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«Este hombre de mediana estatura, de aspecto tranquilo y cabellos negros peinados hacia atrás, vestido con modestia aunque sumamente cuidado, podía muy bien pasar desapercibido. Los rasgos finos y maravillo-samente expresivos de su boca estaban casi totalmente cubiertos por los mechones caídos de un espeso bigote». Con estas palabras retrata su amiga Lou Andreas-Salomé al filó-sofo Nietzsche (1844-1900). Su vida exterior fue de lo más anodina: hijo de un pastor ale-mán, estudió filología y filosofía clásica, trabó amistad con el compositor Richard Wagner en Leipzig, fue profesor en Basilea, participó como enfermero de guerra en 1870…, y poco más. Debido a que sufría fuertes dolores de cabeza, en 1879 presentó su dimisión en la universidad. A partir de ese momento, vivió

entre Italia y Sils-Maria, una pequeña aldea en las montañas suizas, completamente retira-do del mundo. Fue entonces cuando comenzó su verdadera carrera como pensador.

Nietzsche ataca los componentes judeocris-tianos de la moral y el pensamiento occiden-tales, a los que acusa de negar la vida, y propone una filosofía afirmativa de amor a la vida. En sus obras, escritas con un estilo literario antiacadémico, resuena la voz de Dionisos y Zaratustra, sus personajes filosó-ficos, quienes anuncian una nueva forma de vivir y de pensar alejada de los consuelos metafísicos del pasado, como la idea de Dios y de la salvación. La influencia de Nietzsche, que acabó volviéndose loco, ha sido enorme tanto en el pensamiento como en las artes.

Resuelve el enigmaDebido a su frágil estado de salud, Nietzsche ha perdido poco a poco el control sobre su obra… Aprovechándose de esta situación, una familiar muy perversa ha manipulado sus textos y ha insertado frases que son de otros autores. ¿Sabrías decir qué tres frases de las que te ofrecemos a continuación no son atribuibles a Nietzsche?

Friedrich NietzschePER

SON

AJE

a «Cuanto más alto estamos, más pequeños parecemos a los que no saben volar.»

b «Hace falta tener un caos dentro de sí para dar a luz una estrella fugaz.»

c «El hombre es un lobo para el hombre.»

d «Nosotros amamos la vida no porque estemos habituados a vivir, sino porque estamos habituados a amar.»

e «¡Proletarios de todos los países, uníos!»

f «Dios ha muerto.»

g «Venceréis, pero no convenceréis.»

12. EL SIGLO XIX

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A lo largo del siglo XIX, el panorama lite-rario estuvo dominado por dos corrientes antagónicas: el romanticismo y el realismo. La primera, en la que destacan las obras de Goethe, Keats, Byron, Walter Scott, Victor Hugo y Stendhal, se caracterizó por la exal-tación de las pasiones, la creación de perso-najes malditos y la ubicación de la acción en paisajes exóticos y alejados en el tiempo. La segunda, en la que sobresalen las nove-las de Balzac, Tolstói y Flaubert, reaccionó contra este tipo de literatura sentimental, y propuso una descripción objetiva del mundo y de la sociedad. El desarrollo del realismo desembocó en los planteamientos positivistas de la escuela naturalista, de la que forman parte, entre otros, Zola y Maupassant.

En España, ambas corrientes dieron también sus frutos. Dentro de la primera podemos incluir las Rimas y Leyendas de Bécquer, las obras de teatro de Zorrilla, los poemas de José Espronceda y Rosalía de Castro, y los artículos periodísticos de Larra. En la segunda, en cambio, destacan las novelas de Leopoldo Alas, Clarín, y de Benito Pérez Galdós.

Además de constituir dos escuelas, el roman-ticismo y el realismo pueden considerarse, de forma más general, dos actitudes posibles ante la creación artística. El escritor román-tico es aquel que, independientemente del siglo al que pertenezca, sitúa en un primer plano su subjetividad, mientras que el realista prefiere darle protagonismo al mundo mate-rial y social que le rodea.

¿Cómo empieza…?¿Sabrías identificar a cuál de las siguientes obras del siglo XIX pertenecen los siguientes comienzos?

Romanticismo vs realismoLI

TERATU

RA

MÚ

SICA

Moby Dick, de Herman Melville

Las flores del mal, de Charles Baudelaire

Madame Bovary, de Gustave Flaubert

La Regenta, de Leopoldo Alas, Clarín

a «Estábamos en la sala de estudio cuando entró el director, seguido de un novato con atuendo pueblerino y de un celador cargado con un gran pupitre...»

b «La heroica ciudad dormía la siesta. El viento Sur, caliente y perezoso, empujaba las nubes blanquecinas que se rasgaban al correr hacia el Norte...»

c «Llamadme Ismael...»

d «Cuando, por un decreto de las potencias supremas, /El Poeta aparece en este mundo hastiado, /Su madre espantada y llena de blasfemias /Crispa sus puños hacia Dios, que de ella se apiada.»

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¿Quién lo hizo?Verdi y Wagner son dos creadores inconfundibles. ¿Sabrías decir cuál de los dos compuso las siguientes piezas?

Giuseppe Verdi y Richard Wagner: ¿hijos de un mismo dios?Los dos compositores nacieron en 1813 y am-bos actualizaron el significado más profundo de la tragedia al recuperar la antigua unidad de palabra, música y baile. Al margen de estos dos rasgos comunes, no existen dos creadores más distintos que Giuseppe Verdi y Richard Wagner. El primero pertenece a la generación italiana que hizo florecer la ópera a través de la escenificación de grandes temas, como las obras de Shakespeare, dando prioridad al canto y a la trama. El segundo, en cambio, es el maestro de la ópera romántica alemana, caracterizada por una intensidad y compleji-dad armónica hasta entonces desconocida. Si Verdi crea para los siglos venideros un mundo plural destinado al fracaso, Wagner despliega ante los ojos y los oídos de los espectadores

un universo entero de emociones y sentimien-tos desgarradores inspirados en la mitología nórdica.

Aunque se trata de un personaje que levanta pasiones encontradas, Richard Wagner repre-senta el final de una época y el comienzo de la siguiente. Sus óperas, entre las que destaca la tetralogía El anillo de los Nibelungos, ya no se conciben como una suma de partes, sino que constituyen una sola pieza, vertebrada a partir de distintos leitmotiv que permiten reconocer tanto los personajes como los puntos culminan-tes de la trama. Su concepción de la música como un arte total y prodigiosamente expresi-vo sitúa a Wagner en el límite entre la música decimonónica y la moderna.

MÚ

SICA

1 Parsifal

1 Rigoletto

1 La Traviata

1 Tristán e Isolda

1 Los maestros cantores de Núremberg

1 El Trovador

1 Wagner 2 Verdi

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¿Qué nombre recibe…?En junio de 1919, se firmó un importante tratado que supone el inicio del proceso de pacificación y la modificación de las fronteras europeas. ¿A qué tratado nos referimos?

La Primera Guerra MundialA comienzos del siglo XX, Europa se encontraba en la cima de su historia: su cultura servía de ejemplo en todo el mundo, los avances cientí-ficos y tecnológicos hacían la vida más fácil, y los imperios coloniales constituían la prueba inequívoca de su poderío. Cuarenta y cinco años más tarde, no quedaría nada de esta floreciente Europa.

Veamos algunas de las causas de la Primera Guerra Mundial:

• Contradicciones derivadas de las economías capitalistas.

• Aspiraciones nacionalistas y ambiente patrió-tico de los Estados europeos.

• Asesinato de Francisco Fernando de Habs-burgo, el heredero del trono austriaco, y de su esposa en Sarajevo, llevado a cabo por un terrorista serbio el 28 de junio de 1914.

La suerte estaba echada: una vez que se aseguró el apoyo alemán, Austria le declaró la guerra a Serbia el 28 de julio de 1914. Rápidamente se puso en marcha una política de alianzas (Ale-mania, Austria-Hungría e Italia, por un lado, y Francia, Rusia y Gran Bretaña, por otro) que des-encadenó el mayor conflicto bélico de la historia hasta la Segunda Guerra Mundial (≥ La segun-da mitad del siglo XX). Al finalizar la contienda, eran treinta y dos los países implicados.

Veamos ahora las principales consecuencias de la Primera Guerra Mundial:

• Desaparición de las monarquías de Alemania y Austria, que se convierten en repúblicas.

• Aparición de nuevos países y consecuente modificación del mapa europeo.

• Estados Unidos se convierte en la primera potencia mundial.

HIS

TORIA

CIE

NCIA

Tratado de Viena

Tratado de Versalles

Tratado de París

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Aunque muy pocas personas comprenden totalmente la teoría de la relatividad formulada por Albert Einstein (1879-1955) a comienzos del siglo XX, en la práctica nadie se salva: ¡todos estamos afectados por ella! Al igual que habían hecho Copérnico (≥ El Renacimiento II) o Newton (≥ El siglo XVII) en el pasado, Einstein dio al traste con nuestras antiguas creencias al introducir una nueva concepción del mundo. ¿A qué le tocaba el turno esta vez?, ¿al espacio, a la órbita de los planetas, al movimiento de la Tierra? No. En esta oca-sión, Einstein revolucionó nuestra concepción del tiempo de forma radical. El propio nombre de la teoría ya nos ofrece una pista: todo es relativo. En efecto, la conclusión a la que llegó Einstein es que el tiempo no es absoluto, sino relativo, idea ésta que marcó profundamente el clima del siglo XX (Depende… Todo depende…).

Lo cierto es que, para llegar a esta conclusión, Einstein violó uno de los principios básicos de la ciencia: introdujo la subjetividad del observador y, al hacerlo, descubrió que la observación de cualquier objeto requiere tiempo y que el tiempo es relativo a la posi-ción del observador: el tiempo deja de ser una magnitud fija, independiente y objetiva. De esta manera, Einstein acabó con la idea newtoniana de un tiempo y un espacio absolutos y separados, para volver a relacionarlos estrechamente: el tiempo se con-vierte en la cuarta dimensión, des-pués de la línea, la superficie y el cuerpo.

¿Quién lo hizo?Numerosos escritores y directores de cine han tomado el tiempo como tema de inspiración para sus obras. ¿Podrías relacionar los siguientes autores y directores con los títulos de libros y películas que les corresponden?

La teoría de la relatividadCIE

NCIA

1 Robert Zemeckis

2 Harold Ramis

3 Marcel Proust

4 Martin Heidegger

5 José Ortega y Gasset

6 Gabriel García Márquez

1 Cien años de soledad

1 Atrapado en el tiempo

1 Regreso al futuro

1 En busca del tiempo perdido

1 El tema de nuestro tiempo

1 Ser y tiempo

13. LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX

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Resuelve el enigmaRené Magritte fue un pintor vanguardista belga que dejó numerosos cuadros de lo más inquietantes. Te desafiamos a que relaciones cada obra con el título que le dio su autor.

Las vanguardias históricasSin duda, la primeras décadas del siglo XX constituyen la época dorada de los «ismos»: cubismo, futurismo, surrealismo, dadaísmo… Los movimientos artísticos se suceden a la velocidad del rayo, duran apenas unos años, y lo que es válido un día ya no lo es al día siguiente. A esta aceleración de la historia del arte hay que añadir otro factor que aumenta el desconcierto del estudioso y del espectador: la obra de arte empieza a no parecer una obra de arte en absoluto. Los museos se llenan de ruedas de bicicleta, lienzos en blanco, montones de chatarra, paradojas, rostros deformados… ¿Cómo orientarse en medio de este caos de pro-puestas, manifiestos y consignas? Quizá lo más recomendable sea deshacerse de cualquier idea preconcebida de lo que pueda ser o no el arte, pues lo que está claro es que si los creadores de la primera mitad del siglo XX se propusieron

algo fue, precisamente, romper con todo el arte anterior a ellos. Por eso reciben el nombre de vanguardistas: los que van por delante.

Aunque no se pueda ofrecer una única defini-ción válida del arte vanguardista, sí se pueden enumerar algunos rasgos descriptivos. Veamos algunos de ellos:

• Ruptura del pacto de la «representación».

• Prioridad del proceso artístico frente al resul-tado final.

• Violación del decoro: todo es susceptible de aparecer como arte.

• El propio arte se convierte en tema artístico.

• Ruptura de la «ilusión de realidad» a través de paradojas, trampantojos y enigmas.

ARTE

LITE

RATU

RA

1 La condición humana

1 Las vacaciones de Hegel

1 Esto no es una pipa

1 Los amantes

b

d

a

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