Sobre el pretendido antropocentrismo

Bueno, cuando hablamos de propósito, podemos distinguir entre propósito objetivo y subjetivo. El subjetivo sería uno como que yo piense que mi propósito sea escribir libros de filosofía y pedagogía que afecten las ideas de mi país. Un ejemplo.

El objetivo, sería algo que es independiente de los deseos humanos, o de los propósitos que se propongan para sí mismos.

No es necesario un propósito objetivo para yo darme propósitos subjetivos. Pero sin propósito objetivo, en realidad los propósitos subjetivos son los que consisten un Wishful Thinking. Me doy una importancia que objetivamente no tengo, y en realidad la diferencia mía con la de las heces de un perro, es de tipo física. Pues no hay nada que diga objetivamente que soy más importante que aquello.

En ese sentido también seríamos antropocentristas, al sentirnos valiosos cuándo objetivamente no tenemos por qué serlo.

Con respecto a la postura de atribuirle un propósito objetivo al cosmos, en mi caso no lo hago porque quiero darle sentido a mi existencia, sino porque considero que así lo muestra el hecho de mi misma existencia, el ajuste fino, la espiritualidad del cerebro humano, etc.

Pero inclusive, si alguien creyese en el propósito por meras ganas de darle sentido a su existencia, aunque es un Wishful Thinking, podría estar en lo correcto. Ya que constituye una falacia genética juzgar la validez de una aseveración, basados en su origen.

Por ello, digo que al fin y al cabo somos igual de antropocentricoss unos y otros (comparando éstas dos formas de antropocentrismo claro, porque podrían haber otras más arrogantes) y ni el más intrépido puede escapar del mismo, por el sólo hecho de creerse en la capacidad de entender el universo.