Casa higienista

Post on 26-Jun-2015

324 views 4 download

Transcript of Casa higienista

Casa higienista

Antecedentes historicos El Movimiento higienista es un movimiento arquitectonico y

de urbanismo que predica la aplicación de las teorías higienistas.

El higienismo es una corriente que nace en la primera mitad del siglo XIX con el liberalismo, cuando los gobernantes comienzan a reparar con más detenimiento en la salud de la ciudad y sus habitantes.

La necesidad de mantener determinadas condiciones de salubridad en el ambiente de la ciudad mediante la instalación de agua corriente, cloacas, iluminación en las calles, y de poder controlar las epidemias fueron dando forma a esta corriente

Los higienistas critican la falta de salubridad en las ciudades industriales, así como las condiciones de vida y trabajo de los empleados fabriles.

Representó el inicio de un movimiento que trataba de mejorar las condiciones higiénicas introduciendo ampliamente la vegetación en la ciudad, y disminuyendo la densidad

A fines del siglo XIX había diferentes tendencias que trataban de diseñar nuevos modelos de ciudad, adaptados a las necesidades de la industrialización y del ferrocarril.

En muchos países las ideas de ciudad-jardín fueron muy influyentes y tendrían incidencia también durante el periodo de dominio del Movimiento Moderno.

Las preocupaciones higiénicas que tan presentes estaban en los ideales de ciudad-jardín serían asimismo importantes en la configuración de las creaciones del nuevo urbanismo que se desarrollaría a partir de los años 1920.

Después de los intensos debates producidos por el movimiento higienista, que trataba de construir ciudades más salubres y habitables, en las décadas de 1910 y 1920 se formularon nuevas opciones arquitectónicas y urbanísticas que supusieron una forma diferente de construir la ciudad

Este nuevo estilo constructivo se caracteriza por la predilección por las formas geométricas simples, y el uso de materiales como el acero y el cemento.

Siempre el objetivo del higienista fue luchar contra la insalubridad de las viviendas y la propagación de la tuberculosis.

La escuela fue un edificio público en donde se empezó a experimentar con las ideas de los higienistas.

El volumen de las aulas y la medida de las ventanas fueron calculadas según los datos científicos de la época para optimizar la oxigenación y las horas de sol para los jóvenes alumnos, y esto en todas las escuelas en Francia.

Hace falta fijarse que todas las escuelas construidas durante este periodo obedecen al mismo esquema.

Concretado por la celebración de un Congreso internacional de saneamiento y de salubridad de la vivienda, que tuvo lugar en París el año 1904, Se predicó una arquitectura científica inspirándose en el modelo hospitalitario y de los sanatorios y se difundió principalmente mayor horas de sol en las viviendas.

Este movimiento tuvo una fuerta influencia sobre los arquitectos modernos, desde Henri Sauvage a Le Corbusier pasando por Tony Garnier.

El carácter higienista (soleamiento, orientación, ventilación…) y la preocupación de índole económica y constructiva propia del periodo de entre guerras europeo, llevan a arquitectos como Hugo Häring a plantear viviendas sociales donde el espacio exterior adquiere una funcionalidad específica en relación al interior.

Serán precisamente estas premisas higienistas y de salubridad las que revuelvan las conciencias de los urbanistas de finales del siglo XIX en la generación de modelos de ciudad que protejan de los excesos de la vida urbana desarrollada a partir de la revolución industrial.

Antecedente histórico Guadalajara

“Todavía a principios del siglo XX, en las casas los baños se encuentran afuera de la casa, en los jardines, caballerizas o en el patio”

“Influenciado por el movimiento higienista de Inglaterra que se da a finales del siglo XIX durante un viaje”, “y que fomenta el bañarse más seguido, hizo instalación de excusados y lavabos, pero todos estos ya dentro de la casa”

Casa González luna del arquitecto Luis barragán, una de las primeras casas inspiradas en el movimiento ya bautizado como “higienista”

La cólera

La epidemia de cólera de 1833 fue la que

provocó, el cambio paulatino en la manera de ver la “suciedad y en las condiciones infrahumanas de miseria en que vivía la mayoría de la gente”

El cólera morbus afectó por primera vez a la población de Guadalajara en 1833. La pandemia se diseminó por muchos estados de la república y su efecto fue realmente devastador

Falleció casi 8% de la población, la mayoría gente muy pobre que vivía en condiciones de miseria, infrahumanas y de grave hacinamiento. Esto también fue favorecido por las condiciones sociopolíticas y económicas que prevalecían en el período posterior a la Independencia de México.

Esta epidemia coincidió con las disputas entre liberales y conservadores, que se extendían hasta los estados. La mayor parte de la población era analfabeta, con una minoría de clase pudiente.

La falta de higiene, la contaminación ambiental, el hacinamiento en ciertas jurisdicciones y la insalubridad predominaban.

La ciudad no contaba con sistemas de drenaje y los que existían con bastante frecuencia se fracturaban por ser de barro; la gente pudiente extraía el agua a través de pozos, grandes norias o por fuentes de agua. La gente de escasos recursos la tenía que comprar en grandes jarrones y la depositaban en cualquier contenedor, muchas de las veces sin ningún tipo de higiene.

Por la tarde los habitantes arrojaban en las esquinas de las calles los excrementos y un carretón de mulas los recogía para llevarlos a un punto distante de la ciudad. A estos carretones se les conocía como “carretones excrementicios”, con cierta frecuencia los problemas financieros del municipio impedían que el servicio se cumpliera con normalidad; también en ocasiones se estancaban las aguas negras, aguas de lluvias y los excrementos formando verdaderos muladares y lodazales hediondos. Otro grave problema lo representaban los rastros, tenerías, jabonerías, carnicerías y mercados sin resumideros, quienes arrojaban a la calle sus desperdicios.

Descripción de la vivienda “no higienista” en Guadalajara

“Los barracones son nauseabundos alojamientos que más parecen viviendas de bestias, donde los infelices viven a centenares, mucho peor que en los presidios.”

Uno de los motivos principales que ocasionaba las enfermedades gástricas era la ausencia de agua y de retretes.

El termino de higienista aplicado a la arquitectura no se conocía en Guadalajara probablemente hasta finales de la segunda década del siglo pasado.

La vivienda tradicional de Guadalajara a principios del siglo pasado, tenia una configuración que no propiciaba el higienismo.

Esta vivienda tradicional era la que tenia un patio al centro.

Tampoco en la vivienda tradicional se separaban las áreas de noche de las de día

Todas estas condiciones en la vivienda tradicional no contribuían a la higiene.

Probablemente uno de los primeros casos de casas higienistas (sin saber el termino aún) fue la casa Pérez Verdía

Del Ingeniero Arnulfo Villaseñor Carrillo; estilo Art Nouveau, fechada en 1910, calle Madero # 525.

Esta casa se podría considerar como una temprana del higienismo en nuestra ciudad de Guadalajara.

Esto debido a que se separa el área de noche de la de día, es decir las habitaciones se separan de las zonas de estar o de la cocina caballerizas o patio.

La casa ubicada Madero 525, una casa de cantera gris mandada hacer por el licenciado e historiador Luis Pérez Verdía al ingeniero Arnulfo Villaseñor Carrillo como regalo de bodas para una de sus hijas Aurora