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Integrada por más de doscientas piezas arqueoló-gicas pertenecientes a las tres culturas prehispá-

nicas que habitaron la región del golfo de México y dieron a esta zona una identidad perdurable y asom-brosa, la exposición “Veracruz: Antiguas Culturas del Golfo de México” ha sido abierta al público re-cientemente en la sede del Instituto Veracruzano de la Cultura en el Puerto de Veracruz.

Para lograrlo, se requirió la colaboración de diez museos esparcidos a lo largo de la entidad que aportaron una selección esencial de piezas de las culturas huasteca, olmeca y totonaca; remanentes que son un patrimonio cultural de todos los vera-cruzanos y también una especie de ventana abier-ta al pasado, oportunidad de mirar un testimonio tangible de alguna faceta ya irrecuperable de la vida de estos pueblos, y aventurar una mínima re-construcción de ciertos aspectos de su concepción

Veracruz: AntiguasCulturas del Golfo de México

del mundo, a partir de sus estatuillas, de sus pie-dras preciosas, de las efigies de sus dioses; una ven-tana necesaria en tanto todos los pueblos siempre precisan del conocimiento de su pasado común.

“Veracruz: Antiguas Culturas del Golfo de Mé-xico” es el producto de casi dos años y medio de trabajo realizado por un equipo de restauradores, luego de que las piezas que la integran fueron re-gistradas y catalogadas para esta exposición al pú-blico que por primera vez reúne semejante acervo.

La exhibición está conformada por estatuillas, es-telas, máscaras, esculturas, collares, vasijas, puntas de flechas, entre otros vestigios arqueológicos que han sido encontrados en los sitios de El Tajín, El Ídolo, Tres Zapotes, Matacapan, El Zapotal, Cempoala, Las Puertas, Castillo de Teayo y Palmillas, donde flore-cieron las tres culturas principales que habitaron el actual estado de Veracruz, además de otros grupos

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menos extendidos, como los del área de la Mixtequilla, Re-mojadas y la zona de los Tuxtlas.

Las piezas —ela-boradas con mate- riales diversos, como concha, hueso, cerá-mica y piedra— van desde pequeñas fi-gurillas de entre tres y cuatro centímetros de largo, hasta otras

de mediano formato, como es el caso de frisos y banquetas que mi-den 1.60 metros. Cabe agregar tam-bién que el acervo abarca un lapso histórico de alrededor de 2,500 años —correspondientes a los pe-riodos del Preclásico al Posclásico Tardío—, desde el establecimiento de los olmecas hasta la llegada de los mexicas a esa región.

Sin embargo, tal vez en realidad nada de lo hasta ahora menciona-do sea tan fascinante como el cau-dal de información que esta ex-posición postula. Mencionemos, por ejemplo, que se explica cómo, dentro de la religión del golfo, los atributos y comportamientos

de los seres de la naturaleza fue-ron transferidos a distintas dei- dades: como en los casos del ja-guar y su fuerza, del murciélago y sus cacerías nocturnas, del pez y su medio acuático, de las aves y su relación con el cielo. O, también, la elucidación en el tema de las ru-tas y sistemas de intercambio con el resto de las culturas del México prehispánico, que propició el co-mercio de conchas, caracoles, sal, maderas valiosas, algodón, cacao, hule y piedras preciosas.

“Veracruz: Antiguas Culturas del Golfo de México”, una ex-posición organizada gracias a la labor conjunta del Instituto Ve-racruzano de la Cultura y la Se-cretaría de Turismo, y a partir de un trabajo de curaduría a cargo del arqueólogo David Morales, Director de Museos de la Dele-gación Veracruz del Instituto Nacional de Antropología e His-toria, permanecerá en exhibición en la Sala Oriente y Capilla del Recinto Sede del Instituto Vera-cruzano de la Cultura del 18 de agosto al 23 de octubre de 2011.

Visitarla equivale a asombrar-se. Los invitamos.

“Veracruz: Antiguas Culturas del Golfo de México” es el producto de casi dos años y medio de trabajo realizado por un equipo de restauradores, luego de que las piezas que la integran fueron registradas y catalogadas para esta exposición al público que por primera vez reúne semejante acervo.