Informe de Lectura Economia y Sociedad

6
ABRIR LAS CIENCIAS SOCIALES. AUTOR: IMMANUEL WALLERSTEIN MARIA ELENA ARCE G. LICENCIATURA EN HISTORIA El autor es sociólogo, referente de la sociología histórica, con vinculación al estudio de los grandes procesos históricos. En el texto leído encontramos como tesis central del autor la existencia de una relación estrecha entre el desarrollo del capitalismo y los procesos históricos y el de las ciencias sociales, identificándolas en forma inseparable con la construcción del mundo moderno y su idea de infinitud del progreso. El autor plantea una cronología de las ciencias sociales, comenzando en el siglo XIX, caracterizado por la disciplinarización y profesionalización del conocimiento, surgido de la necesidad urgente de legitimar las transformaciones políticas, organizar y racionalizar el cambio social, dar un sustento a la unidad e identidad de los nacientes Estados naciones. Este desarrollo de las ciencias sociales se produce en aquellos países donde el moderno sistema capitalista había alcanzado un importante desarrollo. El afán de expansión capitalista, unido siempre a la idea de progreso infinito y dinámico, enfrentó a los países modernos con el resto del mundo, el que fue objeto de estudio de las ciencias sociales, determinando que los otros pueblos se encontraban inmovilizados, no habiendo alcanzado la modernidad. Esto sirvió para legitimar en la diferenciación el proceso de colonización y conquista, “la

Transcript of Informe de Lectura Economia y Sociedad

Page 1: Informe de Lectura Economia y Sociedad

ABRIR LAS CIENCIAS SOCIALES. AUTOR: IMMANUEL WALLERSTEIN

MARIA ELENA ARCE G. LICENCIATURA EN HISTORIA

El autor es sociólogo, referente de la sociología histórica, con vinculación al estudio de los

grandes procesos históricos. En el texto leído encontramos como tesis central del autor la

existencia de una relación estrecha entre el desarrollo del capitalismo y los procesos históricos y

el de las ciencias sociales, identificándolas en forma inseparable con la construcción del mundo

moderno y su idea de infinitud del progreso.

El autor plantea una cronología de las ciencias sociales, comenzando en el siglo XIX,

caracterizado por la disciplinarización y profesionalización del conocimiento, surgido de la

necesidad urgente de legitimar las transformaciones políticas, organizar y racionalizar el cambio

social, dar un sustento a la unidad e identidad de los nacientes Estados naciones. Este desarrollo

de las ciencias sociales se produce en aquellos países donde el moderno sistema capitalista había

alcanzado un importante desarrollo. El afán de expansión capitalista, unido siempre a la idea de

progreso infinito y dinámico, enfrentó a los países modernos con el resto del mundo, el que fue

objeto de estudio de las ciencias sociales, determinando que los otros pueblos se encontraban

inmovilizados, no habiendo alcanzado la modernidad. Esto sirvió para legitimar en la

diferenciación el proceso de colonización y conquista, “la evidente superioridad de la sociedad

europea de la época era la culminación del progreso”. Para lo anterior adquirieron importancia la

historia y la antropología.

Siguiendo en la cronología podemos decir que a principios del s.XX las distintas disciplinas de

las ciencias sociales se institucionalizan y buscan distinguirse entre ellas delineando sus campos

de estudio. Se establece una clara delimitación entre las ciencias naturales que estudian sistemas

no humanos y las sociales que estudian a las sociedades humanas civilizadas.

Las ciencias sociales hacia 1940 se encontraban asentadas, pero nuevamente hay cambios en el

mundo, Europa ha sufrido una masacre con las guerras mundiales y el desarrollo del nazismo y

fascismo, es evidente que la idea de modernidad y progreso infinito trastabilla. Luego se produce

la llamada guerra fría, la población se expande junto a su capacidad productiva a niveles

insospechados y se multiplica la cantidad de científicos sociales profesionales. Los pueblos no

europeos se reafirman políticamente y con ello se produce el cuestionamiento de los fundamentos

Page 2: Informe de Lectura Economia y Sociedad

de las ciencias sociales erigidos en las décadas anteriores. La guerra fría hace surgir polos

centralizados de desarrollo científico. Este escenario cuestiona la validez de las distinciones entre

las ciencias sociales, surgiendo los estudios de áreas con una base geográfica, de carácter

multidisciplinario, con evidentes motivaciones políticas. Asimismo, la separación en el estudio de

occidente y de áreas no occidentales, tuvo connotaciones políticas. Concretamente para los

historiadores surgió la duda acerca del hecho de que si las naciones no occidentales, como África,

tenían o no historia. Si bien, las áreas no occidentales eran iguales a las occidentales, se

diferenciaba por encontrarse en etapas diferentes del camino de la modernidad. Surge el concepto

de desarrollo, y el compromiso político de los Estados con éste, pasa a justificar la inversión de

fondos públicos en las ciencias sociales.

Los cambios sociales ocurridos a partir de 1945, que producen la pérdida del dominio indiscutido

de Occidente en el mundo, engendraron acérrimas críticas al parroquialismo de las ciencias

sociales, que se oponía a la idea de universalismo necesaria para la legitimación de ellas. Lo que

se presentaba como aplicable a todo el mundo, con pretensiones normativas y de comunidad,

constituía la opinión de una minoría, que había llegado a dominar el mundo del conocimiento por

su dominio político y económico. La verdad universal cambia con los cambios en la constelación

del poder. Las principales críticas vinieron de grupos feministas y otros que desafiaban el

eurocentrismo, que demandaron un apertura de las ciencias sociales a la reflexión sobre la

diferencias, reclamando inclusión como parte de una demanda descolonizadora. Se debe excluir

de las ciencias sociales la mención del otro, ya que el otro es parte de nosotros, objeto de estudio,

se debe propender a un universalismo pluralista.

A partir de la década de 1960 se produce una superposición entre las disciplinas, volviéndose

estas más heterogéneas y adoptando nombres interdisciplinarios. Lo anterior por la necesidad de

incluir como objeto de estudio todos los procesos sociales

Desde 1960 hasta la fecha surge como desafío a la división del conocimiento el tema de la

complejidad, que busca hacer compatibles la idea de ley natural con la idea de incertidumbre e

irreversibilidad, que han transformado a la ciencia natural, considerada más dura y más precisa

que la filosofía, las artes o las letras en una ciencia más “blanda”. Un segundo desafío lo plantean

los llamados estudios culturales, que resaltan los estudios de género y no eurocéntricos, el

análisis histórico local y la estimación del valor asociado a las realizaciones tecnológicas. Por

Page 3: Informe de Lectura Economia y Sociedad

último, los estudios culturales se han reafirmado gracias al surgimiento de intereses ecológicos

que cuestionan el mérito del progreso tecnológico. Lo anterior disminuyó la división entre los

supercampos de las ciencias sociales y de las humanidades, produciéndose formas de

cooperación. La división entre ciencias naturales, sociales y humanidades, ya no es tan evidente,

pasando las ciencias sociales a tener un papel conciliatorio entre las humanidades y las ciencias

naturales.

Surge para el autor, luego del análisis cronológico del desarrollo de las ciencias sociales, que da

cuenta de la imposición de intereses políticos a la actividad intelectual; la necesidad de una

restructuración del área que combine distintas perspectivas de género, raza, clase y culturas

lingüísticas, de una forma real, para lo que es importante rechazar la distinción ontológica

moderna entre el ser humano y la naturaleza, abordándolos a ambos en toda su complejidad.

Asimismo, el rol del Estado, como frontera natural de la vida social, de suma importancia en los

albores de la modernidad, ha sido cuestionado por desilusionados individuos, que buscan reducir

el estadocentrismo. El autor plantea la importancia de la universalidad y objetividad en las

ciencias que propone restructurar, debiendo incluirse en ellas la mayor cantidad de experiencias

históricas y cuidar el equilibrio entre el universalismo y el particularismo, respectivamente.

El autor concluye con un rápido diagnóstico de la situación actual (1995) de las ciencias sociales

en las distintas regiones del mundo y concluye que se está en un momento en que la estructura

disciplinaria existente de las ciencias sociales ha sido cuestionada, y propone llevar adelante

ciertos procesos por parte de los administradores de estructuras de conocimiento, que

contribuirán a la reestructuración de las ciencias sociales, tales como la expansión de

instituciones que agrupen a a estudiosos sobre puntos específicos y urgentes, el establecimiento

de programas de investigación integrados, el nombramiento conjunto de profesores y el trabajo

adjunto para estudiante de posgrado.

Me parece que el autor no resuelve a cabalidad el tema central del texto, ya que si decimos que el

desarrollo y desenvolvimiento de las ciencias sociales ha ido de la mano de los distintos procesos

históricos, como un campo influenciable y una herramienta utilizable por los grupos de poder de

turno, las conclusiones propuestas para una reestructuración de las ciencias sociales, debiera

concentrarse primeramente en generar aquellas que puedan dotar de la suficiente autonomía

moral y económica a aquellos que tienen como objeto de estudio al ser humano y sus procesos.

Page 4: Informe de Lectura Economia y Sociedad