Geertz. Una profesión inconstante.

8/4/2019 Geertz. Una profesin inconstante.

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relaci6n enfie ese desarrolio _v los amplios movirnientos de la historia conlemporaaea. Sinembargo, adem6s de esto, de la necesidad, se produce una especie de narativa de "lascosas por las que he pasado y las cosas que he hecho". No estoy, eo mayor parte,preocupado ni por mi trabajo ni por mi persona. Estoy preocupado por lo que ha pasado ami airededor, tanto eo la profesi6n en la que me he desenRrelto, sin embargo vagamentey en ocasiones inc6modo, agrego, y en la que estamos satisfechos en llaBar "el mundoancho" en el que esa profgsi6n ha estado, sin embargo, iffegua y marginadame$e,integrada. Ese mundo esta con nosolros trlrde y temprano: hay muy poco en laantopologia que sea genuiname[te aut6nomo;1as pretmsiones por e] conhano, sinembargo disfrazadas en las ropas prestadas de la "ciencia", son de auto servicio. Somos,como todo el resto de ias personas, cr;lturas de nuestro tiempo, reliquias de nuestroscompromi


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reltero, no son los itntcos cortes que se pod ar hacer, i los mejores, pero si sonreflexiones, difusas y refractadas, en mi propia menle, de la forma del'mundo y defoflnas de la aflhopologia denko de dl.laslas

Dulante la Segunda Guena Mundial, ios antrop6logos americanos, al igual que lossocidlogos, historiadores, psic6logos y po1it61ogos, estabao siendo llevadol hombres omujeres, hacia el servicio gubemainental. Despuds de que dsta finaiiz6, lo que fue, en losEstados Unidos al menos un corto tiempo, mas o menos hes o cuafto aio6. ellos v e]lasretomaroo inmediatamenle a la academia con la concepcion oe elJos mismos 1'de suprofesi6tr mdicaLnente aiterada. Lo que habia sido una obscura, aislada, incluso unaespecie de disciplina seme_jante a un lobo solita.io, preocupada principalmente cotretnografia tribal, las clasificaciones raciales y lingiiisticas. li evoluci6n culturai v laprehistoria, cambi6 en ei cuso de una d6cada al modelo de una muv modemapolilicame0le cooscienle crencia social colecltvd fenrendo la a*p".,"0",a d" hub.ihabajado (principalmente en conexi6n cotr propaganda, guerra psicol6gica o esfuerzos de1a inteligencia) en largos e intelectualmetrte diversos grupos de ispeciaiistas en problemas

EXUB EM N C IA DE P OS G I]ERK4

uevas.Ea!-trt!!L1qqliempo leuarlsn'-

especificos, la mayoria de los cuales se habian conocido paeviam;trte y con los qLre tenianpoco que ver, Ios antrop6logos volvieron a las universidades con un estado de dtxmoclaramente experimental. Trabajos multi- io inter, o cruzados) disciolinarl1r'abajo y aclones con atos del mundo contemporineo,ia, inventiva y con sentido,disponibilidad de materiales. Las ciertamente en

Encuentro todo esto en 10 que podria ser su mayor putrto de concenfoaci6n, gmidesinvestigaciones, y de ias mi:s alocadas corfusionis: Iiarvard en ios 50s. Unaetraordinaria coiecci6n de persotras y persoflaiidades se habiaD reunido en ese lugar, yen el vecho Instituto de Tecnologia de Massaohussets (Massachussets lnstitute ofTeclmology), produciendo proyectos en todas las direcciones. Ah se encontaba elDelartamento de Relaciones Sociales, el cuai -presidido por el soci6logo sistemeticoTalcott Parson, y aDimado, bastatrte difusamente, por su bastante difusa ,,ieoria Generalde Aooi6tr Social' ,combinaba sociologia, antropologia, psicologia clinica y psicologiasocial en un todo integado, al menos termjnoi6gicamente (iarsons y inii. fOSl;.Estaban ademds el Cent o Ruso de Investigaci6n (Russian Research Center), encabezadopor el anrrop6logo cultural Clyde Klucktohr (i951); ta Ctinica psicol6gic;, dtigida porel psicoa&lista Herry Muray (1938)t el Laboratodo de Relaciones Sociales, diri;ido porel estadista social Samuel Stouffer (Stouffer 1949). John y Beatrice Whiting, desie yile,constituyeron un equipo y comenzaron a explotar Ia recidn creada l,rea dJ Documentosde Relaciooes Huraaaas, para hacer estudios compaftltivos y corelacionales sobresocializaci6tr (BB Whiting y J Whiting 1975). En el Instituto de Tecnologia deMassachussets, se encoDtraba el Centro para Estudios Internacionales dedicado aestimular la modernizaci6n y despegar la democmtizaci6l ell los nuevos estados de AsiayAfrica y aquellos relegados de Eruopa Orientai y Amrica Latina (Mllikal y Blackmer1961). Casi todo lo que se enconhaba en cuaiquier forma del aire de Io social o. como joque pronto llegaron a Ilamar"e. a medrda que las presiones hacta Ia un,ftcacion se


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intensificaron, las ciencies conductuales (behavioral sciences) _desde dinilmicas de grupo(Homans 1950), teo as cognoscitivas (Tolman 1958), y la psicologia experimental(Bruner y Krech 1950), hasta lin8iistica estr[cturai (Jackobson 1952), 1as medicionesactitudinalcs (Allport i954), el anzilisis de contenido (lnkels i950). y la ciberidtica(Winer 1962)- estaban represenladas po, uno u otro instituto, centro, proyecto o gnlpoel maniismo estaba auseite- v un nrimero dA estudirgler fllzmente lo proveian(para una critica geueral desde la izquierda sobre esto, ver a Diamond 1992Para mi, coloo un futu:ro antop6logo -u[o que nunca ha tenido ur curso antropoldgico yno ha tenido una intenci6n particular eD mente excepto el de prestarse asi mismo comoposible empleado- la figura con la que m;,s llegue a E.milros en este enjambre deautoridades de muoho hablar, fue Clyde Kiuckhobn. Un hombre llevadero,-impotrente,con una enorne gama de intereses, una mente continuamente incansable y cotr uDapasionado y a veces sentido sectario de la vocaci6n, que habia leido Ciasioos en axfordcomo un escolar de Rodees. Habia estudiado a los Navajo y otras gentes del suioesteamericano, ya que fue etrviado a 6stos lugares como un adolescente por cuestiones desa1ud, y conoci6 su camho por los pasilios del poder, tanto en Washington (donde trabaj6como consultor para la Secretaria de Guera y dirigi6 peritajes morales para Ia Oficina deInfomlaci6n de Guerra) como en Harvard, un loglo atn mayor (considerando que nacioen la oscura Iowa). El autor de 10 que ha sido 1a miis leida, y mejor escrita, declaraci6r de1o que es 1a atrtopologia, Espelo para la H monidad (Mirror Jor M.t, (1949), un pasadobresidente de la Asociaci6n Antropol6gica Americana, un feroz controversial, jugador depredilectos, un master para co$eguir dinero, Kluckhohn fue m6s que una presencia-Una de las ofltiples iniciativas eolectivas (recordiindolo, cuerto al menos ocho, y habia[probablemente mris) que Kluckhohn estaba en ese fiometrto ya fuera dirigiendo,planeando o de Io contrario a mando, en ias que yo por mi parte me involuor6, etr tresque al menos tomendolas juntas, no s61o lanzaron mi carera, sino que hjaron sudlrecci6nLa p mera, y la m6s pequeia, fire ei conrpendio de definiciones de cuitura queKluckhohn estaba preparaado en colaboraci6n con Alfted Kroeber, para ese momento ensus setentas y concluyendo una cai:rera soberala en un retiro distanciado (Kroeber yKluckhohn1952). Fue dado que, con la ayuda de ohos, estudiantes graduados, o m6salanzados ensamblarol 1o que habian escrito en forma de cometrtaios, y yo fui llamado areyisarlo y o&eoer sugerctrcias. Tenia algnoas sugerenoias, la mayoria de estasexpositivas, de las cuales pocas fircron atendidas; pero el mes latal resultado de laerperiencia para mi, fue que fui inducido a ma.leras de pelsar en una forma particular deantropologia en ese momento llamada, bastante exhaflamente, modelo te6rlco oconfiguracionalismo. En esta distribuci6n, contenida desde el trabajo antes y durante lagu"..i, pot el linguista comparativo Edward Sapir en Yale y la holista culhual RuthBeoedict en Columbia, se dio la intenelaci6n de elementos, la gestalt que formaron, nodesde su oariicte, particular y atomistico, como en prcvias ifueas de estudio de difusion ycultula, los condujo a lo que 11eg6 a ser el coraz6n del asuDto. Un fen6melo, una prActica,un rol, una actitud, un hebito, una caracteristic4 una idea, una cosfumbre, eran, como iodice el eslogao, "un punto en un pat6n"; emn sistemas, fueron despuds, formas,estructuras y cootextos -la geometria social del sentido (Kluckhohn1962, Sapir 1949'Benedict 1934).


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Un fran dee ones de este acercamiento a las cosas contunes enantIopo aparecleron en ese momento. Quizis el ]riis vFiEIE-dpersomlidad, en el seryicio del cuai Kluchohn, Murray y un j""* ;;;;rJ JJDelartamento de Relaciones Sociales, David Scheinder, istablecieron una lectu.ad,ehnitiva mas,omenos definitrva (Kluckhoh et al. 1949) Fuertemetrre iaflu;;;iado porrdeas pslcoatralitrcas y por metodos prolectivos de pruebas, busc6 relacionar Drocesos deldesanollo individual psicol6gico a las institucionis culturares de diversas sociedades.Abram Kardiner y Ralph Lintot en Columbia, Cora DuBuis, primero en Berkeiey yposterio.mente en Harvatd, Eric Erickson, tambien pnmero en Berkeley y luego enHarvard, y el mismo Kluckhobn en su trabajo sobre loi Navajo (Kardiner liLinton tl:1,DuBois et al.-1994, Erickson 1950, Leighton ) KluckhohnI'q47) fueron qur.zds las m6sprominentes figrras deltro del mo miento, y Margart Mead que fue su oponente fuera

resutlado no ser tan longevo. fue e1 llamado movimiento culfur;l v de

de la tr.ibunat pero 6ste fue fuertemente expandido (Halloweli 1-955, piers y Singer 1953,Wallace 1970). Muy ligados a la cultura y la pgrsonalidad, estaban ta,rbidn los'ilamados

o que ento a otra de las escalas

ios de carecte. naciotral o estudio; tales como los deen Japon. r los de Mead. Rhoda Mebauu Ceorfiey C;;-;i*opa y Amer ica(Beredict.19-49t ^Meaq ^1.9-42: M:aq y Meb.aux 1953j Metraux y Mead iSSi; N4eaa yRickman i 951 : 1948, i955; co.", y n;"munta,j;,;.;;;, il;ilfijdonde socidlogos, psic6lo qllqlggos y arn op6logosbre sovidtica del1959, Bauner

largas, de largo t6rmino,mcratlvas- culhras de Kluqhlbn,:11_::1!: tt }lerlLru: !r _u444q9li!luql9s clmplla yas]le valores o paovecto Ramah(t\spue; Prol-ecto Rinrock). Este proyecto, met6dico y bietr financiado, estaba dedicadoa desc.ibir el sisteaa de valores (visioles de mundo, actitudes mentaies, estiios rnorales)de cinco pequeias comunidades adyacentes geogiificamente, pero cultuEimentediscrepantes del noroeste de Nuevo Mdxico -N"rr:", Zrri, a-e.l"i E'.;;";, M;.rr" yAnglo (o. Texa[). Durallte un periodo que finaloeate se redujo a veinte aiosagoxirpad,Fentg docenas de investigadores provenientes de uru gran variedad deespecialidades -fi16sofos de la moral, histo adores regiolales, so-ci6logos rurales,indigenistas americanos, psic6logos de niios- fueron "nriuao. tu"iu uigr-.-ri* aa ".to.itios a desc.ibir algun aspecto de Ia vida que ahi se vivia Sus notas de caitpo, cientos decietrtos de pdginas, las que despuds de haber sido trascritas, se archivaron en los Archivosdel Area de RelacioDes Humanas del pea6o dy Anthropologl Musern, donde podian sercomiinmelte consultadas y adenuls de una serie de estudioi especiales, qu. finalment" se:."fr|:ro'n -:._,*- rglumen colectivo (Vogt y Albert 1966, Vogt 1955, KlucktrohnyStrodtbeck 196t, Smith y Roberts 19j4, Ladd 1957). En mi caso, no fui al suroeste, perotrabajd po. algurlos meses con los archivos, vastos y vadados, sobre un punto pianteadopor KluckhohlJas distirtas respuestas de cinco grupos hacia problemas que se l.spresentaban por su misma existencia por ser oomuddades pequeiias, rurales, mas omenos aisladas: sequias, muertes y alcohol. El racionalismo teinol6gico en Mormos, lasdarzas de lluvia en Zuni, el fatalismo d.ametico al enfientar iquias en Am6ricaespaflol4 el miedo a los fatrtasnus en Navajo, los esquemas escatol6gicos en Mormon, lahuida del dolor al enteltar la muerte en Anglo, la sobriedad eo Zuaii, el puritanismo en

Ruso dc Inr estifristorias de vida de re


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lt/-\1"' ". I t, ,. \'.. .d,,. _ rlt,r lt (" ffa[VMormos, y las boracheras en Navajo ai reia.roour.. J/n.l consu del alcohol -flieroltodas expuestas, de marera bastante esquemdtica, y atribuidas bastanie especuiativamentea sus distintos sistemas de valores (GeerE, observaciones no publicadas). Pero a pesar decualquiera de las limitaciones del repofie que produje (y no estaba del todo mal al ser unpdmer aceacamjento hacia estas cosas), la exDeriencia resullo ser t nto una especie deES ia de la clase d camDo -comDarativo- c y di gido acuestiones de

reposa sobre e1 heoho de que si no la primera. rma de las mds alas de lo quepr9nlo se tom6 el utra mlnda:rpl+ de 6stos, poral estudio de sociedades de gan

- del resto deba aasi como una liansici6

MODERNIZACION Y GUERRA FRIAE1 Cento para Estudios Intemaciolales en el lNtituto de Tecnologla de Massachussets,que me[ciond ante ormente como parte del grupo de ias iniciativas de las CierlciasSociales eme.gentes en la Cambridge de posgrrerra, fue establecido en 1952 como unacombinaci6n d una agrupaci6n de intelectuales y una organizaci6n de planificaci6n depoiiticas dedicado a proporcionar consejos econ6micos y politicos tanto para la ripidaexpansi6n de los programas de 4'uda extsa[jera de los Estados Unidos, asi como paraaquellos aparentemetrte asistidos -los "en vias de desarrollo", "subdesarrollados" o para1os menos sanguheos, "rctrasados" paises de Asia, Africa y Am6rica Latina. En unap rnera instancia, el Cento, algo que podia parece, una anoma[4 dento de una esctelade tradici6! en hgenieria, no muy dada en esos mome.tos a llevar a cabo itrvestigacionessociales de ninguna clase, no era dificilmente mes que una seqetaria, una sene deoficinas, un nombre, una graD cantidad de dinero y una agenda nacional. En un simpieesfuerzo por tenerlo levantado y trabajaldo, Kluckhohn, quien continuaba movi6ldose enformas misteriosas, sfuvo otra vez involucrado de cierto modo en esta formaci6n,propo[iendo que ux equipo de cLndidatos a Doctorados de los deparlamentos de Cienc]asSociales de Harvard fueran formados y enviados a lndonesia, bajo sus auspicios, parallevar a cabo jnvestigaciones de carnpo en coopeaaci6n con estudiantes de nuevasuniversidades de estilo euopeo de esos paises. A cinco antrop6logos, itrcluydndome a miy a Ini entonces espos4 Hilred, tambien u1a estudiante de relaciones sociales; unsoci6logo que era un historiado. de China; un psic6logo sociai; y un psic6logo clinico senos fue dado un aio de tuabajo intensivo en lenguaje indonesio y luego fuimos enviadospor dos aflos a los campos de arroz del este de Java (tro todos fuerol a este lugar, peto esais otra historia) para llevar a cabo, investigaciotres ensambladas, paralelas,hterconectadas y por tanto, lo que se esperaba fuemn acumulativas: el modeio mejorado,concent ado y de proyectos extoanjeros del hoyecto Ramah.

Los altos y bajos de esta iniciativa, que l1eg6 a ser llamada el "Proyecto Modjoklto" y elgrado que alcanz6 con respeoto a los fines propuestos, ya han sido detallados (Geertz,1995a)- Para la presente especie de historia de "Maroha del Tiempol-su sigtificancia

L\'.lrr,i.^,"\\\'{*{r}\-l

*iffiJoo hisrorias escntas. gobiemos esl2blecidos. y naciooes.lgados y civilizacrones.i,Inrrlmente co.puesus iPara otrolsfuerzo tlmprana eir esra direccion. ver Steward el

consh-uccion de Ia nacion y de la

a1. 1 el ntmero de este tipo de proyeotos,


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a-"_,'I4,i-o:*,pu,ra" se rDxJUplico Last "orno se rn.rltrplico el numero de ptls


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En mi caso, mi propuesta de tesis o ginal, pero temporaLmenle hecha a un Jado pamdi girme hacia la descripci6n de Ia religi6n javanesa de manera mes Seneral por elprop6sito del proyecto comirn, fue el de perseguir la posibilidad de que los rcformistas (omodemistas) del lslam podian jugar ull rol en Indonesia similar al que el Caivinismo deWeber supuestamente ju96 en Occideote. Entonces, despu6s de escribir un pequeno lihroen el Centro sobre la historia de la agdcultura javaresa, la cual atribuia su fracaso alracionalismo acompaiado por del capital intenso, las lineas del aiorro laboralexperimentadas antedonnente en el Oeste y, de algin modo en una forma diferente' enJap6n, con respeoto a las poiiticas coloniales de los alemales (Geertz' 1963a), regrese aIndonesia espeiaado dfigir la tesis Weberiatra con ulu forma d prueba de hip6tesis mdsdirecta y sistemdtica Iba a estar, pens6, cuatro o cinco meses en cada una de las regironesfue(emente isliimicas efl Sumaaa, en una legi6n profuldamente Calvinista en Sulawesi ]'en uf,a regi6n hild[l en Ba]i, y tratar de indagar los efectos, si existian, de las diferentesvariedadei de orcencias religlosas sobre 1a modemizaci6n de comportamlentosecon6micos.Pero un evento gracioso sucedid de camino al campo. La guerra fria, previanlente peleada(exceplo quEas el muv e.pecral caso de Coreall0 ]os eslEurooal-dEsolEo iu iEiE e a\edad aI |etcer Muldqsudeste Asia. Todo esto la emergencia ya,EGuerra de Viemam. el Khmer Rojo,

y el desanollo general de las cosas, hi"o


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:^:::*]T.]::^1r::!a. -uoosic,ones j en nue\rros csrrto\ de rrabalo. en 0ueqrra propraconcepclon de lo que estabamos trai_rndn de hacer, parecia, como se decia, iadicado

Para el.mornento en que regresd a los Estados Unidos, hacia principios de 1960 (estuve:::],1:9" :ll:r?: :l Bali. Dri^pequeio e ingenioso proyecto de tres vias se amrino por eicslarlloo oe ta reDellones en Sumatra y Sulawesi), Ios efectos desestabilizadores de laagroEacloD de ta conkontaclon de glan poder en el Sudeste de Asia estaba empe,/ando aser seohdo a su \ez con ctefla [r]er7a La prolesion misma fue apaflada por (argos:"11:T-"]'::1,Il acri\1idldes. o supuesra( acri\4dades de tos'annopjtogu. querraoaJaoan e0 Vtetnam. l-r.i.lian los derechos ci\ales La Carta de la ( ircel dePtuh$1nl, libertades civiles y et Chicago Si"t". I-u, *i""..iaua".-_ - rt"t"y,I^T1jl9:,*b,1 Cornelt, Kent Space, Chicago_ expiotaron, ai"iai"ra" t*ut"a".,

T]^'A EXPLOCION DE PARADIGMAS

tlanera mon condenadas como un acto de cuestionamientos sobrese multiplicaron ente, ademds sobre suslT:: :ll.{ltl^, * ta positlr,aaa ae un aesired". o d;; "",*i. i;i oiy.,,, o .,l::^"].:::ir,nrlll*. o si elecriramenre debena de haberse tl;r;; "i;;;;.";;pr-..l:gi_S],t_1, $:*,t1":o estaba para rerira*e u .u ui.iu*i"oto mai"iooui-ffi.iiaiao a"l1..lr^T1Tl:i:t !:,os nuevos par.adismas ae ta viaa cooremporan", _v r,r-tan'qu,"*,1o recomendabaa-, asi como algrmos quJ deseaban ,orn*tu "o ,ri -ori_,ioro .i:"rul- p*,torrar preslado el tdrmino famoso de Thomas Khun, introducido en estos tiempos lXfrun1962). Pronto y en paladas vinieron.

-!ueya! iuclslllIrEl11.j:.du y..l n1f,od e.ctamoroso que el anterior. Algunos, como lo eahi durante un tiemoo nerr

un sistema cuitural" (1968), Marshall Shalirs

despertaado estudiades y alienando d pnblico "n'g"n".ui. i";;;;;;;;;;acaqilqlg.sg)bre paises "subdesanollados,, en general, "y .oO." ii r*a"ffi

1l-31f1. ,1 ,.1g9o"ro romaror u.pa g@ agal]jt!_9lle medida en que Le\ i-srauss,su runoador'propretarro se traslado de los estudios sobre farentescot:acii el a,a]rs.sdishibutivo de formas simb6licas, -mitos, rituales, sistemas categori"or_-V-*, p.o.OiOrma descripci6n general de los cimientos de1 pensarniento 1r*"i"-sraoss'fOii{U Dof,lq64-1967i Boqn l9j2). OEos como la--Soclobiolosra. rCtrasnnn ;-3nttolq!9exa-losfttioa- rlyler. I q6q- EFndra,l" isss, K;;;; 1979\. 1a.@dt"di iryter, pds,lcyry:I"*q* 1e64, redlock tesl). o et ffi;trlilTr?XRappapofi 1968) lireron estimrtudo., utgqgll""". ,obr"ild-uhJ li,lr*"". *|:lgpa1^L[r"5i!@*"i1." * lt *rt6rici o enG-cotogia ua=uia nea-m rasry"{-lrsl-.1@ffis{sEn-,ceror-.-Tre,,a'rfi

:rr,*iir"iffi-(u lu:Kmltr ,t e6j.'+Erfl-er I957) y n@urlileimnRs (Dorrglas tq8q)..pren-eord:eunos orc la*'leotia pracltca- lg-r't. Vrctor Iumer la ,antropologia de la expene cta..{Iurner y tsruier Iq68). Louis Dumonl lc ,,annopologra de las iinluacionei. r o-0,.Rejadt Guha tos "esirdios subattemos,, (19s2). Edm;d f_"u"n fruliJroi." ;"ur,u." ycomunicacion" I1974). Jack Cood) sobre Io',escrito y lo oraf,, l foU Zj, noaney f.leeOna''lsoore e. tenguaje y la e\periencia,, fl972 t. David Schnerder sobre el ,,parenlesco conomi caso conaibui al alborozo con la ,,an ula y colunhua'(1981). Enva". una extqnsi6n ampliada


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y rqdirielda por desarrollos en ljteratura. iilos s del de mr inte#spor los srstemasl&jlgqi

que estaba faltando era cualquier termino de oldenamiento dentro de un marcos senerales- un Dala gma Que los aoarcara,

a66"t q!i"dig"r;] (Delo a 1969) v ta liEe;qgloa*ay (Newton 1979), se sumaron a la1 io.

.---"r"lu, *i "o-o ouevas innovaciones en campos vecinos _el movimie[to de '4"dler enihistoria (Le Roi Ladurie 1980). el nuevo "historicismo" er literatura (Greenblatt 1980),lestudios de ciencia en sociologia (Latour y Woolgar 1986, Traweek 1988), hernenduticalv fenomenologia en filosofia (Gadamer 1975, Ricoeru 1981, Habermas 1972) y eseImou"miento e-vasiro I eqotuoco, conocido evasiva y equivocamente como "post_\estrucn ratismo" (Foucaull 1970. Lacan 197?, Derrida 1976, Deleuze y Guattari 1977)Existia! m6s que suficientes perspectivas que abordar.

s de mundodst os E.l9l'--sa.p:li-".tq- 9r11e,!!qi!9ide la torma en4lleliJsoras parliculares constriryqns,'-ixisteniia-y-"i"er++ p+pryrl4$-Q!73, 1983). l{le!-o! !Llqq99f9l:i*3d::nrovimientos soeieles; eaf"miiisr;I@dsido y Lary:herc-+9+4-Ortuer v whitehead-i9s''1,-M.rSo1rn3q\ y Stainpnr+gsd, weinel-19lp,slaaurr]p "smo (Said 19780, los

oEI seffiio---no de que el campo se estaba desquebrajaado enenJam cr-eci6, produciendo lla]rtos, enojos, desesperaciones, o simplemente"nig*u. "* ,".p""to u unaispecie de reunificaci6n (Lewis 1998) Variedades o tipos deantiopologia, concebidos separadameite y organizados, aparentemente, uno encima delsiguiente:' antropologia m6dica, antropologia sicol6gica' - anfopologia feminista,an'tropologia econ6-iia, altropologia visual;la atrtropologia del kabajo, de la educaoion,ae ta tey,'de la concieflcia; ettrohistoda, etnofilosoffa, etnolitrgiiistic4 etnomusicologia'Lo que irabia sido, cuaado me irvolucre a irfcios de los aios de 1950, un gupo de unoscienios ern6logos argumeltativos, pero de pensamientos parecidos, asi como se hacianllamar, la mayoria di los cuales se conocian personalmente, se tom6 para fines de 1970en rlna vasta muchedumbre de entditos, cuyas inicas cosas en comim a menudo parecianser que habian pasado por uno u otro prcgrana de doctorado etrc.uei'ado de a'atrcpologia(hay mAs de cien solamente en los Estados Unidos, y quiais mucho m6s slrededor delmundo).Mucho de esto era de espemr e ioevitable, un reflejo del crecimiento del campo deestudio y de los avances de la especializaci6n t6cnica, asi como' una vez mes, de lostrabajos del Mundo de Esptuitu cooforme hizo su ruta hacia la conclusi6n de. las cosas'Peroil cambio, sin embargo produjo tanto una intelsificaci6n del combate pol6mico, asicomo malestares y aagustiis en ciertas milicias. No solamente apgaIryllIls:Tg'guerras- invertadas entre combatientes imaEmarloi lolie ls toi ilaES; ld"arr.@s G-buoanjstaq- realistas vs'

J-Lr,rmo de auto-

r""'ela-"ia-. ---q-!qbl9ili.l-

lv" antlopolo&a eolra lal.robrc larepr,igsBgrq! ELQf,ori8ffi""-s!ril@d"- b4b1q ppr-el- se-asentd--s l c comenz6 a expandise,!"1lLlCliftbrd 1988, Fabian 1983).

A tiempo, a medida que 1os impulsos que condujeron el optimismo de 1950 y laturbulencia de los arios sesenta fue.on desapareciendo entre las ruthas y lasinmovilidades de la Amrica de Reagan, esta duda, desilusidtr y auto6itica se congreg6bajo la amplia e indelinida, y de iepente bastante popular, pancarta posmodemistaG;otard 1984, Ilarvey 1989). Defroido en coltra del moderaismo en reprobaci6n y10


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repudiacion -'adi6s a tldo ",n,,- "fuu u",nu,lqui-.L]Lr reo-rja coneciada: rrna etiqrreta retodca apiicada a un sentido profuna de lai is, morll! I eplstemol6gica, "1 rypu"sto cun."trcl;' .o faco on dElqss modos".,bi.m;aa1,,:,"1-f* ffiad" fitese"ffiififfi;.;lallorlansmo. el Do.rctonam,eLto pol,rico y la Justrficacton etica pretendrerorr .rnmuucioso recorrido, e1 ,'derecho a escribir" de los a.trop6logos fuer puesto bajocuestionamieoto. "iPor que los relatos et ogrificos riltimamente ierdieron tanta de suautoridad?" la sobrecubierta de la colecci6n de Esct ibienda Cultu;t de James Clitlbrd vCeorge Marcus q l98o1, erpresaba.iPor que .fueron alguna vez creitles? l,euten tiene el derecho de retar ufla descapci6nculturai objetiva'?... iNo son todas ias .et6 cas ehograficas representacionesdetenninadas por la trecesidad de contar una historia real? ; reden los reclamos de laideologia y el deseo alguna vez estar reconciliados con las oicesidades de la teoria v t,observaci6n?La mayo.ia de trabajosen este sentido (no todos tan al tope o tan emocionados como 6ste,ni tan densamente poblados de cuestionamientos ret6 ;os) tendi6 a ceotralse akededorde una o dos preocupaciones: ya fuera la comtrucci6n de textos, es decr, ios escritosetnogiificos, o el estatus moral del habajo anhopol6gico, es decir, laprdctica etnogrdfica.La primera gui6 esencialmente asr_rntos literarios: catidad dei autor, g6nero, estilo,Itarrativa, metaforas, representacjones, discurso, ficci6n, figuaci6n, peisriasidn (Geertz1988, Boon 1982, Femindez 1986, Saiir y Crocker 1977, nitt 1OSZ;; iu segunda, asurrospoliticos: las bases sociales de ia autoridad antropol6gica, los tipos ie pod'er inscritos ensus priicticas, sus supuestos ideol6gioos, su complicidad con et iolonialsmo, ei racrsmo,la explotacid[ y el exotismo, su dependencia con ]as nafiattvas maestras del auto_entendimiento Occidental (Hymes i972, Asad 1973, Marcus y Fischer 1986, Rosaldo1989). Estas criticas intervinculadas hacia Ia antopologia, uni en el intrior y la otraexlema y recrininatoria, pueden no haber producido la dactuaci6n poderosa de iadialectica etiogr6fica en el sistema mundial posmoderno,', paro citar ese EsctbienCcCuhura, tr'.unpoco fueroll iresisiidos_De 1a manera que fuera, pasd estos aios je asercion y negacion. de promesas y contmpromesas, primero en la Universidad de Chicago, de 1960 a 1970, luigo en el institutopara Estudios Avanzados en Princeototr, de 1970 en adelaate, principal;ente batando demaatener uo balance, de recordar qui6n era yo y de continuarlaciendo lo que fuera queme hubieaa propuesto a hacer, antes de que todo se viniera a perder.En Chicago, una vez mrs, me involufie, y eo ".te mo*ento como el director de nnprograma interdisciplinario enfocado en los prospecros d, para el ahora bastatrte oalado,perdido y hecho trizas tercer mundo -Biafra, Bangladesh, yimen del Sur_: el teaqiliraralos Eltudios _Comparatiyos d9 Nuevas Naciones. Este comitd, qu" p".^u*"16-iiuu pu.mas de uni dcada, no estaba preocupado como tal por cuestiones poiiticas ni poi laconstrucci6n de una teoria general de desarrollo, ni de heoho con una meta de lingxn tipodirigida al equipo de investigacj6n_ Consistia en mAs o menos en uaa doJena de

Iug4res, comprorqgft! era sirlilar. Su activr'dad colectiva principal era ununa discusi6n acerca de suEhinffio semanal en el cual uno de los niembros dirigial1


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trabajo, e1 cual a cambio fortnaba las bases para un grupo central mas pequeio de, sl noprecisamente colaboladores. ya que todos trabajdbamos independientetnente, detrabajadores de carnpo experimentados y de meltalidades sirnilares diseccionadas haciauna serie de aslmtos rclacionados en 10 que era, en dse entonces llamada bastanteesperanzadoramente, consjdemndo el estado Senerai de las cosas, la constlllcci6n de lanaci6n (Geertz, 1963b). Incapacitado, en el momento, de volver a Indonesia, paraentorces completauente dominado por la rabia y la perdida de control, organicd unequipo de estudianles de doctorado del departamento de allhopologia, de1 cual yotambi6fl era miembro, para estudiar un pueblo comparable a Modjokuto en tamar]o,complejidad y representatividad general, pero al otro extremo dei muldo isldmicoVagteb: Maruecos 'beertz el al. lq79)El depaitamento de a!fiopologia de Chicago, presidido en ese tiempo por un grupoinusualmente abierto y coope@tivo de itrvestigadores mds experimentados (Fred Eggan,Sol Tax, Norman MacQuo*n y Robert Bmidwood; Robery Redfield acababa de mo r),provey6 uo escenario inusuaLmente congeniado para este tipo de estilos libres, propuestasde variadas en cuanto a asultos antropol6gicos. Lyod Fallers, Victor Turner, DavidSchneider. McKim Marriot, Robert Adams, Manning Nash. Mellord Spiro, Robe(LeVine, Nur Yalam, Julian Pitt-Rivers, Paul Friedrich y Milton Singer, estaban llevandoa cabo. incluy6ndome a mi, algum linea de andlisis cultural, la itteracci6n enbe nosotrosera iltersa, productiva y sorpresivamente, dada la gama,de temperamentos invollrcrados,generalEente amigables (Stocking n-d). Pero cuando, a finales de 1960, el Director delinstituto de Estudios Avanzados etr Prhceton, el economista Ca.l Kaysen me invito a iralli y crear rma nue\E escuela en las Ciencias Sociales para complementar las escBelas deMatematicas, Ciercias Naturales y de Estudios Culturaies que existian desde queEhstein, Weyl, voD Newman, Panofsky con ohos hotrorables habian puesto a t abajaidesde furales de 1930 y principios de 19,10, yo, despu6s de un par de aios rcspaldando yparticipando, acept6. A pesar del riesgo y de 10 expuesto que pudiera ser, especialmentein un tiempo de tal divisi6n dentro de la academia y de las dudas sobre la misma idea de"ias ciencias sociales", la posibilidad de habdrseme enhegado ufla piigina err blanco' enlimpio scbre Ia cual escibir, era pam algunos, pam ahora adicios a ia bnela fortuna.sioplemente demasiado atactiva como para resistlse

.lsqrydEra muy dificil determinar juslo cuiittdo flle que ese "ahora" empez6. Virginia WolfperisO qrue fue etiembre deio:1", p*u muchos de nosofios quienes encausamos truestros caminos a trales delbalance del terror, fue en 1989 y con la Caida del Muro. Y ahora, habiendo sobrevivido atodo eso, estA el 11 Setiembre del2001.Mis aios, teinta y uno y todavia contando, en el Instituto pala Estudios Avanzados dePrinceton han probado, despues de alBmas dificultades iaiciales con los mandarinesresidentes, que 6stas rapidamente pasaron a ser (las dificultades, no los mandarines) unaventaja excilente de las cuales viendo el presente, vinieron a ser las cieocias sociales(Ge; 2001). Estableciendo una nuera iniciativa en e1 campo desde una posici6n inioial,-todo e1 campo desde 1a economia, la politica, la filosofia y las leyes, hasta la sociologia,la psicologia, la historia y la antropologia, con unos cuantos estudiatrtes de litemtura, arte

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y religi6n- se demand6 una atencr6n mucho mds cercata a lo que estaba sucediendo enestas 6.eas, no s6lo en los Estados Unidos silo tambidn en "f J"nur1."- ?.o-n'_,i a"quinienros esfudiatttes de mis de teula pais". p**ao on uao "oa"'"l,io"r.a'* ag,i,ttempo u otro (cerca de un quilto de el1os anbopologos de uar;u. "tu*., o.,i"n"r. "aua",gmdos de celebridad).]4o rrvo la exr.aor.r,n,rlr op..i",oiu a. ,"r.iJdJ.-U"g_, ",rvovalodocolor

+asado-&sulla rnes fii";t tl!eq_,^es+u:-aeerca_-qqrq_rLa.q*Eg* ,.u6rr,#u".G#"ja-"-g"*"r,o. como lol1*":*,:.1le]\ ,r::"

cpmo eJ presente irnlediato es, en_la naturaieza de este caso,entqmmente en hovimjento, confuso _"., ,ro estabieoi .do,no 16; orffii,ffir"*_a una lecturahacia el rstan

prcaaesca aventuras:::::^""r:::t^1..-"1" *las breles.y erasrvas.obserrzcione. ,"#i;;;;;.;';;;i;;asuDtos antropol6gicos parecen haber caminado en la irltima ddcada "p-*,r*au.o*".A nivel de la histoda mundial oue h. ":g!q 4fqS!!4o-A lo ]aig del ensayo como unongan aclivo,lbs mayoreslesarrollos-ion nor crrnfec1^ ci ri. ,-r. r-internacionai hi Iar iallamar un sistem4 que \.reDen a parecer miis cada dia

alsiedad, de expectati no puede ser un objeto de conocimiento. Mea mi mismo por lo tanto, a GEEE-.sE

comerciales, _la ltet) y ae provinciutis.o. erricos. retiqiosos ,- ;Li-s ;;;;r.umerr"panoquiales (Los Balcanes, Sri-Lanka, Ruardu-Br*GiJ J f,ifrfrffior", .lPais Vasco). Ya sea que este ',Jihad vs. Mcworid, fe*i,". is9ii.'"" ;";;;;;;;;aradoj4 o como se tiende a pensar, un singutar, pofiudameni" ;nt"."on""tuOofe,omeno. ha comenzado ctaamerte a afectar ta &;ra ;;;;;;;;t'i".JJi qr" ,1 de Setiembre solo puede acelerar.

uJo oe capltal, multtnaclonalEa

tsr ud ros sob r.^q!-sc91!9q!isa-.ta r ie i t " o o r. "ob,. i(.


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Las cosas no o al menosivamente conforme larnovjendo: hacia la ftagmentacion, la dispersLon, el plq41i94o, Ja desarticulacion, -mu1ti,mult-1-, muli- Iirs anEop6]l5-gos an t-Jrer q-e ttabaj"t-bajo condrcionesln-mEliB-oiddnad :esfiucturadas y prcdeeibles, y arin menos susceptibles de reduicioles moralese ideoldgicas y de. rripidos ateglos poljticos, de aqueilos bajo los cuales yo trabaj6, queespero liaber

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Geertz. Una profesión inconstante.

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