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UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
FACULTAD DE HUMANIDADES
LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA CLÍNICA (PD)
“AUTOCONCEPTO EN ADOLESCENTES DE FAMILIAS MONOPARENTALES A
CARGO DE MUJERES DE LA ETNIA KAQCHIKEL”
TESIS DE GRADO
LAURA CAROLINA LÓPEZ LÓPEZ
CARNET 2025408
LA ANTIGUA GUATEMALA, ENERO DE 2014
SEDE REGIONAL DE LA ANTIGUA
UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
FACULTAD DE HUMANIDADES
LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA CLÍNICA (PD)
“AUTOCONCEPTO EN ADOLESCENTES DE FAMILIAS MONOPARENTALES A
CARGO DE MUJERES DE LA ETNIA KAQCHIKEL”
TESIS DE GRADO
TRABAJO PRESENTADO AL CONSEJO DE LA FACULTAD DE
HUMANIDADES
POR:
LAURA CAROLINA LÓPEZ LÓPEZ
PREVIO A CONFERÍRSELE
EL TÍTULO DE PSICÓLOGA CLÍNICA EN EL GRADO ACADÉMICO DE LICENCIADA
LA ANTIGUA GUATEMALA, ENERO DE 2014
SEDE REGIONAL DE LA ANTIGUA
AUTORIDADES DE LA UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR RECTOR: P. ROLANDO ENRIQUE ALVARADO LÓPEZ, S. J. VICERRECTORA ACADÉMICA: DRA. MARTA LUCRECIA MÉNDEZ GONZÁLEZ DE PENEDO
VICERRECTOR DE DR. CARLOS RAFAEL CABARRÚS PELLECER, S. J.
INVESTIGACIÓN Y PROYECCIÓN: VICERRECTOR DE DR. EDUARDO VALDÉS BARRÍA, S. J. INTEGRACIÓN UNIVERSITARIA: VICERRECTOR LIC. ARIEL RIVERA IRÍAS ADMINISTRATIVO: SECRETARIA GENERAL: LIC. FABIOLA DE LA LUZ PADILLA BELTRANENA DE LORENZANA
AUTORIDADES DE LA FACULTAD DE HUMANIDADES
DECANA: MGTR. MARIA HILDA CABALLEROS ALVARADO DE MAZARIEGOS
VICEDECANO: MGTR. HOSY BENJAMER OROZCO SECRETARIA: MGTR. LUCRECIA ELIZABETH ARRIAGA GIRON DIRECTORA DE CARRERA: MGTR. GEORGINA MARIA MARISCAL CASTILLO DE JURADO
NOMBRE DEL ASESOR DE TRABAJO DE GRADUACIÓN
LIC. MARIA VICTORIA CABRERA ARMAS DE RAMIREZ
REVISOR QUE PRACTICÓ LA EVALUACIÓN
LIC. KARLA MAGALY ROLDAN DE LA ROSA DE ROJAS
5
Agradecimientos
A Dios: por la vida, por su infinito amor, por guiarme y fortalecerme en los momentos
difíciles, sobre todo por darme la oportunidad de llegar a obtener un logro más en mi
vida. Gracias.
A la virgen María: por ser mi intercesora ante Dios, por acercarme y mantener mi fe,
por estar presente en los momentos de angustia y en los momentos de alegría.
A mis padres: por ser mis primeros educadores, porque sembraron en mí su ejemplo
de perseverancia y dedicación, por su ayuda incondicional, porque ahora soy el reflejo
de ellos, por enseñarme que Dios es mi guía y en el cual debo confiar siempre.
A mi Fer: porque desde que lo conocí ha sido mi apoyo incondicional, porque ha
estado en todos esos momentos alegres y difíciles, por esas palabras que me
motivaron a seguir luchando, sobre todo por su gran amor el cual siempre me ha
demostrado.
A mis hermanas y hermanito: porque su cariño ha sido mi motivación para lograr este
triunfo. Porque gracias a ellas he aprendido tantas cosas que me hacen ser mejor
persona, aunque no estén a mi lado he aprendido muchas cosas positivas de ellas, las
quiero.
Al colegio Parroquial Hermano Pedro: por abrirme las puertas para realizar este
trabajo de campo, principalmente a la directora Marta Josefina directora del
establecimiento, por colaborar en este estudio.
A los adolescentes: gracias por participar y colaborar, porque fueron la parte más
importante de este estudio.
A los Catedráticos y Catedráticas de la URL: gracias por compartir sus
conocimientos y experiencias durante este largo recorrido por sus aulas, en especial a
la licenciada María Victoria Cabrera, por asesorar mi trabajo de tesis, por su paciencia y
sus palabras de motivación.
7
DEDICATORIA
A Dios principalmente por ser el centro de todo lo que existe, porque de él proviene la
sabiduría y el entendimiento, porque sin él nada es posible, porque ha sido mi principal
apoyo para llegar hasta esta etapa tan importante en mi vida, porque me dio la vida
para continuar, porque aunque le falle nunca me ha dejado de amar.
ÍNDICE
I. Introducción 1
1.1 Autoconcepto 10
1.1.2 Características básicas del autoconcepto 14
1.1.3 Dimensiones del autoconcepto 16
1.1.4 Factores que determinan el autoconcepto 18
1.1.5 Diferencias entre autoconcepto y autoestima 19
1.2 Familia 20
1.2.1 Familia monoparental 22
1.2.2 Causas de la Monoparentalidad 25
1.2.3 Factores en el contexto familiar 26
1.2.4 Problemas psicosociológicos que enfrenta la mujer como única
Encargada de la familia 27
1.2.5 La familia kaqchikel 29
1.3 La adolescencia 31
1.3.1 Principales teorías sobre la adolescencia 33
1.3.2 Construcción de la identidad 36
1.3.3 Logro de la identidad 37
II. Planteamiento del problema 39
2.1 Objetivos 42
2.2 Variables 42
2.3 Definición de Variables 42
2.3.1 Definición conceptual 42
2.3.2 Definición operacional 43
2.4 Alcances y límites 43
2.5 Aporte 44
III. Método 45
3.1 Sujetos 45
3.2 Instrumento 46
3.3 Procedimiento 47
3.4 Tipo de investigación 47
3.4.1 Diseño 47
3.5 Metodología estadística 48
IV. Presentación y Análisis de Resultados 49
V. Discusión de Resultados 60
VI. Conclusiones 64
VII. Recomendaciones 66
VIII. Referencias Bibliográficas 68
Anexos
Ficha técnica del Test
Hoja de Respuestas del Test AF5
Hoja de Calificación del Test
10
Resumen
La presente investigación plantea el objetivo general de conocer cómo es el
autoconcepto en los adolescentes de familias monoparentales a cargo de mujeres de la
etnia kaqchikel en las edades de 13 a 16 años de un colegio privado del municipio de
San Antonio Aguas Calientes, Sacatepéquez con estudiantes que asisten al
establecimiento y que accedieron a participar en el estudio. Para lograr el objetivo
planteado se evaluó a diez adolescentes, utilizando como instrumento el test de
Autoconcepto Forma 5 (AF5) de García y Musitu (2009).
El diseño de investigación es de tipo descriptivo, con una muestra no aleatoria y para
describir los datos se utilizó el programa de Microsoft Office Excel, Windows 2010.
Concluyendo que los adolescentes se perciben físicamente atractivos, indicando un
autoconcepto físico y académico alto, seguido del autoconcepto familiar que se ubicó
en un nivel intermedio, mientras que el autoconcepto en la dimensión social y
emocional resultaron bajos, percibiendo así sus relaciones sociales y sus respuestas a
situaciones específicas.
Se recomienda la planificación de talleres que puedan seguir contribuyendo con las
familias monoparentales del municipio a través de las madres y los adolescentes
kaqchikeles para fortalecer su autoconcepto.
1
I. INTRODUCCIÓN
El autoconcepto es un pilar fundamental para la estabilidad emocional del individuo, la
importancia de los conceptos que se tienen de sí mismo desde diferentes perspectivas,
son descripciones abstractas que han dado origen a impresionantes estudios para
definirlo.
Las distintas áreas en las que el individuo se desenvuelve influyen en su experiencia de
vida; sea esta positiva o negativa, el adolescente busca identificarse en su medio social,
familiar, académico, emocional y físico adaptándose de alguna forma a sus
experiencias y su relación con los demás, a sus pensamientos y los sentimientos que
tiene de sí mismo.
Diversos autores han contribuido en la definición de este concepto por la relevancia que
tiene en la vida del ser humano, afirmando que a lo largo de la vida del individuo se
encuentran momentos críticos, donde la exigencia de adaptarse a nuevos roles y
ajustes a nuevas demandas son fundamentales; es allí donde se emplean las
experiencias que se han tenido en cada etapa acontecida, y se espera tener la madurez
necesaria para afrontar esos momentos.
La etapa de la adolescencia que el individuo debe afrontar, para varios estudiosos, es
un período crítico que empieza con dificultades para adaptarse al medio en el que se
encuentra, cabe mencionar, que cuando el sujeto se centra en este escalón de vida,
ingresa a la secundaria en donde le corresponde interactuar con individuos de su
misma etapa; en donde varios adolescentes van con la idea de cómo enfrentarse a
algo nuevo en el inicio de la misma. La educación en esta etapa de la existencia es
algo fundamental, puesto que van surgiendo dudas a nuevas experiencias e
inquietudes que se quieren resolver; es un período en el cual se buscan respuestas a
varias preguntas, y éstas deben ser orientadas de la mejor manera. Sin embargo es la
familia la primera escuela para los niños que luego pasarán a la controversial edad
adolescente, es allí donde se obtiene la base para lograr un autoconcepto estable y una
buena autoestima.
2
Y es en esta edad donde surgen grandes cambios tanto físicos, emocionales, sociales
y familiares, que pueden llegar a crear confusión en los adolescentes; el autoconcepto
en ellos juega un papel determinante para el desarrollo psicosocial donde se resalta la
importancia de sus pensamientos, sentimientos y conductas, para luego llegar a
comprender la forma de pensar, sentir y actuar de los demás.
La familia es la parte fundamental que le brindará al adolescente una base firme y
segura para desarrollar un buen autoconcepto en la edad adulta, pasando previamente
por esta etapa crucial y como organización primaria brindar el apoyo, la estabilidad
emocional, y la seguridad, para ofrecerle al adolescente confianza y comunicación.
Pero ¿qué pasa cuando los adolescentes no cuentan con los dos padres? Cuando
pertenecen a una familia monoparental liderada por la madre ¿Afecta significativamente
el no tener al padre como figura importante en esta etapa?
Actualmente las características y situaciones de la familia han cambiado, siendo una de
ellas el incremento de las familias monoparentales, ya sea por separación, viudez o
divorcio. La monoparentalidad se define como la disolución del vínculo conyugal y por
esta razón existen varios adolescentes que pertenecen a este tipo de familias, que
únicamente pueden contar con el apoyo de uno de sus padres. Posiblemente la figura
encargada de los hijos al verse sola con toda la responsabilidad delegada, empieza a
sentir inseguridad en su capacidad para hacerlo, y más aún cuando la mujer de la
cultura kaqchikel es la única responsable de su familia ya que la falta de preparación
académica, manifestada en esta cultura hace que en muchas ocasiones no pueda
responder adecuadamente a las demandas de los hijos adolescentes; otro factor que
posiblemente surja es la falta de oportunidades laborales que no le permiten crecer
tanto como madre ni como persona para sostener el hogar.
El objetivo principal del estudio, es determinar el autoconcepto en los adolescentes que
pertenecen a una familia monoparental a cargo de la mujer kaqchikel, así mismo el de
contribuir y sugerir talleres, actividades, información a padres de familia y adolescentes
3
sobre el origen del autoconcepto y la autoestima, abordándolo desde el municipio
donde se realizó el estudio y partiendo desde el análisis de los resultados para futuras
investigaciones.
Es importante mencionar la necesidad de investigar y llevar a cabo varios estudios que
contribuyan con la salud mental en diferentes contextos y especialmente en Guatemala
y sus comunidades, en las cuales se ha manifestado interés por estudiar el
autoconcepto como un tema de gran relevancia y trascendencia para las ciencias
psicológicas y seguir contribuyendo con la población a través de investigaciones y sus
resultados.
Expertos manifiestan la importancia de la familia, que para el adolescente, las
relaciones paterno-filiales son la base fundamental para encontrar un equilibrio y
estabilidad del autoconcepto, el cual se origina a través del clima familiar. Es por ello
que en Guatemala y en otros países se han desarrollado investigaciones que giran en
torno a la importancia de la familia para el autoconcepto en el adolescente. En
diferentes literaturas y estudios se ha sugerido que una buena comunicación familiar
proporciona a los hijos el apoyo emocional que es necesario para el desarrollo positivo
de su autoconcepto.
Citando estudios guatemaltecos que destacan la importancia del autoconcepto,
Fuentes (2008), en su investigación “Autoconcepto en el proceso de adaptación social
de los adolescentes”, indica que éste es una parte significativa en la vida integral y
social del ser humano, ya que una buena concepción y percepción de sí mismo significa
salud mental, física y emocional en el futuro; lo cual fortalece la personalidad del sujeto
y esto como resultado un buen desenvolvimiento dentro de un grupo social. Su objetivo
fue determinar la influencia que posee el autoconcepto en los adolescentes para su
adaptación social; para este estudio se aplicó la prueba AUTOPB-96 y el Cuestionario
de Adaptación Bell para adolescentes, en donde los resultados obtenidos demostraron
que, el autoconcepto sí influye en el proceso de adaptación social, sin embargo
menciona que este no es determinante. Concluyendo que hay adolescentes con un
4
autoconcepto alto y una adaptación social no satisfactoria y para solucionarlo
recomienda llevar a cabo un proyecto, para hacer conciencia y transmitir la importancia
de una adecuada formación del autoconcepto en los adolescentes; brindando para ello
información de los cambios físicos, emocionales y sociales que los mismos presentan
en esa etapa de la vida, para que obtengan una mejor adaptación social.
Otro estudio llevado a cabo por León (2006), sobre la “Personalidad en hijos de familias
monoparentales”, cuyo objetivo general fue determinar si existe diferencia entre
personalidad de hijos de familias monoparentales y los hijos de hogares integrados. La
muestra se integró con 67 niños, 28 de ellos hijos de familias monoparentales y 39 hijos
de hogares integrados, de las escuelas rurales del municipio de Jocotenango
Sacatepéquez. La investigación concluyó indicando que no existe diferencia
estadísticamente significativa entre personalidad de los hijos que pertenecen a familias
monoparentales y los hijos de familias integradas por los dos padres. En las
recomendaciones sugiere que se realicen nuevas investigaciones sobre la personalidad
de hijos de familias monoparentales, para indagar más sobre este importante tema.
Por su parte Rojas (2005), en su investigación “Influencia de la familia en la cultura del
adolescente”, tuvo como objetivo determinar si la familia es la principal influencia en la
cultura del adolescente, así como también las ideas irracionales inculcadas por la
familia en el ambiente cultural. La muestra se conformó de doscientos adolescentes
hombres y mujeres, entre las edades de 14 a 16 años de edad, que cursan tercero
básico en la jornada vespertina de colegios privados de Quetzaltenango, Guatemala. La
conclusión fue que los padres son influyentes en la cultura de los adolescentes, ya que
ellos son los responsables directos de la enseñanza de valores morales que al final
determinan la conducta de los individuos.
También Chinol (2010), destaca la participación de la cultura indígena a través de la
investigación titulada “Nivel de autoestima del estudiante indígena que crece sin la
figura paterna” cuyo objetivo fue medir el nivel de autoestima del estudiante indígena
que crece sin la figura paterna. La muestra estuvo formada por estudiantes de primero,
5
segundo y tercero básico de tres establecimientos educativos entre las edades
comprendidas entre los catorce y diecinueve años. Las conclusiones muestran que el
estudiante indígena presenta un nivel alto de autoestima, sin embargo se recomienda
trabajar con técnicas que puedan contribuir al mejoramiento de los mismos, y así
obtener un fortalecimiento en la autoestima de los jóvenes.
Continuando con otro estudio realizado por García y Cifuentes (2010), sobre la
“Ausencia de la figura paterna en la adolescencia”, el cual se llevó a cabo en la capital
de Guatemala en la una escuela de la zona once. La muestra se conformó de 10
alumnos entre las edades de 11 a 16 años de edad teniendo como característica
principal la ausencia de la figura paterna. Utilizando el Cuestionario de personalidad
para niños Eysenck Personality Quetionnarie Junior (EPQ-J). El objetivo fue determinar
si la ausencia de la figura del padre tiene un efecto significativo e imperante en la
formación integral del individuo en la adolescencia, y los resultados manifiestan que la
ausencia de la figura paterna causa inestabilidad emocional y desestabilización del yo
en el niño y en el adolescente, además de problemáticas que se generan en torno a la
identificación en la infancia y la identidad durante la adolescencia. Se llegó a la
conclusión que el adolescente que crece con la ausencia de la figura paterna creará un
concepto adecuado de su contexto y de sí mismo y se sentirá satisfecho con su sentir
pensar y actuar cuando sean satisfechas adecuadamente sus necesidades en todas las
áreas de desarrollo por una madre emocionalmente estable y responsable que no
arrastre negativamente la imagen del padre y no proyecte en el hijo sus sufrimientos,
sentimientos y culpas. Los autores recomiendan brindarles atención psicológica a las
madres solteras posteriormente a la gestación para eliminar la imagen negativa que
tiene la mujer hacia el padre de su hijo.
En la investigación realizada por Ceballos (2009), en adolescentes que presentan
tendencias a los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), refiere, que los TCA han
cobrado relevancia en los últimos años, afectando el área física, intelectual y
emocional, de las personas de todos los niveles socioeconómicos. Y este estudio fue
realizado con estudiantes de sexo femenino de 13 a 18 años de edad, de un instituto
6
privado ubicado en la Ciudad de Guatemala, en el cual se encontró resultados distintos
en las tres áreas que investigó. En las adolescentes identificó que en el autoconcepto
social, presentan buenas relaciones sociales; en el área académica resaltan los
sentimientos de frustración e insatisfacción con las tareas escolares. En cuanto al
autoconcepto familiar, destacan las malas relaciones con la familia nuclear en algunos
de los casos y en cuanto al autoconcepto físico indica que éste suele estar influido por
el desagrado de su cuerpo. Con estos resultados concluyó que las adolescentes están
conscientes de sus habilidades y al mismo tiempo que se exigen cierto grado de
perfección en el área académica, social, familiar y física. Recomienda la necesidad de
abrir un departamento de orientación para poder ayudar a las adolescentes a mejorar
sus relaciones sociales, a tolerar la frustración y manejar su enojo; para ello propone un
manual preventivo planteado por la autora y finaliza sugiriendo que las adolescentes
estudiadas lleven un proceso terapéutico emocional.
Para seguir contribuyendo al estudio del autoconcepto en el adolescente y la familia se
citan investigaciones internacionales, entre las cuales se dan a conocer las siguientes.
Estévez, Musitu, Murgui y Moreno (2008), analizaron la relación existente entre el clima
familiar, el clima escolar, y determinados factores de ajuste personal como la
autoestima, la sintomatología depresiva y la satisfacción con la vida en la adolescencia.
La muestra del estudio se integró por 1319 adolescentes de ambos sexos, con edades
comprendidas entre los 11 y 16 años y escolarizados en siete Centros de enseñanza de
la Comunidad Valenciana de España. Para analizar los datos se calculó un modelo de
ecuaciones estructurales. Los resultados obtenidos concluyeron e indicaron que el
clima familiar positivo se relacionó tanto directa como indirectamente con la satisfacción
vital del hijo adolescente, a través de su influencia en el grado de autoestima y
sintomatología depresiva que éste experimenta. Y como recomendación a sus
resultados señalan la importancia de considerar la percepción del adolescente en sus
contextos de relación más cercanos, como la familia y la escuela, para lograr un mejor
entendimiento acerca de su bienestar general y su satisfacción con la vida en el
presente.
7
Según Sánchez, Jiménez y Merino (1997), en su investigación “Autoestima y del
Autoconcepto en adolescentes: una reflexión para la orientación Educativa”. Cuyo
objetivo fue el análisis de la autoestima y el autoconcepto percibido por los
adolescentes en una muestra obtenida de la población española, contando con 342
adolescentes entre 13 a 18 años. Los resultados denotan que estos adolescentes
perciben su autoestima o autoconcepto poco gratificante para su desarrollo y se
muestran de forma significativamente incómodos socialmente, molestos con sus
obligaciones escolares, inseguros con su imagen corporal, emocionalmente lábiles y
con un inadecuado rendimiento escolar.
Tomando en cuenta que es en esta etapa donde se busca la identidad, y se va
adquiriendo de diversos modelos que la sociedad presenta, el joven busca satisfacer
sus propias necesidades, sin importar la orientación de los adultos, en su mayoría
profesores, evitando de esta forma su responsabilidad como estudiante, como hijo y
como parte de la sociedad.
Por su parte, Pons y Pinazo (2000), en la investigación titulada Autoconcepto y niveles
de comunicación familiar en adolescentes, demuestran la importancia de la familia en el
autoconcepto de los hijos. El objetivo de esta investigación fue analizar los efectos
moduladores de la comunicación familiar en el autoconcepto de los adolescentes. La
cual estuvo conformada por 564 sujetos de ambos sexos, entre las edades
comprendidas de 11 a 16 años de edad y residentes de la comunidad valenciana. Se
llegó a la conclusión que los adolescentes que manifiestan bajos niveles de
comunicación familiar presentan un autoconcepto significativamente más negativo, esto
porque se encuentran asociadas al mantenimiento de niveles bajos de comunicación
con sus padres. Debido al valor de la imagen física en esta etapa de vida, los
resultados sugieren la decisiva importancia de la familia en la explicación de la
satisfacción consigo mismo del adolescente. El estudio concluye que el adolescente
que dispone a compartir espacios abiertos a la comunicación con ambos padres,
percibirá la atención de ellos, se sentirá importante, valorado y desarrollará una
adecuada autoestima. Esto revela la importancia del diálogo de padres e hijos, para que
el adolescente sea mejor orientado y encuentre respuestas confiables a sus preguntas.
8
Es importante que sean los padres, los primeros en influir positivamente en el joven, en
donde se pueda establecer confianza mutua, lo cual permitirá un adecuado desarrollo
de su autoconcepto.
La mayoría de los jóvenes no atendidos adecuadamente por sus padres, buscan
reemplazar esa comunicación con amigos, grupos de pares donde se sientan
importantes, tomados en cuenta y encontrar el sentido de pertenencia a determinado
grupo social, donde puedan sentirse confiados y libres para expresarse, sin embargo en
la mayoría de los casos no resulta de ello un buen desenvolvimiento integral del
individuo.
En otra investigación, Salum, Aguilar y Reyes (2011), realizaron un estudio llamado
“Relevancia de las dimensiones del autoconcepto en estudiantes de escuelas
secundarias de ciudad Victoria, México”, el objetivo fue identificar la dimensión de
mayor relevancia del modelo teórico de cinco dimensiones: académica, social,
emocional, familiar y física, que conforman al autoconcepto general de los alumnos. El
estudio fue realizado con 140 alumnos cursantes del tercer grado, ubicados en
veintidós escuelas secundarias, de Ciudad Victoria, Tamaulipas, México. Los alumnos
fueron evaluados con el Cuestionario AF5, en donde los resultados obtenidos
permitieron sustentar que la dimensión familiar fue la que mejor explicó al autoconcepto
general de los estudiantes con una varianza de 39.83%, el autoconcepto social con un
19.77%, el autoconcepto físico un 15.09%, el autoconcepto emocional un 13.67%,
mientras que el autoconcepto académico representó un 11.62%.El estudio señala la
importancia del ejercicio físico, tanto para un buen desarrollo físico como psicológico y
emocional.
Así mismo, Amezcua y Pichardo (2000) en su estudio “Diferencias de género en
autoconcepto en sujetos adolescentes” cuyo propósito fue profundizar en el análisis de
las diferencias de género existentes entre adolescentes respecto de sus niveles de
autoconcepto, adoptando un modelo multidimensional sobre este constructo. Para ello
se utilizó una muestra de 1235 sujetos 684 hombres y 551 mujeres, cuyas edades
9
oscilaban entre los once y catorce años, estudiantes de sexto de Primaria y Primer
Ciclo de E.S.O. en siete Centros de Granada tres urbanos y cuatro rurales. Los
resultados obtenidos mostraron diferencias significativas entre sexos en tres
dimensiones de las nueve evaluadas, lo que demuestra que en las relaciones de
comunicación familiar y autoconcepto ocurre principalmente: en los adolescentes que
tienen bajo nivel de comunicación familiar presentan un autoconcepto significativamente
más negativo. Dicha investigación menciona que tanto los aspectos emocionales y
familiares, merecen ser considerados en futuras investigaciones con la finalidad de
profundizar en las causas de esas diferencias detectadas entre niños, niñas y
adolescentes.
De igual forma en otro estudio realizado por Fábrega (2010), denominado
“Autoconcepto en preadolescentes”, cuyo objetivo fue determinar el status sociométrico
que ocupan alumnos de séptimo grado en una escuela de educación primaria pública,
de Argentina a través del test Sociométrico de J. L. Moreno y la Escala de
Autoconcepto Infanto-Juvenil de Piers-Harris. La muestra utilizada fue conformada por
dieciocho preadolescentes 11 varones y 7 mujeres de 11 y 12 años que cursaban el
séptimo grado de primaria. Los resultados obtenidos indican que los preadolescentes
rechazados e ignorados por sus compañeros manifiestan un autoconcepto bajo en
comparación a sus compañeros populares, quienes presentan niveles altos en el
autoconcepto.
Esta investigación y sus resultados confirman una vez más la importancia de los
pensamientos y sentimientos que cada adolescente manifiesta en esta etapa hacia sí
mismo y la crítica hacia los demás, la cual cobra gran relevancia para su
desenvolvimiento social y académico.
Los estudios revisados anteriormente evidencian que los jóvenes con menos
comunicación familiar; en donde necesitan ser escuchados en la mayoría de los casos
no se les proporcionan la importancia necesaria, va causando en su mayoría problemas
emocionales y conductuales, porque empiezan a sentirse ignorados y rechazados por
10
sus propios progenitores, siendo la familia el principal apoyo para el adolescente en
donde no encuentra armonía y estructura familiar adecuada, provocando bajo nivel de
autoconcepto.
A continuación se presenta información teórica como fundamento del presente estudio.
1.1 Autoconcepto
A lo largo de la evolución de la psicología, al término autoconcepto se le ha dado
diversas interpretaciones, sin llegar a delimitar los distintos términos y ámbitos en que
se manejan, contribuyendo todos ellos a la investigación.
Retrocediendo al pasado, para ser más exactos al siglo XX, la discusión acerca del yo
(self) giraba en conceptos metafísicos como alma, espíritu, voluntad, entre otros; en los
ámbitos religioso y filosófico, citando a Platón y Aristóteles para encontrar alguna
referencia entre su dualidad cuerpo y alma. Los estudios sobre el surgimiento de este
término han sido modificados a partir de diversas investigaciones y estudios más
recientes.
En el siglo XIX, se manifiesta una forma más convincente de distinguir entre sujeto-
objeto y se le dio al autoconcepto un tratamiento más profundo que cualquiera de sus
predecesores. La idea clave fue la categorización del yo global en dos aspectos: El
"mí", para la persona empírica, y el "yo", para el pensamiento evaluativo, considerando
el yo global como la simultaneidad de ambos (Herrero y Salguero, 1997).
Herrero y Salguero (1997), citan a Watson, Thorndike, Hull y Skinner, enfatizando en
el método científico a través de la corriente del conductismo, el cual fue trasladado a la
psicología como estudio minucioso de los aspectos observables y medibles de la
conducta, mismo que colocó el estudio del autoconcepto bajo una considerable
opresión debido a la implicación subjetiva y la experiencia interna que este concepto
contiene, lo cual supuso un abandono momentáneo sobre esta temática y es a partir de
aquí en donde aparecen nuevas aportaciones para el autoconcepto, tomándolo como
conjunto de actitudes del yo hacia sí mismo.
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La teorización y los estudios básicos sobre el autoconcepto han tenido lugar en el
ámbito de la fenomenología; Herrero y Salguero (1997), citan a Wylie, quien definió al
autoconcepto como el estudio de la conciencia directa. Una de las tesis fundamentales
de esta teoría es que la conducta se ve influenciada no solo por el pasado y por las
experiencias presentes, sino además por los significados personales que cada individuo
atribuye a su percepción de esas experiencias. Ese mundo personal privado del
individuo es el que más influye sobre su conducta.
De este modo, el comportamiento es más que una mera función de lo que sucede
desde el exterior y es también una consecuencia de cómo se cree que se es, (Lewin,
citado por Herrero y Salguero, 1997). Indudablemente el exterior y el ambiente en el
cual se interactúa influyen en la percepción de sí mismo, junto a esos conceptos de los
cuales se apropia el ser humano de los individuos que son importantes para él.
Woolfolk (2006) cita a Harter quien expresa que el autoconcepto ha sido un tema de
interés para los estudiosos, pero es en la década de los ochenta que aparece como un
legítimo constructo teórico para la Psicología Clínica, y de la Psicología educacional. Se
considera que Cooley, Mead, y James según el autor ya mencionado son los teóricos
más importantes del autoconcepto, y es en base a sus afirmaciones que se desarrollan
las tesis contemporáneas del mismo.
García y Musitu (2009), citando a Rosenberg, mencionan la totalidad de los
pensamientos y sentimientos que hacen referencia a sí mismo como objeto.
Varios autores hacen referencia al autoconcepto desde diferentes perspectivas, sin
embargo llegan a la conclusión del ser humano como una totalidad de pensamientos y
sentimientos que son manifestados a través de sus experiencias, tanto positivas como
negativas; los sentimientos que se tienen a sí mismo son el reflejo de sus conductas
manifestadas en el ambiente donde se desenvuelve y expresados a través de sus
pensamientos. Eso hace que el individuo tenga su propia creencia sobre su entorno
inmediato, su valor como persona y el grado de aceptación para los que con él
conviven.
12
Por aparte, Amezcua y Pichardo (2000), citan a Burns el cual interpreta el autoconcepto
como la conceptualización de la propia persona hecha por el mismo individuo, siendo
así considerado un adornado de connotaciones emocionales y evaluativas poderosas,
puesto que las creencias subjetivas y el conocimiento real que el individuo se atribuye
son enormemente personales, intensos y centrales, de su identidad única. Se considera
que al referirse a la autoevaluación se indica el proceso por el cual el individuo examina
sus actos, capacidades y atributos que se ha interiorizado a partir de la familia, y la
sociedad que influye significativamente en los sentimientos y pensamientos de la
persona, y por ende intervienen en su desenvolvimiento diario.
Así mismo Woolfolk (2006) cita a Harter, quien señala que los niños y los adolescentes
que continuamente se preguntan ¿Qué tan bien lo estoy haciendo? y evalúan las
reacciones tanto verbales como no verbales de los individuos significativos para ellos,
que generalmente son: la familia, los padres, la sociedad, los amigos y los profesores
que manifiestan diferentes críticas. Sin embargo, si el individuo se ha desarrollado en
un ambiente seguro, afrontará las diferentes críticas y juicios que se le presenten con
seguridad en sí mismo.
Algunas escuelas psicológicas que han aportado al estudio del autoconcepto, según
Goñi y Fernández (2008), son:
a. El conductismo: toma básicamente los parámetros observables y medibles,
centrándose en el ambiente.
b. El Interaccionismo simbólico: su prioridad es la dimensión social del
autoconcepto, la imagen que tiene cada persona sobre sus relaciones e
interacciones con los demás.
c. El aprendizaje social: se centra en la conducta observable, y asumiendo ciertos
procesos internos como el autorrefuerzo.
d. Psicoanálisis: lo interpreta en relación a los tres ámbitos el Ego, el Yo y el Súper
yo.
e. La fenomenología: se interesa por los procesos de percepción subjetiva
interiorizadas en cada individuo.
13
f. La corriente humanista: se centra en la orientación psicológica para la mejora de
sí mismo.
g. La psicología Social: reside en la importancia de determinadas condiciones y
experiencias del ambiente en que se forma y desenvuelve.
h. El Cognitivismo: se enfoca como una estructura jerárquica de valores que hacen
tener una visión del mundo particular, el cual impulsa al individuo a alcanzar una
serie de objetivos y metas.
Es importante resaltar los diferentes enfoques que las diversas escuelas psicológicas
han aportado, para lograr ampliar la dimensión de tan importante constructo en la
explicación del comportamiento del ser humano.
Por su parte García y Musitu (2009), citan a Shavelson, Cols y Marsh, quienes se
enfocan en una visión jerárquica del autoconcepto en la adolescencia como un modelo
más complejo. Creen que en la parte superior del modelo hay un autoconcepto general
bastante estable que se basa principalmente en dos dimensiones: el autoconcepto
académico y el no académico. Estableciendo que, dentro del autoconcepto no
académico, existe una distinción entre autoconcepto social, emocional y físico,
basándose cada una en facetas más detalladas del “Yo”. Estas se catalogan debajo de
la jerarquía ya que se cree que son de naturaleza menos estable y específicas a la
situación.
El egocentrismo y la introspección, están relacionados estrechamente pues cuando el
adolescente comienza una nueva fase de tentativas para comprender el “yo”
emergente, entonces este aspecto de su mundo interno se convierte durante un tiempo
de preocupación importante en esta etapa.
Se menciona la estabilidad del autoconcepto en la adolescencia de la cual se han
realizado investigaciones empíricas al respecto y se cree que algunos aspectos del yo
cambiarán más que otros. En efecto el modelo de Shavelson ya mencionado
anteriormente refiere que cuanto más alto esté el elemento del “yo” en la jerarquía, más
estabilidad habrá. Considerando que el adolescente será consciente de que algunos
aspectos del “yo” estarán sometidos a fluctuaciones o cambios diarios.
14
Como señala Harter, citado por Woolfolk (2006), quien expresa que los jóvenes pueden
preguntarse “realmente no comprendo cómo puedo cambiar tan rápido”. Es decir “como
puedo estar alegre un minuto, ansioso el siguiente y ponerme sarcástico luego” (p.
363).
El autoconcepto se puede concebir como estable en la medida en que las experiencias
obtenidas del ambiente son relativas e inalterables. Es importante mencionar que a
través del tiempo se van adoptando nuevas concepciones basadas en diferentes
experiencias.
1.1.2 Características básicas del Autoconcepto
Un modelo teórico y aceptado, es el modelo jerárquico y multifacético. García y Musitu
(2009), citando a Shavelson, Hubner y Staton, quienes plantean que el autoconcepto
del adolescente se divide en académico y no académico, conformándose el
autoconcepto no académico por componentes emocionales y por ende subjetivos, que
están relacionados con la conducta del individuo con su entorno y la forma de
desenvolverse en su medio, en los que inciden fundamentalmente en sus actitudes y su
apariencia general, tomando en cuenta que en la cima de esta jerarquía se encuentra el
concepto global.
García y Musitu (2009), citando a Shavelson mencionan siete características básicas,
las cuales son: organizado, multifacético, jerárquico, estable, experimental, evaluativo y
diferenciable.
Organizado
Esta característica se basa desde la concepción que el individuo adopte de sus propias
experiencias, las cuales son organizadas y sistematizadas donde el individuo le atribuye
un significado. Se puede agregar que los sistemas particulares de esta categorización
son un reflejo de su cultura particular y ésta es una característica del autoconcepto que
está estructurado.
15
Específicamente el ser humano va sistematizando la diversidad de experiencias vividas
dependiendo de qué tan significativo lo considere.
Multifacético
Es multifacético por la diversidad de áreas que incluye tales como la escuela, el grado
de aceptación social, su atractivo físico, reflejando el grado de aceptación que el
individuo ha compartido con grupos, tomando como base sus relaciones con su
contexto.
Jerárquico
Este rasgo se refiere a la estructura multifacética que conlleva un orden según el grado
de importancia que se le atribuye, enfocándolo desde sus propios valores y de la edad
de los sujetos, los cuales hacen que le asigne diferentes significados. Esto quiere decir
que las distintas fases del autoconcepto pueden formar una jerarquía desde las
experiencias individuales en situaciones particulares situadas estas en la base de la
jerarquía.
Estable
Esta característica del autoconcepto depende de su ubicación en la jerarquía, y donde
se ubique, así será la estabilidad; mientras éstas sean inferiores serán más variables.
Además los niveles más bajos de la jerarquía están probablemente atenuados por los
niveles más altos, haciendo al autoconcepto más resistente al cambio. Para modificar el
autoconcepto general se necesita de cambios o modificaciones de diferentes
situaciones específicas, en ocasiones con pocos nexos al autoconcepto general.
Experimental
Ésta se va construyendo a lo largo de la vida del ser humano ya que al aumentar la
edad y las experiencias que vaya adquiriendo, especialmente al adquirir niveles
verbales, el autoconcepto llega a diferenciarse cada vez más.
16
Evaluativo
Esta sexta característica varía según el grado de significado, dependiendo de la
valoración que se le atribuya a cada situación que experimente el individuo, puesto que
también hace valoraciones de sí mismo. Pueden realizarse comparando patrones
relativos tales como observaciones o apreciaciones de otros que sean significativos
para él, tales como el ideal que le gustaría ser comparándolas en diferentes escenarios.
Estas valoraciones probablemente las construya desde sus experiencias pasadas.
Diferenciable
Una séptima característica del autoconcepto es que es diferenciable de otros
constructos, con los cuales está teóricamente relacionado. Por lo tanto cuanto más
íntimamente relacionado esté el autoconcepto con diversas situaciones, mayor será la
reciprocidad. (Musitu, García y Gutiérrez, 1996, pp. 2-5).
Otra característica que asombra y que en algunas veces es controvertido es la
multidimensionalidad del autoconcepto que se refiere al estado estable o cambiante del
individuo y al mismo tiempo, algunos determinan que dependiendo de la situación a la
experiencia vivida por el ser humano se manifiesta un cambio en sus pensamientos con
relación a sí mismo y por otro lado si es permanente a pesar de las distintas
situaciones, puede ser estable en sus aspectos más profundos, y a la vez variable en
sus aspectos más dependientes del contexto. García y Musitu (2009), citan a
Schawalbe quien refiere que el individuo busca constantemente sus propias creencias
acerca de sí mismo y es fácil para él inferir en un porcentaje alto y deseable lo cual le
brindará la estabilidad de su propio autoconcepto.
1.1.3 Dimensiones del autoconcepto
García y Musitu (2009) abarcan cinco dimensiones del autoconcepto.
17
Autoconcepto académico/laboral
Esta dimensión se refiere a la percepción que adopta el individuo de la calidad y el
desempeño de su rol, como estudiante y como trabajador. Hace esta referencia de
académico y laboral, porque ambos contextos son de trabajo. La dimensión gira en
relación a dos ejes importantes: el primero se refiere a la parte de sentimientos que el
estudiante o trabajador tiene a través de sus docentes, o superiores. El segundo se
refiere a la percepción que se tiene del ambiente, que pueden ser cualidades
específicas o valoradas que provienen del exterior.
En el adolescente, el autoconcepto académico depende de una relación positiva que se
dé entre padres e hijos, como el apoyo, el afecto y la importancia que estos aporten al
individuo. Si fuere una relación negativa de los padres hacia el hijo se manifestaría en
este como conductas de coerción, negligencia e indiferencia.
Autoconcepto Social
Este eje hace referencia al desempeño que el individuo tiene en sus relaciones
sociales. Y esta dimensión es guiada por dos ejes importantes, los cuales son: el
primero que se refiere a la red social del sujeto y la facilidad o la dificultad para
mantenerla y ampliarla, y el segundo se refiere específicamente a las cualidades del
individuo para poder adoptar sus relaciones positivamente.
Autoconcepto emocional
Hace referencia al estado emocional del individuo, con respecto a diversas situaciones
específicas, y de las respuestas que manifiesta con cierto grado de compromiso e
implicación en su vida cotidiana.
El autoconcepto emocional correlaciona positivamente con las habilidades sociales, el
autocontrol, el sentimiento de estabilidad y aceptación de otros adolescentes, y
negativamente con la sintomatología depresiva, la ansiedad y la pobre integración
social.
18
Autoconcepto familiar
Esta dimensión se refiere a la percepción que el sujeto tiene de su familia, en cuanto a
la participación, implicación e integración en su medio familiar. En el individuo influye
positivamente con el rendimiento escolar y laboral, con la conducta prosocial, con los
valores aprendidos desde el seno familiar, y la concepción de salud, físico y mental.
También correlaciona negativamente con la sintomatología depresiva, ansiedad y el
consumo de drogas, entre otros.
El adolescente se desenvolverá de forma positiva a través de la influencia que los
padres le trasmitieron, siendo estos; el afecto, la comprensión y el apoyo y
negativamente con la coerción, violencia, indiferencia y negligencia.
Autoconcepto físico
Este factor se refiere a la percepción que el sujeto tiene acerca de su aspecto físico y
de su condición corporal. Esta dimensión correlaciona positivamente con “la percepción
de la salud, el autocontrol y con la percepción de bienestar con el rendimiento
deportivo, con la motivación de logro y la integración, tanto social y escolar”. Y se
relaciona negativamente con el desajuste escolar, la ansiedad y en menor grado la
presencia de problemas con iguales.
1.1.4 Factores que determinan el autoconcepto
Mingote y Requena (2008), citan cuatro factores que determinan el autoconcepto del
individuo desde su propia percepción.
La actitud o motivación
Este factor se refiere a la reacción que se manifieste al enfrentar determinada situación,
sea positiva o negativa, se puede mencionar que es la fuerza que impulsa a reaccionar
a la situación tras ser evaluada.
19
El esquema corporal
Es la percepción que se tiene del cuerpo, a través de los estímulos y sensaciones. Esto
está estrechamente relacionado con la influencia de los grupos sociales, los medios de
comunicación y la moda, que hacen manifestar los sentimientos que se mantienen a sí
mismo.
Las aptitudes
Capacidades que posee el ser humano para realizar las cosas de manera positiva; son
las competencias que se van desarrollando en diferentes etapas de la vida, y que
caracterizan a las personas en su saber y hacer.
Valoración externa
Es la manifestación de consideración o apreciación que hacen las personas en el
individuo. Son los halagos, el contacto físico, los refuerzos sociales, expresiones
faciales y reconocimientos, entre otros, que provienen del exterior, y hacen sentir
valorado al sujeto.
1.1.5 Diferencias entre Autoconcepto y Autoestima
García y Musitu (2009), refieren que la delimitación conceptual de autoconcepto y
autoestima no es clara, ya que actualmente se utilizan ambas sin distinguir
precisamente una de la otra, para describir al ser humano entre sus pensamientos y
sentimientos que se tiene a sí mismo. Señalando la postura de la “no diferenciación”
Estos autores citan a Shavelson, Hubner y Stanton, los cuales indican que las
afirmaciones que describen y evalúan al individuo, no son lo mismo, sin embargo se
relacionan empíricamente. Citan también a Watkins y Dhawan, quienes señalan que el
autoconcepto y la autoestima sí se pueden diferenciar indudablemente.
La falta de claridad en la delimitación puede atribuirse en gran porcentaje a la
investigación enfocada al autoconcepto que se ha refugiado en los aspectos
evaluativos. Todos coinciden en que el término autoconcepto adopta autodescripciones
20
abstractas que se pueden diferenciar teóricamente, de las concepciones de autoestima,
ya que no implican necesariamente juicios de valor.
García y Musitu (2009), citan a Román y García quienes expresan que el término de
autoestima se refiere al concepto que se tiene de sí mismo, según las cualidades que
son susceptibles de valoración y subjetividad. Es decir que el sujeto se autovalora a
través de sus propias cualidades que provienen de su experiencia y que son
consideradas como positivas y negativas.
Como una conclusión final, la autoestima es el grado de satisfacción personal que el
sujeto tiene consigo mismo, la eficacia que manifieste desde su propio funcionamiento y
la actitud evaluativa constante de la aprobación hacia sí mismo. Por otra parte se
menciona que el autoconcepto es el producto de la actividad reflexiva. Es el concepto
que el individuo tiene de sí mismo como ser físico, social y espiritual.
Para concluir es fundamental mencionar la relación entre los términos autoconcepto y
autoestima; hasta se podría hablar de dos dimensiones, la cognitiva y la afectiva de una
misma realidad.
1.1 Familia
La familia es un sistema relacional que conecta al individuo con un grupo extenso
llamado sociedad. Eguiluz (2003), cita a Andolfi quien describe a la familia como un
sistema relacional, lo que implica verla como un todo orgánico “que supera y articula
entre sí los diversos componentes individuales” (p. 2). El mismo autor refiere que la
familia es la unidad básica y fundamental de la sociedad, es el conjunto social que
conserva relaciones de parentesco entre cada uno de sus miembros que lo conforman y
sus nexos entre cada uno de ellos, tanto en su relación legal como consanguíneo, y se
conforma por sujetos de diferentes edades, y distintas generaciones.
La familia, como organización primaria, debe garantizar protección, seguridad,
comunicación y estabilidad emocional, en donde se incluyen factores de bienestar
emocional, como la satisfacción con la vida y la autoestima.
21
Cuervo (2007), citando a Engels señala que la familia es un elemento que durante el
tiempo de vida, se mantendrá activo, ya que nunca permanece estacionado, porque se
va transformando a medida en que la sociedad evoluciona de una forma de
organización a otra.
Cuervo (2007), citando a Minuchin, el fundador de la teoría estructural sistémica, señala
que la familia puede indicarse como un sistema que maneja dentro de otros grupos o
sistemas más amplios y tiene tres características:
1) Su estructura que forma un sistema sociocultural amplio y abierto, en constante
trasformación, esto quiere decir, un sistema flexible.
2) Se refiere al desarrollo de la familia, que es marcada en una serie de procesos
enfrentando crisis que la obligan a modificar su estructura, siempre y cuando
conserve su identidad como familia.
3) Se menciona el ciclo vital, que es capaz de adaptarse a los diferentes cambios
que le ofrece su contexto, modificando de esta manera sus reglas y
comportamientos para poder adaptarse a las demandas que le ofrece su
ambiente.
La familia que se empieza a construir requiere de varios factores para que se mantenga
unida y así continuar su crecimiento, tanto en números de individuos como en las
experiencias que se enfrenta constantemente, es un esfuerzo que se tiene que hacer a
diario. Se puede mencionar la capacidad de transformarse, para llevar a la familia al
cambio, y se puede mencionar también la homeostasis que se entiende como el
equilibrio que debe permanecer constante para mantener a la familia en óptimas
condiciones de vida.
Por su parte contribuye a este concepto, Eguiluz (2003), citando a De Alda quien indica
que el sistema familiar se integra “de un conjunto de personas, relacionadas entre sí,
que forman una unidad frente al medio externo” (p. 5).
La familia como núcleo de la sociedad, como conjunto de individuos con diferentes
roles, jerarquías y generaciones juega un papel primordial. Sus bases fundamentales
22
están a cargo de los dos progenitores como pilares importantes del desarrollo integral y
sistemático de sus generaciones posteriores. El núcleo familiar va pasando por diversos
cambios que su ambiente y contexto le ofrece, desde sus diversas estructuras;
adoptando nuevos estilos de vida, dependiendo de la época y la evolución de la
sociedad. Por tal razón existe hoy en día diversidad de familias con diferentes
características y tipologías, en cuanto a su organización y funcionamiento.
Se menciona los diversos ciclos que la familia enfrenta a los que se tiene que ajustar.
Acontecimientos como la interrupción de la relación conyugal sea por: divorcio, muerte
o separación; a este tipo de familia que en la actualidad, se le conoce como familia
monoparental, desde diferentes concepciones sea padre e hijo o hija (s) o madre e hijo
o hija (s).
En esta investigación se abordará desde un punto de vista de la familia monoparental a
cargo de la mujer, sin embargo es conveniente conceptualizar la monoparentalidad
como tal.
1.2.1 Familia monoparental
Jiménez (2005), cita a Flaquer quien expone que la familia monoparental se entiende
por aquellos hogares formados por un padre o una madre solos que habitan con sus
hijos que aún no son independientes de sus padres y aún no han alcanzado la mayoría
de edad.
Barron (1988), citando a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), indica que la
familia monoparental se define por la variación de la familia nuclear de un solo adulto,
compuesta por una madre o un padre y uno o varios hijos.
En otro aporte, Jiménez (2005), citando a González, hace referencia a este tipo de
familias, son aquellas en las que solo hay un progenitor que habita con los hijos sin la
presencia permanente de la pareja y en presencia de al menos un hijo que no supere
los dieciocho años de edad. En muchos de los casos, los factores socioeconómicos,
sentimentales, culturales y otras influencias sociales de parte de uno de los dos
23
cónyuges influyen en su desarrollo materno o paterno en la dinámica familiar. Estas son
algunas de las razones que intervienen en la separación del vínculo conyugal.
Dando origen al tipo de familias que se caracterizan por estar incompletas a la falta de
una de las figuras parentales, de forma permanente o parcial, el motivo determina las
circunstancias que no le permite tener un contacto y relación directa o constante con el
resto de la familia nuclear.
En este tipo de familia donde la encargada es la madre, existe el riesgo de proyectar
mensajes negativos sobre el adulto que abandonó al grupo familiar, en especial si la
relación no acabó en convenios pasivos para el progenitor, y los hijos permanecerán sin
la figura paterna, o bien por un abandono que ocasiona malestar emocional intenso.
Como anteriormente se cita, se enfocará al estudio de las familias monoparentales
como se le designa al tipo de familia en donde la madre es el único progenitor que
convive directamente con los hijos de una relación pasada, centrándose desde
diferentes causas, sea por divorcio, separación o muerte de la figura paterna.
Así mismo Jiménez (2005) citando a Alberdi quien menciona que en diversos estudios
de género del ámbito de la sociología hacen hincapié a la característica que surge de
las familias maternales, y argumentan los estudiosos que lo controversial y novedoso
en la monoparentalidad femenina posmoderna es que resulta ser unidades familiares
viables, tanto a nivel económico como a nivel personal.
Este tipo de familia femenina representa una alternativa más para su introducción en
un contexto cultural y étnico como lo es Guatemala. El poder que se le ha delegado a la
mujer, independientemente de su consentimiento, es de resaltar, el cambio que, con el
transcurrir del tiempo se ha dado. Recordando la historia de la etapa patriarcal, el
dueño, señor absoluto, y la cabeza de la familia, era el padre, sin discusión alguna, y
este es el cambio radical que ocurre en la actualidad.
Este estudio está enfocado a la etnia kaqchikel que forma parte de la diversidad de
etnias y culturas de Guatemala, en donde las familias nucleares eran las familias
24
aceptadas comunalmente; sin embargo esto ha cambiado, pues la idea de que los
cónyuges deberían permanecer juntos hasta que la muerte los separe ha desaparecido,
se ha disuelto y esto debido a los diversos cambios que la sociedad ha tenido que
enfrentar, siendo claros los factores externos que han sido fundamentales en las
familias, como la tecnología, la moda y las conductas manifestadas por imitación.
La monoparentalidad es considerada hoy en día como algo nuevo y relevante para los
estudiosos. Cuervo (2007), citando a Rodríguez y Luengo refieren que las distintas
definiciones de familia monoparental tienen en común cuatro características que cabe
resaltar, primero que en este tipo de familia se encuentra la presencia de un solo
progenitor en el hogar, segundo: la presencia de uno o varios hijos en el hogar; tercero
la dependencia económica de los hijos, cuarto el considerar que los fenómenos
anteriores se originan por diferentes causas. Indican también que no todas las familias
monoparentales posean similares características. En la actualidad se encuentra la
existencia de diferentes tipos de familias monoparentales como consecuencias de las
diferentes formas que las personas acceden a la monoparentalidad.
Cuervo (2007), cita a Rodríguez y Luengo que establecen una tipología de familias
monoparentales de acuerdo a las causas que dan origen a este tipo de familia.
a) Monoparentalidad vinculada a la natalidad, en los que se encuentran los núcleos
monoparentales derivados de las madres solteras.
b) Monoparentalidad vinculada a la relación matrimonial, la cual abarca las
rupturas ya sea voluntaria o involuntariamente de la relación matrimonial.
c) Monoparentalidad vinculada al ordenamiento jurídico, aquí se incluyen la
maternidad y paternidad que se da como resultado de los procesos de adopción.
d) Monoparentalidad vinculada a situaciones sociales, en donde existe la ausencia
de uno de los conyugues por motivos de trabajo, privación de libertad y
emigración.
25
1.2.4 Causas de la monoparentalidad
a) Divorcio
Hasta la mitad del siglo XX el divorcio era visto como una señal de inestabilidad de la
familia, por lo tanto no era aprobado por la sociedad, y era sancionado como una falta
contra el otro, la familia, los hijos y la sociedad misma. Sin embargo esta situación
actualmente ha cambiado, el aumento de la frecuencia con que se presenta, este
fenómeno ha perdido el sentido de sanción social, empezando a ser objeto de estudio
de varias disciplinas como la psicología, ciencias de la educación, antropología y
sociología entre otras.
Cuervo (2007),citando a Slaikeu, refiere que en la mayoría de las familias el divorcio
ocasiona una crisis, es decir un “estado temporal de trastorno y desorganización,
caracterizado principalmente por la incapacidad del individuo para abordar situaciones
particulares utilizando métodos acostumbrados para la solución de problemas, y por el
potencial para obtener un resultado radicalmente positivo o negativo”. (P. 64).
Consecuencia para los hijos
Cuervo (2007), cita a autores como Hetheringtony Stanley que sostienen que un hogar
después de haber vivido el acontecimiento de divorcio está asociado con una
probabilidad mayor de lo normal a que los hijos puedan adquirir una relación débil con
los padres, de sentirse solos e insatisfechos, y considerar que la vida está fuera de
control y de esta manera experimentar muchos problemas tanto de salud, físicos como
emocionales.
En la etapa de la adolescencia el individuo parece ser que dispone de capacidades
cognitivas que le permite comprender de mejor manera el divorcio y de mayores apoyos
afectivos fuera del hogar. Cuervo (2007), citando a Rice menciona que las reacciones
emocionales para los adolescentes en el caso de un divorcio de los padres, pueden ser
de sorpresa e incredulidad. Son comunes también los sentimientos de miedo, ansiedad
e inseguridad con respecto al futuro; se producirá la ira y la hostilidad, especialmente
hacia el padre que ellos consideran que tiene la culpa del divorcio
26
b) Muerte o separación del padre
Otros estudios realizados por Cuervo (2007), donde cita a Takeuchi, el cual refiere que
personas que han experimentado la muerte o separación de la figura paterna, y
principalmente si el hijo es del mismo sexo, reportan en su mayoría una mayor
frecuencia y severidad de cuadros depresivos de mayores magnitudes.
Los estudios revelan que cualquiera que sea la causa de la monoparentalidad, afecta
significativamente al cónyuge que se queda a cargo de su familia y especialmente a los
hijos, en las actitudes, conductas y estado emocional del presente y las secuelas que
en el futuro puedan desarrollar.
1.2.3 Factores en el contexto familiar
Cuervo, (2007), citando a Bosman y Hetherington, menciona que a pesar de la gran
diversidad de factores existentes en una familia monoparental existen algunos que
pueden ser más o menos observados en la mayoría de estas familias.
A menudo la familia monoparental se origina a causa de un acontecimiento dramático,
generalmente la pérdida del compañero por una separación. Esta pérdida puede ir
acompañada por emociones muy fuertes, como la tristeza, desesperación o culpa entre
otros, tomando en cuenta los conflictos intensos en caso de divorcio, lo cual puede
ejercer una fuerte presión sobre toda la familia y especialmente en los hijos. Todo
depende de cómo sea vivida la separación.
En cuanto al peso de la carga parental en este tipo de familia monoparental, la madre
se encuentra sola para cumplir con todas las tareas, que pueden ser compartidas en
familia y por los dos padres, entre los cuales se puede mencionar, garantizar un
ingreso, ocuparse del hogar, en la educación, entre otros.
En el caso de la mujer kaqchikel la madre no se incorpora al trabajo laboral fuera del
hogar, sus ingresos son dentro de su comunidad, generalmente a través de la
elaboración de artesanías, y enfrentará sola la responsabilidad de sostener a sus hijos;
no será una tarea fácil, ya que la mayor parte del tiempo lo ocupará en trabajar para
27
poder sostener su hogar; esto implica la ausencia transitoria de la atención de parte de
la madre a causa de su trabajo.
Situación económica
En América Latina se habla del fenómeno de la feminización de la pobreza, ya que a
raíz de la separación, las mujeres deben afrontar un gran descenso en la economía de
su hogar.
Ausencia de un modelo de identificación
Grinder (1978), cita a Biller y Borstelmann, que refieren la presencia de uno solo de los
progenitores, implica la ausencia de rol o de identificación del otro sexo, donde la
ausencia del padre sobre todo en niños y adolescentes hombres son puestos en
evidencia. “La falta de identificación con el progenitor ausente es causa en muchos de
los casos de problemas conductuales y emocionales”. (p. 378).
1.2.4 Problemas psicosociológicos que enfrenta la mujer como única encargada
de la familia.
Cuando la madre se coloca en el rol tanto de padre como de madre, para compensar la
distancia o abandono de parte de la figura paterna, generalmente tiene menos
contactos con otros adultos que no sean sus parejas o padres de sus hijos, ellas
desarrollan una sensación frecuente de sentirse encerradas en el mundo de sus hijos; y
crean en cierta forma frustración y problemas emocionales, especialmente enfrentando
una economía en la mayoría de los casos inestable.
Sin embargo, Jiménez (2005), cita a Beck quien analiza la precariedad laboral de las
madres en familias monoparentales que representa el costo de una sociedad que
prioriza el trabajo mal remunerado y la independencia de efectos y reciprocidades que
se les impone; la exclusión social y el estado, la necesidad de estabilizar las funciones
de mantenimiento económico del hogar y de cuidado de sus hijos disminuye su valor de
mercado, reduciendo sus oportunidades y posibilidades de inserción laboral. Y esto no
es nada nuevo y relevante, a través de la historia se puede confirmar la debilidad de la
28
mujer ante situaciones laborales y sociales, donde ella jugaba un papel de inferioridad
en relación al hombre. Sus obligaciones como mujer eran limitadas al hogar y a la
intimidad con su esposo, si bien la familia era considerada como patriarcal como
anteriormente se cita, y con el tiempo la situación no ha cambiado en un porcentaje
alto, donde se pueda describir igualdad en hombres y mujeres.
El fenómeno de la monoparentalidad ha sido asociado con problemas
psicosociológicos, los cuales residen en el hecho de que es un solo progenitor el que
debe realizar las funciones de socialización, en este caso la mujer. Pero la pregunta
plantea ¿Cómo puede la madre educar a su hijo adolescente a mantener un nivel de
socialización alto? Esto con respecto a sus pares, autoridades educativas y familiares, y
¿cómo sentirse capaz de describir sus propias emociones y sentimientos con relación a
los demás? si por el contrario no se le ha inculcado a través de la familia el
autoconcepto adecuado, cuando la mujer aun no es capaz de manifestarlo ella misma.
La mayoría de las investigaciones se basan en la salud mental de estas familias, es
decir, en la salud mental de las madres y sus hijos. Dentro de los problemas
psicosociológicos se suelen enfatizar la consecuencias negativas que para el desarrollo
cognitivo del niño y posteriormente adolescente puede tener el vivir en una familia
monoparental.
La inestabilidad económica y social tiene implicaciones directas en la salud mental de
las familias monoparentales, entre otros. La evidencia americana en la década de los
setenta sugería que la ansiedad y el estrés eran resultado del cambio en los roles
sociales. Torremocha (2006), cita a Garfinkel, McLanahan, Popay y Jones quienes
describen, lo que parece un hecho cierto, es que la situación de pobreza y no la
estructura familiar monoparental es lo que determina la salud mental de estas familias.
Torremocha (2006), refiere a Ford y Millar respecto a que otro problema relacionado
con la monoparentalidad ha sido que para algunos tipos de familias puede representar
una crisis de la familia nuclear tradicional. En sociedades como la americana la
preocupación por el incremento de este tipo de familias se ha basado en dos creencias:
la primera es considerar que las experiencias familiares desempeñan un papel
29
importante en el nivel de vida de los niños. En segundo lugar defender que grandes
cambios en la estructura de las familias tendrán una influencia negativa, tanto en el
carácter como en la conducta de las futuras generaciones.
1.2.5 La familia Kaqchikel
Nuñez (1998), indica que la familia kaqchikel, nombre con el cual se identifica el grupo
social, que se establece en 51 municipios de 7 departamentos de Guatemala,
confirmándolo como un país multicultural y multiétnico. Este grupo es distinguido por su
cosmovisión y su propia identidad como pueblo indígena, con elementos característicos
y expresiones culturales distintas entre las que se resaltan: el idioma materno es el
kaqchikel, las costumbres, tradiciones, creencias, el traje, su educación basada en el
respeto a los padres y los valores inculcados por ellos, disciplina, autoridad, y su
organización familiar, entre otras.
El enfoque de la presente investigación se canaliza a la cultura kaqchikel en familias
con hijos adolescentes, donde es necesario tomar en cuenta las costumbres y
tradiciones de esta cultura porque en ellas se originan las prácticas sociales, que nacen
en el seno de la comunidad y al practicarlas se van convirtiendo en patrones culturales,
heredándolas a las nuevas generaciones, dando origen a la tradición.
Algunas de las costumbres practicadas es la tradición oral, ya que forma parte
importante para la historia de la comunidad kaqchikel de la actualidad.
Comunidades Lingüísticas de Guatemala (2011), expresan el significado etimológico y
cosmogónico de la palabra kaqchikel, el cual significa color rojo, la pureza, la sangre y
la tierra colorada; Chi, autoridad, báculo, idioma, boca, palo y kel, grupo de personas
con identidad y autonomía. Citan también al Instituto Nacional de Estadística (INE) que
el número de hablantes de este idioma es de 832,968 personas en Guatemala.
Para la comunidad maya kaqchikel, cada elemento de la naturaleza se refleja en los
cultivos y la vida cotidiana. Le dan importancia a las diversas actividades diarias, como
la confección de finos tejidos elaborados a base de sedalina, una de las principales
expresiones y fuentes de ingresos económicos para la comunidad. Los hombres se
30
dedican principalmente a la agricultura, construcción de artesanías y al comercio. La
mayoría de mujeres se dedica al cuidado del hogar, así como en la participación,
producción y comercialización de cultivos. En su mayoría elaboran artesanías.
El municipio de San Antonio Aguas Calientes pertenece al departamento de
Sacatepéquez que posee una población de 93.82% indígena Kaqchikel y 6.18% ladina;
según el Instituto Nacional de Estadística INE, citado por Segeplan (2002). El cual
expresa que para el año 2008, la población del municipio, el 79.53 % era menor de
cuarenta años, lo cual indica que más de la tercera parte de su población es
relativamente joven y el 6.68 % de la población era mayor de sesenta años.
En este municipio se destacan las actividades de producción, vinculación con mercados
y la organización empresarial artesanal, los cuales son sus principales motores del
desarrollo económico. Según Segeplan el 99.62% de sus habitantes se desempeñan en
algún trabajo, mencionado anteriormente.
En cuanto a la organización familiar destaca la costumbre de que la familia se sienta
alrededor de la mesa a la hora de la comida, mientras la madre e hijos mayores sirven
los alimentos. Cuando se almuerza generalmente cuentan a los hijos sobre sus
experiencias de vida.
En la familia kaqchikel es fundamental la presencia de ambos padres, especialmente si
los hijos son de ambos sexos; en este tipo de grupo familiar, el adolescente busca
identificarse con la figura paterna. Como anteriormente se cita, hace varios años atrás
las familias estaban a cargo exclusivamente del padre, quien gobernaba a los miembros
de su familia. A través del tiempo, los tipos de familias monoparentales empezaron a
crecer y manifestarse. Indicando actualmente un porcentaje elevado de familias
monoparentales, por diversas causas, con hijos a cargo de la mujer kaqchikel.
Toda esa descripción que identifica a la familia kaqchikel se ha ido perdiendo, en una
sociedad que está marcada por adoptar patrones y modelos de conductas y actitudes
que no le pertenece; el adolescente, debido a nuevas oportunidades que le ofrece la
vida, no es un ente pasivo, se manifiesta activamente por un ambiente influyente, razón
por la cual las generaciones son distintas y lo seguirán siendo a través del tiempo.
31
En las teorías existentes de la identificación del hijo con el progenitor, resaltan la
importancia de la figura paterna en el aprendizaje, en un sexo y otro, según
corresponda el rol sexual. Le corresponde al padre animar a la hija a comportarse de
manera expresiva y es quien ha de proveer un modelo para su hijo. La ausencia del
padre en su familia por razones laborales o periodos prolongados de tiempo; porque así
se lo exige su rol de trabajador y padre, priva a sus hijos de un modelo de aprendizaje.
Pero si la causa de su ausencia se debe al abandono o muerte, los problemas se
complican, razón por la cual la madre tendrá que asumir todas las tareas del padre de
manera definitiva. Esto indica que la madre tendrá que trabajar, dependiendo de sus
habilidades y preparación académica; en la familia kaqchikel la mujer es dedicada al
hogar y su trabajo es en torno a él, desde las artesanías elaboradas por ella hasta la
salida de su hogar en un trabajo mal remunerado. Independientemente de su rol de
trabajadora, implicará menos tiempo al cuidado de sus hijos y ellos se verán en la
necesidad de retribuirse las distintas responsabilidades domésticas.
Grinder (1978), cita a Biller y Borstelmann, quienes mencionan que los efectos de la
ausencia del padre sobre la socialización se consideran mayores para los hijos que
para las hijas, la mayoría de los investigadores se han fijado en la relación padre-hijo.
En opiniones varias, la privación del padre puede conducir al joven a desarrollar fuerte
motivación negativa hacia la figura de su progenitor, que luego manifestará dificultades
en su identidad respecto al rol sexual. Estos autores han demostrado de manera
consistente que la presencia del padre como figura y modelo masculino en el hogar es
un factor importante en el desarrollo varonil en la edad preescolar y especialmente en la
etapa de la adolescencia, donde se pueden fijar en otros modelos.
1.2 La adolescencia
El término adolescencia se deriva del latín “adolescere” que significa “crecer”. Según la
Organización Mundial de la Salud, es una etapa que abarca toda la segunda década de
la vida, desde los diez a los diecinueve años. Se indica que esta definición es un tanto
convencional, ya que la cronología de la maduración varía de un individuo a otro.
32
En cuanto al término pubertad se hace referencia a la gama de cambios que convierten
al niño en un individuo sexualmente maduro, con la capacidad reproductora.
La etapa de la adolescencia se acompaña de diversos cambios a diferentes niveles,
entre los cuales se mencionan, el desarrollo corporal, en relación al crecimiento,
cambios hormonales, que se producen tanto en hombres como en mujeres, así como
un desarrollo psicológico. En la adolescencia se producen cambios en la manera de
pensar, de desarrollar el razonamiento lógico, y la visión del futuro, en donde el
adolescente va comprendiéndose mucho mejor a sí mismo.
Aguirre (1994), cita a Jones quien refiere “La adolescencia recapitula a la infancia y la
manera precisa en que una persona dada habrá de atravesar las necesarias fases del
desarrollo; la adolescencia está determinada, en gran medida por la forma de su
desarrollo infantil” (p. 12).
La adolescencia está marcada por el protagonismo de la sexualidad y Freud llegó a
definirla como una segunda etapa edípica. La adolescencia es “El logro de la primacía
genital y consumación del proceso de búsqueda no incestuosa del objeto”. (p. 12).
Aguirre (1994), cita a Rosenthal, Knobel, Bloss y Freud A. quienes indican que el
nuevo adolescente experimenta tres tipos de pérdidas que lo llevan a enfrentar tres
duelos:
a. La pérdida del cuerpo infantil, que produce un cierto tipo de despersonalización.
b. La identidad infantil
c. Padres de la infancia
Pons y Pinazo (2000), mencionan a Hortacsu y Pippet quienes han indicado, en otros
estudios, que las interacciones familiares no satisfactorias motivan al adolescente a la
búsqueda de nuevas relaciones, donde se sienta identificado, pasando a un segundo
plano el sistema familiar: los jóvenes que se desarrollan en un clima familiar negativo
tienden a buscar otro grupo de iguales que les produzca bienestar y seguridad que no
le son proporcionados en la familia, y buscan principalmente apoyo emocional, valores,
creencias, actitudes y referencias normativas. Los mismos autores citan a Moore, Noller
33
y Bagi, quienes señalan que en la adolescencia se incrementa la intensidad de las
relaciones con los amigos y la importancia que el adolescente otorga a estas.
Es en esta etapa que el adolescente se enfrentará a nuevas influencias y diferentes
formas de desenvolverse en la sociedad, donde su contexto manifestará actitudes
aprendidas y conductas diferentes, roles nuevos etc., y es ahí donde manifestará, las
bases del autoconcepto dependiendo de cómo la familia, siendo el núcleo primordial ha
influido en él.
1.3.1 Principales teorías de la adolescencia
a. El enfoque psicoanalítico
Teorías de la personalidad de Sigmund Freud
Freud construye su teoría Psicosexual del desarrollo, partiendo de los recuerdos de los
adultos. Principalmente se enfatizó a la forma de manejar los impulsos sexuales y
agresivos del niño en sus primeros años de vida, lo cual era fundamental y crucial para
el desarrollo de una personalidad sana.
Woolfolk (2006), indica que Sigmund Freud desarrolló las etapas que según él,
formaban la personalidad a través de etapas psicosexuales, donde creyó que a lo largo
del crecimiento del niño, los impulsos sexuales cambiaban de lugar con relación a las
regiones del cuerpo, a la oral, a la anal, y la genital. En cada una de las etapas los
padres recorren una línea muy fina entre permitir demasiadas gratificaciones de las
necesidades básicas del niño, o bien permitirles apenas, o deficientes a sus hijos.
Cualquiera de estos dos extremos podría provocarles que las energías psíquicas del
niño sean fijadas, o detenidas en cada una de las etapas determinadas. Al contrario si
los padres mantienen un equilibrio apropiado, entonces los niños crecen como adultos
bien ajustados con la capacidad para manifestar una conducta sexual madura, inversión
en la vida familiar y criar a la siguiente generación.
Freud, hace énfasis en la siguiente etapa que describe el desarrollo de la etapa del
adolescente.
34
La etapa genital (adolescencia): la etapa de la pubertad y es la causa de que los
impulsos sexuales de la etapa fálica reaparezcan nuevamente. Si el desarrollo
de esa etapa se ha llevado con éxito, en las etapas tempranas conducirá al joven
al matrimonio, relaciones maduras y la educación de sus hijos.
La teoría psicosexual de Freud, resaltó la importancia de los primeros años de vida en
los individuos y sus relaciones familiares. Fue la primera teoría que indicó la vital
importancia del desarrollo temprano en su desenvolvimiento posterior.
Por su parte Aguirre (1994), cita a Bloss quien distingue cinco estadios relativos a la
etapa de la adolescencia.
Pre-adolescencia: que está ligada al despertar puberal. Fase en la cual se
supone un aumento cuantitativo de la pulsión sexual, pero no cualitativo, ya que
no existe un nuevo “Objeto” afectivo. No obstante reafirma “La barrera contra el
incesto”, la cual ha sido ya constituida en el período de la latencia.
Primera adolescencia: esta etapa se concentra en la liberación del adolescente
de los antiguos objetos edípicos, realiza su “Duelo” por la pérdida de las figuras
parentales. Etapa en la cual se instala a un mundo individual o grupal, que le
permite superar la dependencia de los padres, apoyándose en un grupo de
pares.
La adolescencia: en esta fase se encuentra con el descubrimiento del objeto
heterosexual, con el cual logra la ruptura de los vínculos con sus figuras
parentales. Por un lado se busca tener las figuras parentales protectores
idealizados (situación que es semejante a la vida infantil) y por otra parte la
necesidad de independencia para alejarse de los padres y acceder al objeto
heterosexual.
Final de la adolescencia: el yo es el “heredero” de la adolescencia, como el
superyó es el heredero del Complejo de Edipo. La identidad y la mismidad
proporcionan la posibilidad de acceso al objeto heterosexual.
35
Pos-adolescencia: en esta fase se centra en la vida adulta, donde se espera
haber adquirido trabajo, pareja etc., el objeto amoroso es exterior de sí mismo. El
adolescente termina teniendo responsabilidades parentales.
b. Gesell y su determinismo biológico
Aguirre (1994), citando a Gesell quien indica que la adolescencia es una etapa que se
da desde los 11 a los 24 años, siendo la juventud la primera mitad del periodo de
adolescencia, el cual basa su teoría del desarrollo, desde el concepto de crecimiento y
maduración. Describiendo el crecimiento, como el proceso de cambio formal y funcional
del individuo, que además está sujeto a las leyes biológicas, lo cual es producto de la
maduración.
“El crecimiento es un proceso tan intrincado y delicado, que necesita poderosos
factores estabilizadores, más intrínsecos que extrínsecos, que conserven tanto el
equilibrio de la pauta total, como la dirección y la tendencia del desarrollo. Y la
maduración es, en cierto sentido, un nombre para ese mecanismo de regulación”.
Gesell (1956), desde su determinismo biológico, creía en la maduración y el
crecimiento, donde uno depende del otro siendo los factores más subjetivos y no tanto
los ambientales o externos, olvidando factores como la educación, la familia y el
contexto cultural, etc.
c. Teoría Psicosocial de Erick Erikson
Woolfolk (2006), cita a Erikson el cual retoma el planteamiento freudiano de las fases y
lo reestructura desde las diferentes aportaciones de la antropología de su tiempo,
abarcando las etapas a todo el ciclo de vida, su aporte más importante es el
desplazamiento con relación al tema de la sexualidad y la identidad como núcleo de la
personalidad del adolescente.
Describe el desarrollo del ser humano a través de ocho etapas, cada una de ellas hace
referencia a la organización, respectivamente de la personalidad, afirmándose en los
logros de la etapa anterior y los integra, ya que cada una consiste en la vivencia y
solución de un estado de crisis que provoca una situación negativa.
36
Erik Erikson, amplió la teoría de Sigmund Freud, enfatizando los resultados
psicosociales del desarrollo. En cada una de las etapas psicosexuales, se resuelve un
conflicto psicológico. Si el resultado es positivo, los individuos adquieren actitudes y
habilidades que les permiten contribuir constructivamente a la sociedad.
El estadío que hace referencia a la etapa de la adolescencia según Erikson, es el de
Identidad versus difusión de la identidad que se da aproximadamente de los 13 a los 21
años y se centra en la etapa de la adolescencia, cuando el joven intenta responder a las
preguntas ¿Quién soy? ¿Cuál es mi lugar en la sociedad?, los valores elegidos y las
metas individuales que por vocación conllevan a una identidad personal y duradera. El
resultado negativo es la confusión sobre los roles adultos en futuro.
La teoría psicosocial de Erikson, fue basada en la creencia de Freud creando su propia
teoría psicosocial basada en la relación del individuo con la sociedad, dependiendo de
cómo pasó su infancia, así se manifestará de adulto. En su teoría implementó hasta el
periodo de la vejez del ser humano. Se menciona como cada etapa se va dando y
cerrándose al mismo tiempo para darle paso a la siguiente, eso si la etapa anterior fue
concluida de la mejor manera, podrá pasar a la nueva, si se logra concluir con éxito; el
ser humano manifestará un desarrollo positivo de vida. Woolfolk (2006) citando a
Erikson quien señaló que el desarrollo normal del ser humano debe ser entendido con
relación a la forma de vivir única de cada cultura.
1.3.2 Construcción de la Identidad
La búsqueda de la identidad reconocida por el psicoanalista Erikson lo define como el
logro más importante para la personalidad del adolescente, y un paso crucial y
fundamental para pasar a la vida adulta productiva y de bienestar.
El construir una identidad significa definir quién se es como persona, que se valora y
las direcciones que se eligen para seguir en el recorrido de la vida. La búsqueda del yo
es la fuerza que está oculta e impulsa a reconocer compromisos, a descubrir la
vocación, los ideales éticos, políticos, religiosos y culturales.
37
Erikson consideró los resultados psicosociales llevados a cabo con éxito en las edades
de la infancia y la niñez, como etapas de preparación para un desarrollo positivo de la
identidad en el futuro. En las sociedades complejas los adolescentes experimentan una
crisis de identidad, conocido como un período de confusión y angustia a través de sus
experiencias donde optan a diferentes alternativas antes de una serie de valores y
metas. En este período en que los adolescentes empiezan a cambiar las características
que definieron el yo en la infancia, en la adolescencia son combinadas con nuevos
compromisos que su realidad les exige.
Varios investigadores, aportan sobre la trayectoria de la identidad y han agrupado a los
adolescentes en cuatro categorías, llamadas estados de identidad, que manifiestan el
progreso que han realizado hacia la formación de una identidad madura. Woolfolk,
(2006), cita a Grotevant y Cooper, quienes describen los cuatro estados de identidad y
características de la personalidad que a continuación se describen.
1.3.2 Logro de la identidad
Este estado se manifiesta habiendo explorado alternativas; los individuos que han
logrado una identidad están implicados a manifestar una serie de valores y metas
elegidos por ellos. Perciben un bienestar psicológico, de igualdad al transcurrir el
tiempo, y de saber hacia dónde van. Berk (1999), cita a Grotevant y Cooper donde
resumen a continuación los estados de identidad: Moratoria, este estado hace
referencia a un patrón aplicado a la vida, es la etapa donde el individuo no ha realizado
compromisos definidos todavía. Esto implica que permanecen en el tiempo de
exploración de alternativas, acumulando información e intentando actividades, con el
deseo de encontrar valores y metas que puedan guiar su vida. El segundo estado es el
de Identidad de compromiso, donde el ser humano se ha comprometido a manifestar
valores y metas sin dedicar tiempo para explorar otras alternativas. En esta etapa se
acepta una identidad ya hecha por las figuras de autoridad para el individuo. El
siguiente es difusión de la identidad en el cual los individuos que se desarrollan en una
identidad difusa carecen de una dirección clara de vida. No están comprometidos a
valores y metas. Tampoco intentan activamente alcanzarlos. Lo más probable es que
38
nunca practicaron nuevas alternativas, o puede que lo hayan hecho, pero lo hayan
encontrado demasiado amenazante o abrumador.
El logro de las etapas de identidad y moratoria se consideran rutas saludables
psicológicamente hacia la definición madura de uno mismo, mientras que la identidad
de compromiso y la difusa no son adaptativas.
El desarrollo de la identidad también depende de las escuelas y comunidades que
proporcionan a los jóvenes oportunidades abundantes y variadas de exploración. Berk
(1999) menciona a Erikson quien indicó “La incapacidad para escoger una identidad
ocupacional es lo que más trastorna a la gente joven”. El mismo autor manifiesta que
los adolescentes con identidad de compromiso, generalmente, tiene vínculos cercanos
con sus padres, pero no tienen oportunidades de separación saludable. Y la gente
joven con identidad difusa manifiesta los niveles más bajos de comunicación abierta y
cálida en casa.
El período de la adolescencia es una etapa de cambios críticos, según varios autores
expuestos anteriormente que describen la búsqueda de la identidad, lo cual provoca
confusión para adaptarse a su contexto, sin embargo es la familia la base fundamental
para un buen desarrollo integral del ser humano durante este período.
39
II. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Durante la vida el ser humano va creando nuevas experiencias y conceptos sobre sí
mismo, relaciones exteriores, habilidades sociales, lo que forma el significado de
autoconcepto, término que en ocasiones se entiende como autoestima, sin embargo no
es lo mismo. Pons y Pinazo (2000), citando a Lila, Musitu y Molpeceres mencionan que
el autoconcepto recoge las percepciones que un individuo tiene de sí mismo y
representa una variable crucial para el ajuste psicológico y social de esa persona.
El autoconcepto es la base fundamental para obtener una buena autoestima e imagen
que cada sujeto tiene de sí mismo reflejando sus experiencias vividas, por lo que no
cabe duda que un componente ligado es la estructura cognoscitiva que contiene
conceptos e imágenes de lo que se es, de lo que se quiere ser y lo que se manifiesta
hacia los demás.
En la etapa de la adolescencia se busca acomodarse a una identidad que produzca
placer, evitando así el dolor; el adolescente adopta situaciones que no le generen
presión ni ansiedad experimentando así su propio Yo.
Para muchos autores la adolescencia es una etapa crucial y difícil, que el ser humano
experimenta, no solo para el adolescente sino para todos aquellos que con él conviven.
En ella el sujeto manifiesta un autoconcepto innato, que ha estado formándose a
través de las vivencias de su niñez y es el modelo que represente la familia que le
brindará una base firme y segura combinado con sus propias experiencias.
Este período se caracteriza por cambios físicos, emocionales y conductuales, que dan
salto a una nueva etapa como lo es la adultez. Aguilar y Lemus (2011), citando a
Erikson, quien afirma que el desarrollo funciona a partir de un principio epigenético. “Yo
supondría que los adolescentes de hoy y de mañana están luchando por definir nuevos
tipos de conducta que sean aplicables a sus vidas, solo la experiencia directa puede
proporcionar correctivos, que nuestra tradicional mezcla de ilustración radical y
moralismo clase media ha dejado de proporcionar”(p. 9).
40
Debido a los cambios ya referidos, puede existir en los adolescentes un desequilibrio en
su personalidad. Al no sentirse apoyados, al pertenecer a una familia monoparental, al
enfrentar situaciones de la vida en donde se torna difícil mantener una comunicación
afectiva y participativa, son factores que pueden incidir directamente en su conducta,
afectando su autoconcepto; figuras como el director, el catedrático, los amigos, pero
sobre todo su núcleo familiar tienen un rol fundamental.
Como lo manifestaran Pons y Pinazo (2000), citando a Adams: “La adolescencia es un
periodo crítico para el crecimiento del self, cuyo desarrollo dependerá en gran medida
del clima familiar”.
La organización de la familia actual, ha sufrido notables cambios, entre los que se
pueden mencionar: el incremento de las familias monoparentales, por diferentes
situaciones, ya sea por divorcio, separación o viudez, o por migración por parte de
alguno de los cónyuges. Esta disolución puede afectar directamente a los hijos, en
especial a los adolescentes, en su búsqueda de la identidad, sin dejar de mencionar el
cambio patriarcal que durante muchos años predominó, dándole ahora un papel más
importante a la mujer.
En un contexto familiar unido, armonioso que ofrece apoyo emocional, afectivo y
comunicativo a sus miembros, se puede esperar resultados de identidad firme y un
autoconcepto positivo en los adolescentes. No obstante si el contexto familiar ofrece
poca cohesión y una escasa comunicación, el resultado será el de individuos de pobre
autoconcepto.
Es por ello que la familia como núcleo y base fundamental debe garantizar
comunicación, afecto, seguridad, y estabilidad emocional donde puede incluirse la
satisfacción con la vida y el principio de un buen autoconcepto. La satisfacción de la
vida surge de una familia integrada en un marco de oportunidades de expresión y
comunicación parental.
41
En un país multicultural como lo es Guatemala, la cultura, la edad, el género y el nivel
socioeconómico del adolescente no le garantiza un adecuado autoconcepto. Es por
esta razón la importancia de investigar el nivel de autoconcepto de los adolescentes
que en particular pertenecen a familias monoparentales, siendo la madre, la figura que
en muchas ocasiones representa padre y madre a la vez.
En las familias que pertenecen a la cultura Kaqchikel los adolescentes en su mayoría
son dependientes directamente de sus padres, incluso después de los dieciocho años;
sin embargo muchos de los núcleos familiares son desintegrados por alguno de los
miembros parentales, sin prever las consecuencias que se acarrean para los hijos y
que en el mayor de los casos los dañan directamente; estos son factores de una
comunidad en muchas ocasiones sin oportunidades en el pasado.
En la actualidad los adolescentes se ven en dificultades, las cuales necesitan
comunicar a sus padres, sin embargo es difícil cuando no se cuenta con el apoyo de los
dos miembros que en muchas ocasiones son más significativos para él.
Estas son unas de las razones del estudio, brindar información necesaria que pueda
contribuir a la familia guatemalteca, y en particular a la comunidad estudiantil del
Colegio Parroquial Mixto El Hermano Pedro, que singularmente cuenta con alumnos
del nivel básico conformada por una parte de familias monoparentales.
El enfoque dado al estudio es desde el punto de la psicología emocional que va ligada
al área cognoscitiva, como lo es el autoconcepto en una edad de cambios significativos
para el adolescente kaqchikel guatemalteco. Esto lleva a plantearse el siguiente
cuestionamiento:
¿Cómo es el autoconcepto de los adolescentes que pertenecen a familias
monoparentales a cargo de mujeres de la etnia kaqchikel?
42
2.1Objetivos
2.1.1 Objetivo general
Determinar el autoconcepto en adolescentes de familias monoparentales, a cargo de
mujeres de la etnia kaqchikel, del Colegio Parroquial Mixto El Hermano Pedro del
municipio de San Antonio Aguas Calientes del departamento de Sacatepéquez.
2.1.2 Objetivos Específicos
Identificar el nivel del autoconcepto en hombres y mujeres adolescentes, de
familias monoparentales a cargo de las mujeres de la etnia kaqchikel.
Indicar cuál es la causa más frecuente de la monoparentalidad en las familias de
la etnia kaqchikel.
Establecer la dimensión del autoconcepto que menor nivel manifiesta en
adolescentes de familias monoparentales.
2.2 Variables
Variable de estudio
Autoconcepto
Variable de control
Familias monoparentales a cargo de mujeres de la etnia kaqchikel
2.3 Definición de las variables
2.3.1 Definición Conceptual
Autoconcepto
Woolfolk (2006), cita a Hilgard, Arkinson y Arkinson, quienes refieren que el
autoconcepto es “la combinación de ideas, sentimientos y actitudes que la gente
tiene acerca de si misma” (p. 605), Se puede decir que el autoconcepto es el intento
del ser humano de explicarse a sí mismo. Sin excluir que la autopercepción varía de
una situación a otra.
43
Familias monoparentales
León (2006), cita a Leistenschneide, que define como familia monoparental, la que
se constituye por uno de los padres y sus hijos. Esta puede entenderse desde
diversos orígenes, debido a un embarazo precoz, divorcio, separación, viudez y los
hijos se quedan viviendo con uno de los padres. Se caracteriza por la convivencia
de uno solo de los padres con el hijo o hijos, de forma que la mayor parte del
compromiso se centra exclusivamente en sus manos.
2.3.2 Definición Operacional
Autoconcepto
Esta variable de estudio se medirá a través de la prueba psicométrica AF5, el
autoconcepto en 5 áreas específicas: académico, social, emocional, familiar y físico.
Familias monoparentales a cargo de mujeres de la etnia kaqchikel
Tipo de Familia en la cual la mujer kaqchikel ha tomado el papel de encargada
absoluta en la mayoría de los casos de su hijo o hijos, que por motivos de viudez,
abandono o separación de parte de la figura paterna, ella ha tenido que asumir las
responsabilidades en todos los ámbitos del hijo adolescente, lo cual se medirá
mediante el cuestionario que se incluye en anexos.
2.4 Alcances y Límites
La presente investigación se enfoca a la etapa de la adolescencia, con el propósito de
conocer el autoconcepto de los adolescentes que pertenecen a familias
monoparentales, lideradas por la mujer kaqchikel, que por varias razones se hacen
cargo de su familia solas, entre algunas de las causas se pueden mencionar: el
divorcio, la separación o viudez. Tomando en cuenta cómo los jóvenes se perciben
dentro de su familia y de qué manera lo reflejan ante diferentes situaciones
contextuales.
El estudio está dirigido a estudiantes de la secundaria de un Colegio privado ubicado
en el municipio de San Antonio Aguas Calientes del departamento de Sacatepéquez,
44
entre las edades de 13 a 16 años que permanecen en el establecimiento en un horario
específico toda la semana, por lo que los resultados que se obtengan pueden
generalizarse a sujetos con características similares a los del presente estudio.
2.5 Aporte
Esta investigación pretende contribuir con el autoconcepto de los adolescentes que
forman parte de una familia monoparental. Y partiendo de los resultados puedan ser
tomados en cuenta para la planificación de talleres y actividades que puedan fortalecer
su autoconcepto y la autoestima en los estudiantes del establecimiento, y no
limitándose únicamente a los sujetos que formaron parte del estudio.
El aporte de esta investigación se tornó de mucha importancia para los padres de
familia y los educadores para fortalecer el autoconcepto en los jóvenes que no se les
brindaba atención necesaria para sobresalir.
Al mismo tiempo se pretende contribuir con la sociedad guatemalteca, dando a conocer
los resultados de la investigación, haciendo una réplica de los beneficios que
proporciona tener un nivel de autoconcepto adecuado ante las diferentes circunstancias
que le ofrece su contexto.
Es necesario mencionar de los pocos estudios que se han enfocado a la cultura
kaqchikel, donde se manifiestan diferentes concepciones en cuanto a pensamientos y
sentimientos propios del adolescente que pertenece a una familia monoparental, en la
cual los patrones de crianza y modelos familiares son tan marcados lo que hizo
significativo los resultados que se obtuvieron de esta investigación.
45
III. MÉTODO
3.1 Sujetos
El estudio se realizó en un Centro Educativo privado que brinda servicios a
estudiantes del nivel básico en jornada vespertina; dicho Centro se encuentra ubicado
en el municipio de San Antonio Aguas Calientes del departamento de Sacatepéquez.
Cuenta con una población estudiantil, de ambos sexos pertenecientes en su mayoría a
la etnia kaqchikel, con un nivel socioeconómico medio.
Se tomó como muestra a adolescentes de trece a dieciséis años de edad, tanto de sexo
masculino como femenino, que pertenecen a familias monoparentales, específicamente
a cargo de la madre de la etnia kaqchikel, que accedieron a participar en el estudio.
Por lo tanto el tipo de muestra es no probabilística.
Tabla No. 1: Características de los sujetos que participaron en el estudio
Abascal e lldefonso (2005), indican que el muestreo no probabilístico no se basa en un
proceso al azar sino que es el investigador quien elige la muestra. Dado que no existe
un proceso al azar no es posible controlar el error de la muestra y la confianza de
obtener resultados generalizados, sino orientativos.
Sujeto Sexo Edad Grado
1 F 15 segundo básico
2 M 15 Tercero básico
3 F 16 Tercero básico
4 M 14 segundo básico
5 F 13 primero básico
6 M 15 segundo básico
7 F 14 segundo básico
8 M 14 segundo básico
9 F 15 segundo básico
10 M 13 primero básico
46
3.2 Instrumento
El instrumento utilizado para el presente estudio se denomina AF-5,
AUTOCONCEPTO FORMA 5 de García y Musitu (2009) y fue diseñado y estandarizado
en España en el año de 1999 por los autores, con el propósito de medir el
autoconcepto. La validación del instrumento original se realizó en una muestra de 6.483
sujetos españoles de ambos sexos; 2859 varones y 3624 mujeres, con un rango de
edad que oscilaba entre 10 y 62 años. Se aplicó por una parte a personas
escolarizadas desde quinto primaria hasta licenciados, y por otra, a personas adultas
que en el momento de la aplicación no cursaban estudios. Para contrastar
empíricamente la validez teórica de los cinco componentes principales, aplicando la
rotación oblimin con normalización de Kaiser, por tratarse de dimensiones relacionadas.
Se asigna un máximo de 999 iteraciones para la extracción y otras tantas para la
rotación; 5 de límite de las dimensiones, para controlar el número de componentes, y -
20 al valor de delta para la rotación.
La escala consta de 30 ítems, los cuales se expresan de manera comprensible para
diferentes edades y formación académica. Su aplicación puede ser tanto individual
como colectiva y con él pueden ser evaluados desde sujetos que cursen el quinto
grado de primaria hasta personas adultas y el tiempo de aplicación es de 15 minutos
aproximadamente.
Los ítems se deberán responder a través de un puntaje de 1 a 99, según la persona, si
está o no de acuerdo con el enunciado presentado.
El instrumento mide el autoconcepto en cinco áreas, cada una de las cuales se
compone de seis ítems; éstos indicarán un total, sumando así las puntuaciones de
cada área para determinar el nivel de autoconcepto.
Las cinco áreas son:
a) Autoconcepto académico/laboral
b) Autoconcepto social
c) Autoconcepto emocional
d) Autoconcepto familiar
47
e) Autoconcepto físico
3.3 Procedimiento
Para realizar la presente investigación se ejecutaron los pasos que a continuación se
detallan:
Se hizo la petición verbalmente al establecimiento, solicitando el permiso para
realizar el estudio.
Se solicitó formalmente el permiso al establecimiento educativo a través de un
documento escrito para la práctica del referido estudio.
Se planificó la fecha para aplicar una encuesta con el fin de obtener la muestra.
Se dio a conocer las fechas calendarizadas para su aplicación, así como para la
aplicación del test a emplearse.
Se aplicó el test a los alumnos según la fecha acordada en el establecimiento,
en un salón que reúna las condiciones necesarias.
Se procedió a calificar el test AF 5 con las normas indicadas.
Se procedió con la cuantificación y tabulación de los datos obtenidos.
Se hizo un análisis de los resultados que brindó el estudio.
Se elaboraron las conclusiones y recomendaciones pertinentes.
3.4 Tipo de investigación
Según Achaerandio (2000), expresa que la investigación descriptiva se caracteriza por
ser un estudio sistemático y empírico de las variables entre sí, lo que significa que las
variables no son manipuladas, así como la influencia y la relación entre variables.
3.4.1 Diseño de investigación
En el presente estudio se utilizará un diseño transeccional descriptivo, según Gonzalvo
(1978), menciona que esta metodología resume afirmaciones con referencia a medidas
realizadas a una población determinada; es útil para la descripción numérica de un
grupo particular, considerando que ninguna conclusión va más allá del grupo descrito.
48
3.5 Metodología Estadística.
Fernández, Cordero y Largo (2002), manifiestan que estadística descriptiva son los
registros u observaciones efectuadas, que proporcionan una serie de datos que
necesariamente deben ser ordenados y presentadas de una forma inteligible. Además
desarrolla un conjunto de técnicas cuya finalidad es presentar y reducir los diferentes
datos observados.
Los cálculos de la estadística descriptiva se realizaron con medidas de tendencia
central y medidas de dispersión, así como el cálculo de porcentajes utilizando el
programa Excel de Office, para luego realizar su análisis y posteriormente las
conclusiones de la investigación.
49
IV. PRESENTACION Y ANÁLISIS DE RESULTADOS
A continuación se presentan los resultados obtenidos, tras la aplicación del test
Autoconcepto forma 5 (AF5) de García y Musitu (2009) a los adolescentes que
pertenecen a familias monoparentales de una comunidad Kaqchikel en San Antonio
Aguas Calientes. Los resultados están distribuidos por género y áreas del
autoconcepto.
Los resultados fueron agrupados y tabulados haciendo uso del programa de
procesamiento de datos de Microsoft Office Excel, Windows 2010.
Tabla No. 1
Resultados del Autoconcepto: Dimensión Académico/Laboral
No. Sujeto Mujeres No. sujeto Hombres
1 75 6 85
2 80 7 93
3 55 8 75
4 40 9 40
5 10 10 85
La tabla No. 1 indica los percentiles del autoconcepto Académico/Laboral en hombres y
mujeres, donde se observa que el autoconcepto en hombres presenta puntuaciones
más altas, contrario a las mujeres.
50
Tabla No. 1.1
La tabla anterior indica que en la dimensión académico/laboral las mujeres obtuvieron
un promedio de 6.004 con una desviación estándar de 2.02, lo cual corresponde a un
percentil 50 que significa promedio en esta área. Mientras que los hombres obtuvieron
un promedio de 7.156 con una desviación estándar de 1.322 lo cual corresponde a un
percentil 75 e indica un autoconcepto Académico alto.
Tabla No. 2
La tabla No. 2 indica que los percentiles del autoconcepto social en las cinco mujeres,
tres presentan un bajo nivel, mientras que de cinco hombres dos presentan un bajo
nivel, y el resto indica un nivel medio.
Estadística Descriptiva del Autoconcepto Académico Laboral
femenino masculino
Promedio 6.004 7.156
Desviación estándar 2.020 1.322
N 5 5
Resultados de la Dimensión Social
No. Sujeto Mujeres No. sujeto Hombres
1 7 6 10
2 7 7 50
3 75 8 60
4 50 9 55
5 70 10 70
51
Tabla No. 2.1
La tabla anterior indica que en la dimensión Social las mujeres obtuvieron un promedio
de 6.636 con una desviación estándar de 1.717, lo cual corresponde a un percentil 30
que significa un resultado bajo en esta área. Mientras que los hombres obtuvieron un
promedio de 6.86 con una desviación estándar de 1.022 lo cual corresponde a un
percentil 40 e indica un autoconcepto Social bajo.
Tabla No. 3
Los resultados presentados en la tabla No.3 indican que los percentiles del
autoconcepto emocional, de cinco mujeres dos tienen una baja percepción en el manejo
de sus emociones, mientras en los sujetos hombres tres tienen una baja percepción en
esta dimensión.
Estadística Descriptiva del Autoconcepto Social
femenino masculino
Promedio 6.636 6.86
Desviación estándar 1.717 1.022
N 5 5
Resultados de la Dimensión Emocional
No. Sujeto Mujeres No. sujeto Hombres
1 60 6 40
2 20 7 25
3 15 8 65
4 80 9 20
5 97 10 70
52
Tabla No. 3.1
La tabla anterior indica que en la dimensión Emocional las mujeres obtuvieron un
promedio de 5.112 con una desviación estándar de 2.416, lo cual corresponde a un
percentil 60 que significa un resultado promedio en esta área. Mientras que los hombres
obtuvieron un promedio de 5.214 con una desviación estándar de 1.120 lo cual
corresponde a un percentil 45 e indica un autoconcepto Emocional bajo.
Tabla No. 4
La tabla indica que en los percentiles del autoconcepto familiar, dos de los adolescentes
hombres tienen una percepción baja en esta dimensión, y de las cinco mujeres tres
tienen una baja percepción familiar.
Estadística Descriptiva del Autoconcepto Emocional
femenino masculino
Promedio 5.112 5.214
Desviación estándar 2.416 1.120
N 5 5
Resultados de la dimensión Familiar
No. Sujeto Mujeres No. sujeto Hombres
1 70 6 70
2 25 7 55
3 10 8 70
4 90 9 30
5 20 10 90
53
Tabla No 4. 1
La tabla anterior indica que en la dimensión Familiar las mujeres obtuvieron un
promedio de 7.55 con una desviación estándar de 1.728, lo cual corresponde a un
percentil 30 que significa un resultado bajo en esta área. Mientras que los hombres
obtuvieron un promedio de 8.808 con una desviación estándar de 0.908 lo cual
corresponde a un percentil 60 e indica un autoconcepto Familiar promedio.
Tabla No. 5
Los resultados de la tabla No. 5 indican que los percentiles del autoconcepto en
hombres uno se percibe bajo en esta dimensión, en el caso de las cinco mujeres dos de
ellas no se perciben atractivas en cuanto a su aspecto y condición física.
Estadística Descriptiva del Autoconcepto Familiar
femenino masculino
Promedio 7.55 8.808
Desviación estándar 1.728 0.908
N 5 5
Resultados de la Dimensión Física
No. Sujeto Mujeres No. sujeto Hombres
1 80 6 97
2 93 7 93
3 97 8 90
4 10 9 60
5 20 10 15
54
Tabla No. 5.1
La tabla anterior indica que en la dimensión Física las mujeres obtuvieron un promedio
de 5.5 con una desviación estándar de 2.760, lo cual corresponde a un percentil 55 que
significa un resultado promedio en esta área. Mientras que los hombres obtuvieron un
promedio de 7.206 con una desviación estándar de 2.028 lo cual corresponde a un
percentil 70 e indica un autoconcepto Físico alto.
Los puntos obtenidos del test de Autoconcepto (AF5) de cada adolescente fueron
importantes y trascendentales para la presente investigación. A continuación se
presenta la tabla que contiene detalladamente los resultados en percentiles de cada
sujeto.
Estadística Descriptiva del Autoconcepto Físico
femenino masculino
Promedio 5.6 7.206
Desviación estándar 2.760 2.028
N 5 5
Tabla No. 6 Punteos Generales del Test de Autoconcepto de cada sujeto
Sujeto Autoconcepto Académico/
Laboral
Autoconcepto Social
Autoconcepto Emocional
Autoconcepto Familiar
Autoconcepto Físico
1 75 07 60 70 80
2 85 10 40 70 97
3 93 50 25 55 93
4 80 07 20 25 93
5 75 60 65 70 90
6 55 75 15 10 97
7 40 55 20 30 60
8 40 50 80 90 10
9 10 70 97 20 20
10 85 70 70 90 15
55
La tabla anterior muestra los percentiles obtenidos por los adolescentes, que
pertenecen a familias monoparentales a cargo de las mujeres de la etnia kaqchikel, en
el test de Autoconcepto (AF5), donde se aprecian los punteos diferenciales.
A continuación se presentan los resultados obtenidos con sus respectivos porcentajes
en las diferentes dimensiones del Autoconcepto.
Gráfica No.1
La gráfica No. 1 presenta los porcentajes obtenidos en las cinco áreas del
autoconcepto, los cuales indican que la dimensión que mayor nivel manifiesta es la
dimensión física y la dimensión social indica el nivel más bajo.
23%
16%
18%
19%
24%
Porcentajes de las cinco dimensiones del Autoconcepto
AutoconceptoAcadémico/Laboral
AutoconceptoSocial
AutoconceptoEmocional
AutoconceptoFamiliar
Autoconcepo Físico
56
Gráfica No. 2
Los resultados indican que el 70% de los adolescentes tienen una alto nivel de
autoconcepto Académico/Laboral, señalando que la percepción es positiva en su
calidad del desempeño de su rol como estudiante. Y el 30% de los adolescentes
manifiesta un nivel bajo en su autoconcepto académico.
Gráfica No. 3
La gráfica No. 3 indica el autoconcepto social, donde los porcentajes fueron iguales al
50% tanto para el nivel alto como para el nivel bajo en esta dimensión.
30%
70%
Autoconcepto Académico Laboral
Bajo
Alto
50% 50%
Autoconcepto Social
Bajo
Alto
57
Gráfica No. 4
Con relación al autoconcepto emocional, los porcentajes fueron iguales al 50% tanto
para el nivel alto como para el nivel bajo en esta dimensión.
Gráfica No.5
La gráfica No. 5 indica que el 60% de los sujetos tienen un autoconcepto familiar alto,
implicando participación e integración familiar, mientras el 40% corresponde a un nivel
bajo en su autoconcepto familiar.
50% 50%
Autoconcepto Emocional
Bajo
Alto
40%
60%
Autoconcepto Familiar
Bajo
Alto
58
Gráfica No.6
Los resultados de la gráfica No. 6 reportan que el 70% de los adolescentes tienen un
autoconcepto físico alto, mientras que el 30% corresponde a niveles bajos en esta
dimensión.
Gráfica No. 7
60%
10%
20%
10%
Razones de la Monoparentalidad
No se hizoresponsable
Por Migración
por muerte
Problemasfamiliares
30%
70%
Autoconcepto Físico
Bajo
Alto
59
En la gráfica anterior se presentan las razones por las cuales el padre se ausentó de la
familia. La principal causa de la monoparentalidad en las familias de los sujetos de la
muestra, es porque la figura paterna no se hizo responsable, al alcanzar un 60% que
supera ampliamente las otras razones.
60
V. DISCUSIÓN DE RESULTADOS
La presente investigación tuvo como objetivo principal identificar el nivel de
autoconcepto en adolescentes hombres y mujeres, que pertenecen a familias
monoparentales a cargo de la mujer de la etnia kaqchikel en un colegio privado del
municipio de San Antonio Aguas Calientes, donde la muestra que participó fue elegida
por el investigador. El estudio da a conocer como los adolescentes de trece a dieciséis
años se perciben en diferentes áreas del autoconcepto.
Amezcua y Pichardo (2000), citan a Burns quien refiere que el autoconcepto es la
conceptualización que la propia persona hace de sí misma, siendo considerado como
un conjunto de connotaciones desde diferentes perspectivas. Se puede observar a
través de las cinco áreas con las cuales se basa el estudio: el autoconcepto
académico/laboral, autoconcepto social, autoconcepto emocional, autoconcepto familiar
y autoconcepto físico.
La muestra estuvo conformada por el 50% de sujetos adolescentes mujeres y el 50%
de sujetos adolescentes hombres los cuales presentan resultados diferentes en cada
una de las dimensiones evaluadas.
El autoconcepto académico/laboral se refiere a la percepción de pensamientos y
sentimientos que el sujeto tiene acerca de su rol, como estudiante y como trabajador.
De la presente investigación se obtuvieron resultados donde se manifiesta que los
adolescentes a pesar de provenir de una cultura donde pocos años atrás los hombres
eran los únicos con oportunidades académicas, actualmente la mujer ha sobresalido y
esto se puede manifestar a través de la muestra conformada por cinco de ellas
estudiando el nivel básico, otro de los obstáculos más para la mayoría de los sujetos es
el factor económico, sin embargo los resultados tras la aplicación del test de
autoconcepto manifiestan un 70% de adolescentes que perciben su desempeño
académico alto y el 30% perciben su situación académica baja.
61
El autoconcepto social, para García y Musitu (2009), es la percepción que tiene el
sujeto de su desempeño en las relaciones sociales, considerando las experiencias,
pensamientos y actitudes que los adolescentes manifiestan en la etapa de la
adolescencia, donde es importante citar que es en esta fase donde busca su propia
identidad, influenciada por su entorno. Esta definición contribuye con el trabajo
realizado donde los resultados para esta dimensión indican un 50% de autoconcepto
alto y positivo, mientras el otro 50% manifiestan un nivel bajo en esta dimensión, como
lo indica el estudio realizado por Sánchez, Jiménez y Merino (1997), quien evaluó el
autoconcepto en adolescentes refiriendo que los resultados denotan que los
adolescentes se muestran incómodos socialmente, inseguros y emocionalmente lábiles,
encontrando resultados similares del autoconcepto social en los adolescentes que
pertenecen a familias monoparentales.
Así mismo la investigación de García y Cifuentes (2010), refiere que el adolescente que
crece sin la figura paterna le causa inestabilidad emocional; aportando también que
una madre emocionalmente estable y responsable que no arrastre negativamente la
imagen del padre y no proyecte en el hijo sus sentimientos de culpa y sufrimientos, el
adolescente podría crear un concepto adecuado de su contexto y de sí mismo, se
sentirá satisfecho con su sentir. Esto complementa lo que se obtuvo del estudio; ya que
el 50% de los sujetos se perciben emocionalmente estables, y el otro 50% se perciben
negativos en su estado emocional y sus respuestas a situaciones específicas.
Por su parte Rojas (2005), en su investigación indica que la familia es la principal
influencia en la cultura del adolescente, siendo los padres los responsables directos de
la enseñanza de los valores morales y que al final determinan las conductas de los
individuos; ahora bien en éste estudio se logró concluir en un 60% de adolescentes que
pertenecen a una familia monoparental tienen una percepción adecuada en cuanto a su
participación e integración familiar, no siendo una limitante la monoparentalidad ya que
se pudo obtener como resultado que sola la madre puede llegar a crear un buen
desarrollo de autoconcepto familiar en su hijo, sin embargo el 40% de los adolescentes
indican no sentirse cómodos en sus relaciones familiares.
62
Los resultados encontrados en la presente investigación manifiestan que el 70% de los
hijos adolescentes de familias monoparentales se perciben atractivos en su condición
física, como concluyen Pons y Pinazo (2000), que refieren en su estudio, que debido a
la etapa de la adolescencia la imagen física de los jóvenes tiene un valor significativo, y
que en los resultados sugieren la decisiva importancia de la familia, en la explicación de
la satisfacción consigo mismo, lo cual es reflejado en los resultados del presente
estudio ya que el nivel de autoconcepto físico no está afectado en su mayoría y esto
viene a contribuir a que los jóvenes pueden valorarse y aceptarse como son
físicamente.
Al apreciar el resultado que obtuvieron García y Cifuentes (2010), en su estudio
realizado con población adolescente que crece con la ausencia de la figura paterna,
indican que el adolescente creará su propio autoconcepto dependiendo de la imagen
que la madre proyecte del padre. Esto complementa lo que se obtuvo del estudio al
deducir que el autoconcepto físico, académico y familiar se encuentran altos en los
adolescentes, sin embargo necesitan ser reforzados para un mejor desarrollo de los
mismos; en cuanto al autoconcepto social y emocional fueron las áreas bajas de los
adolescentes que pertenecen a familias monoparentales a cargo de la mujer kaqchikel
los cual indica que necesitan ser reforzados en dichas áreas.
Los estudios anteriormente citados concluyen que los adolescentes presentan un nivel
de medio a alto en su autoconcepto, esto probablemente sea debido a que las
diferentes dimensiones del autoconcepto se ven afectadas para cada sujeto, así
también se pudo inferir que los adolescentes de familias monoparentales, presentan un
autoconcepto donde se ven afectadas más las áreas social y emocional.
Otro dato importante que se pudo obtener en el estudio, es la razón por la cual el padre
se ausentó de la familia, y según los resultados el 60% es porque no se hizo
responsable desde el embarazo, y con esto se puede estimar que a causa del
abandono desde que el hijo estaba en el vientre materno, el padre no fue reconocido ni
identificado y a raíz de esto la madre pudo crear razones válidas de la ausencia del
padre, lo cual explica que los resultados en el autoconcepto a nivel familiar son
positivos y recibe el apoyo de la madre.
63
Es importante mencionar que para los autores citados indican la importancia de brindar
orientación psicológica tanto a la madre como al adolescente para orientarlos hacia un
adecuado desarrollo integral y así fortalecer su autoconcepto en todas sus
dimensiones.
64
VI. CONCLUSIONES
Con base en los resultados obtenidos de la presente investigación, se concluye lo
siguiente.
1. Las dimensiones del autoconcepto que menor nivel manifiestan son la dimensión
social y emocional en relación a las otras áreas, indicando que los adolescentes
tienen una percepción negativa en cuanto a su desempeño en sus relaciones
sociales y sus emociones.
2. Las dimensiones del autoconcepto que en mayor nivel manifiestan los
adolescentes son el área física y el área académico/Laboral, por lo cual se
perciben en una buena condición física y como buenos estudiantes o
trabajadores.
3. La percepción que los sujetos adolescentes tienen de su calidad de desempeño
en su rol como estudiantes o como trabajador, se encuentra afectada en un 30%
y el 70% indica un nivel de autoconcepto favorable en el área académico/laboral.
4. En la dimensión emocional los adolescentes presentaron resultados en un 50%
quienes se perciben emocionalmente estables y sus respuestas a situaciones
específicas son asertivas, al contrario del otro 50% que hacen referencia a un
bajo control en sus emociones.
5. En el autoconcepto familiar, según los resultados presentados, el 60% de los
adolescentes manifiestan una percepción positiva en cuanto a su implicación,
participación e integración en el medio familiar mientras el 40% presentan un
autoconcepto familiar bajo o negativo.
6. El 70% de la población de adolescentes presenta un alto nivel de autoconcepto
físico, es decir se perciben atractivos y con una buen condición física.
65
La causa más frecuente de la monoparentalidad en las familias de los adolescentes
hombres y mujeres es porque la figura paterna no se hizo responsable desde el
embarazo.
66
VII. RECOMENDACIONES
1. Implementar talleres y actividades que puedan fortalecer el autoconcepto y
autoestima dirigidos a los alumnos del centro educativo y padres de familia.
2. Fortalecer el autoconcepto desde el enfoque educativo, donde los docentes
puedan integrar actividades de conocimiento de sí mismos y tomar en cuenta los
sentimientos manifestados por los alumnos en el aula.
3. Trabajar el área social, motivando desde el centro educativo a los adolescentes a
involucrarse en diversas actividades que puedan fortalecer habilidades sociales.
(como juegos, trabajos grupales, deportes).
4. Para fortalecer la dimensión emocional, se recomienda reforzar las conductas
positivas que los alumnos puedan manifestar, siendo el reforzador verbal, social
o físico. Tomando en cuenta las diferentes habilidades y destrezas que
manifiesten los alumnos.
5. Planificar desde los cursos docentes actividades donde se pueda involucrar a la
familia, para fortalecimiento de la comunicación y convivencia, aprovechando la
integración que hace el Curriculum Nacional Base, (CNB).
6. Programar actividades diarias que implementen y fomenten el deporte,
motivando el bienestar físico, social y emocional, promoviendo una buena salud
mental.
7. Crear talleres que puedan fomentar la comunicación de madre hacia el hijo y del
hijo hacia la madre, para la resolución efectiva de conflictos.
8. Seguir contribuyendo con la población de adolescentes, ya que es una etapa
donde se busca identidad y existen varias inquietudes y dudas no resueltas por
67
las madres, promoviendo así programas específicos para establecimientos
educativos donde se le brinde orientación a la madre kaqchikel.
9. Informar acerca de la importancia de la orientación psicológica, y se pueda
fomentar en la cultura, la necesidad de acudir al psicólogo dejando los mitos y
falsas creencias a un lado sobre la psicología.
68
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73
IX. ANEXOS
74
FICHA TÉCNICA DEL TEST
Nombre: Autoconcepto Forma 5 (AF5)
Autores: Fernando García y Gonzalo Musitu
Características de administración:
Forma de administrarse: individual o colectiva
Duración: 15 minutos aproximadamente
Aplicación: Alumnos de quinto y sexto grado de Educación Primaria Obligatoria (EPO),
Educación Secundaria Obligatoria (ESO), bachiller, universitarios y adultos no
escolarizados en el momento de la aplicación.
Instrucciones para la aplicación
Se le pide al evaluando leer cuidadosamente cada una de las frases que se presentan y
contestar con un valor entre 1 y 99 según su grado de acuerdo con cada frase; si está
de acuerdo, contestará con un valor alto, por el contrario si está muy poco de acuerdo,
elegirá un valor bajo. Según el valor, debe anotarlo en la hoja de respuestas.
75
76
77