El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

101
El Trabajo con Adolescentes en una Sociedad Postmoderna Por Felix Ortiz 1 Tomado de: ParaLideres.org http://www.paralideres.org/sections/section_139.asp 1 Félix Ortiz es licenciado en historia por la Universidad de Zaragoza, máster en educación cristiana por el Southwestern Baptist Theological Seminary de Forth Worth (Estados Unidos). Es director de los ministerios juveniles de AGAPE, director asociado para España de los ministerios de Josh McDowell, pastor de jóvenes de la Iglesia Evengélica Bautista "Bona Nova" y profesor de STBE.

description

Es una guia para los lideres que trabajan con adolecentes en la era postmoderna.realmente es una herramienta eficaz para tener una vista preliminar hacia una pastoral juvenil.

Transcript of El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Page 1: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

El Trabajo con Adolescentes en una Sociedad Postmoderna

Por Felix Ortiz 1

Tomado de: ParaLideres.org

http://www.paralideres.org/sections/section_139.asp

1 Félix Ortiz es licenciado en historia por la Universidad de Zaragoza, máster en educación cristiana por el Southwestern Baptist Theological Seminary de Forth Worth (Estados Unidos). Es director de los ministerios juveniles de AGAPE, director asociado para España de los ministerios de Josh McDowell, pastor de jóvenes de la Iglesia Evengélica Bautista "Bona Nova" y profesor de STBE.

Page 2: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

TABLA DE CONTENIDOS

1 - La Postmodernidad

2 - Retrato de un Joven Postmoderno

3 - El Relativismo

4 - La Nueva Tolerancia

5 - El Pluralismo

6 - Revisar Nuestras Premisas Educativas

7 - El Acompañamineto Espiritual

8 - Algunas Características de los Adolescentes Postmodernos

9 - Crear Estructuras de Credibilidad

Page 3: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

EL TRABAJO CON ADOLESCENTES EN

UNA SOCIEDAD POSTMODERNA

Este es el primero de una serie de artículos acerca del trabajo con

adolescentes en el contexto de una sociedad postmoderna. Se trata de

una breve introducción a la postmodernidad. En sucesivos meses

iremos tratando otros aspectos del increíble reto que la

postmodernidad plantea al trabajo con la juventud. Os adelantamos el

resto de los contenidos:

I. LA POSTMODERNIDAD (JUNIO)

II. CÓMO SON LOS JÓVENES POSTMODERNOS Y LOS JÓVENES

POSTMODERNOS EVANGÉLICOS (JULIO)

III. LOS RETOS DE LA POSTMODERNIDAD I. EL RELATIVISMO

(AGOSTO)

IV. LOS RETOS DE LA POSTMODERNIDAD II. LA NUEVA

TOLERANCIA (SEPTIEMBRE)

V. LOS RETOS DE LA POSTMODERNIDAD III. EL PLURALISMO

(OCTUBRE)

VI. LA REVISIÓN DE NUESTRAS PREMISAS EDUCATIVAS

(NOVIEMBRE)

VII. EL ACOMPAÑAMIENTO ESPIRITUAL, UNA ESTRATEGIA

EDUCATIVA FRENTE A LA POSTMODERNIDAD (DICIEMBRE)

Fraternalmente

EL EQUIPO DE AVENTURA

Page 4: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

EL TRABAJO CON ADOLESCENTES EN UNA

SOCIEDAD POSTMODERNA I:

LA POSTMODERNIDAD

I. INTRODUCCIÓN

A. Una de las características de nuestra sociedad es el cambio.

B. Estos cambios son tremendos y se desarrollan a una

velocidad vertiginosa.

1. Evolución del mundo nómada al sedentario.

2. De la revolución agrícola a la revolución industrial.

3. De la revolución industrial a…

C. Alguien ha afirmado que vivimos tan acelerados que cada

década se inaugura un nuevo siglo.

D. No es una sorpresa para nosotros que en estos últimos 50

años se han producido más avances e inventos que en todo el

resto de la historia de la humanidad. Pensemos tan sólo en

dos ejemplos:

1. Internet

2. Ingeniería genética

Page 5: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

E. Los expertos hablan de que nuestro mundo vive en lo que hoy

se llama: “la crisis de las crisis”

F. Esta crisis está afectando, al menos en la sociedad occidental,

a todos los ámbitos de la vida: la familia, la escuela, la

religión, la economía, la política, la cultura e incluso la

ciencia.

G. Esta crisis enfrenta a dos grandes corrientes: modernidad y

postmodernidad.

1. En nuestras sociedad conviven los dos tipos de

cosmovisiones

2. Estas cosmovisiones están enfrentadas y en buena

parte delimitadas por las diferentes generaciones.

a. Los adultos que representan la modernidad.

b. Los jóvenes que representan la postmodernidad.

II. CÓMO SURGE LA POSTMODERNIDAD

A. Surge como un resultado de un desencanto generacional.

B. La modernidad fue el tiempo de las grandes utopías sociales.

1. Un tiempo de fe: en la libertad, la ciencia, el progreso,

el ser humano.

2. Se creía que la razón humana, la ciencia y el progreso

iban a solucionar todos los problemas del ser humano.

Page 6: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

3. Se acabaría con la ignorancia, la servidumbre, las

supersticiones religiosas y el hombre podría ser

completamente feliz.

4. La modernidad representaba la mayoría de edad de la

humanidad.

a. Kant afirmaba: El hombre es capaz de caminar por

sí mismo sin necesidad de tutela alguna.

C. La postmodernidad surge como resultado de la frustración

que produce el fracaso de los postulados de la modernidad.

III. QUÉ ES LA POSTMODERNIDAD

A. Es una reacción que se produce cuando la humanidad

comienza a darse cuenta de que el proyecto moderno ya no

era válido.

B. Se ha afirmado que la postmodernidad se genera y nace

como consecuencia del desencanto.

1. El poeta francés Baudelaire afirmó: El progreso no es

sino el paganismo de los imbéciles.

C. La postmodernidad es el predominio de

Individual Universal

Psicológico Ideológico

Page 7: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Comunicación Politización

Diversidad Homogeneidad

Permisivo Coercitivo

D. La postmodernidad es el agotamiento de la razón, la renuncia

a los sistemas y las ideologías.

E. Los valores de la postmodernidad

Valores modernos Valores postmodernos

Fe Increencia

Sacralización Secularización

Absoluto Relativo

Objetividad Subjetividad

Razón Sentimiento

Ética Estética

Culpabilidad Carencia de culpabilidad

Futuro Presente

Historia Historias

Unidad Diversidad

Colectivismo Individualismo

Inconformismo Conformismo

Idealismo Realismo

Compromiso Pasotismo

Convicción Light

Esfuerzo Placer

Prometeismo Narcisismo

Seriedad Humor

Page 8: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Fundamental Superficial

Intolerancia Tolerancia

Necesario Accesorio

IV. CARACTERÍSTICAS DE LA POSTMODERNIDAD

A. Hedonismo

1. El fin supremo de la vida es conseguir el placer. O al

menos evitar al máximo cualquier tipo de dolor, bien

sea este físico, psicológico o moral.

2. El hombre postmoderno está convencido de que no es

posible cambiar o mejorar la sociedad. Por tanto, ha

decidido disfrutar al menos del presente.

3. Se vive en el momento presente. No se piensa ni en el

pasado ni en el futuro. Se busca la libertad y la

espontaneidad.

4. Esta actitud queda muy bien reflejada por la frase del

poeta latina Horacio: Carpen diem, carpen hora.

Aprovecha el día, aprovecha la hora.

5. Un cantante español, Joaquín Sabina es considerado

como uno de los exponentes de la postmodernidad. En

una de sus canciones afirma: …Apúntate a cualquier

clase de bombardeo, no tener otra fe que la piel, ni

más ley que el deseo.

6. Vivimos en un auténtico culto al cuerpo.

Page 9: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

7. En la cultura postmoderna el goce es el principio y el

fin.

B. La muerte de la ética y la ausencia de reglas

1. En una sociedad postmoderna la estética sustituye a la

ética. La belleza sustituye a la moral.

2. En estos días nos encontramos ante una total floración

y multiplicación de “micro éticas” escépticas unas con

otras y desorientadas todas.

3. La postmodernidad nos ofrece el relativismo, la

pluralidad y la total tolerancia.

a. Como bien afirmó el escritor ruso Fedor

Dostoyewsky: Si Dios no existe todo está

permitido.

b. O como dice de nuevo el ya mencionado Joaquín

Sabina: Al deseo los frenos le sientan fatal ¿Qué

voy a hacerle yo, si me gusta el güisqui sin soda,

el sexo sin boda, las penas con pan?

4. No a las normas, las reglas, cualquier forma de

moralidad

Encuesta realizada en España

Page 10: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

• 41% de los jóvenes entre 14 y 24 años se

manifestaban de acuerdo con la frase: vale lo que me

agrada. No vale lo que no me agrada.

• 27% contestó que el principio ético más importante

es: hacer lo que quieras.

• 89% considera correctas las relaciones sexuales sin

estar casados.

• 62% considera correctas las relaciones homosexuales.

5. No hay nada prohibido, lo importante es ser feliz.

C. La exaltación del sentimiento

1. En plena revolución francesa el Marqués de Condorcet

exclamó: Habrá un tiempo en que el sol brillará sobre

una tierra de hombres libres que no tendrán más guía

que la razón.

2. La modernidad llegó a hacer de la razón una diosa. De

hecho, fue entronizada como tal durante los tiempos

de la revolución francesa.

3. La postmodernidad grita: Muera la razón y viva el

sentimiento.

4. Se produce el cambio del “HOMO SAPIENS” al “HOMO

SENTIMENTALIS”

a. La famosa expresión: “Pienso, luego existo” ha sido

sustituida por: “Siento, luego existo”.

Page 11: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

5. El racionalismo aburre a la juventud. Una pintada en

el metro de Madrid leía así: La sabiduría me persigue,

pero yo corro más.

6. El centro de la moral y la persona es el yo. Los

sentimientos y los gustos individuales configuran a la

persona, sus valores, principios y pautas de actuación.

D. La crisis de las ideas y los ideales

1. Hay una avalancha de información, pero una orfandad

de sabiduría.

2. Hay una “cultura del cleanex” en referencia a los

pañuelos de usar y tirar.

3. Hay diversidad de ideas, valores, cosmovisiones y

estilos de vida. Pero se carece de toda orientación

normativa por la carencia y la negación de la

posibilidad de todo tipo de absolutos.

4. En la cultura de la postmodernidad uno cambia de

opinión con más frecuencia que de camisa. Además

uno puede sostener ideas contradictorias y eso no

producirle la más mínima tensión.

5. El único imperativo categórico es: Haz lo que quieras,

vive feliz.

6. Volvemos a ilustrar estos principios haciendo

referencia a Sabina: Cada noche un rollo nuevo. Ayer

el yoga, el tarot, la meditación. Hoy el alcohol y la

droga. Mañana el aeróbic y la reencarnación.

E. El retorno de los brujos

Page 12: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

1. La modernidad y su énfasis en la razón socavó los

cimientos y la solidez de las creencias religiosas. La fe

era considerada como algo irracional. La religión era el

opio del pueblo, según Marx. Una reliquia neurótica,

según Freud.

2. La postmodernidad postula el nihilismo y el

agnosticismo.

a. El agnosticismo es la imposibilidad de saber si

Dios existe o no, por tanto, es mejor hablar de

otra cosa.

b. El nihilismo es la negación de cualquier

creencia, sea esta política, religiosa o social.

3. Sin embargo, no hemos de equivocarnos. Esto no

significa que la postmodernidad sea irreligiosa.

Contrariamente ha dado pábulo a un amplio abanico

de creencias.

4. El gran vacío se intenta llenar con todo tipo de

caricaturas, en ocasiones grotescas, de lo religioso.

Nuevas formas religiosas que sustituyen al

cristianismo tradicional. Un neopaganismo.

5. La postmodernidad, en su negación de la razón se

traga lo increíble.

a. El escritor británico Chesterton decía: Desde

que los hombres han dejado de creer en

Page 13: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Dios, no es que no crean en nada. Ahora

creen en cualquier cosa.

6. La explosión del esoterismo, las creencias ocultas, la

astrología, la cartomancia, la quiromancia, la videncia,

las cartas astrales, la cábala, la alquimia, y un largo

etcétera.

a. Se estima que tan sólo en Madrid existen

más de 3000 brujos registrados. Muchos de

ellos se anuncian en la radio, la televisión y

la prensa.

b. En España no hay programa radiofónico y

muchos televisivos que se precien que no

tengan su brujo/a.

c. Revistas para adolescentes regalan

manuales para ser bruja. Y varios libros

dirigidos al público juvenil ponen de moda la

brujería.

7. Nuestra sociedad se vuelve cada vez más receptiva a

las soluciones de tipo mesiánico y fanático.

8. Rebrote de lo satánico.

9. Explosión de las sectas.

10. La seducción de la espiritualidad de tipo oriental.

11. La fascinación por lo extraterrestre. Recordemos las

películas Expediente X (X FILES).

12. Las nuevas religiones. La religiosidad secular:

Page 14: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

a. La música

b. El deporte

c. El culto al cuerpo

d. La ecología

e. El consumo

13. La emoción, los sentimientos controlan y se vuelven

centrales en la experiencia religiosa. Esto afecta

incluso al cristianismo:

a. Vivencia emocional.

b. Fe a la carta. Hecha a la medida de cada

uno.

c. Fe cómoda. Sin compromiso, fuerza o

relevancia cultural o social.

(1) Dios es un Dios que no exige, más

bien ofrece y da.

(2) Las circunstancias, la motivación, las

ganas son muy importantes

d. Fe alejada de las instituciones.

e. Carente de confianza en los líderes.

Page 15: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

RETRATO ROBOT DE JOSÉ MARÍA

AZNAR, UN ADOLESCENTE

POSTMODERNO

Este documento trata de presentar el retrato robot de un joven

evangélico postmoderno. Al elaborarlo hemos intentado plasmar 17

características. Queremos invitarte a que lo leas y trates de

identificarlas. Sin embargo, lo más importante es que al leerlo pienses

en los jóvenes de tu iglesia local, especialmente en los adolescentes, y

trates de ver hasta que punto este retrato robot refleja la realidad,

total o parcial, de la juventud con la que estás trabajando.

El propósito final es ayudarte a entender un poquito mejor cómo son y

cómo piensan esos jóvenes con los que has de llevar a cabo tu

ministerio y, que implicaciones ha de tener para tu pastoral juvenil.

Buen viaje exploratorio. FÉLIX ORTIZ, director de AVENTURA

José María tiene 16 años y está estudiando secundaria. Ha nacido en

una familia evangélica y desde su más tierna infancia acude a la iglesia

junto con sus padres. También asiste a las actividades del grupo de

jóvenes. Su situación está a medio camino entre la integración y la

marcha. No es uno de los jóvenes más fieles del grupo pero va

asistiendo.

Page 16: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

José María podría dar las respuestas correctas a las preguntas con

relación a la fe y la experiencia cristiana. Sin embargo, su

conocimiento es bastante teórico. La iglesia le aburre y no le dice gran

cosa. No tiene una actitud negativa hacia Dios, pero lo percibe como

una realidad bastante lejana y distante de su situación cotidiana. Los

cultos se le hacen largos y pesados. Uno sabe con bastante exactitud

lo que va a suceder cada domingo.

A veces, por las noches, en la quietud de su cuarto piensa en Dios. Le

gustaría experimentar a Dios. Siempre ha oído que Jesús es un amigo

que está cerca de ti y nunca te deja. Sin embargo, nunca ha

experimentado a Dios en su vida. ¿Por qué Dios se esconde? ¿Por qué

es tan difícil conocerlo? Tiene un temor hacia el Señor, temor que le

viene de su educación familiar y vinculación con la iglesia. Varias veces

le ha pedido a Dios que sea su amigo. Pero para ser honestos, no ha

visto ningún cambio significativo en su vida.

Los adultos de la iglesia no han ayudado demasiado a hacer a Dios una

realidad cercana en su vida. Algunos domingos, mientras el pastor

predica, su mente vaga y piensa en la gente de su congregación. Le

cuesta ver una diferencia entre ellos y el resto de la gente. En su

opinión, son igual que el resto. La única diferencia significativa es que

los domingos no van al campo o a la playa.

Sabe que la Biblia es la Palabra de Dios, pero le cuesta un montón

leerla. A veces lo ha intentado, pero no la entiende y no sabe cómo

relacionarla con sus necesidades y las situaciones que vive en la vida

cotidiana.

Page 17: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Le gusta pasar tiempo en Internet. De hecho, es un auténtico experto.

Encuentra fabulosas las oportunidades que este medio le brinda.

“Chatea” con gente de medio mundo gracias a sus conocimientos del

inglés. Sus padres no siempre están en casa debido al trabajo, por

consiguiente, tiene una gran libertad de acción y puede pasar si quiere

un par de horas diarias conectado y navegando por la red.

Ha visitado en varias ocasiones páginas pornográficas. Está asombrado

de la cantidad de situaciones sexuales que existen y que desconocía.

En ocasiones, al visitar algunos sitios con contenido sexual explícito se

ha sentido asqueado de las perversiones que se pueden encontrar en

la red. Sin embargo, el morbo, la tentación y las hormonas hacen que

una y otra vez vuelva a esas páginas. Ha visto tanto y en tan poco

tiempo que se considera a sí mismo con bastante experiencia en el

campo de la conducta sexual. Por cierto, está muy enfadado por el

cierre de Napster. Se ha consolado encontrando otras varías páginas

donde puede descargar archivos musicales.

Los vídeo juegos y la televisión son también grandes pasiones para

José María. La supervisión paterna no siempre es la más adecuada. De

hecho, en casa, puede ver casi todo, a excepción, eso sí, de películas

con contenido sexual explícito. Pero bueno, para eso tiene Internet. Le

gustan las películas de acción, cuanto más violentas mejor. En

ocasiones, sus padres se alarman por la crudeza de las imágenes de

algunas películas. Pero su horror dura poco y nunca ha pasado de la

indignación momentánea. Cuando sus padres le llaman la atención por

la crudeza y violencia de las películas, José María siempre piensa en

cómo reaccionarían si vieran algunos de los video juegos violentos que

tiene en la computadora.

Page 18: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Sus series y dibujos animados favoritos son producidos en América del

Norte, pero también le gustan algunas creaciones japonesas manga.

La mayoría de su música –a excepción de algunos grupos locales- está

en inglés. No la entiende en su mayor parte pero le gusta como suena.

José Maria se sorprendería de cuán similar es y cuantas cosas tiene en

común con jóvenes de otros países y continentes. Aunque a través del

“chat” ya empieza a ser bastante consciente de ello.

Sus mejores amigos están en la escuela secundaria donde asiste. Alex,

cuyos padres están divorciados. Raquel, que vive sola con su madre

desde que ésta se separó. Carlos, que vive con dos hermanastros con

quienes se lleva fatal. Su padre se volvió a casar tras el divorcio y le

trajo a casa el regalo de sus dos hermanastros. Joaquín, con quien a

veces José María comenta en plan de broma que ellos dos son los

únicos que tienen una familia normal. Por último está Juana, que

sorprendió a todos el pasado verano declarándose abiertamente

lesbiana y enamorada de una compañera de la escuela.

La declaración de Juana abrió un gran debate en el seno del grupo de

amigos. Muchos no están de acuerdo y consideran que los muchachos

han de tener relaciones sexuales con las muchachas. Otros, consideran

que cada uno ha de hacer lo que el cuerpo le pide. La mayoría

consideran que es una opción personal que cada cual ha de tomar.

José María, por ejemplo, nunca optaría por un estilo de vida

homosexual pero respeta y considera que es una decisión que incumbe

tan sólo a Juana. Los padres de José María no pueden entender esa

actitud. En una conversación de sobremesa le explicaran claramente a

José María lo que la Biblia decía al respecto y como Dios condenaba la

Page 19: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

conducta homosexual. Aquello no pareció afectar demasiado a nuestro

amigo. Insistió una y otra vez que él lo tenía muy claro y pensaba

seguir lo que la Biblia enseñaba, pero ¿Cómo podía juzgar la decisión

de Juana? Ella no hacía daño a nadie y era una decisión personal en la

que nadie podía meterse.

El padre de José María insistió en que la Biblia afirma que la

homosexualidad es pecado y, por tanto, lo es para todo el mundo. La

Palabra de Dios es la norma de moral que Dios ha dado a la

humanidad. Es clara y tajante al enseñarnos lo que es bueno y es

malo.

José María no puede entender como su padre es tan cerrado y poco

tolerante con sus amigos. Cada uno ha de ser coherente con lo que

piensa y no preocuparse por lo que los demás creen. Lo cierto es que

todo esto le crea a José María bastante confusión. Cuando sus amigos

le pregunta por qué deja de hacer ciertas cosas o hace ciertas otras,

no tiene una argumentación muy clara que presentarles.

De hecho, todavía le da vueltas una y otra vez en su cabeza la

pregunta de Joaquín acerca de por qué el cristianismo es la única

religión verdadera y todos los demás están equivocados. Su amigo

considera que es muy bestia el hacer una afirmación de ese tipo.

Joaquín no entiende cómo José María puede ser tan tajante y con una

sola frase dejar fuera de juego a millones y millones de personas que

creen de forma diferente y se esfuerzan por vivir de forma honesta su

fe. El propio Joaquín procede de una familia católica, aunque no

excesivamente practicante, y considera, por tanto, ofensivas hacia sus

Page 20: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

padres las pretensiones de José María de que sólo los evangélicos

poseen la verdad.

La última preocupación de José María tiene que ver con las relaciones

sexuales. Los amigos discutieron acerca de tener relaciones, no sólo

antes de estar casados, sino incluso con un muchacho o muchacha con

quien no tienes ningún compromiso pero los dos están de acuerdo.

Aquel día José María estuvo especialmente callado. La razón, no sabía

que decir ni cómo argumentar. Estaba muy confundido y no podía ver

con claridad cuál y por qué era la postura cristiana.

José María no tiene héroes. Las personas que él y sus amigos admiran

son gente popular del mundo del deporte, la música y el espectáculo.

Sin embargo, no son auténticos héroes. Más bien, muchos de ellos son

antihéroes ya que sus vidas dejan mucho que desear desde el punto

de vista ético y moral. Incluso, en algunos casos, su inmoralidad

añade más morbo a su personalidad. No hay en la iglesia nadie que

realmente desafíe su vida y sea un buen modelo a imitar. Jorge, el

líder de jóvenes, podría serlo. El pobre, sin embargo, está demasiado

ocupado y lleno siempre de actividades.

Page 21: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

LOS RETOS DE LA POSTMODERNIDAD I

EL RELATIVISMO

El RELATIVISMO, lo que se ha venido a llamar LA NUEVA

TOLERANCIA y finalmente el PLURALISMO son los tres grandes

desafíos que plantea la postmodernidad al trabajo con los

adolescentes, tanto en el contexto de la iglesia local como fuera de ella

al intentar ganar a los muchachos y muchachas no cristianas.

Como líderes es muy importante para nosotros, en primer lugar,

entender el significado de estos tres retos. En segundo lugar, entender

cómo afectan a los jóvenes con los que estamos trabajando y, por

último, que implicaciones se derivan a la hora de llevar a cabo la

pastoral juvenil.

En este artículo abordaremos el relativismo, el primero de estos

grandes retos. En sucesivos artículos iremos desarrollando los otros

retos y la manera de afrontarlos.

Deseamos que este artículo pueda ser de gran utilidad para todos los

líderes.

Page 22: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

EL RELATIVISMO

I. DEFINICIÓN

La Enciclopedia Filosófica Garzanti define del siguiente modo el

relativismo:

Término con el que se puede calificar toda concepción filosófica

que no admita verdades absolutas en el campo del conocimiento

o principios inmutables en el ámbito moral.

De esta definición se implica que existen dos ámbitos básicos en el que

se desenvuelve el relativismo: el epistemológico o del conocimiento y

el de la moral.

El diccionario, por su parte, define el relativismo con las siguientes

palabras:

Una perspectiva que afirma que las verdades éticas dependen

tan sólo de los individuos o grupos que las aceptan.

Dicho de una manera más simple: “Es bueno para ti pero no

necesariamente para mí. Yo no negaré que lo sea para ti pero no

trates de imponérmelo y obligarme a aceptarlo como bueno para mí”.

Page 23: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Como veremos más adelante al hablar de la tolerancia, el relativista ve

la moralidad como algo totalmente abierto a la interpretación de cada

individuo. Lo correcto o incorrecto en la visión del relativista está

sujeto a cambio según las personas, o según las circunstancias dentro

de una misma persona. El relativista, como ya se indicó anteriormente,

puede sostener ideas contradictorias acerca de la moralidad y la ética

y no considerar que su contradicción sea un disparate. Véase a modo

de ejemplo la afirmación hecha por el antropólogo español Tomás

Calvo Buezas:

Del integrismo de hace unas décadas pasamos hace unos años a

un relativismo -inicialmente sano- que pareció instalarse en

nosotros. Pero ahora se ha comprobado que es importante

contar con algunos puntos de referencia y educar a los jóvenes

en un sistema de valores. Esto no supone que haya una vuelta al

pasado sino a unos valores que cada uno toma y selecciona a la

carta, como si fuera un menú.

II. EL FIN DE LA VERDAD OBJETIVA

La modernidad pretendía que los seres humanos tenían a su alcance la

habilidad para descubrir de forma racional la verdad y aplicar esas

verdades a situaciones éticas y morales. Se partía de la base que el

conocimiento podía tener las siguientes características:

• Ser cierto. Es decir, ser correcto y absoluto de forma esencial.

Page 24: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

• Ser objetivo. Es decir, podía ser visto y analizado al margen

de la personalidad.

• Ser bueno. Es decir, la ciencia y el conocimiento combinados

tendrían un poder liberador y restaurador del ser humano.

La postmodernidad acabó con ese sueño. Afirma la imposibilidad de

conocer cualquier verdad objetiva, ya que nosotros mismos, como

observadores estamos viciados de subjetividad.

Toda “realidad” es meramente una construcción cultural y social.

Aunque teóricamente el postmoderno pueda aceptar la existencia de la

verdad absoluta, en la práctica no acepta que nadie pueda encontrarla

y tener una mínima comprensión de la misma. Las implicaciones de

estas afirmaciones son claras:

• Como mucho podemos aspirar a conocer partes de la

realidad.

• Como mucho, nuestras creencias deberían ser consideradas

en un estado de precariedad, ya que son únicamente teorías

temporales.

• Todas las afirmaciones son hechas en base a la fe. Por tanto,

ninguna afirmación puede tener una prioridad, precedencia o

superioridad sobre otra.

• Cualquier afirmación de poseer la verdad con mayúscula es

totalmente ridícula.

• Quien intente imponer sus puntos de vista sobre otro es un

ser despreciable.

• La tolerancia, como veremos más adelante, se convierte en la

principal virtud social.

Page 25: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

El descubrimiento de la Teoría de la Relatividad ha creado un montón

de problemas para toda la física basada en las premisas de Newton y

en la creencia de la existencia de una teoría que pudiera explicar

absolutamente todo. La física cuántica se mueve en el terreno de las

contradicciones, donde la luz puede ser descrita como ondas o

partículas en función de cómo sea observada, lo cual, es una total y

absoluta contradicción. Sin embargo, ha destruido los cimientos del

pensamiento cartesiano.

Según el escritor Codrington hay tres grandes componentes dirigiendo

el gran cambio de la modernidad a la postmodernidad:

• La ruptura de las creencias y la pérdida de un consenso

universal acerca de lo que es verdadero y lo que no lo es.

• El nacimiento de una cultura global. Conforme las

cosmovisiones son más conscientes de la existencia de

otras cosmovisiones se produce la negativa, no sólo a

aceptar ninguna de ellas como absolutamente verdadera,

sino incluso la posibilidad de encontrar un método o forma

de decidir entre los valores relativos de los diferentes

sistemas.

• Una creciente polarización entre las partes con relación a

diferentes temas morales, filosóficos, educativos y

culturales.

III. LA DESAPARICIÓN DEL CONSENSO CULTURAL

Page 26: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

No hace demasiado tiempo la mayoría de las personas en los países de

cultura occidental sabían con total y meridiana claridad qué era

correcto y qué era incorrecto. Ambas cosas estaban muy bien

delimitadas y su conocimiento al alcance de cualquiera. Eso no

significaba que todo el mundo siguiera lo correcto ¡Naturalmente que

no! Siempre ha habido personas que han decidido vivir al margen de la

legalidad y la moralidad. Pero estas personas sabían perfectamente de

qué lado vivían.

La sociedad reconocía que existían unos valores morales absolutos por

los cuales se regía. Esto era posible porque existía un consenso

cultural acerca de esos valores. Dicho consenso era provisto por la fe

cristiana que convertía la moralidad pública y privada en una única

cosa. Durante siglos, en occidente, el cristianismo proporcionó los

valores sobre los que se edificó la sociedad.

Sin embargo, eso ya no es cierto. El consenso cultural que el

cristianismo proporcionaba ya no funciona. Los valores de la cultura

judeocristiana ya no son los que fundamentan nuestra sociedad. Es

cierto que esto se da con mayor intensidad en algunas culturas que en

otras. Es cierto que la ruptura de ese consenso es más fuerte en

Europa Occidental y Estados Unidos que en otros países. Sin embargo,

parece ser un fenómeno irreversible en toda la cultura occidental.

Al respecto y de manera profética Francis Schaeffer, el gran filósofo

cristiano, en fecha tan temprana como el año 1984 escribió lo

siguiente en su libro El gran desastre evangélico:

Page 27: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

No existe una edad de oro en el pasado que podamos idealizar –

Ya sea en los años tempranos de los Estados Unidos, la Reforma

o la iglesia primitiva. Pero hasta hace muy pocas décadas existía

algo que correctamente podía ser denominado un consenso

cristiano que dio de un modo definitivo una forma distintiva a la

sociedad occidental y a los Estados Unidos. Ahora, ese consenso

se fue para siempre y las libertades que trajo se destruyen ante

nuestros ojos. Estamos en un tiempo en el que el humanismo

está llegando a su conclusión natural en moralidad, valores y

legislación. Lo único que la sociedad tiene hoy en día son valores

relativos basados en resultados estadísticos, o la decisión

arbitraria de aquellos que tienen el poder político o legal.

¿Cuál es el resultado del rompimiento de dicho consenso? Relativismo.

Un relativismo que entre formas se expresa de la siguiente manera:

• La experiencia es la medida última de todo significado.

• Lo correcto y lo correcto es diferente y arbitrario para cada

persona.

• La moralidad y la ética son una cuestión de gustos personales y

preferencias individuales.

• No hay manera objetiva de decidir lo que es correcto e

incorrecto. Dos personas pueden definirlo de forma, no sólo

diferente, sino incluso contradictoria y ambos ¡Tener razón!

• Naturalmente, ninguna opción es mejor o más válida que otra.

IV. EL RELATIVISMO CULTURAL

Page 28: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

¿Bajo que bases se puede culpar a los talibanes por la forma en que

trataban a las mujeres en Afganistán? ¿Quién puede afirmar que la

práctica de la oblación –mutilación del clítoris llevada a cabo entre las

niñas de muchos países de religión musulmana- sea ago incorrecto?

El relativismo cultural afirma que una cultura o sociedad define lo que

es correcto o incorrecto para las personas que forman parte de la

misma. Dicho de una manera llana, la moralidad es una construcción

social llevada a cabo por los miembros de un determinado grupo

social. Consecuentemente sólo obliga a los que voluntariamente

forman parte del mismo.

Parece coherente ¿verdad? Un grupo o cultura se pone de acuerdo

acerca de lo que sus miembros consideren correcto e incorrecto y

definen sus propios límites. Al ser algo dado por los mismos miembros,

estos límites pueden ser cambiados cuando el interés general o

simplemente la mayoría así lo determinen.

Naturalmente un grupo diferente no tiene porque aceptar ni considerar

válidos los criterios y los límites de otro grupo. Así, en el año 1994 se

celebró una conferencia mundial sobre los derechos humanos. La

conferencia estaba patrocinada por las Naciones Unidas. Varios países

asiáticos, entre ellos China, protestaron por las presiones recibidas de

los países occidentales para que se respetaran los derechos humanos

en aquellos países. Su argumentación fue la siguiente: “Los derechos

humanos son un concepto occidental. En oriente las cosas se

entienden de una forma diferente. ¿Qué derecho tienen los países

occidentales a decirnos cómo hemos de organizar nuestras

Page 29: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

sociedades?” el razonamiento de estos países es impecable y

demuestra los límites del relativismo cultural: los valores tan sólo son

válidos para los grupos que los aceptan, pero carecen de fuerza moral

para aquellos que los rechacen por la razón que sea.

Si no hay verdades absolutas. Si la moralidad es algo que un grupo

humano se otorga a sí mismo, entonces no existe ninguna base lógica

ni racional por la cual un grupo pueda emitir un juicio sobre los valores

de otro colectivo humano simplemente porque son contrarios,

diferentes o injustos desde su perspectiva.

Vistas así las cosas no hay base humana racional para hacer un juicio

negativo de los talibanes o sobre la oblación ¿Quiénes somos nosotros

–gente externa y ajena a su cultura- para poder emitir juicios? A este

respecto, Josh McDowell en su libro The New Tolerance menciona la

increíble contradicción que tuvo que asumir una escritora feminista,

atrapada entre su feminismo y su relativismo, al tener que hacer una

valoración de la ya mencionada práctica de la oblación. He aquí el

resultado:

¿Cómo puedo yo argumentar contra una cultura que ni siquiera

he tratado de entender? ¿Es relevante que yo, que soy una

extraña, pueda encontrar dicha práctica cruel? A pesar de lo

duro que me resulta admitirlo, la respuesta es no.

Naturalmente sobran todos los comentarios.

Concluimos el apartado del relativismo cultural con una frase del

escritor y pensador cristiano Gene Edward quien al referirse a un

Page 30: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

hipotético enfrentamiento entre los valores opuestos de dos grupos

diferentes escribe lo siguiente:

La sociedad no está sujeta a la ley moral, construye la ley moral.

Si no hay absolutos, la sociedad presumiblemente puede

construir cualquier valor que quiera y ella misma no estar sujeta

a ninguno. Todos los temas son tan sólo una cuestión de poder.

Sin absolutos morales el poder se convierte en arbitrario. Puesto

que no existe una base para la persuasión moral o la

argumentación racional, el bando con más fuerza o poder gana.

La fuerza se convierte en el único remedio para resolver los conflictos

entre los valores sostenidos por grupos diferentes cuando estos

valores son enfrentados o contradictorios. La fuerza hace que el

ganador esté en lo correcto y el perdedor en lo incorrecto. Se

convierte pues en una auténtica ley de la selva. Un imperio del más

fuerte.

PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR

1. ¿De qué forma el relativismo afecta a la manera en que nuestros

jóvenes piensan y viven?

2. ¿Cómo el relativismo afecta al concepto de bien y mal?

3. ¿Cómo el relativismo afecta al concepto de pecado?

Page 31: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

4. Si lo bueno y lo malo depende de la persona y el momento ¿Cómo

podemos ayudar a los jóvenes a tomar decisiones morales? ¿Cómo

podemos ayudarles a entender el concepto de pecado?

5. En tu opinión ¿Qué dificultades y/o retos plantea el relativismo a la

pastoral juvenil? ¿Qué puede hacerse para contrarrestarlos?

Page 32: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

LOS RETOS DE LA POSTMODERNIDAD II

LA NUEVA TOLERANCIA

En el anterior artículo desarrollamos el tema del relativismo y lo vimos

como uno de los principales retos que nos plantea la postmodernidad a

la hora de trabajar con los adolescentes. En este nuevo artículo

abordaremos un nuevo desafío: la llamada nueva tolerancia.

LA NUEVA TOLERANCIA

I. INTRODUCCIÓN

La tolerancia es la segunda gran fuerza que moldea a la nueva

generación de jóvenes en nuestros países de cultura occidental.

Josh McDowell en su libro The New Tolerance describe de una manera

magistral la forma en que en los últimos años el concepto de

tolerancia ha ido cambiando en nuestra sociedad. McDowell utiliza para

ello dos términos. La nueva tolerancia en contraste con la tolerancia

tradicional.

Page 33: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

El diccionario describe la palabra tolerancia como “respeto a las ideas,

creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias

a las propias”. La idea que transmite esta definición es la necesidad de

expresar respeto y buscar la protección de los legítimos derechos de

otras personas. Incluso, con los de aquellos con los que no estamos de

acuerdo.

Podemos creer que determinadas religiones son falsas y están

equivocadas, no están en posesión de la verdad. Sin embargo,

podemos defender el derecho de todo ser humano a la libertad

religiosa. A creer conforme a su conciencia. Además, sostener este

derecho para aquellos que creen de manera diferente a como nosotros

creemos o concebimos la fe.

Todo el mundo tiene derecho a tener su propia opinión, creencias y

estilos de vida, siempre que estos se encuentren dentro de los límites

que permiten las diferentes legislaciones. La tolerancia tradicional

quedaría bien reflejada en la frase de aquel parlamentario que en

respuesta al discurso de un contrincante político afirmó: “Estoy en el

más total y absoluto de los desacuerdos con usted y sus ideas. Ahora

bien, daría mi vida para que usted pudiera expresarlas”.

La tolerancia tradicional siempre ha buscado y expresado una

valoración del individuo, una aceptación y respeto hacia el mismo sin

que ello implicara necesariamente una aprobación o participación de

sus creencias y/o conductas.

Page 34: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

II. LA NUEVA TOLERANCIA

La nueva tolerancia es la hija predilecta del relativismo que ha traído

consigo la postmodernidad. La verdad es una construcción social

relativa a la comunidad en que una persona participa.

Puesto que existen muchas comunidades humanas existen muchas

verdades diferentes. Hay muchas percepciones diferentes e incluso

contradictorias de la realidad, por tanto, ninguna de ellas puede ser

verdadera en el sentido último del término.

La verdad es descrita por el lenguaje y todo lenguaje es creado y

construido por los seres humanos, por lo tanto, y como conclusión

lógica, toda la verdad es una construcción humana.

Los postmodernos afirman que ya que todos miramos con ojos

diferentes y, no hay manera humana de afirmar que ni siquiera vemos

los mismos colores, mucho menos la misma realidad, no puede existir

algo como la verdad objetiva. Toda realidad es filtrada a través de los

sentidos del individuo que transmiten todas las experiencias

sensoriales de una forma subjetiva. Ni siquiera estar en el mismo lugar

al mismo tiempo, observando el mismo evento nos garantiza una

idéntica respuesta. Un ejemplo para ilustrar esta realidad serían dos

personas observando un mismo juego de béisbol. Pensemos por un

Page 35: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

momento en que una de ellas es un auténtico experto. Por el

contrario, la otra carece totalmente de conocimiento del juego y sus

reglas. ¿No estarían experimentando la misma realidad de una forma

diferente?

¿A qué conclusión lógica nos lleva todo esto? Muy sencilla, si toda

verdad es creada por los seres humanos, y todos los seres humanos

son iguales, entonces todas las verdades son iguales. El filósofo

español Fernando Savater lo explica de la siguiente manera:

Todas las opiniones son iguales. Cada una tiene una contribución

que llevar a cabo, todas deberían ser respetadas o alabadas.

Esto implica que no existe una manera racional de discernir

entre ellas.

En su libro antes citado, Josh McDowell hace referencia a la definición

que de la nueva tolerancia hace el escritor T. A. Helmbock. Este

pensador dice lo siguiente:

Todas las creencias, valores, estilos de vida y percepciones de la

verdad de cualquier individuo son iguales. No hay jerarquía de

verdades. Tus creencias y mis creencias son iguales y toda

verdad relativa.

El escritor cristiano Josh McDowell hace el siguiente comentario a las

palabras de Helmbok:

Page 36: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Todo el mundo tiene derecho a sus creencias. Además, todas las

creencias son iguales. Todos los valores son iguales. Todas las

verdades son iguales.

Ahora bien, para cualquier observador de la realidad es evidente que

no todas las verdades, valores y creencias son iguales ni tienen el

mismo valor. Mucho menos que merezcan el mismo respeto y

consideración. ¿Pueden ser considerados al mismo nivel el racismo y la

fe cristiana? ¿Podemos poner al mismo nivel a los que practican el

terrorismo indiscriminado y a sus víctimas? ¿Son igualmente válidos

los valores que sostiene la Madre Teresa de Calcuta y los que

sostienen los grupos islámicos extremistas?

Nosotros podríamos afirmar sin ningún empacho que no. Sin embargo,

otra de las características de la postmodernidad es sostener puntos de

vista aparentemente contradictorios y no sentir la más mínima

aprensión al respecto.

Vive y deja vivir es el lema de estos tiempos. Permite que cada

persona tome sus propias decisiones con respecto a lo que es correcto

e incorrecto.

Ahora bien, la nueva tolerancia va un paso más allá en sus

pretensiones. No es suficiente con que cada persona tenga la libertad

para tomar las decisiones que considere más adecuadas en cuestiones

de moralidad, ética y conducta. No basta con tener la posibilidad de

decidir por uno mismo acerca del bien y del mal. Los defensores de la

nueva tolerancia exigen de los demás alabanza y el reconocimiento

Page 37: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

explícito de que sus creencias, valores y opciones son tan válidos como

los nuestros.

Expresado con total y meridiana claridad y contundencia. Hoy en día

para ser auténticamente tolerante –siempre de acuerdo con la nueva

tolerancia- uno debe aprobar, apoyar y sinceramente refrendar

las creencias, valores y estilos de vida de los demás. Este es el

más paso más allá al que nos ha llevado la nueva tolerancia.

No solamente todas las verdades son válidas. También lo son todos los

valores y todos los estilos de vida. Nadie puede ni siquiera osar emitir

un juicio sobre la forma en que otras personas decidan vivir su vida.

Contrariamente todo el mundo debería activamente apoyar las

opciones vitales tomadas por otros.

Para el cristiano en general y la juventud en particular la nueva

tolerancia plantea serios cuestionamientos. ¿Cómo puede un joven

tomar decisiones morales si todas las opciones y posibilidades son

igualmente válidas? ¿Cómo es posible discernir cuál puede ser la mejor

opción, la más correcta desde el punto de visto moral y ético? ¿Cómo

podemos hacer ningún tipo de juicio o valoración sobre las creencias,

valores o estilos de vida de otras personas? ¿En base a qué? Si todas

las opciones son igualmente válidas ¿Cómo vamos a evangelizar si la

noción de pecado desaparece totalmente?

Page 38: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

III. NUEVA TOLERANCIA E IDENTIDAD

El paso anteriormente descrito es muy importante y tiene tremendas

implicaciones para el cristianismo y nuestra labor de cumplimiento de

la Gran Comisión. Para poder comprender esta transición es necesario

que entendamos cómo es percibida la cuestión de la identidad en la

postmodernidad.

En la postmodernidad desaparece totalmente la diferencia entre lo que

una persona es y aquello que la persona hace, cree o los valores que

la misma sostiene en la vida. Consecuentemente, mi identidades

inseparable de lo que hago, pienso y creo. Mi identidad personal está

en completa simbiosis con mi cultura y mi conducta. La separación

forma parte de la visión de la tolerancia tradicional. Las implicaciones

que esto tiene son claras:

• Si juzgas mis creencias, valores o estilo de vida me estás

juzgando a mí mismo.

• No hay diferencia posible entre lo que soy y aquello que

pienso y hago.

• Si no puedes aceptar mi estilo de vida eres intolerante

conmigo. La vieja afirmación de “odiar el pecado pero

compadecer al pecador” es imposible. Odiar mi estilo de vida

es odiarme a mí. Yo soy la manera en que vivo.

El político francés Edgard Pisan, mencionado por Josh McDowell, hace

la siguiente afirmación:

Page 39: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

La intolerancia… no es simplemente la falta de un sentido de

solidaridad con otras personas: es el rechazo de otros por lo que

son, por lo que hacen, por lo que piensan y, eventualmente,

simplemente porque existen.

La implicación de las palabras de Pisan son muy evidentes. Eres

intolerante si no me aceptas tal y como soy y no valores lo que hago.

La falsa premisa en la que se basa la nueva tolerancia es la siguiente:

lo que hago representa lo que soy.

En función de esta premisa nosotros no podemos condenar la

homosexualidad de una persona y al mismo tiempo mostrar amor y

aceptación incondicional por la misma. Al emitir un juicio sobre su

homosexualidad estamos lanzando un juicio sobre la misma esencia de

la persona y, por tanto, condenándola.

Las personas postmodernas no distinguen, no pueden hacerlo por

haber sido educadas bajo el paradigma de la nueva tolerancia, entre

los juicios emitidos contra su conducta y los juicios emitidos hacia ellos

como personas. Lo uno implica a sus ojos necesariamente lo otro. Aquí

se produce uno de los grandes conflictos de comunicación entre las

personas educadas bajo uno y otro paradigma. Mientras unos piensan

que aman y aceptan incondicionalmente a los otros, a pesar de que

puedan condenar sus conductas. Estos últimos reciben como una

condena y una falta de amor y aceptación incondicional cualquier tipo

de comentario, valoración o juicio sobre su estilo de vida. Es imposible

la comunicación porque las mismas palabras están cargadas de un

valor semántico totalmente diferente.

Page 40: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

La tolerancia se convierte en la única virtud auténticamente universal.

Consecuentemente es intolerante cualquiera que afirme o, tan siquiera

pretenda, no el poseer una verdad universal y objetiva, sino incluso

aquel que tenga la desfachatez de afirmar la existencia de algo así. No

olvidemos que cualquier pretensión de objetividad, absolutismo o

dogmatismo será considerada como intolerancia. Las palabras del

profesor de filosofía Deslié Armour expresan con total claridad la

importancia de la tolerancia como la virtud más elevada a la que se

puede aspirar:

Nuestra idea es que ser un ciudadano virtuoso es ser alguien que

lo tolera todo excepto la intolerancia.

No perdamos de vista que el afirmar tener la verdad absoluta o

afirmar que otros pueden estar equivocados en sus creencias o estilos

de vida es un síntoma evidente y agresivo de intolerancia.

¿Nos cuesta ver las implicaciones que eso tiene para la fe cristiana?

Jesús afirmó ser el camino la verdad y la vida. Declaró que nadie podía

acercarse al Padre si no era a través de Él. Jesús pretende ser el único

que puede dar vida eterna y dice sin ambages que es Dios. La Palabra

de Dios se declara competente para emitir juicios no únicamente sobre

las conductas de las personas, sino también sobre las intenciones de

sus corazones. El cristianismo es políticamente incorrecto y sus

pretensiones dogmáticas de ser la única religión verdadera son

totalmente intolerables y un signo rabioso, abierto, agresivo y violento

de intolerancia hacia todos aquellos que no encajan en su estrecho

molde.

Page 41: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

McDowell en su libro acerca de la tolerancia menciona la experiencia

sufrida por un estudiante de la Universidad de Stanford en California:

Recientemente, un decano de la Universidad de Stanford

comenzó a presionar a los grupos cristianos evangélicos para

que pararan su práctica de “hacer proselitismo entre los otros

estudiantes”. Irónicamente, lo que enfadó al decano no fue el

contenido del mensaje que estaba siendo compartido, sino la

práctica de compartirlo en sí misma. El cree que con el simple

hecho de aproximarse a alguien con el Evangelio, uno está

implicando que las creencias de esa persona son inferiores a las

propias. Tal implicación es inaceptable porque está llena de

prejuicios e intolerancia.

McDowell indica que hay cuatro elementos en la misma esencia de la

fe cristiana que la convierten en intolerante a los ojos de los

defensores de la nueva tolerancia. En primer lugar la Palabra de Dios.

Los cristianos creemos que la Biblia es la Palabra inspirada dada por

Dios al ser humano. Creemos que en ella se encuentra claramente

definida toda noción de lo correcto y lo incorrecto y, por tanto, los

seres humanos pueden construir sus vidas y culturas sobre la misma.

En segundo lugar esta la persona de Jesús y la cruz de Cristo. Ya

hemos hablado anteriormente sobre las declaraciones exclusivas y

excluyentes de Jesús. La cruz es un signo de intolerancia porque

abierta y claramente expresa y representa las afirmaciones

contundentes del Maestro de Nazaret.

Page 42: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

En tercer lugar está la doctrina del pecado. En la Biblia se especifican

muchas conductas y actitudes de los seres humanos como

pecaminosas y, por tanto, reprobables. Pero con los principios de la

nueva tolerancia nadie puede emitir juicios morales sobre las

conductas de otras personas sin ser considerado intolerante.

Finalmente nos encontramos con la misión de la Iglesia. La iglesia está

llamada en la Gran Comisión a llevar el mensaje de salvación a todas

las naciones. La labor de hacer discípulos es considerada como

intolerancia por los practicantes y abogados de la nueva tolerancia. La

premisa de que las personas deben ser cambiadas de su “errónea”

manera de vivir es inaceptable.

IV. LAS CONSECUENCIAS DE LA NUEVA TOLERANCIA

A. La muerte de la verdad

La verdad con mayúsculas ya no existe. Como hemos dicho por activa

y por pasiva la verdad es una construcción personal y social. No hay

tal cosa como la verdad objetiva y, por tanto, esta no puede ser

conocida.

B. La muerte de la moralidad

Page 43: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Del mismo modo que no hay absolutos en el terreno de la

epistemología tampoco los hay en el terreno de la ética y la moral.

Como la verdad, ambas cosas son meras construcciones culturales y

sociales. Cada uno debe de tomar sus propias decisiones con relación

a lo que es correcto o incorrecto.

C. La muerte de la justicia

El escritor Don Closson dice con relación a las implicaciones que la

nueva tolerancia tiene para la justicia:

Mientras que los abogados de la nueva tolerancia pueden de

manera ocasional hacer alguna mención a la justicia, ésta no

puede ser la base o cimiento para su movimiento. Para que

alguien pueda afirmar que ciertas acciones o palabras son

injustas, debe asumir que un cierto orden moral –aparte de uno

mismo- realmente existe. La injusticia implica la existencia de la

justicia, justicia implica la existencia de leyes morales, y las

leyes implican que un dador de las mismas existe.

Con el continuo crecimiento de la nueva tolerancia la idea de justicia

se irá debilitando cada vez más hasta el punto que más y más los

legisladores y los políticos tomarán sus decisiones en base a la presión

de la opinión pública expresado por medio de encuestas de opinión y

estudios sociológicos. Esto significará también el fin de todo tipo de

ideología política. Lo importante no será hacer lo correcto, aunque esto

sea impopular. Lo que contará será hacer aquello que requiere y pide

Page 44: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

la opinión pública, incluso si a los ojos del legislador o gobernante se

trata de algo injusto o incorrecto.

D. La pérdida de las convicciones

Josh McDowell sabiamente indica que la pérdida de todo tipo de

convicciones será otro de los resultados de la nueva tolerancia. Hemos

de reconocer que va a ser más y más difícil para nuestros jóvenes el

sostener ningún tipo de convicciones personales en un contexto en el

que todas las creencias, valores y estilos de vidas son igualmente

válidos. Precisamente una de las consecuencias de la tolerancia y el

pluralismo es la pérdida de sentido de las diferentes opciones. Todas

quedan relativizadas y diluidas.

E. La privatización de la experiencia religiosa

Las manifestaciones religiosas, especialmente las de tipo cristiano,

serán consideradas más y más como muestras de intolerancia y, por

tanto, existirá una presión cada vez mayor por parte de muchos

grupos sociales, políticos e incluso religiosos de otro signo, para que

toda manifestación pública de la fe cristiana sea mantenida

estrictamente dentro de los límites de la esfera personal y privada de

los individuos. La fe será desterrada de la arena pública e incluso los

individuos que públicamente se identifiquen como cristianos pueden

ver en peligro su progreso cultural, social y político. Esto último tiene

todo el sentido si consideramos que el ser cristiano conllevará

automáticamente el ser tildado de fundamentalista, intolerante y

absolutista.

Page 45: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Por otra parte, muchos cristianos aprenderán a autocensurar su fe a

fin de evitarse problemas en la vida pública. Las palabras de Pablo a

Timoteo de que todo aquel que quiera vivir piadosamente habrá de

sufrir persecución, parecen tomar una nueva y actual dimensión a la

luz de la nueva tolerancia.

F. El peligro de la desaparición de los derechos humanos

Una de las expresiones de la nueva tolerancia es el multiculturalismo.

El multiculturalismo vendría a ser a nivel social lo mismo que los

diferentes estilos de vida a nivel individual. De la misma manera que

en una sociedad existen muchos individuos diferentes y cada uno de

ellos tiene derecho a su propio estilo de vida, también a nivel global

existen muchas culturas diferentes que tienen todo el derecho a ser

como son y a impedir el ser cambiadas desde el exterior.

Tiene todo el sentido del mundo ¿Qué derecho tienen una cultura a

juzgar la forma en que otra ha decidido organizarse? Las implicaciones

de esta afirmación pueden ser más peligrosas de lo que a primera

vista uno puede suponer. De hecho, y como se menciona en el

documento sobre el relativismo, muchos países no occidentales están

cuestionando cada vez con más seriedad el concepto de los derechos

humanos por considerarlo una construcción cultural occidental ajena a

las tradiciones culturales propias.

El mundo occidental continúa insistiendo en que la Declaración

Universal de los Derechos Humanos ha de ser un absoluto ético y

moral para todo el planeta. Pero si hemos de ser sinceros dicha

Page 46: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

afirmación carece de cualquier tipo de fundamento lógico a luz de la

nueva tolerancia.

G. El triunfo y la exaltación del sentimiento

La nueva tolerancia, con su nuevo énfasis en la identidad del ser

humano que hemos visto anteriormente, abre un camino para el

triunfo del sentimiento sobre la razón, otra, por cierto, de las

características propias de la postmodernidad. ¿Cómo puede ser

incorrecto lo que yo siento? Poner en duda mis sentimientos

equivaldrá a poner en duda mi propia identidad al emitir juicios sobre

los mismos, lo cual, como ya hemos vistos es una clara señal de

intolerancia.

PREGUNTAS DE REFLEXIÓN

1. ¿En qué se diferencia la nueva tolerancia de la tolerancia

tradicional?

2. ¿Por qué la nueva tolerancia es un serio reto para la pastoral

juvenil?

3. ¿De qué forma la nueva tolerancia condiciona nuestro trabajo con

los jóvenes? Por favor, sé práctico

4. ¿Qué podemos hacer para ayudar a los jóvenes a superar estos

desafíos?

Page 47: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

LOS RETOS DE LA POSTMODERNIDAD III

EL PLURALISMO

En anteriores artículos abordamos el relativismo y la nueva tolerancia

como dos importantes retos que la postmodernidad nos está

planteando. En este artículo estaremos tratando el último de los

grandes desafíos que en nuestra opinión, el mundo postmoderno

plantea al trabajo con los jóvenes y los adolescentes de nuestras

iglesias locales. Vamos a verlo.

I. UNA SOCIEDAD PLURAL

Los padres de los adolescentes actuales fuimos educados en una

sociedad en la que no existía una pluralidad de cosmovisiones o

formas de ver la vida. La cultura judeocristiana era el eje alrededor del

cual los valores públicos y privados se estructuraban. Bien es cierto

que aquella sociedad estaba recibiendo los primeros y potentes

embates del secularismo y estaba en camino de perder su monopolio,

era no obstante la dominante y en ese contexto fuimos educados y

crecimos.

Raramente entrábamos en contacto con personas que tuvieran

una forma de vida o de entender ésta que fuera radicalmente diferente

de la nuestra. Cierto que los católicos diferían de la manera evangélica

de ver la fe, sin embargo, eran variaciones sobre una misma

Page 48: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

cosmovisión. Hoy en día, es mucho más evidente, que hay más

similitudes en la forma de entender la vida de un católico que las que

hay con una persona que no participa de los valores culturales del

cristianismo.

Todo esto ha cambiado drásticamente con la llegada de la

postmodernidad. El pluralismo, la variedad, la heterogeneidad, la

distinción, la diferencia, son algunas de las divisas de los tiempos en

que vivimos. Al contrario del tiempo que hemos descrito

anteriormente, hoy en día, carecemos de un centro unificador y

estructurador que de coherencia y sentido a la totalidad de la vida. A

este respecto, Antonio Jimenez Ortiz en un artículo titulado Cómo

comunicar la fe a la juventud actual escribía:

“Los jóvenes padecen una aguda fragmentación interna, sin una

columna vertebral que sostenga a la persona. La desestructuración

interna genera inseguridad personal, y con frecuencia, una baja

autoestima.”

La pluralidad nos deja a merced de la elección, de la necesidad

de escoger los valores que creamos más adecuados y correctos para

estructurar alrededor de ellos nuestra cosmovisión. Pero al

encontrarnos en un contexto de pluralismo sociocultural, vemos que se

presentan ante nosotros, múltiples sistemas de valores en abierta

competencia por conseguir nuestra lealtad y compromiso.

El pensador cristiano Os Guiness afirma que el pluralismo lleva a

una relativización de todas las opciones. Todo, afirma este escritor,

acaba convirtiéndose en una cuestión de opciones o elecciones

personales. Efectivamente, cuando múltiples visiones del mundo se

Page 49: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

enfrentan y reclaman nuestro afecto y atención, todas quedan

relativizadas, y las personas ante tal avalancha de opciones empiezan

a dudar y cuestionar el propio marco de referencia, su propia

cosmovisión personal.

En este contexto de variedad y pluralismo la postmodernidad

encuentra el terreno ideal para llevar a cabo su proceso de

deconstrucción. La deconstrucción es la negación de la capacidad del

ser humano para interpretar la realidad o hacer declaraciones de

verdad desde un punto de vista objetivo. Si la realidad objetiva no

existe, entonces todo queda relativizado, cualquier opción o

cosmovisión es tan válida como cualquier otra, cualquier religión es

válida como cualquier otra.

Estos conceptos de pensamiento pueden parecernos demasiado

abstractos o simples divertimentos intelectuales, sin embargo, han

llegado al hombre de la calle y forman parte de nuestra vida cotidiana

y nuestra forma de pensar y afrontar la realidad. Hoy en día no hay

nada incorrecto con ser cristiano, homosexual, budista, musulmán o

practicar la quiromancia. Nada está bien o está mal, todo es cuestión

de elecciones personales. La tolerancia nos lleva a afirmar que aunque

nosotros nunca vayamos a practicar una determinada opción no vamos

a negar que puede ser buena y válida para otras personas.

II. ADOLESCENTES Y PLURALISMO

Este es el contexto, el caldo de cultivo cultural y social en el que

los adolescentes del 2000 están creciendo, y nos guste o no, es el

Page 50: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

mismo en el que nuestros hijos se están formando. Por tanto, no

debemos engañarnos, todo lo que aplica a los adolescentes de esta

generación aplica a nuestros hijos, ellos no son diferentes, son hijos de

su cultura y su tiempo.

Los adolescentes de nuestros días están acostumbrados y han

mamado el pluralismo y la diversidad desde siempre. En sus escuelas

cada vez es más normal la presencia de chicos y chicas de otras razas,

culturas y religiones. Cuando llegan a la secundaria y aún más en la

universidad, no es nada raro para ellos encontrarse con compañeros y

compañeras que tiene valores y cosmovisiones de lo más variado y

variopinto. Tener amigos homosexuales, budistas, que creen en las

abducciones, que son ateos o que practican activamente la nueva era

es algo asumido por nuestros hijos. Es cierto que muchos de ellos no

practicarán el estilo de vida de sus amigos y compañeros, pero lo

encuentran aceptable y válido para ellos y, por tanto, lo toleran y

respetan.

Los medios de comunicación y la creciente importancia e

influencia de Internet hace que nuestros hijos tengan una visión

global, y decir global, significa decir plural, como nunca antes ninguna

generación la tuvo. Los medios masivos de comunicación, de los que

son ávidos consumidores, ponen a su disposición una multiplicidad de

formas y maneras diferentes de vivir la vida. Las producciones que

consumen no son mero entretenimiento, son transmisores de la amplia

variedad de opciones vitales que nuestra sociedad brinda a sus

miembros.

Page 51: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Desde pequeños están acostumbrados a ver con naturalidad

parejas de hecho, monogamias sucesivas, parejas homosexuales,

parejas monoparentales, madres que acuden a bancos de semen para

poder tener hijos sin necesidad de tener que casarse o convivir en

pareja, familias mezcladas –aquellas que se forman con hijos

procedentes de matrimonios anteriores de los cónyuges, además de

los propios-

Internet les permite acceso directo e inmediato a fuentes de

información y a posibilidades de conocimiento que hace simplemente

cinco o seis años eran un sueño para la mayoría de nosotros. Todo

esto les permite vivir directa o vicariamente experiencias que antes

estaban reservadas a los adultos o a los miembros de diferentes

culturas o contextos sociales.

Nuestros hijos, crecen pues, en un ambiente en que se ven

confrontados con una gran variedad de opciones definidoras de la

realidad. Todas estas opciones compiten por su atención y lealtad.

Entre todas estas opciones el cristianismo, nuestra fe, la fe de sus

padres es simplemente para ellos una opción más en competencia con

muchas otras opciones. Además, en este supermercado de

cosmovisiones tan propio de la postmodernidad, el cristianismo no

necesariamente es a sus ojos ni la mejor, ni la más novedosa,

gratificante o atractiva de las opciones a las que dar su lealtad.

Creo que nuestra generación creció alrededor de una verdad

única. Una verdad que podías aceptar o rechazar. A la que podías dar

tu lealtad o negársela, pero al fin y al cabo era la VERDAD y como tal

la reconocíamos. Contrariamente, nuestros hijos crecen alrededor de

Page 52: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

muchas verdades, todas con minúsculas, todas reclamando su

atención y lealtad y compitiendo por ser las mejores, las más

gratificantes y atractivas.

III. EL DESAFÍO DE LLEVAR LA FE A LOS ADOLESCENTES

Todo lo anteriormente expuesto plantea un gran reto a los

padres y educadores ¿Cómo podemos ayudar a nuestros adolescentes

a entender y aceptar el cristianismo como la VERDAD única y

definitiva? ¿Cómo podemos hacer creíble el evangelio entre tantas

opciones que compiten por convertirse en la cosmovisión que domine

sus vidas?

Hemos de notar que no estamos hablando de hacer el evangelio

atractivo en el sentido estético, lúdico o políticamente correcto del

término. Estamos planteando hacer el evangelio creíble y digno de

convertirse en la estructura alrededor de la cual los chicos y las chicas

pueden organizar su vida. Se trata, dicho en otras palabras, de

ayudarles a ver y experimentar que entre todas las opciones sólo

una relación personal con el Señor satisfacerá su necesidad de sentido,

propósito y realización.

En el anterior párrafo hay dos palabras que han sido resaltadas:

ver y experimentar. Nuestra generación es una generación

predominantemente intelectual y racional. No debemos olvidar que

hemos sido educados en la modernidad, bajo el imperio del intelecto y

la razón. Nuestros hijos son fruto de la postmodernidad, y para ellos el

sentimiento y la experiencia son los elementos dominantes. Para

Page 53: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

nosotros, la argumentación y el razonamiento son importantes a la

hora de tomar compromisos. Para ellos, la experiencia y la evidencia

son determinantes.

El autor Peter Berger, al hablar de la pluralidad que la sociedad

postmoderna impone, indica que cada cosmovisión, es decir, cada

forma de entender y explicar la vida, necesita y requiere de una base

social para justificar su existencia continuada y real como cosmovisión.

A esta base social, este autor la denomina, estructura de plausibilidad.

Vamos a tratar de explicar el párrafo anterior en términos más

coloquiales y llanos. Hay muchas formas de ver la vida en

competencia, todas clamando ser la verdad y pidiendo la fidelidad de

la gente. Para que las personas puedan confiar en una de esas formas

de ver la vida necesitan verla puesta en práctica y funcionando en un

grupo humano. Cuando existe un grupo de gente que practica los

valores de esa cosmovisión, los observadores ajenos a la misma

pueden observar la coherencia o no de dicha forma de vida y pueden

valorar la credibilidad o no de la misma. Eso es una estructura de

plausibilidad, un grupo de gente que vive lo que predica.

Dennis Hollinger, un estudioso cristiano del tema, afirma que

cuanto más coherente sea una estructura de plausibilidad más

credibilidad tendrá la cosmovisión que este grupo represente. Dicho de

nuevo en lenguaje coloquial, cuanto más coherente es la vivencia de

un grupo más credibilidad tiene su forma de ver la vida. Cuando la

cultura judeocristiana era la estructura básica que proporcionaba la

cosmovisión de la mayoría de las personas en la sociedad, todo era

más fácil. En estos momentos, al ser minoritaria y tener que vivir en

Page 54: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

abierta y despiadada competencia con otras cosmovisiones, la

estructura de plausibilidad se hace más necesaria y su papel más vital.

Las implicaciones son claras de cara a un ministerio con jóvenes

y adolescentes. Nuestros hijos necesitan no únicamente que les

transmitamos la verdad, necesitan ver y experimentar esa verdad

funcionando en una estructura de plausibilidad coherente y creíble.

Hemos de asumir la realidad que para nuestros hijos el cristianismo ya

no es la VERDAD, es una verdad más en competencia, y, por tanto,

hemos de luchar por mostrarles que es la mejor opción alrededor de la

cual pueden estructurar toda su vida, su presente y su futuro eterno.

Pero no olvidemos que esta generación no se mueve por

razonamientos sino por experiencias. No basta explicarles la verdad,

compartirla, trasmitirla, ellos deben ver la verdad actuando, encarnada

y viviendo en un grupo humano. Sólo entonces esa verdad tendrá

credibilidad para ellos.

PREGUNTAS PARA REFLEXIÓN:

1. ¿Cómo definirías con tus propias palabras el pluralismo?

2. ¿Por qué el pluralismo es un reto para la pastoral juvenil?

3. ¿De qué modo ha de condicionar el trabajo con los

adolescentes?

Page 55: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

4. ¿Por qué es tan importante que los adolescentes puedan

tener estructuras de plausibilidad?

5. ¿Qué puedes hacer en tu situación de ministerio para

desarrollar una buena estructura de plausibilidad para los

adolescentes?

REVISAR NUESTRAS PREMISAS

EDUCATIVAS

Los estudios anteriores nos sirvieron para definir de forma breve qué

es la postmodernidad. También pudimos observar algunas de las

características más notables de los jóvenes postmodernos. Por último,

durante los tres últimos meses abordamos los desafíos más

importantes que la postmodernidad plantea a la juventud.

El propósito de este estudio es trabajar los cambios que debemos

llevar a cabo en nuestra forma de trabajar con la juventud de nuestras

iglesias. Este tema puede ser muy delicado ya que cuestionará muchas

premisas que nos son conocidas y queridas, aunque no

necesariamente sean bíblicas.

Esperamos que lo tratado en este tema os ayude a servir mejor a la

juventud de nuestras comunidades.

Page 56: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

I. LA VERDAD OBJETIVA YA NO FUNCIONA PARA LOS JÓVENES

Cuando hablábamos del relativismo ya mencionamos que éste se da

en dos campos diferentes, el campo de la moral y el campo del

conocimiento. Afirmamos que el relativismo indica que no existen

verdades absolutas en el campo del conocimiento. La verdad absoluta

no existe, afirman los relativistas. Si existiera, pueden llegar a admitir,

sería imposible conocerla y, naturalmente, sería totalmente imposible

el demostrarla.

El concepto de verdad absoluta que hoy en día manejamos con tanta

soltura tiene su origen en la Ilustración europea. La ilustración fue ese

movimiento filosófico que se dio en la Europa del siglo XVIII. La

ilustración enseñaba que el conocimiento que nosotros podemos tener

por medio de la razón es como una especie de espejo, o foto, de la

realidad, de cómo el mundo realmente es. Dicho de otra manera, por

medio de nuestra razón, de nuestro intelecto podíamos llegar a

conocer las cosas tal y como realmente eran. Podíamos estar seguros

que lo que sabíamos era cierto y tenía una correspondencia fiel con el

mundo real.

Se creía que la verdad, por decirlo de una manera coloquial, existía ahí

afuera, en una especie de limbo o lugar donde la verdad residía. Esta

verdad estaba esperando ser descubierta, y ese descubrimiento podía

llevarse a cabo por medio del uso de la razón. Cuando usábamos

nuestra razón podíamos estar seguros que aquello que llegábamos a

conocer era real, cierto y objetivo. Es decir, todas las personas,

Page 57: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

partiendo de la misma base y usando su razón podían llegar a las

mismas conclusiones puesto que la verdad era algo objetivo, algo que

tenía existencia por sí misma al margen totalmente del observador

exterior.

Bien, ya sé que para algunos hermanos lectores todo esto puede sonar

a arameo del periodo intertestamentario, sin embargo, es muy

importante tratar de comprenderlo para poder entender los cambios

que se han producido en la manera de pensar y vivir de nuestros

jóvenes.

Sigamos con nuestro intento. Si la verdad era objetiva y existía, eso

significaba, como hemos mencionado antes, que cualquier persona que

no estuviera impedida o condicionada por las nubes de la sinrazón, los

prejuicios ideológicos o los intereses personales, podría llegar a la

misma conclusión que nosotros, ya que la verdad es algo objetivo, con

existencia propia al margen de cualquier observador. Vamos, que si los

dos miramos a los mismos hechos y no llegamos a la misma

conclusión es debido a que alguno de los dos está condicionado en su

acercamiento por las razones que sean.

Si la verdad existe por sí misma (recordemos que en una especie de

“limbo”) al margen de las personas, puede existir una dicotomía entre

mi forma de pensar y mi forma de vivir. No habría una relación

necesaria entre ambas aunque esta si que fuera deseable. Dicho de

manera más clara. Yo puedo hablar del evangelio y no vivirlo ni

demostrarlo en mi vida personal. Pero, aunque exista una dicotomía el

evangelio continúa siendo la verdad, y cualquier persona que

investigara las evidencias debería de llegar a reconocer esa verdad. Si

Page 58: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

no lo hacen es por intereses oscuros que les impiden acercarse a Dios.

La verdad, sigue siendo la verdad aunque yo no la viva ni la encarne

en mi experiencia.

Todo lo dicho hasta ahora refleja la forma de pensar de la modernidad.

Estas eran las premisas con las que las personas modernas se

acercaban al tema de la verdad. Sin embargo, no olvidemos, ya lo

hemos mencionado anteriormente, los postmodernos, es decir, los

jóvenes con los que estamos trabajando se acercan al tema de la

verdad con unas premisas completa y totalmente diferentes.

II. LA MODERNIDAD Y LA ENSEÑANZA BÍBLICA

En la modernidad la verdad era, ante todo, conocimiento intelectual al

que se llegaba por medio de la razón. En consecuencia, y a fin de estar

en línea y ser aceptables a la modernidad y contactar con ella, los

evangélicos adaptamos todo nuestro acercamiento educativo a las

premisas con las que se movía la modernidad.

Ross Rhode en un magnífico artículo titulado El evangelio y la

postmodernidad (puedes descargarlo de nuestra página web

www.aventuraweb.org) explica cómo la forma en que hemos

organizado la educación en el mundo cristiano responde a la

concepción moderna de la verdad. Veamos algunos ejemplos.

• Perspectiva científica de la Biblia. Toda nuestra apologética está

orientada a demostrar que la Biblia es históricamente fiable y

Page 59: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

que podemos confiar en que el texto recibido es el que

realmente escribieron los autores de los diferentes libros.

• Énfasis en la doctrina. Hemos hecho grandes esfuerzos en

sistematizar la Escritura, de ahí la importancia de nuestra

teología sistemática y de nuestras controversias teológicas y

doctrinales sin fin, en ocasiones, por matices totalmente

banales. Se produce también un rechazo a todo aquello que no

encaja dentro de nuestros sistemas doctrinales.

• Poca tolerancia al misterio. La razón era lo más importante en la

modernidad y, nosotros, a fin de hacer el cristianismo aceptable

a la modernidad intentamos suprimir todo aquello que olía

demasiado a misterio o sobrenatural. Llevado al extremo trajo

consigo todo el proceso de desmitificar la Biblia que la teología

protestante europea llevó a cabo durante los siglos XIX y XX. Sin

embargo, sin ir más lejos, muchas de nuestras denominaciones

contemporáneas tienen aversión a todo tipo de manifestaciones

carismáticas procedentes del Espíritu y a toda la vertiente

subjetiva de la experiencia cristiana.

• Poca tolerancia por la disensión y la diversidad. Esto es una

realidad tanto a nivel de doctrina como de práctica. Estamos tan

convencidos de tener la verdad objetiva, que nos resulta muy

difícil tolerar y aceptar incluso a hermanos que ven esa verdad o

la entienden de manera diferente a la nuestra.

• Proclamación del evangelio como doctrina. Las iglesias han

desarrollado una gran capacidad para transmitir el mensaje del

evangelio de una forma proposicional, clara y sencilla. Hemos

esquematizado, resumido y simplificado el evangelio para

hacerlo más comunicable. Las Cuatro Leyes Espirituales serían

Page 60: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

un ejemplo y a la vez, la obra maestra de la modernidad en este

sentido.

• Centralidad de la predicación y la enseñanza. La manera en que

entendemos la fe hace que consideremos espiritualmente

maduro a aquel que posee conocimiento bíblico y doctrinal. De

ahí la importancia de la enseñanza. De hecho, nuestros

ministerios de enseñanza en la iglesia local copian el sistema

educativo secular, con grados, currículos, materias, etc.

• Poca prioridad al discipulado personal. La transmisión de la fe

por medio del acompañamiento espiritual, que fue central

durante muchos años en la iglesia cristiana, no tiene el lugar

central que debería tener. Incluso, cuando se da, está más

centrado alrededor del estudio bíblico que la transmisión de vida

espiritual. En ocasiones bajo la expresión discipulado se esconde

un sistema reglado de formación. Nada puede ser más contrario

al espíritu del discipulado bíblico que la expresión “clase de

discipulado” o bien, “curso de discipulado” A uno le resulta difícil

ver a Jesús usando esas expresiones y siguiendo ese patrón.

La iglesia se adaptó a la modernidad y lo hizo bien. Sin embargo, los

tiempos han cambiado y, sin cambiar el evangelio, la iglesia debería

hacer un esfuerzo para acomodar sus premisas educativas a los

nuevos tiempos. Esto requiere mucha sabiduría y sensibilidad para

saber desechar aquello que es temporal y cultural y mantener a la vez

el evangelio puro. Hemos de cambiar la forma pero no el fondo. Sin

embargo, el peligro se da cuando confundimos ambas cosas y

defendemos la forma como si del fondo se tratara. Esta confusión

puede llevarnos a muchos problemas, el principal de ellos sería

defender la cultura de la modernidad como si del evangelio se tratara

Page 61: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

impidiendo con ello que los jóvenes con una mentalidad postmoderna

puedan acercarse al evangelio redentor de Jesús. El vino nuevo

requiere de odres nuevos. Al menos, eso afirmaba Jesús.

III. EL CONCEPTO DE VERDAD HA CAMBIADO PARA EL JOVEN

No lo olvides, los jóvenes postmodernos quieren ver y experimentar.

Ellos no se acercan a la verdad y al conocimiento de la misma por

medio del intelecto sino más bien por medio de la experiencia. Vale la

pena volver a recordarlo el concepto de verdad objetiva a la que se

accede por medio de la razón es una invención, un producto de la

Ilustración.

La nueva generación no pueden identificar la verdad en un discurso o

una predicación, necesitan verlas encarnada en un grupo humano, en

la comunidad, en individuos para poder reconocerla y, por tanto, poder

aceptarla en sus vidas.

Ya mencionamos al hablar del pluralismo que en las sociedades

postmodernas son precisas las estructuras de credibilidad o

plausibilidad para que los diferentes estilos de vida puedan ser creíbles

y aceptables.

Para los jóvenes postmodernos no basta con decirles o explicarles la

verdad. No importa cuan ortodoxa y bien sistematizada esté nuestra

teología. Para ellos es indiferentes cuántas doctrinas tengamos y

nuestros planes y estructuras para enseñarlas. Ellos necesitan ver la

verdad en la comunidad en la que forman parte y, a menos que la

Page 62: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

vean, no podrán reconocerla. No lo olvides, ellos no procesan la

verdad como los modernos, ellos necesitan ver, vivir y experimentar.

Ya lo desarrollamos en el tema del pluralismo, la comunidad cristiana

debe actuar como estructura de credibilidad, es decir:

• Debe ser un grupo humano que vive y practica lo que cree. No

basta con que enseñe la verdad y crea la verdad. Debe vivir de

forma evidente la verdad.

• Desde el punto de vista bíblico la verdad no es algo que existe

ahí afuera, en ese “limbo” donde residen las ideas. Este concepto

que popularizó la Ilustración tiene su origen, como tantas cosas,

en el pensamiento griego. Desde el punto de vista bíblico la

verdad sólo existe encarnada, bien sea en personas o en la

comunidad.

• Si una comunidad no vive la verdad, entonces no posee la

verdad, tan sólo tiene discurso teórico.

• Los jóvenes únicamente podrán identificar la verdad de Dios

cuando la puedan ver encarnada, es decir, hecha carne,

tomando vida en la comunidad o sus individuos.

• Los jóvenes no buscan estructuras de credibilidad perfectas,

pero, como mencionábamos en el artículo anterior, si

coherentes.

• A menos que la comunidad provea con la verdad encarnada los

jóvenes no podrán tomar decisiones en un contexto de

pluralismos.

Es posible que llegados a este punto algunos lectores piensen que

estamos rozando la herejía. Creemos que no. Es nuestra convicción

Page 63: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

que la enseñanza bíblica va en la dirección que hemos estado

apuntando. Veamos algunos puntos al respecto:

• En el Nuevo Testamento Jesús es la verdad revelada y

encarnada. Jesús se definió a sí mismo como la verdad en el

famoso pasaje de Juan 14:6.

• En Juan 1:14 se nos dice que Jesús plantó su tienda en medio

nuestro. Esto es muy importante. Jesús ha sido y sigue siendo la

estructura de credibilidad de Dios. Nosotros sabemos que el

amor y el interés de Dios por nosotros es cierto porque Jesús,

con su encarnación, vida y muerte lo ha demostrado. El amor de

Dios no es discurso, el amor de Dios es amor encarnado. Dios se

ha hecho creíble para los seres humanos gracias a la vida de

Jesús.

• Jesús se definió a sí mismo como la luz. La luz que permite

discernir en medio de la oscuridad. Del mismo modo, Jesús nos

ha dicho a nosotros que somos la luz. No ha dicho que nuestras

confesiones de fe o declaraciones doctrinales sean la luz. Lo que

el Maestro afirma es que nuestras vidas son la luz, las que hacen

creíble, o no, el evangelio.

• Jesús fue su mensaje. Del mismo modo, el primer relato del

evangelio y, todo sea dicho, el más creíble es nuestra propia

vida. Muchas veces nuestra vida habla tan fuerte y claro que

hace imposible el acercamiento al relato del evangelio escrito.

• Jesús nos desafío a encarnar la verdad. Es interesante que en su

afirmación de Juan 13:35, Jesús indica que el mundo llegará a la

conclusión de que somos sus discípulos al comprobar nuestro

amor. Dicho de manera más clara, no serán nuestros credos o

confesiones de fe los que darán credibilidad a nuestra identidad

Page 64: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

cristiana, será nuestro amor, o, por decirlo de otra manera,

nuestra forma de vivir, la verdad encarnada.

• En su oración sacerdotal Jesús también indica que lo visible, en

este caso nuestra unidad, será lo que ayudará a un mundo

incrédulo a creer que Jesús ha sido enviado por el Padre (Juan

17:23). La verdad encarnada en la iglesia, ésta viviendo en

unidad, será reconocible por el mundo, sin embargo, el discurso,

no sirve ni tiene valor para una sociedad postmoderna.

• Finalmente en el ya mencionado pasaje de la luz del mundo

Jesús indica que cuando la gente vea nuestras buenas obras,

entonces, y sólo entonces, alabarán a nuestro Padre que está en

los cielos.

Los que estamos tratando de insistir una y otra vez es el hecho de que

la verdad, desde el punto de vista de las Escrituras vive y toma cuerpo

en la vida de la comunidad cristiana. La Biblia cuando habla de verdad

habla de verdad encarnada. Cuando la iglesia no encarna la verdad

sólo tiene discurso vacío. Cuando la iglesia no vive la verdad y ésta no

toma cuerpo en los creyentes es irreconocible para los jóvenes

postmodernos que tienen premisas diferentes y sólo pueden

reconocerla cuando la ven y la experimentan.

Jesús desafiaba a la gente a que fueran y vieran “VEN Y VE” fue el reto

de Jesús a los que querían ser discípulos suyos. Es increíble como el

evangelio siempre tiene la respuesta a los desafíos de cada

generación. Para el joven postmoderno nuestra respuesta educativa ha

de ser “VEN Y VE”, una respuesta auténticamente bíblica ¿no es cierto?

Cuando trabajamos con los jóvenes y los adolescentes hemos de

olvidarnos del “VEN Y OYE” propio de la modernidad y enfatizar el

Page 65: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

“VEN Y VE”, “VEN Y VIVE”, “VEN Y EXPERIMENTA” a Jesús, la verdad

encarnada.

Nuestras premisas educativas deben cambiar en este mundo

postmoderno. Para trabajar con los jóvenes y tener un impacto en sus

vidas hemos de encarnar la verdad para ellos, hemos de vivirla.

Recordemos que la verdad bíblica no existe en un limbo exterior donde

residen las ideas tal y como suponían los griegos. La verdad existe

encarnada en una comunidad de fe que la vive, la hace real y, por

tanto, la hace identificable para los jóvenes.

Este artículo tenía como propósito desafiar nuestras premisas

educativas. El próximo trabajo tratará sobre la aplicación práctica de lo

desarrollado, es decir, de qué modo podemos encarnar la verdad para

los jóvenes, cómo se transmite la verdad en la postmodernidad.

Page 66: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

EL ACOMPAÑAMIENTO ESPIRITUAL

UNA NECESIDAD EN UN CONTEXTO

POSTMODERNO

Con este breve ensayo llegamos al último de los estudios acerca del

trabajo con adolescentes en el contexto de la postmodernidad.

Queremos abordar en estas páginas la aplicación práctica que se ha de

derivar de la revisión de nuestras premisas educativas. El

acompañamiento espiritual se presenta como el mejor medio para

poder encarnar la verdad y darle credibilidad para nuestros

adolescentes.

I. JUSTIFICACIÓN

El Señor Jesús en Marcos 2:22 nos narra la parábola de los odres

nuevos y viejos. Según la misma, el vino nuevo no puede colocarse en

odres viejos. De hacerlo, se corre el peligro de perder ambos, el vino y

el odre. El nuevo vino requiere un nuevo odre.

Todos los comentaristas están de acuerdo en afirmar que la parábola

hace referencia al evangelio y al judaísmo. El viejo recipiente, el

judaísmo, no era válido para el nuevo tipo de relación con Dios que

Jesús estaba instaurando. Ambos no casaban y había el serio peligro

Page 67: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

que el viejo odre, el judaísmo, acabara echando a perder el nuevo

vino, una relación personal con Dios basada en la gracia y la fe.

En Hechos 15 se nos narra la celebración del primer concilio de la

iglesia cristiana, el Concilio de Jerusalén. Este cónclave fue decisivo

para la historia del cristianismo. En el fondo, el problema a debatir era

el de los odres nuevos y los viejos. Un sector de la naciente iglesia

quería que los gentiles se convirtieran prácticamente en judíos,

observando la Ley e incluso practicando la circuncisión. Otro sector,

encabezado por Pablo y Bernabé consideraba que el nuevo vino, los

gentiles, debían tener un nuevo odre, una iglesia cristiana libre de las

cargas judaizantes.

Gracias sin duda a la intervención de Dios, los asistentes al concilio

tomaron la decisión de permitir que los gentiles construyeran odres

nuevos para la nueva cosecha espiritual que se estaba recogiendo

entre ellos. La iglesia cristiana en Palestina continuó con el odre viejo,

observando la Ley y viviendo en el judaísmo. Hacia finales del siglo I,

este tipo de cristianismo había prácticamente desaparecido y la iglesia

cristiana era una iglesia de odres nuevos, eminentemente gentil.

Los desafíos que la postmodernidad nos presenta, de los cuales ya

hemos hablado, nos llevan a ser serios a la hora de plantearnos cuáles

han de ser los nuevos odres que hemos de utilizar para la transmisión

y el cultivo de la fe entre nuestros adolescentes. La iglesia, como

institución cultural, so pena de quedar obsoleta, no puede permitirse el

lujo de continuar acercándose al problema del vino nuevo con su bien

elaborada estrategia de odres viejos.

Page 68: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

No olvidemos la forma en que las nuevas generaciones se acercan y

procesan la verdad, la necesidad de que ésta esté encarnada y que la

iglesia actúe como una auténtica estructura de credibilidad. No

olvidemos el ejemplo de Jesús, la verdad encarnada, y la práctica

durante muchos siglos por parte de la iglesia del acompañamiento

espiritual.

II. AYUDAR A LOS JÓVENES A EXPERIMENTAR A DIOS

Cuando los jóvenes asisten a nuestras iglesias buscan y, además,

tienen el derecho a encontrar un Dios real al cual puedan experimentar

y el cual pueda manifestárseles. Los adolescentes ni quieren, ni

desean, ni necesitan cultos fríos, muertos y carentes de total

significado espiritual para ellos.

Los adolescentes en particular, y los jóvenes en general, desean

experimentar de forma real aquello que les estamos predicando y les

estamos enseñando. No puede ser que hablemos de un Dios de amor,

perdón, gozo, paz, acompañamiento en la vida cotidiana, auxilio en los

momentos de angustia, dirección para la toma de decisiones y,

después, todo eso no lo experimenten. Si nuestro acercamiento

educativo a los adolescentes “habla” de ese tipo de Dios pero no les

permite “experimentar” ese tipo de Dios, algo no funciona y, hemos de

ser honestos y reconocer que con bastante probabilidad somos

nosotros y nuestro sistema el que falla. Es una solución muy socorrida

culpar al adolescente por no creer en vez de plantearnos si nosotros le

estamos ayudando a vivir y experimentar la verdad. Recordemos

Page 69: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

nuevamente, sin ver y experimentar esta generación no puede

reconocer la verdad.

Esto nos plantea a los líderes y educadores de jóvenes un gran

desafío, ayudarles a que vivan y experimenten una auténtica amistad

con Jesús, una auténtica relación de amor con un Dios que les ama y

acepta de forma incondicional

Todos aquellos que tenemos la responsabilidad de trabajar con los

jóvenes debemos esforzarnos en ayudarles a reconocer a Dios en la

vida cotidiana. Nuestro Dios es un Dios trascendente, es decir, que

está más allá y separado de su creación, no constituye una sola cosa

con ella. Pero a la vez, es un Dios cercano que está a nuestro lado que

se revela en la cotidianeidad, que no es indiferente a nuestras

necesidades y que constantemente trabaja en el universo. Nuestro

Señor ha hecho que la vida cotidiana se convierta en sagrada al estar

Él presente en todos y cada uno de sus aspectos.

Los líderes de jóvenes tenemos el deber y el desafío de ayudar a la

generación de adolescentes postmodernos a poder identificar y ver el

trabajo cotidiano de Dios, no únicamente en sus vidas personales, sino

a su alrededor.

Un contraste entre la antigua forma de hacer ministerio juvenil y la

nueva forma pueden sernos de gran ayuda para entender lo que

queremos decir. Se trata, como fácilmente se verá, en un contraste

entre nuevos y viejos odres

Page 70: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Modelo tradicional de

ministerio

Acompañamiento espiritual

En el modelo tradicional de

ministerio la palabra clave es

conocimiento. Este modelo nacido

y pensado para la modernidad está

basado en la transmisión de

información dirigida

fundamentalmente al intelecto. Se

considera que la fe, la madurez y el

crecimiento se adquieren a través

del acceso a la información acerca

de Dios y la vida cristiana. El modelo

presupone que dado el conocimiento

correcto los jóvenes sabrán

identificarlo como tal y sabrán cómo

aplicarlo en su vida y su realidad

cotidiana.

En el modelo nuevo de

acompañamiento espiritual la clave

es la intimidad y el desarrollo de una

relación personal con Jesús. Se

busca que el joven pueda conocer y

experimentar la realidad de la

presencia de Dios, no sólo en su

vida, sino en el mundo en general.

Este modelo no descarta el

conocimiento ni la transmisión de

información, sin embargo, va más

allá de la misma y provee al joven

con oportunidades para la

experiencia y lo expone a la verdad

encarnada.

Este tipo de modelo de ministerio se

centra en entretener y enseñar. Si

definimos la enseñanza como la

mera transmisión de información

veremos que muchos grupos de

jóvenes se han especializado

precisamente en eso, en transmitir

información a los jóvenes que lo

componen. El entretenimiento

también es una parte central del

viejo modelo. Muchas iglesias se

esfuerzan en retener a sus jóvenes

El nuevo modelo de ministerio busca

y pretende ayudar a los jóvenes y

adolescentes a desarrollar un

concepto que denominaremos RED.

R

Este modelo pretende ayudar a los

jóvenes a reconocer el trabajo de

Dios a su alrededor. Los líderes de

jóvenes, con su mayor madurez y

perspicacia ayudan a los

Page 71: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

por medio de experiencias de ocio

creativas y constantes. ¡Cuidado! No

estamos diciendo que enseñanza y

entretenimiento sea malas.

Simplemente estamos señalando un

modelo de ministerio que gira

alrededor de estos ejes y, que de

acuerdo a nuestra opinión, no es

válido para los nuevos desafíos que

plantea una sociedad postmoderna a

jóvenes y adolescentes.

adolescentes bajo su

responsabilidad a que puedan

identificar el trabajo del Señor en

sus vidas cotidianas, sus familias,

sus amigos, su escuela, su iglesia, el

propio grupo de jóvenes, etc.

Los líderes han de ayudar al

adolescente a interpretar la vida

cotidiana en clave sobrenatural y

divina. Cuando, por ejemplo, un

joven ha salido ileso de un accidente

automovilístico, no se trata de una

cuestión de “vaya suerte que ha

tenido”, antes bien, el líder les

ayuda a ver “el cuidado y la

providencia de Dios”.

Este trabajo es tremendamente

exigente para el líder ya que implica

cercanía e implica al mismo tiempo

su propia capacidad de discernir al

Dios vivo actuando en su propia vida

y su propio ambiente. Lo importante

en este caso no es cuánto sabe el

líder acerca del Señor, más bien

cuánto de lo que sabe está

experimentando y viviendo en su

vida cotidiana. Sólo si esto sucede

podrá ayudar a otros a reconocer y

experimentar el trabajo del Señor en

sus propias vidas.

Page 72: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Partimos de la base de que los

líderes no somos ni los iniciadores,

ni los protagonistas de la Pastoral

Juvenil. Dios está trabajando en la

vida de todos y cada uno de

nuestros jóvenes y adolescentes

desde mucho antes que nosotros, ni

siquiera comenzáramos algún tipo

de acción o trabajo con ellos.

Somos, no lo olvidemos,

colaboradores de Dios, de un Dios

que trabaja y toma la iniciativa de

buscar al hombre y que nos invita a

nosotros a unirnos en ese trabajo.

Es pues nuestro reto ayudar a los

adolescentes a que puedan ver ese

trabajo ya presente del Señor en sus

vidas desde hace tiempo.

E

El segundo paso es expresar el

trabajo de Dios. De nuevo, esta es

una responsabilidad del líder. Él

debe comenzar expresando lo que

Dios está haciendo y enseñándole en

su vida cotidiana. Al hacerlo, los

adolescentes podrán comprobar que

Dios es real, que trabaja en la vida

Page 73: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

de personas como ellos y, por tanto,

puede haber esperanza de que

trabaje en sus propias vidas de

forma real. Al expresar el líder u

otros jóvenes cómo Dios está

actuando en su experiencia vital, el

resto de los jóvenes comprueban

que Dios no es algo teórico o

doctrinal solamente, sino un ser que

se preocupa y se involucra en la

vida de los seres humanos.

Veamos una ilustración. Un líder

comparte la forma en que durante la

semana el Señor le ha ayudado a

superar un problema serio de

relaciones interpersonales. Mientras

el líder lo hace, los adolescentes se

dan cuenta que Dios actúa de forma

real. Pueden pensar que si Dios ha

ayudado a su compañero puede

ayudarlos a ellos. Además pueden

identificar la posibilidad de ser

ayudados por Dios en áreas en las

que ni habían pensado ni sabían

cómo hacerlo.

Cuando un líder expresa cómo ha

visto la presencia de Dios en una

situación cotidiana, los adolescentes

pueden empezar a pensar que lo

que atribuyen al azar o la casualidad

Page 74: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

tiene una intervención divina detrás

y pueden empezar a reconocer el

trabajo del Señor en sus propias

experiencias cotidianas.

D

Finalmente, el líder debe

desarrollar el trabajo de Dios.

Después de haber reconocido y

expresado el trabajo del Señor en la

vida de los adolescentes, el líder

debe desarrollar este trabajo.

¿Cómo se lleva a cabo? Animando a

otros a compartir sus propias

experiencias del trabajo de Dios.

Desafiándoles a que relacionen sus

necesidades con la posibilidad de la

intervención de Dios. Dando gracias

por el trabajo hecho por el Señor y

pidiéndole que se involucre en las

vidas de aquellos con problemas,

desafíos y necesidades. Animando a

los adolescentes a identificar de

forma cuidadosa la intervención del

Señor durante los siguientes días.

En este modelo no se desprecia en

absoluto la información ni el

conocimiento, antes bien, se busca

que este pueda ser vivo y aplicable

Page 75: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

en la realidad cotidiana de cada

joven.

En el modelo tradicional de

ministerio el líder de jóvenes, o el

pastor en aquellas comunidades

que lo tienen, es el centro de la

pastoral juvenil. El líder saber y

enseña a los que no saben. Es el

responsable de transmisión de la

información y, en muchos casos, se

siente responsable de que los

jóvenes crezcan y maduren

espiritualmente. Muchos líderes de

jóvenes funcionando con este

paradigma se sienten responsables

de tener todas las respuestas para

todas las preguntas. Consideran, así

mismo, que deben ser perfectos y

sin fallo, de lo contrario perderían

autoridad ante los jóvenes.

En el nuevo modelo de ministerio la

pastoral juvenil no es una tarea de

un solo hombre o mujer. Se trata

eminentemente de un trabajo de

equipo. Lo importante no es “el

pastor de jóvenes” sino un equipo

de mentores, de acompañantes

espirituales que trabajan de forma

coordinada para asegurarse que

todos y cada uno de los jóvenes

bajo su responsabilidad pueden

experimentar a Dios y son

acompañados espiritualmente en su

proceso de búsqueda del Señor.

El líder de jóvenes no está llenando

de conocimientos una botella vacía.

Contrariamente facilita a los jóvenes

que descubran al Dios que está

trabajando a su alrededor. Todos

participan, todos son protagonistas

y todos contribuyen a la edificación

de los otros.

Un ministerio de este tipo requiere

de un equipo de personas en

contraste con el modelo tradicional

que exige un “hombre orquesta”

capaz de hacerlo todo y, además,

bien y con resultados exitosos.

Page 76: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

III. ACOMPAÑAR ESPIRITUALMENTE A LOS JÓVENES

Como puede deducirse del nombre, el acompañamiento espiritual es

un proceso. Es el proceso de guiar y cuidar espiritualmente al

adolescente durante toda su travesía espiritual desde la incredulidad al

conocimiento y el encuentro personal con Cristo.

El acompañamiento espiritual es un proceso a largo término. No es

una actividad. Tampoco es un evento. Es un viaje espiritual de años.

En el acompañamiento espiritual cada persona tiene su propio ritmo.

Dios trabaja de forma diferente en la vida de cada persona. El tiene su

“kairos” para cada individuo y utiliza en ese viaje espiritual multitud de

experiencias, personas y situaciones diferentes para cada adolescente.

Ese viaje espiritual no puede ser acelerado ni retrasado. El

acompañante, el mentor, debe de ir al ritmo del pupilo. Animando

cuando sea necesario. Exhortando cuando las circunstancias lo

requieran. Disminuyendo el paso cuando el joven se estanque.

El acompañamiento espiritual es estar al lado del adolescente durante

esos años críticos en que su fe será asaltada por el relativismo, el

pluralismo, la nueva tolerancia y el resto de los desafíos que la

postmodernidad le irá presentando.

Page 77: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

El acompañamiento espiritual de un adolescente puede fácilmente

durar cinco o seis años.

Este viaje espiritual parte del principio básico de la oveja perdida.

Cada individuo es único, precioso y valioso a los ojos del Señor. Los

noventa y nueve que están en el rebaño no nos llevan a un

conformismo y auto satisfacción que nos impidan ver la importancia y

necesidad de ese único que todavía falta.

A. LA IMPORTANCIA DEL MENTOR

El mentor es el acompañante espiritual del adolescente

durante su viaje hacia el conocimiento de Cristo.

La palabra mentor tiene su origen en la mitología de la Grecia

clásica. Ulises, el héroe de la Iliada, encomendó a su hijo

Telémaco bajo la tutela y cuidado de un sabio llamado

Mentor. Como Ulises estaba batallando en la famosa guerra

de Troya, Mentor tenía la responsabilidad no únicamente de

enseñarle por medio de los libros, sino también todos los

ardides, tretas y peligros que había de encontrar y enfrentar

en la vida. De tal modo que la tarea de Mentor fue educar su

mente, pero también su espíritu. No sólo proporcionar

información sino sabiduría para vivir.

Page 78: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

El diccionario castellano define como mentor la persona que

aconseja, guía y orienta. Las dos últimas acepciones del

término indican claramente el papel activo y vital del mentor.

Para guiar y orientar es preciso conocer el camino o estar en

un proceso activo de averiguarlo.

En jardinería se acostumbra colocar un palo al lado de un

árbol joven que está en proceso de crecimiento. Este palo o

vara sirve para que el crecimiento del nuevo árbol se

produzca de manera recta y erguida, sin doblarse u orientarse

de forma incorrecta. La vara ayuda a garantizar el desarrollo

en la dirección adecuada y sirve para suplir la debilidad y

fragilidad del nuevo árbol.

La tarea del mentor es acompañar espiritualmente al

adolescente en su viaje único, personal y vital hacia el

conocimiento de Cristo como Señor y Salvador personal.

B. COMO SE LLEVA A CABO EL ACOMPAÑAMIENTO ESPIRITUAL

El acompañamiento espiritual como proceso espiritual vital se

lleva a cabo por medio de cuatro grandes influencias.

1. Encarnar la verdad para el adolescente

Se ha repetido hasta la saciedad que el primer y

más importante evangelio que los jóvenes leen y

Page 79: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

consideran como válido es nuestra propia vida

personal como educadores. Nuestra vida es el

primer y, tristemente el único, evangelio que

nuestros adolescentes leen. Nuestra pobre vida

espiritual, la inconsistencia de nuestra experiencia

cristiana, hace que para muchos nuestra vida sea

suficiente excusa para rechazar una lectura más

profunda de la Palabra de Dios.

Ya se ha repetido ampliamente que los jóvenes no

procesan la verdad intelectualmente sino de

forma vivencial. El mentor, el acompañante

espiritual vive y encarna el mensaje para el joven.

Nuestra vida es nuestro mensaje. El mentor no

debe tener miedo de decir al joven que sea un

imitador de él, porque a su vez, él está imitando a

Cristo. En contra de esa falsa humildad de que la

gente no debe poner los ojos en nosotros sino en

Cristo. La Palabra nos reta a ser dignos de imitar.

No perfectos, pero coherentes. No perfectos, pero

caminando hacia la perfección. De nada sirve

pretender que los jóvenes no fijen sus ojos en

nosotros, lo hacen y, por tanto, debemos vivir

vidas dignas para ellos. Nuestra enseñanza es

nuestra vida.

Jesús vino y plantó su tienda entre nosotros nos

dice Juan 1:14. Él es el verbo, la palabra, la

verdad encarnada, hecha carne entre nosotros,

Page 80: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

hecha accesible para nosotros. Juan afirma que

nadie jamás ha visto a Dios, sin embargo, el Hijo

nos lo ha dado a conocer (1:18)

El mentor actúa del mismo modo para el

adolescente. El mentor vive y acompaña al joven

en su viaje, en su peregrinaje espiritual. El

mentor está al lado y puede, por tanto, señalar al

joven cómo Dios está actuando en medio de su

mundo y quiere y puede actuar en su propia vida

personal.

El mentor es responsable de ayudar al

adolescente a percibir al Señor en medio de todo

el ruido, tensión y contaminación espiritual que le

pueden impedir ver a un Dios de amor actuando y

obrando a su alrededor.

El mentor con su vida ilustra lo que Dios puede

hacer en el proyecto vital de una persona.

Recordemos que el adolescente necesita ver la

verdad para reconocerla. Cuando el adolescente

pueda ver, a través de nuestra propia experiencia

vital, que Dios trabaja en la vida de personas

como él, de carne y hueso, entonces podrá

reconocer la verdad y con la ayuda y el trabajo

del Espíritu Santo aceptarla.

Page 81: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Este último punto está muy relacionado con la

experiencia narrada por Marcos en el capítulo 5

de su evangelio. Jesús cura a un endemoniado en

Gadara, éste le pide acompañarle en su

ministerio. Jesús, en 5:19 le indica que vuelva

con los suyos y sea un testimonio de lo que Dios

ha hecho en su vida. El mentor ilustra lo que Dios

puede hacer en la vida de una persona. El mentor

ilustra que Dios sigue actuando en personas

auténticas. El acompañante espiritual no explica

ni más, ni menos que aquello que Jesús está

haciendo. El mentor no debe exagerar, debe ser

coherente y consistente para ser convincente.

Un mentor narra su propia historia única y

personal de lo que Dios está haciendo con Él. El

acompañante espiritual es consciente, él mismo,

de estar en un viaje vital y, por tanto, puede

explicar que Dios sigue pacientemente trabajando

en Él. Dios guarda su propia honra. Un

acompañante espiritual no precisa inventar la

intervención del Señor, tan sólo ser fiel a lo que

Dios hace.

Cuando un mentor narra su historia el

adolescente puede sentirse identificado. Puede

pensar que si Dios trabaja en personas como el

mentor también puede hacerlo en la suya.

Cuando el mentor explica su experiencia, sus

Page 82: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

luchas, cargas, victorias y derrotas, el

adolescente puede sentirse identificado y generar

esperanza de que Dios también puede obrar en

sus circunstancias.

2. Proveer un marco de referencia para el joven

En el proceso de la formación de la identidad

espiritual los marcos de referencia tienen un papel

vital e importantísimo. Estos marcos actúan como

puntos de orientación que sirven para que por

medio del contraste, la comparación, la imitación

y, en ocasiones, la oposición, el adolescente

pueda ir modelando su nueva y emergente

personalidad e identidad.

En un momento en que las familias pierden una

parte de su influencia con el adolescente, el

mentor actúa como un modelo que ayuda a los

muchachos y muchachas a responder a esas

preguntas claves de la adolescencia ¿Cómo debo

ser? ¿Qué tipo de persona he de desarrollar? El

adolescente en búsqueda de una identidad

espiritual buscar a su alrededor tratando de

encontrar señales y personas que le permitan

tener una idea acerca de cómo formarse esa

identidad.

Page 83: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

3. Provee una estructura de credibilidad

Ya hemos mencionado de forma extensa este

punto. El mentor, viviendo y encarnando la

verdad en su propia vida y experiencia vital hace

creíble el evangelio a los ojos de los adolescentes

que están bajo su responsabilidad.

Por medio de su amor y aceptación incondicional

del adolescente, mostrándole su gracia en

cualquier situación y circunstancia, hace creíble

para estos el amor, la aceptación y la gracia de

Dios.

No olvidemos que las estructuras de credibilidad

son básicas para poder reconocer la verdad y, por

tanto, aceptarla.

4. Provee relaciones retentivas

El mentor, como indicamos en el punto anterior,

hace creíble la gracia, el amor y la aceptación

incondicional de Dios hacia el adolescente. Pero

además, al vivirlo en sus relaciones con los

adolescentes les permite a estos experimentar

unas relaciones de redención. Hay muchos

jóvenes que no pueden entender y, por tanto,

aceptar la gracia de Dios porque nunca la han

experimentado.

Page 84: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

En sus casas e iglesias son tratados con juicio y

condena. Al suceder esto, la gracia es

simplemente teoría, discurso, pero no una verdad

viva para ellos. Sin embargo, cuando un mentor

les trata con gracia pueden entenderla. Este tipo

de relaciones redentoras hacen mucho más por

acercar a los jóvenes a Dios que muchos

sermones y estudios bíblicos juntos.

Los jóvenes pueden experimentar con el mentor

ese tipo de relaciones que Jesús estableció con los

publicanos y pecadores y que precisamente eran

las que atraían este tipo de personas hacia el

Señor.

El mentor ayuda al adolescente a experimentar

las ricas verdades contenidas en las tres

parábolas de Lucas 15 (la oveja perdida, el padre

que acepta y perdona y la moneda perdida).

Hemos llegado al final de esta serie de artículos acerca del trabajo con

adolescentes en un contexto postmoderno. Esta nueva etapa histórica

nos trae nuevos desafíos, sin embargo, la Palabra de Dios sigue siendo

viva y eficaz y nos trae soluciones y respuestas para estos retos. Es,

sin embargo, nuestra responsabilidad el osada y valientemente buscar

una renovación de nuestro trabajo con la juventud aplicando los

principios eternos de la Palabra a las nuevas situaciones y no

Page 85: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

protegiéndonos detrás de la rutina y la inercia de las cosas que

siempre hemos hechos.

Toda época de transición es difícil. La tentación es buscar la seguridad

de los territorios bien conocidos, aunque estos hayan probado no

funcionar, en vez de lanzarnos confiadamente en un viaje de fe y

confianza en el Señor con la certeza, de que a su tiempo, Él nos dará

las claves para ganar esta generación para Él.

Page 86: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

ALGUNAS CARACTERÍSTICAS DE LOS

ADOLESCENTES POSTMODERNOS

El número de jóvenes que crecen en familias disfuncionales

aumenta de forma constante.

Son hijos de una generación que se ha esforzado por darles un

mayor confort y prosperidad económica.

Se dan cuenta que las generaciones previas fallaron en sus intentos

por cambiar el mundo, por tanto, ellos han desistido de ese empeño

y tratan de sacarle el mayor provecho posible a la situación actual.

La “era de la literatura” como principal medio para transmitir las

verdades bíblicas es para ellos algo del pasado.

No procesan la información en la misma forma que las generaciones

anteriores. No olvidemos que son hijos de la sociedad de la

comunicación.

Para ellos la verdad es algo más experimental que proposicional.

Su capacidad para escuchar y seguir sermones y charlas es muy

limitada. Su capacidad de atención es muy corta.

Son hijos de la era electrónica.

Están mucho más estimulados que cualquier generación previa:

o Tienen acceso a mucha más información.

o Mucho más acceso a diferentes opciones y estilos de vida.

o Están sobre estimulados, especialmente por los medios de

comunicación

o Son, sin embargo:

§ Menos sabios aunque más informados.

Page 87: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

§ Más desorientados aunque con más opciones.

Consideran como simple ruido y se desconectan de todo aquello

que perciben como irrelevante.

No hay grandes esperanzas de que el futuro vaya a ser mejor para

ellos. No creen en el mito del progreso constante.

Tienen muy poca autoestima.

En muchos casos sus vidas están tremendamente organizadas

debido a las necesidades de padres que trabajan.

Viven para el presente. Mañana es un futuro lejano para ellos. La

falta de claras perspectivas de futuro ayuda en este sentido.

Buscan el placer y la gratificación. Muchas de sus decisiones son

tomadas en base a estos parámetros.

La edad de iniciación al consumo de tabaco, alcohol, drogas e

incluso las relaciones sexuales desciende constantemente.

Les molestan las reglas y las estructuras.

La rigidez de los géneros es menos específica para ellos (los

muchachos llevan pendientes y colas de caballo y las chicas visten

como chicos y hacen cosas hasta ahora consideradas “masculinas”)

La diversión y el entretenimiento pueden llegar hasta extremos

obsesivos.

Los compromisos con relación a la fe se toman en edades más

tardías.

Estas expuestos a muchos estilos de vida diferentes, no sólo a

través de los medios de comunicación, sino también por medio de

sus compañeros.

La fe se imparte más por medio de relaciones interpersonales que

por las estructuras tradicionales.

Page 88: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

La dificultad para orientarse y tomar decisiones morales es

creciente.

A pesar de todos los mitos, la familia, cuando esta ejerce como tal

sigue siendo la principal influencia en sus vidas.

Desconfían de los adultos pero al mismo tiempo buscan relaciones

significativas con ellos.

Los jóvenes se fragmentan en grupos cada vez más definidos.

Los amigos continúan siendo una de las cosas más importantes.

Carecen de héroes, tan sólo tienen ídolos.

Su cosmovisión puede ser muy ecléctica, sosteniendo en ocasiones

valores opuestos y contradictorios.

II. EVALUACIÓN DE NUESTRA PROPIA IGLESIA

¿En qué medida estas características están presentes en los

adolescentes de nuestras congregaciones?

III. IMPLICACIONES PARA EL TRABAJO CON ADOLESCENTES

Ayudarles a clarificar la experiencia de conversión.

Ayudarles a relacionar la Biblia con su vida cotidiana

Ayudarles a participar, preguntar, dudar, cuestionar y no estar de

acuerdo.

Page 89: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

CREAR ESTRUCTURAS DE

CREDIBILIDAD

I. INTRODUCCIÓN

Ya hemos mencionado anteriormente que en una sociedad pluralista –

y la nuestra lo es- las únicas cosmovisiones, las únicas formas de ver

la vida que pueden sobrevivir son aquellas que cuentan con una buena

estructura de credibilidad o plausibilidad.

Este tipo de estructura era descrito como un grupo humano que

encarna los valores y estilos de vida defendidos por una cosmovisión

en particular. La carencia de este tipo de estructuras en un mundo

pluralista, relativista y tolerante pone en peligro de extinción cualquier

tipo de modo de ver la vida, por mucho que el mismo pueda clamar

ser la verdad con mayúsculas o minúsculas.

Si nos centramos en la realidad de nuestro país, España, no es osado

afirmar que el cristianismo, en buena parte, no es considerado por las

personas como una alternativa sobre la cual construir sus vidas debido

a la falta de credibilidad que tiene. La fe cristiana, representada

mayoritariamente en España por la Iglesia Católica, no es creíble y

eso, es debido a que no somos percibidos los cristianos como una

comunidad que encarna los valores que defendemos y aseguramos ser

verdaderos.

Page 90: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Podría pensarse que esta declaración es totalmente subjetiva y estar

en radical desacuerdo con la misma. Sin embargo, lo dicho en el

anterior párrafo está sustentado por varios estudios sociales realizados

en nuestro país. Simplemente a modo de apoyo citaremos dos de

ellos.

Un estudio realizado este mismo año -2004- entre los jóvenes

barceloneses reflejaba que el 80% de ellos desconfiaba de la iglesia.

Únicamente los partidos políticos, con una desconfianza del 88%, eran

menos creíbles a los ojos de los jóvenes barceloneses. Este porcentaje

era mayor en el estudio JOVENES ESPAÑOLES 2000, dirigido por el

profesor Javier Elzo y publicado por la Fundación SM.

El punto central radica en que a los ojos de la juventud española, el

cristianismo no es creíble y, por tanto, no van a considerarlo como una

opción sobre la cual construir su proyecto vital. Sin estructura de

credibilidad no hay opción de supervivencia posible en una sociedad

postmoderna. Además, y todos los que trabajamos con jóvenes somos

conscientes de ello, los mismos jóvenes de nuestras iglesias están

abandonando la fe y dejándola de considerar como el eje vertebral de

su proyecto vital por la misma razón, la falta de credibilidad de

nuestras comunidades.

No olvidemos que para los jóvenes postmodernos ver es creer. No

echemos en saco roto la realidad de que la verdad para ellos es algo

experimental, no un simple concepto intelectual. Meditemos sobre las

implicaciones de la realidad de que para estos jóvenes la verdad

únicamente es identificable cuando la pueden ver encarnada en un

Page 91: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

grupo humano. Aquel que es la Palabra se hizo hombre y vivió entre

nosotros lleno de amor y de verdad.

II. UNA VIEJA TRADICIÓN DE ESTRUCTURAS DE CREDIBILIDAD

Si bien es cierto que el concepto de “estructura de credibilidad” es un

término acuñado en nuestros días por los sociólogos y estudiosos de la

cultura, no lo es menos que el principio –dar credibilidad a lo que

creemos con nuestro estilo de vida- es más viejo que el tebeo y está

presente a lo largo de todas las páginas de la Escritura.

El pueblo de Israel fue escogido por Dios para ser un testimonio –

estructura de credibilidad- suyo entre todas las naciones de la tierra.

La idea era que la cercana relación entre el Señor e Israel fuera una

evidencia que moviera a los otros pueblos a plantearse la cuestión y

volverse hacia el único Dios (véase a este respecto Deuteronomio 4:1-

9)

Israel falló de forma estrepitosa en su responsabilidad de ser una

buena estructura de credibilidad. En sus primeros tiempos debido a

que siguió y se contagió del estilo de vida idolátrico de los otros

pueblos. Esto llevó incluso a su destrucción como nación, primero del

reino del Norte, Israel y posteriormente del reino del sur, Judá.

En sus últimos tiempo el reconstituido Israel se fue al extremo

contrario y se convirtió en una sociedad cerrada y excluyente, que

perdió de vista nuevamente cual era el propósito de Dios para su

pueblo. En su xenofobia y rechazo de los otros pueblos perdieron su

Page 92: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

oportunidad de ser una buena estructura de credibilidad y consiguieron

todo lo contrario, hacer aborrecible en nombre de Dios entre los

gentiles (véase Romanos 2:24)

Jesús fue la estructura de credibilidad de Dios. Este es un punto que

ya hemos tratado anteriormente. Con su vida, muerte y resurrección

Jesús dio total y absoluta credibilidad al amor de Dios hacia la

humanidad. Este amor habría quedado única y exclusivamente en

palabras, en grandes declaraciones de intenciones y propósitos si no

hubiera sido porque Cristo, haciéndose ser humano y muriendo por

nosotros, hizo creíble, plausible, auténtico y genuino el interés del

Señor por una humanidad caída.

Jesús da credibilidad a Dios. Del mismo modo Jesús hace creíble su

propio mensaje porque ante todo, y sobre todo, Jesús encarnó todos

los valores que predicó. Su estilo de vida estuvo caracterizado por ser

un ejemplo viviente del nuevo tipo de humanidad que planteaba y así

lo ilustró en sus relaciones con Dios y con los hombres.

Jesús llamó a la iglesia a vivir de tal manera que hiciera creíble el

evangelio a los ojos de un mundo que está bajo el dominio y la

oscuridad de Satanás. El Señor nos dijo que éramos sal y luz y que

una ciudad en lo alto de una montaña no podía esconderse. Mencionó

una y otra vez que nuestro estilo de vida –algo evidente, comprobable

y verificable por los demás- sería la causa principal que nos

identificaría como hijos de Dios y discípulos suyos. No deja de ser

curioso que el énfasis se ponga en el estilo de vida y no

necesariamente en las creencias. Tiene todo el sentido porque las

Page 93: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

estructuras de credibilidad no se construyen con ideologías sino con

vidas transformadas, devotas y comprometidas.

Las cartas del Nuevo Testamento están vacías de exhortaciones a la

evangelización. Es curioso pero es necesario rebuscar ampliamente

entre las páginas del Nuevo Testamento para poder encontrar en los

consejos de Pablo, Pedro, Santiago u otros escritores bíblicos,

referencias a la necesidad de evangelizar.

No obstante las referencias que pueden ser leídas en clave de construir

estructuras de credibilidad son muy abundantes. Una y otra vez nos

encontramos en las epístolas referencias a cultivar, cuidar y promover

un estilo de vida que evidencia la realidad de nuestro caminar con el

Señor. (véase entre otras referencias 1 Pedro 2:11-12; 3:1-2; 1 Juan

1:1-4; 2:3-4; 4:7-9)

III. EL RETO DE DESARROLLAR ESTRUCTURAS DE CREDIBILIDAD

Hay un episodio que todavía está vivo en mi mente como el día que

sucedió hace ya varios años.

Mi esposa y yo paseábamos por la playa de la Vila Olímpica de

Barcelona una tarde verano. Era aquella hora en la que el sol ha

perdido su fuerza y está a punto de ponerse. La luz tiene un tono muy

especial en ese momento del día. La playa estaba prácticamente vacía,

tan sólo unos pocos bañistas aquí y allí permanecían.

Page 94: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Entonces comenzó ante los nuestros ojos un desfile de seres deformes.

Jóvenes y adultos con claros síntomas de enfermedades cerebrales y/o

degenerativas, todos ellos en sillas de ruedas, eran conducidos hacia la

playa por un grupo de jóvenes de aspecto “Cumbayá” Era evidente

que habían escogido premeditadamente aquella hora de la tarde para

evitar que aquello se convirtiera en un espectáculo.

Dos cosas nos impactaron de aquella situación. En primer lugar la

alegría de los voluntarios que llevaban a cabo aquel increíble trabajo.

En segundo lugar, su amor y dedicación hacia gente necesitada. El

espectáculo rompía el corazón y hacía que las lágrimas pugnaran por

salir de nuestros ojos.

Un versículo vino a mi mente y me golpeó de forma brutal, fueron

aquellas palabras de Jesús cuando afirmó: “Os aseguro que los que

cobran los impuestos para Roma, y las prostitutas, entrarán antes que

vosotros en el reino de Dios” (Mateo 21:31)

Porque no podemos obviar la apabullante realidad de que hay miles y

miles de personas que sin ser cristianas, ni conocer a Dios, ni

pertenecer a ninguna iglesia evangélica, viven de forma más fiel y más

intensa muchos de los valores del Evangelio que nosotros mismos. Y

que tristemente aquellos que no conocen a Dios van por delante

nuestro en lo que a encarnar algunos de los valores más importantes

del cristianismo se refiere.

Tristemente la iglesia en vez de verse desafiada por semejante

realidad y sentirse empujada a una profunda revisión de nuestra

función como estructura de credibilidad ha reaccionado

Page 95: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

menospreciando y echando por tierra la labor de aquellos que aman a

su prójimo y se entregan por él. Hemos cuestionado sus motivaciones,

hemos cuestionado aspectos morales de su estilo de vida y, sobre

todo, hemos apelado que no tienen la verdad, no conocen a Dios y

nunca han orado la oración de salvación. Dicho de otra manera, es

posible que hagan el bien –sólo posible, habría que investigar que

retorcidas razones les mueven- pero en cualquier caso no tienen la

verdad. ¿Quién fue aquel que dijo: “quiero misericordia y no

sacrificios”?

Es tiempo para la demostración, se acabó la era de la proclamación. Si

realmente queremos servir como estructura de credibilidad para el

mensaje del Evangelio hemos de cambiar totalmente nuestro

paradigma con relación a la evangelización y el discipulado, hemos de

asumir que los tiempos han cambiado y que hemos de redescubrir y

recuperar el viejo paradigma bíblico del “Ven y ve”

En un mundo como el que nos tocado vivir lleno de dolor, sufrimiento,

desesperanza y necesidades los creyentes no podemos quedarnos de

brazos cruzados, ajenos a esas realidades y repitiéndonos una y otra

vez que tenemos la verdad. La verdad que no lleva a la acción no es

tal verdad es un mero discurso vacío de sentido y de poder.

DEMOSTRAR VERSUS PROCLAMAR

Durante varios siglos la evangelización ha sido comprendida como una

proclamación o verbalización del mensaje del Evangelio y, de éste,

Page 96: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

reducido a unos cuantos principios básicos. Las Cuatro Leyes

Espirituales serían un ejemplo magnífico en este sentido.

La evangelización se entendía desde un paradigma espiritual e

intelectual. Espiritual en cuanto a que lo importante era la salvación

de las almas. Los seres humanos eran percibidos como almas y lo más

importante y prioritario era la salvación de las mismas. Las personas

no eran vistas ni comprendidas como seres humanos integrales, por

tanto, la salvación era algo esencialmente espiritual que no

necesariamente afectaba al resto del ser humano.

Sin duda esta era una visión reduccionista. Si el pecado, tal y como

vemos en Génesis 3 afectó a la relación del ser humano con Dios, con

otros seres humanos, consigo mismo y con su entorno. La salvación –

no olvidemos que el Hijo de Dios vino para restaurar las obras del

maligno- debía de afectar a esas mismas áreas. Una caída integral

requería una redención integral.

Desde esta perspectiva todo esfuerzo social que no sirviera de

“coartada” para la evangelización –entendida esta como salvación de

almas- no era valorado y se consideraba una pérdida de tiempo.

Ministrar a los seres humanos en sus necesidades era simplemente un

trampolín, una estrategia para lo que realmente era importante, la

proclamación del mensaje para la salvación del alma.

Intelectual en cuanto a que el mensaje del Evangelio se entendía

como una serie de conceptos o proposiciones dirigidas al intelecto de

las personas. El Evangelio era algo que se debía de creer, entendiendo

por creer, la comprensión y aceptación de ciertas proposiciones

Page 97: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

intelectuales. Una mala comprensión del término bíblico creer, nos ha

llevado a la histriónica situación de que no importa cómo vivas

siempre que aceptes intelectualmente las verdades correctas.

Esta degeneración del concepto de creer nos ha llevado hasta tal punto

que incluso aquellos que creemos –aunque no practiquemos- nos

sentimos con la libertad y la autoridad para poder juzgar a aquellos

que practican pero, desde nuestro punto de vista no creen lo correcto.

Cuando confrontados con las enseñanzas de Santiago respecto a la

nulidad de ese tipo de fe o creencia, no nos sentimos en absoluto

afectados y nos repetimos una y otra vez: “no por obras para que

nadie se gloríe”

Para millones de cristianos nacidos y educados bajo este paradigma de

evangelización esta es la única y correcta manera de dar a conocer el

mensaje de salvación a un mundo perdido.

Sin embargo, es muy cuestionable que este sea el único modo de

evangelizar. Sin duda es un modo. Sin duda ha sido válido durante

muchas generaciones y ha servido para que personas se acercaran al

conocimiento de Dios, pero sería un error creer que es el modo por

antonomasia y aún más creer que es el modo bíblico de llevar a otros

el mensaje de salvación.

Los tiempos han cambiado y de nuevo ha vuelto a salir a la palestra lo

que ya vimos que la Biblia una y otra vez indica, la necesidad de

construir estructuras de credibilidad. Sin duda, el método de

proclamación sin encarnación ha quedado totalmente obsoleto y no

responde a las demandas de la realidad social. Para aquellos que

Page 98: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

confunden el medio con el fin, o la forma con la función, esto es una

auténtica catástrofe. Sin embargo, para aquellos que buscan ser sal y

luz en su generación de una forma efectiva hay buenas noticias en la

Palabra de Dios hacia la que nos podemos volver en busca de

principios de trabajo.

El nuevo paradigma de evangelización tiene varias características.

1. Demostración por medio de la encarnación

Hemos abundado ya ampliamente sobre este concepto. La verdad

bíblica es siempre una verdad encarnada en la vida de individuos y

comunidades. Estas, con su estilo de vida hacen creíble, plausible las

verdades que defienden y proclaman.

Dios debe ser evidente en nuestras vidas, nuestras familias y nuestras

comunidades. Su presencia y su trabajo sobrenatural ha de ser real y

visible, no únicamente para nosotros, sino para aquellos que no creen

y nos rodean.

2. Una visión integral del ser humano

La salvación restaura todo aquello que el pecado destruyó y

corrompió. Cuando la salvación llega a una casa no solamente el alma

es limpia de pecado y restaurada, también lo son las relaciones

interpersonales, la propia visión y dignidad que ese ser humano tiene

Page 99: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

de él mismo, su relación con el entorno, sus heridas emocionales,

sociales, mentales.

Un buen ejemplo en este sentido lo encontramos en la curación de un

leproso que aparece en el evangelio de Marcos en el capítulo 1:40-45.

Jesús se preocupó por la salvación integral de aquel desgraciado. En

primer lugar lo tocó, algo totalmente innecesario y que le declaraba

impuro según la ley levítica. Ahora bien, el toque hacia un ser humano

que durante tiempo había vivido en total soledad sin que nadie jamás

le hubiera tocado y mostrado afecto significó mucho. El t

El toque de Jesús devolvía dignidad de ser humano y transmitía afecto,

identificación y cariño, transmitía el mensaje: “eres digno y valioso. Te

amo”.

Jesús ministró su necesidad física curándolo. Le ordenó que presentará

la ofenda prescrita, lo cual significaba que su relación con Dios estaba

restaurada, podía volver a relacionarse con Dios en el templo.

Finalmente, Jesús se preocupó también por su situación social, por

restaurarlo a su entorno. Le dijo que se presentara ante el sacerdote

para que este diera evidencia ante la comunidad de su curación,

permitiéndole, por tanto, volver a la comunidad de Israel.

Jesús nunca tuvo una visión reduccionista del ser humano. Jesús no

vio almas, vio hombres y mujeres auténticos, integrales.

3. Una involucración con las necesidades de un mundo que sufre.

Page 100: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

Santiago, el hermano de Jesús, en 1:27 nos dice: “he aquí la

religiosidad auténtica e intachable a los ojos de Dios Padre: asistir a

los débiles y desvalidos en sus dificultades y mantenerse

incontaminado del mundo.”

Uno de los pecados que de forma reiterada los profetas denunciaban

era que Israel y Judá se habían olvidado del huérfano y de la viuda.

Esta expresión en el Antiguo Testamento sirve para referirse a todos

aquellos desvalidos y necesitados. El huérfano y la viuda ilustraban

pero no excluían a todos aquellos que vivían en una situación de

necesidad y estaban desvalidos.

El ministerio de Jesús nos muestra con toda claridad este tipo de

entrega a un mundo en necesidad. Es tan obvio que no vamos a

invertir más tiempo desarrollando los múltiples ejemplos que podemos

encontrar en las Escrituras.

Así lo ha entendido la iglesia cristiana a lo largo de los siglos. Todas las

instituciones que hoy en día forman parte de las redes de servicios

sociales de los países más desarrollados nacieron al amparo de la

iglesia: escuelas, universidades, educación para todos, hospitales,

asilos para ancianos, orfanatos, casas para moribundos, etc., etc. Todo

esto hoy en día se ha convertido en un derecho de cualquier ciudadano

y el estado ha asumido todas esas competencias, ahora bien, es

importante no olvidar que nacieron todas, sin excepción, a la luz de la

cruz. El mundo grecorromano desconocía ese tipo de instituciones de

tipo universal.

Page 101: El Trabajo Con Adolescentes en Una Sociedad Postmodern A

4. Una vida radical y auténtica

La autenticidad, el ser genuino ha de ser la marca de la nueva

evangelización. Porque probablemente ésta será más una cuestión de

ser y vivir que de hacer.

Es muy probable que simplemente tengamos que vivir de una forma

real, radical, cristocéntrica que evidencia que Cristo está en nosotros.

Estamos hablando de un estilo de vida que despierte preguntas e

interrogantes y que como dijo un pensador cristiano no pueda ser

comprensible si no es debido a la presencia de Dios en nuestras vidas.

Preguntas para reflexionar:

1. ¿Cómo podemos crear estructuras de credibilidad para los jóvenes

de nuestras iglesias?

2. ¿Cómo podemos crear estructuras de credibilidad para los jóvenes

no cristianos?

3. ¿Qué iniciativas prácticas podemos poner en acción?