V. 5 Correo de las Culturas 52

8/9/2019 V. 5 Correo de las Culturas 52

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d e l a s C u l t u r a s d e l M u n d o

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EOVol. V, nmero 52, 15 de noviembre de 2009. CEDICULT Director: Leonel Durn Sols

En este nmero:

El santuario celtibrico de Segeda, nico calendario lunisolar conservado

Hallan en Samos pecios de 2,400 aos

La gran aventura del espritu: semblanza de Claude Lvi-Strauss

Las Cantigas de Alfonso X por primera vez juntas en exposicin


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El santuario celtibrico de Segeda,

nico calendario lunisolar conservado

El santuario celtibrico de Segeda, en Calatayud (Zaragoza), que data

del siglo II de nuestra era, es el nico calendario de ciclo lunisolar

que se conserva desde la antigedad en todo el Mediterrneo. As lo

constatan los ltimos descubrimientos, que demuestran que la base de

esta construccin se levant teniendo en cuenta distintas orientaciones

astronmicas.

Lo ha explicado el catedrtico Francisco Burillo, que dirige el grupo deinvestigacin de este estudio arqueoastronmico, ya que los celtberos

construyeron el santuario alinendolo con el solsticio de verano, los equi-

noccios, el norte astronmico y la Parada Mayor de la Luna, que marca

un ciclo de 19 aos denominado ciclo de Metn.

Burillo ha calificado este descubrimiento de excepcional y ha explica-do que para llevar a cabo este estudio se utiliz un programa informtico

que permite recrear el firmamento de cualquier poca. Posteriormente se

comprueban los datos sobre el terreno.

Los descubrimientos han demostrado que el santuario de Segeda es

una construccin nica en el mundo, que permite aumentar los cono-

cimientos sobre la sacralidad en la cultura celtibrica, muy desconocidos

hasta la fecha, como por ejemplo, que la construccin no tena cubierta.

Esto se relacionara con las culturas galas, que afirmaban que sus dio-

ses eran tan importantes que no podan estar prisioneros dentro de un

edificio, ha subrayado Burillo.

Cronologa


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Cultura ibrica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Tambin ha explicado que una de las cosas que ms llam la atencin

de los investigadores fue la extraa forma de la base de la construc-

cin, que tena forma trapezoidal, y un ngulo muy poco comn, de

120 grados, en la piedra angular. Esto significa que utilizaban el sistema

sexagesimal, lo que lo relaciona con otras corrientes mediterrneas de

la antigedad. La base de este trapecio coincidira con el norte astro-

nmico, mientras que el lado mayor de la plataforma est orientado ala Parada Mayor de la Luna, es decir, cuando la Luna est ms alejada,

cuando se encuentra muy alta en el firmamento.

Esta construccin demuestra el inters de las poblaciones celtibricas

por los movimientos del Sol y la Luna como forma de medir el tiempo.

Adems, los hallazgos se han presentado en el Congreso de la SociedadEuropea de Astronoma celebrado recientemente en la Biblioteca de

Alejandra, lo que ha llevado a esta sociedad a solicitar a las autoridades

espaolas medidas para proteger el paisaje y el entorno visible desde el

santuario, en el que hay diversas torres de cableado elctrico.

Fuente: EFE

Cronologa


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Hallazgo

Hallan en Samos pecios de 2,400 aos

La importancia del sudeste del Mediterrneo en la navegacin y el

comercio en el mundo clsico ha quedado patente con el descubrimiento

de pecios de 2 mil 400 aos de antigedad en el mar de la isla griega de

Samos. El arquelogo Teotokos Theodulu, encargado de la supervisin

submarina de las reliquias arqueolgicas en la isla griega, declar que el

equipo ha descubierto por primera vez en Samos un naufragio que

demuestra la importancia del este del mar Egeo en la navegacin de laantigedad. El descubrimiento se hizo en octubre, durante los trabajos

de renovacin del puerto de Pithagorio, situado en el sureste de Samos,

cerca del litoral occidental de Turqua.

Los testimonios de pescadores de la isla llevaron a los cientficos a

investigar el fondo del mar, al sur de la isla, a entre 25 y 40 metros deprofundidad, lo que permiti descubrir nforas que datan del siglo III a.C.

Un naufragio es una mquina de tiempo debido a que tiene la ventaja

de conservarse intacto al paso del tiempo, al contrario de las ruinas en la

superficie, declar el arquelogo.

Theodulu afirm que los restos de ese naufragio se encuentran en

buen estado. Otros restos de nforas y piezas de cermica fueron

localizados al este de Samos, a poca profundidad, entre las rocas y

la playa, procedentes de un naufragio del que an no se ha definido

su antigedad.


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Hallazgo

La jefa del departamento de arqueolgica submarina, Angeliki Simosi,

puntualiz que las nforas tienen letras y dibujos que indican el uso del

puerto de Pithagorio.

Ya desde el siglo VI aC, Pithagorio fue el primer puerto utilizado para

la guerra por el tirano Polcrates y en el siglo V a.C. se convirti en una

gran base naval para la flota de Atenas.

En otro punto del mar de la isla, llamado Kokariu, se encontraron restos

de un asentamiento de tiempos bizantinos de la segunda mitad del siglo

IX, que supuestamente se hundi debido a fenmenos tectnicos, segn

explicaron los cientficos.

Fuente: Efe/www.elhistoriador/eluniversal/mzr


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rase una vez un jovencito que no saba muy bien qu hacer con

su vida. Criado en una familia donde el arte era un verdadero

objeto de culto, hijo de un pintor retratista, era dueo de todos los

dones. Pudo convertirse en fotgrafo, como lo prueban las admirables

placas que tom durante sus expediciones, reunidas en su mayor parte

en Saudades do Brasil (Editorial Omnibus, 1994). Pudo convertirse en

escengrafo, toda vez que dise el decorado para una pera com-

puesta por su amigo Ren Leibowitz, empresa que terminara incon-

clusa. Autor de un Cinna que afirmaba haber extraviado pero donde

relata la intriga detallada al final de Tristes trpicos, pudo ser tambin

un autor teatral. Instruido en solfeo, capaz de escribir un deslumbrantecomentario sobre el Bolero de Ravel, recopil entre los Nambikwara y

los Tupi-Kawahib msicas transcritas por la compositora Betsy Jolas

que despus se le perdieron en un taxi a un editor a quien jams per-

don. Habiendo comenzado desde la infancia con pequeas coleccio-nes, se volvi un coleccionista avezado durante su exilio neoyorquino

y esa fue una pasin que nunca perdi. Ante todo, un artista.

Atento a la observacin de la naturaleza, le gustaba mirar un paisaje

rocoso para fijarse en las grietas verdaderas centinelas del paso de

Semblanza

La gran aventura del espritu (Claude

Lvi-Strauss 1908-2009)


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los siglos. Aquel joven indeciso sigui los consejos de Andr Cres-

son, clebre autor de manuales, su profesor de filosofa en la Normal

Superior, y termin la carrera de derecho. Y de filosofa, pero sin

apasionarse: la filosofa universitaria de aquel entonces consista en

mirarse el ombligo mientras jugabas a saltar el burro. Sin embargo,

en su escuela Mont-de-Marsan fue un agregado feliz, pero, asignado

en Laon al ao siguiente, se vio condenado a la repeticin y protest:

nunca ms filosofa!

Qu hacer? Cuando lee la versin original de La sociedad primi-

tiva, del estadunidense Robert H. Lowie, le llega una revelacin. Se

convertir en etngrafo. Cmo? Misterio. En esas estaba cuando le

proponen ir a ensear sociologa en Sao Paulo. Aprovech entonces

para estudiar la vida de los indgenas en los suburbios. De este modo,

en 1934, comenz en la vida de Claude Lvi-Strauss la gran aventura

del espritu.

Para un estudiante de los aos 30 tena ideas avanzadas que se afin-

caban en la geologa. De acuerdo a su lectura de Freud, y puesto que

el viens se conceba a s mismo como un arquelogo, Lvi-Strauss

se percata de que el psicoanlisis exploraba las ruinas de un paisaje

psquico incomprensible en primera instancia. Y Marx, a quien ley a

los 17 aos, construa modelos sociales que era menester confrontar

con la realidad. Geologa, psicoanlisis, marxismo, las tres disciplinas

demuestran que comprender consiste en reducir un tipo de realidad a

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otro; que la realidad ms veraz nunca es la ms visible; y que la natura-

leza de lo verdadero se transluce ya en el esmero que intenta ocultar,

escribe Lvi-Strauss en Tristes trpicos.

La gran aventura del espritu comienza a finales de los aos 30 con

la observacin de los grupos amerindios en el Mato Grosso y en la

Amazonia. Son los Caduveo, los Bororo, los Nambikwara, la Tupi-

Kawahib: pasada la sorpresa de la primera impresin, el etnlogo los ve

sujetos a estructuras sociales inconscientes, expresadas en sus formas

de parentesco. En 1949, Las estructuras elementales del parentesco

su tesis de Estado recurre a la complicidad del matemtico Andr

Weil para descifrar el orden de las alianzas familiares por medio de la

teora de conjuntos, introduciendo la idea de que un modelo lgico-

matemtico permite comprender lo social. Concebido de esta forma,

todo parentesco aparece como un sistema de intercambio de mujeres

y de bienes materiales, en el que Lvi-Strauss perciba en la poca la

separacin entre cultura y naturaleza. Pero si en este estudio, que ms

tarde fue objeto de tantas polmicas, el espritu sienta las bases de

modelos a partir de una realidad muy compleja, lo sensible regresa

al fin de la obra. Y con qu lirismo!, pues a diferencia de los bienes

materiales, las mujeres hablan; y este intercambio de signos pasin,

misterio, afecto s, eso cambia todo. Hasta nuestros das, la

humanidad ha soado con aprehender ese instante fugitivo donde le

fue permitido creer que poda usar con astucia la ley de intercambio,

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ganar sin perder, disfrutar sin compartir, dice Lvi-Strauss en Las

estructuras elementales del parentesco. Lnea de fuga de un paraso

imposible de encontrar.

Al usar las matemticas, Lvi-Strauss realiz un llamado a las ciencias

jams desairado despus. Ya en 1949, al trabajar sobre un caso de

magia entre los Zuni de Nuevo Mxico, los Kwakiutl de la regin de

Vancouver y los Cuna de Panam, analiza el extrao poder de las pala-

bras sobre el cuerpo, que Freud convirti en la base del psicoanlisis.

Eso curaba, por supuesto y, claro est, eso tambin mata. As funciona

la eficacia simblica. Como puede apreciarse tambin en los campos

de batalla o bajo los efectos de las bombas, el miedo a los efectos del

vud altera el sistema simptico, disminuye el volumen sanguneo,

debilita la tensin arterial y puede ocasionar la muerte. A la manera de

un Freud que nunca hubiera renegado de sus primeras concepciones

psico-fisiolgicas, Lvi-Straus no suelta jams el hilo que une el esp-

ritu al cuerpo. Desde 1949, confiando en las investigaciones suecas

que identifican el papel de los polinucletidos en las clulas nerviosas,

presenta el sustrato bioqumico de la cura mediante el habla, trtese

de psicoanlisis o de chamanismo. Y construye su teora.

Durante la cura, las palabras de los mitos y la palabra del psicoanlisis

inducen una transformacin orgnica que reorganiza la estructura del

espritu para adaptarla a la perturbacin que provoca el desorden. La

eficacia simblica escribe Lvi-Strauss en Antropologa estructural

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I. Magia y religin. La eficacia simblica consistir precisamente en

esta propiedad de induccin que poseen, unas en relacin a otras, las

estructuras formalmente homlogas que pueden edificarse, con mate-

riales diferentes, en las diferentes etapas de lo vivo: proceso orgnico,

psiquismo inconsciente, pensamiento reflexivo. Y concluye acerca de

la fuerza de la metfora potica con palabras increbles: Nosotros

constatamos, de este modo, el valor de la intuicin de Rimbaud cuan-

do dice que [la metfora] puede servir para cambiar al mundo. En

1971, en Raza y cultura, su segunda conferencia contra el racismo sos-

tenida a solicitud de la UNESCO, Lvi-Strauss utiliza la gentica de los

pueblos para demostrar, con el ejemplo de las inmunidades cruzadas

entre la malaria y la sicklemia en frica, que, a largo plazo, la cultura

puede modificar el patrn gentico de un grupo humano. El espritu

del hombre puede todo, incluso eso. Pero su eficacia se inscribe en

una totalidad.

Acaso descubramos un da que la misma lgica opera en el pensa-

miento mtico y en el pensamiento cientfico escribe Lvi-Strauss en

1955. Siete aos ms tarde, con El pensamiento salvaje, franquea el

paso: s, la misma lgica acta en todo pensamiento, ya sea salvaje,

revestido de magia y mito, o bien civilizado, utilizando la ciencia y

sus aplicaciones. Presente en Occidente con el trabajo manual, el pen-

samiento salvaje est en todo. El inmenso trabajo de las Mitolgicas

ya est en camino, repartido en cuatro volmenes desde 1964 hasta

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1971: Lo crudo y lo cocido, De la miel a las cenizas, El origen de las

maneras de mesa, El hombre desnudo. Tomando como punto de par-

tida un mito bororo, que relata la historia de un hijo incestuoso casti-

gado por su padre y resucitado en un demiurgo heroico para vengarse,

Lvi-Strauss recorre ochocientos trece relatos de mitos, de los cuales

algunos son japoneses (una pequea excursin). De esta manera des-

pliega la aventura del hombre amerindio con los animales, los rboles

y los dioses a partir de un simple gesto universal: prender el fuego.

rase una vez un jovencito admirable que estudi filosofa a falta de

otra opcin al no saber qu hacer con su vida. La Historia tomara otra

decisin. El etnlogo que en toda su obra rechaz la filosofa fue sin

duda el mejor filsofo de su tiempo; aqul que, al no tener obstculos

para su curiosidad, reflexion sobre la cestera, un cuadro de Nicolas

Poussin, un collar de Clouet, el intercambio de botellas de vino en los

pequeos bistrs del suroeste de Francia en los aos 1930, el mito de

Cendrillon y el mito de Edipo; sobre Japn, las peras de Richard Wag-

ner, la obra de Chrtien de Troyes y el canibalismo, el pensamiento de

Jean-Jacques Rousseau y el uso de la sonaja, en fin, una no acabara

nunca. Su obra no deja lecciones, es cierto. Salvo una. La leccin de un

pensamiento destinado a jams abandonar la aventura del espritu.

Catherine Clment. Tomado de Mgazine Littraire on line.

Traduccin de Hctor Orestes Aguilar

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Las Cantigas de Alfonso X por primera

vez juntas en exposicin en Murcia

Murcia, (EFE).- Las Cantigas de Santa Mara, de Alfonso X, se podrn

ver juntas por primera vez en la historia en una exposicin monogrfi-

ca que sobre el rey Sabio y el siglo XIII espaol se inaugurar el prxi-

mo mes de octubre en Murcia.

El objetivo de la misma es dar a conocer la importancia del monarca,

su actividad poltica en Espaa y Europa, as como el esplendor cultural

que promovi durante su reinado. As lo han explicado en la presen-

tacin de la muestra el presidente territorial de Caja Mediterrneo

(CAM), ngel Martnez; el alcalde de Murcia, Miguel ngel Cmara

y el director general de Cultura de la Regin, Enrique Ujaldn, orga-

nizadores de la misma, y el comisario de la muestra, el catedrtico de

Historia Medieval de la Autnoma de Madrid Isidro Bango.

La exposicin pretende mostrar la importancia de la figura de Alfon-

so X, considerado por algunos historiadores como el monarca ms

universal y brillante de la Edad Media hispnica, en los campos de larenovacin de las leyes, Las Partidas, as como en los aspectos arts-

ticos y culturales o la astronoma.

Bango ha manifestado que la premisa conocer nuestro pasado para

entender el presente es la gua de esta exposicin, donde se explicar

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la historia con coherencia para una fcil comprensin del contexto

de la poca. Esto, a travs de la contemplacin de obras como El

Corpus del Scriptorium real, donde se realizaba su obra literaria, los

cdices y los trabajos de traduccin, adems de una de las piezas

reina de los talladores de marfil europeo: la Virgen Abridera, que se

conserva en Allarz (Orense); o fichas y tableros del juego de ajedrez al

que el monarca era muy aficionado.

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El comisario de la muestra ha destacado entre las piezas estrella de

la muestra, que permanecer abierta hasta enero de 2010, una casulla

del arzobispo de Toledo, Sancho de Aragn, en la que se unen borda-

dos en seda y oro los escudos de los reinos de Castilla, Len y Aragn.

Tambin joyas de la orfebrera, como el Relicario de las Tablas alfonses

o el del Santo Sepulcro, obras que han sido cedidas por instituciones

tanto espaolas como britnicas e italianas.

Isidro Bango ha dicho que el trabajo cientfico se plasmar en un

catlogo, en el que cuarenta especialistas nacionales y extranjeros

mostrarn la dimensin del personaje y de su obra.

Alfonso X tuvo una relacin especial con Murcia, como la reparticin

de la Huerta en la que se permiti el asentamiento de castellanos y

aragoneses. Aunque muri en Sevilla, su corazn se custodia en la

Catedral murciana.

En una de sus Cantigas, la nmero 169 dedicada a la virgen de la

Arrixaca, Alfonso X relata a modo autobiogrfico algunos de los suce-

sos que protagoniz junto a su suegro Jaime I, respecto a las relaciones

entre cristianos y musulmanes.

Fuente: EFE

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Directorio


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INSTITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGA E HISTORIA

DIRECTOR GENERAL

ALFONSO DE MARIA Y CAMPOS CASTELL

SECRETARIO TCNICORAFAEL JULIO PREZ MIRANDA

SECRETARIO ADMINISTRATIVOLUIS IGNACIO SAINZ CHVEZ

COORDINADORA NACIONAL DE MUSEOS Y EXPOSICIONESMIRIAM KAISER

DIRECTOR DEL MUSEO NACIONAL DE LAS CULTURASY DEL CORREO DE LAS CULTURAS DEL MUNDO

LEONEL DURN SOLS

STA ES UNA PUBLICACIN DELCENTRO DE ESTUDIOS SOBRE LA DIVERSIDAD CULTURAL (CEDICULT)

DEL MUSEO NACIONAL DE LAS CULTURAS

EDITORMARIANO FLORES CASTRO

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DE LOS ARTCULOS, NOTAS Y FOTOGRAFAS.

MXICO, D.F., 15 de noviembre de 2009.

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