Muriel Mas Moraza

María Esther Gargallo Ibort

Facultad de Letras y de la Educación

Grado en Educación Infantil

2016-2017

Título

Director/es

Facultad

Titulación

Departamento

TRABAJO FIN DE GRADO

Curso Académico

Trastornos en la Coordinación. La lateralidad

Autor/es

© El autor© Universidad de La Rioja, Servicio de Publicaciones,

publicaciones.unirioja.esE-mail: publicaciones@unirioja.es

Trastornos en la Coordinación. La lateralidad, trabajo fin de grado de Muriel MasMoraza, dirigido por María Esther Gargallo Ibort (publicado por la Universidad de La

Rioja), se difunde bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.

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Trabajo de Fin de Grado

TRASTORNOS EN LA COORDINACIÓN

LA LATERALIDAD

Autor:

Muriel Mas Moraza

Tutor/es:

Fdo. María Esther Gargallo Ibort

Titulación:

Grado en Educación Infantil

Facultad de Letras y de la Educación

AÑO ACADÉMICO: 2016/2017

Resumen

El propósito de este trabajo es conocer el significado del trastorno de la

coordinación y las derivaciones que tiene, así como el desarrollo, detección y

diagnóstico, junto con las consecuencias que esto reporta en los niños y en su futuro.

Entre las derivaciones del trastorno de la coordinación, se profundizará en la lateralidad

la cual puede tener un predominio motor relacionado con las partes del cuerpo. También

se analizará en el sentido de cómo puede llegar a afectar una lateralidad mal definida o

una predominante en el mismo lado en el proceso de aprendizaje de los niños.

Asimismo, se hablará de la lateralización, factor ligado a la lateralidad que forma parte

de la prevalencia del segmento corporal y de la constitución corporal humana. La

finalidad de la evaluación será descifrar cual es la lateralidad natural del niño y detectar

la lateralidad cruzada. En este caso, no se realizará ningún estudio con muestra, sino que

el mismo se basará en un estudio teórico de todo lo mencionado anteriormente.

Para poder atender a los alumnos con una lateralidad no conformada totalmente,

se medirá la dominancia lateral y realizaremos actividades o dinámicas que ayuden a los

alumnos a establecer su lateralidad adecuadamente. Aunque este proyecto no se lleve a

cabo en la práctica, se definirá cada uno de los apartados que lo contienen para darle

una respuesta teórica al mismo.

Palabras clave: aprendizaje, coordinación, desarrollo, infantil, lateralidad,

lateralización.

Abstract

The purpose of this project is to learn about the meaning of coordination disorder

and its derivations, as well as development, detection and diagnosis, along with the

consequences that it reports on children and their future. Among them, what will be

spoken about in depth is laterality, which can have a predominant motor related to the

different parts of the body. Laterality will also be analyzed as in which way it can affect

an illdefined or a predominant laterality on the same side in the child ´s learning

process. Also, I will talk about lateralizaion, a factor linked to the laterality that is part

of the body segment and the human body constitution. The purpose of the evaluation

will be to decipher what the child ´s natural laterality is and to detect cross laterality. In

this case, no study will be done with samples, but it will be based on a theoretical

study of everything mentioned above.

In order to assist students with a completely non-conformed laterality, the lateral

dominance will be measured and we will do activities or dynamics that help students

establish their laterality appropriately. Although this Project is not carried out in

practice, each of the sections that contain it will be defined to give a theoretical answer

to it.

Key words: learning, coordination, development, childish, laterality,

lateralization.

Índice

Introducción ..................................................................................................................... 1

Justificación ...................................................................................................................... 3

Objetivos ........................................................................................................................... 4

Marco teórico ................................................................................................................... 5

Trastorno del desarrollo de la coordinación ........................................................ 5

Concepto de lateralidad ........................................................................................ 6

Influencia de la lateralidad en los problemas de aprendizaje.............................. 7

Tipos de lateralidad .............................................................................................. 8

Importancia en las etapas prelaterales .............................................................. 10

Factores que influyen o determinan la lateralidad ............................................ 11

Sintomatología, detección y diagnóstico ............................................................ 13

Direccionalidad y dominancias ........................................................................... 15

La dominancia lateral y la orientación espacial ......................................................... 18

Propuesta didáctica ....................................................................................................... 20

Conclusión ...................................................................................................................... 30

Bibliografía ..................................................................................................................... 32

Webgrafía ....................................................................................................................... 36

Anexos ............................................................................................................................. 37

1

1. Introducción

El presente documento, está redactado con el objetivo de que se pueda

comprender la importancia de la psicomotricidad y la coordinación desde los primeros

años de vida y su repercusión en el futuro.

En este caso, se partirá de la descripción del término ‘trastorno del desarrollo de la

coordinación’ y su influencia en el desarrollo normalizado en un alumno de Educación

Infantil. Una vez tratado este tema en general, se centrará en la lateralidad, determinada

de manera espontánea por una cuestión biológica. A partir de este proyecto se pretende

descubrir qué es la lateralidad, cómo y cuándo se establece, los tipos que existen, los

factores que influyen en ella y en el aprendizaje.

Castaño (2002) cree que una de las principales causas de los trastornos del

aprendizaje es debido a la alteración de la lateralidad. En el marco teórico, se desarrolla

todo lo que tiene que ver con la lateralidad comenzando por su definición, origen,

causas, etc.

El proyecto siempre irá enfocado a los alumnos de Educación Infantil, ya que es

imprescindible que los niños tengan un adecuado desarrollo motriz y en el caso de que

no lo tengan, la detección de cualquier problema o metodologías y actividades para su

solución.

El trabajo está dividido en varios apartados, el primero de ellos dedicado a la

justificación de la elección del tema. El segundo, está dedicado a los objetivos.

Posteriormente, he realizado un análisis de toda la información obtenida, proporcionada

por los documentos examinados sobre el tema en cuestión, para fundamentar

teóricamente este proyecto. A su vez, se plantean una serie de dinámicas, pero tanto el

marco teórico como las actividades, no se llevarán a la práctica en ningún momento. He

querido partir de lo más general que en este caso son los trastornos del desarrollo de la

coordinación, para finalizar con la lateralidad y las herramientas para facilitar su

desarrollo.

Para finalizar, he realizado unas conclusiones donde está reunido todo el proceso

de trabajo, plasmando los pros y los contras que han aparecido en su desarrollo y mi

2

opinión final sobre el tema. A continuación y en último lugar está la bibliografía en la

que se encuentran todas las páginas y libros usados para la realización del trabajo.

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2. Justificación

La elección de este tema viene motivada por algunas de las asignaturas cursadas

durante estos años de carrera, pero ante todo porque me resulta muy interesante, ya que

nunca lo había tratado en profundidad y pienso que es muy importante tener

información sobre este tipo de contenidos.

Adquirir una buena lateralidad evitará muchos problemas en el futuro en cuanto al

desarrollo motor, artístico, lectoescritura, etc. Para que se vaya alcanzando de manera

adecuada es imprescindible que los niños tomen conciencia de la lateralidad en su

propio cuerpo y que sea consciente de ambos lados, el derecho y el izquierdo.

Muchos autores como, Harris (1961) o Broca (1865), admiten que existe siempre

un predominio lateral de un lado del cuerpo frente al otro y que los problemas que

aparezcan en el proceso de adquisición de la lateralidad y lateralización pueden causar

dificultades en el aprendizaje en un futuro. Todo esto nos lleva a concluir lo dicho

anteriormente de que puede afectar a muchos ámbitos del aprendizaje infantil.

Es importante resaltar todo aquello referente a la etapa de Educación Infantil, ya

que en estos primeros años de vida, los niños cumplen varias etapas de desarrollo

fundamental tanto en la motricidad gruesa como en la fina, las cuales afectan a la

emocional y la intelectual.

En mi opinión, las personas deben conocer estas cuestiones debido a que les

puede afectar tanto a ellos mismos como a sus hijos. Esto puede repercutir en los

procesos de aprendizaje, por lo que es indispensable tanto su conocimiento como su

ejecución para todos.

Por último, cabe destacar la teoría de Piaget (1981), referente a la inteligencia, ya

que afirma que se construye a partir de la actividad motriz. Por lo cual, nos demuestra la

importancia de la psicomotricidad en los primeros años de educación del niño tanto en

su desarrollo como en la inteligencia motriz.

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3. Objetivos

Con la elaboración de este trabajo, se han planteado una serie de objetivos para

orientar el proceso de elaboración del mismo.

- Comprender qué es el trastorno del desarrollo de la coordinación y sus

características más comunes.

- Conocer y describir los tipos de lateralidad y sus clasificaciones.

- Estudiar el influjo que tiene la lateralidad en el proceso de aprendizaje.

- Desarrollar un proyecto que, a través de la danza, contribuya en el proceso de

lateralización del niño.

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4. Marco teórico

Para realizar el marco teórico de este trabajo, como ya se ha expuesto

anteriormente, partiremos de la parte más general a la parte más específica sobre la que

se sustenta el trabajo, que en este caso es la lateralidad.

4.1 Trastorno del desarrollo de la coordinación

Este término se usa para describir las dificultades en el desarrollo de las destrezas

motoras. La bibliografía consultada nos revela que este trastorno aparece en un 5-6% de

la población infantil en edad escolar.

En nuestro entorno es poco frecuente su detección y diagnóstico, lo que hace que

muchos de los niños que poseen este trastorno no hayan sido definidos como tal.

El nivel de desarrollo de la coordinación puede darse tanto en los movimientos

gruesos como en los finos, estos pueden llegar a afectar a las actividades diarias y al

proceso de aprendizaje de los niños, por lo que es muy importante su detección. Este

problema puede observarse en distintos comportamientos como torpeza, dificultades

para diversas habilidades como escribir, hacer deportes, etc.

No todos los niños con trastorno del desarrollo de la coordinación presentan

características similares, sino que depende del grado de afectación que posean y si está

ligado a otro tipo de problema.

Partiendo de los autores que estudiaron la prevalencia de este trastorno,

encontramos que de entre ese 5-6% mencionado anteriormente, hay al menos un niño

por aula que presenta este desorden. La cifra varía del 1-15%, aunque la más fiable es la

que dice que aproximadamente un 50% de los niños con TDAH, trastorno del

aprendizaje y trastorno específico del lenguaje presentan también TDC (Appleton,

2007; DeLaat, 2007; Egan, 2008; Gaines, 2007; Gibbs, 2007; Macnab, 2001; Mandich,

2001; Miller, 2001; Missiuna, 2008; Polatajko, 2001; Pollock, 2008; Soucie, 2008).

A partir de estas investigaciones, se considera que este tipo de problemas de

coordinación motora provienen de alteraciones en el proceso cognitivo y perceptivo.

Igualmente, parece encontrarse habitualmente en niños prematuros o de bajo peso.

6

Hablando de la detección, se quiere destacar que es muy importante el

descubrimiento de estos problemas desde edades tempranas. Esto es así, ya que el

problema puede ser abordado lo más anticipado posible y porque va a facilitar el choque

con otro tipo de problemas o trastornos. En el caso de que estos alumnos sean

detectados, la intervención que se llevará a cabo puede ser de dos tipos, centrándose en

los déficits subyacentes del procesamiento y facilitando el desarrollo madurativo o

adquiriendo destrezas y resolución de problemas funcionales.

4.2 Concepto de lateralidad

A lo largo de los años la definición de lateralidad ha ido enunciándose por muchos

autores y a su vez ha cobrado forma.

Partiendo de estos primeros autores, la definición de lateralidad es el dominio

funcional de un lado del cuerpo sobre otro y se manifiesta en la preferencia selectiva de

un miembro determinado (mano, pie, ojo y oído) para realizar movimientos o

actividades (Conde y Viciana, 1997; Defontaine, 1981; Le Boulch, 1976; Rigal, 1979).

Acercándonos a la etapa actual y a los autores más recientes, tomaremos como

referencia a Romero (2000), que define la lateralidad como una influencia de un lado

sobre otro para realizar ciertas acciones, es decir ‘‘el predominio de un lado del cuerpo

sobre otro a la hora de realizar ciertas acciones motrices, por la dominancia del

hemisferio contrario al de uso, y como consecuencia de la maduración del sistema

nervioso y de la experimentación’’.

Del mismo modo, el concepto de lateralización es el curso que se sigue para

definir la lateralidad, es decir, ‘‘el proceso que experimenta el niño en el tiempo, con el

uso de uno u otro segmento corporal con mayor o menor preferencia hasta que aparece

definida la lateralidad’’. Señala ante todo que en este proceso se llegará a la

conformación de la lateralidad y que se prolongará de los 0 a los 6-7 años, aunque se

define entre los 4-5 años.

Por otro lado, hay autores que establecen conceptos similares de la lateralidad

como Ortigosa (2004) y García (2007), que explican que siempre hay una

predominancia sobre un lado del cuerpo y que el cerebro se encarga de llevar a cabo

cualquier tarea con esa parte que es la que más utilizará, debido a que la otra actúa solo

como complemento.

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Para finalizar, autores como Burt (1973), Ferré (2000) y Rodriguez Boggia

(2006), dan definiciones al concepto de lateralidad y lateralización similares a los

anteriores, ya que se puede comprobar como desde hace años viene significando lo

mismo. Estos, explican que ‘‘la lateralidad es el predominio relacionado con las partes

del cuerpo, que integran sus mitades derecha e izquierda y que son la consecuencia de la

distribución de funciones que se establece entre los dos hemisferios cerebrales, el

derecho y el izquierdo’’.

A medida que pasa el tiempo, se van añadiendo aportaciones de distintas personas

y argumentando en mayor medida el mismo concepto pero más desarrollado.

4.3 Influencia de la lateralidad en los problemas de aprendizaje

Los niños deberían tener como ya he mencionado anteriormente, una lateralidad

homogénea, ¿esto qué quiere decir?, que todo un lado del cuerpo predomine sobre el

otro en su totalidad. Si la lateralidad no se desarrolla correctamente, se producirá en la

persona una mala lateralización, la cual se convertirá en no homogénea y podrá afectar a

su aprendizaje. Pero esto no se puede determinar desde edades muy tempranas, ya que

en Educación Infantil los alumnos van afianzando su lateralidad, lo cual hace que a

partir de Educación Primaria se determine si un alumno tiene la lateralidad

correctamente establecida.

Todo esto viene dado por los hemisferios cerebrales, puesto que cada hemisferio

predomina en un tipo de función. Si estas funciones se ven alteradas en su desarrollo, se

producirán perturbaciones que influirán en el aprendizaje. Las disfunciones del

hemisferio izquierdo alteran a las habilidades lingüísticas, por ello han sido las más

estudiadas.

En cuanto al hemisferio derecho, hablamos de disfunciones asociadas al

razonamiento, lectura, escritura o aritmética. Estas suelen darse de una manera más

leve, ya que maduran más tarde y sus signos se manifiestan posteriormente.

Teniendo en cuenta este tema que abarca la importancia de que cada hemisferio se

encargue de sus tareas y las desempeñe de la manera correcta, se puede nombrar a

Brocca (1865), que descubrió el centro del habla y los dos hemisferios en los que se

divide el cerebro. Se basaba en que siempre existía una predominancia de uno de los

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dos, que resultaba más importante que el otro, es decir que asumía el control, el restante

tenía funciones subalternas.

La cuestión en la que se profundiza sobre este tema es: ‘¿Se pueden prevenir los

problemas de aprendizaje? Lo más importante para prevenir estas dificultades, es su

diagnóstico prematuro, ya que cuanto antes se detecte, antes se podrán tomar medidas

sobre la situación. A partir de este diagnóstico, se planteará la terapia que puede ser

aplicable para esa persona, para reforzar las áreas en las que sufra algún tipo de carencia

y así poder resolver el problema desde su base.

Otros autores como Piaget (1984), Nettle (2003) o Boltanski (1984), mencionan

que la inteligencia no tiene nada que ver ante algunas dificultades en la adquisición de

la lectoescritura, sino que se debe al retraso en la maduración nerviosa, estructuración

del esquema corporal o por problema de lateralidad cuando se dan rasgos de

cruzamiento o zurdera que puede dar lugar al fracaso escolar cuando no se da respuesta

frente a esta problemática.

Oña (2005), añade que en la actualidad la mayoría de los problemas relacionados

con la lateralidad son de ámbito social. Esto se debe a lo ya mencionado anteriormente

sobre las sociedades para diestros. Cree que este problema social se debe a varios

hábitos como:

Mediante la lectura se han trasmitido muchos tabús en contra de los

zurdos. Como ejemplo, tenemos la biblia que en muchas ocasiones ensalza a la

mano derecha.

La escritura occidental está pensada para diestros, ya que los zurdos

tienen varios problemas a los que enfrentarse a la hora de escribir de esta

manera:

No ven lo que van escribiendo en el papel.

Pasan el puño o la mano por encima de lo escrito, produciendo así

que en muchas ocasiones se les ensucie o emborrone lo que ha escrito.

4.4 Tipos de lateralidad

En cuanto a los tipos de lateralidad, existen muchos autores que han conformado

sus propios términos y definiciones, pero en este caso me centraré en la clasificación de

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Romero (2000), ya que los organiza en varios tipos y los define para su perfecta

comprensión. Además a la lateralidad integral y la no integral, añade algunos subtipos.

Dentro de esa clasificación encontramos los siguientes puntos:

a) Lateralidad espontánea: parte de las acciones espontáneas y se relaciona

con actividades de control postural.

b) Lateralidad de utilización: uso y predominio de una de las partes del

cuerpo en las acciones del día a día.

c) Lateralidad integral: predominio de una de las partes del cuerpo sobre la

otra.

Dextralidad: predominio del oído, mano, pie u ojo derecho por el

predominio del hemisferio izquierdo del cerebro.

Zurdería: predominio del oído, mano, pie u ojo izquierdo por el

predominio del hemisferio derecho del cerebro.

d) Lateralidad no integral: no hay predominancia exacta de una parte del

cuerpo sobre otra.

Lateralidad invertida: preferencia de la mano derecha en niños

supuestamente zurdos, debido a la obligación dada.

Ambidextralidad: no existe una predominancia manual hasta el

proceso de lateralización.

Lateralidad cruzada: domina la mano derecha y pie izquierdo, y

dominancia de mano derecha y ojo izquierdo o viceversa.

Aunque partamos de este autor aparecen en la búsqueda de los tipos de lateralidad

otros puntos de vista que no debemos dejar atrás, ya que tienen bastante relevancia.

Algunos hallan una correlación entre todos los tipos de lateralidad y diversos

trastornos del aprendizaje. Autores como, Pellicer (2000), Fernández (2008), Mendrano

(2011), o Guardado (2014) nos indican que algunos trastornos de lateralidad darán lugar

a dificultades en la lecto-escritura y pueden afectar al futuro escolar de los niños. Lo que

sí hay que tener en cuenta es que se recalca que existe una relación directa entre la

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lateralización cerebral del lenguaje, la mano dominante para la escritura, y la

compresión lectora (Guardado, 2014).

De esta forma consideramos que gracias al proceso de lateralización, desde

pequeños podemos alcanzar la confirmación de nuestra lateralidad. Según dice Oña

(2005), este proceso tiene una base neurológica, ya que se basa en la maduración del

sistema nervioso, lo que quiere decir que domina un hemisferio cerebral sobre otro

como se explica en apartados anteriores.

Olivares-García et al. (2005) concluye que algunas investigaciones relacionan la

dominancia auditiva izquierda con la dislexia en niños diestros de distintas edades.

4.5 Importancia en las etapas prelaterales

Aunque la lateralidad y la lateralización tienen total importancia para el desarrollo

del trabajo, no se deben olvidar otros puntos imprescindibles como las etapas

prelaterales, ya que tienen una misión trascendental en el desarrollo de la lateralidad y la

evolución del niño.

Para comenzar, se tratarán las fases en las cuales se produce el desarrollo de la

lateralidad, según Núñez y Fernández Vidal (1994):

Entre 0-24 meses: manifestación imprecisa.

Entre 2-4 años: definición con alternancia de las dos manos.

Entre 4-7 años: preferencia instrumental.

Entre 5-10 años: desarrollo de la lateralidad.

A parte de contar con las fases de desarrollo de la lateralidad, también podemos

hablar de las fases prelaterales y de su importancia para el desarrollo del niño.

Las etapas prelaterales son las etapas en las que el niño a través de los sentidos y

de los movimientos va activando los dos hemisferios cerebrales. Esto se debe a los giros

sobre ambos lados del cuerpo, al reptado y al gateo, ya que proporciona al niño el

establecimiento y descubrimiento de sus posibilidad respecto a sí mismo y al entorno. Si

este niño solo utiliza un lado del cuerpo, nos está indicando que puede que tenga

problemas para establecer la lateralidad en un futuro.

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Según Ferré (2008), Michel (2006) y Tyler (2006), en el desarrollo de la

lateralidad aparecen cuatro etapas prelaterales que se abarcan el periodo de 0 a 4 años

de edad.

1. Monolateralización: los niños menores de un año no poseen aún a esta

edad el proceso de lateralización, esto quiere decir que son ambidiestros.

2. Duolateralización: tiene su desarrollo óptimo entre los seis y el año, ya

que el niño aprende a usar partes de los dos lados del cuerpo. Todo este

proceso conlleva a que los niños comiencen a gatear y andar.

3. Contralateralización: esta etapa se prolonga desde el primer año de vida a

los 6 o 7, en los que se produce un funcionamiento coordinado de ambas partes

del cuerpo. Hay preferencias en cuanto a las partes del cuerpo, pero aún no

existe una dominancia.

4. Unilateralización: proceso final en el que ya se puede dar la

lateralización, ya que un hemisferio dirige la acción y el otro la apoya.

Lo que se quiere conseguir con todo esto es destacar la importancia de estas

etapas, ya que gracias a ellas desarrollamos y determinamos nuestra lateralidad, así

como la adquisición del dominio de nuestro propio cuerpo y de los órganos sensoriales

que lo componen. Con estas fases se pretende alcanzar una buena coordinación y

especialización lateral.

4.6 Factores que influyen o determinan la lateralidad

En este apartado tendremos en cuenta la obra de Rigal (1987) ‘‘Motricidad

humana’’, ya que considera que no hay ninguna teoría absoluta sobre la lateralidad, sino

que esta se ve afectada o determinada por una serie de factores.

Factores Neurofisiológicos: se basa en los dos hemisferios cerebrales y la

predominancia de uno sobre el otro. Esta dominancia, se debe a un mejor

funcionamiento y uso de uno frente al otro, lo que dará lugar a la lateralidad.

Factores sociales: muchos factores de origen social puede condicionar la

lateralidad del niño, entre ellos se destacan dos:

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Significación religiosa: en la antigüedad forzaban a los niños a ser

diestros y no zurdos, porque consideraban que la mano derecha era

divina y pura, y la izquierda todo lo contrario.

El lenguaje: si tenemos en cuenta el lenguaje hablado, el término

diestro siempre se ha relacionado con cosas buenas. Lo opuesto es

siniestro lo cual estaba relacionado con la izquierda. En cuanto al

lenguaje escrito, nuestra escritura se realiza de izquierda a derecha, de tal

forma que, el zurdo, tapa lo que va escribiendo y el diestro no, siempre lo

tiene visible.

Factores ambientales: algunos de los factores de origen ambiental puede

condicionar la lateralidad del niño, entre ellos destacan:

De ámbito familiar: como coger al bebé, mecerlo, como situarlo o

darle los objetos…

Acerca de mobiliario y utensilios: la mayoría de materiales están

adaptados para diestros, lo que hace que los niños mal lateralizados o

zurdos tengan mayores complicaciones para adaptarse.

Factores genéticos: la preferencia lateral, viene en la mayoría de los

casos determinada por la herencia, de tal forma, que, la lateralidad de los niños

vendría establecida por los padres. Zazo, determina que las lateralidades vienen

determinadas desde el nacimiento y no es una cuestión de educación, sino de

genética y herencia, como ya se ha mencionado anteriormente.

La lateralidad, como ya hemos mencionado anteriormente no sólo está definida

por la mano con la que realizamos todo tipo de actividades, sino que también es un

predominio de una parte del cuerpo sobre otra. Monge (2000), aparte de tener en cuenta

todos los factores influyentes anteriores, estudia la lateralidad sobre factores

anatómicos, fisiológicos, neurológicos y de la conducta, para aportar otro enfoque

diferentes motivos que influyen en la lateralidad de las personas.

Otros autores como Ferré o Catalán (2000), aportan su ampliación a la teoría de

Rigal y destacan que los factores que intervienen en el desarrollo de la lateralidad son:

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La información genética: afirman que la construcción de la lateralidad

tiene influencia genética, aunque no exista ningún dato concreto. A su vez, hay

que tener presente a los niños que nacen con hermanos mellizos o gemelos, ya

que el medio familiar es distinto al no tener hermanos de la misma edad o

tenerlos más mayores o pequeños.

Los condicionantes afectivos: los niños y las niñas siempre son

influenciables y buscan un modelo a seguir, por lo tanto los autores dicen que

es importante la parte emocional y afectiva desde edades muy tempranas para

su desarrollo adecuado.

La influencia física del entorno: el entorno del que se rodean,

recapitulando distintos aspectos, está adecuado más para personas diestras que

para zurdas.

Los factores educativos: los niños antes de comenzar la etapa de

Educación Primaria, tienen que definir su lateralidad.

4.7 Sintomatología, detección y diagnóstico

Los síntomas frecuentes que aparecen en caso de que falle la organización

lateral son muy variados, entre ellos destacan:

Alteraciones en procesos de integración y ordenación de información.

Problemas psicomotrices.

Inestabilidad.

Irritabilidad o problemas de relación con compañeros.

Asimismo, las características o indicadores que nos puedes llevar a pensar que un

niño tiene un problema de organización lateral son:

Velocidad comprensiva y lectora lenta.

Confusión derecha-izquierda.

Nivel de comprensión oral mayor que en el escrito.

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Problemas en la orientación temporal.

Dislexia, disgrafía…

Todo esto tiene una relación directa con el apartado de problemas en el

aprendizaje, ya que estas situaciones o características destacadas anteriormente, pueden

llegar a crear una gran desmotivación en el niño y lo puede llevar a un fracaso escolar o

a un rechazo directo hacia las tareas escolares y todo lo que tiene que ver con ellas.

En cuanto la detección y el diagnóstico de los problemas en la lateralidad, hay que

tener en cuenta que la primera forma que existe de evaluación de la lateralidad es la

observación directa. Para ello, se debe examinar la conducta motriz desde edades muy

tempranas para que en el caso de que surja alguna complicación se detecte cuanto antes.

Los encargados de esta observación, serán los profesores y los padres, tanto en casa

como en el colegio.

En el caso de que con este método no se pueda obtener suficiente información

como para establecer un diagnóstico, existen otros como el mencionado por los autores,

Ferré, Casaprima, Catalán y Mombiela (2000), en el que establecen que para evitar

equivocaciones es imprescindible el uso de las respuestas manuales, ya que son tanto

más fiables cuanto más espontáneas sean (saludar, aplaudir…), y mucho menos fiable,

cuanto más influya en su desarrollo la cultura y el aprendizaje con instrumentos.

Otra técnica que proponen estos autores es la exploración directa, basada en

presentar al niño una serie de pruebas para comprobar cómo responde ante cada una de

ellas.

El último método es realizar un test de lateralidad completo, que nos aportará la

información necesaria y el diagnóstico preciso en cada caso. Una vez detectada la

situación, se iniciará una terapia de recuperación o un tratamiento dependiendo de la

valoración del profesional.

Teniendo en cuenta que estamos tratando el tema con alumnos de Educación

Infantil, lo más factible es usar el método de observación directa, basándonos en la

espontaneidad de los actos y acciones de los niños en su vida cotidiana.

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CL: Cociente de lateralidad

ND: Respuestas con la mano derecha

NI: Respuestas con la mano izquierda

Otros autores como Ortigosa (2004), plantea que antes de realizar al niño

cualquier prueba que tenga que ver con la lateralidad, se deben conocer una serie de

características:

El niño debe tener más de seis años. Si se realizase alguna prueba previa

a esta edad solo nos serviría para orientarnos sobre lo que puede desembocar

en el futuro.

Es imprescindible comprender la coordinación óculo-manual para evitar

en un futuro problemas en la escritura.

Es importante atender a la lateralidad ocular, manual y podal para asignar

la dominancia hemisférica.

Asimismo, en su estudio, determinó un indicador para la detección de la

lateralidad llamado cociente de lateralidad. Este, es el resultado de restar las pruebas de

la parte derecha de las de la parte izquierda entre la suma de las situaciones, y a

continuación multiplicarlo por cien. En el caso de que el resultado sea positivo, el niño

es diestro y cuando es negativo, el niño es zurdo.

La fórmula de este cociente de lateralidad es:

𝐶𝐿 =ND − NI

ND + NI 𝑋100

4.8 Direccionalidad y dominancias

La direccionalidad es la capacidad que tiene el individuo para interpretar las

direcciones de derecha e izquierda en el espacio. Hay que saber identificar el concepto

de la lateralidad, ya que esto hace referencia a la conciencia de identificar la izquierda y

la derecha, y sin embargo, la direccionalidad es el usar todos estos conocimientos para

poder organizar su espacio exterior. Esto quiere decir que cuando el niño ha tomado

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conciencia de la lateralidad de su propio cuerpo, está listo para proyectarlo hacia ese

espacio externo.

Según Condemarín (1996), el organismo tiene una naturaleza bilateral simétrica y

está neurológicamente diseñado para construir un punto de referencia para el desarrollo

de nociones espaciales. Únicamente, mediante la experimentación con ambas partes del

cuerpo y sus relaciones, el niño llega a comprender y a distinguir ambos sistemas, el

derecho y el izquierdo.

La lateralidad es la dominancia de uno de los hemisferios, por lo tanto estos dos

términos están íntimamente relacionados, por ello podemos decir que la lateralidad

también se relaciona con la direccionalidad.

La dominancia se puede considerar como el predominio de una parte del cuerpo

sobre otra o de un miembro sobre su simétrico. Se diferencia de la lateralidad en que la

dominancia se refiere a los distintos miembros y la lateralidad al cuerpo en su conjunto,

es decir, el predominio de un lado frente al otro. Esto viene dado por la supremacía de

un hemisferio sobre el otro, el cual tiene mayor capacidad para desempeñar actividades

o dinámicas motrices que el otro.

La lateralidad cruzada hace referencia a un predominio no homogéneo, es decir,

no existe una dominancia exacta y definida de uno sobre otro.

De acuerdo con Kephart (1960), lo anterior se confirma y plantea que la

lateralidad se relaciona con la direccionalidad. Esto se debe a que el niño debe proyectar

su imagen en las dimensiones derecha-izquierda en el espacio. Además, sugirió que

estas cualidades motrices deben estar correctamente establecidas, ya que constituyen la

base de la organización del mundo. Una deficiencia en la coordinación tiene muchas

posibilidades de dar lugar a una desorganización perceptual.

Contrastando los anteriores autores y comprobando sus investigaciones sobre los

tipos de dominancias que existen, he llegado a la conclusión de que se basan en los

sentidos (vista, oído), y en las extremidades.

a) Dominancia ocular: Dominancia o preferencia del uso de un ojo frente al

otro.

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Sensorial: el ojo que predomina en el test del filtro rojo. Este test

consiste en un conjunto de métodos para examinar la fusión del ojo.

Motora: ojo responsable de la localización espacial y la intensidad

del impulso nervioso.

Preferida: la que se elige inconscientemente.

b) Dominancia auditiva: Dominancia o preferencia del uso de un oído frente

al otro.

c) Dominancia manual: Dominancia o preferencia del uso de una mano

frente a la otra. La escogida, suele ser la que más destreza posee de las dos.

d) Dominancia pédica: Dominancia o preferencia del uso de un pie frente al

otro.

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5. La dominancia lateral y la orientación espacial

A continuación voy a proponer una serie de actividades para estimular el

desarrollo de la lateralidad y el establecimiento de la dominancia. En este caso, creo que

una intervención en el proceso de lateralización a través de la danza es una opción

divertida e original para llevar a cabo con los niños de edades más tempranas.

Para comenzar es imprescindible aportar algunos datos sobre la danza y de la

importancia que tiene con el desarrollo motriz y con el movimiento. Algunos autores

como Robinson (1992), entienden la danza como algo que permite al ser humano

expresar las ideas que han sido captadas por el espíritu y cualquier sentimiento que se

puede expresar a través de un gesto.

Centrándonos en las distintas formas de danza que existen, es importante nombrar

a Bucek (1992), que propone dos maneras de agrupamiento de los tipos de danza.

Por un lado nos presenta la danza espontánea, en la que el niño puede expresar sus

emociones y sentimientos para darle sentido a la realidad. Por otro lado encontramos

una danza formal, en la que el niño se limita a repetir o imitar los movimientos de un

guía o tutor.

En cuanto al papel que juega la danza en la educación, encontramos que a partir

del siglo XX distintos coreógrafos, bailarines y pedagogos defendieron su importancia

en la sociedad, ya que lo consideran una herramienta fundamental para el desarrollo

óptimo del alumno, entre ellos destaca Laban (1978).

Otro factor a tener en cuenta, es la influencia de la sociedad, ya que en muchas

ocasiones se considera como una actividad femenina, haciendo que los hombres lo

hayan comenzado a practicar más recientemente y que en muchas ocasiones sean

juzgados por ello.

La danza no se reconoce como materia de aprendizaje, esto es debido a que el

profesorado no tiene la formación necesaria y de que no existe un currículo específico

como tal para llevarla a cabo. Por ello, autores como Fuentes (2006), García Ruso

(1997) o Rizo (1996), insisten en que la danza es vital para el desarrollo de los niños, ya

sea física, afectiva o intelectual.

19

Desde el punto de vista intelectual, esta actividad se puede usar como aprendizaje

de aspectos variados como culturales, artísticos o sociales, pero también en el ámbito

espacial y temporal, ya que para realizar los distintos movimientos se necesita tener una

conciencia espacial para desplazarse.

Desde el social, favorece a la socialización entre los niños, ya que facilita el

contacto social debido al contacto corporal o a la coordinación grupal. Esto va

favoreciendo la comunicación y el contacto con otras personas y nos hace ser seres

sociables con ningún tipo de prejuicio.

En cuanto a los beneficios que produce en los niños, se destaca la oportunidad de

expresar y crear con el cuerpo, no sólo nos referimos en este caso a la danza como tal,

ya que en niños de edades más tempranas se pueden realizar juegos de expresión

corporal o de iniciación para trabajar el ritmo y la improvisación. Gracias a la danza, el

niño puede adquirir mayor conciencia y conocimiento sobre su propio cuerpo y sobre el

de los demás. Otro factor a destacar es que con el baile se ejercita y aumenta la

memoria, la conciencia auditiva y la memoria, lo que ayuda a los niños a incrementar su

atención y su rendimiento.

20

6. Propuesta de intervención

A raíz de todo lo comentado en el apartado anterior, se ha creado una propuesta de

intervención relacionada con la danza, destinada a mejorar o solucionar problemas

relacionados con la lateralidad. Esta propuesta no se pondrá en práctica en ningún

momento, pero si tendrá su fundamentación teórica con sus apartados determinados.

Con esto se pretende ofrecer una propuesta de intervención en el proceso de

lateralización, a través de una serie de sesiones que tienen como herramienta principal la

danza. Esta propuesta ha sido diseñada para alumnos de 2º ciclo de Educación Infantil.

Concretamente, para los niños de cinco años.

6.1 Temporalización

Este proyecto se llevará a cabo durante todo el curso escolar, realizando una

sesión mensual centrada en la danza para trabajar el desarrollo motriz. Las sesiones

podrán repetirse en el caso de no haber obtenido los objetivos previstos para las mismas

y en el caso de que exista alguna festividad como Navidades o la representación de final

de curso, se realizará sesiones diferentes en las que se trabaje el movimiento y la

coordinación (véase anexo I). Estas quedan estructuradas basándome en la organización

de Vaca (2008):

Momento de encuentro: presentación de materiales, explicación de la

sesión y asamblea.

Momento de construcción del aprendizaje:

Actividad guiada: actividad creada.

Danza libre: libertad de movimiento.

Momento de despedida: expresan las sensaciones que han tenido en esa

sesión.

6.2 Metodología

Para la creación de esta unidad he tenido en cuenta varios principios

metodológicos:

21

Principio de individualización: cada niño es único y tiene sus propios

ritmos de aprendizaje y sus limitaciones, por ello se debe respetar a todos y en

el caso de que haya que adaptar alguna actividad se hará.

Principio de globalización: los niños perciben la realidad de una forma

global, lo que hace que las actividades diseñadas tienen que partir de algo muy

genérico.

Principio de socialización: el ser humano es un ser social por naturaleza,

lo que hace que tenga un punto de vista propio.

A parte de tener en cuenta estos principios metodológicos, se empleará un

enfoque investigativo, esto quiere decir que el alumno no actuará simplemente

realizando la acción mandada o guiada, sino que debe ser el protagonista de su acción

motriz, utilizando su cuerpo acorde al ritmo.

6.3 Objetivos

El objetivo principal del proyecto será favorecer el proceso de lateralización, en

Educación Infantil, a través de la danza. Este objetivo será el general, pero a su vez

plantearé a continuación unos específicos:

Identificar la simetría corporal.

Manipular objetos para la realización de movimientos.

Realizar movimientos coordinados.

Disfrutar de la música y de la danza.

Ser consciente de la dominancia de una parte del cuerpo sobre otra.

6.4 Contenidos

Los contenidos están directamente ligados a los objetivos anteriores para poder

alcanzar lo que se propone.

Localización de las diferentes partes del cuerpo de uno mismo y de los

demás.

Situarse en el espacio y en el tiempo.

Realización de movimientos coordinados.

Disfrute por la música y la danza.

22

6.5 Evaluación

Aunque este proyecto no se lleve a cabo, la evaluación que se plantea está basada

en la observación directa durante todas las sesiones que se expondrán a continuación.

Además se puede plantear la opción de diseñar una tabla de evaluación para cada

una de las sesiones, para así comprobar la dominancia de cada alumno y sus progresos

(véase anexo II). La última sesión servirá para recoger toda la información que hemos

recapitulado anteriormente y con los datos que se obtengan se sacarán conclusiones

sobre la lateralidad de los alumnos.

6.6 Sesiones

A continuación se presentan algunos modelos de sesión que formarían parte del

proyecto anual.

1º Sesión: El cazador

En esta actividad se escogerá una música específica y cada uno de los alumnos se

colocará en un espacio determinado de la sala donde se lleve a cabo la sesión. El

objetivo de la música, es que los niños realicen movimientos libres para que

posteriormente, cada uno se coloque de manera individual frente al profesor. El profesor

comenzará a dar indicaciones orales sobre los movimientos que ellos tendrán que

realizar como: girar sobre sí mismo, una mano sobre una oreja/la otra, sacudir una

mano/la otra, saltar a la pata coja, etc. Una vez finalizada esta fase, los niños y el

profesor cantarán la canción del cazador y los alumnos tendrán que ir improvisando y

dramatizando las acciones del cazador.

Soy un cazador

no tengo miedo al león

mira cuantas flores

No le temeré......

le buscaré........

¡oh un árbol! ¡qué alto!

no puedo pasar sobre él

no puedo pasar bajo el

23

no puedo rodearlo

¿Qué puedo hacer?

TREPARÉ

(Los niños imitan con sus gestos la acción de trepar o pueden subir sobre las sillas o

bancos.....)

Soy un cazador..............

¡Oh un rio! ¡Qué largo!

No puedo pasar sobre él

no puedo pasar bajo él

no puedo rodearlo ¿Qué puedo hacer?

NADARÉ

- Soy un cazador........

¡Oh unas zarzas!

No puedo pasar sobre ellas

no puedo pasar bajo ellas

no puedo rodearlas

¿Qué puedo hacer?

(Vamos mencionando varios elementos hasta que se encuentra con una cueva)

¡Oh una cueva! ¡Qué oscuro está!

Entremos.

¿Qué tocamos?

Es peludo.

¡EL LEÓN! ¡HUYAMOS!

Paso otra vez sobre las zarzas, el rio, el árbol, la montaña y vuelvo a casa.

Objetivos:

Identificar las partes del cuerpo.

Realizar movimientos en secuencia.

24

Contenidos:

Identificación de las partes corporales.

Ejecución de diferentes movimientos de la manera adecuada.

Recursos y espacios:

Música.

El aula.

Temporalización:

Duración de 50 minutos aproximadamente.

25

2º Sesión: Pelota pie

Repartimos a cada alumno una pelota, una vez que todos tengan la suya realizarán

movimientos libres con ella mientras suena la música. Una vez que acabe la danza libre,

comenzará la guiada, en la que los niños colocará un pie encima de la pelota para

manejarla de adelante a atrás, derecha izquierda y en círculos. Primero, lo harán con un

pie y luego con el otro. La segunda dinámica guiada consistirá en que cada alumno

desplace el balón por la sala, primero con un pie y más tarde con el otro. Una vez que

todos hayan hecho las dos actividades, se les colocará por parejas para realizar pases al

ritmo de la música con un pie y luego con otro.

Objetivos:

Realizar movimientos guiados con ambos pies usando pelotas.

Coordinar los movimientos y asociarlos a la música.

Contenidos:

Concienciación de la lateralidad del pie.

Realización de movimientos con ambos pies mediante la utilización de

pelotas.

Recursos y espacios:

Pelotas.

Música.

Aula.

Temporalización:

Duración de 50 minutos aproximadamente.

26

3º Sesión: Danza a la tierra

Al comienzo de la dinámica, los alumnos tendrán un tiempo libre en el que

experimentarán con objetos como las pelotas y las cuerdas que más tarde se usarán en la

sesión con música.

Una vez que termine este tiempo, se colocarán al lado de ellos los materiales y se

comenzará con la danza en la que el profesor dará una serie de indicaciones mientras

suena la canción de ‘Madre Tierra’ de Chayanne. La sesión se dirigirá de esta manera:

Al ritmo de la música y en posición erguida, cogemos una pelota con una

mano y la arrastramos por el cuerpo comenzando por una pierna y pasando por

el pecho hasta el brazo. Posteriormente se realizará lo mismo pero con la otra

parte del cuerpo.

Continuamos colocando el balón en el suelo y pisándolo para hacer

pequeños círculos con cada uno de los pies.

Nos colocamos de rodillas y rodamos la pelota de una mano a otra por el

suelo.

Dejamos la pelota y cogemos la cuerda, la cual dejaremos estirada en el

suelo formando una línea que comenzaremos a saltar en zig-zag.

Agarramos la cuerda por un extremo y hacemos giros con un brazo para

posteriormente realizarlo con el otro.

Cogemos la cuerda por ambos extremos con una mano y damos círculos

frente a nosotros.

Con la cuerda agarrada por ambos extremos realizaremos unos saltos con

ambos pies y a continuación un pie primero y el otro detrás.

Para terminar con la danza se dejará la cuerda en el suelo para

balancearnos lentamente.

Durante toda la dinámica se seguirá el ritmo de la canción a través de los

movimientos para que aparte de desarrollar la lateralidad, sean capaces de asociar

sonido-movimiento.

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Objetivos:

Manejar los objetos y realizar diferentes movimientos con ellos y con el

propio cuerpo.

Asociar el sonido al movimiento.

Contenidos:

Manejo de los objetos con las manos y los pies.

Concienciación sobre la dominancia de una de las partes del cuerpo.

Recursos y espacios:

Pelotas y cuerdas.

Música.

Aula.

Temporalización:

Duración de 50 minutos aproximadamente.

28

4º Sesión: Danza de Lula le lula

Los niños se colocan en círculo y al compás de la canción comienzan a dar vueltas

caminando cogidos por los hombros de los compañeros, la primera parte de la canción

seguirán las agujas del reloj y luego al contrario. Después irán cambiando la forma de

agarrarse, de los codos, cintura, manos, etc. Esto se llevará a cabo la primera vez que

suene la canción, la segunda, el profesor irá dando indicaciones como: mano derecha en

la nariz, avanzamos hacia el lado izquierdo o el derecho, brazo izquierdo en nuestro

compañero, etc.

CANCIÓN : LU LA LE LU LA LE LU LA LU LA LE LU LA LU LA

LU LA LU LA LU LA LE ...(dirección agujas del reloj).

Cambio de dirección... LU LA LE LU LA LE LU LA LU LA LE LU LA

LU LA LU LA LE.

Una vez finalizada esta dinámica, procederemos a realizar una relajación haciendo

como que somos piedras de río en la que acompañados por música relajante les diremos

que se tumben con los ojos cerrados, comentándoles que son piedras y que se van

hundiendo más y más en el río. Cuando todos los alumnos lleguen ya al punto de

relajación ideal, la profesora irá tocándoles de uno en uno la nariz para que se coloquen

en su respectivo lugar en la fila.

Objetivos:

Recopilar todos los aspectos trabajados en las sesiones anteriores y ser

consciente de con que parte del cuerpo trabajan.

Realizar movimientos conscientes con cada parte del cuerpo.

Contenidos:

Realización de movimientos teniendo presente la lateralidad.

Asociación del movimiento con el sonido.

Recursos y espacios:

Música.

29

Aula.

Temporalización:

Duración de 40 minutos aproximadamente.

30

7. Conclusión

Ante todo, cabe destacar la importancia que tiene la lateralidad y de cómo puede

llegar a influir en el aprendizaje y desarrollo desde edades muy tempranas. Desde mi

punto de vista, es un tema que puede que muchas personas no conozcan y sobre todo

que no lo tengan en cuenta, pero debemos saber que es algo que puede ser un obstáculo

para el futuro de los niños.

En primer lugar, las dificultades que me han surgido al realizar el trabajo, se

basaban principalmente en la obtención de información correcta sobre el tema y

relacionarla directamente con los autores, ya que a pesar de que existen cantidad de

libros o artículos sobre ello, no todo estaba directamente relacionado con las

dificultades que esto puede conllevar a los niños desde muy pequeños.

Sí que es cierto, que casi toda la indagación sobre la lateralidad es de hace años,

ya que actualmente lo que encontramos son artículos digitales en revistas o páginas

web, pero el problema de estos, es que no tratan el tema en profundidad como se hacía

anteriormente. Un factor a tener en cuenta, es que existen muchos autores que tratan

cada punto del proyecto, pero no todos con la misma cantidad y calidad de información,

lo que hace que haya escogido los mencionados precedentemente.

Por lo que he observado durante la realización del trabajo y con la información

obtenida, pienso que es verdad que la lateralidad pueda influir en el aprendizaje de los

niños, ya que una lateralidad mal definida puede afectar al desarrollo motriz. Con todo

esto, me percato de que es imprescindible trabajar este ámbito con los niños desde muy

pequeños en casa y en la escuela. Debido a esto, es importante que los centros sepan

descubrir esta serie de dificultades, ya que es importante la temprana detección para su

resolución. Para ello, el colegio debe conocer cómo puede afectar esta clase de

dificultades en el desarrollo del niño y sobre todo de cómo solucionarlo.

En este caso en concreto, al no llevarlo a la práctica no puedo determinar como

hubiera concluido la propuesta de intervención realizada, pero sí puedo decir que me ha

resultado interesante plantear un reto como es el aplicar la danza o el movimiento como

posible solución a los problemas relacionados con la lateralidad. Escogí esta propuesta

porque descubrí información sobre clases de danza que mejoraban el ámbito motriz de

los niños desde muy pequeños.

31

En definitiva, considero que en un principio no era un tema que me causaba

mucha motivación, pero una vez tratado pienso que es un aspecto interesante a estudiar

y analizar, ya que es algo que se trata por encima en muchas ocasiones y a veces es

importante indagar en el tema para poder conocerlo con mucha más precisión. Todo

esto me conlleva a afirmar, desde el punto de vista como futura docente, que es un tema

que tanto padres como docentes deberían conocer, ya que puede aparecer tanto en sus

hijos como en sus alumnos, y así podrán averiguar cuando una lateralidad es cruzada o

está mal definida, así como han de intervenir en el caso de que los síntomas que

observen sean claros y concisos para poder establecer un diagnóstico claro y

solucionarlo de la manera adecuada.

32

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37

10. Anexos

Anexo I: Temporalización

Inicio de curso

Vacaciones de Navidad

Vacaciones de Semana Santa

Fin de curso

Días festivos

Propuesta de intervención motriz

Días de posible repetición de la sesión

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Anexo II: Tablas de evaluación

1º Sesión:

ACCIONES DERECHA IZQUIERDA

Gira sobre sí mismo

Colocaa la mano en la cabeza

Sacude el brazo

Sacude la mano

Salta a la pata coja

Toca con la mano…

Salta con el pie

2º Sesión:

ACCIONES DERECHA IZQUIERDA

Maneja la pelota con el pie Pasa la pelota con el pie Realiza toques con el pie Desplaza la pelota con el pie

3º Sesión:

ACCIONES DERECHA IZQUIERDA

Coge la pelota con la mano Pisa la pelota con el pie Pasa la pelota rodando con la

mano

Pie con el que comienza a saltar

el zig zag

Coge el extremo de la cuerda con

la mano

Salta la cuerda con el pie Se Balancea hacia el lado

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4º Sesión:

ACCIONES DERECHA IZQUIERDA

Comienza la danza hacia el lado

Realiza el cambio de dirección

hacia el lado

Coloca la mano derecha en la

nariz

Coloca la mano izquierda en su

compañero

Se agacha con la pierna

Camina con el pie izquierdo

Camina con el pie derecho