Monitoreo Democrático 008

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Año I Edición 008 páginas 04 a 06 El Pacto de Ética. ¿A qué se comprometieron? página 11 Comuníquese y cúmplase: La ciudadanía. páginas 08 y 09 Semana del 14 al 20 de febrero de 2011 Me lo contó Chepaco... La Incontenta. página 10

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Boletín Monitoreo Democrático número 008. Lea en esta edición una entrevista con Carlos Zúñiga, así como el contenido del Pacto de Ética y otra historia de Chepaco.

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Año I Edición 008

páginas 04 a 06

El Pacto de Ética. ¿A qué se comprometieron?

página 11

Comuníquese y cúmplase: La ciudadanía.

páginas 08 y 09

Semana del 14 al 20 de febrero de 2011

Me lo contó Chepaco...La Incontenta.

página 10

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Monitoreo democrático es una publicación de Constitución para Todos

- ONG - como complemento de la página www.eleccionesguate.infoAmbas publicaciones son un a porte a l debate político d el p aís y buscan promover la participación de la población por medio del acceso a la infor-mación objetiva y sin sesgos políticos o ideológicos.

Se permite la reproducción parcial o toal de este boletín una vez se cite la fuente

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editorial

directorio

La democracia es la mejor forma de gobierno conocida hasta la fecha, es la voluntad de las mayorías, aunque se equivo-quen, no consiste únicamente en elecciones, sino en la garan-tía plena de los derechos de los habitantes, en gozar de una vida plena con sus necesidades básicas satisfechas. Es gozar de la libertad en todas sus dimensiones.

La situación económica y social de los guatemaltecos es pre-caria, saber que uno de cada dos habitantes vive bajo la línea de la pobreza y en pobreza extrema tres de cada diez es para lamentar. Los 25 años de vigencia de la Carta Magna, no son suficientes, se hace necesario impulsar el crecimiento econó-mico, la participación real y activa en la toma de decisiones, instituciones fuertes, gozar de los satisfactores y oportunida-des; buscar el consenso, lidiar y negociar con el conflicto y otras.

Se asiste en septiembre de este año al séptimo proceso elec-cionario, sin embargo, muchos lo hacen con indiferencia, sin importancia, porque se ha observado como un show, no importa por quien se vote, de todas formas vamos a seguir igual. Los partidos que han estado al frente del gobierno han desilusionado, utilizado la voluntad de las mayorías para pri-vilegiar sectores o intereses particulares. La corrupción es la enfermedad.

La democracia, tan anhelada, esperada y conquistada por ge-neraciones pasadas es hoy una forma a través de la cual un grupo llega al poder, se enriquece y resuelve sus problemas. Lamentablemente la idea de hacer gobierno remite a enrique-cerse. Tanto en el gobierno local como nacional. “Aprovechá” le dicen a quienes llegan a un cargo público.

La población desea participar en la toma de decisiones, apoya ideas, proyectos, pero espera que se cumplan, sabe que mu-chos mienten para llegar al poder pero les concede la duda y vota. A los actores directos del proceso, instituciones y parti-dos políticos se les hace un llamado a responder a las expec-tativas.

En el interior del país, donde la presencia del Estado es casi

inexistente no se vota por el presidente con tanto ánimo como si lo hacen por el candidato a alcalde o diputado. Para la gente es importante el gobernante que está cerca, al que pueden ver y consultar. Porque aunque en estos años de vida democrática la sociedad civil organizada tiene presencia aún no llega a sec-tores amplios que se sienten excluidos de todo.

Tenemos un reto con la democracia guatemalteca y es respon-der con acciones concretas a las demandas sociales, seguridad, justicia, trabajo, educación de calidad, salud, oportunidades, vida cultural y científica. No se pasó de gobiernos militares a civiles para seguir en lo mismo. Ahora existen enemigos forta-lecidos, narcotráfico, crimen organizado y grupos enquistados en estructuras de gobierno enriquecidos con los fondos públi-cos pagados por los ciudadanos.

Los problemas se conocen, se tienen soluciones planteadas, lo que hace falta es llevarlas a la práctica.

Democracia es más que derecho a voto

Director Sergio Paz

Editor Byron Montenegro

Redacción Álvaro Martínez, Paola Rodas, Karla Alfaro

DiseñoIntegrated Business

FotografíaDouglas Marroquín

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entrevista

Carlos Enrique Zúñiga Fumagalli es un exitoso empresario del agro guatemalteco, dirigente y representante del sector en la Cá-mara del Agro y el Cacif, fue recientemente declarado como el presidenciable del Partido CASA. Esta entrevista se llevó a cabo una semana antes de ese anuncio, por lo que algunas preguntas pueden tener un desface contextual y coyuntural en sus respues-tas.

¿Cómo ha sido la evolución empresarial en un contexto his-tórico marcado por dictaduras militares, luego una etapa democrática con conflicto armado interno, y últimamente, luego de la firma de la paz, una sociedad polarizada y vícti-ma de la violencia?

En primer lugar, el conflicto armado, fue una guerra que no era nuestra, la lucha ideológica entre dos potencias que instalaron un área de amortiguamiento en la región donde desafortunadamen-te nos tocó poner la lucha armada y los muertos, porque al final cayó una de las ideologías y nunca hubo más que un conflicto imaginario entre ellas. En el sector agropecuario y comercial, el impacto fue enorme, me tocó perder a muchos amigos y sus familias, además de las pérdidas millonarias, es una guerra que le costó al país por lo menos unos 100 años de atraso.Todo se debe juzgar en su tiempo, en su momento y en su con-texto. Hoy podemos juzgar muchas cosas de hace 40 años, pero para quienes no estuvieron allí o no investigan lo suficiente para encontrar los motivos, es muy fácil criticar y tomar partido de forma superficial.En la guerra interna hubo muchas calamidades de ambas partes, y sigue en el imaginario colectivo por parte de muchos sectores esa decisión y ese enfrentamiento, que debemos conocer para no repetir, pero que también debemos superar para seguir adelan-te. Y eso ayudará a que el proceso democrático madure, porque desde la época de la Democracia Cristiana, no se tienen avances, y la corrupción ha ido en aumento, desde ese primer gobierno civil, hasta el último, donde todos han tenido su parte nefasta. Los Acuerdos de Paz fueron acuerdos políticos, pero no fueron hechos de corazón. En su momento habían algunas condiciones, que al final no se cumplieron, y ahora, pierden relevancia algu-nos temas, porque las condiciones son otras.Se puede rescatar algo, a pesar del intento de golpe de Serrano Elías, y es la continuidad del proceso democrático, pero que no ha sido suficiente para mantener un Estado de Derecho y ha per-mitido la incursión de poderes paralelos dedicados al crimen, trata de blancas, narcotráfico, tráfico de armas, secuestros, et-cétera, y que su génesis es la corrupción tanto estatal como pri-vada, porque hay mucha irresponsabilidad de ambas partes con tal de enriquecerse, incluso a costa de la vida de personas, de

guatemaltecos, eso llora sangre.

¿Es demasiado tarde para combatir estos flagelos?

Tarde ya es, demasiado tal vez no, aún se puede hacer algo, pero hay que hacerlo ya. La desarticulación del ejército sin tomar en cuenta otros as-pectos de seguridad es un grave error que ahora se está pagando, porque había que quitarle a las fuerzas armadas el poder político que tenían, pero no el poder militar en favor de la nación. Pero era una revancha, y por eso se comete el error, creando paralelamente un a Policías que se infestó de corrupción. El ejército en ese momento era la única fuerza de ley que existía. Y al convertirse en tierra de nadie, llegan estos flagelos que se han enraizado. Esa sí fue una decisión hecha con el corazón, y debió haberse hecho con la cabeza, porque las consecuencias son catastróficas para mi-les de chapines que hoy sufren de un estado de violencia incontrolable. Esto ha degenerado en una desgregación social en la que muchos grupos y naciones surgen con su propia bandera y defienden su espacio, porque la violencia ha hecho desconfiar a unos de otros. Y los políticos se han aprovechado de eso, haciendo barreras entre ricos y pobres, católicos y evangélicos, ladinos e indígenas, hombres y mujeres. Es ridículo y triste, que esto suceda. Quizás las nuevas generaciones, que traen nuevas ideas y que no se dejan influenciar tanto por ideologías extremistas puedan lograr cambios importantes. La ley en este país ha favorecido más a las clases pudientes que a los de escasos recursos en algunos casos, pero no se trata de buscar revanchismo y hacerlas ahora al contrario, la ley debe aplicarse pareja para todos. Se necesita un Estado más fuerte, no más grande, que logre el orden y el cumplimiento de las normas.

Tocó un tema interesante y que viene desde la colonia, la discrimina-ción. ¿Qué hace falta para romper con esos paradigmas de descalifi-cación a priori solamente por características distintas?

Es un error chapín el sentirse menos que los demás, porque mucha de la discriminación, que sí la hay, no es porque se discrimine, sino porque la gente se siente discriminada. Y es que la cultura guatemalteca es tan noble, que cae en el error de creer mejores a quienes vienen de la Ciudad, a quienes vienen del extranjero, y estos se aprovechan. Sin embargo, tam-bién están los que discriminan creyéndose superiores, y eso sí es un pro-blema mental de esas personas que deben ser denunciadas y castigadas, porque esa etapa de razas puras ya fue superada, aunque no erradicada. En Guatemala somos un país con muchas culturas y muchas mezclas, y de-bemos respetarnos unos a otros, porque en esas diferencias radica nuestra riqueza, nuestra capacidad de alcanzar consenso. Y los partidos políticos juegan allí un papel importante, al brindar oportunidades por igual, y no porque se tengan chequeras más grandes, ojos claros, o un traje distinto. La institucionalidad política es vital para eliminar estos barbarismos. El ser humano no es lo que tiene, sino lo que es. El dinero y la apariencia no hace a la persona, y eso recae por la falta de valores y de moral.

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Han mejorado muchas cosas, pero hay que ponerse pilas para cambiar lo que hace falta.

Hablando de ese aspecto institucional y de cierta falta de identidad nacional, ¿qué es lo que falla? ¿la educación cívica? ¿la educación familiar? ¿la educación religiosa?

Creo que el aspecto cívico es muy importante, porque debe incluirse dentro de los sistemas educativos del país. Para crear un esquema de formación dentro de los valores, la ética, el respeto; pero eso requiere un compromiso de Estado, porque si no lo aplicamos, cómo lo vamos a enseñar. Mientras existan funcionarios corruptos, empresarios corruptos, educadores corrup-tos, no podremos enseñar a las nuevas generaciones a cambiar, y lo único que se enseña es una doble moral. Vivir de forma correcta para dar el ejemplo, que es más difícil que hacerlo violando las leyes, pero es lo que se debe hacer.

¿Y cómo se debe dar ejemplo? ¿qué es vivir correctamente?

Pues es eso, vivir de forma coherente con lo que se dice. Si yo le digo a mi hija que no mienta, pero cuando me llaman por teléfono le digo: “decí que no estoy”; cómo le voy a reclamar luego porque ella mienta. A nivel macro, un ejemplo de nación que tuvo problemas similares a los que aho-ra enfrentamos, fue Colombia, que ha logrado superarlos. Aún no es un ejemplo de transparencia y de moralidad, pero logró salir de un abismo en el que la había metido un conflicto interno que se ha narcotizado, una ola de violencia y de criminalidad de las más altas de Latinoamérica, pero que se ha logrado reducir. Cuando tuve la oportunidad de platicar con el expre-sidente Álvaro Uribe, acerca de cómo hizo para lograr esos cambios, me contaba que su gran secreto fue crear consensos. No se puede vivir en un Estado de Derecho, donde no todos son iguales ante la ley, así que reunió a todos los sectores y cada uno se comprometió a cumplir con su parte. Se logró que se incrementara la recaudación fiscal, con mejores medidas de vigilancia y haciendo que cada quien pagara lo que debía pagar. A la par, se plantearon medidas de transparencia y consenso en el gasto público en los temas prioritarios. Y cuando no hubo consenso, se tomaron decisiones de Estado, porque siempre existen los que quieren cambios, pero que sin que a ellos se les afecte, y si es necesario afectar a una minoría para favo-recer a una gran mayoría de la población, debe hacerse, para eso se eligen líderes, para que tomen las decisiones más adecuadas. No se puede quedar bien con todos siempre. Si la solución es subir lo impuestos, hay que subir-los y ver que todos los paguen; si la solución es eliminar la corrupción, hay que juzgar a quienes estén involucrados y meterlos presos. Claro, tal vez tenga encima al CACIF con la medida, o a la CONIC, o a los dos, pero se va a respetar la medida tomada, al demostrar que era necesaria. El respeto se gana. Por ejemplo, una de las decisiones que se debió haber tomado ya es reformar la ley de minería y establecer medidas y tributos coherentes a la realidad, pero no se vale venir ahora y declarar un contrato lesivo para

el Estado cuando la ley dicta una cosa.

Como empresario, ¿ha vivido usted bajo esa filosofía?

Le agradezco que me lo pregunte, para no pecar de vanidoso. Yo como empresario, soy producto de mi propio esfuerzo, yo no heredé, no recibí un favor político, no me regalaron nada. Yo empecé desde la microempresa, y gracias a Dios he tomado algunas decisiones que me han llevado a donde estoy ahora, claro, me equivoqué a veces, pero seguí adelante, con mi gente, con el grupo de personas que funda-mos las primeras empresas. Porque eso vale mucho, de hecho, es lo más valioso de mi empresa, su gente. Y si ellos creyeron en mí, y siguieron a mi lado, yo también debo retribuirles. Acá no se paga el salario mínimo, se paga mucho más, y en muchas empresas el salario mínimo se convierte en salario máximo. Lo que le quiero decir es que de todo hay, yo no santifico a los empresarios por el hecho de serlo, hay muchos empresarios que han logrado su éxito a costa de muchas cosas y de muchas personas, pasando sobre la ética y la moral, y eso es condenable desde todo punto de vista.Que uno puede cometer errores eso es intrínseco del ser humano, pero se debe rectificar. Y cuando se alcanza el éxito se debe ser agradecido con quienes lo rodearon a uno en la búsqueda de esas metas. Pero si yo despido gente cada cuatro años, ¿usted cree que habrá lealtad? La gente llegará al puesto a ver qué roba, cómo hace negocios en lo que le dura el puesto. Y eso pasa con el gobierno. La carrera de servicio público es fundamental, y debe ser vocacional, no por conectes o por ambición de dinero. Para eso que arriesguen en el sector privado, para eso hay libertad de mercado, y no que se lleguen a apoderar del dinero de todos. Del que tributamos todos, desde el más rico, hasta los más pobres que igual pagan IVA cuando consumen, aunque ese dinero no llegue a su destino, ya sea porque se lo roban en el camino, o se lo roban los funcionarios.

Hablando de ese destino de los impuestos, que deberían servir para una redistribución social con proyectos de beneficio, sobre-todo, para los más necesitados o los más olvidados. ¿Qué opina de los programas sociales implementados por el actual gobierno?

Son una maravilla, como concepto. Los programas sociales son la base para lograr un mejor equilibrio social, han sido exitosos en mu-chas partes del mundo, y se tienen ejemplos claros en el Sur del con-tinente.Sin embargo, en el país están mal enfocados. Son utilizados de forma populista y no cumplen con el objetivo de crear oportunidades, sino dependencia. Deben ser programas coherentes. Por buscar la gratuidad y la cober-tura se descuidan aspectos fundamentales como la calidad y la segu-ridad, por ejemplo. Los niños van a las escuelas pero no tienen dónde

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escribir, quien les de clases, y para colmo llegan mareros a chanta-jearlos y robarles. Pero claro, seguirán llegando porque les pagan por ir, que está bien, pero que no funciona con el objetivo pretendido. El futuro de un país es la educación. Si a los niños no se les da una nu-trición adecuada, no desarrollan sus capacidades de forma plena, y si además la educación es deficiente, qué pasará cuando lleguen a buscar un empleo o quieran desarrollarse como deportistas, o lo que sea; ten-drán una desventaja competitiva con respecto a otros niños que vivie-ron en mejores condiciones. Entonces no se trata de crear realidades inexistentes al ofrecer cosas que no servirán en el futuro, como una educación gratis, pero sin ningún objetivo. Se trata de lograr equiparar la vida de estos niños con las de otros que si tienen oportunidad de estar bien nutridos y bien educados para que en el futuro compitan por oportunidades similares.Los programas deben continuar, pero reenfocarse, porque nacieron con un objetivo político y no social.Y el tema de la corrupción debe combatirse, porque muchos señala-mientos se han enfocado en esto de la transparencia. Yo estoy seguro que la pobreza puede erradicarse si los gobiernos de turno se dejan de robar el 80% de lo que se roban, con eso podríamos erradicarla.

La corrupción trae consigo el tema del financiamiento a los parti-dos políticos proveniente de actividades ilícitas, desde allí se tiene ya un problema, porque las autoridades responderán a intereses de grupos paralelos fuera de la ley...

Exactamente, ese es un análisis y fiscalización que habrá que hacer, porque se deberían tener campañas más modestas en cuanto a publi-cidad e imagen de candidatos y centrarse más en la discusión de los problemas y el planteamiento de soluciones a través de sus planes de trabajo. Los partidos tienen un rol muy importante que jugar, pero más importante debe ser la exigencia de las bases y de la población en ge-neral por procurar que estos no solamente ofrezcan y debatan, sino que además cumplan al llegar al poder.Los programas de gobierno en el país son puro “copy-paste” de parti-dos de otros países. Cosas irreales, los gobiernos llegan sin saber qué hacer, y cuando medio agarran la onda, ya van para afuera, pero es por falta de planificación, no porque no les de tiempo de hacer algo.

¿Existe liderazgo real actualmente en los partidos políticos?

Los partidos se han caracterizado en Guatemala por ser dirigidos por caudillos, jefes, o propietarios de partidos. No existen liderazgos cla-

ros, y lo que pasa es que culturalmente se tiene la idea de que es la figura del presidente la que cambiará todo y se forma en el imaginario un superman o una mujer maravilla, y eso no es así, se necesita todo un equipo de trabajo que tenga experiencia y que tome las decisiones de las que hablaba anteriormente. Un líder es el que tiene la capacidad de dirigir y coordinar para que todos logren hacer al sinergia necesaria. Por eso un entrenador de fútbol debe ser un líder, sino el equipo no funciona. Por eso se debe exigir no solamente la imagen del presidente, sino pregun-tarle quiénes serán sus ministros, su gabinete de Estado, porque el presidente no tiene por qué saber de todo o ser experto en todo, lo que necesita es saber quiénes pueden hacer mejor gestión.Hay quienes dicen que el gobierno no es empresa, pero sí es, todo en la vida es una empresa.Los candidatos están optando a un puesto público, están pidiendo trabajo, hay que cuestionarlos, los candidatos a presidente están optando al puesto de la gerencia del país, hay que investigarlos, conocerlos, y si son de confianza darles el voto, pero sino lo son no hay que vender el voto por un puesto, por un regalito, por un negocio dentro del gobierno, por una bolsa de víveres, eso no es así, no debe ser así.No vamos a elegir como dirigente del país a alguien con víncu-los con el narcotráfico, o alguien que ha robado en el pasado, o alguien que ha asesinado, o alguien que acosa sexualmente, no. Simplemente eso es intolerante, por eso esta campaña política, gracias a la facilidad de las comunicaciones y el manejo de la información puede ser distinta, con electores mejor informados, como el trabajo que hacen ustedes en la ONG, que es de gran valor para la ciudadanía. No importa si la página la ven mil o un millón de personas, pero allí está la información y a más de alguno le servirá para informarse.

¿Participará como candidato?

Tengo ofertas, pero no he tomado la decisión, lo cierto es que se tiene la obligación, no solamente yo, sino todos los ciudadanos que creemos que la cosa debe cambiar, tenemos la obligación y el derecho de participar contra los mismos de siempre, contra los que solamente ven un botín en el erario nacional. Contra los tran-seros y los que llegan sólo a hacer business... hay candidatos que invierten Q5 o Q10 millones en la campaña, ¿para ir a ganar Q40 mil mensuales durante cuatro años? ¿en dónde cuadra la cosa? Ya van con hecho pensado de sacar lo más que puedan.

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coyuntura

1.Respetar la Constitución Política de la República de Guatemala, a la Ley Electoral y de Partidos Polí-ticos y sus reformas y al ordenamiento legal vigente en nuestro país, como única forma de garantizar el Estado de Derecho, pilar fundamental para la De-mocracia y la vida armónica de nuestra sociedad.

2.Coadyuvar a garantizar la pureza del proceso elec-toral desde el ámbito de nuestras responsabilidades, reafirmando el irrestricto cumplimiento de las leyes electorales y de todas las normas aplicables dentro del desarrollo de las elecciones generales 2011.

3.Colaborar con el Tribunal Supremo Electoral, a efecto que las elecciones sean una muestra de civis-mo y patriotismo y garantía del estado de derecho y a reforzar a esa máxima autoridad electoral en su quehacer.

4.Emprender una campaña electoral centrada en va-lores y principios democráticos, rescatando la ética y la moral en la conducta de los participantes.

5.Denunciar de inmediato la propagación campañas de desprestigio apócrifas o “campañas negras”, a fin de deducir las responsabilidades civiles y penales que correspondan, de tal manera que no se promueva el desprestigio entre los aspirantes bajo ninguna moda-lidad.

6.Desarrollar una campaña electoral centrada en un debate de ideas y programas, donde predomine el res-peto a las organizaciones políticas y a la dignidad de los candidatos participantes, dejando de lado los in-sultos y ataques personales, que afecten sus derechos fundamentales.

7.Promover activamente la divulgación de programas y planes de gobierno locales y nacionales, así como el debate de éstos entre los aspirantes que los impul-sen, generando para el efecto foros públicos y otros medios, que garanticen la presencia y libre participa-ción de la población, dentro del plano de la civilidad, descartando cualquier tipo de violencia.

8.Auspiciar el flujo de información que tienda a vi-

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gilar la legítima y lícita procedencia de los fondos o donaciones que recibamos los partidos y movimientos políticos y candidatos, para el desarrollo de nuestras campañas.

9.Evitar el uso directo o indirecto de los recursos públi-cos a favor o en contra de cualquier organización polí-tica o candidato.

10.Realizar una campaña de limpieza al finalizar el pro-ceso electoral con la finalidad de mantener el ornato.

11.Adoptar los mecanismos necesarios para que los principios y compromisos éticos electorales sean cono-cidos y respetados por nuestras bases.

12.Entregar mensualmente al Tribunal Supremo Electo-ral, el listado completo de donaciones recibidas para la campaña electoral, identificando donante y monto de la donación (si se trata de donaciones en especie, el monto será estimado a valor mercado), así como entregar men-sualmente al Tribunal Supremo Electoral, el listado de gastos de campaña incurridos en el período, identifican-do proveedor, concepto y monto del gasto.

Firmaron el Pacto:

Frente Republicano Guatemalteco Partido de Avanzada NacionalMovimiento Reformador Unión DemocráticaLos Verdes Partido PatriotaUnidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca Gran Alianza NacionalUnidad Nacional de la Esperanza Coalición por el CambioUnión del Cambio Nacional Centro de Acción SocialEncuentro por Guatemala Partido Político Visión con ValoresFrente de Convergencia Nacional Alternativa Nueva NaciónMovimiento Integral de Oportunidades Acción de Desarrollo NacionalCompromiso Renovación y Orden Libertad Democrática RenovadaVictoria

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me lo contó...Chepaco

Las elecciones en aquel país eran alegres, aun-que la Ley Electoral y de Partidos Políticos, con carácter constitucional prohibía realizar campa-ña anticipada, desde tiempo antes los principa-les partidos de oposición empezaban a realizar la misma, porque según ellos, el partido de go-bierno impulsaba a su candidato desde la toma de posesión. El órgano encargado de velar por el proceso electoral multaba por esta mala práctica, los partidos se quejaban y se negaban a pagar, era más barato pagar la multa que perder la opor-tunidad de tener presencia. Además, qué era el monto de la multa frente a las donaciones de sus financistas.

Sin embargo, con lo que no contaban era que como históricamente el país pertenecía a una re-gión que antes era unida y grande y ahora era un grupito de países subdesarrollados, en sus Cons-tituciones se establecía la nacionalidad para to-dos los habitantes de la región. Aprovechando esto, a una extranjera se le ocurrió hacer uso de esa disposición legal y convertirse en la primera mujer en buscar la presidencia de la República, éste es un país machista le decían sus conocidos. No importa, señaló, ya estoy en la historia. Y eso era cierto, porque sus posibilidades casi nulas, más bien mínimas.

Las encuestas no la favorecían, su atractivo tam-poco, no tenía el don de la palabra, le decían la candidata calcetín, puesto que cada vez que abría la boca metía la pata. En un foro se quejó de lo mal que la ubicaban las encuestas. “estoy incon-tenta” expresó, porque las encuestas están mal

elaboradoras, el diseño de la muestra no corres-ponde a la realidad. Ella se basaba en que como era mujer, el 50 por ciento de la población votaría por ella.

Su hijo, un estudiante universitario con deseos de colaborar con su madre, decidió realizar una práctica profesional, diseñó una muestra acorde a lo indicado por su progenitora, preparó la boleta y luego de varios días de pruebas y correcciones decidió hacer una sola pregunta. ¿Por quién vota-rá usted en la próxima elección?, con esto tendría una verdadera medición sin darse color que era del equipo de la Incontenta, apodo que le quedó entre el gremio periodístico de aquel país.

Se nos olvida decir que el hijo era bastante dedi-cado, tenía compromisos sociales, descanso, de-portes y de estudio según su escala de prioridades. Por tal razón, no había tenido tiempo de realizar su investigación de mercado. Una noche, al concluir una parranda tomó el teléfono y decidió realizar su encuesta, optó por el muestreo aleatorio simple, al azar, llamaba y realizaba su pregunta, sin tomar en cuenta la hora en que realizaba dicha actividad, esto lo repitió por tres noches seguidas porque de-bía concluir el estudio de forma profesional.

Los resultados eran sorprendentes, su mamá tenía razón, las encuestas no reflejaban la realidad por-que cuando él llamaba y realizaba su pregunta en horas de la madrugada todos respondían: ¡por tu madre!. La incontenta ganará expresaba mientras se quitaba la goma.

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comuníquese y cúmplase

ARTICULO 144.- Nacionalidad de origen. Son guatemaltecos de origen, los nacidos en el territorio de la República de Guate-mala, naves y aeronaves guatemaltecas y los hijos de padre o madre guatemaltecos, nacidos en el extranjero. Se exceptúan los hijos de funcionarios diplomáticos y de quienes ejerzan cargos legalmente equiparados. A ningún guatemalteco de origen, puede privársele de su na-cionalidad. ARTICULO 145.- Nacionalidad de centroamericanos. También se consideran guatemaltecos de origen, a los nacionales por na-cimiento, de las repúblicas que constituyeron la Federación de Centroamérica, si adquieren domicilio en Guatemala y manifes-tar en ante autoridad competente, su deseo de ser guatemalte-cos. En ese caso podrán conservar su nacionalidad de origen, sin perjuicio de lo que se establezca en tratados o convenios centroamericanos. ARTICULO 146.- Naturalización. Son guatemaltecos, quienes ob-tengan su naturalización, de conformidad con la ley. Los guatemaltecos naturalizados, tienen los mismos derechos que los de origen, salvo las limitaciones que establece esta Constitución. ARTICULO 147.- Ciudadanía. Son ciudadanos los guatemaltecos mayores de dieciocho años de edad. Los ciudadanos no tendrán más limitaciones, que las que establecen esta Constitución y la ley. ARTICULO 148.- Suspensión, pérdida y recuperación de la ciuda-danía. La ciudadanía se suspende, se pierde y se recobra de con-formidad con lo que preceptúa la ley.

EL ESTADO

CAPÍTULO II

NACIONALIDAD Y CIUDADANÍA

Constitución Política reformada por Acuerdo Legislativo No. 18-93 del 17 de Noviembre de 1993

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Se buscan diez abogados valientes, probos, comprometidos con el país y

con la Constitución...

Es LA HORA de PARTICIPAR

¿Será que los encontraremos?