Diagnóstico de la sustentabilidad agrícola del cultivo del durazno en ...

[ ROSTROS Y CAMINOS DE LOS MOVIMIENTOS INDÓGENAS EN MÓXICO ]

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SOCIEDADES RURALES, PRODUCCIÓN Y MEDIO AMBIENTE AÑO 2006 VOL. 6 NÚM.12

Resumen. A pesar de que la agricultura impacta significa-tivamente los recursos naturales y el ambiente, es un sectorclave para la reducción del hambre y la pobreza. La FAO vis-lumbra como reto inaplazable desarrollar una agricultura sus-tentable para satisfacer las demandas de alimentación quesurgirán en los próximos 25 años. La agricultura sustentablesatisface estas necesidades, mejora la calidad de vida de lagente, protege la integridad de los sistemas naturales, y eseconómicamente rentable. Transitar hacia ella involucracambios relacionados con estilo de vida, prácticas de ma-nejo agrícola y políticas institucionales. En este contexto, elpropósito de este trabajo es hacer un diagnóstico de lasustentabilidad agrícola del cultivo del durazno en el munici-pio de Tetela del Volcán. La importancia de esta investiga-ción radica en determinar si existen o no amenazas a lasustentabilidad, derivada de un cultivo económicamente ren-table, para usarlas como base del diseño de nuevas estrate-gias para el cultivo del durazno en la agenda ambiental local.

ARTÍCULOS DE INVESTIGACIÓN

Diagnóstico de lasustentabilidad agrícola delcultivo del durazno en Tetela

del Volcán, estado de Morelos,México

Juan Manuel Chávez Cortés1

y Marta Magdalena Chávez Cortés1

1 Departamento El Hombre y su Ambiente, Universidad AutónomaMetropolitana-Xochimilco.

[ FRANCISCO LÓPEZ BÓRCENAS ]

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Palabras claves: Sustentabilidad agrícola, indicadores, diag-nóstico.

Abstract. Eventhough agriculture has a significant impact onnatural resources and environment; it is a key sector for hungerand poverty decrease. FAO considers developing a sus-tainable agriculture as an undeferable challenge to meet fooddemands for the next 25 years. Sustainable agriculture meetsthese demands, enhances quality of life, protects naturalsystems integrity, and it is economically profitable. Movingtowards it involves changes related to life styles, agriculturalmanagement practices and institutional policies. In thiscontext, the objective of this paper is to make a diagnosisregarding agricultural sustainability of peach crop in Teteladel Volcán municipality. The significance of this research is indetermining if there exist or not threats against sustainability,delivered from an economically profitable crop, to be usedas a basis to design new strategies for peach cultivation, whichcan be included in the municipal agenda.

Key words: Agriculture sustainability, diagnosis.

1. Introducción

La agricultura tiene un impacto significativo sobre losrecursos naturales y el ambiente. Es responsable del 70%del uso de agua dulce, y cerca del 40% del uso del sueloen el planeta (FAO, 2002). Las prácticas agrícolas pue-den aumentar o reducir la diversidad genética de plan-tas y animales, dependiendo de las estrategias demanejo que se elijan. Además, juega el papel de fuentey reservorio de los compuestos químicos que provocanel efecto invernadero. A pesar de todo esto, es un sec-tor clave para la reducción del hambre y la pobreza.

DIAGNÓSTICO DE LA SUSTENTABILIDAD AGRÍCOLA DEL CULTIVO DEL DURAZNO...


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En términos de su expansión, la FAO proyectaun aumento en la demanda mundial de alimentos dealrededor del 60% para el año 2030. Muchas de las nue-vas demandas y las necesidades de mayor producciónse darán en los países en desarrollo como México. Tam-bién se anticipa que cerca del 20% de la producciónadicional provendrá de la expansión de tierras para elcultivo, el 10% de un aumento en la frecuencia de cose-chas por año, y el 70% de un mayor rendimiento de lasmismas. Este organismo internacional plantea que elreto para satisfacer esta demanda mundial de alimen-tos en los siguientes cinco lustros, debe ser un mayor ren-dimiento con un impacto negativo mínimo sobre elmedio ambiente. En otras palabras, se requiere del de-sarrollo de una agricultura sustentable. Este artículo abor-da este tema.

Como todos los campos insertados en un mar-co de sustentabilidad, la agricultura sustentable, comotérmino, se ha usado de maneras muy diferentes tantoen las publicaciones científicas como en los medios decomunicación, por lo que su significado se consideratodavía un debate actual. No obstante, se distinguentemas comunes a estas interpretaciones como son: laproductividad estable, en el largo plazo, de plantas yanimales; el mantenimiento y mejora de la calidad am-biental y la integridad ecológica; y la viabilidad socio-económica. Se asume además, que estos tres aspectosdeben coincidir para transitar hacia una agricultura sus-tentable. La visión a lograr es la de un sistema agrícolaque sea ecológicamente sustentable, pues de lo con-trario, no podría subsistir en el largo plazo y, por lo tan-to, no ser productivo y rentable.

En este sentido, un sistema debe ser producti-vo y rentable en el largo plazo, o no podría sostenerseeconómicamente (independientemente de su relevan-cia ecológica). Finalmente, esta estrategia productiva

CHÁVEZ CORTÉS, JUAN MANUEL Y CHÁVEZ CORTÉS, MARTA MAGDALENA


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debe competir satisfactoriamente con otras opcionesque los productores tienen a su alcance. Es decir, el sis-tema debe ser aceptado por los productores como al-ternativa viable (Altieri, 1987; Ikerd, 1990; Stenholm yWaggoner, 1990).

En este contexto, el propósito de este trabajo eshacer un diagnóstico desde la perspectiva de lasustentabilidad agrícola, del cultivo del durazno en elmunicipio de Tetela del Volcán. Un cultivo de buen rendi-miento económico en una región deprimida, pero cuyoauge ha afectado otros recursos regionales como la can-tidad y calidad del agua, y la superficie forestal. Asimis-mo, ha dado lugar a impactos ambientales derivadosde los fertilizantes, pesticidas y fitohormonas empleadas.La idea central en este trabajo es identificar una serie deindicadores de sustentabilidad agrícola y evaluar el des-empeño del cultivo del durazno a luz de estos indicadores.En esta investigación se aplica el enfoque de ecosistemay la evaluación de impacto ambiental como enfoquesteóricos para desarrollar el diagnóstico.

La importancia de esta investigación radica endeterminar las amenazas a la sustentabilidad regional de-rivada de un cultivo económicamente rentable. Este diag-nóstico puede servir como base para ubicar la necesidadde diseñar nuevas estrategias para el cultivo del duraz-no en la agenda ambiental regional. También será deutilidad para que los otros actores sociales afectados seincluyan en las decisiones sobre el cuidado de la cali-dad de su ambiente y sobre los aspectos financieros ylegales del manejo de sus recursos.

2. La agricultura sustentable

El uso contemporáneo del término agricultura sustenta-ble es relativamente reciente y tiene como antecedentea la agricultura orgánica. De hecho, la frase “agricultu-



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ra sustentable” se usó por primera vez a finales de ladécada de los 70 (Rodale, 1990, en Neher, 1992).

Si bien la defensa por una agricultura sustenta-ble se ha vuelto universal, el acuerdo sobre lo que serequiere y las estrategias para lograrla no lo es. Confor-me más partidarios se suman al esfuerzo de la agricultu-ra sustentable, las percepciones sobre lo que define lasustentabilidad en la agricultura se han multiplicado(Gold, 1999). De hecho, un aspecto que marca la ten-dencia en la evolución de este concepto es la nociónde que no hay una fórmula precisa que se pueda apli-car a todas las situaciones (Stenholm y Waggoner, 1990;Neher, 1992).

Dentro del debate conceptual, la SociedadAmericana de Agronomía define a la agricultura susten-table como aquélla que en el largo plazo, promueve lacalidad del ambiente y de los recursos base de los cua-les depende la agricultura; provee las fibras y alimentosnecesarios para el ser humano; es económicamente via-ble; y mejora la calidad de vida de los agricultores y lasociedad en su conjunto. Además, debe basarse en en-foques holísticos que integren el aspecto cultural, involu-crando el conocimiento nativo y de las comunidadespara su desarrollo (Giampietro y Bukkens, 1992; Flora,1995). De esta manera, se entiende que la agriculturasustentable debe ser viable ambiental y socialmente, yque además, a nivel económico, pueda contribuir amejorar los ingresos de los productores, dando comoresultado un incremento sustancial de la producciónde alimentos a bajo costo.

Existen opiniones como la de Farshad y Zinck(1993) quienes establecen que los factores que afectanla sustentabilidad agrícola pueden ser de naturalezabiofísica, social, económica, técnica, institucional ocultural. Por lo que una definición general de la misma,incluye elementos con el mantenimiento de la fertilidad



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del suelo y su productividad en el largo plazo. De allíque en su definición se incluyan aspectos tales como elrégimen de rotación de cultivos; el control integral deplagas; los métodos de cultivo; el control de la conta-minación ocasionada por pesticidas y fertilizantes; lasestrategias de manejo (selección de híbridos y varieda-des, costos bajos en insumos, etc.); las necesidades hu-manas (demandas por alimentos y fibras básicos); laviabilidad económica; la aceptabilidad social; la via-bilidad ecológica; el horizonte de tiempo (adecuaciónde largo plazo en vez de corto); y los valores éticos queimpliquen la satisfacción de metas espirituales y mate-riales de la humanidad.

En otra visión, la agricultura sustentable puedeser reconocida por cinco aspectos fundamentales: 1) Suorientación hacia la continuidad cualitativa y cuantita-tiva en el uso de un recurso. En acuerdo con Wilkinson(1973), esto implica construir un patrón y una tasa deuso de los recursos que el ambiente pueda sostener enforma indefinida. 2) Otro aspecto tiene que ver con sudinámica, en tanto que este tipo de agricultura estáacoplada a un uso del suelo que refleja las necesidadescambiantes de la población y los cambios en el desa-rrollo económico. 3) Por su significado como relaciónestable y satisfactoria entre la producción agrícola y elconsumo (Barker y Chapman, 1990). Es decir, la susten-tabilidad en la agricultura también implica un estadode equilibrio entre las actividades humanas, las cualesse ven influidas por la conducta social, el conocimientoadquirido, la tecnología aplicada y la producción derecursos. 4) Por su búsqueda por significar un bienestarcontinúo en la sociedad. En este sentido, la equidad setransforma en una medida de cómo se benefician losseres humanos al aplicar un sistema productivo. 5) Entérminos de manejo, se le ve como la respuesta a lasprácticas agrícolas que han causado contaminación y



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pérdida de recursos. Por ello, sus propuestas implicanque los recursos para la producción de alimentos (sue-lo, agua y biota) sean manejados apropiadamente, detal forma que las prácticas aplicadas no causen degra-dación y contaminación (Farshad y Zinck, 1993).

Una visión más operativa es la de Altieri (1989),quien piensa que un modelo de agroecosistema sus-tentable persigue el desarrollo de una tecnología apro-piada capaz de transformar el manejo de recursosagrícolas en un bienestar sustentable para todos. Porlo general la sustentabilidad se alcanza cuando lasmedidas de conservación compensan la degradaciónde los suelos. Este autor, siguiendo un enfoque de eva-luación de impactos ambientales (EIA), propone el usode los siguientes criterios para su diagnóstico: 1) di-versificación en tiempo y espacio, 2) estabilidad diná-mica, 3) promoción de la conservación y regeneraciónde recursos naturales, 4) productividad y autosuficien-cia, 5) estar basada en un buen potencial económi-co, 6) uso de tecnología adaptable y aceptada socialy culturalmente, y 7) potencial de autopromoción yprovisión de autoayuda.

Estos son los criterios que serán utilizados paraanalizar el caso de estudio de Tetela del Volcán, los cua-les se discuten brevemente en la siguiente sección.

3. Criterios de análisis

Diversificación en tiempo y espacio

Este criterio tiene que ver con dos atributos recomenda-bles en la agricultura sustentable, la diversidad de culti-vos que permitan un mejor manejo de los nutrientes delsuelo con base en una rotación temporal de los mis-mos, y otra diversidad, apoyada en las asociacionesentre diferentes plantas. Ambos atributos buscan medir



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la aplicación estratégica de las prácticas agrícolas parael mantenimiento y la mejora de la base de nutrientesdel suelo. El primer atributo se mide generalmente porindicadores que permitan determinar la naturaleza delas políticas para el futuro que busquen mantener ymejorar la fertilidad del suelo. Para el segundo, losindicadores buscan evaluar las estrategias de cultivobasadas en asociaciones de plantas seguidas por losagricultores con el mismo fin.

Estabilidad dinámica

El criterio de estabilidad dinámica tiene que ver con elmantenimiento en el largo plazo de la productividadagrícola, la fertilidad del suelo y el flujo constante de bie-nes agrícolas al mercado. Es por ello que los indicadorespara su evaluación se den en tres dimensiones que sonmedidas por su persistencia como son: tiempo de per-manencia en periodos largos de la producción agrícola,de la calidad en nutrientes del suelo y del flujo de alimen-tos y fibras para la industria y el consumo.

A su vez, incluye la medición de factores rela-cionados con la flexibilidad de la producción agrícolade acuerdo con las demandas del mercado local, re-gional o nacional. Por lo general, se estima la veloci-dad de respuesta y adaptación a demandas dealimentos y fibras derivadas del consumo local, regio-nal o nacional.

Promoción de la conservación y regeneración derecursos naturales

Este criterio se centra en las políticas y estrategias segui-das por los agricultores para la conservación de la baseregional de recursos para la agricultura. Por lo generalse centra en la conservación del agua regional como



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insumo imprescindible para las actividades agrícolas. Unsegundo aspecto de interés reside en la conservaciónde los bosques regionales como productores de suelo yreguladores del ciclo hidrológico regional. Finalmente,en una escala menor, en las estrategias para mantenervida silvestre en los bordes de las áreas cultivadas. Deigual manera que el primer criterio, su estimación se basaen indicadores que permitan determinar la naturalezade las políticas para el futuro que desarrollan los pro-ductores agrícolas para la conservación y regeneraciónde recursos naturales.

Productividad y autosuficiencia

Este criterio evalúa la contribución de la productividadagrícola a la satisfacción de las necesidades locales yregionales de alimentos y fibras, en donde el énfasis seconcentra en la contribución de esta producción a laautosuficiencia local, regional o nacional. Por lo gene-ral, se estima la proporción de su contribución a las de-mandas, primeramente locales, en seguida regional y,finalmente, nacional.

Buen potencial económico como base

Este criterio se relaciona con la rentabilidad económicade la productividad agrícola. Por lo general, se mide através de medidas derivadas del análisis costo-beneficio.

Tecnología adaptable y aceptada socialy culturalmente

En este criterio se busca evaluar la clase de tecnologíaempleada en la productividad agrícola desde la pers-pectiva de su aceptación por parte de los productores.Por lo general, se estima por su grado de dispersión, desde



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su aplicación inicial; o bien, por el grado de estanda-rización en su empleo en el ámbito local.

Potencial de autopromoción y provisión de autoayuda

Este criterio estima los mecanismos subyacentes en ladispersión de prácticas y tecnologías agrícolas social yculturalmente aceptadas en los ámbitos local, regionalo nacional. En general, se estima a través de la existen-cia de canales formales y no formales que contribuyena su dispersión.

3. Área de estudio

Tetela del Volcán se ubica en los18°57' 48’’ de latitudnorte y los 99°15’12’’ de longitud oeste, a una altura de2,040 metros sobre el nivel del mar. Al norte colinda conel Estado de México; al sur con Zacualpan de Amilpas;al este con el estado de Puebla; y al oeste con el muni-cipio de Ocuituco. El municipio tiene una superficie de98,518 kilómetros cuadrados, cifra que representa el 1.99% el total del Estado de Morelos. De acuerdo a cifrasrecientes, el municipio dedica 3,035 hectáreas para usoagrícola y 6,602 hectáreas para uso forestal repartidasen 2,756 unidades de producción. El área de las unida-des de producción rural suma 3,949 ha divididas en 2,987ha de temporal, 99 ha de riego, 841 ha de pastos natu-rales o agostaderos, 18 ha de selva y 4 ha de otros usos.Los principales cultivos son el maíz de grano, jitomate,tomate de cáscara, frijol, aguacate, y durazno. La po-blación económicamente activa de concentra en pri-mer lugar en el sector primario (agricultura y ganadería)con un total de 2,550 habitantes, seguido por el sectorsecundario (industrial) con 200 habitantes y el sector ter-ciario (turismo, comercio y servicios) con 566 habitan-



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tes. La población reportada en el último censo del 2000fue de 16,420 habitantes (Gobierno del estado de Morelos2004; Wikipedia, 2004).

El principal recurso hidrológico del municipio esla corriente de la barranca del Amatzinac, que nace enlas faldas del volcán Popocatépetl, tiene un caudal per-manente todo el año y su cuenca hidrológica abarcatodo el municipio. La precipitación pluvial es de 2,341.63milímetros por año y el periodo de lluvias es de junio aoctubre.

4. Materiales y métodos

Selección de la estrategia de investigación

Abordar el diagnóstico de la sustentabilidad en la agri-cultura lleva necesariamente a la evaluación de proce-sos productivos dentro de un contexto. Por ello, se requierede estrategias de investigación que sean apropiadas paraanalizar problemas de la vida real, que den privilegio alos enfoques globales u holísticos, y que den lugar a pro-puesta de carácter práctico a los problemas que anali-zan. Por todo lo anterior, la estrategia seleccionada paraesta investigación fue la de estudio de caso. Entre otrasrazones que justifican esta selección destacan la de quepermite estudiar un fenómeno como ocurre naturalmen-te y admite la posibilidad de aplicar diferentes métodosde investigación y múltiples fuentes de datos.

Para el caso del cultivo de durazno en Teteladel Volcán, se añaden las razones de conveniencia de-rivadas del conocimiento y experiencia de trabajo dela región del Iztaccíhuatl-Popocatépetl por parte de losautores.



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Instrumento de investigación y recopilación de datos

Si el cultivo del durazno en Tetela del Volcán amenazao no la sustentabilidad local es una pregunta que sólopuede responderse por medio de un análisis de carác-ter empírico. Para llevarlo a cabo, primero se hizo unarevisión de literatura sobre agricultura sustentable conel propósito de identificar los criterios que servirían comobase para referir el análisis del caso de estudio. Des-pués, se colectó información proveniente de entrevis-tas cara a cara con informantes clave.

Se condujeron un total de 15 entrevistas perso-nales de naturaleza semi-estructurada, siguiendo las re-comendaciones de Arksey y Knight (1999). Las entrevistasse estructuraron en función de los criterios de juicio – yaestablecidos en la Sección 2 –, sobre los cuales se que-ría obtener información. Las preguntas fueron abiertaspara dar oportunidad a los entrevistados para agregartoda información que consideraran relevante (Blaxteret al., 1998; Arksey y Knight, 1999).

Los informantes se eligieron tomando en cuentala contribución que podían hacer en torno al tema deinvestigación y su entendimiento de la problemática. Esasí que se entrevistó al responsable de la integradora lo-cal denominada FRUFIDET S.A. de C.V., a los responsablesde las integradoras regionales FRUFIMOR, C.S. de R. L. enOcuituco; Unión de Fruticultores en Tlacotepec eINTERCOMEFRON S.A de C.V. en Zacualpan de Amilpas; alRegidor de Desarrollo Agropecuario del ayuntamiento deTetela del Volcán, y a 10 pequeños productores de duraz-no de la región durante la feria que se celebra cada año.

Análisis de datos

Se siguió un enfoque de expertos para analizar las res-puestas de las entrevistas. El propósito de este análisis



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fue el de identificar declaraciones verbales que permi-tieran hacer inferencias sobre los criterios que se toma-ron como referencia para diagnosticar el estado de lasustentabilidad agrícola del área de estudio.

Se siguieron tres pasos fundamentales para elanálisis cualitativo (Tress y Tress, 2003; Yuksel, 2003). 1) Dosinvestigadores compartieron sus registros e impresionessobre las entrevistas para obtener un panorama gene-ral del material colectado. 2) Los investigadores clasifi-caron los aspectos que surgieron de la recurrencia depatrones en las respuestas, y que eran alusivos a los cri-terios planteados. 3) El paso final consistió en la inter-pretación de los hallazgos. Se adoptó una herramientagráfica para representar los juicios de valor de los exper-tos en relación al cultivo del durazno, y se acompañóde una discusión a detalle de los mismos.

5. Resultados y discusión.

5.1 El contexto del cultivo del duraznoen Tetela del Volcán

El cultivo del durazno representa la alternativa de pro-ducción agrícola con los mejores rendimientos econó-micos en el municipio y la región. Asimismo, ha dadolugar a la búsqueda de formas de organización tantopara mantener y mejorar la producción, como paraatender las demandas del mercado regional y nacio-nal. La mayoría de los fruti cultores están organizadosen lo que llaman una integradora, cuya misión es ofre-cer al fruticultor un centro donde pueda recibir asesoríasobre las labores de cultivo, selección y almacenamien-to, así como el de agregar valor comercial a su produc-to sin la necesidad de intermediarios. Para lograrlo, laintegradora busca regular la calidad del durazno y suprecio entre el productor y el consumidor.



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En Tetela del Volcán existe una integradoradenominada FRUFIDET S.A. de C.V., y en la región, existenotras tres: FRUFIMOR, C.S. de R. L. en Ocuituco; Unión deFruticultores en Tlacotepec e INTERCOMEFRON S.A de C.V.en Zacualpan de Amilpas. La organización por integra-doras es relativamente reciente en la región, pues datadel 2001. De ellas, FRUFIDET es la integradora más jovenya que se fundó en el 2003, y está integrada por 320 pro-ductores agrupados en 20 sociedades de producciónrural. Al igual que las otras tres integradoras, FRUFIDETpretende convertirse en una empresa que proporcionealtos beneficios económicos para sus asociados inde-pendientemente del municipio donde se ubica. De igualmanera, las integradoras pretenden mejorar la cantidady calidad del producto por medio del uso de tecnolo-gías que cubren todo el ciclo productivo, desde la plan-tación de los árboles hasta la puesta en los mercadoslocal, regional y nacional. Su propósito es puramenteeconómico: obtener mayores ganancias que contribu-yan a mejorar la calidad de vida de los productores.

El grado de consolidación y el tiempo que lle-van laborando como integradoras ha influido en sucapital financiero y en su infraestructura. Es así queFRUFIDET es la única integradora que aún no tiene cá-mara fría. En cambio, FRUFIMOR es la única que cuentacon vehículos propios para el transporte de durazno.Además de dos empacadoras y seleccionadoras de ro-dillos que cuentan con un sistema de agua para lavar,secar y evitar que la fruta sufra daños. Por otro lado, laUnión de Fruticultores, en la búsqueda de maximizar lasganancias ha adoptado formas alternativas de apro-vechar el durazno de más baja calidad o magullado,por lo que han adquirido maquinaria para la elabora-ción de yogurt de durazno.

Para mejorar la calidad, cantidad y comer-cialización del producto, las integradoras han obteni-



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do asesoramiento técnico de personal calificado pro-veniente de diferentes instituciones gubernamentales yparticulares. El Colegio de Posgraduados en Chapingo,es una de las instituciones que más apoyo les han brin-dado en el manejo del cultivo, la aplicación deagroquímicos, la aplicación de compensadores de fríoy realizando estudios referentes a la fertilidad del suelo.Por otra parte, la Secretaria de Desarrollo Agrícola hacontribuido con apoyos económicos, asesoría técnicapara el manejo del cultivo, la comercialización del pro-ducto y agroquímicos a bajo costo. Para el caso parti-cular de FRUFIDET, ésta hizo un convenio con el estadode Chihuahua para un intercambio tecnológico, tantoen el manejo del cultivo de durazno como en la comer-cialización del producto. Como puede verse, las inte-gradoras proporcionan asesoría técnica sobre manejodel cultivo y su comercialización, además del uso de lainfraestructura para seleccionar, empaquetar y almace-nar el producto, a los productores independientes quesoliciten estos servicios. Es importante señalar que estasasesorías tienen un costo.

Para formar parte de una integradora se pidecomo requisito a los productores el pago de cuotas deingreso que ascienden hasta $3,000, además de adqui-rir una acción con valor de $1,000, y ponerse al corrientecon los pagos mensuales que se han hecho hasta elmomento de la inscripción. En acuerdo con las opinio-nes de muchos fruticultores no asociados a las integra-doras, estas cuotas se ven como obstáculos para queestén dispuestos a formar parte de ellas, ya que hay quie-nes no tienen una producción que reditúe suficientes ga-nancias para cubrir las cuotas y sus gastos familiares.

La desconfianza de los productores hacia suspares es otro obstáculo para formar parte de estasintegradoras. Por lo que muchos de ellos no aceptan el



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requisito de estar integrados dentro de una Sociedadde Producción Rural (SPR).

Por todo lo anterior, la comercialización deldurazno se hace no sólo por medio de las integradoras,sino también mediante un importante mercado local,al cual llegan compradores de la Central de Abastos dePuebla y del D.F. principalmente.

5.2 Diagnóstico

El cuadro 1 presenta los juicios de valor que los expertoshacen sobre el cultivo del durazno en Tetela del Volcán.

Como puede observarse en este cuadro, sepresenta una total asimetría entre los factores relaciona-dos con el desarrollo económico y los relacionados conla conservación de la naturaleza. Estos últimos se califi-can como de carácter marginal e inaceptable, predo-minando este último en los factores de promoción de laconservación y regeneración de los recursos naturales, yen la diversificación en tiempo y espacio. Por el contra-rio, los relacionados con el desarrollo económico, la ca-lificación predominante es la de bueno. A continuación,se discuten los argumentos que dieron origen a las califi-caciones otorgadas que sustentan el diagnóstico.

Diversificación en tiempo y espacio

En este indicador el cultivo del durazno no califica comouna alternativa agrícola hacia la sustentabilidad. En laregión, la práctica agrícola predominante es como mo-nocultivo bajo un esquema intensivo, en donde no sepermite el establecimiento de ningún otro tipo de plan-ta. Este esquema intensivo promueve prácticas dedeshierbe, manuales o con herbicidas, a fin de erradi-car cualquier otro tipo de vegetación que de maneranatural se pudiese asociar con los árboles. Durante el



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tiempo de estudio, no se identificó un ejemplo local quebuscara el empleo de asociaciones con otras plantaspara mantener la fertilidad del suelo. Por otro lado, supredominancia como cultivo con elevado valor comer-cial, pone en riesgo la diversidad en los usos del sueloen el municipio y la región. El monocultivo del duraznopone en riesgo también la existencia de otros cultivos, ylas demandas por una mayor superficie para su expan-sión amenaza la existencia de los bosques y las fuentesde agua regionales. No sería nada extraño encontraren pocos años, un paisaje regional monótono caracte-rizado por un territorio cubierto de árboles de durazno.

Cuadro 1. Evaluación del cultivo de durazno en Tetela delVolcán de acuerdo a los criterios que definen la

sustentabilidad agrícola


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oicapseyopmeitnenóicacifisreviD

acimániddadilibatsE

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Estabilidad dinámica

El cultivo del durazno da lugar a una paradoja local.Por un lado, representa uno de los pocos cultivos exitososdesde la perspectiva económica, en una región en don-de no abundan este tipo de ejemplos. Pero por otro, noes un cultivo destinado a satisfacer las necesidades bá-sicas locales o regionales de alimentos o fibras. Sin em-bargo, sí socializa los costos asociados al uso del aguadulce regional, a su contaminación, y a la de los suelos.También aquellos asociados al aumento de la eroda-bilidad regional, derivadas del empleo de agroquímicosen su estrategia de producción forzada. Esta prácticacompletamente tecnificada y dependiente en su totali-dad de entradas externas (fertilizantes, fitohormonas,herbicidas, podas selectivas, deshierbe, y otros) para laobtención de dos cosechas al año, pone en duda suestabilidad dinámica ya que depende absolutamentede estas entradas de energía; así como del valor delproducto en el mercado. Esta dependencia es una fuentede incertidumbre para su permanencia temporal, puesla continuidad del cultivo queda supeditada a premisaspoco probables como son: la estabilidad en los costosde los insumos, el desarrollo pobre de plagas cada vezmás resistentes a los pesticidas, la disponibilidad conti-nua de agua en los manantiales –cada vez más limita-da por la desaparición de bosques para favorecer sucultivo–, una disminución en los precios relativos del pro-ducto, y la falta de exigencias por parte del sector saludrespecto a la presencia de agroquímicos en el durazno,entre otras.

A pesar de lo anterior, este cultivo contribuyede manera importante a abastecer las demandas na-cionales de durazno. Desde el punto de vista regional,la producción de Tetela del Volcán, Ocuituco y Zacual-pan de Amilpas contribuye tanto al abastecimiento de



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los mercados de las ciudades de México y Monterrey,como a la satisfacción de las demandas de envasadoresde fruta en conserva de Aguascalientes. En este senti-do, se podría afirmar que la producción regional ha lo-grado estabilizar un flujo constante de un productoagrícola a diferentes mercados. En términos locales, larespuesta a las demandas del producto en los ámbitosregionales y nacionales ha sido sumamente rápida. Lasuperficie bajo cultivo está en constante crecimiento,actualmente, la superficie municipal sembrada con du-razno ya representa casi un tercio (31.34 %) de la superfi-cie sembrada en el estado de Morelos con este cultivo.

Promoción de la conservacióny regeneración de recursos naturales

Este es uno de los puntos débiles, desde la perspectivade la sustentabilidad, del cultivo local del durazno. Lasuperficie sembrada con durazno reportada por el INEGI-Gobierno del estado de Morelos (2001) para el munici-pio es de 239 ha bajo producción temporal. Por su parte,Sotelo (2004) reporta una superficie sembrada de 1,150ha, de las cuales 850 están bajo producción temporal y300 bajo producción de riego. Sin embargo, en entrevis-tas realizadas a técnicos de las integradoras se reportauna superficie de 2,500 ha bajo producción de riego (véa-se cuadro 2).

Siguiendo los datos de INEGI-Gobierno del esta-do de Morelos (2001) y Sotelo (2004), al comparar el cre-cimiento de la superficie agrícola entre los años 2001 y2004, resalta un aumento en la superficie de cultivo bajotemporal de 239 ha a 850 ha, lo que significa un creci-miento del 350%. Por otro lado, con base en los datosque proporciona los técnicos de las integradoras respectoal cultivo bajo riego, se reconoce un aumento significa-tivo, para el mismo periodo, de 300 ha a 2,500, que re-



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presentan un aumento porcentual de 833% (Cuadro 2).Dado que el municipio se encuentra ubicado en unazona con bosques abundantes, estos aumentos de lasuperficie agrícola han sido a costa del suelo forestal. Esdecir, se han perdido alrededor de 2,500 ha de bosque,considerando que una pequeña porción de las tierrasen las que ahora se siembra durazno antes se sembra-ban con otros cultivos.

Cuadro 2. Superficie sembrada y cosechada y volumen dela producción de durazno 2001 y 2004,

de acuerdo con distintas fuentes

Otro punto crítico en este criterio es el manejo del agua.El cultivo del durazno ha monopolizado el empleo delagua dulce de la región y contribuye de manera impor-tante a la pérdida de su calidad en un ámbito regional,ya que contamina con agroquímicos a los escurrimientosy mantos freáticos. El agua es un factor crítico para estecultivo y dentro de su desarrollo existen varias etapasimportantes donde el árbol requiere una mayor canti-dad de este líquido. Una de ellas la constituyen los prime-ros dos años, en donde es necesario mantener el ritmode crecimiento a través de riegos ligeros cada ocho o 15días. Otras comprenden desde del amarre del fruto has-


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1002 --- 932 932 --- 148,1 148,1

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4002 003 058 050,1 043,2 474,6 418,8

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4002 005,2 --- 005,2 005,91 --- 005,91


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ta el endurecimiento del hueso. Y del cambio del colora la madurez. En estas etapas los riegos contribuyen amejorar considerablemente la calidad y cantidad delfruto. La siguiente etapa es cuando los árboles son adul-tos y requieren riegos una vez por semana, con un míni-mo de 100 litros de agua por árbol (Sotelo, 2004).

Un balance aproximado del agua utilizadapara riego sería el siguiente: si se considera una densi-dad de 615 árboles por hectárea, y una demanda deagua de 100 l por árbol a la semana, se tiene que elconsumo de agua es de alrededor de 61,500 l por sema-na por ha. Sin embargo, en el municipio de Tetela delVolcán el riego se efectúa dos veces por semana (co-municación personal de los técnicos de FRUFIDET), por loque el consumo se calcula en 123,000 l por semana porhectárea. Si se toma en cuenta este consumo y el totalde la superficie sembrada, en el municipio de Tetela delVolcán se consumen alrededor de 224,475,000 l de aguapor semana para el riego exclusivo del durazno.

Es importante mencionar que actualmente elagua que se utiliza para riego proviene de los escurri-mientos superficiales de los deshielos del Popocatépetl.El agua se conduce por gravedad por medio de unared deficiente de mangueras hacia los huertos deduraznos. Este sistema de riego fue instrumentado porlos mismos pobladores del municipio, por lo que actual-mente los fruticultores no le pagan a la Comisión Na-cional del Agua (CNA) por el agua que utilizan, faltandocon ello al artículo 51 de la Ley de Aguas Nacionales.

El riego por gravedad se realiza en terrenos dependiente suave y con suelos relativamente profundos;este se puede hacer de dos formas: riego a manta, queimplica que el agua moja toda la superficie del suelo, opor surcos. En cualquiera de las dos modalidades unaparte del agua que entra se escurre por la superficie,mientras que el resto se infiltra. Sin embargo, la capaci-



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dad de infiltración no es homogénea para todo el huer-to, lo que provoca en algunas partes encharcamientosy escurrimientos, que representan una pérdida de aguaademás de ocasionar erosión y, por lo tanto, remociónde nitrógeno (Fuentes, 1999).

Productividad y autosuficiencia

Este criterio generalmente tiene mayor aplicación a loscultivos de alimentos básicos, ya que su énfasis está enla contribución de este tipo de producción a la autosu-ficiencia local, regional o nacional. Para el caso de uncultivo comercial, como el durazno, se invierte el ordende prioridades en la contribución del cultivo para satis-facer las demandas. Primeramente se atienden las na-cionales o regionales y después las demandas locales.Como ya se expresó anteriormente, este cultivo ha teni-do una buena comercialización debido a la gran de-manda que el producto tiene en el ámbito regional ynacional. De allí, que se pueda establecer que contri-buye a satisfacer ambas demandas. Por supuesto, lademanda local queda sobradamente satisfecha.

En el municipio se realiza una producción for-zada, para la cual se utilizan gran cantidad de fertili-zantes, nematicidas, fungicidas, herbicidas, hormonasaceleradoras y homogenizadoras de floración. Este tipode producción permite obtener dos cosechas al año yse obtiene un rendimiento promedio de 13 Kg por árbolpor cosecha. Sin embargo, Sotelo (2004) menciona queeste rendimiento podría elevarse a 45 Kg por árbol si sehacen mejoras en el manejo del cultivo. Un valor aproxi-mado de la producción derivado de las entrevistas alos productores y el máximo rendimiento proyectadosegún los datos Sotelo (2004) se presenta en el cuadro 3.



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Cuadro 3. Producción actual y potencial de durazno enTetela del Volcán


etneuFeicifrepuSadarb

mes)ah(

dadisneD)ah/selobrá(

otneimidneR

lobrárop)lobrá/gk(

otneimidneR

ahcesocrop)ah/not(

nóiccudorProplatot)not(

ahcesoc

nóiccudorPoñaroplatot

sodnoc

sahcesoc)not(

)4002(oletoS

051,1036

5453.82

5.206,3502,7

sotaD

edsodaviredsatseucnesal

nocserotcudorp

005,2006

318.7

005,91000,93


30

Por otro lado, la autosuficiencia queda paten-te en dos dimensiones. Por un lado, las necesidades lo-cales de durazno para el autoconsumo son satisfechasde manera sobrada, como ya se señaló anteriormente.Por otro, el intercambio de información agrotecnológicaentre productores, asociados o no a las integradoras,ha dado lugar a una autosuficiencia de carácter regio-nal que tiende a homogeneizar las estrategias encami-nadas a la producción forzada del durazno.

Buen potencial económico como base

Este criterio se relaciona con la rentabilidad económicade la productividad agrícola. Por lo general se mide através de medidas derivadas del análisis costo-benefi-cio. Para el caso bajo estudio, la producción intensivadel durazno en Tetela del Volcán, considerando los re-sultados de las entrevistas, y dos cosechas al año, da unrendimiento de aproximadamente 39 000 toneladas alaño. El valor monetario por tonelada, es variado y de-pende de la calidad del fruto. El cuadro 4, elaboradode acuerdo con los datos de comercialización de laconcentradora FRUFIDET, para el año 2002, ilustra el va-lor del durazno por su calidad.

Derivando de este cuadro un promedio pon-derado del valor monetario por tonelada y consideran-do calidad y porcentaje del producto, se estima un valoraproximado de $15,425 pesos por tonelada de fruto.Tomando en cuenta este valor estimado y la produc-ción promedio por hectárea, calculada con base en losdatos derivados de las entrevistas a los productores, seestima que el valor monetario de dos cosechas al añopor hectárea (aproximadamente 15.6 toneladas) es de$240, 630.00. O bien, considerando el peor escenario, sólola producción de durazno de cuarta clase, daría lugara una ganancia de $141,648.00.



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Cuadro 4. Volumen y valor de la produccióncomercializada por FRUFIDET en el 2002


Fue

nte

: C

om

un

ica

ció

n p

ers

on

al

(200

4);

Sim

en

tal

(200

4).

.V.

Ce

d.A.S,n

ácloVle

daleteT

sod

avireD

ys

aniFs

aturF

ed

da

dila

Cat

urF

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M-er

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bA

nói

cc

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cey

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)%(

ad

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oT

nói

cc

ud

orp

ale

dr

ola

V)$(

noT

nói

cc

ud

orp

ale

dr

ola

V)$(

not/$

lat

oTn

ot/$l

atoT

artxEr

ep

uS01

053385,02

050,4027

033333,61

098,8935

artxE01

053070,91

005,4766

052231,51

000,3873

.a1

53007

846,61006,356

11032

012,31003,830

3

.a2

03056

126,31056,358

8002

808,01006,161

2

.a3

01071

729,21006,345

105

502,7052,063

.a4

5003

080,9001,878,3

02271,5

044,301

latoT

001025,2

005,70893

080,1084,548

41


32

Por otro lado, los costos anuales del manejodel cultivo se muestran en el cuadro 5.

Cuadro 5. Costo de insumos agroquímicos en el cultivo deldurazno (producción forzada) y de la mano de obra


otcudorP )$(ahroplaunaotsoC

setnazilitreF

ocinomaidotafsoF 05.715

oinomaedotartiN 678

oisatopedotartiN 02.141,1

)71elpirt(KPN 884

sadicitseP

adicitameN 884,1

nóihtalaM 043

nóihtaraP 213

nadoihT 083

otaotemiD 063

nonizaiD 023

aneaF 044

edalisuF 043

anilortiC 07

sortO

arboedonaM 005,1

latoT 07.275,8


33


Estos costos son relativamente bajos respectoal valor de venta de la producción por hectárea, por loque la ganancia neta que obtienen los productores as-ciende a $232,057.50 por ha por año en el escenariomedio y $133,075.50 en el escenario pesimista como semuestra en el cuadro 6. Como puede observarse, la ren-tabilidad del cultivo es muy alta ya que las gananciasexceden los costos en 27 y 15.5 veces respectivamente.

Cuadro 6. Relación costo-beneficio para la producción dedurazno en el municipio de Tetela del Volcán

Sin embargo, cabe aclarar que a pesar de este buenpotencial económico, las ganancias no se reflejan en lamejora de la calidad de vida de los habitantes del mu-nicipio. Los productores monopolizan las gananciasmonetarias y socializan los costos ambientales y socia-les de su estrategia productiva, ya que los costos delagua dulce, de la contaminación de acuíferos y del suelopor agroquímicos no son considerados en los costos deproducción. Además, la derrama de beneficios socialespor esta actividad productiva es limitada. La mayorparte de los empleos generados se da en la contrata-ción de mano de obra fuera del municipio, por ser másbarata. Lo anterior limita a esta actividad como fuentede empleo para los habitantes de Tetela del Volcán.


oturboicifeneB)oña/ah/$(

sotsoC)oña/ah/$(

aicnanaGsosepneaten)oña/ah/$(

oiranecsEoidem 00.036,042 05.275,8 05.750,232

oiranecsEatsimisep 00.846,141 05.275,8 05.570,331


34

Tecnología adaptable y aceptada socialy culturalmente

La tecnología empleada para el logro de dos cosechasal año es ampliamente aceptada, sobretodo por losproductores asociados a las concentradoras. Al volver-se socios, en forma automática se ven beneficiados conla ayuda técnica, y con las estrategias de producciónque han sido desarrolladas por el personal técnico quetrabaja para las concentradoras. La ayuda técnica vadesde el establecimiento del cultivo, el seguimiento es-tricto de un calendario que rige las actividades de riego,fertilización, deshierbe, poda, aplicación de fitohormo-nas, cosecha, almacenamiento, selección, empaque ymercadeo del producto. Los productores independien-tes, no asociados a las concentradoras, imitan muchasde las estrategias que emplean los técnicos de lasconcentradoras, pero difieren o personalizan las de al-macenamiento, selección, empaque y mercadeo delproducto. Se puede concluir que la estrategia de culti-vo esta estandarizada en el ámbito local y regional.

Potencial de autopromocióny provisión de autoayuda

En este criterio el cultivo del durazno sale bien califica-do. Las concentradoras como asociaciones de produc-tores, actúan como el canal formal que han facilitadola dispersión de prácticas y tecnologías que cubren todoel ciclo de producción agrícola. Las integradoras propor-cionan asesoría técnica referente al manejo del cultivo ysu comercialización a los productores independientesque lo soliciten, También los asesora en el uso de la in-fraestructura para seleccionar, empaquetar y almacenarel producto. Como canal informal actúa la comunica-ción personal que se da entre productores independien-



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tes, y entre ellos y los asociados a las concentradoras.Como resultado de las entrevistas a productores aso-ciados e independientes se puede afirmar que existendiversos mecanismos de autoyuda entre productores quese dan a nivel de transmisión oral.

6. Conclusiones

Dado el enfoque de manejo de recursos basado en laoferta –o también llamado “duro”– que ha caracteriza-do el cultivo del durazno en Tetela del Volcán, se con-cluye que es necesaria la formulación de un plan paradesarrollar de manera completa la sustentabilidad deeste cultivo. Desde la perspectiva contemporánea delmanejo de recursos, la cual defiende el llamado enfo-que “suave”, este plan deberá estar orientado tanto aprevenir los impactos del cultivo sobre los ecosistemas yagro-ecosistemas en una perspectiva de largo plazo,como a fomentar la gobernabilidad de este tipo de sis-tema productivo. En este sentido, las metas que se pro-pone alcanzar son: 1) la conservación del agua y el suelo,2) la internalización de los costos ambientales y socialesen la producción, 3) el cambio de valores y actitudescon respecto a los patrones de producción y 4) el ma-nejo adaptativo del agroecosistema.

La primera meta requerirá de la instrumenta-ción de tecnologías para el ahorro de agua y para elempleo de agua reciclada sin niveles tóxicos de conta-minantes, en lugar de agua dulce. También la reduc-ción en el uso de compuestos orgánicos, como primerpaso, y luego el cambio por abonos orgánicos y controlbiológico de plagas. La asociación con otros cultivosfijadores de nitrógeno, el reciclaje de abonos animalesy residuos de las cosechas, son estrategias obligadas conel fin lograr la integridad ecológica de los suelos. Tam-bién lo es la diversificación del uso de suelo, ya sea pre-



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servando áreas boscosas, o reforestando para aumen-tar la diversidad biológica y garantizar la recarga deacuíferos, lo que mejorará la disponibilidad de agua.

En lo que se refiere a la internalización de loscostos ambientales y sociales requerirá de una valora-ción de los bosques como proveedores de serviciosambientales tales como la producción de agua limpiay el control de la erosión. A su vez, deberán ser incluidoscomo parte de los costos de producción, los costos re-lacionados con los gastos ocasionados por intoxicaciónen humanos y animales ocasionados por agroquímicos,falta de agua potable y pérdida de sitios para la re-creación en contacto con la naturaleza.

La meta del cambio de valores subyace tantoen la de conservación de recursos como en la deinternalización de los costos ambientales y sociales. Estoes así porque las metas y los valores personales influyenen nuestras decisiones al determinar las preferenciassobre lo que queremos y cómo lo queremos conseguir.De aquí que la agricultura sustentable requiera del im-pulso de políticas y acciones para promover la acepta-ción de los cambios tecnológicos discutidos en lospárrafos anteriores. Y para fomentar también el cambioen las percepciones de los productores con respecto alambiente y al proceso productivo.

Con respecto a este último punto, hay que darénfasis a la importancia de la diversificación de la pro-ducción frutícola del municipio, pues existen otras espe-cies con igual potencial que el durazno (aguacate, laciruela, la granada y la manzana) que podrían cultivar-se en la zona. Su incorporación a la producción localademás de promover la diversidad del agroecosistema,evitaría que la economía del municipio se viera afecta-da en el caso de una estrepitosa caída en la produc-ción del durazno, o una baja considerable en su valorde mercado.



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Finalmente, la instrumentación del manejoadaptativo del agroecosistema implicará que el mane-jo se modifique conforme surjan nuevas situaciones deamenazas u oportunidades, en torno al cultivo del du-razno en el municipio.

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