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PROYECTO DE BIBLIOTECA Contenido Contexto......................................2 Situación inicial ...........................2 Objetivos ....................................3 Actividades .................................4 Presupuesto ...............................6 Evaluación ..................................6 CEIP GENIL Isla Redonda 2015-16 Leer: cómo se hace, para qué sirve Andrés Ibáñez Ahora, querido lector, querida lectora, estás leyendo. ¿Crees que tus ojos «se deslizan» por las líneas como una especie de góndola a lo largo de un canal? Te equivocas. Los ojos humanos no se deslizan, sino que saltan por la línea escrita. Saltan, se detienen una centésima de segundo, leen las palabras que hay antes y después, vuelven a saltar de nuevo, y así hasta llegar al final de la línea: entre tres y seis saltos por línea, según lo apretadas que estén las palabras o la atención con que se lee. Tampoco nuestra atención se desliza, sino que salta. Aunque leamos con atención, no leemos todas las palabras: nos distraemos continuamente. Nuestra atención no está preparada para leer un chorro conti- nuo de palabras únicas y esenciales, y los textos en los que uno no se puede perder ni una palabra (por ejemplo, ciertos textos de filosofía) tenemos que leerlos una y otra vez para entenderlos. Los textos bien escritos (como este, por ejemplo) consisten en continuas reelaboraciones de lo mismo, en variacio- nes y variaciones de un tema. Es necesario decir las cosas muchas veces para que el lector las entienda. Es necesario, digámoslo así, dar muchos ejemplos. La literatura es, en cierto modo, el arte de poner ejemplos. Cervantes dice en un par de frases que Don Quijote se volvió loco: a continuación, se dedica, a lo largo de cientos y cientos de páginas, a poner ejemplos. «Diferir» significa dos cosas: (1) decir algo diferente de lo que dice otro, y (2) postergar, es decir, retras- ar en el tiempo. Todas las frases que existen, desde la primera que se escribió al principio de los tiem- pos, comparten esas dos cualidades. Difieren y se difieren. Diga usted algo, cualquier cosa. En seguida notará que es imposible decir eso «completamente», y que necesita añadir otra frase más para aclarar la primera. La segunda frase aporta precisión y acota el campo de significado de la primera, pero tam- bién introduce significados nuevos, nuevas cosas que hay que aclarar. Aparece así una tercera frase, que pretende dejar perfectamente claras la primera y la segunda. El «significado», pues, esa perla per- fecta, esa flor azul inconcebible, difiere: se retrasa. Y también difiere en el otro sentido, se hace cada vez más diferente. Así surge la literatura: por la imposibilidad de decir nada completamente, de decir nada definitivamente. Antiguamente, leer se percibía como algo semejante a hablar. Esa es la razón de que en las inscripciones romanas, por ejemplo, las letras estén tan juntas: sólo se entiende dónde empiezan y terminan las pala- bras si se leen en voz alta. Fue San Agustín el primero que describe a una persona leyendo en silencio, es decir, leyendo con los ojos. A partir de entonces comienza el proceso que llevará a la lectura moder- na, que percibimos no como algo semejante a hablar, sino como algo semejante a mirar. Leemos con los ojos, excepto los ciegos, que leen con los dedos: claro que los ciegos también ven con los dedos. Pero ¿qué es lo que vemos? Cuando leemos literatura, no vemos las letras. Ni siquiera vemos la página. Es posible que al principio, por espacio de unas frases, veamos la página, pero luego, si la magia de la literatura se produce de verdad, los ojos comienzan a ver cosas que no están físicamente presentes. Entonces leer ya no se parece ni a hablar, ni a mirar, sino a recordar. ¿Por qué los libros suelen estar escritos en pasado, si nos cuentan cosas que sentimos como presentes? Sin duda el origen está en los aedos que contaban las hazañas épicas sucedidas siempre mucho tiempo atrás, pero esa convención bien podría haber caído en desuso como tantas otras. No, los libros están escritos en pasado porque son algo así como recuerdos inducidos. Leer es una creación, y todo el que lee es creador. El buen lector lee sin prisa, lee sin expectativas. El buen lector no desea aprender nada ni convertirse en una persona mejor: desea vivir más, tener expe- riencias reales. El buen lector no va en busca de diversión, sino de alimento. Claro que, ¿quién desea alimentarse de una sustancia que no resulte deliciosa? El buen lector sabe que cuando entra en los ca- minos de un libro entra también en su propio interior, y que las cosas que encuentra en esos caminos, dragones o rosas, estatuas o ratas, están también dentro de él. Leer es viajar por dimensiones inexplo- radas del palacio de la imaginación; quiero decir, visitar cuartos de la propia casa mental que de otra forma estarían siempre cerrados. Leer es viajar, leer es descubrir, leer es construir en el espacio interior una casa, una resistencia. Leer es construir una casa para el alma. Leer es construirse un alma.

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PROYECTO DE

BIBLIOTECA

Contenido

Contexto......................................2

Situación inicial ...........................2

Objetivos ....................................3

Actividades .................................4

Presupuesto ...............................6

Evaluación ..................................6

CEIP GENIL

Isla Redonda 2015-16

Leer: cómo se hace, para qué sirve Andrés Ibáñez Ahora, querido lector, querida lectora, estás leyendo. ¿Crees que tus ojos «se deslizan» por las líneas como una especie de góndola a lo largo de un canal? Te equivocas. Los ojos humanos no se deslizan, sino que saltan por la línea escrita. Saltan, se detienen una centésima de segundo, leen las palabras que hay antes y después, vuelven a saltar de nuevo, y así hasta llegar al final de la línea: entre tres y seis saltos por línea, según lo apretadas que estén las palabras o la atención con que se lee. Tampoco nuestra atención se desliza, sino que salta. Aunque leamos con atención, no leemos todas las palabras: nos distraemos continuamente. Nuestra atención no está preparada para leer un chorro conti-nuo de palabras únicas y esenciales, y los textos en los que uno no se puede perder ni una palabra (por ejemplo, ciertos textos de filosofía) tenemos que leerlos una y otra vez para entenderlos. Los textos bien escritos (como este, por ejemplo) consisten en continuas reelaboraciones de lo mismo, en variacio-nes y variaciones de un tema. Es necesario decir las cosas muchas veces para que el lector las entienda. Es necesario, digámoslo así, dar muchos ejemplos. La literatura es, en cierto modo, el arte de poner ejemplos. Cervantes dice en un par de frases que Don Quijote se volvió loco: a continuación, se dedica, a lo largo de cientos y cientos de páginas, a poner ejemplos. «Diferir» significa dos cosas: (1) decir algo diferente de lo que dice otro, y (2) postergar, es decir, retras-ar en el tiempo. Todas las frases que existen, desde la primera que se escribió al principio de los tiem-pos, comparten esas dos cualidades. Difieren y se difieren. Diga usted algo, cualquier cosa. En seguida notará que es imposible decir eso «completamente», y que necesita añadir otra frase más para aclarar la primera. La segunda frase aporta precisión y acota el campo de significado de la primera, pero tam-bién introduce significados nuevos, nuevas cosas que hay que aclarar. Aparece así una tercera frase, que pretende dejar perfectamente claras la primera y la segunda. El «significado», pues, esa perla per-fecta, esa flor azul inconcebible, difiere: se retrasa. Y también difiere en el otro sentido, se hace cada vez más diferente. Así surge la literatura: por la imposibilidad de decir nada completamente, de decir nada definitivamente. Antiguamente, leer se percibía como algo semejante a hablar. Esa es la razón de que en las inscripciones romanas, por ejemplo, las letras estén tan juntas: sólo se entiende dónde empiezan y terminan las pala-bras si se leen en voz alta. Fue San Agustín el primero que describe a una persona leyendo en silencio, es decir, leyendo con los ojos. A partir de entonces comienza el proceso que llevará a la lectura moder-na, que percibimos no como algo semejante a hablar, sino como algo semejante a mirar. Leemos con los ojos, excepto los ciegos, que leen con los dedos: claro que los ciegos también ven con los dedos. Pero ¿qué es lo que vemos? Cuando leemos literatura, no vemos las letras. Ni siquiera vemos la página. Es posible que al principio, por espacio de unas frases, veamos la página, pero luego, si la magia de la literatura se produce de verdad, los ojos comienzan a ver cosas que no están físicamente presentes. Entonces leer ya no se parece ni a hablar, ni a mirar, sino a recordar. ¿Por qué los libros suelen estar escritos en pasado, si nos cuentan cosas que sentimos como presentes? Sin duda el origen está en los aedos que contaban las hazañas épicas sucedidas siempre mucho tiempo atrás, pero esa convención bien podría haber caído en desuso como tantas otras. No, los libros están escritos en pasado porque son algo así como recuerdos inducidos. Leer es una creación, y todo el que lee es creador. El buen lector lee sin prisa, lee sin expectativas. El buen lector no desea aprender nada ni convertirse en una persona mejor: desea vivir más, tener expe-riencias reales. El buen lector no va en busca de diversión, sino de alimento. Claro que, ¿quién desea alimentarse de una sustancia que no resulte deliciosa? El buen lector sabe que cuando entra en los ca-minos de un libro entra también en su propio interior, y que las cosas que encuentra en esos caminos, dragones o rosas, estatuas o ratas, están también dentro de él. Leer es viajar por dimensiones inexplo-radas del palacio de la imaginación; quiero decir, visitar cuartos de la propia casa mental que de otra forma estarían siempre cerrados. Leer es viajar, leer es descubrir, leer es construir en el espacio interior una casa, una resistencia. Leer es construir una casa para el alma. Leer es construirse un alma.

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SUGERENCIAS PARA ELE-

GIR Y DISFRUTAR DE LOS

LIBROS

La lectura de cuentos

hace que tu hijo/a:

Estimule su imaginación,

curiosidad y creatividad.

Despierte y desarrolle su

sensibilidad.

Abra su mente a otras

experiencias y a otros

mundos.

Provoque la reflexión y

despierte su sentido críti-

co.

Ayude a conocerse a sí

mismo.

Les sugiera soluciones a

los problemas que les

inquietan.

La Biblioteca en este curso anterior ha sufrido un pequeño cam-

bio a nivel estético, haciéndola más atractiva para los niños y

niñas de nuestro centro.

Se ha realizado un expurgo concienzudo de los volúmenes que

teníamos y hemos llegado a un acuerdo con el concejal de cul-

tura para que la biblioteca escolar asuma las competencias de

biblioteca municipal y se abra dos tardes durante el curso.

Para este año nos queda empezar con la catalogación en Abies.

“La lectura de un buen libro es un diálogo incesante en que el libro habla y el al-ma contesta”. André Maurois

CONTEXTO

SITUACIÓN ACTUAL

El colegio se encuentra en la localidad de Isla Redonda, cercana

a Écija. Su población no llega a los quinientos habitantes, siendo

predominante el trabajo en el campo la ocupación de sus habi-

tantes.

En cuanto al centro, cuenta con 28 alumnos, 13 de infantil, 8 de

primero a tercero y 7 alumnos de cuarto a sexto. Familias muy

participativas en la vida del centro. De las que se podrá contar

para la realización de actividades en la biblioteca o relacionadas

con la animación a la lectura o el Día del libro.

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Estimule la confianza en

sí mismo y en su futuro.

Favorece actitudes de

tolerancia y solidaridad.

Eduque los sentimientos

y enriquezca el lenguaje.

Además los cuentos son

divertidos y estimulan

que sus lectores se con-

viertan en auténticos

mensajeros de alegría y

felicidad.

La influencia de la familia

es decisiva para fomentar

lectores:

La mejor receta para ad-

quirir el gusto por la lec-

tura consiste en compar-

tir un rato de lectura con

vosotras/os, remirar las

páginas del libro, comen-

tar las ilustraciones…

Elegir un momento con-

creto del día para leer

juntos.

Haced de la lectura un

tiempo divertido.

De 3 a 5 años.

Buscad libros en los que

la ilustración sea predo-

minante o con pequeños

textos.

Mostradles las ilustracio-

nes de los cuentos. Que

comprendan que las imá-

genes también cuentan

historias.

Les interesan: historias

rimadas, fábulas, cuentos

maravillosos con hadas,

príncipes, dragones…

OBJETIVOS

Cuatro serán los objetivos que nos planteemos para el Proyecto de la

biblioteca de este año:

1.– Organizar la biblioteca de adultos con una CDU adecuada a las nece-

sidades de nuestra localidad, analizando las próximas compras por parte

de la biblioteca.

2.- Poner en marcha la biblioteca desde el punto de vista del préstamo,

desde la adquisición de nuevos ejemplares y desde la realización de la

informatización de la misma.

3.– Adecuar la biblioteca para la realización de actividades de animación

a la lectura y como un

punto de encuentro

del centro

4.– Organizar activi-

dades de animación y

fomento de la lectura

buscando para ello la

colaboración de las

familias y de todos

los miembros del cen-

tro Educativo. 3

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PAUTAS PARA CONTAR UN CUENTO

ELEGIR EL CUENTO Tiene que

ser un cuento con el que estemos emocional o esté-ticamente identificados. Nos tiene que gustar de verdad. Tiene que estar adecuado a la edad de los oyentes

LEERLO VARIAS VECES Ensayar y ejercitarse antes de con-tarlo.

ESTABLECER UN CLIMA RELA-JADO Esperar el silencio. Colocar a los niños en se-micírculo, y nosotros tene-mos que estar a su altura.

USAR UN TONO DE COMIENZO SUAVE Mirando a los niños directamente y creando un clima de misterio.

DAR EXPRESIVIDAD A LA VOZ Sobre todo es importante diferenciar el narrador de cada uno de los persona-jes. Hay que cambiar el timbre (el tono de la voz) y la entonación.

SONORIZAR EL CUENTO Dar sonoridad a las onomato-peyas y articular de un modo especial las palabras rimadas o las palabras especiales desde el punto de la sonoridad

HACER PARTICIPAR A LOS NI-ÑOS Dejando pausas e invitándoles a intervenir. Por ejemplo: en las ono-matopeyas, en las repeti-ciones, etc.

Y lo más importante de todo… DISFRUTAR TÚ Y HACER DISFRUTAR A LOS NIÑOS Y NIÑAS.

ACTIVIDADES

Estas actividades van a centrarse en la organización de la biblio-

teca de una manera más adecuada a nuestros alumnos:

Organización de espacios

Distribución de los fondos bibliográficos

Actividades de formación de usuarios

Organización del préstamos de los fondos

Las actividades las vamos a

centrar en cuatro grupos de

trabajo: organizativas, catalo-

gación, decoración y ambien-

tación de la biblioteca y fo-

mento a la lectura y anima-

ción.

Además de las actividades

propias de cada grupo, vamos

a desarrollar actividades en

relación a la celebración del

Día del Libro, así como activi-

dades de carácter familiar, co-

mo libros viajeros y cuenta-

cuentos en las clases por parte

de las familias. Así como la ce-

lebración de un mercadillo del

libro.

4

Actividades de catalogación

Actividades organizativas

En este apartado vamos a contar con la necesaria colaboración

de las familias, ya que al ser un centro rural, solo el responsable

de biblioteca no podría realizarlo todo.

Creación de un CDU

Catalogar los fondos con el programa ABIES

Tejuelar los fondos

Realizar el préstamo de manera informatizada

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Crear una biblioteca es crear una vida. Nunca es solo una colección aleatoria de libro (Carlos M. Domínguez)

Una biblioteca tiene que ser un lugar de encuentro de-

ntro de un centro, por lo que tiene que resultar atractiva

para los alumnos, donde la vean como un centro de acti-

vidades y donde vayan a pasárselo bien.

En este apartado lo que pretendemos es decorar la bi-

blioteca de manera que les resulte interesante, aportan-

do sus ideas y utilizando sus trabajos de plástica para tal

fin.

Además de utilizar las bases de las animaciones a la lec-

tura, creando espacios y ambientes diferentes.

Se van a desarrollar desde dos

artistas diferentes pero com-

plementarias, la de las fami-

lias, y las del responsable de

animación en el aula.

Desde el punto de vista de las

familias pretendemos que

acudan a realizar cuentacuen-

tos en las aulas y acerquen el

libro y la lectura de una forma

más lúdica y participativa a sus

hijos.

Desde el cole, se van a des-

arrollar actividades de anima-

ción a la lectura con las tres

aulas que componen el centro:

1. Los martes a segunda hora

con Primaria 1 y 2.

2. Miércoles a cuarta y quinta

hora con los alumnos de

infantil, trabajando el pro-

yecto de los Hermanos

Grimm.

3. Los viernes a tercera hora

con los alumnos de Prima-

ria 1 y 2.

Además vamos a realizar acti-

vidades como:

Creación de un blog de la

biblioteca y de una revista

escolar

Actividades de creatividad

literaria

5

Actividades de ambientación

Actividades de Fomento de la lectura

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El presupuesto con el que contamos para la compra de nuevos fondos

bibliográficos es de 350€

Los fondos que hay que adquirir con mayor premura son libros para

educación infantil y segundo ciclo. El fondo bibliográfico de adultos

corresponde al ayuntamiento

PRESUPUESTO “Cada libro, cada volu-

men que ves aquí, tiene

un alma. El alma de la

persona que lo escribió

y de aquellos que lo

leyeron, vivieron y so-

ñaron con él. Cada

vez que un libro cambia

de manos, cada vez

que alguien baja sus

ojos a las páginas, su

espíritu crece y se for-

talece.”

La Sombra del Viento,

Carlos Ruiz Zafón.

EVALUACIÓN

La evaluación la desarrollaremos al finalizar el curso, viendo don-

de hemos tenido mayoras dificultades, donde tenemos que

hacer más incidencias en actividades que han resultado benefi-

ciosas y que plan de mejora se puede llevar a cabo.

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