Post on 03-Jul-2022
1
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
ABORDAJE CLÍNICO DEL CABALLO CON PATOLOGÍA CARDÍACA
María Villalba Orero, LV, PhD, GCertPract(Cardio)
Clínica privada, CardiologiaEquina_MVO. Profesora asociada del Departamento de Medicina y Cirugía Animal, Facultad de
Veterinaria, Universidad Complutense de Madrid
Contacto: cardiologiaequina@gmail.com
Introducción
El hallazgo de una alteración cardíaca, como un soplo o una arritmia, en los caballos a
menudo es un reto para el veterinario equino. Situaciones comunes en las que el
veterinario se enfrenta a la necesidad de determinar si un soplo o arritmia tiene
repercusión clínica son, por ejemplo, caballos que presentan disminución del
rendimiento, intolerancia al ejercicio o colapso, y también, en evaluaciones de caballos
con sintomatología inespecífica como pérdida de peso o fiebre intermitente. Determinar
si la alteración cardíaca es la causa de la sintomatología que presenta el animal, requiere
un cuidadoso examen, y es importante tener presente que la existencia de un soplo o
arritmia no necesariamente explica el cuadro clínico observado. Además, hay otras
situaciones en las que es fundamental poder establecer la importancia de un hallazgo
cardíaco en un caballo, como por ejemplo, en un examen compra-venta.
El abordaje del caballo cardiópata conlleva, por un lado, obtener información sobre el
estatus del animal, con o sin pruebas complementarias y, por otro lado, contestar las
preguntas del propietario sobre la patología y repercusión clínica. Para ello es necesario
profundizar y responder las siguientes cuestiones:
- ¿Tiene importancia clínica?
- ¿Incapacita para trabajar?
- ¿Qué esperanza de vida tiene?
- ¿Tiene tratamiento?
- ¿Qué pronóstico tiene?
Cabe destacar que, en la mayoría de los casos los propietarios, además de demandar
conocer si existe relevancia clínica en el momento del estudio, quieren conocer la
repercusión de estas alteraciones cardíacas en un futuro. Cuando la cardiopatía se
2
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
clasifica como severa, es sencillo responder estas preguntas, y el pronóstico es malo,
especialmente para los caballos de alta competición. Sin embargo, en aquellos caballos
con alteraciones leves o moderadas, la evolución de la enfermedad a largo plazo es más
difícil de determinar. En general, los caballos con cardiopatías leves o moderadas
mantienen el rendimiento deportivo y la esperanza de vida de forma similar a los
caballos sanos. Sin embargo, en ocasiones, la cardiopatía progresa y los caballos
desarrollan disminución del rendimiento, intolerancia al ejercicio, insuficiencia cardíaca
o muerte súbita. Determinar qué caballo progresará, en la actualidad no es del todo
posible.
Para determinar la relevancia clínica, en el momento en el que se detecta una patología
cardíaca en un caballo, es importante realizar un examen clínico enfocado a detectar
marcadores de daño cardíaco o de respuesta sistémica al daño cardíaco. A continuación,
se describe una evaluación clínica dirigida a estudiar la importancia de una alteración
cardíaca, normalmente soplo o arritmia. Además, se describen las pruebas
complementarias a realizar y se detalla un algoritmo de manejo terapéutico.
Anamnesis:
Debe ir enfocada a conocer si ha existido historia previa de disminución del rendimiento,
intolerancia al ejercicio, síncope o colapso. Es importante destacar que la disminución
del rendimiento no es siempre bien valorada por el jinete o propietario, y que,
dependiendo del trabajo que realice el animal, puede ser difícil de detectar, como en los
caballos de paseo o con poca actividad física. Igualmente ocurriría con los caballos de
salto, en los que se trabaje más la potencia que la resistencia. En disciplinas como
carreras de velocidad, completo o raid es más sencillo percibir alteraciones del
rendimiento, incluso si son sutiles.
Examen clínico:
Frecuencia cardiaca (FC) y presión arterial sistémica (PAs)
La FC y PAS cambian como parte de la respuesta sistémica al daño cardíaco. Brevemente,
cuando disminuye el gasto cardiaco de forma significativa, se activa el sistema renina-
angiotensina-aldosterona y esto produce estimulación simpática (aumento de la FC,
3
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
entre otros), vasoconstricción arterial sistémica y retención de líquido (aumento de la
PAS). Así pues, el aumento de FC (mayor de 50 lpm) y de la PAS (sistólica mayor de
130mmHg) pueden ser utilizados como indicadores de patología cardiaca con
importancia clínica.
Indicadores inespecíficos de cardiopatía
Los indicadores que se describen a continuación, de forma individual no significan
necesariamente la presencia de importancia clínica de las alteraciones cardíacas. Sin
embargo, cuanto mayor cantidad de ellos observemos en un caballo, mayor
probabilidad de que la patología cardiaca esté implicada en la sintomatología observada
en el animal.
- Historia de colapso.
- Edema en abdomen o pecho.
- Depresión.
- Caquexia.
- Tos.
- Taquipnea.
- Ascitis.
- Distensión venosa.
Indicadores específicos de cardiopatía
La presencia de estos marcadores es muy sugestiva de enfermedad cardiaca severa.
Entre ellos tenemos:
- Soplo continuo.
- Pulso yugular.
Exámenes complementarios:
La ecocardiografía es muy útil en la valoración de la función sistólica y diastólica del
corazón, dilataciones en las cámaras y flujos anómalos, y en general, de diferentes
situaciones patológicas que pueden disminuir el gasto cardiaco. Nos permite detectar
cardiopatías estructurales que, en el caso de ser severas, presentan un pronóstico
4
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
reservado. Sin embargo, si estas cardiopatías estructurales son leves o moderadas, es
necesario realizar otras pruebas complementarias, como electrocardiografía o holter en
ejercicio, con el objetivo de conocer con mayor exactitud la importancia clínica de la
alteración cardíaca.
Con respecto a la electrocardiografía cabe destacar que, los caballos en reposo tienen
periodos diastólicos prolongados, periodo en el cual el corazón es irrigado por las
coronarias, o lo que es lo mismo, oxigenado. Por tanto, detectar arritmias cardíacas
malignas, como consecuencia de sobrecarga de presión y volumen en las diferentes
cámaras del corazón, durante el reposo es poco probable. No detectar alteraciones del
ritmo cardiaco en un caballo en reposo, no aporta información en la toma de decisión
clínica o sobre la implicación clínica de la enfermedad. Sin embargo, cuando el caballo
se ejercita, la FC se puede multiplicar casi por diez, por lo que la diástole se ve reducida
drásticamente, y con ello la oxigenación del miocardio. Es durante el ejercicio cuando
más probabilidades hay de detectar arritmias malignas, producidas por la sobrecarga de
volumen y de presión del corazón. Estas arritmias son peligrosas, pues pueden producir
síncope o muerte súbita durante el ejercicio y, además, ponen en riesgo la vida del
jinete. Así pues, para poder determinar si existe riesgo de colapso o síncope durante
ejercicio y, por tanto, determinar si un caballo puede ser o no montado, es
imprescindible realizar electrocardiografía o holter en ejercicio. Obviamente, en
aquellos caballos en los que se detecten arritmias malignas en reposo no será necesario
realizar el test de ejercicio, además se pone en peligro la vida del animal.
5
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
NOTAS
6
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
VALORACIÓN CLÍNICA DE LOS SOPLOS CARDIACOS
María Villalba Orero, LV, PhD, GCertPract(Cardio)
Clínica privada, CardiologiaEquina_MVO. Profesora asociada del Departamento de Medicina y Cirugía Animal, Facultad de
Veterinaria, Universidad Complutense de Madrid
Contacto: cardiologiaequina@gmail.com
Las enfermedades cardiacas en los caballos son relativamente poco frecuentes en
relación con las patologías que sufren. Debido a esto, el conocimiento en profundidad
de estas alteraciones y su divulgación se encuentra más limitado. Sin embargo, el uso
deportivo que se da a esta especie dota al corazón de gran importancia, por lo que
reconocer sus alteraciones y las consecuencias que éstas tienen en el caballo es
fundamental para el veterinario equino.
Algunos estudios muestran que aproximadamente el 80% de los caballos tienen un
soplo. Su hallazgo se puede dar en caballos sin alteraciones valvulares (soplos
fisiológicos), en caballos con alteraciones valvulares pero asintomáticos, y en caballos
con patologías valvulares y sintomáticos. La identificación y diferenciación de los
mismos, así como el conocimiento del significado que este soplo conlleva en el animal
es a menudo un reto para el veterinario. Con la auscultación cardiaca se puede hacer el
diagnóstico de la patología valvular que existe, y en función del examen clínico se puede
determinar si el soplo tiene repercusión clínica. Sin embargo, para establecer el grado
de esta repercusión y realizar un pronóstico más preciso se necesitan estudios
adicionales, como la ecocardiografía, puesto que no existe correlación fija entre la
intensidad y duración del soplo con el tamaño y severidad de la regurgitación. El reto
del veterinario por tanto radica en reconocer cuando un soplo es fisiológico, y, una vez
detectado el soplo patológico, poder estimar la repercusión clínica que éste tiene en el
animal.
El objetivo de este documento es hacer una descripción de los soplos más comunes en
los caballos, describir las características que diferencian los soplos fisiológicos de los
patológicos y detallar los criterios que permiten determinar si el soplo es indicativo de
7
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
enfermedad (moderada o severa) para poder establecer el riesgo de desarrollar
insuficiencia cardiaca congestiva, arritmias y muerte súbita y poder determinar si el
caballo debe parar la actividad física.
Los soplos en los caballos:
En los caballos es posible identificar todos los sonidos cardiacos (S1, S2, S3 y S4) en la
auscultación debido al elevado tamaño de este órgano y al elevado volumen de
eyección. Los soplos son vibraciones prolongadas audibles que se desarrollan en una
parte del ciclo cardiaco normalmente silencioso. Pueden ser manifestaciones de flujo
normal (funcionales) o anormal (patológicos) en el corazón y en los vasos sanguíneos de
gran calibre. Los ruidos auscultados entre S1 y S2 se corresponden con soplos sistólicos
y los que se detectan entre S2 y S1 se denominan soplos diastólicos.
Soplos funcionales:
La mayoría de los soplos funcionales están causados por vibraciones provocadas por la
eyección de la sangre del corazón durante la sístole o durante el inicio de la diástole. En
los caballos, éstos son más frecuentes que en el resto de las especies y puede ser debido
al gran tamaño del corazón y a los grandes volúmenes de influjo y eflujo que existe. Los
soplos funcionales son siempre blandos (grado 1-3/6), localizados, de corta duración,
lábiles y crecientes-decrecientes en el tiempo. Nunca son holosistólicos (durante toda la
sístole) u holodiastólicos (durante toda la diástole), por lo que los sonidos cardiacos
siempre son evidentes. Es importante conocer las características de estos soplos para
diferenciarlos de aquellos que implican daños valvular, y por tanto, enfermedad.
Soplos funcionales sistólicos:
Se deben a la eyección de la sangre por la válvula aórtica y/o pulmonar durante este
periodo. Por tanto, su auscultación es posible sobre el área de proyección de estas dos
SISTÓLICOS DIASTÓLICOS
S
8
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
válvulas cardiacas. Siempre comienzan después de S1 y siempre terminan antes de S2.
El diagnóstico deferencial se debe realizar con las estenosis pulmonar y/o aórtica y con
la regurgitación mitral y/o tricuspídea, pues son los soplos que también se pueden
detectar durante la sístole.
• Diferenciación con estenosis pulmonar y/o aórtica: son soplos similares a los
fisiológicos de eyección sistólica, con el mismos periodo y área de auscultación.
Sin embargo, tanto la estenosis aortica como la pulmonar son muy raras en los
caballos por lo que normalmente se excluyen del diagnóstico diferencial.
• Diferenciación con regurgitación mitral y tricuspídea: los soplos funcionales de
eyección siempre tienen su punto de máxima intensidad sobre las válvulas
aórtica y/o pulmonar, nunca son de elevada intensidad y no duran toda la sístole.
Una adecuada auscultación permite diferenciar estos soplos fácilmente.
Los soplos funcionales diastólicos:
Se detectan en área de entrada de los ventrículos desde la parte dorsal hacia el vértice
(alrededor del ápex cardiaco). Se pueden detectar entre S2 y S3 (llenado de los
ventrículos durante se relajación pasiva), o entre S4 y S1 (llenado de los ventrículos
durante la contracción auricular). El diagnóstico diferencial incluye el resto de los soplos
diastólicos, y pueden ser la estenosis mitral y tricuspídea y regurgitación aórtica y
pulmonar.
• Diferenciación con estenosis mitral y tricuspídea: en estas válvulas también las
lesiones estenóticas son muy poco frecuentes por lo que se pueden descartar
como posible patología valvular causante de soplo.
• Diferenciación con la regurgitación aórtica: se puede diferenciar fácilmente de
los soplos diastólicos funcionales porque su punto de máxima intensidad es el 5º
espacio intercostal izquierdo, puede ser muy intenso, musical, es decrescendo y
puede ocupar toda la diástole.
• Diferenciación con la regurgitación pulmonar: aunque es frecuente encontrar
cierto grado de insuficiencia en esta válvula durante el estudio Doppler,
normalmente no se asocia con la aparición de un soplo y no suele ser causa
primaria da patología valvular.
9
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Soplos patológicos:
Los soplos patológicos son los detectados en asociación con enfermedades cardiacas
estructurales. Las causas son principalmente, incompetencias de las válvulas, defectos
septales, lesiones vasculares o estenosis valvulares. Las lesiones estenóticas en el
caballo son muy poco frecuentes, sin embargo, las incompetencias valvulares
(adquirida, fundamentalmente) son muy comunes. La importancia de la lesión valvular
depende del volumen de la sangre regurgitada y se relaciona con el área de superficie
del orificio de regurgitación, el gradiente de presión que conduce la sangre y el tiempo
de regurgitación. El movimiento retrógrado de la sangre se asocia con un flujo
turbulento, que en la mayoría de los casos se corresponde con un soplo cardiaco.
Aunque los soplos indicativos de lesión severa son de intensidad alta, la intensidad del
soplo no se corresponde siempre con la gravedad de la lesión, depende de las
estructuras que vibren por las turbulencias. Cuando estas alteraciones son moderadas
o severas producen una disminución del gasto cardiaco (limitando la tolerancia al
ejercicio),dilatación de las cámaras cardiacas (predisponiendo la aparición de arritmias)
y fallo cardiaco congestivo.
Soplos patológicos sistólicos:
Las patologías cardiacas que pueden causar la aparición de soplos durante la sístole son
las estenosis aórtica y pulmonar, las regurgitaciones mitrales y tricuspídeas y el defecto
en el septo interventricular. De todas, las que con mayor frecuencia se asocian a
enfermedad cardiaca son la regurgitación mitral y el defecto el en septo interventricular.
Soplos patológicos diastólicos:
Nuevamente, las estenosis en la mitras y tricúspide se puede descartar del diagnóstico
diferencial, así como la regurgitación pulmonar. Por tanto, el soplo diastólico que se
detecta en los caballos con mayor frecuencia es el producido por la regurgitación
aórtica. Además, algunos defectos en el tabique interventricular pueden cursar con
soplos diastólicos similares a los producido por estenosis.
Así pues, se podría afirmar que la insuficiencia mitral, insuficiencia aórtica y defecto en
el septo interventricular son las enfermedades cardiacas que se relacionan con mayor
10
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
frecuencia a los soplos patológicos. Las características de los soplos, los signos clínicos
que nos pueden indicar severidad y el pronóstico, en función de los exámenes
complementarios se describen a continuación.
11
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Insuficiencia aórtica y mitral en la especie equina
María Villalba Orero, LV, PhD, GCertPract(Cardio).
Clínica privada, CardiologiaEquina_MVO. Profesora asociada del Departamento de Medicina y Cirugía Animal, Facultad de
Veterinaria, Universidad Complutense de Madrid
Contacto: cardiologiaequina@gmail.com
Insuficiencia Mitral
Definición
La IM consiste en un reflujo de sangre, durante la sístole ventricular, desde el VI hacia la
AI, causado por una disfunción de una o varias partes del aparato valvular mitral (anillo,
velos, cuerdas tendinosas o músculos papilares); lo que produce un cierre defectuoso
de la válvula mitral. La IM es la segunda patología valvular más frecuente en los caballos
y se estima una prevalencia de alrededor del 3% de la población equina, aunque es más
prevalente en determinadas razas como los PSI.
Fisiopatología
Si la regurgitación mitral es importante, se produce sobrecarga de presión y volumen de
la AI, y se dilatada. Como consecuencia, el caballo puede desarrollar fibrilación auricular,
sobrecarga de la circulación pulmonar e incluso, si la IM es severa, puede provocar
dilatación de la arteria pulmonar y su ruptura, lo que conduce a la muerte súbita del
caballo. Además, el gasto cardiaco disminuye, puesto que parte del volumen latido no
es expulsado a través de la válvula aórtica, sino que retrocede. Esto activa el SRAA lo
que conduce a hipertensión arterial sistémica, que a su vez incrementará el trabajo
cardiaco. La IM es la patología cardíaca estructural en los caballos que más repercute en
el rendimiento deportivo, debido a la sobrecarga de la circulación pulmonar que
produce. Además, cuando coexiste con fibrilación auricular, el caballo presenta más
riesgo de mostrar intolerancia al ejercicio, y en ocasiones, desarrollan insuficiencia
cardíaca.
12
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Diagnóstico
Auscultación:
La IM produce un soplo sistólico, de grado variable, con PMI sobre el 5º espacio
intercostal izquierdo, con irradiación dorso-craneal.
Tratamiento
Actualmente no existe tratamiento definitivo de la IM en los caballos, pues la válvula no
se puede reemplazar. El tratamiento farmacológico va encaminado a restaurar la
presión arterial (IECAs), controlar la aparición de arritmias y la frecuencia cardiaca
(digoxina) y disminuir la congestión (furosemida).
Pronóstico
El pronóstico de esta patología, en parte, depende de la etiología. Cuando la válvula
mitral presentar degeneración fibrótica, el pronóstico variará en función del tamaño de
la regurgitación. Alteraciones valvulares producidas por ruptura de cuerdas tendinosas,
endocarditis o neoplasias, suelen ser más severas y se asocian a un pronóstico reservado
o malo. En general, si el tamaño de la regurgitación es pequeño, normalmente los
caballos no desarrollarán problemas de rendimiento deportivo, ni presentan la
esperanza de vida disminuida. Si la regurgitación es grande, el caballo puede desarrollar
disminución del rendimiento o intolerancia al ejercicio. Durante el examen clínico, lo
indicadores de severidad de la IM son: soplo mayor de 3/6, auscultación de S4
(contracción auricular), fiebre, disminución del rendimiento y signos clínicos de
insuficiencia cardiaca izquierda. En el estudio electrocardiográfico, indicadores de mal
pronóstico son, principalmente, la existencia de arritmias en reposo, o la aparición de
éstas durante el ejercicio. Ecográficamente, establecen mal pronóstico un marcado
engrosamiento de los velos valvulares, varios jets regurgitantes, regurgitación mayor de
2/3 del VI, dilatación severa de la AI, dilatación del VI, dilatación de la arteria pulmonar
y ruptura cuerdas.
13
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Insuficiencia Aórtica
Definición
La insuficiencia aórtica (IAo) consiste en un cierre defectuoso de la válvula aórtica que
permite un flujo retrógrado de sangre, desde la aorta hacia el ventrículo izquierdo (VI)
durante la diástole. La IAo es la patología valvular más común en los caballos,
especialmente en los animales de edad avanzada, pues la prevalencia aumenta con la
edad.
Fisiopatología
El flujo retrógrado de sangre hacia el VI produce sobrecarga de volumen y presión de
esta cámara. Si la regurgitación es grande, esta sobrecarga puede afectar a la capacidad
contráctil del VI, disminuirá el volumen latido y puede aumentar la excitabilidad de las
células miocárdicas ventriculares. Esto conduce, por un lado, a la disminución del gasto
cardiaco y riesgo de arritmias ventriculares, y por otro lado, a la activación del sistema
renina-angiotensina-aldosterona (SRAA). La activación del SRAA en última instancia
producirá hipertensión arterial sistémica y una diferencia entre la presión arterial
sistólica y diastólica elevada (pulso arterial saltón), que será mayor cuanto mayor sea la
regurgitación, y correlaciona con la dilatación vetricular. Si la IAo es severa, con
moderada dilatación del VI, el anillo mitral se dilata, impidiendo el correcto cierre de
esta válvula y, apareciendo por tanto, insuficiencia mitral (IM). A su vez, la IM aumenta
el volumen y la presión de la aurícula izquierda (AI), incrementando el riesgo de
fibrilación auricular y de desarrollo de insuficiencia cardiaca izquierda.
La IAo leve y que no produce remodelado en el VI, normalmente no presenta
consecuencias clínicas y los caballos mantienen un adecuado rendimiento deportivo.
Cuando la IAo es moderada o severa, pueden producir el colapso del caballo por el
aumento del riesgo de arritmias ventriculares. Esto ocurre incluso aunque los caballos
no muestren sintomatología previa, como disminución del rendimiento o intolerancia al
ejercicio. Por ello, cuando un caballo tiene IAO moderada o severa, es fundamental
realizar electrocardiografía en ejercicio, con el objetivo de establecer el riesgo de
14
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
colapso durante el ejercicio y evaluar si el caballo puede ser montado y ejercitado sin
riesgo.
Diagnóstico
Auscultación:
Esta alteración produce un soplo diastólico, de grado variable, con punto máxima
intensidad sobre el 3º-4º espacio intercostal izquierdo y con irradiación ventro-caudal.
A menudo, con un timbre musical, pues el chorro regurgitante choca con las cuerdas
tendinosas, haciéndolas vibrar.
Tratamiento
En los caballos no existe tratamiento quirúrgico para reparar la válvula aórtica. El
tratamiento va encaminado a disminuir la presión arterial sistémica y el trabajo cardíaco
en caso de ser necesario, generalmente con fármacos inhibidores de la enzima
convertidora de la angiotensina (IECAs). En etapas avanzadas de IAo, si el caballo
presenta signos clínicos de insuficiencia cardíaca se puede administrar digoxina para
reducir la frecuencia cardíaca y furosemida, como diurético, para tratar la congestión.
Pronóstico
El pronóstico depende en buena parte de la etiología. Cuando la IAo se produce por
degeneración fibrótica o prolapso de los velos valvulares, normalmente la progresión es
lenta y el pronóstico bueno. Cuando la IAo se debe o está asociada a endocarditis, el
pronóstico es reservado o malo. A menudo, no es posible establecer la causa de la IAo y
el pronóstico se establece en función del examen físico, la ecocardiografía y el holter en
ejercicio. En función del examen físico, algunos indicadores de severidad, y que
determinan la necesidad de realizar pruebas complementarias son: soplo de grado
mayor de 4/6, coincidencia con un soplo sistólico (por IM asociada), auscultación de
latidos prematuros, pulso saltón o hipercinético, presión arterial diastólica menor de 60
mmHg y presión arterial sistólica mayor de 140 mmHg. Los parámetros
ecocardiográficos que establecen mal pronóstico en la IAO son: marcado engrosamiento
de los velos valvulares, dilatación severa del VI, disminución de la fracción de
acortamiento o fracción de eyección y una regurgitación mayor de 2/3 del VI. Realizar
15
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
un holter en ejercicio en los caballos con IAo es fundamental, pues es la patología que
más se relaciona con ritmos ventriculares que producen colapso durante el ejercicio. El
desarrollo de latidos o ritmos ventriculares en los caballos, al aumentar la frecuencia
cardíaca o durante el ejercicio tiene mal pronóstico y en estos casos es recomendable
retirar al caballo de la.
Por último, destacar que los caballos que desarrollan insuficiencia aórtica moderada o
severa, o antes de los diez años, tienen elevadas probabilidades de presentar problemas
de rendimiento e incluso incapacidad para trabajar.
16
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
NOTAS
17
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
EFECTO DE LA FIBRILACIÓN AURICULAR EN LOS CABALLOS
María Villalba Orero, LV, PhD, GCertPract(Cardio).
Clínica privada, CardiologiaEquina_MVO. Profesora asociada del Departamento de Medicina y Cirugía Animal, Facultad de
Veterinaria, Universidad Complutense de Madrid
Contacto: cardiologiaequina@gmail.com
Introducción
La fibrilación auricular (FA) es la arritmia más frecuente en los caballos y la consecuencia
más común es la disminución del rendimiento. Es un ritmo cardiaco irregular producido
como consecuencia de la activación auricular desorganizada que produce una disfunción
mecánica de ambas aurículas. La prevalencia varía entre 0.03 y 2.5% de la población
equina dependiendo de la zona geográfica y de la raza.
En condiciones normales, el impulso eléctrico se genera en el nódulo sinusal (NS) y se
propaga a través del nódulo auriculo-ventricular (AV). Si se genera un impulso en una
zona diferente al NS, el estímulo puede llegar al nódulo AV cuando éste aún está en
periodo refractario (no transmite el estímulo) por lo que la onda eléctrica no pasa hacia
el ventrículo. Si los cardiomiocitos próximos al nódulo AV no se han estimulado todavía,
lo harán, y el estímulo se dirigirá hacia la aurícula de nuevo, produciéndose los circuitos
de reentrada. La aparición de FA requiere un aumento del automatismo auricular
(evento disparador, por ejemplo, una extrasístole auricular) que se perpetua debido a
un circuito de reentrada en la propia aurícula.
Las posibilidades de que un circuito de reentrada se perpetúe son mayores al aumentar
la masa auricular. Debido a esto, las especies de mayor tamaño, como la equina, están
predispuestas a padecer esta arritmia sin presentar patologías cardiacas subyacentes,
del mismo modo que las patologías que cursan con agrandamiento auricular
(insuficiencia mitral y tricuspidea) normalmente producen FA. Además, el aumento del
tono vagal (por ejemplo, durante una insuficiencia cardiaca) influye en la persistencia de
los circuitos de reentrada, porque acorta el periodo refractario de las células atriales y
18
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
disminuye la conducción del nódulo AV. El alto tono vagal, que en condiciones normales
presenta la especie equina, también les predispone a tener esta arritmia.
El signo clínico más común en la FA es la disminución del rendimiento y la intolerancia
al ejercicio, aunque los caballos pueden no mostrar signos clínicos asociados (o ser muy
leves), presentar taquicardia, taquipnea, epistaxis y/o síncopes, dependiendo de si
existe enfermedad cardiaca subyacente o no.
La FA se caracteriza por presentar un ritmo irregularmente irregular (caótico) que se
puede detectar durante la auscultación. Cuando la frecuencia cardiaca es baja, el ritmo
caótico es más evidente. Sin embargo, con una frecuencia cardiaca elevada, apreciar un
ritmo irregular es más complicado y podemos no detectarla. La auscultación de posibles
pausas (que podemos interpretar como bloqueos) y de latidos prematuros (que
podemos interpretar como extrasístoles) en un mismo caballo nos debe hacer sospechar
de FA, puesto que la aparición de bloqueos auriculoventriculares (favorecidos por un
estímulo parasimpático) y de extrasístoles (favorecidos por un estímulo simpático) en el
mismo animal no es habitual, y esas “pausas” con “latidos prematuros” normalmente
indican la presencia de FA (ritmo caótico). El electrocardiograma es la prueba
complementaria que confirma la presencia de la FA que se caracteriza por la ausencia
de ondas P (en su lugar ondas f) y el intervalo R-R irregular (Fig. 1).
Fig 1. Electrocardiograma de un Pura Sangre Inglés de 4 años con FA.
Efecto sobre el rendimiento deportivo
Desde un punto de vista atlético, el sistema cardiaco del caballo es muy eficaz. Esta
especie puede pasar de una FC de 20 a 240 latidos/min, y presenta una reserva grande
de glóbulos rojos en el bazo que garantiza un gasto cardiaco adecuado durante ejercicios
19
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
muy intensos. Los problemas cardiacos en los caballos constituyen la tercera causa más
común de disminución del rendimiento, después de los problemas respiratorios y
musculoesqueléticos. Como ya se ha comentado, la FA es la arritmia que con mayor
frecuencia se asocia a la intolerancia al ejercicio. Los animales afectados presentan el
problema normalmente cuando el galope es largo o en el sprint final. Si la FA aparece
como consecuencia de una enfermedad cardiaca subyacente, las consecuencias
hemodinámicas se agravan y aparecen los signos clínicos descritos anteriormente en
reposo.
El gasto cardiaco depende del volumen sanguíneo que es eyectado del ventrículo
izquierdo (VI) y de la frecuencia cardiaca (FC). Aproximadamente, el 75% del llenado
ventricular se produce de forma pasiva, durante la relajación del propio ventrículo, y el
25% restante de forma activa, durante la contracción auricular. Los caballos que
presentan FA no tienen contracción auricular eficaz, por lo que el llenado ventricular se
encuentra disminuido. El gasto cardiaco en los pacientes con FA se mantiene
aumentando la FC (Fig. 2). Durante el reposo o el ejercicio moderado el aumento de la
FC es suficiente para mantener un volumen-minuto adecuado, pero en ejercicios
intensos, a FC máximas, ya no son capaces de compensar el gasto cardiaco,
manifestándose así la disminución del rendimiento o la intolerancia al ejercicio. Además,
los animales con FA presentan sobrecarga de presión en la aurícula izquierda (debido a
que no se eyecta todo el volumen), lo que predispone la aparición de hipertensión
pulmonar, aumentando la intolerancia al ejercicio. Por tanto, la FA se hace evidente
únicamente en animales con un alto entrenamiento deportivo que están sometidos a
esfuerzos grandes, y normalmente pasa desapercibida, o constituye un hallazgo
accidental, en los animales dedicados a paseo y con bajo nivel deportivo.
20
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Modificado De Verheyen T et al. 2012
Fig. 2. Frecuencia cardiaca de 43 caballos con FA (sin otra patología cardiaca) en reposo
y ejercicio (en gris) y rango de la frecuencia cardiaca de caballos sanos en reposo y
ejercicio (en granate). Se observa el aumento en latidos/minuto que tienen los caballos
con FA para poder mantener el gasto cardiaco.
Los caballos son una especie que está predispuesta a desarrollar FA espontánea, debido
a un alto tono vagal y gran masa auricular. Las principales consecuencias de la FA son el
remodelado eléctrico, hemodinámico y estructural de la aurícula, lo cual, genera más FA
(la fibrilación auricular produce fibrilación auricular). Por ello, una vez desencadenada
esta arritmia cuanto mayor tiempo se prolongue menor probabilidad de desaparición
espontánea o cardioversión a ritmo sinusal. Relacionado con esto, existen tres tipos de
FA:
• FA paroxística: aparece y desaparece de forma espontánea en 24-48 horas.
Normalmente asociada alteraciones electrolíticas. Esta FA no se debe tratar, hay
que monitorizar y esperar la cardioversión espontánea.
• FA persistente: son las que no desaparecen de forma espontánea, pero en las
que aún el remodelado auricular es leve por lo que es posible la cardioversión
(desde la semana hasta los primeros tres meses). Estas FA son las que mayor
0
50
100
150
200
250
300
350
Reposo Paso Trote Canter Galope
Fre
cue
nci
a C
ard
iaca
(la
tid
os/
min
)
21
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
éxito de cardioversión a ritmo sinusal presentan con la terapia antirrítmica, por
lo que estaría indicado el tratamiento.
• FA permanente: son las que no desaparecen de forma espontánea, llevan un
tiempo prolongado y en las que el remodelado auricular es moderado o severo,
por lo que ya no será posible restaurar el ritmo sinusal o, se puede lograr, pero
con una elevada tasa de recurrencia a FA. En este tipo de FA, no está indicado
tratar.
Otra consideración importante cuando encontramos esta arritmia en los caballos es
establecer sí está repercutiendo en su vida o rendimiento deportivo. Si no es así, puede
no estaría indicado asumir el riesgo de la terapia antirrítmica, aunque tengamos
probabilidad de éxito. Por ello, se recomienda que si la FA es un hallazgo accidental en
un caballo no destinado a la alta competición no se trate. Sin embargo, aquellos caballos
con aptitud deportiva, en los cuales la FA pueda impedir su máximo rendimiento,
deberían recibir terapia antirrítmica para restaurar el ritmo sinusal.
En el electrocardiograma observaremos que no hay ondas P (pudiendo haber o no ondas
f) y un intervalo RR irregular. La auscultación de esta arritmia es característica pues se
detecta un ritmo irregularmente irregular (caótico) que sólo se puede asociar a FA. Sin
embargo, en ocasiones, es fácil confundir con caballos que presentan BAV 2º que al
auscultar aumentan su frecuencia cardiaca y el bloqueo desaparece de forma
intermitente.
Como ya hemos dicho, para decidir si se trata o no la arritmia, hay que tener en cuenta,
en primer lugar, si estamos ante una FA persistente, y, en segundo lugar, si está
repercutiendo sobre la vida o el rendimiento deportivo del animal.
Hay dos tipos de cardioversión a ritmo sinusal:
Cardioversión farmacológica
Como ya se ha descrito, la principal desventaja de los fármacos antiarrítmicos, son su
efecto proarritmogénico. En los caballos se emplea:
22
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Quinidina: es el fármaco más utilizado en la cardioversión. Es un antiarrítmico de clase
1ª: prolonga el periodo refractario y disminuye la conducción miocárdica. El efecto es
muy potente, por lo que tiene elevada probabilidad de éxito, pero al mismo tiempo alta
probabilidad de efectos indeseados. Los principales efectos adversos descritos son
hipotensión, disminución de la contractilidad cardiaca, insuficiencia cardiaca congestiva,
taquicardia supraventricular, taquicardia ventricular, muerte súbita, dolor cólico,
diarrea severa, infosura, cuadro neurológico…
Digoxina: se administra cuando, tras repetir las dosis de quinidina, no hay cardioversión
a ritmo sinusal. Hay que tener especial cuidado porque aumenta la toxicidad de la
Quinidina.
Flecainamida, procainamida y amiodarona: son fármacos antiarrítmicos más recientes,
desarrollados en medicina humana ante la necesidad de encontrar terapias
antiarrítmicas que no presenten tantos efectos indeseados. Sin embargo, por esta
misma razón, su principal problema es que su efecto antiarrítmico es menor y las
probabilidades de éxito disminuyen. Además, aunque menos que la Quinidina, también
tienen descritos efectos secundarios, como arritmias ventriculares y diarrea severa.
Cardioversión eléctrica
Consiste en administrar una corriente eléctrica para resetear el ritmo cardiaco. Como en
los caballos no se puede realizar a través de palas o electrodos en la superficie de la piel,
debido a su elevado tamaño, la cardioversión se debe realizar introduciendo los
electrodos directamente en el corazón (TVEC, del inglés transvenous electrical
cardioversion). Uno de los electrodos se coloca en la aurícula derecha, otro en la
ramificación de la arteria pulmonar izquierda y, adicionalmente, se puede colocar un
tercer electorado en la base del ventrículo derecho, este último para utilizar como
marcapasos en caso de parada cardiaca. La corriente eléctrica debe administrarse
sincronizando el desfibrilador con el QRS del caballo, para evitar realizar una descarga
en el periodo refractario. Este procedimiento debe realizarse con el animal anestesiado.
23
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Los principales problemas de la cardioversión eléctrica son los asociados a la anestesia,
la posible parada cardiaca que puede producir la corriente eléctrica y el coste elevado
del procedimiento.
El pronóstico de los caballos con fibrilación auricular que de forma exitosa retoman
ritmo sinusal es bueno y pueden recuperar su vida deportiva. Sin embargo, no hay
estudios realizados a largo plazo sobre la recurrencia FA en estos animales. En los
animales en los que la FA no desaparece pese a tratamiento, la arritmia repercutirá
sobre su vida deportiva, y puede mermar la calidad de vida, especialmente si durante el
galope eleva la frecuencia por encima de 240 lpm.
24
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
NOTAS
25
JORNADAS CARDIO EQUINA CÁCERES 2018 | María Villalba Orero
Bibliografía recomendada
• A. Fraipont, E. Van Erck, E. Ramery et al. Subclinical diseases underlying poor performance in endurance horses:
diagnostic methods and predictive tests. Veterinary Record 169:6, 2011.
• Bishop, S. P., Cole, C. R. & Smetzer, D. L. Functional and morphologic pathology of equine aortic
insufficiency. Pathol. Vet. 3, 137–58 (1966).
• Hallowell, G. D. & Bowen, M. Reliability and identification of aortic valve prolapse in the horse. BMC Vet.
Res. 9, 9 (2013).
• Porter, S. R. et al. Vegetative endocarditis in equids. J. Vet. Intern. Med. 1411–1416 (2008).
• Reef, V. B. & Spencer, P. Echocardiographic evaluation of equine aortic insufficiency. Am. J. Vet. Res. 48,
904–9 (1987).
• Stevens, K. B. et al. Effect of left-sided valvular regurgitation on mortality and causes of death among a
population of middle-aged and older horses. Vet. Rec. 164, 6–10 (2009).
• Reef, V. B. et al. Recommendations for management of equine athletes with cardiovascular abnormalities. J
28, 749–61 (2014).
• Buhl, R. Valvular regurgitations in the horse: the importance of an exercise ECG. Vet. J. 183, 117–8 (2010).
• Reef, V. B., Bain, F. T. & Spencer, P. A. Severe mitral regurgitation in horses: clinical, echocardiographic
and pathological findings. Equine Vet. J. 30, 18–27 (1998).
• Buergelt, C. D. Equine cardiovascular pathology: an overview. Anim. Heal. Res. Rev. 4, 109–29 (2003).
• Reef, V. B. Mitral valvular insufficiency associated with ruptured chordae tendineae in three foals. J. Am.
Vet. Med. Assoc. 191, 329–31 (1987).
• Reef, V. B. Heart murmurs in horses: determining their significance with echocardiography. Equine Vet. J.
Suppl. 71–80 (1995). at <http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/8933072>
• REEF, V. B., BAIN, F. T. & SPENCER, P. A. Severe mitral regurgitation in horses: clinical,
echocardiographic and pathological findings. Equine Vet. J. 30, 18–27 (1998).
• Imhasly, A., Tschudi, P. R., Lombard, C. W. & Gerber, V. Clinical and echocardiographic features of mild
mitral valve regurgitation in 108 horses. Vet. J. 183, 166–71 (2010).
• Young, L. E., Rogers, K. & Wood, J. L. N. Heart murmurs and valvular regurgitation in thoroughbred
racehorses: epidemiology and associations with athletic performance. J. Vet. Intern. Med. 22, 418–26 (2008).
• Deem DA, Fregin GF: Atrial fibrillation in horses: A review of 106 clinical cases, with consideration of prevalence, clinical
signs and prognosis. JAVMA 180:261–265, 1982.
• Reef VB, Reimer JM, Spencer PA: Treatment of atrial fibrillation in horses: New perspectives. J Vet Intern Med 9(2):57–
67, 1995.
• Reef VB, Levitan CW, Spencer PA: Factors affecting the prognosis and conversion in equine atrial fibrillation. J Vet Intern
Med 2:1–6, 1988.
• Holmes JR, Darke PGG, Else RW: Atrial fibrillation in the horse. Equine Vet J 1:211–222, 1969.
• Else RW, Holmes JR: Pathological change in atrial fibrillation in the horse. Equine Vet J 3:56–64, 1971.
• Bertone JJ, Wingfield WE: Atrial fibrillation in horses. Compend Contin Educ Pract Vet 9(7):763–771, 1987.
• Bertone JJ: Atrial fibrillation in the horse: Diagnosis, prognosis and treatment. Equine Pract 6:6–12, 1984.
• McKeever KH, Hinchcliff KW, Reed SM & Robertson JT (1993).Role of decreased plasma volume in hematocrit
alterations duringincremental treadmill exercise in horses. Am J Physiol 265,404–408.
• Martin, B.B., Jr., Reef, V.B., Parente, E.J. and Sage, A.D. (2000) Causes of poorperformance of horses during training,
racing, or showing: 348 cases (1992-1996). J. Am. vet. med. Ass. 216, 554-558.
• Veeheten T, Decloedt A, Van Der Vekens N, et al. (2012) Ventricular response durin lungeing exercise in horses with lone
atrial fibrillation. Equine Vet J..