América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier:...

72
Una ventana abierta al mundo Agosto - Septiembre 1977 (año XXX) Precio : 6,60 francos franceses AMERICA LATINA

Transcript of América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier:...

Page 1: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Una ventana abierta al mundo

Agosto - Septiembre 1977 (año XXX) Precio : 6,60 francos franceses

AMERICA LATINA

Page 2: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

'T

©

TESOROS

DEL ARTE

MUNDIAL

@£/ Salvador

Cabeza de maya

La civilización maya clásica o del Antiguo Imperio (siglos IV al IX de nuestra era) se extendió desde Palenque (sur deMéxico) hasta Copan (Honduras), alcanzando su apogeo en Peten, al norte de Guatemala. Su más bello florón es sinduda alguna la escultura, que hacia el año 700 iba a alcanzar un esplendor no igualado en Mesoamérica. Caracterizan alos escultores mayas de la época clásica el refinado realismo, la elegancia del modelado y la minuciosa elaboración dela indumentaria, en contraste con la economía de formas y la abstracción de sus contemporáneos olmecas yteotihuanacos. De sus manos salió esta cabeza de hombre enmarcada en un pico de ave. La pieza, de 23,5 cm de altura,está esculpida en granito con relieve y vigor excepcionales.

Page 3: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

UNESC

El CorreoAGOSTO-SEPTIEMBRE 1977 ANO XXX

PUBLICADO EN 16 IDIOMAS

Español Japonés PortuguésInglés Italiano NeerlandésFrancés Hindi Turco

Ruso Tamul Urdu

Alemán Hebreo

Arabe Persa

Publicación mensual de la UNESCO

(Organización de las Naciones Unidas para laEducación, la Ciencia y la Cultura)

Venta y distribuciónUnesco, Place de Fontenoy, 75700 París

Tarifas de suscripción :

un año : 28 francos - dos años : 52 francos.

Tapas para 11 números : 24 francos.

Los artículos y fotografías que no llevan el signo © (copy¬right) pueden reproducirse siempre que se haga constar"De EL CORREO DE LA UNESCO , el número del quehan sido tomados y el nombre del autor. Deberán enviarsea EL CORREO tres ejemplares de la revista o periódicoque los publique. Las fotografías reproducibles serán faci¬litadas por la Redacción a quien las solicite por escrito.Los artículos firmados no expresan forzosamente la opi¬nión de la Unesco o de la Redacción de la revista. Encambio, los títulos y los pies de fotos son de la incum¬bencia exclusiva de esta última.

Redacción y Administración :

Unesco, Place de Fontenoy, 75700 París

Jefe de Redacción :

René Caloz

Subjefe de Redacción :

Olga Rodel

Redactores Principales :

Español : Francisco Fernández-SantosFrancés :

Inglés :Ruso : Victor Goliachkov

Alemán : Werner. Merkli (Berna)Arabe : Abdel Moneírn El Sawi (El Cairo)

Japonés : Kazuo Akao (Tokio)Italiano : Maria Remiddi (Roma)

Hindi : H. L. Sharma (Delhi)Tamul : M. Mohammed Mustafa (Madras)'Hebreo : Alexander Broido (Tel Aviv)

Persa : Fereydun Ardalan (Teherán)Portugués : Benedicto Silva (Rio de Janeiro)Neerlandés : Paul Morrén (Amberes)Turco : Mefra Arkin (Estambul)

Urdu : Hakim Mohammed Said (Karachi)

Redactores :

Español : Jorge Enrique AdoumFrancés : Philippe OuannèsInglés : Roy Malkin

Documentación : Christiane Boucher

Composición gráfica : Robert Jacquemin

Páginas

22

29

31

AMERICA LATINA :

LARGO VIAJE HACIA SI MISMA

por Leopoldo Zea

8 COMO EL NEGRO SE VOLVIÓ CRIOLLO

por Alejo Carpentier

13 UNA EXPERIENCIA ÚNICA :

LA CULTURA AFROBRASILEÑA

por Gilberto Freyre

18 EL PAIS DONDE SE MEZCLARON HOMBRES Y DIOSES

por Jorge Amado

21 AZTECAS Y MEXICANOS

Drama y laberinto de un mestizajepor Octavio Paz

LA PASIÓN SEGÚN LOS YAQUI

Fotos

LA MUERTE ES UNA FIESTA

Fotos

DE LA SELVA VENEZOLANA A LA VANGUARDIA ARTÍSTICA

por Arturo Uslar-Pietri

35-

38 PAGINAS EN COLOR

39 LAS CULTURAS ANDINAS, DE AYER A HOYpor Pablo Macera

40 UNA ARTESANÍA ANTIQUÍSIMA Y ACTUAL

Fotos

46 LOS OLVIDADOS DE LOS ANDES

por Jorge Enrique Adoum

51 PARAGUAY : UNA ISLA RODEADA DE TIERRA

por Augusto Roa Bastos

55 LO QUE ESPAÑA NOS LEGO

por Roberto Fernández Retamar

56 UN CONTINENTE BARROCOFotos

60 EL TANGO, RUMOR DE BUENOS AIRESpor César Fernández Moreno

63 EL CASTELLANO EN AMERICA

por Marcos A. Morínigo

64 VICTORIA OCAMPO Y LA COOPERACIÓN INTELECTUAL

por Jacques Rigaud

67 LA UNESCO Y EL PATRIMONIO CULTURAL LATINOAMERICANO

70 LATITUDES Y LONGITUDES

2 TESOROS DEL ARTE MUNDIAL

EL SALVADOR : Cabeza de maya

La correspondencia debe dirigirseal Director de la revista.

Nuestra portada

En su vasto ámbito geográfico América Latinaes, culturalmente, múltiple y una. La historiaha ido operando en ella, desde elDescubrimiento y la Conquista, un complejoy rico proceso de interacción cultural en el

que la cultura española y portuguesaconquistadora, las culturas indígenasautóctonas y la negra importada, fundidas envigorosa pero a veces contradictoriacompenetración, nos ofrecen el rostrocambiante pero único de Iberoamérica.Escrutar ese rostro cultural del continente es

lo que se propone este número de El Correo

de la Unesco. En nuestra portada, una jovenmulata brasileña destaca sobre la trama

ingenua y abigarrada de una de esas pinturassobre corteza de árbol en que son maestroslos indios mexicanos. Respecto del elementocultural hispánico, véase la portada posterior.

Page 4: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

¿Qué es, culturalmente, América Latina? ¿Cuáles son los diversos factores quecomponen su cultura y a través de qué proceso histórico sa han fundido,

o se han yuxtapuesto, hasta constituir este conglomerado de pueblos al mismotiempo tan diverso y tan uno? He aquí las cuestiones esenciales a las que trata de

responder, por intermedio de algunos de los más eminentes escritores ypensadores de Iberoamérica, este número de El Correo de la Unesco.

A la cultura de este continente que Bolívar calificara de "extraordinario ycomplicado" dedica desde hace tiempo la Unesco señalada atención. Así, en 1967

emprendió un vasto programa de estudios de las culturas latinoamericanas,en sus más variadas expresiones. En el marco del mismo, y bajo el título general de

"América Latina en su cultura", se han publicado ya varios volúmenes(véase el recuadro de la pág. 70).

Por su parte. El Correo de la Unesco ha dedicado con anterioridad al continenteiberoamericano dos números : América Latina. 150 años de Independencia, en junio

de 1961, y América Latina. Esplendor de una cultura múltiple, en marzo de 1972.

LATINA

AMERICAlargo viaje

hacia sí misma

por Leopoldo Zea

NUESTRO caso, diría el LibertadorSimón Bolívar (1783-1830). es el

más extraordinario y complicado :"No somos europeos, no somos indios,sino una especie medía entre los aborí¬genes y los españoles." Tal es lo extraor¬dinario y complicado de esta América ysu cultura. Cultura surgida de la unión,pero no asimilación, de la cultura propiade esos hombres. Cultura de expresionesencontradas que, por serlo, lejos de mes¬tizarse, de asimilarse, se han yuxtapuesto.Yuxtaposición de lo supuestamente supe¬rior sobre lo que considera inferior.

LEOPOLDO ZEA, ensayista y filósofo mexicano, esprofesor de filosofía de la historia y de historia delas ideas en América de la Universidad Nacional Autó¬

noma de México (UNAM). Dirige además el Centro deEstudios Latinoamericanos de la Facultad de Filosofía

y Letras de dicha Universidad. Gran parte de su obrade escritor gira en torno al análisis y a la historia deAmérica Latina como cultura, tema en el que se lereconoce mundialmente como una de las primerasautoridades. Entre sus libros, algunos de ellos tradu¬cidos a varios idiomas, figuran América en la historia(México, 1957, Revista de Occidente, Madrid, 1970),Dependencia y liberación en América Latina IMortiz,México, 1975), América como conciencia (UNAM,México, 1975), El pensamiento latinoamericano (SeixBarrai, Barcelona, 1976) y Latinoamérica, tercer mun¬do (México, 1977).

La misma relación que guardarán entresí europeos y americanos, relación deseñores y siervos, conquistadores y con¬quistados, colonizadores y colonizados.Relación que en el mestizo, tanto culturalcomo racialmente, se transforma en con¬flicto interno. Conflicto del hombre que

lleva en su sangre y cultura al dominadory al bastardo. Bastardía que le viene alamericano no sólo por la sangre sinotambién por la cultura, o simplemente porhaber nacido en América y no en Europa.Ya que, frente al peninsular o metropoli¬tano, lo mismo da el criollo, hijo legítimodel colonizador, que el mestizo de india yeuropeo. Ante la mirada europea, elnacido en esta América se sabe el subor¬

dinado ; en cambio, ante la mirada indí¬gena, será el explotador, al servicio delcolonizador.

"Americanos por nacimiento y Europeospor derechos Bolívar noshallamos en el conflicto de disputar a losnaturales los títulos de posesión y demantenernos en un país que : nos vionacer, contra la oposición de los invaso¬res." "Nacidos todos del seno de una

misma Madre, nuestros padres diferentes

en origen y en sangre son extranjeros, ytodos difieren visiblemente en la epider¬mis : esta desemejanza trae un reato de lamayor trascendencia."

Tal es el latinoamericano como expre¬

sión y fruto de la yuxtaposición impuestadentro de la que se sentirá incómodo ;incómodo lo mismo en relación con el

gentío paterno que en relación con elgentío materno. Rechazado por uno, seavergonzará de ser parte del otro. Es elhombre que empieza por aceptar los crite¬rios del colonizador sobre la cultura mater¬

na y americana y, de acuerdo con ellos,la inferioridad de su mestizaje, que leimpide ser parte legítima de la culturapaterna. Su mestizaje, lejos de ser algopositivo, será la fuente de toda su ambi¬güedad y ambivalencia. Ambigüedad yambivalencia que se mostrarán a lo largode la historia de la cultura de este hombre.

Se le verá nadar o flotar entre la realidad

de que es expresión y realidades extrañasde las que quisiera ser parte.

El pensador brasileño Darcy Ribeiro haresumido esta singular situación diciendoque el mestizo de blanco e india, "identi-wficándose con el padre, se volvía el cas-r

Page 5: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

¿Mestizaje cultural? ¿yuxtaposición de culturas?: en este dilemapuede cifrarse el largo camino de la conciencia latinoamericanahacia su identidad cultural. Los hispanoamericanos, decía Bolívar,"somos una especie media entre los aborígenes y los españoles".A partir de la conquista, durante la Colonia y en las Repúblicasindependientes, las dos culturas del conquistador español, ladel indígena conquistado y explotado se yuxtaponen, se¡nterpenetran y se contradicen a la vez. El resultado es, pese atodo, la progresiva afirmación de una personalidad cultural

hispanoamericana, sobremanera compleja y, a veces,contradictoria pero real y vigorosa, tal como se nos muestra enlas muchas y admirables obras de arte de que ha ido sembrandotodo el continente. Aun asi, todavía hoy el indio originario vive aveces al lado de esa cultura sin fundirse verdaderamente en ella,yuxtaponiéndose a ella. Y, sin embargo, él ha contribuidopoderosamente a crearla. En la foto, indias bolivianas esperancon ancestral paciencia junto a los muros de la catedral de SanFrancisco, en La Paz, ejemplo de una arquitectura mestiza.

Page 6: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Las tres culturas

tígador del gentío materno. Como entre' tanto, a pesar de esta adhesión, jamásllegaba a ser reconocido... como igual,sufría toda la carga del prejuicio prove¬niente de la apreciación señorial de lacomunidad nativa como inferior". Es

decir, era al mismo tiempo siervo de ungentío y castigador servicial del otro. Origi¬nándose el complejo de inferioridad o debastardía que, una y otra vez, impedirá laasunción cultural de su encontrado modo

de ser, la definición de su identidad.

Complejo de bastardía expreso en elafán inútil por ser distinto de lo que sees ; por ser otro, renunciando a lo que sees por sí mismo. Viendo lo propio comoinferior a aquello que le es extraño y deque sólo se considera eco y sombra.

Es el afán por sobreponer al pasado pro¬pio, por indigno, un modelo extraño peroque se considera digno el que dará origena una, también, extraordinaria y compli¬cada filosofía de la historia que vendrá aser como la antípoda de la filosofía de lahistoria de Europa. Una filosofía en la quese hará expresa la yuxtaposición de cultu¬ras y no la asimilación de unas con lasotras. Pero será a su vez la conciencia de

esta yuxtaposición en la inteligencia lati¬noamericana la que dará origen a la inelu¬dible pero ya consciente asimilación cul¬tural de la que se deriva el perfil o iden¬tidad de la cultura latinoamericana pro¬piamente dicha. Esto es, la cultura que hasido realizada, pese a todo, por el hombreque, en esta nuestra América, ha hechoalgo más que sobreponer o yuxtaponer,que ha tenido que asimilar. Una cultura,que diría Bolívar, igualmente extraordina¬ria y complicada.

Ahora bien, el origen de esta extraor¬dinaria complicación cultural está, preci¬samente, en el pasado colonial que fueraimpuesto a esta América. ËI pasado que,quiérase o no, es parte de la realidad deesta América y con el cual habrá de con¬tarse si ha de lograrse el anhelado cam¬bio. El cambio, precisamente, de la rela¬ción de dependencia que ha originadotoda la complicación.

El origen de todo está en la forma dedominación impuesta por la colonizacióneuropea a esta América. Forma de domi¬nación que imposibilitará el mestizajeasuntivo que fuera propio de la culturaeuropea. La cultura europea es una culturamestiza. Cultura asuntiva de las expresio¬nes culturales de los múltiples pueblos yrazas que, empujándose las unas a lasotras, se acrisolaron a lo largo de las di¬versas regiones que formaban Europa.Acrisolamiento que permitió el surgimientode culturas síntesis, como la greco-roma¬na, a su vez asumida por la cristiana hastaculminar en la cultura europea occidental.

Será esta cultura, europea occidental,la que al expandirse a partir del siglo XVI

por América y el resto del mundo, trataráahora de impedir el mestizaje asuntivo.El imperialismo que surge no será ya elimperialismo greco-romano que asimilabalas culturas con las que se encontraba, aligual que sus panteones se asimilaron losdioses de otros pueblos. Se trata ahora deuna cultura que se considera superior, queno puede asimilar otras culturas, ni serasimilada. Tal será la cultura cristiana quetraen consigo los conquistadores y colo¬nizadores iberos del siglo XVI, dispuesta,sí, a incorporar a los hombres de las tie¬rras descubiertas, pero siempre que éstos,a su vez, renuncien a sus propias expre¬siones culturales. Sus evangelizadores es¬tán dispuestos a asimilar a esos entes uhomúnculos, que diría Juan Ginés deSepúlveda, en su polémica con Bartoloméde las Casas, si estos abandonan, parasiempre, un pasado que parece ser másobra de demonio que de Dios. Esto es,si aceptan ser conducidos, libres de todaculpa, desnudos de una falsa cultura ehistoria, hacia la cultura que Dios mismoha creado. Así, sobre las demoniacas cul¬turas indígenas se sobrepondrá la culturadel conquistador y el colonizador. Sobrelos antiguos teocalis se alzarán temploscristianos. Y sobre los viejos ídolos, lacruz, la virgen o un santo cristiano.

Lo mismo sucederá con la segunda olaconquistadora y colonizadora en el sigloXVII, ahora a cargo de la Europa llamadaoccidental. Estos hombres tampoco quie¬ren saber de asimilación alguna, aunquesu cultura sea el fruto de una extraordi¬

naria asimilación. La preocupación de estoshombres será también impositiva : asimilarpero sin ser asimilados. Su misión es ahorallevar la civilización a la barbarie. Y expre¬sión de la barbarie serán no sólo los abo¬

rígenes y mestizos, sino los mismos euro¬peos que hicieron posible el mestizaje ycuya cultura será vista como anacrónicaen relación con la cultura occidental que

ahora se expande. Nada querrán saber,los portadores de la cultura occidental, demestizaje.

Mestizar es reducir, contaminar. Por

ello, culturas supuestamente inferiores,como las que esta colonización encuentraen Norteamérica, serán simplemente barri¬das y sus hombres exterminados o acorra¬lados. Y lo que no puede ser barrido, porsu volumen y densidad, como en la otraAmérica, Asia y África, será simplementepuesto abajo, en lugar que ' imposibilitecontaminación o asimilación alguna.

Así, en lo que se refiere a la relación quepudiera guardar esta nuestra América conla cultura europea occidental, Bolívar lohace expreso cuando dice : "Tengamospresente que nuestro pueblo no es elEuropeo, ni el Americano del Norte, quemás bien es un compuesto de Africa y deAmérica que una emanación de Europa ;

pues que hasta la España misma deja deser Europa por su sangre africana, por susinstituciones y por su carácter. Es impo¬sible asignar con propiedad a qué familiahumana pertenecemos." Y esto es imposi¬ble porque no se realiza asimilación algu¬na, sino la yuxtaposición de las diversasformas de cultura a que dio origen la colo¬nización ibera. Colonización que ahoraserá vista como algo inferior cultural ypolíticamente, en relación con la coloniza¬ción llevada a cabo por la Europa occiden¬tal. Colonización cuya expresión la handado los Estados Unidos de Norteamérica.

Sin embargo y pese a todo, la realidadque es propia de esta América se irá yaexpresando en los intentos de yuxtapo¬sición o imitación servil de los modelos

impuestos. En los templos cristianos,levantados sobre los teocalis, el demonio

que se intentaba soterrar se mostrará en Jainterpretación que darán los artesanosindígenas a las órdenes de conquistadoresy evangelizadores.

Así, frente a las cruces, vírgenes y san¬tos cristianos, los indígenas danzarán yfestejarán como antes festejaban a susderrocados dioses. En el arte barroco queadorna aún las iglesias levantadas se hacever los rostros, y el gusto por el color desus artistas intérpretes nativos. No hayaquí un panteón para los dioses mayas,aztecas e incas y otros muchos más ; sinembargo, éstos, de una u otra forma, sehacen expresos y se mezclan en diversasformas de la cultura colonial.

En igual forma la barbarie seguirá expre¬sándose en quienes se consideren susvencedores. Por ello el argentino JuanBautista Alberdi verá en su opositor Sar¬miento a otro bárbaro en la forma como

lucha contra la barbarie. El demonio y labarbarie, supuestamente enterrados,dejarán ver sus rostros a lo largo de estaextraordinaria y complicada historia ycultura latinoamericana. El mestizaje serealiza, pese a la pretensión por evitarlode sus opositores.

1810 es el año en que se inicia la gestade liberación de la América Latina, comoresultado de la inutilidad de los esfuerzos

que los americanos harán por mantenersefieles al pasado histórico y cultural ibero.A un pasado que estos hombres consi¬deran como propio, pretensión que serárechazada por la arrogancia e intoleranciaibera; en especial la hispana, que se oponea toda pretensión política y cultural queimplique el reconocimiento de la reclamadaigualdad de americanos y europeos.

Así las liberales Cortes de Cádiz esca¬

motean y anulan toda demanda en estesentido. En la lucha contra la invasión

napoleónica de la Península se rechaza lacolaboración americana, aunque tal rechazoimplique la entrega misma de las coloniasal invasor francés.

Page 7: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

A punto de ser vencidos los españolespor las tropas napoleónicas, se envíanexpediciones de castigo a México, Vene¬zuela y otros lugares de Hispanoamérica,considerando que están en rebeldía alenarbolar, como propios, los mismosderechos con los que se han enfrentadolas Cabezas de los antiguos reinos espa¬ñoles a José Bonaparte.

Para la Metrópoli todos los nacidos enAmérica son considerados inferiores, racialy culturalmente. Los hombres de estas

tierras son vistos, no como hijos de laepopeya española de la conquista, sinocomo bastardos de la misma y sin derechoalguno. La yuxtaposición impuesta seráférrea, los americanos no podran romperla,tan solo eludirla. Y eludirla implicaráapartarse de España, de una parte de símismo, de una parte del propio ser his¬tórico y cultural. Se tendrá que renunciara una cultura que sólo acepta formarhombres para la servidumbre.

Será Simón Bolívar quien tambiénexprese el sentimiento latinoamericanoante el rechazo : "Los americanos en el

sistema español... no ocupanotro lugar en la sociedad que el de siervospara el trabajo, y cuando más el de simplesconsumidores". La cultura al alcance de

los hombres de esta América no es sino

aquella que eduque para la servidumbre,la que haga de los americanos eficacesservidores. Por ello, estos hombres al ser1

rechazados, en sus demandas de igualdad,por los españoles, se verán obligados aimprovisarlo todo. Así, a una cultura dedominación seguirá una cultura de impro

visación. Los americanos, prosigue Bolívar,sin los conocimientos, sin la práctica paraello, han tenido que improvisarse como"legisladores, magistrados, administradoresdel erario, diplomáticos, generales y cuantasautoridades supremas y subalternas for¬maban la jerarquía de un Estado organizadocon regularidad".

Cultura de improvisación, necesidadde hacer algo para lo cual nunca se fueeducado y que, menos aún ha sido prac¬ticado. Ahora bien, dispuestos a improvi¬sar, los americanos sólo tenían dos cami¬

nos, caminos encontrados, conflictivos.Los caminos que darán origen a la largalucha intestina que azotará la totalidad deHispanoamérica al emanciparse del colo¬nialismo hispano.

Un camino era el de conservar el mismo

orden político y cultural que había permi¬tido a España mantener su dominio a lolargo de tres siglos, pero ahora al serviciode quienes se consideraban sus herederos,los criollos, los barones de las tierras quehabían gobernado en nombre de la Metró¬poli, pero que ahora lo harían en nombrepropio.

Pero culturalmente cabía apropiarse,no sólo el pasado colonial, sino el mismopasado hispano. La cultura como la his¬toria españolas eran también cultura ehistoria de los españoles en América. Asílo entenderá Andrés Bello (1781-1865) quehacía ver cómo la reacción emancipadorade los hispanoamericanos era una reacciónpropiamente española. Eran los mismoshombres, tanto los que se habían enfren¬tado a las tropas francesas en Zaragoza

"Sobre los antiguos teocalis se alzarán temploscristianos", afirma Leopoldo Zea resumiendoplásticamente la yuxtaposición cultural que se operaen los albores de la Conquista. En la foto, la Plaza delas Tres Culturas, en Ciudad de México : sobre los

restos de un teocali indio, una iglesia de estilocolonial español. Al fondo, un edificio modernorepresenta a la cultura de nuestra era tecnológica.

como los que se habían enfrentado a lastropas españolas de la Metrópoli en Car¬tagena. Las tropas metropolitanas espa¬ñolas habían sido vencidas en Boyacá,Ayacucho y otros lugares de América, portropas insurrectas igualmente españolas."Los capitanes y las legiones veteranas dela Iberia trasatlántica fueron vencidos yhumillados Bello por los caudillosy los ejércitos improvisados de otra Iberiajoven que, adjurando el nombre, conser¬vaba el aliento indomable de la antiguadefensa de los hogares".

Mantener viva la cultura hispana, apro¬piársela como otro Prometeo, sería man¬tener vivo el propio ser de esta América.España, a pesar suyo, había dejado expre¬siones de su cultura que los americanospodrían hacer suyas. Nada entoncestendría que improvisarse, sólo habría queasimilar, aprender y practicar. La herenciacultural española era también americana.Tal sería la preocupación del proyectoconservador.

Frente a este proyecto estarán quienesnada querrán ya saber de un pasado y unacultura para la servidumbre. Servidumbreante la Metrópoli, o servidumbre antequienes se presentaban en América comosus legítimos herederos. Si era menesterimprovisar, habría entonces que improvisaralgo distinto. Si era necesario empezar aalcanzar un conocimiento y una experiencia,éstos podrían ser buscados en otras expe¬riencias y otras culturas. El mismo Bolívarpediría la total ruptura con un orden polí¬tico, social y cultural dentro del cual losamericanos sólo podían tener el papel desiervos.

No teniendo nada propio, los americanosbien podían hacer suyos modelos y expe¬riencias culturales más eficaces. Y quepodían ser más eficaces que las expe¬riencias de los hombres que habían dadoorigen a las naciones que ahora señalabanla ruta a seguir por el resto del mundo.Las mismas naciones que habían marginadoal mundo y a la cultura iberos, dispután¬doles sus conquistas. Las naciones líderesen la marcha de la civilización.

Habría entonces que borrar el largo yequivocado pasado colonial. Habría quepartir del cero de la propia experiencia,apropiándose la del modelo extraño. Esteserá el proyecto civilizador. Proyecto queverá su pasado más propio, el indígena,hispano y mestizo, como expresión de labarbarie. Barbarie que había de ser domi¬nada por la civilización. (Civilización obarbarie!, grita el argentino Domingo F.Sarmiento (1811-1888) | Progreso o retro¬ceso!, sostiene el mexicano José María

Luís Mofa" (1794-1850) |Catolicismo orepublicanismo I, dice el chileno FranciscoBilbao (1823-1865).

Y así como los conquistadores y colo¬nizadores iberos trataron de soterrar las

SIGUE EN LA PAG.

Page 8: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

COMO EL NEGRO SE VOLVIÓ

por

Alejo Carpentier

La huella de África en todo un

EN 1441, diez nativos del norte de

Guinea son llevados a Portugal,como "presente" hecho al rey Enri¬

que el Navegante por un comerciante yviajero, Antam Gonçalvez, quien los traíaa título de mera curiosodad exótica, como

hubiese podido traer papagayos o plantasraras de! Trópico. Pero muy pronto (de¬masiado pronto! entendieron los hom¬bres de Europa que esas "rarezas tropi¬cales" podrían constituirse en formidablesfuerzas de trabajo y ya, tres años mástarde, eran doscientos treinta y cinco afri¬canos, entre hombres, mujeres y niños,los que fueron llevados por la fuerza aPortugal la salvación de sus almas,hasta entonces irremisiblemente perdidas",nos aclara un piadoso cronista.

Y así fue como muy pronto, en lospalacios y haciendas de ricos señores,aparecieron, para realizar faenas domés¬ticas y agrícolas, esclavos negros ennúmero cada vez mayor. Se había instau¬rado ya, por lo tanto, el abominable nego¬cio de la trata que ahora cobraría propor¬ciones pavorosas con el descubrimientode América. Y ese negocio quedaríaoficializado, por así decirlo, con la auto¬rización dada por Carlos Quinto, en 1518,para que cuatro mil esclavos africanos

fuesen llevados a la isla Española (SantoDomingo), Cuba, Jamaica y Puerto Rico.

Pero antes de esa fecha la costumbre

de utilizar esclavos negros se había gene¬ralizado en España, a imitación de Portugal(y Cervantes nos hablará de ello, cien añosmás tarde, en sus Novelas Ejemplares).Y, por ello, muchos negros pasaron alNuevo Continente las Antillas, cuyacolonización era ya un hecho con ante¬rioridad a los años en que la trata quedaraestablecida como negocio de gran rendi¬miento.

En la inestimable fuente de documen¬

tación demográfica que constituye el"Catálogo de Pasajeros a Indias" de laCasa de la Contratación de Sevilla, encuyas páginas quedaron los nombres delos primeros solicitantes a trasladarse a"las tierras recién descubiertas del otro

lado de la Mar Occeana" (sic), se puedenver los siguientes asientos : 5 de febrerode 1510. Francisco, de color negro", (Esel primero de su raza, en fecha, y se ins¬cribe con el número 38). "27 de febrero

ALEJO CARPENTIER, cubano, es uno de los prin¬cipales novelistas de lengua española. Entre susnovelas, traducidas a numerosos idiomas, cabe seña¬lar El reino de este mundo. Los pasos perdidos. Elacoso. El Siglo de las Luces, Concierto barroco y Re¬curso del método. Ensayista y musicólogo, ha escritoun volumen sobre La música en Cuba. Fue Durantevarios años director de la Editora Nacional de La

Habana y profesor de historia de la música del Con¬servatorio de dicha ciudad. Actualmente es Ministro

Consejero para Asuntos Culturales de la Embajada deCuba en Francia.

8

Page 9: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

CRIOLLO

continente

de 1512. Rodrigo de Ovando, negro horro"(es decir : liberto). "Abril de 1512. Pedro yJorge, esclavos" (viajan con sus amos).Agosto de 1512. Cristina, de color negro,y su hija Inés", etc. etc. Y siguen otrosmuchos, esclavos, "ahorrados", "loros"(cuando son de tez particularmente obs¬cura), de "color de pera cocha" (cocida)que son los mulatos, sin olvidar, por lopintoresco del caso, un Juan Gallego,negro, natural de Pontevedra, que embarca,no se nos dice si liberto o no, el 10 denoviembre de 1517...

Y ahora, con la instauración en firme de

la trata española como portu¬guesa el número de negros pasados aAmérica crecerá en proporción geométrica,constituyéndose en uno de los elementosétnicos de base de una población que,formada por europeos tempranamenteunidos a mujeres indias, enriquecida ahorapor la aportación africana, habría deengendrar la clase de los criollos, deter¬minante para cuanto se refiera al estudio,interpretación, entendimiento y visióngeneral de la historia de América.

La palabra "criollo" aparece por vezprimera en un texto geográfico de JuanLópez de Velazco, publicado en Méxicoen 1571-74 : "Los españoles que pasan aaquellas partes (léase : América) y estánen ellas mucho tiempo, con la mutacióndel cielo y del temperamento de las regio¬nes no dejan de recibir alguna diferenciaen el color y la calidad de sus personas ;pero los que nacen en ellas se llamancriollos, y aunque en todo son tenidos yhabidos por españoles, conocidamentesalen ya diferenciados en el color y eltamaño". En 1608, en un poema escrito enCuba, Silvestre de Balboa califica de

criollo a un negro esclavo. Y en 1617 nosdice el Inca Garcilaso de la Vega : "Criollosllaman ( los españoles a los nacidos en elNuevo Mundo, así sean de padres espa¬ñoles o africanos".

Durante un tiempo, barruntándose elpeligro que la palabra nueva entrañaba,trató la Corona de España de prohibir suuso en cualquier documento, memoria oescrito legal. Pero la palabra se siguióusando corrientemente para designar unaraza de hombres surgida en América yque estaba cobrando características pro¬pias, según las regiones y la proporciónde ingredientes que hubiesen intervenidoen su formación. En las Antillas, y en lascostas de México, Colombia, Venezuelay Brasil cabos hacia la cuenca

del Misisipí esa raza sería poderosamentemarcada por la presencia africana, dándoseel caso de que en ciertas islas del Caribela población negra fuese más numerosa!que la oriunda de Europa.

Hacia 1920, París1 conoce algo queCocteau no vacilaría en calificar, alarmado,de "crisis negra". Picasso ha pintado ya

Ya en las carabelas del Descubrimiento llegaron a América los primeros esclavos africanosque/junto con los conquistadores ibéricos, iban a crear en el Caribe, las Antillas, Brasil yotras regiones del continente un nuevo tipo humano y una nueva cultura, enriquecidos porel aporte de los dos mundos (foto de la izquierda). Pero el "arte negro" de América Latinaestá muy alejado de la tradición puramente africana, aunque conserve aún un evidenteaire de familia. Ejemplo, la pintura del cubano Wifredo Lam, pintor mestizo porexcelencia, de cuyo célebre cuadro La jungla tanto escándalo causó en 1943 enNueva York se ha dicho que constituye la primera declaración plástica de un TercerMundo que se percataba ya de la necesidad de poner en común todas las culturas y elanuncio profético de ese despertar en el ámbito mundial. En la pintura aquí reproducida.Presencia eterna, que data de 1944, Lam retoma algunos de los elementos fundamentalesde La jungla.

Foto © André Morain, París. Colección privada, Estados Unidos

en 1907 Las doncellas de Aviñón, conevidente influencia de ciertas obras de

arte africanas que habían suscitado suentusiasmo, así como el de Matisse,Derain y otros que, como el poeta Apolli¬naire, se dieron a coleccionar piezas deaquello que empezaron a llamar "artenegro". Las galerías de pintura rebosande esculturas, tallas, máscaras, objetosprocedentes del continente tan mal cono¬cido hasta entonces, tanto en su historia

como en sus voliciones creadoras. Porquecalificar aquello, en su conjunto, de "artenegro" resultaba tan absurdo como cali¬ficar de "arte blanco" lo que pudiesereunirse en un museo delirante donde

unas Venus griegas anduviesen revueltascon vírgenes catalanas del siglo XIII,mármoles renacentistas, gárgolas medie:vales y móviles de Calder.

: Además, tras de la plástica, ha venidotoda una tradición oral literatura

hablada, recitada, salmodiada en quelo mágico y lo religioso alternan con relatosmás o menos épicos, la leyenda cosmogó¬nica, la fábula de animales, el apólogo, el

proverbio, la simple narración destinadaal entretenimiento o la edificación de los

oyentes un corpus literario, reunidoaquí, allá, por exploradores y misioneros,y que ahora se recoge en libros de "litera¬tura negra" (negra, como siempre, sindistingos de raza ni grado de evolucióncultural) cuyo logro mayor es la prontofamosa Antología de Biaise Cendrars,traducida a veinte idiomas y que aunpuede hallarse en todas las librerías delmundo.

Pero, puesto que ya hay un "arte negro"y una "literatura negra", se irá ahora enbusca de una "música negra". Y ésta nose hace esperar. El jazz hace su entradaarrolladura en Europa al terminarse laPrimera Guerra Mundial. Stravinsky seentusiasma con esa novedad, como Picassose había entusiasmado antaño con las

máscaras del Dahomey, y compone unaPiano Rag Music y un Rag-Time para\once instrumentos. Obra clave del espíritude la época es el ballet La Creación del

Mundo de Darius Milhaud (1923), cuya wmúsica se inspira en los ritmos y giros del t

Page 10: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Pintura "espontáneay vodú

a

, ¡azz. El argumento, de Cendrars, se basaen una vieja leyenda cosmogónica africana.Y, como hay que apropiar las decoracionesy los trajes al carácter de la obra, FernandLéger se aplica a traer a su mundo lasformas que le aportan ciertas plásticas delAfrica.

Pero ahí empezaba a producirse ungrave malentendido, explicación de muchoserrores futuros. Porque no parecían darsecuenta, los entusiastas europeos del jazz,de que los dos primeros grandes éxitos deesa música en Europa se titulaban Alexan¬der Rag-Time Band y Saint Louis Bluesy de que este último era obra de un músiconegro de la Nueva Orleans, ChristopherHandy, en tanto que el primero era debidoa la graciosa inventiva de un compositorque de negro nada tenía : Irving Berlin. Yera porque el jazz, resultante de una largaelaboración, muy poco tenía que ver yacon el Africa. Era un producto criollo,auténticamente criollo, cuyos orígeneseran debidos a un ya remoto mestizaje

de un tipo que empezó aconocerse, por vez primera, en América.

Como bien dice Deborah Morgan (Mu¬sique en Jeu, febrero de 1977), "la historiadel jazz comienza en 1619, en el momentoen que una fragata holandesa desembarcaen Jamestown (Virginia) los primerosnegros destinados a trabajar en Américadel Norte. En efecto, no es el jazz ungénero musical nacido en los alrededoresde 1900, en la Nueva Orleans, como lo

pretende una leyenda tenaz, sino que esel resultado de la confrontación, durante

tres siglos, de dos comunidades : una,originaria del Africa, otra, de Europa".

Curioso es observar que la músicapopular cubana viene a adquirir sus rasgospropios hacia la misma época (inicios delsiglo XVII), aunque, desde luego, conmuy distintas características. Y, a pesarde parecerse bastante poco al jazz, lamúsica cubana invade el mundo hacia

1930, en tanto que la música brasileñaempieza a ser conocida fuera de susfronteras en vísperas de la Segunda GuerraMundial. Y es de notar que así como eljazz difiere totalmente de las músicasafricanas que conocemos, tampoco separecen a ellas las músicas cubanas ybrasileñas que hoy podemos escuchar entodas partes, aunque el negro haya con¬tribuido poderosamente, en un lugar o enotro, a su formación y desarrollo.

Pero toda similitud con lo que suena enel continente negro ha desaparecido. Elcha-cha-cha o el mambo de Cuba, la

plena dominicana, la biguine martiniqueña,el calypso o las steel-band de Barbados yTrinidad, la samba o la bossa-nova delBrasil, como tampoco el boogie-woogie y,menos aún el free jazz de Norteamérica,tienen ya nada que ver con los documentosfolklóricos musicales que nos vienen del

Africa en grabaciones eruditas o en fide¬dignas recopilaciones etnográficas.

Y es que, transplantado, el negro delAfrica se ha vuelto otra cosa. Como jus¬tamente apunta Franz Fanon, buen cono¬cedor de la materia : "Tanta diferencia hayentre un haitiano y un dakariano comoentre un brasileño y un madrileño".

Pero ahora hemos de considerar un

fenómeno que se manifiesta en las activi¬dades creadoras del africano transplantadoa América (Norte o Sur) : al ser arrancado

al suelo nativo, parece perder todo sentidoplástico. Es decir que pierde, como escultor,como tallador, como pintor, lo que ahorahabrá de ganar como músico. Se opera,en él, como una transferencia de energías.Y aunque hoy podamos admirar una queotra estatuilla, algún dibujo, salidos de susmanos en Cuba (las firmas o símbolos

gráficos de los grupos abakuá), en Haití(los vevés trazados al pie de los altares delrito vodú), en el Brasil (las figurillas de

hierro forjado de los candomblés), nadade esto evoca la fuerza, la originalidad, lamaestría técnica de todo un arte de

jado atrás y como olvidado en una lejaníacada vez más imprecisa. En cambio, losmás grandes compositores de este siglo,tanto en Europa como en América, puedeninspirarse, para escribir obras de altosvuelos, en lo que el negro elabora, conasombroso poder de invención, en lasmás distintas comarcas del llamado Nuevo

Continente.

Esta pérdida evidente del sentido plás¬tico primigenio se explica por el hecho deque la práctica de la escultura, de la talla

de la pintura ornamental habríaexigido un tiempo destinado a trabajosque poco hubiesen interesado al amoesclavista. No iba el propietario a ofrecertalleres y herramientas a hombres emplea¬dos en acrecer sus riquezas con su manode obra, para que éstos se entregaran alplacer de esculpir figuras consideradas

10

Page 11: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

En Haití, como en otras islas de las Antillas y en Venezuela, ha surgido en los últimosdecenios una auténtica escuela popular de pintores "espontáneos" o "primitivos", negroso mulatos (izquierda). En el mismo Haití se conservan aun ritos ancestrales provenientesde Africa, como el vodú, practicado sobre todo en las zonas rurales.' El vodú fueintroducido en la isla por los esclavos llevados por los franceses entre los siglos XVII yXIX; a los rasgos típicos de la primigenia religión dahomeyana se añadieron ingredientesde creencias locales y elementos de la liturgia v de los sacramentos católicos.

Foto Eve Arnold © Magnum Photos Inc.

como bárbaros ídolos, conservadores de

viejas creencias ancestrales, cuyo recuerdodebía extirparse del recuerdo de los some¬tidos a la tralla de los mayorales másen una época en que el "hombre civilizado"de Occidente no tenía la menor estimación

por aquello que más tarde valorizaríaaltamente bajo el nombre de folklore.

No. Los intentos de creación plásticadel negro eran tenidos por obras delDemonio. La música, en cambio, nomolestaba mayormente, y los hacendadosde Cuba, por ejemplo, permitían a susesclavos que de tarde en tarde hiciesen

sonar sus tambores y se entregaran a ladanza, porque con ello demostraban quegozaban de buena salud y que su "carnede ébano" (sic) estaba en condiciones de

dar un buen rendimiento.

Y, entretanto, el esclavo oía lo que entorno suyo sonaba. Durante el siglo XVI,primero de su transplantación en América,se asimiló el romance español, los cantos

venidos de Portugal y hasta la contradanzafrancesa. Conoció nuevos instrumentos

musicales, desconocidos en su tierra deorigen, y se acostumbró a tocarlos. Ycuando alcanzaba a ser ahorrado (o liber¬

tado) por un amo más humano que otrosespera del término de una esclavitud

que fue abolida escalonadamente sobre elsuelo de América se consagró a menudoa la profesión de músico, mezclándose alblanco en virtud de una cierta hermandad

de oficio. Como habría de observarlo el

cubano José Antonio Saco en 1831 : "La

música goza de la prerrogativa de mezclarnegros y blancos, pues en las orquestasvemos confusamente mezclados a los

blancos, pardos y morenos."

Ya muy alejado de toda raíz africana, elnegro de América Latina se hizo un ele¬

mento básico, constitutivo, como ya diji¬mos igual que el indio de ese criolloque habría de marcar los rumbos históricos

de todo un continente, con sus aspiraciones,

luchas y rebeldías. Por lo tanto, al incor¬porarse gradualmente dentro de la sociedadde sus nuevas patrias que le ocurriócon un considerable retraso debido a la

esclavitud y, en muchos lugares, a unalamentable situación de hombre discrimi¬

nado .el negro fue recuperando poco apoco un sentido poético y un sentido plás¬tico, aparentemente perdidos por él desdehacía varios siglos.

Pero no se trataba ahora, para él, deprolongar del otro lado del Atlántico unastradiciones ancestrales que ya no corres¬pondían a las realidades ambientes*. No

hablaba ya los idiomas del Africa, sino lasgrandes lenguas, con distintas raigambresclásicas, que ahora se ofrecían a su expre¬sión verbal. No sentía la necesidad de

hacer revivir viejas narraciones yorubas,de rememorar antiguas leyendas, deregresar a las fuentes de una literatura oral,sino de "hacer poesía" en el cabal sentido wdel término. r

11

Page 12: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Igual ocurrió con el pintor. Poco teníaéste ya que ver con una plástica concebida,en su medio original, como un comple¬mento de cultos religiosos dejados muyatrás sincretizados, a veces, enaltares consagrados, aparentemente, asantos cristianos. Para él, los problemasplásticos eran los mismos que podíanplantearse, en una época dada, al artistade cualquier parte. De ahí que surgieranpintores y escultores negros o mulatos, enAmérica Latina, durante todo el siglo XIX,que en modo alguno recordarán, con suspinceles o cinceles, las formas y estili¬zaciones del arte africano.

Igual ocurrió, en la misma época, con lapoesía. Y hemos de añadir que, al propiotiempo, fueron escritores "blancos" (contodo el sentido relativo que pueda tener talpalabra en América Latina) quienes publi¬caron numerosas novelas de ambiente

"negro" denunciadoras de las prácticasrepugnantes de la esclavitud en el con¬tinente americano.

Sin embargo, nuestra época habría deasistir, de cincuenta años a esta parte, a laaparición de poetas, de pintores, cuyaobra presentará características nuevas,debidas a las simbiosis de culturas que

propició la historia misma del llamadoNuevo Mundo. Por ello, se ha hablado

mucho de "poesía negra", en estas últimasdécadas, designándose así una poesíaretumbante, percusiva, onomatopéyica,que, para mayor confusión de nociones,era producida a menudo por poetas perfec¬tamente "blancos", como el cubano EmilioBallagas o el venezolano Manuel FelipeRugeles.

Esto equivalía a un concepto exótico denegritud. Porque la verdad era que, encaso de que una "poesía negra" existiesecomo tal, más auténtica hubiese sido laque hiciera escuchar una voz de negrooprimido por siglos de esclavitud o de dis¬criminación racial revolucionaria,

ante todo, si pensamos que, desde el sigloXVI, el negro siempre estuvo alzado contrael amo en algún lugar del continente,llegando a constituir pequeños estadosindependientes, en Brasil, en Guayana,en Jamaica, que duraron largos años. Elnearo de América Latina nunca se resignó

(*) Podrá argüirse que los núcleos abakuá y lasantería, en Cuba, el rito de los Obeah enJamaica, el vodú de Haití, son auténticas per-vivencias africanas. Pero puede decirse quetales pervivencias, además de hallarse muysincretizadas y enriquecidas por pequeños cul¬tos locales, están destinadas a desaparecerantes de pocos años a acriollarse conside¬rablemente, como ocurre con el panteón delvodú, enriquecido por dioses de nueva cosechacomo Criminel Petro, Erzulíe o Marinette Bois-Cheché. En otras islas de las Antillas, el folklore

africano se ha vuelto una atracción para uso delturista, a quien se ofrecen "ceremonias mági¬cas" y "danzas rituales" a cambio de dólares. Y

'ya sabemos que cuando un folklore puede com¬prarse con monedas, ha dejado desde hacetiempo de ser auténtico. Esto, por no hablar deun país como Cuba donde las viejas agrupacio¬nes de ñañigos (suerte de asociaciones secretasde protección mutua) dejan de tener toda razónde ser en un sistema socialista.

a ser esclavo. Son incontables sus suble¬

vaciones y cimarronadas, desde la promo¬vida en Venezuela, en el siglo XVI, por elNegro Miguel, hasta las guerras de inde-'pendencia de Haití la admirablefigura de Toussaint-Louverture precur¬soras de las Grandes Guerras de Indepen¬dencia del continente.

Jamás renunció el negro, en su largahistoria americana, a la idea de Libertad

alentada por los criollos de todasclases y niveles que, al cabo de muchasluchas, se sacudieron el yugo del colonia¬lismo español, portugués, francés o inglés.Pensamiento típicamente criollo es el quepone Montesquieu, en 1721, en boca deun negro antillano : "¿Por qué se quiereque yo trabaje para una sociedad a la queyo no quiero pertenecer? ¿Por qué sequiere que yo defienda, a pesar de mímismo, una organización que se hizo sincontar conmigo?".

"Jamás renunció

el negro, en sularga historiaamericana, a la

idea de Libertad"

Por ser criollo y a la vez nutrido por lasmejores tradiciones clásicas, un poetacomo Nicolás Guillen pudo escribir unapoesía que, tomando como base escansío-nal los ritmos del son cubano (géneromusical de por sí tremendamente acriolla¬do), revelaba unas raíces hincadas no yaen el suelo del África, sino en tierras muy

cultas, roturadas siglos atrás por Lope deVega y Góngora, así como por la mexicanaSor Juana Inés de la Cruz, cuando esos

autores se dieron a escribir lo que llamaban"poemas de negros". Y, por ello, sí unapoesía puede ser calificada justamente decriolla es la de este poeta que no se haencerrado, por lo demás, en los estrechoslímites de un estilo determinado, resultando

tan cubano en sus poemas de factura clá¬sica como en los percutientes versos pri¬meros de Motivos del Son o de SóngoroCosongo.

En pintura podríamos - citar, en planoparalelo, un cuadro monumental como LaJungla de Wifredo Lam, síntesis de vege¬taciones y formas que pertenecen al ámbitoun tanto mágico del Caribe, -obra de unpintor mestizo, de sensibilidad auténtica¬mente criolla, cuya producción ocupa unlugar privilegiado en el panorama del artemoderno... Y, al propio tiempo, se estáproduciendo ahora en Venezuela, peque¬ñas islas de las Antillas y Haití una autén

tica escuela 'de pintores de los' llamados"espontáneos" o "primitivos" que estáhaciendo maravillas desde los años 40/ Y

esa pintura local es otra aportación a lapintura latinoamericana en su totalidad,sin que en ella aparezcan indicios de unatradición ancestral africana, fuera de unacomún afición a los colores vivos y alegres,emanación de temperamento más que deidiosincrasia.

De este modo,- en el mundo de lasAntillas de habla española, y también enlas anglófonas y francófonas, se producenactualmente una literatura y una pinturade marcadas características criollas, sin

que nos pongamos a medir aquí la pro¬porción de los ingredientes raciales mala¬xados en el conjunto.

Por ello, la aportación del negro almundo a donde fue llevado, muy a pesarsuyo, no consiste en lo que ha dado enllamarse erróneamente "negritud" (¿porqué no hablar, en tal caso, de una "blan-quitud"?) sino en algo mucho más tras¬cendental : una sensibilidad que vino aenriquecer la de los hombres con quienesse le había obligado a convivir, comuni¬cándole una nueva energía para mani¬festarse en dimensión mayor, tanto en loartístico como en lo histórico, puesto queel criollo de indio y europeo no alcanzó laedad adulta, en América, mientras nocontó con la sensibilidad del negro.

De la suma de esta tres razas

mayor proporción de indios en algunasregiones, en tanto que otras están inde¬leblemente marcadas por el negro surgióel hombre que, con sus obras musicales,plásticas, poéticas, novelescas, ha con¬quistado un lugar de primer plano en elpanorama cultural del mundo.

Alejo Carpentier

12

Page 13: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Junto a los colonizadores europeos (sobre todo de la Península Ibérica) y a los amerindiosautóctonos, el Africa negra está biológica y culturalmente presente desde los comienzosen la formación de la nacionalidad brasileña. Se ha creado así en el país un nuevo tipo decivilización, mestizo por la sangre y por la interpenetración de culturas, que no es europeoni africano sino propiamente brasileño, producto de una vigorosa síntesis de razas yculturas. El tipo físico del brasileño actual delata constantemente la presencia del negro :la población se vuelve crecientemente "morena". En la foto, una familia afrobrasileña en

las calles de Salvador de Bahía ; en los muros, escenas relacionadas con la conquista y lacolonización del país.

UNA EXPERIENCIA ÚNICA

LA CULTURA

AFROBRASILEÑA

GILBERTO FREYRE, brasileño, es reconocido entodo él mundo como una autoridad en materia de

sociología y de antropología social y cultural. Ha cola¬borado en varías ocasiones con las Naciones Unidas ycon la Unesco como asesor en materia de racismo yde tensiones sociales. Pertenece a gran número deinstituciones culturales de diversos países y ha sidoprofesor o conferenciante en numerosas universidadesde Europa y América. Entre sus obras numerosas des¬

tacan la clásica Casa grande y senzala, Sobrados emucambos. Los ingleses en el Brasil e Interpretacióndel Brasil.

por Gilberto Freyre

QUE Brasil comenzó a ser un pre-Brasil como una proyecciónhumana e histórica de Europa

de Portugal es unhecho histórico irrefutable. Pero no basta,por sí solo, para explicar la aparición deBrasil como una nueva entidad socio-cultural en el mundo llamado "moderno"

ni su consolidación como un sistema de

convivencia y de cultura.

Esa consolidación se llevó a cabo me¬

diante la confluencia de otras presenciasy de otras contribuciones a más de la

europea. Se trata de un proceso complejoy totalizador. En él tuvieron una impor¬tancia que no hay que desdeñar nunca lacultura y la población amerindias, cuyainfluencia subsiste todavía. Pero a ese

proceso iba a sumarse otra fuerte pre-tsencia no europea : la de! Africa negra, r

13

Page 14: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

De danzas y esclavos

Las culturas negras africanas, junta¬mente con los negros yasea como individuos, ya, más aún, comogrupos sociales o socioculturales hicieronsentir su presencia, desde el siglo XVI, enla formación de un tipo mestizo de hombreparanacional y de una forma prenacionalde cultura. Esa presencia fue tan activa,dinámica e influyente, su acción africa-nizante fue tan intensa, que hizo de losnegros venidos al Brasil cuando setratase de esclavos una especie de co-colonizadores de esta parte de América,junto a los europeos, principales funda¬dores de la nueva cultura, y frente a losamerindios, aquí menos desarrollados queesos negros africanos tan presentes en elBrasil desde hace cuatro siglos.

Biológicamente presentes. Culturalmentepresentes. Presentes y determinantes,actuantes, influyentes, contribuyentes.

Mediante la mezcla física contribuyeroná la aparición de nuevos tipos de hombrey de nuevas formas de belleza de la mujer;mediante la mezcla cultural, a las nuevas

combinaciones culturales, dejando suimpronta no sólo en los valores y rasgosculturales indígenas y amerindios sino

también en los que, de manera creadoray fructífera, fueron trasplantados de Europay de ciertas áreas culturales de África.Trasplantados principalmente de la Europaibérica, la colonizadora más activa delBrasil, ella misma impregnada ya, en lapropia Península, de influencias negras yafricanas.

Entre los condicionamientos ecológicostropicales de formaciones socioculturalescomo la del Brasil, cuya base étnicocul-tural es euroafroamerindia, figuran, comoes natural, los que se reflejan en susformas peculiares de economía o degobierno, casi todas todavía en fase deexperimentación. Pero esta audacia expe¬rimental no significa, en nuestro caso, unBrasil antieuropeo sino un Brasil cons¬ciente de que, en varios aspectos de sucomportamiento sociocultural, tiene queser extraeuropeo. Y esto lo advirtieron ya,hace medio siglo, sus pensadores y suscientíficos sociales cuando trazaron pers¬pectivas sociológicas y antropológicas que,sin perder su sentido científico-socialuniversal, son brasileñas y eurotropicalesen sus aplicaciones y proyecciones.

Para las nuevas repúblicas de África y

de Oriente, como para otros países jóvenes,puede resultar útil esta experiencia delBrasil que, al cabo de más de un siglo deindependencia y cuatro de desarrollo

prenacional, luego nacional ,surge como una civilización en busca desus propias formas de expresión dentro deuna ecología tropical y sin repudiar losvalores europeos profundamente enrai¬zados en su base nacional. Y que cuentaya con una arquitectura, una música, unapintura, un arte culinario, un cristianismo,un estilo de convivencia, una higiene, unfútbol es más brasileñamente dioni-síaco que británicamente apolíneo enlos que se expresa un tipo nuevo decivilización. Nuevo, sobre todo, por sermestizo, si no siempre por la sangre, sípor las interpenetraciones de culturas.

La integración del negro se produce nosólo en el ámbito biológico sino tambiénen el sociológico. Adviértase, por ejemplo,la fuerte africanización del catolicismo queen el Brasil se está volviendo un culto

lleno de símbolos y de ritos característicosque, siendo los oficialmente apostólicosromanos, añaden a su origen europeocreencias y prácticas religiosas del más

14

Page 15: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

En las danzas brasileñas lo africano se manifiesta en el frenesí del ritmo y en laprofundidad de las significaciones míticas. Este fondo religioso del Africa se infiltra endanzas aparentemente recreativas y aun carnavalescas como el maracatu (a la izquierda) oen el torbellino de la macumba (véase la página 35). Centros de irradiación de las culturas

negras en el Brasil eran las antiguas "senzalas" o casas de esclavos estudiadas por;Gilberto Freyre. En la foto, una "senzala" de Olinda hoy transformada en tienda de. anticuario.

puro sabor africano. Que lo diga el cultode la Virgen María, con sus asimilacionesdel culto de Yemanyá (equivalente femeni¬no de Orixá, divinidad secundaria del culto

africano yeye-nagó). En el Brasil existenVírgenes negras como la del Rosario omorenas oscuras como la de Guadalupe,a las que sus fieles hacen promesas pormedio de exvotos que constituyen unaforma rústica de escultura en madera y enbarro, en su mayor parte mucho más afri¬cana que europea, típicamente brasileña.Esos exvotos entrañan, por su sacralfeacíónde los colores, significados simbólicos quetambién son a menudo más africanos queeuropeos o que ortodoxamente cristianos.

Otro ejemplo puede encontrarse en elmaracatu, danza aparentemente recreativae incluso carnavalesca pero que en susignificado más profundo revela toda unacompleja infiltración africana en el espíritureligioso brasileño. Esas infiltraciones seproducen, a través de un proceso de sin¬cretismo, en no pocos cultos de santostípicos del catolicismo practicado en elBrasil, por ejemplo, el culto de San Jorge,el de Santa Bárbara o el de los Santos

Cosme y Damián.

Los brasileños que practican estos cultosno se consideran menos católicos porseguir, en sus prácticas religiosas, asimi¬laciones de cultos o de creencias negras oafricanas que han dado color, han tropica-lizado y deseuropeízado su catolicismo.Para los devotos brasileños esas influencias

africanas no han degradado ni descris¬tianizado su catolicismo. Sucede que en lareligión, al igual que en la cocina, en lamúsica, en la escultura o en la pintura deorigen europeo, las infiltraciones africanasno constituyen una degradación de susvalores sino más bien un enriquecimiento.

Es evidente que la colonización europeadio a ese nuevo tipo de sociedad y a esenuevo tipo de cultura un instrumento deintercomunicación que sólo podía darleuna nación europea ya unificada y lite¬rariamente desarrollada : la lengua, eneste caso la portuguesa, heredera de lanoble y prestigiosa lengua latina. Pero noes menos evidente que ninguna lenguaeuropea, de las que los europeos trajerona los trópicos, se está tropicalizando tantocomo el portugués en el Brasil.

Esta tropícalización de la lengua por¬tuguesa que se viene produciendo en el

Brasil que es, en parte,deseuropeización se debe principalmentea las infiltraciones. africanas y sólo demanera secundaria a las amerindias. .Y

esas infiltraciones se proyectan en eldesarrollo de una lengua literaria que yano es una sublengua en relación con laconsagrada como académicamente castizapor los puristas portugueses más intran¬sigentes. En esa lengua se afirman, cadadía con mayor desenvoltura extraacadé-mica, nuevos ritmos y nuevas expresionesque, ya sea en su musicalidad ya en sufuerza de expresión, están marcados porlo que en ellos hay de origen africano y quehasta hace algún tiempo estaban limitadosa la llamada habla popular : se los consi¬deraba plebeyos, vulgares, "dichos denegros", restos de dichos de esclavos,residuos de las "senzalas" (alojamientos ocasas de esclavos).

¿A dónde nos conducen estas conside¬raciones sobre la importancia de la presen¬cia negra o africana en la sociedad, en lacultura y en la lengua portuguesa delBrasil? Nos llevan a sugerir que esa pre¬sencia está dando como resultado la for-k

mación, por un lado, de una población*

15

Page 16: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

.creciente pero no exclusivamente morenaen cuanto a su color y, por otro, de unacultura crecientemente extraeuropea sinperjuicio de su esencial europeidad. Amísticas tales como la del arianísmo segre¬gador o la de una negritud también segre¬gadora se opone en el Brasil la tendenciaa la síntesis, ya sea biológica a través delmestizaje, ya sociológica por medio de lainterpenetración de culturas en las cualeslas presencias no europeas son ya, enciertos sectores, tan acusadas como las

europeas.

El Brasil tiende hoy día a considerar suindependencia, política y económica, enparticular, o sociocultural, en general,como el resultado no de una súbita des¬

colonización sino más bien de una precoz

autocolonización (otro neologismo socio¬lógico creado en el Brasil). Esta auto-colonización se habría producido en opo¬sición a un poder europeo colonizadormenos fuerte o menos tentacular, en susmanifestaciones oficiales, que los demáspoderes europeos colonizadores : menoscapaz de imponer su voluntad y sus mode¬los a los colonizados y más proclive atransigir con ellos, dejándoles sabiamenteque se autocolonizaran yque el africanoactuara junto a él como có^colonizador delBrasil.

En esta función de colonizar el

mestizo amerindio se asoció al portugués,superándolo a veces. De ahí la gran impor¬tancia que tiene la acción de los bandei-rantes* en la formación del Brasil. No iba

a ser menor la participación del negroladino* o brasileñizado, asociado al por¬tugués y también superándolo en muchosaspectos, dada su fácil adaptación denativo del trópico africano al trópico bra¬sileño. Esta adaptación le permitió desa¬rrollar, en las tierras lacustres y pantanosasdel Brasil, una actividad y un esfuerzo queresultaban difíciles para el conquistadoreuropeo, cuando era puramente europeo.

Ello explica algunas características dela formación de la nación brasileña que ladistinguen de otras poblaciones que decoloniales pasaron a ser nacionales, per¬mitiéndole ser más creadoramente extra-

europea, incluso cuando era todavía, entodos los aspectos oficiales, una coloniade Portugal.

Esta característica se expresa de modovehemente en la escultura del Aleijadínho:una escultura ecológica y, dentro de suestilo, más extraeuropea que pasivamentesubeuropea, y con una audacia estéticatropical, propiamente brasileña.

En esta esfera de la estética, los brasi¬leños tienen con los africanos afinidades

especialísimas que los diferencian del restode los latinoamericanos de las

regiones tropicales de América que sonlas más marcadas por la presencia afri¬cana en su relación con el África negra.Recordemos que en Nigeria, por ejemplo,llegó a haber un estilo brasileño no sólo dearquitectura sino de decoración, configuras de animales y de plantas tropicalesdel Brasil, por no hablar de los rasgos

De María a Yemanyá

* Bandeirantes : miembros de asociaciones destinadas

a esclavizar indios o a descubrir minas. Ladino : esclavo

que hablaba portugués y había aprendido nociones dela religión cristiana y del trabajo doméstico o agrícola.N.D.L.R.

16

Page 17: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

En el Brasil los ritos católicos brasileños han asimilado creencias y prácticas religiosas delmás puro sabor africano. Así, el culto de la Virgen María, tan penetrado por el deYemanyá, divinidad femenina venida de Nigeria. Arriba a la izquierda, una ceremonia delculto de Yemanyá. Abajo, la leyenda afrobrasileña del orixá Oxosse puesta en escena porel coreógrafo Clyde Morgan y el Grupo de Danza Contemporánea de la UniversidadFederal de Bahía. Abajo a la izquierda, un curioso ejemplo de arte popular brasileño en elque quizá pudieran rastrearse ciertas Influencias africanas : una de las famosas"carrancas" o mascarones de proa de las embarcaciones del río San Francisco.

Foto © Rivaldo G. Leite, tomada de la revista Cultura, Ministerio de Educación y Cultura, Brasilia

brasileños que se introdujeron en la cocina,las danzas, las diversiones, los cultos reli¬

giosos y el folklore nigerianos.

En un artista joven de la Nigeria actual,Jacob Afolabí, algunos críticos extranjeroshan descubierto cierto parentesco con elpintor español Miró. Podríamos decir conel refrán que "amor con amor se paga",pues ¿no fue otro gigante de' la pinturaespañola, Picasso, quien desarrolló expre¬siones del arte africano, transmitiéndolas

a otros artistas europeos y de otras regio¬nes del mundo? Pero ese artista nigeríanoy. otros artistas africanos presentan afini¬dades no sólo con Picasso y sus congé¬neres sino con los artistas brasileños,Picassos a su manera, por su sensibilidadpara las expresiones africanas o negras.Porque parece manifiesto que el artistanigeriano de hoy encuentra en gran partedel arte brasileño más auténtico algo quele es familiar, fraterno y emparentado conlo que para él representa el arte.

La acción que esas herencias psicocul-turales ejercen en no pocos brasileñosexplica el hecho de que artistas negrosafricanos como Afolabi tengan, más quesemejanzas con los Mirós españoles, unparentesco con los brasileñísimos Ciceros

Dos Santos Dias, Emilianos Di Cavalcanti yLulas Cardoso Ayres. De ahí también quese encuentre en un Adebisi delibe¬radamente revive en su arte el llamado

estilo brasileño-nigeriano semejanzascon la cerámica pintada del Brasil (la deun Francisco Brennand, por ejemplo).

El ambiente creado por esa sensibilidadde los modernos artistas brasileños paralas raíces africanas de su pintura, su escul¬tura, su música, ¿es acaso favorable a una"negritud" que separe al brasileño des¬cendiente principalmente del negro afri¬cano, de los brasileños de otros orígenesétnicos y culturales, convirtiéndolo en un

"negro brasileño" semejante al "negronorteamericano"? De ninguna manera.Sólo retóricamente puede serlo en unosPOCOS. - ,. - .- _-,' Debe insístirse en que entre los brasi¬leños aumenta la conciencia de ser casi en

su totalidad un pueblo morenoempleada para designar matices del coloroscuro de la piel y que actualmente tieneentre nosotros tal flexibilidad que abarcaincluso a los negros De ahí también elconcepto brasileño de metarraza (más alláde la raza), según el cual no interesan albrasileño las precisiones de origen o desituación étnicos, puesto que tales preci¬siones no le afectan en su condición

nacional.

Estos conceptos resultan de sumaimportancia para el antropólogo o el soció¬logo en la medida en que ilustran el hechode que no es la raza o el color lo que haceespecíficamente de un hombre esto oaquello sino lo que hay de íntimo en losgustos, tendencias, motivacionesprendidas las artísticas de ese individuo,cualquiera que sea su origen : blanco onegro, africano o europeo.

Por lo que toca al folklore del Brasil, nofaltan las idealizaciones o caracterizaciones

de figuras africanas que se incorporaron ala sociedad . patriarcal brasileñaprincipal para la interpretación del ethos y vde la formación del país como la mae}

17

Page 18: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

I prêta (madre negra), la bá (nodriza), elnegro velho (negro anciano) o ese negrinhodo pastoreio (especie de ángel bueno delas pampas) en que se inspiró una de lasobras maestras de nuestra literatura. Otras

obras maestras se inspiraron en la "esclavaIsaura" (Bernardo Guimaraes), el "mulato"(José Lins do Regó), el "Balduino" deJorge Amado, o Esa negra Fulo de Jorgede Lima. Todo ello sin olvidar a las "mula¬

tas" veces negras, de las llamadaspuras, tan raras desde hace años en elBrasil en continuo mestizaje del pintorEmiliano Di Cavalcanti.

Mucho se ha hablado ya de la presenciaafricana en la música brasileña, mucho

más que de cualquier otra influencia afri¬cana en las expresiones de la sensibilidady del arte brasileños. Esa influencia semanifiesta no solamente en la música

popular sino en algunas de las más altasexpresiones de la música culta. Suges¬tiones e inspiraciones musicales africanasse ejercieron en Heitor Villa-Lobos, juntocon las amerindias a las que concedía tantovalor, considerándolas germínalmentebrasileñas. En su caso, tal vez estas últimas

influyeron de manera más notoria que lasinspiraciones africanas, aunque en modoalguno rechazó éstas.

Son las afinidades psicoculturales lasque hacen que Brasil y Africa presentensemejanzas en varias expresiones culturalesque les son características, sin olvidar quea esas semejanzas ha contribuido, a másde las experiencias históricas, una ecologíaque les es común : la tropical. Se trata enambos casos de pueblos situados enregiones tropicales que hoy sufren lasconsecuencias de la modernización. De un

modo general, africanos y brasileños hansabido conciliar, en el marco de forma¬

ciones nacionales diversas, la ecología tro¬pical y la modernización en que estánempeñados.

' Es preciso que la modernización no losvuelva antiecológicos, separándolos de lasfuentes naturales de sus culturas nacio¬

nales, o volviendo artificiales sus expre¬siones culturales privativas al convertirlasen simples remedos de los modernismostriunfantes en regiones económica y tecno¬lógicamente avanzadas y proclives a domi¬nar las culturas de aquellas que aún seencuentran en vías de desarrollo.

No se trata de rechazar los elementos

culturales europeos, ni siquiera norteame¬ricanos, susceptibles de ser adaptados acondiciones no europeas. Pero tampocose trata de convertir a brasileños de origentanto europeo como no europeo en sub-europeos o subyanquis. Orientación éstaque puede ser también particularmenteválida para las nuevas naciones africanasque quizá encuentren en algunas antici¬paciones brasileñas ejemplos susceptiblesde ser aprovechados en sus nuevas situa¬ciones socioculturales.

Gilberto Freyre

En el cuadro Las tres razas del pintor brasileño Emiliano diCavalcanti se plasma simbólicamente la idea de una armoniosaconvivencia de las razas existentes en el Brasil que vanfundiéndose hasta constituir una metarraza, un tipo de hombremás allá de ellas.

EL PAIS

DONDE

LOS DIOSES

Y LOS

HOMBRES

SE

MEZCLARON

por Jorge Amado

EL Brasil es un país mestizo. Esta esuna verdad incuestionable, una

que está muy por encimade cualquier deformación impuesta porcircunstancias ocasionales o por interesescasi siempre inmediatos, cuando no incon¬fesables. Aquí se llevó a cabo y continúarealizándose una experiencia de impor¬tancia capital para la solución del problemaracial que, por desgracia, sigue siendoterrible en el mundo de hoy. Aquí se mez-

JORGE AMADO, miembro de la Academia Brasileña,es uno de los novelistas latinoamericanos más leídos

en el mundo entero. Desde su novela Mar muerto, quelo dio a conocer en todo el continente, ha escrito másde 15 libros que han sido traducidos a unas 30 len¬guas. Sus obras más recientes son Gabriela, clavo ycanela. Doña Flor y sus dos maridos y Teresa Batistacansada de guerra.

ciaron y se mezclan todavía las razas másdiversas.

¿Qué brasileño podría proclamarsehonestamente de raza pura si aquí seconfundieron las naciones blancas más

diversas eslavas, anglosajonas,magiares y otras con las diferentesnaciones negras e indígenas y con losárabes, judíos y japoneses? Se fundieron yse funden y lo hacen cada vez más. Esa ésnuestra realidad más profunda y nuestracontribución a la cultura mundial y alhumanismo.

Somos un pueblo mestizo y en nuestromestizaje, siempre en vías de completarse,el negro participa con una contribuciónfundamental, tan importante como la delblanco. A los negros les debemos direc¬tamente algunas de nuestras característicaspopulares más acusadas : por ejemplo,nuestra capacidad de resistir a la miseria ya la opresión, de sobrevivir en las condi¬

ciones más duras y difíciles, de reír y amarla vida. A ellos les debemos esa alegría devivir que nos impulsa a luchar y vencer elatraso, la miseria, la falta de libertad, losinnumerables obstáculos que se oponen anuestro desarrollo. Esa capacidad de resis¬tencia y de lucha la debemos en primer

18

Page 19: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Foto © Dominique Desjardins, Paris

lugar a la sangre de negro que corre pornuestras venas, para no referirnos a la quecorre por las de la música, la danza y lavocación artística general del brasileño.

La cultura brasileña se ha formado en la

lucha contra el racismo y se origina en elcruce del blanco, del negro y del indio.Pero nuestro componente africano estáindisolublemente mezclado con nuestro

componente blanco. De ahí que debamosproclamar orgullosamente nuestro mes¬tizaje y la presencia maternal y maravillosade Africa. Porque el África es nuestroombligo.

Pero sería una estupidez afirmar que noexisten racistas en el Brasil. Los hay amontones. En cambio, lo que no existe esuna filosofía racista de la vida : nuestra

filosofía de la vida es fundamentalmente

antirracista puesto que se basa en lamezcla, en el meztizaje. La escultura de unAgnaldo da Silva sin parangónen el Brasil contemporáneo tan pode¬rosa y tan negra, no es exclusivamentenegra : en ella encontramos rasgos de lainfluencia blanca, peninsular e ibérica,tanto en los temas como en la forma. El

Oxossi de Agnaldo es al mismo tiempoSan Jorge.

Es de lamentar, sin embargo, la imagendistorsionada que de nuestra cultura se daa veces en los festivales organizados en elextranjero. Sucede que en ellos se esca¬motea o niega lo fundamental, lo realmenteimportante, es decir el significado de lapresencia africana en nuestra cultura.

Con un curioso espíritu colonial, suelereunirse a pintores, cantantes y literatosde piel más oscura, en una tonta demos¬tración de aquello que algunos creen seruna ausencia de prejuicio racial en elBrasil, cuando, por el contrario, es laprueba de una actitud racista opuesta anuestra filosofía de la vida, antirracista porexcelencia. Se escoge a las cantantes másnegras, pero no se presta atención a surepertorio y se les hace cantar las can¬ciones de menor influencia negra y demayor influencia ibérica, olvidando quenuestra música es ante todo descendiente

de los atabaques africanos, nacida en elvientre mismo de los orixás. La pintura quese expone suele ser la de la Escuela deParís, pintada eso sí por artistas de pieloscura, dejando de lado la obra de unaTarsila o de un Di Cavalcanti, en los quese advierten los elementos de origen negroque marcan nuestras artes plásticas y le

comunican una originalidad nacional almezclarse con los elementos de origenblanco, indígena o japonés.

Lo que debemos proclamar en público yexhibir ante los ojos del mundo es lapresencia exaltante y fundamental deAfrica en el Brasil, su presencia en nuestravida, en nuestra cultura, en el rostro denuestro pueblo, dándonos la medidaexacta de nuestra grandeza. Allí está él, elnegro africano, presente en todo cuantohacemos de inmortal. Allí está el Africa,con su sol y con su sombra, en los profetas,santos y ángeles que el Aleijadinho fueesculpiendo por los caminos del oro deMinas Gérais. Allí está, en la música deVilla-Lobos, en la de Dorival Caymi, en losorixás y las madonas de Agnaldo, en lasmulatas de Di Cavalcanti, en la Bahíarecreada por Carybé, en la poesía deGregorio de Matos, de Castro Alves, deVinícius de Moraes, en el baile, en el canto,en la dulzura, en la gracia, en la cordialidad,en la imaginación libre, en todo cuanto degrande se realiza en el Brasil. Porque aquílos dioses y los hombres se han mezcladopara siempre, felizmente. Sí, felizmente.

Jorga Amallo

19

Page 20: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

El violin de la soledad

"Todos los hombres nacimos desheredados y nuestra condición verdadera es laorfandad, pero esto es particularmente cierto para los indios y los pobres deMéxico", escribe Octavio Paz. Ese sentimiento de soledad, que le viene al indio desu fondo azteca originario, impregna intensamente sus expresiones culturales yartísticas.

20

Page 21: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

AZTECAS

Y MEXICANOS

Drama y laberintode un mestizaje

por Octavio Paz

Texto © copyright. Prohibida la reproducción

CUALQUIER contacto con el pueblomexicano, así sea fugaz, muestraque bajo las formas occidentales

laten todavía las antiguas creencias y cos¬tumbres. Esos despojos, vivos aún, sontestimonio de la vitalidad de las culturas

precortesianas. Y después de los descu¬brimientos de arqueólogos e historiadoresya no es posible referirse a esas socieda¬des como tribus bárbaras o primitivas. Porencima de la fascinación o del horror quenos produzcan, debe admitirse que losespañoles al llegar a México encontraroncivilizaciones complejas y refinadas.

Mesoamérica, esto es, el núcleo de lo

que sería más tarde Nueva España, era unterritorio que comprendía el centro y el surdel México actual y una parte de Centro-américa. Los últimos siglos de Mesoamé¬rica pueden reducirse, un poco sumaria¬mente, a la historia del encuentro entre lasoleadas de cazadores norteños, casi todos

pertenecientes a la familia náhuatl, y laspoblaciones sedentarias.

Los aztecas son los últimos en estable¬

cerse en el Valle de México. El previo tra¬bajo de erosión de sus predecesores y eldesgaste de los resortes íntimos de lasviejas culturas locales hizo posible queacometieran la empresa extraordinaria defundar lo que Arnold Toynbee llama unImperio Universal, erigido sobre los restosde las antiguas sociedades. Los españo¬les, piensa el historiador inglés, no hicie¬ron sino sustituirlos, resolviendo en una

síntesis política la tendencia a la disgrega-

OCTAVIO PAZ, poeta y ensayista mexicano, es unade las principales figuras de la literatura hispánica con¬temporánea. Fue embajador de su país en la India de1962 a 1963 y ha dado cursos en diversas universida¬des. Su obra poética de 1935 a 1957 ha sido recogidaen el vomumen Libertad bajo palabra (1958). Sala¬mandra (1962), Ladera Este (1969) y La centena (1971)reúnen su producción poética posterior. De su extensaobra ensayístíca destaquemos obras ya clásicas comoEl laberinto de la soledad {1950), penetrante interpre¬tación del alma mexicana, y El arco y la lira (1956), asicomo Puertas al campo (1966), Corriente alterna (1967),Los signos en rotación (1971) y, más recientemente.Los hijos del limo y El mono gramático (1974). El en¬sayo que aquí publicamos, sobre las afinidades y dife¬rencias de los antiguos y los modernos mexicanos,está tomado de varios capítulos de El laberinto de lasoledad (Fondo de Cultura Económica, México, 1950).

ción que amenazaba al mundo mesoame-ricano.

Desde un punto de vista muy generalse ha descrito a Mesoamérica como un

área histórica uniforme, determinada porla presencia constante de ciertos elemen¬tos comunes a todas las culturas : agricul¬tura del maíz, calendario ritual, juego depelota, sacrificios humanos, mitos solaresy de la vegetación semejantes, etc. Sedice que todos esos elementos son deorigen suriano y que fueron asimiladosuna y otra vez por las inmigraciones nor¬teñas. Así, la cultura mesoamericaña seríael fruto de diversas creaciones del Sur,recogidas, desarrolladas y sistematizadaspor grupos nómadas. De todos modos, ymás allá de la originalidad particular decada cultura, es evidente que todas ellas,decadentes o debilitadas, estaban a puntode ser absorbidas por el Imperio azteca,heredero de las civilizaciones de la Meseta.

Aquellas sociedades estaban impregna¬das de religión. La misma sociedad aztecaera un Estado teocrático y militar. Así, launificación religiosa antecedía, comple¬taba o correspondía de alguna manera a launificación política. Con diversos nom¬bres, en lenguas distintas, pero con cere¬monias, ritos y significaciones muy pare¬cidos, cada ciudad precortesiana adorabaa dioses cada vez más semejantes entre sí.Las divinidades agrarias dioses delsuelo, de la vegetación y de la fertilidad,como Tláloc , y los dioses nórdicos

guerreros y cazadores comoTezcatlipoca, Huitzilopochtli, Mixcóatlconvivían en un mismo culto. El rasgomás acusado de la religión azteca en elmomento de la Conquista es la incesanteespeculación teológica que refundía, siste¬matizaba y unificaba creencias dispersas,propias y ajenas. Las sistematizaciones,adaptaciones y reformas de la casta sacer¬dotal reflejan que en la esfera de lascreencias también se procedía por super¬posición de las ciudadesprehispánícas . Del mismo modo queuna pirámide azteca recubre a veces unedificio más antiguo, la unificación religio¬sa solamente afectaba a la superficie dela conciencia, dejando intactas las creen¬cias primitivas. Esta situación prefigurabala que introduciría el catolicismo, que tam

bién es una religión superpuesta a unfondo religioso original y siempre viviente.Todo preparaba la dominación española.

La Conquista de México sería inexplica¬ble sin estos antecedentes. La llegada delos españoles parece una liberación a lospueblos sometidos por los aztecas. Losdiversos estados-ciudades se alian a los

conquistadores o contemplan con indife¬rencia, cuando no con alegría, la caída decada uno de sus rivales y en particulardel más poderoso : Tenochtitlán. Pero niel genio político de Cortés, ni la superio¬ridad técnica en hechos de

armas decisivos como la batalla de Otum-

ba , ni la defección de vasallos y aliados,hubieran logrado la ruina del Imperioazteca si éste no hubiese sentido de prontoun desfallecimiento, una duda íntima quelo hizo vacilar y ceder. Cuando Moctezumaabre las puertas de Tenochtitlán a losespañoles y recibe a Cortés con presentes,los aztecas pierden la partida. Su luchafinal es un suicido y así lo dan a entendertodos los textos que tenemos sobre esteacontecimiento grandioso y sombrío.

¿Por qué cede Moctezuma? ¿Por qué sesiente extrañamente fascinado por los es¬pañoles y experimenta ante ellos un vérti¬go que no es exagerado llamar sagrado

vértigo lúcido del suicida ante el abis¬mo? Los dioses lo han abandonado. La

gran traición con que comienza la historiade México no es la de los tlaxcaltecas, ni

la de Moctezuma y su grupo, sino la delos dioses. Ningún otro pueblo se ha sen¬tido tan totalmente desamparado como sesintió la nación azteca ante los avisos,

profecías y signos que anunciaron sucaída.

Se corre el riesgo de no comprender elsentido que tenían esos signos y profecíaspara los indios si se olvida su concepcióncíclica del tiempo. Según ocurre conmuchos otros pueblos y civilizaciones,para los aztecas el tiempo no era unamedida abstracta y vacía de contenido,sino algo concreto, una fuerza, sustanciao fluido que se gasta y consume. De ahíla necesidad de los ritos y sacrificios desti¬nados a revigorizar el año o el siglo. Peroel tiempo más exactamente, los tiem¬pos además de constituir algo vivo que

SIGUE EN LA PAG. 24

21

Page 22: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

" <i * / *--

En México la fusión entre el catolicismo

español y las creencias indígenas ha sido amenudo tan profunda que hoy es muy difícildistinguir los dioses paganos de los santoscristianos, los ritos precortesianos de loscatólicos. De tal modo que el Cristomexicano tiene algo del Cristo sangranteespañol y, a la vez, algo de ciertos diosesaztecas (foto 4). Lo mismo ocurre con las

fiestas y ceromonias del culto. Una de lasmás originales del México moderno es laSemana Santa tal como la celebran los

yaqui, pequeña etnia precolombina delnoroeste del país que desde la Conquistahasta la Revolución ha defendido fieramente

su integridad e independencia, a menudocon las armas en la mano. En la Semana

Santa que todos los años representan losyaqui los episodios de la Pasión aparecenmezclados con ritos de significación amenudo oscura pero que vienendirectamente de su pasado más o menosremoto. He aquí unas cuantas imágenes dela gran fiesta : 1) la litera de Cristo confetiches de madera y animales rellenos depaja es paseada en procesión por el pueblo ;3) dos arqueros velan la estatua de Cristo ;5) marcha guerrera a la salida del templo,recuerdo evidente de las seculares luchas de

los yaqui por conservar su identidad ; 2)máscaras rituales con que los "chapayecas"(o narigudos) celebran curioso alapóstol Judas, su héroe.

Page 23: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

La Pasión segúnlos yaqui

Fotos © Marino Benzî. Editions du Chêne, París

T, W3r¿?«!w>tuBOB i JmHI^'

hh mÁSahÁ

- .

Page 24: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

, nace, crece, decae, renace, era una suce1-sión que regresa. Un tiempo se acaba ;otro vuelve. La llegada de los españolesfue interpretada por Moctezuma me¬nos al principio no tanto como unpeligro "exterior" sino como el acaba¬miento interno de una era cósmica y el

principio de otra. Los dioses se van por¬que su tiempo se ha acabado ; pero regre¬sa otro tiempo y con él otros dioses, otraera...

La Conquista de México es un hechohistórico en el que intervienen muchas ymuy diversas circunstancias, pero se olvi¬da con frecuencia la que me parece mássignificativa : el suicidio del pueblo azteca.

Una parte del pueblo azteca desfallecey busca al invasor. La otra, sin esperanzade salvación, traicionada por todos, escogela muerte. Ante la sola presencia de losespañoles se produce una escisión en lasociedad azteca, que corresponde al dua¬lismo de sus dioses, de su sistema religiosoy de sus castas superiores.

La religión azteca, como la de todos lospueblos conquistadores, era una religiónsolar. En el sol, el dios que es fuente devida, el dios pájaro, y en su marcha querompe las tinieblas y se establece en elcentro del cielo como un ejército vencedoren medio de un campo de batalla, elazteca condensa todas las aspiraciones yempresas guerreras de su pueblo. Pueslos dioses no son meras representacionesde la naturaleza. Encarnan también los

deseos y la voluntad de la sociedad, quese autodiviniza en ellos.

La victoria del instinto de la muerte

revela que el pueblo azteca pierde depronto la conciencia de su destino. Cuauh¬temoc lucha a sabiendas de la derrota. En

esta íntima y denodada aceptación de supérdida radica el carácter trágico de sucombate. Y el drama de esta conciencia

que ve derrumbarse todo en torno suyo,y en primer término sus dioses, creadoresde la grandeza de su pueblo, parece pre¬sidir nuestra historia entera. Cuauhtemoc

y su pueblo mueren solos, abandonadosde amigos, aliados, vasallos y dioses. Enla orfandad.

La caída de la sociedad azteca precipitala del resto del mundo indio. Todas las

naciones que lo componían son presa delmismo horror, que se expresó casi siemprecomo fascinada aceptación de la muerte.Pocos documentos son tan impresionan¬tes como los escasos que nos restan sobreesa catástrofe que sumió en una inmensatristeza a muchos seres. He aquí el testi¬monio maya, según lo relata el ChilamBalam de Chumayel :

"El 11 Ahan Katun llegaron los extran¬jeros de barbas rubias, los hijos del sol,los hombres de color claro. |Ay, entristez¬cámonos porque llegaron!... El palo delblanco bajará, vendrá del cielo, por todaspartes vendrá... Triste estará la palabra deHunab-Ku, Unica-deidad para nosotros,cuando se extienda por toda la tierra lapalabra del Dios de los cielos..." Y másadelante : "Será el comenzar de los ahor¬

camientos, el estallar del rayo en el extre¬mo del brazo de los blancos" (las armas

de fuego)... "cuando caiga sobre losHermanos el rigor de la pelea, cuando lescaiga el tributo en la gran entrada del

cristianismo, cuando se funde el principiode los Siete Sacramentos, cuando co¬

mience el mucho trabajar en los pueblos yla miseria se establezca en la tierra."

*

El mexicano actual es un ser religioso ysu experiencia de lo Sagrado es muy ver¬dadera. Mas ¿quién es su Dios : las anti¬guas divinidades de la tierra o Cristo?

En muchos casos el catolicismo sólo

recubre las antiguas creencias cosmogó¬nicas. He aquí cómo el chamula JuanPérez Jolote, nuestro contemporáneosegún el Registro Civil, nuestro ante¬pasado si se atiende a sus creencias, des-cribe la imagen de Cristo en una iglesia desu pueblo, explicando lo que significa paraél y su raza :

"La tumba

del héroe

es la cuna

del pueblo"

"Este que está encajonado es el SeñorSan Manuel ; se llama también señor SanSalvador, o señor San Mateo, es el que

cuida a la gente, a las criaturas. A él se lepide que cuide a uno en la casa, en loscaminos, en la tierra. Este otro que estáen la cruz es también el señor San Mateo ;

está enseñando, está mostrando cómo semuere en la cruz, para enseñarnos a res¬petar... antes de que naciera San Manuel,el sol estaba frío igual que la luna. En latierra vivían los pukujes, que se comían ala gente. El sol empezó a calentar cuandonació el niño Dios, que es hijo de la Virgen,el señor San Salvador." (Ricardo Pozas A.,

Juan Pérez Jolote. Autobiografía de untzotzil, 5a. edición, México, 1965.)

En el relato del chamula, caso extremo

y por lo tanto ejemplar, es visible la super¬posición religiosa y la presencia imborra¬ble de los mitos indígenas. Antes del naci¬miento de Cristo, el sol de Diosno calienta. El astro es un atributo de la

divinidad. La persistencia del mito precor-tesíano subraya la diferencia entre la con¬cepción cristiana y la indígena ; Cristosalva al mundo porque nos redime y lavala mancha del pecado original. Quetzal-cóatl no es tanto un dios redentor como

re-creador. La noción del pecado para losindios está todavía ligada a la ¡dea de saludy enfermedad, personal, social y cósmica.Para el cristiano se trata de salvar el alma

individual, desprendida del grupo y delcuerpo. El cristianismo condena al mun

do ; el indio sólo concibe la salvaciónpersonal como parte de la del cosmos yde la sociedad.

En el México moderno no existe una

veneración especial por el Dios padre dela Trinidad, figura más bien borrosa. Encambio, es muy frecuente y constante ladevoción a Cristo, el Dios hijo, el Diosjoven, sobre todo como víctima redentora.En las iglesias de los pueblos abundan lasesculturas de Jesús cruz o cubiertas

de llagas y heridas en las que el realismodesollado de los españoles se alia al sim¬bolismo trágico de los indios : las heridasson flores, prendas de resurrección, poruna parte, y, asimismo, reiteración de quela vida es la máscara dolorosa de la muerte.

El fervor del culto al Dios hijo podríaexplicarse, a primera vista, como herenciade las religiones prehispánícas. En efecto,a la llegada de los españoles casi todas lasgrandes divinidades masculinas laexcepción de Tláloc, niño y viejo simultá¬neamente, deidad de mayor antigüedad

dioses hijos, como Xipe, dios delmaíz joven, y Huitzilopochtli, el "guerrerodel Sur". Quizá no sea ocioso recordar

que el nacimiento de Huitzilopochtli ofrecemás de una analogía con el de ' Cristo :también él es concebido sin contacto car¬

nal ; el mensajero divino también es ' unpájaro (que deja caer una pluma en elregazo de Coatlicue) ; y, en fin, tambiénel niño Huitzilopochtli debe escapar de lapersecución de un Herodes mítico. Sinembargo, es abusivo utilizar estas analo¬gías para explicar la devoción a Cristo,como lo sería atribuirla a una mera super¬vivencia del culto a los dioses hijos. Elmexicano venera al Cristo sangrante yhumillado, golpeado por los soldados,condenado por los jueces, porque ve enél la imagen transfigurada de su propiodestino. Y esto mismo lo lleva a recono¬

cerse en Cuauhtemoc, el joven Emperadorazteca destronado, torturado y asesinadopor Cortés.

Cuauhtemoc quiere decir "águila quecae". El jefe mexicano asciende al poderal iniciarse el sitio de México-Tenochtitlán,cuando los aztecas han sido abandonados

sucesivamente por sus dioses, sus vasa¬llos y sus aliados. Asciende sólo paracaer, como un héroe mítico. Inclusive su

relación con la mujer se ajusta al arquetipodel héroe joven, a un tiempo amante ehijo de la Diosa. Así, López Velarde diceque Cuauhtemoc sale al encuentro deCortés, es decir, al sacrificio final, "des¬prendido del pecho curvo de la Empera¬triz". Es un guerrero pero también unniño. Sólo que el ciclo heroico no secierra : héroe caído, aún espera su resu¬rrección. No es sorprendente que, para lamayoría de los mexicanos, Cuauhtemocsea el "joven abuelo", el origen de Méxi¬co : la tumba del héroe es la cuna del

pueblo. Tal es la dialéctica de los mitos yCuauhtemoc, antes que una figura histó¬rica, es un mito. Y aquí interviene otroelemento decisivo, analogía que hace deesta historia un verdadero poema en buscade un desenlace : se ignora el lugar de latumba de Cuauhtemoc. El misterio del

paradero de sus restos es una de nuestrasobsesiones. Encontrarlo significa nadamenos que volver a nuestro origen, reanu¬dar nuestra filiación, romper la soledad, iResucitar. I

24

Page 25: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Foto © Gisèle Freund, Parfs

Testigo del pasadoEsta pirámide de Teotihuacán permaneció durante siglos, hastahace pocos años, cubierta de polvo, escombros y maleza, testigomudo de un pasado precortesiano que nunca dejó de influir,aunque sólo fuera subterráneamente, en la formación del Méxicomoderno.

25

Page 26: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

De la Malinche...

En los orígenes de Mexico hay una figura femenina en la que de alguna manera se resumeel drama de la Conquista : Malintzin, la Malinche o doña Marina, la amante de Cortés, laindia que se somete al vencedor y con el que se mezcla de manera subordinada. En eldibujo de abajo, tomado de un códice de los primeros tiempos de la Conquista, elCódice Azcatitlán, aparece (extremo derecho) junto a Cortés, seguidos de un grupo desoldados españoles y varios cargadores indios.

Foto © Biblioteca Nacional, París

, Si se interroga a la tercera figura de latriada, la Madre, escucharemos una res¬

puesta doble. No es un secreto para nadieque el catolicismo mexicano se concentraen el culto a la Virgen de Guadalupe. Enprimer término : se trata de una Virgenindia ; enseguida : el lugar de su aparición(ante el indio Juan Diego) es una colinaque fue antes santuario dedicado a Tonant-zin, "nuestra madre", diosa de la fertilidadentre los aztecas. Como es sabido, la

Conquista coincide con el apogeo delculto a dos divinidades masculinas : Quet-

zalcóatl, el dios del autosacrificio (crea elmundo, según el mito, arrojándose a lahoguera, en Teotihuacán) y Huitzilopoch¬tli, el joven dios guerrero que sacrifica. Laderrota de estos dioses eso fue laConquista para el mundo indio : el fin deun ciclo cósmico y la instauración de unnuevo reinado divino produjo entre losfieles una suerte de regreso hacia las anti¬guas divinidades femeninas. Este fenóme¬no de vuelta a la entraña materna, bien

conocido de los psicólogos, es sin dudauna de las causas determinantes de la

rápida popularidad del culto a la Virgen.

Ahora bien, las deidades indias erandiosas de fecundidad, ligadas a los ritmoscósmicos, los procesos de vegetación ylos ritos agrarios. La Virgen católica estambién una Madre (Guadalupe-Tonantzinla llaman aún algunos peregrinos indios)pero su atributo principal no es velar porla fertilidad de la tierra sino ser el refugiode los desamparados. La situación hacambiado : no se trata ya de asegurar lascosechas sino de encontrar un regazo. LaVirgen es el consuelo de los pobres, elescudo de los débiles, el amparo de losoprimidos. En suma, es la Madre de loshuérfanos. Todos los hombres nacimos

desheredados y nuestra condición verda¬dera es la orfandad, pero esto es particu¬larmente cierto para los indios y los pobresde México.

Sí la Chingada es una representación dela Madre violada, no me parece forzadoasociarla a la Conquista, que fue tambiénuna violación, no solamente en el sentidohistórico, sino en la carne misma de lasindias. El símbolo de la entrega es doña

Malinche, la amante de Cortés. Es verdadque ella se da voluntariamente al Conquis¬tador, pero éste, apenas deja de serle útil,la olvida. Doña Marina se ha convertido

en una figura que representa a las indias,fascinadas, violadas o seducidas por losespañoles. Y del mismo modo que el niñono perdona a su madre que lo abandonepara ir en busca de su padre, el pueblomexicano no perdona su traición a laMalinche. Ella encarna lo abierto, lo chin¬

gado, frente a nuestros indios, estoicos,impasibles y cerrados. Cuauhtemoc ' ydoña Marina son así dos símbolos anta¬

gónicos y complementarios. Y si no essorprendente el culto que todos profesa¬mos al joven emperador héroe ala altura del arte", imagen del hijo sacrifi¬cado tampoco es extraña la maldiciónque pesa contra la Malinche. De ahí eléxito del adjetivo despectivo "malin-chista" recientemente puesto en circulaciónpor los periódicos para denunciar a todoslos contagiados por tendencias extranje¬rizantes.

Nuestro grito es una expresión de lavoluntad mexicana de vivir cerrados al

26

Page 27: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

a GuadalupeLa Virgen de Guadalupe, en torno a cuyo culto gira lo esencial del catolicismo mexicano,es una virgen india : Guadalupe-Tonantzin (diosa azteca de la fertilidad) la llaman aunalgunos peregrinos indios. Su aparición al indio Juan Diego tuvo lugar en una colinadedicada antes al culto de la diosa azteca. En esta Madre por antonomasia buscanconsuelo a su desamparo los indios mexicanos, como los que aquí vemos ante unaimagen ambulante de Guadalupe.

Foto © Marino Benzi. Editions du Chêne, París

exterior, sí, pero, sobre todo, cerradosfrente al pasado. En ese grito condenamosnuestro origen y renegamos de nuestrohibridismo. La extraña permanencia deCortés y de la Malinche en la imaginacióny en la sensibilidad de los mexicanos ac¬tuales revela que son algo más que figurashistóricas : son símbolo de un conflicto

secreto, que aún no hemos resuelto. Alrepudiar a la Malinche mexicana,según la representa José Clemente Orozcoen su mural de la Escuela Nacional Prepa¬ratoria el mexicano rompe sus ligas conel pasado, reniega de su origen y se aden¬tra solo en la vida histórica.

El mexicano condena en bloque todasu tradición, que es un conjunto de gestos,actitudes y tendencias en que ya es difí¬cil distinguir lo español de lo indio. Poreso la tesis hispanista, que nos hacedescender de Cortés con exclusión de la

Malinche, es el patrimonio de unos cuan¬tos extravagantes ni siquiera sonblancos puros Y otro tanto se puededecir de la propaganda indigenista, quetambién está sostenida por criollos y mes

tizos maniáticos, sin que jamás los indiosle hayan prestado atención. El mexicanono quiere ser ni indio ni español. Tampocoquiere descender de ellos. Los niega. Y nose afirma en tanto que mestizo sino comoabstracción : es un hombre. Se vuelve

hijo de la nada. El empieza en sí mismo.

Para los antiguos mexicanos la oposi¬ción entre muerte y vida no era tan abso¬luta como para nosotros. La vida se pro¬longaba en la muerte. Y a la inversa. Lamuerte no era el final natural de la vida,sino fase de un ciclo infinito. Vida, muerte

y resurrección eran estadios de un procesocósmico, que se repetía insaciable. Lavida no tenía función más alta que desem¬bocar en la muerte, su contrario y comple¬mento ; y la muerte, a su vez, no era unfin en sí ; el hombre alimentaba con su

muerte la voracidad de la vida, siempreinsatisfecha. El sacrificio poseía un dobleobjeto : por una parte, el hombre accedíaal proceso creador (pagando a los dioses,simultáneamente, la deuda contraída porla especie) ; por la otra, alimentaba la vida

cósmica y la social, que se nutría de laprimera.

Posiblemente el rasgo más característicode esta concepción es el sentido imperso¬nal del sacrificio. Del mismo modo que suvida no les pertenecía, su muerte carecíade todo propósito personal. Nuestrosantepasados indígenas no creían que sumuerte les pertenecía, como jamás pensa¬ron que su vida fuese realmente "suvida", en el sentido cristiano de la pala¬bra. Todo se conjugaba para determinar,desde el nacimiento, la vida y la muerte decada hombre : la clase social, el año, el

lugar, el día, la hora. El azteca era tanpoco responsable de sus actos como desu muerte.

Espacio y tiempo estaban ligados yformaban una unidad inseparable. A cadaespacio, a cada uno de los puntos cardi¬nales, y al centro en que se inmovilizaban,correspondía un "tiempo" particular. Paraellos había tantos "espacios-tiempos"como combinaciones poseía el calendariosacerdotal. Y cada uno estaba dotado de

una significación cualitativa particular,superior a la voluntad humana.

Religión y destino regían su vida, comomoral y libertad presiden la nuestra. Mien¬tras nosotros vivimos bajo el signo de lalibertad y todo la fatalidad griega yla gracia de los teólogos es elección ylucha, para los aztecas el problema sereducía a investigar la no siempre claravoluntad de los dioses.

El advenimiento del catolicismo modi¬

fica radicalmente esta situación. El sacrifi¬

cio y la idea de salvación, que antes eranelectivos, se vuelven personales. Lalibertad se humaniza, encarna en los hom¬

bres. Para los antiguos aztecas lo esencialera asegurar la continuidad de la creación ;el sacrificio no entrañaba la salvación

ultraterrena, sino la salud cósmica ; el

mundo, y no el individuo, vivía gracias ala sangre y la muerte de los hombres.Para los cristianos, el individuo es lo quecuenta.

, Ambas actitudes, por más opuestas quenos parezcan, poseen una nota común :la vida, colectiva o individual, está abiertaa la perspectiva de una muerte que es, asu modo, una nueva vida. La vida sólo se

justifica y trasciende cuando se realiza enla muerte. Y ésta también es trascenden¬

cia, más allá, puesto que consiste en unanueva vida. Para los cristianos la muerte

es un tránsito, un salto mortal entre dos

vidas, la temporal y la ultraterrena ; paralos aztecas, la manera más honda de

participar en la continua regeneración delas fuerzas creadoras, siempre en peligrode extinguirse si no se les provee desangre, alimento sagrado. En ambos sis¬temas vida y muerte carecen de autono¬mía ; son las dos caras de una mismarealidad.

Octavio Paz

27

Page 28: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

La muerte es una fiesta

Quizá en ningún otro país como en México es tan grande lafamiliaridad con la muerte. El mexicano lo mismo la festeja quese burla sarcásticamente de ella, se la come (literalmente) que laacaricia y la canta. Gusto que a otros pueblos puede parecermacabro pero que al mexicano le es perfectamente natural, aunen sus extremos más delirantemente imaginativos. He aquí unascuantas y expresivas muestras : 2) la Muerte en las festividadesdel Carnaval en Tlaxcala ; 1 y 41 dos orquestas mariachis

formadas por esqueletos y calaveras ; 3) una calavera de azúcarde las que es costumbre comer el día de Todos los Santos(detalle soberbio : ni siquiera falta el nombre de la persona aquien se ofrece o que la ofrece); 5) el esqueleto de Don Quijoteatacando lanza en ristre a los esqueletos de sus enemigos,grabado del gran artista mexicano José Guadalupe Posada (1851-19131, quien hace a la muerte mexicana, pelona y descarnada,protagonista de infinidad de sus obras.

I

Page 29: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

m *

& -

ftY^Sr.

tèài-

Foto Aimasy, Pans

Page 30: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

por Arturo Uslar-Pietri

A

DE LA SELVA

VENEZOLANA

LA VANGUARDIA

ARTÍSTICA

DE un modo sorprendente y signifi¬cativo un conjunto de artistaslatinoamericanos ha surgido en

ios últimos veinte años a la cabeza de uno

de los más nuevos desarrollos y transfor¬maciones de las artes plásticas.

En un paso más allá del arte abstractoy en la formulación de lo que habría queconsiderar como un nuevo lenguaje plás¬tico, lleno de posibilidades y de sorpren¬dentes hallazgos, han contribuido a creary definir una nueva dimensión de la obrade arte, que deja de ser un objeto, más omenos pasivo, de contemplación que elespectador mira desde afuera, para con¬vertirse en un espacio vivo y cambiante,dotado de movimiento que termina deconstruirse y de formarse por medio de laparticipación activa del expectador, elcual, en cierta forma, deja de serlo paraentrar en un sorprendente proceso decreación de formas y de espacio. Esto eslo que se ha llamado el cinetismo o artecinético. (*)

Ciertamente el cinetismo constituyemucho más que una escuela nueva, den¬tro de la sucesión cronológica y derivadade la evolución del gusto y de los mode¬los artísticos. El cubismo, el dadaísmo, elfuturismo o el surrealismo conservaban,fundamentalmente, la herencia de la rela¬

ción del espectador con la obra, que veníadesde el Renacimiento : el espectadorfrente a una creación sugestiva pero ajena,que conservaba las distancias tradiciona¬les entre el espectador y la obra y quecontinuaba el viejo juego de simular espa¬cio y movimiento. Había una genial simpli¬ficación pero no una innovación de mediosentre Monet y Kandinsky.

Los cinéticos hallaron los elementos de

un nuevo lenguaje y de una nueva rela¬ción. Ya la obra no simulaba el espacio yel movimiento sino que creaba su propiomovimiento y una nueva relación espacialcon el espectador. El espectador no con¬templa la obra sino que entra en ella, no

la mira desde fuera sino que participa en |ella. En algunos casos entra física y literal- 1(*) Véase El Correo de la Unesco de septiembre de1963.

ARTURO USLAR-PIETRI, venezolano, es uno de losescritores más destacados de América Latina. Entre

sus numerosas obras pueden señalarse las novelasLas lanzas coloradas (traducida a varios idiomas). El

camino de El Dorado y Oficio de difuntos, los volú¬menes de cuentos Red y Pasos y pasajeros y los librosde ensayos Letras y hombres de Venezuela y La otraAmérica. Ha sido profesor de literatura latinoameri¬cana de la Universidad de Columbia (Estados Unidos)

y actualmente es embajador de su país en la Unesco ymiembro del Consejo Ejecutivo de la Organización.

30

Page 31: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Gran parte de América Latina se halla situada en la región tropical o subtropical.Allí el espacio natural las selvas inmensas e impenetrables hasta lospelados altiplanos, desde los enormes ríos hasta las oceánicas llanuras lleva la

marca de la grandiosidad y de la amenaza, de lo cambiante y de la explosión de loscolores. En esta naturaleza inmemorial encuentra justamente su impulso y suinspiración una de las manifestaciones más vanguardistas del arte actual, elcinetismo, que cultivan algunos de los mejores plásticos latinoamericanos. De lanaturaleza tropical sudamericana (abajo) a las obras de tres artistas cinéticosvenezolanos como Jesús Soto, Carlos Cruz Diez y Alejandro Otero no hay más queun paso : el del arte. (Véanse la página 33 y las dos centrales en color)

V/O*

31

Page 32: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

mente dentro de ella, se mete dentro,

como se puede entrar en un bosque o enuna lluvia.

No ha dejado de ser motivo de sorpresay hasta de polémica que artistas venidosde la América Latina se hayan convertido,sin esfuerzo y de una manera casi espon¬tánea, en creadores del nuevo lenguajecinético en los grandes centros universales.

Con mucho de determinismo superficial

y simplista se ha llegado a pensar que,dada la evolución de la América Latina ylas condiciones de su circunstancia social

e histórica, no era éste el modelo artístico

que correspondía a esos artistas, ya quedeberían estar limitados, por su situaciónlocal, a alguna forma de realismo popularo de expresionismo político, sin lanzarse ala vanguardia de la búsqueda de nuevasformas y de nuevos lenguajes, que cons¬tituyen la avanzada de la creación artísticade Occidente.

La verdad es que no ha habido rupturaen estos artistas, en nada han renegadode su origen ni de su sensibilidad y quienlos trata y oye no tarda en descubrir lasólida continuidad de lo que hacen hoycon lo que son profundamente y con loque mantienen vivo y actuante en su con¬dición de latinoamericanos.

Yo me atrevería a decir más, y a adelan¬tar la posibilidad de que es su propiacondición de hombres de la América

Latina la que los ha llevado a situarse enesa avanzada de la nueva búsqueda delespacio y el movimiento. El arte cinéticono es una mera consecuencia de la máqui¬na y de la metrópoli, sino de la relaciónverdadera y cambiante del hombre con elespacio natural y con el movimiento de suparticipación. Y esto podría explicar, enbuena parte, la adecuación de una sensi¬bilidad latinoamericana a la expresión delcinetismo en arte.

Hay, ciertamente, una relación entre elhombre y el espacio característicamentelatinoamericana. El espacio natural no hasido nunca un mero telón de fondo parael latinoamericano sino una condición fun¬

damental de su ser, y un personaje predo¬minante y múltiple de su aventura existen-cial. La mayor parte de la América Latinase encuentra dentro de la zona tropical osubtropical, en dimensiones de paisajedesconocidas en Europa. No es sólo lamagnitud de las cordilleras nevadas einaccesibles, la extensión oceánica de lasllanuras, la alucinante vastedad de las

selvas impenetrables y la grandeza de losríos más caudalosos y cambiantes delmundo sino, además, la peculiar actividadde la naturaleza. Es una naturaleza en lucha

y en agresión. La vastedad y la magnitudamenazan al hombre. La vegetación proli¬féra e invade. Las inundaciones periódicascambian las llanuras en mares. Se pasa enhoras de la selva húmeda y cerrada a la

puna desértica de hielo y desnudez. Elhombre de la América Latina ha vivido porsiglos en pugna abierta con la naturaleza.

Junto a esto la naturaleza de los trópi¬cos es cambiante. Cambia de color y dedimensión durante el día. Se enciende en

la mañana de vida y de formas, se borraen una blancura deslumbrante en el me¬

diodía, y se fragmenta en una inagotablesinfonía de matices en el comienzo del

atardecer, para transformarse en la nocheen un delirante teatro de sombras impre¬cisas y de ruidos vivientes e ¡napresables.

"La naturaleza

es el

protagonistaprincipalde la aventura

del hombre

latinoamericano'

La relación del hombre con el espacioamericano tiene un carácter dinámico yriesgoso que es desconocido para el euro¬peo. Es un espacio, en su mayor partetodavía, no sometido ni penetrado por elhombre. Un espacio inasible de aventuray riesgo.

Está lejos de haber un acomodamientoestablecido y un equilibrio del hombre conla tierra que se mueve y tiembla, con latorrentera que se desborda, con la sabanaque se seca o se inunda, con el volcánque cubre de fuego el cielo o con los tai¬mados y hambrientos animales enemigos.

En el mestizaje cultural latinoamericanosigue viva, como una veta poderosa, laimpresión de desacomodo y desproporciónde los dos protagonistas venidos de fuera:el blanco y el negro. Tan sólo el indiohabía llegado a establecer una relación deproporción y equilibrio con la naturalezaamericana.

No tenemos testimonios de la reacción

del negro pero, en cambio, conocemosabundantemente el asombro y el desaso¬siego del español ante la naturaleza de laAmérica Latina. Un libro como el del jesuí¬ta José de Acosta, escrito a fines del sigloXVI, no es sino el eco de este asombro

ante el paisaje, las plantas y los anímales.Con sólo atravesar el Atlántico se les rom¬

pía bruscamente a los españoles una rela¬ción milenaria de proporciones, distanciasy aposentamiento del europeo con sumedio natural.

Esta ruptura de equilibrio y esta presen¬cia de nuevas dimensiones hubo de afec¬

tar su psicología y su propia actitud vital.Todas las proporciones quedaron súbita¬mente alteradas. Las alturas, las distan¬

cias, la significación misma de los fenó¬menos cambiaron en su relación con la

persona, ocasionando graves alteracionesen la mente. Debió de crearse una especiede psicosis de desequilibrio y una angus¬tiosa ruptura de las relaciones ordinariasdel hombre con su circunstancia. Todo se

había hecho distinto, cambiante y nofamiliar. La lluvia era aquel torrente quecaía del cielo y el río era aquel anchoespacio 'de agua sin la otra orilla.

No era sólo el miedo al indio guerrero,sino el pavor a la soledad desconocida yagresiva. No conocemos, pero es fácilsuponer, los inmensos desajustes psicoló¬gicos que sufrieron los conquistadorescuando sintieron derrumbarse y alterarsetodas las relaciones espaciales que habíancondicionado y asegurado sus vidas hastaentonces. Lo que debieron sentir los com¬pañeros de Orellana cuando descendían,empequeñecidos e infinitamente solos yextraños, por la vastedad inimaginabledel Amazonas. O lo que Soto y su puñadode hombres experimentaron cuando pene¬traban en las praderas del Misisipí, dondehubiera cabido cien veces la meseta cas¬

tellana y otras tantas la corriente delGuadalqivir. O lo que sintió Balboa cuan¬do vislumbró el Pacífico o lo que pensaronlos raleados grupos de aventureros queveían acabarse los días sin llegar al térmi¬no del mar de yerba de las llanuras delOrinoco o del Plata, o la visión sobreco-

gedora de los compañeros de Pizarro antela nunca vista muralla de piedra y de nievede los Andes.

Tal vez buena parte de las reaccionespsicóticas y criminales que se registraronen la conquista de América tengan algunaraíz en ese inmenso desplazamiento de loshombres y en la ruptura de todas sus rela¬ciones normales y tradicionales con elespacio.

Esta condición ha persistido en muchasformas en los descendientes del conquis¬tador español y del negro. Son los herede-dos de un desajuste que no ha sido nuncaenteramente resuelto. La adaptación deleuropeo, del africano y del asiático a ladimensión y características de su medio esmilenaria y se confunde con su propiapsicología. Pero la cultura, la expresión,el lenguaje y la visión de la historia y delpaisaje que ha predominado en la AméricaLatina son los del transplante del europeo.El mestizaje cultural no ha resuelto el

32

Page 33: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

problema sino que más bien ha mante¬nido vivas algunas de sus contradicciones.La visión que el latinoamericano actualpuede tener del volcán, del río, del caimán,de la serpiente, no son las del indio y seacercan más a las del europeo que expe¬rimentó el choque original del transplante.En buena parte la naturaleza sigue siendoamenazante y extraña para él. La sientecomo un inmensurable ser vivo que lorodea y lo combate y con el que no termi¬na de establecer un acomodamiento segu¬ro y estable.

"El arte cinético

reflejala relación

cambiante del

hombre con el

espacio natural"

La presencia de la naturaleza ha sidofundamental y dominante en la literaturalatinoamericana hasta nuestros días,

porque la naturaleza era no sólo el granhecho nuevo sino el protagonista principalde la aventura del hombre.

A mi modo de ver esta condición tuvo

su parte determinante en la importantepaticipacíón de artistas latinoamericanosen el desarrollo del moderno arte cinético.

Para limitarme a los casos que mejorconozco voy a referirme, entre muchos, a

tres grandes artistas venezolanos quevinieron a París al comienzo de los años

50, en la hora en que la pintura abstractaparecía haber agotado sus medios, y quecon su obra original contribuyeron a mar¬car nuevos rumbos.

Jesús Soto venía de lo más tropical yselvático de Venezuela. Había crecido en

Ciudad Bolívar, en la ribera del Orinoco yen el borde de la selva guayanesa, en unageografía donde, como acaso en ningunaotra, la presencia del hombre estaba redu¬cida marginalmente frente a la avasalladoray múltiple presencia de una naturalezallena de vigor, dinamismo y multiplicidad.No era un centro de formación artística

sino un viejo establecimiento humano a la lorilla del río inmenso y de la selva tropical f

Foto © Alejandro Otero, París

Las grandes estructuras metálicas, con elementosmóviles, de Alejandro Otero son un ejemplo notablede integración del arte en el paisaje. Integración dedoble sentido en la medida en que la obra se inspiraen el paisaje primigenio del artista y, a su vez, creapaisaje. Un paisaje de colinas, árboles,crepúsculos... que cambia con la hora y con la brisa.De ellas ha escrito el gran poeta y premio Nobelchileno Pablo Neruda : "Son a veces luz que vibra ;otras veces agua que juega. Estructuras vibrantes degran altura material, y espiritual". La que aquíreproducimos pertenece al grupo de tres construidoen Washington y que lleva el título de Delta solar.

33

Page 34: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

> impenetrable. La más grande presenciaque Soto conoció hasta su adolescenciafue la de la naturaleza selvática.

Después de hacer estudios en la Escuelade Artes Plásticas de Caracas y de haberpasado algún tiempo en Maracaibo ense¬ñando en una escuela de pintura, se vinoa París en plena y ávida juventud. Llega alParís de la postguerra en el que se ensaya¬ban anárquicamente todas las formas delarte abstracto. Soto mira con deslumbra¬

miento todas aquellas posibilidades y des¬pués de una breve etapa entra audazmentea explorar un camino nuevo, el del arte delmovimiento y de la participación delespectador.

Se convierte, de una manera rápida yasombrosa, en un creador y en un inno¬vador. Adivina que se puede crear unnuevo espacio en el que se integren laobra y el espectador y en el que el movi¬miento no sea simulado, o provocado pormedios mecánicos, sino creado por laespontánea y fatal participación del espec¬tador.

Más tarde él dirá que su propósito era"integrar el tiempo al arte". Ir mucho másallá de donde habían llegado Mondrian,Kandinsky y Malevich.

Comienza por sobreponer elementos, aveces translúcidos, a veces opacos, queactúan los unos sobre los otros en la

misma medida en que la visión del espec¬tador se desplaza. Lo que crea son verda¬deras visiones nuevas y fantasmas ópticosprovocados en los que de pronto, porobra "der ojo que mira, rayas y colores seponen a vibrar sin término creando una

sensación de espacio fluido y viviente y decuarta dimensión. Esos espacios nuevosque provoca Soto, en los que el especta¬dor entra y forma parte de una nuevarelación de movimientos y variaciones decolor, de línea y de distancia, recuerdanmuy válidamente características de algu¬nos aspectos del paisaje de su trópiconativo. Aquellos movimientos de varillasverticales superpuestas en espesura cam¬biante, aquellos colores y formas queparecen desplazarse y transformarse pro¬ducen un efecto muy semejante al de lostallos de palmas, lianas y heléchos en laespesura tropical, donde el juego de la luzy las distancias parece alterarlos conti¬nuamente.

Podría hacerse, y se ha hecho mediantela cámara cinematográfica, el paso inin¬terrumpido y revelador de aspectos de lanaturaleza tropical a obras de Soto. Haycomo una continuidad, una secuencia yunos rasgos que las acercan.

Esto no ha sido consciente, ni buscado,

en Soto, sino que le ha surgido en subúsqueda del nuevo arte por el propiocondicionamiento de su sensibilidad.

En su propósito constante de hacerparticipar al espectador y meterlo efectiva¬mente dentro de la obra ha llegado a lacreación de algunas formas nuevas, llenasde las más extraordinarias posibilidades deaplicación. Tales son los "espacios ambi-

, guos", donde en grandes compartimientosde plexiglás, por la superposición de lassuperficies transparentes y del movimientodel visitante, se provoca una animacióncontinua de formas, colores y distanciasen una vibración impresionante.

Una de sus más recientes experienciasen este sentido lo constituyen los "pene¬trables". Grandes espesuras colgantes decuerdas de nylon en las que el visitantepenetra, se pierde y se borra como en unaespesura selvática o en un aguacero tropi¬

cal. A la sensación visual se une la expe¬riencia del contacto físico con aquellainforme materia de múltiples tentáculosque nos cubre y rodea como el agua deuna catarata. Ha llegado Soto a crear"penetrables sonoros" construidos devaras metálicas resonantes que, al pasodel espectador, resuenan con una vibra¬ción metálica continua que se añade ala de la luz y a la de la forma. Literal¬mente, hay que abrirse paso a través de laobra y el acto tradicional de contemplarse convierte en una inescapable experien¬cia vital.

Es distinta la expresión de Carlos CruzDiez pero no su propósito, ni su concep¬ción del arte. Este Original artista quiereque sea el color solo quien hable y quiense manifieste en toda su potencia creadoraen la obra de arte. La mayor virtud de laluz es su proteica capacidad de cambio

continuo. Fue lo que los impresionistastrataron de atrapar en sus series de un

mismo tema, sin poderlo lograr sino deuna manera representativa y alusiva. CruzDiez se propone "poner en evidencia latransformación continua de la luz" y supoderosa autonomía creadora. El trata delograr en sus obras una "situación abierta"que evoluciona continuamente. Cree queen la pintura tradicional el tiempo estabacontenido y el espacio falsificado o simu-

SIGUE EN LA PAG. 6«

PAGINAS EN COLOR

Página de la derecha

Como en otras culturas, en la

latinoamericana la fiesta es una de las

más genuinas y ricas expresiones de lopopular. En ella se exaltan lossentimientos, los modos de vida y losvalores básicos de un pueblo. Arriba,una escena de la Danza de la

Conquista, en Ciudad de México, enque bailarines y cantantes representan,con toda la riqueza de formas y decolorido de la plástica popularmexicana, escenas de la invasión

española. Abajo, la macumba, danzapopular afrobrasileña de origen ritualcomo tantas otras. (Véase también

abajo la foto en blanco y negro)

Foto © Gisèle Freund, Paris

Foto Claus Meyer © Rapho, Paris

Páginas centrales

¿Dónde acaba la naturaleza y dóndecomienza el arte? ¿O viceversa? Juntoa una imagen natural de la selvasudamericana, dos obras artísticas queparecen prolongarla en el mundourbano del arte : una estructura de

varillas metálicas del venezolano Jesús

Soto (una obra semejante del mismoartista adorna una de las entradas de la

Casa de la Unesco en París) y unaestructura cromática de su compatriotaCarlos Cruz Diez. Hijos del trópico,ambos trasponen al mundo de lacreación el sentimiento del paisajeoriginal en que nacieron. (Véansetambién las págs. 31 y 33)

Foto © J. Soto, ParísFoto Claus Meyer © Rapho, ParisFoto © C. Cruz Diez, París

No hay ciudad ni pueblo de los Andes que no tenga sufiesta, en la que el gusto mitad indio mitad español porlos colores abigarrados, las formas fantásticas y losritmos rituales estalla a menudo con violencia. En la

música andina universalmente conocida losinstrumentos de origen indio, como la quena, semezclan a los importados de Europa.

34

Page 35: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

$ 1^^^^_

w^^9

1 Mt£

.^ta

Page 36: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

1 «Vil ^BBl

Jill

:1 1-1 1 i

Page 37: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

1J 1.

Page 38: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,
Page 39: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

por Pablo Macera

LAS CULTURAS

ANDINAS

DE AYER A HOY

Fotos Hans Silvester © Rapho, París

Cuzco, que fuera capital del antiguo Incario, fue transformada enciudad española por los Conquistadores. En el centro, casi todos losedificios reposan hoy sobre cimientos incaicos. Así, las dos culturas seyuxtaponen o se superponen, se funden a veces, y bajo lo español lateaun con fuerza la vieja cultura precolombina. A la izquierda, entrada altemplo inca de la Luna en Ollantay Tambo, cerca de Cuzco. Arriba, unacallejuela de Cuzco diríase que arrancada de la más pura Andalucía.

EL territorio de tres países sudame-mericanos (Ecuador, Perú y Bolivia)constituye el corazón geográfico de

la antiquísima cultura andina. Pero inclusootros países como Colombia y Chile par¬ticipan, aunque en menor grado, de esacultura cuya influencia se deja sentir hastaen el extremo norte de la República Ar¬

gentina. Millones de hombres en unaextensión de casi 3.500.000 km2 viven así

ajustándose, a veces sin saberlo, a modelosde conducta elaborados hace miles de

años.

Cuando decimos cultura andina no esta¬

mos únicamente hablando de los famosos

Incas emperadores del Cuzco. Los Incasfueron respecto de la cultura andina lo quefueron los romanos para la cultura medite¬rránea clásica o los antiguos persas enMesopotamia : no tanto el comienzo comoel punto final. Un simple dato cronológicopondrá en evidencia este hecho.

Los Incas comenzaron sus conquistas amediados del siglo XV y su imperio no teníamás de 80 años cuando fue destruido porlos invasores españoles. La cultura andina,en cambio, había empezado a formarsedesde muchos miles de años antes. Los

más viejos pobladores de lo que hoy esPerú o Ecuador fueron hace 20.000 años

contemporáneos del Perezoso gigante y delTigre con dientes de sable. Alrededor de3000-2000 a. de C. estos hombres inicia¬

ron un activo proceso de experimentaciónque les llevó a domesticar numerosas plan¬tas (primero pallar, frijol, algodón, papa,quinua ; después el maíz) y algunos anima¬les básicos (camélidos, conejillo de Indias,pato). De aquella época de despegue datatambién la invención de la cerámica quepermitió controlar mejor el uso del fuego yel agua y ahorrar trabajo es decir futuro y iocio. I

PABLO MACERA, peruano, es profesor de la Univer¬sidad de San Marcos de Lima. Especialista en historiaeconómica e historia del arte, dirige actualmente elCentro de Historia Rural Andina. Ha trabajado cordiversas instituciones de Canadá, Estados Unidos, Eu¬

ropa y Sudamérica.

39

Page 40: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Una artesanía

antiquísimay actual

Desde las primeras sociedades agrícolasandinas hasta la conquista española delsiglo XVI pasaron aproximadamente 3 o4.000 años. Numerosos imperios florecie¬ron y se derrumbaron durante ese tiempo.Numerosas culturas refinadísimas hasta la

sofisticación ocuparon diversas partes delgran territorio andino. Pero tres fueron lasfundamentales, aquellas que aun hoy díaimprimen unidad a los ecuatorianos, boli¬vianos y peruanos : Chavín, Tihuanaco ylos Incas (1000 a.C. ; 800 d.C. ; 1400 d.C.respectivamente). Para aquella época denada vale hablar de culturas peruanas,ecuatorianas o bolívianes pues Perú, Ecua¬dor y Bolivia no existían ya que son creacio¬nes muy recientes de apenas hace unos 150años. Sin embargo, por aproximaciónpodríamos decir que por sus probables orí¬genes geográficos Chavín fue una cultura"ecuatoriana", Tihuanaco una cultura

"boliviana" y los incas una cultura"peruana".

¿Cuánto de estas viejas culturas andinasdesapareció cuando llegaron los europeos?¿Cuánto subsiste todavía hoy? En los mis¬mos países andinos nadie lo sabe con cer¬teza ; y el asunto es materia de encendidasdisputas en que intervienen motivacionespolíticas más que científicas. Con frecuen¬cia, quienes en esos países sudamericanosrepresentan opciones políticas conservado¬ras prefieren verse como si fueran hombresoccidentales y cristianos. La cultura andinano es para los conservadores sino un com¬ponente menor y subordinado a una matrizcolonial de tipo europeo. Una variante máscautelosa de esta posición pro-colonial pre¬fiere hablar de una cultura mestiza" con el

fin de postular una reconciliación entre loandino y lo europeo, negando el estado deconflicto en que se encuentran.

La verdad parece ser muy diferente. Haypor supuesto en los países sudamericanosuna cultura occidental de tipo provinciano ;pero está vinculada a ciertos sectores urba¬nos cuyo porvenir se halla en debate. Encuanto al mestizo, es un grupo social difícilde definir científicamente y nunca, desde elcoloniaje, logró desarrollarse como entidadindependiente de lo andino y lo europeo.La cultura andina, en cambio, sigue consti¬tuyendo el marco de referencia global parauna gran mayoría demográfica. No habla¬mos únicamente de los indios que habitanen Ecuador, Perú y Bolivia pertenecientes adiversos grupos étnicos y lingüísticos (que¬chuas, aymarás, uro-chipayas, etc.). Nosreferimos también a todos los demás pobla- kdores de esos países. '

La cultura andina prehispánica se extendía por el sur hasta lo que hoy esla provincia de Salta, en el noroeste de la Argentina, rayando con Bolivia.En las zonas rurales de la región, donde el mestizaje es antiguo y muygeneral, existe una artesanía popular del tejido cuyos colores abigarradosy formas más o menos naturalistas o míticas recuerdan poderosamente alos productos de la artesanía textil incaica que se han conservado. En lostejidos modernos que aquí reproducimos pueden verse motivosclaramente indígenas como la serpiente y el cóndor o águila de doscabezas. La mezcla con temas actuales es manifiesta en las figurasantropomórficas. No faltan tampoco formas puramente abstractas cuyosignificado es difícil desvelar.

40

Page 41: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,
Page 42: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

y Por lo pronto, el 90% o más de susnombres geográficos provienen de laslenguas andinas. Pero, lo que es másimportante, es la cultura andina y no lacultura occidental la que determina elcarácter de la economía y las estructurassociales en los medios rurales del Ecuador,

Perú y Bolivia. Medios rurales dondevive la mayoría de los habitantes de esospaíses. Es cierto que los campesinossudamericanos fueron sometidos al régi¬men feudal de la Hacienda y que losespañoles quisieron introducir allí nuevoscultivos ' y nuevas tecnologías agrarias.Pero 400 años no han bastado para des¬terrar lo propio. Los antiguos cultivos(papa, quinua, maíz, yuca) siguen forman¬do parte principal de la dieta cotidiana. Esmás, las técnicas que emplean los campe¬sinos andinos son, en gran parte, lasmismas técnicas neolíticas que primabanantes del siglo XVI. El buey, el arado, larueda y los metales no han reemplazadoa los instrumentos de piedra y maderamanejados directamente por el músculohumano sin auxilio animal.

Pero no es sólo en el nivel económico

y tecnológico donde actúa la culturaandina. La encontramos también en las

organizaciones mentales más profundas yen las expresiones más elaboradas delarte y la religión. Las gentes del Perú,Ecuador y Bolivia no perciben, organizany representan el Espacio o el Tiempo comoun occidental. Los europeos piensan eltiempo en términos de progreso y estánseguros que todo futuro es necesariamentemejor que cualquier pasado. Para lacultura andina, en cambio, el tiempo his¬tórico tiene un desarrollo cíclico con una

fase de ascenso y otra de descenso queculmina en una gran Crisis Universal(Pachacútecl en que el munao puededesaparecer. Esta es sin duda la cosmo-visión correcta para sociedades como lassociedades arcaicas andinas sujetas a losciclos agrarios estacionales ; es también laexpresión más adecuada para una geo¬grafía donde tanta importancia tienen losdesastres naturales (terremotos, ¡nun-,

daciones, sequías, etc.). Esta ¡dea del Pa-chacútec explica la celebridad de algunoscultos católicos actuales como el Señor de

los Milagros de Lima, que no es sino elviejo dios Pachacámac vestido de cristia¬no. Lo mismo podemos decir del TaitachaTemblores del Cuzco.

De un espacio y un tiempo histórica¬mente amenazados, la cultura andina noobtuvo una resignación pesimista. Postuló,en cambio, que la misión del hombre erala de restablecer los equilibrios cósmicos.De ahí conceptos básicos como Tinkuy yPaíkíki. Tinkuy es pelea pero tambiénreunión y equivale a la agonía griega perocon una implícita promesa dialéctica de

Wiracocha danza en Oruro

42

Page 43: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

En el altiplano andino, desdeEcuador hasta el norte de la

Argentina pasando por Perú yBolivia, bajo las nociones y for¬mas actuales laten aun podero¬samente formas y mitos que vie¬nen del pasado precolombino.Un ejemplo famoso es el delCarnaval de Oruro, capital de laregión minera boliviana, cuyasceremonias están íntimamente

relacionadas con antiquísimosrituales indígenas de la regióndel lago Titicaca (arriba). La ico¬nografía católica hispana semanifiesta sin duda en las más¬

caras de los Diablos orureños

pero éstas son en lo esencial

variantes de imágenes religiosasmucho más antiguas como lacabeza del Dios de Chavín o el

Wiracocha de Tihuanaco. "Así,

en pleno siglo XX siguen dan¬zando los dioses andinos queeran adorados 2.000 años antes

de Cristo". A la izquierda, unade las primeras máscaras utiliza¬das en Oruro ; a la derecha,máscara moderna de diablo.

reconciliación. Paikikí es el doble o parmágico. que compensa e iguala. Hoy loshabitantes del Ande continúan todavía

pensando su propio acontecer en esostérminos de Pachacútec (crisis), Tinkuy(pelea-reunión) y Paikiki (par de equili¬brio). Cuando todo les falla, cuando la ideaoccidental del progreso es desmentida porla repetida infelicidad diaria, no caen poreso en el pesimismo. Saben que su funcióny su deber es asociarse a lo que ellosconsideren fuerzas positivas de su universopara vencer los Pachacútec.

Esta cosmovisión se refleja en el uso y

representación del espacio y en las simbo¬lizaciones poéticas. Como todas las socie¬dades agrarias de tipo despótico oriental,también las sociedades andinas tuvieron

preferencia por el empleo de grandesmasas de materiales en sus edificaciones.

Era la arquitectura que correspondía aculturas con enorme disponibilidad demano de obra. Esta regla de economía yde estética se mantuvo durante el coloniajepues los españoles tuvieron tanta abun¬dancia de obreros como habían tenido los

emperadores incas o los sacerdotes deChavín. Grandes masas arquitectónicasson también las egipcias y babilónicas.

Foto © Dominique Desjardins, Pans

Pero en cada caso hay un orden según elcual aquellas masas se organizan.

En la cultura andina fue el principio hori¬zontal. Así en la Costa como en la Sierra

todo se edifica en sentido horizontal de

modo que la obra humana se constituyecomo una figura paralela al paisaje. Nada seeleva imperiosamente, sino que cede ypenetra en las figuras naturales para madu¬rarlas y llevarlas a su plenitud. Parece comosi la función de la construcción humana no

fuese otra que poner en evidencia laspotencialidades ocultas en la figura natural, iLa función del hombre-arquitecto no es I

43

Page 44: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

ANALES DE CUERDAS. La cultura incaica, desprovista de escritura propiamentedicha, tenía en los quipus un substituto de notable eficacia. El quipu (dibujado en lafoto) está formado por cuerdas de diversos colores en las que se hacen una serie denudos. "Es increíble un cronista español del siglo XVI lo que en este modoalcanzaron (los incas), porque cuanto los libros pueden decir de historia y leyes yceremonias y cuentas de negocios, todo eso suplen los quipos tan puntualmenteque admiran." Los quipus siguen todavía en uso en muchas comunidades indias dela cordillera. Como sigue en uso este antiquísimo instrumento musical, el rondadoro zampona india.

otra que permitir que las cosas adquieransu propio ser.

Este principio lo hallamos tanto en untemplo costeño precerámico como en unsantuario de Chavín o de Tihuanaco. Per¬

siste también en las casas-haciendas del

coloniaje y la república. Lo hallamos enpleno siglo XX en el llamado Centro Cívicode Lima donde un joven arquitecto peruanoha empleado con una cruel franqueza elcemento para presentar grandes masas queno contradicen el paisaje urbano sino quelo vuelven a representar, sin que falte la iro¬nía india, que los criollos hicieron suya, deañadir pesados balcones de cemento enrecuerdo de los ágiles balcones de maderade la Lima antigua.

En ningún sitio, sin embargo, es más evi¬dente este principio de paralelismo y hori¬zontalidad que en el Cuzco, donde todo estriste y grnade. Nada hay más andino quela Catedral del Cuzco, hecha sin embargopor un arquitecto español. La Catedral seextiende macizamente en todo un costado

de la Plaza de Armas y parece una granparalela de la fortaleza de Sacsahuamán,como si ambas fueran dos grandes ande¬nes. Cada uno es el Paikíki del otro. A dife¬

rencia de la iglesia jesuíta de La Compañíaque se eleva vertícalmente como unadvenedizo.

No olvidemos que, en el caso de la cul¬tura andina, estamos hablando de una cul¬

tura cuyas bases económicas y sociales ori¬ginales fueron profundamente erosionadaspor la invasión europea del siglo XVI. Losvencedores exigían ser reconocidos comodominantes. Para subsistir los derrotados

debieron disimular. La disimulación es el

segundo principio de la cultura andina bajosu aspecto colonial (español y criollo).Desde el siglo XVI la cultura andina es unacultura bajo disfraz. En Ecuador,Perú o

Bolivia un Sí puede ser un No o también unSí, pero quien lo escucha no está seguro desaberlo mientras no comparta las normasdel misterio. En este lenguaje no sólo hay lanecesaria y legítima hipocresía del vencido.Es también un recurso táctico para preser¬var lo propio y triunfar sobre la culturadominante apoderándose de sus principa¬les poderes. Supone también el empleogeneralizado de la metáfora como modelocultural básico. El criollo y el blanco suda¬mericanos del siglo XX acusan de mentiro¬sos a los indios porque no comprenden

que la metáfora ha sido una estructurabásica de la cultura andina, estructurareforzada por la coyuntura colonial.

Daremos algunos ejemplos que incluyenun vasto territorio, desde Quito en el Norte(Ecuador) hasta las fronteras de Charcas

(Bolivia) con Argentina. Hablaremos decucharas, prendedores, llamas y lunas.

Hasta que llegaron los europeos las mu¬jeres andinas prendían sus mantas con un

prendedor en forma de luna creciente cuyacontraparte masculina era el Tumi o

cuchillo de los sacrificios. Esta ambiguaforma sexual (Luna-Tumi) no desaparecedurante la colonia y la República perotiende a ser reemplazada por la Cuchara deSopa que trajeron los españoles. Primerdato.

Asimismo, en el ritual andino había doscomponentes básicos : la Conopa (figurade piedra) en forma de Llama y el Kero

de madera con paredes rectas. LaCönopa Llama en piedra de base plana seconvierte en el Toro de cerámica con patas.El Kero se estrangula en el Ecuador y seconvierte en Copa. La seriación es suges¬tiva : de la Luna a la Cuchara ; de Llama

acostada a Toro de pie ; del Kero a la Copa.En cada caso las formas utilitarias de la cul¬

tura victoriosa han sido incorporadas por lacultura vencida y sometidas a su propioservicio, con renuncia aparente de sus for¬mas plásticas sacralizadás.

Por eso los quipus (forma de escritura)

44

Page 45: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

hace 10 años y le han puesto una casacaverde como si fuera un coronel actual.

Pero, al mismo tiempo, el Santiago deCallapa refleja una experiencia históricareciente ; en efecto, los indios de Oruro lehan añadido pelucas y anteojos que, segúnel sacristán, usaban los guerrilleros.

¿Cuál es el porvenir de la cultura andi¬na? Muchos temen que desaparezca en elcurso del proceso de industrialización quehan iniciado los países sudamericanos.Para muchos industrialización y moderni¬

zación equivalen a la adopción de losmodelos occidentales de cultura. A este

peligro añaden la peculiar composición declases" en los países andinos. Una minoríaétnica, de blancos y mestizos, dominadesde la ciudad a una gran mayoría deindios y mestizos rurales pobres. La cús¬pide de esta jerarquía está ocupada porlos criollos. Para comprender este fenó¬meno recordemos que las RevolucionesCriollas de Norteamérica (Washington)y Sudamérica (Bolívar) fueron fundamen¬talmente revoluciones oligárquicas. Enoaíses como Perú o Bolivia los criollos

gobiernan desde hace 150 años. Porbupuesto que estas gentes se consideran así mismos europeos nacidos en otrocontinente.

Digamos para terminar que la homo-geneización cultural a que tiende el mundoactual es un peligro para toda la especiehumana. La subsistencia y el desarrolloautómo de culturas como la andina am¬

plía el radio de experimentación y super¬vivencia de la especie misma.

Pablo Macera

simulan en sus nudos las trenzas de las

muchachas, como puede verse entre loschincheros (Perú) y urochipayas (Bolivia),puesto que ambos (palabra, trenza) salende la cabeza. Como lo prueba el que ningúnQuipucamayoc (encargado de los quipus)podía leerlos sin ponerse antes una pelucaque mimaba las trenzas de las muchachas,peluca-quipu que guardaba en una bolsa depiel de zorro, divinidad femenina y lunar dela astucia.

Un ejemplo todavía más célebre es el ae¡carnaval de Oruro (Bolivia) y el de Puno(Perú) que en realidad son uno solo yestán conectados a viejos rituales pre-hispanos que se practicaban entre loslagos Titicaca y Poopó. Las máscaras desus Diablos están sin duda influenciadas

por la iconografía católica pero son bási¬camente variantes de imágenes religiosasmucho más antiguas : la cabeza del Diosde Chavín (Piedra Raimondí) y el Wira-kocha de Tihuanaco (Portada del Sol). Así

en pleno siglo XX siguen danzando los

dioses andinos que eran adorados 2.000años antes de Cristo.

Concluyamos con una experiencia re¬ciente : hace unos meses viajé hasta elSantuario de Callapa en el Departamentode Oruro (Bolivia). Me interesaban sus

ingenuos murales sobre El Arca de Noé.Me sorprendió todavía más la figura delSantiago Apóstol que vela sobre el altarmayor. El Santiago Matamoros de laReconquista española se convirtió en elSantiago Mataindios de la Conquistaamericana. Los indios hicieron suvo el

Santiago y lo identificaron con el lllapa oRayo de su propia religión. Estos Santiagosindios fueron vestidos con todos los signosexteriores del poder enemigo. Los másantiguos parecen soldados europeos delsiglo XVI ; luego corregidores del XVIII ; yya en el XIX aparecen con los uniformesmilitares de los generales criollos.

Pues bien, el Santiago de Callapa hadado un paso más en el futuro. Lo handespojado de las sedas que vestía hasta

45

Page 46: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

LOS

EN América Latina quien no descien¬de de indio o de negro desciendede los barcos. Este dicho, popula¬

rizado aunque no de origen popular, ex¬presa a las claras el estado actual del mes¬tizaje étnico-cultural del continente. Por¬que algún abogado del diablo que volvierala vista a 400 años atrás podría decir quelos indios aborígenes de esastierras vieron descender al mismo tiempoa los blancos desde el puente y a los

negros desde las sentinas de los mismosbarcos.

Ese mestizaje se produjo desde el primermomento (el conquitador no trajo mujerconsigo) y se ha ¡do afirmando a tal puntoque sorprende quizá porque constituye unfenómeno singular (en oposición a la super¬posición de culturas que las conquistas ocolonialismos dejaron en otras latitudes) ypor la marcada heterogeneidad de suscomponentes étnicos (a diferencia delhomogéneo mestizaje europeo o norte¬americano).

Sin embargo, habría que demarcar lasregiones donde ha tenido lugar esa fusión yestablecer los niveles que ha alcanzado.Porque la situación de las Antillas, delCaribe y del Brasil, por un lado, o la de Uru¬guay, Argentina y Chile, por otro (dondelos indígenas se han extinguido o consti¬tuyen grupos sumamente minoritarios), noes la misma que en los países con granpoblación indígena Perú,Bolivia, algunas regiones de América Cen¬tral y México.

En estos últimos, cualquiera que sea el ""nivel del mestizaje étnico y cultural, existeen una u otra medida un fenómeno de acul-

turacíón : anglicismo entendido no como"la aproximación por contacto de un gruposocial o pueblo a otro en materia de culturao de arte" sino como "la transferencia de

elementos culturales de un grupo social opueblo a otro".

El mestizaje cultural, al igual que elétnico, supone una igualdad de participa¬ción en el cruce o mezcla, un intercambio

enriquecedor por adición de valores. Laaculturación, en cambio, entraña una pér¬dida : se trata de la imposición directa oindirecta o de la adopción de elementosculturales siempre ni forzosamente

válidos en detrimento de los valores de la |propia cultura I

JORGE ENRIQUE ADOUM, poeta y escritor ecua¬toriano, ha recogido gran parte de su poesía en susantologías Informe personal sobre la situación y Noson todos los que están (de próxima aparición). Suobra de teatro El sol bajo las patas de los caballos,sobre la conquista del imperio de los incas por losespañoles, ha sido traducida al inglés, al francés, alsueco y al polaco, y representada en diversos paísesde Europa y de Amerita Latina. Ha colaborado en elprograma de la Unesco de estudio de las culturaslatinoamericanas. Actualmente pertenece a la redacciónde El Correo de la Unesco.

46

Page 47: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

OLVIDADOS DE LOS ANDESpor Jorge Enrique Adoum

La preservación de laidentidad cultural,verdadero rostro de un

pueblo, no tiene por quéestar reñida con la

adopción de loselementos más valiosos

de otras culturas. Este

fenómeno de

asimilación cultural

suele comenzar cuando

individuos de los gruposétnicos que se hanmantenido aislados

entran en contacto con

los centros urbanos queson, obviamente, el

lugar a donde llegan enprimer término los"adelantos de la

civilización". En esta

fotografía de una aldeadel altiplano andinopueden advertirseminuciosamente

diversos valores o

rasgos, tradicionalesunos, modernos otros.

Cuando estos indígenasregresan a su

comunidad y a suvivienda, algo hacambiado ya en suforma tradicional de

cultura.

47

Page 48: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

, Cuando a menudo se habla de "incorpo¬rar al indio a la civilización" o de "integrarloa la vida de la nación" países en losque los indios constituyen del 40 al 80 porciento de la población total y representancon su trabajo agrícola o minero la fuenteprimordial del ingreso nacional quedaclaro que oficialmente se concibe la civili¬zación y la nación como blanco-mestizas yno como indígenas.

Pero, extrañamente, en América Latinaesta discriminación no es racial sino de

clase y, por ende, cultural. En casi todosesos países los indios tienen acceso, auncuando a veces pueda tratarse solamentede casos de excepción, a la educaciónsuperior, al poder económico e incluso alpoder político. Pueden llegar a ser profesio¬nales, propietarios, funcionarios, pero lacondición para ello ha sido la de renunciar atodos los elementos de su cultura : creen¬

cias, costumbres, vestidos, lengua.

La lengua oficial, la de la alfabetizaciónrequisito para ser ciudadano , la de las

relaciones económicas, es el español. En elque hablamos en América Latina hanentrado posiblemente ya todas las palabrasquechuas que le eran necesarias o útiles,pero el indígena asimilado que aprende elespañol renuncia a su lengua : primero,como símbolo de prestigio, luego porqueno le servirá para el trato en su nuevomedio y porque ya no tratará a los que fue¬ron sus semejantes. Sucede a veces queincluso los niños indígenas de la ciudad seniegan a responder cuando se les habla enquechua.

El paso de la situación de aislamiento delos grupos indígenas a la de su asimilaciónva de par con el paso de la economía desubsistencia a la de mercado que es la quedetermina los contactos interculturales, yasean intermitentes ya permanentes.

Los indígenas a los que se pretendeincorporar a la civilización, cuando se man¬tienen aislados de ella sólo pueden conce¬birse a sí mismos en medio y en función desu comunidad, con una autoridad pero sinclases. José Carlos Marlátegui decía que elindio "nunca es menos libre que cuandoestá solo", y no comienza a tener nuestranoción de la libertad individual sino cuando

entre en contacto con la cultura dominan¬

te, quizás porque precisamente es allídonde la pierde.

Ese inmemorial sentido de la comunidad

se expresa en instituciones tales como elprestamanos colectiva, y sinremuneración alguna, para techar la casade uno de sus miembros o la minga

colectivo en los campos comuna¬les, construcción de acequias Perosucede que la otra cultura, la oficial, apro¬vecha esta tradición de vida y trabajo encomún para obtener mano de obra ni si¬quiera barata sino gratis y con sanción demulta en caso de ausencia, para la cons¬trucción de carreteras, ferrocarriles, escue¬

las, iglesias. Mas, aunque los indígenasentren en contacto con elementos cultura¬

les nuevos herramientas, nociones

de otra arquitectura sería un eufemismocómplice hablar de mestizaje cultural.

El indígena de los grupos aislados del alti¬plano andino dice mucho más frecuente¬mente "nosotros" que "yo". Y a menos deque se trate de una respuesta a una pre

gunta precisa, difícilmente dirá "tengo".Quizá porque tiene poco, pero más aunporque, al igual que la comunidad, no tienela noción de poseer. Esta la adquiere, juntocon la de individualismo, al entrar en con¬tacto con la aldea o la ciudad blanco-

mestiza. (También adquirirá, entre muchosotros "valores" de diversa índole desco¬

nocidos hasta entonces, el adulterio, la

prostitución, la explotación de la mujer ola explotación a secas).

El campesino del antiplano puede com¬prar en la ciudad ojotas "modernas", queson la reproducción de su calzado tradicio¬nal salvo que la suela de soga ha sido susti¬tuida por una de neumático de automóvil, osea de mayor duración. Pero si compra unabicicleta entonces dirá "tengo" ,cuando regresa al campo, con mayor fatigay rapidez que sobre un asno, con la mujerdelante, el hijo detrás y la oveja sobre loshombros, interesa saber hasta qué puntocomienza a sentirse diferente de los demás

y, sobre todo, a quién beneficia ese ahorrode tiempo, particularmente si trabaja paraotro.

Con el éxodo a la ciudad, cada vez másfrecuente dado que la introducción de laagricultura mecanizada ha reducido lanecesidad de mano de obra, los indígenasvan, por lo general, a sumarse a un subpro-letariado marginalizado. Cuando alguno deellos logra un relativo éxito económico,pasa a gozar de la consideración moderadaque se tiene por el mestizo ; si el éxito con¬tinúa o es mayor, de la consideracióndebida al blanco. Y este "ascenso" se

refleja en una situación legal distinta : nosólo en materia de derechos y de influen¬cias sino que, por típicamente indígenasque sean sus rasgos físicos, ese ex indio

puesto que de tal sólo guarda el origenétnico habiendo renegado de su culturaobtiene un pasaporte en el cual el funciona¬rio competente, sin que nadie se lo pida osugiera, escribirá en lo tocante a su filia¬ción : "Raza blanca".

Rostros de la Cordillera

48

Page 49: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Tales son los extremos del aislamiento yde la integración. Pero entre ambos seadvierten las etapas de una progresión quepor ahora parece irreversible. Sin caer en elpaternalismo blanco-mestizo que durantemucho tiempo predominó en la literatura,la antropología y la sociología, y lejos de laidealización de la sociedad indígena pura,cabe preguntarse, en cada caso concreto,si ha habido un enriquecimiento recíproco,un verdadero mestizaje de dos o másculturas.

Son los creadores de modelos de "alta

costura" quienes de pronto imponen enEuropa o en América la moda del poncho ode la utilización en los tejidos de los moti¬vos zoomórficos geométricos de los indíge¬nas del altiplano andino ; pero cuandoéstos, en Ecuador, por ejemplo, al tejer susalfombras los reemplazan por motivos flo¬rales o diseños persas ligeramente entrevis¬tos en un catálogo extranjero, no lo hacenpor decisión personal sino por una imposi¬ción del gusto urbano, es decir de la

demanda del mercado. También se debe a

ella la aparición de esos cántaros de losindios de las tierras altas de Guatemala,hermosos por su forma y su decoración tra¬dicional, pero hechos hoy de plástico.

Es verdad que en los museos del mundocentenares de miles de personas enrique¬cen su cultura con las exposiciones de arteindígena prehispánico ; pero los habitantesdel altiplano no llegan siquiera a enterarsedel acontecimiento, a veces desconocenese arte y, lejos de continuar la tradición desus antepasados recientes por lo menos,fabrican ahora una cerámica en la quereproducen personajes de Walt Disney.

Si alguien pretende afirmar que la con¬trapartida de este "enriquecimiento" cultu¬ral se encuentra en el consumo turístico de

las artesanías locales auténticas, preciso esseñalar que 'la diferenciaradica en que el turista adquiere un objetodecorativo sin perder nada por ello. Encambio, la adquisición de artículos de plás

tico por el indio obedece a un confusodeseo de "ser moderno", de "parecersea", que es el comienzo de su incorporacióna una cultura "superior". La misma actitudse advierte en los jóvenes campesinos quelos domingos suelen lucir ropas de la ciu¬dad incompatibles con sus labores agrí¬colas y peor aun cuando se enorgulle¬cen de vestir, como algunos jóvenes de lacapital, camisetas con la figura de Tarzán ode Batman.

En una pequeña población ecuatoriana,en la entrada misma de la selva amazónica,las niñas del colegio participaron hace pocoen la celebración de la fiesta local, vestidascon trajes de papel crêpé, en actitudesestáticas, como de bailarinas fotografiadasdurante una representación de El lago delos cisnes, en un camión decorado que imi¬taba la forma de una góndola. Sería diver¬tido indagar por qué caminos impenetra¬bles por qué canales, mejor llegó eseelemento de la cultura veneciana a- la selva. \

Y no se trata de un caso aislado. Pero el I

En la medida en que se mantienen en una situación deaislamiento vez más rara indígenas de los Andesperuanos y bolivianos, cualquiera que sea su edad o sucondición económica, guardan celosamente su tradicióncultural con todo lo que ella entraña : ocupaciones, vestidos,adornos. Y sobre todo su concepción de la vida en medio desu comunidad, hasta el punto de que la noción de la soledadles resulta metafísicamente incomprensible.

Foto © Gaillarde, París

49

Page 50: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

h hecho sería menos grave si pudiéramostener la certeza de que a esas chiquillas seles había enseñado al mismo tiempo algosobre la cultura italiana y, ante todo, sobresu propia cultura. (Ignoro si en los carnava¬les de Venecia o de Niza desfilan canoas

con "indígenas" de la Amazonia ; en todocaso, dudo de que alguien pudiera conside¬rar esas malas imitaciones "exóticas" como

un enriquecimiento cultural.)

La música culta latinoamericana aveces la europea se inspira en los ritmosindígenas pero no emplea sus instrumen¬tos ; por su parte, los indígenas siguentocando siempre su propia música, salvoque a la quena, al rondador y al tambor tra¬dicionales, les han añadido la guitarraespañola popular que se ha vueltolatinoamericana por excelencia yviolines, arpas, ocarinas, armónicas y ban¬doneones.

, Con ellos van a sus fiestas que suelencoincidir con las del santoral católico. Mas,una vez terminada la misma o la

procesión en la cual la Virgen lleva unmanto al que le han añadido billetes debanco, monedas, cereales secos, trozos deperiódicos y de espejos, tal como en laarmazón que portan sobre la cabeza y loshombros los danzantes de sus fiestas

inmemoriales los indígenas celebran suancestral rito, "pagano" para la cultura otraque ignora qué profundos significadosmitológicos encierra.

En esas fiestas, a la chicha tradicional se

ha incorporado la cerveza, y aunque consti¬tuyen las raras oportunidades en las que losindios comen carne, no pueden tomarleche (ni siquiera existe la palabra en que¬chua), ni huevos, porque están destinadosal mercado de la otra cultura. Hay quienesjamás los prueban, aun cuando alguien lesofrezca esos productos. Así, al exiguo régi¬men alimentario impuesto por la pobreza,escaso en proteínas y excesivo en hidratosde carbono, se suman tabúes cuyo origeneconómico resulta innegable.

Acaso su única revancha, si lo supieran,consistiría en decirse que las patatas y eltabaco han conquistado el mundo entero yque en la comida cotidiana de la ciudad eincluso en las recepciones a visitantes ilus¬tres es de buen tono ofrecer platos de lacomida "típica indígena"... que la mayorparte de los indígenas no puedenpermitirse. Y que no siempre es típica.

¿Grupos aislados? Cada día se va vol¬viendo más difícil encontrar a los indígenas

en esa situación. Inclusive entre los indios

cunas, de Panamá que optaron por vivir enel archipiélago de San Blas (dicen que tiene-365 islas, como los días del año) y quehan preservado su cultura preservándosede los contactos con el continente, uno desus nelejkantules (suerte de sacerdote,

hechicero, médico y sabio a la vez) decía :"Antes era fácil luchar contra eso que lla¬man civilización, porque eran hombres.Ahora es peor, porque son máquinas".Hablaba de la televisión. Puesto que, gra¬cias a la civilización, para establecer con¬tactos culturales ya no es preciso que elindio vaya a sitio alguno, sino que los obje¬tos, portadores de conceptos, vienen a ély se instalan en su casa.

El radiorreceptor de transistores ha inva¬dido toda la región andina. Pero entre lavida real de las comunidades indígenas y laimagen idealizada de esa otra vida urbanaque propagan tales aparatos, existe unacontradicción tan brutal que debe produ¬cirse más de un desequilibrio psicológico.En efecto, la radio y la televisión pueden

contribuir a crear en los indígenas la sensa¬ción de que su sistema de vida esanticuado, de que su vivienda es fea y anti¬higiénica ; una dependencia respecto deartículos superfluos ajenos a su tradición yde los productores de esos artículos, y unafrustración por el menosprecio de sus valo¬res culturales aborígenes.

Parece que ahora es ya imposible con¬servar culturas químicamente puras. Entodo caso se trataría de que cada una deellas asimilara y absorbiera los elementosque considere más adecuados y útiles y nolos que se le impongan mediante cualquierforma de poder. Porque en la búsqueda ypreservación de la identidad cultural en queestán empeñados nuestros pueblos, es pre¬ciso ante todo reconocerse en un espejosin caer en el peligro de contemplarse yahogarse como Narciso en la fuente. Pero acondición de que no sea un espejo cón¬cavo o convexo que deforme el rostro quese trata de identificar.

Jorge Enrique Adoum

¿MESTIZAJE CULTURAL O ACULTURACION? La radio y la televisión, así como el cine,constituyen instrumentos de utilidad incalculable para la ampliación de la educación. Perola dudosa calidad de la película que una "moviola" ofrece a estos dos indígenas en unaplaza de La Paz puede dejarnos perplejos respecto de la opinión que luego tendrán tantode su tradición cultural como de la civilización y el progreso. Y quienes van a ganarseduramente la vida en la ciudad que acaso pertenecieron al mismo grupo étnico que elindígena que pasa junto a ellos renunciarán más fácilmente a sus valores ancestralesque a los atractivos y ventajas que les brinda un centro urbano.

50

Page 51: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

PARAGUAY

ISLA RODEADA

DE TIERRA

por Augusto Roa Bastos En el Paraguay, como en la mayor parte de los países de América Latina, laproporción de la población rural es sumamente elevada. En efecto, en esepaís llega a cerca del 70 por ciento de la población total. En su inmensamayoría está formada por indígenas que se comunican entre síque sea la agrupación tribal a la que pertenezcan en guaraní, lengua que sehabla no solamente en el campo sino en todas las ciudades del país.

EN un pequeño ensayo puDlicadohace muchos años escribí que en elpanorama general de la cultura his¬

panoamericana el Paraguay ha sido siem¬pre una tierra poco menos que descono-nocida : una isla rodeada de tierra en el

corazón del continente. En aquel estudiollamaba la atención sobre el hecho de quelos indagadores de la cultura de nuestraAmérica no se habían esforzado mucho en

desentrañar las causa que hacen de la

AUGUSTO ROA BASTOS, paraguayo, es actualmen¬te profesor de la Universidad de Toulouse (Francia!.Publicó primero un libro de cuentos El trueno entrelas hojas antes de iniciar su carrera de novelistacon Hijo de Hombre, que le valió un reconocimientointernacional. Pero es su obra más reciente. Yo el

Supremo, la que le ha dado a conocer ampliamenteen Europa, en muchas de cuyas universidades ha sidoincluida en los programas de estudio de la literaturalatinoamericana.

cultural paraguaya una terra incognita,vedada al parecer por misteriosos motivosa la exploración y al análisis.

Ocurre, sin embargo, que el Paraguaycomo nación y como pueblo es uno de lospaíses que en América han sufrido la mayorcarga de peripecias y vicisitudes. Su histo¬ria parecería, si no fuese objetivamente real,la fabulación de un dramático destino, de

una tragedia ininterrumpida, con tramos degrandeza y plenitud, sin embargo, muyaltos y significativos.

Los principales hechos podrían resumirsecomo sigue :

Desde esta isla rodeada de tierra se

desarrolló la expansión colonial en buscadel alucinante, del huidizo mito deEldorado.

En el tiempo de los comienzos lapequeña isla configuró la mayor posesión iterritorial que detentaba en una sola zona I

51

Page 52: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

, administrativa la dominación colonial. ElParaguay fue entonces la Provincia Gigantede las Indias que abarcaba casi medio con¬tinente, desde las tórridas selvas tropicaleshasta los hielos del extremo sur en la Tierra

del Fuego. La Provincia Gigante tuvo suapogeo hacia finales del siglo XVI.

Cuando el espejismo del áureo metal seesfumó, sólo les quedó a los conquistado¬res la enorme cantera humana de la pobla¬ción indígena, que les resultó al final unamagra compensación. Comenzaron aexplotar "el oro de sus cuerpos", ese metaloscuro, viviente, que en lugar de agotarsese propagaba sin cesar, proveyéndolos demano de obra esclava en la economía de

subsistencia agraria de las Encomiendas deIndios ; de mujeres esclavas en los serra¬llos ; de una descendencia mestiza, la de losque luego serían los mancebos de la tierra ocriollos, los que a su vez iban a superar asus padres blancos en la opresión de sushermanastros nativos que no habían tenidoel "privilegio" de ser hijos de europeos.

Hacia fines del siglo XVI y comienzos delXVII, la inmensa nebulosa de la Provincia

Gigante empezó a contraerse, a disgregar¬se. Perdió el mar. Inauguró su destino deisla de tierra rodeada de tierra, bajo los peo¬res auspicios. Se convirtió en la provinciapobre que la administración metropolitanaabandonó a su suerte.

Entretanto, en la provincia pobre había

surgido el increíble experimento de lasreducciones jesuíticas que con el nombrede .República de los guaraníes y combi¬nando la evangelización con la explotaciónmaterial de la población originaria, instauróun imperio dentro de otro imperio : el impe¬rio jesuítico que acabó enfrentando al de laCorona y desbordando sus intereses eco¬nómicos con su famoso régimen de divi¬sión y explotación colectivista del trabajo.

En la provincia pobre del Paraguay acon¬teció también el primer movimiento insu¬rreccional de carácter masivo contra el

absolutismo metropolitano. Entre 1717 y1735 estalló la revolución de los comuneros

que, en cierto modo, era la continuación enAmérica del levantamiento comunero de

Castilla contra la dominación usurpadorade Carlos V. La revolución comunera en el

Paraguay duró prácticamente hasta 1737.

En 1767, treinta años después de estosacontecimientos memorables, los jesuítasfueron expulsados por Carlos III, unmonarca que vio ya claramente en el"imperio" instaurado por los hijos deLoyola no sólo un bastión casi inexpugna¬ble erguido contra la autoridad real sinotambién un ejemplo peligroso para el régi¬men abusivo y compulsivo de la administra¬ción colonial. Primero, los jesuítas desa¬rrollaron un sistema de organización espiri¬tual y temporal más humano que el de lasencomiendas ; segundo, este sistema, el

primero de su tipo en América, preservó lalengua y la cultura de los indígenas, almismo tiempo que sus modos tradicionalesde producción. No fue raro entonces quealgún cronista hablase del "régimen comu¬nista" establecido en las reducciones :

república-imperio comunista. La confusiónsemántica de estas denominaciones no

desdibuja sin embargo la vigorosa realidadde aquel experimento que anticipó en casiun siglo la instauración de un estado autár-quico, independiente y soberano en elParaguay.

Este estado autárquico que comenzó ainstaurarse bajo la dictadura vitalicia deldoctor José Gaspar Rodríguez de Francia(1816-1840) y alcanzó su auge durante losgobiernos de Carlos Antonio López yFrancisco Solano López, su hijo, fuedestruido y arrasado a sangre y fuegoen 1C70, a lo largo de la guerra de cincoaños, llamada de la Triple Alianza, que laArgentina y el Imperio del Brasil, arras¬trando al Uruguay, desataron contra elParaguay en 1865, en una confabulaciónsecreta que contó con el patrocinio delimperio británico.

Esta guerra de depredación y de con¬quista diezmó la población viril del Para¬guay, lo sometió a las exacciones y a lacontinuada dependencia de los países ven¬cedores. Este largo martirio de todo unpueblo, celoso de su independencia y

52

Page 53: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

La urdimbre

y la trampaEl arte del tejido degeneración en generación ha constituidodesde tiempos remotos una de lasocupaciones femeninas más importantesde la población indígena del Paraguay.Pero la fabricación de ponchos, conmotivos decorativos "típicos", como losque tejen estas dos campesinas endesmedro de la tradicional confección de

camisas de encaje obedeceindudablemente a una imposición debidaal mercado urbano del turismo. (No

olvidemos que el Paraguay, atravesadopor el Trópico de Capricornio, es un paíscálido cuya temperatura media anual es de23 grados). En cambio, el "tejido" decercas de los pequeños ranchos del campoparaguayo parece estar reservado a losvarones.

soberanía, quebró la línea de su destinohistórico y convirtió al Paraguay, que habíasido el país más adelantado de AméricaLatina, en uno de los más pobres y atra¬sados.

Sobre el fondo de este complejo entrela¬zamiento de los hechos capitales de su his¬toria y su aislamiento geográfico deben sersituados los problemas de la cultura para¬guaya. Sólo de este modo pueden plan¬tearse correctamente las tentativas de

aproximación a su realidad material y cultu¬ral, a los enigmas de su destino comonación y, en consecuencia, al drama de suexpresión.

Es aquí, en el plano de su expresión,donde aparecen primeramente las dificul¬tades más agudas para la comprensión dela "incógnita paraguaya". Al aislamientogeográfico se superpone el aislamientoidiomático ; al cerco de su mediterraneidad,el doble cerco bilingüe : la coexistencia,desde hace cuatro siglos, de dos idiomas,el castellano y el guaraní lengua delconquistador y la lengua del conquistadoque sirven paralelamente, aunque no com¬plementariamente, como instrumentos decomunicación a toda una colectividad.

Este es un caso único en América Latina.

No existe ningún otro país en el áreahispanoparlante que ofrezca las mismasparticularidades o parejas similitudes yanalogías.

SIGUE EN LA PAG. 63

Cuna de una nación

La Casa de la Independencia, en Asunción, de donde en la noche del 14de mayo de 1811 salieron los patriotas conjurados a intimar rendición algobernador español Bernardo de Velazco. Este cedió sin derramamientode sangre y un mes después se proclamaba la independencia de laRepública del Paraguay. Asunción es, de todas las capitales de paíseslatinoamericanos con alta población indígena, la única en la que existe unmarcado bilingüismo (español-guaraní), aunque se ha advertido ya que lasgrandes concentraciones urbanas de ese país tienden cada vez más a unmonolingüismo español.

Foto © Jesús Ruiz Nestosa, Paraguay

Page 54: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

por RobertoFernández Retamar

LO QUE ESPAÑANOS LEGO

Una respuestaa la Leyenda Negra

LA estimulante discusión, reverdecidaestos años, en torno a la culturalatinoamericana ha llevado a des¬

tacar la genuinidad de nuestras herenciasindígenas indoamericanas o africanasy a señalar las distancias o, si se quiere,las "simpatías" y las "diferencias" con"Occidente". Esto último es imprescin¬dible, pues si no somos europeos, sísomos en cambio, como dijo el chilenoAlejandro Lipschuptz, "europoides".

Pero hay otra fuerte herencia que casinos atrevemos a llamar intermedia : ni

indígena ni, en rigor, "occidental", sino alo más "paleoccidental":la herencia ibérica.

Que una parte de nuestra cultura pro¬viene de fuente española, es obvio. Aun¬que hablar de "fuente" implica usar unametáfora, y aunque no pueda exagerarseel peso de aquella parte en la elaboraciónulterior de nuestra cultura, tampoco puedeminimizarse, y todavía menos pretenderseborrarla de un plumazo. Es mucho másque la lengua lo que recibimos de España.Pero incluso en la lengua se revela la formapeculiar como ocurrió esa recepción.Ramón Menéndez Pidal, al hablar de la

unidad del idioma, explicó : "Hay, pode¬mos decir, dos tipos de lengua españolaculta, como hay dos tipos de inglés : unoeuropeo y otro americano, distintos fun¬damentalmente por algunas peculiaridadesde pronunciación". Esa diferencia visible(o, mejor, audible), que también puedellamarse riqueza, no implica, por suerte,riesgo de fragmentación de nuestro idioma,ya que "los pueblos en que se fraccionóel Imperio español se comunican hoy entresí mucho más que cuando formaban unsolo Estado". La unidad de nuestro idioma,

pues, sin mengua de los enriquecimientosque cada zona le aporta, se ha conservado.

Más allá de la lengua la situación es,desde luego, mucho más compleja. A loshispanoamericanos nos gusta repetir, enrelación con los españoles, que no des-

ROBERTO FERNANDEZ RETAMAR, poeta y en¬

sayista cubano, es profesor de la Universidad de LaHabana y director de la revista Casa de las Americas.Antologías de su poesía se han publicado en francés,ruso, italiano, inglés y serbo-croata. Su ensayo Call-ban. Apuntes sobre la cultura en nuestra América hasido traducido al francés, inglés, italiano, portugués yhúngaro. En Poesía reunida y A quien pueda interesarha recogido sus poemas desde 1943 hasta 1970. Entresus otros libros cabe citar Ensayo de otro mundo (LaHabana, 1967) y Lectura de Martí (México, 1972).Sobre el tema del artículo que aquí publicamos haaparecido un ensayo mucho más extenso en Casa delas Americas.

54

Page 55: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

cendemos de los que quedaron, sino delos que vinieron, cuyos hijos dejaron yade ser españoles para hacerse, primero,criollos y luego, mezclados con otrasetnias, latinoamericanos. Este planteo eslógico : hace más de siglo y medio que laAmérica española inició su separaciónpolítica del maltrecho y decadente Imperioespañol, el cual perdería sus últimas pose¬siones americanas, Cuba entre ellas, en1898. Y, por otra parte, la primera defi¬nición de Hispanoamérica se hace encontrapunto con España y supone, nece¬sariamente, señalar las diferencias conésta : señalamiento complejo, en el que el

énfasis en destacar lo que nos distinguede la vieja metrópoli, sin generar solucionesverdaderamente propias, ayudó a quemuchos sucumbieran ante las propuestasde nuevas y voraces metrópolis : como sicambiar de amo, según advirtiera Martí,equivaliera a ser libres.

La asunción de tales propuestas "occi¬dentales", que fascinaban a ciertos gruposhispanoamericanos ávidos de moderni¬zación, fue facilitada por el estado lamen¬table en que se encontraba España y laexplotación inicua a que sometía a estastierras donde surgían nuevas naciones ;pero a ello coadyuvó también el hecho de

que España y lo español habían estadomarcados, desde el siglo XVI, por unaferoz campaña adversa que se ha dado enllamar la Leyenda Negra.

En apariencia, esta Leyenda Negra fueprovocada por el compartible rechazo alos crímenes monstruosos cometidos en

este Continente por los conquistadoresespañoles. Pero el menor respeto a laverdad histórica muestra que esto essencillamente falso. Los crímenes existie¬

ron, sí, y fueron monstruosos. Pero,vistos desde la perspectiva de los siglostranscurridos desde entonces, no más

SIGUE EN LA PAG. 58

Bajo la dura regla de la explotación del indígena y del Imperio (a la Izquierda, un virrey deNueva España en el siglo XVIII, pintado en estilo rococó), España creó enAmérica Latina, fundiéndose física y culturalmente con el medio americano, un nuevo tipode cultura que ni era ya propiamente español ni tampoco indígena. Mientras el español sevolvía criollo o mestizo, su cultura y su arte se volvían coloniales. Plástica manifestaciónde este cambio es el arte barroco iberoamericano (véanse las páginas 56 a 58). En estainmensa obra de creación cultural de la que surgieron universidades e iglesias, obrasliterarias y obras de arte, Portugal acompañó a España en sus dominios del Brasil, dondela influencia peninsular se manifiesta en el barroco "clásico" de un Aleijadinho o en elsofisticado rococó de, por ejemplo, este interior de una iglesia de Ouro Preto (abajo).

55

Page 56: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Un continente barroco

Foto © Companhia Melhoramentos de Sao Paulo.Tomada de Historia da Arte Brastleira

El barroco es, en opinión generalizada, lamanifestación esencial del arte

latinoamericano. "Nuestro arte AlejoCarpentier fue siempre barroco : desde laespléndida escultura precolombina y el de loscódices hasta la mejor novelística actual,pasando por las catedrales y monasterioscoloniales". Los modelos de ese barroco

están sin duda en la península ibérica, o en elresto de Europa, pero ello no empece a suesencial y peculiarísimo carácterlatinoamericano. El llamado "arte colonial" no

es una simple extensión del arte español oportugués. Es un nuevo avatar del barroco.He aquí unos cuantos ejemplos : 1) uno de losfamosos profetas que el Aleijadinho, artistamulato brasileño, esculpió para la terraza dela iglesia del Buen Jesús de Matosinhos enCongonhas do Campo (Brasil) ; 2) PalacioEpiscopal de Lima, joya de la arquitecturacolonial ; 3) detalle del interior de una iglesiade Bahía (Brasil), cuyo delirio de formasrecuerda al de tantos otros monumentos

latinoamericanos, como la famosa iglesia deTepotzotlán (México) ; 4) retrato de unaprincesa inca del Cuzco (siglo XVII) ; 5)pechina del templo de Santiago de Pomata(Perú) en que el artesano indígena adaptómotivos y formas del arte andaluz,profundamente impregnado a su vez por el delos árabes españoles.

56

Page 57: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,
Page 58: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

ARABESCOS INCAICOS. Cúpula del templo de Santiago de Pomata, enPerú, uno de los monumentos más destacados de la "arquitecturamestiza" en el altiplano andino. La adornan fajas radiales de tradiciónandaluza ; entre ellas aparecen figuras a base de arabescos pero conevidentes motivos indígenas (detalle abajo).

( monstruosos que los cometidos por lasmetrópolis occidentales que sucedieroncon entusiasmo a España en esta pavo¬rosa tarea y sembraron la muerte y ladesolación en todos los continentes. Si

algo distingue a la conquista española noes la proporción de crímenes, en los queninguna de aquellas naciones se deja aven¬tajar, sino la proporción de escrúpulos. Lasconquistas realizadas por tales países tam¬poco carecieron de asesinatos ni de des¬trucciones ; de lo que sí carecieron fue dehombres como Bartolomé de las Casas (*),

y de polémicas internas como las que en¬cendieron los dominicos y sacudieron al

Imperio español, sobre la legitimidad de laconquista : lo que no quiere decir quetales hombres, siempre minoritarios,lograran imponer sus criterios, pero sí quellegaron a defenderlos ante las más altasautoridades, y fueron escuchados y encierta forma atendidos.

El ya citado Alejandro Lipschutz estimaque "tal leyenda negra es ingenua; y.

Véase El Correo de la Unesco de junio de 1975.

MEDALLÓN INDIO. Mascarón con

penacho de plumas esculpido en laportada de la iglesia de Paucarpata,cerca de Arequipa (Perú). Larelación parece evidente entre esta

figura del arte hispano-colonial y lasde la cerámica mochica

precolombina.

58

Page 59: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

peor que eso, es maliciosa propaganda.Es ingenua, porque los conquistadores yprimeros pobladores no son exponentesde la cultura moral del pueblo español ;y es maliciosa propaganda, porque enforma igualmente tremenda se han reali¬zado, y todavía están realizándose, todaslas conquistas de tipo señorial".

Y Laurette Séjourné confiesa : "Noshemos dado cuenta también de que laacusación sistemática a los < españoles

desempeña un papel pernicioso en estevasto drama, porque sustrae la ocupaciónde América a la perspectiva universal a lacual pertenece, puesto que la colonizaciónconstituye el pecado mortal de todaEuropa (...) Ninguna nación lo hubierahecho mejor. (...) Por el contrario, Españase singulariza por un rasgo de importanciacapital : hasta nuestros días ha sido elúnico país de cuyo seno se hayan elevadopoderosas voces contra la guerra deconquista".

Tales observaciones ayudan a entenderlas verdadera^ razones por las cuales seurdió y difundió contra España la LeyendaNegra, la cual, en efecto, "sustrae laocupación de América a la perspectivauniversal a la cual pertenece". Se ve asícon toda claridad que, "en definitiva, laconquista y la colonización de América enel siglo XVI forman parte del fenómeno deaparición y consolidación del capita¬lismo".

No es extraño, dado su origen, que laLeyenda Negra antiespañola encontraralugar entre las formas variadas, y siempreinaceptables, del racismo. Quizás sea útilrecordar una frase cuya formulación clási¬ca se atribuye a Alejandro Dumas : "Afri¬ca empieza en los Pirineos". El sacrosantoOccidente muestra así su repugnancia porlo otro que no es él : y ese otro lo encuen¬tra encarnado por excelencia en África.

Aquí también la España tradicional seembarulla sin remedio.

A la tonta simplificación según la cual"la España eterna" fue ocupada durantevarios siglos por . los infieles árabes, aquienes al cabo logró arrojar de la Penín¬

sula, preservando la pureza de la fe cris¬tiana y evitándole a Europa el contagio dela barbarie, mahometana, se sobreponeuna verdad mucho más rica : en España

convivieron durante siglos, y se influyeronmutuamente, fructuosamente, cristianos,moros y judíos, españoles todos.

- La influencia de aquella sociedad árabe,"la más alta civilización existente en el

mundo entre los siglos IX y XII", deaquella "cultura árabe que era muy supe¬rior a la latina", penetra, en efecto, enEuropa a través de España, y vivifica elmortecino mundo cultural europeo : 'sehace sentir en su filosofía, en su literatura, ,en su ciencia, en su técnica, en sus culti¬vos, en sus hábitos ; en Santo Tomás, enDante.

Pero España no sólo resulta ser, así,"eslabón entre la Cristiandad y el Islam"sino que, debido a la vastedad del mundoislámico, esta función de puente viene aser aún más importante para Europa, alaportarle contribuciones, ya asimiladas porlos árabes, de origen griego, y tambiénindio o indopersa.

Si se tiene en cuenta todo esto, se verá

hasta qué punto es cierto no sólo queAfrica sí empieza, felizmente, en los Piri¬neos sino que también empieza Asia ; y,además, cómo este hecho fertiliza (junto amuchos otros) a la entonces crepuscularcultura europea. Se verá en qué medida laidea que Occidente propone de sí mismocomo un nuevo pueblo de elección es tanfalsa como todas las otras ¡deas similares

a lo largo de la historia.

A Alejo Carpentier le gusta evocar eltriste destino del pueblo caribe, una comu¬nidad orgullosa y peleadora que ascendiódesde la hoya del Orinoco hacia el mar alque daría su nombre y sus huesos al grito"Sólo el caribe es hombre", y, cuandoempezaba a expandirse por el gran mar,se topó con las orgullosas y peleadorasvelas españolas, cuyas cruces y espadasno decían otra cosa que lo que decían loscaribes.

Esas velas, esas cruces y esas espadas,a su vez, resultaron tan frágiles como lasflechas, los gritos y las canoas aborígenes,cuando empezó a desarrollarse en plenitudel implacable mundo capitalista, queecharía de lado a España y a su historia, ala que tanto debía sin embargo : desdecreaciones filosóficas, artísticas, jurídicaso técnicas, hasta la entrada europea enAmérica y la sangrienta extracción del oroy la plata que irían a parar a las ávidasmanos de esos banqueros genoveses oalemanes que llamaban a los arrogantesnobles españoles, sarcástícamente, "nues¬tros indios".

"Sin embargo Pierre Vilar laEspaña de Velázquez es todavía prestigio¬sa ; inspira al 'gran siglo' francés. Hacia1650, el castellano es la lengua noble entodas partes. En la Isla de los Faisanes

los tapices de Versalles lavieja distinción de la corte castellana anulael lujo sin gusto de Luis XIV y de su séqui¬to. Tendrá que pasar mucho tiempo paraque las otras potencias europeas perdonenesa superioridad". La "perdonarán" con laLeyenda Negra. !

¿Será menester insistir en lo entrañableque nos es y nos será siempre esa otraEspaña, la España popular y democrática,la España donde Las Casas y los grandesdominicos del siglo XVI, "el momentomás brillante del pensamiento anticolo¬nialista hispánico", defendieron noble¬

mente a los primeros americanos ; laEspaña donde pensaron (aunque algunosse vieran obligados a hacerlo fuera delpaís) Vives y los erasmistas del siglo XVI,Servet, Suárez, Feijoo, Jovellanos, BlancoWhite e, incluso más allá de la indepen¬dencia de casi toda Hispanoamérica, Larra,Pi y Margall, Costa, Iglesias, Cajal, algu¬nos hombres del 98 y sobre todo AntonioMachado ; la España cuyo pueblo, en unproceso dramático, engendró descen¬dientes rebeldes en nuestra América?

Con los ojos de esta España contempla¬mos una impresionante y compleja fami¬

lia : el arte hispanoárabe, el Poema delCid, el Arcipreste, La Celestina, el roman¬cero y la novela picaresca, Garcilaso,Santa Teresa, Cervantes, San Juan, Gón-

gora, Quevedo, Calderón; El Greco, Veláz¬quez, Goya, Galdós, Unamuno, Baroja,

Valle Inclán, Machado, Juan RamónJiménez, Picasso, Miró, Falla, Lorca,Alberti, Buñuel...

¿A santo de qué los inficionados por laLeyenda Negra van a venir a decirnos quelos errores y los horrores de la conquista,española deben hacernos olvidar que esaes también una herencia (o una línea para¬lela) nuestra, o hacernos avergonzar deella? ¿Tiene algún sentido declarar inhabi¬litada la creación cultural de un país porlos espantos que en un momento dadohayan cometido sectores de aquel país?¿Acaso no admiramos, pese a la historiadel colonialismo y del imperialismo, la obrade Shakespeare y de Virginia Woolf, deWhitman y de Hemingway, de Rabelais yde Malraux, de Pushkin y de Dostoyevski,de Goethe y de Brecht, de Dante y dePavese?

La verdad es que -nos llena de orgullosaber que aquella España también esnuestra, y que prescindir de ella no nosenriquecería : nos empobrecería lamen¬tablemente.

Roberto Fernández Retamar

¿PURA COINCIDENCIA? Esta figura deuna portada de la Casa de las Recogidas,en Potosí (Bolivia), recuerdaostensiblemente los altorrelieves de los

templos hindúes de Elephanta o Konarak.Como un capricho casi surrealista, estafigura exótica viene a desMzarse,intrusivamente, en un monumento barroco

del altiplano andino.

59

Page 60: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

por

César

Fernández

Moreno

EL TANGO,RUMOR DE

BUENOS AIRES

CUANDO vamos en busca de nuestra

esencia, los argentinos solemosencontrarnos con un vacío. El

paisaje de la pampa consiste en no serlo,no es más que una promesa (Ortega yGasset). Al Noroeste, algo nos quedó dela cultura incásica ; al Noreste, de la gua-ranítica ; en ambos casos, en versiones

fronterizas, atenuadas. La Patagonia esuna inmensa región escasamente habitada,casi no es otra cosa que un camino através de la Patagonia. El problema es aunmás grave para los habitantes de la ciudadde Buenos Aires, llamados "porteños"como énfasis de la condición portuaria deesa capital : la cultura de Buenos Aires estan cosmopolita que es casi imposiblefijar su identidad.

Por lo tanto, podemos partir de la basede que el porteño arquetípíco no tieneidentidad cultural, o acaso que su identidadcultural consiste en no tenerla. Y éste es

un justo reproche que le hacen al porteñoel resto de los argentinos, lo que es graveademás de justo si se considera que laaglomeración de Buenos Aires acaparamás de la tercera parte de la población delpaís.

Gran parte de los porteños son, a suvez, descendientes de inmigrantes. Enconsecuencia, se ven llevados a afirmar

su "porteñidad" fingiendo desvalorizar lanacionalidad de los otros. El "gallego"(por los españoles) tomará en solfa al"ruso", el "ruso" al "taño" (por los ita¬lianos), éstos al "llollega" (por los gallegos),y en general todos a cada uno. Este clásicorecurso de todos los teatros popularesdel mundo, claro está, encubre un real yprofundo sentimiento de fraternidad.

¿A qué nivel social se produce entoncesel porteño arquetípico? No en la claseterrateniente, que tiene arrestos rurales ynacionalistas que la despersonalizanasimilándola a las análogas élites de otrospaíses periféricos respecto a la cultura

CESAR FERNANDEZ MORENO, ensayista y poetaargentino, dirige la Oficina Regional de Cultura de laUnesco para América Latina y el Caribe, en la que selleva a cabo el programa de estudios sobre la culturalatinoamericana. Es autor de numerosos trabajos sobretemas culturales, especialmente Introducción a la poe¬sía (1962), La realidad y los papeles (1967) y Argentina(1972). Fundador y director de revistas, corresponsalde diarios, ha colaborado además en la radio y el cineen calidad de crítico o de autor. Como poeta su obraprincipal es Argentino hasta la muerte (Editorial Sud¬americana, Buenos Aires, 1963).

rrfV.yt^: 5 ££-£*W»a

E ' ~ *$H^¿HkjL i Bu.-* * t^ Ía s'.r jfíl

^ mUtño i. í

¿fi V^

w/'JsH

r^L^Ér^BA <D

11

VjCÎr \ nK dfi

..I \}JEJp <

Oc©-3

o YU i )rC II1;*«

cû Hi 'i*

,n7TV F

MT^H

±^3p^.^ r

<

o

c

$ Willio IffÉlc \UÊ \i> rWM 1u VI L -J 1 *Á-\ m " *Z|^^F<

UjjMa

1 '*rT^WI lk / / -p - U

m

0)

u *-* Etc \M 1 Jl Ajh^?^i ^\Au/^

- «!Mwày A O

'5

LU

^ jwfc?" ©o -1 ifi

<-mJv/f''jM cv Jfc CD

O

c 1 n w¿

v?'fi jfJr '/4ÄWT^ V'-^

^^* v *s(0

m

X

CO

_co

ro

CO ^rm?.J

Xi^íl^ ' ¿5) "O

p

o

o

*3

a

lUTi /

occidental. No entre los ejecutivos, teñidosde crematística admiración por el "americanway of life". No entre los intelectuales,que en su mayoría están todavía empeña¬dos en parecerse a los europeos. Tampocoentre los obreros, cuyo dominio es másbien suburbano que urbano.

Pero sí en un conglomerado social quees mayoritario en el corazón de la ciudadde Buenos Aires y que se compone prin¬cipalmente de los comerciantes al pormenor, de los pequeños industriales y delos empleados públicos y privados demediano nivel. En'esta zona social encon¬

tramos todas las características de este

imaginado porteño arquetípico : una buenavida de discreto hedonismo, cierta con¬ciencia de ese hedonismo, una renuenteatonía política, y una fácil simpatía paraquien acepte a tal porteño en su simpli¬cidad aparentemente inofensiva. Así setipifica el porteño, afirmándose en unaserie de notas más o menos originales queél ha creado o desarrollado dentro del

perímetro urbano. Notas que en la mayoríade los casos comparte con la vecina ciudadde Montevideo, de donde resulta uncompetitivo amor con esos hermanosuruguayos.

He qui una sumaria relación de estasnotas características :

El café (y esto no hay duda que viene deEspaña), con sus anexos : los dados, elbillar. La vida en el café tiende a identifi¬

carse con la amistad, y también, inespe¬radamente, como lo descubrió un poetadel tango, con la madre (y esto no hayduda que viene de Italia).

Con moderado machismo que no excluyeel debido respeto a la "patrona" (la espo¬sa) : el donjuanismo, el recurso al "caba¬ret" (y esta palabra no hay duda de queproviene de Francia).

Como una traslación a la ciudad de las

delicias de la pampa, el asado a fuegolento : costumbre gauchesca que se hahecho inmigratoria, ganando así maticestales como el "asadíto" de los albañiles

entre los andamios ; o los "carritos"expendedores de la avenida Costanera,tan añorados por los argentinos cuandoestán fuera de su patria.

En general, el mucho comer. Tener"buen diente" es una virtud de pueblosbien alimentados. El porteño ha enrique¬cido su histórica dieta carnívora con las

pastas y las "pizzas" italianas (tan ligadas,otra vez, a la "mamma").

Como bebida, el mate, infusión para¬guaya que el argentino comparte con eluruguayo, aunque tiende a monopolizarla peculiaridad en el exterior : "en buvant

60

Page 61: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Del tango ha dicho el escritorargentino Ernesto Sábato que es"acaso el fenómeno más notable yoriginal que haya producido el Ríode la Plata". Dibujantes y pintoresdel país se han inspirado a menudoen él. He aquí tres curiosasmuestras.

du maté, l'on devient argentin", ha asen¬tado con afilada ironía Raymond Queneau.

Los deportes, incluso las carreras decaballos, pero especialmente el fútbol,que liga al porteño, a dos puntas, con laprosperidad inglesa del siglo XIX y lagenovesa del XX.

El lenguaje, que oscila entre el lunfardoítalo-porteño que en rigor sólo

es propio de los medios delictivos y elmero lenguaje familiar. Habla que confi¬gura su peculiaridad con variantes fácilestales como el "vesre" (palabras dichas alrevés) y las aportaciones dialectales de lainmigración.

Last but not least, el tango, que serásentido por el porteño como la quintae¬sencia de la música y a la vez de la filo¬sofía. Pero aquí nos asalta una graveduda : ¿es el tango realmente argentino?

La discusión eminentemente rioplatensesobre el origen del tango, la falsa disyun¬tiva "Argentina o Uruguay" pueden serdesleídas con una remisión. No ya a lahabanera o el danzón, que son en todocaso ramas del mismo tronco ; es necesa¬

rio ir más atrás, al folklore musical andaluz.Es reconocible a simple vista el parentescode la palabra fandango con tango ; tam¬bién lo es su parentesco musical. Si vamostodavía un poco más atrás o, si se quiere,

un poco más al sur, volveremos a acer¬carnos a nosotros mismos y nos encon¬traremos en el África.

Es muy probable que el tango, de ori¬gen africano, haya sufrido una evoluciónmuy temprana en España que, comogeneral predecesora histórica de la Argen¬tina, también tuvo esclavos africanos antes

que ella. Este primitivo tango habría sidotransportado a América, por una parte,con la esclavitud y, por otra, con la inmi¬gración andaluza por ella influida.

El musicólogo cubano Argeliers Leónrecuerda que los primeros negros vinierona América en las naves de Cristóbal Colón,

y que procedían de España. Ya en Amé¬rica, desarrollaron fiestas procesionalessincréticas de las festividades católicas

que se les imponían. "En el Uruguay,estas fiestas procesionales agruparon ex¬presiones de baile y música como la calen¬da, el tango, el candombe, la chicha, labámbula o la samba. "

Los africanistas se preocupan especial¬mente del origen de esta palabra tango.El antropólogo, también cubano, FernandoOrtiz la hace derivar de la voz congoleñaiango (especie de danza), y Vicente Rossila adjudica a la onomatopeya del sonidodel tambor. Roger Bastide, a su vez, la

deriva del bantú tamgu, que significa bai¬lar. Para Ortiz Oderigo, "la dicción tangoes, lisa y llanamente, una corrupción delnombre Shangó, dios del trueno y lastempestades en la mitología de los negrosyorubas de Nigeria".

Esto, en cuanto a la filología. En cuantoa la relación de los primitivos tangos negroscon los ulteriores rioplatenses, Ortiz Ode¬rigo no se pronuncia, pero aduce unaserie de antecedentes que, a partir delsiglo XV, muestran una clara continuidaden la música popular latinoamericana, yaun andaluza, ya que el tango andaluz,afirma con toda precisión, "emana de lasinéresis musical afro-española".

En la época colonial de Buenos Aires,el virrey Vértiz autorizó la realización debailes populares en el teatro de la Ranche¬ría. En ellos se bailaba García

Jiménez "el favorito fandango de airesensual, compás irresistible y figuras conarrequives que barruntaban el enlazadojuego futuro del corte y la quebrada".Esta costumbre, revitalízada en el sigloXIX durante la dictadura de Rosas, desa¬

pareció luego en la racha unitaria deeuropeización.

En la transición entre los siglos XIX yXX, al urbanizarse la cultura popular yascender monetariamente las clases menos

favorecidas, el tango vuelve a surgir comomúsica "típica" de las ciudades riopla¬tenses. En 1870, los negros de BuenosAires se habían organizado en "naciones"(agrupaciones según sus tierras de origen),y hacia ese mismo año aparecen en Mon¬tevideo las "comparsas" de carnaval. Deeste modo, el tango se impone con espe¬cial autenticidad en el Uruguay, que man¬tenía en esa época más población negra,mientras que los africanos radicados en laArgentina emigraban hacia el norte.

Jorge Luis Borges fija el nacimiento deltango porteño hacia 1880, en las pulperíassuburbanas, en las casas llamadas de"mala vida" y entre mujeres "de la vida"(o sea, siempre mezclado con la vida). Losespecialistas fijan un lugar-: el mataderode reses que se llamaba Corrales Viejos.El tango enriquece así sus orígenes conuna corriente de aire fresco que viene delcampo, con los arrieros y los payadores(versificadores espontáneos).

Dos líneas confluyen, pues, en la his¬toria del tango : una, básicamente musical,de origen negro o negro-andaluz ; otraliteraria y payadoresca, de origen gaucho. VEn esta forma, modalidades gauchescas,"

61

Page 62: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

L de cultura tales como la guitarra y la' improvisación de versos fueron transfe¬

ridas a los tangueras y poetas dialectalesde las ciudades, que son versiones urbanasde los payadores.

Todo poeta argentino tiene delante suyoesos dos grandes triunfos de la poesíanacional que son la lírica gauchesca y eltango ; son dos desafíos que debe sostenery donde, por cierto, no es fácil vencer.Pocos años antes, pocos años después delos primeros tangos con letra, aparecentambién los primeros libros del sencillismoy el vanguardismo, en los que se abrenlos rumbos de toda la ulterior poesíaargentina. De este modo, la integracióndel tango en música y letra crea entreaquél y la gran literatura argentina uncomún denominador popular.

Hay . entre ambas expresiones otrocomún denominador, esta vez de tono yde tema : la nostalgia. Los tangos expresanuna nostalgia : la de la vida aventurera delgaucho o el malevo res¬pectivos del campo y la ciudad ; lanostalgia del hombre abandonado por lasuerte, o por la mujer que encarna esasuerte. Correlativamente, toda la poesíaculta de la primera generación del sigloXX se genera en la nostalgia inmigratoria ;la poesía ciudadana de Borges, en lageneración siguiente, en la nostalgia delBuenos Aires malevo.

El tango sigue así su ascendente historiasocial, si entendemos por ascenso laconquista de las clases privilegiades. Delos esclavos pasó al pueblo, de allí a laburguesía, de la burguesía a la aristocracia.Durante la primera posguerra, el tango seexporta a Europa y culmina con el triunfode su genio, Carlos Gardel, "el modelo delabasto", gran cantor llamado "el mudo"con admirativa ironía. Con su actuación

personal y con sus films enFrancia, luego en Estados UnidosGardel extiende el área del tango a todaAmérica Latina. Subrayemos, sin embargo,que Gardel no representa en realidad. elapogeo del tango sino en cuanto a" sudifusión : la máxima calidad musical del

tango es anterior al tango canción, queimpuso Gardel, y el apogeo de este tangocanción se vincula con los grandes "letris-tas", que sólo alimentan sectores delrepertorio de Gardel.

Gardel supo imponer una imagen deargentino avasallador, gracias a su super-dotación como cantor, a su simpatíapersonal y a la época político-económicaque le tocó vivir. Por entonces, todotriunfaba fácilmente en la Argentina ; elpaís podía exportar todo : desde suscereales y, carnes hasta su fútbol. Sinembargo, deseamos reconocer que esteídolo nacional argentino es... francés :nació en Toulouse en. 1890, y sólo a lostres años de edad llegó a la Argentina.

Aunque no saben mucho sobre el gau¬cho, los europeos especialmente losfranceses lo identifican con el tango.Esta simbiosis fue exigida por los públicoseuropeos de los años 20 y 30, para quienesno había verdadero tango sí no era eje¬cutado y cantado por personajes disfra¬zados de gauchos. Los países metropo¬litanos exigen pintoresquismo : en estecaso, la exigencia no va del todo desca

minada si se recuerda el aporte campesinoa los orígenes del tango.

Actualmente, el tango es evocado enEuropa con cierto humorismo : es comúnque aparezca en un pasaje teatral o cine¬matográfico con el solo fin de provocaruna sonrisa. Sin embargo, el ritmo deltango es utilizado generosamente en lasnuevas canciones francesas que triunfantodos los días. Y el tango ha ganadotambién al público de otras partes delmundo. En el Japón, por ejemplo, haalcanzado gran popularidad : sus orquestas"típicas" repiten con oriental precisión losritmos que les llegan.de Buenos Aires.Otras veces, el tango sirve para expresartensiones más serias : así en Tango, lapieza teatral del polaco Slawomir Mrozeck,o en el publicitado film El último tango enParís, del cineasta italiano Bernardo Ber-tolucci.

En la Argentina, el tango sufre hoy unacontradictoria evolución que comprendeun descenso y un ascenso. Por una parte,parece ir quedando para las generacionessuperadas : sólo los tíos más que madurossaben todavía bailar el tango ; la juventudha reemplazado a Carlos Gardel por ídolosmás vocingleros. Por otra parte, se imponeun "tango de vanguardia", empujado porel compositor Astor Piazzolla y apoyadopor los intelectuales.

El tango felizmente el directorde cine Simón Feldman "es una especiede ruido de la vida de Buenos Aires, unadestilación de la ciudad". Pero a veces la

ciudad parece indiferente cuando no hostil

o represiva a su propio ruido, a su propiadestilación. Y el largometraje documentalde Feldman sobre el tango (1970) tuvograves dificultades para ser exhibido enBuenos Aires ; en cambio, se distribuyócon fluidez a la televisión de Europa yAmérica del Norte. Un último detalle

pesimista : las grandes figuras del tangohan tenido una vida breve. Es más : hayuna tradición de cantores muertos poraccidente, empezando por el más grandey por lo tanto el "malogrado" por exce¬lencia : Carlitos Gardel, carbonizado enuna catástrofe aérea de 1935.

Sin embargo, los muertos resucitanacaso más eficaces en el mito : cuarenta ydos años después de su muerte, no sólo'sigue diciéndose metafóricamente que"Carlitos cada día canta mejor" sino quemuchos admiradores siguen creyendo,' oqueriendo creer, que sobrevive oculto enalgún lugar de América Latina. Por lomenos, en más de uno de sus países, lafecha de su muerte se rememora año a

año con unción popular. De una manera ode otra, el tango sigue afirmando su vita¬lidad adentro y afuera de la Argentina yde los argentinos. Es uno de los productosmás universalizados que podría presentarla cultura porteña, y aun argentina, en elmomento de afirmar su identidad.

César Fernández Moreno

EL

CASTELLANO

EN

AMERICA

por

Marcos A. Morínigo

MARCOS A. MORÍNIGO, filólogo y lingüista argen¬tino nacido en Paraguay, es director del Instituto deFilología de la Universidad de Buenos Aires. Ha sidoprofesor de esta Universidad y de otras varias deAmérica del Norte y del Sur. Entre sus obras cabe

citar América en el teatro de Lope de Vega, Hispanis¬mos en el guaraní y Programa de filología hispánica.

62

Page 63: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Ala reciente celebración del mile¬

nario de Castilla sucede ahora la

no menos pertinente y grata del

milenario de la lengua castellana, lazo de

unión, entendimiento y fraternidad entre

pueblos y continentes, el más alto destinoque una institución humana puede alcanzar.

Es bien sabido que ninguna lengua tiene

historia diferente de la del pueblo que la

habla. Con él sube y se prestigia con su

éxito, y con él se abate cuando el infortunio

lo asecha. La lengua de Castilla, que desde

el siglo IX asoma entre los intersticios de lasletras de los escribas de bajo latín, acusa ya

formas que constituirán rasgos peculiaresdel dialecto castellano, y otras que, coinci¬diendo con dialectos colindantes, innova¬

rán sobre estos con decisión dejándolos

como arcaizantes. Por ejemplo : las formas

karraria y fraxino ocurren en León, en Cas¬tilla y en el dialecto mozárabe, pero en Cas¬

tilla al poco tiempo se transforman en ka-

rrera y fresno, y así se escriben sin vacilar.

Esta seguridad de formas da ventajas al dia¬

lecto castellano, que además empieza amanifestarse literariamente cantando anti¬

guas hazañas de héroes populares, o relatos

ligados a recuerdos locales, cuando losotros dialectos todavía se atenían al latín

para los mismos fines. Un latín que los

escribas conocían deficientemente y que

mechaban de formas vulgares que les eran

más familiares. La más antigua literatura

romance en castellano trató probable¬

mente, en poemas breves, de la muerte trá¬

gica de los Infantes de Salas, o de la del

infante García, o de la prisión de Fernán

González y la liberación de Castilla, o de lamuerte de Sancho II en las murallas de

Zamora. , .

El rumbo abierto por Castilla no tiene

émulos en esta época, y el entrenamiento

que su dialecto recibe la lanza a empresas

más ambiciosas, aunque sobre los mismos

temas, que se hacen tradicionales. Con ello

el castellano burgalés se afirma como len¬

gua literaria de la nación y en él se tratarán

temas líricos además de los épicos, e histó¬

ricos, religiosos, eruditos y novelescos; y

los escritores de las demás regiones lingüís¬

ticas lo preferirán cuando quieran hacer oírsu voz en toda la nación.

Terminada la guerra de la Reconquista

conducida por Castilla, con la derrota totaldel reino musulmán de Granada en 1492, he

aquí que en este mismo año jubilar, a los

reyes de Castilla y de León "nuevo mundo

dio Colón", un inesperado regalo que eldestino confió en manos de sus reyes.

Naturalmente, la preocupación primerafue la de tener idea cabal de las dimensio¬

nes inauditas de los nuevos dominios, luego

el conocimiento de sus habitantes y, por

fin, el de sus productos y naturaleza. Y

desde los puertos castellanos se suceden

expediciones sin cuento hacia Occidente,

sobre la línea del ecuador tanto como hacia

el norte y el sur. .

Paralela era la busca del oro y de las espe¬

cias, pues Colón y sus huestes creían haberalcanzado las costas del Áureo Quersoneso,

o Cipango. Alvarez de Ayllón llega eninvierno a las nevadas costas de Virginia, lo

que desahucia a los buscadores de oro,

pues según la creencia oriental, muy en

boga entonces, el oro hijo del Sol sólo seencuentra en las tierras cálidas; creencia

que Colón compartió y que decidió delrumbo de sus viajes y la dirección de las

empresas exploradoras y conquistadoras. Y

que le hizo viajar incansablemente por la

costa de Paria y Tierra Firme y el Darién y

Nicaragua y por el Caribe. Por el mismomotivo Grijalva y Cortés y Panfilo de Nar-

váez se dirigen a las costas de México, y

españoles y portugueses costean el litoral

brasileño y Solís llega al Río de la Plata. Tam¬

bién por eso Balboa lleva a cabo su hazaña,

y Pizarro explora las costas del Perú.

La conversión de los infieles es la preocu¬

pación de los reyes : convertirlos a la reli¬

gión cristiana y arrancar sus almas de las

garras del Demonio.

Por fin, la tercera preocupación esencial

era la de los humanistas, que se Imaginabanver a la América toda como una tierra

donde la lengua española sería la domi¬

nante, la poseedora sobre todas las demásdel más extenso dominio del orbe.

Desde Nebrija los humanistas no podían

disociar el destino de la lengua española del

destino imperial de la nación, y cedían con

frecuencia a la tentación de establecer para¬

lelos entre el latín difundido en el pasado

por las armas del imperio romano y el cas¬

tellano en el presente :" ...pero ya que

España reina y tiene conversación en tantas

partes, no solamente del mundo sabido

antes pero fuera de él que es en las Indias, y

tan anchamente se platica y se enseña ya la

lengua española según antes la latina..."

|]

ÉCr*vt<

>> . i ft

AiW ¿funA(u«l>if ó«j i á'm <W

ck.m<i¿n»li(.ít<íl'«u»li(1;

<£1nhtL<c'Br»..-£r.¿. VirtíVi*1 .-w "».«*" **"

<

(TjMIpvKt¿- jwmm info «xvfufc^iñl t<

til Mp<c<9»<rtíTn<i nie-jsAlp*?

I-^nm«^ o^Y*r> Vrfr*>',»«,'**'~'~'

Se cumple en 1977 el milenario del nacimientode la lengua española. En efecto, de 977 datael primer texto (arriba) que se conoce encastellano : 43 palabras escritas por unanónimo monje del monasterio de San Millánde la Cogolla (Logroño!, como parte de lasllamadas Glosas Emilianenses. Este es el punto

de partida de una lengua con la que secomunican actualmente casi 300 millones de

personas, esencialmente en América Latina yEspaña.

Veinte años después ya se oye a los indios

antillanos hablar español con el Padre Las

Casas. Pronto los tlaxcaltecas se empeñan

en' aprenderlo, y luego los nobles aztecas y

sus hijos, y la extensa parentela del Inca.

Alvar Núñez es saludado en español por los

guaraníes en las selvas paraguayas en 1541.

Y en las calles de Potosí, al mediar el siglo

XVI, sólo se oye español. Y se oye español

en Cajamarca, en Quito y en el Cuzco. Los

conquistadores no tienen que aprender las

lenguas de las tierras conquistadas puesto

que los vasallos deben aprender la lenguadel señor. Ercilla en su Araucana se asom¬

bra de que Juan y Hernando de Alvarado

"... y el valiente Ibarra..." hubieran apren¬dido el araucano. En el Río de la Plata las ciu¬

dades de Asunción, Corrientes, Concepción

del Bermejo, Ontiveros, Villa Rica del Espí¬ritu Santo, construidas en el seno de densas

poblaciones indias, son bilingües, pero

Santa Fe y Buenos Aires, fundadas por mes¬

tizos bilingües y numerosos servidores

indios, son ciudades monolingues y acen¬

dradamente españolas.

Siempre fue intensa en América, en todas

partes, la enseñanza del español. Azaracuenta cómo se hacía esta enseñanza en la

campaña paraguaya a fines del siglo XVIII, y

Carlos III por Real Cédula firmada en Aran-

juez en mayo de 1770 urge a las autoridades

coloniales a poner en práctica medidas efi¬

caces para que los indios aprendan el

español. La R. Cédula tuvo que ser en todas

partes acatada pero no cumplida. Los maes- '

tros necesarios para tamaña empresa no los

había. El empeño de Carlos III fue heredado

por los gobernantes de la América indepen¬

diente, y el siglo XlX'fue el siglo de la mayorexpansión del idioma español. Las lenguasindígenas no han desaparecido. Se hablan

aun desde México a la Patagonia, con la

excepción del Uruguay, en algunas partes

con resuelta adhesión popular y en otras

con numerosos practicantes, pero en todas

partes en estado de franca regresión.

La preocupación hispanoamericana por el

alfabetismo y la difusión de la escuela

pública tiene por principal aunque no confe¬

sado propósito la enseñanza de la lengua

oficial del país, que en todas partes es el

español, y el arrinconamiento y olvido de

las lenguas autóctonas. En un mundo en

que todo se va uniformando a pasos de

gigante, la uniformidad lingüística es un

inapreciable beneficio y el mejor instru¬mento al servicio de la difusión de la

cultura. Las lenguas indígenas no son ya

sino reliquias arqueológicas y el español es

en América su natural y único sustituto, no

sólo porque lo conocen y practican 200 mi¬

llones de seres humanos, no sólo porque

desde hace cinco siglos en él se expresaron

y se expresan los representantes más califi¬

cados de su espíritu, no sólo porque el

español es la lengua de sus creaciones lite¬

rarias sobresalientes, no menos valiosas

que las más reputadas del mundo contem¬

poráneo, sino también porque la lengua

española desde hace cinco siglos puso y

pone al servicio de los que la poseen todo el

contenido y la forma de la cultura de Occi¬dente.

63

Page 64: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

VICTORIA OCAMPO Y LA

El 15 de enero de 1973, dos ciudadanas

argentinas, Victoria Ocampo y su her¬mana Angélica, ofrecieron en donacióna la Unesco un conjunto de bienes raí¬ces, entre ellos una espaciosa residen¬cia, propiedad de la primera, la llamadaVilla Ocampo (foto a la derecha), sitaen el barrio de San Isidro, Buenos

Aires. Según el deseo de la donadora,la Villa Ocampo debe ser utilizada "enla promoción, . investigación, experi¬mentación y desarrollo de las activida¬des culturales, literarias, artísticas y decomunicación social tendientes a

mejorar la calidad de la vida". La pro¬piedad es "especialmente apta parasede de talleres permanentes, centroso programas de investigación, experi¬mentación o realización cinematográ¬fica, televisiva, teatral, musical o litera¬

ria, de traducciones o de nuevas for¬

mas de expresión y comunicación ynuevos tipos o técnicas de creacióncultural, artística y de educación por elarte."

^ H

mm

-. ''¿¿JÉ.

R^^Kflpj% & ~ . w

V

por Jacques Rigaud

SI quisiéramos utilizar un lenguaje unpoco mundano, diríamos de la viday la obra de Victoria Ocampo que

es la aventura intelectual de una rica here¬

dera enamorada de la literatura. Pero, conello, no sólo seríamos injustos con unamujer que ha luchado y corrido riesgos ennumerosas ocasiones sino que dejaríamosde lado el fenómeno excepcional en cuyavirtud esta gran dama argentina se haconvertido en una auténtica personifica¬ción premonitoria del encuentro entreculturas.

Nacida a fines del pasado siglo en el senode una familia cuya historia va a menudounida a la de la Argentina misma, VictoriaOcampo tuvo la infancia feliz y recibió laeducación cosmopolita propias de los privi¬legiados de la época. Podría haberse dadopor satisfecha, como otros muchos, con lavida holgada y brillante de los pudientes.Pero su destino iba a ser otro.

JACQUES RIGAUD es Subdirector General de la

Unesco para el Sector de Apoyo al Programa yAdministración.

Su espíritu despierto, su generosidadsiempre orientada a la acción, un dina¬mismo infatigable, una insaciable curiosi¬dad, un valor a toda prueba y una capaci¬dad sin igual para movilizar a sus amigos :todos estos rasgos, que tan irresistible¬mente evocan a Madame de Staël, impul¬saban a Victoria Ocampo hacia la acción yla creación.

Comienza todo ello en 1924 cuando la

joven escritora acoge en su casa familiar deSan Isidro, cerca de Buenos Aires, a Rabin-,dranath Tagore, que, enfermo, ha de per¬manecer algún tiempo en la Argentina. Vic¬toria Ocampo descubre en él a uno de losgrandes escritores del siglo, aureolado de lafascinación de la cultura india, pero, almismo tiempo, se revela en ella la vocaciónque más íntimamente la impulsa, la de aco¬ger, respaldar, estimular y reunir a los escri¬tores, artistas y creadores.

Desde ya estas lejanas fechas y hasta elmomento presente, poniendo en ello unentusiasmo y una dedicación que parecenhaberle impedido envejecer, VictoriaOcampo lleva a cabo su misión en las doscasas a las que su figura se ha identificadoplenamente : la de piedra de San Isidro y lainmaterial creada por ella : la revista Sur.

En la primera moraron al menos porella pasaron los mayores creadores de

este siglo : Ortega y Gasset, Stravinsky,Gropius, Le Corbusíer, Neruda, Maritain,Ansermet, Camus, Malraux, . Saint-JohnPerse, Supervielle, Graham Greene, IndiraGandhi... Interminable sería la lista de los

que allí estuvieron y cuya presencia invisi¬ble impregna esta rica mansión, auténticosantuario de la cultura.

En lo que atañe a la revista Sur que Vic¬toria Ocampo dirige desde su fundación en1931, quizá no exista eri el mundo un ejem¬plo más notable de audacia, de agudeza enel juicio y de eclecticismo.

- Cuando el año pasado visité la mansiónde San Isidro, en uno de esos días dulce¬

mente melancólicos del otoño argentino enque el olor de las hojas muertas se mezclacon el de las flores vivaces, Victoria me

mostró con orgullo la colección completade su revista. Tomé el primer volumen y,hojeándolo al azar, me topé en el primernúmero con la firma de Alejo Carpentier; elfabuloso novelista tan despierto aun hoycon sus más de setenta años ; sin duda

había que disponer de un juicio seguro paradarle su oportunidad, hace cuarenta yseis...

Cuando se establezca el índice analítico

completo y se haga'una antología de Sur,se verá claramente que la revista es unaauténtica institución de cooperación inte¬lectual internacional por las firmas queacoge (*), por los temas que en ella seabordan y por su ejemplar espíritu de bús¬queda, de audacia y de tolerancia.

I*) De Lorca a Joyce, de Kazantzaki a Faulkner, deSartre a Toynbee, de Heidegger a Pirandello, deGabriela Mistral a Thomas Mann.

64

Page 65: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

COOPERACIÓN INTELECTUAL

Foto del centro : Victoria Ocampo en

1947 con el primer Director General de laUnesco, señor Julian Huxley. Foto de laderecha : con el escritor francés André

Malraux, unos años después.

El último número aparecido, de fines delpasado año, está dedicado a la traduccióny a sus problemas. Este factor tandesdeñado pero tan esencial de la relaciónentre culturas merecía el homenaje activode la revista, tan a la manera de su funda¬dora y directora, a base de exigencia, deinterrogantes y de proyectos.

Pero la vida de Victoria Ocampo no sereduce a dirigir una casa y una revista. Noolvidemos que es también escritora, que haejercido activamente su ciudadanía hastaconocer la prisión en tiempos difíciles, quedirigió durante varios años el Fondo Nacio:nal de las Artes, que ha viajado infatigable¬mente : en toda ocasión Victoria Ocampoha estado y está en la vanguardia de laacción y del pensamiento.

Naturalmente, su personalidad es dema¬siado acusada para que no haya sido y seaaún discutida. Los personajes de su enver¬gadura imponen el respeto y, a la vez, sus¬citan la impertinencia. Veamos algunas delas críticas que se le hacen o se le podríanhacer : la respuesta es bien fácil.

¿Se la acusa de cosmopolitismo? Pero, sies verdad que Victoria Ocampo ha hechomucho por introducir en la Argentina lasletras y las artes del mundo entero, quizáno haya nadie más profundamente argen¬tino que ella. Conforme ha dicho el críticofrancés René Etiemble, poco dado a fácilescomplacencias : "¿Cómo podría' decirseque no ha servido a su país quien durantetreinta años se gastó gran parte de su for¬tuna en imprimir y difundir, se vendiesen o

no, a los escritores yanquis, argentinos oeuropeos que estimaba, quien durantetreinta años, con desprecio de las reglas dela prudencia comercial, ofreció ai mundo lamejor de las revistas de la Hispanidad?" Loque Victoria Ocampo ha hecho en pro delprestigio internacional de Borges, deSábato y de tantos otros escritores argenti¬nos muestra a las claras su raigal apego auna patria, a una tierra cuya identidad cul¬tural ha exaltado poderosamente.

¿Se le reprocha su preferencia por lasculturas europeas? Pero Tagore y Nehru ybuen número de escritores japoneses handado fe de lo que le debían. Y Octavio Pazha dicho lo que le debe América Latinaentera. El etnólogo Alfred Métrauxseñalaba que Victoria Ocampo se conside¬raba "igualmente americana en el sentidocontinental de la palabra ; en las diversasliteraturas del Nuevo Mundo le gustabaencontrar temas o acentos comunes que

las distinguían de las de Europa".

Y sí alguien ve en ella a una mujer deletras en estado puro, será fácil recordarlelo que Victoria Ocampo hizo por arquitec¬tos como Le Corbusier o por músicoscomo Stravinsky y Ansermet, así como laacogida que Sur ha dispensado siempre alas ciencias humanas.

Y si otros se arriesgaran a afirmar que auna aristócrata como ella no le era difícil lle¬

var tan brillante existencia, podría redar-güirse que no era tan fácil vivir en la acción,y no sólo verbalmente, la emancipaciónfemenina en la Argentina de los ' años

treinta, arriesgar no sólo su fortuna sinotambién su libertad en una vida de luchas,

pagar así en cierto modo sus privilegiosexponiéndose constantemente a los ries¬gos personales, a la incomprensión, hastaal insulto.

Aventuremos una última posibilidad decrítica : ¿no pertenece todo este brillantehistorial a una época pasada? Pero, aun eneste punto, habrá que declararse vencido :Victoria Ocampo no sólo ha acogido favo¬rablemente el "nouveau roman" francés

sino que ha apoyado y sigue apoyando alos escritores jóvenes y presta una atenciónsiempre despierta a las más nuevas ¡deas,vengan de donde vinieren. Ella no perte¬nece a la raza de los que, como Royer Co-Hard, confiesan tristemente : "A mi edad

no se lee, se relee". Desde siempre VictoriaOcampo se interesa antes que nada por loshallazgos, mientras se cansa rápidamentede lo consagrado. En ella, como en Borges,Sábato y Cortázar, late la imperiosa necesi¬dad de ir más allá de las apariencias, de nodejarse engañar ni por las sombras ni porlos espejos.

Las relaciones de Victoria Ocampo con laUnesco son antiguas. ¿Cómo habríapodido esta adelantada de la cooperacióninternacional mostrarse indiferente a la

creación del organismo encargado precisa¬mente de dar una base permanente a esacooperación? Julian Huxley, el primerDirector General de la Unesco, fue a Bue¬

nos Aires y habló a Victoria Ocampo de laOrganización con palabras que ella nunca Wolvidaría, hasta el punto de que muchos f

65

Page 66: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

años después, a la hora de tomar sus dispo-, siciones para el futuro, legó a la Unesco sus

dos propiedades de San Isidro y Mar delPlata para que en ellas pudiera continuar laobra de su vida.

La Unesco prepara el futuro de la dona¬ción en relación estrecha con la donadora.

En el plano de la cultura el progresodepende muy a menudo vida de Victo¬ria Ocampo lo demuestra de la iniciativade unos pocos, de la audacia visionaria deunos cuantos creadores o de unos anima¬

dores excepcionales que como ella sabensuscitar las necesidades, crear las conexio¬nes y obligar a los creadores a superarse.Es ésta la fase heroica de la cultura. Pero,

después, la comunidad tiene que tomar elrelevo del individuo y garantizar la perma¬nencia de su iniciativa sin alterar su vitali¬

dad única.

Victoria Ocampo encarna de maneraespléndida la gran idea del encuentro entre

culturas que es el meollo mismo de la voca¬ción de la Unesco. Al continuar su obra,

exaltando el ejemplo que ella representa yque puede trasponerse a todos los conti¬nentes y a todas las épocas, la Unesco noolvidará lo que hay de insustituible en la fra¬gilidad de toda aventura personal, no olvi¬dará el fervor de que da fe respecto de ellael gran poeta Saint-John Perse :

"Hay para nosotros seres 'auténticos'cuya simple manera de ser suscita la con¬vicción. Victoria Ocampo habrá vivido laobra aun en marcha de su vida como un

gran árbol de su tierra, o mejorque los árboles son esclavos de susraíces como ese imperioso río de la Plata,señor de su infancia, de su adolescencia yde su madurez de mujer, cuya sorda pulsa-

. ción late para siempre en ella ; tan fiel a sucaudal de gran río nutricio como a susbodas con la mar océana y a la alianza que,a lo lejos, sella con las hermosas corrientes

marinas que le relevan en su marcha haciaotras orillas.

"Cara Victoria, gran criatura llena defuerza y de franqueza, inalienable y pose¬siva como su mismo río de la Plata, somos

muchos en Europa, América y Asia los quela tenemos por un preciosísimo testigo deesa alma argentina que tan orgullosamentese expresa siempre en usted : alma múltipley sobremanera compleja, tan pródiga comofatalista, tan ferviente en el entusiasmocomo desdeñosa en la acción y despreocu¬

pada del mañana."

La única reserva que cabría hacer a tanbello homenaje es que, justamente, esadespreocupación por el mañana ha dadopaso, por conducto de la Unesco, a lavoluntad de continuidad.

Jacques Rigaud

DE LA SELVA VENEZOLANA A LA VANGUARDIA

(Viene de la pág. 34)

lado. El quiere substituir el "espacio repre¬sentado por un espacio real". Piensa quela obra de arte es una realidad en sí. Una

"realidad autónoma".

A esta aventura de descubrimiento yconquista se ha lanzado Cruz Diez pormedio de sus "Físiocromías", "Cromosa-

turaciones" y fenómenos de color indu¬cido. La mera aproximación de : ciertoscolores los pone a vibrar y a moverse. Esno sólo imposible verlos dos veces de lamisma manera sino que, además, la obramisma se pone a crear colores nuevos,colores que el artista no puso en ella, sinoque los- mismos colores, por su potenciaen la retina del espectador, inducen yhacen aparecer. De esta manera la obraincorpora el tiempo y crea un espacio pro¬pio en el que participa como polo de acciónel espectador.

Es una búsqueda distinta y original perocoincidente en sus fines con la de Soto.

Terminar con la simulación del espacio yel tiempo en el arte y crear un espacio yun tiempo autónomos en los que participael ya no pasivo contemplador. No haymovimiento de cosas en esta obra, sino

por la virtud dinámica e inductora del color.Son cuadros literalmente vivientes, que

cambian todo el tiempo de aspecto y dematices, según el ángulo desde donde seles mire o según la luz que (os penetra.

En este sentido su obra es la creación

de una realidad autónoma que no le debenada a ninguna convención de escuela.Su arte es un arte de hechos reales. El

mismo lo dice : ''Una especie de realidad

autónoma". Su objeto es crear con la luzviva un espacio real y viviente que surgemágicamente para cada espectador en suhora.

Carlos Cruz Diez confiesa que su evo¬lución le debe mucho a su práctica con lasartes gráficas. Fue por largo tiempo dia¬gramador y dibujante publicitario. Esto escierto y puede advertirse ' en muchosaspectos de su obra, sobre todo al comien¬zo. Pero algo lo debió condicionar incons¬cientemente antes para esta sensibilidaddel espacio y de su autonomía. Cruz Diezes también un hijo del trópico americano yen este sentido la formación de su sensi¬

bilidad ante el espacio y el color debió desufrir un poderoso acondicionamiento.

Hay un tercer venezolano que, nacidotambién en las riberas del Orinoco, llegócon los otros al París de los años 50. Es

Alejandro Otero. Su recorrido fue de

Picasso hacia lo abstracto y el cinetismo.Pero su objeto era el mismo : crear unnuevo espacio verdadero, una nuevaexperiencia natural en la obra de arte incor¬porando al tiempo y a la luz.

De pintar sobre tela o sobre madera, encuyo tiempo alcanzó maneras tan expre¬sivas y originales como sus Colorritmos,rayas de color puro que se entrecruzan ycrean nuevas relaciones de color y dedimensión, llegó hasta la creación deobjetos en el espacio. Por la vibración delos metales ionizados en la luz levanta

estructuras gigantescas que, bajo la brisay la hora, cambian de forma y de colorcomo, montes vivos. Que se añaden al

paisaje como nuevos árboles o nuevascolinas o como pequeños crepúsculos quecomienzan a crecer. La vibración de la luz

en las superficies pulidas se alza comoespejismos o como juegos inesperados de ^reflejos sobre las nubes y las edificaciones.Es lo que él llama "integrales vibrantes" o"alas solares".

Son como espectáculos inagotables quese desarrollan ante el espectador en unacreación continua dé formas y de matices.Son obras para grandes espacios abiertoso cerrados. Son elementos integrantes delpaisaje. En Washington, en Bogotá o enCiudad Guayana (Venezuela) ha levantadoestas deslumbrantes y fascinantes colinasde reflejos.

También Soto y Cruz Diez, por unaevolución natural de su propia búsqueda,han realizado obras monumentales, paracompletar o dar sentido a espacios araui-tectónicos.

No puede ser un mero azar el significa¬tivo hecho que se repite, en distinta forma,en estos tres notables artistas latinoame¬

ricanos. Formados en su sensibilidad en el

espacio cambiante del trópico americano yen su ambigua relación con el hombre,pasados por la búsqueda más avanzadadel arte contemporáneo, han llegado a sercreadores de un nuevo espacio que pro;longa su experiencia vital y forjadores déuna nueva relación con el espacio al quehan devuelto su condición mágica sobreel espectador.

Arturo Uslar-Pietri

66

Page 67: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

LA UNESCO

Y EL

PATRIMONIO

CULTURAL

LATINO¬

AMERICANOLAS actividades de la Unesco en materia de preservación y revaloriza¬

ción del patrimonio cultural latinoamericano han ido aumentando

considerablemente en los últimos años. Los países de la región

cobran crecientemente conciencia de la importancia del patrimonio cultural

como uno de los principales elementos de consolidación de la identidad

cultural y de afianzamiento del desarrollo integral.

En los países andinos Chile, Colombia, Ecuador, Perú y

Venezuela se está llevando a cabo desde 1974 un proyecto regional de

múltiples facetas, que ha despertado gran entusiasmo y ha suscitadonumerosas iniciativas colaterales.

Las actividades del proyecto, financiado por el Programa de las Naciones

Unidas para el Desarrollo (PNUD), se agrupan en varias esferas, a saber :

capacitación, inventario, preservación y conservación de bienes muebles o

inmuebles, museos, urbanismo, difusión y animación.

En lo referente a capacitación, desde 1975 se organizan anualmente en

Cuzco cursos en tres especialidades (preservación de monumentos arqui¬

tectónicos, de bienes muebles y de restos arqueológicos). Más de un cen¬

tenar de becarios provenientes de los seis países de la región andina han

seguido cursos teórico-prácticos impartidos por más de cuarenta especia¬listas internacionales. Al mismo tiempo se han instalado talleres-

laboratorios de restauración de pintura y escultura en La Paz y en Quito y

se han reforzado los ya existentes en Santiago, Lima y Bogotá.

Todos los países participantes han emprendido la urgente tarea de esta¬

blecer el inventario de su patrimonio mueble e inmueble. El proyecto regio¬

nal ha permitido enviar consultores especialistas para asesorar a las auto¬ridades nacionales!

Otros consultores se dedicaron a asesorar a los países en cuestiones rela¬

tivas a la preservación y restauración de edificios y obras de arte : especia¬

listas en problemas del adobe, la piedra, el papel, la madera, restauración

de pinturas, esculturas, instrumentos de música, cerámica y metales, res¬

tauración funcional de edificios coloniales, museología, preservación y pla¬nificación de centros urbanos históricos, etc.

El proyecto regional viene organizando también coloquios y seminarios alos que son invitados investigadores de prestigio internacional para tratartemas concretos, tales como "Preservación de centros urbanos históricos"

(Quito), "Museología" (Bogotá), "Inventario" (Santiago), etc.

El proyecto regional se interesa particularmente por la difusión de losvalores culturales del patrimonio y por la necesidad de conseguir la activa

participación de los habitantes que conviven con los monumentos. Para

ello se han organizado exposiciones, cursillos de divulgación, conferenciasy mesas redondas, se han publicado folletos y artículos, se han producidoprogramas de radio y televisión, etc. Merece destacarse aquí la exposición"5.000 años de textiles peruanos", que se presentó en Lima en 1977.

Otra acción de importancia en la que la Unesco está participando enSudamérica es el plan COPESCO. Como las siglas indican, se trata de unplan de cooperación entre el Perú y la Unesco para desarrollar la zona com¬

prendida entre el Cuzco y el lago Titicaca. Los objetivos del proyecto sonde carácter cultural y económico, a saber : por una parte, la preservación delos sitios y monumentos precolombinos y coloniales, cuya concentraciónes excepcionalmente densa en esa región, antiguamente centro del imperio,incaico, y, por otra, el desarrollo del turismo atraído por ese mismo patri¬

monio cultural, turismo que se espera contribuya al desenvolvimiento eco- inómico de la zona, cuya población tiene un nivel de vida bajo. t

Iglesia de Chacacupe, Perú, integradaen uno de los proyectos depreservación de bienes culturales enAmérica Latina patrocinados por laUnesco. Aquí, como en otros casos,se trata de restaurar y proteger enfunción de la comunidad circundante.

67

Page 68: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Una vez terminada la fase preparatoria, en la que la Unesco asesoró alPerú con vistas a la programación y preparación de los proyectos concre¬tos de restauración, acaba de iniciarse la fase de ejecución efectiva con

fondos nacionales y del Banco Interamericano de Desarrollo. Por deseoexpreso de las partes, la Unesco sigue facilitando su asistencia técnica enlos problemos concretos de preservación. Numerosos expertos y consulto¬res asesoran a varias decenas de técnicos peruanos en materias tales como

restauración de obras arquitectónicas, arqueología, restauración de pintu¬ras, esculturas, adobe, metales y cerámica, museología, planificaciónurbana, etc. Un importante taller-laboratorio instalado en Cuzco sirve tam¬bién de apoyo a cursos regionales de capacitación a cargo de expertosinternacionales.

Además de estos dos grandes proyectos, la Unesco viene proporcio¬nando asesoramiento en las diversas esferas especializadas relativas a la

preservación del patrimonio cultural en otros países latinoamericanos. Así,

a Honduras se han enviado consultores para proteger el sitio maya de

Copan ; en Guatemala la Unesco colabora para paliar los daños sufridos a

causa de los recientes terremotos ; en Panamá se han efectuado tareas de

inventario ; en Brasil se ha facilitado asesoramiento para la organización de

cursos de formación de especialistas en restauración de monumentos, en

luminotecnia y en preservación de barrios y ciudades históricos ; en

Argentina y en Paraguay la Organización participa en las tareas de revalori¬

zación de las ruinas de las misiones jesuíticas ; en Uruguay varios consulto¬res colaboran en la prospección y excavación del sitio prehistórico de Salto

Grande ; en Bolivia se ha prestado asesoramiento en la preservación de

sitios arqueológicos y en la revalorización de pueblos jesuíticos delOriente ; en México la Unesco colabora con el Centro de Formación de

Churubusco, etc.

PARAGUAY, ISLA RODEADA DE TIERRA (Viene de la pág. 53)

Durante mucho tiempo sólo tuvo vigen¬cia el tópico de que el Paraguay es un paísbilingüe y de que este bilingüismo cons¬tituía para algunos una rémora en el caminode su progreso cultural y para otros sumayor riqueza.

"La denotación del fenómeno lingüísticoen el Paraguay el padre BartomeuMeliá, máxima autoridad en esta materiacomo una situación 'típica' de bilingüismoestá muy generalizada y es aceptadaincluso por los lingüistas que en otras cues¬tiones no aceptarían sino los 'hechos delengua' y los análisis objetivos. Ahora bien,el bilingüismo en el Paraguay es un mito(tomando mito en el sentido de fábula ideo¬

lógica)". Y agrega : "Desde los días de laconquista y de la colonia el Paraguay haaparecido como un caso único de bilin¬güismo. Dos lenguas, dos culturas hancoexistido y han convivido, al parecerarmoniosamente, modificándose y confor¬mándose mutuamente... En este sentido,

el Paraguay sería el triunfo del espíritu colo¬nial, habiendo suprimido y superado elantagonismo de amo y esclavo, de domi¬nante y dominado. Más aún : 'hemos lle¬gado al extremo de que la lengua del pue¬blo conquistado sea la que domine', sequejaba el gobernador Lázaro de Ribera afines del siglo XVIII."

Es importante retener estos conceptos,sobre todo en función de lo dicho al

comienzo en cuanto a la relación de la len¬

gua dominante del conquistador y lalengua dominada guaraní Estasituación conflictiva en el proceso del mes¬tizaje enfrentó desde el comienzo un nivelde notorio desequilibrio y alteración socio-lingüística : ' para el infante mestizo, esdecir para el niño nacido de padre europeoy madre indígena, la lengua materna eranaturalmente el guaraní y el castellano oespañol la lengua impuesta y asumidacomo signo de autoridad ; lengua que a suvez iba a emplear el mestizo, criollo o man¬cebo de la tierra para imponer su propiaautoridad sobre los naturales.

En el duro régimen de las Encomiendasmenos riguroso sin embargo en el Para¬

guay que en otras partes de América con¬quistada y colonizada el mestizo y elindígena sintieron que la lengua del padre odel amo, según los casos, era precisamenteel atributo de su dominación, tanto o. más

que los elementos materiales : las armas,las herramientas, los alimentos, las vivien

das, las costumbres en que el poderíoseñoreaba.

En las reducciones misioneras el indio

escuchaba las predicaciones y rezaba enguaraní. No le cambiaron su lengua. Lecambiaron sus rituales, su liturgia, su Dios,sus dioses, su sentido de la naturaleza, delmundo, del universo, que resplandecenaún hoy, como un rescoldo inextinguible,en sus mitos cosmogónicos.

No ocurrió entonces lo que el goberna¬dor Lázaro de Ribera comunicaba en su

memorial, a la vez quejoso y alarmado : lalengua del pueblo conquistado no era, nopodía ser, la lengua dominante. Se replegóen los hondones de la memoria colectiva ;

se depositó y catalizó allí como el sedi¬mento originario que iba a dominar desdeadentro la expresión emocional del para¬guayo bilingüe o no bilingüe.

A este respecto precisa Meliá : "Lasociedad . colonial fue desde el principiooficialmente castellana ; la lengua guaraníno entraba en la administración ni en la

política oficial. El guaraní colonial carecíade sostén literario, cuando al mismo tiempoestaba en contacto con una lengua caste¬llana que había entrado en un marcadoproceso de literaturismo. Poco a poco ibaapareciendo un guaraní paraguayo contodas las características de lengua verná¬cula : la lengua materna de un grupo domi¬nado social o políticamente por otro quehabla una lengua diferente" (Ver Empleode las lenguas vernáculas en la enseñanza,Unesco, París, 1954, p. 48).

Esta oposición de los sistemas lin¬güísticos, uno aglutinante o polisintético encierto modo, el guaraní, y otro de flexión, elcastellano, que se interfieren y erosionanmutuamente en los niveles sintácticos,

semánticos y pragmáticos, es lo que puededenominarse globalmente como bilin¬güismo. Pero quizás más correcto seríahablar de dí-lingüísmo.

"El Paraguay es bilingüe, pero pocosparaguayos son bilingües Meliá ;más aún, tal vez nadie es realmente bilingüeen el Paraguay. El bilingüismo claramentesocial del Paraguay se puede caracterizarcomo bilingüismo rural-urbano. Porque,aunque es verdad que también en Asun¬ción, la capital, se habla guaraní, es cadadía más clara la tendencia que muestran lasconcentraciones urbanas hacia un mono-

lingüismo español mientras en el campo la

proporción de monolingues en guaraníalcanza un índice elevadísimo.

El uso del castellano o del guaraní estáregido en el Paraguay por factores socialesy por factores regionales, porque estáfundamentalmente dislocado en dos campossemánticos que difícilmente se sobre¬ponen. Incluso el que se dice y se creebilingüe no abordara nunca ciertos temasen la lengua indígena ; sencillamente nopuede porque el hecho social no se lopermite. Así, en realidad, el guaraní-parlante tiene una serie de campos que leson vedados, porque en ellos no puedehacer oír su voz ; más aún, ni siquiera lospiensa, al carecer del instrumento ade¬cuado de la expresión lingüística.

Así, si consideramos como una hipótesisel acceso del guaraní al mundo de la'técnica, por ejemplo, ello le impondría unainvasión neológica de tal magnitud queimplicaría prácticamente su anulación. '

En el caso particular del Paraguay, elproblema del bilingüismo se ve agra¬vado por el hecho de que en esta coexis¬tencia varias veces secular, el guaranígua oral por excelencia, dominada social-mente y marginada culturalmente seva empobreciendo en su expresión lingüís¬tica "como una patria Meliá ala que le han sacado inmensos territorios deexpresión y va perdiendo su capacidad deautoafirmación cultural completa."

De cualquier modo y cualquiera que seala suerte que le está reservada histórica¬mente al guaraní, lo evidente es que ellaestá estrechamente ligada a la suerte, aldestino histórico del país mismo. En igualmedida que el castellano, quizás conintensidad mayor aún.

Relegado el guaraní a ser el instrumentode comunicación emocional de una colecti¬

vidad, su fuerza consiste precisamente enque será él, el idioma originario, el que con¬tinuará modulando la palabra secretadla

palabra incesante de todo un pueblo desdelo hondo de sus sentimientos, que es comodecir desde lo más vivo de su intersubjetivi-dad social. Ligada a los misterios de la san¬gre, del instinto, de la memoria colectiva, lasobrevivencia del guaraní está aseguradapor la densidad de ese limo lingüístico quees el sustrato primegenio de la isla bilingüellamada Paraguay.

Augusto Roa Bastos

68

Page 69: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

LARGO VIAJE HACIA SI MISMA (viene de ,a Pág. ?,

viejas culturas indígenas yuxtaponiendolas propias, los civilizadores latinoameri¬canos tratarán de enterrar el pasadocolonial, la cultura hispana y la indígena,así como el mestizaje a que dio origen laColonia. Se intenta nueva yuxtaposiciónimitándose ahora los modelos culturales

de la Europa occidental, tanto las insti¬

tuciones políticas sajonas como las expre¬siones de la Literatura y la Filosofía de laCultura de Francia. De igual manera setomarán las expresiones a que dieraorigen la Democracia- de los EstadosUnidos de las que con sorpresa hablaráTocqueville. Ser como Inglaterra, Franciay los Estados Unidos será la meta delproyecto civilizador y, como consecuencia,anular el propio pasado, considerándoloimpropio. La emancipación política alcan¬zada por los libertadores debía ser ahoraseguida por lo que los civilizadores llamaron"emancipación mental".

Dejar de ser lo que se es, para ser otrodistinto, va a ser la preocupación 'de estenuevo esfuerzo cultural latinoamericano.

"Reconozcamos el árbol por sus frutos",dice Sarmiento. "La América del Sur se

quedará atrás y perderá su misión provi¬dencial de sucursal de la civilización

moderna. No detengamos a los EstadosUnidos en su marcha". "Alcancemos los

Estados Unidos. Seamos América como

el mar es el océano. Seamos Estados

Unidos".

¿Cómo lograr esto ? Mediante la edu¬cación y a través de un gran procesoinmigratorio. Lavado de cerebro y lavadode sangre. Tal se pretendió con la edu¬cación inspirada en el positivismo francés,el utilitarismo inglés y el pragmatismoestadounidense. Habría que hacer de losmexicanos, diría Justo Sierra. (1848-1912),los yanquis del sur. En igual forma hablabaAlberdi de los yanquis hispanoamericanos.Nada con el pasado, nada con la Españacerril, el negro servil y el indígena salvaje.Pero menos aún con el mestizo de estas

razas. "En América Juan Bautista

Alberdi (1818-1884) -todo lo que no eseuropeo es bárbaro". Educar para la civi¬lización y traer a esta América hombresque hiciesen por ella lo' que ya habíanhecho en Europa y en los Estados Unidos,sería incorporar a sus pueblos entre lasnaciones que ya marchaban por la vía delprogreso y la civilización.

La nueva yuxtaposición cultural eranecesaria para evitar lo que ya señalabaSarmiento como un peligro : el que estaAmérica perdiese su misión de sucursal dela civilización moderna. Puestos a impro¬visar, sin antecedentes, sin experiencia enla ruta civilizatoria, sólo quedaba aceptar,libremente, la tutoría de los adelantadosen esta vía. Tutoría libremente aceptadaen relación con Europa occidental o losEstados Unidos. Ser sucursal no pudiendoser centro. Al no poder ser locomotoradel tren que conduce a la plena civilización,ser al menos furgón de cola. "No temáisencadenaros al orden y la cultura", diceAlberdi. "No temáis enajenar el porvenir

remoto.de nuestra industria a la civili¬

zación, si hay riesgo de que la arrebatenla barbarie o la tiranía anteriores". A los

inversionistas, a las empresas particulares,"colmadlas de ventajas, de privilegios, detodo favor imaginable, sin detenerse enmedios". Hecho esto, la incorporación deesta América a la civilización se daría porañadidura.

Pero la presencia europea como violentoimperialismo, así como el expansionismode los Estados Unidos iniciado ya sobreesta América en la guerra de 1847 contraMéxico y su presencia en 1898 sobre elCaribe, desplazando a los restos del impe¬rialismo ibero, darán una nueva concienciaa los hombres de esta nuestra América.

Conciencia de las yuxtaposiciones reali¬zadas, así como de la necesidad de asimi¬

larlas. Conciencia del complejo de inferio¬ridad que había permitido pasar de unadependencia impuesta a una dependencialibremente aceptada.

José Enrique Rodó (1871-1917) es delos primeros en enfrentarse al equivocadocamino civil ¡zatorio. Muestra la des/atini-

zacíón y la nordomanía como expresionesde tal complejo. "Se imita en sulibro Ariel a aquel en cuya superioridady prestigio se cree". Así, libremente seacepta, paradójicamente, nueva depen¬dencia. Por ello los Estados Unidos, agrega,están "realizando entre nosotros una

suerte de conquista moral". A una depen¬dencia se yuxtapone nueva dependencia.

Tal es lo que se viene haciendo al pre¬tender hacer de la cultura modelo un ins¬

trumento para incorporar a esta América auna cultura que le es ajena por su origen yexperiencia. No se trata, por supuesto, derechazar la civilización, ni las experienciasculturales de otros hombres. Ya que,siendo experiencias de hombres, sontambién experiencias para los hombres deesta América. De lo que se trata es dehacer de tales experiencias, y sus frutos,parte de las experiencias y frutos culturalesde esta América. No se rechaza a Caliban,

simplemente se le pone al servicio de Ariel.La experiencia del materialismo sajón,puesta al servicio del espíritu latino deAmérica. Las experiencias europeas yestadounidenses serán buenas experienciassí son puestas al servicio de Latinoaméricay de su cultura, asimiladas por ellas.

Imitar, sí, pero inventar un poco, diráel mexicano Antonio Caso (1883-1946)

hablando del bovarismo latinoamericano,inspirado en la heroína de Flaubert. Bova¬rismo, como el afán de ser distinto de loque se es, anulándose a sí mismo. América,nuestra América, como dirá el cubano

José Martí (1853-1895), no es un vacío

que ha de ser llenado una y otra vez.América es una realidad, tiene una cultura

y una ya larga historia. América son susindios, los conquistadores de éstos, loslibertadores luchando por poner fin a laconquista, los conservadores afanosos pormantener el orden que habían heredado,los civilizadores queriendo saltar sobre suspropias experiencias. América es así un

crisol de culturas que van asimilándose ensu seno, pese a los vanos intentos porsuperponérselas. La cultura latinoamericanase ha impuesto a la supuesta superioridadde las culturas que se le quisieron imponero aceptó libremente ; cada una de estasculturas fueron absorbidas y mezcladas enel crisol de la cultura de esta América.

El proyecto asuntivo, en cuyo empeñosiguen pugnando los hombres de culturaque han hecho conciencia de esta suineludible realidad, tomará también con¬

ciencia del error en que cayeran sus mayo¬res. El error cometido en el mismo mo¬

mento en que esta América alcanzó suemancipación política, en el afán porborrar un pasado que se consideró igno¬minioso, empeñándose en adoptar un pre¬sente que era extraño a sus experiencias.

Fue un error el pensar que estos pue¬blos eran, por sí solos, incapaces de incor¬porarse a una cierta forma de cultura ocivilización. "La incapacidad no está en elpaís naciente José Martí que pidereformas que se le acomoden y grandeza

" útil, sino en los que quieren regir pueblosoriginales de composición singular y vio¬lenta con leyes heredadas de cuatro siglosde práctica libre en los Estados Unidos".El genio debió haber estado en hermanarlo que parecía opuesto, en mezclar lo queparecía superpuesto. Ni "el libro europeo,ni el libro yanqui, daban la clave del enigmahispanoamericano Martí el

.problema de la independencia no era uncambio de forma, sino un cambio de

espíritu".

Tal es lo que se ha venido intentando alo largo de este siglo en Latinoamérica.Un cambio de espíritu por lo que se refiereal propio pasado, a la cultura propia, deacuerdo a como lo hacía otro de los ade¬

lantados de este espíritu, José Vasconcelos(1882-1959), al hablar de la que parecíamítica Raza Cósmica. Como crisol de

culturas en el que se va perfilando la cul¬tura latinoamericana. Cultura que, en vezde desdibujarse, va tomando cuerpo ex¬presando su identidad.

La dolorosa identidad a la que tambiénse refería Martí, y que debería de llenar deorgullo a quienes la han heredado. "¿Enqué patria puede tener un hom¬bre más orgullo que en nuestras repúbli¬cas dolorosas de América, levantadasentre las masas mudas de indios, al ruidode pelea del libro con el cirial, sobre losbrazos , sangrientos de un centenar deapóstoles? De factores tan descompues¬tos, jamás en menos tiempo histórico sehan creado naciones tan adelantadas ycompactas."

Identidad cultural complicada y, porserlo, original. Experiencia de hombres enextraordinarias y complicadas situacionesque, por serlo, viene a ser su originalaportación a la historia y a la cultura delhombre. , Del hombre sin más, en sus

múltiples expresiones.

Leopoldo Zea

69

Page 70: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

ñauu

Publicaciones de la Unesco sobre las culturas

latinoamericanas

Desde 1967 la Unesco lleva a cabo un vasto programa de estudios de las culturas latinoamericanas,en sus más variadas expresiones. Como resultado de ese programa se han publicado ya, bajo el títulogeneral de "América Latina en su cultura", varios volúmenes importantes, en coedición con SigloXXI Editores de México. Otros se hallan en preparación. En la elaboración de estos volúmenes hanparticipado numerosos especialistas y escritores latinoamericanos.

Serie "América Latina en su cultura" (1)

AMERICA LATINA EN SU LITERATURA512 p. 45 francosAMERICA LATINA EN SUS ARTES240 p. 25 francosAMERICA LATINA EN SU ARQUITECTURA320 p. 36 francosAMERICA LATINA EN SU MÚSICA

(de próxima aparición)

Serie "El mundo en América Latina"

AFRICA EN AMERICA LATINA <2>

(en preparación)

Aparte de estas series, la Organización ha publicado otras obras de primera importancia sobre diver¬sos aspectos de Latinoamérica. He aquí unas cuantas :

BIBLIOGRAFÍA GENERAL DE LA LITERATURA LATINOAMERICANA 187 p. 18 francosPANORÁMICA DE LA ARQUITECTURA LATINOAMERICANA

(Véase la página siguiente)MAPA MUNDIAL DE LOS SUELOS América Central

volumen explicativo i110 p. 35 francos1 hoja (82 x 1 15 cm) 50 francos

América del Sur

volumen explicativo215 d. 48 francos1 hoja (82 x 115) 50 francos

(1) Siglo XXI Editores, S.A. de México, Av. Cerro del Agua, 243, México 20 D.F., Apartado postal 20626 :exclusiva de venta en todos los países de América LatinaUnesco : exclusiva de venta en su librería de París y en España.Ambos coeditores o sus agentes en los demás países del mundo.

(2) Siglo XXI Editores : exclusiva de venta en MéxicoUnesco : en España.Ambos coeditores : demás países.

El reto del año 2000

En junio pasado la Unesco reunió en suCasa de París a más de treinta personali¬dades de la política, las artes y las ciencias,para que intervinieran en una Mesa Redon¬da sobre "El reto del año 2000". Los parti¬cipantes los cuales figuraban Alfredkastler (de Francia), Premio Nobel de Físi¬

ca, y Sean MacBride (de Irlanda) y PhilipNoel-Baker (del Reino Unido), Premios

Nobel de la Paz pusieron de manifiestouna preocupación común ante la tripleamenaza que se cierne sobre la humanidaden lo que respecta al armamento nuclear,al medio ambiente y a las normas morales.

Inauguraron la reunión el señor Amadou-Mahtar M'Bow, Director General de la

Unesco, y el señor Luis Echeverría, exPresidente de México. En el curso de los

debates, que duraron dos días y medio, losoradores expresaron su inquietud por "lalentitud del desarme nuclear, como primeraetapa para el desarme mundial general ycompleto ; por el continuo saqueo de losrecursos naturales no renovables, la defo¬

restación arbitraria y la contaminación dela naturaleza ; y por el debilitamiento sen¬sible de las normas éticas y la acción sutilque en la mente de los hombres ejercen losmedios de comunicación manipulados porintereses económicos, gobiernos u otrasinstituciones o individuos que actúan enprovecho propio".

Todos los participantes pusieron derelieve que, para resolver todos esos pro¬blemas y el del establecimiento urgentey duradero de una justicia social, erannecesarias una cooperación internacionallo más estrecha posible, una distribución

equitativa de los recursos naturales y unadisminución del desaforado consumo de

bienes. Se plantearon asimismo los proble¬mas relativos a la juventud y al desempleo,todos ellos en relación con la instauración

de un nuevo orden económico "como

condición previa para esa paz tan grave¬mente amenazada y tan ardientementeanhelada por todos".

Entre los participantes, provenientes detodos los continentes, figuraban ademásJerzy Grotowsky, director de teatro pola¬co ; Oswaldo Guayasamín, pintor ecuato¬riano ; Michiko Inukai, escritor japonés ;Vladimir S. Kemenov, vicepresidente de laAcademia de Bellas Artes de la URSS;

Prem Kirpal, educador indio ; Tran Van Khe,musicólogo vietnamita, y Peter Ustinov,'actor, dramaturgo y cineasta inglés.

Exposición circulantede la Unesco sobre

América Latina

"Las artes de América Latina" es el tema de la

duodécima exposición circulante de la Unesco,organizada en el marco de su programa enca¬minado a promover la circulación internacionalde las obras de interés cultural. Esta exposi¬ción, que comprende centenares de fotografías,ofrece una visión general de las artes plásticasy decorativas y de la arquitectura del conti¬nente latinoamericano.'

A petición de los Estados Miembros, la expo-]sición recorrerá diversos países del mundo. EnBogotá se presentará con ocasión de la Confe¬rencia Intergubernamental sobre Políticas Cultu¬rales en América Latina y el Caribe que ha decelebrarse del 10 al 20 de enero de 1978.

Obras representativasde América Latina

En la serie iberoamericana de su colección

"Obras representativas" la Unesco hapublicado, entre otros, los siguientes títulos :

En inglés : Memorias de un sargento demilicias de Antonio Manuel Almeida, YayaGarcía de Joaquín María Machado de Assis,Poesía moderna del Brasil, Memorias de

Mama Blanca de Teresa de la Parra, Poemas

escogidos de Octavio Paz, Selección deobras de teatro de Florencio Sánchez, Via¬

jes de Domingo Faustino Sarmiento, y Poemasescogidos de Jaime Torres Bodet.

En francés : Raza de bronce de Alciaes

Arguedas, Quincas Borba de Machado deAssis, El mulato de Aluizio de Azevedo, Pági¬nas escogidas de Simón Bolívar, Antologíade Rubén Darío, Martín Fierro de José Her¬

nández, María de Jorge Isaacs, La venganzadel árbol y otros cuentos de Monteiro Lobato,Páginas escogidas de José Martí, Los últi¬mos días de la colonia en el Alto Perú de

Gabriel René Moreno, Motivos de Proteo de

José Enrique Rodó, Facundo y Recuerdos deprovincia . de Domingo F. Sarmiento, - Unmundo dividido para todos de Roberto Sosa.

En inglés y en francés : El Lazarillo de cie¬gos caminantes de Concolorcorvo, Enriquillode Manuel de Jesús Galván, Tabaré de JuanZorrilla de San Martín.

En edición bilingüe español-francés : Antologia de la poesía iberoamericana de Federico de Onís, Antología de la poesía mexicana de Octavio Paz y Manuscrito Tovar

Recordamos a nuestros lectores los

NUEVOS PRECIOS DE "EL CORREO DE LA UNESCO"Precios de suscripción aplicables a partir del 1o de enero de 1978 :

Por un año : 35 francos franceses

Por dos años : 58 francos franceses

Precio del número suelto : 3,50 francos franceses

OFERTA ESPECIAL VALIDA HASTA EL 31 DE DICIEMBRE DE 1977Suscriptores - Si su suscripción, hecha directamente con la Unesco, caduca antes del

31 del mes de diciembre próximo, puede renovarla por uno o dos años a las tarifas actuales:Por un año : 28 francos franceses

Por dos años : 52 francos franceses

No suscriptores - Hasta el 31 de diciembre de este año pueden suscribirse o regalarsuscripciones por uno o dos años a las tarifas actuales.

IMPORTANTE - Los lectores no residentes en Francia deberán dirigirse al agentede ventas en su país (ver página siguiente) quien les concederá estos mismos bene¬ficios a las tarifas actualmente en vigor en su moneda nacional.

70

Page 71: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

Un nuevo libro de la Unesco

sobre América Latina

Acaba de aparecer

panorámica dela arquitecturalatino

americana

damián boyónpacto gasparmí

« .SCO

Publican conjuntamente el volumen la Unesco y la EditorialBlume (Milanesado, 21-23, Barcelona 17, España).

La exclusiva de distribución en España corresponde a laEditorial Blume, en Francia a la Unesco y en los demás paísesconjuntamente a ambos coeditores o sus agentes.

Precio : 55 francos franceses.

En el marco del vasto programa de estudios sobre lacultura latinoamericana emprendido por la Unesco, sepublicó recientemente un importante volumen tituladoAmérica Latina en su arquitectura del que ya dimosnoticia aquí mismo (véase El Correo de la Unesco,noviembre de 1976).

Aparece ahora este nuevo libro centrado en torno almismo tema aunque realizado con diferente enfoque. Setrata aquí esencialmente de conceder la palabra a losmismos creadores de la arquitectura latinoamericana y demostrar plásticamente, con la mayor riqueza visualposible, sus realizaciones.

Consecuentemente, el volumen reúne dos elementos

distintos :

una serie de diez entrevistas con arquitectos de otrostantos países de la región (hombres tan conocidos comoR. Burle Marx, R. Salmona, P. Ramírez Vázquez, C. Testa,etc.), recogidas por el crítico de arte argentino DamiánCarlos Bayón ;

una serie de 233 fotografías de obras arquitectónicasrealizadas especialmente para el libro por el famosofotógrafo italiano radicado en Venezuela Paolo Gasparini.

El resultado es una visión sobremanera viva y vigorosa delo que en América Latina se ha hecho y se está haciendoen la materia. La obra ofrece al lector no sólo un

inventario visual y una crítica dialogada de la arquitecturay el urbanismo del continente sino también un panoramade su inserción en el medio social.

Para renovar su suscripcióny pedir otras publicaciones de la Unesco

Pueden pedirse las publicaciones de laUnesco en las librerías o directamente

al agente general de la Organización.Los nombres de los agentes que nofiguren en esta lista se comunicarán alque los pida por escrito. Los pagospueden efectuarse en la moneda de

cada país.

ANTILLAS HOLANDESAS. C.G.T. Van Dorp & C°.

(Ned. Ant.) N.V. Willemstad, Curaçao. - ARGEN¬TINA. EDILYR, Belgrano 2786-88, Buenos Aires. -REP. FED. DE ALEMANIA. Todas las publicaciones :Verlag Dokumentation, Pössenbacher Strasse 2, 8000

München 71 (Prinz Ludwigshöhe). Para "UNESCOKURIER" (edición alemana) únicamente : Colmant-

strasse 22, 5300 Bonn. BOLIVIA. Los Amigos del

Libro, casilla postal 4415, La Paz; Perú 3712 (Esq.

España), casilla postal 450, Cochabamba. BRASIL.Fundaçao Getúlio Vargas, Serviço de publicaçoes,caixa postal 21120, Praia de Botafogo 188, Rio deJaneiro, G.B. COLOMBIA. Libreria Buchholz

Galería, avenida Jiménez de Quesada 8-40, apartadoaero 53-750, Bogotá; J. Germán Rodríguez N., calle17, Nos. 6-59, apartado nacional 83, Girardot, Cundi-

namarca; Editorial Losada, calle 18 A Nos. 7-37, apar¬

tado aéreo 5829, apartado nacional 931, Bogotá; ysucursales : Edificio La Ceiba, Oficina 804, Medellín;

calle 37 Nos. 14-73, oficina 305, Bucaramanga; Edificio

Zaccour, oficina 736, Cali. COSTA RICA. Librería

Trejos S.A., apartado 1313, San José. - CUBA.

Instituto Cubano del Libro, Centro de Importación,

Obispo 461, La Habana. CHILE. Bibliocentro Ltda.,

Casilla 13731, Huérfanos 1160 of. 213, Santiago (21). -ECUADOR. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Núcleo

del Guayas, Pedro Moncayo y 9 de Octubre, casilla decorreo 3542, Guayaquil. RAID de Publicaciones,

Garcia 420 y 6 de Diciembre, casilla 3853, Quito.

EL SALVADOR. Librería Cultural Salvadoreña, S.A.,

Calle Delgado No. 117, San Salvador. - ESPAÑA.

DONAIRE, Ronda de Outeiro, 20, apartado de correos,341, La Coruña ; EISA - Ediciones Iberoamericanas,

S.A., calle de Oñate, 15, Madrid 20 ; Liberia Al-

Andalus, Roldana, 1 y 3, Sevilla, 4 ; LITEXSA, Librería

Técnica Extranjera, Tuset, 8-10 (Edificio Monitor) Bar¬

celona ; Mundi-Prensa Libros, S.A. Castelló, 37, Ma¬

drid 1. - ESTADOS UNIDOS DE AMERICA. Unipub,

P.O.Box 433, Murray Hill Station, Nueva York N.Y.10016. Para "El Correo de la Unesco": Santillana Pu¬

blishing Company Inc., 575 Lexington Avenue, NuevaYork, N.Y.10022. - FILIPINAS. The Modern Book Co.

926 Rizal Avenue P.O. Box 632, Manila, D-404. -

FRANCIA. Librairie de l'Unesco, 7, place de Fon¬

tenoy, 75700 Paris (C.C.P. Paris 12.598-48). -

GUATEMALA. Comisión Guatemalteca de Coope¬ración con la Unesco, 6a. calle 9.27, Zona 1, apartado

postal 244, Guatemala. - HONDURAS. Librería

Navarro, Calle Real, Comayaguela, Tegucigalpa.JAMAICA. Sangster's Book Stores Ltd., P.O.

Box 366; 101, Water Lane, Kingston. - MARRUE¬

COS. Librairie "Aux Belles Images", 281, avenue

Mohammed-V, Rabat. "El Correo de la Unesco" para

el personal docente : Comisión Marroquí para la Unes¬

co, 20, Zenkat Mourabitine, Rabat (C.C.P. 324-45).

MEXICO. SABSA, Servicio a Bibliotecas, S.A.,

Insurgentes Sur, Nos 1032-401, México 12, D.F.

Únicamente para las publicaciones : CILA (Centro

Interamericano de Libros Académicos), Sullivan 31 bis,

México 4, D.F. MOZAMBIQUE. Instituto National

do Livra e do Disco (INLD), Avenida 24 de Julho, 1921,

r/c e 1o andar, Maputo. PANAMA. Librería Uni¬

versitaria, Universidad de Panamá, Panamá.

PARAGUAY. Agencia de Diarios Y Revistas, Sra.

Nelly de García Astillero, Pte. Franco n° 580,. Asun¬

ción. PERU. Editorial Losada Peruana, Jirón Contu-

maza 1050, apartado 472, Lima. - PORTUGAL. Días

Et Andrade Ltda., Livraria Portugal, rua do Carmo 70,

Lisboa. - REINO UNIDO. H.M. Stationery Office,

P.O. Box 569, Londres S.E. 1. - URUGUAY. Edito¬

rial Losada Uruguaya S.A. Librería Losada, Maldonado1092, Montevideo. VENEZUELA. Librería del Este,

Av. Francisco de Miranda, 52-Ed¡ficio Galipán, apartado

60337, Caracas.

Page 72: América Latina: múltiple y una; The UNESCO Courier: …unesdoc.unesco.org/images/0007/000748/074814so.pdf · Las tres culturas tígador del gentío materno. Como entre ' tanto,

iS? ií i

V-< s

Presencia de EspañaDel río Grande a la Patagonia, de Cuzco aPernambuco, lo hispánico o, más exactamente, loibérico está siempre presente y actuante en la vida,el arte y la civilización de América Latina. Herenciapeninsular son las lenguas, son muchos modos de

mÊmÊÊÊmm mm mmmmy compleja empresa de interpenetración y mestizaje.La huella de España se hace plásticamente visible enel arte hispano-colonial del que tantas admirablesmuestras se encuentran esparcidas por todo elcontinente. En la foto, un elocuente detalle del

interior de una de las numerosas iglesias de Quito,tan características del estilo colonial o jesuíta. Abajo,pintura popular india sobre corteza de árbol (Véasela leyenda de la pág. 3).

<l. m

'mi^ét^ «il f;