ECOJESUITS Ecologia y Jesuitas en comunicación Boletines...

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1 ECOJESUITS Ecologia y Jesuitas en comunicación Boletines Rio+20

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ECOJESUITS

Ecologia y Jesuitas en comunicación

Boletines Rio+20

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EcoJesuit en Rio+20

Índice de los Boletines

Boletín del lunes 18 de Junio 2012 Es el momento de replantear y recuperar el control sobre el futuro de la familia humana (pág. 4) ¿Qué significa Río+20 para mí? (pág. 8) Peter Henriot, SJ Primeros pasos en Rio (pág. 10) Pedro Walpole & José Ignacio García

Boletín del martes 19 de Junio 2012

Guía de oración para acompañar nuestra presencia en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible (Río+20) y Cumbre de los Pueblos Río de janeiro, Brasil, junio 2012 (pág. 12) El futuro que queremos (pág. 14) Jaime Tatay, SJ

Principios para una Ciudad Justa (pág. 16) Pedro Walpole Caritas Internationalis: Todos hambrientos de justicia, equidad, sostenibilidad ecológica y corresponsabilidad (pág. 18) José Ignacio García Río+20: ¿Demasiado poco y demasiado tarde? (pág. 19) Fernando F. Franco

Boletín del miércoles 20 de junio 2012 Oración para el 20 de Junio 2012, Río+20 (pág. 21) La Cumbre de Río+20 en movimiento (pág. 23) Robert Athickal, SJ Refugiados medioambientales en el marco del desarrollo sostenible (pág. 25)

Pedro Walpole

Iglesia Católica presente en Río (pág. 27) José Ignacio García La esperanza, motor del cambio (pág. 28) Luis Arancibia

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Boletín del jueves 21 de Junio 2012 Oración para el 21 de Junio, Río+20 (pág. 31) Desarrollo Sostenible – Lo que hemos aprendido (pág. 32) ¿Otro mundo es posible? La perspectiva centro-periferia en Río+20 (pág. 34) Mauricio López Oropeza La esperanza está en las personas (pág. 36) Patxi Álvarez, SJ

El futuro que quieren las mujeres: Igualdad de género y empoderamiento femenino para el desarrollo sostenible (pág. 38) Borrador del acuerdo: ¿frustración o satisfacción? (pág. 41) José Ignacio García

Boletín del viernes 22 de Junio 2012 Oración para el 22 de Junio, Río+20 (pág. 42) Los jóvenes en la defensa de la vida (pág. 44)

Mary Tere Guzmán Cuatro miradas a la Cumbre de los Pueblos (pág. 46) Jaime Tatay Marcha Global en la Cumbre de los Pueblos: Algo nuevo está surgiendo (pág. 47) Gilberto Faggion y Lucas Luz

Boletín del lunes 25 de Junio 2012 Declaración de la Conferencia Internacional de Pueblos Indígenas sobre Desarrollo Sostenible y Libre Determinación (pág. 49)

La ecología, foco de atención del apostolado social (pág. 52) Patxi Álvarez, SJ Lo germinal que nace de lo marginal: Otro mundo es posible (pág. 53) Mauricio López Oropeza América Latina en la encrucijada: ¿Es posible el crecimiento sostenible e inclusivo en la región? (pág. 55) Mary Tere Guzmán Primeras impresiones del Futuro Que Queremos (pág. 58) José Ignacio García, SJ

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EcoJesuit en Rio+20 - Boletines

Lunes 18 de Junio 2012

Esta vez Ecojesuit se ha desplazado para narrar un acontecimiento en directo.

Durante esta semana enviaremos una crónica diaria desde Rio de Janeiro donde se

celebra la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible, conocida

como Rio+20. Intentaremos acercarte cada día lo que está sucediendo en Rio así

como reflexiones sobre este concepto fundamental de desarrollo sostenible.

Deseamos que disfrutes de esta edición especial de Ecojesuit desde Rio.

El equipo Ecojesuit

Es el momento de replantear y recuperar el control sobre el futuro de la

familia humana

Junio 18, 2012

Los líderes de la Iglesia y de la sociedad civil hacen un llamado a los

gobiernos para que centren su atención en los más pobres y aprovechen

los debates de Río +20, para plantear nuevos caminos hacia un mundo

justo y sostenible

Nosotros, representantes de la Iglesia Católica y de la sociedad civil de

todos los continentes, trabajando para la erradicación de la pobreza y el

desarrollo integral apelamos a los líderes mundiales para que hagan una

demostración de su liderazgo político en la Conferencia de Rio +20, y a

toda la gente de buena voluntad para que actúen para lograr un mundo

justo y sostenible.

No podemos seguir esperando re-imaginar y re-hacer un mundo mas verde y mas

justo en el que la gente, mujeres y hombres, reconozcan que son una parte integral

de la creación, viviendo en armonía con ella y respetándose mutuamente los unos a

los otros. La tarea es inminente puesto que nos hemos permitido construir un

mundo en el que existe aún demasiada gente sin suficiente alimento, agua o

energía para vivir de forma digna.

Trabajamos a diario con los más necesitados y queremos darles voz. Las

comunidades más pobres están luchando para tener acceso a los recursos

necesarios para su propio desarrollo, siendo cada vez más vulnerables a las

amenazas medioambientales, mientras que los ecosistemas de los que dependen

para ello están agotados y destrozados.

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Vemos cómo la necesidad de tierra, agua, comida, recursos minerales y energía

está aumentando de forma dramática, causando múltiples y violentos conflictos en

el mundo entero. La imperiosa necesidad de recursos naturales será aún más

intensa en las generaciones venideras.

El cambio climático está avanzando con mucha rapidez, por lo cual no podremos

retroceder salvo si empezamos a actuar ahora. La gente más pobre y vulnerable es

la más afectada por este cambio, a pesar de ser la menos responsable por las

causas que lo provocan.

Estamos frente a una enorme tarea, por haber permitido que las reglas del

mercado quedasen fuera de nuestro control, y que su lógica mercantilista se

impusiese en nuestros anhelos y deseos, tratando la diversidad de la creación de

Dios como «natural» y como parte del «capital humano». Hemos permitido que

nuestros deseos humanos y aspiraciones sean fundamentalmente materialistas en

lugar de generosos, impulsados más por el interés personal, que por la solidaridad.

Juntos, somos capaces de crear nuevos caminos de desarrollo hacia un mundo

justo y sostenible. Además, este cambio depende también de cada uno de nosotros,

con lo cual nuestra tarea primordial es trabajar en una transformación radical,

fomentar estilos de vida alternativos, una nueva cultura caracterizada por el

respeto a la creación, simplicidad y solidaridad, para un mayor desarrollo humano,

verdadero y con calidad de vida. Aunque los pobres sean marginados, en su lucha

diaria para sobrevivir demuestran mucha creatividad y han trabajado alternativas

que constituyen para nosotros una gran fuente de aprendizaje y de referencia a la

hora de adoptar políticas de incidencia. Hacemos un llamamiento para adoptar,

durante la Conferencia de Rio +20, cambios estructurales que permitan a las

mujeres y a los hombres alcanzar su pleno potencial en igualdad de condiciones.

Es el momento de replantear todo y tomar el control! Ya es hora de regular el

mercado para que sirva al bien común. Los líderes mundiales se fijan en el

crecimiento económico como principal medida de éxito. No obstante, ¿qué significa

realmente el concepto del «crecimiento económico» si tomamos en cuenta el hecho

de que los más pobres no pueden participar en éste, si nuestra calidad de vida no

mejora y las desigualdades persistentes se profundizan aún más? ¿Qué significa

este mismo concepto si implica la destrucción de nuestros bosques, nuestros

océanos y nuestros recursos naturales? Necesitamos medir las cosas que importan,

midamos de qué manera la economía está reduciendo la pobreza, creando modos

de vida y trabajos dignos, mejorando la sostenibilidad ecológica y la estabilidad

social. Una economía que nos lleve realmente al desarrollo sostenible tiene que ser

justa y equitativa, reconociendo de forma adecuada la contribución valiosa de los

enfoques locales que generan ventajas sociales y, sobre todo, respetan la dignidad

y los derechos humanos de mujeres y hombres.

El desarrollo sostenible tiene que ser la base de un sistema financiero debidamente

diseñado y regulado, que ponga la dignidad humana, el interés común y el cuidado

de la creación en el centro de la vida económica. Son elementos fundamentales de

un sistema financiero justo, la subsidiariedad y el mantenimiento de la función

social de la propiedad privada, además de la redistribución a través de los

impuestos. Es necesario dar reconocimiento y apoyo al pequeño e informal sector

que constituye una parte importante del sector privado y es fuente de ingresos y

empleo para millones de personas pobres. Las instituciones financieras que forman

parte de las grandes corporaciones sólo representan una pequeña parte del sector

privado; sin embargo, tienen el mando de la mayoría del poder y los recursos, se

les deberá exigir que demuestren cómo están contribuyendo al desarrollo sostenible

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por medio de su transparencia cada vez mayor y el cambio de sus prácticas

insostenibles y explotadoras.

Los gobiernos deberán asegurar que los marcos normativos prioricen las

necesidades y los derechos básicos de las comunidades y los países pobres para

que éstos tengan suficiente acceso al agua, al alimento y la energía, y asegurarse

también de que reciban beneficios por comercializar sus recursos naturales.

Debe darse prioridad a las mujeres, porque son ellas las que constituyen la mayoría

de la gente que vive en la pobreza y las que se ven más afectadas por las

desigualdades sociales, medioambientales y económicas. Por ello, en el eje de las

políticas de los gobiernos, se deberán adoptar fuertes medidas para fomentar la

igualdad entre mujeres y hombres a nivel social, económico y medioambiental para

el desarrollo justo y sostenible.

El escándalo de que mil millones de personas están pasando hambre quebranta el

derecho humano a la alimentación, y no puede continuar. Hay que aportar un

mayor apoyo a los millones de campesinas y campesinos que trabajan en armonía

con el medioambiente; ellos suponen la fuente más importante en materia de

seguridad alimentaria para los más pobres.

En definitiva, hay que realizar esfuerzos para tratar con urgencia el cambio

climático de origen antropogénico – esa es la amenaza más acuciante (de los más

pobres en particular) a la que ahora nos enfrentamos. Se deben tomar acciones

más ambiciosas, basadas en los principios clave de la Convención Marco de las

Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

Por último, el marco esbozado para desarrollo sostenible deberá capitalizar también

los logros obtenidos; dirigiendo responsabilidades y retos de desarrollo en países

desarrollados y menos desarrollados; deberá ser medible y comprensible para todo

el mundo.

¡Esperamos que la Conferencia de Rio+20 finalice con un mensaje bien

fundamentado de esperanza para todas las generaciones venideras!

Esperamos que los líderes mundiales asuman su responsabilidad y la

obligación moral de sus actos. Hoy hacemos un llamamiento a los líderes

mundiales y a todas las personas de bien, a que sean conscientes de que

tienen la oportunidad de hacer el camino de forma conjunta, un camino

hacia un desarrollo equitativo y basado en los derechos humanos, hacia

una vida verdaderamente humana, hacia un mundo en el que aceptemos

que somos parte de la creación que nos ha sido dada para salvaguardarla.

Lista de los firmantes

Líderes de la iglesia:

• Mgr Pedro Ricardo BARRETO JIMENO – Archbishop of Huancayo and President of

the

Commission for Justice and Solidarity of CELAM (Consejo Episcopal

Latinoamericano) (PERU)

• Mgr Jean-Claude HOLLERICH – Archbishop of Luxembourg (LUXEMBOURG)

• Mgr Gabriel MBILINGI – Vice President of SECAM (Symposium of Episcopal

Conferences of Africa and Madagascar), Archbishop of Lubango (ANGOLA)

• Mgr Paul OUEDRAOGO – Archbishop of Bobo-Dioulasso (BURKINA FASO)

• Mgr Werner THISSEN – Archbishop of Hamburg (GERMANY)

• Mgr John ARNOLD – Auxiliary Bishop of Westminster (ENGLAND)

• Mgr Paul BEMILE – Bishop of Wa (GHANA)

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• Mgr Markus BÜCHEL – Bischop of St. Gallen (SWITZERLAND)

• Mgr Claude CHAMPAGNE – Bishop of Edmundston, New Brunswick (CANADA)

• Mgr Raymond FIELD – Auxiliary Bishop of Dublin and Chairman of the Council for

Justice and Peace of the Irish Bishops’ Conference (IRELAND)

• Mgr Theotonius GOMES – Auxiliary Bishop of Dhaka (BANGLADESH)

• Mgr Richard GRECCO – Bishop of Charlottetown, Prince Edward Island (CANADA)

• Mgr Bernard HOUSSET – Bishop of La Rochelle (-Saintes) and President of the

Conseil pour la Solidarité (FRANCE)

• Mgr Aloysius JOUSTEN – Bishop of Liège (BELGIUM)

• Mgr John KIRBY – Bishop of Clonfert (IRELAND)

• Mgr Gerard de KORTE – Bishop of Groningen-Leeuwarden (THE NETHERLANDS)

• Mgr Peter MORAN – Bishop Emeritus of Aberdeen (SCOTLAND)

• Mgr Alvaro Leonel RAMAZZINI – Bishop of Huehuetenango (GUATEMALA)

• Mgr Josef SAYER (GERMANY)

• Mgr Dr. Ludwig SCHWARZ SDB – Bishop of Linz (AUSTRIA)

• Presidency of the Brazilian Catholic Bishops Conference CNBB (BRAZIL)

Líderes CIDSE

• Chris BAIN – President of CIDSE and Director of CAFOD (ENGLAND and WALES)

• Philippa BONELLA – SCIAF (SCOTLAND)

• Ronald BREAU – President of Development and Peace (CANADA)

• Michael CASEY – Executive Director of Development and Peace (CANADA)

• Myriam GARCÍA ABRISQUETA – President of Manos Unidas (SPAIN)

• René GROTENHUIS – Director of CORDAID (THE NETHERLANDS)

• Antonio HAUTLE – Director of Fastenopfer (SWITZERLAND)

• Lieve HERIJGERS – Director of BROEDERLIJK DELEN (BELGIUM)

• Heinz HÖDL – Director of Koordinierungsstelle der Österreichischen

Bischofskonferenz für internationale Entwicklung und Mission (AUSTRIA)

• Jim HUG S.J. – President of Center of Concern (UNITED STATES)

• Justin KILCULLEN – Director of Trócaire (IRELAND)

• Patrick KRÃNIPÎ GODAR – Director of Fondation Bridderlech Deelen

(LUXEMBOURG)

• Jorge LÍBANO MONTEIRO – Director of FEC – Fundação Fé e Cooperação

(PORTUGAL)

• Sergio MARELLI – Secretary General of FOCSIV – Volontari nel mondo (ITALY)

• Bernd NILLES – Secretary General of CIDSE

• Bernard PINAUD – Délégué Général CCFD–Terre Solidaire (FRANCE)

• Rafael SERRANO CASTRO – Secretary General of Manos Unidas (SPAIN)

• Angelo SIMONAZZI – Secretary General of Entraide et Fraternité (BELGIUM)

• Fr. Pirmin SPIEGEL – Director of MISEREOR (GERMANY)

Miembros y aliados de CIDSE

• Firmin ADJAHOSSOU – SECAM (Symposium of Episcopal Conferences of Africa

and Madagascar) (BENIN)

• Brian ASHLEY – AIDC (Alternative Information and Development Centre) (SOUTH

AFRICA)

• Sr. Denise BOYLE – Franciscans International

• Camille CHALMERS – PAPDA (Plate-forme Haïtienne de Plaidoyer pour un

Développement Alternatif) (HAITI)

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• Mamadou GOÏTA – ROPPA (Réseau des organisations paysannes et de

producteurs de l’Afrique de l’Ouest (WEST AFRICA)

• Pedro GONTIJO – CBJP (Comissão Brasileira Justiça e Paz) (BRAZIL)

• Jenny GRUENBERGER – LIDEMA (Liga de Defensa del Medio Ambiente) (BOLIVIA)

• Ivo LESBAUPIN – Iser Assessoria (BRAZIL)

• Fr. Martinho MAULANO – SECAM (Symposium of Episcopal Conferences of Africa

and Madagascar) (MOZAMBIQUE)

• Moema de MIRANDA – IBASE (BRAZIL)

• Paul MUCHENA – SECAM (Symposium of Episcopal Conferences of Africa and

Madagascar) (ZIMBABWE)

• Fr. Ferdinand MUHIGIRWA RUSEMBUKA – CEPAS (Centre d’études pour l’action

sociale) (CONGO-DRC)

• Francis F. NGANG – Inades Formation International (IVORY COAST)

• Br. Rodrigo de Castro Amédée PERET, ofm – Franciscans (BRAZIL)

• Regina “Nanette” SALVADOR-ANTEQUISA – ECOWEB (Ecosystems Work for

Essential Benefits, Inc.) (PHILIPPINES)

• L.A. SAMY –AREDS (Association of Rural Education and Development Service)

(INDIA)

• Lorenzo SOLIS TITO – CIPCA (Centro de Investigación y Promoción del

Campesinado) (BOLIVIA)

• Can TRUONG QUOC – SRD (Sustainable Rural Development) (VIETNAM)

• COPAGEN (Coalition pour la protection du patrimoine génétique Africain)

(AFRICA)

¿Qué significa Río+20 para mí?

Peter Henriot, SJ

Junio 18, 2012

Mientras escribo esta breve nota, estoy temblando de frío con este clima

inesperado de principios de junio aquí en Lilongüe, Malawi. ¡El invierno se supone

que no llega hasta julio! Y estoy

recordando que las lluvias, tan

importantes para nuestros cultivos de

maíz, no comenzaron como de

costumbre a finales de octubre del

año pasado, sino que hubo que

esperar hasta principios de

diciembre. Y entonces la lluvia

“inesperada” se detuvo y comenzó de

nuevo, en dos ocasiones,

preocupando no sólo a los

agricultores.

Sí, “inesperado y fuera de

temporada” parece ser la mejor manera de describir nuestro clima en Malawi – y el

clima de gran parte del sur de África en este tiempo. Se dice que la causa es debida

al “cambio climático,” y si esto sigue así, estaremos en problemas aún mayores.

¿Qué significa esto para mí, jesuita originario de EE.UU. que ha vivido en Zambia y

Malawi desde hace más de dos décadas?

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He visto las consecuencias de ese “cambio climático” en los patrones climáticos

erráticos que nos afectan a todos hoy día: los efectos devastadores de intensas

lluvias, el cambio de los patrones de las precipitaciones, inundaciones, sequías y

períodos prolongados de sequía. En un país donde se produce más del 80% de los

alimentos por los pequeños agricultores, tales patrones erráticos significan más

hambre, más muertes infantiles y maternas, y más pobreza por todas partes.

Oigo a la gente preguntarse qué está pasando ¿A qué se debe todo este cambio?

¿Quién tiene la culpa? ¿Qué podemos hacer para estabilizar la situación? ¿Cómo

podemos hacer algo diferente?

Me gustaría pensar que las personas que se reunirán en Río de Janeiro para la gran

conferencia del “desarrollo sostenible” reflexionen sobre nuestra situación en

Malawi, y adopten las medidas globales necesarias que marquen una diferencia con

el pasado. Pero yo sé también que tenemos que hacer algunas cosas aquí en

Malawi para marcar sea diferencia.

Pues bien, de una manera modesta, los jesuitas tratamos de marcar una diferencia.

En una nueva escuela secundaria que estamos empezando en una zona rural pobre

de este país (Kasungu), estamos haciendo hincapié en algunos de los conceptos

“verdes” que deben ser puestos en práctica. Vamos a tener una escuela e internado

para 500 jóvenes que tratará de ser “sostenible” para que sea más que el tema de

una gran conferencia.

En la construcción, vamos a usar ladrillos de barro sin cocer al horno que tendrían

el coste de quemar nuestros preciados árboles. En el mantenimiento, se prestará

especial atención al uso del agua y (si encontramos los fondos) trataremos de

introducir energía solar. El plan de estudios, que se enseñará incluirá conciencia

medioambiental, no sólo en las clases de ciencias, sino de una manera transversal

en todas las asignaturas. En la formación del personal docente, se requerirán

servicios que impliquen actividades relacionadas con los retos ecológicos locales

(por ejemplo, en la agricultura). Y en el estilo de vida y la espiritualidad, vamos a

tratar de poner en práctica algunas de esas recomendaciones que acompañan al

reciente documento de la Compañía “Sanar un mundo herido.”

Rezo porque algo bueno y “sostenible” salga de la conferencia de Río+20. Pero

también rezo para que nosotros podamos hacer lo que consideremos oportuno aquí

en nuestra tierra y esto es ciertamente un reto imprevisto e inesperado por la

sociedad.

Peter Henriot, SJ dirigió el Centro de la Compañía para la reflexión Teológica en

Zambia entre 1990 y 2010, y ahora es el Directo del Departamento de Desarrollo

del colegio de secundarias Loyola de la en Malawi. Peter puede alcanzarse a través

de su correo electrónico: phenriot(at)jesuits.org.zm.

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Primeros pasos en Rio

Pedro Walpole & José Ignacio García

Junio 18, 2012

A medida que se acerca la inauguración de la conferencia de Naciones Unidas sobre

el Desarrollo Sostenible, más conocida como Rio+20, crecen las voces que

denuncian que ésta tendrá un resultado muy limitado o que incluso será un fracaso.

El recuerdo de lo sucedido en la Conferencia del Cambio Climático en Copenhague

hace que duden hasta los más optimistas. 20 años después de la Cumbre de la

Tierra, en la que la Agenda 21 se convirtió en hilo conductor para el cambio,

volvemos a reunirnos para discutir sobre las posibilidades del desarrollo sostenible.

Evidentemente no es fácil hacer una evaluación de veinte años de actividad. Si

consideramos las expectativas en reducción de la pobreza, acceso de millones de

personas a sanidad, educación o patrones de consumo tal y como ha sucedido en

los llamados BRICS (Brasil, Rusia, India, China) entonces sí tenemos motivos para

celebrar. Pero algunos de los temas

que se discutieron en el 92 en Rio no

sólo no han mejorado sino que han

empeorado. La pobreza extrema

sigue afectando a más de mil

millones de personas en el mundo, el

hambre, las hambrunas siguen

aconteciendo así como conflictos

armados y violencia. Lo que todavía

es más evidente es el efecto negativo

de la acción humana en su medio

ambiente (agotamiento de recursos

naturales, desertificación, polución) y

el continuo impacto del cambio climático, mantenido por el excesivo consumo de

algunos y su falta de solidaridad.

El reciente informe “Perspectivas del Medio Ambiente Mundial” o GEO-5 del

Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente afirma que: “Los cambios

que actualmente se observan en el sistema Tierra no tienen precedentes en la

historia de la humanidad. Los esfuerzos por reducir la velocidad o la magnitud de

los cambios – incluyendo una mejora en la eficiencia de los recursos y medidas de

mitigación – han dado resultados moderados pero no han conseguido revertir los

cambios ambientales adversos. En los últimos cinco años no han disminuido ni la

escala de los cambios ni su velocidad.”

La humanidad se está acercando a algunos umbrales como no lo había hecho nunca

antes, algunos los ha traspasado a nivel local o regional y en muchos otros estamos

muy cerca de hacerlo. La perspectiva global es hoy mucho más negativa, urgente y

grave que nunca. Por eso provoca más miedo la posibilidad de que Rio+20 puede

ser un nuevo fracaso a engrosar la larga lista de los fallidos procesos

internacionales por promover la sostenibilidad. Lo que está en juego es mucho más

que la reputación de los diplomáticos, y mucho más que la capacidad de las

Naciones Unidas por ser ese organismo que coordine las políticas globales. Es

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evidente que los gobiernos no se han centrado de la manera adecuada en estos

problemas durante las dos últimas décadas y ahora en medio de una devastadora

crisis financiera y un comercio internacional ingobernable es difícil imaginar que va

a surgir la voluntad política necesaria para responder a la degradación

medioambiental acumulada. Existe una gran preocupación por la falta de voluntad y

capacidad, de parte de los gobiernos y poderes económicos, para afrontar esta

situación. Sin duda que esto significa una mayor responsabilidad de parte de la

sociedad civil que tendrá que demandar las respuestas adecuadas.

Rio+20 comenzó el 13 de Junio con la 3ª Reunión del Comité Preparatorio que es el

órgano encargado de hacer que el borrador de 88 páginas con centenas de frases

entre paréntesis (que es el modo de la diplomacia para expresas el desacuerdo en

las negociaciones internacionales) se convierta en un documento listo para la

discusión y tal vez ser aprobado. Este Comité Preparatorio concluirá el 15 de Junio.

Desde el 15 se celebrarán los “Diálogos para el Desarrollo Sostenible” que es una

iniciativa especial que quiere acercar a la sociedad civil, el sector privado, las

organizaciones no gubernamentales y la comunidad científica para discutir

cuestiones fundamentales sobre el desarrollo sostenible. El objetivo es obtener

conclusiones que se puedan incorporar a la discusión del documento oficial de la

conferencia.

El miércoles 20 de junio se celebrará la sesión de apertura de la Conferencia del

Segmento de Alto Nivel que reunirá a Jefes de Estado y de Gobierno de 115

estados. Las conclusiones de esta conferencia están previstas para el 15 de junio.

Los dos temas principales de esta conferencia son “una economía verde” y la

“reducción de la pobreza.” Este segundo tema es mucho más conocido aunque

también genera cuestiones, especialmente en las formas que se están adoptando

para erradicar situaciones tan dramáticas. Por otro lado, el concepto “economía

verde” está lleno de ambigüedades y no admite una interpretación unívoca. No se

está seguro de la capacidad de este concepto “verde” de promover los cambios

necesarios para transformar la estructura económica actual y asumir los posibles

costes. La dificultad del concepto “economía verde” se muestra en la dificultad de

formular un borrador de documento conjunto para países desarrollados y menos

desarrollados.

Pero Rio+20 será mucho más que esto. La ciudad va a acoger a decenas de miles

de participantes en la Cumbre de los Pueblos, un evento semejante al Foro Social

Mundial que nación precisamente en Brasil. Serán dos semanas de presentaciones,

mesas redondas, encuentros, debates e incluso liturgias. La Cumbre de los Pueblos

cuenta con un apoyo importante del gobierno de Brasil que quería que Rio se

asociase con un lugar de amplia participación social y no sólo como el lugar del

encuentro.

Se ha buscado la manera de conectar la Cumbre de los Pueblos con la Conferencia

de Naciones Unidas, para ello una plataforma virtual permitirá trasladar a la

conferencia oficial los acuerdos de la Cumbre de los Pueblos. Rio quiere promover la

participación para mostrar que necesitamos un auténtico proceso desde abajo hacia

arriba, que permita que la sostenibilidad sea algo real y no otra materia objeto de

comercio.

Ecojesuit, junto con algunos jesuitas y amigos, seguirá esta Conferencia desde Rio

y tratará de acercar los debates tanto de la Conferencia de Naciones Unidas como

de la Cumbre de los Pueblos. Queremos colaborar a generar un debate abierto.

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Martes 19 de Junio 2012

Segundo día desde Río. Poco a poco, la Conferencia va tomando forma. Hoy hemos

tenido la oportunidad de asistir a varias presentaciones y hemos empezado a tomar

el pulso a Río+20: muchas personas de todo el mundo, una gran cantidad de

energía y un temor, no oculto, sobre los resultados. A partir de hoy una oración

preparada por el Comité Ejecutivo de las Comunidades de Vida Cristiana

acompañará a nuestros artículos. Es una manera visible para mostrar la dimensión

creyente de nuestro compromiso. Gracias a las CVX y esperamos que disfruten

esta edición de Ecojesuit.

El equipo Ecojesuit

Guía de oración para acompañar nuestra presencia en la Conferencia de

Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible (Río+20) y Cumbre de los

Pueblos Río de janeiro, Brasil, junio 2012

Junio 19, 2012

Introducción

La familia ignaciana – inspirada en nuestro fundamento vital, la espiritualidad de los

Ejercicios de San Ignacio – asume una tarea de promover los valores de un mundo

nuevo posible, a la manera del reino que Jesús nos ha mostrado; y cada vez más lo

hace de manera más articulada: como verdadero cuerpo apostólico que se va

tejiendo alrededor del llamado a la promoción de la justicia y la opción preferencial

por los más pobres. En ese sentido, como instancias ignacianas hermanadas en la

misión, participamos activamente de diversas redes de acción social, y es por ello

que nos sentimos interpelados por los temas más apremiantes del mundo de hoy.

El tema medioambiental y todo lo referente a la ecología, entre muchos otros que

representan los asuntos que impiden a las personas tener una vida digna, son

cruciales por la manera en que reflejan la vulnerabilidad de la creación y la

humanidad hoy, y por su importancia ineludible para el futuro de las próximas

generaciones.

Es en ese contexto que algunos miembros de la familia Ignacia – a través de la

Comunidad de Vida Cristiana (CVX), el Secretariado de Justicia Social y Ecología de

la Compañía de Jesús, del sector social de la Conferencia de Provinciales Jesuitas de

América Latina (CPAL), de la RED Ecojesuit, el Equipo Itinerante Amazónico, y Fe y

Alegría – se han articulado para participar en la Conferencia de Naciones Unidas

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sobre Desarrollo Sostenible, o Río+20, en Junio de 2012. Un importante grupo de

personas estará participando de distintos países, tratando de fortalecer la presencia

ignaciana en esta importante instancia de Naciones Unidas, en la Cumbre de los

Pueblos (evento paralelo de la sociedad civil) y en actividades de reflexión e

intercambio. Esto, como un genuino intento por focalizar nuestras acciones

alrededor de la temática ambiental, los modelos de desarrollo orientados a la

acumulación y a un crecimiento ilimitado dentro de un planeta finito, con la

esperanza de trazar algunas proyecciones de compromiso a futuro como RED

ignaciana en este sentido. Por este motivo, queremos que esta sea una experiencia

genuina de presencia como Cuerpo Apostólico ampliado. Para este fin, presentamos

a ustedes esta guía de oración y reflexión para que todas las personas de nuestras

redes que tengan interés, puedan acompañarnos en este proceso.

Metodología

A continuación se presenta una sencilla guía, la cual pretende animar la oración-

reflexión, mediante la cual todos nos sintamos igualmente partícipes de este

proceso. La guía está construida a partir de 4 momentos, un momento preparatorio

“contemplar” que se sugiere realizar hasta el día 19 de Junio, y tres momentos

(ver, juzgar, y actuar) para realizar durante las 3 jornadas de la Río+20 durante los

días 20, 21 y 22 de Junio.

Cada jornada de oración-reflexión, la cual esperamos se realice de manera

comunitaria, aunque también puede hacerse personalmente, incluye:

A) Contexto preparatorio de la jornada

B) Frase clave para inspirar el momento

C) Texto base para la reflexión

D) Una sencilla guía para la reflexión

E) Una oración de cierre, y

F) Un material audiovisual complementario.

Solicitamos a todos los que participen nos escriban las reflexiones resultantes de

estos espacios de oración comunitaria y personal a los correos mauriciol@cvx-

clc.net y [email protected], de forma que podamos compartirlas en nuestros

distintos espacios de difusión, junto con los informes de nuestra presencia en la

Río+20.

Asimismo, aunado a esta guía de oración, se enviará día con día un boletín de

noticias de los principales acontecimientos de la Río+20; esto dentro de un equipo

de trabajo coordinado por la red de incidencia internacional de la Compañía de

Jesús para el tema “Ecología,” ECOJESUIT.

Oración para 19 Junio, RÍO+20

CONTEMPLAR

A. Contexto como preparación de la jornada: La Encarnación

Las tres Personas divinas, contemplando a toda la humanidad tan dividida por el

pecado, deciden darse completamente a los hombres para liberarlos de todas sus

cadenas. Por amor, el Verbo se encarnó y nació de María, la Virgen pobre de

Nazareth.

Inserto así entre los pobres, y compartiendo con ellos su condición, Jesús nos invita

a todos a entregarnos continuamente a Dios y a trabajar por la unión de la familia

humana. Esta entrega de Dios a los hombres y de los hombres a Dios se sigue

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realizando hoy, bajo la moción del Espíritu Santo, en todas nuestras diversas

circunstancias particulares” (Princ. Grales. CVX. No. 1).

B. Frase clave: “Vino, pues, el Hijo, enviado por el Padre, que nos eligió en Él

antes de la creación del mundo, y nos predestinó a la adopción de hijos, porque en

Él se ha complacido en restaurar todas las cosas (cf. Ef. 1, 4-5 y 10)” (Lumen

Gentium No. 3).

C. Texto base para la reflexión pastoral:

“Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro

tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la vez gozos y

esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo. Nada hay

verdaderamente humano que no encuentre eco en su corazón. La comunidad

cristiana está integrada por hombres que, reunidos en Cristo, son guiados por el

Espíritu Santo en su peregrinar hacia el reino del Padre…. La Iglesia se siente

íntima y realmente solidaria del género humano y su historia” (Gaudium Et Spes

No. 1).

“Siempre se ha esforzado el hombre con su trabajo y con su ingenio en

perfeccionar su vida; pero en nuestros días, gracias a la ciencia y la técnica, ha

logrado dilatar y sigue dilatando el campo de su dominio sobre casi toda la

naturaleza… De lo que resulta que gran número de bienes que antes el hombre

esperaba alcanzar sobre todo de las fuerzas superiores, hoy los obtiene por sí

mismo. Ante este gigantesco esfuerzo que afecta ya a todo el género humano,

surgen entre los hombres muchas preguntas. ¿Qué sentido y valor tiene esa

actividad? ¿Cuál es el uso que hay que hacer de todas estas cosas? ¿A qué fin

deben tender los esfuerzos de individuos y colectividades?” (Gaudium Et Spes No.

33).

D. Guía de reflexión:

- ¿Cuáles son nuestras primeras reacciones y percepciones sobre el tema

ecológico? ¿Cuánto entendemos y sentimos el tema?

- Como cristianos miembros de la familia ignaciana, ¿Cuánto nos falta por asumir

este tema como una prioridad ineludible en nuestra identidad y cómo hacer para

integrarlo seriamente?

- Como comunidades ignacianas y como personas ¿Qué invitaciones concretas

recibimos del Dios de la vida con respecto a la temática ambiental? ¿Qué podemos

hacer al respecto?

E. Oración de cierre: Alabado seas por toda criatura, mi Señor, y en especial seas

bendecido por el hermano sol, que alumbra, y abre el día, y es bello en su

esplendor, y lleva por los cielos noticia de su autor. ¡No probarán la muerte de la

condenación! Servidle con ternura y humilde corazón. Agradeced sus dones, cantad

su creación. Las criaturas todas, bendecid a mi Señor. Amén. (San Francisco de

Asís).

F. Material de apoyo: Principle and Foundation, Spiritual Exercises 23

El futuro que queremos

Jaime Tatay, SJ

Junio 19, 2012

“Aspiramos a nada menos que a un movimiento global capaz de general un cambio

generacional. Espero que los negociadores (…) alcancen un compromiso político

renovado por el desarrollo sostenible,” afirmó recientemente said Ban Ki Moon,

15

secretario general de las Naciones

Unidas. ¿Resultará fácil alcanzar el

acuerdo político y el compromiso

necesario para alcanzar semejante

cambio?

Ciertamente no va a ser sencillo.

Durante los próximos días, en la

cumbre de la ONU sobre Desarrollo

Sostenible (Rio+20), tres problemas

deben ser abordados para poder

alcanzar el cambio generacional

requerido: clarificar el significado y los objetivos del desarrollo sostenible, definir el

concepto de economía verde y perfilar el marco institucional necesario para

articular el cambio.

Más de cien jefes de estado y de gobierno participarán de la cumbre de Rio+20,

haciendo de esta conferencia el encuentro internacional más importante del año.

Pero a pesar de la amplia y variada representación institucional, los problemas a los

que se enfrentan los participantes parecen haberse convertido “en impedimentos

difíciles” de sortear en el camino hacia un futuro sostenible.

El “documento cero”, publicado en Enero de 2012, reafirmó los principios de Río y

los planes de acción previos, intentando definir la economía verde, el marco

institucional necesario en el contexto del desarrollo sostenible y la erradicación de

la pobreza. Importantes divergencias entre los negociadores, sin embargo, han

emergido en todos estos campos.

Martin Khor, miembro del Third World Network, ha expresado crudamente las

divergencias existentes entre distintas naciones en Río del siguiente modo:

“Desgraciadamente, la cumbre tiene lugar en un momento en el que países

desarrollados y en vías de desarrollo parecen cada vez menos capaces de alcanzar

un entendimiento en temas claves y principios. La distancia entre el norte y el sur

se ha hecho patente en las negociaciones de la Organización Mundial del Comercio,

en la convención sobre Cambio Climático y, más recientemente, en la conferencia

de la ONU sobre comercio y desarrollo. La misma distancia existe en las

negociaciones de Rio+20.”

El compromiso de las naciones más desarrolladas en Rio 92 para la transferencia de

tecnología y asistencia financiera a las menos desarrolladas y el principio de

responsabilidades comunes pero diferenciadas (CBDR, en inglés) ya no pueden

darse por sentado. En un momento en que las naciones más ricas sufren una

creciente presión económica y una mayor inestabilidad política, estas naciones

están tentadas de olvidar lo que ya habían aceptado: “la responsabilidad que tienen

en la búsqueda internacional del desarrollo sustentable, en virtud de las presiones

que sus sociedades imponen al medio ambiente global y de la tecnología y recursos

financieros de que disponen.” Las naciones más ricas tienen una mayor

responsabilidad en la búsqueda de una salida a los problemas planteados en Rio.

Cuarenta años después de Stockholm 72 y veinte después de Rio 92, está en juego

la capacidad de nuestras sociedades para establecer políticas a corto plazo, diseñar

cambios estructurales a largo plazo y promover transformaciones estructurales en

la dirección de los Objetivos de desarrollo del Milenio.

El norte, donde sigue estando buena parte de la riqueza, está tentado de hacer

marcha atrás respecto a sus compromisos anteriores en el camino hacia Río. Pero

no todo está perdido, Río+20 y las numerosas iniciativas de la sociedad civil siguen

16

siendo una oportunidad para articular una respuesta valiente, construir

capacidades, traducirlas en políticas, crear una visión común, generar contratos

sociales amplios y compartir valores basados en la sostenibilidad medioambiental,

la prosperidad económica y la equidad social.

Principios para una Ciudad Justa

Pedro Walpole

Junio 19, 2012

Aunque el resultado de las negociaciones de alto nivel, en estos momentos, puede

ser bastante incierto no hay duda de la calidad de las presentaciones paralelas.

Nadie debería dejar Rio sin aprender algo valioso; es una enorme plataforma de

aprendizaje. La Fundación Ford acaba de celebrar una valiosa sesión sobre la

“Ciudad Justa y Sostenible).” En este link encontrará los datos de los intervinientes

y resumiré el diálogo sin ajustarme a las intervenciones individuales porque el

diálogo fue rápido y muchas las preguntas.

El problema identificado es que el crecimiento no va acompañado de educación y

los emigrantes desplazados a las ciudades del mundo necesitan oportunidades e

infraestructuras. Las dinámicas emergentes de las necesidades de los pobres que

deben ser reconocidas como sus

capacidades y los gobiernos que

deben proveer las infraestructuras en

este contexto permitiendo la

creatividad y la participación de los

asentamientos en la vida ciudadana.

Las sociedades tienen que reconocer

que estas personas existen en

nuestras ciudades, reconocimiento

que tienen de facto -y que debiera

ser suficiente- que la tierra sobre la que han construido les pertenece, entonces

apoyarles en las inversiones necesarias en sus viviendas. Escuchar estos

argumentos en una mesa redonda con funcionarios de gobiernos y de agencias

internacionales debe ser increíble para agentes inmobiliarios que a través de los

sistemas legales que permiten reclamar la propiedad en ausencia de títulos legales

y los desalojos administrativos en favor de los desarrollos urbanísticos dejan poco

terreno para los pobres.

La mitad de la población mundial vive actualmente en ciudades y los pobres siguen

nutriendo la migración. La urbanización ha reducido la exclusión y la pobreza,

aunque el contraste con la riqueza en las ciudades destaca todavía más que es algo

inaceptable. En las zonas rurales la pobreza y la exclusión social permanecen

ocultas en gran medida.

Desde Rio 92 ya no se intenta detener la emigración a las ciudades y la orientación

ha cambiado , las zonas de realojo ya no se ven sólo como un lugar de alojamiento

sino como de alojamiento y comercio; se necesita reconocer el derecho a disfrutar

una vivienda, tener un sustento y disfrutar de seguridad.

Las viviendas sociales, en muchos casos, han provocado más marginación en las

afueras de las ciudades, y aunque se transforme esos barrios siguen sin disfrutar

de oportunidades. Las viviendas sociales en Santiago de Chile se presentaron como

ejemplo de fracaso para promover auténticos hogares. El movimiento de los pobres

17

hacia las ciudades genera valor, incluso valor económico, pues se deben extender

los servicios para atender a las necesidades y ofrecer oportunidades a estas

personas. Se debatió si las ciudades que han organizado juegos Olímpicos han

alcanzado un mayor desarrollo social por la incorporación de personas pobres a

través de las nuevas infraestructuras creadas.

En la discusión se acudió numerosas veces a la los “Principios de la Ciudad Justa),”

que se han identificado inicialmente como tres:

“El primer principio es el de densidad. Abundante investigación confirma que la

densidad aumenta la creatividad, la energía empresarial y el empleo. Al mismo

tiempo, la densidad es la clave para mitigar el cambio climático, asegurando que

los residentes están cerca de donde viven y trabajan.

“El segundo principio es la diversidad. Las ciudades que son incluyentes y

activamente acogen la diversidad experimentan no sólo más rápido sino también

mejor crecimiento.

“El tercer principio es una buena planificación del uso del suelo y su regulazación.

Las ciudades sostenibles debe estar bien planeadas, diseñadas para el uso eficiente

de la tierra y de la energía, y capaces de maximizar las oportunidades económicas

para todos los residentes. Del mismo modo, dando a los residentes la propiedad de

la tierra y reconocimiento a niveles municipal y provincial favorece la energía

creativa y el crecimiento, al mismo tiempo promueve un compromiso más profundo

de los residentes urbanos con la sostenibilidad de sus comunidades. La concesión

de derechos de residencia permite a los residentes y les da una participación para

el desarrollo sostenible de sus propias ciudades. Se convierte en una fuerza de

cambio que es mucho más poderoso que cualquier cosa que se pueda diseñar en su

nombre desde el exterior.”

Geroge McCarthy, Director de Oportunidades en la Ciudad, de las Fundación Ford,

debe ser mencionado por sus comentarios y estricta gestión del tiempo de discusión

en el debate. Al ser preguntado Luis Ubiñas, Presidente de la Fundación Ford,

reiteró su compromiso por reducir el número de coches particulares y mejorar el

transporte público como un objetivo básico para las ciudades, una obviedad, como

indicó.

Yo comenté la realidad en Filipinas y en otros muchos lugares de Asia donde crecen

las catástrofes, las pérdidas de vidas humanas, las viviendas y la seguridad de los

hogares. ¿No debería ser el cambio climático un elemento fundamental para el

diseño de ciudades hoy? ¿No debería incluirse como un principio? La gente

respondió con “diseño regenerativo” de la ecología y el reconocimiento de

diferentes habitats en la city; la rehabilitación de ríos es esencial para poder

afrontar algunos desastres naturales.

El programa brasileño “Mi casa, Mi vida” fue comentado por Jorge Bittar, Secretario

Municipal de la Vivienda en la ciudad de Rio de Janeiro. Se debatió el grado de éxito

de este proyecto. Raquel Rolnik, Rapporteur Especial de las Naciones Unidas sobre

Vivienda Adecuada, destacó que “los problemas son que el sector privado define el

área dónde se localizan los pobres y que son las zonas de menor valor y mayor

riesgo.” Jeb Brugmann, fundador del ICLEI – Gobiernos Locales por la

Sostenibilidad, reconoce los riesgos y que el programa no ha funcionado tanto

como se esperaba.

Desigualdad provoca inestabilidad y se produce un grave conflicto a la hora de

situar los diferentes intereses. Uno de los participantes en la mesa redonda dijo:

“compiten intereses que necesitan ser compatibles.” Bien dicho, pero ¿cómo se

18

puede llegar a hacer esto sigue siendo un reto? y ¿cómo saber quién se pondrá del

lado de los pobres y cómo se les va a escuchar a ellos de una forma efectiva?

Se propusieron otros factores de enorme importancia: planificación, ingeniería y

etnografía, según Dr Xavier de Souza Briggs, Profesor Asociado de Sociología y

Planificación Urbana, en el Instituto Tecnológico de Massachusetts. La

heterogeneidad de culturas debería ser incorporada a una visión de la ciudad, un

principio hermoso, el reto es llevarlo a la realidad. Una ciudad basada en el bien

común y lo comunitario y no en lo privativo es algo fundamental para Raquel Rolnik

y el Dr Briggs añadiendo a los bienes y servicios públicos, la capacidad para

aprender a competir en el mercado.

La adaptación al clima tiene un doble efecto negativo por los pueblos, se necesita

redefinir la resilencia con respecto a la comida, el agua y la energía en niveles

determinados para su gestión – qué esperanza, y qué reto.

Caritas Internationalis: Todos hambrientos de justicia, equidad,

sostenibilidad ecológica y corresponsabilidad

José Ignacio García

Junio 19, 2012

Esta mañana Caritas Internationales

trajo a la Conferencia Rio+20 su

propia reflexión sobre las

posibilidades del desarrollo sostenible

a través de una “economía solidaria,”

esta expresión fue usada por

Benedicto XVI como la alternativa

necesaria entre un modelo binario

que sólo conoce el mercado y el

estado, “mientras que las formas de

economía solidaria, que encuentran su mejor terreno en la sociedad civil aunque no

se reducen a ella, crean sociabilidad” (CIV 39).

Caritas Internationalis describe “economía solidaria” como un modo alternativo en

las relaciones económicas en el cual la persona se pone en el centro y no el

mercado. Que “cambia el paradigma al establecer un intercambio cooperativo, por

un lado las asociaciones de productores creadas para ofrecer productos en mayor

cantidad y calidad (p.ej. consorcios solidarios de los productores de café o

artesanía) y, por el otro, consumidores que se agrupan para acceder a servicios y

bienes básicos (p.ej. organizaciones comunitarias, compras conjuntas, cooperativas

de consumo y usuarios) usando incluso instrumentos de financiación solidarios. La

economía solidaria es una estrategia global, con el potencial de incorporar a todos

los sectores y todas las fases de la economía: producción, distribución (comercio

justo, solidaridad financiera), consumo (ética del consumo) y la generación de

riqueza (desarrollo de la economía solidaría).”

Caritas ha traído a Rio muchos años de experiencia promoviendo este tipo de

relaciones económicas, especialmente en América Latina: cooperativas de

productores de café en Costa Rica o múltiples pequeñas iniciativas en Brasil,

especialmente llevadas a cabo por mujeres, que se han ido transformando en

importantes iniciativas1 que acercan a productores y consumidores son algunas de

las experiencias que se han presentado esta mañana en Rio.

19

Antes de esta Conferencia Caritas

Internationalis hizo público un

documento en el que tomaba

posición titulado: ¡Todos hambrientos

de justicia, equidad, sostenibilidad

medioambiental y

corresponsabilidad! Caritas afirma

que estamos atravesando una

combinación de crisis como nunca

habíamos sufrido antes, que estamos

afrontando cambios desconocidos

para el mundo y que todo ello “está

pidiendo un cambio de paradigma,

una nueva civilización de amor a la humanidad, que coloque la dignidad y el

bienestar de hombres y mujeres en el centro de la acción.”

Caritas propone que este cambio de paradigma esté regido por cinco principios:

1. Un futuro sin hambre. El derecho a la alimentación se debe garantizar a todos,

en todos los lugares

2. Un futuro con visión, más en concreto, Caritas propone que los Objetivos de

Desarrollo del Milenio se conviertan en esta visión que al mismo tiempo es una

especie de hoja de ruta hacia un mundo más justo

3. Un futuro en el que cuidemos nuestro hogar: la creación. El medioambiente

como “recurso” pone en peligro nuestro entorno como “hogar,” no se puede

asegurar la vida si el medioambiente no se respeta ni se protege.

4. Un futuro con un nuevo marco para la economía verde, que no se puede

comprender, de ninguna manera como seguir actuando del mismo modo como

hasta ahora, o una simple adaptación del sistema económico actual. La persona

debe ocupar el lugar central y el empleo debe estar en el centro de las futuras

transformaciones.

5. Un futuro que respete a los hombres y mujeres creados por Dios: un nuevo

contrato social que incluya la democracia participativa y promueva la dignidad

humana, el desarrollo humano sostenible y la distribución del riesgo.

La mayoría de nosotros estaríamos de acuerdo con estos cinco puntos, por

supuesto, añadiendo algunos elementos o insistiendo en otros, pero sin lugar a

duda apreciamos la decisión y la valentía de Caritas. Cuando tantas personas, a

veces nosotros mismos, nos quejamos de la falta de visión sobre el futuro es muy

de agradecer que Caritas haga propuestas concretas precisamente en el momento

de estas discusiones aquí en Rio. 1 El documento “20 años de Economía Popular Solidária” puede ser visto o

descargado en Cáritas Brasileira como documento pdf.

Río+20: ¿Demasiado poco y demasiado tarde?

Fernando F. Franco

Junio 19, 2012

Tuve la gran suerte de ser miembro de un grupo de 22 jesuitas y laicos que

asistieron a la Cumbre sobre Desarrollo Sostenible celebrada en Johannesburgo en

septiembre de 2002: un punto medio entre la Conferencia de Naciones Unidas

sobre Medio Ambiente y Desarrollo (CNUMAD), celebrada en Río en 1992, y la

20

próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible en Río en

2012 (Río+20). En un artículo que escribí tras la Cumbre de Johannesburgo llegué

a la conclusión de que “nos quedamos con la convicción abrumadora de que el

actual desequilibrio político y económico de poder en el mundo no va a permitir un

cambio significativo.”

En este artículo argumento que los últimos diez años, en lugar de desmentir esta

predicción negativa, la han fortalecido. Soy consciente de que después de

innumerables esfuerzos, se ha avanzado lentamente en el fomento de las políticas

ambientales. La percepción de la realidad y la conciencia de la población se han

vuelto más sensibles a la necesidad del desarrollo sostenible. Muchos activistas, sin

embargo, comparten perplejos una fuerte inquietud ¿hemos perdido el impulso? Yo

comparto también esas dudas. Mi argumento es que los frutos de una política

gradual de “pequeños pasos” pueden haber llegado a un callejón sin salida.

Permítanme esbozar brevemente las principales razones para defender esta

posición.

En primer lugar, el contexto socio-cultural, político y económico del mundo actual

ha cambiado radicalmente: las promesas de la globalización para crear una aldea

global con beneficios para todos se han estancado. El ascenso político de los

extremismos de derecha e izquierda, dos caras de la misma moneda desesperada,

está destruyendo los espacios abiertos de la tolerancia humana adquirida en los

últimos 30 años. Los muros entre grupos, y entre las naciones; el endurecimiento

de las fronteras entre los que tienen y los que no tienen (la migración es sólo un

caso particular); y el uso cada vez mayor de fanatismos religiosos así como el

conservadurismo con fines políticos han hecho que la escena mundial sea muy

diferente del sueño de un mundo globalizado, y por lo tanto mejor. A esto hay que

añadir un conjunto de valores basado en la gratificación instantánea y la avidez

consumista generalizada, no sólo en las altas esferas, y la desaparición de los

conceptos de trabajo y desierto. El endurecimiento de las tendencias

proteccionistas y la “balcanización” del sistema bancario europeo en un momento

en el que la unificación y la supervisión financiera podrían salvar el euro convierten

el panorama en un escenario aún más sombrío. Para poner todo esto en una forma

provocativa: estamos asistiendo a un poderoso intento de erosionar y desmantelar

las bases de la equidad social, el acceso universal a las oportunidades, la

solidaridad comunitaria, y las capacidades de los estados para apoyar la codicia

común y el control del bien individual.

En segundo lugar, el surgimiento de los países BRIC (Brasil, Rusia, India, China),

con China e India como líderes de este grupo de naciones emergentes tienen como

lado positivo romper con la imagen de un mundo dominado por un poder político

único, pero en el lado negativo resultado rescatan el ideal de “crecimiento

económico a cualquier costo.” Con China y en particular con India sufriendo una

importante recesión económica, parece altamente improbable que vayan a apoyar

los cambios radicales de política en los asuntos pendientes o permitir la discusión

de retos importantes que han permanecido por mucho tiempo bajo la mesa.

En tercer lugar, el concepto de ‘economía verde’ propuesto como el nuevo

paradigma económico conlleva, en el contexto de recesión global, el peligro

inherente de debilitar el vínculo entre el medio ambiente, la equidad y los

componentes de desarrollo social (erradicación de la pobreza, creación de empleo,

alimentación, salud y educación). En un mundo de crecientes desigualdades esto

sería fatal para los pobres.

21

Cuarto, los países en desarrollo seguirán utilizando la compleja estructura de la

OMC para bloquear cualquier intento de eliminar los subsidios agrícolas y la

introducción de técnicas respetuosas con el medio ambiente. La tecnología

respetuosa con el clima apenas se ha implantado en países en desarrollo; esta

tendencia se verá reforzada y el Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de

Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio junto a los derechos de

propiedad intelectual se utilizará para bloquear futuras propuestas. Si esta política

de bloqueo de la transferencia de tecnología no ha cambia radicalmente, los países

BRICS comprensiblemente seguirán bloqueando sin piedad, y con eficacia, cualquier

intento de imponer restricciones a su patrón de producción y consumo energéticos.

En quinto lugar, los países en desarrollo han insistido en que los países

desarrollados deberían proveer “suficientes, nuevos y adicionales” medios

financieros para poner en práctica las nuevas propuestas. Estamos hablando de

propuestas de entre 500 y 1.000 millones de dólares al año. Sin embargo, la

predicción económica pesimista para los próximos dos años hará estas cifras

totalmente irreales.

En sexto lugar, haciendo frente a muchas metas no cumplidas de los Objetivos del

Milenio, los pobres de África y Asia, los indígenas y otras comunidades marginadas

socialmente se han vuelto cada vez más escépticos a las propuestas respaldadas

por sus propias élites políticas y países extranjeros. La confianza en la voluntad de

la clase política que mira más allá de sus propios y estrechos intereses desaparece

rápidamente en todas partes.

Para terminar, quisiera reconocer una vez más los logros positivos de los últimos 20

años obtenidos por aquellos que han defendido un enfoque “gradual.” He apoyado

este enfoque en el pasado. Los cambios en el contexto descrito anteriormente

sugieren que puede haber otros asuntos que participan desesperadamente los

oscuros rincones de las mentes y los corazones de la gente. También muestra que

la clase política está respondiendo a estos desafíos tarde y de una manera

desordenada. Lo que está en juego parece es tan fundamental que la política de dar

pequeños pasos puede llevarnos más cerca del precipicio.

Otras políticas más pragmáticas tendrán que aplicarse en algún momento…si llega

ese día!

Miércoles 20 de junio 2012

Hoy hemos vivido el tercer día en Río+20, en medio de intensos rumores sobre la

existencia de un borrador de documento final que contaría con bastante consenso.

Efectivamente el documento ha sido elaborado por el gobierno brasileño y hecho

público. La decepción sobre el documento es enorme. Confiemos en que los días

que quedan sirvan para mejorarlo.

Hoy comentamos la activa presencia de la Iglesia en Río+20, sin duda como

testimonio del compromiso de la Iglesia con el mundo, y especialmente con los que

más sufren. Encontrará también información sobre desplazamientos de personas a

causas de desastres naturales y una colaboración de Luis Arancibia, Director-

Adjunto de Entreculturas.

Muchas gracias por su apoyo durante Río+20!

Oración para el 20 de Junio 2012, Río+20

Junio 20, 2012

22

VER

A. Contexto como preparación de la jornada: La realidad actual [1]

El mundo en el que vivimos no es el paraíso que desearíamos. La mayor parte de

los problemas actuales del medio ambiente han sido generados por la acción

humana.

1. Presión continuada sobre los recursos naturales

2. Degradación creciente del medio ambiente debido a sistemas agrícolas

inadecuados y a la explotación insostenible de los recursos naturales

3. Grandes diferencias de ingresos entre ricos y pobres

4. Ausencia de acceso a servicios básicos, como educación, salud, etc

5. Urbanización rápida que genera un gran número de personas pobres y sin techo

en las ciudades

6. Consumismo creciente dentro de un paradigma económico que no paga los

costes del deterioro ecológico… y otros.

La crisis ecológica amenaza el sustento vital de todos los pueblos, especialmente el

de los más pobres y vulnerables: estos viven en contextos crecientemente frágiles

y caracterizados sobre todo por los riesgos naturales, las cambiantes condiciones

climáticas, la contaminación, la deforestación, la desertificación y el agotamiento

del suelo… El vínculo entre medioambiente y pobreza es insoslayable, ese es

nuestro desafío.

B. Frase clave: “La naturaleza es expresión de un proyecto de amor y de verdad.

Ella nos precede y nos ha sido dada por Dios como ámbito de vida. Nos habla del

Creador (cf Rm 1,20) y de su amor a la humanidad.” (Cáritas In Veritate No. 48)

C. Texto base para la reflexión pastoral:

“El tema del desarrollo está también muy unido hoy a los deberes que nacen de la

relación del hombre con el ambiente natural. Éste es un don de Dios para todos, y

su uso representa para nosotros una responsabilidad para con los pobres, las

generaciones futuras y toda la humanidad… La naturaleza está a nuestra

disposición no como un ‘montón de desechos esparcidos al azar,’ sino como un don

del Creador que ha diseñado sus estructuras intrínsecas para que el hombre

descubra las orientaciones que se deben seguir para ‘guardarla y cultivarla’ (cf Gn

2,15). Por tanto, los proyectos para un desarrollo humano integral no pueden

ignorar a las generaciones sucesivas, sino que han de caracterizarse por la

23

solidaridad y la justicia intergeneracional. El modo en que el hombre trata el

ambiente influye en la manera en que se trata a sí mismo, y viceversa. Esto exige

que la sociedad actual revise seriamente su estilo de vida. Es necesario un cambio

efectivo de mentalidad que nos lleve a adoptar nuevos estilos de vida.” (CIV No. 48

y 51)

D. Guía de reflexión:

¿Qué expresiones de esta vulneración de la creación podemos percibir en

nuestro contexto y qué impactos tiene en la población más vulnerable?

¿Cómo nos afecta directamente a nosotros esta situación?

¿Qué es lo que más nos duele y conmueve de esta realidad?

E. Oración de cierre: Y por la hermana agua, preciosa en su candor, que es útil,

casta, humilde: ¡Alabado sea mi Señor! Por el hermano fuego, que alumbra al irse

el sol, y es fuerte, hermoso, alegre: ¡bendito sea mi Señor! ¡No probarán la muerte

de la condenación! Servidle con ternura y humilde corazón. Agradeced sus dones,

cantad su creación. Las criaturas todas, bendecid a mi Señor. Amén. (San Francisco

de Asís).

F. Material de apoyo: La Historia de las Cosas

[1] Tomado de “Sanar un mundo herido” Informe especial sobre Ecología.

Secretariado de Justicia Social y la Ecología de la Compañía de Jesús. Roma, 2011.

La Cumbre de Río+20 en movimiento

Robert Athickal, SJ

Junio 20, 2012

Río de Janeiro. 18 de junio: La tan esperada Cumbre Rio+20 está en marcha. Más

de 20.000 personas han descendido a la metrópolis de Río de Janeiro. Los

auditorios, salas de encuentro, lugares para eventos paralelos y los puestos de

exposición se extienden en el área de Barra da Tijuca, que está a una hora de

coche de la ciudad. Cientos de autobuses alquilados por el gobierno llevan a los

delegados arriba y hacia abajo todo el día.

Había muchos puestos y salas a las que los participantes podrían optar por asistir a

los programas de su interés. Muchos procesos se están acabando y se preparan

para formar parte de la Declaración a los Líderes del Mundo del 20 de junio. Hay

sesiones interactivas especialmente entre las ONG y muchos Presidentes de los

órganos NU. Hasta ahora, los delegados gubernamentales han llegado a un

consenso del 37% del proyecto de trabajo.

24

Hay una cruda realidad que uno tiene que enfrentar, las

Naciones Unidas han estado en un punto muerto desde

hace varios años. La comunidad mundial está polarizado

en varios niveles. Los grandes luchadores son el G-77 y el

bloque de China y de 134 países del mundo en desarrollo y

el resto de los países desarrollados del mundo. El G-77 es

originalmente un grupo de co-fundado por la India, pero desde entonces se

ha convertido en uno de los bloques más sólido de países. China no se ha

unido a ellos en calidad de miembro, sino más bien los apoya. Así que el

grupo se conoce siempre como Grupo de los 77 y China.

Para citar un ejemplo de la polarización, la Hermana Misionera Médica Sor Céline le

contó esta mañana a un pequeño grupo de religiosos que el lobby de empresas que

gestionan el agua querían eliminar la palabra “derecho al agua” y sustituirla por

“acceso al agua” en el documento. Se sienten nerviosos cuando alguien habla en

aplicar el enfoque basado en los derechos a la ecología. Ambos campos están

hablando desde diferentes visiones del mundo y de los intereses. Las corporaciones

del primer mundo no pueden ponerse de acuerdo por el derecho humano al agua,

ya que significaría que tienen que pagar altos costos.

Así que el documento final al término de la Cumbre tendrá unas líneas más añadido

a la visión original de la Cumbre de Río de 1992. 20 años por lo tanto, la lucha

sigue encendida.

La trampa de esta lucha es que podría prolongarse hasta conseguir muchos más

años. Esto daría a la vez muy necesario para las empresas en el rastrillo de todos

los beneficios y llenar sus arcas. En la reunión de ONG se sugirió que unamos

nuestros recursos para movilizar a los mediadores aceptables, tales como Noruega

y Suecia, para presionar por un acuerdo anterior.

En las reuniones de la ONU no hay conversaciones nítidas y claras. Todo lo que uno

tiene que decir tiene que ser velado en frases diplomáticas y jergas.

El cabildeo es el camino hasta aquí. Tome un diplomático para tomar un café y

hablar con él / ella como si fueran las personas más importantes en el mundo.

Nunca aventurar algunas ideas claras, y no esperar a que la persona vaya pedir las

aclaraciones, así que con cuidado de su punto de vista sin que ellos sepan que

están presionando!

Hay muchas congregaciones religiosas que participan activamente en las

negociaciones y el cabildeo. Varios señalaron la ausencia de los jesuitas en estas

reuniones.

El Tarumitra, patrocinado por los jesuitas en India, ha traído una delegación de

estudiantes para organizar un evento paralelo sobre la necesidad de ahorrar

electricidad. El estudiante tribal, Shweta Marandi, en su presentación puso de

manifiesto la conexión entre el clamor de los pobres y el grito de la tierra. Ella

como Santhal también mostró cómo su comunidad fue diezmada por las

corporaciones con el apoyo del gobierno, que se mudó y desplazó a las

comunidades tribales del carbón. Ella afirmó categóricamente en su presentación,

“las bombillas eléctricas son alimentados por la sangre de los pueblos tribales

popular!”

Los teólogos como Leonardo Boff, los combatientes contra las patentes de las

semillas como Vandana Shiva, los científicos agrícolas como Miguel Altieri, etc se

ven regularmente en las reuniones de la creación de la opinión pública.

25

La temperatura de las reuniones se disparará cuando los líderes del mundo lleguen

el 20 de junio. El gobierno local ha declarado tres días de vacaciones para

mantener a los líderes del mundo lejos de los atascos de tráfico omnipresente!

Refugiados medioambientales en el marco del desarrollo sostenible

Pedro Walpole

Junio 20, 2012

Foto de: Mundial estima 2011 por el Observatorio de Desplazamiento Interno, el

Consejo Noruego para los Refugiados, junio 2012

“Más de un millón de personas han perdido la vida desde Rio ’92 en catástrofes

naturales … 4.4 millones han sido desplazados, la mayor parte de ellos desplazados

internos,” ha señalado Manuel Bessler, de la Ayuda Humanitaria Suiza. Al presentar

el Global Estimates for 2011 del IDMC, Elisabeth Rasmusson afirmó que el año

pasado el mayor número de desplazados se produjo en China debido a las

inundaciones provocadas por los monzones. En Sri Lanka, el drama de las

inundaciones se suma a la vulnerabilidad provocada por el conflicto armado que

sufre el país; el 3% de la población se vio desplazada, el porcentaje más alto de

todos los países.

Es evidente que las comunidades locales necesitan ser más resilientes. Se precisa

asegurar y planificar soluciones perdurables, garantizar la colaboración y el

compromiso a largo plazo. Se necesita también abordar las lagunas en el

conocimiento de la problemática. No hay cifras fiables de las personas atrapadas en

trampas medioambientales o afectadas por efectos a largo plazo como la sequía y

la degradación.

Moustafa Hussein Kamel (Ministro de medioambiente egipcio) dijo respecto al

cambio climático: el impacto de las altas temperaturas en el área, la escasez de

agua, la creciente salinización y el aumento del nivel del mar suponen un impacto

grave en el delta del Nilo. La combinación de estos elementos está afectando

especialmente las zonas costeras y el delta del Nilo – donde vive el 40% de la

población – afectando la agricultura, las pesquerías y el modo de vida de las

poblaciones locales. La vulnerabilidad de la población a otros tipos de desastres

aumenta la creciente inseguridad de la población, reduciendo su resiliencia.

Seethapathy Chander, del Banco de Desarrollo Asiático (BDA) habló de la necesidad

de abordar cuestiones legales para poder avanzar. Asia es una región

26

especialmente sensible ante los desastre naturales, un gran número de personas y

recursos están localizados en áreas de alto riesgo. El porcentaje de personas

viviendo en zonas inundables se ha incrementado en un 114%. El riesgo ha

aumentado en un 15%, a un ritmo más rápido que la creación de riqueza, donde

tan sólo un 3% de las pérdidas están aseguradas.

El BDA tiene un problema en su aproximación a la reducción de riesgo de desastres

ambientales: de los 2.5 billones de dólares invertidos, el 96% se han destinado a

mitigación y el 4% a adaptación. ¿Por qué? La falta de políticas adecuadas y

medidas de adaptación consonantes con el conocimiento científico son las

principales causas de la situación, a juicio de Señor Chander. El BDA trata ahora de

realizar informes mas detallados a nivel nacional. Las cifras globales de desastres

naturales son sorprendentes y cada incidente local resulta difícil de gestionar. Cerca

de 800 personas murieron en desplazamientos de tierra en Río el año pasado. Las

medidas políticas y de adaptación son necesarias, pero la reubicación de aquellas

poblaciones en riesgo o recuperándose de un desastre no se está produciendo,

poniendo de relieve la falta de liderazgo político.

¿Qué tiene que ver todo esto con las reuniones de Río?: nada. Ese es precisamente

el problema; el problema de las migraciones y los desplazados medioambientales

no aparece en el último borrador del documento oficial de Rio+20. ¿Es que acaso

esta cuestión no forma parte de la sostenibilidad? A juicio de Heikki Holmås,

probablemente es ya demasiado tarde para introducir nuevos cambios en el

documento. Pero aún así debemos avanzar, abordar la realidad y realizar cambios

“desde abajo,” buscando alianzas con gente, como los del panel de hoy, trabajando

“desde arriba.”

Países con el mayor número de personas desplazadas, 2011

País # Sucesos # Desplazados

1. China 10 4,489,545

2. Philippines 20 2,499,241

3. Thailand 3 1,644,965

4. India 7 1,503,320

5. Japan 2 892,000

6. Sri Lanka 4 689,924

7. Mexico 3 546,795

8. Bangladesh 1 400,000

9. Pakistan 1 300,000

10. Turkey 1 252,000

11. Vietnam 2 230,000

12. Angola 3 227,490

13. Cambodia 1 214,000

14. Brazil 6 169,500

15. Colombia 2 149,000

Se muestran todos los países con al menos 100,000 personas desplazadas durante

el año pasado.

27

Iglesia Católica presente en Río

José Ignacio García

Junio 20, 2012

Hoy la Iglesia Católica ha tenido una importante presencia en Río+20. Se inició en

la mañana con un acto paralelo organizado por CIDSE , la organización que agrupa

a las agencias de desarrollo católicas de Europa. Bajo el título no muy específico

de: Intensificación sostenible, Agroecología – Derecho a la Alimentación y Cambio

Climático y después de las palabras iniciales del Señor Bernd Nilles, Secretario

General de CIDSE, cuatro intervinientes compartieron sus visiones bajo la presencia

omnipresente de la Sra. Monika Hoegen, periodista, que llevó a cabo el evento.

Hubo una presentación introductoria por parte del arzobispo Paul Ouedraogo, de

Burkina Faso, que acercó a la audiencia la dramática situación de la población de su

país debido a la poca lluvia que ha causado escasez de alimentos y el hambre

masivo. Señaló los esfuerzos de la Iglesia con el fin de promover la resilencia en las

comunidades, y la necesidad de alianzas con otras instituciones dado que la

magnitud de los problemas es tan grande, que hacen imposible resolverlo de

manera independiente e individualista.

El primer ponente en intervenir fue el ingeniero agrónomo, bien conocido de la

Universidad de Berkeley, el Señor

Miguel Altieri, Profesor de

Agroecología. Argumentó

fuertemente en contra del uso del

término sostenibilidad.” Los agro

negocios tiene una lógica de

consumo excesivo de recursos lo que

hace imposible una relación

respetuosa con el medio ambiente. El

Señor Altieri propone la agroecología

como una alternativa real basada en

ser socialmente justa,

económicamente viable, ecológicamente adaptada y aceptable culturalmente.

Según el Señor Altieri agroecología es la única alternativa a la concesión de una

soberanía alimentaria real de una sociedad.

Inmediatamente después, la Sra. Loretta Dormal Marino, Directora General Adjunto

de la Dirección General de Agricultura de la Comisión Europea, reivindicó el uso del

término “sostenible” con el débil argumento de que la “sostenibilidad” es una

palabra muy conocida por el público en general. La Sra. Anika Schroeder, asesora

de política climática de Misereor, Alemania, pidió que la seguridad alimentaria y la

soberanía alimentaria, deben abordarse como una cuestión de derechos humanos.

Esto exigiría la intervención de los gobiernos para garantizar los derechos,

cambiando la marcada tendencia de los gobiernos a considerar la crisis alimentaria

como un asunto de mercado que debe ser considerado sólo en los aspectos

económicos. Las medidas reglamentarias son indispensables, como la concesión de

los derechos fundamentales.

Por último el Señor Jean Marc von der Weid, Director de la asociación Agricultura

Familiar y Agroecología (AS-PTA) de Brasil, presentó la experiencia de esta

asociación que reúne a pequeños agricultores, grupos religiosos y asociaciones de

mujeres. Él compartió cómo los agricultores que participan en la agroecología está

obteniendo mejores resultados, incluso financieramente, ya que están menos

28

endeudados que los agricultores convencionales.

En su opinión, es totalmente imposible un

acuerdo entre la agroindustria y los pequeños

productores, es necesario elegir o los unos o los

otros. La mayoría del público estaba claramente

del lado de los pequeños productores si creemos

el caluroso aplauso a estas afirmaciones.

Por la tarde fue la Santa Sede laque organizó un

evento paralelo. Esta acto fue organizado

conjuntamente por la Misión de la Santa Sede

ante las Naciones Unidas, Caritas

Internationalis, Familia Franciscana

Internacional, Catholic Relief Services, la

Asociación de Voluntarios en Servicio

Internacional y CIDSE. El encuentro se tituló:

Agricultura y sostenible: la seguridad

alimentaria, la tierra y la solidaridad. El panel

estuvo precedido por la intervención del cardenal Scherer, enviado especial de Su

Santidad el Papa Benedicto XVI a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el

Desarrollo Sostenible y el arzobispo de São Paulo.

Aunque tenemos que reconocer el compromiso de la Iglesia por estar presente en

Río+20, y el esfuerzo de participar en un debate público de este tipo, también

tenemos que reconocer que no es fácil para la Iglesia encontrar una manera de

estar presente, o por lo menos de encontrar un lenguaje que pueda ser entendido

por muchos y no sólo por los creyentes. Es un gran paso adelante para llegar al

debate público, pero todavía quedan cosas que ajustar como: un lenguaje más

inclusivos para los creyentes y no creyentes, una mayor claridad en las opciones

técnicas que la Iglesia promueve – no porque la Iglesia tenga que producir ciencia o

tecnología en sí, sino porque considera que estas opciones son moralmente más

valiosas que otras, así como una presentación mucho más adecuada de lo que la

Iglesia hace.

La esperanza, motor del cambio

Luis Arancibia

Junio 20, 2012

El 9 de abril de 1992, hace exactamente 20 años, el volcán Cerro Negro, situado en

la comarca de Lechecuagos cerca de la ciudad de León en Nicaragua, estalló en una

violenta erupción que cubrió de cenizas más de 25.000 ha de pequeños campesinos

pobres, daño seriamente ocho escuelas, contaminó los pozos de agua y destruyó

los pocos caminos e infraestructuras existentes. Se trataba de una comunidad

campesina que había sufrido la opresión somocista, la guerra posterior y la pobreza

de tantas comunidades rurales de América Latina.

En el verano de 2004 tuve la suerte de compartir unos meses con esa comunidad

comprometida y luchadora. Las condiciones de vida seguían siendo muy duras y la

pobreza golpeaba por todos lados. Sin embargo, se habían reconstruido las

escuelas de Fe y Alegría dirigidas por las religiosas de la Asunción y habían crecido

hasta la docena; tenían un sistema de agua canalizada, gestionado por la propia

organización comunitaria, que llevaba agua potable a cada casa; habían creado el

29

banco de semillas que permitía a cerca de 200 familias librarse de

los intereses de los usureros; incluso, gracias a su lucha y

perseverancia habían instalado una red eléctrica que abastecía a la

comunidad[1].

Hace unos meses, unos compañeros visitaron la comunidad y supe

que seguían mejorando lenta pero constantemente su calidad de

vida, gracias a una organización comunitaria sólida, basada en las

comunidades cristianas de base que se reúnen periódicamente a

compartir la palabra, la vida y la lucha.

La historia de Lechecuagos es extraordinaria, pero no es única ni excepcional. Hay

otras muchas historias de pequeñas y grandes conquistas, de victorias sobre la

muerte de la pobreza y la explotación. Sin embargo, en nuestro trabajo por la

justicia que nace de la fe no siempre reconocemos, celebramos y agradecemos los

signos de esperanza que existen a nuestro alrededor. El sufrimiento de las personas

que viven en la pobreza, la indignación que nos producen la desigualdad y la

injusticia y la urgencia del activismo en el que vivimos inmersos, no nos permite

tomar conciencia agradecida de los relatos concretos a través de los cuales la vida

se abre paso, como un signo de la presencia del Reino entre nosotros. Solo si

tenemos una mirada agradecida sobre nuestra realidad y nuestro mundo, somos

capaces de traspasar el fatalismo y reconocer la presencia del Dios de la vida en lo

germinal, como dice tan bellamente Benjamín Gonzalez Buelta. Necesitamos

reconocer y celebrar, pues solo así nuestra memoria se hace agradecida y nuestra

mirada se vuelve esperanzada al reconocer al Dios de la vida actuando en lo

profundo de la historia e invitándonos a prolongar la tarea a favor del desarrollo

humano y sostenible.

En estos veinte años desde la cumbre de Rio encontramos motivos para la

preocupación por una desigualdad que no para de crecer y para la indignación por

el desinterés de los líderes de nuestro mundo en combatir con voluntad política la

pobreza en la que vive aun casi la mitad de nuestro mundo y el deterioro ambiental

que amenaza la creación entera.

Pero al hacer memoria de estos años, podemos encontrar también motivos para la

esperanza, razones para el agradecimiento, argumentos para la celebración. A

pesar del crecimiento global de la población, el número de personas por debajo del

umbral internacional de pobreza (1.25$/día) ha disminuido de 1.800 a 1.400

millones de personas en estos veinte años[2]; de cada 1.000 niños en países del

Sur, 36 más que en 1992 sobreviven; la esperanza de vida en los países menos

avanzados ha aumentado en cinco años y medio, alcanzando los 55.9 años[3] y el

número de personas que tiene acceso al agua potable en África subsahariana ha

pasado de 252 a 492 millones; en estos años, el porcentaje de mujeres

parlamentarias casi se ha duplicado pasando de 11 a 20%.

No son solo cifras. Son historias de superación, lucha y supervivencia personal y

comunitaria. Son triunfos de la vida, que estamos llamados a reconocer, agradecer

y celebrar.

También podemos encontrar un signo de esperanza, en medio de tantas

dificultades y limitaciones que identifico con mucha mayor facilidad, es la creciente

toma de conciencia, sensibilización, movilización e incluso capacidad de influencia

de la sociedad civil organizada. En estos años hemos asistido al surgimiento del

movimiento antiglobalización y al desarrollo de las redes globales de organizaciones

no gubernamentales; hemos visto desarrollarse a los foros sociales mundiales y a

las comunidades indígenas de base organizarse y lograr reconocimiento y poder;

30

hemos asistido al reconocimiento universal de los derechos humanos y a las

revoluciones pacificas a favor de la democracia en muchos rincones del mundo;

hemos sido testigos del la toma de conciencia medioambiental en gobiernos,

empresas y personas que el movimiento ecologista ha conseguido.

Son triunfos incompletos, logros insuficientes ante la magnitud de los problemas y

de los desafíos a los que nos enfrentamos. Pero son avances que hemos de

reconocer, logros que estamos invitados a agradecer, victorias que no siempre

celebramos como se merecen.

Veinte años después de Rio los desafíos para el desarrollo sostenible de nuestro

mundo siguen siendo gigantescos y el trabajo por la justicia social y

medioambiental sigue siendo una tarea prioritaria. La fe en el Dios de la vida

constituye un motor incombustible para seguir colaborando en la tarea de hacer de

nuestro mundo un lugar más habitable y humano para todas las personas. Pero la

justicia y la fe, se alimentan de una memoria agradecida, de una mirada lúcida y de

una celebración conspiradora. Examinar estos veinte años de desarrollo sostenible,

es una oportunidad para reconocer al mensajero de la paz y la justicia abriéndose

camino lenta pero firmemente en nuestra historia.

Luis Arancibia es Director- Adjunto de Entreculturas. Actualmente en un sabático en

el Boston College.

[1] Una sistematización de la experiencia del Núcleo educativo rural de

Lechecuagos puede encontrarse en

http://centroderecursos.alboan.org/ebooks/0000/0703/6_FyA_NUC.pdf

[2] Todas las cifras, salvo indicación, obtenidas de United Nations Development

Programme,

[3] United Nations Population division

Jueves 21 de Junio 2012

El cuarto día en Río 20, y el documento muy esperado, satisfaciendo a los líderes

de la Conferencia también sacó la consternación y la desilusión, que no sorprendía

dado las expectativas muy bajas que los estados destinen significativamente al

desarrollo sostenible. Patxi Alvarez nos recuerda aunque esto al final, la esperanza

esté en la gente y las numerosas iniciativas creativas que ocurren globalmente la

promoción del desarrollo humano sostenible e integral. Frank Turner comparte lo

que hemos aprendido sobre el desarrollo sostenible durante los años. También hay

una entrevista de vídeo por Pedro Walpole de Shweta Marandi, una muchacha de

Adivasi joven de India, que comenzó una campaña para reducir el uso de

electricidad en pueblos.

También compartimos con usted los toques de luz del Foro de los Líderes de las

futuras mujeres quieren y de la perspectiva de periferia del centro dominante en las

discusiones de Cumbre habla Mauricio Lopez de la Comunidad de Vida cristiana

Mundial.

31

Oración para el 21 de Junio, Río+20

JUZGAR

A. Contexto como preparación de la jornada: La propuesta de una economía

verde y sus graves peligros y retos

Una de las premisas básicas para la Conferencia de las Naciones Unidas sobre

Desarrollo Sustentable, Río+20, es el concepto de “Economía Verde” (EV). La

mayoría de las reflexiones, aportes, y ejes de trabajo de este encuentro

internacional, giran alrededor de este concepto. Sin embargo, debemos confrontar

la concepción de esta noción de EV en su construcción meramente sustentada en

las leyes de mercado que sostienen, y reproducen, el modelo mismo de desarrollo

que hoy ha probado sus claras limitaciones y ha generado una mayor brecha de

pobreza e injustica en la distribución de los recursos y bienes. Nuestra perspectiva

como creyentes debe sustentarse en los planteamientos de la Doctrina Social de la

Iglesia, la cual habla de buscar otro paradigma . Igualmente es importante

anticipar lo que ya se está percibiendo en los espacios de discusión sobre la

Río+20; se habla de la EV como nuevo paradigma, pero se inserta en la visión de

libre mercado que ha probado ser un mecanismo inútil para reducir la pobreza y las

desigualdades, ya que su razón de ser es crear utilidades, sin importar los impactos

sociales.

B. Frase clave: “Nada hay verdaderamente humano que no encuentre eco en el

corazón de Dios” (Gaudium Et Spes, 1).

C. Texto base para la reflexión pastoral:

“La naturaleza, especialmente en nuestra época, está tan integrada en la dinámica

social y culturales que prácticamente ya no constituye una variable independiente.

El acaparamiento de los recursos, especialmente del agua, puede provocar graves

conflictos entre las poblaciones afectadas… Ante el imparable aumento de la

interdependencia mundial, y también en presencia de una recesión de alcance

global, se siente mucho la urgencia de la reforma tanto de la Organización de las

Naciones Unidas como de la arquitectura económica y financiera internacional, para

que se dé una concreción real al concepto de familia de naciones. Y se siente la

urgencia de encontrar formas innovadoras para poner en práctica el principio de la

responsabilidad de proteger y dar también una voz eficaz en las decisiones

comunes a las naciones más pobres. Esto aparece necesario precisamente con

vistas a un ordenamiento político, jurídico y económico que incremente y oriente la

colaboración internacional hacia el desarrollo solidario de todos los pueblos… para

prevenir el empeoramiento de la situación financiera actual y mayores

32

desequilibrios consiguientes… para garantizar la salvaguardia del ambiente”

(Cáritas In Veritate No. 57 y 61).

“El absolutismo de la técnica tiende a producir una incapacidad de percibir todo

aquello que no se explica con la pura materia. Sin embargo, todos los hombres

tienen experiencia de tantos aspectos inmateriales y espirituales de su vida… Todo

conocimiento, hasta el más simple, es siempre un pequeño prodigio, porque nunca

se explica completamente con los elementos materiales que empleamos. En toda

verdad hay siempre algo más de lo que cabía esperar, en el amor que recibimos

hay siempre algo que nos sorprende” (Cáritas In Veritate No. 77).

D. Guía de reflexión:

¿Cuáles son las causas más profundas que están provocando esta situación?

¿Cómo contribuimos con nuestro estilo de vida, decisiones u omisiones, a

que esta situación sea así?

¿Qué expresiones significativas de defensa del medio ambiente y promoción

ambiental vemos a nuestro alrededor?; ¿Qué es lo que más nos llama la

atención?; y ¿Qué podemos aprender de ellas?

¿Es el concepto de Economía Verde un verdadero nuevo paradigma?,

¿Cuáles son sus limitaciones y peligros?, y ¿Qué alternativas podemos poner

sobre la mesa?

E. Oración de cierre: Y por la hermana tierra, que es toda bendición, la hermana

madre tierra, que da en toda ocasión las hierbas y los frutos y flores de color, y nos

sustenta y rige: ¡Alabado sea mi Señor! ¡No probarán la muerte de la condenación!

Servidle con ternura y humilde corazón. Agradeced sus dones, cantad su creación.

Las criaturas todas, bendecid a mi Señor. Amén. (San Francisco de Asís)

Desarrollo Sostenible – Lo que hemos aprendido

Junio 21, 2012

Las ideas sobre el desarrollo también cambian, se desarrollan podríamos decir. No

nos podemos imaginar hoy, tal y como mucha gente pensaba en la década de los

1960s, que economías menos desarrolladas simplemente “despegarían” (take off)

una vez que alcanzasen un punto crítico, en virtud de una tendencia que podríamos

llamar natural hacia el progreso.

Estas teorías tan influyentes como ingenuas fueron descritas por el investigador

social norte americano Walt Rostow, en 1960, en un trabajo de gran impacto

titulado Las etapas del desarrollo: una declaración no comunista. ‘Economías

subdesarrolladas’ no alcanzarían necesariamente a las más ricas, pero

compartirían, cada vez más, la creciente prosperidad, motivados por el ejemplo de

sus vecinos más prósperos. Los países ricos, se suponía, eran el modelo al cual

debían aspirar los países más pobres.

Según esta interpretación el

desarrollo es un proceso harmónico

en el que los intereses de todos, más

o menos, coinciden.

La Iglesia, con mucho más contacto

con la realidad humana que un

profesor universitario de Estados

Unidos, fue mucho más prudente.

33

Juan XXIII en la encíclica Pacem in Terris (1963) aceptó la premisa de Rostow que

subraya que los países atraviesan ‘diferentes estadios de desarrollo’ (p 73) pero (en

un momento en el que, indirectamente, los conflictos entre las potencias de la

Guerra Fría eran sobre el control de recursos, instrumentalizando a los países más

pobres) evitó dar por supuesto un estado de harmonía natural entre las naciones.

Más bien habría un combate por el dominio entre las naciones (p 92-93) y por eso

lanzó una llamada a la ‘solidaridad’ (casi unos veinte años antes de que Juan Pablo

II adoptara este término); ha alentado la puesta en común de recursos materiales

y espirituales (p 98) y el tratamiento de las diferencias mediante la negociación, ‘no

por la fuerza armada, ni por engaño o argucia’ (p 93).

Lo que siguió a los años 60 tristemente dio la razón a los temores de Juan XXIII. A

través de la Guerra Fría, las superpotencias utilizaron las guerras de los países

satélites en lo que llamaban el ‘Tercer Mundo’ ( el Primero serían los países

occidentales y el segundo la URSS). Mientras tanto se explotaban los recursos

naturales de América Latina y África por las potencias dominantes para satisfacer

las necesidades estratégicas de sus industrias más que para el desarrollo de esos

pueblos.

Estos dos procesos diferentes se combinaron para dar lugar a un efecto sombrío. La

guerra civil de Angola, que duró desde 1975 a 2002, no habría durado tanto tiempo

si Angola no hubiese sido rica en petróleo y diamantes, así mientras un bando era

sostenido por la Unión Sovietica y Cuba, el otro lo era por los EE. UU., Israel y el

régimen del apartheid de Sud África. Así nos enteramos de la maldición de los

recursos’ más que del enriquecimiento por los recursos. Mientras tanto, las

instituciones de Bretton Woods, dominadas por Occidente (principalmente el Banco

Mundial y el Fondo Monetario Internacional) normalmente incorporaron, como

condición para sus préstamos, a los países pobres, las políticas de desregulación y

privatización; la priorización de cultivos comerciales para la exportación, en lugar

de agricultura en pequeña escala para el sustento; una política que en muchos

sentidos hacía el desarrollo más difícil, mientras que favorecía a los países más

ricos.

Una cosas que hemos aprendido es que el desarrollo sostenible no se puede

conseguir salvo si se convierte en un principio de empoderamiento, allí donde se

sostienen las capacidades de participación de los países, no sólo sus materias

primarias. Así el Papa Benedicto XVI, en 2005, en su encíclica Caritas in Veritate

incluye en el subtítulo la frase ‘desarrollo humano integral’: la palabra ‘desarrollo’

aparece más de 100 veces en la carta, pero insiste mucho en que no es posible el

desarrollo sin ‘justicia’ como tampoco es posible sin ponerlo al servicio del ‘bien

común’ (es decir, el bien que no es aceptable cuando se excluye a los pobres de él).

Promoviendo estos dos objetivos, conjuntamente, dice el Papa, ‘ésta es la vía

institucional – también política, podríamos decir – de la caridad, no menos

cualificada e incisiva de lo que pueda ser la caridad que encuentra directamente al

prójimo fuera de las mediaciones institucionales de la pólis’ (p 7).

En distintos mensajes con motivo de las Jornadas Mundial de la Paz muestran los

cambios en la reflexión sobre estos modelos, desde ‘crecimiento’ a justicia. En el

mensaje de 2009, el Papa Benedicto escribió sobre las negativas consecuencias del

‘superdesarrollo’ (p 2). En el mensaje de 2010 de Juan Pablo II: ‘Paz con Dios

creador, paz con toda la creación, es evidente que una solución adecuada no puede

consistir simplemente en una gestión mejor o en un uso menos irracional de los

recursos de la tierra. Aun reconociendo la utilidad práctica de tales medios, parece

necesario remontarse hasta los orígenes y afrontar en su conjunto la profunda crisis

34

moral, de la que el deterioro ambiental es uno de los aspectos más preocupantes’

(p 5, resaltado en el original). Benedicto XVI apelará no sólo a una ‘eficiencia

energética (una fórmula compatible con la economía liberal) sino que propone una

redistribución de los recursos energéticos en favor de las naciones que carecen de

ellos’ (Jornada Mundial de la Paz 2010, p 9).

Por lo tanto, hemos aprendido algo más, aunque ciertamente nuestras sociedades

necesitan tiempo para digerir sus implicaciones. El desarrollo sostenible deber ser,

de ahora en adelante, un principio fundante de las políticas públicas. No podemos

‘crecer’ para salir de la crisis económica actual a menos que el crecimiento

signifique el ‘desarrollo humano integral’ que no es una mera acumulación de

posesiones para una minoría sino que el crecimiento debe favorecer a todos,

especialmente a los que más lo necesitan.

El énfasis de este crecimiento debe ponerse en diferenciar a quién y cómo

beneficia. Cuando hablamos de la Unión Europea o los Estados Unidos podemos

hablar de ‘desarrollo sostenible.’ Cuando hablamos de los países más pobres del

mundo sería mejor hablar de ‘desarrollo sostenible.’

¿Otro mundo es posible? La perspectiva centro-periferia en Río+20

Mauricio Lopez Oropeza

Junio 21, 2012

Muchas grandes palabras y conceptos, tales como DIGNIDAD, RESLILIENCIA,

EQUIDAD, etc, han sido presentados en el marco de la cumbre oficial Río+20.

Todas ellas evidentemente suenan razonables, interesantes e importantes; incluso

hemos escuchado estas grandes afirmaciones en el marco del que se ha tornado en

un slogan de los eventos de las ONGs en la cumbre: “OTRO MUNDO ES POSIBLE.”

En este planteamiento caben hoy casi todos los posicionamientos, y pareciera que

se trivializa peligrosamente, o pierde su sentido al ser enmarcado en visiones

verticales como muchas de las que hemos atestiguado aquí en estos días. Preocupa

mucho que la mayoría de estos

grandes conceptos e ideales han sido

ubicados en el marco de lo que se ha

intentado posicionar como un

paraguas común que insiste en

aglutinar todo en función de sus

propias intenciones: la ECONOMIA

VERDE (EV).

Hemos escuchado en este contexto

de la Río+20, y en los espacios de

trabajo previos, cómo la EV parece

que trata de acarrear consigo,

persistentemente, a su fallido

antecesor, el DESARROLLO

SUSTENTABLE; igualmente con

grandes ideales y buenas intenciones, pero también ahogado por intereses

mayores, y que en esta cumbre parece haber sido sentenciado a muerte en su

concepción inicial que por 20 años no pudo cumplirse. Con estas afirmaciones no

tratamos de negar o rechazar muchos de los grandes aportes de las sociedades

para dar sentido y origen a estos conceptos.

35

El problema que percibimos, y que se torna en la no-ética social del modelo

estructural del sistema mundo hoy, es que hay entes (por llamarlos de alguna

manera) que representan intereses que tienen dimensiones inigualables, y que son

grupos corporativos del más alto nivel, los cuales hoy no tienen nacionalidad –

tampoco la necesitan en el esquema global que se va desviando y reproduciendo

hacia las propias rutas trazadas por ellos. Estos entes, que ocultan el rostro de

personas e intereses concretos, tienen tal poder de incidencia que en esta cumbre

podemos olfatear por todas partes su omnipresencia desde los discursos de algunos

grupos, las posiciones de algunos estados, pero sobre todo, y en ello el eje de este

aporte, en la lógica CENTRO-PERIFERIA que igual que estructura el mundo

económico, también incide, desafortunadamente, en el espacio de intento colectivo

de Naciones y Organizaciones en diálogo dentro de esta Cumbre por el Desarrollo

Sustentable.

Ya lo dijo Michael Porter en su libro “Ser competitivo,” hay naciones ganadoras y

naciones perdedoras. También lo afirmaron los autores que impulsaron la

perspectiva centro-periferia (Friedman, Prebisch, y otros) en el intercambio

económico que sirve de base para el modelo global actual. El “Centro-Ganador” es

el que establece el discurso dominante, sus proyecciones enmarcan las discusiones

que inciden en los cambios de las estructuras globales, y genera modelos que se

exportan a los países y grupos “Periféricos-Perdedores” que son vistos como

incapaces y excluidos que no tienen la posibilidad de trazar por sí mismos un

horizonte, y que si lo hacen fuera de los planteamientos estructurantes del Centro,

se anticipa que equivocarán el camino.

Aquí en la Río+20 percibimos la noción de CENTRO-PERIFERIA en el plano de lo

conceptual, donde la apuesta por la ECONOMÍA VERDE ha marcado el ritmo de las

discusiones, y el cual establece los mecanismos propios del mercado como ejes

organizadores de la sociedad. Este concepto, a decir de muchos participantes,

reafirma, incluso en los documentos de trabajo de la cumbre, la centralidad del

esquema de agro-negocio y mega-empresa como bases predominantes para

impulsar la superación de la pobreza… y todo lo demás se dará por añadidura

(triste uso para tan bello concepto de la tradición cristiana).

Voces solidas e informadas hablan en la Cumbre desde la experiencia de la

RESILIENCIA que se sustenta en visiones como la agroecológica, desde la

afirmación de la diversidad como eje de comprensión de la realidad en un mundo

complejo, y sobre todo desde la constatación de que las respuestas, si han de ser

genuinamente originadas en la experiencia de RESILIENCIA, han de provenir de los

propios actores de la realidad profunda y de base. Sobre todo algunos campesinos,

indígenas, y otros grupos que han tenido una relación histórica más respetuosa con

la tierra, y que siguen representando la mayor proporción de la producción total

para la alimentación de nuestro planeta.

Pero, y siempre hay un pero en estas cuestiones del CENTRO-PERIFERIA, el

problema fundamental que percibimos está en la certeza de que las decisiones

están tomadas de antemano por ese CENTRO que está aquí sin estarlo, o está aquí

representado por algunos grupos y gobiernos. Esta presencia toma fuerza en los

posicionamientos que reafirman que un cambio de fondo no es necesario, que basta

con reverdecer un poco el modelo que en las últimas décadas hemos vivido, y que

debemos enfocarnos en mitigar los impactos que equivocadamente son llamados

externalidades (y es una equivocación porque dichas “externalidades” no son algo

casual o externo, llamarlo así exime de responsabilidad a los modelos de mercado y

36

consumo que llevan en lo más profundo su intención de sacar el mayor provecho a

costa de todo y todos).

Sobre todo, estas voces tratan de convencernos en esta cumbre, que todos-as

están siendo escuchados, y que asistimos a un acto de profunda democracia;

cuando, estando aquí, podemos ver que las discusiones de fondo se dieron hace

meses, y que se refuerza la premisa de que el crecimiento es la única salida de la

crisis actual.

Hablar de CENTRO-PERIFERIA, incluso participando en la Cumbre Oficial Río+20 es

alarmante, pero aún más dramático es imaginar y constatar lo que experimentan

los muchos movimientos sociales, organizaciones de base, y grupos identitarios que

están por su parte en la Cúpula de los Pueblos a varias decenas de kilómetros de

distancia, y que tanto ellos, como sus propuestas y demandas, no parecen tener

ninguna cabida de manera formal aquí en este gran evento democrático.

Si Otro mundo es posible, aquellos que llamamos más vulnerables, y que

seguramente serán los más afectados por lo que será el modelo de ECONOMIA

VERDE, son los que tienen en realidad mayor claridad de lo que significa la

experiencia de RESILIENCIA, y deberíamos pedirles que nos eduquen en tan

hermosa tarea.

Mauricio López Oropeza es con la Comunidad de Vida Cristiana Mundial y él puede

ser alcanzado por su correo electrónico: mauricio(at)cvx-clc.net.

La esperanza está en las personas

Patxi Álvarez, SJ

Junio 21, 2012

Inicio de la conferencia organizada por la UNDP, "Beyond GDP: Measuring the Future We Want"

Esta Conferencia de Río+20 es una exhibición de innumerables grupos procedentes

de todo el mundo que aspiran a llevar una vida digna de ser llamada humana,

protegiendo al mismo tiempo el medio ambiente. Se manifiestan en las calles, se

cuelan entre los ministros y jefes de Gobierno en la cumbre oficial y organizan

múltiples actividades públicas donde muestran sus iniciativas locales.

37

Mientras se extiende la sensación

de que el documento final de la

Conferencia confirmará un escaso

compromiso de los Estados con el

desarrollo sostenible, una vez

más se puede comprobar que la

esperanza está en las personas.

Hoy teníamos la ocasión de

conocer a Shweta, una preciosa

chica adivasi –indígena, por

tanto– de la India que nos

hablaba de su empeño por reducir

el uso de electricidad en las

aldeas. Un modo de contribuir a ahorrar recursos energéticos y a extender la

preocupación por el medio ambiente. Shweta trabaja con Robert Athickal, SJ en

Patna, en una organización llamada Tarumitra, “amigos de los árboles.

Igualmente, se multiplican en el mundo los esfuerzos por acompañar a campesinos

pobres para que puedan aumentar su producción agrícola sin utilizar productos

químicos. Esto les protege de la dependencia de la industria agrícola, cuida de sus

suelos y les ayuda a preservar la diversidad de las semillas. Son muchos los lugares

donde la Compañía está participando de estos esfuerzos.

Abundan las comunidades que se defienden de la acometida de las empresas

extractivas y de los grandes proyectos de desarrollo, que las desplazan y despojan

de sus tierras. Un movimiento sin precedentes en la historia acelerado por la

demanda insaciable de recursos naturales que impulsa nuestro modelo de

consumo.

Los jóvenes del planeta están cada día más convencidos de que el crecimiento tiene

que ir de la mano de la protección del medio ambiente. Incluso aunque esto

disminuya el crecimiento, como señalaba hoy Fondapol, en una encuesta llevada a

cabo entre jóvenes del mundo sobre desarrollo sostenible.

También hemos podido escuchar los esfuerzos del Programa de Naciones Unidas

por el Desarrollo para valorar el crecimiento de otro modo que no sea

exclusivamente económico, como se hace con el PIB. Hace años que incorporó en

su medición la educación, la salud y la esperanza de vida como parte de los

indicadores del desarrollo. Más tarde introdujeron la igualdad, ahora le toca el turno

a la sostenibilidad. Pues no hay desarrollo real, si no es sostenible. La

insostenibilidad en el desarrollo condena a las generaciones futuras a desprotección

y vulnerabilidad.

La lista de iniciativas podría ser larguísima. Mientras los jefes de Gobierno siguen

dialogando e intentando alcanzar acuerdos viables en competición de intereses –

con exasperante poco éxito, nos corresponde continuar sumando esfuerzos a una

construcción colectiva global de protección de la naturaleza, de la que hoy nace

toda esperanza razonable

El reloj corre cuenta atrás. No podemos demorarnos en nuestro compromiso

cuando aumentan los indicadores de deterioro del medioambiente y de las

poblaciones amenazadas. Todos estamos convocados a utilizar nuestra creatividad

para generar nuevos estilos de vida, más sanos, más sencillos, más saludables y

más responsables con el medio ambiente.

38

El futuro que quieren las mujeres: Igualdad de género y empoderamiento

femenino para el desarrollo sostenible

Junio 21, 2012

El futuro que quieren las mujeres: Igualdad de género y empoderamiento

femenino para el desarrollo sostenible

Michelle Bachelet

Director ejecutivo de Mujeres de Naciones Unidas y ex-Presidenta de Chile, hoy en

el Río+20 Conferencia sobre Desarrollo sostenible

La exclusión de las mujeres nos hace daño a todos.

Necesitamos coordinar nuestra capacidad global de aprendizaje.

Necesitamos un nuevo paradigma de desarrollo centrado en el el ser humano.

Tenemos que transformar las palabras en acciones.

Los mismos derechos y la misma participación para todos.

El mundo nos necesita, hagamos que el mundo nos escuche.

Dr Gro Harlem Brundtland

Ex Primer Ministro de Noruega y Presidente de la Comisión Mundial sobre el Medio

Ambiente y el Desarrollo (Comisión Brundtland)

Niñas y mujeres están en el centro del futuro desarrollo.

Niñas y mujeres suponen representan una parte significativa de la economía.

Niñas y mujeres han jugado y siguen jugando un papel central en todas las

sociedades y en todas las áreas de esas sociedades.

Niñas y mujeres tienen un importante papel que jugar en la gestión

medioambiental.

El empoderamiento de las mujeres es el catalizador mas importante del cambio

global. Las mujeres pueden jugar un papel clave en la implementación de los

objetivos de la sustentabilidad global. Justicia social, igualdad de genero y

sustentabilidad medioambiental son condiciones necesarias para el cambio. No

infravaloremos el papel clave de las mujeres. No podemos permitirnos ignorar este

hecho tan decisivo.

39

Prerana Shakya

Girl Scouts, Nepal

Necesitamos que los gobiernos tomen decisiones valientes.

Las mujeres de todo el mundo están haciendo una contribución significativa a la

humanidad.

Las mujeres son vectores de cambio social.

Cuando hablamos de mujeres sobresalen cuatro temas: la necesidad de

participación plena y significativa, la habilidad para valorar la economía del cuidado,

la necesidad de garantizar el acceso a la sanidad y la importancia de eliminar la

pobreza femenina.

La mayoría del trabajo realizado por mujeres es invisible a los ojos del PIB;

necesitamos ir mas allá del PIB y explorar otras medidas significativas de

desarrollo.

Lakshmi Puri.

Ciertamente hemos mejorado, pero todavía queda un largo camino por recorrer. La

igualdad de genero y el empoderamiento femenino es un tema transversal a todos

los objetivos de desarrollo del milenio.

Las dimensiones económica, social y medioambiental son la trinidad del desarrollo.

La igualdad de genero y el empoderamiento femenino son centrales a las tres

dimensiones.

Hemos visto una marcha atrás en algunas áreas, como la salud reproductiva. Este

es un reto que tenemos que abordar y superar. Necesitamos acelerar la

implementación.

Anita Nayar

Development Alternatives with Women for a New Era (DAWNE)

40

Tenemos que ser conscientes que esta conferencia esta teniendo lugar en un

momento de grave disrupción medioambiental. Las crisis estructurales profundas

que atravesamos necesitan para su solución un nuevo marco analítico y estructural.

Necesitamos un cambio de conciencia para ver las conexiones entre la economía y

la ecología. En los textos de Río+20 no hay un reconocimiento explicito de estas

conexiones. Los textos no son equilibrados y no dan la suficiente importancia a las

cuestiones de genero.

El nuevo marco de la economía verde prioriza la economía sobre la ecología y la

justicia social. Los intereses empresariales están protegidos en esta conferencia.

Los vínculos entre genero y los tres pilares del desarrollo sostenible has sido

reconocidos, pero no han sido plenamente introducidos en los borradores del

documento de Rio.

Es necesario decirlo algo y claro: tenemos que abordar la realidad, ponernos en pie

y empezar a trabajar.

Eleonora Menicucci

Ministra de asuntos de las mujeres del Brasil

Hablar de un mundo sostenible es hablar de un mundo que incluye a las mujeres en

todas las esferas de la actividad económica, social y política. Significa reconocer el

trabajo doméstico remunerado y no remunerado como trabajo productivo.

Mary Robinson

ExPresidenta de la Republica de Irlanda

Tres temas clave ha sobresalido: igualdad de género, empoderamiento femenino y

liderazgo de mujeres.

41

Borrador del acuerdo: ¿frustración o satisfacción?

José Ignacio García

Junio 21, 2012

El canciller brasileño, Antonio de Aguiar Patriota inauguró ayer la sesión plenaria

del mediodía, informando que creía que estaban en condiciones de adoptar el texto

que se presentaría oficialmente en la Conferencia de las Naciones Unidas para el

Desarrollo Sostenible (Río+20) para su aprobación. Observó que, si bien no es

ideal, el texto representa “el equilibrio” en este momento.

“Ahora tenemos un texto que será aprobado en la Conferencia,” dijo el Sr. Sha

Zukang, Secretario General de Río+20, en un comunicado. “Creemos que el texto

contiene mucha acción, y si esta acción se implementa, y si las medidas de

seguimiento se toman, realmente va a provocar una gran diferencia al generar un

cambio global positivo.” Destacó la forma incluyente en que Brasil llevó las

consultas, y destacó, entre otros elementos de este borrador: el acuerdo sobre un

proceso para establecer los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la economía verde,

el foro de alto nivel para el seguimiento sobre el desarrollo sostenible, el sector

privado ha sido invitado a hacer de los informes de la sostenibilidad corporativa

parte de su responsabilidad, el inicio de un proceso para ir más allá de Producto

Interno Bruto para medir la

prosperidad y el bienestar … “Al igual

que en todas las negociaciones,

habrá algunos países que sienten que

el texto podría ser más ambicioso,

otros que sienten que sus propias

propuestas podrían reflejarse mejor,

mientras que otros podrían preferir

tener su propio idioma,” dijo. “Pero,

seamos claros: las negociaciones

multilaterales requieren tomar y

ceder.”

En el lado opuesto, el representante

de las organizaciones no gubernamentales, dijo con palabras muy fuertes en un

comunicado leído en la sesión plenaria de la Conferencia, delante de los Jefes de

Estado o de Gobierno: “No se puede tener un documento titulado El futuro que

queremos sin ninguna mención de los límites planetarios, puntos de inflexión, o

capacidad de carga de la Tierra. El texto en su forma actual está completamente

fuera de contacto con la realidad. Para ser claros, las ONG aquí en Río de ningún

modo aprueban este documento. Ya hay más de 1.000 organizaciones e individuos

han firmado en un solo día una petición llamada El Futuro que No queremos que

niega por completo el texto actual. No, de ninguna manera refleja nuestra

aspiración, y por lo tanto, exigimos que las palabras ‘en la plena participación de la

sociedad civil’ se eliminen en el primer párrafo.”

Hay un acuerdo general sobre la debilidad del documento, incluso el Sr. Ban Ki-

moon, ha mostrado su frustración porque él esperaba un acuerdo mucho más

ambicioso: “Algunos Estados miembros esperaban un documento más ambicioso,

yo también esperaba que pudiéramos tener un documento de resultados más

ambiciosos. Sin embargo, usted debe entender que las negociaciones han sido muy

difíciles, y muy lentas, debido a tantos intereses en conflicto.”

42

Esta vez, la fotografía muestra una imagen muy diferente de la realidad en función

de quién la haya tomado. Hoy pudimos conversar con el P. Johnny Muller, SJ,

presidente del Consejo Consultivo de la agencia de desarrollo alemana Misereor y

que asiste a la Conferencia en calidad de miembro de la delegación oficial de

Alemania. El Gobierno alemán invitó a varias organizaciones no gubernamentales a

formar parte de la representación oficial y Misereor es uno de ellas. El P. Muller

cree que sólo el tiempo dirá si esto fue, o no, un buen acuerdo. Según ha señalado,

no debemos olvidar de dónde veníamos: el fiasco enorme de Copenhague y las

conferencias posteriores sobre el Cambio Climático. Río es una nueva oportunidad

para el multilateralismo, un camino largo y sinuoso, pero por el que hemos

conseguido caminar en el pasado. Ahora bien, para que este acuerdo funcione, se

necesita el compromiso de todos y, especialmente, la participación de la sociedad

civil.

Lo más probable es que el texto del acuerdo no vaya a cambiar, ya que cualquier

cambio sería abrir nuevos debates y esto abriría la caja de Pandora. Se van a hacer

muchos análisis a lo largo de los próximos días. Vamos a escuchar mensajes de

satisfacción y mucho más de consternación. Sin embargo, si somos honestos,

debemos reconocer que las expectativas eran muy bajas de antemano; y este texto

no ha hecho sino cumplir con ellas: sin casi creatividad y sin casi ninguna novedad

se han cumplido unas expectativas muy pequeñas.

Viernes 22 de Junio 2012

Este número de Ecojesuit dedica especial atención a la Cumbre de los Pueblos, el

evento que promovido por la sociedad civil quiere ser una voz alternativa a la

cumbre oficial de Río+20. El escenario de esta Cumbre es una zona preciosa de Rio

de Janeiro, Aterro do Flamengo, allí junto al mar y en un ambiente festivo se han

congredo más de 50.000 personas estos días para compartir, aprender y celebrar el

sueño de un mundo diferente. Hemos tenido la suerte de disfrutrar durante unas

horas de las iniciativas organizadas por distintas obras de la Compañía de Jesús,

coordinadas en esta ocasión por Fe y Alegría de Brasil.

Oración para el 22 de Junio, Río+20

ACTUAR

A. Contexto como preparación de la jornada: Promover un desarrollo humano

integral

43

“En las iniciativas para el desarrollo debe quedar a salvo el principio de la

centralidad de la persona humana, que es quien debe asumirse en primer lugar el

deber del desarrollo. Lo que interesa principalmente es la mejora de las condiciones

de vida de las personas concretas… Los programas de desarrollo, para poder

adaptarse a las situaciones concretas, han de ser flexibles; y las personas que se

beneficien deben implicarse directamente en su planificación y convertirse en

protagonistas de su realización. También es necesario aplicar los criterios de

progresión y acompañamiento, porque no hay recetas universalmente válidas.

Constructores de su propio desarrollo, los pueblos son los primeros responsables de

él… Las soluciones se han de ajustar a la vida de los pueblos y de las personas

concretas, basándose en una valoración prudencial de cada situación… es necesaria

la movilización efectiva de todos los sujetos de la sociedad civil, tanto de las

personas jurídicas como de las personas físicas” (Cáritas In Veritate No. 47).

B. Frase clave: “El ser humano, a quien Dios le encargó la creación, debe

contemplarla, cuidarla y utilizarla, respetando siempre el orden que le dio el

Creador” (V CELAM-Aparecida No. 125).

C. Texto base para la reflexión pastoral:

Se está tomando conciencia de la naturaleza como una herencia gratuita que

recibimos para proteger, como espacio precioso de la convivencia humana y como

responsabilidad cuidadosa del señorío del hombre para bien de todos. Esta herencia

se manifiesta muchas veces frágil e indefensa ante los poderes económicos y

tecnológicos. Por eso, como profetas de la vida, queremos insistir que en las

intervenciones sobre los recursos naturales no predominen los intereses de grupos

económicos que arrasan irracionalmente las fuentes de vida, en perjuicio de

naciones enteras y de la misma humanidad (V CELAM No. 471).

Ante esta situación ofrecemos algunas propuestas y orientaciones:

1. Evangelizar a nuestros pueblos para descubrir el don de la creación,

sabiéndola contemplar y cuidar como casa de todos los seres vivos y matriz

de la vida del planeta… educando para un estilo de vida de sobriedad y

austeridad solidarias.

2. Profundizar la presencia pastoral en las poblaciones más frágiles y

amenazadas por el desarrollo depredatorio, y apoyarlas para lograr una

equitativa distribución de tierra, agua y espacios urbanos.

3. Buscar un modelo de desarrollo alternativo, integral y solidario, basado en

una ética que incluya la responsabilidad por una auténtica ecología natural y

humana.

4. Empeñar nuestros esfuerzos en la promulgación de políticas públicas y

participaciones ciudadanas que garanticen la protección, conservación y

restauración de la naturaleza.

5. Determinar medidas de monitoreo sobre la aplicación de los estándares

ambientales internacionales.

D. Guía de reflexión:

¿Qué acciones concretas, viables y sostenidas nos sentimos llamados a

realizar como comunidades cristianas, y como personas, para contribuir a la

protección del medio ambiente?

¿Qué tipo de acciones, iniciativas o propuestas podríamos realizar como

ignacianos (u organizaciones fraternas) en lo local, nacional y mundial en

este sentido?

¿Qué tipo de redes, de Iglesia u otras, podrían ser importantes emprender o

reforzar para tener una acción más significativa?

44

E. Oración de cierre: Y por los que perdonan y aguantan por tu amor los males

corporales y la tribulación: ¡felices los que sufren en paz con el dolor, porque les

llega el tiempo de la consolación! ¡No probarán la muerte de la condenación!

Servidle con ternura y humilde corazón. Agradeced sus dones, cantad su creación.

Las criaturas todas, bendecid a mi Señor. Amén. (San Francisco de Asís).

F. Material de apoyo: She’s Alive… Beautiful… Finite… Hurting… Worth Dying for-

Propuesta presentada por:

Comunidad de Vida Cristiana (CVX-Mundial) -

Zero Draft of Rio+20 (documento pdf), copie y pegue la siguiente URL en su

navegador web

http://www.uncsd2012.org/rio20/content/documents/370The%20Future%20We%2

0Want%2010Jan%20clean%20_no%20brackets.pdf

Sanar un Mundo Herido, Secretariado para la Justicia Social y la Ecología de la

Compañía de Jesús (SJSE)

Carta Encíclica, Caritas in Veritate. Benedicto XVI

V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe

Red Ecojesuit

Equipo Itinerante Amazónico

Conferencia de Provinciales Jesuitas en América Latina (CPAL) y Apostolado Social

Fe y Alegría Brasil

Contactos e información con:

Mauricio López Oropeza, Coordinación de Iniciativas Apostólicas e Incidencia

Internacional CVX, Correo electrónico: mauricio(at)cvx-clc.net

Franklin Ibáñez, Secretario Ejecutivo CVX, Correo electrónico: exsec(at)cvx-clc.net

Los jóvenes en la defensa de la vida

Mary Tere Guzmán

Junio 22, 2012

Estos días durante la cumbre de Río+20 es constante la presencia de jóvenes en los

foros y espacios de discusión. El título de la cumbre, El Futuro Que Queremos,

indiscutiblemente convoca a las nuevas generaciones a debatir y a ejercer su

derecho a decidir sobre su futuro.

En algunos espacios oficiales de la cumbre se presentan estudios y encuestas sobre

la opinión de los jóvenes respecto a

la globalización, al desarrollo

sostenible o a la oportunidad que

representa la economía verde para el

desarrollo de sus países. Es muy

difícil analizar la juventud,

evidentemente no es una sola ni

homogénea pero comparte

características propias de esta cultura

globalizada y postmoderna.

Paralelamente a la cumbre oficial en

Río se desarrolla la Cumbre de los

45

Pueblos. En ella, a diferencia de la

oficial, la presencia de los y las

jóvenes es entusiasta. Contra las

críticas que muchas veces nos

atrevemos a lanzar sobre la juventud

como apática y despolitizada, en esta

cumbre encontramos a jóvenes

preocupados y ocupados en el

trabajo de crear propuestas para el

futuro que ellos y ellas quieren.

Esta misma mañana hemos asistido a

distintos eventos organizados por y

para jóvenes. En uno de esos

espacios los protagonistas fueron jóvenes representantes de distintos pueblos

indígenas de Latinoamérica que junto con Leonardo Boff defendieron y

argumentaron por qué “El Buen Vivir” puede ser un camino de salida a esta crisis

ambiental y económica que enfrentamos.

“No tenemos liderazgos que cuiden de sus pueblos y de la naturaleza. Parece que

no tenemos utopías y buscamos fuentes de inspiración,” afirmaban esta mañana.

Por eso, como jóvenes, abrazan y recuperan lo que sus propios pueblos indígenas

tienen como riqueza: su cosmovisión, la forma de entender la vida y su relación

íntima con la naturaleza y con la creación. Lo que han descubierto es que recuperar

sus propios orígenes puede ser inspirador, orientador y generador de esperanza.

El Buen Vivir es una categoría holística que incluye a personas y a la naturaleza.

También, implica una profunda construcción colectiva y una verdadera democracia

comunitaria, en donde la centralidad la tiene la tierra que ofrece la fuente de la vida

y los recursos que no son para explotar sino para vivir y cuidar de ellos, porque

dicen, a esa tierra pertenecemos.

Esta visión que puede inspirarnos mucho también puede ser fácilmente descalifica

de romántica y utópica. Porque rompe nuestra idea occidental de bienestar, de

progreso y de consumo desmedido como sinónimo de desarrollo y de calidad de

vida no nos deja mirar y sentir de otra manera. Vivimos al amparo de un status quo

económico que es claramente dominante. Su lógica – generación y concentración

de la riqueza “para mí y para hoy”- está seriamente protegida por el marco político

constitucional de la mayoría de los países, por las instituciones financieras

internacionales y por nuestra aspiración personal de lo que es bueno para nuestras

vidas.

Frente a esta realidad, lo que hoy se nos propone es una lógica de la generación y

redistribución de la riqueza para todos y todas y para hoy y mañana, un modelo

que representa una alternativa no solo económica, sino ecológica y vital. Los

jóvenes que hoy conocimos nos inspiraron que

el buen vivir puede ser esa utopía necesaria y

la gran alternativa para la humanidad. El futuro

que ellos quieren no puede ser la prolongación

del presente, ni puede repetir o errores del

pasado.

De esta propuesta quizá lo que lo que más nos

cuesta entender es que los pueblos humildes de

la tierra tengan “razón y verdad” en lo que nos

dicen y que quizá, la solución a los grandes

46

problemas de la humanidad estén fuera del paradigma que los ha originado, que la

armonía y el equilibrio entre personas y naturaleza sea hoy tan necesario y que

aprender la lección desde la humildad de los desposeídos sea nuestra única

posibilidad de salir de esta crisis planetaria que enfrentamos.

Ms Mary Tere Guzmán trabaja con la Acción Política y Redes Departamento de

Alboan, una ONG Jesuita en España, provincia de Loyola que promueve la

cooperación para el desarrollo mediante la educación y capacitación, apoyo a las

políticas y fortalecer la transformación social de las organizaciones que se dedican a

trabajos de desarrollo.

Cuatro miradas a la Cumbre de los Pueblos

Jaime Tatay

Junio 22, 2012

1. FE Y ALEGRÍA

Fe y Alegría es “un movimiento para la educación popular

integral y la el desarrollo social.” Este movimiento ofrece

sus actividades y esfuerzos a los sectores más

empobrecidos y excluidos de la sociedad, para empoderarlos

en su desarrollo personal y en su participación en la

sociedad. FyA nació en Venezuela en 1955 como un modo

de consolidar los esfuerzos que se estaban realizando para

ofrecer educación en barrios pobres de Caracas. Hoy en día

está presente por toda Latinoamérica, el Caribe y partes de

África. La educación es, y siempre será, un modo excelente

de empoderar a las personas.

2. PUEBLOS INDÍGENAS

Pueblos indígenas de todos los rincones del mundo se han reunido en la

“Conferencia internacional de pueblos indígenas sobre desarrollo sostenible y

autodeterminación” del 17 al 19 de Junio en el Museu da República in Río de

Janeiro, Brasil. También han estado presente en la cumbre de la ONU sobre

Desarrollo Sostenible, Río+20, y en la Cumbre de los pueblos. Los pueblos

indígenas enfrenta numerosos problemas, como la construcción de la presa Belo

Monte, aquí en Brasil. Siglos de depredación, contaminación, colonialismo, violación

de los derechos humanos y genocidio hacia estos pueblos no es algo del pasado.

47

3. ECO-ALFABETIZACION

“Eco-alfabetización” es un término que ha estado muy

presente en la cumbre de los pueblos. El término lo

inventó el educador americano David W Orr y el físico

Fritjof Capra en los 90. Eco-alfabetización puede

definirse como “la habilidad de entender los sistemas

naturales que hacen posible la vida en la tierra.” Como

Orr mismo afirmó, el objetivo de la eco-alfabetización

es “construir sobre la convicción que el desorden en los

ecosistemas refleja un desorden mental previo,

convirtiéndose en una preocupación vital para las

instituciones que tratan de mejorar las mentes. Dicho

de otro modo, la crisis ecológica es en todos los

sentidos una crisis educativa… Toda educación es educación medioambiental… en la

que se incluye (o se excluye) que ensenemos a los jóvenes que ellos son parte (o

no) del mundo natural.” ¿Estamos entonces listos para eco-alfabetizarnos?

4. ECONOMÍA VERDE O PINTAR DE VERDE LA ECONOMÍA? ESA ES LA

CUESTIÓN

Cuales son las verdaderas cuestiones que se están

debatiendo en Río+20? Esa es la pregunta que Río

trata de responder de cara al futuro. Para muchos, el

documento final – El futuro que queremos – es una

gran decepción. La Northern Alliance for Sustainability

(ANPED), junto con muchas ONGs y otras

organizaciones de la sociedad civil, han lanzado una

petición electrónica titulada ‘El futuro que no

queremos.’ Estas voces críticas aseguran que “el texto

oficial no hace ninguna mención a temas vitales como

son la justicia medioambiental, la innovación social o a

la necesidad de nombrar un alto-representante para las

futuras generaciones. El texto es claro en algunas

partes – como los párrafos sobre los Objeticos de Desarrollo Sostenible, la

reafirmación de los Derechos Humanos, la necesidad de eliminar los subsidios a los

combustible fósiles y la cuestión de los océanos – el texto en su conjunto no será

una respuesta válida para la multitud de crisis que enfrentamos.” La pregunta que

resta es: ¿Será esta declaración suficiente para generar el cambio que necesitamos,

o está sola la sociedad civil en la tarea de realizar las urgentes transformaciones

que se precisan?

Marcha Global en la Cumbre de los Pueblos: Algo nuevo está surgiendo

Gilberto Faggion y Lucas Luz

Junio 22, 2012

En la tarde del Miércoles, 20 de junio, miles de personas se reunieron en el centro

de Río de Janeiro para la Marcha Mundial, organizado por la “Cumbre de los Pueblos

en Río+20 para la Justicia Social y Ambiental,” evento organizado por la sociedad

civil global. Ciertamente, la Marcha Mundial no fue homogénea, es decir, que se

caracteriza más bien como una multitud, en el sentido acuñado por los filósofos

48

Antonio Negri y Michael Hardt. Una pluralidad real, tal vez una característica de una

sociedad opulenta.

Fue una demostración de que expresa los dilemas estratégicos que tiene planteada

la humanidad, tratando de encontrar alternativas al capitalismo global, avanzando

en la crítica al modelo de civilización existente, tratando de expresar la voluntad de

una relación más equilibrada con la naturaleza. Por otra parte, en expresión

conocida de Edgar Morin, “nuestro tiempo de cambio se ha convertido en un cambio

de época.”

Una manera de entender mejor la diversidad de la marcha, su pluralidad, es tratar

de escuchar y observar a diferentes individuos que participaron.

Idón Moisés Chivi Vargas (de Bolivia y miembro de los aymaras gente de los Andes

y el Altiplano regiones de América del Sur) expresa con vehemencia la diferencia de

la Cumbre de los Pueblos y su marcha con Río+20: “en la conferencia oficial Río+20

están decidiendo el color de la tinta con que firmarán el acta de defunción del

planeta. Aunque haya países pequeños que tratan de cambiar esta situación, lo que

están decidiendo es sólo el color de la tinta. La Cumbre, la marcha, es la expresión

de la diversidad que nos ofrece la Madre Tierra. Se trata de un movimiento de la

vida, de sus posibilidades.”

Pueblo indígena Xavante de Marãiwatsédé, del estado de Mato Grosso en el

Amazonas, bailó, cantó y protestaron

a lo largo de la marcha. De acuerdo

con el Arimathea, un Xavante, hace

20 años la tierra fue demarcada y

reconocida, pero los agricultores

todavía la ocupan. Afirma no

entender lo que sucede con el

sistema de justicia de Brasil en

relación con los indios, y su tribu.

También en forma de canción y

danza, los miembros de la Escuela de

Samba de la comunidad de Vigário

Geral en Río de Janeiro, defendieron y difundieron la idea de un proyecto iniciado

en Alemania, llamado Bread Tank, o tanque de pan, que apoya la reorientación de

las inversiones militares.

Podemos añadir a estas declaraciones las del señor Adán, de Río de Janeiro, un

residente de Baixada Flumininense, portero en un edificio de oficinas, que estaba

en la puerta del edificio en el que trabaja, viendo la manifestación. Preguntado

sobre su percepción de la marcha dijo: “Tienen que hacerlo mucho más. Aunque

sea un barullo. Si no hacen ruido nadie se da cuenta y nadie se entera. Hay que

poner al gobierno en una situación difícil. No importa que paren el tráfico y la

ciudad. Hay que hacer algo. La corrupción, la contaminación, los bajos salarios,

todo esto precisa un cambio.”

Las expresiones en la marcha fueron muy variadas, a las anteriores habría que

añadir: manifestaciones relacionadas con el género, la libertad de orientación

sexual, en contra de la inducción de los medios de comunicación que lleva al

consumismo infantil, la violencia en el medio rural, en favor de los derechos de los

animales, el movimiento vegano, entre muchos otros proyectos. Si no fuese

suficiente esta multiplicidad de actores, de movimientos, de perspectivas, las cuales

tienen en común el deseo de una sociedad diferente, también se unieron a la

49

marcha, una serie de movimientos en huelga, como los empleados federales, y un

grupo de tres sindicatos.

Por último, esta diversidad de propuestas, que a menudo no está bien definidas,

que se expresan en forma de protesta, apuntan a iniciativas diversas, algunas

pequeñas, locales, sin embargo, confrontadas a la lógica de la complejidad, tal vez,

podrían dar lugar a cambios significativos. La verdad es que la marcha pretendía

ser un contrapunto a la oficial Río+20. Lo que nos permite recordar lo que Zygmunt

Bauman, un sociólogo polaco, señaló, “lo nuevo está en disputa y de esa disputa

sobrevivirá un proyecto emancipatorio, o no.”

Los autores son desde el Instituto Humanitas Unisinos, una universidad jesuita.

Lunes 25 de Junio 2012

Llegamos con este boletín a la última de edición de Ecojesuit en Río+20. Para

todos los que hemos compartido estos días en Rio de Janeiro ha sido una intensa

experiencia. Queremos agradecer a Alfredo Ferro, SJ, Coordinador Social de la CPAL

por todas las facilidades para estar estos días en Río, coincidiendo además con el

encuentro de Centros Sociales de América Latina. Durante estos días hemos

formado un equipo formado por Mauricio López Oropeza de las Comunidades de

Vida Cristiana, Mary Tere Guzmán de la ONG Alboan, Pachita del Equipo Itinerante

de la Amazonia, Patxi Álvarez, SJ del Secretariado para la Justicia Social y la

Ecologia de Roma y Jaime Tatay, SJ del Seminario de Investigaciones para la Paz

de Zaragoza, España. Ha sido un colaborador excepcional y un apoyo constante

Franclim Brito. A todos ellos nuestro más sincero agradecimiento.

Esperemos que disfrute con este último número desde Río. Para nosotros estos

días nos han reforzado en nuestro compromiso para acercar la ecología y los

desafíos medioambientales a los jesuitas y sus amigos. Los retos siguen enfrente

de nosotros y sólo podemos afrontarlos como gran comunidad.

Declaración de la Conferencia Internacional de Pueblos Indígenas sobre

Desarrollo Sostenible y Libre Determinación

Junio 25, 2012

Los Pueblos Indígenas de todas las regiones del mundo nos reunimos en la

“Conferencia Internacional de los Pueblos Indígenas sobre el Desarrollo Sostenible y

la Libre Determinación” de 17–19 de junio de 2012 en el Museo de la República, Río

de Janeiro, Brasil.

Damos las gracias a los Pueblos Indígenas de Brasil por darnos la bienvenida y

expresamos nuestra solidaridad con sus luchas impuestas por el desarrollo, como la

represa de Belo Monte, que amenazan a sus territorios y formas de vida. También

agradecemos a los pueblos indígenas de todas las regiones del mundo por sus

actividades de preparación y su participación en este proceso.

Afirmamos con una sola voz que ya es hora de asumir las responsabilidades

históricas para revertir siglos de depredación, contaminación, colonialismo,

violación de los derechos y genocidio. Es hora de asumir las responsabilidades para

con las generaciones futuras. Es el momento de elegir la vida.

1. La cultura como una dimensión fundamental del desarrollo sostenible

Como Pueblos Indígenas, nuestros sistemas de creencias culturales fundamentales

y cosmovisiones del mundo están basados en nuestras relaciones sagradas con la

Madre Tierra que han sustentado nuestros pueblos a través del tiempo.

50

Reconocemos las contribuciones y la participación de los titulares de conocimientos

tradicionales, las mujeres y los jóvenes indígenas.

Nuestras culturas son formas de ser y de vivir con la naturaleza, que sustentan

nuestros valores, opciones éticas y morales y nuestras acciones. La supervivencia

de los pueblos indígenas se basa en el apoyo de nuestras culturas, que nos

proporcionan lo material, social y la fuerza espiritual. Creemos que todas las

sociedades deben fomentar una cultura de la sostenibilidad y que Río+20 debe

poner de relieve la cultura, la moral y la ética como las dimensiones más

fundamentales del desarrollo sostenible.

2. El ejercicio pleno de nuestros derechos humanos y colectivos

Vemos que la Madre Tierra y toda la vida se encuentran en una grave situación de

peligro. Vemos que el actual modelo de desarrollo sostenible sigue avanzando en el

camino del peligro. Los Pueblos Indígenas hemos experimentado los terribles

efectos negativos de este enfoque. Estas amenazas se extienden a los pueblos en

aislamiento voluntario.

El desarrollo sostenible solo puede realizarse a través de la plena vigencia y

cumplimiento de los derechos humanos. Los Pueblos Indígenas vemos el desarrollo

sostenible y la autodeterminación como complementarios. Los avances en varios

países han sido posibles en la medida en que los Estados han cumplido con su

obligación de respetar, proteger y

promover los derechos humanos,

mientras que los conflictos se han

intensificado en donde los gobiernos

han impuesto de arriba hacia abajo el

desarrollo, ya sea con la etiqueta

“sostenible,” “pro-pobres,” o “verde.”

La Declaración de la ONU sobre los

Derechos de los Pueblos Indígenas es

la norma que debe aplicarse en la

implementación del desarrollo

sostenible en todos los niveles,

incluido el respeto de la plena

participación en la toma de decisiones y de nuestro consentimiento libre, previo e

informado (CLPI) en todas las políticas, programas y proyectos que nos afectan.

3. El fortalecimiento de diversas economías locales y la ordenación

territorial

Para los Pueblos Indígenas, la autodeterminación es la base del Buen Vivir, y esto

se realiza a través de derechos seguros sobre la tierra y la ordenación territorial y

la construcción comunitaria de economías más vibrantes. Estas economías locales

proporcionan medios de vida sostenibles locales, la solidaridad comunitaria y son

componentes críticos de la resiliencia de los ecosistemas.

Vamos a seguir fortaleciendo y defendiendo nuestras economías y el ejercicio de

nuestros derechos a nuestras tierras, territorios y recursos, en contra de las

industrias extractivas, las inversiones depredadoras, la apropiación de tierras, los

reasentamientos forzados y los proyectos de desarrollo insostenibles. Estos incluyen

las represas a gran escala, las plantaciones, la infraestructura a gran escala, la

extracción de arenas de alquitrán y otros mega-proyectos, así como el robo y la

apropiación de nuestra biodiversidad y conocimientos tradicionales.

De la Conferencia surgieron muchas respuestas para hacer frente a la crisis global,

tan variadas como las diversas culturas presentes en la reunión. La mayor riqueza

51

es la diversidad de la naturaleza y su

diversidad cultural asociada, las

cuales están íntimamente

relacionadas y deben ser protegidas

de la misma manera.

Los Pueblos Indígenas llamamos al

mundo a volver al diálogo y la

armonía con la Madre Tierra, y

adoptar un nuevo paradigma de

civilización basado en el Buen Vivir. En el espíritu de la humanidad y nuestra

supervivencia colectiva, la dignidad y el bienestar, respetuosamente ofrecemos

nuestros puntos de vista culturales del mundo como una base importante para

renovar colectivamente nuestras relaciones con los otros y con la Madre Tierra y

para garantizar Buen Vivir con integridad.

En base a estas afirmaciones y acuerdos, nos comprometemos a llevar a

cabo las siguientes acciones:

Dentro y entre las comunidades, pueblos y naciones indígenas

1. Vamos a definir y poner en práctica nuestras propias prioridades para el

desarrollo económico, social y cultural y la protección del medio ambiente,

sobre la base de nuestras culturas tradicionales, nuestros conocimientos y

prácticas, y la aplicación de nuestro derecho inherente a la libre

determinación.

2. Vamos a revitalizar, fortalecer y restaurar nuestras instituciones y métodos

para la transmisión de nuestros conocimientos y prácticas tradicionales que

se centran en la transmisión por nuestras mujeres y nuestros ancianos a las

próximas generaciones.

3. Vamos a restablecer el intercambio de conocimientos y productos, incluidos

los intercambios de semillas entre nuestras comunidades y pueblos en

refuerzo de la integridad genética de nuestra biodiversidad.

4. Vamos a estar en firme solidaridad con todas luchas contra los proyectos

que amenazan a nuestras tierras, bosques, aguas, prácticas culturales,

soberanía alimentaria, medios de subsistencia tradicionales, ecosistemas,

derechos y formas de vida. También en solidaridad con otros sectores

sociales cuyos derechos están siendo violados, incluidos los campesinos,

pescadores y pastores.

En las acciones frente a los Estados y las corporaciones:

1. Vamos a seguir rechazando el concepto del modelo neoliberal dominante y

la práctica de desarrollo basada en la colonización, la mercantilización, la

contaminación y la explotación del mundo natural, y las políticas y proyectos

basados en este modelo.

2. Insistimos en que los Estados apliquen plenamente sus compromisos en

virtud de las leyes nacionales e internacionales y las normas que defienden

los derechos inherentes, inalienables, colectivos e inter-generacionales de

los pueblos indígenas y los derechos afirmados en tratados, acuerdos y

arreglos constructivos, la Declaración de las Naciones Unidas sobre los

Derechos de los Pueblos Indígenas y el Convenio 169 de la OIT.

3. Vamos a rechazar y oponernos firmemente a las políticas de los Estados y

los programas que repercuten negativamente en las tierras y territorios de

los pueblos indígenas, ecosistemas y medios de subsistencia, y a los

permisos otorgados a las empresas o cualquier otro tercero para hacerlo.

52

En las Naciones Unidas

1. Insistir en la participación plena y efectiva en todos los debates y

actividades de establecimiento de estándares en materia de desarrollo

sostenible, biodiversidad, medio ambiente y cambio climático y para la

aplicación de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de

los Pueblos Indígenas en todos estos procesos.

2. Vamos a llevar estos mensajes a la Conferencia de las Naciones Unidas

sobre el Desarrollo Sostenible, la Conferencia Mundial de los Pueblos

Indígenas (CMPI, 2014) y todos los otros procesos internacionales, donde

nuestros derechos y la supervivencia se ven afectados. Proponemos que la

visión y práctica de los Pueblos Indígenas del desarrollo sostenible sea un

foco de discusión en la CMPI.

Nosotros adoptamos la presente Declaración el 19 de junio de 2012, en Río de

Janeiro, Brasil, afirmando nuestros derechos y reiterando nuestras sagradas

responsabilidades con las generaciones futuras.

19 de junio de 2012, Río de Janeiro

La ecología, foco de atención del apostolado social

Patxi Álvarez, SJ

Junio 25, 2012

La segunda semana de junio se celebró en Buenos Aires la reunión anual de los

delegados sociales de la Conferencia de América Latina y Caribe. En un clima frío en

medio del otoño austral se reunieron cerca unas 30 personas procedentes de las

distintas provincias de América Latina. Entre ellas los coordinadores de la red

indígena, de Fe y Alegría y del Servicio Jesuita a Refugiados y Migrantes (SJR–

SJM), así como otras personas pertenecientes a agencias de cooperación que les

apoyan.

La siguiente semana les ha correspondido reunirse a los directores de centros

sociales de la Conferencia latinoamericana, en este caso en Río de Janeiro, en el

contexto de la cumbre oficial de Río+20 y de la Cúpula de los Pueblos, la cumbre

paralela de los movimientos sociales. En esta

ocasión, la representación brasileña ha sido

especialmente numerosa.

Ambas reuniones – de delegados sociales y de

directores de centros – han abordado sus

propias agendas, que giran en torno a la

creación de una conciencia latinoamericana y al

establecimiento de redes de colaboración entre

provincias e instituciones sociales. Llevan años

reuniéndose juntos, por lo que el ambiente es

muy constructivo y cordial.

En los dos encuentros, Alfredo Ferro, SJ –

coordinador social de la Conferencia – ha

propuesto disponer de un día y de una mañana

respectivamente para dialogar sobre cuestiones

de ecología. Se ha podido presentar el

53

documento “Sanar un mundo herido,” ofrecer una perspectiva del conjunto de

iniciativas de la Compañía en el campo ecológico y discernir cuáles pueden ser los

siguientes pasos a dar para que nuestra respuesta sea más completa y eficaz.

Era la primera vez que se trataba esta cuestión de modo monográfico. El interés

suscitado ha sido muy grande. Quienes acompañan a comunidades pobres en

América Latina saben que las cuestiones medioambientales son cruciales para el

futuro de estas personas.

Los recursos mineros están siendo explotados en todo el continente a un ritmo sin

precedentes. Aumentan los grandes proyectos de desarrollo. La industria maderera

sigue consumiendo los bosques. La agroindustria crece en todos los países,

acaparando enormes cantidades de tierra para la producción de monocultivos como

la soja y la caña de azúcar. Son las comunidades campesinas e indígenas las que

más están sufriendo las consecuencias, amenazadas en sus modos de vida. Los

jesuitas acompañan o están cerca de muchos de estos grupos, por lo que su

sensibilidad es muy elevada, como podía verse en las reuniones.

Asimismo, ha sido una preciosa sorpresa descubrir la gran cantidad de iniciativas

que tienen los jesuitas de América Latina en el campo ecológico: ofertas de

espiritualidad, publicaciones, cursos de formación en instituciones educativas,

investigaciones, participación en movimientos civiles, promoción de alternativas al

desarrollo. Son innumerables las

acciones emprendidas, si bien aún

permanecen poco conectadas entre

sí. En el futuro será necesario

articularlas mejor para poder ofrecer

una respuesta integral. Por ello han

repetido con insistencia la necesidad

de la interdisciplinariedad y de

responder de modo coordinado desde

el conjunto de los sectores

apostólicos. Subrayaban también la

importancia de enraizar los esfuerzos

en nuestra espiritualidad ignaciana.

Hay camino por recorrer, pero éste ya marcha en la buena dirección. Se trata de

uno más de los muchos esfuerzos de tanta gente de buena voluntad que está

luchando por un mundo más justo y sostenible.

Patxi Álvarez, SJ es Director de la Secretariado para la Justicia Social y la Ecología

en Roma.

Lo germinal que nace de lo marginal: Otro mundo es posible

Mauricio López Oropeza

Junio 25, 2012

Martín Buber, en su texto “Yo y tú: y otros ensayos,” plantea la situación actual

como extremadamente angustiante y como un momento en donde se hace difícil

encontrar alternativas distintas, pero continúa constatando que a pesar de eso,

justamente por la insistencia en encontrar un mejor horizonte, encontraremos

siempre y definitivamente la esperanza. Es con base en esto que confirmamos

decididamente que otro mundo es posible.

54

En el marco de la Cumbre Río+20, como se ha compartido ya, hemos

experimentado algunas voces unívocas y sin consenso, las cuales han enmarcado el

rumbo de este evento. Sin embargo, a pesar de ellas o quizás por ellas, hemos

puesto más atención a las expresiones distintas que se han hecho evidentes en una

tónica que nos presenta cómo en lo marginal se encuentra hoy la raíz de lo

germinal.

Hoy queremos poner más atención a otras perspectivas que se han ido tejiendo en

la cumbre para hablarnos de esperanza:

1. La postura oficial de las ONGs articuladas a Naciones Unidas fue de un

contundente y casi unánime rechazo a los pobres resultados oficiales de esta

cumbre. Esto nos dice que la última palabra no está dicha, que una buena

parte de la sociedad civil va dejando la ingenuidad, y reafirma su madurez al

oponerse a la superficialidad de muchos de los acuerdos presentados.

2. Entre sala y sala, sobre todo en el sitio “periférico” de los eventos de las

ONGs, aparecieron voces proféticas que expresan que sólo la construcción

de un nuevo paradigma es la alternativa. Asimismo se ha expresado que los

únicos capaces de diseñar una propuesta resiliente, generalizada y activa,

podrían ser muchos pequeños campesinos y grupos minoritarios con

prácticas más comunitarias y respetuosas del medio ambiente. En esto se

percibe lo que Paulo Freire expresa como el ineludible proceso de liberación

que sólo puede venir de los oprimidos. Ellos son los únicos que pueden

liberar a los opresores, ya que sólo éstos son conscientes de su condición y

han sido capaces de sobrevivir a ella. En esta afirmación asumimos la

Cumbre de los Pueblos, con sus límites y fragmentaciones, como una

expresión que marchó para mostrar que hay otras vías más democráticas

que deben tener un rol más protagónico.

3. Los sistemas naturales superan las fronteras y funcionan como órganos

vivos que no pueden ser fragmentados, y si bien están siendo afectados por

las decisiones no integradas provenientes de intereses parciales, son los

únicos capaces de mostrarnos la vía de superación de nuestros fallidos

paradigmas.

4. Gobiernos específicos están rompiendo, o en proceso de hacerlo, con los

rígidos y homogéneos índices de medición de la pobreza, para promover

índices de medición de la felicidad. Estos integran otro tipo de valoraciones

que marcan la plenitud y el sentido de la vida como metas últimas. Los otros

esquemas, sin ser rechazados, se vuelven complementarios.

5. Son países pequeños los que están planteando los temas más cruciales con

soluciones más viables en esta cumbre. La noción de lo pequeño-marginal

como germen, se ha constatado en la Río+20. Es momento de retomar

antiguas proyecciones como la de EF Schumacher, afirmando que “lo

pequeño es hermoso.”

6. Ante lo que parece el fracaso de la cumbre; lo que subyace a este ejercicio

de diálogo entre Naciones, es que las soluciones han de constituirse desde

procesos colectivos. Hoy los grupos de naciones de menor poder, como el de

los 77 en la ONU, van tomando más protagonismo ante la crisis que aqueja

a los grupos de las naciones auto-afirmadas como élites que antes eran

incuestionables. Anhelamos que estén a la altura del momento coyuntural.

Indudablemente queda mucho por recorrer para que estas perspectivas emergentes

tengan solidez y puedan propiciar cambios serenos a esta situación. Sin embargo,

cuando hablamos de ecología no podemos más que asumir los ritmos y transiciones

55

inter-conectadas, pero sostenidas, que los sistemas vivos nos muestran.

Mantengamos una esperanza encendida, sobre todo aquella que viene de jóvenes

en todo el mundo que comienzan a dar un paso de indignación. Estas apuestas

eventualmente conducirían a la articulación de propuestas que se originen de otros

saberes considerados marginales-germinales.

Mauricio López Oropeza es con la Comunidad de Vida Cristiana Mundial y él puede

ser alcanzado por su correo electrónico: mauricio(at)cvx-clc.net.

América Latina en la encrucijada: ¿Es posible el crecimiento sostenible e

inclusivo en la región?

Mary Tere Guzmán

Junio 25, 2012

La región de América Latina enfrenta grandes retos para su desarrollo. Estos retos

han sido atendidos en la cumbre de Río+20 con especial interés. La economía de la

región es

significativa por

su tamaño y los

sectores que la

componen, y el

impacto de sus

políticas en

materia

económica y

ambiental son

de gran

relevancia para

el contexto

global.

En la recta final

de la cumbre el

Banco

Interamericano

de Desarrollo (BID) organizó un espacio de discusión, Crecimiento Sostenible e

Inclusivo para América Latina y el Caribe. El debate presidido por Luis Alberto

Moreno presidente del BID intentó abordar los principales retos en desarrollo y

sostenibilidad para la región.

56

Luis Alberto Moreno

Entre los temas abordados podemos destacar la preocupación por el cambio

climático y los efectos en los países de la región, especialmente en la población

empobrecida. La economía latinoamericana es altamente dependiente de la

exportación de recursos naturales y de la agricultura por lo que las sequías,

inundaciones, huracanes, etc. seguirán afectando fuertemente a las economías

nacionales. El BID estima que los efectos por el calentamiento global serán de unos

100.000 millones de dólares anuales. Los retos que se presentan es de qué manera

invertir para paliarlos y proponer soluciones innovadoras para reducir las emisiones

de carbono.

Un segundo reto es lograr crecimiento sostenible y a la vez inclusivo. Latinoamérica

se ha caracterizado por una polarización social y económica creciente y es

hoy en día la región más desigual del mundo. Los indicadores de crecimiento

de países como Perú, Brasil, o Colombia demuestran que es una región dinámica,

pero el crecimiento económico no ha logrado reducir las desigualdades sociales.

En tercer lugar, aparece el reto de diversificar el patrón de exportaciones más

allá de las materias primas. Se apunta que es necesaria una mayor inversión en

generación de capacidades en la población, en infraestructuras y en tecnología. De

igual forma, se resalta la importancia de avanzar hacia una mejor gobernanza de

los recursos naturales y del cuidado y mantenimiento de la riqueza en

biodiversidad.

Si bien estos retos son compartidos por el conjunto de países de la región, el punto

de partida entre ellos es muy desigual. No es posible hablar de América Latina

como un todo, pues las diferencias entre los países son enormes y es necesario

reconocerlas. Estas diferencias se hacen evidentes no solo en las condiciones de

partida, sino también, en la idea de desarrollo que se está impulsando y en el

conjunto de políticas que están aplicando unos y otros países.

57

Frank Pearl

En este espacio de discusión tuvo un gran protagonismo la participación de Frank

Pearl, Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia, quien enfatizó la

necesidad de incluir en los acuerdos de la cumbre Objetivos de Desarrollo

Sostenible. El ministro colombiano explicó en profundidad los objetivos del gobierno

de Colombia entre los que podemos destacar la atención al “territorio” como

espacio para el desarrollo local/regional, la inversión en generación de capacidades

y en tecnología e investigación para comercio y conservación de la riqueza natural

del país.

La intervención del ministro colombiano confirmó la gran diferencia de enfoques y

estrategias que hay entre los países latinoamericanos. Por un lado, países como

Ecuador o Bolivia apuntan, al menos en el discurso, a propuestas como “El Buen

Vivir,” incorporando visiones tradicionales e indígenas. Por otro lado, países como

Brasil, Colombia, o México incorporan elementos de este discurso de sostenibilidad

e inclusión pero continúan reforzando el crecimiento de sus economías basado en la

explotación de los recursos naturales como motor del desarrollo, frecuentemente

sin planes para transitar hacia otro modelo más sostenible. La región se encuentra

ante una encrucijada, potenciar el crecimiento o avanzar seriamente con

propuestas sostenibles y que mitiguen la desigualdad.

Finalmente, es importante destacar que en este espacio los grandes temas

ausentes fueron: la democracia, la creciente violencia en los países de la región y la

migración. Temas de enorme relevancia social y económica para América Latina

que parecen olvidados o desconectados de los debates del discurso del desarrollo

de los gobiernos latinoamericanos.

Ms Mary Tere Guzmán trabaja con la Acción Política y Redes Departamento de

Alboan, una ONG Jesuita en España, provincia de Loyola que promueve la

cooperación para el desarrollo mediante la educación y capacitación, apoyo a las

políticas y fortalecer la transformación social de las organizaciones que se dedican a

trabajos de desarrollo.

58

Primeras impresiones del Futuro Que Queremos

José Ignacio García, SJ

Junio 25, 2012

El Futuro Que Queremos es el título del acuerdo final de la Conferencia de Naciones

Unidas sobre Desarrollo Sostenible, Río+20. Es un largo texto de 49 páginas y hará

falta más tiempo para hacer una análisis más detallado. Este artículo quiere dar

una primeras impresiones, destacando algunos de los puntos más controvertidos.

Efectivamente no es un texto original, nada creativo, casi no hay ninguna idea

novedosa salvo tal vez las de “economía verde” y “objetivos de desarrollo

sostenible,” de hecho el acuerdo hace referencia a docenas de acuerdos,

convenciones y tratados anteriores a los que anima a reforzar, apoyar o sostener

en ese universo de iniciativas ya existentes. Vamos a ofrecer algunos ejemplos, con

el número del párrafo del documento oficial entre paréntesis.

“Con la plena participación de la sociedad civil” (1). En un duro comunicado

publicado por las ONGs presentes en Río pidieron que esta expresión fuera retirada

porque no se veían en absoluto representadas en el resultado de la Conferencia y

eso les hacía poner en cuestión todo el proceso.

“Reafirmamos también la importancia de la libertad, la paz y la seguridad, el

respeto de todos los derechos humanos, entre ellos el derecho al desarrollo” (8).

De la forma que se expresa aquí el derecho al desarrollo parece superior y por lo

tanto no puede ser limitado por límites físicos del planeta, no se inscribe en un

hecho mayor como es la escasez y el agotamiento de los recursos naturales.

“Reconocemos que muchas personas, especialmente los pobres, dependen

directamente de los ecosistemas para su subsistencia, su bienestar económico,

social y físico, y su patrimonio cultural. Por esa razón, es esencial generar empleos

e ingresos decentes que reduzcan las disparidades entre los niveles de vida para

atender mejor a las necesidades de la población y promover medios y prácticas de

subsistencia sostenibles y el uso sostenible de los recursos naturales y los

ecosistemas” (30). La solución que se ofrece – empleos e ingresos – podría sugerir

que se trata de una prioridad frente la protección de los ecosistemas. Esto podría

ser claramente contradictorio, ya que es bien sabido que destruir, o no gestionar

correctamente los ecosistemas es la primera fuente de pobreza por el colapso de

los ingresos tradicionales. Una vez más podemos ver una de las principales

dificultades de este texto: no acaba de dar prioridad sólo enumera, por lo que no

ofrece un criterio en caso de conflicto.

“Reconocemos la necesidad de establecer formas más variadas de medir los

avances que complementen al producto interno bruto, con el fin de informar mejor

las decisiones de política, y a este respecto, solicitamos a la Comisión de Estadística

de las Naciones Unidas que, en consulta con las entidades pertinentes del sistema

de las Naciones Unidas y otras organizaciones competentes, ponga en marcha un

programa de trabajo en este ámbito sobre la base de las iniciativas existentes”

(38). Otra vez nada nuevo, demasiado poco, pero algo claramente bueno y que es

positivo.

“Reconocemos que el planeta Tierra y sus ecosistemas son nuestro hogar y que

Madre Tierra es una expresión común en muchos países y regiones, y observamos

que algunos países reconocen los derechos de la naturaleza en el contexto de la

promoción del desarrollo sostenible. Estamos convencidos de que, para lograr un

justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y ambientales de las

generaciones presentes y futuras, es necesario promover la armonía con la

59

naturaleza” (39). La cuestión sobre los derechos de la naturaleza o los derechos de

la tierra está siendo muy controvertida, especialmente allí donde hay comunidades

indígenas que se organizan para proteger sus tradiciones y recursos, y sus

territorios. La solución ofrecida en este acuerdo es reconocer que algunos países los

reconocen como derechos y para el resto hace una llamada general a la harmonía

con la creación. Obviamente es un argumento muy débil si lo comparamos con la

fuerza que tienen la protección de un derecho.

“Reconocemos la importancia de la presentación de informes sobre sostenibilidad

empresarial y alentamos a las empresas, especialmente a las sociedades que

cotizan en bolsa y a las grandes empresas, a que, cuando proceda, consideren la

posibilidad de incorporar información sobre sostenibilidad a su ciclo de presentación

de informes. Alentamos a la industria, los gobiernos interesados y las partes

interesadas pertinentes a que, con el apoyo del sistema de las Naciones Unidas,

según proceda, preparen modelos de mejores prácticas y faciliten la adopción de

medidas en pro de la incorporación de informes sobre sostenibilidad, teniendo en

cuenta las experiencias de los marcos ya existentes y prestando especial atención a

las necesidades de los países en desarrollo, incluso en materia de creación de

capacidad” (47). La recomendación es tan débil que podría pensarse que es

ingenua si no fuese porque está escrita en un acuerdo internacional. Río+20 habría

marcado una diferencia si hubiese hecho obligatorio el informe de sostenibilidad – y

hubiese remitido a algún protocolo – mantenerlo como una recomendación es una

gran oportunidad perdida.

“Destacamos la importancia de la participación de los pueblos indígenas en el logro

del desarrollo sostenible. Reconocemos también la importancia de la Declaración de

las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas en el contexto de

la aplicación de estrategias de desarrollo sostenible en el plano mundial, regional,

nacional y subnacional” (49). Este párrafo resulta totalmente insuficiente cuando

los pueblos indígenas se están esforzando por sobrevivir. La llamada a participar

para contribuir al desarrollo sostenible parece casi hipócrita cuando simplemente

están tratando de sobrevivir como pueblo. El texto debería recoger esta situación

de minoría que debe ser respetada.

“Nos comprometemos a fortalecer la función del Programa de las Naciones Unidas

para el Medio Ambiente (PNUMA) como principal autoridad ambiental mundial que

establece las actividades mundiales en pro del medio ambiente, promueve la

aplicación coherente de los aspectos ambientales del desarrollo sostenible en el

sistema de las Naciones Unidas y actúa como defensor autorizado del medio

ambiente a nivel mundial” (88). El Programa de NU para el Medio Ambiente

permanece programa, que es un rango muy inferior en el ranking de las agencias

internacionales, esto hace que sea muy dudoso su papel de “principal autoridad

ambiental mundial.”

“Reconocemos que los minerales y los metales hacen una gran contribución a la

economía mundial y las sociedades modernas. Observamos que las industrias

mineras son importantes para todos los países con recursos minerales, en particular

los países en desarrollo. También observamos que la minería ofrece la oportunidad

de catalizar un desarrollo económico de amplia base, reducir la pobreza y ayudar a

los países a lograr los objetivos de desarrollo convenidos internacionalmente, entre

ellos los Objetivos de Desarrollo del Milenio, cuando se gestiona de manera efectiva

y adecuada. Reconocemos que los países tienen el derecho soberano a explotar sus

recursos minerales de conformidad con sus prioridades nacionales y la

responsabilidad sobre la explotación de los recursos que se describe en los

60

Principios de Río. Reconocemos también que las actividades mineras deben

aumentar al máximo los beneficios sociales y económicos y abordar de manera

efectiva los efectos negativos ambientales y sociales. En este sentido, reconocemos

que los gobiernos necesitan una gran capacidad para desarrollar, gestionar y

reglamentar sus industrias mineras en interés del desarrollo sostenible” (227).

Probablemente este es uno de los más desafortunados párrafos de la declaración.

La preeminencia económica que se da a la minería, sin mencionar que es un

recurso que se agota, y poniendo sus implicaciones sociales al final, sin mencionar

que tiene efectos devastadores como la expulsión de poblaciones, la apropiación de

tierra, la contaminación de suelos y agua, y las condiciones laborales inhumanas,

indica la escala de valores que se propone. Las materias primas se anteponen de

forma radical a los seres humanos.

“Reconocemos que la formulación de objetivos también podría ser útil para la

puesta en marcha de medidas concretas y coherentes sobre el desarrollo

sostenible. Reconocemos también la importancia y la utilidad de un conjunto de

objetivos de desarrollo sostenible, basados en el Programa 21 y el Plan de

Aplicación de las Decisiones de Johannesburgo, que respeten plenamente todos los

Principios de Río” (246). Esta es una de las novedades, el tiempo dirá si se

concretiza y se hacen operacionales.

El futuro que queremos (Formato PDF)