Periódico EnRedAndo Nº 4

1Edición 4 - Julio de 2010

Edición Número 4 - Julio de 2010

En los días de la campa-ña para elegir al Perso-nero Estudiantil en la Institución Educativa Fe y Alegría del barrio Popular Nº 1, la rivalidad entre los candidatos llevó a que hubiera diferencias entre quienes apoyaban al uno y al otro. Esas miradas por encima del hombro, por fortuna, terminaron después de la elección, cuando los dos candidatos se reunieron con sus compañeros de undécimo y con un apre-tón de manos cerraron el compromiso de apoyarse y consultarse mutuamen-te para que la labor del elegido beneficie mucho más a la comunidad educativa.

¡Juego limpio!

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Jhon Fredy Gómez Bolívar. Red de Personeros.

Como si el colegio fue-ra un micropaís, du-rante las elecciones a

los cargos de representación estudiantil, podemos leer de cerca los procesos democráti-cos de nuestra nación. Y es allí cuando la popularidad de los candidatos y sus propuestas ganan seguidores y cuando, lastimosamente, a veces se presentan diferencias entre los que apoyan a cada candidato.Pero el problema no son las diferencias ni los conflic-tos. ¿Qué sería de nuestra sociedad si todos pensára-mos exactamente igual? No, el reto es cómo resolver los conflictos, cómo plantear el

Con la fe y la alegría de hacer paísdiálogo de ideas y asumir los resultados de la democracia, beneficien a quien beneficien. Por eso, la imagen que EnRe-dAndo propone en portada re-fresca y enseña a los más gran-des: después de pasadas las elecciones para el Personero Es-tudiantil en la Institución Edu-cativa Fe y Alegría del barrio Popular Nº 1, los candidatos se encontraron para demostrar que su rivalidad sólo es parte de la dinámica democrática, pero que después del conteo de votos, lo que queda es sumar liderazgos para que las buenas ideas de los dos puedan recogerse y realizar una gran gestión en beneficio de la comunidad educativa.

¡Qué clase de democracia y de respeto nos dan nuestros jóvenes de la Fe y Alegría! Qué bueno que de esto apren-dieran nuestros líderes ba-rriales y nacionales, para que entendamos que, como decía Aristóteles “la democracia ha surgido de la idea de que sí los hombres son iguales en cualquier respecto, lo son en todos”, pero para que esta igualdad sea posible es nece-sario el respeto y, aunque a algunos les cueste, hay que es-cuchar lo que dijo el líder bri-tánico Winston Churchill: “la democracia es la necesidad de doblegarse de vez en cuando a las opiniones de los demás”.

A lo largo de la his-toria, en el mundo han existido mu-

chos monopolios que con-trolan a la gente de mane-ra directa o indirecta. Y así como en la Edad Media la Iglesia controló todo con su Santa Inquisición, en nues-tra época este dominio es ejercido por los medios de comunicación.

Y claro, como cada vez vivi-mos más conectados, hoy la tecnología permite mayor dominio de los mercados en esta sociedad de consumo, en

Mentiras disfrazadasla cual las principales corpora-ciones del mundo tienen más poder que los Gobiernos y en la cual el consumismo parece una dictadura que, lentamen-te, lleva nuestro planeta al co-lapso, como se puede ver en el video “La historia de las cosas” (http://www.youtube.com/watch?v=x5NVqDPYKjg).

Y este consumismo, alentado desde los medios de comuni-cación, el que hace que noso-tros no veamos qué hay detrás de los medios. Por eso hay que estar atentos sobre los mensa-jes que recibimos y analizar su fuente, qué tan confiable y revisar en perspectiva lo leído, lo escuchado o la imagen que

estamos viendo.Como jóvenes necesitamos la información clara, pues para-dójicamente para expresarnos también necesitamos de los mismos medios que el sistema utiliza para dominarnos. Por eso, para acercarnos a la verdad, debemos examinar, analizar las fuentes y ver si lo que nos cuen-tan no está maquillado.

Es hora de reaccionar. Hay que ser críticos. No nos podemos dejar engañar más, siendo víc-timas del consumismo en exce-so, pues la publicidad tienen el poder de obligarnos a hacer las cosas inconscientemente, por más que a veces pensemos que es simple información.

Publicación de la Red de Personeras, Personeros, Representantes

y Líderes Estudiantiles.Edición #4. Medellín,

Julio de 2010

Personero de MedellínJairo Herrán Vargas

Personera AuxiliarAna Cristina Ferrer Martínez

InterventoríaAna Mayerly Boada Burgos

Jefe Oficina Asesor de Comunicaciones y Relaciones InternacionalesIldefonso Cardona

Programa de Democracia EscolarAna Mayerly Boada BurgosAdíela Cristina ÚsugaYonny Atehortúa

Reporteros de EnRedAndoJhon Fredy Gómez BolívarLuis Miguel Arango AguirreLady Stephany Luna ParraCristian Quiroz Yeison Patiño GuzmánCarlos Alberto CuellarLeison Sánchez AragónFranci Darleyi García HernándezLeidy Hernández Steven CamachoMaría Soledad GómezDandenis Álvarez ValderramaJorge Andrés ValenciaRobinson Mesa OtálvaroSusan PérezSusana Paniagua ValenciaCarlos Ignacio GonzálezElvis Andrés Tordecilla T.

FotografíaEquipo de reporteros de EnRedAndo

Coordinación general del proyectoEnchufe Creativo

Diseño GráficoIsabel Cristina Toro Quintero

Coordinación LogísticaWendy Cano

Las opiniones expresadas en este medio son responsabilidad de los autores y en ningún momento comprometen a la Personería de Medellín. Todos los artículos pueden reprodu-cirse, citando la fuente.


Tenemos mucho que decir y “nadie” que nos atienda…

¿Todos somos partícipes de la dinámica institucio-

nal? Es un cuestionamiento bastante personal, aunque algunos somos o queremos ser parte de esta dinámica, la mayoría de los estudiantes son indiferentes a ésta, pues en algunos casos las insti-tuciones educativas no son incluyentes para que el estu-diante contribuya de manera crítica al desarrollo y progre-so institucional.La participación del estu-diante en los espacios ofreci-dos por los colegios es muy reducida o en ocasiones son escasas las posibilidades de participación.

Durante varias épocas se ha creado la unidireccional men-talidad de “el alumno obede-ce y el maestro ordena”. Por ello, las opciones de consenso y análisis se ven restringidas a los protagonistas de la historia institucional, incluyendo do-centes y alumnos, delegando toda función administrativa y creativa a entes que poco o nada saben de la realidad en el colegio.Entrando en este ámbito podría formularse una cuestión: ¿Cuál es la función de la Personería? Es verdad que dicha obligación reside en la representación es-tudiantil y el propósito de de-finir espacios de participación para sus representados, pero en este punto hay otra cues-tión que pone aun más crítica la situación, ¿A la Personera –

teniendo en cuenta que es una educanda- se le permite y/o apoya en los proyectos que formula para dicho fin?La participación es un derecho que no se cumple en la mayo-ría de instituciones educativas, debido a un principio básico de pasividad en los alumnos y a un desinterés agigantado de las instituciones por permitir dichos pronunciamientos.De ambos puntos se tienen concepciones muy opuestas. Por un lado los rectores de las instituciones afirman que “se dan todas las posibilidades para que los estudiantes parti-cipen pero ellos por pereza no lo hacen”, y en contraposición a ello, los alumnos denuncian “una falta de espacios para participar y ser escuchados. Tenemos mucho que decir y nadie que nos atienda”.

Paren oídos: Soy jovenAsí piensan…

“El estudiante promedio tiene un nivel de par-ticipación baja, pues el único medio que tiene es intermediando con su re-presentante de grupo, el cual suele ser bastante desinteresa-do, y aunque lo intermediara, el representante lo único que puede hacer es transmitirle el mensaje al representante de los estudiantes o al personero. El estudiante debe tener más medios de participación, que se viva una democracia más activa, utilizar más medios de participación que un voto una vez al año: Referendos, consultas, encuestas y buzo-nes de sugerencias que sean leídas en las reuniones del consejo”.David López Institución Educativa Presbítero Antonio José Bernal Londoño Sacerdote Jesuita.

“En el colegio no nos tienen en cuenta, ya que nos consideran como inferiores y no como una parte importante

para el colegio, sabiendo que sin nosotras las estudiantes el colegio no existiría”.Ana María NietoInstitución Educativa Javiera Londoño

Lady Sthephany Luna Parra, Inst. Ed. Javiera Londoño.


No sólo con un voto se participa en la democracia

Una mirada juvenil a la política actual

Susan Pérez. Personera, Colegio Presbítero Carlos Alberto Calderón.Jhon Fredy Gómez Bolívar. Red de Personeros.

Colombia celebra sus 200 años de su inde-pendencia. Dos siglos

de una lucha constante de un pueblo sumergido en el decli-ve político, en el que no se ha podido equilibrar la balanza de un poder justo, como lo muestra un estudio en el que se afirma que el país tiene un porcentaje alto de inequidad.Los jóvenes, en todo este tiempo, han sido mirados con indeferencia por parte de los diferentes gobiernos que han callado sus voces. A lo largo de la historia, la clase dirigente ha tachado a la juventud de inexperta, no obstante, esta afirmación está errada porque es mucho lo que se puede aportar desde este sector de la población.La juventud debe tomar partido en este tipo de te-mas porque padece con la violencia y la falta de edu-cación, entre otros aspectos, por parte de quienes han tenido el poder y quienes, en distintos escenarios, han prometido mejoras. Pero de verdad, ¿se ha visto tal me-

jora?, ¿cuáles han sido esas ventajas que los gobiernos le han dado a los jóvenes?

¿Horizontal o vertical? Hay dos aspectos muy impor-tantes a evaluar como adoles-centes, jóvenes o casi adultos que somos: cómo nos mira el gobierno y cómo miramos a la

entidad que nos ayuda a llevar las riendas de nuestro país. La principal diferencia que se puede hallar es la forma mirar a nuestro gobierno, lo hace-mos de forma vertical, como esa “cosa” por allá lejos, impo-sible de alcanzar y así no debe ser. Todos tenemos que mirar a nuestros entes públicos de una manera más horizontal, como esa parte de una orga-nización que está dispuesta a ayudarnos, a apoyarnos, pero no, terminamos haciéndole venia, cuando ellos son los que deben de estar preocupa-dos por nuestro bienestar y no nosotros preocupados por nuestro malestar.

Desde aquí, los jóvenes toma-mos conciencia de cómo está funcionando el país y hemos logrado que nos tengan más en cuenta. Ya los gobiernos no nos ignoran del todo, pero todavía falta mucho trabajo, a pesar de que hemos avanza-do en el sentido de pertenecía y nos preocupamos y anali-zamos con más profundidad cada reacción política que su-cede en este país.Hace pocos días, Colombia se movilizó por las eleccio-nes presidenciales. Nosotros, como ciudadanos y jóvenes, vimos como esta “fiebre” po-lítica tomó gran importancia en nuestro vivir y aunque


Leison Sánchez.Personeroestudiantil, I. E. Camilo Mora Carrasquilla.

Todos los días Beimer arriesgaba su vida pe-gándose de los carros

en su bicicleta, práctica co-mún para algunos jóvenes de la Comuna 13 de Medellín, entre los cuales algunos acep-tan hacerlo por diversión y otros por necesidad, como Adrian, amigo de Beimer, quien argumentaba que su trabajo quedaba muy lejos y que por eso optaba por enre-dar un gancho a un bus para evitar el esfuerzo de pedalear para subir lomas.

Y adicional a esta práctica juvenil, tampoco es raro ver cómo un conductor acelera

Porque la muerte también viene a todo pedal

Gancho mortalcuando un joven se pega de la parte trasera de su vehículo y que cuando ocurran los ac-cidentes, simplemente digan que no sabían que ese menor estaba allí.

El dolor de FelipeFelipe era un joven que encon-traba diversión al pegarse de un bus por medio de un gancho y mostrar su habilidad para lle-var la bicicleta. Lo hizo durante mucho tiem-po, pues estaba seguro de que nunca se cae-ría, pues sus amigos lo consideraban “un teso”.

Pero una tarde de vier-nes el destino propuso otro final para sus tar-des de diversión. En la Carretera al Mar per-dió su vida cuando, al ir pegado de un bus, la

llanta delantera de su bicicleta se enredó en hueco y después de caerse fue arrollado por el carro que venía atrás.

Con su muerte, además del do-lor imborrable para su madre y su familia, también llegó una voz de alerta para Beimer, quien

desde entonces no arriesga su existencia de esa manera, pero ve con tristeza cómo sus amigos se siguen pegando de los buses y sabe que, así, qui-zás esta triste noticia vuelva a producirse cuando un ami-go suyo tropiece y caiga de la misma manera.

Foto: http://www.elcolombiano.com/BancoMedios/Imagenes/3360991_G.jpg

muchos compartían la opi-nión de que se necesitaba un cambio estructural de nues-tro gobierno, finalmente este no se dio. Muchos tenemos la conciencia para mirar de una forma más eficaz la política actual, pero ¿de verdad esta-mos participando en ella? No sólo con un voto se partici-

pa en la democracia. Tenemos que reflexionar y analizar cada propuesta. Observar, debatir y concientizar a aquellas perso-nas que todavía no adquieren esta disciplina, para que como jóvenes ocupemos nuestro es-pacio en la política, en lugar de mirar como los mayores como nos organizan el país, desde la

publicidad en las campañas. Es decir, velar para que se cum-plan las propuestas no sólo para la población juvenil, sino para el interés general.Ahí está la reflexión: es hora de que nos toquemos y ver que ya tenemos mayor participación en espacios de entes políticos. Que si queremos un cambio,

ya están las oportunidades, aunque mal llevadas, pero que podemos, desde nuestros colegios, hogares y universi-dades, aportar ese granito de arena a que no seamos tan in-diferentes a nuestra realidad. ¡Hagamos política para tener una mirada más clara a una participación juvenil!


Tengo el placer de es-tudiar en un buen colegio: la Institución

Educativa José Horacio Be-tancur, la que desde el año

Los padres y estudiantes, vitales para que mejoren los colegios

Calidad, con C de compromiso

Jorge Andrés Valencia.Personero, I.E. José HoracioBetancur

2005 participa del programa “Escuelas de Calidad para la Equidad y Convivencia” de la Alcaldía de Medellín, una iniciativa pensada para que salgamos mejor preparados a enfrentar la educación supe-rior y la vida laboral.

Y este año, la Secretaría de Educación de nuevo nos invitó

a ser parte de la quinta cohor-te, en la que 25 instituciones educativas podemos trabajar para obtener nuestra certifica-ción y lograr ser un colegio de calidad, por medio de mejoras en procesos que nos permitan obtener mejores resultados en pruebas como las Icfes.

Para esto contamos con el acompañamiento continuo y sistematizado de una repre-sentante de la Secretaría de Educación, Zuleima Hinca-pié, quien durante estos tres años nos va a acompañar en todos los momentos con un Comité de Calidad para tra-bajar por mejorar la pedago-gía, los procesos administra-tivos y presupuestales y la proyección a la comunidad.


Seguir mejorandoGracias a este programa de la Secretaría de Educación y al compromiso de los educado-res y los estudiantes, la Institución Educativa José Horacio Betancur entró en el nivel me-dio en pruebas Icfes y hoy tenemos el reto de estar en el nivel alto en unos dos o tres años.

Del mismo modo, hoy hemos mejorado pro-cesos de aprendizaje y de cercanía con la co-munidad, por medio de eventos como la ce-lebración de los días de la Antioqueñidad en septiembre, del Niño, de la pareja y del Pro-fesor, o la Semana del Libro que disfrutamos en abril.


Luis Miguel Arango Aguirre. Personero Estudiantil,I.E. Fe y Alegría Popular Nº 1

Es un tema que para muchos no tiene sentido, ni mucho menos importancia, mientras que para

otros sí, pues en los colegios no faltan las riñas o peleas entre los grupos o los mismos estudiantes, todo porque los jó-venes somos muy inconformistas con lo que tenemos, por eso a veces actuamos con rencor, rabia o simplemente envidia hacia los demás.

El hecho de anhelar ser como el otro, te-ner lo que él tiene o saber lo que él sabe, a veces nos lleva a sentir envidia, lo que puede convertirse en agresiones físicas o verbales, lo que afecta no sólo los cole-

gios, sino también toda la sociedad.El joven pasa por una etapa de su vida en la cual necesita el apoyo de las demás per-sonas y ahí es clave entender que “noso-tros no somos más que nadie ni nadie es más que nosotros”: Por eso, si en lugar de preocuparnos tantos por los demás, nos ocupamos más de nosotros mismos, sería posible evitar estos conflictos en nuestros colegios, pues estos necesitan de nuestra colaboración y apoyo para la convivencia.

Choques electoralesEn la pasada campaña por el puesto de Personero en la Institución Educativa Fe y Alegría Popular Nº 1 se vivió una riva-lidad juvenil entre los grupos de apoyo a los candidatos. Así, cuando una candida-ta a Representante Estudiantil veía que el actual Personero realizaba alguna activi-dad, al otro día resultaba con algo mejor para ayudar al candidato opuesto.

De esta manera, en el colegio se veía algo de lo que se ve en la sociedad, inclusive gente que decía que había irregularidades

Hay que prestarle atención a la inconformidad y la rivalidad en los colegios

en los votos. Por eso, después de todo, tenemos que saber que al pasar las elec-ciones, seguiremos juntos. Por eso, en la Fe y Alegría, la rivalidad entre los candi-datos se disolvió con el pasar de los días, dejándonos la enseñanza de que no hace falta crear nuevas rivalidades ni hablar mal del otro, pues hay que aprender de frases como estas: “cuando hables pro-cura que tus palabras sean mejores que

El reto es convivir

Así piensan“La inconformidad y la ri-validad en los colegios se dan más que todo en los alumnos y alumnas porque se agreden física y verbal-mente y en muchas de las ocasiones se guarda tanto

rencor como la envidia porque cada una de las personas tenemos diferentes ideas y formas de pensar”.Carolina Ruiz Arredondo, Estudiante de 7º de la IE Fe y Alegría Popular Nº 1

“Pienso que la rivalidad y el inconformismo se da por la forma de actuar de los mismos estudiantes, ya si uno es serio le dicen que es muy ‘picado’ y si es muy cansón es ‘desatinado’, pues cada día estamos más inconformes con lo que hacemos y lo que tenemos, ya que cotidianamente es una pe-lea diferente entre grupos y los mismos es-tudiantes. La rivalidad y la inconformidad no tienen estatura, sexo ni mucho menos nivel social y aunque son muy comunes, nosotros podemos cambiar esa historia”.Johnier Alexander Palacio Barrera, Estu-diante de 11º de la IE Fe y Alegría Popu-lar Nº 1


No usan corbata, sino camisetas de múltiples colores. En sus reunio-

nes difícilmente un lustrador podría ganar algo, pues en lu-gar de zapatillas, usan tenis. Sin embargo, sus 19 cerebros deben pensar políticas para que los jó-venes vivan mejor, porque al fin y al cabo, ese es el objetivo del Consejo Municipal de la Juven-tud, más conocido como CMJ.

El CMJ es la representación de la juventud ante los entes guberna-mentales y no gubernamentales de la ciudad, pero a decir ver-dad dicha representación tiene a muchos jóvenes insatisfechos con sus elegidos, pues sienten que no cumplen a cabalidad con sus obligaciones, lo que lleva al CMJ a sentir una “crisis”.

Por eso, el pasado martes 11 de mayo en el Concejo de Medellín los jóvenes fuimos convocados para conocer más a fondo el trabajo del CMJ en el periodo de tres años, de cara a conocer los resultados en la recta final, ya que este año se elegirán nue-vos consejeros, y verificando qué tan útil y qué mejoras había tenido el CMJ con respecto a los años anteriores.En ese debate se buscaba cono-

María Soledad Gómez.Colegio Presentación de Medellín

cer a profundidad el CMJ, pero el objetivo no se logró porque sus integrantes, tristemente, no dieron buenas respuestas. Al principio, esperamos que sus respuestas borraran las sos-pechas de que su trabajo fue mediocre, pero con el transcu-rrir de las horas teníamos más preguntas que al principio y, lo peor de todo, jamás fueran contestadas. Hasta el público la contradicción en sus res-puestas, pues mientras unos decían que habían estado en los colegios dando a conocer el CMJ, pero otros dijeron que no los apoyaban, por lo que nunca supimos si les ayudaron o no en las instituciones educativas a reafianzar su tarea.

Inquietudes y retosOtro tema inquietante fue la co-laboración de Metrojuventud y la queja constante de la falta de presupuesto para realizar sus

actividades. Algunos consejeros dijeron que no realizaban mu-chas de las propuestas por falta de dinero y otros que por la fal-ta de apoyo de Metrojuventud, diciendo que no eran tenidos en cuenta. Aunque, sinceramente, se vio como una excusa para jus-tificar las falencias en organiza-ción y para buscarle explicación a su pobre desempeño.

Es lógico que organismos de esta índole sean conocidos por todos los jóvenes porque es un derecho contemplado en la Ley 373 de 1997 y como afirmó Ju-lián Hincapié, un estudiante de derecho de 20 años y líder juve-nil, “si (el CMJ) hubiera gene-rado un trabajo de impacto, los jóvenes lo conoceríamos”, pero por desgracia no fue así.

El CMJ es bastante desconocido y si se ha mostrado es por estar vinculado con algún proyecto de

la Alcaldía, a sabiendas de que es el espacio para que la población de los 14 has-ta los 26 años, actúe, apor-te para hacer una socie-dad mejor y para que los jóvenes tomen partido en temas vitales como

los falsos positivos, los partidos políti-cos, las relaciones internacionales y la educación, entre

otros, por lo que el CMJ necesita urgentemente salir de la crisis de descono-cimiento, presupuesto y con-

flictos con entidades cercanas y mejorar los procesos internos.

Aunque claro, como aspecto positivo hay que resaltar el tra-bajo con organizaciones como PP Joven, el IPC, Fenalco y la Red de Personeros, que apo-yan la labor de los consejeros juveniles, quienes tienes que llevar en alto y cumplir el reto de que las personas “asuman al CMJ no como la alternati-va para Medellín, sino como otra alternativa de representa-ción juvenil” como concluyó el Concejo en el debate. Por consiguiente, ellos tienen que trabajar en la famosa frase de “Querer es poder” y salirse de la calificación dada aquel día de que “lo que no sirva, que no estorbe” y hacerse una pregun-ta crucial ¿vale la pena ejercer un periodo considerable para no satisfacer las expectativas de los jóvenes? No lo creo.

CMJ: Conversemos más juntos Un espacio necesario para los jóvenes


“Me agradan de mi colegio los elementos

deportivos, las ac-tividades lúdicas que realizan y los profesores que tra-tan al máximo que tengamos buena y sana educación. Me parecen bien las fes-tividades familiares, ya que esto aumen-ta nuestra unión y la armonía entre las personas”, comenta Anderson Montoya Tamayo, de 12 años y quien estudia en la Institución Edu-cativa José Horacio Betancur.

Y Anderson toca un tema clave, pues para hablar de su cole-gio, menciona no sólo el com-promiso de los docentes, sino también la participación de los padres de familia y los estu-diantes, pues por más que la Secretaría de Educación se pre-ocupe por construir colegios de calidad, hay que ir más allá de

Por eso, cuando a algunas ins-tituciones educativas no les va bien en las pruebas Saber o Icfes o cuando se ven las cifras que muestran como hay un im-portante número de jóvenes y niños que no asisten al colegio, es fácil mirarse para buscar un culpable, pero el reto para to-

Susana Paniagua Valencia

Las directivas y los estudiantes, igual de protagonistas

la infraestructura para conver-tirlos en verdaderos espacios de aprendizaje, pues como dice el mismo Anderson “la biblio-teca, la sala de computadores y el laboratorio también son muy importantes para nuestra for-mación, aunque falta más con-tinuidad en su asistencia”.

dos es preguntarnos cómo hacer que los colegios generen más interés.

A todos nos tocaEs cierto que hay jóvenes que aban-donan sus estudios porque la situación de sus familias los obliga a trabajar para aportar en sus casas o porque caen en las garras de la drogadicción o la prostitución, pero también hay algu-nos que abandonan las aulas porque no se sienten motiva-dos para estudiar.

Por eso, y teniendo en cuenta que el co-legio lo construimos entre todos, las di-rectivas institucio-nales, los docentes y estudiantes, con el liderazgo de los personeros estu-diantiles, tenemos el reto de identificar estrategias para que,

de la mano con la Secretaría de Educación, mejoremos el nivel educativo y aumen-temos el entusiasmo de los estudiantes, mejorando los métodos de estudio y los ambientes de los colegios, para que desde las aulas hagamos de Antioquia una mejor sociedad.


Aunque muchos sólo asocien la palabra Antimili con un con-

cierto, esta trae consigo una apuesta de vida muy pro-funda: “El derecho que recla-man muchos jóvenes de no

La objeción de conciencia, una lucha que sigue en pie

tener que pagar servicio mili-tar obligatorio, de no tener que empuñar un arma”.

El antimili nace en la oposición a un deber que opaca el dere-cho fundamental de los jóve-nes, el no empuñar un arma en contra de ningún individuo. La Red Juvenil de Medellín fue iniciadora del proceso, querien-do mostrar que los jóvenes no

“No estoy de acuer-do con que n o s o t r o s los Jóvenes t engamos el deber de presen-tarnos a prestar el servicio militar, puesto va en contra de mis principios e ideales sociales. Considero que me estancaría a la hora de em-prender mis estudios hacia la educación superior”Julián Lopera Creadores del futuro .

Antimilisólo son los que delinquen, sino también los que quieren y pueden conseguir un país mejor luchando por la vida y la libertad.

“El servicio militar obligatorio no afecta solo a los hombres que se preparan para pagar su deber ante su Gobierno, sino también a mujeres que pueden ser desde madres o

hermanas e incluso hijas”, como lo comenta nuestro amigo Daniel, más conocido como “El Pollo”, integrante de la Red Juvenil de Mede-llín.

Como bien lo dice el artículo 18 de la Constitución “Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión”. Derecho fundamental que prima sobre la ley de que cada persona esté obligada a tomar un arma.

Por estos días en los cole-gios se presentan los es-tudiantes ante las Fuerzas Amadas, aunque según el Artículo 14 de la Ley de Re-clutamiento las institucio-nes no pueden obligar a los jóvenes a presentarse, como tampoco pueden obligar a los religiosos, ni los que tienen cadenas, ni los hijos únicos, ni los jóvenes que sean padres, como lo esti-pula la Ley.

Carlos Alberto Cuellar. Danndenis Alvarez Valderrama. Personero, I.E. Creadores del Futuro el Corazón.

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