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Índice

GRUPO EDITOR

PresidenteMons. Diego Monroy Ponce

DirectorLic. Arturo Rocha Cortés

EditorialLic. Ángel Roa Hernández

Jefe de FormaciónRicardo Galindo Melchor

ColaboradoresP. Juan Ortiz Magos - P. Gabriel Rodríguez Martín del Campo - Diácono Mario Bustamante Rubio - Lenice Rivera Hernández - Iván Martínez Huerta - Arturo Pardo Ayala - Ricardo Galindo Melchor - Lidia Binzhá Guerrero - Lic. María de la Concepción M.C. de Jiménez - Lic. Marcela Vallecillo Gómez - Lic. Samuel Jiménez Hernández - María Guadalupe Bustamante Rosas.

Boletín Guadalupano es una publicación mensual y gratuita de la Basílica de Guadalupe A.R. La distribución es realizada por la propia Basílica, con domicilio en Plaza de las Américas núm. 1, Col. Villa de Guadalupe, Deleg. Gustavo A. Madero, C.P. 07050, México, D.F. Tel.: 5577-60�� exts. �01 Redacción y 161; fax 5577-5038. Correo electrónico: boletinguadalupano@basilicadeguadalupe.org.mx. web: www.virgendeguadalupe.org.mx.

Registro de SEPOMEX (en trámite). Certificado de Licitud de Contenido núm. 10545, expedido por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la SEGOB, el �6 de noviembre de �004. Certificado de Licitud de Título núm. 12972, expedido por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de SEGOB, expedido el �6 de noviembre de 2004. Certificado de Reserva de Derechos al Uso Exclusivo núm. 04-�004-10�81�475400-106, expedido por la Dirección de Reservas de Derechos del Instituto Nacional del Derecho de Autor, el �8 de octubre de �004.

DiseñoArturo Pardo, Arturo Rocha

Formación Editorial Arturo Rocha y Ricardo Galindo

ImpresiónFormas Continuas Administrativas, S.A. de C.V.

Acalotenco 74, Col. Santo Tomás, C.P. 0�040, Deleg. Azcapotzalco, México D.F., con un tiraje de 10,000

ejemplares.

PUBLICACIÓN GRATUITA. PROHIBIDA SU VENTA

Los artículos y demás contribuciones publicadas en el Boletín Guadalupano no reflejan necesariamente el

sentir de la Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe. Y son responsabilidad exclusiva de sus autores.

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Mensaje deRector

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Lic. Samuel H. Jímenez Hernández.

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6 Editorial

Lic. Marcela Vallecillo Gómez

35 Festejos Guadalupanos2008

Dr. Patrick Johansson K.

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Cultura y Arte

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En Portada

Anónimo novohispAno

El Padre eterno pintando a la Virgen de GuadalupeSiglo XVIIIÓleo sobre telaCol. Museo de la Basílica de GuadalupeFoto: Manuel Zavala y Alonso

Diseño de Portada:Arturo Pardo Ayala

Diseño de interiores:Arturo Rocha, Ricardo Galindo, Lidia Binzhá.

María Guadalupe Bustamante Rosas

28 Misiones Guadalupanas

Omar Espinosa Garra, Laura E Villasana Anta,Verónica Saldivar Monroy

Espiritualidad, familia y valores del mundo indígena en la ciudad

Lic. Ángel Roa Hernández

Celebración familiar para arrullar al Niño Dios

Visita nuestro sitio en internet:www.virgendeguadalupe.org.mx

El Nican mopohua: un ayate verbal

Pastoral

Mons. Jorge Palencia Ramírez de Arellano

La familia ante los valores del cuidado de la creación

Artículo

La Basílica de Guadalupe, la Sagrada Liturgia y la Piedad Popular.Huamantla

Pbro. Gabriel Rodriguez Martín del Campo.

Peregrinaciones en el año 2008

CelebraciónNavideña

Misioneras Guadalupanas de Cristo Rey, OSB

Mons. Diego Monroy Ponce saluda a todos los peregrinos y lectores

Conociéndonos

CrónicaGuadalupana

Inauguración de la LXXXVI Asamblea de la Conferencia del Episcopado Mexicano

Peregrinaciones

Tonantzin Guadalupey los indígenas

MENSAJE DEL RECTOR

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Hermanos y hermanas: desde la Basílica de nuestra Señora de Guadalupe los saludo en la alegría y en la esperanza del Dios que viene, del Señor que se acerca, Jesucristo, nuestro redentor, quien por su nacimiento trajo la paz al

mundo y restauró con su venida el Reino de Dios, su Padre, nuestro Padre.

La inminente llegada de la Navidad, mis amados hermanos y hermanas, lleva nuestra mirada al humilde pesebre de Belén, para contemplar en el Niño que está ahí recostado y envuelto entre pañales, el inmenso amor con que Dios nos ha amado.

Este amor de Dios por nosotros está antecedido por la larga historia de la salvación, la cual tiene como cumplimiento -llegada la plenitud de los tiempos- la Encarnación y el nacimiento del Hijo de Dios, quien se hizo carne y habitó entre nosotros por y para nuestra salvación, para que conociéramos el amor de Dios, para ser nuestro modelo de santidad y para hacernos partícipes de su naturaleza divina.

Esta verdad de fe, el nacimiento en la carne del Hijo de Dios, lejos de la parafernalia con que se envuelve su celebración anual, es una invitación para todos los cristianos del mundo para comprender mejor su auténtico significado. Para ello es necesario echar una mirada a los evangelios de la infancia, los cuales relatan que su advenimiento aconteció en una noche callada que se contrapone al bullicio actual de nuestras navidades. No habla de un dulce niño de ensortijados cabellos, sino del pesebre y los pañales, signos concretos que proceden de un mundo humilde y pobre.

El Salvador del mundo, nacido en un establo, pone de manifiesto una clara toma de posición a favor de los desprovistos de nombre y de poder. De ahí que el relato de la Navidad nos hable de los pastores y esté en contra de los poderosos que detentan el poder: César Augusto y Quirino.

La Navidad es la fiesta del anonadamiento, del sometimiento por amor de la divinidad por la humanidad; es la manifestación plena de la pasión de Dios por el hombre. Es la fiesta que lleva un pleno sentido del otro, de la entrega sin medida, del reconocimiento y de la esperanza de Dios por el hombre. Es la fiesta de la paradoja, pues el Salvador, el Mesías, el Señor, nace despojado, pobre y en paraje solitario; sobre su pequeña humanidad se proyecta ya la sombra de la cruz.

Acompaña al evento de la Natividad el canto de los ángeles que proclaman: “Gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor”. La gloria de Dios se manifestaba en el Antiguo Testamento en los acontecimientos de la historia, Ahora, en el Niño que nace, nos encontramos con el centro del tiempo salvífico. Por eso, con Él llega la paz que es una de las expresiones utilizadas para hablar de la salvación esperada en el tiempo del Mesías. Y esta paz llega no sólo a los hombres de buena voluntad, sino a aquellos que son amados de Dios. He aquí la razón de nuestra alegría: somos amados de Dios.

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Mensaje del Rector Mensaje del Rector

Los invito, hermanos y hermanas, a vivir más intensamente esta Navidad a través del espíritu del Adviento, el cual durante cuatro semanas habrá de acompañarnos y prepararnos en la celebración histórica y escatológica de la venida de Cristo. Los textos bíblicos de la liturgia durante el tiempo del Adviento nos ayudan a entrar en la expectativa de la llegada del Mesías.

Los profetas nos animan a reflexionar sobre las promesas de Dios de rescatar a su pueblo e inaugurar una nueva era de amistad, de justicia, paz y alegría, mientras que las lecturas del Evangelio nos presentan una transición al cumplimiento de aquellas promesas de una manera sorprendente. Las cartas de los apóstoles nos invitan a vivir en comunión con Jesucristo, abriéndonos a recibir sin barreras la abundancia de vida. Miran también a la “Parusía” o la segunda venida de Jesús al final de este mundo.

En este camino nos acompañan Isaías, el gran visionario de los tiempos mesiánicos, Juan el Bautista, quien nos invita a la conversión y María, la Madre de la Esperanza, la Virgen del Adviento. María, la joven Virgen de Nazareth, la que se convirtió en la Madre de Jesús, es la misma Madre que celebraremos todos los mexicanos el próximo viernes 1� de diciembre, al conmemorarse los 477 años de sus históricas apariciones en este Tepeyac, en el que se dejó ver entre flores y oír entre cantos al indio santo Juan Diego Cuauhtlatoatzin.

Ella, como afirman nuestros Obispos reunidos en Aparecida, desde entonces: enriqueció con su visitación la vida de nuestros pueblos, convirtiendo la rica cultura cristiana en el más precioso tesoro de la fe católica. Su presencia en estas tierras fue y sigue siendo acontecimiento decisivo para el anuncio y el reconocimiento de su Hijo, pedagogía y signo de inculturación, manifestación y renovado impulso misionero de propagación del Evangelio.

La celebración de su presencia en medio de nosotros a lo largo de estas casi cinco centurias, son motivo suficiente para agradecer a nuestro Buen Padre Dios el privilegio y la distinción hecha, pues a través de Ella hemos reconocido su paterno y benévolo amor. Este reconocimiento y la conciencia de ser albaceas de tan magnífico portento deben llevarnos al compromiso de construir el templo que Ella pidió se le erigiera para manifestar desde ahí todo su amor maternal y su mirada compasiva.

Sabemos que el templo que Nuestra Niña y Señora nos pide no es el templo material, sino aquel que se levanta con muros de solidaridad, fraternidad y progreso, que se cimienta en la verdad, en la justicia y en el amor. Sólo mediante la construcción de este templo habremos de hacer realidad el deseo de la Virgencita, que no cesa de llamarnos a la unidad, comunión y reconciliación.

Hoy más que nunca debemos mirarla e invocarla, pues Ella nos ofrece como ya lo he señalado en otras ocasiones, la oportunidad de reconocernos como hermanos a pesar de nuestras diferencias, ideologías, capacidades y responsabilidades.

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En Ella, en su mensaje inculturador, la Iglesia de México y América encuentra no sólo el sustento de su fe, sino también la manera de ser familia, Iglesia y Nación. Así, queridos hermanos y hermanas, los invito a sumarse a la solemne fiesta anual en honor de nuestra amada Madrecita, santa María de Guadalupe. Que su fiesta principal sea motivo de encuentro y de reconocimiento entre nosotros los hijos de la Virgen. Pidámosle que nada empañe nuestra tranquilidad, pongamos bajo su cuidado maternal la seguridad, la prosperidad y el desarrollo de nuestras comunidades. Que aleje de nosotros la violencia, la corrupción y el narcotráfico, que nos conceda tiempos nuevos donde la cultura de la vida y del amor se anteponga a la cultura de la muerte.

No quiero despedirme, mis queridos hermanos y hermanas, sin antes exhortarlos a seguir muy de cerca el VI Encuentro Mundial de la Familias, a celebrarse en nuestra ciudad el próximo mes de enero de 2009. En esta jornada mundial, el Santo Padre Benedicto XVI hablará a las familias del mundo entero y sin lugar a dudas invitará a éstas a ser formadoras de personas, de valores, transformadoras de la sociedad, pero sobre todo, manantiales de amor y vida.

Acontecimiento de gracia será, durante el mes de febrero, la ordenación episcopal de S. E. Mons. Armando Florencio Colín Cruz, como nuevo obispo auxiliar de esta arquidiócesis de México. El Santo Padre Benedicto XVI lo ha llamado a colaborar en el ministerio episcopal para que en medio del pueblo santo sea Obispo, profeta, testigo y servidor de la esperanza. Lo felicitamos desde ahora y lo encomendamos también al cuidado maternal de nuestra Muchachita y celestial Señora, santa María de Guadalupe. Que Ella lo lleve en su Corazón Inmaculado de Madre.

Finalmente, mis amados hermanos y hermanas, quiero desearle a cada uno de ustedes una Santa y Feliz Navidad; que Jesús, el Niño que contemplaremos recostado en el pesebre, renueve en cada uno de nosotros los frutos de su nacimiento. Que la alegría de estos días sea motivo para abrazarnos y oportunidad para reconocer a Dios en cada uno de nuestros hermanos, especialmente en los más necesitados.

Les deseo un Año Nuevo lleno de bendiciones y mejores oportunidades para todos. Que a lo largo del año vayamos palpando el inmensurable amor de Dios. Un abrazo para todos y unas muy felices fiestas. Dios les bendiga.

Su hermano y amigo.

Mons. Diego Monroy PonceVicario General y Episcopal de Guadalupe

Rector del Santuario.

Mensaje del Rector

El año que termina cierra una página más de nuestra historia y abre otra no muy alentadora debido a la terrible crisis mundial.

Perplejos, vemos cómo las grandes economías del mundo se desploman, trayendo consecuencias gravísimas entre la gente más pobre del planeta. Éstos cada vez son más pobres y sus esperanzas cada vez están más lejos de ser alcanzadas.

Si a esto sumamos el terrorismo, ejemplo inmediato del que fuimos testigos recientemente en Bombay, la carrera armamentista y nuclear, el tráfico de personas y estupefacientes, la violencia, la corrupción y los atentados contra la naturaleza…, entonces pocas esperanzas tenemos de un mundo mejor.

Es aquí donde la voz profética de la Iglesia se levanta y nos invita a mirar el futuro con esperanza, a esperar contra toda esperanza, a celebrar la Navidad a pesar de lo dramático y triste de los tiempos.

Ante esta ola de adversidades el Señor nos invita a estar de pie, a no derrumbarnos. Él nos dice: “levántate, no estés dormido, ponte en camino, recupera tu libertad y tu dignidad”. En una palabra, Él nos dice: “mira al horizonte”; es hacia allí donde los cristianos tenemos que mira. Y esto sólo lo lograremos en la medida en que levantemos la cabeza y comencemos a soñar y trabajar por un mundo nuevo, donde haya amor, justicia, solidaridad y progreso. Éste es el verdadero sentido del Adviento que nos prepara para la Navidad.

Hay que ponernos en camino, hay que caminar con esperanza y en este camino encontrar a Cristo, el Hijo de Dios, que hace más de dos mil años se encarnó por amor al hombre. Hay que ponernos en camino para escuchar el clamor de los pobres, de los leprosos, de los encarcelados, de los que viven en soledad o cualquier otra clase de marginación.

Navidad es caminar junto a uno mismo, en un viaje al propio corazón. Hay mucho que descubrir dentro de nosotros. Caminar hacia uno mismo

es acercarnos a nuestra verdad, nuestro vacío, nuestra grandeza…, capacidades y debilidades, esperanzas e insatisfacciones, es un peregrinar al misterio de nuestra propia persona.

Navidad es caminar hacia el otro, no importa si está lejos o cerca; la distancia geográfica no importa, sino la distancia espiritual. Es comprensión y empatía, no metros o kilómetros. Hoy es más fácil llegar a Marte que a nuestro semejante (José Saramago).

Navidad es caminar hacia los pobres pobre, es hacernos solidarios con ellos, es comenzar a ser pobre con ellos y descubrir en ellos el rostro del Señor. Los pobres nos urgen prontamente.

Navidad es caminar hacia el otro, en última instancia hacia Dios, pues a Él lo encontramos de muchos modos a lo largo del camino: en los signos, en las huellas, en los pobres, en la palabra, en la fracción del pan, en el sacerdote, en el que está tirado a un lado del camino.

Quienes formamos el Consejo Editorial de este Boletín Guadalupano, deseamos a todos nuestros suscriptores y lectores una feliz y santa Navidad. Que la celebración del nacimiento del Hijo de Dios, renueve en nosotros el amor eterno del Padre y haga renacer la santa esperanza. ¡Felices fiestas de fin de año y un Año Nuevo lleno de bendiciones!

Venga el día, Señor, en que nuestra miseria encuentre misericordia. Venga el día, Señor, en que nuestra pobreza encuentre tu riqueza. Venga el día, Señor, en que nuestra senda encuentre en camino de tu casa. Venga el día, Señor, en que nuestras lagrimas encuentren tu sonrisa. Bendito seas Padre, por aquel día en que nuestros ojos verán tu rostro.

(Thierry Maertens)

EDITORIAL

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CULTURA Y ARTE

Entre todos los documentos que aluden a las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el Tepeyac, el documento conocido como Nican

mopohua1 tiene un lugar muy especial. En efecto, el texto que entraña funde en el crisol de la lengua náhuatl aspectos relevantes de la Fe cristiana y de la cultura indígena, generando asimismo un sincretismo espiritualmente fecundo.Antes de descubrir los recursos discursivos presentes en el texto, conviene considerar brevemente la lengua de Anáhuac, todavía sin hilar, antes de que sus palabras y sonoridades se tramen en un relato.

La lengua náhuatl

El náhuatl, es una lengua aglutinante, polisintética, es decir, en la que los adjetivos, los adverbios y los complementos se funden con los radicales sustantivos o verbales en una masa sonora, unidad

expresiva reacia en separar lo circunstancial de lo esencial, reflejo a su vez de un mundo donde la circunstancia y la esencia resultan inseparables. Por ejemplo, cuando leemos en el texto guadalupano: oyuhceuhtiquiz in cuicatl “cesó en canto”, el equivalente náhuatl del verbo “cesar” entraña la marca del pasado o, expresa lo que ya no es: yuh ya, el verbo cehui “apagar”, un morfema compulsivo –ti y el verbo “salir”: quiza. La luz sonora del canto se vino a apagar, cesó. La ausencia de preposiciones en la lengua náhuatl da mucha movilidad al sentido y permite que se forme en el texto una totalidad que incita al receptor a pasar a una dimensión sensible “impresionista” para poder percibir el mensaje con todos sus matices. Más que construir un sentido a partir de sus unidades lingüísticas, el nahua-hablante parece disponer hilos frásticos sobre el telar de la lengua y esperar que un sentido surja de esta urdimbre.

El Nican mopohua: un ayate verbal

Dr. Patrick Johansson K.IIH/UNAM

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Fernando LeaL (1896-1964)Juan Diego encuentra las flores en el cerro del Tepeyac ca. 1951Acuarela sobre papel ?Impreso en: Fleuve de Lumiere. Reine du Tepeyac (extrit et adaptation par Elise Dac), México, DAC, 1951. pp. 24 (Colección Luciérnaga)

Cultura y arte

La lengua náhuatl propicia una epifanía de sentido sensible: con un impulso afectivo, el hablante encuentra el camino verbal de su expresión sin que el lastre semántico de lo que se dice llegue a oscurecer la luz fonética de sus componentes silábicos. El carácter polisintético de la lengua náhuatl permite que una imagen pueda quedar “atrapada” en la materia verbal. En el rubro de las sonoridades, el hecho de que todas las consonantes de la lengua náhuatl sean “sordas”, le confiere su suavidad característica. Además el gran número de consonantes “líquidas” hace que la lengua parece manar de los labios de los hablantes.Según la inflexión de la voz, pueden ser suspiros, exhalaciones, vahos, aliento, oclusiones o saltos. Alfonso Reyes describió las sonoridades de la lengua náhuatl de la siguiente manera: “óyense unos dulces chasquidos; fluyen las vocales, y las consonantes tienden a licuarse. La charla es una canturia gustosa. Estas xés, esas tlés, esas chés que tanto nos alarman escritas, escurren de los labios del indio con una suavidad de aguamiel”.�

La oclusiva glotal o “saltillo” [`] o la aspirada final [h] son consonantes que no existen en español y por tanto que no fueron siempre transcritas. En el texto guadalupano se expresa mediante la “h” o el saltillo.La suavidad y la dulzura de la lengua náhuatl hacían de ella un medio idóneo para expresar el mensaje mariano. En el Nican mopohua se observa su uso moderado de la “aglutinación” de palabras en compuestos verbales inextricables para el pensamiento occidental. Los sujetos, los verbos y los complementos se yuxtaponen sin fundirse, manteniendo la claridad en la subordinación o la coordinación de las ideas que expresan. Se observa una tendencia en “aislar” los componentes gramaticales del texto y construir las frases en la manera occidental, separando los sujetos, los verbos y los complementos en ves de integrarlos en una palabra-sintagma a la usanza genuinamente indígena. Esto se podría deber a la influencia que ejerció la lengua española sobre la lengua náhuatl y sugeriría que el texto es relativamente tardío.Si atendemos la pulcritud gramatical así como la

sobria riqueza expresiva del texto, el autor del relato debe haber sido a la vez un “Cicerón” en su lengua nativa y un escritor consumado en español y en latín. El relato avanza según un esquema lineal de acción combinado con una expansión narrativa centrífuga típicamente indígena. Los términos que la componen, en cambio, son netamente indígenas como lo es su reiteración: los adjetivos, sustantivos, verbos, sujetos y los complementos se repiten dos o tres veces, grabando de manera indeleble la idea en la materia verbal. Es como si el eje sintagmático de progresión narrativa fuera ya mestizo, mientras el eje paradigmático de selección y eventual reiteración de palabras permaneciera genuinamente indígena. El uso de las palabras pareadas, típico de la discursividad indígena, es manifiesto en el texto:

Ye xotla, ye cueponiin tlaneltoquiliztli, in iximachocatzinin Ipalnemohuani, nelli Teotl Dios

“reverdece abre su corollala Fe, el conocimientodel dador de la vida, de la divinidad verdadera Dios”

El vocablo tlaneltoquiliztli es un neologismo creado para referir un concepto desconocido de los indígenas: la Fe.

Las nuevas interrogantes están sutilmente integradas a fórmulas expresivas indígenas:

Aço çan nictemiquiAço çan niccochitlehua

¿Acaso sólo lo sueño,acaso sólo lo estoy soñando?

Lo que dejaron dicho los abuelos (tococolhuan) está referido y la referencia constituye la base de una elevación:

Cuix oncan[…] in Xochitlalpan in TonacatlalpanCuix oncan in Ilhuicatlalpan

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Xochitlalpan “La tierra florida” y Tonacatlalpan “La tierra de nuestro sustento” son referentes genuinamente indígenas de un inframundo donde prevalecía la alegría. La evocación de los dos lugares en este contexto permite pasar suavemente de lo conocido a lo desconocido: Ilhuicatlalpan “La tierra del cielo”, es decir, a lo celestial cristiano. La flor, el maíz y el cielo cristiano se vinculan estrechamente en torno a la bisagra sonora y semántica tlalpan “tierra”.Antes de la deslumbrante aparición de la virgen, su presencia se anticipaba mediante el trino de aves y pájaros preciosos: el coyoltototl “pájaro cascabel”, el tzinitzcan, el xiuhtototl. El colorido gorjeo afín al plumaje, así como el eco, respuesta del cerro, ponía al Tepeyac en efervescencia sonora y visual. En cuanto a la primera aparición de la Virgen, la

dulzura y suavidad sonoras de la lengua náhuatl producen a su vez una luminosidad verbal que envuelve la aparición textualmente referida. Todo en esta descripción es albor, luz, resplandor; un arco iris de palabras tiende un puente luminoso entre lo indígena y lo cristiano, las espinas de los mezquites y los nopales irradian, el verdor y la luz se sublima en jade, turquesa y oro.

En el tejido expresivo náhuatl del Nican mopohua en el cual quedaron grabados el relato y la imagen, tanto el vocabulario, la sintaxis, las sonoridades, el ritmo, como las metáforas son destellos de luz. La imagen de la Virgen quedó plasmada en un ayate verbal tejido con los hermosos hilos de la lengua náhuatl.

Cultura y arte

NOTaS

1 Nican mopohua “Aquí se relata…” El nombre del documento Guadalupano constituye un Incipit, palabra latina que significa “comienza” y expresa el hecho de que los textos sin títulos eran referidos mediante sus primeras palabras.

2 Alfonso Reyes, Visión de Anáhuac, página 18.

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La SagraLa Sagrada Liturgia es la cumbre de la Vida Celestial. En la Celebración Litúrgica el hombre y la comunidad son conscientes de

encontrarse ante Dios Santísimo y Trascendente.

La piedad popular se expresa con diversas manifestaciones culturales que derivan del genio de un pueblo. Éste se expresa con sus gestos, textos, cantos, música, imágenes, ambiente de vida y de trabajo, tiempos, cambio de estaciones, fiestas, representaciones sagradas, diversas formas de devoción, rosarios, peregrinaciones, novenas, octavarios, triduos, devoción a María, a los ángeles, a los santos, sufragios por los difuntos, etc. La Basílica de Guadalupe se sirve además de agrupaciones, como la Archicofradía de Guadalupe, los Ministros de

la Comunión; también de las bendiciones de niños, personas mayores, ancianos, enfermos, etc. La vida cultural es comunión con el Padre, por Cristo, en el Espíritu Santo. La oración cristiana tiene como destinatario al Padre, por la mediación de Jesucristo en la fuerza del Espíritu Santo. La Iglesia, pueblo reunido en la unidad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, es una comunidad del culto. Mediante los sacramentos de la iniciación cristiana, el fiel entra a formar parte de la Iglesia, y reunido con los demás fieles, constituyen el pueblo de Dios, que ejerce su sacerdocio de los fieles espiritual, y que participa de la celebración Eucarística y expresa su culto sirviéndose también de las manifestaciones de la piedad popular.

ARTÍCULO

Pbro. Gabriel Rodríguez M. del C.Capellán de Coro

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La Sagrada Liturgia y la Piedad Popular

La Basílica de Guadalupe

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En el Año Litúrgico, la Iglesia celebra todo el Ministerio de Cristo, desde la encarnación hasta la esperanza de la segunda venida del Señor. En el Año Litúrgico se relaciona la liturgia con la piedad popular.

Se conjugan celebrando el Tiempo de Adviento (la Corona de Adviento), la Virgen María en el adviento, la Solemnidad de la Inmaculada Concepción, la Fiesta de nuestra Señora de Guadalupe, la Novena de Navidad. Aparecen los pastores y los reyes magos en los nacimientos, las Bodas de Cana, los santos inocentes, la presentación del Señor, la fiesta de la Sagrada Familia…. Puro gozo del pueblo de Dios.

En el Tiempo de Cuaresma se practica la oración, el ayuno, la limosna, los sacrificios, entrar de rodillas a la Basílica, la ofrenda de veladoras, colectas especiales para los pobres, para los seminarios, el óbolo de san Pedro, etc. Todo tiene su lugar y su tiempo.

En el Triduo Pascual, la adoración de la Santa Cruz, la devoción del viacrucis, del Via Matris, representaciones de la pasión, la procesión del Domingo de Ramos, el recuerdo de la Virgen de los Dolores, la hora de la Dolorosa. Todo esto se celebra en la Basílica. El Sábado Santo la Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su pasión y muerte, su descenso a los infiernos y esperando en la oración y el ayuno, su resurrección. Domingo de Pascua, el encuentro del resucitado con la Madre. La devoción de la Divina Misericordia. Todo en este Santuario de Guadalupe.

Pentecostés: La novena de Pentecostés, el Veni Creator Spiritus… Unión con el Espíritu Santo.

Tiempo Ordinario: La Solemnidad de la Santísima Trinidad. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo… Devoción trinitaria del pueblo de Dios. La celebración del domingo. Todo se realiza con sentido de Iglesia. La Solemnidad del Cuerpo y la Sangre del Señor, la vive el pueblo de Dios con una procesión. La devoción Eucarística, tan arraigada en el pueblo cristiano, debe ser educada, uniendo la Pascua con la Eucaristía y tomar al Santísimo Sacramento, reservando en el Sagrario, la adoración ante el Santísimo Sacramento, expuesto, la denominada adoración perpetua o la de las cuarenta horas. Cristo Eucaristía es nuestra vida. La Asunción de Santa María Virgen es muy apreciada en la piedad popular.

Se da particular importancia al sábado como memoria de Santa María y se toman en cuenta los triduos, septenarios, novenas marianas, los meses de María o el Angelus Domini, el Reina del Cielo, el rosario, las letanías de la Virgen, la consagración a María, el escapulario del Carmen, y otros escapularios, las medallas marinas, que se bendicen aquí. La doctrina de la Iglesia y su litúrgica proponen a los santos y beatos, al pueblo de Dios, que contemplan ya claramente a Dios Uno y Trino, como testigos históricos de la vocación universal a la Santidad, discípulos insignes del señor, ciudadanos de la Jerusalén del cielo, intercesores y amigos de los fieles, patronos de Iglesias locales.

Los fieles veneran también a los santos ángeles y arcángeles, veneran a los ángeles custodios, a san José, esposo de María, patrono de la Iglesia Universal y también como José obrero. También se da culto a las reliquias de los santos, se rezan sus letanías. El pueblo se embebe de todo esto, santamente.

No se descuida el sufragio a los difuntos, diariamente en las criptas. La Basílica de Guadalupe toma en cuenta todo lo anterior y concede particular importancia a la evangelización, a las primeras comuniones, a la caridad. Y no puede faltar la participación de los indígenas, con sus danzas típicas y sus celebraciones particulares. Dios está vivo entre la gente. No se descuida tampoco la Basílica de Guadalupe como lugar de cultura: cuenta con un valioso Museo Guadalupano y religioso. Las peregrinaciones anuales de las Diócesis de México cobran particular importancia, dando todo su lugar al aspecto de piedad popular. Vibra la Basílica con mariachis, corales, orquestas, danzas, etc.

Hay que tomar en cuenta que dichas peregrinaciones anuales diocesanas son muy bien preparadas y mueven a devoción a toda la nación, a pueblos y ciudades importantes. Dios y María están vivos entre nosotros. ¡Benditos sean Dios y María!

La Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe, con sus organizaciones, se hace presente así mismo en todo el Continente Americano y en el mundo entero. Se vive el amor de Dios y de María y se expande.

El Boletín Guadalupano registra esta vida: “A Jesús por María”. Necesitamos la ayuda de María para llegar al “Dios Jesús”. Este es el pan de Dios.

Artículo

PASTORAL

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A un mes de iniciar la celebración del VI Encuentro Mundial de las Familias, que se realizará en la Ciudad de México en Enero de

2009, presentamos un tema de suma actualidad en esta XI Catequesis sobre “La familia ante los valores del cuidado de la creación.

El ser humano ha recibido de parte de Dios una misión de gobierno sobre la creación para hacer brillar todas sus potencialidades, es una participación que Dios le atribuye en los orígenes mismos de la creación, cuando el hombre y la mujer, que son “imagen de Dios” (Génesis 1, �7), reciben la orden de ser fecundos, multiplicarse, llenar la tierra, someterla y dominar los peces del mar, las aves del cielo y todo cuanto vive y se mueve sobre la tierra (cf. Génesis 1, �8).

“Puesto que el hombre, creado a imagen de Dios, recibió el mandato de gobernar el mundo en justicia y santidad, sometiendo a sí la tierra y cuanto en ella se contiene, y de orientar a Dios la propia persona y el universo entero, reconociendo a Dios como Creador de todo, de modo que con el sometimiento de todas las cosas al hombre sea admirable el nombre de Dios en el mundo, el Concilio enseña que la actividad humana, individual y colectiva o el conjunto ingente de esfuerzos realizados por el hombre a lo largo de los siglos para lograr mejores condiciones de vida, considerado en sí mismo, responde a la voluntad de Dios”. (Compendio de Doctrina Social de la Iglesia No. 456)

XI Catequesis Preparatoria al VI Encuentro Mundial de las Familias

Mons. Jorge Palencia Ramírez de ArellanoVicerrector y Coordinador General de la Pastoral del Santuario

La familia ante los valores del cuidado de la creación

Sin embargo el señorío del ser humano sobre la creación no es “absoluto”, sino un señorío “delegado por Dios”, reflejo real del señorío único e infinito de Dios. Por eso, el hombre debe vivirlo con sabiduría y amor, participando de la sabiduría y del amor inconmensurables de Dios. Dicho de manera sencilla nuestra misión no es ser dueños absolutos e incensurables, sino administradores, llamado a continuar la obra del Creador, una obra de vida y de paz. Nuestra tarea esta bien definida en el libro de la Sabiduría: “gobernar el mundo con santidad y justicia” (Sabiduría 9, 3).

Después de tanto siglos, desde la creación del mundo, el hombre no es ya “delegado” del Creador, ahora es autónomo y déspota. Si analizamos las diversas regiones nuestro planeta, enseguida nos damos cuenta de que la humanidad ha defraudado las expectativas divinas. Sobre todo en nuestro tiempo, el hombre ha devastado sin vacilación llanuras y valles boscosos, ha contaminado las aguas, ha deformado el hábitat de la tierra, ha hecho irrespirable el aire, ha alterado los sistemas hidro-geológicos y atmosféricos, los espacios verdes son ahora desiertos, el sobre calentamiento atmosférico esta derritiendo los polos helados del globo terráqueo. Debemos todos comprender que estamos en un limite, ante el abismo

Desde las familias se debe tomar conciencia de que no solo está en juego una ecología “física”, que atenta contra el hábitat de los diversos seres vivos, sino también está en riesgo una ecología “humana”, que cada día hace más imposible una digna la co-existencia de las personas y las criaturas.

Desde el núcleo familiar se debe proteger el bien radical de la vida en todas sus manifestaciones, especialmente defender la sacralizad de la vida humana, desde la concepción hasta su murete natural, preparando así, a las futuras generaciones un mundo que se acerque más al proyecto del Creador.

Recordemos que con alguna frecuencia las mismas personas que se horrorizan de que mueran focas o mariposas monarcas, no se espantan de que se aborten niños.

Pasa lamentablemente que muchos quieren oponer los derechos de la madre, bajo el título de “derechos reproductivos de la mujer,” contra los derechos del niño no-nacido; y se dicen a favor de la Ecología

o ecologista y estas pisoteando lo más sagrado de la creación, que es el mismo ser humano. No confundamos Ecología con superficialidad de amar la naturaleza en sí y despreciar la vida humana.

Como cristianos debemos recordar, que san Pablo siempre vinculó el bien de la creación a la manifestación de los hijos de Dios (Romanos 8,19-�1). Hay algo muy profundo ah, los cristianos: si amamos la naturaleza, no la idolatramos, pues ningún bien es superior al bien humano, y ningún bien humano es permanente y profundo si no tiene raíz en el bien de la Redención.

Otra cosa a tener en cuenta en el diálogo del creyente con la Ecología es que, como la ecología busca conexiones entre seres vivos, hay gente que habla del planeta como de un solo ser vivo: “”la madre tierra” y no están pensando en una metáfora, sino verdaderamente en la maternidad de la tierra.

De tal manera, así como la vida “material” está tan interconectada, entonces toda vida debe estarlo, y eso implica la vida “espiritual”, llegando afirmar que: “en el fondo yo soy Dios, y tú eres Dios y todo es Dios.”

Semejante panteísmo es insostenible racionalmente y sobre todo es contrario e incompatible con nuestra fe. Ante esta realidad de pensamiento confuso, desde las familias debemos:

1.- Necesitamos activar más y mejor nuestra conciencia ecológica.

�.- Necesitamos no dejarnos confundir por la retórica ambigua que lamentablemente usan muchos ecologistas agnósticos y ateos.

Frente a la naturaleza, a la que hemos herido con nuestras irresponsabilidades, necesitamos amor pero también sabiduría. De lo que se trata finalmente es de la realización del plan de Dios, que tiene su culminación en Cristo, pues “todo fue creado por Él y para Él.” (Colosenses 1,16).

Cada familia debe tratar de hacer que los bienes de la tierra estén disponibles para todos y que en medio de estas maravillas descubramos la voz del Creador, transmitida por el cielo y la tierra, por el día y la noche, por las profundidades del mar y la inmensidad del cielo.

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TEMA 11. LA FAMILIA CRISTIANA ANTE LOS VALORES DEL CUIDADO DE LA CREACIÓN:

Respeto a la creación, ecología cristiana.

La Creación es obra de Dios, ningún creyente puede quedarse impasible ante la destrucción de lo que Dios ha hecho. En cada flor, en cada galaxia, en cada animalito hay un mensaje de sabiduría, de poder y de amor, que viene de Dios. Perder una especie, o peor aún, colaborar en su extinción, es como cerrar los ojos a las maravillas del Señor. Es algo equivalente a la ingratitud y la sordera. Por el contrario, como lo testificó sobre todo San Francisco de Asís, la contemplación respetuosa y amorosa de la Naturaleza es un camino real de encuentro con el Señor.

El libro del Génesis nos habla de cómo Dios encarga la creación al cuidado del Hombre. El ser humano, cada uno en particular y todos como familia de Dios, tenemos no el encargo de saquear a la naturaleza, como quien desocupa una cantera, sino de cuidarla, como quien cultiva un jardín. Tal es la visión bíblica. No es difícil ver las implicaciones que esto tiene en relación con algunos conceptos modernos como “desarrollo sostenible” o planeación urbana.

Detrás de los desastres ecológicos hay siempre seres humanos afectados, y siempre los más afectados son los más pobres. La búsqueda de un mundo más apto para la vida coincide en buena parte con la búsqueda de una sociedad más abierta a la justicia. De hecho, cada “pecado” ecológico puede ser descrito en términos de una injusticia cometida contra la casa de todos.

El que tiene la mentalidad de saquear a la naturaleza no parece que cambie de mentalidad cuando trata con seres humanos: en ambos casos priman el egoísmo, la miopía, el utilitarismo a corto plazo. Por estas y parecidas razones es evidente que quienes creemos en Cristo como Señor de todo lo creado tenemos buenas razones para comprender el lenguaje de la ecología.

El libro de la Sabiduría, evocado por san Pablo, celebra esta presencia de Dios en el universo recordando que “de la grandeza y hermosura de las criaturas se llega, por analogía, a contemplar a su Autor” (Sb 13, 5; cf. Rm 1, �0).

Los Objetivos de esta Catequesis son:

- Ver en la Creación el regalo que Dios nos ha dado.-- Respetar la Creación mediante el cuidado de todos sus elementos. - Aprovechar los bienes de la naturaleza de manera razonable y con la responsabilidad de heredarlos a las futuras generaciones.

1. Iniciemos nuestra reflexión con una Oración:

“Bendiga la tierra al Señor, cántenlo y ensálcenlo por los siglos. Bendigan al Señor cuanto brota en la tierra, cántenlo y ensálcenlo por los siglos. Bendigan, mares y ríos, al Señor, cántenlo y ensálcenlo por los siglos. Bendigan, todas las aves del cielo, al Señor, cántenlo y ensálcenlo por los siglos. Bendigan todas las bestias y ganados al Señor, cántenlo y ensálcenlo por los siglos. Bendigan, hijos de los hombres, al Señor, cántenlo y ensálcenlo por los siglos.” (Da 3,74).

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2. Como Segundo Paso leamos la Palabra de Dios:

“Entonces dijo Dios: Hagamos al ser humano a nuestra imagen, según nuestra semejanza, para que dominen sobre los peces del mar, las aves del cielo, los ganados, las bestias salvajes y los reptiles de la tierra. Y creó Dios al ser humano a su imagen; a imagen de Dios los creó; varón y mujer los creó. Y los bendijo Dios diciéndoles: Crezcan y multiplíquense; llenen la tierra y sométanla; dominen sobre los peces del mar, las aves del cielo y todos los animales que se mueven por la tierra. Y añadió: Les entrego todas las plantas que existen sobre la tierra y tienen semilla para ser sembradas; y todos los árboles que producen frutos con su semilla les servirán de alimento…. Y así fue. Vio entonces Dios todo lo que había hecho, y todo era muy bueno” (Gen 1, �6-31).

3. Como Tercer Paso, desarrollemos el tema de los valores del cuidado de la creación:

La Creación en el Plan de Dios.

Nosotros los católicos, no miramos el universo solamente como la naturaleza considerada en sí misma, sino como creación y primer don del amor del Señor por nosotros. “Del Señor es la tierra y cuanto hay en ella; el orbe y los que en él habitan” (Sal �4,1), esta afirmación recorre toda la Biblia y confirma que la tierra es el primer signo de la Alianza de Dios con el ser humano. La revelación bíblica nos enseña que cuando Dios creó al hombre, lo colocó en el jardín del Edén para que hiciera uso de él (cf. Gen �,16) señalándole unos límites (Gen �,17), que recuerdan al ser humano que Dios es el Señor y Creador y de Él es la tierra y todo lo que contiene. Dios entrega a los seres humanos toda la creación, para desarrollar su vida y las de sus descendientes. Estos límites miran a preservar la justicia y el derecho que todos tienen a los bienes de la creación, que Dios destinó al servicio de todos. Las criaturas del Padre le dan gloria “con su sola existencia”, y, por eso, el ser humano debe hacer uso de ellas con cuidado y delicadeza. Nosotros podemos usarlas, no como dueños absolutos, sino como administradores. Como discípulos de Jesús, tenemos que dar gracias por el don de la creación, reflejo de la sabiduría y belleza de Dios Creador. A través de la creación cada persona entra en comunión con Él, con los demás seres humanos y con toda la creación.

La ecología en el pensamiento de la Iglesia.

La teología y la catequesis de la Iglesia han reflexionado sobre la creación, la tierra, la naturaleza, el progreso, etc., pero en los años ochentas aparece el concepto que nosotros hoy conocemos como ecología. La ecología alude a la naturaleza como la casa en que todos vivimos. En el documento del CELAM en Aparecida se nos recuerda la importancia de tomar conciencia de la naturaleza como una herencia gratuita que recibimos para proteger la convivencia humana de modo responsable para bien de todos. La explotación irracional de los bienes de la creación deja consecuencias preocupantes en las que tiene una enorme responsabilidad el desmedido afán por la riqueza, la actitud egoísta por encima de la vida de las personas en especial de los campesinos e indígenas, que tienen que migrar a las grandes ciudades para salir de la miseria. Hay que progresar en el desarrollo para valorar las riquezas de la tierra y su capacidad al servicio del bien común, evitando la industrialización descontrolada, que contamine con desechos orgánicos y químicos y produzca eliminación de bosques, contaminación del agua y mayor desertificación. El Catecismo de la Iglesia Católica sintetiza el pensamiento eclesial sobre los bienes creados: Dios que trasciende la creación al tiempo que está presente en ella, crea todo por sabiduría y amor de modo ordenado y bueno, Él mantiene y conduce la creación con su divina Providencia y encarga al ser humano que colabore con Él, administrando la creación. El ser humano debe respetar la bondad propia de las criaturas y no hacer uso desordenado de ellas. La destrucción sistemática de la naturaleza es un pecado social.

El hombre, pues, no debe olvidar que « su capacidad de transformar y, en cierto sentido, de “crear” el mundo con el propio trabajo... se desarrolla siempre sobre la base de la primera y originaria donación de las cosas por parte de Dios. No debe « disponer arbitrariamente de la tierra, sometiéndola sin reservas a su voluntad, como si ella no tuviese una fisonomía propia y un destino anterior dados por Dios, y que el hombre puede desarrollar ciertamente, pero que no debe traicionar. Cuando se comporta de este modo, en vez de desempeñar su papel de colaborador de Dios en la obra de la creación, el hombre suplanta a Dios y con ello provoca la rebelión de la naturaleza, más bien tiranizada que gobernada por él.

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Si el hombre interviene sobre la naturaleza sin abusar de ella ni dañarla, se puede decir que « interviene no para modificar la naturaleza, sino para ayudarla a desarrollarse en su línea, la de la creación, la querida por Dios. Trabajando en este campo, sin duda delicado, el investigador se adhiere al designio de Dios. Dios ha querido que el hombre sea el rey de la creación. En el fondo, es Dios mismo quien ofrece al hombre el honor de cooperar con todas las fuerzas de su inteligencia en la obra de la creación. (Compendio de Doctrina Social de la Iglesia No. 460)

La ecología es el mayor reto para la humanidad en el siglo XXI.

La tierra está seriamente amenazada, si seguimos obrando como hasta ahora, podríamos destruir la herencia que recibimos y comprometer el futuro de las nuevas generaciones. El modelo de desarrollo que hemos adoptado desde la segunda guerra mundial se basa en una economía que destruye la naturaleza que se ve frágil e indefensa ante los intereses económicos y tecnológicos. Las intervenciones sobre los recursos naturales no pueden arrasar irracionalmente las fuentes de vida, en perjuicio de la misma humanidad. La familia puede y debe ser una escuela para manejar adecuadamente los bienes de la creación. En ella, el comportamiento de cada uno da coherencia y autoridad moral para trabajar por la ecología. Desde ella se puede cambiar la mentalidad y las acciones de toda la sociedad. Hay que tener la firme convicción de que la ecología empieza en casa. Los cristianos estamos llamados, por fidelidad al Evangelio, a influir en los gobernantes y en las legislaciones que tienen que ver con la ecología. De este modo la familia se convierte en “fermento de un mundo nuevo” promoviendo la conciencia y el compromiso con el bien de la creación. Las generaciones que nos sucedan tienen derecho a recibir un mundo habitable y no un planeta contaminado. Por ello hay que comprometerse en acciones como las que se enumeran a continuación:

- Evangelizar para descubrir y cuidar el don de la creación, educando en un estilo de vida de sobrio, austero y solidario, ejercitando responsablemente el señorío humano sobre la tierra, para que rinda sus frutos en su destinación universal.

- Profundizar la presencia eclesial en las poblaciones

más amenazadas y apoyarlas en la gestión de la tierra, del agua y de los espacios urbanos. - Promover el desarrollo integral y responsable de una ecología natural y humana, basado en el evangelio de la solidaridad y el destino universal de los bienes, frente al utilitarismo individualista. - Fomentar políticas públicas y participaciones ciudadanas que garanticen la protección, conservación y restauración de la naturaleza.

4. Como cuarto paso ahora profundicemos un caso o hecho de vida familiar:

Laura y Javier es un matrimonio con cuatro hijos pequeños. Aún cuando su situación económica es estable, forman a sus hijos en el cuidado de los recursos económicos y naturales. Procuran dar testimonio de ahorro, en el consumo necesario de sus necesidades. Más aún, fomentan en sus hijos una cultura ecológica, motivándolos a reciclar y reutilizar los materiales que manejan. Cuando salen al campo les enseñan a valorar y apreciar la naturaleza, a alabar a Dios por su grandeza, a ser agradecidos con Dios por las maravillas de su creación.

5. Ahora reflexionemos en diálogo familiar las siguientes preguntas:

- ¿Tengo claro que Dios me ha dado la misión de ser administrador de la creación? - ¿Considero tener una conciencia ecológica alerta y bien informada? ¿Estoy dispuesto a comprometerme a trabajar por la ecología lo más posible? - ¿Qué plan familiar vamos a hacer para avanzar en conciencia y coherencia ecológicas? ¿Cómo vamos a transmitir a nuestros hijos lo que hemos aprendido en este tema? ¿Qué mundo queremos dejar a nuestros hijos y nuestros nietos? - ¿Qué podríamos hacer en el vecindario o en nuestra localidad?

6. Textos para iluminar el diálogo familiar en busca de auténticos valores del cuidado de la creación:

“La sociedad actual no hallará una solución al problema ecológico si no revisa seriamente su estilo de vida. En muchas partes del mundo esta misma sociedad se inclina al hedonismo y al consumismo, pero permanece indiferente a los daños que éstos causan.

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Como ya he señalado, la gravedad de la situación ecológica demuestra cuan profunda es la crisis moral del hombre. Si falta el sentido del valor de la persona y de la vida humana, aumenta el desinterés por los demás y por la tierra… Hay, pues, una urgente necesidad de educar en la responsabilidad ecológica: responsabilidad con nosotros mismos y con los demás, responsabilidad con el ambiente. No se debe descuidar tampoco el valor estético de la creación. El contacto con la naturaleza es de por sí profundamente regenerador, así como la contemplación de su esplendor da paz y serenidad...” (Juan Pablo II, Mensaje para la celebración de la Jornada Mundial de la Paz, No.1990).

“Es necesario que la promoción del desarrollo tendiente a satisfacer las necesidades del presente no comprometa las capacidades de las generaciones futuras para cubrir sus propias necesidades. Por ello es preciso que el desarrollo se pueda sostener y hacer viable a mediano y largo plazo. Es necesario tomar en cuenta tres factores fundamentales para ello: la promoción de la responsabilidad social de las actividades productivas, el respeto y cuidado del medio ambiente natural y el respeto y promoción de la persona humana, de sus valores y de su cultura.” (Conferencia del Episcopado Mexicano, “Del encuentro con Jesucristo a la solidaridad con todos”, 2000).

7. Síntesis conclusiva para nuestra familia:

- Dios “es el Señor y Creador y de Él es la tierra y todo lo que contiene”. - Dios creó al hombre, lo colocó en el jardín del Edén para que lo labrara y cuidara, e hiciera uso de él, no como dueño absoluto, sino como administrador con límites. - Los límites en el uso de la tierra, preservan la justicia y el derecho de todos a los bienes de la creación, que Dios destinó al servicio de todos.

8. Compromiso personal y familiar

- Considerar los recursos naturales como dones que Dios da a cada uno para administrar con sabiduría y ofrecer a las siguientes generaciones. - Poner los medios en familia para cuidar la naturaleza, evitando el despilfarro de los recursos naturales: agua, aire, vegetación, animales, etc. - Tomar medidas para evitar la contaminación.

9. Oración final en familia

Señor ayúdanos a que desde nuestra familia sepamos reconocer y agradecer todos los dones que Tú pones a nuestra disposición en la Creación para que los sepamos usar con una visión solidaria y responsable, y nuestros hijos sean buenos administradores del mundo que Tú pones en nuestras manos. Te lo pedimos por Jesucristo, Nuestro Señor. AMÉN.

10. Glosario

- Ecología: Ciencia que estudia las relaciones entre los seres vivos y el medio ambiente. También es la defensa y protección del medio ambiente. - Reciclar: Proceso por el que los productos de desecho son nuevamente utilizados. - Destino universal de los bienes: Principio de la doctrina social de la Iglesia por el que los bienes de la creación, aún cuando son poseídos legítimamente, conservan siempre una orientación de servicio a toda la humanidad.

11. Bibliografía

- Juan Pablo II, Mensaje para la Celebración d la Jornada de la Paz. Paz con Dios Creador paz con toda la creación. 1990. - Juan Pablo II, Carta Encíclica Sollicitudo rei sociales. 1987. - Pontificio Consejo Justicia y Paz, Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia. �004. - Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica.

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CONOCIÉNDONOS

La congregación de Misioneras Guadalupanas de Cristo Rey, Orden de San Benito (OSB), fue inspirada por Dios e iniciada por P. José

Castellón Velasco, sacerdote diocesano del Estado de Jalisco que formaba parte del círculo de estudios de Cristo rey y tenía como ideal trabajar por el reinado social de Cristo, bajo la protección de Santa María de Guadalupe. Este sacerdote invitó para fundadora de la rama femenina a la Madre Josefina María Valencia y Rodríguez, la cual contaba con 63 años de edad y su salud era muy delicada.

La fundación de la Congregación tuvo lugar el �� de mayo de 1930, vísperas de celebrar los 400 años del Evento Guadalupano (1931). Por estas fechas, en el país había persecución para los cristianos que profesaban su fe en Cristo Rey y en Santa María de Guadalupe. Sin embargo cuando se dieron las condiciones necesarias para iniciar, lo primero que hizo la madre Josefina fue ir a la Basílica a poner la Congregación bajo el amparo de María de Guadalupe: “le ofrecí la obra que íbamos a empezar, nombrándola como nuestra especial protectora y superiora”. Su amor era tan grande que lo primero que pensó fue buscar una casa por la Villa para comenzar “desde luego bajo el amparo de nuestra madre santísima de Guadalupe”.

Se establecieron por primera vez en una casa rentada en la Av. Madero 60 (Hoy Fray Juan de Zumárraga), pero durante 7 años experimentaron la itinerancia en

diferentes colonias, hasta regresar nuevamente en 1937 a la Villa de Guadalupe. “Vivíamos felices en la amplia y simpática casa del bosque de Morelos 69, que está al pie de un hermoso cerro donde posó sus virginales plantas nuestra amada madre Santa María de Guadalupe en sus apariciones a Juan Diego”. En esta casa quedaron escritas las Constituciones basadas en la Santa Regla de nuestro glorioso Padre San Benito Abad. La cercanía a este santuario nos ha involucrado a través de la historia a dar nuestro servicio, primero, al coro de infantes de la Basílica, después como ministras de la Eucaristía y actualmente como parte del equipo Guadalupano D.A. en situación de calle, que pertenece al área de Pastoral socio-caritativa”.

La espiritualidad benedictina empezó a vivirse en la congregación por la presencia de la madre Ma. Plácida de Cristo Rey, OSB. En 1931 ingresó en el monasterio de san Benito, en Estella, España, pero después de 4 años decidió regresar a México con el deseo de fundar una congregación benedictina misionera y trabajar por la extensión del reinado de Cristo. En 1936, al encontrarse con la madre Josefina María Valencia, decidió unirse a la reciente fundación y el �4 de diciembre de ese año, emitió sus votos en la Congregación. Desde entonces, todo fue común entre ellas: los sufrimientos, las alegrías e ideales que fundieron en uno solo.

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Misioneras Guadalupanas de Cristo Rey, OSB

Lic. Samuel Homero Jiménez Hernández

Conociéndonos

En este apartado queremos subrayar como vital para las hermanas y el pueblo de Dios, la presencia, tenacidad y visión de la madre Josefina Ma. Valencia y de Ma. Plácida, fundadora y cofundadora respectivamente, que fueron capaces en medio de esta realidad conflictiva de persecución y martirio engendrar en su vida y corazón la llamada de Dios en la historia y responder en la medida de sus posibilidades a esta realidad. En efecto, la realidad de muerte de los pobres, hombres y mujeres que en su fe y convencimiento no escatimaron nada por defender con valentía aquello que significaba lo más valioso y sagrado para su vida, debió mover el corazón de estas mujeres para arriesgar su comodidad, prestigio e incluso su propia vida para fundar esta congregación y creer que con sus objetivos, metas y servicios se podría cooperar en la extensión del Reino de Dios en la historia. La espiritualidad de la Congregación es Guadalupana-Benedictina y tiene como esencia la buena noticia del Reino, la escucha a Dios y al prójimo, la preferencia por el pobre y excluido, la búsqueda de Dios y la respuesta concreta a los signos de los tiempos.

“Actualmente nuestro carisma, que en esencia consiste en “Cooperar en la construcción del Reino de Dios, en unión con los hombres y mujeres de nuestro tiempo y según la espiritualidad Guadalupana-Benedictina, lo realizamos a través de una acción evangelizadora integral, con preferencia a los más necesitados: pobres, peregrinos, mujeres, indígenas, campesinos niños y niñas, por medio de los apostolados de la pastoral educativa, pastoral de inserción y pastoral de hospitalidad”. Orando y trabajando en la República Mexicana, Estados Unidos, Guatemala y Nicaragua

En la ciudad de México, en la calle Allende 37, muy cerca del santuario de nuestra Señora de Guadalupe, se encuentra ubicada nuestra Casa Madre o casa generalicia. Esta comunidad, que intenta ser fiel al Evangelio desde la Espiritualidad Guadalupana-Benedictina, tuvo desde sus inicios la acogida a los huéspedes. Sin embargo, fue a partir de 1963 cuando se estableció formalmente “la hospedería eclesiástica para el peregrino guadalupano” con la licencia y bendición del Sr. Arzobispo de México D. Miguel Darío Miranda y Gómez. Por ser la casa madre de la congregación, la hospedería es utilizada principalmente por las propias hermanas cuando tienen necesidad de curarse, hacer compras, reuniones o celebraciones; pero también la ocupan otras personas que la solicitan, especialmente peregrinos mexicanos o extranjeros que

desean visitar la Basílica de Guadalupe. Se reciben diferentes grupos para hacer retiros o reuniones. Los vecinos en ocasiones solicitan la Capilla para la Eucaristía. Actualmente la casa está acondicionada para hospedar a 40 personas, que pagan una cuota módica. Los huéspedes que lo desean pueden participar de la oración comunitaria que las hermanas realizan por la mañana en la oración de Laudes, a medio día, en la Hora Intermedia o por la tarde en la oración de Vísperas. La oración de la noche o Completas es privada sólo para las hermanas.

A las jóvenes que tienen deseos de conocernos se les invita a estar como huéspedes por un tiempo para que experimenten nuestro estilo de vida. Si desean ingresar, el requisito principal como lo pide San Benito, es “que de verdad busque sólo a Dios, que sea solícita en la oración, obediencia y humildad”. Las etapas de formación son: Aspirantado. Edad mínima 18 años; máxima 30. Con preparatoria terminada. Postulantado. Con duración de un año. Noviciado. Con duración de � años. Juniorado. Con duración de 5 años.

La Medalla de San Benito: es un signo muy difundido entre los fieles católicos. Presenta de un lado la Cruz de Cristo y del otro la imagen de San Benito Abad. Sobre la Cruz –y a su alrededor– se hallan escritas las letras iniciales de una oración o exorcismo. Esta medalla recuerda a los fieles que la llevan consigo, la presencia constante de Dios y su protección.

El significado de las iniciales es el siguiente (texto latino y traducción):

��

Tomando como modelo la medalla de San Benito, las hermanas reciben esta medalla en su primera profesión religiosa. En ella está contenida nuestra identidad y misión congregacional.

Crux Sancta Sit Mihi Lux; Non Draco Sit Mihi Dux; Vade Retro Satana,Numquam Suade Mihi Vana; Sunt Mala Quae Libas, Ipse Venena Biba

La Santa Cruz sea mi luz; no sea el demonio mi guía;¡Apártate, Satanás! no sugieras cosas vanas; maldad es lo que brindas, bebe tú mismo ese veneno.

CRÓNICA GUADALUPANA

Alrededor de 100 obispos de México participaron, el pasado 10 de noviembre, en la apertura de la LXXXVI Asamblea de

la Conferencia del Episcopado Mexicano, la cual incluyó, por primera vez, la participación de laicos de todo el país. En la Celebración Eucarística con este motivo, ante Santa María de Guadalupe, el Presidente del Episcopado, Mons. Carlos Aguiar Retes, hizo la histórica declaración del lanzamiento de la Misión Continental en México, derivada de la V Reunión del Episcopado Latinoamericano. En un momento solemne de la ceremonia, indicó que: “En el marco de esta hermosa celebración a los pies de nuestra madre a quien encomendamos esta misión, queremos declarar este lanzamiento de la Misión Continental para nuestro país, para todas nuestras diócesis”.

Enseguida dio lectura a la Convocatoria a la Misión Continental en México. He aquí el texto: “Al concluir la V Conferencia General en Aparecida Brasil en mayo de �007, los obispos asumimos el desafío de trabajar para darle un nuevo impulso y vigor a la misión evangelizadora de la Iglesia, en y desde América Latina y el Caribe. “Al reafirmar el compromiso por la formación de discípulos y misioneros, nos propusimos atender con más cuidado

las etapas del Primer Anuncio, la Iniciación Cristiana y la Maduración en la Fe. Señalamos que con el fuego del Espíritu, vamos a inflamar de amor nuestro Continente. “Será un nuevo Pentecostés que nos impulse a ir de manera especial en búsqueda de los católicos alejados y de los que poco o nada conocen a Jesucristo, para que formemos, con alegría, la comunidad de amor de nuestro Padre Dios; misión que debe llegar a todos, ser permanente y profunda.”

“Por su parte, el papa Benedicto XVI en su Carta de presentación del documento conclusivo de Aparecida, señala que fue para él un motivo de alegría conocer el deseo de realizar una misión continental para reforzar la formación cristiana de los fieles en general y de los agentes de pastoral en particular, tarea que las conferencias episcopales, en cada diócesis, están llamadas a estudiar y llevar a cabo, convocando para ello a todas las fuerzas vivas, de modo que caminando desde Cristo, se busque su rostro. “De ahí que el 17 de agosto pasado, en Quito, Ecuador, en el marco del Tercer Congreso Americano Misionero, se hizo el lanzamiento oficial de la Misión Continental para América Latina y el Caribe ya que la Iglesia esta llamada a repensar profundamente y relanzar, con fidelidad y audacia, su misión en las nuevas circunstancias latinoamericanas y mundiales.

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Inauguración de la LXXXVI Asamblea de la Conferencia del Episcopado Mexicano Lanzamiento de la Misión Continental en México

Lic. Marcela Vallecillo GómezComunicación Social de la INBG

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Crónica Guadalupana

“Por eso hoy, a los pies de la Virgen de Guadalupe, perfecta discípula y pedagoga de la evangelización, los obispos de México convocamos a los sacerdotes, religiosos, religiosas y todos los fieles laicos, a asumir el compromiso de poner a la Iglesia que peregrina en México, en estado permanente de misión, para confirmar, renovar y revitalizar la novedad del Evangelio arraigada en nuestra historia, desde un encuentro personal y comunitario con Jesucristo, que suscite discípulos y misioneros. Ya que conocer a Jesucristo por la fe es nuestro gozo, seguirlo es una gracia, y transmitir este tesoro a los demás es un encargo que el Señor, al llamarnos y elegirnos, nos ha confiado. “Jesús nos invita a todos a participar de su misión. Que nadie se quede de brazos cruzados, ser misionero es ser anunciador de Jesucristo con creatividad y audacia, en todos los lugares donde el Evangelio no ha sido suficientemente anunciado o acogido, en especial en los ambientes difíciles y olvidados e incluso más allá de nuestras fronteras.

“Necesitamos pasar de una pastoral de conservación, a una pastoral misionera. Por lo tanto, la misión se convierte en cambio de mentalidad, es decir, en conversión pastoral. Esta firme decisión misionera

debe impregnar todas las estructuras eclesiales y todos los planes pastorales de diócesis, parroquias, comunidades religiosas, movimientos y cualquier institución de la Iglesia. Ninguna comunidad debe excusarse de entrar decididamente con todas sus fuerzas en los procesos constantes de renovación misionera, y de abandonar las estructuras caducas que ya no favorezcan la transmisión de la fe. “El Espíritu Santo, agente principal y alma y de la misión de la Iglesia nos ofrece su luz, estímulo, su fortaleza y su unción. No tengamos miedo, nos dice Jesús, llevemos nuestras naves mar adentro. Jesucristo estará con nosotros en esta pesca que será milagrosa. Que así sea”.

Al concluir la lectura del documento, los asistentes: obispos, laicos y peregrinos, brindaron un aplauso por el inicio de esta misión que compartimos con nuestros hermanos de toda Latinoamérica y del Caribe. Más adelante, los pastores de las diócesis de México se despidieron de la Virgen Morena con el Himno a la Virgen de Guadalupe: “Mexicanos, volad presurosos…”, rumbo a su segunda y trascendente Asamblea anual donde compartieron con 186 laicos, la realidad de México y las acciones que es necesario emprender en la evangelización.

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Obispos de la Iglesia Católica Oriental Veneración a Santa María de Guadalupe

En un acto sin precedentes, una decena de obispos de diversas partes del mundo, pertenecientes a la Iglesia Católica Greco Melquita, llegaron a la Basílica de Guadalupe el pasado 08 de noviembre para venerar a la Virgen Morena. En el marco de una reunión de obispos integrantes de la Iglesia

Greco Melquita en América, celebrada en el puerto de Acapulco, Guerrero, obispos de Argentina, Brasil, Venezuela, Canadá, Estados Unidos, México, además de Australia, Nueva Zelanda, Italia, Francia y Líbano, encabezados por Su Beatitud, el Patriarca Gregorio III Laham, visitaron la Basílica de Guadalupe.

Crónica Guadalupana

En el Altar Mayor, llevaron a cabo la Divina Liturgia de San Juan Crisóstomo en ocho lenguas: griego, árabe, italiano, francés, portugués, alemán, inglés y español, y posteriormente celebraron la Divina Eucaristía de rito bizantino en la Capilla del Santísimo Sacramento ubicada dentro del Santuario, la cual estuvo repleta de feligreses.

Durante la procesión a la Capilla, decenas de fieles presenciaron, asombrados y congratulados, el paso de los obispos --que venían ataviados con sus singulares vestimentas y mitras (en forma de corona)--, y se acercaron solicitando la bendición, particularmente de Su Beatitud el Patriarca Gregorio Laham que portaba una cruz con el ícono de Jesucristo.

En los diferentes momentos de oración, los obispos pidieron a nuestro Padre Dios por los mexicanos, una y otra vez. En su homilía, el Patriarca se pronunció porque sean superados los diversos problemas que aquejan al país, sobre todo el de la inseguridad y la violencia. Asimismo, enterado del fallecimiento de

los funcionarios del Gobierno Federal: el Secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, el asesor presidencial en temas de seguridad, José Luis Santiago Vasconcelos, y 1� personas más, elevó sus oraciones por el descanso eterno de sus almas. Al finalizar la Santa Misa, los obispos manifestaron su congratulación por esta visita. En breve entrevista, Su Beatitud el Patriarca Gregorio Laham expresó que la Iglesia Católica Oriental venera, al igual que los católicos de todo el mundo, a la Madre de Dios en sus diferentes advocaciones, entre ellas la de Santa María de Guadalupe, y manifestó su alegría por esta oportunidad de visitarla en su Santuario. Al día siguiente, los obispos participaron en al ceremonia de la consagración del Altar de la Iglesia de Porta Coeli ubicada en el centro de la Ciudad de México. La Iglesia Greco Melquita es una iglesia particular de la Iglesia Católica y está en plena comunión con el Papa, aunque goza de autonomía. Tuvo su origen en el Medio Oriente y hoy se ha extendido a otros continentes. Su lengua litúrgica es el árabe y el griego aunque va adecuándose a la lengua del lugar donde esté establecida.

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Visita de la Doctora María de los Ángeles Chapa BezanillaEl pasado 30 de octubre la Doctora María de los Ángeles Chapa Bezanilla* visitó el Archivo de Música de esta Insigne y Nacional Basílica de santa María de Guadalupe.

La doctora Chapa Bezanilla fue recibida por la responsable del Archivo Musical, la Mtra. Lidia Guerberof Hahn. Ambas conversaron largamente sobre el estado actual de nuestro acervo musical así como de su conservación y difusión.

La doctora Chapa Bezanilla se marchó entusiasmada y elogiando ampliamente la labor cultural que en este repositorio se realiza.

* Es doctora en Historia y Musicología. Investigadora de tiempo completo del Fondo Reservado de la Biblioteca Nacional y Académica de la Escuela Nacional de Música de la UNAM. Tiene varios libros y trabajos publicados.

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Durante el año arriban a la Basílica de Guadalupe peregrinaciones procedentes del Distrito Federal, área metropolitana, de las

diversas ciudades de la República Mexicana y del extranjero.

Este año –�008– se registraron en el libro � mil 4�7 peregrinaciones: once arquidiocesanas, 70 diocesanas y una prelatura; las restantes pertenecen a congregaciones religiosas, parroquias, sindicatos, instituciones gubernamentales, asociaciones civiles, industrias, empresas, escuelas, universidades, familias, comunidades, pueblos, entre otras. Del total de peregrinaciones se celebraron � mil �53 en el Altar Mayor, 16� en la capilla de San José y 5 en el atrio de la Basílica; – Arquidiócesis de México, Querétaro, Femenil de Celaya, Jubilados y pensionados y el Movimiento Familiar Cristiano–, esto debido a la gran cantidad de asistentes. El año

pasado –2007– se registraron en libro 2 mil 196 peregrinaciones lo que significa que se registró un incremento de ��1 en este año. Cabe mencionar que anualmente se realizan peregrinaciones que no están registradas en el libro y que pueden igualar en cifras a las registradas. El mes de noviembre se registraron 358 peregrinaciones y en diciembre, 371. Este mes es cuando acuden más peregrinos a la Basílica con ocasión de las festividades del 1� de diciembre.

El fervor que se respira ya en el Tepeyac ante la proximidad de las festejos guadalupanos, que conmemoran los 477 años de las apariciones de la Virgen de Guadalupe, es el de los muchos hombres y mujeres de todas las edades que peregrinan para cumplir sus mandas y agradecer todos los favores recibidos. Muchos de ellos entran de rodillas desde el atrio hasta llegar a los pies de la Emperatriz de América.

PEREGRINACIONES

Peregrinaciones 2008

María Guadalupe Bustamante RosasComunicación Social de la INBG

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A lo largo del año visitan este santuario mariano aproximadamente 18 millones de personas, y sólo entre los días 9 al 12 de diciembre, acuden 5 millones.

El arribo de los fieles a este Santuario es a pie desde sus lugares de origen. Tal es el caso de la peregrinación de Querétaro, Toluca y Atlacomulco –por mencionar algunas– apoyados por personal de protección civil y vialidad. Otros llegan en autobuses, camiones o trasporte particular.

Como ya es tradición, la mayoría de las peregrinaciones se congregan en la ex Glorieta de Peralvillo, donde recorren cinco kilómetros en dos horas aproximadamente, por el Corredor del Peregrino que está sobre Calzada de Guadalupe, hasta llegar a la Basílica.

Algunas peregrinaciones durante su caminar hacia este recinto sagrado son acompañados por bandas de música, mariachis, danzantes… que amenizan el momento; o entre ellos cantan alabanzas o rezan el Santo Rosario. Portan globos, portadas florales, camisetas con la imagen de la Virgen de Guadalupe, estandartes, ramos de flores, entre otras expresiones de fe.

Una vez que llegan a la Basílica, se congregan en la puerta número cinco, donde el Obispo o sacerdote –dependiendo de la peregrinación– les da la bienvenida, los rocía agua bendita e ingresan por la nave central al el interior del templo, lugar reservado para ellos.

Ahí participan de la Eucaristía, invocan por intercesión de la Dulce Señora del Cielo el auxilio que viene de lo alto. Terminada su celebración, recorren el conjunto guadalupano, sin dejar de subir al Cerrito, para luego volver a sus lugares de origen con el firme propósito de regresar el año siguiente con nuevos compromisos personales, familiares y profesionales.

Las peregrinaciones son parte importante en la vida de la Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe. Confiados vienen a postrarse a los pies de la Morenita del Tepeyac, para agradecer su amor, protección y predilección.

La devoción que los fieles le profesan es tal, que tan sólo pasar bajo la imagen hace de ello una experiencia inolvidable que inspira en todos “una paz inmensa”.

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Peregrinaciones

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El Rector de la INB de Guadalupe, incansable mensajero del amor maternal de la Muchachita del Tepeyac, consagró una

imagen de nuestra Señora de Guadalupe, tocada al sagrado original, en la nueva Capilla Guadalupana, situada en la bellísima Sierra de Marineo, en Palermo, Italia, acontecimiento pastoral y misionero que se efectuó del �5 al �8 de septiembre de �008.

Mons. Diego Monroy Ponce fue recibido por el Obispo Auxiliar Mons. Carmelo Cuttita, en la Catedral de Palermo, quien le brindó una amigable bienvenida a nombre de la comunidad italiana, agradeciéndole fraternalmente su presencia y sobre todo reconociendo su gran celo evangelizador, pastoral, y misionero como embajador de la Niña del Cielo. Recibió también los saludos del Síndico de Marineo, en la casa Comunal, y de los líderes sindicales Dr. Gullo y Dr. Ciro Spadara. Visitó la Parroquia de San Ciro y San Giorgio, donde tuvo un encuentro cordial con el párroco y las Misioneras de Cristo Rey. Al llegar a Iglesia del Crucifijo, en la que se encontraba la Imagen de nuestra Señora de Guadalupe, se postró ante Ella, honrándola amorosamente.

El día �6 de septiembre de �008 por la tarde, en procesión solemne, se trasladó la imagen de la Siempre Virgen Santa María de Guadalupe de la Iglesia del Crucifijo a la nueva Capilla Guadalupana. El �7 de septiembre se realizó la solemne inauguración y bendición de la capilla en presencia de las autoridades civiles y religiosas. Allí cientos de hermanos y hermanas muy devotos de la Virgen Morenita y “Madre de toda Sicilia” como le llaman cariñosamente, expresaron con gran júbilo la llegada de la imagen a su nueva “casita”.

En la solemne Eucarística, concelebraron con Mons. Monroy, el Padre Franco Viglia y el Padre Guiseppe. El Rector de Guadalupe, impulsado por el Espíritu de Dios, proclamó el Evangelio Guadalupano, enfatizando que: “María de Guadalupe es camino seguro para llegar a Cristo y como Madre de Dios y Madre de la Iglesia, Cuerpo místico de Cristo, no cesa de llevar a todos los rincones de la tierra; su amor, consuelo, amparo y aliento a todos los hombres y mujeres que en esta tierra este en uno, bajo su mirada compasiva y misericordiosa”.

MISIONES

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DEL TEPEYAC A PALERMO ITALIA

Incasable labor misionera

Lic. María de la Concepción M.C. de Jiménez

VISITA PASTORAL EN SANTA CATARINA DEL MONTE, DIÓCESIS DE TEXCOCO

Con ocasión de la fiesta patronal de Santa Catarina de Alejandría, el �5 de noviembre �008, fue invitado el Vicario Episcopal de Guadalupe, Mons. Diego Monroy, por el Párroco P. Manuel Antonio Yamamoto, los señores fiscales y la comunidad en general. El Obispo Auxiliar de la Diócesis de Texcoco, Mons. Víctor René Rodríguez, dio la bienvenida a Mons. Monroy, con elocuentes palabras de cariño y gratitud, pidiéndole tenerlos siempre presentes ante la Señora de Guadalupe.

Siendo una comunidad de músicos y floristas, no podemos soslayar lo impresionante y muy digo de reconocimiento y admiración del arreglo floral que presentaba la Capilla, en su exterior e interior, tapizado de flores tanto en su portada, como en sus columnas, paredes y altar. Esto fue posible gracias a la devoción y colaboración de los floristas de la entidad. Destacó también la emotiva ofrenda musical.

Dentro de su homilía, Mons. Monroy, resaltó la vida y virtudes de Santa Catarina e invitó a los presentes a seguir su ejemplo de santidad. Al tiempo de proclamar el amor maternal de Dios a través de María de Guadalupe y de su mensajero San Juan Diego Cuauhtlatoatzin digno de toda su confianza.

LA IMPORTANCIA DEL ACONTECIMIENTO GUADALUPANO EN LA CONCIENCIA Y DESTINO DE MÉXICO

Fue el título de la magistral conferencia dictada por Mons. Diego Monroy Ponce, el �6 de noviembre de �008, en la Universidad Vasco de Quiroga, en la ciudad de Morelia, Michoacán, en atención a la invitación del Mtro. José de Jesús Zenil Nogueira, rector de la mencionada institución. Autoridades académicas, profesores, empleados administrativos y estudiantes se congregaron para escuchar atentamente, de boca del Rector del Santuario, el Acontecimiento Guadalupano, conciencia y destino de México, ejemplo evangelizador perfectamente inculturado, que opera Santa María de Guadalupe.

Todos los presentes, así como los medios de comunicación de Morelia, Michoacán elogiaron la excelente participación del Rector de Guadalupe, resaltando la trascendencia del mensaje guadalupano, en todos los ámbitos de la sociedad, mensaje, que como expresó Mons. Monroy, “es de amor, unidad, vida y reconciliación, nunca de rechazo, de despreció y mucho menos de condena”.

Misiones

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�º SEMINARIO GUADALUPANO DE LOS CERESOS DE LA DIÓCESIS DE QUERÉTARO

“Madrecita de Guadalupe, ruega por nosotros” es la invocación que desde lo más profundo de los corazones nuestros hermanos y hermanas recluidos en los cinco Centros de Readaptación Social de Querétaro, elevan a la Niña del Tepeyac.

Por segunda ocasión, el pasado jueves �7 de noviembre de �008, Mons. Diego Monroy, acompañado de misioneros del santuario, salió al encuentro de los necesitados de consuelo, fortaleza y esperanza, para llevarles el venerable aliento de Guadalupe. Dentro de su mensaje, les anunció: “que la medida del amor está en la Cruz gloriosa de Cristo. Él es el Rey de Reyes que lava las inmundicias de los hombres y mujeres con su sangre preciosa. Y que nuestra Madre querida desde su Casita del Tepeyac, hace sentir a sus hijos más pequeños, que ellos están el hueco de su manto. ¡Ánimo! no estamos solos, el Arraigadísimo Dios por quien se vive está con nosotros todos los días, hasta el fin del mundo”.

Cristo y María de Guadalupe: colmen de bendiciones al Director General de estos centros, Ing. Juan José Pedraza y a su excelente equipo, comprometidos todos con una “Readaptación Social son sentido humano”.

Como testimonio de la misión evangelizadora publicamos una carta «edificante y a la vez interpelante» dirigida a nuestra Madrecita de Guadalupe, escrita por un interno postrado en la cama del dolor.

LAS FLORES MENSAJERAS DE DIOS

El domingo 30 de noviembre de �008, Mons. Diego Monroy, recorrió detenidamente la hermosísima exposición titulada “Las flores del Tepeyac”, que se presentó en el Atrio de las Américas, bajo la dirección de Mons. Pedro Agustín R. Díaz.

En medio de cientos de visitantes, el Rector del Santuario compartió con ellos el anuncio de vida, expresado a través de la “tilma y las variadas flores del Tepeyac”, signos del amor de Dios por la humanidad. Exhortó a los presentes a contemplar detenidamente cada uno de los espacios en donde se colocaron arreglos bellísimos de rosas realizados con gran creatividad, y a reflexionar en la narración del Nican Mopohua, que los enmarcaba.

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Misiones

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Carta a la Virgen de Guadalupe de Pablo Ortiz, interno del Centro de Readaptación Social de Qro.

TONANTZIN GUADALUPE

La familia, tal y como nos recuerda el Concilio Vaticano II en su Constitución Dogmática Gozos y Esperanzas que habla sobre la Iglesia

en el mundo de hoy, “…es escuela del más rico humanismo (…) en la que distintas generaciones coinciden y se ayudan mutuamente a lograr una mayor sabiduría y a armonizar los derechos de las personas con las demás exigencias de la vida social, constituye el fundamento de la sociedad” (G.S. No 52).Sin embargo, esta se ha ido reconfigurando en los nuevos tiempos, sobre todo en espacios cosmopolitas

como son las grandes urbes debido al mosaico de diversidad que existe en la variedad cultural, social, ideológica e incluso espiritual.

No podemos dejar fuera la evidencia de la ciudad que se representa en los puntos emergentes de exclusión y confusión en cuanto a fenómeno familiar, sobre todo en el ámbito de ser indígena migrante en la gran ciudad ser mujer sola o divorciada y cabeza de familia, así como las realidades juveniles que van buscando.

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Espiritualidad, familia y valores del mundo indígena en la ciudad

Omar Espinosa Garra Laura E Villasana Anta Verónica Saldivar Monroy Miembros de CHIMAC (Cáritas Hermanos Indígenas y Migrantes A.C.)

“Valorar especialmente a los indígenas por su respeto a la naturaleza y el amor a la madre tierra como fuente de alimento, casa común y altar del compartir humano”

(Aparecida No. 472).Fo

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Códigos más cercanos a su búsqueda particular (…) la concepción de familia nuclear no es más la realidad mayoritaria de nuestro país, menos aún en las grandes ciudades. 1

Hoy en día nuestra Iglesia, siempre atenta al tema de la familia, busca un acercamiento desde los valores comunes que se comparten como núcleo y base de toda sociedad en la búsqueda por explicar qué sucede con el impacto que los tiempos modernos le imponen como referente moral, afectado por una gran cantidad de circunstancias y factores que se acentúan en las grandes urbes como la nuestra.

En la cotidianeidad familiar indígena el papel de lo religioso se expresa en prácticas, ritos, mitos, relatos que se encarnan. A continuación, presentamos los que consideramos elementos importantes para explicar la especificidad étnico cultural y los rasgos característicos que aportan los pueblos indígenas, a través de la institución familiar muchas veces no explicitado, visualizado, reconocido ni valorado por el resto de la sociedad y que debe formar parte de los contenidos que cualquier propuesta intercultural debe tener y que forman parte de su cosmovisión, sistema de valores y prácticas socio culturales:

- La Tierra como Madre y como territorio, fuente de identidad y generadora de vínculos una vez que se han iniciado procesos migratorios; es el lugar imprescindible después de la muerte. La Madre Tierra es uno de los espacios más importantes y para su cultivo se lleva a cabo todo un rito de celebración para solicitar su autorización y para agradecer la cosecha de cada año.

- El Servicio gratuito como ejercicio de la autoridad a través de la vigencia de un sistema de cargos que puede trascender la presencia en otros territorios, inclusive más allá de las fronteras nacionales. Para los indígenas, el servicio se hace con toda la humildad que cualquier persona pueda tener, esto debido a que la creencia siempre ha sido la de “dar sin esperar o recibir algo a cambio”; tenemos como ejemplo, la mayordomía que representa a quien la asume, toda una responsabilidad espiritual y se encarga de ver por el cuidado del Santo Patrono (o

Santa patrona) de su pueblo, contando con el apoyo de toda la comunidad.

- El consenso en Asamblea para la toma de decisiones, preservación de redes sociales de apoyo y celebración de ritos y ceremonias como expresión de comunitareidad. Las Asambleas se llevan a cabo para la toma de decisiones importantes, tales como la celebración de la fiesta del Santo Patrono o cualquier otro, de tipo social-sacramental como una boda, un bautizo; o la muerte de un ser querido, este acto se lleva de esta forma debido a que la comunidad es muy importante y el beneficio, gozo o dolor será para ellos mismos y de esta forma se convierte en algo compartido y no vivido en forma individual.

- El Trabajo Colectivo como acto de recreación. La presencia de solidaridades distributivas de orden laboral, social y ceremonial, basadas en la reciprocidad, misma que se ejerce, no solamente con seres humanos, sino también con seres de la naturaleza. Es una de las actividades más importantes ya que toda la comunidad participa en ella para un beneficio común, porque el beneficio que se obtenga será disfrutado por todos.

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- Presencia de instituciones sociales y políticas consuetudinarias; así como un sistema comunitario de procuración y administración de justicia apoyada en recursos como la mediación, los juicios orales y la justicia restaurativa, entre otros, acompañada de una cosmovisión integral donde la justicia terrena y la divina conforman un todo inseparable.

- Identificación propia y por otros, como miembros de un grupo cultural distinto ya que los miembros de cualquier pueblo indígena se identifica como propio cuando se da cuenta de que existen otras etnias distintas a la suya, con costumbres, lengua, vestimenta y cultura diferente; pero que al igual que ellas conservan una identidad propia.

- Los vínculos de parentesco y compadrazgo como fundamento de valores, afecto y lealtad. El compadrazgo es uno de los vínculos más importantes del mundo indígena, esto debido a que se genera una responsabilidad mutua, en ella se deposita el mayor de las lealtades hacia una persona, porque al faltar los padres, las personas que se hacen responsables del desarrollo de los hijos serán los padrinos como símbolo de lealtad.

Preservación y práctica de la medicina tradicional y del comercio justo como propuestas de desarrollo sustentable. La preservación de la medicina tradicional es una de las prácticas más importantes que la gente mayor lleva a cabo ya que se considera el mejor remedio para cualquier mal y, a la vez, símbolo de la preservación de la cultural, llevado a cabo desde nuestros ancestros. La familia indígena, desde los valores, prácticas y costumbres anteriormente descritas, es toda una escuela de enseñanza para una sociedad marcada por valores y estilos de vida consumistas, egoístas e individualistas.

A lo largo de la existencia de cada uno de estos elementos, se puede visualizar la unión de la familia en base a las costumbres del “buen vivir”, de acuerdo al género, el rol y al desarrollo de cada miembro. El hombre responsable de velar por el sustento familiar, generalmente tomará la mejor decisión para la educación de los hijos; la mujer, por

su parte, acompañará y apoyará al hombre en todos los aspectos de su vida. Los hijos, cada uno de ellos, tendrá un rol dentro de este ámbito familiar, las niñas se prepararán para poder casarse y atender a la familia y los niños se prepararán para el trabajo en el campo y poder mantener a la misma. La familia indígena nos enseña, no sólo con palabras sino con hechos, que otra familia, otra sociedad y otro mundo es posible desde la justicia, el amor y la solidaridad.La Pastoral Indígena desde esta Casita sagrada muestra su preocupación por todas las familias, pero en especial por las indígenas que en el transcurso del año llegan a postrarse a los pies de Nuestra Señora de Guadalupe presentando sus necesidades y ofreciendo los frutos de su trabajo. Compartiendo con nosotros sus valores como nos lo mostró San Juan Diego Cuauhtlatoatzin, casado con María Lucía, santificándose en el matrimonio y sin dejar de ser indígena es Santo.

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1 Dios habita en las familias urbanas. Pautas y reflexiones sobre la familia y su concepción desde los sectores urbanos. Punto de partida en el Taller Nacional realizado del 14 al 16 de octubre, en la ciudad de México.

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FESTEJOS GUADALUPANOS 2008

MISA POR RADIO, TELEVISIÓN E INTERNET

Cadena RASA, 620 AMTodos los Domingos, 9:00 hrs.

XHTV, Canal 4 TV14 de diciembre de �008

a las 9:00 hrs.

www.virgendeguadalupe.org.mxTodos los Domingos, 9:00 hrs.

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Martes 9 de Diciembre Solemnidad de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin

1�:00 hrs. Eucaristía Solemne de la Festividad de San Juan Diego, (Antigua Parroquia de Indios) Preside: Emmo. Sr. Cardenal Don Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México17:00 hrs. Misa de Indígenas Santuario de San Juan Diego Preside: M.I. Sr. Cango. Antonio Vallejo Sánchez

Jueves 11 de Diciembre

17:00 hrs. Vísperas Solemnes Preside: Monseñor Diego Monroy Ponce, Rector del Santuario Participa: Venerable Cabildo de Guadalupe y Padres Capellanes del Santuario.18:00 hrs. Homenaje del Venerable Cabildo, Padres Capellanes, Empleados y Agentes de Pastoral del Santuario a la Virgen de Guadalupe.18:45 hrs. Serenata Popular a la Virgen de Guadalupe�1:00 hrs. Homenaje de Nuestros Hermanos Migrantes a la Virgen de Guadalupe ESNE (El Sembrador Nueva Evangelización)�3:00 hrs. Homenaje Musical y de Oración de los Artistas a Nuestra Señora de Guadalupe�4:00 hrs. Tradicionales Mañanitas

Viernes 12 de DiciembreSolemnidad de Nuestra Señora de Guadalupe Reina de México y Emperatriz de las Américas

0:00 hrs. Eucaristía Solemne Preside: Monseñor Diego Monroy Ponce, Rector del Santuario Concelebra el Cabildo de Guadalupe y Sacerdotes.�:00 hrs. Misa de Concheros y Trabajadores de la Construcción.5:00 hrs. Misa de Alborada7:00 hrs. Misa de los Institutos de Vida Consagrada11:00 hrs. Oficio de Lectura - Hora Intermedia Solemne Preside: Monseñor Diego Monroy Ponce, Rector del Santuario Asiste el Cabildo de Guadalupe y Sacerdotes.1�:00 hrs. Solemne Concelebración y Bendición de las Rosas Preside: Emmo. Sr. Cardenal Don Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México Concelebra Consejo Episcopal, Venerable Cabildo de Guadalupe, Venerable Cabildo Metropolitano y Sacerdotes.

477 Aniversario de las Apariciones de Santa María de Guadalupe en el Tepeyac