Se publican en este número cuatro Informes · pacientes con distrofia macular de Stargardt,...

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Se publican en este número cuatro Informes que hacen referencia a problemas actuales de in- terés. En el primero se comenta la posibilidad de tratar algunas enfer- medades oculares con células madre embrio- narias, haciendo una revisión bibliográfica sobre los antecedentes de estos tratamientos. En el segundo, se re- coge la opinión de los Obispos españoles sobre la retirada del antepro- yecto de ley del aborto, por el señor Rajoy. En el tercero, se comenta la decisión de Google y Face- book de pagar determinados tratamientos a sus empleadas para aumentar su productividad la- boral retrasando su maternidad y el cuarto hace referencia a la posibilidad de regenerar lesiones de médula espinal con terapia celular, al hilo del tratamiento de un paciente de 38 años afectado de este tipo de lesión. 1. Personas resistentes a la infección por el VIH 2. Se derivan células pulmonares a partir de cé- lulas iPS 3. ¿Es realmente eficaz la terapia celular en el in- farto de miocardio? 4. Características biológicas de las células iPS 5. Retrasar la maternidad puede crear problemas para las madres y sus hijos 6. Terapia celular para el tratamiento de la dia- betes 7. ¿Es posible crear un ovario artificial? 1. Uso de células troncales embrionarias para tratar graves enfermedades oculares 2. Los Obispos españoles afirman que defender la vida humana es un deber de los creyentes y de toda persona de buena voluntad. 3. ¿Apoyo a los tratamientos de infertilidad o intento de aplazar la maternidad? 4. Un paso adelante en la regeneración medular nº 445 / 15 octubre 2014 correspondencia: [email protected]

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Se publican en este número cuatro Informes que hacen referencia a problemas actuales de in-terés. En el primero se comenta la posibilidad de

tratar algunas enfer-medades oculares con células madre embrio-narias, haciendo una revisión bibliográfica sobre los antecedentes de estos tratamientos. En el segundo, se re-coge la opinión de los

Obispos españoles sobre la retirada del antepro-yecto de ley del aborto, por el señor Rajoy. En el tercero, se comenta la decisión de Google y Face-book de pagar determinados tratamientos a sus empleadas para aumentar su productividad la-boral retrasando su maternidad y el cuarto hace referencia a la posibilidad de regenerar lesiones de médula espinal con terapia celular, al hilo del tratamiento de un paciente de 38 años afectado de este tipo de lesión.

1. Personas resistentes a la infección por el VIH

2. Se derivan células pulmonares a partir de cé-lulas iPS

3. ¿Es realmente eficaz la terapia celular en el in-farto de miocardio?

4. Características biológicas de las células iPS

5. Retrasar la maternidad puede crear problemas para las madres y sus hijos

6. Terapia celular para el tratamiento de la dia-betes

7. ¿Es posible crear un ovario artificial?

1. Uso de células troncales embrionarias para tratar graves enfermedades oculares

2. Los Obispos españoles afirman que defender la vida humana es un deber de los creyentes y de toda persona de buena voluntad.

3. ¿Apoyo a los tratamientos de infertilidad o intento de aplazar la maternidad?

4. Un paso adelante en la regeneración medular

nº 445 / 15 octubre 2014

correspondencia:[email protected]

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IntroducciónEl pasado 15 de octubre el periódico El Mundo

publicó un Informe, con destacado relieve editorial, comentando un reciente artículo publicado online en la revista The Lancet. (doi.org/10.1016/S0140-6736(14)61376.3) en esa misma fecha.

Los hechosEn el artículo de The Lancet se relata cómo, a partir

de células troncales embrionarias, se obtienen células de epitelio de retina, que son trasplantados a nueve pacientes con distrofia macular de Stargardt, ma-yores de 18 años y a otros nueve con degeneración macular asociada a la edad. Los pacientes fueron se-guidos durante 22 meses con los pertinentes exáme-nes oftalmológicos. Los estudios fueron registrados en la página web Clinical Trials.gov, con el núme-ro NET0134500, para los enfermos con distrofia de Stargardt, y con el NCT01344993 para las de enfer-medad degenerativa macular asociada a la edad.

Se trata de un ensayo clínico de fase 1/2, por lo que su finalidad es evaluar la seguridad y tolerabilidad del tratamiento, y no los resultados clínicos. No se pudo detectar evidencia de proliferación adversa o recha-zo. Los efectos adversos encontrados fueron atribuidos a la cirugía vitreo-retinal y a la terapia inmunosupreso-ra. Aunque no se buscaba valorar los efectos clínicos, los autores comentan que se recuperó la visión en diez pa-cientes (en el ojo tratado), se mantuvo sin cambios en siete y disminuyó en uno. Mientras que los ojos de los pa-cientes que no fueron tratados mantu-vieron una visión similar a la inicial.

Los autores comentan que ésta es la primera vez que se realiza una experiencia similar, mostrándose segura, con permanencia del implante celular y posible actividad biológica de las células progenitoras trasplantadas, lo que les permite con-cluir que a partir de células troncales embrionarias se pueden derivar células que podrían ser utilizadas con seguridad en la clínica médica.

Comentarios de El MundoAnte estos hechos se comenta en El Mundo que

hasta este momento “células pluripotenciales aún no se han utilizado con éxito para tratar ninguna enfer-medad humana”, lo que puede deberse a la “posibi-lidad de que lleguen a formar tumores o de que se transdiferencien en tipos de células que no se desea-ban obtener.

Sigue comentando El Mundo que “el trabajo lidera-do por Robert Lanza, director científico de Advanced Cell Technology, no solo ha demostrado la seguridad del uso terapéutico de las células troncales, sino que también ha logrado resultados positivos en el trata-miento de dos enfermedades oculares, que suponen la primera causa de ceguera en los países desarro-llados”.

Nos parece excesivamente optimista esta afirma-ción, por no decir infundada, pues los ensayos de fase 1/2, como ya se ha comentado, no van dirigi-dos a evaluar resultados clínicos, sino a comprobar la seguridad y tolerabilidad del fármaco o produc-to utilizado. Pero además, que de 18 pacientes se comprueben efectos beneficiosos en 10, sin efecto de ningún tipo en 7 y negativos en 1, no parece que

sea una evidencia médica suficiente, para afirmar lo que se afirma, inclu-so además, como el propio articulista de El Mundo comenta, el número de enfermos incluidos en el ensayo es “insuficiente para valorar adecuada-mente su validez como terapia médi-ca”, lo que contrasta con el título del Informe que reza así: “Un trasplante de células madre embrionarias logra regenerar la visión en pacientes con ceguera”. Sin duda, es una optimis-

ta interpretación de las experiencias. Además el tí-tulo incluye un error médico grave como es utilizar el supuesto efecto beneficioso a las células troncales embrionarias, cuando, si acaso existió, se debió a las células de epitelio retiniano derivadas de las células troncales embrionarias.

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Antecedentes a las experiencias aquí comentadas

1. Primeras experiencias preclínicas con células troncales embrionarias humanas

No podemos desarrollar aquí un exhaustivo exa-men de este tema, por lo que simplemente vamos a referirnos a algunos de los hechos más destacados re-lacionados con el mismo.

En 2007, Laflame y colaboradores demostraron por primera vez que se podían derivar cardiomiocitos (células de corazón) a partir de células troncales em-brionarias humanas y que con ellas se podía mejorar la función cardiaca de corazones de rata infartados (Nature Biotechnology 25; 1015-1024, 2007), lo que fue un gran estímulo para potenciar las investigaciones en este campo.

A partir de esas experiencias se pu-sieron en marcha otras muchas que demostraron la posibilidad de derivar células cardiacas de cualquier tipo, principalmente cardiomiocitos y cé-lulas endoteliales (Cell 151; 221-232, 2012).

En 2008, se comprobó también que a partir de células troncales embrio-narias se podrían obtener células de músculo esquelético, y que cuando éstas se transfe-rían a ratones con distrofia muscular se conseguía mejorar la función de los músculos dañados, sin que se produjeran tumores secundarios (Nature Medici-na 14; 134-143, 2008). Estas experiencias abrían la puerta a la posibilidad de utilizar este mismo tipo de células en pacientes con distrofias musculares, espe-cialmente la distrofia muscular de Duchenne.

También en el campo neurológico son muchas las experiencias preclínicas realizadas con células tron-cales embrionarias humanas, como se recoge en PNAS (www.pnas.oeg/cgi/doi/10.

1073/pnas.11084 87108), pero hasta ese momen-to no se había conseguido una completa integración funcional de las células neuronales producidas. Sin embargo, esto parece que ha sido logrado, según se describe en el referido artículo de PNAS, al demos-trar los autores que neuronas derivadas de células troncales embrionarias humanas trasplantadas a rato-nes son capaces de establecer conexiones sinápticas con las neuronas corticales de los ratones a los que han sido trasplantadas.

Según se publicó el 21 de abril de 2013 en Nature Biotechnology (DOI: 10.1038/nbt.2565) un equipo

de la Universidad de Winsconsin-Madison, en Esta-dos Unidos, ha trasplantado a ratones con trastornos de la memoria células troncales embrionarias huma-nas que tras el trasplante se convirtieron en células nerviosas, lo que favoreció que los ratones enfermos recuperaran la memoria. Es de interés señalar que esta es la primera vez que células embrionarias hu-manas pueden implantarse en cerebros animales y reparar alteraciones neurológicas.

Otro de los más prometedores avances experimen-tales en el uso de las células troncales embrionarias es el que se refiere al área oftalmológica. Así, en un trabajo publicado en Nature Biotechnology (31; 741-747, 2013) se demuestra que de células troncales em-

brionarias murinas se pueden produ-cir bastones retinianos sensibles a la luz. Pero más importante es que las células producidas se pudieron inte-grar en retinas de ratones adultos que padecían diversas retinopatías, que tras el trasplante evolucionaron fun-cionalmente de forma positiva y que las células trasplantadas seguían es-tando presentes tres semanas después del injerto, e incluso establecían co-nexiones nerviosas con el circuito re-

tiniano. No cabe duda que estas experiencias podrían contribuir al tratamiento de enfermedades retinianas humanas, especialmente la degeneración macular asociada a la edad, cosa que por otro lado ya se está haciendo.

2. Primeros ensayos clínicos con células troncales embrionarias humanas

El primer ensayo con células troncales embriona-rias fue propuesto por la compañía norteamericana Geron. Estaba dirigido al tratamiento de lesiones de médula espinal. También la firma Novocell propuso producir células productoras de insulina a partir de células troncales embrionarias, e igualmente Myto-gen, otra firma norteamericana, propuso producir células epiteliales pigmentadas de retina para tratar a pacientes con degeneración macular asociada a la edad (Nature Biotechnology 26, 598-599, 2008). Las tres propuestas fueron denegadas por la FDA nortea-mericana por no existir a su juico suficientes expe-riencias previas en animales (Nature Biotechnology 26, 598-599, 2008).

Sin embargo, el 23 de enero de 2009, la propia FDA, a propuesta de Geron, aprobó la realización del

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primer ensayo clínico de fase 1 con células troncales embrionarias dirigido a tratar pacientes con lesión de la medula espinal (Nature Biotechnology 2009; 27: 213-214). En el ensayo iban a participar 11 pacientes. El primero fue incluido en octubre de 2009. A me-diados de septiembre de 2011 se habían incluido ya

4 pacientes (Boston Article 20-07-2011).

También la firma Advanced Cell Te-chnology propuso un segundo ensayo clínico utilizando células troncales em-brionarias para tratar la distrofia macular de Stargard, una en-fermedad progresiva

que afecta a los jóvenes y que puede llegar a producir ceguera en la edad adulta; así como un tercero para tratar la degeneración macular asociada a la edad (Nature.com, Spoonful of Medicine. Posted by Elie Dolgin on September 22, 2011).

Por otro lado, la misma firma Advanced Cell Tech-nology propuso el primer ensayo clínico con células troncales embrionarias a realizar fuera de Estados Unidos, en el «Moorfields Eye Hospital» de Londres. En él se pretendía igualmente tratar 12 enfermos con distrofia muscular de Stardgard (Nature.com, Spoon-ful of Medicine. Posted by Elie Dolgin on September 22, 2011).

Sin embargo, el ensayo propuesto por Geron no dio los resultados esperados, por lo que el 14 de no-viembre de 2011 la firma californiana anuncio que lo interrumpía (Nature 479; 272-273, 2011). La ra-zón aducida por Geron para suspender su ensayo fue económica, pues según ellos, en los tres primeros trimestres de 2011 Geron perdió 65 millones de dó-lares (Nature 479; 272-273, 2011). Pero parece que en el fondo la razón última fue la no obtención de buenos resultados clínicos, pues como ellos mismos comentaron «aunque el tratamiento parece seguro, no han encontrado ninguna mejoría en la función de la médula espinal de los pacientes tratados» (Nature 479; 272-273, 2011). Pero sea de una u otra forma, lo cierto es que se había suspendido el primer ensayo clínico iniciado con células troncales embrionarias.

Aparte de las dificultades éticas que este tipo de ex-periencias tienen, pues no hay que olvidar que para obtener las células troncales que se trasplantan hay

que destruir embriones humanos, existen también dificultades médicas, entre ellas, especialmente la posibilidad de que se puedan desarrollar tumores en los pacientes trasplantados. Esta inquietud ha sido re-cientemente manifestada por dos destacados expertos del área biomédica, James Thomson y John Gearhart, al afirmar que “existe una gran preocupación entre muchos de nosotros ante la posibilidad de que algu-nos de los pacientes incluidos en el estudio puedan desarrollar tumores, lo que podría ser un auténtico desastre” (Nature Biotechnology 2009; 27: 213-214).

3. Situación actual de los ensayos clínicos con cé-lulas troncales embrionarias

Con frecuencia se difunde en determinados medios de comunicación que se están llevando a cabo impor-tantes y numerosos ensayos clínicos con células tron-cales embrionarias, lo que no coincide exactamente con la realidad. Para comprobarlo basta acudir a la página web Clinical Trials.gov en la que se consta-ta que en octubre de 2011 estaban en marcha en el mundo 110.468 ensayos clínicos, en 174 países. De ellos 3601 con células troncales adultas y solamente 11 con células troncales embrionarias. Sin embargo, analizando pormenorizadamente esos datos noso-tros hemos podido comprobar que solamente dos de ellos, los números 9 y 10, estaban utilizando células troncales embrionarias con fines terapéuticos (Revis-ta Clínica Española 212; 403-406, 2012). Volviendo a evaluar estos datos, en octubre de 2013 se com-

prueba prácticamen-te lo mismo, pues los ensayos clínicos en marcha en ese mo-mento eran 144.360, en 185 países, los realizados con célu-las troncales adultas 4451 y con células troncales embriona-rias 15; pero al igual que en el caso ante-rior tras realizar una

pormenorizada evaluación de dichos ensayos (Acta Bioethica, en prensa) hemos podido constatar que so-lamente tres de ellos estaban dirigidos a un fin espe-cíficamente terapéutico, dos a tratar la degeneración macular asociada a la edad, y un tercero a producir epitelio pigmentado de retina para tratar a pacientes con enfermedad de Stardgard.

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Es decir, nos parece que se puede afirmar sin temor a errar que en este momento son solamente tres los ensayos clínicos que utilizan células troncales em-brionarias, dos dirigidos al tratamiento de degenera-ción macular asociada a la edad adulta y un tercero a tratar la enfermedad de Stardgard.

Datos actualesLos primeros resultados de estos estudios se pu-

blicaron en The Lancet (379; 713-720, 2012). Es de señalar, cosa a nuestro juicio inusual en lo que a ex-perimentación clínica se refiere, que únicamente se comunicaron los resultados de dos pacientes, uno con distrofia macular de Stargardt y otro con degeneración macular relacionada con la edad (NCTO1344993), afirmándose que el paciente de Stargardt mejoró la agudeza visual y que también mejoró el de la dege-neración macular asociada a la edad.

Como comentábamos nosotros en un trabajo an-terior (Acta Bioethica, en prensa) ¿No parece que se extraen demasiadas conclusiones a partir de datos de dos enfermos? Somos de la opinión de que en este caso no hay evidencia médica suficiente para afirmar que a partir de células derivadas de células troncales embrionarias, se puede mejorar la visión de dos gra-ves enfermedades oculares, la enfermedad de Star-gardt y la degeneración macular asociada a la edad.

Ahora se han publicado los resultados del ensayo clínico que estamos comentando (The Lancet, doi.org /10.1016/S0140-6736 (14)61376-3); en él, a nuestro juicio, también se consideran como evidencias médi-cas lo que nos parece son únicamente presunciones.

Investigaciones con células iPS.Recientemente (Nature News, doi:10.1038/na-

ture.2014.15915) se ha publicado un trabajo dirigido por Yasuo Kurimoto del japonés “Kobe City Medical Center Ge-neral Hospital” en el que se describe, la implantación de epitelio pigmentario de retina obtenido a partir de células iPS

generadas por reprogramación celular de células epi-teliales de la propia paciente, siguiendo las experien-cias anteriores de Yamanaka con este tipo de célu-las, con resultados satisfactorios. A diferencia de los

ensayos que utilizan células troncales embrionarias descritos más arriba, en este caso no se han necesi-tado embriones –ni, por tanto, su destrucción- para

la obtención de cé-lulas troncales, sino células epiteliales adultas de la propia paciente, que son so-metidas a un proceso de reprogramación para transformarlas en células troncales pluripotentes indu-cidas (siglas iPS, en inglés) que, a su vez,

son diferenciadas hacia células de epitelio pigmen-tario de retina y posteriormente implantadas. Los autores refieren ausencia de complicaciones tras el trasplante.

Una de las firmantes del estudio, la oftalmóloga Masayo Takahashi, ha afirmado tras el éxito de la ex-periencia clínica que “Con esto como punto de par-tida, sin duda, quiero traer (la medicina regenerativa basada en células iPS) a tantas personas como sea posible”.

Valoración éticaAl valorar la eticidad de las experiencias publica-

das en The Lancet, hay que tener en cuenta que el trabajo está financiado por la propia firma farmacéu-tica Advanced Cell Technology, de la que Lanza es director científico, con las implicaciones éticas que ello puede tener.

También nos parece éticamente cuestionable que se den por seguros resultados de ensayos clínicos no finalizados, pues ello puede crear infundadas ex-pectativas a los pacientes que sufren estas graves en-fermedades. Como se comenta en Nature (510, 187-188, 2014), “procedimientos no éticos y promesas infundadas es lo que fundamentalmente se hace en los titulares de algunos medios de comunicación con respecto a la terapéutica con células troncales que se pueden utilizar en la medicina regenerativa, cuando su veracidad es todavía dudosa. Hay informes regula-res de compañías farmacéuticas que están explotando la vulnerabilidad de pacientes que sufren graves en-fermedades con promesas de curación, con terapias no probadas, con terapias milagrosas”. Este juicio de valor puede atribuirse a los actuales ensayos clínicos aquí comentados, dirigidos a tratar la degeneración

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macular usando células de retina. Utilizar nuevas te-rapias en humanos y darlas por buenas, requiere mu-cha precaución, cosa que no estamos seguros se haya tenido en cuenta en el caso que se comenta.

Todas estas consideraciones avalan la inseguridad ética de los resultados de estos ensayos clínicos, pero además hay que tener en cuenta que siempre que se utilizan células troncales embrionarias hay que des-truir un embrión humano, lo que sin duda tiene obje-tivas dificultades éticas. Por ello, nos preguntamos si no sería mejor apoyar otro tipo de ensayos clínicos, especialmente aquellos en los que se utilizan célu-las troncales adultas o células adultas reprograma-

das (células iPS), tal como exponemos en el punto anterior. De hecho la investigación con este tipo de células es la que está experimentado un mayor auge en la búsqueda de procedimientos clínicos aplicables en terapia regenerativa en la actualidad.

Como no podía ser de otra forma, nuestro Observa-torio de Bioética se adhiere a las orientaciones de los obispos españoles, y particularmente a la declaración de la Conferencia Episcopal Española, a propósito de la decisión del Gobierno español de retirar el “Ante-proyecto de Ley para la protección de la vida del con-cebido y de los derechos de la mujer embarazada”, y de la polémica suscitada al respecto.

Cabe destacar, como no podía ser de otra manera la unidad de pensamiento de los obispos en este tema. Sus voces se suman a las de diferentes entidades reli-giosas y laicas que tan activamente están participan-do en dicha polémica.

Así, el entonces Arzobispo de Valencia, Don Car-los Osoro, afirmaba, «La vida es un regalo de Dios. La vida no es cuestión de votos, es un derecho que Dios mismo nos ha otorgado, nos regala.» (Reportaje en la Cope del 15/9/2014).

Por su parte, el actual Arzobispo de Valencia, Cardenal Cañizares mani-festaba el 28/09/2014, en su colabo-ración semanal en La Razón, “¿Por qué se ha procedido así? No acabo de entenderlo y me encuentro descon-certado; no se han dado explicacio-nes convincentes ni suficientes. No entiendo lo sucedido, ya que con la medida adoptada se da continuidad y firmeza, y se confirma, la legis-lación vigente que, de hecho, sanciona el derecho a

eliminar al ser humano no nacido –débil, inocente, indefenso– en determinados plazos de su existen-cia, mientras se retira un proyecto que abría una luz de esperanza en medio de la oscuridad cultural que acentúa una cultura de muerte contraria al hombre, injusta y relativista, que no sitúa en el centro al hom-bre y su dignidad.”

Por otro lado, Mons. Mario Iceta, obispo de Bilbao, afirmaba el 26/9/2014 en una entrevista en ABC, “A mí, buscar un consenso me parece una excusa. Pien-so que lo que debe hacer un Gobierno es cumplir con el mandato que sus electores le han dado con mayoría absoluta. La ley actual, que se aprobó en el Gobier-no de Zapatero, no buscó ningún consenso. Entonces hubo incluso un consenso menor que en la actuali-

dad.” Y manifestaba también que, la medida del Gobierno afecta la con-vivencia democrática por incumplir un compromiso con su electorado de defender un principio irrenunciable como es el derecho a la vida.

Igualmente, Mons. Reig Plá, obis-po de Alcalá de Henares y Presidente de la Comisión de Familia y Vida, de la C.E.E., en comunicado de Europa Press del 25/9/2014, afirmaba, “Con-viene denunciar, con todo respeto a su

persona, que el presidente del Gobierno ha actuado con deslealtad respecto a su electorado, al no cumplir su palabra en esta materia, explicitada en su progra-

Justo Aznar y Julio TudelaObservatorio de BioéticaUniversidad Católica de Valencia.

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ma electoral; también ha actuado con insensatez pues ha afirmado que lo sensato es mantener el derecho al aborto, es decir, el derecho a matar a un inocente no-nacido.” Refiriéndose al Partido Popular conti-nuaba afirmando, que éste ya no es una alternativa aceptable para los que defienden la vida y la familia.

Nos parece acertada su afirmación, que ha sido corroborada por el silencio del PP ante la renuncia del Gobierno a defender la vida humana.

Finalmente, el portavoz de la Con-ferencia Episcopal, declaraba a Europa Press el 3/10/2014,

“Cuando hay una ley que considera un derecho el poder matar, salen consecuencias muy duras para el resto de la especie” y continuaba, “ hay unos funda-mentos éticos y prepolíticos que están fallando que hace a una sociedad endeble, porque falta lo princi-pal que es el principio de la inviolabilidad de la vida humana”, y seguía afirmando , que las intenciones que el Gobierno ha manifestado de promover políti-cas para la mujer embarazada y la familia, “hay que plasmarlas en lo esencial que es la protección de la propia vida, después vienen las políticas eficaces de que hagan compatible la vida de la mujer embarazada con su acceso al trabajo en igualdad de condiciones y de ayuda a la familia.”

De este conjunto de opiniones cabe destacar una línea de pensamiento común, que creemos respon-de a la preocupación de los fieles católicos ante las elecciones que se avecinan, y que Mons. Munilla sintetiza, “…los creyentes tienen un serio problema, no existe ningún partido de ámbito estatal capaz de representar el voto católico”, y consecuentemente, “un católico que aspire a ser fiel a los principios de la Doctrina Social Católica, no puede votar en cohe-rencia a los partidos políticos de ámbito nacional pre-sentes en el actual Congreso de Diputados”, lo que corrobora Mons. Iceta al afirmar, “El aborto como un derecho también es sostenido por todo el arco par-lamentario porque ningún grupo político ha objetado nada.”

Pero sobre todo, nos parece importante el docu-mento de la “Comisión Permanente de la Conferen-cia Episcopal Española”, de 2/10/2014, (el lector

puede leer en su integridad, clicando sobre el título siguiente), Defender la vida humana es tarea de to-dos, que manifiesta:

“1. Ante el debate abierto con motivo de la retira-da por parte del Gobierno del “Anteproyecto de Ley para la protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada”, la Comisión Per-manente de la Conferencia Episcopal Española desea de nuevo hacer oír su voz. La vida humana es sagrada e inviolable y ha de protegerse desde la concepción hasta su fin natural. En esa defensa ocupan un lugar privilegiado los más débiles: aquellos que habiendo sido ya concebidos no han nacido todavía. La ciencia prueba que desde el momento de la concepción hay un nuevo ser humano, único e irrepetible, distinto de los padres.

2. No se puede construir una sociedad democráti-ca, libre, justa y pacífica, si no se defienden y respe-tan los derechos fundamentados de todos los seres humanos en su dignidad inalienable y, especialmen-te, el derecho a la vida, que es el principal de todos.

3. Proteger y defender la vida humana es tarea de todos, (el subrayado es nuestro) principalmente de los Gobiernos. España sigue siendo, por desgracia, una triste excepción, al llegar incluso a considerar el aborto como un “derecho”. En este sentido es espe-cialmente grave la responsabilidad de quienes, ha-

biendo incluido en-tre sus compromisos políticos la promesa de una ley que ami-noraba algo la des-protección de la vida humana naciente que existe en la vi-gente normativa del aborto, han renun-ciado a seguir ade-lante con ello en aras

de supuestos cálculos políticos. Hay bienes, como el de la vida humana, que son innegociables.”

Alguien podría preguntarse si es función de los obispos aconsejar sobre opciones políticas, la doctri-na de la Iglesia es clara, no. Pero cuando la política y la gestión del Gobierno comprometen principios irrenunciables, como la vida y la dignidad humana en el estadio de desarrollo que se encuentre, es su de-

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ber pastoral orientar las conciencia de los cristianos y dejar claro que en este caso no se trata de ningún tipo de dirigismo político, sino de defender el dere-cho a la vida de los no nacidos. Como manifestaba Mons. Munilla al afirmar: “Los pastores orientan con sus palabras la conciencia de los creyente y proponen pautas para una sociedad más justa y para la defensa de la dignidad humana” (LD/AGENCIAS 2014-09-28).

IntroducciónEl pasado 15 de Octubre, la cadena NBC News ofreció en primicia una noticia que fue luego re-cogida por un diario nacional1, que se hace eco de una iniciativa promovida por las empresas Apple y Facebook dirigida a “seguir ampliando los benefi-cios para las mujeres, con una nueva política de ba-jas maternales, además de la criopreservación y el almacenamiento de óvulos como parte de nuestro apoyo para tratamientos de infertili-dad”, tal como expresa literalmente el comunicado. Sigue afirmando al respecto: “Queremos dar poder a las mujeres de Apple para que hagan el mejor trabajo de su vida al mismo tiempo que cuidan de sus seres que-ridos y crían sus familias”.

La iniciativa, no obstante, no está exenta de polémica, tal como recoge el mismo artículo. Y no sin motivo.

Tras la bondad incuestionable que entrañan medidas como la de baja maternal paga-da, cobertura médica en las propias instalaciones, «cheque-bebé» de 4.000 dólares a los empleados de Facebook cuando son padres –también si adoptan–, extensión de la baja maternal a cuatro meses –tam-bién para padres y con flexibilidad– y subvención para la guardería en las oficinas, se ofrece otra con-sistente en sufragar la criopreservación de ovocitos, para la que Facebook cubre hasta 20.000 dólares –el precio habitual de dos rondas de congelación de ovocitos, suficiente para conseguir cerca de veinte de ellos– y Apple se compromete a secundar la ini-ciativa a partir de Enero del próximo año.

Hiperestimulación ováricaLa obtención de ovocitos –hasta 20 en dos ciclos de estimulación- obliga a provocar una ovulación

múltiple en la mujer, mediante la administración de fármacos como el clomifeno, y no está exenta de riesgos. Presenta efectos secundarios que pueden llegar a ser graves, como trastornos tromboembóli-cos, algunos tipos de cáncer o, incluso, la muerte2,3.

Crioconservación de ovocitosEn un trabajo publicado en 20104 se compara la

tasa de embarazos clínicos resultantes de la im-plantación de embriones obtenidos por fecundación in vitro partiendo de ovocitos crioconservados por dos técnicas diferentes, vitrificación y congelación lenta, obteniendo un porcentaje de éxito del 38% y 13% respectivamente. Las tasas de aborto espontáneo fueron similares. Estas cifras son similares a las obtenidas en la fecundación in vitro con em-briones frescos o crioconservados, y presentan un alto índice de pérdidas

embrionarias, que sin duda sigue planteando un pro-blema ético.

Posponer la maternidad: ¿recomendable?Parece deducirse de la lectura del artículo que nos

ocupa, que la medida propuesta pretende algo más que ofrecer una ayuda en casos de infertilidad, como se afirma en el mencionado artículo. El que haya sido ofertada a todas las mujeres de las mencionadas empresas y aireada mediáticamente a través de un importante canal de televisión norteamericano, hace sospechar que tras la medida se esconde un intento de lograr que mujeres empleadas en las empresas decidan, a través de la opción de congelar sus ovo-citos para ser utilizados en un futuro, posponer su posible maternidad. Quizá resulten más útiles a la empresa en un determinado intervalo de edad –su

Justo Aznar y Manuel ZunínObservatorio de BioéticaUniversidad Católica de Valencia.

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juventud-, en el que un embarazo podría suponer una interrupción en su actividad laboral, estratégi-camente problemática para los intereses de las men-cionadas multinacionales.

Pero animar indiscriminadamente a mujeres jóve-nes a posponer su maternidad hasta edades madu-ras, no parece lo biológicamente más sensato. A partir de los 35 años una mujer ve reducida su probabilidad de embarazo, se incrementa el riesgo de que sus hijos padezcan anomalías genéticas, la probabilidad de aborto es también mayor (más del doble en una mujer de 40 años respecto al de una menor de 30), los problemas de salud durante el embarazo también son más frecuentes, como diabetes, hipertensión arterial o preeclampsia. También el parto de una mujer de más de 35 años puede presentar más complicaciones. Por último, aunque no es nuestro caso, la posibilidad de emba-razos múltiples aumenta en los embarazos tardíos, aún sin tratamientos para la infertilidad5.

La utilización de ovocitos crioconservados que fueron extraídos cuando la mujer era más joven pre-tende minimizar los riesgos de aborto y anomalías genéticas. Pero no debe olvidarse que el propio pro-ceso de criopreservación unido a la necesaria fecun-dación in vitro posterior, introduce nuevos riesgos que pueden ser superiores a los de un embarazo fru-to de una fecundación natural, aún en edad madura.

Habría que añadir, además, que las objeciones que pueden plantearse no terminan en el propio embara-zo, sino que pueden extenderse al ejercicio de la ma-ternidad posterior, para la que la edad joven supone una ventaja objetiva.

¿Fecundación natural o fecundación in vitro?Optar por la crioconservación de ovocitos conlle-

va también hacerlo por la fecundación in vitro. Re-nunciar, por evitar un embarazo, a la fecundación natural cuando esta es posible, para buscarlo en un

futuro utilizando un ovocito crioconservado, avoca a la mujer a la fecundación in vitro, que presenta in-dudablemente, más riesgos y menos probabilidades de embarazo que una fecundación natural en con-diciones normales. Ignoramos si las empresas en cuestión también sufragarán el proceso de fecunda-

ción in vitro en el futuro, que resulta, además de más inseguro e ineficaz, mucho más caro y, probablemente, a cargo de la empleada.

Y un problema más: los embriones sobrantes que resultan de toda fecun-dación in vitro, verdadero problema ético sin resolver.

Conclusión. A nuestro juicio, se está planteando

en este tema un conflicto de intereses para la mujer sobre aspectos que no son equipara-bles en cuanto a su jerarquía de valores. El derecho a la promoción laboral no debería equipararse al de la maternidad, ni, como parece ocurrir en este caso, imponerse a él. Inducir a una mujer, en aras de un mayor rendimiento profesional, a renunciar a su le-gítima opción de vivir su maternidad en la edad más favorable para ello, no parece, precisamente, defen-der sus derechos y dignidad. Los esfuerzos por la conciliación de la vida laboral y familiar, primando ésta sobre aquella, parece antropológicamente más correcto, más satisfactorio para la mujer y su espo-so y mucho más beneficioso para una sociedad que envejece a pasos de gigante por falta de un relevo generacional suficiente.

Justo Aznar y Julio TudelaObservatorio de BioéticaUniversidad Católica de Valencia.

Referencias ABC · Sociedad · 16 oct. 2014 Jóźwik M, The mechanism of thromboembolism in the course of ovarian hyperstimulation síndrome. Dev. Period Med. 2012;16(4):269-71 Cluroe AD, Synek BJ. A fatal case of ovarian hyperstimulation syndrome with cerebral infarction. Pathology 1995;27(4):344-646. doi:10.1080/00313029500169273 Smith, GD. et al. Prospective randomized comparison of human oocyte cryopreservation with slow-rate freezing or vitri-fication. Fertility and Sterility 2010;94(6):2088-95http://umm.edu/health/medical/spanishpreg/embarazos-de-cuidados-especiales/embarazo-en-edad-avanzada

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Existe una casuística en cada paciente que su-fre lesión medular de forma que una terapia que resulta exitosa en un paciente no es trasladable a todos los demás.

Esta semana tanto la prensa nacional como la in-ternacional se hacían eco de una publicación en la revista Cell Transplantation (CT-1239 Cell Trans-plantation Early Epub), que publica el resultado de un ensayo clínico donde se muestra un hombre de 38 años y de origen búlgaro cuya médula fue sec-cionada tras sufrir una puñalada en la espalda, que ahora puede caminar de nuevo con la única ayuda de un andador.

Ante esta buena noticia, sin duda una noticia espe-ranzadora, debemos ser cautos en su lectura.

La lesión medular es una enfermedad que trastor-na de forma muy dramática no sólo la vida de quien, bien de forma congénita bien repentina la sufre, sino de los familiares y amigos que viven de cerca las di-ficultades que atraviesa la persona no sólo en el ám-bito físico sino también psicológico e incluso social. Es por esto que cualquier noticia relacionada con la lesión medular siempre genera un gran impacto social que puede llevarnos de forma precipitada a pensar que “ya tiene cura”.

Debemos ser cautos e indagar un poco más. Cuando sucede una lesión medular se produce una interrup-ción en la vía de comunicación entre los músculos y

el cerebro, de forma que la información que éste envía para que se produzca un movimiento queda interrumpida como si de una conexión eléctrica se tratase. Este caso concreto publica los resulta-dos de una terapia

aplicada a un solo paciente, combinando el tras-plante de tejido nervioso del tobillo con células de la glía envolvente olfatoria. La vía olfatoria, como caso excepcional en el sistema nervioso central, se

caracteriza por tener la capacidad de regenerar con-tinuamente las neuronas sensoriales olfatorias (que son las que nos permiten percibir los olores). En los últimos veinte años, estas células han sido motivo de investigaciones, por su habilidad para promo-

ver el crecimiento de las conexiones interrumpidas en la lesión medular, así como de cubrirlas de mielina (sustancia necesaria para que funcionen).

De esta forma el tejido nervioso del tobillo actuó como

“puente” entre los extremos sanos de la médula para que las células pudiesen desarrollar su función de manera más eficiente.

Este tratamiento se complementó con cinco horas diarias de neurorrehabilitación con una frecuencia de entre 3 y 5 días a la semana.

Siendo ésta una terapia lícita y válida, existen otras publicaciones con resultados también muy positivos utilizando diferentes tipos celulares (células madre procedentes de la médula ósea principalmente), te-rapia farmacológica e incluso electroestimulación.

Debemos añadir también que ciertamente existe una casuística en cada paciente que sufre lesión me-dular de forma que una terapia que resulta exitosa en un paciente no es trasladable a todos los demás.

Es por todo esto que el futuro en la recuperación de la lesión medular pasa por el estudio en profun-didad de cada persona individualmente, y el trata-miento con una terapia combinatoria (celular, elec-troestimulación, fisioterapia, fármacos, biomateria-les, etc.).

Así resulta necesario contar con la ética profesio-nal de los investigadores, que deben publicar sus resultados con impecable rigor científico y trabajar conjuntamente para combinar técnicas que posibili-ten, en un futuro, que esta noticia que hoy conoce-mos sea extensible a todas las personas que sufren una lesión medular.

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01 Hay algunas personas que poseen una mu-tación de su genoma (CCR5A32) que les

confiere determinada resistencia para ser infectados por el VIH. Aprovechando esa circunstancia, ahora se da un paso que puede ser útil para el tratamiento de los individuos infectados por el VIH. Se trata de derivar célu-las iPS de dichos individuos y a partir de ellas producir monocitos/macrófagos. Los autores determinan su resis-tencia a la infección por VIH y sugieren que a partir de ellos se podría abrir una puerta para el tratamien-to de las personas infectadas por este virus (PNAS 111; 9591-9596,2014).

02 En los últimos 3 años se han desarrollado diversos protocolos para derivar diversos

tipos de células pulmonares a partir de células iPS y embrionarias. Ahora se describe (PNAS111; 6120-612,2014) la posibilidad de producir células ciliadas de epitelio pulmonar a partir de células iPS. Según sus autores el trabajo por ellos desarrollado puede aportar algunas de las claves para su uso clínico.

03 En un reciente trabajo (BMJ 2014; 348: g2688) se evalúan las discrepancias que

puede haber en los ensayos clínicos dedicados a la valoración del posible efecto beneficioso de la tera-pia celular en las enfermedades cardiacas. Con esta finalidad analizan 49 ensayos clínicos, encontran-do en los mismos alrededor de 600 discrepancias, concluyendo que aunque es difícil evitar totalmente dichas discrepancias, es importante tratar de hacerlo porque pueden influir en los resultados, añadiendo que solo han encontrados 5 ensayos clínicos, en los que se utilizaban células madre de médula ósea para terapia celular en el infarto de miocardio, sin detec-tar discrepancias y precisamente en ellos la mejora funcional encontrada fue nula.

04 Un problema hace tiempo planteado es determinar si las células iPS producidas a

partir de células somáticas adultas tienen las carac-terísticas propias de las células madre embrionarias. Si así fuera podrían las células iPS sustituir ven-

tajosamente a las células madre embrionarias, con fines experimentales y clínicos y sin la dificultad ética que tiene su uso, pues para obtenerlas hay que destruir embriones humanos. Ahora se consigue por primera vez células de músculo esquelético deriva-das de células iPS que muestran propiedades elec-trofisiológicas similares a las células que se pueden obtener de células madre embrionarias, lo que segu-ramente podría facilitar el uso de estas células con fines clínicos, evitando así las dificultades éticas que tienen las células madre embrionarias (PNAS 111; 8275-8280, 2014).

05 Es sabido que retrasar la maternidad en las mujeres puede producir problemas para

ellas y para sus hijos. Ahora se amplía la información sobre este tema. En un artí-culo publicado en PNAS (doi 10.1073/pnas.1409328111) se comprueba que los hijos de las madres mayores (más de 38 años), además de tener un riesgo aumentado de al-teraciones cromosómicas en su ADN celular, pueden también tener alteraciones en el ADN de sus mitocondrias, lo que podría te-ner consecuencias negativas en ellos, pues es sabido que dichas alteraciones mitocondriales pueden ser causa de graves enfermedades.

06 Una posibilidad de poder tratar la diabetes es poder producir células beta pancreáti-

cas que puedan ser trasferidas a los pacientes y de esta forma generar en ellos la tan necesaria insulina. Hasta ahora existía una dificultad importante para que esta fuera útil en la clíni-ca y es la escasez de células que se producían. Ahora se publica un artículo en Cell (159; 428-439, 2014) en el que el equipo de Douglas Melton, con gran experiencia en el tratamiento de la diabe-tes, pone a punto un método que permite obtener cientos de millones de células beta a partir de célu-las madre humanas pluripotentes. Las células pro-ducidas muestran los marcadores propios de las cé-

Breverías

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lulas beta. Cuando estas células fueron trasplantadas a ratones se demostró que favorecían la producción de insulina después del trasplante de una forma re-gular tras el estímulo con glucosa, y que también el trasplante de estas células mejora la hiperglucemia en ratones diabéticos. Sin duda, posiblemente, un paso más para el tratamiento de esta enfermedad tan extendida, pues solamente en Inglaterra hay más de 400.000 pacientes afectos de diabetes tipo 1.

07 La posibilidad de crear un ovario artificial para poder restaurar la fertilidad en mu-

jeres que no pueden beneficiarse del trasplante de tejido ovárico crioconservado, por padecer un pro-ceso tumoral y existir la posibilidad de que se les puedan trasferir células malignas es una nueva posi-

bilidad de tratamiento. Ahora se publica en Fertiliy and Sterility (101; 1149-1156, 2014) la posibilidad de crear un ovario artificial transfiriendo folículos pre-antrales y células ováricas encapsuladas en matrices de fibrina que contienen bajas concentraciones de fibrinó-geno. Después de una sema-na de la transferencia celular se producen células ováricas en la matriz de fibrina creada, lo que sugiere que ésta es una objetiva po-sibilidad para la producción de un ovario artificial, lo que podría ser útil en la clínica humana, tras la previa y necesaria experimentación animal.