Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana · global y de oferta por la inicial...
Transcript of Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana · global y de oferta por la inicial...
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
1
Dimensión Energética
Tendencias del sector petrolero
y la economía colombiana Escenarios de choque de precios y COVID-19
Dirección de Asuntos Económicos y Administrativos
Abril 21, 2020
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
2
Estudios Ecónomicos
GERMÁN ESPINOSA Presidente Ejecutivo [email protected]
ANDRÉS SÁNCHEZ Director Económico y Administrativo [email protected]
JUAN SEBASTIÁN GALLEGO Analista Económico [email protected]
LUISA FERNANDA TORRRES Analista Económica [email protected]
FELIPE ROMERO Analista Técnico [email protected]
Encuentra todos nuestros informes ingresando a www.campetrol.org
________________________________________________________________________________________________
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana. Abril 2020 Todos los derechos reservados
www.campetrol.org Carrera 14 # 89-48. Oficina 603
(+571) 6170204 - (+571) 6170201 Bogotá – Colombia
Foto portada: Cortesía Independence
Campetrol es el titular de los derechos patrimoniales y morales, al igual que propietario exclusivo de toda obra, documento o imagen, que sea publicada u elaborada por el mismo. Al ser el titular de los derechos de autor tiene la
facultad exclusiva de disponer, aprovechar, reproducir o comunicar la obra en los términos de la Ley 23 de 1982. Por lo tanto, quien publique, total o parcialmente, o por cualquier medio o procedimiento compendie, mutile o
transforme sin autorización previa y expresa de Campetrol cualquier obra elaborada por el mismo, podrá incurrir en prisión hasta por noventa (90) meses y en multas de hasta trescientos (300) salarios mínimos legales mensuales
vigentes (COP$ 263.340.900).
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
3
SOMOS
CAMPETROL
PARA AFILIACIONES Y MAYOR INFORMACIÓN
Eduardo Luis Amaris – Analista Comercial
[email protected] | (+571) 6170188-6170204 ext 103 | 3163623619
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
4
CUENTE CON CAMPETROL - MENSAJE DEL PRESIDENTE EJECUTIVO
Hoy nos encontramos frente a una situación mundial única, enfrentando un reto que no habíamos tenido
que vivir en esta generación. Es por esto que en Campetrol nos estamos adaptando para ajustarnos
rápidamente a las nuevas necesidades de nuestros afiliados.
Sabemos que la industria de hidrocarburos se encuentra en un proceso de adaptación a las nuevas
condiciones mundiales, haciendo cambios profundos en su actividad, y el sector de bienes y servicios no
puede ser una excepción en esta dinámica.
En este sentido, encontramos una oportunidad para que los afiliados de Campetrol puedan aprovechar
el know-how que tienen los colaboradores del gremio y así, maximizar el valor del mercado para que las
empresas de bienes y servicios sean sostenibles y sigan creciendo, dentro de la coyuntura.
Oportunidad de apoyo a los afiliados por parte de la
Dirección Económica y Administrativa
Oportunidad de apoyo a los afiliados por parte de la
Dirección de Asuntos Públicos y Corporativos
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
2
TABLA DE CONTENIDO
1. Introducción: ¿Por qué, en medio de la pandemia del COVID-19 y el choque de precios, la industria
petrolera es un sector mucho más estratégico? ................................................................................ 4
2. ¿Qué nos puede enseñar la anterior crisis petrolera? [1] .......................................................... 9
1. El “Boom” de precios pre-2014 ..........................................................................................10
2. La caída de los precios internacionales ...............................................................................13
3. Impacto en Colombia [4], [5] ............................................................................................15
3. La doble coyuntura de 2020: COVID-19 y la caída de los precios ...........................................20
1. El COVID-19 [6] ..............................................................................................................20
2. ¿Qué sucede con los precios? ............................................................................................22
El papel de OPEP+ y G20 ......................................................................................................... 22
3. Panorama de la oferta ........................................................................................................23
Producción ................................................................................................................................. 23
Capacidad de almacenamiento .................................................................................................. 24
4. El Acuerdo ........................................................................................................................26
5. Demanda ...........................................................................................................................27
6. Reacciones del Gobierno Nacional .....................................................................................28
4. ¿Hacia dónde nos lleva la actual coyuntura?: Una perspectiva de la crisis sobre los precios y los
niveles de producción ....................................................................................................................31
1. La Geopolítica y precios del petróleo .................................................................................31
2. Producción y breakeven, ¿Hasta dónde es eficiente la producción? .....................................32
3. Impactos en la Economía Internacional ..............................................................................35
4. La Economía Colombiana y su vulnerabilidad ante la coyuntura .........................................36
5. Escenarios de Precios y Producción 2020-2022 ......................................................................40
1. Escenario de Precios ..........................................................................................................40
2. Escenarios de producción de petróleo en Colombia ...........................................................42
6. Impactos del doble choque de precios y COVID-19 sobre el sector petrolero en Colombia ....43
1. Pozos exploratorios ............................................................................................................43
2. Adquisición Sísmica ...........................................................................................................44
3. Taladros ............................................................................................................................47
4. Empleos ............................................................................................................................50
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
3
7. Impactos del doble choque de precios y COVID-19 sobre la economía colombiana ...............53
1. Exportaciones petroleras ....................................................................................................53
2. IED petrolera ....................................................................................................................54
3. TRM .................................................................................................................................56
4. PIB petrolero ....................................................................................................................55
5. Renta petrolera ..................................................................................................................57
8. Conclusiones y Recomendaciones de Política .........................................................................61
1. Conclusiones .....................................................................................................................61
Generales ................................................................................................................................... 61
Sobre el sector petrolero colombiano ........................................................................................ 61
Impactos sobre la Economía colombiana .................................................................................. 62
2. Recomendaciones de Política .............................................................................................63
Garantizar la viabilidad operacional ........................................................................................... 63
Estabilidad Jurídica .................................................................................................................... 64
Apertura de líneas de crédito ..................................................................................................... 64
Régimen Fiscal ........................................................................................................................... 64
9. Bibliografía ............................................................................................................................63
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
4
1. Introducción: ¿Por qué, en medio de la pandemia del
COVID-19 y el choque de precios, la industria petrolera es
un sector mucho más estratégico?
El mundo hoy ve como la pandemia del COVID-19 ha frenado la economía mundial, afectando a todos
y cada uno de los sectores productivos, y llevando a lo que posiblemente sea la peor crisis económica
desde la Gran Depresión, de 1929. Tanto a nivel global, como en Colombia, la industria de petróleo y
gas, y toda su cadena de valor, incluyendo la de bienes y servicios, no es ajena a este impacto. Sumado a
lo anterior, una dramática caída en los precios del barril ha terminado de configurar lo que podría ser una
de las peores crisis de la historia para el sector de O&G. El objetivo de este documento es realizar un
recorrido por la última crisis, iniciada con la caída de precios en 2014, estudiar sus impactos y analizar,
dadas las condiciones actuales del doble choque que hoy nos afecta, cuales serían las tendencias que
podrían seguir estos impactos sobre la economía y el sector petrolero colombiano.
Desde la primera gran crisis del petróleo en 1973, se han observado una multitud de estas coyunturas
enfocadas en los precios a lo largo de la historia. Antes de los 2000, la respuesta de los precios se
presentaba ante eventos estructurales que condicionaban de forma volumétrica el balance del mercado
entre oferta y demanda, sin embargo, con la introducción de los precios internacionales como cotizaciones
en las principales bolsas de valores del mundo, la respuesta de los precios pasó a ser también de carácter
bursátil. En adelante, las crisis pasaron de ser estructurales a tener importantes contenidos especulativos,
tal como se observó con los ataques del 11 de septiembre y la crisis financiera de 2008. Posteriormente,
la crisis de 2014 se gestó en la medida en que la revolución de los shale en Estados Unidos, un evento
estructural que impulsó inesperadamente la oferta al alza, se a la vez profundizado por la especulación de
los mercados bursátiles, por lo que ambos efectos conllevaron a un choque en los mercados, con una
caída en los precios que derivó en una crisis en la industria petrolera, con una duración cercana a los dos
años, ubicando así a la industria en nuevo normal de precios que puso fin a la época de las cotizaciones
del barril de 100 USD [1].
En el nuevo normal de precios bajos que debemos enfrentar hoy en día, el sector es más resiliente ante
los choques externos después de la crisis de 2014, y ha adoptado buenas prácticas operacionales para
continuar desarrollando su actividad, cada vez de manera más eficiente. El 2019 cerró con un precio
promedio Brent de 64,4 USD/BL, 10% por debajo del promedio de los 71 USD/BL de 2018. Esta caída
no representó pérdidas para la industria, por el contrario, en el 2019 el sector consolidó su recuperación
y retomaba una tendencia de crecimiento positiva. Este año, el promedio Brent de enero a abril está en
48,5 USD/BL, 22% por debajo del promedio de mismo periodo de 2019, y la tendencia se mantiene a la
baja a la espera de los recortes anunciados por la OPEP+ y el G20 a partir del 1 de mayo, y de la evolución
del COVID-19. El 2020, por tanto, representa un reto muy grande para el sector, no solo por los precios
bajos, sino por las restricciones que la cuarentena obligatoria impone a nivel nacional e internacional.
A este nivel de precios se añade un efecto bursátil que llevó el WTI a cotizarse por debajo de los 10
USD/BL en lunes 20 de abril, fecha de publicación de este documento. Este hecho se explica por el
contrato de esta referencia de entrega en mayo que está próximo a expirar (21 de abril), por lo que los
agentes están vendiendo estos contratos para adquirir unos a mayor plazo. Los contratos de mayor plazo
se cotizan sobre los 20 dólares, el rango que sigue el WTI desde marzo. Esto nos indica que la caída de
este tipo de crudo no es un reflejo de las condiciones reales del mercado. Sin embargo, el Brent también
ha experimentado una ligera tendencia a la baja, la cual se atribuye al sentimiento de preocupación del
mercado frente a la crisis económica que se avecina, y la gran acumulación de existencias en Estados
Unidos, que añade presiones a la baja sobre la ya débil demanda.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
5
Hoy, la propagación del COVID-19 tiene en jaque a la mayoría de los países, con una inevitable recesión
económica a la vuelta de la esquina y como resultado de esta, una demanda de petróleo a la baja. A lo
anterior, se le debe sumar que en marzo se dio una ruptura de los acuerdos de recorte a la producción de
la OPEP+, lo que generó expectativas de oferta al alza, desbalanceando aún mas el mercado y ubicando
los precios del crudo en mínimos de 20 años. Con fuertes presiones de demanda por la crisis sanitaria
global y de oferta por la inicial falta de acuerdo en los recortes, profundizado con la especulación del
mercado bursátil y las perspectivas negativas de la economía mundial, el sector petrolero se enfrenta a un
escenario nunca antes visto.
El sector petrolero en Colombia y perspectivas
Colombia no es ajena a la crisis actual. En efecto, las medidas del Gobierno Nacional para contener la
propagación del COVID-19 plantean un nuevo escenario socioeconómico, bajo el cual, todos los sectores
productivos, algunos más que otros, se ven ante el escenario de una fuerte disminución en la actividad, la
cual amenaza directamente su sostenibilidad financiera, incluyendo los ingresos y empleos de cientos de
miles de colombianos. Toda la cadena de valor del sector petrolero no es la excepción, incluyendo los
bienes y servicios petroleros, pues la caída en la demanda, las restricciones a la movilidad de personal y
los nuevos protocolos de salud representan un nuevo reto para sostenibilidad de la industria colombiana.
El sector venía avanzando en su recuperación, luego de la caída iniciada en 2014. El año 2019 fue positivo
y el 2020 se veía mucho mejor, pues sería el año que iniciaría una nueva fase de reactivación en la industria
petrolera. Gobierno, Industria y Territorio han trabajado mancomunadamente en búsqueda de un sector
mucho más competitivo, generador de encadenamientos productivos, de sostenibilidad macroeconómica
y desarrollo regional. Las perspectivas no podrían ser mejores para 2020, pues la puesta en marcha del
Programa Permanente de Asignación de Áreas (PPAA), de los avances en los Proyectos Piloto de
Investigación Integral (PPII), del nuevo impulso al offshore y a la exploración continental, generaban un
importante interés inversionista por Colombia. Todo ello con el objetivo de continuar uniendo esfuerzos
en pro de la autosuficiencia petrolera del país.
La actividad del sector durante 2019 se encontraba en una senda ascendente. Por un lado, las estrategias
llevadas a cabo por el Gobierno Nacional, en cabeza del Ministerio de Minas y Energía y la Agencia
Nacional de Hidrocarburos (ANH) dieron como resultado la firma de 31 nuevos contratos de E&P,
marcando fuertemente el camino de la reactivación del sector. Por su parte, la producción promedio de
petróleo alcanzó los 886 mil barriles por día, su nivel más alto en los últimos tres años, con un promedio
de 138 taladros en operación.
Así mismo, se alcanzó la perforación de 48 pozos exploratorios y la adquisición de más de 5.300
kilómetros de sísmica, de los cuales 2.100 correspondieron a sísmica terrestre, unos niveles superiores a
los obtenidos durante 2018, y que, en el caso de la sísmica, triplicaron las metas propuestas en el Plan
Nacional de Desarrollo. Sin embargo, estos niveles aún se encuentran muy distante de los 123 pozos y
16.300 kilómetros de sísmica terrestre adquiridos en promedio entre 2010 y 2012, un hecho que pone en
peligro nuestra autosuficiencia energética en el mediano plazo.
Con esta caída de la demanda y de los precios del crudo, se compromete una fracción bastante significativa
de las operaciones del sector petrolero en toda su cadena de valor y muchos proyectos que se veían
atractivos para este año, han dejado de serlo con el nivel de precios actual. De esta manera, las empresas
de E&P han empezado a realizar recortes en sus planes y programas de inversión para 2020, lo que
reduciría considerablemente la actividad, producción y contratación del sector, afectando especialmente
al de bienes y servicios petroleros, disminuyendo así el aporte de todo el sector a las regiones, a las cuentas
fiscales gubernamentales y a los agregados macroeconómicos.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
6
Estos impactos sobre el sector afectan directamente la economía colombiana. Como es sabido, el sector
petrolero y toda su cadena de valor son fuente, por un lado, de ingresos para la nación y las regiones, y,
por otro lado, de divisas, convirtiéndolo en un sector estratégico para el crecimiento y el desarrollo
económico de Colombia.
El sector representa cerca del 3,4% del PIB nacional, los ingresos fiscales que giró al Gobierno Nacional
en 2019 representaron el 1,4% del PIB, un 8,6% del total de los ingresos totales. Tan solo entre 2011-
2018, la industria apotró cerca del 10% de los ingresos del Gobierno Nacional, ingresos fundamentales
para financiar el desarrollo en términos de salud, educación, infraestructura, vivienda, agua y saneamiento
básico, entre otros, lo cual es fundamental para la lucha contra la pobreza en Colombia. Tan solo
Ecopetrol, aportó en 2018 un total de $23 billones de pesos (dividendos, impuestos y regalías), y en la
última década una suma de $220 billones.
Por otra parte, si bien el sector es intensivo en capital y no en mano de obra, genera más de 100 mil
empleos a lo largo del territorio nacional e importantes encadenamientos que permiten impulsar el
desarrollo regional. La renta petrolera (dividendos de Ecopetrol más impuesto de renta de la industria)
desafortunadamente es muy volátil puesto que depende del precio del crudo, lo que llevó a que fueran
del 20% en 2013 y del 1% en 2016. En 2020 se repite la historia y esta es la realidad a la que nos
enfrentamos hoy en día.
Así mismo, la generación de regalías es otro de los principales aportes económicos del sector. Entre 2012
y 2019 el Sistema General de Regalías ha financiado proyectos por cerca de $42 billones de pesos, casi
tres veces el recaudo adicional esperado de la última reforma tributaria (2019). Tan solo en el bienio 2019-
2020, el presupuesto del SGR es de $24 billones de pesos.
Por otro lado, el sector es clave para la generación de divisas. Representa cerca del 40% de las
exportaciones, lo que permite controlar la balanza comercial y la cuenta corriente de la balanza de pagos.
Así mismo, representa cerca del 38% de la Inversión Extranjera Directa (IED), lo que permite el ingreso
de dólares al país. La tasa de cambio en Colombia respecto al dólar estadunidense está directamente
relacionada con la volatilidad en el precio del crudo, de modo que, sin los ingresos de divisas por cuenta
del petróleo, probablemente la relación del peso con el dólar sería muy superior, impactando
directamente el consumo de los hogares y los agregados macroeconómicos como la inflación. Nuestros
cálculos en el libro “Fracking. Una decisión de país” de enero de 2019 son que, en un escenario de
pérdida de la autosuficiencia de petróleo, el primer impacto sería la suspensión de la capacidad de
exportación, que le costaría al país $24 billones anuales en promedio a partir de 2024, y al tiempo, de
darse la necesidad de importar crudo para abastecer la carga de las refinerías nacionales, se tendría un
costo de $30 billones adicionales, impactando así en $54 billones de pesos anuales las cuentas de la nación.
En síntesis, la consecuencia de dejar de percibir los ingresos petroleros para Colombia es tremendamente
negativa. Habría un gran desbalance macroeconómico, pérdida de recursos para las regiones y de divisas
para mantener la capacidad de importar los productos que la economía no produce. Todo ello, con una
afectación directa sobre la capacidad del Gobierno Nacional, así como de los locales, de poder financiar
las necesidades de la población en salud, educación, vivienda, agua potable y acceso a la energía, entre
otros. Todo lo anterior se hace mucho más relevante al pensar hoy en las necesidades de recursos del
Gobierno Nacional y regionales para atender a los millones de colombianos que se ven afectados por la
pandemia, por lo que los recursos de las regalías se vuelven hoy más vitales que nunca. Mantener el sector
petrolero e impulsarlo debe ser una tarea de primera importancia para el Gobierno Nacional.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
7
¿Para dónde vamos con este doble choque? Un análisis de tendencias
Ante la coyuntura y la importancia de entender el comportamiento de las principales variables de interés
para el sector, en Campetrol decidimos plantear un ejercicio de análisis de tendencias de la industria y la
economía colombiana, con unos escenarios de cotización Brent y de producción nacional de petróleo. Es
importante mencionar que, los escenarios fueron calculados a partir de las diferentes perspectivas tanto
del balance global de crudo, como del potencial y costo de producción de los campos petroleros del país,
con los datos disponibles correspondientes al corte del 17 de abril de 2020. De esta manera, las
estimaciones de este documento no representan proyecciones o predicciones de futuro, sino un análisis
de tendencias, de cómo se comportarían algunas variables bajo los escenarios hipotéticos propuestos.
Dentro de nuestros escenarios, decidimos adoptar unos precios bajos, teniendo en cuenta la debilidad en
la demanda mundial por causa del COVID-19 y la oferta al alza por la ruptura del acuerdo de recortes de
la OPEP+ y la posición expectante del mercado frente al nuevo acuerdo ampliado con el G20, que podría
no ser suficiente para compensar la caída en la demanda. De manera similar, asumimos una producción
a la baja, por debajo del promedio de 2019, como consecuencia de los bajos precios y de las medidas de
contención del COVID-19.
El documento inicia con un análisis de contexto, en primer lugar, del comportamiento de las diferentes
crisis petroleras de la historia, para luego ahondar en la de 2014 y finalmente explicar en detalle la crisis
actual. A continuación, se hace un repaso de las proyecciones y perspectivas de los principales agentes del
mercado, a nivel de precios del crudo, de los breakeven de los países petroleros, de la economía
internacional y la colombiana. Luego de esto, se da inicio al ejercicio de análisis de tendencias de
Campetrol, con una descripción metodológica y de los escenarios de precios y producción, para pasar a
los resultados de los modelos econométricos de las variables de la industria (Pozos exploratorios,
Adquisición sísmica, actividad de taladros, empleo) y de la economía (Exportaciones, IED, TRM, PIB y
renta petrolera). El documento concluye con la postura de Campetrol frente a la doble coyuntura y con
unas recomendaciones de política del gremio.
El Sector de Bienes y Servicios Petroleros en Colombia
En medio de la pandemia del COVID-19 y el choque de precios, la industria petrolera es un sector mucho
más estratégico. El sector petrolero colombiano es tremendamente resiliente y ha sabido salir avante de
las grandes crisis que han afectado a la industria y al país, en sus más de 100 años de existencia.
El doble choque de precios y la pandemia es inédito y es sin duda la crisis más profunda que ha visto el
mundo desde la gran depresión de 1929. Crisis que por la conectividad global tiene dimensiones nunca
vistas y gracias a la tecnología se vive y se sufre en tiempo real. De ahí que las medidas que deben tomar
los gobiernos son más exigentes y deben comprometer los mejores valores y atributos de la sociedad como
un todo. Colombia y su industria petrolera no son la excepción.
La doble coyuntura es una gran oportunidad para reinventarnos y hacer lo que en circunstancias normales
no hemos podido hacer. Lo primero cambiar de una vez por todas el modelo de relacionamiento del
sector con el territorio, abandonando los aspectos transaccionales que lo han caracterizado; y adoptando
un modelo basado en la generación de confianza, en el diálogo, en los acuerdos, en los compromisos y
en el cumplimiento, con el propósito superior de generar bienestar y mejorar las condiciones de vida para
toda la sociedad colombiana.
Ese es el punto de partida para contribuir a garantizar entre todos la seguridad energética, la estabilidad
macroeconómica y el desarrollo regional sostenible que demanda el país. Pero esto sólo será posible,
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
8
como será posible salir de esta crisis, si trabajamos juntos Gobierno, industria y territorio. Nos necesitamos
todos unos a otros. No hay otra fórmula.
Y en esta perspectiva, el petróleo no es el problema; por el contrario, es parte muy importante de la
solución. Sin duda, en estas difíciles circunstancias la industria petrolera es un sector mucho más
estratégico para el país.
La doble coyuntura ha obligado a reducir las operaciones a mínimos vitales y en esto el compromiso del
sector es total. La industria de bienes y servicios petroleros es tal vez de las más afectadas, pero también
de las más resilientes. Sin embargo, es importante acceder a los beneficios de crédito y liquidez del
Gobierno Nacional. Pero igualmente hay que ser muy claros al declarar que, solo si se cuenta con una
oferta de bienes y servicios petroleros sostenible, la industria petrolera en Colombia también será
sostenible y competitiva. Esto es determinante. Así como también es muy pertinente decir que la industria
de bienes y servicios está preparada para retomar la senda de la reactivación en el momento en que el
Gobierno Nacional si lo decida.
Unidos, a través de sinergias y esfuerzos conjuntos, el sector seguirá siendo por muchos años uno de los
principales jalonadores de desarrollo económico y social del país. El sector petrolero es ahora más
estratégico y necesario que nunca.
Germán Espinosa
Presidente Ejecutivo
CAMPETROL
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
9
2. ¿Qué nos puede enseñar la anterior crisis petrolera?
Sin duda los precios del petróleo se han visto influenciados por eventos geopolíticos y económicos a lo
largo de la historia, pero incluso, la forma en la que este mercado responde ha ido variando con el tiempo.
En este sentido, se pueden diferenciar dos grandes periodos en el precio del barril, de acuerdo con las
variables que impactan su comportamiento y la manera en la que estos responden.
Desde la década de los 70 hasta inicios de los 2000, el precio del barril respondía a eventos estructurales
que afectaban la demanda o la oferta volumétrica real, tal como conflictos bélicos y recesiones financieras,
por lo que, eran variaciones más lentas, pero a su vez, de mayor duración. Las caídas de precios
evidenciadas durante la Guerra Irán-Iraq, la crisis financiera de Asia y los ataques del 9-11 son ejemplos
de este tipo de comportamientos, en los cuales el precio disminuía en la medida que la oferta y demanda
real lo hacían [2]..
Sin embargo, en las últimas dos décadas, el petróleo obtuvo un papel mucho mayor en la estrategia global,
siendo también susceptible a volatilidades por incertidumbres en la oferta y la demanda futura, dando
cada vez más relevancia al papel de la especulación en el mercado. Por lo anterior, durante la esta segunda
etapa, respondió a los choques financieros y a las proyecciones de los analistas, dando como resultado,
caídas más elevadas, pero de menor duración.
Una muestra de este tipo de comportamiento fueron las crisis de 2008 como respuesta al colapso
financiero en las bolsas estadounidenses, y en 2014 durante la llamada crisis de los shales, en las cuales
no se llegó a materializar mayores variaciones en la oferta y demanda, pero el mercado respondió a los
pronósticos de esta.
Fuente: EIA
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
10
En este sentido, la situación actual llevada de la mano por dos grandes eventos coyunturales: la
propagación del COVID-19 afectando directamente la demanda, y el exceso de oferta en el mercado,
posee tantos elementos especulativos como reales. Por lo anterior, es posible que la crisis se supere en el
corto a mediano plazo, dependiendo de las decisiones que se tomen en los próximos días por parte de
los grandes actores del mercado.
1. El “Boom” de precios pre-2014
De acuerdo con la EIA, a principios de los 2000, hasta el 2003 el promedio de la cotización Brent fue de
26 USD/BL, sin embargo, a partir del 2004 se observó un incremento inusitado en los precios hasta llegar
a los 140 USD/BL en 2008. Este aumento se explicó principalmente por la creciente demanda de crudo
por parte de China e India, lo que generó un exceso de demanda en el mercado, la cual fue profundizada
por la OPEP, quienes decidieron fijar un techo en la oferta del cartel.
Este rally del petróleo finalizó drásticamente en 2008 con la recesión económica mundial, bajo la cual los
mercados globales cayeron y las mayores economías a nivel mundial redujeron su demanda de crudo. De
esta manera, la cotización Brent pasó de 140 USD/BL en julio de 2008 a 35 USD/BL en diciembre del
mismo año.
Luego de que los precios internacionales cayeran a causa de la crisis mundial, la reactivación económica
y el auge de los países emergentes, quienes aumentaron exponencialmente su demanda de crudo,
impulsaron nuevamente al alza a los precios. Esta condición fue ahondada por el control de la oferta por
parte de la OPEP, con lo cual el mercado experimentó fuertes excesos de demanda nuevamente [3].
Bajo este contexto del mercado, los precios pasaron de 35 USD/BL en 2018 a 125 USD/BL en 2011.
Esta nueva condición se mantuvo constante durante tres años, en los cuales de 2011 a 2014 el promedio
Brent se ubicó en los 107 USD/BL.
-4
-3
-2
-1
0
1
2
3
4
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
MM
BL
Fuente: EIA
Exceso de oferta Exceso de demanda Brent
0
50
100
150
US
D/B
L
Cotización Brent y Balance del mercado de crudo
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
11
La coyuntura de precios altos generó un aumento exponencial en los ingresos de los países exportadores
de petróleo, así como de las empresas hidrocarburíferas. Con esto, el sector petrolero ganó mayor
atractivo para los inversionistas, ubicándose como uno de los principales negocios receptores de
inversiones a nivel mundial.
En este sentido, de acuerdo con los datos de la IEA, del 2005 al 2014 se evidenció un incremento del casi
180% en la inversión nominal global en petróleo y gas destinada al segmento del upstream, al pasar de
258 mil millones de dólares a 713 mil millones.
Con el aumento en los flujos de capital destinados al sector petrolero a nivel mundial, se incentivaron los
proyectos de investigación en búsqueda de innovaciones tecnológicas. De esta manera, la industria
empezó a experimentar un proceso acelerado de mejoramiento en eficiencia y eficacia metodológica.
Como resultado, al poder acceder a recursos que con tecnologías y eficiencias anteriores no era posible,
se generaron nuevos y mayores descubrimientos de reservas a nivel mundial, como se puede observar en
los datos de la EIA. En efecto, las reservas probadas mundiales experimentaron un incremento del 23%,
al pasar de 1,4 billones de barriles en 2005 a 1,7 billones de barriles en 2014 [1].
De igual manera, los grandes márgenes de ganancia y los altos flujos de inversión permitieron el desarrollo
y la viabilidad comercial del Offshore y el Fracking, los cuales también permitieron incorporar nuevas
reservas mundiales de crudo.
0
100
200
300
400
500
600
700
800
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
Mil
es d
e m
illo
nes U
SD
Fuente: IEA
Inversión nominal global en petróleo y gas (upstream)
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
12
1.000
1.200
1.400
1.600
1.800
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014M
iles
de m
illo
nes
de
barr
iles
Fuente: EIA
Reservas probadas a nivel mundial
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
13
2. La caída de los precios internacionales
Luego de que los precios gozaran de cierta estabilidad por encima de los 100 USD/BL entre el 2011 y el
2014, para finales de 2014 una demanda débil a nivel mundial, acompañada de un crecimiento constante
en la oferta internacional de crudo, inundó el mercado y generó grandes excesos de oferta, los cuales
presionaron fuertemente a la baja a los precios internacionales del crudo. En efecto, de acuerdo con la
EIA, el mercado pasó de un exceso de demanda de 400 KBOPD promedio entre el 2011 y mediados de
2014, a un exceso de oferta cercano a los 850 KBOPD promedio entre 2015 y 2016. Lo anterior hizo
que los precios pasaran de 112 USD/BL a mediados de 2014, a 30 USD/BL a principios de 2016, una
caída del 73% en menos de dos años.
El exceso de oferta del mercado se explicó por dos frentes. En primer lugar, dado que los precios del
crudo estaban ubicados en niveles muy altos, los países consumidores empezaron a racionar su consumo
y a fijar sus esfuerzos en desarrollar nuevas fuentes energéticas, lo anterior generó que la demanda de
crudo a nivel mundial se debilitara. Además, con las constantes innovaciones tecnológicas se logró mejorar
la eficiencia al generar mayor energía con menor cantidad de petróleo. Bajo este nuevo contexto, la
demanda de crudo se estancó y fue altamente sobrepasada por la oferta, lo que impulsó a los precios a la
baja.
El segundo frente se explica a partir de la oferta, la cual continuó expandiéndose constantemente a raíz
del desarrollo masivo del Fracking en EE. UU., gracias al cual la producción del país norteamericano pasó
de 5 millones BOPD en 2008 a 9,5 millones BOPD en 2015, de acuerdo con los datos de la EIA. Por su
parte, como respuesta ante el mayor interés en nuevas fuentes energéticas y a una demanda débil a causa
de los precios altos, la OPEP liderada por Arabia Saudita, incrementó drásticamente la producción en
búsqueda de unos menores precios que incentivaran nuevamente el consumo masivo del petróleo.
-4-3-2-101234
2011
2012
2013
2014
2015
2016
2017
2018
2019
MM
BL
Fuente: EIAExceso de oferta Exceso de demanda Brent
20
70
120
US
D/B
L
Cotización Brent y Balance del mercado de crudo
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
14
70.000
75.000
80.000
85.000
90.000
95.000
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015
2016
KB
OP
D
Fuente: BP Stats Review
Producción de crudo a nivel mundial
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
15
El nuevo contexto del mercado daría el inicio a la última crisis del petróleo, con la cual se llegaría a un
precio mínimo Brent de US$ 26 el 20 de enero de 2016. La crisis generó fuertes impactos negativos sobre
las finanzas públicas de todos los países exportadores de petróleo y de las compañías grandes, medianas
y pequeñas del sector petrolero, puesto que bajo el efecto precio y sin alterar las cantidades vendidas, los
ingresos percibidos experimentaron drásticas reducciones. De esta manera, la crisis de precios se trasladó
directamente a las finanzas de los países productores, causando crisis económicas en países con baja
resiliencia ante los cambios en las cotizaciones del crudo.
La crisis se mantuvo hasta finales de 2017, periodo en el cual, gracias al acuerdo de recortes a la
producción fijada por la OPEP y sus aliados, sumado a condiciones geopolíticas que condicionarían tanto
la oferta como la demanda, se retomaría una senda creciente en los precios, hasta llegar a los niveles que
se observan a la fecha.
3. Impacto en Colombia [4], [5]
Con el ciclo de precios altos evidenciado antes de 2014, el país experimentó un aumento exponencial en
sus ingresos a partir del sector, tanto por entrada de divisas a partir de exportaciones e IED, como por
ingresos fiscales mediante renta petrolera y regalías. De esta manera, los recursos captados se destinaron
al financiamiento de la economía colombiana en general. Al llegar la crisis, la estructura económica del
país no se encontraba preparada para afrontar unos precios tan bajos, es así como los ingresos se redujeron
drásticamente, mientras que los demás sectores no lograban reaccionar para jalonar la economía.
Fuente: (López, Montes, & Collazos, 2013), elaboración Campetrol
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
16
Al disminuir drásticamente los ingresos del negocio, el sector y su actividad se vio fuertemente impactado.
Debido al poco atractivo del sector dada una baja rentabilidad de los proyectos, sumado a unas
condiciones internas desfavorables, la actividad exploratoria se suspendió y llegó a sus mínimos históricos,
de igual manera, se redujo drásticamente el descubrimiento de nuevos yacimientos, lo que resultaría en
una disminución en las reservas y del horizonte de autosuficiencia del país.
Lo anterior también se vería reflejado en la actividad de taladros, indicador que lleva una alta correlación
con los precios internacionales del petróleo, de tal manera que los equipos en operación se desplomaron
un 60% de 2013 a 2016. Todo lo anterior impactó la producción nacional de petróleo que cayó hasta los
854 KBOPD en 2017, pues se hizo insostenible mantener los niveles experimentados antes de la crisis
(un millón de barriles diarios promedio en 2013).
13.000
2.110
2012
2016
Fuente: ANH
Adquisición sísmica terrestre
(KM 2D equivalentes)
131
26
2012
2016
Fuente: ANH
Perforación de pozos
exploratorios
6,9
5,1
2012
2016
Fuente: ANH - Cálculos Campetrol
Años de autosuficiencia
petrolera
108
43
2013
2016
Fuente: Campetrol
Número de taladros en
operación
1.006
854
2013
2017
Fuente: ANH
Producción de crudo
(KBOPD)
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
17
Así mismo, la menor actividad petrolera generó disminuciones en las regalías, lo que impidió la ejecución
de proyectos de inversión pública, afectando negativamente las finanzas regionales. De igual manera, la
renta petrolera percibida por el Gobierno Nacional se contrajo drásticamente, lo cual desfinanció al
Gobierno e incrementó el déficit fiscal.
La inversión extranjera destinada al sector hidrocarburos se detuvo y empezó a presentarse una salida de
capital, dado que el sector resultó menos atractivo para los inversionistas extranjeros. Lo anterior afectó
aún más las cuentas nacionales y la ejecución presupuestal. Los ingresos en divisas por exportaciones se
redujeron, dado que los exportadores recibirán menos dólares por barril exportado, este nuevo contexto
resultó en un mayor déficit comercial. Ante las reducciones en los ingresos en divisas por exportaciones
e IED, se contrajo la cantidad de dólares en la economía, por lo que se generó una depreciación del peso
colombiano, con un incremento exponencial de la tasa de cambio y una pérdida del poder adquisitivo.
23,8
3,3
2013
2016
Fuente: MFMP 2018
Renta petrolera
(billones de pesos)
1,05%
0,36%
2013
2016
Fuente: MFMP 2018
Ingresos por regalías
petroleras (%PIB)
-2,4%
-4%
2013
2016
Fuente: MFMP 2018
Déficit Fiscal (%PIB)
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
18
El sector petrolero incide indirectamente sobre otras variables macro fundamentales, pues tiene
encadenamientos productivos con otros sectores, de tal forma que les provee insumos y demanda bienes
y servicios de ellos. Así mismo demanda mano de obra para su funcionamiento. De esta forma, caídas en
la cotización del crudo generaron grandes pérdidas a las empresas petroleras, que redujeron tanto sus
niveles de demanda y oferta a otros sectores, así como la demanda de mano de obra, contribuyendo
negativamente a su crecimiento y a la generación de empleo.
Además, la depreciación de la moneda generada por una caída en los precios del petróleo incide en la
inflación por efecto de pass through, esto es, que se transmite a los precios de bienes y servicios dentro
de la canasta familiar y a los precios de insumos para la producción de bienes, o la prestación de servicios
que están incluidos en la canasta familiar.
32.486
10.796
2013
2016
Fuente: DANE
Exportaciones
petroleras (millones
USD)
58.826
31.768
2013
2016
Fuente: DANE
Exportaciones
Totales (millones
USD) 0,6%
-4,0%
2013
2016
Fuente: DANE
Balanza Comercial
(%PIB)
5.112
2.386
2013
2016
Fuente: BanRep
IED petrolera
(millones USD)
16.209
13.850
2013
2016
Fuente: BanRep
IED total (millones
USD)
1.869
3.051
2013
2016
Fuente: BanRep
TRM (USD/COP)
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
19
Dado que impactos en el sector petrolero afectan los ingresos fiscales, en divisas y en otros sectores, el
nivel de crecimiento de la economía en el agregado también se ve afectado. Una caída en el precio del
petróleo reduce los ingresos de divisas por exportaciones, aumentan gastos por cuenta de importaciones
dado que se deprecia la moneda (entre ellos, la deuda que se paga en dólares o en otra moneda extranjera),
reduce el gasto del Gobierno por la disminución de sus ingresos fiscales, disminuye el consumo de los
hogares por el efecto sobre inflación y se reduce la inversión pública. Todo lo anterior generó que la
contracción en el PIB petrolero jalonara a la baja el PIB total de la economía colombiana, con lo cual se
redujo considerablemente el crecimiento económico del país.
Los precios han demostrado ser coyunturales e impredecibles, pues su comportamiento depende tanto
de factores internos de la industria, como de fuerzas ajenas al sector. La coyuntura geopolítica y las
condiciones económicas globales pueden llegar a ser los principales drivers tanto de la oferta de crudo
como de la demanda. Lo anterior resulta alarmante al tener en cuenta que los precios resultan
determinantes para el desempeño del sector petrolero a nivel mundial, pero en mayor medida para
aquellos países productores y económicamente petróleo-dependientes, que no poseen poder de mercado
y que resultan poco resilientes ante los movimientos de las cotizaciones. Lo anterior se pudo evidenciar
con la más reciente crisis del petróleo, en la cual, los precios internacionales se desplomaron hasta sus
niveles mínimos en menos de dos años y que generó desbalances fiscales en numerosos países
productores de crudo.
Al analizar la composición de la economía colombiana y los impactos que generó la crisis en los
indicadores externos, las finanzas públicas y la economía regional, se evidencia la urgencia que tiene el
país por diversificar su economía, sus exportaciones y sus fuentes de ingresos fiscales. Lo anterior, sin
dejar a un lado los altos beneficios que el sector petrolero puede generar, en materia de empleo, desarrollo
regional sostenible y estabilidad macroeconómica, sin embargo, es necesario que el país cuente con una
mayor resiliencia antes la volatilidad e inestabilidad de los precios internacionales del crudo.
4,55%
3,62%
2013
2016
Fuente: DANE
Participación PIB petrolero
en el PIB total
8,50%
-9,60%
2013
2016
Fuente: DANE
Crecimiento real PIB
petrolero
4,60%
2,10%
2013
2016
Fuente: DANE
Crecimiento real PIB total
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
20
3. La doble coyuntura de 2020: COVID-19 y la caída de los
precios
1. El COVID-19 [6]
El llamado coronavirus que mantiene al mundo en jaque con gran parte de la población confinada en sus
casas y una recesión económica que apenas comienza, surgió en diciembre de 2019 en China, cuando
cuatro personas llegaron a un hospital en la ciudad de Wuhan con un extraño cuadro de neumonía que
no respondía al tratamiento común a este tipo de afecciones respiratorias. El 31 de diciembre, las
autoridades sanitarias de la misma ciudad en la provincia de Hubei, informaron sobre la aparición de 27
personas con los mismos síntomas respiratorios, que se catalogaron como síndrome respiratorio agudo
grave con origen desconocido. Las primeras investigaciones arrojaron que todos los casos estaban
relacionados con un determinado mercado de mariscos y otros animales, algunos salvajes, ubicado en la
ciudad, con lo cual se decidió cerrar este tipo de mercados en toda la provincia.
El siete de enero las autoridades chinas anunciaron que el origen del síndrome era un nuevo virus de la
familia de los coronavirus, cuyo origen es animal, posiblemente proveniente de murciélagos, serpientes o
pangolines. Una semana después, se detectó un caso en Tailandia y otro en Japón, de personas que habían
viajado a Wuhan días antes de presentar síntomas. Ante este hecho, el mundo empezó a voltear la mirada
hacia China y hacia el virus, pues se determinó que el contagio humano a humano podía darse a través
de secreciones respiratorias como la tos, de tal manera que poseía una capacidad de propagación muy
alta.
El 21 de enero se conoció que existían casos en Estados Unidos de personas que también habían viajado
a Wuhan. El 29 de enero ya había casos en casi toda China, en Corea del Sur, Hong Kong, Reino Unido,
Vietnam, Singapur, Francia y Alemania, sumados a los casos en Tailandia, Japón y Estados Unidos. Hasta
ese día el virus había provocado 169 muertes en la provincia de Hubei.
En tan solo un mes el virus conquistó China y varios países alrededor del mundo, por lo que la
Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió declarar la situación como emergencia de salud
internacional. En ese momento había más de 7.000 casos, 83 de los cuales estaban en otros países
diferentes a China y casi todos tenían antecedentes de viaje a este país excepto por siete. Cabe resaltar que
el virus tiene un periodo de incubación de entre 7 y 14 días, por lo que los casos conocidos hasta ese
momento estaban muy por debajo de los casos reales.
Dos semanas después de declarada la situación de emergencia internacional, los casos se multiplicaron, y
ya eran más de 46.000, la mayoría en China. Ante la grave emergencia las autoridades chinas decidieron
cerrar varias ciudades y las fronteras del país, limitando todo el comercio y el flujo de personas desde y
hacia este país. Sin embargo, la epidemia se propagaba rápidamente en el resto del mundo, y se cree que
dos hechos propiciaron un incremento exponencial en el número de casos en Europa y Asia. En primer
lugar, según el alcalde Bérgamo, Italia, el partido de la UEFA Champions League entre Atalanta (equipo
italiano) y Valencia (equipo español) habría sido el escenario perfecto para un importante contagio, con
más de 45.000 asistentes y casos ya confirmados en ambos países.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
21
En segundo lugar, según BBC News, una mujer en Corea del Sur, contagiada con coronavirus, habría
tenido contacto con más de 1.000 personas en un culto religioso, de tal manera que este país pasó de
tener 31 contagiados a más de 1.000 en un par de días. España tuvo como agravante las protestas del 8 de
marzo por el día de la mujer que reunieron a miles de personas en las calles de las principales ciudades,
en especial en Madrid.
Italia y España, en efecto, han sido los países más golpeados por la infección en Europa, superando a
China en número de casos y en muertes asociadas. Al inicio de la epidemia, las autoridades chinas
hablaban de una tasa de mortalidad de entre 0,4 y 4%, sin embargo, el impacto en los dos países
mencionados generó alerta en el mundo, y demostró que las condiciones de los sistemas de salud y el
número de pruebas realizadas eran indicadores fundamentales para lograr una tasa de mortalidad baja.
Europa tuvo poco tiempo para prepararse cuando se dispararon los contagios, pues lo hicieron de forma
exponencial y los sistemas de salud en especial de Italia y España colapsaron rápidamente. El virus con el
pasar de los días se propagó en el Reino Unido, Francia y Alemania con miles de casos confirmados en
solo dos semanas.
El 11 de marzo, la OMS decidió caracterizar la situación como pandemia, mientras los casos superaban
los 100.000, con presencia en 114 países y más de 4.000 muertes asociadas. Con este anunció, se inició
una campaña mundial para preparar a los países donde no había llegado el virus con estrategias que
garantizaran la adecuada contención del virus, en especial en aquellos países con sistemas de salud
precarios. Posteriormente, el 26 de marzo Estados Unidos superó a China en número de casos, y se
convirtió en el foco de mayor infección a nivel mundial, con la tasa de contagio más alta del mundo que
crece exponencialmente todos los días. En este momento el panorama es muy preocupante, pues el
mundo ya tiene más de 2,5 millones de casos, con más de 150.000 muertes asociadas y 600.000 personas
recuperadas.
Es importante destacar que, así como han crecido los casos de COVID-19 en el mundo, el número de
recuperados también crece rápidamente, la curva de crecimiento de China y Corea del Sur se aplanó, y
las de Italia y España empiezan a aplanarse. El mundo se enfrenta a una fase de mitigación, y en un par
de semanas se conocerá el resultado del confinamiento obligatorio de un gran número de países.
Ahora bien, además de la crisis sanitaria y el impacto a los sistemas de salud de más de 180 países, el
COVID-19 ha impactado la economía global generando una de las peores recesiones en la historia
reciente. El confinamiento ha detenido cientos de industrias, dejando en funcionamiento solo a las
esenciales que producen alimentos, bebidas, medicamentos y servicios básicos, entre otras cuya activa
función depende de las políticas adoptadas por cada país. El turismo y la aviación se detuvieron por
completo, dejando a miles de empresas al borde de la quiebra, y a millones de personas sin trabajo y sin
ingresos. El comercio de bienes y servicios entre países se limitó, de tal manera que el intercambio se
redujo a bienes esenciales y algunos pocos de capital y materias primas. La industria petrolera ha sido una
de las más afectadas de esta situación, pues ha impactado la demanda de los principales compradores de
crudo en todo el globo: Estados Unidos, China y la Unión Europea, generando una importante reducción
en el consumo y un exceso de crudo en el mercado que empujó los precios a la baja.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
22
2. ¿Qué sucede con los precios?
Hasta el viernes seis de marzo, el mercado del petróleo se movía en un equilibrio inestable, que venía
experimentándose desde hace por lo menos 10 meses. El lunes nueve, con el shock generado por la falta
de acuerdos para el control de la oferta, en la reunión de la OPEP+, y las radicales decisiones individuales
anunciadas por algunos de sus miembros de incrementar su producción, el mercado entró en una
turbulencia de magnitudes no vistas desde 1991, en la Guerra del Golfo, que llevaron a los precios a
niveles de 30 dólares por barril, una caída de más del 24% en una sola jornada, que se sumó a la caída en
las bolsas, que tuvieron ese mismo lunes su peor día desde la crisis financiera de 2008.
Por si fuera poco, desde mediados de enero, con la aparición del COVID-19 en China y su dispersión en
todo el mundo, gran parte de la población mundial se queda en casa para evitar contagios y el colapso
masivo de los sistemas de salud. De esta manera, se ha contraído el consumo de crudo y combustibles, y
se prendieron todas las alarmas sobre la gran brecha que habría entre oferta y demanda, y que arrastra los
precios a la baja.
La situación actual es inusual para la historia del mercado petrolero, puesto que al tiempo se juntan, un
choque por una sobreoferta de crudo, por una parte y por la otra, una contracción de la demanda, que
afecta a todo el mercado, pero principalmente a los países que no puedan continuar produciendo a los
niveles de hoy día, por razones de eficiencia y sostenibilidad operacional y financiera, especialmente en
plays que conllevan altos costos y que tiene alta sensibilidad a los precios.
En este sentido, en lo corrido del año, al 15 de abril, el precio Brent se ubica en promedio en 48,4
USD/BL, 24,5% por debajo del promedio anual de 64,4 USD/BL de 2019 y 23,1% por debajo del
promedio del primer trimestre de 2019. Desde 2016 no se observaba un nivel de precios con una
tendencia tan marcada a la baja, ni una coyuntura internacional tan volátil, tanto del lado de la demanda
como de la oferta.
El papel de OPEP+ y G20
Tras la crisis de 2014 explicada por la caída en los precios del crudo, los grandes países productores se
unieron para incentivar el mercado y compensar el exceso de petróleo, generado principalmente por la
implementación del Fracking en Estados Unidos, y así buscar que los precios incrementaran, con el
objetivo de recuperar los ingresos en el sector y balancear sus presupuestos nacionales. De esta manera,
en 2016 surgió el acuerdo de la OPEP+, que reunió a los 13 miembros de la OPEP y otros países
productores de crudo, encabezados por Rusia, el mayor exportador de este commodity en el mundo en
ese momento. Este pacto, en efecto, logró que los precios llegaran a cotizarse sobre los 86 USD/BL en
octubre de 2018, 60 USD/BL por encima del piso de 26 USD/BL de enero de 2016, dándole incentivos
al sector para seguir creciendo.
A finales de 2019, debido a la debilidad de la demanda, principalmente por la guerra comercial entre
Estados Unidos y China, los dos principales consumidores de crudo en el mundo, el cartel pactó recortar
su producción en 1,2 millones de barriles al día hasta marzo de 2020, acción que permitió mantener los
precios sobre los 60 USD/BL, en el referencial Brent.
Hoy, el sector se enfrenta a una nueva tendencia de precios a la baja, donde la OPEP+ tiene un papel
fundamental para compensar la falta de demanda en el mundo, dada la crisis del COVID-19. A inicios
de marzo, la organización se reunió en Viena para analizar la situación del mercado y la tendencia a la
baja en precios.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
23
En dicha reunión, los 13 países miembros del cartel propusieron ampliar el recorte en la producción de
petróleo en 1,5 millones de barriles al día, la reducción más alta desde la crisis financiera de 2008,
alcanzando así un recorte total de 2,7 millones de barriles.
Sin embargo, Rusia no aceptó tal recorte, argumentando que no perdería su poder de mercado, pues ello
permitiría que Estados Unidos se convirtiera en el mayor exportador de crudo, y sostuvo así mismo que
su economía tiene la capacidad de sostenerse con un barril sobre los 42 USD/BL. Por su parte, Arabia
Saudita maneja un presupuesto fiscal con crudo a 83 USD/BL, nivel que le da mayor margen de maniobra
geopolítica a Rusia.
Estos valores corresponden al precio con el cual se mantienen estables los ingresos fiscales de estas
economías, pero cabe destacar que el precio breakeven bajo el cual las estatales petroleras de estos países
pueden producir sin pérdidas, es de 17 USD/BL para Arabia, y de 32 USD/BL para Rusia, lo que implica
una muy alta dependencia de la economía saudí al petróleo [8].
Es así como, a partir de dicha reunión, se inició una guerra de precios que terminó de inundar el mercado
de crudo y de lapidar los precios, que cayeron 25% en una sola jornada, pasando de 45,8 USD/BL a 34,3
USD/BL, y siguió una tendencia a la baja, hasta un nivel donde se hacía indispensable una intervención
conjunta. Todos los productores en el mundo actualmente se enfrentan a grandes pérdidas (incluso
superiores a las de la crisis iniciada en 2014) y al riesgo de tener que cerrar pozos y reducir gastos para no
incurrir en sobrecostos de almacenamiento.
De esta manera, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió mediar diplomáticamente
entre Arabia Saudita y Rusia, con el objetivo de acercar las partes y explorar un posible acuerdo que
reactive el sector, y señaló, a través de su cuenta de Twitter, que habló con los mandatarios de estos dos
países, asegurando que sostuvieron conversaciones en pro del mercado e indicó que reducirían su oferta
en 10 millones de barriles diarios. Tras el anuncio, el régimen de Riad hizo un llamado a la OPEP+ para
reunirse lo más pronto posible y alcanzar un acuerdo justo, que restableciera el equilibrio del mercado e
hiciera frente a la disminución de la demanda causada por el COVID-19.
Así mismo, en el marco de estas discusiones, los países miembros del G20 decidieron reunirse el 10 de
abril, para evaluar la crítica situación de la industria y determinar así acciones que, complementarias a la
decisión de la OPEP+, permitieran incentivar el mercado. El grupo, que reúne a más del 60% de la
población mundial y un 85% del PIB mundial, buscaba adicionar a los recortes de la OPEP+ otros
provenientes de países como Canadá y Estados Unidos, países no pertenecientes al cartel [9].
3. Panorama de la oferta
Producción
En 2019, según la EIA, la oferta total de crudo cerró en promedio en 100,7 millones de barriles al día,
0,2% por debajo del promedio registrado en 2018 de 100,9 millones de barriles. Esta reducción se debe
a diversos factores. En primer lugar, a partir de enero de 2019, la OPEP comenzó a reducir su oferta de
crudo en 1,2 millones de barriles al día, siguiendo el pacto firmado el 7 de diciembre de 2018 por los
miembros de la OPEP y sus aliados, encabezados por Rusia. Parte de la reducción total de la oferta del
cartel se explicó por conflictos internos de algunos países pertenecientes al cartel. Este es el caso de
Venezuela, cuya producción durante 2019 cayó a mínimos históricos por debajo de 700 KBOPD, cuando
este país ha llegado a producir hasta 3,5 millones de barriles. En este mismo año, solo la OPEP produjo
29,4 millones de barriles al día, 0,4 millones menos que el suministro de 2018. El resto del mundo
incrementó su producción en 2 millones de barriles al día, jalonados en especial por Estados Unidos, que
alcanzó una producción récord de 12,3 millones.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
24
El panorama del mundo cambió radicalmente este 2020, los drivers que mueven el mercado son
diferentes y la producción ha estado determinada por decisiones políticas y por respuestas del mercado
ante los bajos precios. Según el último informe de la OPEP, el cartel incrementó su producción en 821
KBOPD en marzo de 2020, alcanzando un promedio de 28,61 millones de barriles al día. Este
incremento se explica por la guerra de precios entre Arabia Saudita y Rusia, de tal manera que la
producción saudí es responsable de un 50% del incremento del cartel. Otros miembros como Argelia,
Angola, Gabón, Kuwait, y Emiratos Árabes Unidos contribuyeron con el incremento del 50% restante. A
estos aumentos se contraponen Libia y Venezuela, que por sus conflictos políticos internos continúan
disminuyendo su producción [10].
Según las estimaciones de la organización y fuentes secundarias al cartel, la producción de Rusia
incrementó 100 KBOPD en marzo. El suministro estadounidense se ubicó en 12,7 millones de barriles
al día, manteniendo la tendencia de crecimiento que lleva desde enero [10].
Fuente: Informe mensual OPEP, EIA, Rystad Energy
Sin embargo, a partir del segundo trimestre del año y con el acuerdo alcanzado por la OPEP+ y el G20,
más los recortes voluntarios de algunos países del Golfo Pérsico, se espera que la producción caiga, en
especial en mayo y junio, cuando se estipula el inicio de los recortes. Además, los bajos precios no son
económicamente viables para continuar con algunas operaciones, de tal manera que habrá recortes para
muchos países tanto de la OPEP como del resto del mundo, que se sumarán a los acuerdos.
Capacidad de almacenamiento
Con la guerra de precios iniciada el seis de marzo, la estatal petrolera de Arabia Saudita, SAUDI
ARAMCO, señaló que aumentaría su producción hasta los 12 millones de barriles al día, para incrementar
las presiones a la baja en precios y obligar así al gobierno ruso a retomar la alianza, con el objetivo de
incrementar los precios. Así mismo, Rosneft, la estatal petrolera rusa, señaló que incrementaría
producción en 500 KBOPD en las siguientes dos semanas, como respuesta a la amenaza saudí. Todo
ello, en el marco de que el anterior acuerdo de reducir 1,2 millones de barriles al día culminaba el primero
de abril, adicionando también esta oferta al mercado.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
25
Por tanto, esta coyuntura llevó a una situación en la que el mundo se encuentra inundado de petróleo por
el incremento en la producción, junto con una pronunciada caída en la demanda, dado el confinamiento
de gran parte de la población global. Este excedente crece rápidamente y, con él, una grave problemática
sobre la capacidad de almacenamiento de crudo, pues ésta es limitada y podría toparse durante el segundo
trimestre del año. Analistas de Citigroup han estudiado la capacidad de almacenamiento de la industria,
y señalan que aún habría espacio para almacenar unos 1.300 a 1.600 millones de barriles, pero el ritmo
de producción es tan acelerado que este podría agotarse pronto. Los países productores deben tomar
acciones inmediatas, pues una vez se alcance la capacidad instalada de almacenamiento, no será viable
seguir produciendo, independientemente del precio del crudo.
Bloomberg informó el pasado 8 de abril que, debido al exceso de crudo en el mercado, comerciantes de
la OPEP están recurriendo a utilizar la flota mundial de grandes buques petroleros para almacenar
millones de barriles que aún no pueden ser despachados, dada la falta de demanda de los grandes
consumidores. A pesar de que se presenta esto como una alternativa para ampliar la capacidad de
almacenamiento del cartel, el precio del transporte de crudo en estas estructuras se ha multiplicado, de
tal manera que pasaron de pagar una tarifa de flete de 18.000 dólares al día a casi 400.000 diarios.
En este sentido, Marco Dunand, el cofundador de Mercuria Energy Group, la principal empresa
comercializadora de petróleo, estima que 250 millones de barriles de crudo y productos refinados ya se
encuentran abordo de buques petroleros, ya sea como almacenamiento flotante o esperando ser
descargados, teniendo en cuenta que las refinerías no pueden aceptar más crudo en este momento. Esto
nos indica que la capacidad normal de varias empresas ya está en su límite y se han tenido que buscar
alternativas de almacenamiento. Este hecho generó tal incertidumbre en el mundo que obligó a acelerar
las conversaciones de la OPEP+, para evitar un escenario aún más dramático para el sector.
Fuente: Rystad Energy
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
26
4. El Acuerdo
A la luz de una profunda crisis para la industria petrolera en todo el mundo, se confirmó el pasado
domingo que la OPEP+ resurge con un nuevo acuerdo de reducción de oferta, el más alto en la historia
de la organización. Las negociaciones empezaron el jueves pasado con buenas perspectivas, pues tanto
Arabia Saudita como Rusia se mostraron abiertos al acuerdo anunciado por D. Trump. Debido a la
coyuntura, la OPEP+ reunió a un círculo de países más amplio para extender el poder sobre el mercado,
incluyendo a las 13 naciones que pertenecen al cartel de la OPEP y a aliados como Rusia, Noruega,
Kazajistán, Omán, Egipto, México, entre otros. El objetivo inicial era llegar al acuerdo de reducir la oferta
en los 10 millones de barriles al día que anunció D. Trump la semana anterior, estableciendo cuotas para
cada integrante y evaluando la viabilidad de recortes más amplios.
La OPEP+ decidió, el domingo 12 de abril, recortar su producción en 9,7 millones de barriles al día por
dos meses, a partir del primero de mayo hasta el 30 de junio. Esta cifra representa un 10% de la
producción de petróleo global antes de la crisis. Cuando finalice el acuerdo el 30 de junio, no se
reestablecerá la producción total, sino que el recorte bajará a ocho millones de barriles de julio a
diciembre, y a seis millones a partir de enero de 2021. Este es el recorte más amplio en la historia de la
OPEP+ y la apuesta más grande de los países petroleros en una alianza que incentive el mercado y
compense la caída de la demanda por el COVID-19 [12].
El reto más significativo que enfrentaron las negociaciones fue la negativa de México de recortar su
producción. A la delegación mexicana se le propuso un recorte de 400 KBOPD al día, equivalente a un
23% de su producción, el cual rechazaron, presentando una contraoferta de 100 KBOPD.
Ante la negativa del gobierno mexicano de recortar la cifra propuesta, las negociaciones tambalearon y
hubo temor de no llegar a un acuerdo, provocando que los precios abrieran el lunes a la baja. Sin embargo,
Estados Unidos se comprometió a retirar del mercado los 300 KBOPD que México no aceptó, para evitar
más disputas al interior de la OPEP+ y alcanzar el anhelado acuerdo. El presidente Donald Trump
aseguró que México reembolsará más tarde la intervención estadounidense que logró finalmente el
acuerdo.
Posteriormente, en la reunión del G20, grupo de las principales economías del planeta, se acordaron
recortes adicionales de 3,7 millones de barriles al día a partir de mayo, para apoyar la decisión de la
OPEP+ y contribuir a la recuperación del sector. El grupo señaló que estarán dispuestos a tomar las
medidas necesarias para garantizar la estabilidad del mercado energético, pues una energía asequible y
segura son claves para garantizar el bienestar de la población, en especial en tiempo de crisis. Al respecto,
el ministro de energía de Rusia, Alexander Novak, señaló que confía en que los países al margen de la
OPEP+ lleguen a recortar hasta 5 millones de barriles al día, para contribuir a la estabilidad del mercado
[9].
Además de los 13,2 millones de la suma de OPEP+ y el G20, Arabia Saudita, Emiratos Árabes y Kuwait
anunciaron recortes voluntarios adicionales de dos millones de barriles al día, pues estas economías son
dependientes de los ingresos petroleros, por lo que los precios bajos son negativos para equilibrar sus
presupuestos fiscales. En total, los anuncios oficiales suman un recorte en oferta de 15,2 millones de
barriles al día, 6 millones por encima del anuncio del presidente Donald Trump.
El mandatario estadounidense, junto con varios medios, han señalado esta semana que el recorte será de
20 millones de barriles, aunque no se conoce aún el origen de los 4,8 millones adicionales que han
anunciado. Esta cifra proviene de especulaciones por efecto del mercado, pues varias empresas se verían
obligadas a hacer recortes por los bajos precios, pero, por el momento, las autoridades no han anunciado
más reducciones además de las pactadas.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
27
A pesar de este histórico acuerdo, el mercado no respondió como se esperaba y el Brent se mantuvo
sobre los 30 USD/BL, y bajó a los 27 USD/BL en las jornadas siguientes. Este hecho puede tener varias
explicaciones. En primer lugar, el mercado ya descontaba un recorte de al menos 10 millones de barriles
al día, como anunció el presidente Trump vía Twitter, y ya había reaccionado pasando de 22,8 USD/BL
a 34 USD/BL para el Brent en la semana del 30 de marzo al 3 de abril. En segundo lugar, las
preocupaciones sobre la demanda impiden que el precio suba, pues no se sabe si los recortes sean
suficientes para cerrar la brecha de oferta y demanda. Por último, se anunció que los recortes empezarían
a partir de mayo, de tal manera que en lo que resta de abril seguirá existiendo un alto excedente de crudo,
junto con la problemática que representa su almacenamiento.
5. Demanda
Desde 2019 la demanda de crudo se ha venido debilitando por cuenta de la guerra comercial entre
Estados Unidos y China, pues este choque impactó económicamente a ambas naciones, las mayores
consumidoras de crudo en el mundo. Finalizando el año, el preacuerdo comercial entre estos dos países
le dio un respiro a la demanda de crudo, y cerró por encima de la oferta en unos 0,6 millones de barriles
al día.
Sin embargo, la demanda se enfrenta a un nuevo desafío, donde el COVID-19 es el centro de atención
de la economía mundial y las organizaciones internacionales. El mundo se encuentra en una situación de
salud pública cuyo impacto pasó de ser únicamente sobre el mercado bursátil a tener efectos sobre la
economía real. El sector petrolero fue uno de los primeros en sufrir afectaciones sobre su actividad, pues
los precios marcaban una tendencia a la baja desde febrero, la cual terminó por sellarse comenzando
marzo.
Esta tendencia se explica en buena parte por las preocupaciones sobre el crecimiento de la demanda en
2020, pues China, epicentro del virus, cerró sus fronteras y frenó el comercio desde y hacia este país, en
un esfuerzo por controlar la epidemia.
Debido a la globalización y el creciente movimiento de bienes, servicios y capital humano en todo el
mundo, la propagación del COVID-19 se hizo inevitable, obligando a otras grandes economías a sumarse
a China con los cierres fronterizos y la suspensión de gran parte de la actividad comercial y económica.
Europa se convirtió en el nuevo epicentro de la epidemia, de tal manera que la demanda de crudo ya no
solo se limitaría para China, sino también para los países europeos que tuvieron que tomar medidas
extremas para mitigar el colapso de sus sistemas de salud. Solo considerando estas dos zonas del mundo,
el 30% de la demanda agregada de crudo se verá severamente afectada durante el tiempo que se extienda
la pandemia.
En Estados Unidos, la propagación ha sido exponencial, obligando a varios estados a cerrar sus fronteras
e imponer una cuarentena obligatoria. Este hecho pone en riesgo otro 20% del consumo de petróleo
global, de tal manera que un 50% de la demanda está en juego [13].
A esto se suma la caída en el consumo de combustibles, pues en un escenario donde gran parte de la
población mundial está confinada en sus casas y donde se han cancelado miles de vuelos en todo el mundo
como parte de las restricciones, es de esperar que la demanda siga cayendo, hasta que se recupere un
ritmo de vida normal en la mayor parte del mundo.
Aunque aún no se conocen las cifras reales de consumo de crudo mundial, algunos analistas estiman que
la reducción estaría entre 20 y 30 millones de barriles al día, de los 100 millones demandados en promedio
durante 2019. La AIE, por ejemplo, estima que se han dejado de demandar unos 20 millones de barriles
al día, mientras analistas como Saad Rahim, economista jefe de Trafigura, la principal comercializadora
de productos transables, es más pesimista y asegura que la demanda puede caer en 30 millones de barriles
al día.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
28
Por el momento se conoce que China redujo en marzo su consumo de crudo un 5%, equivalente a una
reducción de 4 millones de barriles al día. La mayor parte del petróleo comprado por el gigante asiático
fue destinado a sus inventarios, mas no a consumo, pues dada la cuarentena obligatoria y el estancamiento
de la economía, no se consume todo el crudo que se importa [14]. Por otro lado, la EIA señaló que
Estados Unidos redujo su consumo en 1,3 millones de barriles al día, también por el efecto del virus y el
confinamiento de algunos estados. Hasta el momento solo se conoce el recorte de 5,3 millones de barriles
al día en consumo, pero se estima que sumado al golpe en demanda de Europa y el resto del mundo, se
llegue a la reducción total señalada de entre 20 y 30 millones de barriles al día [15].
En este momento predomina la incertidumbre, el mercado carece de la información suficiente para
reaccionar al nuevo recorte y prevalece el efecto de la demanda sobre los precios. Hasta no conocerse el
impacto real del COVID-19 sobre el consumo de los actores ya mencionados, será difícil evaluar qué
tanto se cierra la brecha con el acuerdo y qué tan rápidamente podría recuperarse la demanda una vez
pasada la pandemia.
6. Reacciones del Gobierno Nacional1
La coyuntura actual representa un reto sin precedentes para los gobiernos de todo el mundo. A lo largo
de la pandemia se han tomado decisiones radicales para contener la propagación del virus y evitar el
colapso masivo de los sistemas de salud. Estas decisiones traen costos económicos altos, y visibilizan
problemáticas sociales profundas de muchos países. Esta crisis involucra todos los sectores, representa un
reto sanitario, social, político, demográfico, y económico.
En Colombia esta crisis ha mostrado varios problemas que persisten desde hace varios años, y que no han
sido debidamente tratados. Entre estos está el sistema de salud colombiano, que, a pesar de tener varias
ventajas por encima de otros países de la región, no cuenta por sí solo con la capacidad suficiente para
atender la gran cantidad de enfermos que trae el contagio del COVID-19. Además de falta de insumos,
no hay suficientes camas en unidades de cuidados intensivos (UCI) para hacer frente a la enfermedad.
Este es el primer reto que el Gobierno Nacional tuvo que enfrentar, pues es el primer frente de batalla al
que ataca el virus. De esta forma, se destinaron nuevos espacios en todo el país para atender enfermos en
Bogotá, epicentro de la enfermedad en nuestro país, y en otras grandes ciudades donde el virus puede
dispersarse rápidamente por su densidad poblacional.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, gestionó la adaptación del centro de convenciones Corferias como
hospital para la atención de personas contagiadas con COVID-19 de mediana y baja complejidad, para
liberar a los hospitales de un gran volumen de enfermos y destinar los recursos de los centros
especializados en el tratamiento de casos de alta complejidad. El Gobierno Nacional habilitó el Hotel
Tequendama para el mismo efecto, y el parqueadero del Hospital Militar para expandir su capacidad,
teniendo en cuenta que es uno de los hospitales más grandes de la capital. El resto de los hospitales en el
país empezaron una campaña para adecuar sus espacios y atender de manera eficaz a los futuros enfermos,
ampliando en especial las UCI y capacitando a todo su personal en cuanto a desinfección y tratamiento.
Además de la capacidad hospitalaria, el Ministerio de Salud, encabezado por el ministro Francisco Ruíz,
desplegó una campaña de información para todos los colombianos, donde se puso a disposición toda la
1 Toda la información y los decretos expedidos por el Gobierno Nacional se encuentra en
https://coronaviruscolombia.gov.co/Covid19/acciones-del-gobierno.html
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
29
investigación conocida sobre el nuevo coronavirus, junto con protocolos de desinfección y autocuidado.
A partir del 11 de marzo, se decidió restringir los eventos de más de 500 personas en todo el país,
suspendiendo así todos los eventos deportivos, culturales, conciertos, convenciones etc. Esto con el objeto
de evitar contagios masivos, como sucedió en España e Italia, y otorgar a los centros médicos más tiempo
de preparación y adecuamiento.
Con la declaración de pandemia de la OMS, el Gobierno Nacional decidió imponer medidas de
restricción más fuertes, prohibiendo los eventos de más de 50 personas, e invitando a las empresas a
implementar el teletrabajo para sus empleados en la medida de lo posible. Además, se suspendieron las
visitas a centros carcelarios, el desembarco de cruceros en los puertos colombianos, y protocolos de
tratamiento en los hoteles de todo el país. Debido al impacto de esta medida en el turismo, Bancoldex
habilitó una línea de crédito por 250 mil millones de USD para las empresas asociadas a este sector y a la
aviación, y determinó que se aplazaría su declaración de IVA hasta fin de año.
El Banco de la República, por su parte, anunció medidas de liquidez en pesos, como el aumento de cupo
en REPOS y la ampliación de la participación de entidades financieras, y subastas forward de
cumplimiento financiero por mil millones de dólares, para inyectar liquidez en la moneda extranjera.
A partir del 13 de marzo, ante el aumento de casos importados, el Gobierno Nacional decidió cerrar las
fronteras con Venezuela y restringir la entrada de personas no residentes ni ciudadanos colombianos, que
hayan estado en Europa y Asia. Posteriormente, el 16 de marzo, la restricción se amplió para todos los
viajeros que llegaban de cualquier parte del mundo, imponiendo, además, una cuarentena obligatoria de
14 días para los colombianos que llegaban de viaje. El aumento de los casos obligó, finalmente, a cerrar
todas las fronteras durante 75 días.
Con la expansión del virus se evaluaron otros espacios de alta aglomeración de personas, como colegios
y universidades, y se tomó la decisión de suspender las clases presenciales en ambos recintos tanto
públicos como privados, promoviendo su continuación virtual. Sin embargo, todas las medidas no fueron
suficientes, por lo que el presidente, Iván Duque, tomó la decisión de declarar estado de emergencia,
convocando el artículo 215 de la Constitución y otorgándole al mandatario facultades para tomar
decisiones y expedir decretos sin la previa aprobación del congreso, por un término de 30 días
prorrogables a 60.
Tras la declaración presidencial, se tomó la decisión de decretar cuarentena obligatoria para todos los
colombianos, con 39 excepciones para las operaciones que no pueden detenerse, como algunos pozos de
perforación petrolera, y para todas las actividades de primera necesidad, como alimentación, farmacia y
transporte de personal.
La situación de emergencia evidenció un grave problema social en el país: la informalidad laboral. Gran
parte de la población fue obligada a mantenerse en sus casas con opción de salir solo para comprar
alimentos y/o medicamentos, para consultas bancarias o para citas médicas. Sin embargo, un 48% de la
población ocupada es informal, y depende de sus ingresos diarios para sobrevivir. Muchos colombianos
de repente se quedaron sin ingresos, a lo cual el Gobierno Nacional respondió otorgando subsidios,
devolviendo el IVA a las familias más vulnerables, y dando un ingreso solidario a hogares no cubiertos
por programas sociales y que se encuentren en informalidad.
Así mismo, la superintendencia financiera estableció varios alivios para empresas y personas naturales que
tengan créditos de consumo, hipotecarios, de vivienda, etc, con periodos de gracia, aumento de plazos,
entre otros, según la entidad financiera asociada. A esta iniciativa se suman las líneas de crédito para micro,
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
30
pequeñas y medianas empresas que necesiten cubrir gastos, en especial de nómina, esto con el fin de
proteger el empleo. Se creó el Fondo de Mitigación de Emergencias (FOME) para atender necesidades
del sector salud y la afectación en el sector económico a causa del COVID-19. Mediante este fondo se
atienden gastos que no cubre el Presupuesto General de la Nación (PGN), y se provee financiamiento
directo a empresas públicas o privadas. A través de Findeter se abrió una línea de crédito por 713 mil
millones de pesos para empresas de cualquier sector que requieran un crédito para enfrentar la coyuntura.
Además, se suspendió el pago de parafiscales durante la cuarentena, aliviando cargas a las empresas más
afectadas. Para más información sobre las medidas de alivio del Gobierno Nacional consulte nuestros
documentos Orientación a las Compañías de Bienes y Servicios Petroleros y Monitoreo de Entorno,
donde se analizan cada uno de los apoyos a las empresas y los decretos hasta ahora expedidos desde el
inicio de la crisis
Ahora bien, en cuanto al sector petrolero, la ANH anunció un proyecto con medidas transitorias para
mitigar los efectos de los precios internacionales bajos y de la pandemia. La Agencia aseguró que el sector
deberá enfrentar un nuevo normal de precios bajo a lo largo del año, por lo que se hace indispensable
fortalecer el sector y mantener a flote su reactivación. De esta manera en el Acuerdo 2 del siete de abril
de 2020, se aplican medidas transitorias a los contratos de evaluación técnica, exploración y producción
de hidrocarburos, así como para los convenios de exploración y explotación. Además, podrán pactarse
extensiones de los plazos correspondientes a las siguientes etapas de la ejecución contractual, conforme a
las condiciones y requisitos del contrato y teniendo en cuenta que este no debe estar suspendido.
La extensión en los términos y plazos se aplicará en distintas etapas del periodo de exploración a las
actividades del programa de evaluación, en las declaraciones de comercialidad y en la presentación de los
planes de explotación o desarrollo de un campo comercial. Bajo nueve reglas se podrá llevar a cabo este
proceso, según precisó la entidad [16].
Se modificaron, además, las vigencias y porcentajes en las garantías de cumplimiento, donde la ANH
podrá otorgar autorización para la reducción y constitución de nuevas cartas de crédito y/o garantías
bancarias, siempre y cuando el valor resultante de la actividad se mantenga soportado con respaldo
financiero. Si se desea trasladar la actividad o la inversión en exploración entre contratos, la solicitud se
hará a la entidad sin tener que hacer una inversión adicional, según lo establecido en el Acuerdo 1 del 30
de marzo del presente año [17].
El gran paquete de ayudas para todos los sectores, presentado hasta el momento por el Gobierno
Nacional, involucra una gran inversión, que se traduce también en más endeudamiento. Desde el
Ministerio de Hacienda y Crédito Público, se anunció que se dispondrán de todos los instrumentos
necesarios para enfrentar la crisis sanitaria y la recesión económica que viviremos a lo largo del año. Cabe
destacar que el pasado 15 de abril finalizaron los 30 días que dura el estado de emergencia, y que le
otorgan al presidente, Iván Duque, a tomar decisiones y establecer decretos sin consultar con el Congreso.
Así mismo, el Congreso de la República reinició sesiones a partir de esta semana, con el fin de evaluar las
medidas que se necesitarán a partir de ahora y que necesitarán aprobación previa.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
31
4. ¿Hacia dónde nos lleva la actual coyuntura?: Una
perspectiva de la crisis sobre los precios y los niveles de
producción
1. La Geopolítica y precios del petróleo
Además del análisis sobre los hechos estilizados del mercado, es importante identificar los pronósticos de
los analistas más importantes sobre el futuro en el corto plazo del balance del mercado y de los precios,
pues los commodities se liquidan a futuro, bien sea en las jornadas siguientes al cierre, o en forwards a
plazos hasta de 5 años. Por lo tanto, las expectativas del mercado también impactan las negociaciones
jornada tras jornada.
Estos pronósticos se realizan tomado en cuenta múltiples variables, desde los valores observados de oferta
y demanda agregada, y las cotizaciones en las jornadas anteriores del crudo, hasta variables
macroeconómicas y políticas relevantes, como el crecimiento del PIB real global y de las potencias
productoras y consumidoras, los índices de manufactura de estos, entre otros, sumados a variable como
el clima.
Comenzando el año, la EIA estimaba que el Brent estuviera entre 65 y 67 USD/BL en el primer trimestre
de 2020, en el segundo trimestre bajara hasta 63 USD/BL y a lo largo del segundo semestre se mantuviera
en 65 USD/BL. Así mismo, otros analistas como Goldman Sachs, ANIF, Reuters y la IEA, pronosticaban
este año un precio promedio Brent entre 62 y 65 USD/BL. Sin embargo, el gran impacto del COVID-19
sobre la economía mundial alteró todos los planes de inversión de la industria, e impactó de tal manera
el mercado que los nuevos escenarios de precios están por la mitad de los planteados iniciando 2020.
El panorama actual del mercado de crudo es complejo, y tiene muchas aristas alrededor que dificultan
establecer un pronóstico. Las posiciones en el mundo son diversas, pero coinciden en que, en lo que resta
de 2020, no será posible retomar la tendencia de precios observada al iniciar el año. La EIA anticipa que
hasta finales de 2021 habrá exceso de crudo en el mercado, y que el precio terminará el año en promedio
en 33,3 USD/BL. Según la agencia, este exceso se mantendría a lo largo del 2021, año en el cual el precio
se ubicaría en promedio en 45,5 USD/BL. Esta proyección no tiene en cuenta los recientes acuerdos de
la OPEP+ y el G20, por lo que los escenarios podrían modificarse en su próxima publicación iniciando
mayo [15].
Otros analistas como Standard & Poors estiman un precio Brent promedio de 30 USD/BL, similar a
Barclays, que prevé 31 USD/BL, y a Standard Chartered Bank, que pronostica 29 USD/BL. Goldman Sachs aseguró que el recorte pactado por la OPEP+ y el G20 es insuficiente, que los precios seguirán
desplomándose y cerrarían este trimestre en 30 USD/BL, pues el impacto sobre la demanda es muy alto
y no se recuperará en el tercer trimestre del año.
Por su parte, la IEA estima que la demanda de crudo en 2020 caería un valor récord de 9,3 millones de
barriles al día, rompiendo la tendencia de crecimiento que sostiene desde hace 20 años. La agencia de
energía sostiene que este pronóstico se debe a las medidas de confinamiento en 187 países, que ha
limitado la movilidad en el mundo en un 50%. Solamente en abril la caída en demanda sería de 29
millones de barriles al día menos que 2019, es decir, que durante este mes solo se consumirían 69 millones
de barriles al día, una cifra no observada desde 1995. Además, sostienen que la recuperación será
progresiva, de tal manera que en diciembre de 2020 la caída será de 2,7 millones de barriles al día. A este
hecho se contrapone la oferta, que la agencia anticipa se reduzca en 2,3 millones de barriles al día durante
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
32
2020, teniendo en cuenta el acuerdo firmado, con lo cual se observará un exceso de oferta de 7 millones
de barriles al día al finalizar el año, la brecha más alta que se haya visto en el mercado [18].
La OPEP actualizó sus pronósticos en su último informe mensual, y revisó a la baja la producción de para
este año de los países no miembros del cartel, que caería 4,26 millones de barriles al día, de los cuales
1,05 serían recortes de Estados Unidos. Mientras, la producción del cartel caerá a partir de mayo en siete
millones de barriles al día, producto del pacto OPEP+ y de recortes voluntarios de algunos miembros. La
organización destaca el acuerdo logrado el pasado domingo 12 de abril, y señala que los impactos del
COVID-19 también generarán interrupciones en el suministro. Por el lado de la demanda, el cartel estima
que en 2020 caerá 6,9 millones de barriles al día, debido a la limitación en el transporte de crudo y a la
reducción en el consumo de combustibles. De estos 6,9 millones de barriles, sostiene que 3,7 serán
producto de una contracción en el consumo de crudo de los países de la OCDE, mientras los 3,2 millones
restantes corresponden al resto del mundo.
De esta forma, existen un consenso entre las agencias de energía y los diferentes centros de investigación
económica sobre el nivel de precios y el balance entre oferta y demanda para este año. Inevitablemente
la demanda caerá, de la mano de los precios, pero habrá que seguir monitoreando el mercado para
verificar el efecto de los acuerdos de reducción en el cierre de la brecha entre producción y consumo.
2. Producción y breakeven, ¿Hasta dónde es eficiente la producción?
El comportamiento cíclico propio de los precios del petróleo ha conducido a la mayoría de los países a
disminuir los costos operativos envueltos en el desarrollo de sus recursos, como una estrategia de choque
contra futuras crisis. Un proceso que solo ha sido posible llevar a cabo de la mano de las tecnologías y
metodologías proveídas por las compañías de Bienes y Servicios.
Gracias en gran medida a la implementación de nuevos conceptos y optimización de las operaciones, los
costos de desarrollo para la mayoría de las compañías se han visto reducidos entre un 30% y un 77%, en
comparación a los valores que tenían en 2014. Una muestra de resiliencia por parte del sector petrolero,
que se ha preparado para superar de la mejor manera las situaciones que se puedan presentar como
consecuencia de la disminución en el precio del petróleo.
13,87
10,43
6,4
14,2
19,15
10
12,25 11,85
0,00
5,00
10,00
15,00
20,00
25,00
30,00
2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019
USD
/Boe
Costos de producción antes de impuestos en diferentes países
Brasil (Petrobras) México (Pemex) Argentina (YPF) Colombia (Ecopetrol)
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
33
Fuente: Instituto Brasilero del Petróleo, Gas y Biocombustibles [19], Diario El Economista [20], Información
Financiera YPF [21]. Resultados Trimestrales Ecopetrol [22]
Sin embargo, bajo la coyuntura actual, los precios han disminuido a niveles no vistos en las últimas
décadas, llevándolos incluso por debajo del punto de equilibro de muchos recursos, principalmente a los
que tienen altos costos de producción. Dentro de este grupo se encontrarían los yacimientos en shale oil, arenas bituminosas, offshore ultra profundo y los recursos en países con altos government take, que eleven
el precio de equilibrio a pesar de tener bajos costos de producción [23].
Para el caso de Colombia, los precios de equilibrio se encuentran entre 9,9 y 56,7 USD/Bl, con un
promedio ponderado en 27,4 USD/Bl [24]. Como resultado, se deberán reevaluar algunos activos, pero
los campos con mayor producción de petróleo en el país aún mantienen sus costos de desarrollo por
debajo de los precios actuales, siendo económicamente rentables durante la coyuntura. Un escenario
diferente al del resto de la mayoría de los países productores, debido a que más del 63% tienen costos de
producción por encima de los 35 USD/Bl, lo que ciertamente impactará en la producción global.
Fuente: IHS Markit, Saudi Aramco: Programa Global a Mediano Plazo [24]
Cabe destacar que, muchas de las compañías con recursos como los mencionados anteriormente, poseen
coberturas financieras que cobijan gran parte de la producción en caso de darse una baja en el precio del
barril [25]. Sin embargo, estas coberturas no serían suficiente para compensar las operaciones en muchos
casos, lo que se reflejaría en una declinación natural en la producción de muchos campos alrededor del
mundo.
Por otra parte, debido a la tendencia que llevó el precio del barril durante los últimos dos años, muchos
países esperaban un crecimiento de este, que se reflejó en el precio del petróleo utilizado para planificar
sus cuentas fiscales. Para 2020, la mayoría de los países realizaron su presupuesto con un precio entre 42
y 195 USD/Bl, para alcanzar sus metas fiscales, muy lejos de los niveles actuales.
0,0
10,0
20,0
30,0
40,0
50,0
60,0
70,0
80,0
90,0
Cam
po
s pro
duct
ore
s…
Ara
bia
Sau
dita
Offsh
ore
Irak
Onsh
ore
UA
E O
nsh
ore
Gab
ón O
nsh
ore
Nig
eri
a O
nsh
ore
Irán
Offsh
ore
Colo
mbia
Onsh
ore
Alg
eri
a O
nsh
ore
Chad
Onsh
ore
Indonesi
a O
ffsh
ore
Guin
ea
Ecu
atori
al O
ffsh
ore
Ingl
aterr
a O
ffsh
ore
EE. U
U O
ffsh
ore
Bra
sil O
ffsh
ore
Noru
ega
Offsh
ore
Bru
nei O
ffsh
ore
Sudán
Onsh
ore
Turk
menis
tán O
nsh
ore
Mal
asia
Offsh
ore
Kaz
ajis
tán O
nsh
ore
Aze
rbai
ján O
nsh
ore
Ango
la O
ffsh
ore
Kaz
ajis
tán O
ffsh
ore
India
Offsh
ore
Aze
rbai
ján O
ffsh
ore
Chin
a O
nsh
ore
USD
/Bl
Precio de equilibrio (breakeven) por países
Rango Promedio Ponderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
34
Fuente: S&P Platts [8]
En consecuencia, la IEA proyecta que los ingresos netos para las principales economías productoras de
petróleo disminuirán 76% frente al valor obtenido en 2019, destacando que los descensos estimados
podrían ser aún mayores dependiendo del alcance final de la caída de la demanda y la desaceleración
económica [18].. Este valor representa un alto impacto para aquellos países cuyas cuentas fiscales
dependan fuertemente de las rentas petroleras, y debilita la capacidad de estos países para proporcionar
servicios esenciales a sus poblaciones, como atención médica o la educación.
Así mismo, incluso entre los países del Consejo de Cooperación del Golfo, algunos de los cuales todavía
tienen un cierto grado de amortiguación financiera contra el empeoramiento de las condiciones del
mercado, la Agencia estima que los déficits fiscales alcancen entre el 10% y el 12% del PIB este año, lo
que implicaría necesidades financieras adicionales de alrededor de entre 150 y 170 millones de USD.
Fuente: IEA [18]
46
51
55
60
70
83
88
92
100
109
195
Catar
Rusia
Kuwait
Irak
UAE
Arabia Saudita
Omán
Barein
Libia
Algeria
Irán
Precio del barril para el equilibrio fiscal de distintos países
449417
397
183145
198
280 287
70
2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020
2018 U
SD B
n
Ingresos netos de la producción petróleo en las principales economías con
los precios actuales
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
35
La actual coyuntura es una gran prueba para todo el sector. Es la primera vez en la historia de la industria
petrolera que se experimenta un choque conjunto entre oferta y demanda. La base para superar esta
situación de la mejor manera serán la austeridad en el gasto y la eficiencia de capital, que permitirán tener
operaciones costo efectivas, teniendo como base la innovación en tecnología y procesos.
3. Impactos en la Economía Internacional
Otra de las variables a tener en cuenta para la realización de este análisis, son las perspectivas
internacionales sobre el crecimiento de la economía mundial y las consecuencias del COVID-19 en el
desarrollo de la actividad comercial y productiva en todo el globo.
Los analistas coinciden en que el mundo enfrenta una de las peores recesiones en la historia reciente,
puesto que, aunque la crisis para la mayoría de las economías comenzó como un efecto bursátil por la
incertidumbre que generó la aparición del virus en China, terminó por materializarse en una crisis sin
precedentes que aún no es posible saber cuánto durará. La pandemia ha afectado a todos los sectores
productivos, en especial aquellos cuya operación quedó completamente frenada por las medidas de
cuarentena que predominan en gran parte del mundo.
En Estados Unidos, por ejemplo, el número de solicitudes de subsidios por desempleo pasó de 380.000
en promedio histórico, a 6,8 millones en solo un mes, reflejando así la gran cantidad de empleos perdidos
por las actividades económicas frenadas y las innumerables empresas que están en quiebra o al borde de
cerrar. Mientras, China, la segunda economía más grande del mundo, decreció 6,8% en el primer
trimestre del año, según informó el centro de estadística del país. Este es el peor desempeño que haya
tenido desde 1992, y el reflejo del efecto del confinamiento sobre el crecimiento del país.
Europa apenas en 2018 logró completar un largo proceso de recuperación tras la crisis financiera de 2008,
y comenzaba a dinamizar su economía, con algunas limitaciones por el alto nivel de deuda de algunos
países de la Unión Europea. Sin embargo, el Brexit puso en tela de juicio la eficacia de este tipo de bloques
económicos, y generó incertidumbre sobre su impacto en la economía de toda la UE, y sobre el futuro
de las relaciones entre los países miembro. Con la llegada del COVID-19, la incertidumbre se exacerbó,
y se limitó el desarrollo de algunas de las actividades más importantes de toda la zona.
Por su parte, Latinoamérica es una zona caracterizada por tener problemas sociales, pues la mayoría de
los países latinos son economías en desarrollo, que, además, dependen de los ingresos por la venta al
exterior de commodities como petróleo y carbón. A pesar de que es la zona del mundo que más tiempo
de preparación tuvo ante la inminente llegada del virus, no ha tenido un menor impacto sobre sus
economías, por el contrario, ha obligado a varios países, entre ellos Colombia, a solicitar créditos externos
del FMI para financiar la crisis. Buena parte de las economías latinas tienen problemas de informalidad,
desempleo y pobreza persistentes, que se agudizan con la cuarentena obligatoria que se vieron obligados
a implementar. Gran cantidad de personas calificadas como pobres sobrepasarán la línea de pobreza
multidimensional y entrarán en pobreza extrema cuando pase la pandemia, se tendrán tasas de desempleo
de dos dígitos y miles de micro y pequeñas empresas entrarán en quiebra.
El FMI ha dispuesto líneas de crédito para varios países en todo el mundo, que les permitan financiar
tanto la crisis sanitaria como la económica. Sin embargo, la directora del fondo, Kristalina Gerogieva,
señaló el pasado 15 de abril que la crisis económica que enfrenta el mundo es la peor que se haya
observado en más de 100 años, y es solo comparable con la Gran Depresión de 1929. Destacó que la
institución está a la altura de la situación, y dispuesta a ayudar a los países que más lo requieran. Así como
las personas con condiciones médicas preexistentes son más vulnerables al COVID-19, las economías
con problemas previos serán las más golpeadas por la crisis, indicó la funcionaria.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
36
El organismo internacional prevé que más de 170 países decrezcan este año, y que aquellos que no
presenten crecimientos negativos, apenas tendrán variaciones entre 0 y 1%. De esta manera, se espera que
la economía global crezca -3% este año, pero con un ritmo de recuperación positivo apenas se retome la
vida normal y pase la pandemia. Alejandro Werner, funcionario del FMI, advirtió que la situación sería
más crítica en Latinoamérica, cuya economía regional crecerá -5.2%, y se enfrentaría a una posible nueva
década perdida por la crisis. Los países más afectados serían México y Ecuador, con variaciones en su
PIB de -6%, seguidos de Brasil (-5.3%), Argentina (-5,7%), Chile (-4,5%) y Venezuela (-15%). Este último
con problemas económicos, políticos y sociales muy fuertes y persistentes desde hacer varios años [26].
El Banco Mundial, por su parte, sostuvo que tiene a disposición 160.000 millones de dólares para
distribuir en los próximos 15 meses, y publicó el informe La Economía en los Tiempos del COVID-19,
donde prevé que Latinoamérica retroceda 4.6% en 2020, y que las economías más afectadas sean la de
México, decreciendo 6%, Argentina, con -5,2% y Brasil, con -5%. Sin embargo, estima que para 2021 el
panorama mejore y la región crezca 2,6% [27].
Cabe destacar que ambos organismos establecen la protección a la vida como prioridad, y hacen
recomendaciones para que los gobiernos tengan el mejor manejo de la situación, poniendo a disposición,
además, amplias líneas de crédito que le den solvencia a las economías más vulnerables, y teniendo en
cuenta que las medidas de confinamiento son necesarias por un tiempo determinado, y el único
mecanismo efectivo conocido hasta el momento para contener la propagación del virus.
4. La Economía Colombiana y su vulnerabilidad ante la coyuntura
Al igual que el resto del mundo, la economía colombiana ha tenido que enfrentar los efectos del COVID-
19, y ha tenido que disponer de una gran cantidad de recursos para hacer frente al reto sanitario y
económico, en un esfuerzo por mitigar los efectos del virus sobre el sistema de salud, y los de la cuarentena
y el cierre de fronteras, sobre la economía. Sin embargo, como lo señaló el FMI, las economías con
problemas preexistentes son las más vulnerables a una recesión de grandes proporciones, y Colombia es
una economía que, a pesar de tener condiciones sociales complicadas como la informalidad y la pobreza,
es un país fortalecido frente a otros pares de la región, y que venía con un desempeñó económico muy
positivo que denotaba la recuperación después de la crisis de 2014.
Según el director del DANE, Juan Daniel Oviedo, la economía colombiana creció 4,1% entre enero y
febrero de 2020, 0,7 puntos porcentuales por encima del crecimiento de 2019. El funcionario destacó en
especial las actividades de agricultura y ganadería, explotación de minas y canteras, transporte, industrias
manufactureras y servicios públicos y turismo, que crecieron por encima de 2,5%. Los efectos de la
cuarentena obligatoria impuesta en el país a partir del 24 de marzo no se reflejarían en el primer trimestre
del año, sino entre abril y junio, meses donde más se verá el estancamiento de varios sectores productivos
[28].
El Banco Mundial y el FMI, prevén que Colombia decrezca 2 y 2,4%, respectivamente, teniendo en cuenta
los fundamentales macroeconómicos estables con los que venía la economía desde 2018. Estos
decrecimientos están por debajo de las caídas pronosticadas por los organizamos para el resto de la región,
con lo cual tendríamos una reactivación económica más satisfactoria. Según el FMI a 2021 la economía
colombiana crecerá 3,5%, mientras el Banco Mundial prevé que la recuperación sea de 2,6%. Sin
embargo, otros analistas no son tan optimistas y ven esta como la peor crisis económica que haya
enfrentado nuestro país, puesto que seguimos siendo una economía altamente dependiente del petróleo
y con los precios actuales se reducirían los ingresos de la nación considerablemente.
Fedesarrollo, por ejemplo, realizó un estudio sobre los impactos económicos del COVID-19, donde
establece tres escenarios para cinco variables: la tasa de cambio, precio Brent, producción de petróleo,
crecimiento económico de los socios comerciales y crecimiento económico mundia
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
37
Variables Escenario Prospectiva,
diciembre 2019 Escenarios 2020
Optimista Medio Pesimista
TRM (Pesos por dólar) 3.400 3.640 3.750 4.020
Precio del petróleo - Brent (USD
por barril) 60 46 36 25
Producción de petróleo (KBOPD) 900 807 766 725
Crecimiento económicco socios
comerciales 2,6 1,5 -0,3 -2,1
Crecimiento económico mundial 3,3 1,9 -0,4 -2,7
Fuente: Fedesarrollo con cálculos del International Institute of Finance, Bloomberg, Banco de la República.
A partir de estos cálculos, establecieron un modelo de pronóstico donde se obtuvo que el país crecerá en
el escenario pesimista -0,4%, en el escenario medio 1,2% y en el escenario optimista 2,3%. Esta perspectiva
es más optimista que la de organismos internacionales, pero no tiene en cuenta el tiempo de reactivación
que la propagación del COVID-19 le permitirá a la economía [29].
Corficolombiana, por su parte estima un escenario base donde la economía no crecerá, y uno pesimista
donde decrecerá 2,6%. La entidad financiera señala que uno de los grandes riesgos para la economía es
el déficit fiscal, que inevitablemente crecerá por la cantidad de deuda que el Gobierno ha tenido que
tomar para enfrentar la crisis. En el escenario base, el déficit se ubicaría en 6,3% del PIB, y en el pesimista
será de 8,7%. Este es una de las variables que más se tiene en cuenta por las calificadoras de riesgo, de tal
manera que S&P y Fitch Rating bajaron la calificación soberana para el país, de BBB a BBB- en ambos
casos. Aunque se mantiene en grado de inversión, existe un riesgo sobre la pérdida de este, pues implicaría
la pérdida de grandes inversiones al país, y con ello más presiones sobre el crecimiento y la tasa de cambio
[30].
Mientras, ANIF presentó un desalentador informe sobre los impactos económicos de la coyuntura,
señalando que las pérdidas económicas ascienden a $5,8 billones de pesos, 0,5% del PIB, pero podrían
incrementar hasta un rango entre $12,5 y $26,9 billones de pesos. Debido a la pérdida de empleos y a la
reducción en los ingresos de una parte importante de la población, el impacto se verá reflejado en el
consumo, afectando directamente una buena proporción del crecimiento. El centro de pensamiento
estima que el país crecerá apenas 0,5% este año, siempre y cuando la recuperación sea rápida en el
segundo trimestre. Si la crisis y las medidas restrictivas se prolongan por más tiempo, la economía caería
0,7% [31].
Por el momento, el Gobierno Nacional seguirá trabajando para contener el virus en nuestro país,
mitigando los efectos adversos que las medidas restrictivas contraen. Algunos sectores y agremiaciones
han presentado planes de reactivación económica por etapas, donde la población regrese progresivamente
a las calles y se permita empezar a dinamizar la economía sin poner en riesgo a la población y al sistema
de salud.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
38
5. Escenarios de Precios y Producción 2020-2022
1. Escenario de Precios
Teniendo en cuenta los análisis de entidades internacionales, desde Campetrol analizamos tres posibles
escenarios de precios, tomando en cuenta diferentes variables económicas y políticas. Cabe resaltar que
los escenarios no tienen en cuenta el reciente acuerdo de la OPEP+ y el G20, pero dado el
comportamiento de los precios, se ajustan a la tendencia que siguió la cotización del crudo tras las
negociaciones.
Los factores que determinaron los escenarios se establecieron teniendo en cuenta el informe de la EIA
sobre las variables que afectan el precio del crudo, es decir, la oferta y la demanda. Este informe extrae
los movimientos que impactan cada una de estas variables. De esta manera, por el lado de la demanda, el
crecimiento de la economía mundial es un determinante del consumo agregado de crudo, así como los
cambios en las expectativas de este mismo, en especial cuando se trata de cambios sobre la expectativa de
crecimiento de los grandes consumidores de crudo, como China y Estados Unidos [32].
Por el lado de la oferta, cambios en el nivel de producción de países no pertenecientes a la OPEP afectan
los precios, así como las variaciones en las expectativas de suministro de estos. La producción de algunos
países, como Arabia Saudita, Rusia y Estados Unidos, es tan representativa en el mercado que por sí sola
puede impactar los precios ante variaciones inesperadas. Coaliciones como la unión OPEP+, impactan el
nivel de oferta, pues la mayoría de las veces se trata de pactos para reducir el nivel de producción, esto
depende de la coyuntura que enfrente el mercado. Otros hechos aislados, como el conflicto en el Golfo
Pérsico, la guerra civil el Libia y la situación venezolana, impactan el suministro de crudo agregado dado
que generan interrupciones inesperadas bien sea en la producción o en el transporte.
Los inventarios de petróleo, en especial en Estados Unidos, impactan tanto la demanda como la oferta,
pues determinan qué tanta disponibilidad de crudo tiene un país y, por tanto, cuánto necesitará demandar.
Si los inventarios crecen, se tiene más disponibilidad de petróleo para producción y se necesitará comprar
menos para abastecer determinado país. Desde 2014, cuando Estados Unidos duplicó su suministro, los
inventarios de este país se convirtieron en un driver importante de los precios.
Por último, el balance entre oferta y demanda muestra el apetito del mercado por comprar o vender
crudo, y determina si hay excesos de oferta o de demanda. Desde 2014, por el crecimiento de la
producción estadounidense, predominan los excesos de oferta, por lo que fue necesario un acuerdo de
reducción en el suministro de la OPEP+ para incrementar los precios. A partir de 2017, la cotización del
crudo se mueve en un equilibrio inestable, donde los principales actores se esfuerzan por reducir la brecha
entre oferta y demanda.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
39
Fuente: EIA
Dada la coyuntura actual, se tomaron en cuenta las variables descritas por la EIA, sumadas al crecimiento
de la curva de contagios por COVID-19 en el mundo, y la movilidad de factores que se ha limitado por
la cuarentena y el cierre en las fronteras de la mayoría de los países.
El primer escenario es uno muy crítico, donde el Brent cierre el año en promedio en 25 USD/BL, debido
a que el mundo enfrentaría la peor recesión en décadas, el tráfico de factores de producción sería casi
nulo, la curva de crecimiento del COVID-19 seguiría creciendo exponencialmente y sobrarían más de 10
millones de barriles de crudo en el mercado. El segundo escenario es uno crítico donde el Brent termine
en promedio en 35 USD/BL por la recesión mundial (menos grave que en el escenario muy crítico), un
tránsito de factores de producción permitido pero limitado, crecimiento polinomial de la curva de
COVID-19 y menos de 10 millones de barriles al día que sobran en el mercado. El tercer y último
escenario es uno moderado donde el Brent cierre en promedio en 43 USD/BL, debido a que el
crecimiento global sea bajo o de 0%, haya apertura progresiva del tránsito de factores, se aplane la curva
de contagios y el exceso de oferta sea de apenas dos millones de barriles al día.
20
30
40
50
60
70
-5
-4
-3
-2
-1
0
1
2
3
4
ene-1
9
mar
-19
may
-19
jul-19
sep-1
9
nov-
19
ene-2
0
mar
-20
may
-20
jul-20
sep-2
0
nov-
20
ene-2
1
mar
-21
may
-21
jul-21
sep-2
1
nov-
21
Balance global del mercado de crudo (MBPD) vs Precio Brent
Balance Brent
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
40
USD/BL (Promedio anual)
MFMP 2019 Muy crítico Crítico Moderado
2019 65,5 64 64 64
2020 67,5 25 35 43
2021 70 35 45 58
2022 70 50 60 68
Fuente: EIA, Ministerio de Hacienda, Proyecciones Campetrol
0
20
40
60
80
100
120
140
mar
-01
ene-0
2
nov-
02
sep-0
3
jul-04
may
-05
mar
-06
ene-0
7
nov-
07
sep-0
8
jul-09
may
-10
mar
-11
ene-1
2
nov-
12
sep-1
3
jul-14
may
-15
mar
-16
ene-1
7
nov-
17
sep-1
8
jul-19
may
-20
mar
-21
ene-2
2
nov-
22
US
D/B
LBrent (promedio trimestral)
MFMP 19 obs. Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
41
2. Escenarios de producción de petróleo en Colombia
Históricamente el precio del petróleo ha tenido un efecto importante en la producción de petróleo del
país. Este efecto se refleja no solo en la cantidad de campos produciendo, o en la actividad operacional
que permitirá aumentar o mantener tal producción, sino, además, en las inversiones diferidas que hacen
las compañías con el fin de tener una base sólida de producción en el mediano plazo, por lo que, los
efectos de estas inversiones se evidencian alrededor de los 12 meses posteriores.
Fuente: ANH [33] y EIA [34]
Tomando en consideración la fuerte relación mostrada entre el precio del barril y la producción de
petróleo, se estimaron bajo un modelo econométrico los impactos de la actual coyuntura en los volúmenes
que se producirán anualmente en el país. Los datos de entrada para este modelo fueron los precios del
barril definidos anteriormente, junto a otras variables como la TRM y el precio del barril rezagado un
año.
0
20
40
60
80
100
120
140
0
200
400
600
800
1000
1200
feb-9
9
dic
-99
oct
-00
ago-0
1
jun-0
2
abr-
03
feb-0
4
dic
-04
oct
-05
ago-0
6
jun-0
7
abr-
08
feb-0
9
dic
-09
oct
-10
ago-1
1
jun-1
2
abr-
13
feb-1
4
dic
-14
oct
-15
ago-1
6
jun-1
7
abr-
18
feb-1
9
dic
-19
USD
/Bl
KB
OPD
Producción de Petróleo en Colombia vs Brent
Producción (KBOPD) Brent (USD/Bl)
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
42
Fuente: ANH [35], Cálculos Campetrol
KBOPD MFMP 2019 Meta PND Muy crítico Crítico Moderado
2019 865 892 886 886 886
2020 880 905 763 786 810
2021 862 891 718 755 794
2022 855 854 725 770 818
Como resultado del modelo, se puede observar que bajo un escenario muy crítico la producción se ubique
en promedio en 763 KBOPD, una reducción de 16% frente a los 886 KBOPD producidos durante 2019.
Así como en un escenario crítico la producción se podría ubicar en 786 KBOPD, un valor 11% menor al
de 2019, y en un escenario podríamos llegar a producir 810 KBOPD, lo que representaría una
disminución de 9% con respecto al año pasado.
Se estima que el mayor impacto en la producción se de en 2021, debido principalmente al efecto causado
por los recortes en las inversiones diferidas por parte de las compañías de E&P. En este año la producción
se encontraría entre 718 y 794 KBOPD, lo que significaría una disminución de 10,3 y 19% frente a los
niveles de producción de 2019.
Finalmente, para el año 2022 esperamos que la producción de petróleo en Colombia experimente un
aumento de 1% al 2,9% con respecto a 2021, ubicando su producción entre 725 y 818 KBOPD. Iniciando
de esta manera el ciclo de recuperación e incremento en la actividad del sector, de manera similar a lo
ocurrido en las crisis de 2014 y 2008.
500
600
700
800
900
1000
1100
2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020 2021 2022
KB
OP
D
Producción de crudo - KBOPD
Obs Moderado Critico Muy Critico
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
43
6. Impactos del doble choque de precios y COVID-19 sobre el sector
petrolero en Colombia
En esta sección se establecieron las relaciones presentes entre los indicadores asociados a la operación
petrolera con el precio de barril y otras variables claves en el desarrollo de estas actividades, como la
TRM. Este proceso se da con el fin de cuantificar los efectos de las actuales condiciones del mercado en
la industria petrolera y de esta manera, aproximar la tendencia que podría tomar la industria bajo los
diferentes escenarios de precios planteados anteriormente.
La metodología seguida consistió en la utilización de modelos econométricos como vectores
autoregresivos (VAR) y estacional autoregresivo de media móvil exógena (SARIMAX), estableciendo
como variable exógena el precio del barril. Las series históricas incluidas en estos modelos corresponden
a una ventana de observación de 32 años, tomando a 1987 como el año inicial.
1. Pozos exploratorios
El número de pozos exploratorios perforados en el año es un importante indicador de la actividad
exploratoria en el país. A pesar de los esfuerzos realizados por el Gobierno Nacional, en cabeza del
Ministerio de Minas y la ANH por poner en marcha la reactivación del sector, aún nos encontramos en
niveles mucho menores a los experimentados entre 2012 y 2014, cuando se perforaron en promedio 120
pozos anualmente.
En este sentido, la cantidad de pozos exploratorios perforados es muy sensible a los cambios en el precio
del barril. En consecuencia, se deben aunar esfuerzos entre Gobierno, Industria y Territorio para mitigar
estos efectos, debido al papel que tienen estos pozos en el descubrimiento e incorporación de nuevas
reservas.
0
20
40
60
80
100
120
140
1987
1989
1991
1993
1995
1997
1999
2001
2003
2005
2007
2009
2011
2013
2015
2017
2019
2021
Pozos exploratorios perforados
Obs. Moderado Critico Muy Crítico
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
44
Fuente: ANH [35], Cálculos Campetrol
Acumulado de pozos exploratorios perforados Brent MFMP 19 Meta PND Muy crítico Crítico Moderado
2019 65 55 48 48 48
2020 65 42 9 13 18
2021 67 50 13 23 33
2022 68 60 28 36 44
De acuerdo con nuestros estimados, la perforación de pozos exploratorios se podría ver fuertemente
impactada por la actual coyuntura. De continuar con esta situación de precios bajos, podría haber una
disminución de 39 pozos en el escenario muy crítico con respecto a los perforados en 2019, así como una
caída de 35 pozos en el escenario crítico y 30 pozos bajo un escenario moderado.
Así mismo, se espera para 2021 un aumento de cuatro pozos en el escenario muy crítico, frente a los
pozos perforados en 2020, de 10 pozos en el escenario crítico y 15 pozos en el escenario moderado. Este
comportamiento se explica debido principalmente a un posible aumento en el precio del barril para ese
año.
Posteriormente, para 2022 se estima un aumento en el número de pozos perforados en todos los
escenarios, e inclusive se espera que bajo el escenario moderado regresemos a los niveles de pozos
perforados en 2019. Los niveles de aumento para cada escenario serían: 15 en el muy crítico, 13 en el
crítico y 11 en el moderado, lo que concuerda con los niveles de aumento en el precio del barril acordados
para cada escenario.
En definitiva, la actividad petrolera, y en especial la exploración podría verse fuertemente impactada por
la actual coyuntura. La clave para las compañías estará en mantener una austeridad en el gasto,
favoreciendo el flujo de caja, así como disciplina de capital y eficiencia de capital, estrategias que permitan
conducir a operaciones costo efectivas. Estar preparados para cuando el mercado inicie su ciclo de
recuperación y seguir trabajando fuertemente de la mano: Gobierno, Industria y Territorio para iniciar
las operaciones lo antes posible cuando ese momento llegue.
2. Adquisición Sísmica
Al igual que el número de pozos exploratorios perforados, la adquisición sísmica es un indicador
importante de la actividad exploratoria realizada en el país. Si bien en el comportamiento histórico de la
adquisición sísmica es evidente el esfuerzo por reactivar la exploración en el país, y llevábamos una curva
de ascenso, aún nos encontramos muy distantes a los niveles obtenidos entre 2010 y 2012, cuando se
alcanzó el máximo de actividad exploratoria, llegando a un promedio de 16.300 km adquiridos.
Cabe destacar la importancia que tiene esta variable en el sostenimiento de la autosuficiencia energética,
permitiendo encontrar nuevos posibles yacimientos, que permitirán a su vez la incorporación de nuevas
reservas de petróleo y gas. Debido a lo anterior, la adquisición sísmica será una pieza clave para que el
sector se mantenga a flote en el mediano plazo.
Debido a la naturaleza propia de los proyectos de exploración, es evidente el rezago existente entre la
planeación y la ejecución de las campañas sísmicas, que para el caso del país es de alrededor de dos años.
Como consecuencia, la coyuntura actual se verá reflejada en el 2022, permitiendo de esta manera que la
adquisición sísmica tienda a mantenerse estable, o incluso a crecer entre 2020 y 2021.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
45
En términos de sísmica onshore, estimamos que para 2020 bajo un escenario crítico, se reduzca la
actividad alrededor de 7,6% frente a los niveles obtenidos en 2019. De igual forma esperamos para el
escenario crítico un aumento de 5,6% y en el escenario moderado un incremento de 16,3%. Los estimados
van en concordancia con el rezago entre planeación y ejecución de la actividad exploratoria.
De manera similar, para 2021 se espera que se ejecuten los proyectos planeados en 2019, cuando el precio
del barril rondaba los 64 USD/Bl en promedio. Estimamos para 2021 un incremento del 14,7% con
respecto a los niveles de 2020 en el escenario muy crítico, 15,9% en el escenario crítico y 16,8% para el
escenario moderado.
Esperamos que los impactos de la coyuntura actual se visualicen en 2022, año en el que la tendencia indica
que podría haber una disminución en todos los escenarios frente a los valores de 2021. Los escenarios
consideran una disminución de alrededor de 17,6%, mientras que se volverían a los niveles
experimentados entre 2019 y 2020.
Fuente: ANH [35], Cálculos Campetrol
Km Eq. De sísmica 2D - Onshore Muy crítico Crítico Moderado
2019 2.154 2.154 2.154
2020 1.990 2.282 2.575
2021 2.333 2.713 3.094
2022 1.983 2.306 2.630
Para el caso de la sísmica total, que incluye tanto la actividad continental como marina, los escenarios
varían levemente debido al gran volumen que aportan las campañas sísmicas offshore. Pero el análisis
actual muestra que las tendencias son iguales debido a que, de igual forma, se presenta el fenómeno de
rezago entre la planificación y la ejecución de los proyectos de exploración.
0
1000
2000
3000
4000
5000
6000
7000
8000
9000
2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020 2021 2022
KM
Sísmica onshore adquirida – KM Eq de sísmica 2D
Obs Moderado Crítico Muy Crítico
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
46
En 2019 la adquisición sísmica total fue de 5.354 km, de los cuales 3.200 km correspondieron netamente
a sísmica offshore, lo que representa alrededor del 60% de la actividad. En este sentido, estimamos que
la actividad sísmica en podría aumentar entre 37% y 66%, debido principalmente a la ejecución de
campañas costa afuera planeadas hace por lo menos dos años, cuando los precios del petróleo eran muy
superiores a los actuales.
De igual forma, en 2021 esperamos que, debido al rezago de dos años existente entre la planeación y
ejecución de las campañas sísmicas, se puede dar una disminución de entre 16% y 30% en el total de
sísmica adquirida con respecto a 2020. Bajo esta tendencia, aún nos encontraríamos por encima de la
meta planteada por el Gobierno Nacional, de 3.100 km para ese año.
Por último, y de igual forma que para la sísmica terrestre, estimamos que para 2022 los niveles de
adquisición se encuentren cercanos a los experimentados durante 2019, además de que muestren los
efectos de la coyuntura experimentada hoy en día. En el escenario muy crítico consideramos una
disminución del 66% con respecto a los niveles obtenidos en 2021, mientras que, en los escenarios críticos
y moderados esperamos una disminución de 75% y 60%, respectivamente.
Fuente: ANH [35], Cálculos Campetrol
KM Eq. De sísmica 2D - Total Brent MFMP 19 Meta PND Muy crítico Crítico Moderado
2019 65 1.200 5.354 5.354 5.354
2020 65 1.400 8.481 12.251 16.021
2021 67 3.100 5.868 9.638 13.408
2022 68 1.200 1.983 2.343 5.359
0
5000
10000
15000
20000
25000
30000
35000
40000
45000
1987
1989
1991
1993
1995
1997
1999
2001
2003
2005
2007
2009
2011
2013
2015
2017
2019
2021
KM
Adquisición de sísmica (onshore + offshore) – KM Eq de sísmica 2D
Obs Moderado Crítico Muy Crítico
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
47
Ciertamente la coyuntura actual pone en riesgo nuestra autosuficiencia energética, pero debemos trabajar
todos unidos, Gobierno, Industria y Territorio para reactivar la actividad lo más rápido posible en cuanto
las condiciones de mercado lo permitan. Definitivamente, sin la actividad exploratoria el sector petrolero
se marchita.
3. Taladros
A partir del análisis de precios, construimos una senda para lo que resta de 2020 en cada uno de los
escenarios, suponiendo una recuperación de los precios en el segundo semestre del año, el cual se
trasladaría a la actividad de taladros en el último trimestre de 2020. La tendencia se formuló con base en
las perspectivas de los principales agentes del mercado de taladros en Colombia y suponiendo un
comportamiento similar al evidenciado en la crisis de precios de 2014.
Muy crítico Crítico Moderado
Fecha Drilling Workover Total Drilling Workover Total Drilling Workover Total
ene-20 52 84 136 52 84 136 52 84 136
feb-20 45 84 129 45 84 129 45 84 129
mar-20 35 56 91 35 56 91 35 56 91
abr-20 17 34 51 17 47 64 17 53 70
may-20 10 29 39 14 43 57 15 50 65
jun-20 3 11 14 10 38 48 27 55 82
jul-20 2 10 12 6 33 39 28 65 93
ago-20 2 9 11 7 34 41 29 71 100
sep-20 2 11 13 12 41 53 30 71 101
oct-20 6 29 35 16 46 62 32 73 105
nov-20 8 40 48 20 51 71 34 75 109
dic-20 12 49 61 25 58 83 35 76 111
Promedio
2020 16 37 53 22 51 73 32 68 99
Fuente: Campetrol
0
20
40
60
80
100
120
140
160
jun-1
3
oct
-13
feb-1
4
jun-1
4
oct
-14
feb-1
5
jun-1
5
oct
-15
feb-1
6
jun-1
6
oct
-16
feb-1
7
jun-1
7
oct
-17
feb-1
8
jun-1
8
oct
-18
feb-1
9
jun-1
9
oct
-19
feb-2
0
jun-2
0
oct
-20
Nú
mero
de e
qu
ipo
s
Actividad de taladros en Colombia
Total activos Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
48
Para el escenario moderado, asumimos una recuperación de los precios poco antes de mitad de año, con
lo cual, en mayo se llegaría a un mínimo de 65 taladros activos (15 de drilling) y a partir de ahí se observaría
una recuperación de la actividad, hasta los 111 taladros (76 de drilling). Bajo este escenario, se obtendría
un promedio de actividad de 99 taladros en 2020, lo que representaría una caída del 28% en la actividad,
frente al promedio de 2019.
En el escenario crítico, se supone que los precios se mantienen en los niveles actuales y en el cuarto
trimestre de 2020 se observa una recuperación, la cual se trasladaría a la actividad de taladros. En efecto,
el número de taladros activos tendría una tendencia a la baja hasta julio, al llegar a un mínimo de 39
equipos. En los siguientes meses se experimentaría una recuperación y en diciembre de 2020 se tendría
un cierre de 83 taladros activos. Bajo este escenario, se obtendría un promedio de actividad de 73 taladros
en 2020, lo que representaría una caída del 47% en la actividad, frente al promedio de 2019.
Finalmente, en el escenario muy crítico, se supone una caída de precios hasta el tercer trimestre de 2020.
En el último cuarto del año, la cotización Brent tendría una senda de recuperación. De esta manera, los
taladros activos continuarían bajando hasta agosto, mes en el cual se tendrían 11 equipos activos (2 de
drilling). Para los siguientes meses se experimentaría una tendencia al alza para cerrar el año con 61
taladros activos. Bajo este escenario, se obtendría un promedio de actividad de 53 taladros en 2020, lo
que representaría una caída del 62% en la actividad, frente al promedio de 2019.
4. Empleos
El número de empleos generados por el sector petrolero es un importante indicador de la su contribución
al desarrollo y el crecimiento de la economía colombiana. La industria petrolera genera miles de empleos
directos e indirectos, e importantes encadenamientos productivos que involucran otros sectores. Debido
a la coyuntura de precios del crudo bajos y la interrupción en el desarrollo normal de la actividad por el
COVID-19, las empresas enfrentan caídas importantes en sus ingresos y, por tanto, deben verse obligadas
a tomar decisiones sobre los gastos que afectan los empleos.
Nuestro modelo muestra una correlación directa entre el promedio anual del Brent y el número de
empleos que genera el sector al año. Esta correlación se explica por las variaciones en ingresos de las
empresas del sector ante cambios en el precio internacional. En periodos de bajos precios como el que
se observa en las últimas jornadas, las empresas reciben menos ingresos y, por tanto, se reduce su
capacidad de contratación de personal. Cabe destacar que, para la industria existen operaciones que no
pueden detenerse y que tienen costos asociados que no pueden reducirse, por lo que la flexibilidad para
reducir el gasto de la industria petrolera es limitada en algunas operaciones.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
49
Fuente: ACP, ANH, Cálculos Campetrol
Número de empleados hidrocarburos
Muy crítico Crítico Moderado
2019 105.133 105.133 105.133
2020 78.743 85,855 91.262
2021 89.277 95,684 104.471
2022 95.540 107.333 111.533
Los datos observados de empleos están hasta 2018, el valor de 2019 es estimado del modelo que se corrió
para esta variable, no corresponde a la cifra oficial en tal año. De esta forma, se tiene que en 2019 se
generaron 105.133 empleos, 20% más que en 2018, equivalente a 17.503 más empleos.
En el escenario muy crítico, con un Brent de 25 USD/BL, en 2020 se perderían 26.390 empleos, 25%
menos totales que los generados en 2019, pues este año y bajo este escenario, el precio sería el más bajo
y el impacto sobre el número de empleos el más pronunciado. En 2021, con un precio promedio Brent
de 35 USD/BL, se recuperarían 10.534 empleos, un aumento del 13% frente al total de 2020, debido al
incremento en el promedio anual del precio del crudo. Finalmente, en 2022 con un precio promedio de
43 USD/BL, se incorporarían 6.263 empleos a la actividad, una recuperación de 7% frente al total de
2021 y de 21% frente al de 2020. Cabe resaltar que en los próximos dos años no se vuelve a tener el
mismo nivel de empleos de 2019 bajo este escenario.
Bajo el escenario crítico, con un Brent de 35 USD/BL promedio anual, en 2020 se perderían 19.278
empleos, 18% por debajo de los totales generados en 2019. En 2021, con un precio promedio Brent de
45 USD/BL, se recuperarían 9.829 empleos, un aumento del 11% frente al total 2020. Por último, en
2022 con un precio promedio de 43 USD/BL, se incorporarían 11.649 empleos a la actividad, una
recuperación de 12% frente al total 2021 y de 25% frente al de 2020. En este escenario sí se recupera el
nivel de empleos a 2022, incluso por encima de 2019.
60.000
70.000
80.000
90.000
100.000
110.000
120.000
130.000
140.000
150.000
2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020 2021 2022
Nú
mero
de e
mp
leo
s
Empleos generados por el sector
Observado Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
50
Para finalizar, en el escenario moderado con un Brent de 43 USD/BL, en 2020 se perderían 13.871
empleos, 13% menos que el número total de 2019. En 2021, con un precio promedio Brent de 58
USD/BL, se recuperarían 113.209 empleos, un aumento del 13% frente al total de 2020, debido al
incremento en el promedio anual del precio del crudo. Finalmente, en 2022 con un precio promedio de
68 USD/BL, se incorporarían 7.061 empleos a la actividad, una recuperación de 14% frente a 2021 y de
22% frente a 2020. Bajo este escenario en 2021 se alcanzaría un nivel de empleos similar al de 2019, y en
2022 llegaría a ser incluso considerablemente más alto.
La coyuntura actual representa un reto para todo el país, y el empleo es una de las variables más afectadas
por el detenimiento de múltiples actividades productivas. El sector petrolero no será ajeno a esta situación,
y el importante nivel de empleos que genera decaerá en 2020, pero con perspectivas positivas de
recuperación en 2021 y 2022.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
51
7. Impactos del doble choque de precios y COVID-19 sobre
la economía colombiana
A partir de la serie histórica trimestral desde 2001 de las variables de interés (exportaciones petroleras,
IED petrolera, TRM, crecimiento anual del PIB petrolero) y mediante un modelo estadístico de vectores
autorregresivos (VAR), con los escenarios de precios y producción descritos anteriormente, como
variables exógenas del modelo, se calcularon las tendencias para cada uno de los escenarios establecidos.
Para el caso de la renta petrolera, dado que su periodicidad es anual y que la serie histórica es corta, se
utilizó la metodología de regresión lineal múltiple. Utilizando como variables exógenas la cotización Brent,
la producción de crudo en Colombia y la TRM, los tres como promedio anual.
1. Exportaciones petroleras
Las exportaciones de petróleo iniciaron positivamente el 2020 gracias al buen nivel de precios, que entre
enero y febrero tuvo un promedio cercano a los 60 USD/BL para el Brent. Sin embargo, la nueva
coyuntura mundial cambió el panorama y las perspectivas para lo que resta de 2020. Bajo nuestros
escenarios de precios y producción establecidos, vemos una fuerte tendencia a la baja en las exportaciones
petroleras, a pesar de que con los niveles actuales de TRM los exportadores se verían beneficiados.
La caída en las exportaciones petroleras se daría por causa de dos choques, por un lado, la caída en los
precios del crudo, por puro efecto contable, generaría un menor valor de las ventas externas de petróleo.
El segundo choque, que refuerza el efecto a la baja, es la menor capacidad exportadora del país por cuenta
de una menor producción de crudo en los tres escenarios.
Miles USD (Total anual)
Muy crítico Crítico Moderado
2019 15.969.011 15.969.011 15.969.011
2020 7.431.085 9.376.802 11.713.381
2021 5.411.804 8.496.084 13.316.003
2022 10.302.503 12.606.326 15.675.898
Fuente: DANE, cálculos Campetrol
0
1.000.000
2.000.000
3.000.000
4.000.000
5.000.000
6.000.000
7.000.000
8.000.000
9.000.000
mar
-01
ene-0
2
nov-
02
sep-0
3
jul-04
may
-05
mar
-06
ene-0
7
nov-
07
sep-0
8
jul-09
may
-10
mar
-11
ene-1
2
nov-
12
sep-1
3
jul-14
may
-15
mar
-16
ene-1
7
nov-
17
sep-1
8
jul-19
may
-20
mar
-21
ene-2
2
nov-
22
Miles
US
D
Exportaciones petroleras
obs. Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
52
En este sentido, en 2020 se evidenciaría un primer impacto de la coyuntura negativa. Dado que la
producción aún no se vería afectada en su mayoría, el impacto en 2020 sería liderado por el bajo nivel de
precios. Frente al total de 2019, nuestras estimaciones indican que las exportaciones petroleras en 2020
caerían en un 27% para el escenario moderado, 41% para el crítico y 53% en el muy crítico.
En 2021 se tocaría fondo y sería el año con menores registros para los escenarios crítico y muy crítico. Si
bien, los precios en este año empezarían una senda de recuperación, la producción llegaría sus niveles
mínimos, dado que los planes de inversión y actividad estarían basados en los precios bajos de 2020. La
fuerte caída en la producción generaría una menor capacidad de exportación, con lo que el volumen de
las ventas caería drásticamente. En cuanto al escenario moderado, los niveles de precios cercanos a los 60
USD/BL elevarían considerablemente el valor de las exportaciones, lo que permitiría que en 2021 se
iniciara la recuperación de las exportaciones. En este sentido, frente a 2020, se observaría un incremento
anual de 14% para el escenario moderado y una caída anual de 9% para el crítico y de 27% en el muy
crítico. Ahora bien, frente al total observado de 2019, nuestras estimaciones indican que las exportaciones
petroleras en 2021 caerían en un 17% para el escenario moderado, 47% para el crítico y 66% en el muy
crítico.
El 2022 sería el año de la recuperación y reactivación de la actividad petrolera. Con un Brent ya
recuperado y la producción al alza, las exportaciones petroleras tendrían la oportunidad de consolidar
una tendencia positiva. Lo anterior sumado a que la demanda mundial se normalizaría, luego de superar
la crisis sanitaria del COVID-19. En este sentido, frente a 2021, se observaría un incremento anual de
18% para el escenario moderado, de 48% para el crítico y de 90% en el muy crítico. Ahora bien, frente al
total observado de 2019, nuestras estimaciones indican que las exportaciones petroleras en 2022 caerían
en un 2% para el escenario moderado, 21% para el crítico y 35% en el muy crítico.
Con este análisis podemos observar que únicamente en el escenario moderado, en 2022, las exportaciones
petroleras se acercarían a los niveles registrados en 2019. En los escenarios crítico y muy crítico, la
recuperación de 2022 no sería suficiente y se requeriría un mayor tiempo para volver a los niveles
observados en 2019.
Finalmente, si bien, no estamos incluyendo en el análisis el total de exportaciones que realiza el país, dado
que las exportaciones petroleras representan un 40% del total, la tendencia para cada uno de los escenarios
se vería reflejada directamente en el comportamiento de las exportaciones totales. Incluso, la caída podría
ahondarse con la coyuntura económica global que esperamos se mantenga durante el año, que
condicionaría la demanda mundial a la baja, afectando al 60% de las exportaciones restantes,
especialmente durante 2020 y 2021.
2. IED petrolera
Las condiciones externas desfavorables que se evidencian con la coyuntura actual y que generan una gran
aversión al riesgo podrían resultar en una especie de sudden stop de los capitales dirigidos al país, lo que
incluye a la Inversión Extranjera Directa (IED). Es importante recordar que, ante crisis globales e
incertidumbre, los mercados de los países en desarrollo son los que se ven afectados en primer lugar.
La IED destinada al sector petrolero colombiano enfrentaría dos grandes riesgos a la baja. En primera
instancia, los menores precios del crudo harían que muchos proyectos dejen de ser atractivos para los
inversionistas al no contar con ganancias suficientes o al no ser sostenibles económicamente, lo que
reduciría de primera mano los flujos de capital destinados al sector. Por otra parte, la incertidumbre de
los mercados y la fuerte crisis económica que pronostican los principales agentes, condicionarían las
inversiones hacia activos refugio, en búsqueda de menor riesgo.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
53
Millones USD (total anual)
Muy crítico Crítico Moderado
2019 2.818 2.818 2.818
2020 1.576 2.058 2.613
2021 286 1.137 2.398
2022 1.716 2.549 3.642
Fuente: Banco de la República, cálculos Campetrol
En 2020 se evidenciaría un primer impacto de la coyuntura negativa. Dado que la producción aún no se
vería afectada en su mayoría, el impacto en 2020 se explicaría por la reacción adversa de los mercados
ante la inminente crisis económica global. Frente al total de 2019, nuestras estimaciones indican que la
IED destinada al sector petrolero en 2020 caería en un 7% para el escenario moderado, 27% para el
crítico y 44% en el muy crítico.
En 2021 se llegaría al mínimo valor de los estimados por el modelo para los tres escenarios. Si bien, los
precios en este año empezarían una senda de recuperación, se espera que la IED destinada al sector sea
determinada principalmente por los programas de inversión de las compañías E&P, los cuales se basarían
los precios de 2020 y demostrarían un recorte importante de las inversiones y de la actividad en general.
En este sentido, frente a 2020, se observaría una reducción anual de 8% para el escenario moderado, de
45% para el crítico y de 82% en el muy crítico. Ahora bien, frente al total observado de 2019, nuestras
estimaciones indican que la IED petrolera en 2022 caería en un 15% para el escenario moderado, 60%
para el crítico y 90% en el muy crítico.
Como hemos mencionado anteriormente, el 2022 sería el año de la recuperación y reactivación de la
actividad petrolera. Con un Brent ya recuperado, la producción al alza y las condiciones económicas y de
mercados mundiales normalizados, la IED petrolera registraría nuevamente un buen comportamiento.
En este sentido, frente a 2021, se observaría un incremento anual de 52% para el escenario moderado, de
124% para el crítico y de 500% en el muy crítico. De esta manera, en el escenario moderado se superarían
los niveles observados en 2019 y en el escenario crítico se registrarían niveles ligeramente inferiores a los
2019. Efectivamente, frente al total observado de 2019, nuestras estimaciones indican que la IED petrolera
en 2022 crecería en un 29% para el escenario moderado, por su parte, caerían un 10% para el crítico y
39% en el muy crítico, con respecto a 2019.
-500
0
500
1.000
1.500
2.000
2.500
mar
-01
dic
-01
sep-0
2
jun-0
3
mar
-04
dic
-04
sep-0
5
jun-0
6
mar
-07
dic
-07
sep-0
8
jun-0
9
mar
-10
dic
-10
sep-1
1
jun-1
2
mar
-13
dic
-13
sep-1
4
jun-1
5
mar
-16
dic
-16
sep-1
7
jun-1
8
mar
-19
dic
-19
sep-2
0
jun-2
1
mar
-22
dic
-22
Millo
nes
US
DIED petrolera
obs. Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
54
De estos resultados podemos concluir que la Inversión Extranjera Directa destinada al sector petrolero
colombiano posee una mayor dependencia de las condiciones económicas globales y de los planes y
programas de inversión de las compañías E&P, es decir, del precio Brent del año anterior.
Ahora bien, la IED total ha mostrado una menor dependencia del sector petrolero, sin embargo, la
participación del 20% generaría presiones a la baja. Lo anterior, sumado a que las condiciones sanitarias
y económicas globales son muy desfavorables para todo tipo de inversiones, la IED total también se vería
afectada negativamente en 2020 y 2021.
3. TRM
El tipo de cambio inició 2020 en 3.260, la propagación del COVID-19 lo llevó hasta 3.500 en febrero y
esto sumado al choque de precios del crudo en marzo, llevó a la TRM a superar los 4.100, la máxima
histórica. En adelante, los menores ingresos de divisas por exportaciones e IED continuarían presionando
al tipo de cambio al alza. Sin embargo, el mayor driver del dólar será el precio del barril, debido a la fuerte
correlación que poseen estas dos variables. En este sentido, para la tasa de cambio, la producción de
petróleo en Colombia no representa un determinante principal dentro del modelo econométrico.
Dado que los altos niveles de la TRM no son de largo plazo, puesto que reflejan la inestabilidad e
incertidumbre de los mercados mundiales, se espera, en todos los escenarios de Campetrol, que la TRM
vuelva a sus niveles de equilibrio en 2021 y 2022.
Pesos por dólar (Promedio anual)
Muy crítico Crítico Moderado
2019 3.280 3.280 3.280
2020 4.061 3.908 3.795
2021 3.871 3.668 3.475
2022 3.786 3.605 3.474
Fuente: Banco de la República, cálculos Campetrol
1.500
2.000
2.500
3.000
3.500
4.000
4.500
mar
-01
feb-0
2
ene-0
3
dic
-03
nov-
04
oct
-05
sep-0
6
ago-0
7
jul-08
jun-0
9
may
-10
abr-
11
mar
-12
feb-1
3
ene-1
4
dic
-14
nov-
15
oct
-16
sep-1
7
ago-1
8
jul-19
jun-2
0
may
-21
abr-
22
Peso
s p
or
dó
lar
TRM (Promedio trimestral)
obs. Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
55
En 2020 se evidenciaría el mayor impacto de la coyuntura negativa del COVID-19 y de precios del
petróleo sobre la TRM. La inestabilidad, incertidumbre y la crisis económica global y nacional, que
esperamos se materialice en el segundo trimestre del año, generarían una fuerte depreciación del peso
colombiano frente al dólar. Con respecto al promedio de 2019, nuestras estimaciones indican que la TRM
en 2020 se depreciaría en un 16% para el escenario moderado, 19% para el crítico y 24% en el muy crítico.
En 2021, la recuperación en el precio del petróleo por cuenta de un equilibrio de mercado (oferta y
demanda) y en las condiciones mundiales, una vez superadas las cuarentenas y las restricciones de
movilidad, generarían que el peso ganara valor frente al dólar y empezaría la senda de la TRM hacia sus
niveles de largo plazo. En efecto, consideramos que, en el escenario moderado la TRM volvería a su
nuevo normal de largo plazo en 2021, ligeramente inferior a los 3.500 pesos por dólar. En este sentido,
frente a 2020, se observaría una apreciación anual promedio de 8% para el escenario moderado, de 6%
para el crítico y de 5% en el muy crítico. Ahora bien, frente al promedio observado de 2019, nuestras
estimaciones indican que la TRM en 2022 se depreciaría en promedio un 6% para el escenario moderado,
12% para el crítico y 18% en el muy crítico.
Dado que, en 2022, bajo nuestros escenarios, se normalizarían las condiciones internas y externas en
términos de mercados, de flujos de divisas y de precios del crudo, esperamos que el peso colombiano
continúe ganando terreno frente al dólar, para el caso del escenario moderado, dado que en 2021
alcanzaría su nuevo normal, no presentaría variaciones considerables en 2022. En este sentido, frente al
promedio de 2021, se observaría una apreciación anual de 0,04% para el escenario moderado, de 1,7%
para el crítico y de 2,2% en el muy crítico. Ahora bien, frente al promedio observado de 2019, nuestras
estimaciones indican que la TRM en 2022 se depreciaría un 6% para el escenario moderado, 10% para
el crítico y 15% en el muy crítico.
Como se puede observar, de acuerdo con nuestros escenarios de precios y producción, la depreciación
acelerada del tipo de cambió sería un fenómeno constante en 2020, sin embargo, en los años posteriores,
la TRM tendría una senda a la baja en búsqueda de su nuevo nivel de equilibrio, que se ubicaría entre los
3.000 y los 3.500 pesos por dólar.
4. PIB petrolero
La situación negativa mundial se trasladaría fácilmente al interior del país. En primera instancia, el efecto
precio se traduciría en recortes y ajustes en los planes de inversión, lo que implica menor contratación y
actividad. Por otra parte, el aislamiento preventivo obligatorio y las restricciones a la movilidad de personal
afectarían el desempeño de las operaciones en toda la cadena de valor del sector.
Con lo anterior, y aplicando nuestros escenarios de precios y producción, el PIB petrolero se vería
fuertemente afectado, en especial en 2020 y mitad de 2021. Se esperaría un comportamiento tipo W, en
el cual, luego de la caída de 2020, a partir de la segunda mitad de 2021 se experimentaría una senda de
recuperación que llegaría a su pico más alto a mediados de 2022, en adelante, el crecimiento del PIB
petrolero rebotaría a la baja, para terminar su recuperación en 2023, con una producción de crudo al alza
y unos precios estables.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
56
Var. % anual
Muy crítico Crítico Moderado
2019 2,4 2,4 2,4
2020 -6,4 -3,9 -1,3
2021 -6,3 -3,3 -0,2
2022 -3,5 -0,7 1,7
Fuente: DANE, cálculos Campetrol
En este sentido, en 2020 se evidenciaría el mayor impacto de la coyuntura actual. Dado que las empresas
iniciarían un proceso de recortes en las inversiones, en las actividades y en el personal, la producción
empezaría a mostrar niveles bajos y los precios del crudo estarían en sus niveles mínimos, lo que se
traduciría en una fuerte contracción del PIB petrolero. Cabe mencionar que los efectos de los recortes en
los programas de las compañías se materializarían en el segundo y tercer trimestre, a los cuales se les
sumaría el impacto del aislamiento preventivo, por tanto, estos periodos serían los de mayor contracción.
Frente al crecimiento promedio anual de 2019, nuestras estimaciones indican que el PIB petrolero en
2020 caería en 3,7 puntos porcentuales (pps) para el escenario moderado, 6,4 pps para el crítico y 8,9 en
el muy crítico.
En 2021, los mejores precios del petróleo y las menores restricciones para combatir el COVID-19
permitirían, en la segunda mitad del año, iniciar una senda de recuperación. Sin embargo, los bajos niveles
de producción continuarían siendo un reto importante para la reactivación del sector. En este sentido,
frente a 2020, se observaría un incremento anual de 1 pp para el escenario moderado, 0,7 pps para el
crítico y 0,1 pps en el muy crítico. Ahora bien, frente al crecimiento promedio anual de 2019, nuestras
estimaciones indican que el crecimiento PIB petrolero en 2021 caería en 2,7 pps para el escenario
moderado, 5,7 pps para el crítico y 8,8 en el muy crítico.
En 2022, según nuestros escenarios, se observaría un mejor comportamiento en el PIB petrolero, sin
embargo, solo para el escenario moderado se observaría nuevamente una expansión anual. La
recuperación del Brent y de la producción de petróleo permitiría que la actividad empezara a
normalizarse, a pesar de esto, dada la profundidad de la crisis, las mejores condiciones de 2022 no serían
suficientes para consolidar la recuperación del sector, la cual llegaría en 2023.
-30,0
-20,0
-10,0
0,0
10,0
20,0
30,0
mar
-01
feb-0
2
ene-0
3
dic
-03
nov-
04
oct
-05
sep-0
6
ago-0
7
jul-08
jun-0
9
may
-10
abr-
11
mar
-12
feb-1
3
ene-1
4
dic
-14
nov-
15
oct
-16
sep-1
7
ago-1
8
jul-19
jun-2
0
may
-21
abr-
22
Var.
% a
nu
al
PIB petrolero (var. % anual del trimestre)
obs. Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
57
En este sentido, frente a 2021, se observaría un incremento anual en el crecimiento del PIB petrolero de
1,9 pp para el escenario moderado, 2,5 pps para el crítico y 2,8 pps en el muy crítico. Ahora bien, frente
al crecimiento promedio anual de 2019, nuestras estimaciones indican que el crecimiento PIB petrolero
en 2021 caería en 0,7 pps para el escenario moderado, 3,2 pps para el crítico y 6 pps en el muy crítico.
A pesar de que la industria es más resiliente y está más preparada para afrontar una crisis que en el 2014,
los pronósticos de precio continúan siendo poco alentadores y el choque combinado entre oferta y
demanda podría ubicarnos en un escenario más complejo que en la crisis pasada. Por esta razón, es
necesario llevar a cabo una política de fortalecimiento del sector petrolero, que lo ubique como un gran
jalonador de la economía nacional y una fuente constante de ingresos para el gobierno y las regiones. Este
proceso debe ir acompañado necesariamente, de una diversificación económica, de tal manera que ante
las volatilidades del mercado y de los precios del crudo, la economía colombiana no se vea tan afectada.
5. Renta petrolera
La renta petrolera se relaciona directamente con el precio Brent del año anterior, puesto que los
impuestos de renta y los dividendos de Ecopetrol se causan con el precio T, pero se pagan en T+1.
Adicionalmente, la renta petrolera también se correlaciona ampliamente con la producción de crudo en
el país, ya que esta juega un papel determinante a la hora de calcular los impuestos de renta de las
compañías E&P y del comportamiento de la acción de Ecopetrol, de la cual surgen los dividendos pagados
a la nación.
Miles de millones de pesos
Muy crítico Crítico Moderado
2019 14.589 14.589 14.589
2020 493 3.381 6.280
2021 0 3.157 7.716
2022 3.582 7.730 11.749
Fuente: Banco de la República, cálculos Campetrol
0
5.000
10.000
15.000
20.000
25.000
2010
2011
2012
2013
2014
2015
2016
2017
2018
2019
2020
2021
2022
Miles
de m
illo
nes
de p
eso
s
Renta petrolera
obs. Muy crítico Crítico Moderado
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
58
En 2020 se evidenciaría un primer impacto, causado por la disminución de los precios de 2018 a 2019,
por la menor actividad petrolera y por el comportamiento negativo de las acciones de Ecopetrol que
afectarían los dividendos de 2020. Frente al total de 2019, nuestras estimaciones indican que la renta
petrolera de 2020 caería en un 57% para el escenario moderado, 77% para el crítico y 97% en el muy
crítico.
En 2021, los bajos niveles de precio del año anterior afectarían en gran medida el recaudo y los dividendos.
Lo anterior, sumado a la menor producción de 2021 generaría una menor renta petrolera. Para el
escenario muy crítico en particular, la renta petrolera sería nula, situación similar a la de 2016. Por el
contrario, en el escenario moderado se experimentaría una ligera recuperación, basada en unos mayores
ingresos por dividendos. En este sentido, frente a 2020, se observaría un incremento anual de 23% para
el escenario moderado, y una reducción de 7% para el crítico y del 100% en el muy crítico. Ahora bien,
frente al total observado de 2019, nuestras estimaciones indican que la renta petrolera en 2022 caería en
un 47% para el escenario moderado, 78% para el crítico y 100% en el muy crítico.
En 2022, la recuperación de los precios del crudo iniciada un año atrás y la reactivación del sector
petrolero colombiano, permitiría que se volvieran a generar ingresos considerables a partir de la renta
petrolera. Frente a 2021, se observaría un incremento anual de 52% para el escenario moderado y de
145% para el crítico. De esta manera, en el escenario moderado se superarían los niveles observados en
2019 y en el escenario crítico se registrarían niveles ligeramente inferiores a los 2019. Ahora bien, con
respecto al total observado de 2019, nuestras estimaciones indican que la renta petrolera en 2022 caería
en un 19% para el escenario moderado, 47% para el crítico y 75% en el muy crítico.
Es importante resaltar que la renta petrolera es uno de los indicadores más sensibles a la abaja, es decir
que es muy fácil que se experimenten caídas, pero es difícil y toma más tiempo que se recupere hasta los
niveles previos. Por este motivo, los ingresos fiscales deben diversificarse y hallar nuevas fuentes que
aporten al presupuesto gubernamental.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
59
8. Conclusiones y Recomendaciones de Política
1. Conclusiones
Generales
Hemos visto en los últimos meses cómo el sector petrolero puede, por sí solo, mover toda la estructura
económica global. El sector no ha perdido su vigencia, pues sigue teniendo un rol de primer nivel en los
mercados financieros y, sobre todo, en los agregados macroeconómicos de las principales economías
desarrolladas, así como de aquellas que son dependientes de los ingresos fiscales producidos por los
hidrocarburos, como la colombiana.
Hoy el mundo y la industria se enfrentan a una de las peores crisis en la historia reciente, por lo que es
importante seguir incentivando su desarrollo para evitar que las empresas de toda la cadena de valor del
petróleo en Colombia se enfrenten a un escenario crítico.
Desde Campetrol creemos firmemente que la palabra más importante en estos días debe ser prudencia.
Consideramos que el acuerdo alcanzado por la OPEP+ y el G20, más los recortes voluntarios de algunos
países del Golfo Pérsico, es muy positivo para el mercado, pues contribuyen a cerrar la brecha entre oferta
y demanda y a estabilizar los precios. Sin embargo, a pesar de que estos no reaccionaron al alza con el
acuerdo, el mercado carece de información para medir los impactos reales del COVID-19 y para
establecer si el acuerdo es suficiente para retirar el exceso de crudo que hay en el mundo. Es importante
esperar la reacción del mercado a partir del primero de mayo, fecha en que inicia la aplicación de los
recientes acuerdos.
Con base a lo anterior y frente al panorama actual de un nuevo normal de precios bajos, las compañías
de la industria deben apostarles a las buenas prácticas, la optimización de portafolios y mejoras en sus
eficiencias, para así enfrentar la coyuntura de la mejor manera y continuar trabajando en pro de la industria
petrolera colombiana.
El sector petrolero colombiano es resiliente y ha sido construido a pulso. La reactivación de toda su cadena
es un trabajo que se ha abonado por décadas, en un esfuerzo conjunto entre el Gobierno, la Industria y
el Territorio. Consideramos que trabajando juntos, lograremos sobrellevar esta coyuntura de la mejor
manera posible. Solo mediante una oferta de bienes y servicios petroleros sostenible, la industria petrolera
en Colombia también será sostenible y competitiva. Unidos, a través de sinergias y esfuerzos conjuntos, el
sector seguirá siendo por muchos años más uno de los principales motores del desarrollo económico y
social del país.
Sobre el sector petrolero colombiano
Los precios del petróleo han caído por debajo de los costos de producción que tienen en sus recursos
muchos de los países del mundo, por lo que, se deberá reevaluar la viabilidad de muchos de estos activos,
lo que resultará en la declinación de la producción global. Para el caso de Colombia, si bien aún nos
encontramos en un margen seguro de operación a comparación de muchos otros lugares, la clave para
superar esta situación de la mejor forma será mantener una estricta disciplina de capital y buscar
operaciones costo efectivas, teniendo como base la innovación en tecnología y procesos.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
60
La producción de petróleo del país podría experimentar una contracción por efecto de la coyuntura. Este
impacto se cuantifica en una disminución de entre 9% y 13% con respecto a los volúmenes producidos
en 2019. No obstante, el año 2021 sería posiblemente el que reciba las mayores repercusiones, debido
principalmente a los recortes en las inversiones diferidas por parte de las compañías operadoras.
En este periodo la producción se situaría entre 10,3% y 19% por debajo de los niveles experimentados en
2019. Sin embargo, esperamos que en 2022 la producción del país experimente un aumento e inicie el
ciclo de recuperación e incremento de la actividad del sector.
En términos de perforación de pozos exploratorios, la actividad se ve fuertemente impactada por la actual
coyuntura, por lo que estimamos una disminución de entre 30 y 39 pozos con respecto a los pozos
perforados en 2019. Así mismo, en 2021 se espera un incremento con respecto al 2020 de cuatro pozos
para el escenario muy crítico, 10 pozos en el escenario crítico y 15 pozos en escenario moderado, debido
a una posible recuperación del precio. De igual forma. estimamos un aumento en el número de pozos
perforados en todos los escenarios, e inclusive se espera que bajo el escenario moderado regresemos a
los niveles de pozos perforados en 2019.
Para el segmento de sísmica, esperamos en 2020 un leve incremento del 5,6% en la adquisición sísmica
con respecto a los valores obtenidos en 2019. Debido principalmente a la ejecución de proyectos que
fueron planeados con al menos dos años de anterioridad, cuando los precios del barril eran muy
superiores a los actuales. Estimamos igualmente para 2021 un aumento de la actividad debido al rezago
de dos años entre la planeación y la ejecución de las campañas sísmicas. A pesar de lo anterior, no se
espera llegar a los niveles de adquisición que se tenían antes del 2014. Para finalizar, es muy probable que
en 2022 se materialicen los efectos de los niveles actuales de precios, por lo que, la actividad podría
disminuir alrededor de 15% con respecto a la adquisición realizada en 2021. El escenario actual pone en
riesgo nuestra autosuficiencia, por lo que, debemos trabajar de la mano para actuar lo antes posible cuando
las condiciones del mercado estén dadas para reactivar el sector.
Los empleos generados por el sector caerán en cualquier escenario este año, por efecto de la limitación a
algunas operaciones con la cuarentena obligatoria, y por los bajos precios. Sin embargo, a partir de 2021
se empezará a contratar nuevo personal, y en 2022 bajo los escenarios crítico y moderado, se tendrán
incluso más empleos de los que se estimaron para 2019.
Impactos sobre la Economía colombiana
Al analizar la crisis de doble coyuntura por la que estamos pasando en la actualidad, entendemos que los
fundamentales que la causan son de tipo estructural y no solo especulativo. Lo anterior nos indica que,
esta crisis va a incidir profundamente en la economía nacional e internacional, y que debemos
prepararnos, por un lado, para el impacto real que llegará en el segundo trimestre de 2020 y por otro,
para una lenta recuperación.
Consideramos que las medidas del gobierno para la contención del COVID-19 y para minimizar la
destrucción de empleos y del tejido empresarial han sido oportunas y pertinentes hasta el momento, sin
embargo, mientras no se resuelva en su totalidad la pandemia, las restricciones van a continuar siendo un
gran reto para todos los sectores económicos del país.
Para la industria petrolera en general, dado que se ve impactado por un choque doble, de COVID-19 y
de precios, la recuperación será aún más retadora. En este sentido, planteamos tres pilares fundamentales
para enfrentar la crisis actual, i) Eficiencia operacional, ii) austeridad de gasto, y iii) disciplina de capital.
Basándose en estos tres pilares y sin descuidar las buenas prácticas, en especial en términos de HSE, la
industria deberá buscar operaciones costo-efectivas, a partir de inversiones selectivas, optimización de
portafolios y rigurosidad a la hora de mantener los campos de producción que sean favorables. De igual
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
61
forma, los tres pilares fundamentales deberán estar acompañados necesariamente por la innovación y la
aplicación de nuevas tecnologías, las cuales permitirán encontrar nuevos horizontes de eficiencias y de
reducciones en los costos.
Ahora bien, con respecto al segmento de bienes y servicios petroleros, es de vital importante tener en
cuenta que, si no se generan las condiciones para que la oferta de bienes y servicios sea sostenible y
eficiente, el sector petrolero no va a ser sostenible. En este aspecto es fundamental que las relaciones
contractuales sean equilibradas y establecer la confianza y buenas prácticas, como pilar fundamental del
relacionamiento entre las compañías operadoras y las de servicio. Solo así se podrá iniciar un proceso de
construcción conjunta de escenarios en pro de una relación balanceada de largo plazo.
Como sector nos veremos afectados muy negativamente por el doble choque de precios y COVID-19,
que pueden llevar a la actividad a sus mínimos, con el estancamiento de la gran mayoría de proyectos de
exploración, perforación y servicio de pozos. Aun así, la industria petrolera ha demostrado ser fuerte y
esperamos que con las medidas que ha tomado el Gobierno, las cuales apoyamos, podamos superar la
pandemia y la crisis económica que se avecina.
Desde el segmento de bienes y servicios petroleros, estaremos listos para iniciar la reactivación del sector
cuando así lo decida el Gobierno. Sin embargo, somos conscientes de que aún con precios óptimos y una
vez superada la pandemia, se requiere de un mayor apoyo por parte del Gobierno, en especial con las
pequeñas y medianas compañías, tanto de E&P como de bienes y servicios. Hay que recordar que, luego
de la crisis de 2014, las líneas de crédito y el acceso a financiamiento del sistema bancario ha sido casi
nulo para las empresas del sector, y que, ante la coyuntura actual, muchas compañías van a necesitar alivios
financieros y laborales para afrontar la crisis, y evitar contribuir al incremento del desempleo.
Para que se lleva a cabo una reactivación del sector petrolero en el mediano plazo, se requiere más que
nunca, trabajar unidos, Gobierno, Industria y Territorio, con la generación de incentivos y alivios para las
compañías, en pro del desarrollo regional, el equilibrio de las relaciones contractuales en la industria y la
migración hacia un modelo de relacionamiento sostenible y de largo plazo.
2. Recomendaciones de Política
Desde Campetrol impulsamos a que se lleve a cabo una reactivación del sector petrolero lo más pronto
posible, con estricto cumplimiento de las normativas expedidas al amparo de la emergencia. Con la crisis
sanitaria del COVID-19, el gasto gubernamental ha tenido que incrementarse inesperadamente, lo cual
ubica al país en una situación fiscal insostenible en el mediano plazo, en especial para encarar la crisis
económica que resultará de las medidas de aislamiento preventivo obligatorio. Así las cosas, el balance
fiscal y el Presupuesto General de la Nación serán unos de los principales retos del Gobierno en 2021,
año en el cual se deberán buscar nuevas fuentes de ingresos fiscales.
En este sentido, la reactivación del sector petrolero jugará un papel fundamental en la recuperación de la
crisis económica interna, ya que, si se lleva a cabo correctamente, la industria puede contribuir
ampliamente en la disminución del desempleo y la pobreza, en financiar los ingresos fiscales de la nación
y en estabilizar las cuentas macroeconómicas. Un sector petrolero fortalecido, podrá apalancar la salida
de la crisis a mediano plazo.
Sin embargo, las condiciones actuales de la industria hacen que el sector pierda competitividad, que la
actividad no alcance toda su capacidad y que se pierdan los aportes potenciales al país y a las regiones.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
62
Como gremio identificamos cuatro aspectos clave, en los cuales el Gobierno colombiano podría
interceder para impulsar la reactivación del sector petrolero, como se presenta a continuación.
Garantizar la viabilidad operacional
La industria de bienes y servicios petroleros debe ser austera en el gasto, eficiente en el capital y debe
tener mucha disciplina financiera. Estas coyunturas nos permiten reinventarnos como industria, explorar
nuevas opciones y líneas de negocio y buscar siempre actuar unidos como industria. El uso de la tecnología
en el sector de Oil & Gas demanda cada vez más de trabajadores con las mejores herramientas y
capacitaciones, estos momentos son aquellos en los cuales debemos capacitarnos más porque
seguramente saldremos mucho más fortalecidos de esta coyuntura.
Debemos trabajar unidos, Gobierno, Industria y Territorio. Es necesario poder operar en condiciones
normales en el territorio, con el compromiso de realizar las actividades con los más altos estándares socio
ambientales. La disminución de la conflictividad social es un punto clave, puesto que es el principal
impedimento de las operaciones en la región. El incremento de las asignaciones directas a las regiones
productoras del Sistema General de Regalías, la flexibilización de los OCADs y la eficiencia en la
contratación de mano de obra local y regional, mediante un ajuste al decreto 1668, representan una
oportunidad para mejorar el relacionamiento en territorio y garantizar la viabilidad de las operaciones
petroleras.
Estabilidad Jurídica
Es determinante a la hora de mejorar el atractivo del país para los inversionistas y generadores de empleo
en el sector. En especial, la estabilidad en el proceso de licenciamiento ambiental (licencias ambientales,
PMAs y POMCAs), ya que los proyectos se dilatan y entran en una fase de conflictividad social, que en
muchos casos retrasa la actividad. Adicionalmente, es muy importante que se adquiera conciencia de la
importancia que la toma de decisiones en materias fundamentales para el país se haga con base en las
cifras y en criterios técnicos, despojados de otras dimensiones de tipo político o ideológico, privilegiando
los más altos intereses de la sociedad colombiana y el país.
Apertura de líneas de crédito
Solo mediante una oferta de bienes y servicios petroleros sostenible, la industria petrolera en Colombia
también será sostenible y competitiva. Previo a la crisis de 2014, las empresas petroleras colombianas
gozaban de amplias líneas de crédito por parte de la banca privada, acompañado de bajas y atractivas tasas
de interés. Lo anterior permitía que la industria buscara proyectos más grandes y ambiciosos, los cuales
generaron un incremento exponencial en la actividad, en la generación de excedentes financieros, en la
contratación y en los aportes fiscales. Sin embargo, en la actualidad, las líneas de crédito se encuentran
cerradas para la industria, lo que dificulta la ampliación de los planes de actividad e impide que se
consolide la reactivación del sector. Hacemos un llamado directo al Gobierno Nacional para que la
industria del petróleo, en toda su cadena, pueda acceder a los beneficios de crédito y liquidez del
Gobierno Nacional. Una industria que aporta tanto al crecimiento de la economía y al desarrollo regional
debe ser un foco de atención de primer nivel por parte de las autoridades económicas.
Régimen Fiscal
Sin las inversiones no es posible reactivar la industria, y para recuperar la competitividad del país como
receptor de inversión nacional y extranjera, se requiere un régimen fiscal competitivo. Con esto, un factor
clave es llevar el Government Take colombiano a un nivel competitivo en América Latina (52%). Esto,
debería estar acompañado de alivios fiscales e incentivos tributarios para las empresas del sector petrolero,
las cuales pasan por un momento álgido hoy en día, y bajo las condiciones fiscales y tributarias actuales,
muchas no serán capaces de sobrellevar la crisis.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
63
9. Bibliografía
[1] J. Hamilton, «Historical Oil Shocks,» Handbook of Major Events in Economic History, pp. 239-
265, 2013.
[2] B. Erten y J. A. Ocampo, «Super-cycles of commodity prices since the mid-nineteenth century,»
UN-DESA working paper No. 110, 2012.
[3] J. Hamilton, «Understanding Crude Oil Prices,» The Energy Journal, vol 30, no.2, pp. 179-206,
2009.
[4] Campetrol, El Fracking: Una Decisión de País, 2019.
[5] Ministerio de Hacienda y Crédito Público, «Marco Fiscal de Mediano Plazo,» 2019.
[6] J. H. University, «COVIIS-19 Information,» Baltimore, 2020.
[7] OMS, «La OMS caracteriza a COVID-19 como una pandemia,» Ginebra, 2020 .
[8] S&P Platts, «Why Saudi Arabia’s oil price war is doomed to fail: Fuel for Thought,» 16 Marzo
2020. [En línea]. Available: https://blogs.platts.com/2020/03/16/oil-price-war-saudi-arabia-
doomed/. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[9] G20, «G20 Extraordinary Energy Ministers Meeting,» de G20 Extraordinary Energy Ministers
Meeting Statement, Ryhad.
[10] OPEC, «OPEC Monthly Oil Market Report,» Vienna, 2020.
[11] Bloomberg, «The Most Profitable Trade: ‘Oil All Over the Oceans Right Now’.,» Bloomberg, p.
2, 8 Abril 2020.
[12] OPEP, «OPEC MInisterial Meeting,» de The 10th (Extraordinary) OPEC and non-OPEC
Ministerial Meeting concludes, Vienna, 2020.
[13] BP, «BP Oil Statistics».
[14] T. Paraskova, «China’s Oil Demand Could Rebound Sooner Than Expected,» Oil Price, p. 1,
31 Marzo 2020.
[15] EIA, «Short Term Energy Outlook (STEO),» Abril, 2020.
[16] ANH, «Acuerdo 2 del 7 de abril,» Bogotá, 2020.
[17] ANH, «Acuerdo 1 del 30 de marzo,» Bogotá, 2020.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
64
[18] IEA, «The global oil industry is experiencing a shock like no other in its history,» 1 Abril 2020.
[En línea]. Available: https://www.iea.org/articles/the-global-oil-industry-is-experiencing-shock-
like-no-other-in-its-history. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[19] IBP, «Evolução dos custos médios de extração e refino da Petrobras,» 30 Agosto 2019. [En
línea]. Available: https://www.ibp.org.br/observatorio-do-setor/evolucao-dos-custos-medios-de-
extracao-e-refino-da-petrobras/. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[20] El Economista, «Pemex: costo promedio de extracción de barril de crudo es de 14.2 dólares,»
19 Marzo 2020. [En línea]. Available: https://www.eleconomista.com.mx/empresas/Pemex-costo-
promedio-de-extraccion-de-barril-de-crudo-es-de-14.2-dolares-20200319-0018.html. [Último
acceso: 18 Abril 2020].
[21] YPF, «Estados Financieros Consolidados Al 31 de Diciembre de 2019, 2018 y 2017,» 5 Marzo
2020. [En línea]. Available:
https://www.ypf.com/inversoresaccionistas/Lists/InformacionFinanciera/EEFF%20YPF%20Cons
olidado%20Diciembre-19.pdf. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[22] Ecopetrol, «Resultados Trimestrales Ecopetrol,» 25 Febrero 2020. [En línea]. Available:
https://www.ecopetrol.com.co/english/documentos/Reporte%204T19%20%20Ingl%C3%A9s%20
VF.pdf. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[23] Rystad Energy, «GLOBAL E&P CAPEX WILL REACH AT LEAST A 13-YEAR LOW IN
2020 AS COVID-19 AND PRICE WAR PERSIST,» 30 Marzo 2020. [En línea]. Available:
https://www.rystadenergy.com/newsevents/news/press-releases/global-ep-capex-will-reach-at-least-
a-13-year-low-in-2020-as-covid-19-and-price-war-persist/. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[24] Saudi Aramco, «Global Medium Term Note Programme,» 1 Abril 2019. [En línea]. Available:
https://www.rns-pdf.londonstockexchange.com/rns/6727U_1-2019-4-1.pdf. [Último acceso: 18
Abril 2020].
[25] Rystad Energy, «LOW OIL PRICE? NO PROBLEM. US SHALE FIRMS ARE SET TO
SAVE UP BILLIONS IN RECORD-HIGH HEDGING GAINS,» 13 Marzo 2020. [En línea].
Available: https://www.rystadenergy.com/newsevents/news/press-releases/low-oil-price-no-
problem-us-shale-firms-are-set-to-save-up-billions-in-record-high-hedging-gains/. [Último acceso:
18 Abril 2020].
[26] FMI, «Informe de perspectivas de la economía mundial - Enero 2020,» 2020.
[27] B. Mundial, «La Economía en los tiempos del COVID-19,» Washington, 2020.
[28] E. País, «Economía nacional creció 4.1 % en el primer bimestre de 2020,» El País, p. 2, 17 Abril
2020.
[29] Fedesarrollo, «Choque dual y posibles efectos sobre la economía colombiana,» Bogotá, 2020.
[30] Corficolombiana, «Impaccto fiscal del coronavirus en Colombia,» Bogotá, 2020.
[31] ANIF, «SARS-COV-2: IMPACTO EN LOS INGRESOS LABORALES DE LOS
COLOMBIANOS, EL CONSUMO DE LOS HOGARES Y EL PB,» Bogotá, 2020.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
65
[32] EIA, What drives crude oil prices, Washigton, 2020.
[33] ANH, «Producción Mensual de Hidrocarburos,» Enero 2020. [En línea]. Available:
https://www.anh.gov.co/estadisticas-del-sector/sistemas-integrados-de-operaciones/estadisticas-de-
produccion. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[34] EIA, «Europe Brent Spot Price FOB,» 15 Abril 2020. [En línea]. Available:
https://www.eia.gov/dnav/pet/hist/RBRTED.htm. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[35] ANH, «Cifras y Estadísticas,» Febrero 2020. [En línea]. Available: https://www.anh.gov.co/ANH-
en-Datos/Paginas/Cifras-y-Estad%C3%ADsticas.aspx. [Último acceso: 18 Abril 2020].
[36] FMI, «Informe de perspectivas de la economía mundial - Enero 2020,» 2020.
[37] U.S. Energy Information Administration, «Total Energy Data Browser,» Abril 2020. [En línea].
Available: https://www.eia.gov/totalenergy/data/browser/.
[38] BP, «Statistical Review of the World Energy,» 2019.
[39] U.S. Energy Information Administration, «Short-Term Energy Outlook (STEO),» 2020.
[40] U.S. Energy Information Administration, «Monthly Energy Review,» marzo 2020.
[41] DANE, «DANE - Estaadísticas por tema,» abril 2020. [En línea]. Available:
https://www.dane.gov.co/index.php/estadisticas-por-tema.
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
66
CONOCE NUESTRAS
PUBLICACIONES
¡CONTÁCTANOS! ¿Quieres saber más sobre nuestros informes?
Juan Sebastián Gallego | [email protected] | (+571) 6170201 ext. 115 Catalina Soto | [email protected] | (+571) 6170188-6170204 ext 105
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
67
Tendencias del sector petrolero y la economía colombiana
68
Síguenos en redes sociales y entérate al instante de las
noticias más importantes del sector
@campetrol @campetrol @campetrolco CampetrolColombia