Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

download Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

of 55

Transcript of Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    1/55

    Solamente Por Gracia

    ndice:

    1. DIOS JUSTIFICA A LOS IMPIOS

    2. DIOS ES EL QUE JUSTIFICA

    3. JUSTO Y JUSTIFICADOR

    4. SALVACIN DE PECAR

    5. POR GRACIA MEDIANTE LA FE

    6. QUE ES LA FE?

    7. CMO SE PUEDE ACLARAR LA FE?

    8. POR QU NOS SALVAMOS POR LA FE?

    9. HAY DE MI! NADA PUEDO HACER

    10. AUMENTO DE FE

    11. LA REGENERACIN Y EL ESPRITU SANTO

    12. MI REDENTOR VIVE

    13. SIN ARREPENTIMIENTO, SIN PERDN

    14. CMO SE DA EL ARREPENTIMIENTO

    15. EL TEMOR DE CAER

    16. CONFIRMACIN

    17. POR QU PERSEVERAN LOS SANTOS?

    18. CONCLUSIN

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    2/55

    1

    DIOS JUSTIFICA A LOS IMPIOS

    Atencin a este breve discurso. Hallars el texto en la Epstola a los Romanos 4:5: Al que noobra, pero cree en aquel que justifica al impo, su fe le es contada por justicia.

    Te llamo la atencin a las palabras: Aquel que justifica al impo. Estas palabras meparecen muy maravillosas. No te sorprende el que haya tal expresin en la Sagrada Biblia comoesta: Aquel que justifica al impo? He odo que los que odian las doctrinas de la cruz, acusande injusto a Dios por salvar a los impos y recibir al ms vil de los pecadores. Mas he aqu, comola misma Escritura acepta la acusacin y lo declara francamente. Por boca del apstol Pablo, por

    la inspiracin del Espritu Santo, consta el calificativo de Aquel que justifica al impo Eljustifica a los injustos, perdona a los que merecen castigo y favorece a los que no merecen favoralguno. No habas pensado siempre que la salvacin era para los buenos, y que la gracia de Diosera para los justos y santos, libres del pecado? Te haba cado bien en la mente, sin duda, que sifueras bueno, Dios te recompensara, y has pensado que no siendo digno, nunca podras disfrutarde sus favores. Por tanto te debe sorprender la lectura de un texto como este: Aquel que justificaal impo.

    No me extraa que te sorprendas, pues con toda mi familiaridad con la gracia divina noceso de maravillarme de este texto. Suena muy sorprendente, verdad, el que fuera posible deque todo un Dios Santo, justificara a una persona impa? Segn la natural lealtad de nuestro

    corazn, estamos hablando siempre de nuestra propia bondad y nuestros mritos, tenazmenteapegados a la idea de que debe haber algo bueno en nosotros para merecer que Dios se ocupe denuestras personas. Pero Dios que bien conoce todos nuestros engaos, sabe que no hay bondadninguna en nosotros y declara que no hay justo ni aun uno (Rom.3:10). El sabe que todasnuestras justicias son como trapos de inmundicia (Isa.64:6); y por lo mismo el Seor Jess novino al mundo para buscar bondad y justicia para entregrselas a las personas que carecan deellas. No vino porque ramos justos, sino para hacernos justos, justificando al impo.

    Presentndose el abogado ante el tribunal, si es persona honrada, desea defender alinocente, justificndole de todo lo que falsamente se le imputa. El objeto del defensor debe ser la justificacin del inocente y no encubrir al culpable. Tal milagro est reservado para el Seornicamente. Dios, el Soberano infinitamente justo, sabe que en toda la tierra no hay un justoalguien que haga bien y no peque; y por lo mismo en la Soberana infinita de su naturaleza divinay en el esplendor de su amor maravilloso. El emprende la obra, no tanto de justificar al justocuanto de justificar al impo. Dios ha ideado maneras y medios de presentar delante de si alimpo justamente aceptable; ha concebido un plan mediante el cual puede, en justicia perfecta,tratar al culpable, como si siempre hubiera vivido libre de ofensa; s, tratarle como si fuera deltodo libre de pecado. El justifica al impo.

    Jesucristo vino al mundo para salvar a los pecadores. Esto es cosa sorprendente; cosamaravillosa especialmente para los que disfrutan de ella. Se que para mi, hasta el da de hoy, staes la maravilla ms grande que he conocido, a saber que me justificase a mi. Aparte de su amor

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    3/55

    inmenso, me siento indigno, corrompido, un conjunto de miseria y pecado. No obstante, se porcerteza plena que por fe soy justificado mediante los mritos de Cristo, y tratado como si fueraperfectamente justo, hecho heredero de Dios y coheredero de Cristo, todo a pesar decorresponderme, por naturaleza, el lugar del primero de los pecadores. Yo, del todo indigno, soytratado como si fuera digno. Se me ama con tanto amor como si siempre hubiera sido piadoso,siendo as que antes era un pecador. Quin no se maravilla de esto? La gratitud por tal favor sereviste de admiracin indecible.

    Siendo esto tan admirable, deseo que tomes nota de cun accesible esto hace el evangeliopara ti y para m. Si Dios justifica al impo, entonces, querido amigo, te puede justificar a ti. Noes esta precisamente la persona que eres? Si hasta hoy vives inconverso, te cuadra perfectamentela palabra; pues has vivido sin Dios, siendo lo contrario a piadoso o temeroso de Dios; en unapalabra, has sido y eres impo. Acaso ni has frecuentado los cultos en el da domingo, has vividosin respetar el da del Seor, ni su iglesia, ni su Palabra, lo que prueba que has sido impo. Peor

    todava, quiz has procurado poner en duda su existencia, y esto hasta el punto de declarar tusdudas. Habitante de esta tierra hermosa, llena de seales de la presencia de Dios, has persistidoen cerrar los ojos a las pruebas palpables de su poder y Divinidad. Cierto, has vivido como si noexistiera Dios. Y gran placer te hubiera proporcionado el poder probar para ti mismosatisfactoriamente la idea de que no hay Dios. Tal vez has vivido ya muchos aos en este estadode nimo, de manera que ya ests bien afirmado en tus caminos, y sin embargo, Dios no est enninguno de ellos. Si te llamaran impo te cuadrara este nombre tan bien como si al mar se lellamara agua salada, verdad? Acaso eres persona de otra categora, pues has cumplido con todaslas exterioridades de la religin. Sin embargo, de corazn nada has hecho, y as en realidad hasvivido impo. Te has relacionado con el pueblo de Dios, pero nunca te has encontrado a lmismo. Has cantado en el coro, pero no has alabado al Seor en el alma. Has vivido sin amar, de

    corazn, a Dios y sin respetar sus mandamientos. Sea como fuere, t eres precisamente lapersona, a la cual este evangelio se proclama: esta buena nueva que nos asegura que Diosjustifica al impo. Maravilloso es y felizmente te sirve al caso. Te cuadra perfectamente. Verdadque si? Cunto deseo que lo aceptaras! Si eres persona de sentido comn, notars lo maravillosode la gracia Divina anticipndose a las necesidades de personas como t, y dirs entre ti:Justificar al impo! Pues entonces, por qu no ser yo justificado, y justificado ahora mismo?

    Toma nota, por otra parte, del hecho de que esto debe ser as: a saber, que la salvacin deDios debe ser cosa para los que no la merecen ni estn preparados para recibirla. Es natural queconste la afirmacin del texto en la Biblia; porque, apreciado amigo, slo necesita ser justificadoquien carezca de justicia propia. Si alguno de mis lectores fuese persona absolutamente justa, no

    necesitara ser justificada. Pues t que sientes que cumples bien todo deber y por poco haces alcielo deudor a ti por tanta bondad, para qu necesitas t misericordia, ni Salvador alguno? Paraqu necesitas t justificacin? Estars ya cansado de esta lectura, pues no te interesa el asunto.

    Si alguno de ustedes se rodea de aires tan legalistas, esccheme un momento. Tan ciertocomo que vives, te encaminas hacia la perdicin. Ustedes, justos, rodeados de justicia propia, oviven engaados o son engaadores; porque dice la Sagrada Escritura que no puede mentir, y lodice claramente: No hay justo, ni aun uno. De todos modos, no tengo evangelio alguno, ni unapalabra para los rodeados de justicia propia, Jesucristo mismo declaraba que no haba venidopara llamar a los justos, y no voy a hacer lo que l no haca. Pues si les llamara, no vendran; y

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    4/55

    por lo mismo no los llamar bajo este punto de vista. Al contrario, les suplico que contemplen su justicia propia hasta descubrir lo falsa que es. Ni la mitad de la fuerza de una telaraa tiene.Deschenla! Aljense de la misma!

    Las nicas personas que necesitan justificacin son las que reconocen que no son justas.Ellas sienten la necesidad de que se haga algo para que sean justas ante el tribunal de Dios.Podemos tener la seguridad de que Dios no hace nada fuera de lo necesario. La Sabidura infinitanunca hace lo intil. Jess nunca emprende lo superfluo. Hacer justo a quien ya es justo no esobra de Dios, tal cosa es una insensatez. Justificar al impo es un milagro digno de Dios.Ciertamente as es.

    Escuchen ahora. Si en alguna parte del mundo un mdico descubre remedios eficaces ypreciosos, a quin a de servir el mdico? A gente de buena salud? Claro que no, colquesele enun lugar sin enfermos, y se sentir fuera de lugar. All sobra su presencia. Los sanos nonecesitan mdico sino los enfermos (Marc.2:17), dice el Seor. No es igualmente cierto quelos grandes remedios de gracia y redencin son para las almas enfermas? No sirven para lasalmas sanas, porque les son remedios innecesarios. Si tu, querido amigo, te sientesespiritualmente enfermo, para ti ha venido el gran Mdico al mundo. Si a causa del pecado tesientes completamente perdido, eres la misma persona comprendida en el plan de salvacin porgracia. Afirmo que el Seor del amor eterno tuvo a la vista personas como tu al armonizar elsistema de la salvacin por pura gracia. Supongamos que una persona generosa resolviera entresi que perdonara a todos sus deudores; claro que esto solo podra hacerse respecto a los querealmente le fueran deudores. Uno le debe mil pesos; otro le debe cincuenta pesos; a cada cualtocara tan solo conseguir la firma que cancelara las cuentas. Pero la persona ms generosa delmundo no podra perdonar las deudas de personas que nada deben a nadie. Est fuera del poder

    del mismo Omnipotente perdonar a quien no tenga nada para perdonar. El perdn presuponealguien que sea culpable. El perdn es para el pecador. Sera absurdo hablar de perdonar alinocente, perdonar al que nunca ha faltado.

    Crees acaso que te condenars por ser pecador? Esta es la razn porque te podrs salvar.Por la misma razn de que te reconoces pecador, deseara animarte a creer que precisamente parapersonas como tu est destinada la gracia. Es positivamente cierto que Jess busca y salva alperdido. Muri e hizo la expiacin de verdad por pecadores de verdad. Si encuentro pecadoresque admiten sin excusas que son pecadores, me es un verdadero placer hablar con ellos.Gustosamente platicara toda la noche con pecadores de buena fe. Las puertas de misericordia nose cierran ni de da ni de noche para los tales y estn abiertas todos los das de la semana.

    Nuestro Seor Jess no muri por pecados imaginarios, sino la sangre de su corazn se derrampara limpiar las manchas carmes que nada ms que ella puede quitar.

    El pecador que se sienta negro de pecado, es la persona que ha venido Jesucristo ablanquear. En cierta ocasin predic un evangelista sobre el texto: Ahora, ya tambin el hachaest puesta a la raz de los rboles (Luc.3:9), y lo hizo de modo que le dijo uno de los oyentes:Nos trat usted como si furamos criminales. Ese sermn debiera usted haberlo predicado en elpresidio de la ciudad y no aqu. No, no, contest el evangelista: En el presidio no hablarasobre este texto, sino sobre este: Palabra fiel y digna de ser recibida por todos; que CristoJess vino al mundo para salvar a los pecadores (1Tim.1:15). Correctamente! La Ley es para

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    5/55

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    6/55

    inmediatamente. Dios justifica a los impos, lo que equivale a decir que te recoge donde ests eneste momento y te favorece en el estado ms deplorable.

    Ven degradado, quiero decir: acude a tu Padre Celestial en tu estado de pecado y miseria.Acude a Jess tal como eres, espiritualmente leproso, sucio desnudo, ni apto para vivir, ni aptopara morir tampoco. Acudan ustedes que son como escoria de la creacin, aun cuando no seatrevan a esperar ms que la muerte. Acudan aun cuando la desesperacin les oprima el pechocual pesadilla horrible, pidiendo que el Seor los justifique como a otros impos. Por qu no lohara? Acudan, porque esta gran misericordia de Dios esta destinada para personas como ustedes.Lo digo en las palabras del texto, por no poderse expresar en trminos ms vigorosos: El SeorDios mismo asume este ttulo bendito: El que justifica al impo. Este hace justos, y que setraten como justos, a los que por naturaleza son impos. No les parece este mensaje maravillosoa ustedes? Estimado lector, no te levantes del asiento hasta haber meditado bien este asunto.

    ***

    2

    DIOS ES EL QUE JUSTIFICA

    Cosa maravillosa es sta, el ser justificado o declarado justo. Si nunca hubisemosquebrantado la Ley de Dios, no habra necesidad de tal justificacin, siendo naturalmente justos. Quien toda su vida haya hecho lo que debiera hacer, y nunca hubiera hecho nadaprohibido, ste es de por si justificado ante la ley. Pero estoy seguro de que t, estimadolector, no te hallas en ese estado de inocencia. Eres demasiado honrado para pretender estarlimpio de todo pecado, y, por lo tanto, necesitas ser justificado. Pues bien, si te justificas a timismo, te engaas miserablemente. Por lo mismo, no comiences tal cosa. No valdr lapena. Si pides a otro mortal que te justifique, qu podr hacer? Alguien te alabara porcuatro cuartos, otro te calumniara por menos. Bien poco vale el juicio del hombre.

    Romanos 8:33, dice: Dios es el que justifica, y esto, s que va al grano. Este hechoes asombroso, es un hecho que debemos considerar detenidamente. Ven y ve!

    En primer lugar, nadie ms que Dios, podra haber pensado en justificar a personasculpables. Se trata de personas que han vivido manifiestamente rebeldes actuando mal conambas manos; de personas que han ido de mal en peor; de personas que han vuelto al malaun despus de ser castigadas, siendo forzadas a dejar de cometer el mal por algn tiempo.Han quebrantado la ley y pisado el evangelio bajo sus pies. Han rechazado la proclamacinde misericordia y persistido en la iniquidad. Cmo podrn tales personas alcanzar el

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    7/55

    perdn y justificacin? Sus conocidos desesperan de ellos, diciendo: Son casos sinremedio. Aun los cristianos les miran ms bien con tristeza que con esperanza. Rodeadodel esplendor de la Gracia de su eleccin, habiendo Dios escogido a algunos desde antes dela fundacin del mundo, no reposar hasta haberles justificado y hechos aceptos en elAmado. No est escrito: A los que predestin, a estos tambin llam; y a los que llam, aestos tambin justific; y a los que justific, a estos tambin glorifico? (Rom. 8:30). As esque puedes ver que el Seor ha resuelto justificar a algunos y por qu no estaramosincluidos t y yo en este nmero? Nadie ms que Dios pensara jams en justificarme a mi.Result para mi esto una maravilla. No dudo que la gracia Divina sea igualmente manifiestaen otros. Contemplo a Saulo de Tarso respirando amenazas y muerte contra los siervosdel Seor. Como lobo rapaz espantaba a las ovejas del Seor por todas partes, no obstanteDios le detuvo en el camino de Damasco y cambi su corazn justificndole del todo, tanplenamente, que muy pronto este perseguidor result el ms grande predicador de la justificacin por la fe que haya vivido sobre la faz de la tierra. Con frecuencia debe de

    haberse maravillado de haber sido justificado por la fe en Cristo Jess, ya que antes era untenaz defensor de la salvacin mediante las obras de la ley. Nadie ms que Dios poda haberpensado en justificar a un hombre como el perseguidor Saulo. Pero el Seor Dios esglorioso en gracia.

    Pero, por si alguien pensara en justificar a los impos, nadie ms que Dios podrahacerlo. Es imposible que persona alguna perdone las ofensas que hayan sido cometidascontra ella misma. Si alguien te ha ofendido gravemente, tu puedes perdonarle, y espero queas lo hars; pero una tercera persona fuera de ti no puede perdonarle. Slo de ti debeproceder el perdn. Si ha Dios hemos ofendido, est en el poder de Dios mismo perdonar,ya que contra l mismo se ha pecado. Esta es la razn porque David dice en el Salmo 51:4

    A t, a ti solo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos, pues as Dios contraquien se ha cometido la ofensa, puede perdonarla. Lo que debemos a Dios, nuestro granCreador puede perdonar, si as le place; y si lo perdona, perdonado queda.

    Nadie ms que el Gran Dios contra quien hemos pecado, puede borrar nuestro delito.Por consiguiente, acudamos a l en busca de misericordia. Y cuidado que nos dejemosdesviar por los hombres, que desean que acudamos a ellos en busca de lo que solo Diospuede concedernos; careciendo de todo fundamento en la Palabra de Dios sus pretensiones.Y aun cuando fuesen ordenados para pronunciar palabras de absolucin en nombre de Dios,ser siempre mejor que acudamos nosotros mismos en busca de perdn al Seor nuestroDios, en nombre de Jesucristo, Mediador nico entre Dios y los hombres, ya que sabemos

    de cierto que ste es el camino verdadero. La religin por encargo es asunto peligroso.Infinitamente mejor y ms seguro es que te ocupes personalmente de los asuntos de tu almay no los encargues a otro. Solo Dios puede justificar a los impos, y puede hacerlo aperfeccin. El echa nuestros pecados sobre sus espaldas, los borra, diciendo que aunque sebusquen, no se hallarn. Sin otra razn que su bondad infinita ha preparado un caminoglorioso mediante el cual puede hacer que los pecados que son rojos como escarlata seanms blancos que la nieve y alejar de nosotros las transgresiones tan lejos como el orienteest del occidente. Dios dice: No me acordar de tus pecados, llegando hasta el punto deaniquilarlos. Uno de los antiguos dijo maravillado: Qu Dios hay como t, que perdona la

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    8/55

    maldad y olvida el pecado del remanente de su heredad?No ha guardado para siempre suenojo, porque l se complace en la misericordia. (Miq . 7:18).

    No hablamos aqu de justicia, ni del trato de Dios con los hombres, segn susmerecimientos. Si piensas entrar en relacin con Dios, justo sobre la base de la ley, la iraeterna te aguarda amenazadora por cuanto esto es lo que mereces. Bendito sea su nombre,porque, no nos ha tratado segn nuestros pecados; y hoy nos trata en trminos de graciainmerecida y compasin infinita, diciendo: Les recibir misericordioso y les amar devoluntad. Crelo, porque ciertamente es la verdad que el gran Dios trata al culpable conmisericordia abundante. S, puede tratar al impo como si siempre hubiera sido piadoso. Leeatentamente la parbola del hijo prdigo, y vers como el padre perdonador recibe al hijoerrante con tanto amor como si nunca se hubiera extraviado y nunca contaminado con elmundo. Hasta tal punto el padre demostraba su cario, que el hermano mayor hall en ellomotivo para murmurar, no por eso el padre dej de amarle. Por culpable que fueras, con tal

    que quieras volver a Dios, te tratar como si nunca hubieras hecho mal alguno. Teconsiderar justo y te tratar complacido. Qu dices a esto?

    Deseo aclarar bien lo glorioso de este caso. Ya que nadie sino Dios pensara en justificar al impo, y nadie sino l lo podra hacer, no ves como Dios, bien lopuede hacer? Fjate en como el apstol extiende el reto: Quin acusar a losescogidos de Dios? Dios es el que justifica (Rom. 8:33). Habiendo Diosjustificado a una persona, est bien hecho, rectamente hecho, justamente hecho, ypara siempre perfectamente hecho. El otro da le un impreso lleno de venenocontra el evangelio y los que lo predican. Deca que creemos en una teora por lacual nos imaginamos que el pecado se puede alejar de los hombres. No creemos

    nosotros en teoras; proclamamos un hecho. El hecho ms glorioso debajo del cieloes este, que Cristo por su preciosa sangre real positivamente aleja el pecado y queDios por amor de Cristo, tratando a los hombres en trminos de misericordiadivina, perdona a los culpables y los justifica, no segn algo que vea en ellos oprev que habr en ellos, sino segn la riqueza de la misericordia que habita en supropio corazn. Esto es lo que hemos predicado, lo que predicaremos en tanto quevivamos. Dios es el que justifica, el que justifica a los impos. El no seavergenza de hacerlo, ni nosotros de predicarlo. En la justificacin hecha porDios mismo no cabe duda alguna. Si el Juez me declara justo, quin mecondenar? Si el tribunal supremo de todo el universo me ha pronunciado justo,quin me acusar? La justificacin de parte de Dios es respuesta suficiente para

    la conciencia despierta. El Espritu Santo mediante la misma sopla la paz sobrenuestro ser entero y no vivimos ya atemorizados. Mediante tal justificacinpodemos responder a todos los rugidos y a todas las murmuraciones de Satans yde los hombres. Esta justificacin nos prepara a bien morir, a resucitar y enfrentarel ltimo juicio.

    Sereno miro ese da: Quin me acusar? En el Seor mi ser confa; Quin mecondenar?

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    9/55

    Amigo, el Seor puede borrar todos tus pecados. Todos los pecados sern borrados alos hijos de los hombres (Mat.12:31). Aunque te hallaras hundido hasta lo mximo en lamiseria, l puede con una palabra limpiarte de la lepra, diciendo: Yo quiero, se limpio. ElSeor Dios es gran perdonador. Yo creo en el perdn de los pecados. Crees t? Aun eneste mismo momento, el juez puede pronunciar sentencia sobre ti, diciendo: Tus pecadoste son perdonados: vete en paz. Y si as lo hace, no hay poder en el cielo, en la tierra, nidebajo de la tierra que te pueda acusar, ni mucho menos condenar. No dudes del amor delTodopoderoso. Tu no podras perdonar al prjimo, si te hubiera ofendido como tu hasofendido a Dios. Pero no debes medir la gracia de Dios con la medida de tu estrechocriterio. Sus pensamientos y caminos estn por encima de los tuyos tan altos como el cieloest sobre la tierra Bien, dirs tal vez, gran milagro sera que Dios me perdonara a mi.Justo! Sera un milagro grandsimo, y por lo tanto es muy probable que lo haga, porque lhace grandes cosas e inescrutables (Job 5:44) para nosotros inesperadas En cuanto a mi,qued afectado bajo un terrible sentimiento de culpa que me haca la vida insoportable; pero

    al or la exhortacin: Mirad a m y sed salvos, todos los confines de la tierra! Porque yosoy Dios, y no hay otro. (Isa. 45:22), entonces mir, y en un momento me justific elSeor. Jesucristo, hecho pecado en mi lugar, fue lo que vi, y esa vista me dio reposo alalma. Cuando los hombres mordidos por las serpientes venenosas en el desierto miraron a laserpiente de metal, quedaron sanos inmediatamente, y as yo al mirar con los ojos de la fe alSalvador crucificado por mi. El Espritu Santo, quien me dio la facultad de creer, mecomunic la paz mediante la fe. Tan cierto me sent perdonado, como antes me habasentido condenado. Haba sentido realmente la condenacin, porque la Palabra de Dios melo haba declarado, dndome testimonio de ello la conciencia. Pero cuando el Seor medeclar justo, qued igualmente seguro por los mismos testimonios. Pues la Palabra de Diosdice: El que en l cree, no es condenado (Juan 3:18), y mi conciencia me daba testimonio

    de que crea y de que Dios al perdonarme era justo.. As es que tengo el testimonio delEspritu Santo y el de la conciencia, testificando ambos a una la misma cosa. Cunto deseoque el lector reciba el testimonio de Dios en este asunto, y muy pronto tendra tambin eltestimonio en s mismo!

    Me atrevo a decir que un pecador justificado por Dios se halla sobre fundamento msfirme que el hombre justificado por sus obras, si tal hombre existiera. Pues nuncatendramos la seguridad de haber hecho bastantes obras buenas; la conciencia quedarasiempre inquieta en si, despus de todo, faltara algo y solamente descansaramossobre la sentencia falible de un juicio dudoso. En cambio, cuando Dios mismo justifica, y el Espritu Santo le rinde testimonio, dndonos paz con Dios, entonces

    sentimos que el hecho es firme y muy slido, y el alma entra en descanso. No haypalabras para explicar la calma profunda que se apodera del alma que recibe esa pazde Dios que sobrepasa todo entendimiento. Amigo, bscala en este mismo momento.

    ***

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    10/55

    3

    JUSTO Y JUSTIFICADORAcabamos de ver a los impos justificados y hemos contemplado la gran verdad de que

    solo Dios puede justificar al hombre. Ahora daremos un paso adelante, preguntando:Cmo puede un Dios justo justificar a los culpables? Contestacin plena la hallamos enlas palabras del apstol Pablo, en Rom. 3:21-26. Leeremos seis versculos del captuloindicado con el objeto de conseguir la idea total del pasaje.

    Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios atestiguada por laLey y los Profetas. Esta es la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo para todo los

    que creen. Pues no hay distincin; porque todos pecaron y no alcanzan la gloria de Dios,siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redencin que es en CristoJess. Como demostracin de su justicia, Dios le ha puesto a l como expiacin por la fe ensu sangre, a causa del perdn de los pecados pasados, en la paciencia de Dios, con elpropsito de manifestar su justicia en el tiempo presente; para que l sea justo y a la vezjustificador del que tiene fe en Jess.

    Permtaseme rendir un poco de testimonio personal aqu. Hallndome bajo el poderdel Espritu Santo, bajo la conviccin del pecado, senta pesar sobre mi, clara y fuertementela justicia de Dios. El peso del pecado me abrumaba de manera insoportable. No que tantotemiera yo al infierno, como tema al pecado. Me vea tan terriblemente culpable que

    recuerdo haber sentido que si Dios no me castigaba por el pecado, faltara a su deber al nohacerlo. Senta que el Juez de toda la tierra deba condenar a un pecador como yo. Estabayo sentado en el tribunal condenndome a mi mismo a la perdicin; porque admita que siyo fuera Dios, no podra hacer otra cosa que enviar a una criatura tan culpable a lo msprofundo del infierno.

    Todo ese tiempo me preocupaba profundamente de la honra del nombre de Dios y dela equidad de su gobierno moral. Senta que no estara satisfecha mi conciencia, siconsiguiera yo perdn injustamente. El pecado que haba cometido, mereca castigo y debacastigarse. Luego me vena la pregunta: Cmo podra ser Dios justo y no obstante justificar a persona tan culpable como yo? Cmo puede ser justo y, sin embargo, justificador de los pecadores? Me molestaba y cansaba esta pregunta, y no hallabacontestacin a la misma. Imposible para mi inventar respuesta alguna que diera satisfaccina mi conciencia.

    Para mi la doctrina de la expiacin por la substitucin es una de las pruebas mspoderosas de la inspiracin divina de la Sagrada Escritura. Quin podra haber ideado elplan de que el Rey justo muriera por el sbdito injusto y rebelde? Esta no es doctrina demitologa humana, ni sueo de la imaginacin de un poeta. Este mtodo de expiacin seconoce por la humanidad nicamente por ser un hecho positivo. La imaginacin humana nopodra haberlo inventado. Es arreglo, plan y estatuto de Dios mismo; no es cosa del cerebrohumano.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    11/55

    Desde la infancia haba odo hablar de la salvacin por el sacrificio de Jess; pero enlo profundo de mi alma nada ms saba de ello, estaba en una completa ignorancia. La luzexista, pero yo viva ciego; de pura necesidad el Seor mismo tuvo que aclararme elasunto. La luz vino como revelacin nueva, tan nueva como si nunca hubiese ledo en lasEscrituras la declaracin de que Jess era la propiciacin por el pecado para que Dios fuesejusto y justificador del impo. Creo que esto ha de venir como revelacin nueva para todohombre al nacer de arriba, a saber la gloriosa doctrina de la substitucin por el Seor Jess.

    As llegu a comprender la posibilidad de la salvacin mediante el sacrificio desubstitucin, y que todo se haba provisto para tal substitucin, y que todo se haba provistopara la misma. Me fue dado ver que el Hijo de Dios, igual al Padre e igualmente eterno,desde la eternidad haba sido constituido cabeza del pacto de un pueblo escogido, para queen esa capacidad sufriera por el mismo para salvarle. En cuanto nuestra cada, en primertrmino, no fue cada individual, ya que camos en nuestro representante federal, en el

    primer adn, fue posible para nosotros el levantamiento por un segundo representante, asaber por Aquel que se encarg de ser la cabeza del pacto de su pueblo, a fin de ser susegundo Adn, Vi que, antes de haber pecado en realidad, haba cado por el pecado demi primer padre; y me regocijo, ya que, por tanto, me fue posible, en sentido jurdico, serlevantado mediante esa segunda Cabeza representativa. La cada de Adn dej unaescapatoria: otro Adn puede deshacer la ruina hecha por el primero.

    Cuando me inquietaba respecto a la posibilidad de que un Dios justo me perdonara,comprend y vi por fe, que l, que es el Hijo de Dios, se hizo hombre y en su propia benditapersona llev mi pecado en su cuerpo sobre el madero. Vi el castigo (precio) de mi pazsobre l y que por su llaga fui curado (Isa.53:4,5). Querido amigo, has visto t esto? Has

    comprendido como Dios puede quedar del todo justo, no remitiendo la culpa ni quitando elfilo de la espada, y como l, sin embargo, puede ser infinitamente misericordioso yjustificador del impo que acude a l? La razn es que el Hijo de Dios, eternamente gloriosoen su persona inmaculada se encarga de satisfacer a la ley sometindose a la condena queme corresponda a mi, en consecuencia de lo cual Dios puede quitar mi pecado. Mssatisfaccin resulta para la ley por la muerte de Cristo que hubiera resultado enviando atodos los transgresores al infierno. El establecimiento ms glorioso del gobierno equitativode Dios result sufriendo el Hijo de Dios por el pecado, que sufriendo toda la raza humana.

    Jess ha soportado por nosotros toda la penalidad de la muerte. Contempla estamaravilla! All est colgado de la cruz. Esta es la vista ms solemne que jams has

    contemplado. El Hijo de Dios y el Hijo del hombre, all elevado en el vil madero, sufriendopenas indecibles, el Justo por los injustos, para llevarnos a Dios. Maravillossima es talvista; el Inocente castigado! El eternamente bendito hecho maldicin! El infinitamenteglorioso sufriendo la muerte ignominiosa! Cuanto ms contemplo los sufrimientos del Hijode Dios, tanto ms cierto estoy de que corresponden a mi caso de criminalidad. Por qusufri sino para librarnos de la pena merecida? Habindola pues, expiado por su muerte, loscreyentes en l no necesitan temerla. As es, y as debe ser, que siendo hecha la expiacin,Dios puede perdonar sin alterarse las bases de su tribunal, ni en lo ms mnimo cambiar susestatutos del cdigo. La conciencia halla respuesta plena a su pregunta tremenda. La ira deDios contra la iniquidad debe ser terrible, ms all de toda concepcin humana. Bien dijo

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    12/55

    Moiss; Quin conoce el poder de tu ira? (Salmo 90:11). No obstante al or al Seor degloria gritar. Por qu me has desamparado? (Mat.27:46) y al verle exhalar el ltimoaliento, sentimos que la Justicia Divina ha recibido abundante satisfaccin por la obedienciatan perfecta y muerte tan espantosa de parte de persona tan Divina. Si Dios mismo seinclina ante su propia ley, que ms se quiere? Hay mucho ms en la expiacin en sentidode mrito que en todo pecado humano en sentido de demrito.

    El vasto mar del sacrificio propio del amor de Jess es tan profundo que puedenhundirse en l todas las montaas de nuestros pecados. A causa del valor infinito de nuestroRepresentante, bien puede Dios mirar favorable a los dems seres humanos por indignosque fuesen en si mismos. Ciertamente fue el milagro de los milagros que el Seor Jesstomara mi lugar.

    Sufriendo por mi la fatal condena, Librando mi alma de eterna pena.

    Pero as lo hizo. Consumado es (Juan 19:30). Dios perdonar al pecador, porque noperdon a su propio Hijo. Dios puede perdonar tus transgresiones, porque carg en su Hijounignito esas transgresiones hace 2000 aos. Si crees en Jess, y esto es lo esencial,entonces debes saber que tus pecados fueron alejados de ti por Aquel que representaba almacho cabro expiatorio en el culto proftico de Israel.

    Qu es el creer en l? No simplemente decir Es Dios y Salvador, sino confiar en ldel todo y enteramente, recibindole para toda la obra de la salvacin desde hoy y parasiempre, recibindola cual Salvador nico, cual Seor, Maestro, todo. Si tu quieres a Jess,l te ha aceptado ya. Si crees de verdad en l te aseguro que ya no irs al infierno; porque

    eso hara nulo el sacrificio de Cristo. No es posible que un sacrificio se acepte, y que apesar de ello muera el alma por la cual se haya aceptado el sacrificio. Si el alma delcreyente se pudiera condenar, para qu tal sacrificio? Si Jess muri en mi lugar, por qudebo morir yo tambin?

    Todo creyente puede afirmar que un sacrificio expiatorio se ha hecho por l; por fe hacolocado su mano sobre el mismo, hacindole suyo, y por lo mismo puede descansar segurode que nunca perecer. El Seor Dios no recibir este sacrificio hecho por nosotros paraluego condenarnos a morir. Dios no puede leer nuestro perdn escrito en la sangre de supropio Hijo y luego herirnos de muerte. Tal cosa es imposible. Dios te conceda la graciaahora mismo para mirar slo a Jess, empezando por el principio, por Jess mismo, quien

    es el origen de la fuente de misericordia para el hombre culpable.

    l justifica al impo. Dios es el que justifica, por tanto y por esa misma razn sepuede hacer, y lo hace mediante el sacrificio expiatorio de su Divino Hijo. Por esa raznpuede hacerse en justicia, y tan justamente que nadie podr ponerlo en duda, tanequitativamente que ni en el ltimo y temible da, cuando pasen los cielos y la tierra, habrquien niegue la validez de esa justificacin. Quin es el que condenar? Cristo es el quemuri. Quin acusar a los escogidos de Dios. Dios es el que justifica (Rom. 8:33,34).

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    13/55

    Ahora bien, pobre alma, quieres entrar en este refugio tal cual eres? Aqu estars conperfecta seguridad. Acepta esta salvacin cierta y segura. Acaso dirs: Nada hay en mi queme recomiende. No se te pide tal cosa. Los que escapan por la vida, dejan la ropa detrs des. Refgiate apresurado tal cual eres.

    Te dir algo de mi mismo par animarte. Mi nica esperanza de entrar en la gloriadescansa en la plena redencin de Cristo realizada en la cruz del Calvario por los impos.En esto descanso firmemente, ni sombra de esperanza tengo en alguna otra cosa. Tu tehallas en la misma condicin que yo, pues ninguno de nosotros tiene mrito alguno dignode consideracin cual base de confianza. Juntemos, pues, las manos, colocndonos juntos alpie de la cruz, y entreguemos nuestras almas de una vez para siempre al que derram susangre por los culpables. Nos salvaremos ambos por un mismo Salvador. Si tu perecesconfiando en l, perecer yo tambin. Qu ms puedo hacer para probarte mi propiaconfianza en el evangelio que te proclamo?

    ***

    4

    SALVACIN DE PECAR

    Quisiera decir unas cuantas palabras sencillas a los que comprenden la idea de lajustificacin por la fe en Cristo Jess, pero cuya dificultad consiste en no poder dejar de pecar.No es posible que nos sintamos felices, descansados y espiritualmente sanos hasta que llegamosa ser santificados. Es preciso que seamos librados del dominio del pecado. Pero, cmo se realizaesto? Es este un asunto de vida o muerte para muchos. La naturaleza vieja es muy fuerte y la hanprocurado refrenar y domar; pero no quiere ceder, y aunque deseosos de mejorarse, se hallanpeor que antes. El corazn es tan duro, la voluntad tan rebelde, la pasin tan ardiente, lospensamientos tan ligeros, la imaginacin tan indomable, los deseos tan incultos que el hombredespierto siente que lleva en su interior una cueva de bestias salvajes que acabarn por devorarleantes que l logre ejercer dominio sobre ellas. Respecto a nuestra naturaleza cada podemos decirnosotros lo que dijo el Seor a Job, del monstruo marino: Jugars tu con l como con un

    pjaro, o lo atars para tus nias? (Job.41:5). Ms fcil seria para el hombre poder detener conla mano el viento que refrenar por su propia fuerza los poderes tempestuosos que moran en sunaturaleza cada. Esta es una empresa mayor que cualquiera de las fabulosas de Hrcules; aqu senecesita a Dios, el Todopoderoso.

    Yo podra creer que Jess me perdonara el pecado, dice alguien, pero lo que memolesta es que vuelvo a pecar y que existen inclinaciones terribles al mal en mi ser. Tan ciertocomo la piedra arrojada al aire, pronto vuelve a caer, as yo; aunque por la predicacin poderosasea elevado al cielo, vuelvo a caer de nuevo en mi estado de insensibilidad. Fcilmente quedoencantado por los ojos de basilisco del pecado permaneciendo bajo el encanto, solo laprovidencia me hace escapar de mi propia locura.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    14/55

    Estimado amigo, si la salvacin no se ocupara de esta parte de nuestro pecado de ruina,resultara una cosa por dems tristemente defectuosa. Como deseamos ser perdonados, deseamostambin ser purificados. La justificacin sin la santificacin no sera salvacin de ningn modo.Tal salvacin llamara al leproso limpio, dejndole morir de lepra; perdonara la rebelin,dejando al rebelde permanecer enemigo del soberano. Alejara las consecuencias descuidando ysin fin. Impedira por un momento el curso del ro, dejando abierta la fuente de contaminacin,de modo que ms o menos pronto se abrira una salida con mayor fuerza. Acurdate que el SeorJess vino a quitar el pecado de tres maneras; vino a salvar de la culpa del pecado, delpoderdelpecado, y de lapresencia del pecado. En seguida te es posible llegar a la segunda parte: el poderdel pecado se puede quebrantar inmediatamente; y as estars en el camino a la tercera parte, lasalvacin de la presencia del El ngel dijo del Seor. Llamars su nombre Jess, porque elsalvar a su pueblo de sus pecados (Mat.1:21). Nuestro Seor Jess vino para destruir ennosotros las obras del diablo. Lo que se dijo en el nacimiento de nuestro Seor, se declartambin en su muerte; porque al abrirse su costado, sali sangre y agua para significar la doble

    cura por la cual quedamos salvos de la culpa y la contaminacin del pecado.

    Si no obstante te apenan el poder del pecado y las inclinaciones de tu naturaleza, comobien pude ser el caso, aqu hay para ti una promesa. Confa en ella, porque forma parte de esepacto de gracia que est en todo ordenado y firme. Dios que no puede mentir ha declarado en ellibro de Ezequiel 36:26; Os dar corazn nuevo, y pondr espritu nuevo dentro de vosotros; yquitar de vuestra carne el corazn de piedra, y os dar corazn de carne.

    Como ves, en todo entra el Yo Divino: Yo -dar -pondr -quitar -dar. Tal es el modoreal de actuar del Rey de reyes, siempre poderoso para ejecutar al punto su soberana voluntad.Ninguna de sus palabras quedar sin cumplir.

    Bien sabe el Seor que tu no puedes cambiar tu propio corazn, ni limpiar tu propianaturaleza, pero tambin sabe que el l es poderoso para hacer ambas cosas. Dios puede cambiarla piel del etope y extraer las manchas del leopardo. Oye esto, cree y admralo, l te puede crearde nuevo, hacer que nazcas de nuevo. Esto es un milagro estar al pie de las cascadas del Nigara,y con una palabra manda a la corriente volver atrs y subir arriba el gran precipicio sobre el cualhoy se lanza con poder fantstico. nicamente el omnipotente poder de Dios poda hacer talmilagro; sin embargo, ese no sera ms que un paralelo adecuado a lo que sucedera, si se hicieraretroceder del todo el curso de la naturaleza. Para Dios todo es posible. l es poderoso paravolver atrs el curso de tus deseos, la corriente de tu vida, de modo que en lugar de bajaralejndote de Dios, tengas la tendencia de subir acercndote a Dios. Esto es en realidad lo que el

    Seor ha prometido hacer con todos los incluidos en el pacto, y sabemos por las Escrituras quetodos los creyentes estn incluidos en l. Leamos de nuevo sus palabras en Ezequiel 36:26.

    Os dar corazn nuevo, y pondr espritu nuevo dentro de vosotros; y quitar de vuestracarne el corazn de piedra, y os dar corazn de carne

    Cun maravillosa es esta promesa! Y en Cristo es el s y el amen para la gloria deDios por nosotros. Hagmosla nuestra, aceptndola como verdadera, apropindonosla bien. Asse cumplir, y en das y aos venideros tendremos que cantar del cambio maravilloso que haobrado la soberana gracia en nosotros.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    15/55

    Muy digno de consideracin es el hecho de que, quitando el Seor el corazn de piedra,queda quitado, y cuando esto una vez sea hecho, ningn poder conocido podra jams quitarnosese corazn nuevo que nos da y ese espritu recto que nos infunde. Porque irrevocables son losdones y el llamamiento de Dios (Rom. 11:29), es decir, sin arrepentimiento, o cambio deparecer, de parte de Dios, no quitando lo que una vez ha dado. Permite que te renueve y quedarsrenovado. Las reformas y limpiezas que emprende el hombre, pronto terminan, porque el perrovuelve a su vmito; pero cuando Dios nos da corazn nuevo, este nos queda para siempre, ni sevolver piedra otra vez. En esto debemos regocijarnos para siempre, entendiendo lo que creaDios en su reino de gracia.

    Para aclarar este asunto de un modo sencillo, has odo la comparacin del seorRowland Hill, acerca del gato y el puerco? Te lo contar al estilo propio para ilustrar las palabrasgrficas del Salvador: Os es necesario nacer otra vez (Juan 3:17). Ves ese gato? Cunlimpio es! Ves cmo hbilmente se lava con la lengua y las patas? De verdad, ofrece una vista

    bonita. Has visto alguna vez a un puerco hacer lo mismo? Claro que no! Tal cosa sera contrala naturaleza del puerco. Este prefiere revolcarse en el lodo. Ensea al puerco a lavarse, y verscun poco xito tendrs. Sera mejora sanitaria, de gran valor si los puercos aprendieran limpiezay aseo. Ensales a lavarse y limpiarse como hacen los gatos. Trabajo intil! Puedes limpiar alpuerco a la fuerza, pero en seguida volver a enlodarse, quedando tan sucio como antes. El nicomodo de hacer que se lave el puerco, como el gato, consiste en transformarlo en gato. Solo as,entonces se lavar y se limpiar, pero no antes.

    Supongamos realizada la transformacin; lo que antes era imposible o difcil, ahora esfcil, muy fcil, el puerco ser de ahora en adelante capaz para entrar a la sala y dormir sobre laalfombra al lado de la chimenea. As sucede con el impo; ni le puedes forzar a hacer lo que el

    hombre renovado hace de muy buena voluntad. Puedes ensear al impo, proporcionndolebuenos ejemplos, pero es incapaz de aprender el arte de la santidad, por cuanto carece de facultady mente para ello; su naturaleza le lleva por otro camino. Cuando Dios le transforma en hombrenuevo, todo cambia de aspecto. Tan marcado es tal cambio que o a un convertido decir O todoel mundo ha cambiado o he cambiado yo. La nueva naturaleza sigue en pos del bien tannaturalmente como la vieja naturaleza anda en pos del mal. Cun grande bendicin es obteneresta naturaleza nueva! nicamente el Espritu Santo te lo puede infundir.

    Te has fijado alguna vez en lo maravilloso del caso cuando el Seor imparte un coraznnuevo y espritu recto al hombre perdido? Has visto, quiz una langosta que, pelendose conotra, ha perdido una pata, habindole crecido despus una nueva. Cosa admirable es esto, pero

    muchsimo ms maravilloso es que al hombre se le de un corazn nuevo. Esto, s que es unmilagro, un hecho que sobrepasa todo poder de la naturaleza. All est un rbol. Si cortas una desus ramas, otra podr crecer en su lugar; pero puedes cambiar su naturaleza, puedes volverdulce la savia amarga, puedes hacer que el espino produzca higos? Podrs injertarle algo mejor,siendo esta la semejanza que la naturaleza nos ofrece de la obra de la gracia; pero el cambiar enabsoluto la savia vital del rbol, esto sera un milagro de verdad. Tal prodigio y misterio de poderacta en Dios en todos los que creen en Cristo Jess.

    Si te sometes a su operacin Divina, el Seor transformar tu ser. l someter lanaturaleza vieja, y te infundir vida nueva. Confa en el Seor Jess y l quitar de tu carne el

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    16/55

    corazn duro de piedra, dndote corazn blando como de carne. Todo lo duro ser blando, todolo vicioso, virtuoso; toda inclinacin hacia abajo se elevar con fuerza viva hacia arriba. El lenfurioso dar lugar al cordero manso; el cuervo inmundo huir de la paloma blanca; la serpienteengaosa quedar aplastada bajo el pie de la verdad.

    Con mis propios ojos he visto tales cambios admirables del carcter moral y espiritualque no desespero de la maldad de nadie. Si no fuera indecoroso, indicara a mujeres impuras, hoypuras como la blanca nieve, y a hombres blasfemos que actualmente alegran a todos por suconducta y devocin. Los ladrones se transforman en personas honradas, los borrachos ensobrios, los mentirosos en veraces, los burladores en personas sensatas celosas por la causa delSeor. Dondequiera que la gracia de Dios se haya manifestado, ha enseado al hombre arenunciar a la impiedad y los deseos mundanos, y a vivir templado, justo y santamente en estapoca mala; y estimado lector, lo mismo har la gracia para ti.

    Yo no puedo efectuar este cambio, me dirs. Quin ha dicho que puedes? LasEscrituras que hemos citado, no hablan de lo que har el hombre, sino de lo que har Dios, y a lcorresponde cumplir su Palabra en ti, y ciertamente lo har.

    Pero como se har? Para que lo quieres saber? Ser necesario que Dios explique sumodo de actuar antes de que creas en l? Su proceder en este caso es un gran misterio, el EsprituSanto lo lleva a cabo. El que ha hecho la promesa es el responsable de su cumplimiento, y sucapacidad corresponde perfectamente al caso. Dios que promete efectuar tan asombrosaoperacin, lo llevar a cabo, sin duda alguna, en todos cuantos por fe reciban a Jess, porqueleemos que a todos los que le recibieron, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios (Juan1:11).

    Qu Dios haga que lo creas! Ojal que dieras al Seor de gracia el honor merecido decreer que l puede y quiere hacer esto en ti, por gran milagro que fuera! Ojal que creyeras queDios no puede mentir! Ojal que confiaras en l, a fin de que te diera un corazn nuevo y unespritu recto, ya que l es poderoso para hacerlo! Que el Seor te conceda fe en sus promesas,fe en su Hijo,, fe en el Espritu Santo, fe en l mismo! As sea. Y a l sern dadas alabanza, honray gloria para siempre. Amen

    ***

    5

    POR GRACIA MEDIANTE LA FECreo conveniente insistir en un punto especial, con el objeto de suplicar al lector observe

    en espritu de adoracin el origen de la fuente de nuestra salvacin que es la gracia de Dios.Porque por gracia sois salvos por medio de la fe (Efe.2:8). Los pecadores son convertidos,

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    17/55

    perdonados, purificados, salvos, todo porque Dios es lleno de gracia. No es porque pueda haberalgo en ellos que les recomiende para ser salvos, sino que se salvan por el amor infinito, por labondad, por la compasin, misericordia y gracia de Dios. Detente, pues, por un momento en elorigen de la fuente. Contempla el ro cristalino del agua de vida que brota del trono de Dios y delCordero.

    Qu profundidad de la gracia de Dios! Quin sondear su profundidad? Semejante a losdems atributos de Dios es infinita. Dios es lleno de amor, porque Dios es Amor. (1Juan 4:8).Bondad infinita y amor infinito forman parte de la esencia de la Divinidad. Por la razn de quepara siempre es su misericordia (Salmo 107:1), no ha echado a la humanidad a la perdicin. Yya que no cesan sus compasiones, los pecadores son conducidos a sus pies y hallan perdn.

    Acurdate bien de esto, para que no caigas en el error fijndote demasiado en la fe que esel conducto de la salvacin, podras olvidarte de la gracia que es la fuente y origen aun de la femisma. La fe es obra de la gracia de Dios en nosotros. Nadie puede decir que Jess es Cristo, elUngido, sino por el Espritu Santo. Ninguno puede venir a mi, dice Jess, si el Padre que meenvi, no le trajere (Juan 6:44). As es que esa fe que acude a Cristo es resultado de la obraDivina. La gracia es la causa activa, primera y ltima de la salvacin; y esencialmente necesaria,como es la fe, no es mas que parte indispensable del mtodo que la gracia emplea. Somos salvosmediante la fe, pero la salvacin es por gracia. Proclmense estas palabras, como contrompeta de arcngel: por gracia sois salvos. Cun buena nueva es esta para los indignos!

    Se puede comparar la fe a un conducto. La gracia es la fuente y la corriente; la fe es elcanal por el cual fluye el ro de misericordia para refrescar a los hombres sedientos. Ser unagran lstima cuando se haya roto el canal. Una vista muy triste ofrecen muchos canales costosos

    en los alrededores de Roma, que ya no conducen ms el agua a la ciudad, porque los arcos estnrotos y esas obras admirables estn en ruinas. El canal debe mantenerse completo para conducirla corriente, y as la fe debe ser verdadera y sana dirigida en rectitud a Dios y bajandodirectamente a nosotros para que resulte un conducto til de misericordia para nuestras almas.

    Otra vez te recuerdo que la fe solo es el conducto o canal y no la fuente, y que nodebemos fijarnos tanto en ella que la elevemos por encima de la fuente de toda bendicin que esla gracia de Dios. No te construyas nunca un Cristo de tu fe, ni pienses en ella como si fuese lafuente indispensable de salvacin. Hallamos la vida espiritual por una mirada de fe alCrucificado, no por una mirada a nuestra fe. Mediante la fe todas las cosas nos son posibles; sinembargo, el poder no est en la fe, sino en Dios, en quien la fe se derrama. La gracia es la

    locomotora y la fe es la cadena, mediante la cual el vehculo del alma se ata a la gran fuerzamotriz. La justicia de la fe no es la excelencia moral de la fe, sino la justicia de Cristo Jess quela fe acepta y se apropia. La paz del alma no se deriva de la contemplacin de nuestra fe, sinonos viene de Aquel que es nuestra paz, del borde de cuyo vestido la fe toca, saliendo de l lavirtud que inunda el alma.

    Aprende de esto, pues, querido amigo, que la flaqueza de tu fe no te echar a la perdicin.Aun una mano temblorosa podr recibir una ddiva de oro precioso. La salvacin nos puedevenir por una fe tan pequea como un grano de mostaza. La potencia se encuentra en la gracia deDios, no en nuestra fe. Importantsimos mensajes se mandan por alambres dbiles, y el

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    18/55

    testimonio del Espritu Santo que comunica paz, puede llegar al corazn mediante una fe tanpequea que apenas merezca tal nombre. Piensa ms en AQUEL que miras, que en la mirada. Espreciso quitar la vista de tu propia persona y de los alrededores para no ver a otro que soloJess y la gracia de Dios en l revelada.

    ***

    6

    QUE ES LA FE?

    Qu es esa fe, de la cual se dice: Por gracia sois salvos mediante la fe? Existenmuchas explicaciones de la fe; pero casi todas las que he visto, me han dejado ms ignorante queantes de leerlas. Podemos explicar la fe hasta que nadie la entienda. Cierto predicador dijo al leerun captulo de la Biblia que iba a embrollarlo, lo que probablemente hizo, si bien intentaba decirque iba a explicarlo. Espero que no me haga culpable del mismo error. La fe es la cosa mssencilla del mundo, y tal vez por esta misma sencillez sea ms difcil la explicacin.

    Qu esfe?: Podemos decir que la fe se compone de tres cosas: conocimiento,creencia yconfianza. Primero, viene el conocimiento. Cmo creern a Aquel de quien no han odo?(Rom. 10:14). Necesito saber de un hecho antes de que me sea posible creerlo. La fe es por el or

    (Rom. 10:17). Es preciso or para saber lo que se ha de creer. En ti confiarn los que conocen tunombre (Salmo 9:10). Algn conocimiento es esencial para la fe; de aqu la importancia deconseguir conocimiento. Inclinad vuestro odo, y venid a mi; od, y vivir vuestra alma (Isa.55:3), tal era la palabra del profeta antiguo, y tal es la palabra del evangelio todava. Escudrialas Escrituras y aprende lo que el Espritu santo ensea respecto a Cristo Jess y su salvacin.Porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que el existe, y que es galardonador delos que le buscan (Heb. 11:6). Que el Espritu Santo te conceda espritu de conocimiento y detemor del Seor! Entrate del evangelio: de su buena nueva, de como habla del perdn gratuito,del cambio de corazn, de la adopcin en la familia de Dios, y de bendiciones innumerables deotras clases. Entrate especialmente de Cristo Jess, el Hijo de Dios, el Salvador de lospecadores, unido con nosotros por la naturaleza humana, no obstante de ser Uno con Dios,

    siendo as idneo para actuar como Mediador entre Dios y los hombres, capacitado para colocarsu mano sobre ambos y ser el eslabn entre el pecador y el juez de toda la tierra. Procura conocera Cristo Jess ms y ms. Procura conocer de un modo especial la doctrina del sacrificioexpiatorio de Cristo, ya que el punto principal en la fe salvadora se fija principalmente en este:Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomndoles en cuenta a los hombressus pecados (2Cor. 5:19).

    Procura saber que Jess fue hecho por nosotros maldicin, como est escrito: Malditotodo el que es colgado de un madero (Gl. 3:13). Aprpiate bien de la doctrina de lasubstitucin de Cristo; porque en ella est el ms bendito consuelo para los hijos de los hombres

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    19/55

    culpables, puesto que Dios le hizo pecado por nosotros, para que nosotros fusemos hechosjusticia de Dios en l (2Cor. 5:21). La fe comienza por el conocimiento.

    De aqu pasa el alma a la creencia de que estas cosas son verdaderas. El alma cree queDios existe y que oye el clamor de los corazones sinceros, que el evangelio procede de Dios, quela justificacin por la fe es la gran verdad que Dios ha revelado en estos ltimos tiempos con msclaridad que antes. Luego, el corazn cree que Jess en realidad de verdad es nuestro Dios ySalvador, el Redentor de los hombres, el Profeta, Sacerdote y Rey de su pueblo. Todo esto loacepta el alma como verdad cierta y fuera de toda duda. Pido a Dios que llegues a esta fe enseguida. Afrmate bien en la creencia de que la sangre de Jesucristo, el Hijo de Dios, nos limpiade todo pecado; que su sacrificio expiatorio fue perfecto y plenamente aceptado por Dios enlugar del hombre, ya que el que cree en Jess, no es condenado. Cree en estas verdades, comocrees en otras afirmaciones, porque la diferencia entre la fe comn y la fe salvadora consisteprincipalmente en los objetos de la creencia. Cree en el testimonio de Dios, como crees en el

    testimonio de tu propio padre o de algn amigo. Si recibimos el testimonio de los hombres,mayor es el testimonio de Dios (1Juan 5:9).

    Hasta aqu has ido adelantando en el camino de la fe; solo falta una parte ms paracompletarla, a saber la confianza. Entrgate confiado al Dios de misericordia; pon tu confianzaen el evangelio de gracia; abandona tu alma confiadamente al Salvadormuerto y resucitado porti; contempla confiando la limpieza de tus pecados en la sangre expiatoria de Jess; acepta cualtuya su Justicia Perfecta, y todo estar bien. La confianza es la esencia vital de la fe, sin ella nohay fe salvadora. Los puritanos solan explicar la fe usando la palabra reclinacin, en elsentido de apoyarse reclinado sobre algo. Apyate con todo tu peso sobre Cristo. Me expresarams claramente, si dijera: Extindete, recustate sobre la Roca de los siglos. Abandnate en los

    brazos de Jess, entrgate, descansa en l. Habindole hecho as, has puesto la fe en prctica. Lafe no es cosa ciega, puesto que principia por el conocimiento. No es cosa de conjeturas, porcuanto la fe se funda en hechos ciertos. No es cosa de sueos, porque la fe encomienda sudestino reposadamente a la verdad de la revelacin Divina. Esto es un modo de explicar la fe. Nose si solo he logrado embrollar el asunto.

    Permtaseme otra prueba.La fe es creer que Cristo es lo que se dice ser, que har lo queha prometido hacer y esperar que cumpla lo prometido. Las Escrituras hablan de Jesucristocomo Dios, Dios manifestado en carne humana; como perfecto en su carcter, como sacrificioexpiatorio por nuestros pecados, como quien lleva nuestros pecados en su cuerpo sobre elmadero. Las escrituras hablan de l como de quien ha acabado con la trasgresin, concluido el

    pecado e introducido la justicia eterna. La Biblia nos dice, adems, que resucit de los muertos,que vive para siempre intercediendo por nosotros, que ha ascendido a la gloria, tomandoposesin de ella en favor de su pueblo y que pronto volver para juzgar al mundo con justicia ya los pueblos con rectitud (Salmo 98:9). Debemos creer firmemente que as es, ya que as lohizo saber Dios el Padre, diciendo: Este es mi Hijo amado; a l od (Luc. 9:35). A este rindetestimonio tambin el Espritu Santo, porque l ha testificado de Cristo tanto por la palabrainspirada como por diversos milagros y su obra en los corazones de los hombres. Nos es precisocreer que es verdadero este testimonio.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    20/55

    La fe cree tambin que Cristo har lo que ha prometido, l prometi no echar a nadiefuera, de los que acuden a l, es cierto que no nos echar a nosotros si acudimos a l. La fe creeque, habiendo dicho: El agua que yo le dar, ser en l una fuente de agua que salte para vidaeterna (Juan 4:14), esto debe ser verdad, de modo que si nosotros recibimos de Cristo esta aguade vida, permanecer en nosotros y saltar en nosotros como corrientes de una vida santa.Cualquier cosa que Cristo haya prometido hacer, la har, y debemos creerlo, ya que de su manoesperamos el perdn, la justificacin, la proteccin, y la gloria eterna, todo segn lo prometido alos que creen en l.

    Luego, viene el siguiente paso necesario. Jess es lo que se dice ser, Jess har lo que haprometido hacer, y por lo tanto debemos cada cual confiaren l, diciendo: Ser para mi, lo queha dicho ser y lo que ha prometido hacer, y yo me entrego en las manos del que se ha encargadode la salvacin para que me salve a mi. Descanso en su promesa confiando en que har lo que hadicho. Tal es la fe salvadora, y quien la posee, tiene vida eterna. Cualquiera que fuesen los

    peligros y pruebas, tinieblas y temores, debilidades o pecados, el que as cree en Cristo Jess noes condenado, ni vendr jams a condenacin.

    Deseo que te sirva para algo esta explicacin. Confo en que el Espritu de Dios lo usarpara llevarte lector, a la paz inmediatamente. No temas; cree solamente Mar. 5:36). Confa yreposa en paz.

    Pero temo que el lector quede contento con el simple conocimiento de lo que sea precisohacer sin nunca hacerlo. Mejor es la fe ms pobre actuando que el mejor conocimiento en lasregiones de la fantasa. Lo principal es creer de verdad en Jess, en este mismo momento. No tepreocupes de distinciones y definiciones. El hambriento come sin comprender la composicin

    qumica de los alimentos, la anatoma de la boca y el proceso digestivo; vive porque come. Otromucho ms sabio comprende perfectamente la ciencia de la nutricin, pero si no come, morir apesar de su conocimiento. Sin duda, hay muchos en el infierno que comprendieron bien ladoctrina de la fe pero que dejaron de creerla. Por otra parte, ni uno de los que confiaron en elSeor Jess perecieron, aun cuando nunca supieron explicar bien su fe. Querido lector, recibe alSeor Jess, cual nico Salvador de tu alma, y vivirs eternamente. El que en l cree tiene vidaeterna (Juan 3:36).

    ***

    7

    CMO SE PUEDE ACLARAR LA FE?Para aclarar an ms el asunto de la fe dar aqu unos cuantos ejemplos. Aunque solo el

    Espritu Santo puede dar vista al ciego tanto mi deber como placer es proporcionar al lector todala luz que me sea posible, pidiendo al Seor que habr los ojos de los ciegos. Que Dios haga queel lector pida lo mismo.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    21/55

    La fe tiene sus semejanzas en el cuerpo humano. Es el ojo que mira las cosas. Por el ojointroducimos en la mente los objetos lejanos. Por una mirada podemos en un momento introduciren la mente al sol y las estrellas lejanas. As, por la fe o confianza podemos hacer que Jess senos acerque, y que aunque est en el lejano cielo, entre en nuestro corazn. Tan solo mira aJess, porque contiene la pura Verdad el cntico que dice:

    Vida hay por mirar a Jess... La mirada de fe al momento la vida te da.

    La fe es la mano que toma. Cuando la mano toma y se apropia de algo, hace precisamentelo mismo que la fe al apropiarse de Cristo y las bendiciones de la redencin. La fe dice: Jess esmo. La fe oye hablar de la sangre mediante la cual hay perdn y exclama: La recibo paraperdn de mis culpas. La fe dice que son suyas los legados de Jess, y dice bien porque la fe esla heredera de Cristo habindose dado a s mismo y todo lo que tiene a la fe. Aprpiate, amigo, loque la gracia te ha legado. No resultars hurtador, porque tienes permiso Divino: El que quiere,tome del agua gratuitamente (Apoc. 22:17) . El que puede conseguir un tesoro sencillamentepor tomarlo con la mano, ser loco si permanece pobre.

    La fe es la boca que se alimenta de Cristo. Antes de que la comida nos alimente, espreciso tomarlo. Cosa tan sencilla es comer y beber. De buena gana tomamos en la boca elalimento permitiendo que baje en el cuerpo, donde se absorbe constituyndose parte del mismo.Pablo en Romanos 10:8; dice: Cerca de ti est la palabra, en tu boca. As es que lo que restapor hacer es permitir que baje al alma. Ojal que la gente tuviera hambre espiritual! Pues, elhambriento que ve la comida delante de si, no necesita aprender a comer. Dame un cuchillo, untenedor y la oportunidad, dijo alguien. Para los dems estaba plenamente preparado. En verdad,un corazn hambriento y sediento de Cristo, solo necesita saber que esta invitado para recibirle

    en seguida. Si te hallas en esta condicin, no vaciles en recibirle, puedes estar seguro de quenunca sers reprendido por hacerlo, porque a todos los que le recibieron, les dio potestad de serhechos hijos de Dios (Juan 1:12) El no rechaza a nadie de todos cuantos a l acuden, sino lesrecibe y les autoriza a permanecer como hijos eternamente.

    Las ocupaciones ordinarias de la vida ilustran tambin la fe de varios modos. Elagricultor deposita su semilla en la tierra confiando en que no solo viva sino que se multiplique.Tiene fe en el arreglo del pacto de que la siembra y la cosecha no cesarn, y queda recompensadaas su fe.

    El comerciante entrega su dinero al cuidado de un banquero, confiando del todo en su

    honradez y en la solidez de su banco. Entrega su capital en manos de otro, y se siente mstranquilo que si guardara el oro en su propia casa.

    El marinero se encomienda al mar ondulante. Al nadar quita los pies del fondo y descansaen las olas del ocano. No podra nadar, si no se abandonara del todo al elemento lquido.

    El platero pone su oro precioso en el fuego que parece vido de consumirlo, pero lo sacade nuevo, purificado por el calor del horno.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    22/55

    En cualquier esfera de la vida puedes ver la fe en operacin entre hombre y hombre, oentre hombre y ley natural. Ahora bien, precisamente como en la vida diaria practicamos laconfianza, as debemos hacerlo respecto a Dios, segn se nos revela en Cristo Jess.

    La fe existe en diferentes personas segn su medida de conocimiento o crecimiento en lagracia. A veces la fe no es ms que un sencillo apego a Cristo; un sentimiento de dependencia yde voluntad de vivir dependiente. En la orilla del mar vers a ciertos moluscos pegados a lasrocas. Camina suavemente roca arriba, pega al molusco con el bastn, y vers como queda sueltoen seguida. Reptelo con otro molusco cercano. Este ha odo el golpe, ha quedado avisado, y sepega con toda su fuerza a la roca. No le soltars, no. Pgale tanto como quieras. Ms bienrompers el bastn a que se suelte el molusco. El pobre no sabe mucho, pero sabe pegarse a laroca. Sabe pegarse y tiene algo firme a que hacerlo; esto es todo su conocimiento y lo usa para suseguridad y salvacin. Apegarse a la roca es la vida del molusco, y la vida del pecador esapegarse a Cristo. Miles de almas del pueblo de Dios no tienen ms fe que esta; acogerse de todo

    corazn a Jess, y esto basta para su paz actual y para su seguridad eterna. Jess es para ellas unSalvador fuerte y poderoso, una roca inmovible e inmutable; a ella se aferran vivamente y esteapego les salva. Amigo, no podrs tu apegarte a Cristo tambin? Hazlo ahora mismo.

    La fe se manifiesta cuando una persona confa en otra con motivo del conocimiento de susuperioridad. Esta fe es de ms alta categora: fe que conoce y reconoce la razn de sudependencia actuando conforme a tal conocimiento. Poco conocer el molusco de la roca; peroconforme vaya creciendo la fe resulta ms inteligente. Un ciego se entrega a su gua, porque sabeque este tiene vista y confiando en l, anda por donde l le conduzca. Si el pobre naci ciego notiene idea de lo que es la vista, pero sabe que existe tal cosa, y por lo tanto coloca su mano en lamano del gua dejndose llevar. (2Cor. 5:7). Bienaventurados los que no vieron, y creyeron

    (Juan 20:29). Aqu Andamos por fe, no por vista tenemos tan buen ejemplo de la fe comopuede haber: sabemos que Jess posee la virtud, el poder y la bendicin que no poseemosnosotros, y, por lo tanto, nos entregamos a l, para que sea para nosotros lo que no podemos serpara nosotros mismos. Nos entregamos a l confiados como el ciego al gua, seguros de quenunca abusar de nuestra confianza, ya que nos ha sido hecho por Dios sabidura, justificacin,santificacin y redencin (1Cor. 1:30).

    Todo nio que frecuenta la escuela ejerce fe al aprender del maestro. Este le enseageografa, instruyndole respecto a la forma de la tierra y la existencia de ciertos pases ygrandes ciudades. El nio no sabe que estas cosas son verdaderas, a menos que tenga fe en elmaestro y en los libros que usa. Esto es lo que te toca hacer en orden a Cristo, si quieres ser

    salvo. Es preciso que lo sepas porque l te lo dice; que crees que es as, porque l te lo asegura;que te entregues a l, porque te promete que el resultado ser la salvacin presente y eterna. Casitodo lo que tu y yo sabemos nos ha venido por la fe. Se ha hecho un descubrimiento cientfico yestamos seguros de ello. Por qu razn lo creemos? Por la autoridad de ciertos cientficos muyconocidos, cuya reputacin ha quedado establecida. Nunca hemos visto sus experimentos, perocreemos su testimonio. Es preciso que hagas lo propio en orden al Seor Jess. Ya que l teensea ciertas verdades, debes actuar como discpulo creyendo su palabra. Ya que l a realizadocierta obra magna, debes actuar como recipiente encomendndote a su gracia. l es tu superioren grado infinito recomendndose a tu confianza cual Maestro supremo y Seor de seores. Si lerecibes a l y su palabra, de cierto sers salvo.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    23/55

    Otra forma de fe superior es la que nace del amor. Por qu confa el nio en su padre?La razn es que el nio ama a su padre. Bienaventurados y dichosos son los que tienen una feinfantil en Cristo, mezclada con profunda afeccin, porque esta fe y confianza proporcionaverdadera tranquilidad y reposo al alma. Estos que aman a Jess viven encantados de lahermosura y de sus atributos, se gozan grandemente en su misin y son transportados de alegrapor su bondad y gracia manifiestas. As es, que no pueden por menos de confiar en l, ya quetanto le admiran, reverencian y aman.

    Esta confianza en el salvador se evidencia por ejemplo de la esposa de uno de losprimeros mdicos de este siglo. Aunque afligida de cierta grave enfermedad y postrada por surigor, disfruta ella de calma y quietud admirables, porque su esposo ha hecho estudio especial deesa enfermedad y curado a miles de afligidos como ella. No se inquieta en lo ms mnimo,porque se siente perfectamente salva en las manos de uno tan apreciado como el esposo, en quienla habilidad y amor se juntan en sumo grado. Su fe es natural y razonable y el esposo lo merece

    de su parte en todos los sentidos.

    Esta clase de fe es la que el creyente ms dichoso ejerce respecto a Cristo. No hay mdicocomo l; nadie puede salvar y sanar como l. Le amamos y l nos ama a nosotros, y porconsiguiente nos entregamos en sus manos, aceptamos lo que nos prescribe y hacemos lo que nosmanda. Estamos seguros de que nada errneo se nos manda mientras que l sea el Director denuestros asuntos; porque nos ama demasiado para permitir que perezcamos o suframos la msmnima pena innecesaria.

    Lafe es la raz de la obediencia, y esto puede verse con toda claridad en los asuntos de lavida. Cuando el capitn confa el buque al piloto para que lo lleve al puerto, este lo maneja segn

    su conocimiento y voluntad. Cuando el viajero se confa al gua para que lo conduzca a travs dealgn lugar difcil, este sigue paso a paso el sendero que el gua le seale. Cuando el enfermocree en el mdico, sigue cuidadosamente sus prescripciones y direcciones. La fe que rehusaobedecer los mandamientos del Salvador no es ms que un pretexto y no salvar jams al alma.Confiamos en Jess para que nos salve, dndonos l las indicaciones necesarias respecto alcamino de la salvacin; seguimos estas indicaciones y somos salvos. No se olvide de esto ellector. Confate a Jess y dale pruebas de tu confianza haciendo lo que te diga.

    Cierta forma notable defe nace del conocimiento verdadero. Esto resulta del crecimientoen gracia; y es esta la fe que cree en Cristo, porque le conoce y confa en l, porque tiene laexperiencia de que es infaliblemente fiel. Cierta seora cristiana sola poner P.P., en el margen

    de su Biblia siempre que hubiese puesto a prueba alguna promesa. Cun fcil es confiar en unSalvador puesto a prueba y hallado verdadero! No puedes hacer esto todava, pero lo hars. Todorequiere un principio. A su tiempo ser fuerte tu fe. Esta fe madura no pide seales y milagrossino cree fuertemente. Contempla al marino maestro. Muchas veces le he admirado. Suelta loscables, se aleja de tierra. Pasan das, semanas, acaso meses sin que vea tierra . No obstante,prosigue adelante noche y da sin temor, hasta que se halle una maana precisamente al frentedel deseado puerto, hacia el cual se ha dirigido. Cmo ha podido hallar el camino a travs delprofundo mar sin rastro de huella? Pues ha confiado en su brjula, en su carta marina, en susbinoculares, en los cuerpos celestes; y obedeciendo sus indicaciones, sin ver tierra, ha dirigido subuque tan exactamente que ni un punto tenga que variar el curso para entrar en el puerto. Es cosa

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    24/55

    maravillosa, es admirable ese modo de navegar sin vista terrestre. Espiritualmente es cosabendita dejar del todo fuera de vista y sentimentalismo las playas de la tierra, diciendo Adis alos sentimientos interiores, acontecimientos providenciales animadores, seales y maravillas, etc.Es glorioso hallarse lejos en el ocano del amor Divino muy adentro, creyendo en Dios ydirigiendo el curso directamente hacia el cielo por las direcciones de la carta marina, la Palabrade Dios. Bienaventurados los que no han visto, y sin embargo han credo, a stos serabundantemente administrada la entrada en el reino eterno de nuestro Seor y buena proteccinen el viaje. No querr el lector poner su confianza en Dios manifestado en Cristo Jess? En lconfo yo contento. Amigo, ven conmigo, y cree en nuestro Padre y nuestro Salvador. Ven sintardar!

    ***

    8

    POR QU NOS SALVAMOS, POR LA FE?Por qu se ha escogido la fe cual medio de salvacin? Sin duda se hace con frecuencia

    esta pregunta. Porque por gracia sois salvos por medio de la fe (Efe. 2:8), es sin contradiccinuna de las doctrinas de las Escrituras, plan y arreglo de Dios; pero por qu es as? Por qu seha escogido la fe y no mas bien la esperanza, el amor o la paciencia?

    Nos conviene la modestia al contestar esta pregunta, porque los caminos de Dios no sonsiempre comprensibles, ni se nos permite ser presuntuosos, ponindolos en duda. Quisiramosresponder humildemente que, en cuanto comprendamos nosotros, se ha elegido la fe cual mediode la gracia, porque en la fe hay una capacidad natural propia para servir de recibidor.Supongamos que voy a dar una limosna a un pobre; la pongo en sus manos, por qu? No seralo mismo ponrsela en sus odos, o en los pies; la mano parece haber sido hecha a propsito pararecibir. As en nuestra constitucin mental, la fe se ha creado a propsito para recibir: es la manodel alma que tiene la capacidad de recibir la gracia.

    Permtaseme decir esto con mucha claridad. La fe que recibe a Cristo es un hecho tan

    sencillo como cuando un nio recibe de ti una manzana, porque tu la das con tu manoprometindosela, si viene a tomarla. En este caso la fe y el recibir se refieren a una manzana;pero constituyen precisamente el mismo hecho que tratndose de la salvacin eterna. Lo que esla mano del nio en orden a la manzana, esto es tu fe en orden a la salvacin perfecta de Cristo.La mano del nio no hace la manzana, ni la mejora, ni la merece; solo la acepta. Y la fe se haelegido por Dios para ser la receptora de la salvacin, porque no pretende crear la salvacin, niayudar a mejorarla, sino est contenta de recibirla humildemente. La fe es la lengua que pideperdn, la mano que la recibe, el ojo que la ve, pero no es el precio que la compra. La fe nuncahace para s su propia defensa, sino descansa todo su argumento en la sangre de Cristo.. Ellaviene a ser la sirvienta que trae las riquezas del Seor Jess al alma, pues reconoce de quien lasrecibi y confiesa que nicamente la gracia se las encarg.

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    25/55

    Por otra parte se escogi sin duda la fe,, porque ella da toda la gloria a Dios. Lasalvacin es mediante la fe para que sea por gracia, y es por gracia para que nadie se glore,porque Dios no tolera el orgullo. Al altivo mira de lejos (Salmo 138:6), y no desea tenerlo msde cerca. De ningn modo conceder la salvacin a nadie sobre un plan que incluya o fomente elorgullo. Pablo dice: No por obras para que nadie se glore (Efe. 2:9). Ahora bien, la feexcluye toda gloria. La mano que recibe la limosna no dice: Debes darme gracias, porque heaceptado la limosna; esto sera un gran absurdo. Cuando la mano lleva el pan a la boca, no diceal cuerpo: Dame gracias, porque yo te alimento. Cosa muy sencilla es la que hace la mano, sinembargo muy necesaria, y nunca se atribuye gloria alguna por lo que hace. As es que Dios haescogido la fe para recibir el don inefable de su gracia, por cuanto no puede atribuirse crditoalguno sino en cambio adorar al Dios de toda gracia que es Dispensador de toda ddiva perfecta.La fe pone la corona en la cabeza del Digno y por lo mismo Cristo quiso poner la corona sobre lacabeza de la fe, diciendo: Tu fe te ha salvado; vete en paz (Luc. 7:50).

    Adems, Dios escoge la fe como medio de salvacin, porque esto es un modo seguro deunir al hombre con Dios. Cuando el hombre confa en Dios, resulta esta confianza un punto decontacto entre ellos que garantiza la bendicin de parte del Seor. La fe no salva, porque noshace acogernos a Dios y as nos une a l. Con frecuencia he usado el ejemplo siguiente que deborepetir por no tener otro mejor. Se dice que, hace aos, un bote volc sobre las cataratas delNigara siendo llevados corriente abajo dos hombres, cuando los espectadores en la orillallegaron a echarles una cuerda, a la cual los dos se acogieron. Uno de ellos permaneca agarradoa la cuerda y fue rescatado sano y salvo a tierra. Pero el otro viendo una viga grande flotando enel agua, dej imprudentemente la cuerda y se acogi a la viga que le pareca una cosa ms grandey mejor para aferrarse a ella. Pero, la corriente formidable lanz la viga con el hombre al abismo,porque no haba contacto entre la viga y la orilla. El tamao respetable de la viga no hizo bien

    alguno al pobre que se tom de ella; lo que faltaba era contacto con la tierra. As cuando unapersona confa en sus obras, en sacramentos u otra cosa de semejante naturaleza, no se salvar,porque no hay unin entre l y Cristo; pero la fe, aun cuando parezca cuerda delgada, est en lasmanos de Dios en la orilla; su poder infinito jala de la cuerda y as se rescata al hombre de laperdicin. Gloriosa bienaventuranza es la fe, porque mediante la misma quedamos unidos a Dios.

    Por otra parte, se ha escogido la fe, porque ella toca los resortes de la accin. Aun en lascosas ordinarias de la vida, cierta clase de fe esta a la raz de todo. Pienso que acaso no meequivoco, si afirmo que nada hacemos sino mediante alguna clase de fe. Si atravieso mihabitacin, es porque creo que me llevarn mis piernas. El hombre come, porque cree en lanecesidad de alimentarse; acude a su negocio, porque cree que hay valor en el dinero; acepta una

    letra, porque cree que el banco lo proteger. Coln descubri Amrica, porque crea que otrocontinente haba al otro lado del ocano; y los puritanos lo colonizaron, porque crean que Diosestara con ellos en esas orillas de rocas. Las obras ms grandes han nacido de la fe; para bien opara mal la fe obra maravillas mediante la persona en que existe. La fe en su forma natural es unafuerza vencedora que entra en toda clase de obra humana. Es probable que quien ms se burle dela fe en Dios, es el que de ella ms tiene de mala calidad; en verdad este es quien cae en unacredulidad que diramos ridcula, si no fuera tan desgraciada. Dios concede la salvacin a la fe,porque creando la fe en nosotros, toca el resorte principal de nuestros sentimientos y acciones.Para decirlo as, se apodera de las bateras pudiendo as enviar la corriente sagrada a todas partesde nuestro ser. Al creer en Cristo, habindose acogido el corazn a Dios, somos salvos del

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    26/55

    pecado, siendo llevados al arrepentimiento, a la santidad, al celo santo, a la oracin, a laconsagracin y toda otra forma de la Divina gracia. Lo que es el aceite para las ruedas; lo queson las pesas para el reloj, las alas para el pjaro, las velas para el buque, esto es la fe para losdeberes y servicios santos. Ten fe, y todas las dems gracias sern el resultado y continuarnviniendo.

    Adems, la fe tiene la virtud de actuar por el amor; empuja las afecciones hacia Dios y elcorazn hacia las cosas mejores, que agradan a Dios. El que cree en Dios, amar a Dios sin falta.La fe es cosa del entendimiento, no obstante procede tambin del corazn. Con el corazn secree para justicia (Rom. 10:10), y por tanto Dios concede la salvacin a la fe, porque esta vivejunto de las afecciones y es pariente cercano del amor, siendo el amor la madre y nodriza de todoacto y sentimiento santo. El amor a Dios equivale a obediencia, el amor a Dios es santidad. Elamar a Dios y amar al prjimo es llegar a ser conforme a la imagen de Cristo, lo que significasalvacin.

    Por otra parte, la fe produce paz y gozo. Quien la tiene, descansa tranquilo y disfruta decontento y gozo, lo que es cierta preparacin para el cielo. Dios concede todos los dones celestesa la fe, entre otras razones porque la fe acta en nosotros la vida y el espritu que serneternamente manifiestas en el mundo mejor de la gloria. La fe nos procura la armadura para lavida presente y proporciona la educacin para la venidera. Ella pone al hombre en condicionestanto para vivir como para morir sin temor, le prepara tanto para el trabajo como para elsufrimiento. De aqu que el Seor la ha escogido como el medio ms a propsito paracomunicarnos la gracia y mediante la misma asegurarse de nosotros para la gloria.

    Por cierto, la fe nos sirve mejor que cualquier otra cosa proporcionndonos paz y gozo y

    descanso espiritual. Por qu procuran los hombre conseguir la salvacin por otros medios? Diceun telogo de los antiguos: Un criado necio, a quien se manda a abrir una puerta, pone suhombro contra la misma empujndola con todas sus fuerzas, pero la puerta no cede, no se mueve,y no puede entrar por mucho que se esfuerza. Otro viene con una llave, abre la puerta y entra contoda facilidad. Los que procuran salvarse por sus obras estn empujando las puertas del cielo sinresultado alguno; pero la fe es la llave que abre la puerta inmediatamente. Querido amigo. Noquieres tu valerte de tal llave? El Seor te manda creer en su Hijo amado, por lo mismo debeshacerlo, y hacindolo as vivirs. No es esta la promesa del evangelio: El que creyere y fuerebautizado, ser salvo? (Mar. 16:16). Que podrs t discutir contra un plan de salvacin que serecomienda perfecto tanto a la misericordia como a la sabidura del Dios de gracia?

    ***

    9

    HAY DE MI!, NADA PUEDO HACERDespus de haber aceptado la doctrina de la reconciliacin y comprendido la gran verdad

    de la salvacin mediante la fe en el Seor Jess, el corazn atribulado se inquieta muy a menudopor un sentimiento de incapacidad respecto a la prctica del bien. Muchos suspiran, diciendo:

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    27/55

    Hay de mi; nada puedo hacer! Y no lo dicen en sentido de excusa, sino lo sienten como cargapesada diariamente. Haran el bien si pudieran. Cada uno de estos podra decir francamente:Porque el querer el bien est en mi, pero no el hacerlo (Rom. 7:18).

    Esta experiencia parece hacer todo el evangelio nulo y sin efecto; pues para qu sirve elalimento, si est fuera del alcance del hambriento? Para qu sirve el ro de agua viva, si elsediento no puede beber? Nos acordamos aqu de la ancdota del mdico y del hijo de la madrepobre. El mdico le dijo a la madre que su hijito pronto mejorara bajo un tratamiento propio delcaso, siendo absolutamente necesario que con toda regla tomara del mejor vino de Oporto y quepasara una temporada en los baos termales de Alemania. Receta para el hijo de una madrepobre que apenas tena pan para llevar a la boca! As el evangelio no parece al alma ansiosa cosatan sencilla al decir. Cree, y vivirs, porque pide al pobre pecador que haga lo que no puedehacer. Para el verdaderamente despierto, pero poco instruido, parece faltar un eslabn a lacadena. A lo lejos est el remedio, pero cmo obtenerlo? El alma se siente sin fuerzas y no sabe

    que hacer. Est cerca, a la vista de la ciudad de refugio, pero no puede entrar por la puerta.

    No se ha tenido en cuenta esta falta de fuerza en el plan de la salvacin? Claro que s!La obra del Seor es perfecta. Esta empieza por donde nos hallamos, y nada nos pide paraperfeccionarla. Cuando el buen samaritano vio al viajero herido tendido en el camino mediomuerto, no le pidi que se levantara, viniera, montara su asno y se dirigiera a la posada. No, no.Se le acerc, vend sus heridas y le puso sobre su cabalgadura y le condujo al mesn. As nostrata Jess en nuestro estado lamentable.

    Hemos visto que es Dios el que justifica, que justifica a los impos y que los justificamediante la fe en la preciosa sangre de Jess. Ahora vamos a ver la condicin en la cual se hallan

    estos impos al empezar Jess a salvarles. Muchas personas listas por ver su condicin, nosolamente se hallan atribuladas con motivo de sus pecados sino con motivo de su flaqueza moral.Carecen de fuerzas para escapar del lodo en que han cado y de cuidarse del mismo en elporvenir. No solo se lamentan por lo que han hecho, sino por lo que no pueden hacer. Se sientensin fuerzas, sin recursos, sin vida espiritual. Parece extrao decir que se sienten muertos, y noobstante as. En su propia estimacin son incapaces de todo bien. No pueden andar por el caminodel cielo por tener las piernas rotas. Tanto se sienten sin fuerzas. Felizmente est escrito comorecomendacin del amor de Dios para con nosotros: Cristo, cuanto an ramos dbiles, a sutiempo muri por los impos (Rom.5:6).

    Aqu vemos la incapacidad consciente socorrida: socorrida por la intervencin del Seor

    Jess. Nuestra nulidad es completa. No est escrito: Cuando an ramos comparativamentedbiles, Cristo muri por nosotros, o cuando solo tenamos un poco de fuerza, sino laafirmacin es absoluta, sin limitacin, Cuando an ramos dbiles. Nos faltaba toda fuerzapara ayudarnos en la obra de la salvacin. Las palabras de nuestro Seor eran verdaderas, Sinm nada podis hacer (Juan 15:5). Podra ir ms all del texto y recordarte del gran amor conque el Seor nos am, aun estando nosotros muertos en pecados. El hallarse muerto es aunpeor que hallarse sin fuerzas.

    El gran hecho en que el pobre pecador sin fuerzas debe fijar su mente y retenerfirmemente como nico fundamento de esperanza, es la afirmacin Divina que a su tiempo

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    28/55

    muri por los impos. Cree en esto y toda incapacidad desaparecer. Como dice la fbula delRey Midas, quien todo transformaba en oro por su tacto, as se puede afirmar de verdad respectoa la fe que todo lo que toca vuelve bueno. Nuestras mismas faltas y flaquezas se vuelvenbendiciones, cuando la fe entra en contacto con ellas.

    Fijmonos en ciertas formas de esta falta de fuerza. Ahora, dir alguien: Me parece queno tengo fuerza para concentrar mis pensamientos en los asuntos solemnes en orden a misalvacin; casi no puedo hacer una breve oracin. Acaso esto es as, en parte debido a miflaqueza fsica, en parte por haberme daado por algn vicio, en parte tambin por misaflicciones de esta vida, de modo que me he incapacitado para los pensamientos elevados que serequieren para la salvacin del alma.

    Tal es una forma de debilidad pecaminosa muy comn. Atencin ahora! En este punto tehallas equivocado; y hay muchos como tu. Muchos que seran del todo incapaces de una serie depensamientos consecutivos, por mucho que se esforzaran. Muchas personas pobres de ambossexos carecen de educacin, hallando un trabajo muy difcil y de presuncin tener pensamientosprofundos. Otras personas son por naturaleza tan superficiales que un argumento de raciociniolargo, les sera tan difcil como querer volar como un ave. No llegaran al conocimiento deningn misterio profundo, aun cuando gastaran toda su vida en tal empresa. Por tanto, t, nonecesitas desesperarte, lo que se requiere para la salvacin no es un proceso de pensamientocontinuo, sino una sencilla confianza en Jess. nete a este hecho Cristo, a su tiempo muri por los impos Esta verdad no requiere de tu parte examen profundo, raciocinio lgico, niargumento convincente. All est, Cristo, a su tiempo muri por los impos. Fija tu mente enello y permanece all.

    Mira que este gran hecho glorioso de gracia permanezca en tu espritu hasta que perfumetodos tus pensamientos y te regocije el corazn, aunque te halles sin fuerzas, teniendo al mismotiempo presente que el Seor Jess ha venido a ser tu fortaleza y cancin, s, ha venido ha ser tusalvacin. Segn las Escrituras es un hecho divinamente revelado que a tiempo debido Cristomuri por los impos siendo ellos an dbiles, sin fuerzas. Tal vez hayas odo estas palabrascentenares de veces, pero sin haber comprendido nunca su significado. Son de sabor agradableverdad? Jess no muri por nuestra justicia sino por nuestros pecados. No vino a salvarnosporque merecamos ser salvos, sino porque ramos enteramente indignos, arruinados, intiles.No vino al mundo por alguna buena razn que hubiera en nosotros, sino exclusivamente por lasrazones que hallaba en las profundidades de su amor divino. A su tiempo muri por los que lmismo afirma no eran piadosos sino impos. Aun cuando tengas tan solo poca mentalidad, fjalo

    en esta verdad tan apropiada a la menor capacidad mental, y que, no obstante, puede alegrar elcorazn ms apesadumbrado. Debe este texto ocupar tu mente cual grato recuerdo hasta encantartu corazn y dar colorido a todos tus pensamientos, y entonces nada importara que estos estntan diseminados como las hojas dispersas por el viento de otoo. Personas que nunca brillaron enlas ciencias, ni dieron prueba alguna de originalidad mental, han sido muy capaces de aceptar ladoctrina de la cruz y han sido salvas por ella. Por qu no t?

    Oigo a otro lamentarse Mi falta de fuerza consiste principalmente en no podermearrepentir bastante. Singular idea que algunos tienen de lo que es el arrepentimiento! Muchosimaginan que se debe derramar tanta lgrima, exhalarse tanto suspiro, sufrir tanto desespero. De

  • 8/14/2019 Charles H. Spurgeon - Solamente Por Gracia

    29/55

    donde nos viene idea tan errnea. La incredulidad y la desesperacin son pecad