Benítez Rubio, Fco. Javier - Politeia - HACE UN AÑO

7/31/2019 Bentez Rubio, Fco. Javier - Politeia - HACE UN AO

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Hace un aoFco. Javier Bentez Rubio

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HACE UN AO

El nivel de complejidad que ha alcanzado las sociedades en las

que vivimos hace imposible que todo pueda pasar por la mente y las

manos de unos individuos concretos1. Sistemas y subsistemas,

controlados por personas annimas, gobiernan el mundo. Ms que

gobernar, yo dira que, hacen que funcione de una manera

determinada. Pero, a un sistema no se le pueden atribuir

responsabilidades concretas. El comn de los mortales se ve a s

mismo como ajeno a la responsabilidad de la marcha del mundo. Si

la cosa va mal, es cosa del sistema. A los que logran vislumbrarse

dentro del engranaje y tratan de hacer bien lo que le corresponde se

encuentran:- El sistema no tolera sus proyectos, decisiones o planes

porque estos no entran en la dinmica, o subdinmicas, que subyace

al mismo.

- Los proyectos, decisiones o planes no son aceptados por esas

personas annimas, expertos y tecncratas, que controlan parcelas

del sistema, ya que estos entienden que el saber vulgar del sentido

comn no puede controlar la dinmica del sistema. Para ser

aceptado y dominar el saber del sistema hay que convertirse en

parte del sistema, para hacerlo hay que comulgar, de algn modo u

1 El maravilloso modelo asambleario es hoy en da una reliquia del glorioso pasadotribal de la Humanidad. Clstenes le sac un partido impresionante en su Atenas democrtica.

Pero no caigan en el desaliento, si los mayas tienen razn y nos vamos al garete, los que quedensobre la faz de la Tierra pueden irse a Sol y recomponer el mundo parloteando alegremente ensus asambleas y comisiones.


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otro, con el sistema. Si lo haces, cmo puede seguir defendiendo la

crtica desde dentro?2 Es posible, realmente, un movimiento

quintacolumnista efectivo y duradero?

Frustracin e indignacin son solo una parte de la cuestin.

Centrarse exclusivamente en ellas es de una miopa desalentadora y,

en todo punto, superflua. El sistema, que lleva aqu ni se sabe el

tiempo, es capaz de coger toda esa indignacin y frustracin y

convertirla en un subsistema ms del sistema. El sistema engloba yfagocita la indignacin, y esta misma termina funcionando y

actuando a favor del sistema3. Se necesita un gasto energtico

impresionante para mantener la pujanza social contra el sistema en

la calle. La gente normal tiene vidas normales que vivir y gasta esa

energa en vivirla lo ms normal posible, no en hacer frente al

sistema en la calle.

Por tanto, innegables pero desalentadores. La primera opcin

de las expuestas anteriormente invita a unos cuantos a la

destruccin del sistema al completo. La violencia es una mala

2 El Movimiento no ha querido convertirse en engranaje , no ha querido convertirse en

pieza de relojera. No ha querido materializarse en forma de partido poltico o sindicato u otraestructura terrenal con manos y capacidad de actuacin directa y concreta. Ha queridomantenerse etrea, puro e ideal. Pensaba que de esa manera jovial e infantil podra ser capaz devertebrar la fuerza colectiva. El paso del tiempo dictaminar cunto de manipulacin delsistema haba aqu y cunto de espontaneidad. Dentro del sistema hay partes en conflicto,subdinmicas que luchan contra subdinmicas utilizando otras partes del ensamblaje en sulucha. Es posible que una parte que quiere eliminar a otra haya usado la indignacin de la gentepara hacer el trabajo.

3 Menospreciar al sistema y los tecncratas al mando es una actitud muy infantil. Es derisa, sinceramente, ver toda esa cascada de banderas, carteles, pancartas con eslganes, fraseshechas y estereotipos simplones y vacos. Utilizar esa verborrea descalificativa decimonnicacontra estos es como escupirle lacasitos a un M1 Abrams. Llamarlos explotadores, neoliberales,

fascistas, aguiluchos y ese tipo de cosas es, simplemente, una prdida de tiempo y un pataleo dedesahogo que dice muy poco de la inteligencia del que las escribe o dice.


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respuesta. Sembrar muerte y destruccin ilegitima cualquier

propuesta, cualquier otro sistema alternativo. Hay que jugar dentro

de la segunda opcin. No hay que olvidar que el sistema est

diseado para perpetuarse, para defenderse y un ataque furibundo

tendr respuestas furibundas. Hasta dnde puede llegar una

persona, cuntas lneas rojas pueden cruzarse para destruir al

sistema? El kamikaze, el suicida que se autoinmola, acaba con el

sistema, consigo mismo y con los inocentes que viven su vidanormalmente dentro del sistema.

La cuestin de subvertir el sistema en el que vivimos se centra

exclusivamente en las problemticas que crea-agiganta el sistema,

obviando sus objetivas aportaciones beneficiosas y sobre todo,

desdeando las expectativas que crea en el imaginario colectivo del

comn de los mortales. Y ah est la batalla, en este imaginario

colectivo.

La gente se indigna y se cabrea. Se mete en el facebook y se

pone a mandar fotos y montajes insultantes contra los polticos.

Utilizan el sistema para criticar al sistema, y desahogarse,

desfogarse. No podemos vivir sin el sistema, es l el que nos daforma a nosotros. ste tan cacareado Welfare de las narices, es un

subsistema ms del sistema; y lo defienden como si fuera una

panacea venida de Raticuln para salvar al mundo de las garras

neocons. De verdad, todos esos indignados estn dispuestos a

renunciar al sistema? Se dir que hay elementos que pueden ser

salvados o rescatados o purificados. Quin determina qu


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elementos del sistema s pueden seguir adelante y cules no? Ya no

admitimos que ningn particular dictamine ese tipo de cosas,

precisamente por eso se postergaron a las religiones al mbito

privado.

Cuntos estamos dispuestos a vivir sin los avances

tecnolgicos?4 Cuntos ilusos piensan que la tecnociencia que hace

progresar al mundo puede sacarse del sistema y ser entregada

prometeicamente al mundo! Anda ya! Si es precisamente estatecnociencia el soporte del sistema. No hay seres humanos vivos,

que yo conozca, que no tenga huesos en su interior.

El sistema es un punto de no retorno. Se puso a funcionar y

hay que despegar, seguir volando. Nos guste poco o nada. Hay que

seguir. La cuestin est, una de ellas, en madurar y adquirir mayora

de edad, y eso tiene que ver con admitir que las alternativas que

tenemos no son la buena y la mejor contra la mala y la peor, y que

no estamos ya en un mundo de buenos contra malos, de derrotados

injustamente y vencedores injustos. Hay que aprender a aceptar las

derrotas pero aprendiendo para la siguiente batalla. No es dejarse

llevar, ni dejar de pensar crticamente, ni ser pasivo. Es cambiar deestrategia porque esta, simple y llanamente, no vale un duro.

Madurar tiene que ver con optar, cada muy de vez en cuando,

constatemente entre lo malo y lo muy malo, entre lo peor y lo

4 Cuntos indignados dejaran de hacer gasto en Iphones, y otros smartphones, que no

cuestan 3 duros, desde luego? Se predica con el ejemplo, no insultando la inteligencia del queest en frente. Pero bueno, cada cual gasta su dinero como quiere en el sistema. Ellos lecompran al sistema su carsimo modo de expresin, y hay que respetar su decisin.


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catastrfico5. Corren tiempos en los que hay que pensar en la

supervivencia, como dira aquel, son malos tiempos para la lrica.

Pero como toda crisis que viene, se terminar yendo, y podremos

volver a pensar en ms cosas, en nuevas cosas.

No construimos el mundo en el que vivimos. Fueron otros, del

pasado, los que lo construyeron. Eso no se cambia. En los libros de

historia s pueden cambiarse los vencedores y los vencidos. Pueden

darse satisfaccin moral a los perjudicados y darles las victorias enlas batallas que perdieron. Ahora vivimos el mundo que

construyeron dos Guerras Mundiales, el Teln de Acero y la Guerra

Fra, el petrleo, la Banca, los ordenadores, la lucha entre el

intervencionismo keynesiano y liberalcapitalismo, y as un muy

largo etctera. Nadie entra en una mquina del tiempo para cambiar

aquello o decirle lo cabrones que son por cmo nos hacen vivir

ahora. Son los ladrillos con los que construyeron el edificio donde

vivimos, nos guste poco o nada, repito. Y si esto lo cambiamos no

ser para nosotros. Para nosotros es la demolicin, quedando cero

para el futuro. Y yo, al menos que quiero dejar un legado. Es mi

opcin personal, en libertad y autonoma, habiendo sopesado todas

las otras malas opciones.

La memoria se vuelve importante, el imaginario colectivo es

nuclear y sustantivo. Mi generacin est perdida, lo asumo. Tengo

esperanza en el mundo de mis hijos y de mis nietos. Si cada

5 No hay finales felices en el sistema, el chico besa a la chica y derrota al malvado, eneste mundo nuestro de malos contra malos. A ver si vemos ms Battlestar Galctica y Juegode Tronos y menos azcar hollywoodiese. Un poquito de por favor!


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individuo es capaz de aprender de los errores y traspasar ese

conocimiento a sus hijos y nietos, el sistema dentro de 25-50 aos

ser de otra manera, menos parecido al de ahora y ms parecido al

que queremos para ahora, pero que no tendremos para ahora. Esa es

otra clave, dejar de pesar en el corto plazo, construir para el largo

plazo, para el futuro, con las herramientas que da el sistema

cambiarlo pero para el maana de los nietos y bisnietos. Esto es

poco o casi nada. A muchos no les valdr un pimiento. Yo esperoque mi condena sirva como rehabilitacin de los que me seguirn en

el futuro. Preparar en esta derrota la victoria para el prximo

partido.

Fco. Javier Bentez Rubio

Mayo 2012

Enfermero.

Licenciado en Filosofa.

Ciudadano indignado

Demcrata esperanzado en la renovacin.

Padre (y algn da abuelo) en un posible futuro mejor.

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