. Los medicamentos para el dolor que no necesitan receta médica, como el ibuprofeno o el
paracetamol, se pueden utilizar para aliviar el dolor, a la vez que pueden ayudar a reducir la
hinchazón. NO le dé ácido acetilsalicílico (aspirin) a niños menores de 12 años. Una vez que se
enfríe la piel, una loción humectante también puede servir.
6. Las quemaduras menores suelen sanar sin tratamiento adicional. Sin embargo, en el caso de
quemaduras de segundo grado que cubran un área de más de dos o tres pulgadas en diámetro (5
a 8 cm), o si el área quemada es en la manos, pies, cara, ingles, glúteos o una articulación
importante, trátela como si fuera una quemadura grave.
7. Verifique que la persona esté al día con la vacuna antitetánica.
PARA QUEMADURAS GRAVES:
1. Si alguien se prende fuego, dígale que se detenga, se tire al suelo y ruede. Envuelva a la
persona con un material grueso para apagar las llamas (un abrigo, una alfombra o una manta de
algodón o lana) y rocíela con agua.
2. Llame al número local de emergencias (911 en los Estados Unidos).
3. Cerciórese de que la persona ya no esté en contacto con materiales ardientes. No obstante, NO
le quite las ropas quemadas que estén pegadas a la piel.
4. Verifique que la persona esté respirando. Si la respiración se ha detenido o si las vías
respiratorias están bloqueadas, ábralas. De ser necesario, comience a administrar respiración
artificial y RCP.
5. Cubra el área de la quemadura con un vendaje estéril, húmedo y frío (si lo hay) o una pieza de
tela limpia. Una sábana puede servir si el área de la quemadura es muy extensa. NO aplique
ungüentos y evite reventar cualquier ampolla causada por la quemadura.
6. Si los dedos de las manos o de los pies sufrieron quemaduras, sepárelos con compresas secas,
estériles y no adhesivas.
7. Eleve el área quemada por encima del nivel del corazón y protéjala de presiones y fricciones.
8. Tome las medidas necesarias para prevenir el shock. Acueste a la persona, elevándole los pies
unas 12 pulgadas (30 cm) y cúbrala con una manta o abrigo. Sin embargo, NO coloque a la
persona en esta posición deshock si se sospecha que hay lesiones en la cabeza, cuello, espalda o
piernas o si esto hace sentir a la persona incómoda.
9. Continúe observando los signos vitales de la persona hasta que llegue asistencia médica. Esto
significa elpulso, la frecuencia respiratoria y la presión arterial.
No se debe
NO aplique ungüentos, mantequilla, hielo, medicamentos, cremas, aceites en aerosol ni
cualquier otro remedio casero en las quemaduras graves.
NO respire, sople ni tosa sobre la quemadura.
NO toque la piel muerta o ampollada.
NO retire la ropa que esté pegada a la piel.
NO administre nada a la persona por vía oral si hay una quemadura grave.
NO sumerja una quemadura grave en agua fría, pues esto puede causar shock.
NO coloque una almohada debajo de la cabeza de la persona si hay quemaduras de las
vías respiratorias, porque esto puede cerrarlas.
Se debe buscar asistencia médica de emergencia si
Llame al número local de emergencias (911 en los Estados Unidos) si:
La quemadura es extensa (del tamaño de la palma de la mano o más grande).
La quemadura es grave (de tercer grado).
Usted no está seguro de su gravedad.
La quemadura es causada por sustancias químicas o electricidad.
La persona muestra signos de shock.
La persona inhaló humo.
Se sospecha o se sabe que la quemadura se debe a maltrato físico.
Hay otros síntomas asociados con las quemaduras.
Consulte con el médico si el dolor aún está presente después de 48 horas.
Llame inmediatamente si se presentan signos de infección, como aumento del dolor,
enrojecimiento, inflamación, drenaje o pus de la quemadura, inflamación de los ganglios linfáticos,
líneas rojas que se diseminan desde la quemadura o fiebre.
Asimismo, llame de inmediato si se presentan signos de deshidratación como sed, piel seca,
mareo, confusión o disminución de la micción. Los niños, las personas de edad avanzada y
cualquier persona con un sistema inmunitario debilitado (por ejemplo, por VIH) deben ser
examinados de inmediato.
Prevención
Para ayudar a prevenir las quemaduras:
Instale alarmas de humo en el hogar. Revise y cambie las baterías regularmente.
Enseñe a los niños las medidas de seguridad adecuadas en caso de incendio y el peligro
que ofrecen la manipulación de fósforos y juegos pirotécnicos.
Evite que los niños trepen a la estufa o tomen objetos calientes como planchas y puertas
de los hornos.
Voltee los mangos de las ollas hacia la parte posterior de la estufa, de tal manera que los
niños no puedan tomarlas y que no puedan ser volcadas accidentalmente.
Coloque extintores de incendios en lugares claves en la casa, el trabajo y la escuela.
Retire las cuerdas eléctricas de los pisos y manténgalas fuera de alcance.
Conozca y ensaye rutas de escape en caso de incendio en casa, en el trabajo y en la
escuela.
Gradúe la temperatura del calentador de agua a 120º F (50º C) o menos.
Fracturas
La fractura es la rotura de un hueso: es completa cuando se rompe todo el espesor del hueso, y es incompleta cuando sólo se rompe una parte del hueso. Esta última también suele llamarse fisura y es muy común en los niños, ya que sus huesos tienen gran elasticidad.
Las fracturas son causadas por golpes, caídas y contracciones musculares muy fuertes, aunque también pueden ser causadas por enfermedades en los huesos, como en el caso de la osteoporosis que los debilita por falta de calcio. Las fracturas pueden producirse en el mismo lugar golpeado o a cierta distancia del lugar donde se ha recibido el golpe. Las personas de edad avanzada están más propensas a sufrir fracturas por la debilidad de sus huesos.
Clases de fracturas:
Las fracturas pueden ser cerradas o simples y abiertas.
Las fracturas cerradas o simples: son aquellas que se presentan con el hueso fracturado internamente y queda cubierto por la piel. Las fracturas cerradas son de tres clases:
Fisura: cuando el hueso solo tiene una grieta.
Fractura cerrada sencilla: cuando el hueso está roto y sus partes desplazadas.
Fractura cerrada complicada: cuando el hueso roto afecta algunos nervios o vasos sanguíneos.
Las fracturas abiertas: son aquellas donde el hueso se rompe y queda a la vista porque la piel y los músculos también se rompen.
Primeros auxilios para fracturas:
Los primeros auxilios deben ser aplicados por un experto, de la manera siguiente:
Si la fractura es abierta, limpiar y cubrir si hay sangramiento y herida. Inmovilizar el hueso con una férula o tablilla. Elevar la región afectada, para reducir la hinchazón. Aplicar un vendaje o yeso.
Al usar vendajes para fijar las férulas, es importante que no queden muy apretados, ya que pueden impedir la circulación de la sangre en el miembro afectado. Las fracturas en la clavícula, en los hombros y en el cráneo, son muy delicadas y sólo deben ser atendidas por un médico en un centro asistencial. En caso de fractura en la columna, el paciente no puede ser movido del sitio, sólo debe ser atendido por expertos, ya que un mal movimiento puede dejar a la persona paralítica.
Las Fracturas
Una fractura (del lat. fractura),
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es una solución de continuidad o ruptura en un hueso, producida como consecuencia de un traumatismo o de un proceso patológico debilitante de su estructura normal.
Clínicamente debe sospecharse si el paciente, habitualmente luego de sufrir un traumatismo, aunque puede no haberlo (fractura espontánea o patológica), presenta dolor intenso localizado a nivel de una región ósea.
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Por lo general se desarrolla rápidamente una gran tumefacción local, hematoma, deformación, movilidad anormal, crepitación entre los extremos óseos e impotencia funcional de todo el miembro afectado, en el caso de ser en una extremidad.
Aunque no todos los síntomas y signos estarán presentes, la presencia de varios de ellos nos deben hacer suponer su presencia.
En resumen, los síntomas y signos de una fractura son:
Dolor severo: Se localiza en el lugar de la lesión y mejora sensiblemente con la inmovilización del área.Edema o hinchazón: Habitualmente se presenta de inmediato como consecuencia de la fractura.Hematoma: Pueden ocurrir de inmediato si se presenta hemorragia local, bien originada del hueso fracturado o deestructuras vasculares (arterias o venas) rotas durante el evento o secundariamente por las esquirlas óseas. También puede presentarse más tarde como consecuencia de la ruptura del periostioDeformidad y pérdida de la anatomía normal: La
mayoría de las veces, como consecuencia de la pérdida de la alineación de los extremos del hueso roto, así como por el desplazamiento de los fragmentos, que pueden originar el acortamiento del miembro.Movilidad anormal: El área fracturada va a comportarse como una nueva "articulación" y se observa movimiento donde habitualmente no lo hay.Crepitación: Es una sensación que se presenta cuando se examina a un lesionado, por el roce que producen los extremos del hueso fracturado.Impotencia funcional: Es la incapacidad para utilizar todo o parte del miembro afectado por una fractura.
Podemos clasificar las fracturas en:
No complicadas o simplesComplicadas:»» Abiertas»» Desplazadas»» Con lesión de estructuras vasculares: arterias o venas»» Con lesión de nervios»» Con lesión órganos adyacentes
También, de acuerdo a si la piel está rota y de acuerdo a si el hueso está expuesto al ambiente:
CerradasAbiertas
O de acuerdo al trazo de fractura:
Incompletas
»» Fisura: La línea de fractura no alcanza de extremo a extremo del hueso.
»» En tallo verde:
A semejanza de los arbustos; se ve en niños.
Completas»» Transversales:
El trazo de fractura es perpendicular al eje diafisario (eje mayor del hueso).
»» Oblicuas: El trazo de fractura es diagonal al eje diafisario.
»» Espiroideas:
Producidas por un mecanismo de torsión sobre el eje diafisario.
»» Conminutas:
Es una fractura con múltiples fragmentos.
Fractura transversal Fractura espiroidea Fractura conminuta
Pueden ser clasificadas también por su localización: Epifisaria, metafisaria y diafisaria, así como por su etiología: Traumática, espontánea, patológica y por fatiga.
Primeros auxilios ante una posible fractura:
Verifique los signos vitales del lesionado y los pulsos por debajo de la lesión.No mover al lesionado hasta que no esté inmovilizada la fractura.En fracturas complicadas, controle la hemorragia y cubra el área con material estéril.Inmovilice el área lesionada TAL COMO ESTÁ, preferiblemente con dos objetos rígidos, de tal forma que uno quede por el lado interno y otro por el lado externo y además abarquen las articulaciones por
arriba y por debajo de la fractura.No amarre sobre el sitio de la fractura.No trate de llevar a su sitio los huesos fracturados, ya que puede causar más daño al romper vasos sanguíneos, nervios u órganos adyacentes.Luego de inmovilizar, verifique la presencia de pulso por debajo del área lesionada.Utilice almohadas, cojines, ropa de abrigo o mantas para la inmovilización de las extremidades.No de masajes ni aplique pomadas o cremas en el área fracturada.Traslade al afectado rápidamente, aunque de manera cuidadosa y lo más cómodo posible, a un centro de asistencia médica.
B
FracturaPara otros usos de este término, véase fractura (desambiguación).
Este artículo o sección necesita referencias que aparezcan en una publicación acreditada, como revistas especializadas, monografías, prensa diaria o páginas de Internet fidedignas. Este aviso fue puesto el 18 de noviembre de 2013.Puedes añadirlas o avisar al autor principal del artículo en su página de discusión pegando: {{subst:Aviso referencias|Fractura}} ~~~~
Fractura
Vista interna y externa de un brazo con una fractura compuesta, antes y
después de cirugía.
Clasificación y recursos externos
CIE-10 Sx2 (donde x=0-9 dependiendo de la ubicación de
la fractura)
CIE-9 829
CIAP-2 L76
DiseasesDB 4939
MedlinePlus 000001
MeSH D050723
Aviso médico
Una fractura es la pérdida de continuidad normal de la sustancia ósea o cartilaginosa, a consecuencia de golpes, fuerzas o tracciones cuyas intensidades superen la elasticidad del hueso. El término es extensivo para todo tipo de roturas de los huesos, desde aquellas en que el hueso se destruye amplia y evidentemente, hasta aquellas lesiones muy pequeñas e incluso microscópicas.
Índice
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1 Clasificación
o 1.1 Exposición
o 1.2 Localización en el hueso
o 1.3 Localización en el cuerpo humano
o 1.4 Gravedad
o 1.5 Enfermedades asociadas
2 Etiología
o 2.1 En niños
3 Anatomía patológica
4 Cuadro clínico
5 Tratamiento
6 Véase también
7 Enlaces externos
Clasificación[editar]
Fractura de clavícula.
Una fractura es la ruptura parcial o total de un hueso. Los sistemas de clasificación de las fracturas son varios, y dependen del tipo de rotura del hueso o zona corporal afectada, así como de otros factores asociados. Se pueden clasificar según su etiología en "patológicas", "traumáticas", "por fatiga de marcha o estrés" y "obstétricas".
Exposición[editar]
Dependiendo de si el punto de fractura se comunica o no con el exterior, se clasifican en:
Cerrada: si la punta de la fractura no se asocia a ruptura de la piel, o si hay herida, ésta
no comunica con el exterior.
Abierta: si hay una herida que comunica el foco de fractura con el exterior, posibilitando a
través de ella, el paso de microorganismospatógenos provenientes de la piel o el exterior.
Localización en el hueso[editar]
Según su ubicación en el hueso, se clasifican en:
Fractura epifisiaria, ocurre en el tejido óseo esponjoso del extremo articular de un hueso,
la epífisis, usualmente lugar de inserción de la cápsula articular y ligamentos
estabilizadores de la articulación.
Fractura diafisiaria, ocurre en la diáfisis ósea, muchas veces son lugares con poca
irrigación sanguínea.
Fractura metafisiaria, ocurre en la metáfisis ósea, usualmente muy bien irrigada.
Localización en el cuerpo humano[editar]
Según el hueso afectado se denominan:
Fractura craneal
Fractura vertebral
Fractura clavicular
Fractura escapular
Fractura humeral
Fractura cubital
Fractura radial
Fractura carpiana
Fractura metacarpiana
Fractura falanges
Fractura costal
Fractura esternal
Fractura sacra
Fractura coxigea
Fractura de cadera
Fractura femoral
Fractura rotuliana
Fractura tibial
Fractura peronea
Fractura del tarso
Fractura metatarsiana
Gravedad[editar]
Si la fuerza traumática es de poca intensidad, la fractura producida puede ser poco perceptible. En este caso se suele hablar de fisura o fractura de trazo capilar. Si el rasgo de la fractura secciona el hueso, es completa, y si se produce un desplazamiento de alguno de los huesos se denomina fractura con desplazamiento, la cual implica complicadas operaciones para su cura. En el caso de que la sección del hueso no llegue a ser total, se denomina fractura incompleta.
Enfermedades asociadas[editar]
Cuando una fractura se produce en un hueso afectado por una enfermedad se habla de fractura en hueso patológico. Las enfermedades más comunes que pueden afectar a los huesos son:
Enfermedades del metabolismo calcio-
fósforo: hiperparatiroidismo, raquitismo, osteomalacia
Enfermedades del sistema endocrino: hipertiroidismo y síndrome de Cushing
Patologías óseas: osteopenia, osteoporosis y osteogénesis imperfecta
Neoplasias: cáncer óseo primario
Etiología[editar]
En general, la fractura se produce por la aplicación de una fuerza sobre el hueso, que supera su resistencia elástica, en cuanto al mecanismo de aplicación de dicha fuerza sobre el foco de la fractura, podemos clasificarlas:
Por traumatismo directo, en las cuales el foco de fractura ha sido producido por un golpe
directo cuya energía se transmite directamente por la piel y las partes blandas. Por
ejemplo, el golpe de un martillo sobre un dedo, fracturando la falange correspondiente. En
esta misma clasificación se encuentran las fracturas producidas como consecuencia de
una caída, en las cuales el hueso es el medio de transmisión de la acción de la fuerza y el
suelo u otro elemento contundente es el elemento que reacciona, superando la resistencia
ósea.
Por traumatismo indirecto, en las cuales el punto de aplicación de la fuerza está alejado
del foco de fractura. En este caso, las fuerzas aplicadas tienden a torcer o angular el
hueso. Por ejemplo, la caída de un esquiador, con rotación de la pierna, produce una
fractura a nivel medio de la tibia y el peroné, estando las fuerzas aplicada a nivel del pie
fijo y de todo el cuerpo en rotación y caída.
Si la fuerza es aplicada paralelamente al eje de resistencia habitual del hueso, como
lo que ocurre en las caídas de altura de pie sobre las vértebras, resultando en una
compresión del hueso, acortándolo, se denominan fractura por aplastamiento.
Si la fuerza es aplicada sobre un punto de sujeción de estructuras tendoligamentosas,
desgarrando un trozo del hueso, se denomina fractura por arrancamiento.
Por fatiga, también denominadas espontáneas, son aquellas en que la fuerza es
aplicada en forma prolongada e intermitente en el tiempo. Por ejemplo, la fractura de
marcha que se produce en algunos atletas o reclutas del ejército, que se produce en el pie
(a nivel del segundo metatarsiano)
En niños[editar]
Las fracturas en niños y adolescentes tienen varias características que las distinguen de las que se presentan en adultos. En comparación con el hueso maduro de los adultos, el hueso en crecimiento tiene un coeficiente de elasticidad mayor, debido a su particular composición histológica. Esta elasticidad condiciona la aparición de fracturas que no se acompañan de ruptura completa del hueso en el foco de fractura. Debido a que no existe una ruptura completa, los síntomas observados en muchas fracturas en niños suelen ser de menor intensidad que los que se ven en adultos.
Existen diversos tipos de patrones de fractura exclusivos del hueso en crecimiento de los niños y adolescentes:
En "tallo verde": El hueso está incurvado y en su porción convexa se observa una línea de
fractura que no llega a afectar todo su espesor. En su porción cóncava el hueso
solamente se encuentra deformado.
En "botón o torus": La corteza del hueso se fractura solamente en uno de sus lados,
deformándose sobre sí misma.
Deformación plástica: La diáfisis del hueso lesionado se incurva, sin que exista una
fractura lineal que pueda observarse en radiografías. Sin embargo, sí se puede observar
ruptura de las trabéculas óseas al microscopio.
El tratamiento de las fracturas en niños suele ser más sencillo y tiene en general mejores resultados que en adultos, debido a la alta capacidad de regeneración y remodelación del esqueleto en crecimiento.
Anatomía patológica[editar]
La fractura de un hueso comprende habitualmente la destrucción de la continuidad del periostio, el tejido óseo propiamente dicho y el endostio.
Cuadro clínico[editar]
Los siguientes son los signos y síntomas más habituales de una fractura:
1. Dolor.(hasta shock neurogénico)
2. Impotencia funcional.
3. Deformación.
4. Pérdida de los ejes.
5. Equimosis.
6. Crépito óseo.
7. Movilidad anormal.
8. Hemorragia (hasta shock hipovolémico)
Tratamiento[editar]
En caso de fractura, si no se es médico o no se ha diagnosticado el problema, lo mejor que puede hacerse es entablillar el miembro (brazo, por ejemplo) con algo moldeable como cartón o madera.
El manejo de la fractura es en general el mismo, es decir:
Inmovilizar
Reducir
Rehabilitar
La forma en que se realiza cada uno de estos pasos es el que varía, variando desde los métodos ortopédicos hasta quirúrgicos (de una resolución mucho más rápida, pero de mayor costo y con requerimientos de material técnico-humano mucho más elevados).