Revistas acerca del Fracking

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ECOLOGIST T H E SÓLO 2,99 LA REVISTA INTERNACIONAL PARA LOS AMANTES DE LA NATURALEZA HOY HABLARE- MOS DEL FRACKING Y DEL FUTURO DE NUESTROS HIJOS... LA MÁS VENDIDA DE ESPAÑA NOVIEMBRE.2013-Nº113 NOVIEMBRE DE 2013. UN PLANETA UNIDO CONTRA EL FRACKING FRACKING FRACKING FRACKING FRACKING FRACKING

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ECOLOGISTT H ESÓLO 2 , 9 9

LA REVISTA INTERNACIONAL PARA LOS AMANTES DE LA NATURALEZA

HOY HABLARE-MOS DEL FRACKING Y DEL FUTURO DE NUESTROS HIJOS...

LA MÁS

V E N D I D A

DE ESPAÑA

NOVIEMBRE.2013-Nº113

NOVIEMBRE DE 2013.

UN PLANETA UNIDO CONTRA EL FRACKING

F R A C K I N G

F R A C K I N GF R A C K I N GF R A C K I N G

F R A C K I N G

The Ecologist

¿QUÉ ES EL

FRACKING?

Esto, unido al aumento de la demanda principalmente en los países emer-gentes y a la poca o nula voluntad de los gobiernos del Norte Global a cambiar radicalmente sus patrones de consumo y producción energéticos, ha hecho que los Estados y la industria de los hidrocarburos se lancen de forma desesperada a la búsqueda de nuevos tipos de yacimientos. Aunque de peor calidad y de más difícil aprovecha-miento, es atractivo tanto para las transnacionales de la energía por los mayores precios de venta y la especu-lación en los mercados que terminan haciendo rentables las inversiones iniciales tanto como para los Estados que buscan diversificar sus matrices energéticas y reforzar la seguridad e independencia energéticas de sus terri-torios.Así nos hemos encontrado con nuevos tipos de recursos con nombres tan curiosos como: arenas bitumino-sas, gas de esquisto, gas de pizarra, shale gas, gas de lecho de carbón, gas profundo, hidratos de metano, etc… Son las últimas fronteras del extracti-vismo donde se nos quiere dejar pensar que se juega el futuro energético del planeta y su modelo de desarrollo; son los últimos recursos que quedan, los más caros de aprovechar, en los que es necesario usar más energía, y los que a su vez son más perjudiciales para el medio ambiente y la salud humana. Podríamos decir que son los bonos basura de los hidrocarburos, los que alimentan esta nueva burbuja e inten-tan reconfigurar la geopolítica energé-tica mundial.

Hay una nueva palabra de moda en el mun-do de los hidrocarburos, un nombre que se repite una y otra vez: fracking. Aunque se nos puede hacer extraño este término an-glófono, el fracking, o fracturación hidráu-lica, es una técnica que se está aplicando cada vez más a nivel mundial para aprove-char ciertos yacimientos de gas llamados no convencionales que, aunque de más di-fícil extracción, han entrado con fuerza en la escena energética, social y mediática. De hecho, pese a las incertidumbres y cifras contradictorias sobre las reservas reales de gas no convencional, la Agencia Internacio-nal de la Energía estima que las reservas de estos tipos de gas representa ya la mitad de la base estimada de recursos de gas natural (2011). Dado las importantes reservas esti-madas, es por tanto lógico que esta técnica despierte interés en un contexto marcado por la escasez de los combustibles fósiles y, sobre todo, por la llegada inminente de los techos de producción para petróleo y gas.

Esto, unido al aumento de la demanda va a cambiar radicalmente sus patrones de consumo y producción.

FRA

CK

ING

Imágenes de la manifestación en contra del Fracking en Santander.

El fracking, paso a paso5Una técnica pensada para el gas no convencionalCuando hablamos de fracking o fracturación hidráulica, estamos hablando de la extracción de gas no convencional, familia en la que se engloban yacimientos co-nocidos como gas de pizarra, gas de esquistos y gas de lutitas.6 Para comprender lo que es este gas no convencional, veamos primero cómo se encuentra habitual-mente el gas en un yacimiento convencional y las dos propiedades fundamentales en lo que respecta a los yacimientos de hidrocarburos:● Porosidad: es el porcentaje de huecos que hay en la roca. Este es el espacio que sería ocupado por el hidrocarburo, porque en contra de lo que piensa mucha gente, el gas y el petróleo no están atrapado en unas grandes cavernas subterrá-

neas, sino que se encuentra en los pequeños poros que hay casi todas las rocas.● Permeabilidad: es la facilidad con la que el hidrocarburo fluye por la roca. No es sufi-ciente con tener mucho espacio para acumular la sustancia (esto es, alta porosidad). La pro-ducción se basa en hacer una perforación en la formación que contiene el gas o petróleo, y extraer desde ese único punto la mayor canti-dad posible, con lo que es muy importante que el hidrocarburo se pueda mover con facilidad a través de la formación, es decir, que tenga alta permeabilidad.Normalmente el gas y el petróleo se encuentran en rocas de gran porosidad, en las que además los poros están bien conectados entre sí, y tie-nen una elevada permeabilidad. Estaríamos ha-blando mayoritariamente de areniscas y calizas. El gas no convencional sin embargo se encuen-tra en rocas con una porosidad muy baja y de baja permeabilidad. El mayor inconveniente es que la velocidad de extracción del gas no es tan alta como con el gas no convencional. Esto pro-voca que no se puedan hacer ingresos rápidos por la venta del gas, con lo que la rentabilidad económica del proyecto se ve afectada.

The Ecologist

Hay que aclarar que el fracking no se aplica de forma aislada en cualquier tipo de pozo, sino que requiere de una técnica de perfo-ración concreta para que sea más efectivo. En los yacimientos convencionales, los po-zos se perforan en vertical. Mientras tanto, en los yacimientos no convencionales, se empieza con una perforación en vertical convencional, pero al alcanzar la capa que contiene el gas, se desvía para penetrar a lo largo de la formación toda la longitud posi-ble. Las técnicas actuales de desvío permiten profundizar hasta un km dentro de la forma-ción sin demasiados problemas, después de haber perforado unos 3 km de media en ver-tical, con lo que estamos hablando de son-deos que alcanzan con facilidad los 4-5 km.Una práctica habitual es perforar varios pozos a pocos metros de distancia entre sí, que se conectan en superficie para producir de manera simultánea. A cada uno de estos conjuntos se le denomina plataforma. A pe-sar de que con esta técnica de perforación se consigue mejorar la cantidad de gas a extraer por cada pozo, la mejora sigue sin ser sufi-ciente, con lo que es necesario realizar una gran cantidad de perforaciones en superficie.

¿EL FR

ACKING NOS CO

NVIENE?

El ratio habitual varía de 1.5 a 3.5 pla-taformas por km2. Además, la ocupa-ción de suelo de cada una de estas pla-taformas suele rondar las 2 hectáreas7.Una vez perforado todo el tramo desviado, es el momento de comenzar la operación de fracking en sí. Para ello, se va aislando por tramos el tramo desviado, se usan unas cargas explosivas para perforar la tubería, y se inyecta agua a alta presión, junto con una serie de aditivos. El objetivo es ge-nerar nuevas fracturas en la formación y ampliar las ya existentes. Esta operación de fracturación se puede producir hasta 15 veces por cada uno de los tramos, con adi-tivos específicos en cada caso. Uno de los aditivos más habituales es arena, para que al quedar atrapada en las grietas, las apun-tale, e impida que se cierren una vez ter-minada la presurización de la formación. Además de la arena, se introduce también hasta 500 sustancias entre las que se fi-guran 17 tóxicos para organismos acuá-ticos, 38 tóxicos agudos, 8 cancerígenos probados, 7 elementos mutagénicos, etc.

PRINCIPALES IMPACTOS DEL F R A C K I N G

-Riesgo químico de los adi-tivos.-Contaminación del aire.-Terremotos.-Efecto invernadero.-Ocupación de terreno.

Los riesgos e impactos detecta-dos son múltiples y en ámbitos diversos. Pasemos a continuación a detallarlos.-Riesgos durante la perforación.-Contaminación de agua.

La campaña de pro-paganda institucional simplemente las

ignora, y descalifica a quienes exigen que se aplique el principio de precaución, y se paralicen las explotaciones hasta que se realice un buen análisis de los posibles impactos y las medidas a adoptar.Se está optando por seguir exprimiendo hasta el últi-

mo litro de hidrocarburo de las rocas por no querer afrontar un problema que tenemos delan-te y es ineludible: la transición de una economía basada en los combustibles fósiles, hacia so-ciedades con baja huella ecoló-gica (en particular energética) y tecnologías renovables y no contaminantes. Al igual que no necesitamos bonos basura y activos tóxicos en la economía, tampoco los necesitamos en la política energética. No podemos permitir que esta huida hacia adelante tecnológica y energética pase factura a las generaciones presentes y futuras, en el Norte y

en el Sur, aún menos cuando sabemos que ya existen al-ternativas sectoriales e integrales para enfrentarnos a la vez al cambio climático y al techo de producción

de los hidrocarburos.

¿EL FR

ACKING NOS CO

NVIENE? La demanda mundial actual de combustibles fósiles y el cercano agotamiento de los yacimientos convencionales, ha empujado a la industria del hidrocarburo a aprovechar nuevos tipos de recursos hasta ahora no explotados. Las nuevas técnicas de perforación han facilitado ese movimiento, que ha contado al mismo tiempo con el apoyo institu-cional en muchos países, cegados ante el descubrimiento de un nuevo El Dorado. En esta situación, el aprovechamiento de los yacimientos de gas no convencional, mediante fracturación hidráulica, es la que está recibiendo en estos momentos mayor atención. Sin embargo, esta técnica conlleva graves riesgos medioambientales y de salud pública, que tanto desde las empresas operadoras, como desde las instituciones implicadas, se están queriendo obviar.

FRACKING

ECOLOGIST

The Ecologist

...Nosotros?... Nuestros hijos?

... Nuestros padres?

Nuestra sociedad está azota-da por la crisis económica y las familias están sufriendo sus con-secuencias. Aunque menos vi-sibles, se nos echan encima dos crisis más profundas todavía, las crisis energética y ecológica, esta última con el cambio climático en ciernes. ¿Por qué ocurre todo esto ahora? Nos han hecho creer que el crecimiento económico de los Estados podía continuar ilimi-tadamente. Se sabe, desde hace tiempo, que esto es imposible, que la economía, en buena lógi-ca, no puede crecer y crecer sin toparse con los límites de nues-tro Planeta. Y, desgraciadamente, nos ha tocado vivir esta época, la época en la que estamos sobre-pasando los límites de la Tierra. La primera consecuencia de este hecho es que, desde hace algunas décadas, los sistemas naturales están degradándo-se debido a su sobrexplotación y a su excesiva contaminación. La segunda es que, fruto de di-cho deterioro, ha comenzado un

periodo de decrecimiento físico; hoy a cada uno de nosotros le toca menos gasolina, menos tierra, me-nos alimento, menos agua, menos pescado, menos madera, etc. que ayer y más que mañana. Todavía es poco perceptible este decreci-miento, pero pronto veremos que los precios de la gasolina subirán año tras año y lo mismo sucede-rá con los de otros productos.

Por eso, la tercera consecuencia es que años después del decre-cimiento físico llegará el decre-cimiento económico y el sueño que teníamos de un crecimiento ilimitado se desvanecerá como un espejismo e incluso se po-drá convertir en una pesadilla.Entrar o no en un futuro de pesa-dilla depende de todos nosotros.

“Desgraciadamente, nos ha to-cado vivir esta época, la época en la que estamos sobrepasan-do los límites de la Tierra.”

Si los ciudadanos no tomamos conciencia de lo que está ocu-rriendo, tampoco lo harán los poderes político y económico que nos gobiernan. Lo digo tan rotundamente porque la avalancha de datos de la degradación que sufren los sistemas naturales es tan con-tundente que si no han tomado medidas para solucionarla es porque no les interesa hacerlo o, sencillamente, les sobrepasa el problema.Tomar conciencia del problema supone aceptar el decrecimiento, a partir de ahora, no solo los españoles sino todos los seres humanos tendremos que vivir cada vez con menos energía y productos durante una larga temporada.

¿ H a s t a cuándo? Hasta que nuestra economía disminuya lo suficiente como para respetar los límites plane-tarios, o sea, hasta lograr una situación de sostenibilidad con la Tierra. Entonces la econo-mía podrá estabilizarse, aun-que con un nivel de consumo bastante menor que el actual.Si el decrecimiento se realiza de manera negociada, progra-mada y controlada por todos los países –quizá por media-ción de un organismo mundial, como una ONU con más po-der- el decrecimiento no tiene por qué ser doloroso. Asistire-

mos a cambios políticos y eco-nómicos trascendentales con el fin de potenciar la democra-cia participativa y eliminar el enorme poder que han adqui-rido los grandes bancos y cor-poraciones empresariales. La economía y la vida serán más locales; el comercio entre paí-ses será limitado así como los viajes, el trabajo tendrá que ser repartido y también los sala-rios, el consumo de productos será bastante menor. A cambio, trabajaremos menos horas, dispondremos de más tiempo para el ocio, el deporte, las re-laciones sociales, el trabajo so-cial, las actividades creativas, etc. La contaminación será

mucho menor, se recuperarán los paisajes, los bosques, los ríos y otros sistemas naturales. En definitiva, tendremos me-nos trabajo pero más tiempo libre, menos dinero y estrés pero más calidad de vida, o sea, podremos vivir me-jor aunque con menos co-sas, como reza este eslogan a favor del decrecimiento.

Los valores individualistas y de competitividad a ultranza que dominan en nuestra sociedad serán sustituidos por otros como la austeridad, la solidaridad, la amistad, la prudencia y sensatez, el gusto por estudiar y aprender, la crítica fundamentada, etc. valores que pueden proporcionar tanta o más felicidad que aquellos otros.La meta a alcanzar por la humanidad es la sostenibilidad. La sostenibilidad tiene que ser la utopía que reemplace a la actual del progreso. El progreso se ha conver-tido, de hecho, en un regreso. La sostenibilidad con el Planeta es la esperanza de la humanidad, ni más ni menos. Creo que es una bella idea para que la gente joven la incorpore en su vida y trabaje por ella: salvar el Planeta para salvarnos con él.

CONCLUS IÓN

The Ecologist

EN LA PROXIMA EDICIÓN, ANALIZAREMOS UNA SOCIEDAD TOTALMENTE DEPENDIENTE DE LAS MÁQUINAS,

NO TE LO

PIERDAS!

THE ECOLOGIST

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