BOLET.N SOLE 104 - Hermandad de La Soledad

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número 104

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Editorial 2

En los últimos tiempos estamos asistiendo, cada vezcon más frecuencia, a un hecho notorio y preocupante : lascontinuas críticas, y en ocasiones la actitud de verdaderodesprecio, que hacia los símbolos de nuestra religión y hacianuestras Hermandades muestran los extraños a ellas, losque asisten como espectadores. Son todos aquellos queno ven en las Hermandades y sobre todo en susmanifestaciones de culto externo, en sus Estaciones dePenitencia o en sus Procesiones Eucarísticas, otra cosaque una sucesión de actos vacíos y faltos de sustancia. Losque rechazan tajantemente nuestros cultos, nuestras formas(por exagerados, arcaicos, etc…), sólo demuestrandesconocimiento y sobre todo olvidan una cuestión esencial:la forma no es más que la manifestación externa de algomucho más trascendente en lo que se cree. La forma sólopuede y debe ser eso. Y esa es, precisamente, nuestramayor amenaza : que nos quedemos sólo en la forma, quelo externo no vaya seguido de nada más. Todos sabemosquién y qué es lo principal; no lo olvidemos.

Sólo podremos oponer a esta tendencia, la firmezay la solidez de nuestras creencias, de nuestra fe, elconvencimiento de que lo que hacemos es trascendente yno un mero cortejo procesional.

El cul to externo, en cualquiera de susmanifestaciones, se encuentra en el propio origen y razónde ser de nuestras Hermandades y Cofradías, y por eso nose trata de algo accesorio o prescindible. Las hermandadessalimos a la calle a proclamar públicamente nuestra Fe, aproclamar a los cuatro vientos que Dios existe.Y así lo haremos los hermanos de la Soledad el próximodía 24 de mayo, llevando a nuestro principal Titular, JesúsSacramentado, a los enfermos del barrio.

La Procesión Eucarística de Enfermos e Impedidosdebe y tiene que ser entendida como un acto verdadero defe cristiana. En definitiva, como testimonio y compromiso.Testimonio de nuestra Fe, y por tanto de nuestra vida, ycompromiso con Cristo y nuestros Hermanos. Ahora másque nunca hace falta que las hermandades asumamos estaresponsabilidad. Tenemos que ser cofrades comprometidosen la tarea de dar a conocer la experiencia de Dios a nuestrossemejantes. Esa experiencia de Dios que hemos recibidoprimero de nuestros mayores y después en la Hermandad,es la que nos obliga a ser, hoy más que nunca, testigos dela fe que profesamos.

N.º 104 - Mayo 2009EDITA: HermandadSacramental de la Soledad.C/ Martínez Montañés, 19-2141002 SevillaDepósito legal: SE-199-1972Fotografías:Francisco Gómez SanmiguelAntonio PascualÁlvaro Pastor TorresIMPRIME:TRINIDAD Artes Gráficas

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3La Voz del Hermano Mayor

NUESTRO PASO DE CRISTO

De forma inexorable va pasandoel calendario cofrade y particularmenteel de nuestra propia Hermandad. Atrásha quedado esta Semana Santa del2009, que después de ocho años haestado presidida por una tranquilidadclimatológica que ha permitido realizarsu estación de penitencia a todas lashermandades de vísperas y de SemanaSanta.

Nuestro Sábado Santo, aún conun poquito de susto mañanero, resultóesplendido. Nuestra estación depenitencia fue un año más -y este conmás nazarenos que nunca-, ejemplarpor el comportamiento de todos,especialmente de los niños que supieronaguantar el paroncillo que sufrimos al

llegar a la campana porque hanasimilado la idiosincrasia de nuestraHermandad. Desde aquí quieroagradecer a todos su comportamientoen la cofradía: nazarenos, acólitos, niñosy costaleros; gracias a todos porque unaño más la Hermandad de la Soledadha sabido reflejar en la calle lo que esdurante todo el año.

En la mañana del Jueves Santo,cuando San Lorenzo es el punto deperegrinación de muchos sevillanos ycuando las colas para ver al Señor deSevilla serpentean interminablementepor la plaza y las calles del barrio,escuché un comentario de un niño a sumadre mientras contemplaban los pasosen nuestra Parroquia. El niño le

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4La Voz del Hermano Mayor

preguntaba a su madre que dondeestaba el paso de Cristo de la Soledad,a lo que la madre le respondía que laSoledad no tenía Cristo, que iba sola elSábado Santo. Yo que estaba cerca, ledije que así era, pero que nosotrossacábamos nuestro paso de Cristo enMayo, en la procesión Eucarística deImpedidos. El niño no lo entendió, perola madre, que debía ser del barrio,enseguida me dio la razón.

Así es. Nuestra Hermandad tieneel paso de Cristo más importante detodos, nada más y nada menos que elpaso de un Cristo Vivo, de un CristoResucitado que por Pascua sale a lacalle para entregarse a los demás, paraconfortar a los enfermos e impedidosde nuestro barrio, para en la mañanade ese domingo de la Ascensión,recorrer bajo palio las calles de lafeligresía bajo acompañado de todaslas hermandades y fieles de nuestraparroquia.

Sí, nuestra Hermandad tiene unpaso de Cristo. El mejor paso que se

pueda tener. Un paso en el que todossomos costaleros llevando al Señor ennuestro corazón y entregándolo a todaslas personas impedidas del barrio; unpaso al que todos los hermanos de laSoledad debemos acompañar igual queacompañamos a María en la tarde delSábado Santo; un paso que, sintrabajadoras, lleva más costaleros quenunca; un paso que llega directamentea las casas que son pequeños templosdonde se recoge Jesús Sacramentadoen la Sagradas Formas; un paso quecon la música y los cánticos de losdevotos que Lo acompañan despiertanel barrio en esa mañana espléndida delmes de Mayo.

Desde aquí os invito y os animoa todos a que acompañéis a JesúsSacramentado, el paso de Cristo denuestra Hermandad, en la mañana del24 de mayo después de la misa de 9de la mañana. Esperando veros esamañana, recibid un cordial saludo devuestro hermano mayor. José M. Albiac Rossi

Festividad delCorpus Christi

Tendrá lugar el próximo jueves, día 11 de Junio.

Se recuerda a los hermanos que deseen participar

en la procesión, que deberán estar a las 9.00 horas

en el Patio de los naranjos de la S. I. C., debiendo

asistir con traje oscuro y medalla de la Hermandad

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5Diputado Mayor de Gobierno

INFORME DEL DIPUTADO MAYORDE GOBIERNO SOBRE LA

ESTACION DE PENITENCIA EN LASEMANA SANTA DE 2009

Siguiendo la práctica ya habitual sehan enviado los impresos para la reservao solicitud de varas o insignias en la hojainformativa de cuaresma, habiendoreservado su vara o insignia todos loshermanos que la sacaron el año anterior.Una vez terminado el plazo quedaron libres,una vara en el tramo 6, el Libro de Reglasy la Bandera Concepcionista, que fuecubierta por los hermanos más antiguosde entre los que lo habían solicitado.

El total de papeletas de este añohan sido de 945, 9 más que el año pasadoy número máximo alcanzado desde la fechade la que se disponen de datos de númerode papeletas de sito totales. Las mismashan quedado repartidas de la siguienteforma: cirios: 352; cirios niños: 128; cruces:105; costaleros: 79, niños: 89; simbólicas:21; insignias y resto: 171

Por tramos el número de nazarenos,incluidas las insignias y los diputados quedacomo sigue: tramo 1, 93; tramo 2, 48; tramo3, 66; tramo 4, 98; tramo 5, 71; tramo 6,58; tramo 7; 69; tramo 8, 36; tramo 9, 34;tramo 10, 54; tramo 11, 65; tramo 12, 75.

Impresionante el número denazarenos y monaguillos que componen eltramo 4 de niños, es más este año y vanya dos que ha superado al que casi siempreera el más numeroso de la cofradía, eltramo 5. Con la redistribución de losprimeros tramos estos se han visto máscompensados con el resto de la cofradía,si bien este año ha sido el 1 el másnumeroso de entre los tramos de cirios deadultos. Al igual que en años anterioreshay que destacar la alta participación denuestros hermanos más jóvenes. 299

hermanos conformaron los tramos de niños,es decir más de un 31% de los integrantesde la cofradía.

El tramo 4 sobre todo a la hora dela salida, resulta bastante problemático,sobre todo por los acompañantes de losniños que en muchos casos suele superarla unidad, pero sobre todo lo que hay quetratar para el siguiente año conseguirmantener al menos el 50% del tramodurante la carrera Oficial, ya que es lamayoría de los niños la que se retira en laPlaza del Duque.

Con respecto a la cuadrilla decostaleros como todos los años quierovalorar el gran grupo humano conforman.La cuadrilla ha estado conformada por 75costaleros, habiéndose producido tres altasy 4 bajas con respecto al año pasado, porlo que vamos llegando a plasmar la ideatanto de los capataces como de quiensuscribe así como de los mayordomos de

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que el paso cuente con dos cuadrillascompletas de 35 hombres cada una, de talmanera que en cada trabajadera haya 5costaleros.

Después de entrar la Cofradíatuvimos un acto de convivencia en nuestracasa hermandad como en años anteriores,donde se cambiaron impresiones sobre laestación de penitencia y la cuadrilla. Enesa convivencia quien tuvo la suerte deestar allí, y quien suscribe lo presenció,pudimos ser testigos de esas cosas que tehacen sentirte orgulloso de ser sevillano,amar sobre todas las cosas a su SemanaSanta, ser de la Hermandad de la Soledady dar gracias a Dios y su Santísima Madreen el misterio de su Soledad de poder estaren el sitio oportuno y en el momento justo.Después de que todos los costaleros sehubieran tomado su bocadillo, y una vezque nuestro hermano mayor hubo dado lasgracias a todos los miembros de la cuadrillatomo la palabra, por primera vez, creo queen 50 años, y rompiendo el principio deprimogenitura, don José Ariza Sánchez,segundo capataz de nuestra cofradía, a sumanera, como siempre ha sido y de laforma y manera que todos lo conocemos,dio a conocer a su gente, a la hermandady a toda Sevilla que desde que tocara elmartillo del paso de su Virgen de la Soledadpara mandar su arriá definitiva en laParroquia de San Lorenzo se retiraba demandar pasos, como a él le gusta decir. Lohacía en silencio, delante de toda su gente,sin que nadie lo esperara, porque tampocoson sus formas ni sus maneras, y dejándoleel testigo a su hijo Antonio y a sus sobrinos.Ni que decir tiene que la ovación que sonóen el salón de cabildos de la Casa deHermandad fue atronadora y de las quepocos recuerdan haber escuchado otraigual en ese mismo escenario.

La desarmá se llevó a cabo comoviene siendo costumbre el miércoles dePascua 15 de Abril, y a la conclusión de lamisma tuvimos una convivencia con laentrega de un cuadro de la Santísima Virgenpara aquellos costaleros que llevan 10 añosininterrumpidos en la cuadrilla, este año hasido nuestros hermanos Agustín PérezRomero, Guillermo Gutiérrez Moreno yManuel Ferrer Blanco.

D e s p u é s d e o c h o a ñ o sconsecutivos, por fin hemos podido disfrutarde una Semana Santa completa en lometeorológico, la misma no sólo ha sidobenévola en cuanto a la lluvia, sino tambiénen cuanto a las temperaturas. El SábadoSanto amaneció con algunas nubes, perosegún informaban todos los partesmeteorológicos y nuestra principal fuente,nuestro hermano José Antonio MaldonadoZapata, el día iría mejorando conformefueran avanzando las horas, si bien dichamejoría se hizo esperar, ya que el riesgo

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de lluvia y nubosidad fue aumentando a lolargo de la mañana cuando ese no era elpronóstico, si bien a las 16:00 horas lainformación era definitiva, el riesgo deposibilidades de lluvia en Sevilla a partir deesa hora era del 0%. La mañana porexcelencia de la Hermandad se vioacompañada nubes y claros.

C o m o s i e m p r e f u e r o nnumerosísimas las visitas y el trajín a lolargo de la mañana, muchos fueron losfieles, hermanos y devotos los queacudieron a visitar a la última de lasDolorosas que pone sus pies sobre lascalles de Sevilla, a la espera de demandarlesalud y suerte para poder contemplarla elaño próximo en Su Parroquia de SanLorenzo. A última hora fue el Cardenal FrayCarlos Amigo Vallejo, acompañado delnuevo Consejo General de HH. Y CC., conel presidente a la cabeza, y losrepresentantes municipales quienes seacercaron a cumplimentarnos.

A las 18:50, aunque parezca mentirasin necesidad de cabildo de Oficiales previo,hecho este que más de uno no recordamoscuándo sucedió por ultima vez, una vezrezada la oración conjunta de todas lasHermandades Cofradías para la estaciónde penitencia y tras depositarse ante lasplantas de Nuestra Señora de la Soledadla bolsa con la ofrenda a la caridad pornuestra hermana Concepción Rubio deRueda, de orden de nuestro HermanoMayor, quien suscribe da la orden al fiscalde Cruz para que abra las puertas de SanLorenzo y se inicie nuestra anual estaciónde penitencia a la Santa Iglesia Catedral.

La llegada a la Campana se haproducido con ausencia de novedades deimportancia, algún que otro hermano tuvola necesidad de abandonar las filas de lacofradía al sentirse indispuesto, si bien yal día siguiente quien suscribe se interesópor su estado manifestando que sólo habíasido una enfermedad pasajera. Por lo que

7Diputado Mayor de Gobierno

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respecta al horario del día, a la salida delos primeros tramos de la Parroquia de SanLorenzo me puse en contacto con eldelegado del Consejo para informarme porel transitar de la jornada, indicándome quetodo iba según lo previsto, si bien una vezllegada la Cruz de Guía a la Plaza delDuque el retraso existente en la jornadaera de más de un cuarto de hora, lo queunido a que la salida se había adelantadoen 10 minutos sobre el horario habitual hahecho que se provocara un parón de lacofradía bastante importante.

A las 19:55 llegaba la Cruz de Guíaa la plaza de la Campana. 20:17, “AveMaría Purísima”, con más veinte minutosde retraso sobre el horario fijado pido laVenia en la Campana al Secretario delConsejo quien tras concedernos la mismapara realizar nuestra anual Estación dePenitencia a la Santa Iglesia Catedral nosdesea una feliz estación de penitencia,transmitiéndonos un especial recuerdo a

todos los soleanos y devotos de laSantísima Virgen que nos precedieron.

El discurrir por la carrera oficial hasido más pausado que de costumbre, loque nos ha hecho mantener el retrasoacumulado o en algunos puntos ampliarlo.Una vez que por delante no tuvimosimpedimento alguno pudimos caminar anuestro son y el andar de la cofradía fuecomo de costumbre, de hecho a la salidade la Catedral se enjugaron algunos minutosde retraso. Como se ha indicadoanteriormente una vez que pudimos discurrira nuestro paso la cofradía regresó a laParroquia de San Lorenzo sin incidenciadigna de mención.

En este momento en el que comotodos los años cierro mi anual informe sobrela estación de penitencia, me voy a remontara las primeras horas de la misma,concretamente a la reunión que mantuvimoslos diputados previamente a la salidapenitencial, como sabéis en ella todos losaños se ofrece la estación por alguna causaconcreta, y este año la misma ha tenido unofrecimiento especial y doble, por un ladopor los hermanos de la Soledad que estánpasando un mal momento por la crisiseconómica que nos afecta, y por otro ladopor todos los hermanos de la Soledad queestán por venir.

Sí, por todos aquellos que estén ono en la mente de sus padres o en el vientrede su madre, van a besar las reglas con lacara de la Madre de todos, y con larepresentación de Dios Eucaristía, poraquellos que podrán ver la luz donde tantatiniebla se promulga desde superioresinstancias, de todos los que, como yo sólopuedo dar gracias a mi padre y a mi madrepor haberme dado la vida, casi nada, peroademás en su día me hicieron hermano dela Soledad y me enseñaron a amar a Cristoy a su Bendita madre, y a ser nazareno de

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Sevilla, por aquellos que tendrán la suerte,y esperemos que sean muchos, de que elHermano Mayor les ponga la medalla conel cordón negro y blanco en su pequeñocuerpecito de bebé, de tal manera que lacara de la Virgen le llegue a sus pies, quevestirán la túnica blanca y negra con unamplísimo dobladillo y que recibirán la luzdel sol de primavera por primera vez en laPlaza de San Lorenzo en los brazos de sumadre o de su abuela.

Por todos los padres hermanos ono de la Soledad para que Ella que supodecir Si cuando en su vientre latía el corazóndel que sería Nuestro Salvador, les iluminea la hora de tomar esa decisión que aunqueparezca dificultosa, no es menos cierto quesiempre llena de orgullo y satisfaccióncuando se toma pensando que de tusentrañas saldrá una criatura que será alma,luz, vida y alegría de un hogar.

Cuida de nosotros tus hijos y tushermanos Virgen de la Soledad, de todoslos cofrades de Sevilla y de Tu hermandad,y ayúdanos a tener fuerza de cuerpo y deespíritu para poder rezarte todos los viernesen tu capilla, a cualquier hora del díaagarrándonos a tu reja, y para que lapróxima Semana Santa podamos ser fielestestigos de tu amor por Sevilla, de esesabor añejo de cofradía antigua y nueva ala vez con toda la chiquillería alborozadasaliendo por las puertas de San Lorenzo,y vuelvas a ser como siempre un nuevobroche de oro de otra Semana Santa.

Sevilla 23 de Abril de 2009Festividad de San Jorge

Faltando 339 para el Domingo deRamos y 345 días para el próximo SábadoSanto si Dios y la Santísima Virgen de laSoledad lo quieren.

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Muy intensa ha sido la labor de esta Comisión de Juventud en la cuaresma yapasada y posterior Semana Santa, con la organización y preparación del insigne cuerpode acólitos que en cada culto de nuestra Hermandad, tiene el orgullo y privilegio de servira nuestra Madre de la Soledad. Son muchos los días de ensayo que este grupo deincondicionales hermanos jóvenes, realizan para que posteriormente nuestros cultosluzcan con la excelencia que merecen. Es importantísimo destacar el enorme colectivohumano que hoy día forman el cuerpo de acólitos, que agrupa a más de una treintenade chavales totalmente entregados y dispuestos para realizar esta labor que se lesencomienda, de una manera ejemplar.

Mucho se ha hablado en los mentideros cofrades de la calidad, sobriedad yseriedad del cuerpo de acólitos de la Soledad de San Lorenzo, y razones no faltan, perodesde aquí nos gustaría señalar que esto no es flor de un día, que esta seña de identidadde la Hermandad es herencia del saber hacer de jóvenes acólitos anteriores prestos acolaborar, y sobre todo de la disposición y el sacrificio de los actuales. Así, cuando elSábado Santo se abren las puertas de San Lorenzo y delante del paso de la SantísimaVirgen aparece ese cuerpo de acólitos tan apreciado, en la cabeza de todos ellos figuranimágenes de su aparición en el quinario, en el besamanos, en el ya famoso y mañaneroensayo de Función Principal, en la Majestad, Función de los Dolores, Función de Roca-Amador, Función de Resurrección… y como no, del culto más importante de la Hermandad,que no es otro que la misa de todos los viernes en la Capilla delante de nuestra Madrede la Soledad, donde siempre la acompaña uno de estos sobresalientes jóvenes. Portodo ello, cuando ya han pasado los anhelados días de cultos, cuaresma, SemanaSanta… y todo parece que vuelve a la normalidad, este grupo de hermanos incansablesregresa a casa, al instituto o a su grupo de amigos, y cuando le preguntan por su laboren ese tiempo pasado responden con orgullo: “Yo, soy acólito de la Soledad”.

Pablo Benot

Acólitos de la Soledad

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Camelias Blancas: Juan Hidalgo 14

Hay muchas personas entrañablesen nuestra Hermandad de la Soledad. Ytambién muchos hermanos que se llamanJuan. Pero Juan Hidalgo, sólo tenemosuno. Juan, además de llevar más deveinticinco años interrumpidamente en laJunta de Gobierno, es quien más suelasde zapatos ha gastado por la Hermandad,tanto que me atrevo a decir por eso mismo,que le conocemos todos. A él, y a suinconfundible sonrisa. Quedamos en unacafetería para vernos, pero Juan quisocambiar el lugar de encuentro por otro conmás raigambre cofrade, así que buscamosrefugio de aquel caluroso atardecer, cercade la plaza del Pan en la calle Huelva.Juan, ingresaste en la Hermandadun treinta y uno de diciembre demil novecientos sesenta.Juan. Así es, siendo Secretario don VicenteRubio, estuve saliendo sin ficha varios años,pero no hay constancia de mí comohermano hasta 1963, y no fue hasta elsesenta y cinco que pude salir con mi ficha.¿Cómo es que habiendo sido tupadre diputado mayor de gobiernono te hizo hermano?Pues así fue, y desconozco el motivo.Durante el primer lustro de los cuarenta,don Antonio Petit fue integrando a variosvecinos del barrio en la Hermandad, en loque era una campaña de captación dehermanos: a Joaquín el de la bodeguita, aSalguero… y entre otros a mi tío y a mipadre. Pero mi padre no me empujó a laHermandad, fui yo quien me acerqué.¿A cuántos Hermanos Mayores hastratado como miembro de la Juntade Gobierno?A don José Rueda, a Ramón Pineda, aRafael Riera, a Pepe Rueda Macías, aRafael Ruibérriz, y a José Manuel Albiac.¿Qué diferencias encuentras enHermandad con el paso del tiempo?

Uuufff. A partir de Pepe Rueda -hijo- elHermano Mayor deja de ser un patriarca,y pasa a ser alguien con nombre de pila.Hoy se le pierde el respeto y no debieraser así, porque es el máximo representantede la Hermandad. Se le puede discutir, odisentir, pero debemos tenerlo un escalónmás alto, no estoy diciendo en un pedestal,pero si un escalón por encima, porque nosrepresenta a todos. El hermano Mayor noes el presidente de cualquier asociación,ni un club, ni una agrupación, ni nada deeso; sino alguien que debe poseer unareligiosidad reconocida y también otrascualidades. En una cofradía hay siglos detradiciones sobre una imagen que despiertadevoción, respeto y sentimientos en muchaspersonas. La diferencia está en que antes,podía llegar a casa y decirle a mi madre:“Me ha hablado el hermano mayor”. Y hoy,“estuve hablando con Setanito...”.Tal vez porque antes, era uno deesos señores mayores a quienes

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15Camelias Blancas

siempre vimos desde niños al frentede la Hermandad, y hoy, locontemplamos como a uno denosotros.Con el tuteo llegan las confianzas, y notodo el mundo sabe hasta dónde hay quellegar. Antes las Hermandades sedesenvolvían en círculos más cerrados,propios de aquí, más locales; hoy comoayer, quien acuda a una Hermandad noestá libre de vanidades y ambicionespersonales que no deben tener cabida aquí,porque no es éste su sitio, nuestrasdebilidades humanas debemos dejarlas almargen. y hay que ser cauteloso con esto,porque el fin de las Hermandades yCofradías de Penitencia es otro muy distinto.En el año setenta y siete accedesa la cuadrilla de costaleros hastael año noventa y dos; se produceun salto por enfermedad de unfamiliar, y una llamada de la Juntade Gobierno que reclama quesalgas de debajo del paso paracumplir como Prioste en laCofradía.Si, así es. Aunque tampoco en el añonoventa y uno pude ver a la Soledad en lacalle. Por razones de trabajo la SemanaSanta me pilló en Alemania, invitado pormi empresa al haber ganado un premio enventas. A la hora en que entraba la cofradía,no me pude aguantar y tuve que salir conel corazón en un puño del local donde meencontraba con Mercedes, porque miSoledad estaba entrando, ya en la callellegó José Luis García Fernández con Lolinay me preguntaron qué me pasaba. ¿Quequé me pasa? Saqué mi medalla de laSoledad y la besé. Los demás tambiénsacaron su medalla e hicieron lo mismo,aunque no nos veíamos bien los unos alos otros porque teníamos la visión bastanteborrosa.

Llegas a Prioste…Empecé en el setenta y ocho como auxiliarde Formación con Diego Lencina que mellamó para ello.¡Juani! -que es como él mellamaba- ¡Ven acá! Y comencé a asistir alos cabildos, pues entonces los auxiliaresasistían a los Cabildos. Como prioste meinicié con José Álvarez Andujar, y porsupuesto con Paco Ponce a quiennombraron Prioste Honorario aquél año;ayudaba a Paco Ponce, aunque era muyreacio a recibir ayuda.A partir del primer lustro de los añosnoventa, la estética cambia, y se pasó delarreglo de las flores o de la Virgen alperfeccionismo, a la búsqueda de laperfección absoluta, propiciada por loscomentarios en blogs y las webs y el mirarlotodo con lupa. Hay muchas tertuliascofrades con su página web que lo revisany lo airean todo, y están acabando con lanaturalidad con la que antes se hacían lascosas. Antes no se miraba con tan malaleche. Yo solo, no soy capaz de hacer,siempre he trabajado en colaboración conotros. Siempre he querido trabajar con unequipo, con personas entregadas a unmismo fin.¿Con qué vestidor te quedas?Cada uno tiene su estilo, esto es innegabley hay que aceptarlo tal como es, a partirde ahí tenemos que contar con los gustospersonales de cada uno. A título personal,pese a lo que discutimos sobre esto oaquello, me llevo mejor con ManoloCaballero; nuestras discusiones son sobrecuestiones de matices, la realidad es quenos entendemos muy bien. Hemos deentender también que su estilo es distintopara la Soledad, pues no suele vestirimágenes con encajes. Se da también lacircunstancia de que algunos enseres, comola diadema realizada cuando la Virgen sevestía ancha, influyen en la forma de vestir

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a la Virgen, su estructura te condiciona encuanto a la manera de disponerdeterminados elementos.¿Y con qué Hermano Mayor?Con Ramón Pineda; por su dimensión y sutalla como persona, por su carisma. Peroclaro, tampoco es el único. Pepe Ruedadurante sus tres o cuatro primeros añossupo poner orden sobre la forma de hacertan personal de Ramón, y es un mérito quedebemos reconocerle. Y Albiac, en sus doso tres primeros años sobre todo, ha traídouna alegría a la Hermandad que era muynecesaria.Escoge un día en la Hermandad.Uno no. Son tres, y son los que más mehan marcado. La restauración de la Imagende la Virgen en la sacristía de laSacramental [febrero a marzo de 1985].Me impresionaba ver a la Virgen con todosaquellos elementos que necesitaba elequipo de restauradores, verla con su pelo;y además, por la ventanita que da a laplaza, entraba un rayo de sol que iba ailuminar precisamente a la Virgen, y que amí me dejaba sobrecogido. El Vía Crucisde las Hermandades [22 de febrero de1988], al designar el Consejo deHermandades y Cofradías a la Soledadpara que lo presidiera aquél primer lunesde Cuaresma, siendo además la únicaVirgen que salió coincidiendo con el añoMariano, y estando yo de Prioste, elacontecimiento constituyó también un díaúnico. Y la visita al Cementerio [2 denoviembre de 2003], conmemorando los150 años de la inauguración del Cementeriode San Fernando, con aquel altar, connuestra Virgen al pie del Cristo de lasMieles, es algo que no puedo describir, niolvidar. Hay otras cosas, pero me quedocon los tres días que he mencionado, yespecialmente la visita al Cementerio.

En el año dos mil siete eresnombrado fiscal de paso. ¿Te loesperabas?No. Me hizo una gran ilusión. Juego con laventaja de haber sido costalero muchosaños; no sé que bazas se cotejaron paranombrarme, pero conocer las trabajaderas,los capataces, lo que sucede debajo delpaso, algo tendría que ver… Sé cómo andaun paso, y soy también una persona a quienle gusta dar a cada uno su sitio en susrespectivos cargos, supongo que estotambién contaría. Desde que me nombraronfiscal de paso, mantengo frente a otros queel paso “no se queda atrás”, siendo laCofradía la que va acompañando a laVirgen, “el paso no se descuelga”, es lacofradía “la que se va”, y eso hay que sabercoordinarlo, hay que saber de cuántoespacio dispone el paso hasta que vaya adetenerse de nuevo, sin cansar a loscostaleros con chicotás demasiado cortasy frecuentes, o demasiado largas, o cuándoviene una serie de revueltas.Y de tus veinticinco años en laJunta que nos cuentas…La placa que me entregaron fue unasorpresa, tan de sorpresa me cogió que noacudió nadie de mi familia.¿Qué opinas del momento actualde la Hermandad?La Hermandad es como una grantrabajadera donde todos tenemos que meterel cuello, trabajando cada uno en su cargo.Cuando se jura el cargo, se jura servir a laHermandad, no al hermano mayor, ni almayordomo -por mencionar uno-, ni a otroscargos, y mientras se ocupa sólo debemosestar ahí para trabajar en él. Si queremoshacer daño a un cargo, se lo hacemos a laHermandad, no a las personas.¿Cómo te gusta más la Virgen? Deblanco… de negro…Me gusta más de negro, la hace más

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cercana a su Misterio, a su situación deSoledad como persona, como madre. Comoprioste, siempre he querido estereotiparesa Cruz y ese Sudario, resaltar eseimpacto visual.Que anécdotas te gustaría contar…Hay muchas. A mi hija Ángela cuandocomenzó a ir al colegio, le preguntaron enqué trabajaba su padre, y contestó quesiempre estaba en la iglesia; y tiene suexplicación, generalmente, cuando llegabaa casa, ellas ya estaban dormidas, apenasme veían, la cuestión es que llamaron acasa desde el colegio preguntando siseguíamos conviviendo, y tuvimos que ir adar explicaciones. Siempre que estuve deviaje, allí donde me alojaba, dejaba unaestampa de la Virgen de la Soledad, deforma que quien entrara después, laencontrase. Y siempre que he ido al hospitalVirgen del Rocío, entro en la capilla ytambién dejo un montoncito de estampas.En otra ocasión, como siempre quemontábamos las colgaduras de lascolumnas, tuvimos que desplazar unconfesionario que se encontraba entre elcoro y el Ecce Homo; aquel día noscolocamos uno a la derecha y otro a laizquierda del confesionario, y dando uncarrerón lo empujamos un buen trecho,cuando nos detuvimos, sal ió delcon fes ionar io un cura g r i tandodescompuesto: ¡Un terremoto! ¡unterremoto!. Era un cura que venía de SantaRosalía todos los días a confesar, y que aldía siguiente desde dentro del confesionariono nos quitó el ojo de encima. Cuandoterminaron la restauración de la Virgen:eran las tres o tres y media de lamadrugada, pero no me pude aguantar ydije: “Vamos a echar a repicar lascampanas”. Y mientras unos tenían queagarrar al sacristán (Paquito el Monaguillopor aquel tiempo), dimos el repique… y de

lo que allí sucedió, nunca… más… se supo.Juan… ¿Qué es lo que más te gustahacer?Fundir la cera. Empecé a fundir cera en elaño ochenta y uno. Una de las cosas quemás me ha gustado hacer en la Hermandad,la más gratificante, ha sido el acto de fundir;y toda su parafernalia. Y doy gracias queme dejan continuar ayudando a los nuevosPriostes, Andrés y José Manuel, ya queellos se bastarían solos para hacer eltrabajo. Fundir la cera lleva dos horas odos horas y cuarto…

Amigo Juan.Querido Juan.

Dios y la Santísima Virgen te guardenmuchos años. Y a todos nosotros, que nospermitan compartirlos contigo.

Camelias Blancas

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No hay duda que la historiografíatradicional, encabezada por José Bermejoy Carballo, sospechaba que pudo existirun vínculo común entre el origen de una yotra cofradía al tener un instituto parecido,incluso el mencionado autor dejabaentrever, en las líneas que en su obradedicaba a la Hermandad de la Soledad,que la desaparición del paso del Entierropodía deberse a querellas con la vecinaCofradía de los Humeros. Sin embargo, laprudencia y el no contar con losinstrumentos documentales adecuados, nole permitieron aseverar con rotundidad quépudo llevar a la Soledad a abandonar susantiguas prácticas, pero sí vislumbrar quehubo injerencias; así, el citado autor llegóa afirmar lo siguiente:

«Al principio del siglo diez y siete,ó después dejó de sacar el paso delSepulcro y los armados en su procesióndel Viernes Santo, cesando en su virtud lade Resurrección. La causa de esta novedad,sin duda fue distinguirse de la Cofradía delSanto Entierro, la cual había adoptadoprácticas idénticas ó parecidas á las suyas».

¿Qué hay de cierto en ello? ¿Huboinjerencias o plagios? ¿Fue la Soledad laprimera y única cofradía en representar elSanto Entierro en Sevilla? Veamos quéacontecimientos se produjeron entre 1577y 1599.

En respuesta de una petición quela Hermandad del Santo Entierro habíapresentado ante el Provisor delArzobispado, el 30 de marzo de 1599 elrepresentante legal de la Hermandad de laSoledad, Juan Luis, procurador de laAudiencia Arzobispal, respondía a todaslas acusaciones a la par que hacía, enforma de memorial, una reseña de los

La Ceremonia del Entierro: Epicentro de las disputas de lascofradías de la Soledad y San Entierro (Segunda parte)

sucesos que habían ocurrido entre ambascofradías desde 1577. El extensodocumento indica que las querellas seremontaban veintidós años antes.Desde 1575 la Hermandad de la Soledadradicaba en el Convento de Nuestra Señoradel Carmen, en tanto que la del SantoEntierro, al menos desde 1577, permanecíaen la Iglesia de Santa Catalina. Todo apuntaque, para ese año, la segunda ya efectuabasu procesión del Sagrado Entierro, mientrasque la Soledad lo verificaba desde sufundación, pues Juan Luis así lo aseguraba,reiterando que su cofradía se había fundadohacía más de cincuenta años. Por tanto, eldato confirmaría la cronología queactualmente se baraja y que coincide con

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el primer dato documentado en 1549,aunque previsiblemente su existencia seaalgo anterior.

Los hermanos del Santo Entierrosolicitaron al provisor Doctor Valdecañas yArellano efectuar su salida en 1577 elViernes Santo y no el Jueves, posiblementefundamentando en su alegación que laescena pasional que se representaba nocoincidía con el día en que verificaban laestación. Algo similar había sucedidocuando la Soledad tuvo que abandonar en1557 el Jueves Santo debido a un pleitomantenido con la Hermandad de Pasión.

Enterada la Cofradía de la Soledadde los propósitos de los de Santa Catalina,elevaron sus quejas al Provisor, quienproveyó un auto el 1 de abril ordenandoque saliera el Jueves Santo a la hora queles fuese mandada. El mismo día, los delSanto Entierro volvieron a apelar, alegandoque una y otra no podían encontrarse, alsalir una desde el Carmen y otra desdeSanta Catalina. Por ello, el DoctorValdecañas y Arellano volvió a emitir unauto el mismo día concediendo licenciapara que efectuasen su procesión a las dosde la tarde. Aún así, en el mismodocumento, que se notificó a las partes el18 de abril de 1577, se comunicaba quesolamente saldría en ese año el ViernesSanto, debiendo volver al Jueves Santo elaño siguiente.

Sorprendentemente, el 29 enero de1578 el Santo Entierro solicitaba,nuevamente, al Provisor realizar suprocesión en similares términos que en1577. La Autoridad Eclesiástica reiteró, entodo y por todo, el auto anterior,determinando los cofrades de SantaCatalina trasladar la causa al tribunal civil,en donde parece que las cosas secomplicaron.

El memorial de Juan Luis no es lo

suficiente claro sobre qué pudo suceder enla Real Audiencia de Sevilla, pero de suspalabras se desprende que el tribunal diola razón a los del Santo Entierro:«Apelaron para por (sic) la Real Audienciaen veinte y dos de Febrero del dicho añode setenta y ocho, proveyeron auto en quedeclararon que el dicho señor Provissor nohabía fuerça y le remitieron el dicho pleito,con lo qual, quedó executoriado el dichoauto y devuelto el dicho pleito».Si esto sucedió así el proceso pudoprovocar un conflicto jurisdiccional. Pese atodo, el Arzobispado no retrocedió ni unápice el segundo auto que emitió el Provisor1 de abril de 1577. Ajenos a la decisión,los cofrades del Santo Entierro siguieronorganizando los preparativos para salir elViernes Santo de 1578. Puesto que elDoctor Valdecañas y Arellano pudo habertenido noticias sobre el particular, amenazócon la excomunión a todos los cofrades,instando al clero parroquial que impidiesena toda costa que se realizase la procesión.Con todo, según relata el procurador JuanLuis, el Viernes Santo de ese año,contraviniendo los mandamientos de laIglesia, el Santo Entierro hizo su estaciónde penitencia.

Los acontecimientos que rodearona la procesión fueron verdaderamentesorprendentes. La Soledad, apercibida delas intenciones de la otra hermandad, llamóal brazo secular para impedir sus propósitos.Empero si la jurisdicción civil acudió a lallamada de los del Carmen, es factiblepensar que en la Real Audiencia de Sevillala apelación no prosperó, de lo contrario¿cómo se explica la actuación de losalguaciles de la ciudad contraviniendo unauto civil que apoyaba dicha procesión?Sea como fuere, a las dos de la tarde delViernes Santo de 1578, los cofrades delSanto Entierro rompieron las puertas del

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templo -«la parte contraria quebrantó laspuertas de la dicha Yglesia»-, y principiaronsu estación. En ese momento, hicieron actode presencia el Conde de Barajas, asistentede Sevilla, en compañía del Alguacil Mayory varias justicias, los cofrades interrumpieronsu procesión y se dieron a la fuga,lográndose prender a cuatro de ellos,mientras que el resto de la comitiva sedispersaba por las calles de los alrededores.

Lo que hasta ese momento habíasido una querella entre dos cofradías dabaun profundo viraje, inaugurándose un largoy duro proceso legal entre una hermandady la Iglesia de Sevilla por «desacato ydesobediencia». El licenciado BartoloméRodríguez, fiscal del Arzobispado, solicitóque se trasladase la culpa, sentenciandola excomunión. Los cofrades apelaron antela Santa Sede y nombraron por juez al Abadde San Benito que les restituyó, pudiendosalir en 1579 el Viernes Santo, tal y comolo recoge Francisco de Sigüenza.

templo -«la parte contraria quebrantó laspuertas de la dicha Yglesia»-, y principiaronsu estación. En ese momento, hicieron actode presencia el Conde de Barajas, asistentede Sevilla, en compañía del Alguacil Mayory varias justicias, los cofrades interrumpieronsu procesión y se dieron a la fuga,lográndose prender a cuatro de ellos,mientras que el resto de la comitiva sedispersaba por las calles de los alrededores.

Lo que hasta ese momento habíasido una querella entre dos cofradías dabaun profundo viraje, inaugurándose un largoy duro proceso legal entre una hermandady la Iglesia de Sevilla por «desacato ydesobediencia». El licenciado BartoloméRodríguez, fiscal del Arzobispado, solicitóque se trasladase la culpa, sentenciandola excomunión. Los cofrades apelaron antela Santa Sede y nombraron por juez al Abadde San Benito que les restituyó, pudiendosalir en 1579 el Viernes Santo, tal y comolo recoge Francisco de Sigüenza.

La Soledad apeló ante la SantaSede, nombrándose al Comendador de laMerced como juez, y volviendo aexcomulgar a los cofrades en 1580.Finalmente, el Santo Entierro interpuso unaúltima apelación, llevando el proceso judicialel canónigo Pedro Zumel. No obstante,aunque ambas partes se presentaron ehicieron sus respectivas alegaciones, nohubo sentencia porque el canónigo murió.Ninguna de las cofradías continuó el juicio.

Sin duda, el pleito iniciado en 1577por los cofrades de la Soledad buscabalograr la exclusividad de la procesión delSanto Entierro en la tarde del Viernes Santo.Mismas intenciones fueron las quepersiguieron los de los Humeros cuandoen 1599 interpusieron una demanda contrala Soledad por efectuar ésta cambios ensu cortejo.

El proceso legal suscitado entre

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1577 y 1580 inauguró una etapa deinestabilidad en la Hermandad del SantoEntierro; así, es más que razonable pensarque en 1580 el Santo Entierro abandonaraSanta Catalina, acomodándose en el arrabalde los Humeros, en donde adquirió pordonación unas «Casas de Adoración» yentrando en contacto con el fundador dela Hermandad de Nuestra Señora deVillaviciosa.

El pleito no sólo significaba laexcomunión de los cofrades del SantoEntierro sino su desaparición a todos losefectos, pues la Autoridad Eclesiástica «ladesposeyó de su poceción (sic)» o de suinstituto. Para Juan Luis no había duda deque al no concluirse el tercer juicio por lamuerte de Pedro Zumel, la sentencia delComendador de la Merced seguía vigente.Entonces, ¿por qué años después, en 1599,vuelve a existir un pleito entre ambascofradías por la escena del Santo Entierro?¿Qué ha sucedido en esos diecinueveaños?

Realmente, más que los procesosjudiciales que se produjeron y más que loshechos que los provocaron, interesaconocer qué los motivaron, intentandoanalizar todos sus pormenores para buscaren ellos los posibles orígenes del SantoEntierro y las prácticas ceremoniales queefectuaban los cofrades de la Soledad,muchas de ellas desconocidas hasta elmomento.

Puesto que la disputa que se originóen 1599 estuvo protagonizada por lamonopolización de la escena del SantoEntierro en la tarde del Viernes Santo,parece obvio que se comience estaexposición con ella. No se conoce conprecisión desde qué momento laHermandad de la Soledad incluyó en suprocesión el paso del Santo Sepulcro, sibien los trabajos realizados por Ramón

Cañizares Japón han ayudado acontextualizarlo. De la descripción del AbadGordillo se infiere que, posiblemente, lohizo desde sus primeros momentosfundacionales:«Al fin de la disciplina venía un sepulcroportátil en hombros de los mismo hermanos,la imagen de Jesucristo Nuestro Señoramortajado .

Tampoco desde cuando el SantoEntierro se decantó por esta advocación,siendo en 1576 la primera vez que hayconstancia documental de ello. Por otraparte, la antigüedad de esta cofradía estáfijada pocos años antes, pues se conocela fecha de la aprobación de Reglas de laHermandad del Museo (1575) y el SantoEntierro figuraba en las procesionesgenerales entre ésta y la del Dulce Nombrede Jesús, cuyos estatutos han sido datadosen 1572, debiendo situarse la aprobaciónde dicha corporación en ese trienio. Encualquier caso, no deja de ser significativoque Félix González de León le diese lafecha fundacional de 1582, advirtiendo quecomo hermandad y no como cofradía suantigüedad era mayor:

«Si atendemos á la antigüedad deesta hermandad, refundida después enCofradía, es más antigua que todas lashermandades; pero si la miramos comocofradía de Semana Santa, no tiene másantigüedad, que el año de 1582».

La fecha fundacional de 1582 latomaron, tanto José Bermejo como FélixGonzález de León, del Abad Gordillo.Aunque no parezca razonable, el AbadGordillo no estaba tan equivocado comose ha pensado, sino que omitió algunosdatos, ora por desconocimiento, ora porque,como se ha dicho, su obra no tiene uncarácter historicista. Cuando el AbadGordillo dice que la Hermandad del SantoEntierro estaba fundada por un genovés

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llamado Tomás Pessaro en 1582 no eradel todo incierto. Como consecuencia delprimer pleito entre la Soledad y el SantoEntierro y su paralización en 1580, lasegunda abandonó la Iglesia de SantaCatalina y llegó hasta los Humeros, endonde posiblemente varió su advocaciónhasta 1581-1582. Esto explicaría por quéen el pleito de 1599, Juan Luis, negópersuasivamente y reiteradamente queexistiera una hermandad con el título deSanto Entierro: «no… es nombre deCofradía de Entierro sino del Prendimientode Christo».

Exacto, todo apunta a que entre1580 y 1581, no cabe otra cronologíaposible, el Santo Entierro se transformó enHermandad del Prendimiento. Aquí habríaque introducir las célebres palabras delAbad Gordillo, antes sin sentido, pero que

Pontificia y Real Hermandad Sacramental de NuestraSeñora de Roca Amador, Ánimas Benditas, Beato Marcelo Spínola yPrimitiva Cofradía de Nazarenos de María Santísima en su

ACTO DE EXALTACIÓN A LA SANTA CRUZa cargo de nuestro hermano D. José Manuel Benot Ortiz

que tendrá lugar (D. m.) el próximo 15 de mayo de 2009, a las 21,30 horasen el Palacio de los Condes de Santa Coloma, calle Santa Clara n.º 21.

CENA BENÉFICA

lcon este hallazgo cobran verdaderadimensión y relevancia. No es extraño queel Abad, pocas líneas después de comenzarsu disertación sobre el Santo Entierro, novuelva a calificar a Tomás Pessaro comofundador, sino como despertador einstituidor:

«en una casa que está pegada almuro de la ciudad, y fuera de él vivía TomásPessaro y sin duda este santo pensamientotenía prevenido y hallando ocasión en lacofradía que nuevamente allí había venido,trató con los hermanos cofrades de ella,que mudasen de su invocación oadvocación y memoria y nombre de lacofradía y la llamasen del Santo Entierrode Jesucristo y se dispusiesen a celebrarlocon su compañía el viernes santo».

(Continuará).Pablo Alberto Mestre Navas

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