Tesis 3-La Lucha Estudiantil-7 Congreso CJC

8/6/2019 Tesis 3-La Lucha Estudiantil-7 Congreso CJC

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Tesis 3: Las luchas de la juventud y el movimiento juvenil Tesis 2Tesis 4

ndice

y El papel de la juventud enla lucha por el socialismo y L as contradicciones en el seno dela juventud. y D esarroll ar el movimiento juvenil y su carcter reivindicativo. y L a intervencin dela juventud comunista enlos movimientos de masas. y G anar la conciencia dela juventud y L os frentes delucha prioritarios paralos CJC

o M ovimiento estudiantil o M ovimiento obrero y sindical o M

ovimiento antifascista o M ovimiento republicano o El movimiento de solidaridad internacionalista, antiimperialista y por la paz o M ovimiento feminista

y L a pol tica de alianzas. y El frente de Izquierdas y U na plataforma paraluchar por los derechos dela juventud.

E l papel de la juventud en la lucha por el socialismo

El debate acerca del papel de la juventud enla lucha por el socialismo no debe ser ajeno a

cualquier organizacin comunista que se precie.E n los ltimos tiempos nuestraorganizacin ha estado abordndolo en diferentes debates que abarcan desdelasignificacin del carcter juvenil comunista de nuestra organizacin hasta nuestra forma deintervenir enlos frentes dotndoles de esa perspectiva.

Cuandolas y los comunistas nos referimos ala juventud debemos de tener muy claro quedicha categor a, la de juventud, no esla categor a de una clase social, pero hablamos de unsector cuya procedencia de clase -familia, entorno- es heterogneo y dentro de estadiversidad de clase s encontramos unos ciertos elementos comunes que sonlos siguientes:

y U na personalidad en formaciny U

na conciencia de clase en formaciny U n cuestionamiento del funcionamiento de su entorno, tanto vital como pol tico.

y U na conf luencia en torno al ocio y/o alos centros de formacin.y U n tiempo de ocio amplio que permite desarroll ar actividades diversas.y U n futuro que amenaza ala inmensa mayor a con su proletarizacin y por tanto su

sometimiento a unas condiciones especficas mucho mayores de explotacin


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E stas caracter sticas hacen quela juventud como sector social sea fcilmente movilizable yque juegue un papel activo en diversos tipos de asociacionismo de carcter juvenil,deportivo, estudiantil, ongs, pol tico, cultural. E sto configura quela juventud sea unafuerza social capaz de establecer una cultura propia, hace quela juventud sea un sector social que tiene un papel muy importante en el desarrollo de nuestro proyecto histrico,la

juventud debe incorporarse al

desarroll

o del

mismo de una forma activa para asegurar su propio xito y continuidad y con ell o contribuir al asentamiento de unos valores nuevos quedeben caracterizar ala nueva sociedad.

Las contradicciones en el seno de la juventud.

G anar ala juventud no es slo uno delos objetivos de quienes queremos cambiar el actual estado delas cosas, sino que tambinlo es delos grandes poderes fcticos,la oligarqua ylos monopolios, que mantienen ala juventud alejada dela conciencia dela clase obrera para que no se cuestione el orden establecido.E ste proceso de impregnacin colectiva devalores del enemigo de clase en el seno dela juventud fomentala separacin dela juventud

como entidad grupalpara e

lcuestionamiento de

la rea

lidad.

Aunquela juventud no es una clase social como tal s que aglutina en su seno un ref lejo delas contradicciones del conjunto dela sociedad.E n el da a da se da unalucha de posiciones enla realidad concreta dela juventud, cuyo ref lejo superestructural resulta uncontexto en quelas ideologas de las diferentes clases dan su batall a por la hegemona deeste sector social. E n dicha batall a las posiciones dela clase obrera juegan tambin su papel.

E stas contradicciones que se dan en el desarrollo de la prctica diaria se expresan de unamanera especfica en el sector dela juventud.L os distintos grados de formacin de su

conciencia de cl

ase dial

cticamente articul

ados con su desarroll

o personal

,l

a inf l

uencia dela ideologa del enemigo de clase enla juventud -no siempre esla misma que en el conjuntode la sociedad-,la negacin del futuro yla necesidad de buscar salidas, son ejemplos decaracter sticas concretas quele dan esa cierta especificidad que hace quelas posiciones declase entrela juventud sean a veces muy variables y evolucionen de forma rpida.

L lamamos movimiento juvenil al desarroll o de estas contradicciones en el seno dela juventud en su prctica diaria enlos diferentes movimientos sociales. ste tiene unmovimiento quele es intr nseco: el estudiantil.

Adems de manifestar diferentes contradicciones que se dan de manera trasversal en otros

movimientos social

es, enl

os quel

a juventud coincide con otros sectores an manteniendouna prctica especfica enlos mismos.

Desarrollar el movimiento juvenil y su carcter reivindicativo.

Si queremos incorporar ala juventud alucha general por el socialismo y el comunismo,debemos de plantear la batall a para que seanlas posiciones dela clase obreralas que ganenhegemona entrela juventud, ganando su conciencia de tal forma que consigamos


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Saber transmitir nuestras posiciones al movimiento es vital. Para ell o es importante questas no estn alejadas delas capacidades reales del movimiento y que al mismo tiempole permitan avanzar.D e lo contrario, slo se beneficiar a al enemigo de clase, en el primer caso porque genera frustracin en el movimiento y en el segundo porquelo deja anclado ylo vuelve incapaz de cuestionar nada.

L levar el debate sobre el qu hacer? alos colectivos, ref lexionar conjuntamente acerca delo acontecido en el movimiento es vital. Tomar decisiones colectivamente enlaorganizacin esla mejor forma de dar respuesta a ese movimiento con una perspectiva msgeneral, conociendola realidad del resto delos movimientos.L a militancia debe asumir su papel recordandola disciplina que nos hace respetar y acatar los acuerdos delaorganizacin aunque estemos en minor a. D ebemos entender que en ltima instancianosotros somos militantes dela organizacin antes que de cualquier movimiento.

G anar la conciencia de la juventud

Ganar

la conciencia de

la juventud significa en

la practica ganar una hegemon

a en su senoen las tresluchas; econmica, pol tica e ideolgica. Ser capaces de convencer con nuestro

discurso es una batall a feroz para cualquier comunista, ya que en frente suyo est el sistemade dominacin del enemigo de clase, el cual combinala represin en sus diversasmanifestaciones conla hegemona ideolgica enla apariencia democrtica delos distintos problemas.U n comunista ganala conciencia dela juventudluchando en su seno, peleandoen esasluchas econmicas y ganando hegemona con el objetivo de, dialcticamente,aumentar la conciencia paralas luchas pol ticas.L as luchas econmicas a menudo son batall as interesantsimas desde el punto de vista del aprendizaje pol tico-ideolgico dela juventud y de nosotros mismos en su seno. Conquistar la confianza y respeto dela juventuddepender dela capacidad que tengamos para dar respuestas acertadas a sus problemas y de

que podamos convencer del

as mismas con cl

aridad.El ocio y el tiempolibre tambin son escenarios delucha que no podemos descartar, el favorecer espacios de diversin alternativos, culturales que cuestionen el orden establecidose torna muy importante.L a batall a frente alos medios de comunicacin de masas,la batall a frente al discurso hegemnico es para nosotros una dura batall a, pero disponemos desuficientes armas para combatir la. Participar enla organizacin delos viajes de estudios, participar de organizaciones deportivas, culturales, asociaciones de festejos etc es un punto a nuestro favor enla socializacin y sonlugares donde debemos de situar nuestraopinin.

Los frentes de lucha prioritarios para los CJC.L os CJC definimoslos siguientes seis frentes como nuestros frentes prioritarios ala hora dell evar a cabo nuestralucha diaria.E ntendemos que en este momentolos frentesfundamentales de trabajo que planteamos a continuacin, permitirnla unin de diversossectores dela juventud yla acumulacin de todas aquell as fuerzas que den un importanteimpulso a nuestro proyecto revolucionario.


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M ovimiento estudiantil

L os CJC entendemos que el movimiento estudiantil es prioritario, por ser propiamente juvenil. D ebe ser el frente donde redoblemos nuestros esfuerzos, con el objetivo de hacer surgir movimiento en todoslos centros de estudio donde nos encontremos. Nuestro objetivo

esl

uchar para crear l

as condiciones enl

as que el

estudiantado tengal

as herramientas paraorganizase yluchar por sus derechos.

Como ya hemos explicado enla tesis anterior,la educacin viene sufriendo enlas ltimasdcadas ataques directos por parte del capitalismo con el objetivo de someter la a los principios del mercado, negando su carcter de servicio pblico. Ante esto,los y lascomunistas nos marcamos como tarea fundamental concienciar a todo el alumnado ylograr la organizacin de ste en cada centro. An hoy, existe un gran desconocimiento delo quese nos viene encima conla aplicacin del EEE S y todaslas leyes quele han all anado el camino. Solo la movilizacin estudiantil podr frenar este acelerado proceso.

Nuestra historia ms reciente nos da a entender quel

as importantes movil

izaciones demasas del movimiento estudiantil, se han dado con cierto carcter espontneo. Y esto slose explica porque existe un gran malestar, una enorme inquietud todava desorganizada,teniendo esto presente se puede explicar que con apenas unll amamiento y algunos ncleosorganizados,las movilizaciones contrala LOU y la LO E , y recientemente contra Bolonia,tuvieran ese carcter de masas.

Por otrolado, los CJC entendemoslas dificultades que el movimiento estudiantil ha tenidohistricamente para organizarse de forma continuada en el tiempo.E n nuestro documentoPropuestas para el movimiento, elaborado como herramienta de trabajo en este ltimo periodo, definamos que el movimiento estudiantil tiene un comportamiento cclico, alternaetapas de frentica actividad con otras de mucha calma.E sto viene dado por la continuarenovacin de sus miembros y sobre todo por la carencia de organizaciones unitariasestudiantiles, que defiendan con discurso propiolos verdaderos intereses dela mayor a yque puedan ser la correa transmisora dela experiencia dela lucha enlas sucesivasgeneraciones.

L a socialdemocracialiberal del PSO E ha jugado un papel determinante enlas estrategiasdesarroll adas por el sistema para el debilitamiento delos movimientos de masas. Cada vezque el movimiento ha alcanzado cotas mayores en actividad y combatividad,laintervencin dela socialdemocracia ha sido fundamental para desactivar, desde unasupuesta posicin de izquierdas,las energas acumuladas.

Nuestra propuesta estratgica para el movimiento estudiantil es la Asamblea deE studiantescomo instrumentolegtimo dela organizacin estudiantil y sobrela que se debe articular el mismo, hay que trabajar por la participacin del estudiantado en estructuras de base.L aasamblea debe ser la forma a travs dela cual se articule la coordinacin entrelasdiferentes facultades, universidades o centros de estudios. Hay que participar o potenciar entodoslos lugares donde sea posible experiencias de asamblea concretas que promuevanlamovilizacin.


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Por su carcter abierto, transversal y unitario,la asamblea es una excelente estructura demasas desdela queluchar por los derechos del estudiantado.E stas caracter sticas, pese aser muy tiles para aglutinar ala juventud en momentos de grandesluchas, no consiguenmantener al estudiantado activo en el movimiento cuando este entra en depresin.E s por ello necesaria nuestra intervencin dialctica entrelas asambleas y asociaciones de centro

que permita superar esos cicl

os depresivos conl

a menor dificul

tad posibl

e y se consiga unatransmisin real de conocimientos, tanto prcticos como tericos, entre generaciones deestudiantes. A nivel de enseanzas medias esta necesidad es todava mayor.

D ebemos tambin aspirar a coordinar alas asambleas en todoslos niveles local comarcal regional, autonmico, estatal y supraestatal, para conseguir el ms amplio grado de unidaden el movimiento.

E ntendemos quela clave, el elemento central y el desarrollo del movimiento estudiantil sesita hoy en dar pasos haciala coordinacin estatal y en avanzar haciala unidad.El propiomovimiento tiene que ref lexionar sobre que su posibilidad de xito y grado de inf luenciaest estrechamente relacionada con el nivel y madurez de su unidad.D ebemos partir delaidentidad de intereses dela ampl sima mayor a de las y los estudiantes y superar el sectarismo que, desgraciadamente, todava arrastramoslas organizaciones juveniles.

Por todo ello proponemos que para ir caminando hacia una mayor unidad del movimientoestudiantil es necesario dotarnos de una CoordinadoraE statal del M ovimientoE studiantil que sea capaz de coordinar alas diversas organizaciones que tienen presencia en el movimiento estudiantil, tanto pol ticas como de estudiantes. Slo mediantela creacin deun espacio de coordinacin podremos establecer los primeros pasos que redunden en unamejor organizacin y refuerzo del movimiento y que confronten conla cada da mayor atomizacin y dispersin en el seno del mismo.

Por otrolado, hay diferentes territorios donde existen, y funcionan normalmente,coordinadoras de universidades y asambleas u organizaciones territoriales. D ebemostrasladar a estos espaciosla necesidad de no quedarnos a ese nivel, y dar el paso alacoordinacin estatal.

Como citbamos anteriormente,los CJC hemos de aprender all evar nuestrasreivindicaciones bsicas alos centros de estudio donde nos encontramos, tanto a nivel universitario, como de medias, o formacin profesional. Para ello, se ha de dar prioridad pol tica a este frente, tratandola intervencin de cada camarada en su centro de formacolectiva en cada colectivo de base, de tal forma que se planifique el trabajo y el o lacamarada no se encuentre a solas en esta importante tarea.D e igual forma,los CJC hemosde aspirar para este prximo periodo ala creacin de colectivos sectoriales en aquelloscentros donde se encuentren tres o ms militantes delos CJC, de manera que puedanespecializarse enlas reivindicaciones que el movimiento estudiantil requiere.

Para todo esto nos dotamos dela comisin central de movimiento estudiantil. E sta irmarcandolas directrices quelos diferentes colectivos han dell evar a cabo, como ha venidohaciendo en este ltimo per odo.E s importante incorporar alos cuadros del movimiento adicha comisin, pero es igualmente fundamental que todoslos colectivos, tengan militantes


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participando dela comisin o no, estn permanentemente atentos alas directrices queemanan de ell a, los ll even ala prctica e informen peridicamente, o cuandola comisinlosolicite, delos avancesll evados a cabo.

Finalmente, estas sonlas reivindicaciones delos CJC para el sistema educativo:

y E ducacin pblica:Para que el estado garanticela inversin necesaria en todoslosniveles educativos y se acabe conla precaria situacin delas aulas prefabricadas,infraestructuras insuficientes y materiales en mal estado. Para ello, exigimos unaumento del P.I.B. enla educacin.L uchamos para que se deje de financiar loscentros privados, concertados o adscritos con el dinero del pueblo. Fin delamercantilizacin dela educacin yla ingerencia en ell a del capital privado.El iminacin de acuerdos con fundaciones, patronales o empresas que profundicenen la privatizacin o mercantilizacin dela universidad, quela escuela no seconvierta en un negocio.

y E ducacin de calidad:Para que todoslos y las estudiantes gocen delos mejores profesionales y materiales en su educacin. No queremos escuelasdesinformatizadas,laboratorios precarios ylibros caducos.E xigimos una educacinms personalizada, que atienda alas necesidades de cada estudiante ylas de lasociedad ala que sirve de modo adecuado. Por el fin dela masificacin delas aulas.

y E ducacin democrtica: E n la que los y las estudiantes puedan tener representacin en igualdad de condiciones que otros sectores educativos(profesorado, padres o madres, o personal de administracin y servicios). Por lacreacin o consolidacin de instituciones educativas que sean transparentes y que practiquenla democracia directa, y enlas que el estudiantado tenga un pesodeterminante. Por una gestin paritaria y democrtica. As mismo,luchamos por el reconocimiento ylegitimidad del derecho ala asamblea, por la organizacin del estudiantado de una formalibre y autnoma, enla que la participacin, el debate yla accin sean pilares bsicos. Por que se reconozcala forma asamblearia deorganizacin estudiantil como inter locutor vlido, por el derecho ala huelga y el derecho a poder reunirse en horaslectivas. Por que el alumnado tengala posibilidadde eleccin sobrelos modelos de evaluacin.

y E ducacin gratuita:Que la educacin sea totalmente gratuita para todoslos y lasestudiantes sin excepcin de ningn tipo; gratuidad enla matr cula as como enloslibros de texto.E xigimos un aumento de becas a fondo perdido hasta poder asegurar, ya fuera del capitalismo, una educacin plenamente gratuita; que seanconstantes y no designadas de manera arbitraria.L as prcticas de FP y universidadse deber an realizar en empresas pblicas, siempre estar remuneradas y con el reconocimiento de sus derechoslaborales. As mismo, pedimosla eliminacin delas ayudas por ser vctima del terrorismo ylas ayudas a hijos de militares, personal de universidad, etc. que no hacen ms que crear desigualdades.

y E ducacin igualitaria:Para que puedan acceder a ell a, en todos sus niveles, lasclases populares sin restriccin ni excepcin. Por tanto, exigimosla retirada detodoslos mecanismos discriminatorios para acceder al derecho de estudio comolaselectividad olos exmenes de acceso ala FP superior y media habiendo cursadouna FP media o un PG S respectivamente relacionado con el estudio a realizar, o las pruebas propias de cada universidad para su acceso.E s imperante acabar conlas


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escuelas-ghetos que se forman enlos barrios ylocalidades ms pobres y queempujan a miles de hijos dela clase obrera a un futuro incluso peor que el de sus padres i madres. No ala discriminacin de gnero, clase, cultura o discapacidad.Que se respetela identidad cultural y lingstica delas diferentes naciones del estado espaol y se potencie su conocimiento.E ducar para el fin a la cultura del

patriarcado.y E ducacin laica: L uchamos por una enseanza cientfica y materialista, dondelareligin no tenga ms cabida quela de su conocimiento como elementosociocultural y no como doctrina. Separacin tajante entrela Iglesia yla escuela.Tampoco queremoslas alternativas que escondan implantar los mismos valores quela moral cristiana.

y E ducacin crtica: E n la que los contenidos o planes de estudio se decidan de unaforma colectiva y social y no por empresas o multinacionales; enla que existan programas culturales interdisciplinares. No queremos una educacin que solo nossirva para nuestros futuros puestos de trabajo. Por una educacin integral, que nosforme como personas y no como mercancas, con actitudes de solidaridad, decr tica, de formacin, de interculturalidad, por una sociedad justa, que aportelosinstrumentos para pensar, analizar, interpretar E xigimos poner fin alas agresionescontralas carreras de humanidades que nole hacen servicio al capital. L uchamos por nuevos mtodos pedaggicos y de evaluacin. Por una enseanza que vincule lateor a conla praxis.

y E ducacin popular: E xigimos todala eliminacin delas divisiones ydesigualdades entre centros educativos. No ala autonoma de los centros queleshace caer enlas leyes del mercado yla privatizacin. Fin dela competencia entrelas universidades y escuelas. No queremos universidades o escuelas de primera, para los hijos dela burguesa, y de segunda, paralos hijos de trabajadores.E xigimosla eliminacin inmediata de todoslos centros privados y concertados ytransformar los en pblicos.L a elitizacin es un cncer que hay que eliminar pues esel causante delas desigualdades educativas primero y sociales despus.L aeducacin debe estar al alcance, servicio y manos del pueblo.

y NO A LA LOE, LOU Y E L EEES : E n tanto queleyes al servicio delosempresarios y que confrontan conlos intereses delos estudiantes.E xigimoslaretirada inmediata de estasleyes as como los reales decretos quelas ponen enmarcha y que se abra un profundo debate social en el conjunto dela poblacin sobrela educacin.

E l movimiento obrero y sindical.

L os CJC hemos tenido grandes dificultades enlos ltimos aos para desarroll ar nuestrotrabajo dentro del movimiento obrero.E sto es debido a que un gran porcentaje de nuestramilitancia es estudiante, aunque hemos tratado de que el movimiento estudiantil se vinculea las luchas obreras.

E n los tiempos que corren es fundamental centrar nuestro trabajo dentro del movimientoobrero en caracterizar esta crisis del capitalismo y sus consecuencias, de manera quelaclase trabajadorall egue a entender quelos problemas laborales enlos que ahora se vesumergida no son por un fallo puntual, sino que es una crisis estructural de este sistema


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econmico, que se vienen repitiendo alo largo de su historia, y que no se pasar conlas tressoluciones emanadas desde el gobierno.

L a situacin de precariedad que se haba normalizado dentro dela juventud se ha extendidoal conjunto dela clase trabajadora enlos ltimos meses, agudizndose an mslas

condicionesl

aboral

es del

as yl

os jvenes. Como ya hemos anal

izado anteriormente,l

astasas de paro y temporalidad son muy altas parala juventud. Se aumentala competencia para los escasos puestos de trabajo, por lo quela patronal se da el lujo de recrudecer lascondicioneslaborales.

Frente a esta situacinlos CJC nos marcamos unos objetivos parall evar a cabo por cadacolectivo de base, adems del trabajo que cada camarada ha de realizar en su centro detrabajo:

Tenemosla obligacin de trabajar en todoslos conf lictos laborales, ya sean a nivel local,regional o estatal. El apoyo expreso alas huelgas obreras u otro tipo deluchas que se den

producto del

as contradicciones entre capital

/ trabajo.E

sto debe impl

icar, siempre que hayauna huelga o una protesta obrera, una declaracin de apoyo ala huelga mediante todoslosmtodos que tengamos a nuestra disposicin.

Realizacin de campaas estatales o regionales, que consistan en peridicas jornadas osemanas delucha que sealen las verdaderas causas de esta crisis y pongan sobrela mesa alos cul pables, acercndonos alos ms daados por ell a. L os CJC tenemos que dirigirnos principalmente ala juventud trabajadora, conocer sus problemas, sus dificultades, comolesafectala precarizacinlaboral, la temporalidad, para poder incidir en ellos realmente, por loque se debe hacer un anlisis dela situacin en el territorio ala hora de planificar estascampaas.

Para la coordinacin de todo este trabajo nos dotamos dela comisin central demovimiento obrero,la cual ir marcandolas directrices adems de recoger las experienciasconcretas que se vayan dando en cada territorio.

L os CJC entendemos que, al igual que en el resto de movimientos,la lucha de cadacamarada en el movimiento obrero y sindical debe ser planificada colectivamente en el seno del colectivo.E s preciso analizar las condicioneslaborales de la juventud en cadaterritorio y en cada centro de trabajo para definir cual es el espacio donde debe situarse unmilitante delos CJC con ms capacidad de intervencin, ya sea el sindicato, plataformas oasambleas de trabajadores, asambleas de paradas y parados, plataformas contrala crisis y/ocontrala caresta de la vida; o si conviene impulsar la formacin de tales entidades para dar una respuesta colectiva y unitaria ante el retroceso de derechoslaborales que impone este periodo econmico.

L os CJCluchamos por un sindicalismo de clase, reivindicativo y combativo, en el que laasamblea de trabajadores ylos representantes sindicales jueguen un papel determinante enla organizacin delas y los trabajadores y enla defensa de sus intereses como clase.U nsindicalismo de clase significa un sindicalismo que represente y defiendalos intereses delaclase trabajadora y que cuestionelos elementos bsicos dela explotacin Hemos de


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defender la democracia real en el funcionamiento interno de stos yluchar contrala burocratizacin y el aburguesamiento delos sindicatos de clase.

No reconocemos ni asumimosla falsa paz social, instrumento del capitalismo paramantener la

cal

ma social

y forzar l

a conformidad del

a cl

ase trabajadora para someter l

a ms, bajo unaapariencia de bienestar basado en bienes materiales a cambio de condicioneslaborales quese deterioran a pasos agigantados. Perola construccin del sindicalismo de clase va a ser una tarea dif cil.

Por todo ello, el eje reivindicativo delos CJC exige:

y D erecho al trabajo digno.y El cierre total de las E mpresas de Trabajo Temporal, prohibicin de stas y delas

subcontratas en el mbito pblico.

y Igua

l

acin del

as condicionesl

aboral

es, a favor del

as mejores, entre subcontratas yempresascontratistas.

y L a declaracin de indefinicin enla relacinlaboral de los trabajadoresencuadrados enlas diversasformas de explotacin: trabajadores sin contrato, trabajadores indefinidamentetemporales, falsosautnomos o subcontratados.

y Jornada de 35 horas mximo. No ala jornada delas 65horas.y Subida salarial lineal al coste dela vida.y Paridad trabajo-sueldo entre trabajadores, sea cual sea su gnero y nacionalidad.y Nacionalizacin o municipalizacin delos servicios pblicos fraudulentamente

privatizados con todolo que supone alos trabajadores en cuanto a percepcin desalario y derechos.

y Persecucin y represin real de los empresarios ylas empresarias que defrauden alaseguridadsocial.

y Subsidio de paro equivalente ala seguridad social y D eclaracin de relacinlaboral a las ll amadas becas y todolo que supone en

cuanto ala percepcin de salario y derechos, as como el fin de estos contratos de explotacinencubiertos.

y E xpectativaslaborales equivalentes al grado de formacin acadmica.y G estin por parte delos servicios pblicos de empleo dela insercin delos jvenes

en el mundo del trabajo e intermediacin pblica enlos contratos de trabajo.y Contrato fijo alos quince das por L ey.y Salario Social Bsico.y D erecho real a la organizacin sindical dentro delas empresas.y No al consenso instaurado enlas relacioneslaborales entrela patronal-gobierno y

sindicatosmayoritarios.


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y U nidad delas y los trabajadores frente ala patronal, mediante el sindicato ymediante otras plataformas que puedan surgir.D erecho real de organizar asambleas de trabajadorasytrabajadores.

y Defensa de

l

a negociacin col

ectivaE l movimiento antifascista.

El movimiento antifascista en el estado se encuentra, pese a desarroll arse de maneradesigual en los distintos territorios, en una etapa de avance, tanto cuantitativo comocualitativo.D e las consignas vacas de contenido pol tico, dela falta de organizacin, delahegemona de las posturas infantiles y ultraizquierdistas dentro de un movimientoantifascista sectario, avanzamos haca un movimiento antifascista slidamente organizadoincluso estatalmente, con un carcter popular y de masas, heterogneo y combativo.E stedesarroll o se debe, sin ninguna duda, al aumento dela inf luencia delas y los comunistas enel movimiento, que ha dotado al movimiento antifascista dela maduracin pol ticaadecuada para hacer de este una herramienta efectiva de confrontacin y delucha contra el nazi-fascismo, en todoslos mbitos enlos que se encuentre.

E n ese sentido,los Colectivos de Jvenes Comunistas hemos avanzado internamente, conlaconstitucin dela Comisin Antifascista en el seno del Comit Central de nuestraorganizacin, que en este ltimo periodo se ha centrado en una primera fase de elaboracinterica, conla redaccin de una serie de documentos con el objetivo de caracterizar el fenmeno fascista en trminos generales, y el fascismo espaol en concreto, y situar unaserie de directrices para el trabajo. Para este prximo periodo hemos de fortalecer estacomisin de manera que fortalezca de forma efectiva el trabajo delos colectivos de base enlos espacios que participen.

D e la misma manera,los CJC hemos venido aumentando nuestra implicacin en el movimiento antifascista en diversas plataformas o coordinadoras, incluso siendo creadoresde la misma en algunos territorios. Actualmente, nuestra principal tarea esla apuesta por lacoordinacin antifascista estatal, sin olvidar la provincial y la local, y organizar el movimiento enlos puntos del estado donde este se encuentre desorganizado. A este nivel,los CJC hemos participado activamente delos primerosE ncuentros AntifascistasE statales.Seguiremos avanzando porque estos encuentros vayan siendo cada vez ms decoordinacin y no solo de debate.

Contra el movimiento antifascista de todo el estado se dirige, de una manera cada vez msferoz,la represin brutal de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del E stado.E n ese sentido,debemos de apostar en este terreno por la creacin de un espacio unitario en el que tratar las problemticas relativas ala represin y desde el cual construir un movimientoantirrepresivo que cuente conla capacidad suficiente para hacer frente alos ataquesfrontales del estado burgus; dela misma manera, debemos ser capaces, mediantelaformacin previa, de desenvolvernos y saber actuar correctamente cuando nuestramilitancia es el objetivo principal de esa represin.


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Por todo ello, las propuestas delos CJC para el movimiento antifascista son:

y P or un antifascismo unitario: E n pos dela capacidad aglutinadora del movimientoantifascista y de su intr nseca pluralidad, los CJC apostamos por mantener lamxima unidad posible en el movimiento, pues es su razn de ser. Consideramos

quel

as coordinadoras, pl

ataformas y col

ectivos antifascistas, como parte del

movimiento que ya ha adquirido conciencia dela necesidad que esla organizacin,debe de analizar y asimilar cual es el estado de maduracin pol tica enla que seencuentra su base social, con el objetivo de no quedarse rezagado cuando el movimiento madure pol ticamente, nilanzar consignas incomprensibles parala basedel movimiento, suponiendo ambas circunstanciasla ruptura interna del antifascismo. Por ello, los CJC apostamos por un movimiento antifascista unitario,que recoja todaslas sensibilidades que se reclaman del antifascismo y trabajan a sufavor, puesla ruptura interna del movimiento esla antesala de la atomizacin del mismo.

y Coordinado estatalmente:Como sealbamos anteriormente,la organizacin esuna necesidad, y cada vez ms patente. Teniendo como marco de actuacin todo el E stadoE spaol (que en todos sus territorios comparte unas caracter sticas jur dico-administrativas y una misma problemtica, as como las organizaciones fascistasque existen en todo el estado),se hace necesaria una coordinacin a nivel estatal quesuponga un punto de encuentro entrelas diferentes coordinadoras, plataformas ocolectivos donde se intercambien experiencias, informaciones y se centralice decierta manera el movimiento. Adems, es necesario fomentar la coordinacinlocal y territorial con el mismo criterio de fondo quela estatal adaptada alas peculiaridades delas distintas nacionalidades del estado.

y Combativo: L as bandas nazi-fascistas, como elementos mas reaccionarios yviolentos del capital financiero, hacen uso cada vez mayor dela brutalidadcontrarrevolucionaria, aumento que se da paralelamente, y con una estrecha relacina la acumulacin de fuerzas delos sectores dela izquierda revolucionaria. Ante estehecho,los CJC reivindicamos un antifascismo combativo, que no claudique antelasdiferentes presiones(mediticas, represivas, judiciales) recibidas por parte del estado burgus,(que mantienelatente el franquismo, al no haberse producido en el aparato jur dico-administrativo una depuracin delos elementos provenientes deladictadura franquista),un antifascismo consciente dela crudeza dela lucha contra el fascismo, un antifascismo dispuesto a no ceder jams antela violencia fascista, ydispuesto a hacer uso dela legtima autodefensa.

y P opular y de masas:Con el objetivo de aumentar la pluralidad dela base social del antifascismo organizado, ste debe hall arse ntimamente relacionado con otrosfrentes de masas, evitandolas actitudes sectarias e infantiles del antifascismo pocomaduro pol ticamente.E s por eso que para desarroll o del antifascismo en el estado,es necesaria su relacin con otros movimientos populares tales como el republicano,el feminista, el antirepresivo y otros tantos movimientos que existen en segn queterritorios, traducindose esto en un aumento de su rea de inf luencia y de suimplantacin social. An a pesar dela voluntad aglutinadora del antifascismo, steno debe dejar de denunciar el papel permisivo, cuando no colaborador, que juegalasocialdemocracia respecto alos grupos nazi-fascistas. Por ello los CJC apostamos


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por un movimiento antifascista no endogmico, sino popular y de masas, que seencuentre dispuesto a nutrirse de otros movimientos sociales y vincularse a ellos.

y Asambleario: El mtodo de toma de decisiones mas apropiado para el movimientoantifascista organizado es el asamblearismo, pues facilita la intervencin de todoslos colectivos o individualidades (teniendo especial cuidado con estas ltimas) enla

toma de decisiones. Por ell

o,l

os CJC trabajamos por un movimiento antifascistaque se organice mediante el asamblearismo, pueslo consideramos garanta deunidad.

E l movimiento republicano.

El movimiento republicano ha pasado por muy diversas fases desde, y a consecuencia de,lafalsa transicin haciala democracia. Conla reconciliacin nacional, las republicanas yrepublicanos asumieron el mantener la idea dela repblica como mera ilusin, recordandola II Repblica en privado. Sin embargo, con el paso del tiempo, se ha comprobado que el sistema al que se dio paso no era muy distinto al anterior, y que el rey s que era el continuador delos principales valores de aquel.

Poco a poco, el movimiento republicano ha ido despertndose y comprendiendolanecesidad de salir a la call e. Se comenz conla lucha por la recuperacin dela memoriahistrica, hastall egar ala situacin actual, donde ya se reivindica sin tapujosla IIIRepblica.

L os CJC tenemos dos vas de lucha en el movimiento republicano. Por unlado la participacin enlas diferentes formas de coordinacin por la III Repblica, y por otroll evando a cabola tarea de dar a conocer nuestro proyecto estratgico ala juventud,laRepblica de carcter Confederal y Socialista.

El PCPE , y a su vezlos CJC, hemos participado dela tabla de ocho puntos que se haelaborado comola tabla de contenidos mnimos alas que se acogen todos aquell as formasde coordinacin queluchan por la III Repblica. E sta tabla de contenidos mnimos significuna distincin entre aquell as organizaciones que se haban estancado en el recuerdo dela IIRepblica, y aquell as organizaciones que ven ala repblica como un proyecto de futuro.

A raz de ah se crea una CoordinadoraE statal del M ovimiento Republicano, que realizaencuentros peridicos, y que se ha dotado de una comisin de trabajo, que supuestamentedeba dar continuacin al movimiento republicano fuera delas dos fechas conmemorativas:14 de abril y 6 de diciembre. Sin embargo, esta coordinadora realmente no est cohesionadani ha cumplido sus objetivos iniciales, perdiendo fuerza alo largo delos aos.L a divisinde la izquierda se deja ver con fuerza en este aspecto, de tal forma que en cada territorio sevive una realidad diferente del movimiento sin que se compartanlas experiencias.El trabajo realmente coordinado sigue resumindose enla preparacin del 14 de abril o el 6 dediciembre.

L os CJC trabajamos el movimiento republicano enla gran mayor a de nuestros colectivos.577.E s muy importante el papel que le corresponde jugar ala juventud enla lucha por laIII Repblica, pues sta no tienela conciencia de derrota quela transicin inculc en otras


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generaciones, adems de que en este sector cuesta msla justificacin dela monarqua,caduca parala poca actual. E s necesario aglutinar alos y las jvenes enla lucha por la IIIRepblica de una forma clara y directa.

E s fundamental que la juventud comunista sepamosll evar a aquellos espacios de

coordinacin donde trabajemos propuestas eminentemente juvenil

es, que saquen el

movimiento ala call e de forma permanente, fuera delas dos fechas citadas, para sacar alaluz las contradicciones dela monarqua par lamentaria yla tradicin dela que viene. Paraeste prximo periodo debemos centrar nuestra intervencin en este frente con este objetivo.

D e igual forma, es necesario seguir construyendo colectivos, plataformas de base, de barrio.L os CJC entendemos que estos espacios sonlos ms adecuados para crear el tejidosocial necesario quelogre organizarse por la III Repblica. Acercar estalucha alos problemas barriales acelerar el proceso de malestar general que se est despertando entrela poblacin del E stadoE spaol contra una monarqua impuesta que vive a todolujo acosta de nuestro trabajo, sin realizar ninguna tarea a cambio.

E sta lucha por la III Repblica no va en contraposicin ala lucha por la memoria histrica,aunque haya sido superadora de esta ltima.D esde los CJC creemos que tambin esnecesarioluchar para que no caiga en el olvido los cr menes que el franquismo causdurante toda su dictadura, y para que no se igualen las vctimas de ste conlos cados que pudieron haber del frente nacional. D ebemos participar, enla medida delo posible, en lascoordinaciones que se creen por la recuperacin dela memoria histrica.

Por otrolado, con respecto al proyecto estratgico delos CJC, y del PCPE , los CJCvenimos realizando diferentes campaas donde damos a conocer nuestra propuesta, conloslemas: Repblica de carcter Confederal y Socialista y Repblica, autodeterminacin ysocialismo. E s necesario hacer ll egar ala juventud revolucionaria nuestro proyecto en unlenguaje claro, de manera que sea accesible y logre el acercamiento de estos alos CJC.L aconferencia delos CJC sobre Cuestin Nacional ll evada a cabo en el 2008 fue unelemento fundamental a la hora de clarificar conceptos y dotarnos de nuevas herramientas para salir a la call e armados de nuestro proyecto.

E n este prximo periodo, debemos proponernos afianzar de una vez por todasla comisincentral de movimiento republicano, para poder hacer seguimiento de todas estas propuestas,adems de servir de apoyo alos colectivos de base dando directrices claras.

Resumiendo,las propuestas delos CJC para el movimiento republicano son:

y L a lucha por la Repblica de carcter Confederal y Socialista.y Superacin delas concepciones dela lucha por la repblica como rememoracin del

pasado.L ucha por la III Repblica.y Creacin de colectivos republicanos de base o de barrio.y D ar carcter juvenil a la lucha por la III Repblica, de forma que el movimiento se

salga de lasdos fechas tradicionales anuales, para convertirse en un movimiento continuado enel tiempo.


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y L ograr una coordinacin estatal real y no meramente de intercambio deexperiencias.

y No ala ley de punto y final ni a la nuevaley de memoria histrica. Reivindicamosnuestrahistoria y quelos criminales sen juzgados por sus ataques ala humanidadll evados a

cabo mediantel

as torturas, asesinatos, exil

ios, persecuciones y todo tipo devejaciones alas que fueron sometidoslas y los republicanos.

E l movimiento de solidaridad internacionalista, antiimperialista y por la paz.

D efinimos el imperialismo comola fase superior del capitalismo que responde alasnecesidades del capital de expandir sus fronteras alo largo y ancho del planeta paradesarroll ar un proceso de expolio y saqueo de todoslos recursos naturales y humanos delosque disponenlos pueblos agotado su proceso de conformacin y explotacin de mercadosnacionales.

E

n su fase actual

, el

capital

ismo se encuentra en situacin de crisis profunda.D

e ah

surecurso ala guerra y el reforzamiento delas estructuras e industrias militares como nicoscaminos vlidos parala superacin de su situacin de descomposicin.E sta apuesta por laguerra y el militarismo como nicas opciones posibles nos sita ante una situacin quehemos definido como de guerra permanente. Como expresamos enla anterior tesis, comoconsecuencia de esto nos encontramos con un amplio nmero de pases sometidos al imperialismo y / o en continualucha o resistencia ante l.

L a unidad antiimperialista se convierte enla herramienta ms importante de resistencia al capital de la que disponenlos pueblos y la solidaridad internacionalista conlas luchas deresistencia delos pueblos que sufren con ms intensidad todaslas formas posibles deviolencia del sistema, en una sea de identidad irrenunciable de la juventud comunista.

Ante esto,los CJC entendemos que es imprescindible reforzar el movimiento juvenil progresista enla lucha contra el imperialismo y por la paz. Para ello, a nivel internacional los CJC pertenecemos ala FederacinM undial de la JuventudD emocrtica (FM JD ),creada con el objetivo de conformar un frente mundial juvenil antiimperialista. A ell a pertenecen innumerables organizacin de muchos pases que coinciden en estas consignas,las cuales se renen con cierta periodicidad para intentar organizar campaas a nivel internacional, como pudo ser la de solidaridad conla KSM en este ltimo periodo, entreotras; campaa quelos CJC trasladamos al E stadoE spaol, con una recogida de firmas ycon la gira deM ilan Kragca.E sta federacin est cada vez contando con ms fuerza.E xpresin de ello es la capacidad de convocatoria paralos Festivales M undialesorganizados cada cuatro aos y enlos que venimos participandolos CJC.

L a participacin en este espacio tambin ha supuesto alos CJCla profundizacin enlasrelaciones con otras juventudes comunistas, fundamentalmente de nuestro entornoinmediato, organizaciones del contexto europeo, de manera que se han venido acercando posiciones, entre otros mbitos, enla lucha contra el imperialismo.U no de los objetivos para el prximo periodo debe ser profundizar nuestra participacin enla FM JD as como


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ser representantes delas posiciones ms revolucionarias, junto alas otras juventudescomunistas, dentro de sta.

E nmarcndonos en el E stadoE spaol, el movimiento antiimperialista se ha encontrado, yse encuentra, sujeto a una serie de f luctuaciones, provocadas generalmente por las

intr

nsecas contradicciones del

imperial

ismo,l

o cual

supone que no exista un movimientoantiimperialista realmente cohesionado y constante, sino que se den ciertos momentos puntuales de movilizacin, crendose plataformas que pasados unos aos caen en el olvido.E jemplos de estas movilizaciones puntuales pueden ser las ll evadas a cabo contrala guerrade Irak, o ms recientemente contralos ataques de Israel a Palestina, contando este ltimocon menor repercusin.

L os CJC nos marcamos como objetivo el lograr una coordinacin delos frentes unitariosantiimperialistas con permanencia en el tiempo, que no selimite a dar respuestas alasinquietudes que ciertos ataques ms descarados que otros despiertan enla mayor a de la poblacin, sino que haga un anlisis ms global, entendiendo el carcter general del imperialismo.

E n estos frentes unitarios juega un papel fundamental las fuerzas juveniles revolucionarias para hacer avanzar la lucha enla direccin del socialismo y del comunismo o, por el contrario, de conducir el discurso al campo dela socialdemocracia reformista que hoy entradentro delo pol ticamente correcto. Por eso es fundamental que la participacin delamilitancia delos CJC aumente enlas organizaciones de base dela solidaridad, donde atravs de nuestra intervencin cotidiana vayamos ganando hegemona entrelas y los jvenes organizados y junto al PCPE nuestras posiciones pol ticas vayan siendoreconocidas y asumidas por el movimiento.

L as expresiones de solidaridad conlos pueblos, sin embargo, siempre han tenido uncarcter mscontinuo, aunque tambin f luctuante en su capacidad de movilizacin.

Como organizacin internacionalista, entendemosla utilidad que suponela solidaridad real con los pueblos para el avance dela clase obrera ylos procesos revolucionarios.L osejemplos de solidaridad desdelas fauces del capitalismo son un pilar bsico paralaresistencia delos pueblos. E stas fueron unas enseanzas adquiridas enla I Brigada AntonioG ades delos CJC en Cuba realizada en el 2007, que se realiza con el objetivo de dar lecontinuidad en el tiempo, objetivo que se marca tambin para este prximo periodo.

D ada la dispersin delos movimientos de solidaridad, es necesario hacer una buena priorizacin y anlisis de nuestra capacidad de intervencin.

L os CJC situamos como elemento fundamental de nuestro internacionalismo la solidaridadcon Cuba y el pueblo cubano que ha sabido resistir ms de 50 aos alos taques del imperialismo.E n gran parte delos territorios del estadolos CJC participamos enlascoordinadoras y plataformas de solidaridad con Cuba, adems de participar activamente enla lucha por la libertad delos 5 hroes cubanos presos enEE UU ilegalmente. Hemos de


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seguir dandola batall a hasta quelos 5 cubanos queden enlibertad, reforzandola lucha quese estnll evando a cabo alrededor de todo el mundo.

L os CJC tambin participamos, y hemos de seguir participando, enlas coordinadoras o plataformas de apoyo al proceso bolivariano que se est dando en toda AmricaL atina y a

sus procesos revol

ucionarios. Adems de dar todas nuestras muestras de sol

idaridad al

os pases que se estn viendo atacados por el imperialismo para el robo de sus riquezasnaturales (como en el caso delos pases del M edio O riente entre otros) o parala represinde su legtimo derecho ala autodeterminacin (como en el caso dela histricalucha del Pueblo Saharaui entre otros). As como debemos mantener nuestro apoyo frreo alosdiferentes pases de orientacin socialista existentes enla actualidad.

E l movimiento feminista.

Como hemos definido enla la mujer joven la relacin entre hombres y mujeres y de estosante todoslos aspectos dela vida sigue estando basada enlos roles que el patriarcado ha

asignado a ambos gneros. Todo ell

oll

eva a situar al

a mujer en una posicin deinferioridad en todoslos mbitos, representndose enla actualidad en diferentes escalas.Podemos observar como entrela juventud estn resurgiendo ciertos aspectos que creamosya superados, dndose sobre todo enlas parejas jvenes, reproducindoselos roles de lafamilia patriarcal clsica.

Ante estolos CJC hemos situadola necesidad de un doble trabajo, uno hacialo interno yotro hacialo externo. Para ello nos hemos dotado de una comisin central, que trabajacoordinadamente conla comisin central del PCPE , para conocer los avances que vanll evando a cabo desdelos colectivos y emanar directrices segn sus necesidades.

Hacialo interno,los CJC entendemos que es necesario que el proceso revolucionarioincorpore una pol tica antipatriarcal. D ebemos dotarnos del feminismo de clase paralalucha cotidiana por la emancipacin dela mujer, dotndonos de una base terica y una prctica pol tica dondela lucha contra el patriarcado y contra el capitalismo se articule,convirtindose en una sola forma delucha. Hay que romper conla falsa concepcin de quesimplemente con el alcance del socialismo selograr el fin del patriarcado. Por eso,debemos trabajar por interiorizar lo.

Para ello, los CJC venimos realizando una serie de iniciativas como puede ser laincorporacin de char las o tall eres delos distintos aspectos a tratar dentro dela lucha por laemancipacin dela mujer, en todaslas escuelas, tanto estatales como regionales. D esde losinicios hasta ahora se ha notado el aumento del nivel en este tipo de debates del conjunto denuestra militancia.O tra iniciativa fuela realizacin de un cuadernill o de formacinespecfico de feminismo de clase. Hemos de continuar en estal nea, paralo que no podemos dotar delos anlisis quela comisin ha realizado sobrelas demandas y carenciasde los diferentes colectivos de base.

Hacialo externo,los CJC defendemosla participacin delos colectivos enlas plataformas,coordinadoras, etc, existentes enlos diferentes territorios.E stas son en su mayor a lideradas por la socialdemocracia, por lo que nuestra tarea ha de ser ll evar las posiciones


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revolucionarias dela lucha por la emancipacin dela mujer a estos espacios. A ser posible,hemos de ir superando estas estructuras donde nos queda poco margen de actuacin para ir creando nuevos espacios del feminismo de clase, en coordinacin con otras organizaciones,etc..

Por otrol

ado,l

os CJC hemos avanzado enl

a el

aboracin de campaas propias,normalmente en coordinacin con el PCPE . Adems de mejorar la cobertura del 8 de marzoy el 25 de noviembre,logrando dar ms contenido pol tico a estas fechas, se han realizadocampaas ajenas a estas fechas. Hemos de avanzar en estal nea en el prximo periodo, demanera que no solo salgamos ala call e para hablar de patriarcado dos ocasiones al ao.

Finalmente,las reivindicaciones delos CJC paralograr la emancipacin dela mujer son:

y D efendemos un feminismo de clase y combativo. Romper con el discurso delasocialdemocracia que defiende avances en estalucha mediantela modificacin deleyes.

y Es necesaria

l

a transformacin del

a famil

ia y acabar conl

os rol

es determinados para cada sexo para poner fin ala concepcin de superioridad del hombre frente alamujer, exigiendo este cambio en todo el sistema educativo ylos medios decomunicacin, confrontando directamente con el discurso dela Iglesia Catlica.Ell o ser a fundamental para acabar conla violencia de gnero. Se ha de garantizar la proteccin paralas mujeres maltratadas, as como su reeducacin yla de loshombres maltratadores.

y E s necesariala socializacin del trabajo domstico y el desarroll o de los servicios pblicos (red de guarder as pblicas, comedores municipales, espacios pblicosldicos para adolescentes ) que hagan posible la conciliacin dela vidalaboral yfamiliar en condiciones reales para quela mujer pueda incorporarse plenamente al mercadolaboral y a la vida pblica.

y L a transformacin del mercadolaboral y la lgica del beneficio privado para acabar con la explotacin por el capitalismo ala que se ven sometidos ambos gneros.L uchamos por conseguir la reclama: a igual trabajo, igual salario.

y L uchamos por la plena libertad sexual y el amor libre, de tal forma que se puedandisfrutar delas relaciones personales que plazca sin valores predeterminados,excluyendo cualquier elemento de apropiacin y de control de un miembro dela pareja por el otro, as como cualquier forma de ejercicio de poder dentro dela pareja.L a libertad sexual y el amor libre defienden que toda persona puedemantener las relaciones sexuales, de amistad o de amor con aquell a persona o personas que desee, sea del sexo que sea, sea de forma mongama o no, sea paratoda la vida o puntual, de una formalibre y consciente. Aumentar radicalmentelaeducacin sexual, complementado por educacin emocional, rompiendo conlosroles de gnero.

y D efendemos el abortolibre y gratuito. Se debe regular dentro del sistema sanitario,eliminando costes y riesgos de manera que sea posible en todoslos territorios del E stadoE spaol. L a mujer ha de poder decidir sobre su cuerpo y si quiere ser madreo no y cundo quiere ser lo. D ebemos trabajar por el fin dela persecucin ylacriminalizacin del aborto.


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La poltica de alianzas.

Para los CJCla cuestin dela pol tica de alianzas es fundamental, venimos trabajando cadada para que el proyecto delos CJC se convierta en el referente de muchos jvenes enlalucha por la revolucin, y no podremos conseguir lo sino estamos continuamente elaborando

nuestra poltica de a

lianzas.

La po

ltica de a

lianzas con diversas organizaciones juveni

les decarcter social, pol tico o sindical y sectores organizados del movimiento juvenil, es

necesaria parala consecucin delos intereses dela clase. Como hemos sealado en ms deun documento delos CJC sin pol tica de alianzas no hay proyecto revolucionario.

L os CJC, somosla organizacin delos y las jvenes comunistas marxistas leninistas delos pueblos deE spaa.E n su seno ya hoy milita el ncleo fundamental sobre el que se darlareconstruccin dela Juventud Comunista en el E stadoE spaol, perola unidad delos y las jvenes comunistas marxistas leninistas en el seno delos CJC es una tarea que nuncatermina y ala que debemos ofrecer nuestras mejores energas y capacidades de una maneracontinuada. Nuestro desarroll o pol tico y orgnico, junto ala descomposin dela principal

organizacin reformista, hace necesario que multip

liquemos

las propuestas de unidad quehagan factible la incorporacin individual y colectiva de todoslos y las comunistas que aun

hoy no militan enlos CJC.

Somos conscientes que producto dela historia reciente del movimiento comunista en el estado espaol todava quedan destacamentos juveniles comunistas dispersos e inmersos enun debate acerca del referente revolucionario, entendemos que nuestro deber es dirigirnos aellos y lanzar puentes de colaboracin y debate, para presentar el proyecto de recuperacinde la juventud comunista que representamos.

E n la lucha pol tica nos encontramos con dos tipos de alianzas, tcticas y estratgicas.L as

al

ianzas tcticas se dan enl

a prctica por l

a coincidencia de posturas entre nosotros y otrosgrupos.E sta coincidencia es parcial y momentnea y muchas veces coincidenlas posiciones pero nola interpretacin de comoll evar las a la prctica. Son muy importanteslas alianzas tcticas pues nos ayudan a avanzar siempre que no entren en contradiccin connuestras alianzas estratgicas.

L as alianzas estratgicas son aquell as que se dan con aquellos entes pol ticos conlos cualescoincidimos en alto grado.E stas alianzas son muy importantes ala hora de reforzar lacolaboracin sincera entre organizaciones, pese a esto estas alianzas no se pueden hacer as como as, deben de dar respuesta al desarrollo de la pol tica organizativa,ntimamenteligadas al desarroll o de nuestro proyecto estratgico.

E n los movimientos sociales, nuestro objetivo esll egar a ser hegemnicos, mediante unalucha de posiciones, conmbinandolas posibles alianzas con algunos sujetos pol ticos ysociales a la vez que garantizamosla independencia del movimeinto, pues no se trata de devincular formarmente un determinado movimiento a nuestro proyecto estratgico, sino delograr en el interior del movimiento una amplia hegemona que haga avanzar de esta formanuestras posiciones en su seno.


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L os CJC enlos ltimos aos hemos estado trabajando sobrela pol tica de alianzas yconociendolas posiciones delos diversos sujetos pol ticos y sociales, es hora de que esto sed de una manera generalizada en cada uno delos comits inferiores hastalos colectivos de base.E s necesario que ref lexionemos en cada movimiento social y en cada momentoconcreto qu entes no entran dentro dela pol tica de alianzas, qu entes s y de stos cules

son tcticos y cul

es estratgicos, esta ref l

exin nos ayudar a cl

arificar nuestra accindentro delos frentes.

E sta pol tica de unidad requiere quelos comits intermedios desarroll en en sus territoriosuna pol tica de alianzas, basada en el anlisis y debate de propuestas de trabajo con otrasorganizaciones juveniles. U na pol tica de alianzas no slo con comunistas, sino buscandoavanzar el frente de izquierdas, con otras organizaciones juveniles progresistas, conlasque podamosll egar a acuerdos para hacer avanzar la lucha del movimiento estudiantil, o lalucha contrala precariedadlaboral, entre otras.

E l frente de Izquierdas

Todos sabemos que el PCPE apuesta por un frente de izquierdasE ste frente de izquierdashoy en da pasa por esa conciencia republicana, democrtica, antioligrquica yantimonopolista dela primera etapa del proyecto dela Republica de carcter Confederal ySocialista.E s decir el frente de izquierdas es una propuesta coherente con el proyecto del partido.E n este frente de izquierdaslos movimientos sociales, ylas organizaciones pol ticas y sindicales de carcter transformador son parte indispensable de para suformacin.

Por tanto, frente de izquierdas no es frente electoral aunque ste pueda ser una delasmanifestaciones del frente de izquierdas en momentos concretos.El frente de izquierdas esl

a unin de un frente, con ref l

ejos enl

o pol

tico,l

o social

yl

o sindical

, que da respuestasorganizativas conjuntas alos problemas planteados por la lucha diaria.E ntender esto esentender que un frente de izquierdas se hace para un aumento dela organizacin dela clasey del pueblo en la lucha, paraligar al pueblo en la lucha contralos monopolios, el imperialismo yla oligarqua.

D ebemos ser conscientes quela pol tica del frente de izquierdas del PCPE tiene diferentesritmos enla juventud por diferentes motivos: no sonlos mismos sujetos pol ticos, existencontradicciones dentro delas juventudes ylos partidos a menudo en proyectos ajenos al leninismo,la pol tica unitaria se da a diferentes ritmos,la espontaneidad dela juventudE sto hace que enla configuracin del frente de izquierdasla juventud juegue un papel fundamental en liderar al movimiento juvenil hacia ese frente de izquierdas que plantea el PCPE que se caracteriza por ser opcin de combate contra el enemigo de clase.

E s importante diferenciar frente de izquierdas de unidad comunista. Ambas uniones se dandialcticamente en el desarrollo organizativo, pero mientras una juega un papel en la posibilidad dela transformacin,la otra juega un papel en el fortalecimiento delas posiciones dela clase en dicha transformacin.D igamos quela unidad comunista profundiza en el proyecto dela clase y el frente de izquierdas crealas alianzas necesarias


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para quela clase obrera, junto alos sectores populares, pueda generar ese cambiorevolucionario.

Toda nuestra pol tica de unidad dela juventud, en ese sentido de unidad combativa dela juventud como fuerza, cobra sentido enla articulacin de esta unidad conla pol tica del

frente de izquierdas. Sumar al

a juventud al

frente de izquierdas debe ser nuestra aspiracin.D icha unidad dela juventud que sabemos que es contradictoria en su seno, aunque capaz detener cotas de homogeneidad amplias, esla unidad dela juventud contra el enemigo declase y sus posiciones de clase en el seno dela juventud. Arrebatar le la hegemonaaplicando una pol tica consciente delas contradicciones en el seno dela juventud, en base ala lucha como hemos caracterizado, de tal manera que nos ganemos sus conciencias y segenere una nueva cultura juvenil, que en base al combate por sus intereses como jvenes,que no divergen delos intereses de clase dela clase obrera, se sumen alos sectores mascombativos aunados en el frente de izquierdas propuesto por el partido.E sto que estamosahora sealando es solo una concrecin delo que antesll ambamos desde un plano msabstracto doble unidad dela juventud. Solo as se articula nuestra teorizacin sobre como esla juventud, nuestra pol tica en su seno y su relacin conla pol tica del partido.

Una plataforma para luchar por los derechos de la juventud.

Articular la unidad dela juventud, decamos anteriormente que era necesario para esedesarroll o del proyecto del PCPE , de los comunistas en el estado espaol, pero tambindecamos que deba basarse en ser capaces de ganar su confianza enla lucha por susderechos concretos, que era necesario ganar la call e, avanzar enla movilizacin sostenidade la juventud para dar ese paso delas luchas parciales a las luchas por sus intereses reales.E n ese plano se sita nuestra plataforma paraluchar por los derechos dela juventud, una propuesta para unir ala juventud.U na propuesta que en una situacin de crisis capitalista

ha de aunar al

conjunto del

a juventud.Saber desarroll ar dicha plataforma en nuestra practica diaria es necesario, tanto sudesarroll o desde el punto de vista de su difusin y debate como delos aportes que podamoshacer a ell a. Avanzar en el desarrollo de dicha plataforma nos unir alos sectores msconcientes del movimiento.

L os CJC debemos esforzarnos en su desarrollo y debate con diferentes organizacionessociales. E sta plataforma ha de aunar las reivindicaciones principales de las y los jvenessumndolos al cuestionamiento delo actualmente imperante.D ebe hablar de derechos pol ticos dela juventud, estudiantiles, laborales, de reivindicacin de un ocio apartado del consumo capitalista, de volver a ganar la call e, etc

Tesis 3-La Lucha Estudiantil-7 Congreso CJC

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