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¡1,2,3...Por Mí! 21 SINGULAR EXPERIENCIA Es un gran error pensar que los niños llegan a la escuela sin aprendizajes previos. En su corto bagaje cultural han ido recogiendo y haciendo suyos conceptos e ideas que se relacionan básicamente con las matemáticas. Saben cuando quieren “más” de algo, pueden diferenciar un círculo de un triángulo y establecer diferencias entre niños y niñas o grandes y chicos, sin mucha dificultad. Ety Paniagua, Educadora de Párvulos y Magíster en Ciencias de la Educación, está conven- cida de ello y advierte que una de las principales falencias del sistema educativo en esta ma- teria radica precisamente en el desaprovechamiento de aquel- las “intuiciones, experiencias y procedimientos no formalizados que debieran ser el punto de partida del proceso de enseñanza. Es a partir de sus juegos, fanta- sías e intereses que ellos van es- tableciendo relaciones y dando sentido a sus cono- cimientos, al qué, cómo y para qué aprender matemáticas”. En este contexto, cobra rel- evancia un ensayo del psicólogo Ricardo Rosas, profesor de la Escuela de Psicología de la Uni- versidad Católica, “De cómo el Homo Faber devino en Homo Sapiens gracias al Homo Ludens (o de cómo el juego amplía la zona de desarrollo próximo)”, en el que se refiere a la facilidad que otorga la actividad lúdica a los procesos de aprendizaje. “Al jugar, el niño crea una situación imaginaria que le permite sat- isfacer el estado de necesidad que le ha creado una determinada tendencia irrealizable. ¿Para qué aprender matemáticas? Las matemáticas, entendidas como un conjunto estructurado de conceptos, teoremas y teorías que permiten interpretar, conocer, explicar, planificar acciones o predecir hechos y fenómenos, involucran muchos más aspec- tos. Ety Paniagua menciona que las implicancias de este apren- dizaje “superan lo meramente matemático y desarrollan, además, una forma de pensamiento; precisan los contenidos del lenguaje, incrementan la com- petencia lingüística en todas sus modalidades, ayudan a enfrentar, plantear y resolver problemas tanto matemáticos como de la vida diaria y generan en el niño la actitud y capacidad de aprender progresivamente. Fomenta el desarrollo de objetivos transversales necesarios para su crecimiento personal como la búsqueda de nuevos caminos de solución y la creatividad”. Luisa González Iturria, profe- sora de matemáticas y física de la Pontificia Universidad Católica, coincide con esta propuesta y agrega que esta materia “no es buena por sí misma sino por todo lo que desencadena en la mente. A las matemáticas hay que darle una aplicación directa, hacerle ver al alumno que algún día van a necesitar esa capacidad para reflexionar, sintetizar y organi- zar que sólo da el pensamiento matemático”. En este sentido, se puede afirmar que el desafío de cada educador es lograr el equilibrio perfecto en- tre el juego y los contenidos, mez- clar la sorpresa, los conocimien- tos y los hechos cotidianos en una especie de rompecabezas en el que cada forma calza perfecta- mente en el aprendizaje. Matemáticas 2 4 1 5 6 3 TESTIMONIOS: - “Con cuarto medio, un día de- cidimos jugar al banco. A cada alumna le asigné dinero virtual, para que lo invirtiera en la Bolsa (incluso fuimos a ver cómo se trabajaba allí) Podían comprar, vender, cambiar acciones y después de un tiempo, la que tenía más acciones ganaba un 7. Eran muy interesantes las discu- siones de por qué subían unas y bajaban otras, se metían los papás y no se dieron ni cuenta de cómo aprendieron y se acos- tumbraron a leer el diario. Se puede hacer lo mismo con una compra de supermercado…”, comenta Luisa González, profe- sora de matemáticas y física de la P.U.C. - “Me gusta darles guías de tra- bajo con situaciones problemas más que ejercicios aislados pues lo que realmente importa es que apliquen los contenidos. También hacemos muchos juegos con material concreto como la calculadora o cualquier tipo de experimento que el- los mismos proponen. Cuenta Ximena Carrasco, profesora de educación general básica, men- ción matemática del Colegio San Joaquín. Más información en www.educar.cl Las matemáticas, están presentes casi en todo. El clásico juego infantil de la escondida, o el domicilio de todo individuo, ocultan con simples disfraces el increíble mundo de los números, los espacios y las formas. Alejandra Velasco Periodista

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    Es un gran error pensar que los nios llegan a la escuela sin aprendizajes previos. En su corto bagaje cultural han ido recogiendo y haciendo suyos conceptos e ideas que se relacionan bsicamente con las matemticas. Saben cuando quieren ms de algo, pueden diferenciar un crculo de un tringulo y establecer diferencias entre nios y nias o grandes y chicos, sin mucha dificultad. Ety Paniagua, Educadora de Prvulos y Magster en Ciencias de la Educacin, est conven-cida de ello y advierte que una de las principales falencias del sistema educativo en esta ma-teria radica precisamente en el desaprovechamiento de aquel-las intuiciones, experiencias y procedimientos no formalizados que debieran ser el punto de partida del proceso de enseanza. Es a partir de sus juegos, fanta-sas e intereses que ellos van es-tableciendo relaciones

    y dando sentido a sus cono-cimientos, al qu, cmo y para qu aprender matemticas. En este contexto, cobra rel-evancia un ensayo del psiclogo Ricardo Rosas, profesor de la Escuela de Psicologa de la Uni-versidad Catlica, De cmo el Homo Faber devino en Homo Sapiens gracias al Homo Ludens (o de cmo el juego ampla la zona de desarrollo prximo), en el que se refiere a la facilidad que otorga la actividad ldica a los procesos de aprendizaje. Al jugar, el nio crea una situacin imaginaria que le permite sat-isfacer el estado de necesidad que le ha creado una determinada tendencia irrealizable. Para qu aprender matemticas? Las matemticas, entendidas como un conjunto estructurado de conceptos, teoremas y teoras que permiten interpretar, conocer, explicar, planificar acciones o predecir hechos y fenmenos,

    involucran muchos ms aspec-tos. Ety Paniagua menciona que

    las implicancias de este apren-dizaje superan lo meramente

    matemtico y desarrollan, adems, una forma de

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    precisan los contenidos del lenguaje, incrementan la com-petencia lingstica en todas sus modalidades, ayudan a enfrentar, plantear y resolver problemas tanto matemticos como de la vida diaria y generan en el nio la actitud y capacidad de aprender progresivamente. Fomenta el desarrollo de objetivos transversales necesarios para su crecimiento personal como la bsqueda de nuevos caminos de solucin y la creatividad. Luisa Gonzlez Iturria, profe-sora de matemticas y fsica de la Pontificia Universidad Catlica, coincide con esta propuesta y agrega que esta materia no es buena por s misma sino por todo lo que desencadena en la mente. A las matemticas hay que darle una aplicacin directa, hacerle ver al alumno que algn da van a necesitar esa capacidad para reflexionar, sintetizar y organi-zar que slo da el pensamiento matemtico. En este sentido, se puede afirmar que el desafo de cada educador es lograr el equilibrio perfecto en-tre el juego y los contenidos, mez-clar la sorpresa, los conocimien-tos y los hechos cotidianos en una especie de rompecabezas en el que cada forma calza perfecta-mente en el aprendizaje.

    Matemticas

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    TESTIMonIoS: - Con cuarto medio, un da de-cidimos jugar al banco. A cada alumna le asign dinero virtual, para que lo invirtiera en la Bolsa (incluso fuimos a ver cmo se trabajaba all) Podan comprar, vender, cambiar acciones y despus de un tiempo, la que tena ms acciones ganaba un 7. Eran muy interesantes las discu-siones de por qu suban unas y bajaban otras, se metan los paps y no se dieron ni cuenta de cmo aprendieron y se acos-tumbraron a leer el diario. Se puede hacer lo mismo con una compra de supermercado, comenta Luisa Gonzlez, profe-sora de matemticas y fsica de la P.U.C.- Me gusta darles guas de tra-bajo con situaciones problemas ms que ejercicios aislados pues lo que realmente importa es que apliquen los contenidos. Tambin hacemos muchos juegos con material concreto como la calculadora o cualquier tipo de experimento que el-los mismos proponen. Cuenta Ximena Carrasco, profesora de educacin general bsica, men-cin matemtica del Colegio San Joaqun.

    Ms informacin en www.educar.cl

    Las matemticas, estn presentes casi en todo. El clsico juego infantil de la escondida, o el domicilio de todo individuo, ocultan con simples disfraces el increble mundo de los nmeros, los espacios y las formas.

    Alejandra Velasco

    Periodista