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Sendero de Labra

La Virgen de Labra tiene una gran advocación sobre los Campurrianos de Suso, que la

consideran su Patrona en exclusiva. Sin embargo, esta Virgen también es Patrona de

los abarqueños (de Brañosera), ya que su aparición aconteció en la Sierra del Abra, en

el límite de ambos valles.

Dice la tradición oral, que el 22 de julio de 1615, el pastor Justo Bazo, natural de San Román de

Cameros (La Rioja), estando cuidando su ganado de merinas en las agrestes alturas de los puertos

de Híjar, encontró semioculta una imagen de la Virgen. Maravillado por el hallazgo, comunicó a las

autoridades del valle tan extraordinario suceso, y la llamaron, según el lugar en que apareció, como

Nuestra Señora del Abra. La evolución fonética cambió este nombre por el de Virgen de Labra.

Esta evolución, es igual que la de Cuesta Labra, es decir: CUESTA-DEL-ABRA, CUESTA-EL-ABRA,

CUESTA-L-ABRA, cuya grafía se fijó en "Cuesta Labra". Aquí se ve la pérdida de la "d" y, como

consecuencia, la elisión (desaparición) de la vocal "e" al contacto con la vocal precedente "a".

Esta virgen pronto suscitó gran devoción entre los habitantes de los valles colindantes, por lo que

se edificó la pequeña Ermita de Santa María del Abra en el punto donde se encontró la imagen,

contribuyendo todo el valle a levantarla. Allí quedó el pastor Justo como ermitaño, llegando a

formar una cofradía junto con los vecinos y los pastores, y a la cual hizo donación de sus bienes.

Fue tanta la extensión y fama de la devoción a la Virgen del Abra y su ermita, que el Papa Urbano

VIII concedió una bula o Breve Pontificio en 1624 otorgando indulgencias a los fieles que acudiesen

a la ermita y consagrando la festividad de Santa María de las Nieves (5 de agosto) como día

señalado para la obtención de estas gracias e indulgencias.

Sin embargo, la localización de la ermita en la agreste cumbre de los puertos de Híjar, cubierta

durante nueve meses de nieve, provocó el acuerdo de trasladarla a un lugar más accesible para los

romeros y devotos. Según la tradición, hubo en este punto una pugna entre los cofrades de uno y

otro lado de Sierra Híjar (correspondientes a las actuales provincias de Cantabria y Palencia), pues

ambas partes clamaban que la ermita fuese bajada de la cumbre a sus respectivos valles; se acordó

entonces que el valle que primero recibiese lluvias acogería el nuevo santuario. La lluvia cayó sobre

el valle de Campoo, y así, en 1703, la ermita fue construida sobre la Braña o Prado de Domingo a

mitad de la ladera de la misma sierra, en su vertiente campurriana.

Aun así, como la ermita quedaba aislada al cerrarse los caminos por la nieve, se acordó un nuevo

traslado a la ya existente de San Miguel de Soma Celada, término de Villar, al pie de Pico Liguardi y

Pico Cordel, al Norte de la Sierra de Híjar, donde queda definitivamente emplazada desde el año

1834, hasta nuestros días. Este nuevo asentamiento rebautizó la ermita con el nombre más común

de Virgen de las Nieves, quedando soterrada la primitiva advocación del Arcángel San Miguel. No

obstante, entre la imaginería del interior del templo existe una cuidada imagen de San Miguel,

colocada en sitio preferente y donada en 1941, posiblemente sustituyendo a una anterior destruida

durante la guerra civil; al igual que sucedió con la primitiva imagen de la Virgen y que según D. José

Calderón tiene su réplica en Santa María de la Hoz.

Aunque durante mucho tiempo se la ha llamado Virgen de las Nieves, al celebrarse en el día de esta

advocación, desde hace unos cuantos años se ha vuelto a la primera nominación de Virgen de Labra.

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El objetivo de esta marcha, por tanto, es recorrer los viejos caminos y senderos (algunos de ellos

en desuso) que fueron usados por los romeros de uno y otro lado de Sierra Híjar, los campurrianos

y los abarqueños para ir a venerar a su Patrona.

Datos de la Marcha

Desniveles:

Subida acumulada: 432 m.

Bajada acumulada: 1073 m.

Distancia estimada: 14,2 km, con las

siguientes distancias parciales: La

Collada a Peña Rubia, 1,5 km; a

Cuesta Labra, 1,7 km; a la Ermita de

la Virgen de Labra, 0,5 km; a la

Fuente del Campo Regaliz, 0,5 km; al

Pical de Buzandrique, 0,5 km; a la

Braña Buzandrique, 0,6 km; a la

Braña El Tejío, 1,0 km; al Prao

Domingo, 1,8 km; al Arroyo

Parralozas, 1,8 km; a la Ermita de la

Virgen de Labra, 2,8 km; a Celada de

los Calderones, 0,7 km; a Naveda, 0,8

km.

Duración previsible: 5 h.

Dificultad: Fácil a mediana, con la única dificultad de la primera subida, aunque la bajada es

relativamente larga.

Recorrido

Desde el final del aparcamiento de la Collada (1594 m) se entra en una campa y se toma un sendero

(al fondo derecha de ésta, junto a la empalizada) que en dirección N-NE sube, con fuerte pendiente

(1,5 km), entre escobas por el pernal SE de Peña Rubia. Después de un quiebro, para salvar la zona

rocosa de El Cincho, se torna a NO y se accede directamente al alto de Peña Rubia (1937 m), que

está formado por unas peñas de color rojizo con un gran hito.

Se continúa por el alto del cordal (E-NE) bajando al Collado del Llano de Rocamesa (1908 m). A la

derecha se ve una pequeña cuenca glaciar, en la que se encuentra la Fuente Rocamesa, donde nace el

Panorámica de las sierras del Cordel (derecha) e Híjar, desde Peña Rubia (en primer lugar a la izquierda el Camino de la Guerra).

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río Camesa, y abajo se ve el pueblo de Salcedillo. Comenzando una suave subida, la izquierda, ocultas

por la pendiente, quedan las cuencas de Bucer (donde nace el Arroyo de La Munía) y de Vitor

(nacimiento de Aroyo Parralozas). Esta última ya debajo de Cuesta Labra (1951 m). En la cima de

este monte se aprecian todavía los restos de las posiciones republicanas de la guerra civil, como de

la caseta del capitán, de otras mayores para la tropa, almacenes y también retos de las trincheras y

del hoyo en que depositaban todas las latas vacías. Su punto culminante está marcado por una cruz y

una placa. Desde este pico se tienen unas magníficas vistas (NO) de las Serras de Híjar, con el

Cuchillón y Pico Tres Mares, y la del Cordel, así como de la zona de Mataporquera y Brañosera (S).

Se continúa bajando (E-SE) hasta alcanzar la Ermita Virgen de Labra (1908 m), donde estuvo el

primer emplazamiento. En este punto se encuentra un altar (construido hace unos años), con una

hornacina donde se ve una imagen de la Virgen y los restos de la primera ermita.

Se baja hacia el N, por uno de los escotes que deja un pequeño cortado que hay debajo de la ermita,

se continúa por una zona sin brezo para tomar un camino que sale a la izquierda de ésta (NO), que

llega a la Fuente del Campo Regaliz (1793 m). Esta fuente podría considerarse el nacimiento del Río

Izarilla, ya que algo más abajo en esta misma vaguada se hace evidente.

Se continúa por una zona libre de brezos (N-NE), aunque hay que sortear alguna piedra, que

posteriormente va virando para quedar al NO y alcanzar una campa despejada de monte bajo. Una

vez en esta se baja (NE) hasta el Pical de Buzandrique (1700 m), un conjunto de grandes rocas en el

borde E de Cuenca Vitor, desde donde se ve este circo glaciar con todo detalle.

Se continúa bajando por un marcado camino que sale a la izquierda de las rocas y baja por la loma

divisoria de Cuenca Vitor. A la altitud de 1615 m se encuentra un camino que, viniendo de Cuenca

Vitor por la izquierda, baja al NE hacia unos pastos en una llanada denominada Braña Buzandrique

(1570 m).

Se atraviesa esta braña y se sale de ella por un camino (NE) que atraviesa la pista, que desde el

Collado de Somahoz discurre por la ladera de esta Sierra de Híjar y pasa por la parte baja de las

Cuencas Vitor y Bucer. Se continúa (NE) por esta loma, a la derecha de la cual discurre el Río

Izarilla por un barranco que cada vez se hace más profundo.

Restos de las instalaciones de la Guerra Civil en lo alto de Cuesta Labra. Altar donde se celebra una Misa en honor de la Virgen de Labra, más allá los restos de la primera ermita.

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En este camino se atraviesa la Braña El Tejío (1460 a 1410 m) y se sigue bajando, alcanzando una

zona desbrozada, en la que se irá en diagonal (izquierda, NO) hasta encontrar (1220 m) la pista que

viene de la Población de Suso. Se continuarán 350 m a la izquierda y se llegará al Prao Domingo o

Labra (1230 m), segundo asentamiento de la Ermita de la Virgen de Labra.

Se vuelve por la pista, por donde se ha venido, siguiendo hasta la cerrada curva a la derecha, en la

zona de Canto El Cuadro (1190 m), donde se dejará la pista para tomar un camino (E) que ataja el

entrante que la pista hace para salvar el angosto cauce de Río Izarilla en este punto.

Justo cuando el camino conecta de nuevo con la pista, no se entra a ésta y se sigue por un camino

(NE), que después de cruzar una alambrada se atraviesa el bosque de robles por El Callejón (1087

m). Enseguida se llega a la pista que desde la Población de Suso va a Mazandrero. Se toma el ramal

de la izquierda, que cruza el Arroyo Parralozas (1058 m) y la pista comienza una suave subida hasta

llegar a una bifurcación, donde se continuará por la derecha. Como la pista da una gran curva, se

puede atajar por un camino que, de frente, cruza un claro del bosque.

Después de pasar junto a la intersección de dos pistas, que se unen a la que se trae una por la

izquierda y otra por la derecha, se encontrará un camino a la izquierda, que hacia el NO discurre

por un callejo entre las lindes de los prados, cubierto de vegetación a ambos lados. Se continuará

por éste y en 500 m se llegará a la Ermita de la Virgen de Labra (988 m).

Esta ermita, que fue reconstruida después de ser destruida durante la guerra civil de 1936-1939, tiene planta rectangular, con una fachada de sillería, otra de piedra vista, y otra encalada. El interior tiene tres altares y bóveda con nervaduras, a la manera gótica, como se hacían las iglesias a finales del siglo XIX y principios del XX. Tiene coro, y conserva un púlpito de hierro revestido con un paño de seda bordado con una imagen de la Virgen de Labra, con manto y vestido al estilo de otras vírgenes del siglo XVIII, de forma que, siendo la imagen pequeña, alargaban su figura. En una columna, está una capillita de las que llevaba el ermitaño para visitar las casas del valle y recaudar limosna, con una representación de tipo gótico de la Virgen, totalmente ingenua, pero más aproximada, posiblemente, a la original desaparecida. La imagen que se venera actualmente está en el centro del altar mayor, es de escayola coloreada y se realizó en los años cuarenta.

Se continúa en la dirección que se traía hasta alcanzar la pista que viene de Riaño, en la que se irá a

la derecha (NE, que enseguida vira a E), llegando 600 m después la iglesia de Celada de los

Calderones (970 m) (no es necesario entrar en este pueblo). Se continúa de frente y otros 800 m

después se llegará al final del recorrido en Naveda (953 m)

Alberto Gutiérrez y Javier Tezanos

24-07-2013

Literatura consultada para texto y fotos

1. http://sedosycuetos.blogspot.com.es/2012/06/hijar-ebro-campoo-ccto-desde-poblacion.html.

2. http://vacarizu.es/Cuadernos/Cuaderno_22/La_Virgen_del_Abra.htm.

3. http://escalerilla.barruelo.com/rutas.php?id_ruta=100919_cuesta_labra.

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