Tabloide Especial No. 1 Año 2010 Mañana será demasiado...

32
Tabloide Especial No. 1 Año 2010 Mañana será demasiado tarde para hacer lo que debimos haber hecho hace mucho tiempo Ilustración Orlando Cuéllar, Colombia Fidel, 12 de junio de 1992

Transcript of Tabloide Especial No. 1 Año 2010 Mañana será demasiado...

Tabloide Especial No. 1 Año 2010

Mañana será demasiado tarde para hacer lo que debimos haber hecho hace mucho tiempo

Ilustración Orlando Cuéllar, Colombia

Fidel,12 de junio de 1992

Tabloide Especial No. 12

Discurso pronunciado en Río de Ja-neiro por el Comandante en Jefe en laconferencia de Naciones Unidas sobremedio ambiente y desarrollo, el 12 dejunio de 1992.

(Versiones Taquigráficas-Consejo de Es-tado)

Sr. Presidente de Brasil, Fernando Co-llor de Mello;

Sr. Secretario General de NacionesUnidas, Butros Ghali;

Excelencias:

Una importante especie biológica es-tá en riesgo de desaparecer por la rápi-da y progresiva liquidación de sus condi-ciones naturales de vida: el hombre.

Ahora tomamos conciencia de este pro-blema cuando casi es tarde para impe-dirlo.

Es necesario señalar que las socieda-des de consumo son las responsables

fundamentales de la atroz destrucción delmedio ambiente. Ellas nacieron de lasantiguas metrópolis coloniales y de polí-ticas imperiales que, a su vez, engendra-ron el atraso y la pobreza que hoy azotana la inmensa mayoría de la humanidad.Con solo el 20 por ciento de la poblaciónmundial, ellas consumen las dos terce-ras partes de los metales y las tres cuar-tas partes de la energía que se produceen el mundo. Han envenenado los maresy ríos,han contaminado el aire, han debi-litado y perforado la capa de ozono, hansaturado la atmósfera de gases que al-teran las condiciones climáticas con efec-tos catastróficos que ya empezamos apadecer.

Los bosques desaparecen, los desier-tos se extienden, miles de millones detoneladas de tierra fértil van a parar ca-da año al mar. Numerosas especies seextinguen. La presión poblacional y la po-breza conducen a esfuerzos desespera-dos para sobrevivir aun a costa de la na-turaleza. No es posible culpar de esto alos países del Tercer Mundo, colonias

ayer, naciones explotadas y saqueadashoy por un orden económico mundial in-justo.

La solución no puede ser impedir eldesarrollo a los que más lo necesitan.Lo real es que todo lo que contribuya hoyal subdesarrollo y la pobreza constituyeuna violación flagrante de la ecología. De-cenas de millones de hombres, mujeresy niños mueren cada año en el TercerMundo a consecuencia de esto,más queen cada una de las dos guerras mundia-les. El intercambio desigual, el proteccio-nismo y la deuda externa agreden la eco-logía y propician la destrucción del me-dio ambiente.

Si se quiere salvar a la humanidad deesa autodestrucción, hay que distribuirmejor las riquezas y tecnologías disponi-bles en el planeta. Menos lujo y menosdespilfarro en unos pocos países para quehaya menos pobreza y menos hambre engran parte de la Tierra. No más transfe-rencias al Tercer Mundo de estilos de vi-da y hábitos de consumo que arruinan elmedio ambiente. Hágase más racional

la vida humana. Aplíquese un orden eco-nómico internacional justo. Utilícese to-da la ciencia necesaria para un desarro-llo sostenido sin contaminación. Págue-se la deuda ecológica y no la deuda ex-terna. Desaparezca el hambre y no elhombre.

Cuando las supuestas amenazas delcomunismo han desaparecido y no que-dan ya pretextos para guerras frías, ca-rreras armamentistas y gastos milita-res, ¿qué es lo que impide dedicar deinmediato esos recursos a promover eldesarrollo del Tercer Mundo y combatirla amenaza de destrucción ecológicadel planeta?

Cesen los egoísmos, cesen los hege-monismos, cesen la insensibilidad, lairresponsabilidad y el engaño. Mañanaserá demasiado tarde para hacer lo quedebimos haber hecho hace muchotiempo.

Gracias.

(Ovación)

Desaparezca el hambre y no el hombre

Durante las últimas semanas, el ac-tual Presidente de Estados Unidos se em-peña en demostrar que la crisis va ce-diendo como fruto de sus esfuerzos pa-ra enfrentar el grave problema que Esta-dos Unidos y el mundo heredaron de supredecesor.

Casi todos los economistas hacen re-ferencia a la crisis económica que se ini-ció en octubre de 1929. La anterior ha-bía sido a finales del Siglo XIX. La ten-dencia bastante generalizada en los polí-ticos norteamericanos es la de creerque tan pronto los bancos dispongan desuficientes dólares para engrasar lamaquinaria del aparato productivo, todomarchará hacia un idílico y jamás soña-do mundo.

Las diferencias entre la llamada crisiseconómica de los años 30 y la actual sonmuchas, pero me limitaré sólo a una delas más importantes.

Desde finales de la Primera GuerraMundial el dólar, basado en el patrónoro, sustituyó a la libra esterlina inglesadebido a las inmensas sumas de oroque Gran Bretaña gastó en la contienda.

La gran crisis económica se produjo enEstados Unidos apenas 12 años despuésde aquella guerra.

Franklin D. Roosevelt, del Partido De-mócrata, venció en buena medida ayu-dado por la crisis, como Obama en la cri-sis actual. Siguiendo la teoría de Keynes,aquel inyectó dinero en la circulación,cons-truyó obras públicas como carreteras,pre-sas y otras de incuestionable beneficio,lo que incrementó el gasto, la demandade productos, el empleo y el PIB duranteaños, pero no obtuvo los fondos impri-miendo billetes. Los obtenía con impues-tos y con parte del dinero depositado enlos bancos. Vendía bonos de EstadosUnidos con interés garantizado, que loshacían atractivos para los compradores.

El oro, cuyo precio en 1929 estaba a20 dólares la onza troy, Roosevelt lo ele-vó a 35 como garantía interna de losbilletes de Estados Unidos.

Sobre la base de esa garantía en orofísico, surgió el Acuerdo de BrettonWoods en julio de 1944, que otorgó alpoderoso país el privilegio de imprimirdivisas convertibles cuando el resto del

mundo estaba arruinado. Estados Uni-dos poseía más del 80% del oro delmundo.

No necesito recordar lo que vino des-pués, desde las bombas atómicas lan-zadas sobre Hiroshima y Nagasaki,—queacaba de cumplirse 64 años del genoci-dio—, hasta el golpe de Estado en Hon-duras y las siete bases militares que elgobierno de Estados Unidos se proponeinstalar en Colombia. Lo real es que en1971,bajo la administración de Nixon,elpatrón oro fue suprimido y la impresiónilimitada de dólares se convirtió en lamás grande estafa de la humanidad. Envirtud del privilegio de Bretton Woods,Estados Unidos, al suprimir unilateral-mente la convertibilidad, paga con pape-les los bienes y servicios que adquiereen el mundo. Es cierto que a cambio dedólares también ofrece bienes y servicios,pero también lo es que desde la supre-sión del patrón oro,el billete de ese país,que se cotizaba a 35 dólares la onzatroy, ha perdido casi 30 veces su valor y48 veces el que tenía en 1929. El restodel mundo ha sufrido las pérdidas, sus

recursos naturales y su dinero han cos-teado el rearme y sufragado en gran par-te las guerras del imperio. Baste señalarque la cantidad de bonos suministradosa otros países, según cálculos conser-vadores, supera la cifra de 3 millones demillones de dólares, y la deuda pública,que sigue creciendo, sobrepasa la cifrade 11 millones de millones.

El imperio y sus aliados capitalistas,ala vez que compiten entre sí, han hechocreer que las medidas anti crisis consti-tuyen las fórmulas salvadoras. Pero Euro-pa,Rusia, Japón,Corea,China e India norecaudan fondos vendiendo bonos de laTesorería ni imprimiendo billetes,sino apli-cando otras fórmulas para defender susmonedas y sus mercados, a veces congran austeridad de su población. La in-mensa mayoría de los países en desa-rrollo de Asia, África y América Latina esla que paga los platos rotos, suministran-do recursos naturales no renovables, su-dor y vidas.

El TLCAN es el más claro ejemplo de loque puede ocurrir con un país en desa-rrollo en las fauces del lobo: ni soluciones

Reflexiones del compañero Fidel

Una causa justa que defender y la esperanza de seguir adelante

Cambio climático 3

Reflexiones del compañero Fidel

Una especie en peligro de extinción

para los inmigrantes en Estados Unidos,ni permiso para viajar sin visa a Canadápudo obtener México en la última Cumbre.

Adquiere, sin embargo, plena vigenciabajo la crisis el más grande TLC a nivelmundial: la Organización Mundial de Co-mercio, que creció bajo las notas triun-fantes del neoliberalismo, en pleno apo-geo de las finanzas mundiales y los sue-ños idílicos.

Por otro lado, la BBC Mundo informóayer, 11 de agosto, que mil funcionariosde Naciones Unidas, reunidos en Bonn,Alemania, declararon que buscan el ca-mino para un acuerdo sobre el cambioclimático en diciembre de este año,peroque el tiempo se estaba acabando.

Ivo de Boer, el funcionario de mayorrango de Naciones Unidas sobre el Cam-bio Climático, dijo que solo faltaban 119días para la Cumbre y tenemos “una enor-me cantidad de intereses divergentes,es-caso tiempo de discusión, un documen-

to complicado sobre la mesa (doscientaspáginas) y problemas de financiación…”

“Las naciones en desarrollo insistenen que la mayor parte de los gases queproducen el efecto invernadero provienendel mundo industrializado.”

El mundo en desarrollo alega la nece-sidad de ayuda financiera para lidiar conlos efectos climáticos.

Ban Ki-moon,secretario general de Na-ciones Unidas, declaró que: “Si no se to-man medidas urgentes para combatir loscambios climáticos pueden llevar a la vio-lencia y a disturbios en masa a todo elplaneta.”

“El cambio climático intensificará lassequías, inundaciones y otros desastresnaturales.”

“La escasez de agua afectará a cien-tos de millones de personas. La malnu-trición va a arrasar con gran parte de lospaíses en desarrollo.”

En un artículo del The New York Ti-

Me habría gustado hablar hoy del ex-traordinario concierto “Paz sin Fronteras”,celebrado en la Plaza de la Revolución“José Martí” hace 24 horas, pero la por-fiada realidad me obliga a escribir sobreun peligro que amenaza no solo la paz,sino también la supervivencia de nues-tra especie.

La Organización de Naciones Unidas,cuya tarea es velar por la paz, la seguri-dad y los derechos de casi 200 Estados,que allí representan a más de 6 mil 500millones de habitantes del planeta, ini-ciará los debates de su Asamblea Gene-ral con la participación de los Jefes deEstado el próximo miércoles. Esta vez,dada la importancia excepcional del te-ma, dedicará el martes 22 de septiem-bre a una Sesión de Alto Nivel sobre elCambio Climático, como preparación pa-ra la Conferencia de Copenhague, Dina-marca, entre el 7 y el 18 de diciembredel presente año.

En la Conferencia Internacional sobreel Medio Ambiente convocada por la ONUen Río de Janeiro, afirmé como jefe en-tonces del Estado cubano: “Una especieestá en peligro de extinción: el hombre”.Cuando pronuncié y fundamenté aque-llas palabras, recibidas y aplaudidas porlos jefes de Estado allí presentes —inclui-do el Presidente de Estados Unidos, unBush menos tenebroso que su hijo Geor-ge W.—, éstos creían disponer todavíade varios siglos para enfrentar el proble-ma. Yo mismo no lo veía en fecha tancercana como 60 u 80 años.

Hoy se trata de un peligro realmenteinminente y sus efectos son ya visibles.Me limitaré solo a unos pocos detalles,que serán ampliamente abordados enNueva York por nuestro Ministro de Rela-ciones Exteriores que allí intervendrá ennombre de Cuba.

La temperatura promedio ha crecido 0,8grados centígrados desde 1980, segúnel Instituto de Estudios Espaciales de laNASA. Las últimas dos décadas del sigloXX fueron las más calurosas en cientosde años. Las temperaturas en Alaska, elOeste canadiense y el Este de Rusia hansubido a un ritmo que duplica el prome-dio mundial. El hielo del Ártico está desa-pareciendo rápidamente y la región pue-de experimentar su primer verano com-pletamente libre de hielo tan pronto co-mo en el año 2040. Los efectos son visi-bles en las masas de hielo de más dedos kilómetros de altura que se derritenen Groenlandia, los glaciares de Sura-mérica, desde Ecuador hasta el Cabo deHornos, fuentes fundamentales de agua,y la gigantesca capa de hielo que cubrela extensa zona Antártida.

Las actuales concentraciones de dióxi-do de carbono han alcanzado el equiva-lente a 380 partes por millón, cifra quesupera el rango natural de los últimos 650mil años. El calentamiento está afectandoya los sistemas naturales de todo el mun-do. Si esto ocurriera sería devastador pa-ra todos los pueblos.

Los científicos han descubierto que ha-ce no menos de 3 mil millones de añossurgieron las primeras formas de vidaelemental en el planeta Tierra. Desde en-tonces las mismas evolucionaron conti-nuamente hacia formas superiores y com-plejas en virtud de leyes biológicas inexo-rables. Nuestra actual especie, el Homosapiens, apenas cuenta con 150 milaños de existencia,una insignificante frac-ción de tiempo desde que surgió la vida.Aunque los griegos, cientos de años an-tes de nuestra era, poseían ya determi-nados conocimientos astronómicos, ha-ce solo algo más de 500 años, despuésde un largo período de oscuridad medie-

val, el hombre llegó a conocer que la Tie-rra era redonda y no plana. Un almiranteaudaz de origen genovés y sólidos cono-cimientos se propuso navegar hacia elEste en busca de la India, en vez de bor-dear por el Sur de África. Comenzaba lacolonización europea de este hemisferioy el resto del planeta.

La especie humana pudo medir conbastante precisión la vuelta de la Tierracada 24 horas y su movimiento de tras-lación alrededor de la enorme masa incan-descente del Sol, cada 365 días aproxi-madamente. Estas y otras singulares cir-cunstancias estaban asociadas a la exis-tencia y la vida de todas las especiesque existían entonces.

Desde la antigüedad, los filósofos ypensadores más avanzados han busca-do la justicia social. A pesar de eso laesclavitud física duró legalmente todavíahasta hace 129 años, en que se decre-tó la abolición de la esclavitud en la colo-nia española de Cuba.

Desde mi punto de vista la Teoría de laEvolución, expuesta por Darwin en su li-bro “El origen de las especies”, ha sidouno de los dos descubrimientos de la cien-cia más importantes. Algunos vieron enella un antagonismo con las creencias re-ligiosas; ningún científico,sin embargo,hoyla niega, y muchos de ellos,que profesansinceras creencias religiosas, ven en laevolución la expresión de la voluntad divina.

El otro aporte decisivo fue el de la Teo-ría General de la Relatividad de AlbertEinstein, expuesta en 1915, fuente demuchas investigaciones posteriores a lamuerte del autor en abril de 1955. Po-cas personas han influido tanto en eldestino del mundo como él. Einstein per-suadió a Roosevelt de iniciar las investi-gaciones para producir la bomba atómi-ca por temor a que esta fuese desarro-

llada por los nazis. Cuando Truman lashizo estallar sobre las ciudades civiles in-defensas de Hiroshima y Nagasaki,de talmanera le impactó el hecho que se con-virtió en un pacifista convencido. Hoy Es-tados Unidos posee miles de armas nu-cleares más potentes que aquellas, lascuales podrían exterminar varias vecesla población del mundo. Son a su vez,los mayores productores y exportadoresde todo tipo de armas.

El ritmo acelerado de las investigacio-nes científicas en todos los campos dela producción material y los servicios,ba-jo el orden económico impuesto al mun-do después de la Segunda Guerra Mun-dial, ha conducido a la humanidad a unasituación insostenible.

Nuestro deber es exigir la verdad. Lapoblación de todos los países tiene de-recho a conocer los factores que origi-nan el cambio climático y cuáles son lasposibilidades actuales de la ciencia pararevertir la tendencia, si aún se disponerealmente de ellas.

El pueblo cubano, especialmente sumagnífica juventud, demostró ayer queaún en medio de un brutal bloqueo eco-nómico es posible vencer obstáculos ini-maginables.

+

Fidel Castro RuzSeptiembre 21 de 20095 y 44 p.m.

mes el pasado 9 de agosto se explica-ba que: “Los analistas ven en el cambioclimático una amenaza para la seguri-dad nacional.”

“Semejantes crisis —continúa el ar-tículo— provocadas por el clima pudie-ran derrocar gobiernos, estimular movi-mientos terroristas o desestabilizar re-giones completas, afirman analistas delPentágono y de agencias de inteligenciaque por primera vez están estudiandolas implicaciones del cambio climáticoen la seguridad nacional.”

“‘Se vuelve muy complicado muy rápi-damente’, dijo Amanda J. Dory, Secreta-ria de Defensa Adjunta para Estrategia,que trabaja con un grupo del Pentágonoasignado a incorporar el cambio climáti-co a la planificación de la estrategia na-cional de seguridad.”

Del artículo de The New York Timesse deduce que todavía en el Senado notodos están convencidos de que se tra-

ta de un problema real, ignorado total-mente hasta ahora por el gobierno deEstados Unidos desde que se aprobóhace 10 años en Kyoto.

Algunos hablan de que la crisis eco-nómica es el fin del imperialismo; quizáshabría que plantearse si no significa algopeor para nuestra especie.

A mi juicio, lo mejor siempre será te-ner una causa justa que defender y laesperanza de seguir adelante.

Fidel Castro RuzAgosto 12 de 20099 y 12 p.m.

Tabloide Especial No. 14

En los actos festivos de la SéptimaReunión Cumbre del ALBA, que tuvolugar en la histórica región boliviana deCochabamba, se pudo observar cuán ri-ca es la cultura de los pueblos latinoa-mericanos y cuántas simpatías despier-tan en los niños, jóvenes y adultos detodas las edades los cantos, bailes, tra-jes y rostros expresivos de los seres hu-manos de todas las etnias,colores y ma-tices: indígenas, negros, blancos y mes-tizos. Allí se expresaban milenios de his-toria humana y la rica cultura, que expli-can la decisión con que los líderes devarios pueblos del Caribe, Centro y Sura-mérica convocaron esa Cumbre.

La reunión constituyó un gran éxito.Su sede fue Bolivia. En días recientesescribí sobre las excelentes perspecti-vas de ese país, heredero de la culturaaymara-quechua. Un pequeño grupo depueblos del área están empeñados endemostrar que un mundo mejor es posi-ble. El ALBA —creado por la RepúblicaBolivariana de Venezuela y Cuba, inspi-radas en las ideas de Bolívar y Martí, co-mo un ejemplo sin precedentes de soli-daridad revolucionaria— ha demostradocuánto puede hacerse en apenas cincoaños de cooperación pacífica. Esta co-menzó poco después del triunfo políticoy democrático de Hugo Chávez. El impe-rialismo lo subestimó; de forma burdaintentó derrocarlo y eliminarlo. Por habersido Venezuela el mayor productor petro-lero del mundo durante largo trecho enel siglo XX y una propiedad virtual de lasmultinacionales yankis, el camino em-prendido era particularmente difícil.

El poderoso adversario contaba con elneoliberalismo y el ALCA, dos instrumen-tos de dominación con los cuales aplas-tó siempre toda resistencia en el hemis-ferio después de la Revolución en Cuba.

Indigna pensar la forma burda y des-pectiva con que el gobierno de EstadosUnidos impuso el gobierno del millonario

Pedro Carmona e intentó eliminar al pre-sidente electo Hugo Chávez cuando laURSS había desaparecido y la RepúblicaPopular China estaba a pocos años deconstituir la potencia económica y co-mercial que es hoy, gracias al crecimien-to de más del 10% durante dos déca-das. El pueblo de Venezuela, como el deCuba, resistió la brutal embestida. Lossandinistas se recuperaron, y la luchapor la soberanía, la independencia y el so-cialismo cobró fuerzas en Bolivia y Ecua-dor. Honduras, que se había incorporadoal ALBA, fue víctima de un brutal golpede Estado, inspirado por el embajadoryanki e impulsado desde la base militarde Estados Unidos en Palmerola.

Hoy somos cuatro los países latinoa-mericanos que hemos eliminado radical-mente el analfabetismo: Cuba, Venezue-la, Bolivia y Nicaragua; el quinto, Ecuador,avanza aceleradamente hacia ese objeti-vo. Los planes de salud integral marchanen los cinco países a un ritmo como nun-ca tuvo lugar en pueblos del Tercer Mundo.Los programas de desarrollo económicocon justicia social se han convertido enproyectos de los cinco Estados,que cuen-tan ya con reconocido prestigio en el mun-do por su valiente posición frente al podereconómico, militar y mediático del impe-rio. Al ALBA se suman tres países caribe-ños de origen negro y habla inglesa, queluchan decididamente por su desarrollo.

De por sí, esto constituye un granmérito político, si en el mundo de hoy talhecho fuese el único gran problema dela historia del hombre.

El sistema económico y político queen una breve etapa histórica ha condu-cido a la existencia de más de mil millo-nes de hambrientos, y de otros muchoscientos de millones cuyas vidas apenasrebasan la mitad del promedio del quedisfrutan los de los países privilegiadosy ricos, era hasta este momento el prin-cipal problema de la humanidad.

En la Cumbre del ALBA se planteó congran fuerza un nuevo problema de extremagravedad: el cambio climático. En ningúnotro momento de la historia humana sepresentó un peligro de tal magnitud.

Mientras Hugo Chávez, Evo Morales yDaniel Ortega se despedían de la pobla-ción en las calles de Cochabamba ayerdomingo,ese día,de acuerdo con informa-ciones divulgadas por BBC Mundo, Gor-don Brown presidía en Londres una reu-nión del Foro de las Grandes Economíasdel mundo, integrado en su mayoría porlos países capitalistas de mayor desa-rrollo, máximos responsables de las emi-siones de dióxido de carbono, gas queorigina el efecto invernadero.

La importancia de las palabras de Brownes que no las pronuncia un representan-te del ALBA o uno de los 150 países emer-gentes o subdesarrollados del planeta,sino de Gran Bretaña, donde se inició eldesarrollo industrial y uno de los quemás dióxido de carbono ha inyectado ala atmósfera. El Primer Ministro británicoadvirtió que si no se alcanza en la Cum-bre de Naciones Unidas en Copenhagueun acuerdo, las consecuencias serán“desastrosas”.

Inundaciones, sequías y olas de calorletales son algunas de las consecuen-cias “catastróficas”, afirmó por su parteel grupo ecológico Fondo Mundial para laNaturaleza, refiriéndose a lo señalado porBrown. “El cambio climático quedará fue-ra de control en los próximos 5 a 10años si no se recortan drásticamentelas emisiones de CO2. No habrá un planB si fracasa Copenhague.”

La misma fuente noticiosa afirma que:“El especialista de la BBC, James Lan-dale, explicó que no todo está saliendocomo se esperaba.”

Newsweek publicó que: “Parece cadadía más improbable que los Estados secomprometan a algo en Copenhague.”

El presidente de la reunión, Gordon

Brown, declaró —según informó el im-portante órgano norteamericano de pren-sa— que “si no se alcanza un acuerdo,sin dudas el daño de las emisiones des-controladas no podrá ser reparado conun acuerdo futuro”. A continuación enume-ró conflictos como “emigración descon-trolada y 1 800 millones de personascon escasez de agua”.

En realidad, como informó la delega-ción cubana en Bangkok,Estados Unidosestaba al frente de los países industria-lizados que más se opusieron a la re-ducción necesaria de las emisiones.

Una nueva Cumbre del ALBA ha sidoconvocada en la reunión de Cochabam-ba. De ese modo, el cronograma será: 6 de diciembre, elecciones en Bolivia;13 de diciembre, reunión del ALBA en LaHabana; 16 de diciembre, participaciónen la Cumbre de Naciones Unidas enCopenhague. Allí estará el pequeño gru-po de países del ALBA. Ya no es cues-tión de “Patria o Muerte”; realmente y sinexageración, es una cuestión de “Vida oMuerte” para la especie humana.

El sistema capitalista no solo nosoprime y saquea. Los países industriali-zados más ricos desean imponer al res-to del mundo el peso principal de la lu-cha contra el cambio climático. ¿A quiénvan a engañar con eso? En Copenha-gue, el ALBA y los países del Tercer Mun-do estarán luchando por la supervivenciade la especie.

Fidel Castro RuzOctubre 19 de 20096 y 05 p.m.

Reflexiones del compañero Fidel

El ALBA y Copenhague

El ALBA —creado por la República Bolivariana de Venezuela y Cuba, inspiradas en las ideas deBolívar y Martí, como un ejemplo sin precedentes de solidaridad revolucionaria— ha demostra-

do cuánto puede hacerse en apenas cinco años de cooperación pacífica

Cambio climático 5

Ahora, señoras, señores, ¿acaso noes esa precisamente la realidad de estemundo? ¿Acaso estamos en un mundodemocrático? ¿Acaso el sistema mundiales inclusivo? ¿Podemos esperar algo de-mocrático, inclusivo del sistema mundialactual? Lo que vivimos en este planetaes una dictadura imperial y desde aquí laseguimos denunciando: ¡Abajo la dicta-dura imperial y que vivan los pueblos, lademocracia y la igualdad en este plane-ta! (Aplausos.)

Esto que aquí vemos es reflejo de ello:exclusión. Hay un grupo de países que secreen superiores a nosotros los del Sur,a nosotros el Tercer Mundo, a nosotroslos subdesarrollados,o como dice el granamigo Eduardo Galeano,nosotros los paí-ses arrollados como por un tren que nosarrolló en la historia.

Así que no nos extrañemos pues deesto, no nos extrañemos: No hay demo-cracia en el mundo, y aquí estamos, unavez más, ante una poderosa evidenciade la dictadura imperial mundial.

Aquí subieron dos jóvenes; afortuna-damente, los agentes del orden han sidodecentes, algún empujón por ahí, y elloscolaboraron, ¿no?

Allá afuera hay mucha gente,¿saben?;claro, no caben en este salón. He leídopor la prensa que hubo algunos deteni-dos, algunas protestas intensas ahí enlas calles de Copenhague, y quiero salu-

dar a toda esa gente que está allá afue-ra, la mayor parte de ella jóvenes (Aplau-sos). Claro,son jóvenes preocupados,creoque con razón,mucho más que nosotros,por el futuro del mundo. La mayoría delos que estamos aquí tenemos el Sol ala espalda; ellos tienen el Sol al frente yestán muy preocupados.

Uno pudiera decir, señor Presidente,que un fantasma recorre Copenhague,parafraseando a Carlos Marx,el gran Car-los Marx. Un fantasma recorre las callesde Copenhague, y creo que ese fantas-ma anda en silencio por esta sala, porahí anda entre nosotros,se mete por lospasillos, sale por debajo, sube. Ese fan-tasma es un fantasma espantoso, casinadie quiere nombrarlo. ¡El capitalismoes el fantasma! (Aplausos); casi nadiequiere nombrarlo, es el capitalismo. Ahírugen los pueblos, ahí afuera se oyen.

Yo venía leyendo algunas consignasque hay en las calles pintadas, y creoque esas consignas de estos jóvenes al-gunas de ellas las oí cuando iban el jo-ven y la joven allá. Hay dos de las quetomé nota, se oyen, entre otras, dos po-derosas consignas: Una: “No cambienel clima,cambien el sistema” (Aplausos),y yo la tomo para nosotros: No cambie-mos el clima, cambiemos el sistema y,en consecuencia, comenzaremos a sal-var el planeta. El capitalismo, el modelode desarrollo destructivo está acabando

con la vida, amenaza con acabar defini-tivamente con la especie humana.

El otro lema llama a la reflexión, muya tono con la crisis bancaria que recorrióal mundo y todavía lo golpea, y la formacomo los países del Norte rico auxiliarona los banqueros y a los grandes bancos;solo Estados Unidos...,bueno,se perdióla cifra, es astronómica, para salvar ban-cos. Dicen en las calles lo siguiente: “Siel clima fuera un banco,ya lo habrían sal-vado”, y creo que es verdad (Aplausos).Si el clima fuera un banco capitalista, delos más grandes, ya lo habrían salvadolos gobiernos ricos.

Creo que Obama no ha llegado, reci-bió el Premio Nobel de la Paz casi el mis-mo día que mandaba 30 000 soldadosmás a matar inocentes en Afganistán, yviene ahora a presentarse aquí con elPremio Nobel de la Paz el Presidente deEstados Unidos.

Estados Unidos tiene la maquinita dehacer billetes, de hacer dólares y ha sal-vado..., bueno, creen haber salvado losbancos y el sistema capitalista.

Bien,esto, comentario al margen,queyo quería hacerlo allá,porque estábamoslevantando la mano para acompañar aBrasil, a India, a Bolivia, a China en suinteresante posición, que Venezuela ylos países de la Alianza Bolivariana com-parten con firmeza; pero, bueno, no nosdieron la palabra, así que no me cuente

El cambio climático no es el únicoproblema que afecta hoy a la humanidad

Discurso pronunciado por Hugo Chá-vez Frías, presidente de la RepúblicaBolivariana de Venezuela, en la CumbreClimática de las Naciones Unidas,en Co-penhague, Dinamarca, el 16 de diciem-bre de 2009.

Señor Presidente; Señores, señoras;Excelencias; amigas y amigos:

Les prometo que no voy a hablar másque el que más ha hablado esta tarde aquí.

Permítanme un comentario inicial,que hubiera querido hacer como partedel punto previo que fue ejercido por ladelegación de Brasil, de China, de India,de Bolivia —nosotros estábamos allápidiendo la palabra, pero no fue posibletomarla.

Dijo la representante de Bolivia —sa-ludo, por cierto, al compañero presiden-te Evo Morales, quien está por allí (Aplau-sos), presidente de la República de Boli-via—,entre otras cosas, lo siguiente —to-mé nota por aquí—: “El texto presenta-do no es democrático, no es inclusivo.”

Yo venía llegando apenas y estába-mos sentándonos cuando oímos a laPresidenta de la sesión anterior, la Minis-tra,decir que venía un documento por ahí,pero que nadie conoce. Yo he pregunta-do por el documento,aún no lo tenemos;creo que nadie sabe de ese documento,top secret. Ahora, ciertamente la cama-rada boliviana lo dijo: “No es democráti-co, no es inclusivo.”

Tabloide Especial No. 16

estos minutos,por favor,Presidente,eranpara eso (Aplausos).

Bueno, fíjense, por ahí tuve el gustode conocer a este escritor francés, Her-vé Kempf. Recomiendo este libro, lo re-comiendo,se consigue en español —porahí está Hervé—, también en francés,en inglés seguramente, Cómo los ricosdestruyen el planeta, de Hervé Kempf.Por eso fue que Cristo lo dijo: “Más fácilserá que un camello entre por el ojo deuna aguja, a que un rico entre al reino delos cielos.” Eso lo dijo Cristo nuestro Se-ñor (Aplausos).

Los ricos están destruyendo el plane-ta. ¿Será que piensan irse para otro cuan-do destruyan este, tendrán planes parairse a otro planeta?; hasta ahora no seve ninguno en el horizonte de la galaxia.

Apenas este libro me ha llegado —melo ha regalado Ignacio Ramonet, que es-tá por ahí también en esta sala—, y ter-minando el prólogo o el preámbulo estafrase es muy importante. Dice Kempf losiguiente: “No podremos reducir el con-sumo material a nivel global si no hace-mos que los poderosos bajen varios es-calones, y si no combatimos la desigual-dad; es necesario que al principio ecolo-gista, tan útil a la hora de tomar concien-cia: pensar globalmente y actuar local-mente, le sumemos el principio que im-pone la situación: consumir menos y re-partir mejor.” Creo que es un buen con-sejo que nos da este escritor francésHervé Kempf.

Bien, señor Presidente, el cambio cli-mático es,sin duda,el problema ambientalmás devastador del presente siglo: inun-daciones, sequías, tormentas severas,huracanes, deshielos, ascenso del nivelmedio del mar, acidificación de los océa-nos y olas de calor, todo eso agudiza elimpacto de las crisis globales que nosazotan.

La actual actividad humana superalos umbrales de la sostenibilidad, po-niendo en peligro la vida en el planeta;pero también en ello somos profunda-mente desiguales,quiero recordarlo. Los500 millones de personas más ricas,¡qui-nientos millones!, esto es el 7%, ¡sietepor ciento!, seven por ciento de la pobla-ción mundial. Ese 7% es responsable,esos 500 millones de personas más ri-cas son responsables del 50% de lasemisiones contaminantes, mientras queel 50% más pobre es responsable desolo 7% de las emisiones contaminan-tes. Por eso a mí me llama la atención,es un poco extraño llamar aquí a Esta-dos Unidos y a China al mismo nivel. Es-tados Unidos llegará si acaso a 300 mi-llones de habitantes; China tiene casicinco veces más población que EstadosUnidos. Estados Unidos consume másde 20 millones de barriles diarios depetróleo; China llega apenas a 5 ó 6millones de barriles diarios. No se pue-de pedir lo mismo a Estados Unidos y aChina. He allí temas que hay que discu-tir. Ojalá pudiéramos los jefes de Esta-do y de Gobierno sentarnos a discutir deverdad, verdad, sobre estos temas.

Luego, señor Presidente, el 60% delos ecosistemas del planeta están daña-dos, el 20% de la corteza terrestre estádegradada. Hemos sido testigos impasi-

bles de la deforestación, la conversiónde tierras, la desertificación, las altera-ciones de los sistemas de agua dulce, lasobreexplotación de los recursos mari-nos, la contaminación y la pérdida de ladiversidad biológica. La utilización exacer-bada de la tierra sobrepasa en un 30%la capacidad para regenerarla. El plane-ta está perdiendo la capacidad para auto-rregularse, eso lo está perdiendo el pla-neta; cada día se liberan más desechosde los que pueden ser procesados. Lasupervivencia de nuestra especie marti-lla en la conciencia de la humanidad.

A pesar de la urgencia, han transcurri-do dos años de negociaciones para con-cluir un segundo período de compromi-sos bajo el Protocolo de Kyoto y asisti-mos a esta cita sin un acuerdo real y sig-nificativo.

Y, por cierto, acerca del texto que vie-ne de la nada —como algunos lo califi-caron, el representante chino—, Vene-zuela dice y los países del ALBA deci-mos, la Alianza Bolivariana,que nosotrosno aceptamos,desde ya lo decimos,nin-gún otro texto que no sea el que vengade los grupos de trabajo, del Protocolode Kyoto y de la Convención, son los tex-tos legítimos que se han estado discu-tiendo con tanta intensidad en estos añosy en estas últimas horas. Creo que uste-des no han dormido; además de que nohan almorzado, no han dormido, ¿eh?,no me parece lógico que salga un docu-mento de la nada, como dicen ustedes.

El objetivo científicamente sustentadode reducir la emisión de gases contami-nantes y lograr un convenio de coopera-ción a largo plazo, a todas luces, hoy, aesta hora, parece haber fracasado, porahora. ¿La razón cuál es? No tenemosduda, la razón es la actitud irresponsa-ble y la falta de voluntad política de lasnaciones más poderosas del planeta.Nadie se sienta ofendido, recurro al granJosé Gervasio Artigas cuando dijo: “Conla verdad ni ofendo ni temo”; pero, enverdad es una actitud irresponsable, demarchas de contramarchas,de exclusión,de un manejo elitesco de un problemaque es de todos y que solo podremosresolver todos.

El conservadurismo político y el egoís-mo de los grandes consumidores,de lospaíses más ricos denotan una alta in-sensibilidad y falta de solidaridad con losmás pobres, con los hambrientos, con

los más vulnerables a las enfermeda-des, a los desastres naturales.

Señor Presidente, es imprescindibleun nuevo y único acuerdo aplicable a par-tes absolutamente desiguales, por lamagnitud de sus contribuciones y capa-cidades económicas, financieras y tec-nológicas y que esté basado en el res-peto irrestricto a los principios conteni-dos en la Convención.

Los países desarrollados deberíanestablecer compromisos vinculantes,cla-ros y concretos en la disminución sus-tancial de sus emisiones y asumir obli-gaciones de asistencia financiera y tec-nológica a los países pobres, para hacerfrente a los peligros destructivos delcambio climático. En tal sentido, la sin-gularidad de los estados insulares y delos países menos desarrollados deberíaser plenamente reconocida.

Señor Presidente, el cambio climáticono es el único problema que afecta hoy ala humanidad; otros flagelos e injusticiasnos acechan, la brecha que separa a lospaíses ricos y pobres no ha dejado decrecer,a pesar de todos los Objetivos delMilenio, la Cumbre de Monterrey sobre fi-nanciamiento, todas esas cumbres —co-mo decía aquí el Presidente de Senegal,denunciando una gran verdad, promesasy promesas y promesas incumplidas, y elmundo sigue su marcha destructiva.

El ingreso total de los 500 individuosmás ricos del mundo es superior al ingresode los 416 millones de personas máspobres. Los 2 800 millones de perso-nas que viven en la pobreza, con menosde dos dólares al día, y que representanel 40% de la población global, ¡ese cua-renta por ciento de la población global!,obtiene solo el 5% del ingreso mundial.

Hoy mueren al año unos 9,2 millonesde niños antes de alcanzar el quinto añode vida, y el 99,9% de estas muertesocurren en los países más pobres. Lamortalidad infantil es de 47 muertes por1 000 nacidos vivos; pero es de solo 5por cada 1 000 en los países ricos. Laesperanza de vida en el planeta es de67 años, en los países ricos es de 79,mientras en algunas naciones pobres esde solo 40 años.

Adicionalmente existen 1 100 millo-nes de habitantes sin acceso al aguapotable; 2 600 millones sin servicio desaneamiento; más de 800 millones deanalfabetos y 1 020 millones de perso-

nas hambrientas. Ese es el escenariodel mundo.

Ahora, la causa, ¿cuál es la causa?Hablemos de la causa, no evadamosresponsabilidades, no evadamos la pro-fundidad de este problema. La causa,sin duda —vuelvo al tema—, de todoeste desastroso panorama es el siste-ma metabólico, destructivo del capital ysu modelo encarnado: el capitalismo.

Aquí hay una cita que quiero leerles,brevemente, de ese gran teólogo de laLiberación, Leonardo Boff, como sabe-mos, brasileño, nuestroamericano.

Leonardo Boff dice, sobre este tema,lo siguiente: “¿Cuál es la causa? ¡Ah!, lacausa es el sueño de buscar la felicidada través de la acumulación material y delprogreso sin fin,usando para eso la cien-cia y la técnica, con las cuales se pue-den explotar de forma ilimitada todos losrecursos de la Tierra”, y cita por aquí aCharles Darwin y su selección natural, lasobrevivencia de los más fuertes; perosabemos que los más fuertes sobrevi-ven sobre las cenizas de los más débiles.

Juan Jacobo Rousseau —siempre hayque recordarlo— decía aquello: “Entre elfuerte y el débil la libertad oprime.” Poreso es que el imperio habla de libertad,es la libertad para oprimir, para invadir,para asesinar, para aniquilar, para explo-tar,esa es su libertad. Y Rousseau agre-ga la frase salvadora: “Solo la ley libera.”

Hay algunos países que están jugan-do a que aquí no haya documento,porqueprecisamente no quieren una ley,no quie-ren una norma,porque la inexistencia deesa norma les permite jugar su libertadexplotadora, su libertad arrolladora.

¡Hagamos un esfuerzo y presionemos,aquí y en las calles, para que aquí salgaun compromiso,salga un documento quecomprometa a los países más podero-sos de la Tierra! (Aplausos.)

Se pregunta,Presidente,Leonardo Boff—¿usted le ha conocido, a Boff? No sési pudo venir Leonardo,yo lo conocí hacepoco en Paraguay; siempre lo hemos leí-do—: “Puede una Tierra finita soportarun proyecto infinito?” La tesis del capi-talismo: el desarrollismo infinito, es unmodelo destructivo, aceptémoslo.

Luego nos pregunta Boff: “¿Qué po-dríamos esperar de Copenhague?” Ape-nas esta sencilla confesión: así comoestamos no podemos continuar, y unpropósito simple: ¿Vamos a cambiar derumbo? Hagámoslo,pero sin cinismo,sinmentiras, sin dobles agendas, sin docu-mentos salidos de la nada, con la ver-dad por delante.

¿Hasta cuándo,nos preguntamos des-de Venezuela, señor Presidente, seño-ras, señores,hasta cuándo vamos a per-mitir tales injusticias y desigualdades?¿Hasta cuándo vamos a tolerar el actualorden económico internacional y los me-canismos de mercado vigentes? ¿Hastacuándo vamos a permitir que grandesepidemias como el VIH/SIDA arrasencon poblaciones enteras? ¿Hasta cuán-do vamos a permitir que los hambrien-tos no puedan alimentarse ni alimentara sus propios hijos? ¿Hasta cuándovamos a permitir que sigan muriendomillones de niños por enfermedadescurables? ¿Hasta cuándo vamos a per-

Los países desarrollados deberían establecercompromisos vinculantes, claros y concretos

en la disminución sustancial de sus emisionesy asumir obligaciones de asistencia financiera

y tecnológica a los países pobres

Cambio climático 7

mitir conflictos armados que masacrana millones de seres humanos inocentes,con el fin de apropiarse los poderososde los recursos de otros pueblos?

¡Cesen las agresiones y las guerras,pedimos los pueblos del mundo a losimperios, a los que pretenden seguir do-minando el mundo y explotándonos! ¡Nomás bases militares imperiales ni gol-pes de Estado! Construyamos un ordeneconómico y social más justo y equitati-vo. Erradiquemos la pobreza. Detenga-mos de inmediato los altos niveles deemisión, frenemos el deterioro am-biental y evitemos la gran catástrofe delcambio climático. ¡Integrémonos en elnoble objetivo de ser todos más libres ysolidarios!

Señor Presidente, hace casi dos si-glos un venezolano universal, libertadorde naciones y precursor de conciencia,dejó para la posteridad un apotegma ple-no de voluntad: “Si la naturaleza se opo-ne, lucharemos contra ella y haremos

que nos obedezca.” Era Simón Bolívar, ElLibertador.

Desde la Venezuela bolivariana, don-de un día como hoy, por cierto, hace 10años exactos vivimos la tragedia climáti-ca más grande de nuestra historia, la tra-gedia de Vargas, así llamada; desde esaVenezuela cuya revolución intenta con-quistar la justicia para todo su pueblo,solo posible por el camino del socialis-mo... El socialismo, el otro fantasma delque hablaba Carlos Marx, ese anda porahí también; más bien es como un con-trafantasma. El socialismo,ese es el rum-bo,ese es el rumbo para la salvación delplaneta, no tengo yo la menor duda. Y elcapitalismo es el camino al infierno, a ladestrucción del mundo.

El socialismo, desde esa Venezuelaque enfrenta por ello las amenazas delimperio norteamericano, desde los paí-ses que conformamos el ALBA, la Alian-za Bolivariana, exhortamos, yo quiero,con respeto, pero desde mi alma exhor-

tar, a nombre de muchos en este plane-ta, a los gobiernos y a los pueblos de laTierra, parafraseando a Simón Bolívar, ElLibertador: si la naturaleza destructivadel capitalismo se opone, pues luche-mos contra ella y hagamos que nos obe-dezca, no esperemos de brazos cruza-dos la muerte de la humanidad.

La historia nos llama a la unión y a lalucha. Si el capitalismo se resiste, nos-otros estamos obligados a dar la batallacontra el capitalismo y a abrir los cami-nos de la salvación de la especie huma-na. Nos toca a nosotros, levantando lasbanderas de Cristo, de Mahoma, de laigualdad, del amor, de la justicia, del hu-manismo, del verdadero y más profundohumanismo. Si no lo hiciéramos, la másmaravillosa creación del universo, el serhumano, desaparecerá, ¡desaparecerá!

Este planeta tiene miles de millonesde años, y vivió este planeta miles demillones de años sin nosotros, la espe-cie humana; es decir, no le hacemos fal-

ta nosotros para que él exista. Ahora,nosotros sin la Tierra no vivimos, y esta-mos destrozando la Pachamama, comodice Evo, como dicen nuestros herma-nos aborígenes de Suramérica.

Finalmente, señor Presidente, ya pa-ra terminar, oigamos a Fidel Castro cuan-do dijo: “Una especie está en peligro deextinción: el hombre.” Oigamos a RosaLuxemburgo cuando dijo: “Socialismo obarbarie.” Oigamos a Cristo, el Reden-tor, cuando dijo: “Bienaventurados lospobres, porque de ellos será el reino delos cielos.”

Señor Presidente, señoras y señores,seamos capaces de hacer de esta Tierrano la tumba de la humanidad, hagamosde esta Tierra un cielo, un cielo de vida,de paz y de hermandad para toda lahumanidad, para la especie humana.

Señor Presidente, señoras y señores,muchísimas gracias y buen provecho(Aplausos).

Discurso pronunciado por el compa-ñero, Esteban Lazo Hernández, vicepre-sidente del Consejo de Estado de la Re-pública de Cuba en la Cumbre sobre Cam-bio Climático. Copenhague,Dinamarca,17 de diciembre de 2009

Señora Presidenta: Distinguidos Jefes de Estado y de

Gobierno y otros Jefes de delegación: Señores delegados e invitados:Permítanme, ante todo, expresar mi

total apoyo a las palabras expresadasaquí ayer por el Presidente de la Repú-blica Bolivariana de Venezuela, compa-ñero Hugo Chávez Frías, y hace apenasunas horas por el Presidente del EstadoPlurinacional de Bolivia, compañero EvoMorales Ayma, que transmiten el sentirde todos los países miembros del ALBAcon relación al cambio climático, susverdaderas causas y sus posibles solu-ciones.

Debo también sumarme a su denun-cia y protesta por la falta de transparen-cia y la existencia de formatos de nego-ciación excluyentes y paralelos de docu-mentos que se dice que no existen. Alparecer, se convoca para mañana unareunión con un listado de oradores limi-tado escogidos de manera nada demo-crática. Notamos con preocupación laexclusión de las organizaciones no gu-bernamentales de esta sala y denuncia-mos la evidente represión contra losmanifestantes.

En la histórica Conferencia de Río deJaneiro de 1992, el compañero FidelCastro expresó:

Cito: “Una importante especie bioló-

gica está en riesgo de desaparecer porla rápida y progresiva liquidación de suscondiciones naturales de vida: el hombre.

“(…) las sociedades de consumo sonlas responsables fundamentales de laatroz destrucción del medio ambiente.

“La solución no puede ser impedir eldesarrollo a los que más lo necesitan.

“Si se quiere salvar a la humanidadde esa autodestrucción, hay que distri-buir mejor las riquezas y tecnologías dis-ponibles en el planeta. Menos lujo y me-nos despilfarro en unos pocos países pa-ra que haya menos pobreza y menoshambre en gran parte de la Tierra.”

Esa sigue siendo hoy la esencia delproblema.

Menos de dos décadas después, elcrecimiento promedio anual de las con-centraciones de dióxido de carbono hasido mayor que durante todo el períododel que se tienen registros sistemáticos.

Continúa aumentando la temperaturaglobal. Disminuye el grosor del hielo árti-co. Se eleva el nivel del mar. Aumenta lafrecuencia e intensidad de los huraca-nes. Se ha alterado el régimen de llu-vias. Se perdieron otros 100 millones dehectáreas de bosques. Los desiertoshan crecido. Un 30 por ciento de lasespecies desaparecerá si la temperatu-ra global se incrementa entre 1.5 y 2.5grados centígrados. Pequeños estadosinsulares corren el riesgo de desapare-cer bajo las aguas.

Muchos de estos efectos son ya irre-versibles, por lo que la comunidad inter-nacional, particularmente el mundo endesarrollo, precisa con urgencia imple-mentar acciones que le permitan adap-

tarse al cambio climático y recibir el apo-yo financiero necesario para este fin.

Según lo expresado en la DeclaraciónEspecial sobre Cambio Climático adop-tada en la VIII Cumbre de Jefes de Esta-do de la Alianza Bolivariana para losPueblos de Nuestra América, recién fina-lizada en La Habana,el cambio climáticose convierte en el más serio y urgenteproblema que enfrenta la humanidad.Pero el egoísmo y el interés de los paí-ses desarrollados en preservar un ordeneconómico injusto e inequitativo, impi-den emprender el cambio que reclamanlas generaciones presentes y futuras.

Tras casi dos años de negociacionespara concluir un segundo período de com-promisos bajo el Protocolo de Kyoto,asis-timos a esta cita sin un acuerdo real ysignificativo, por la actitud irresponsabley la falta de voluntad política de las na-ciones desarrolladas.

Quienes provocan el 76 por ciento delas emisiones acumuladas en la atmós-fera, deben asumir la plena responsabi-lidad por el impacto que sus economíasy estilos de vida, sustentados en patro-nes de producción y consumo derrocha-dores e insostenibles, le han infligido alequilibrio climático global. Se imponencompromisos serios de reducción de lasemisiones domésticas de estos paísesy no soluciones hipócritas basadas enlas supuestas bondades del mercado.

Los Estados Unidos, que concentrancerca de la cuarta parte de las emisio-nes globales, no deben continuar man-teniendo a la comunidad internacionalcomo rehén de su política doméstica.

Persistir en los esfuerzos de desar-

ticular el actual régimen legal sobre cam-bio climático, representado en el Conve-nio Marco de Naciones Unidas sobre Cam-bio Climático y el Protocolo de Kyoto, conel propósito de dar lugar a un nuevo yúnico acuerdo aplicable a partes absolu-tamente desiguales en cuanto a la mag-nitud de sus contribuciones y sus capa-cidades económicas, financieras y tec-nológicas, no sólo continuará siendo unférreo obstáculo en el empeño de alcan-zar un resultado final, sino una opciónpolítica y éticamente inaceptable.

Aspiramos a un acuerdo fundado enel respeto irrestricto a los principios acor-dados en la Cumbre de la Tierra en Ríode Janeiro, especialmente el de las Res-ponsabilidades Comunes pero Diferen-ciadas, bajo el cual los países desarro-llados asuman el liderazgo, en corres-pondencia con sus responsabilidades ycapacidades.

Sr. Presidente: Un acuerdo resultante de estas nego-

ciaciones tampoco puede ser ajeno alas realidades de un orden económicointernacional profundamente desigual yexcluyente,que ha dejado —permítanmeutilizar datos conocidos— a 2500 millo-nes de seres humanos en la pobreza, a1100 millones sin agua potable, a 2600millones sin servicios de saneamiento;a más de 800 millones de analfabetos ya más de 1000 millones de hambrien-tos en el planeta.

La brecha que separa a los paísesdesarrollados y subdesarrollados no hadejado de crecer. El 20% más rico de lapoblación mundial, residente en los paí-ses de mayores ingresos, absorbe más

Muchos de estos efectos son ya irreversibles

Tabloide Especial No. 18

del 85% del total de gastos en consumoprivado, mientras que 2800 millones depersonas viven con menos de dos dóla-res al día.

Un acuerdo de largo plazo para com-batir el cambio climático no puede signi-ficar una restricción adicional para el de-sarrollo de los países del Tercer Mundo.

Debe contemplar un fuerte mecanis-mo para la financiación de las accionesde mitigación y fundamentalmente de laadaptación de los países subdesarrolla-

dos al cambio climático por parte de lasnaciones desarrolladas. Esto no es unaobra de caridad, sino, ante todo, unaobligación moral con el Sur y una obliga-ción jurídica resultante de los compromi-sos asumidos en la Convención.

Las colosales sumas para salvar em-presas y bancos en quiebra y los milesde millones de dólares invertidos anual-mente en armamentos demuestran quelos recursos existen. Lo que falta es vo-luntad política para darles un uso más

racional, humano y sostenible y contra-rrestar el desastre que se avecina.

Cuba, un país férreamente bloqueadopor la principal potencia mundial, halogrado con pocos recursos una verda-dera revolución energética que le ha per-mitido reducir considerablemente susemisiones de dióxido de carbono. Comohemos hecho ya en otros foros interna-cionales,ofrecemos humildemente nues-tra experiencia a toda la comunidad in-ternacional.

Finalizo igualmente compartiendo laspalabras de Fidel aquel 12 de junio de1992:

“Cesen los egoísmos, cesen los he-gemonismos, cesen la insensibilidad, lairresponsabilidad y el engaño. Mañanaserá demasiado tarde para hacer lo quedebimos haber hecho hace mucho tiem-po.”

Muchas gracias

Discurso pronunciado por Hugo Chá-vez Frías, presidente de la RepúblicaBolivariana de Venezuela, en la CumbreClimática de las Naciones Unidas, enCopenhague, Dinamarca, el 18 de di-ciembre de 2009.

Buenas tardes.Señora Presidenta:Ha dicho usted una gran verdad, hay

que almorzar.Napoleón Bonaparte decía que los

ejércitos caminan sobre los estómagos.Agradezco mucho que nos hayan dado lapalabra al presidente Morales y a esteservidor, la habíamos solicitado desdetemprano en la mañana,porque tenemosaquí varios días ya.

Obama vino, habló y salió por la puer-tita esta (Risas), esa puertita, una puer-ta camuflada ahí, me imagino que parael servicio, para la logística, las coordi-naciones de la presidencia, y por ahí sefue, por la puerta de atrás, ¡es el impe-rio!, el imperio que llega a medianoche,y en la oscuridad,¿eh?,a espaldas de lamayoría, de manera antidemocráticapretenden cocinar un documento quenosotros no aceptamos ni aceptaremos,¡jamás lo aceptaremos! (Aplausos.)

Yo estoy absolutamente seguro de quepor la dignidad que aquí defendemos no-sotros, el gobierno anfitrión, el Reino deDinamarca,a quien agradecemos la ama-bilidad, las atenciones: he cargado unchofer muy atento que se llama Thomas,los amigos que nos han dado la seguri-dad, la señora del hotel, los trabajadoresdel hotel; anoche nos reuníamos aquí enun gimnasio con miles, de movimientossociales que han estado por las callesbajo la nieve, con pancartas; movimien-tos que luchan por la justicia social, par-tidos políticos; conseguimos aquí en Co-penhague compatriotas de América La-tina, del Caribe, de todos los países. Asíque hemos estado muy contentos. Ano-che apostamos una carrera; a pesar deque Evo es mucho más joven que yo, lehe ganado una carrera de 100 metrosplanos sobre la nieve, y corre duro Evo.Así que estoy seguro de que el gobierno

anfitrión comparte estos criterios de no-sotros, la inmensa mayoría; los que nola comparten: el que sale por la puertade atrás. Y así va a salir el impero yankide este mundo, por la puerta de atrás,¡va a salir por la puerta de atrás, de ma-nera indigna! (Aplausos.)

Ahora, nosotros estuvimos muy preo-cupados porque nos enteramos de quehabía unas reuniones, un pequeño gru-po de países amigos de la presidenciade la Conferencia. Nosotros no somosenemigos,¿verdad?,nosotros somos ami-gos también de todos. No nos invitarona participar para nada, ni siquiera unaconsulta para oír nuestra opinión, y no-sotros queremos dejar bien firme que to-dos los países somos iguales y nosotroslos presidentes, jefes de Estado y deGobierno tenemos el mismo nivel, aquíno hay presidentes de primera y presi-dentes de segunda, ni hay pueblos deprimera y pueblos de segunda, todos so-mos iguales, y eso queremos dejarlo bienclaro aquí (Aplausos).

Creo que ha sido un manejo no trans-parente, por decirlo de manera elegante,¿saben?, para tratar de abortar aquí unasolución que —como dijo Lula— solo unmilagro salvaría, y como para esto nocreemos en milagros, nosotros tenemosque partir, yo hablo a nombre no solo deVenezuela, he sido autorizado por los re-presentantes aquí presentes de los paí-ses de la Alianza Bolivariana para losPueblos de Nuestra América,es decir,elgobierno y pueblo de Bolivia, el gobiernoy pueblo de Cuba, el gobierno y pueblode Ecuador, el gobierno y pueblo de Nica-ragua, los gobiernos y pueblos del Cari-be: los países Dominica, San Vicente ylas Granadinas, Antigua y Barbuda, yVenezuela, no vaya a ser que de la puer-ta de atrás, por donde salió Obama, sal-ga esta tarde, por debajo, un papelito ensecreto, top secret, y se pretenda pre-sentarlo al mundo como la solución. ¡Des-de ya lo impugnamos!, porque nosotrosno conocemos ningún documento tam-poco. Han estado circulando por ahí ver-siones y documentos poco transparen-tes, eso hay que reclamarlo.

Estamos seguros de que no se inten-tará ningún tipo de fraude, porque seríaun fraude a los pueblos del mundo. Sialgo debe implantarse en el mundo, re-cuperarse en el mundo es la confianzaentre nosotros. Ya basta de que algunosse crean superiores a nosotros los in-dios del Sur, a nosotros los negros afri-canos, indígenas, los pueblos del Sur, to-dos somos iguales.

Pues bien, dejamos sentada esa pro-testa,esa violación a los procedimientosde Naciones Unidas.

Teníamos el temor, incluso, de que nonos dieran la palabra, nos habían dichopor aquí, por Secretaría, que ellos no logarantizaban,y nos explicaban desde es-ta mañana que solo iba a hablar un gru-po de presidentes, muy dignos jefes deEstado que estaban en una lista quealguien hizo, no se sabe quién la hizo,¿no? Por eso agradecemos mucho a laPresidenta que nos haya dado la palabraal presidente Morales y a mí, hubierasido algo lamentable que nos hubiesenpretendido vetar en esta reunión. No quie-ro ni pensarlo, ¿no?, ni sospecharlo.

El Protocolo de Kyoto —ya lo dijo Lu-la— no puede ser declarado muerto oextinguido, que es lo que pretende Esta-dos Unidos. Por eso dice Evo una granverdad: Si Obama, el Premio Nobel dela Guerra dijo aquí mismo —por cierto,¡huele azufre aquí!, ¡huele a azufre!, ¡si-gue oliendo a azufre en este mundo!—,que él a lo que vino fue a actuar. Bueno,demuéstrelo señor, no se vaya por lapuerta de atrás, ¿eh?, haga todo lo quetiene que hacer para que Estados Uni-dos se adhiera al Protocolo de Kyoto, yvamos a respetar Kyoto, y a potenciarKyoto y a responderle al mundo de ma-nera transparente (Aplausos).

Por otra parte, todos coincidimos enque las reducciones a las emisiones decarbono para el año 2050 no deben serinferiores de un 80%,un 90%, la mayoríacoincidimos en esto.

Nosotros creemos, señora Presiden-ta, que Copenhague no termina hoy, pa-ra la dignidad de este pueblo. No que-remos irnos con el amargo sabor de la

frustración, no; queremos irnos con elrecuerdo de un pueblo alegre, de un pue-blo al que no conocíamos,una ciudad,unpaís, Dinamarca; queremos llevarnos aCopenhague en el corazón,no como unafrustración sino como una esperanza.

Anoche lo decíamos, Copenhague notermina hoy, Copenhague abrió las puer-tas para que sigamos dando un grandebate mundial sobre cómo salvar elplaneta, cómo salvar la vida en el plane-ta. Copenhague no es un fin, Copenha-gue es un inicio, para que logremos losacuerdos que haya que lograr —y ya lodecía Evo—, lograr el equilibrio de la Ma-dre Tierra, la Pachamama.

Esto que dice Obama es algo verdade-ramente ridículo. Estados Unidos,que tie-ne la máquina de hacer dólares; EstadosUnidos, que creo que asignó 700 000millones de dólares para salvar los ban-cos —con razón dicen allí en las callesque si el clima fuera un banco ya lohubieran salvado, ¿eh?—, ahora viene adecir que va a aportar 10 000 millonesde dólares al año, una cifra irrisoria. Esalgo así como un chiste lo que ha expre-sado el Presidente de Estados Unidos.

El gasto militar de Estados Unidos esde 700 000 millones de dólares al año;solo bajando el gasto militar a la mitad,por lo menos, habría. Estados Unidosque es el gran emisor, es el gran conta-minante y es el gran culpable el imperioyanki de haberle impuesto a punta deinvasiones, de guerras y de amenazas,de asesinatos y hasta de genocidios elcapitalismo a este mundo, Estados Uni-dos y sus aliados. ¡He ahí el gran culpa-ble!, debería asumirlo con dignidad. Sa-bemos que no lo va a asumir en verdadeste gobierno de Estados Unidos, por-que no es sino la continuación del go-bierno anterior. Obama quedará ante lahistoria como una de las más grandesfrustraciones para mucha gente que cre-yó en él en Estados Unidos y en otraspartes del mundo; ahí está demostrán-dolo, una gran frustración. Pero qué im-porta, ¡qué importa!, lo más importantees que los pueblos del mundo y los go-biernos dignos del mundo, la gran mayo-

La culpa es del capitalismo y hay que atacar las causas

Cambio climático 9

Estamos debatiendo si vamos a salvar vidas o vamos a matar

ría, nos pongamos de acuerdo e impul-semos soluciones verdaderas.

Nosotros no venimos aquí a pedir li-mosnas, venimos en condiciones de igual-dad a aportar modestas ideas para bus-car fórmulas de solución. Que nadie lo ol-vide, ¡que nadie lo olvide!: la culpa es delcapitalismo y hay que atacar las causas.

Desde Venezuela, modestamente lodecimos: la única manera de conseguirel equilibrio de las sociedades, de salvarla vida, de obtener niveles superiores devida, de llevar el ser humano a condicio-nes dignas de existencia es a través delsocialismo. Ese es un debate eminente-mente político, eminentemente moral,eminentemente necesario, absoluta-mente necesario. El capitalismo es elcamino a la destrucción del planeta.

Señora Presidenta,queremos que que-de claro: Nosotros nos vamos, no pode-mos esperar más, nos vamos, pero los

países del ALBA dejamos claro que im-pugnamos desde ya cualquier documen-to que saque Obama por debajo de la puer-ta, o que salga por allí de la nada, comoayer decían algunos de ustedes, tratandode presentar esto como una solución sal-vadora. ¡No hay soluciones salvadoras!

Sencillamente nos vamos a sabien-das de que fue posible un acuerdo aquíen Copenhague, y no fue posible por loque ayer decíamos: la falta de voluntadpolítica de los países más desarrolladosde la Tierra, comenzando por EstadosUnidos, y esto es una verdadera vergüen-za. Es el egoísmo de los más responsa-bles, sobre todo por los patrones irracio-nales de producción y de consumo de sucapitalismo hiperdesarrollado.

Fidel Castro escribió —y con esto ter-mino, para no interrumpir el almuerzo, lafoto y las sesiones que vienen— unareflexión anoche, por ahí anda, pendien-

te, como está, desde La Habana, deesta reunión, con esperanzas de que setomen decisiones para salvar a la huma-nidad, y hablaba de una ingloriosa clau-sura, una clausura sin gloria. Estoy deacuerdo, será una clausura sin gloria.

Pero también quiero decir, señora Pre-sidenta, en honor a todos los que hanparticipado, porque aquí hay gente queno ha dormido en no sé cuántos días, unreconocimiento especial para ustedes,los negociadores, los ministros, los dele-gados, los jefes de delegación, los exper-tos,cuánto han trabajado,hay que darlesun reconocimiento a todos (Aplausos), ytengamos fe en que el trabajo intenso deustedes no se va a perder, es un aporte,es un aporte, nosotros nos vamos másconscientes del problema y más com-prometidos a crear conciencia en nues-tros pueblos por el tema del clima y porel tema del desequilibrio ambiental.

Ahora, así como Fidel dice que es unaclausura la que va a ocurrir sin gloria, noquiero decir que sea con pena; no,no escon pena, no es una penosa clausura laque va a ocurrir esta tarde, es una clau-sura que deja al mismo tiempo abiertasesas esperanzas, esas esperanzas deque nosotros logremos tomar decisio-nes para salvar a la humanidad, y solo lolograremos dejando de lado los intere-ses egoístas, especialmente de los paí-ses más desarrollados.

Quiero rendir tributo a Copenhague ya su espíritu, a su pueblo y a los pueblosdel mundo, y comprometernos con la vi-da, comprometernos con el futuro.

Ingloriosa clausura, pero bonita clau-sura, llena de esperanzas. Así nos lleva-mos a Copenhague en el corazón.

Señora Presidenta, muchas gracias.Buenas tardes, señores (Aplausos).

Discurso pronunciado por Evo Mora-les Ayma, presidente del Estado Pluri-nacional de Bolivia,en la Cumbre Climá-tica de las Naciones Unidas, en Copen-hague, Dinamarca, el 18 de diciembrede 2009.

Muchísimas gracias, señora Ministra,Presidenta de la Conferencia.

Primero,agradecer por permitirme nue-vamente intervenir, como otros presiden-tes que intervinieron el día de ayer, asícomo también en el día de hoy.

Me siento sumamente preocupado so-bre la forma como se quiere intentar apro-bar un documento por presidentes quellegaron en el último momento; hay pre-sidentes, delegaciones, que estamos,desde hace dos o tres días atrás, res-petando las formas de negociación parallegar a un acuerdo.

Saludo las palabras del Secretario Ge-neral de las Naciones Unidas, donde tex-tualmente dijo: “Ha llegado el momento detodos.” Esto es de todos y no de unospocos.

Denunciamos desde acá que todavíahay grupos de presidentes que siguentrabajando un documento de pocos, noes de todos los presidentes; menos seráde los pueblos del mundo que luchan porla vida y por la humanidad (Aplausos).

Comparto algunas palabras de los pre-sidentes que han intervenido en esta ma-ñana. De aquí debemos salir orgullososde este evento, y eso es trabajando demanera transparente, democrática, paratener documentos que permitan salvarvidas.

También rescato las palabras del pre-sidente Obama,dijo: “No venimos a hablarsino a actuar.” Si queremos actuar, quie-

ro pedirle que a partir de este momentocumpla con el Protocolo de Kyoto, y asívamos a creer que venimos a actuar y noa hablar (Aplausos); que a partir de estemomento, toda la plata que se destina alas guerras se destine para salvar vidashumanas, y así vamos a creer que veni-mos aquí a actuar y no solamente ahablar (Aplausos).

Queridos presidentes, hermanos pre-sidentes,delegaciones de todo el mundo:

Aquí está en debate si vamos a vivir osi vamos a morir, aquí estamos debatien-do si vamos a salvar vidas o vamos amatar. Y las diferencias,es muy claro,soncon relación a las temperaturas —yo nosoy experto, quiero ser muy sincero—, yde acuerdo con las explicaciones denuestros técnicos que van trabajando,¿cuáles son las diferencias? Países quequieren,por ejemplo,permitir que la tem-peratura del mundo se incremente a 2ºcentígrados. Y de acuerdo con las orien-taciones y las vivencias, elevar la tem-peratura en el mundo a 2º centígradoses eliminar a islas en el mundo, es eli-minar las nevadas de las montañas delos Andes, es eliminar las nevadas detodo el mundo. Es gravísimo, y eso nues-tros pueblos no lo van a aceptar, y tardeo temprano lo van a juzgar.

Otro tema está en debate. Los paísesindustrializados irracionalmente, llama-dos en otras palabras países ricos, esaspotencias, ¿qué nos plantean? Lo queellos plantean es cómo reducir de mane-ra real sus emisiones de gases en un50%. Los planteamientos de los pueblosque luchan por la vida son,por lo menos,reducir, hasta el 2050, de un 90% a un100%. Eso está en debate, lo he enten-dido así.

Entonces acá tenemos profundas di-ferencias: unos plantean solamente re-ducción de esos gases de efecto inver-nadero en un 50%, y otros planteamosreducción del 100%. Si no hay acuerdo—yo quiero reiterarles—,si no hay acuer-do en estos niveles de presidentes,¿porqué no someternos a los pueblos? Es lomás democrático.

Yo aprendí, en este corto tiempo depresidente, que mejor es gobernar subor-dinado a nuestros pueblos,que mejor esgobernar entendiendo y atendiendo lasdemandas de nuestros pueblos, es lomás importante, y es una democraciaparticipativa donde nuestros pueblosdeciden.

Me atrevería a decir, incluso en abril delpróximo año se recuerda el día interna-cional de la Madre Tierra,¿por qué no lospaíses? Sometamos a nuestros pueblos,mediante un referendo,estas diferenciasque tenemos los presidentes, y aplique-mos lo que decidan nuestros pueblos entemas del cambio climático (Aplausos).

Para qué vamos a estar forzando gru-pos, unas peleas, discusiones internas,trabajo secreto, oculto. Yo no comparto,de verdad, las formas como quieren ma-nejarse desde acá, y por eso quiero ape-lar a las palabras del Secretario Generalde las Naciones Unidas: ha llegado elmomento de todos, y debe ser de todosy no de pocos.

Queridos presidentes, para terminaresta pequeña intervención, no podemosseguir acá días y días, ustedes sabenque tenemos muchas responsabilidades,yo tengo que retornar esta tarde; peroquede bien claro que dejo esta propues-ta de someterlo a nuestros pueblos; pe-ro también, si hablamos de la vida, sea-

mos muy responsables. ¿La responsa-bilidad radica en qué? En vez de seguirdestinando plata a bases militares, a in-tervenciones militares, esa plata hay quedestinarla para salvar al planeta Tierra,así, realmente,vamos a ser responsablestodos.

De verdad, nos corresponde actuarde manera conjunta, transparente, perono solamente transparencia de todos lospresidentes, sino consultando perma-nentemente a nuestros pueblos. Nues-tros pueblos saben sus problemas,pero también saben sus respuestas, yesa es la vivencia que yo tengo. Puedocompartir una experiencia de una viven-cia de cuatros años de presidente: cuan-do gobernamos sometidos a nuestrospueblos los resultados son mejores,porque trabajamos la igualdad en nues-tros pueblos; pero quiero decirles queestamos debatiendo problemas del me-dio ambiente, problemas llamados cam-bio climático, y es obligado debatir dedónde viene este problema del cambioclimático,quiénes son los responsables,desde cuándo hay responsabilidad. Y laresponsabilidad es del sistema capita-lista; si no entendemos, si no identifica-mos a los causantes del cambio climá-tico, seguramente va a haber tantas con-ferencias, tantas cumbres de jefes deEstado y nunca vamos a resolver esetema. Y por eso —quiero ser muy sin-cero—, si queremos salvar las vidas, siqueremos salvar a la humanidad, siqueremos salvar al planeta Tierra, esobligado cambiar ese modelo, ese sis-tema capitalista y así salvaremos a lahumanidad.

Muchísimas gracias (Aplausos).

Tabloide Especial No. 110

medidas mínimas que permitan evitaruna gravísima catástrofe para el planetay la especie humana.

El texto de este documento, para Cu-ba, es incompatible con el criterio cientí-fico universalmente reconocido,que con-sidera urgente e insoslayable asegurarniveles de reducción de, al menos, el45% de las emisiones para el año 2020,y no inferiores al 80% ó 90% de reduc-ción para el 2050.

Este vergonzoso documento que us-ted trae,es también omiso y ambiguo enrelación con el compromiso específico dereducción de emisiones por parte de lospaíses desarrollados, responsables delcalentamiento global por el nivel históri-co y actual de sus emisiones, y a quie-nes corresponde aplicar reducciones sus-tanciales de manera inmediata. Este pa-pel no contiene una sola palabra decompromiso de parte de los países de-sarrollados.

La delegación de Cuba reitera, ade-más, su convicción de que la reducciónde las emisiones de carbono de los paí-ses del Sur no puede formularse de ma-nera que obstaculice el ejercicio del de-recho al desarrollo. Este papelucho igno-ra ese concepto.

Todo planteamiento acerca de la con-tinuación de las negociaciones para adop-tar, en el futuro, acuerdos de reducciónde emisiones, debe incluir, inevitablemen-

te, el concepto de la vigencia del Proto-colo de Kyoto, y de que estos acuerdosserán parte de un segundo período decompromisos de dichos protocolos. Supapel, señor Presidente, es el acta dedefunción del Protocolo de Kyoto que midelegación no acepta.

La delegación cubana desea hacerénfasis en la preeminencia del principiode “responsabilidades comunes, pero di-ferenciadas”, como concepto central delfuturo proceso de negociaciones. Su pa-pel no dice una palabra de eso.

Este proyecto de declaración omitecompromisos concretos de financiamien-to y transferencia de tecnologías hacialos países en desarrollo como parte delcumplimiento de las obligaciones con-traídas por los países desarrollados bajola Convención Marco de las Naciones Uni-das sobre Cambio Climático. El documen-to se limita a la idea de que los paísesdesarrollados participen en una llamadamovilización de recursos que se diceque pueden ser públicos o privados,bila-terales o multilaterales, o provenir, inclu-so, de fuentes alternativas. Los paísesdesarrollados, que imponen sus intere-ses mediante su documento, señor Pre-sidente, evaden cualquier compromisoconcreto.

La delegación de Cuba reitera su pro-testa por las graves violaciones de pro-cedimiento que se han producido en la

conducción antidemocrática del proce-so de esta conferencia, especialmente,mediante la utilización de formatos dedebate y de negociación, arbitrarios,excluyentes y discriminatorios. Lo queusted llama, señor Presidente, “un gru-po de líderes representativos” es, paramí, una grosera violación del principiode igualdad soberana que consagra laCarta de las Naciones Unidas, un me-canismo que intenta imponer decisio-nes a la comunidad internacional y ma-nipular a la opinión pública. La formula-ción no transparente de proyectos dedocumentos ha sido constante en estaconferencia.

Debo expresar, señor Presidente, miprotesta y preocupación por la restric-ción del acceso de las organizaciones nogubernamentales a esta conferencia.

La delegación de Cuba hace parte delas posiciones expresadas por los Esta-dos miembros de la Alianza Bolivarianapara los Pueblos de Nuestra América,enparticular de los discursos de los presi-dentes Hugo Chávez y Evo Morales.

Señor Presidente, le solicito formal-mente que esta declaración sea recogi-da en el informe final sobre los trabajosde esta lamentable y bochornosa 15Conferencia de las Partes.

Muchas gracias.(Aplausos).

Cuba considera extremadamenteinsuficiente e inadmisible

el texto de este proyecto apócrifoIntervención de Bruno Rodríguez Pa-

rrilla, Ministro de Relaciones Exterioresde Cuba,en la sesión final de la CumbreClimática de las Naciones Unidas,en Co-penhague, Dinamarca, el 18 de diciem-bre de 2009.

Señor Presidente:Hace ya cuatro horas el presidente

Obama anunció un acuerdo que no exis-te; falta el respeto a la comunidad inter-nacional, se comporta como un jefe im-perial.

El documento que usted varias vecesafirmó que no existía, señor Presidente,aparece ahora. Todos hemos visto ver-siones que circulan de manera subrepti-cia y que se discuten en pequeños con-ciliábulos secretos, fuera de las salas enque la comunidad internacional, a travésde sus representantes, negocia de unamanera transparente.

Resulta, señor Presidente, que el do-cumento que no existió, existe. Lamentoprofundamente la manera en que ustedha conducido esta conferencia.

Puedo anticiparle que la delegaciónde la República de Cuba ha decidido noaceptar el proyecto de declaración queusted presenta. No requiero consultasadicionales en ningún marco ni formato,y, por tanto, declaro que en esta confe-rencia no existe consenso sobre estedocumento (Aplausos).

Sumo mi voz a la de los representan-tes de Tuvalu, Venezuela y Bolivia. Cubaconsidera extremadamente insuficientee inadmisible el texto de este proyectoapócrifo. La meta de 2º centígrados esinaceptable y tendría consecuencias ca-tastróficas incalculables,en particular pa-ra los pequeños Estados insulares. Signi-ficaría un grave impacto en numerosasespecies de la biodiversidad.

El documento que usted, lamentable-mente, presenta no contiene compromi-so alguno de reducción de emisiones degases de efecto invernadero.

Conozco las versiones anteriores quetambién,a través de procedimientos cues-tionables y clandestinos, se estuvieronnegociando en corrillos cerrados que ha-blaban, al menos, de una reducción del50% para el año 2050. Tengo conmigoaquí esas versiones anteriores, que val-dría la pena ofrecer a los medios de pren-sa y a los representantes de la sociedadcivil y hacer públicos en esta sala.

El documento que usted presenta aho-ra, omite, precisamente, las ya magras einsuficientes frases clave que aquellaversión contenía. Este documento no ga-rantiza, en modo alguno, la adopción de

Cambio climático 11

Nuestro futuro no está en venta

Exigimos que esta sesión no se levante, porque el mundo

ya ha esperado lo suficiente

Intervención del Sr. Ian Fray, delega-do de la isla de Tuvalu en la sesión finalde la Cumbre sobre cambio climáticode las Naciones Unidas, en Copenha-gue, Dinamarca, el 18 de diciembre de2009.

Muchas gracias, Presidente; agradez-co que haya regresado a la reunión.Habíamos presionado el botón antes deque usted cerrara esta sesión.

Presidente, hemos trabajado bajo elmarco de las Naciones Unidas en estareunión, y es un placer ver al SecretarioGeneral,Ban Ki-Moon,sentado junto a no-sotros, dentro de las Naciones Unidas.

Nosotros, como naciones, hemos re-cibido respeto, ya seamos grandes o pe-queños, y tenemos la posibilidad de ana-

Para Tuvalu creemos que es impor-tante que tengamos resultados basadosen la ciencia, que nos permitan reducirlas emisiones para que podamos llegara niveles de temperaturas inferiores a1,5º; cualquier cosa diferente sería el finde Tuvalu.

El vínculo entre la adaptación y las me-didas de respuesta no son congruentescon la Convención ni con el programa deacción de Bali.

Presidente, no hay garantía de que elProtocolo de Kyoto continúe después deeste texto.

Presidente, hay una referencia a unmecanismo dentro del contexto de es-tos documentos y estamos seguros delo que es, no hay referencia a un me-canismo que asegure las cosas de ma-

lizar las cosas de manera colectiva, estaes la llamada Conferencia de las Partes.

A principios de esta noche pasé poruna cámara de televisión, donde un líderprominente sugería que había tenido unacuerdo para hacer este anuncio con lasconsideraciones adecuadas, sería algoque no respetaría lo estipulado por lasNaciones Unidas; las negociaciones de-ben ser la norma en algunos países y enotros tienen mayor respeto a los proce-sos democráticos.

Señor Presidente,ahora quisiera consi-derar la consideración de este documento.

Agradecemos que nos haya dado mástiempo para considerar este documento;pero es necesario decir que ha habidoproblemas importantes, déjeme mencio-nar solamente algunos.

nera internacional, lo cual es algo queestamos tratando de lograr.

Presidente, hay un mecanismo de re-visión que se estableció para el 2015,pero eso es muy lejano para nuestro fu-turo; la ciencia nos dice que tenemosque actuar ahora y de manera urgente.

No estamos acá considerando estaoferta, viendo dinero puesto enfrente denosotros; en términos bíblicos es comosi nos hubiesen dado 30 piezas de pla-ta para traicionar a nuestro pueblo.

Presidente, nuestro futuro no está enventa (Aplausos).

Presidente, lamento informarle que Tu-valu no puede aceptar este documento.

Gracias (Aplausos).

Intervención de la Sra. Claudia Salerno,Directora de Cooperación Internacionaldel Ministerio del Poder Popular para elAmbiente de la República Bolivarianade Venezuela, en la sesión final de laCumbre sobre cambio climático de lasNaciones Unidas,en Copenhague,Dina-marca, el 18 de diciembre de 2009.

Gracias, señor Presidente.Es con indignación que mi país levan-

ta la voz en este momento para señalar. Con sorpresa vemos que su Presi-

dencia, después de habernos hechoesperar durante horas en esta sala, apaíses soberanos, decida lanzarnos so-bre la mesa dos papeles, inconsultos,que fueron realizados sin mandato delas partes, de modo que son ilegítimos,y después de que los lanza sobre lamesa, porque esa fue su decisión; des-pués de que varios países desarrolla-dos han dado ruedas de prensa paradecir que en Copenhague hay un acuer-do, cuando los delegados de los paísesque conformamos el sistema de lasNaciones Unidas ni siquiera conocemosel texto de esos acuerdos, usted lanzasobre la mesa estos papeles y se va dela sala.

Señor Presidente, ¿a usted le pareceque un país soberano tiene que hacersangrar su mano para levantar un dere-cho de palabra porque usted simple-

mente no quiere escuchar lo que aquíestá pasando? Esta mano que sangraquiere hablar, y tiene tanto derechocomo cualquiera de estas que usted lla-ma “un grupo representativo de líderes.”

Los acuerdos internacionales, señorPresidente, no se pueden imponer porun pequeño y selecto —como usted lollama— “grupo de países”.

Hemos sido pacientes, hemos sidodiplomáticos,hemos sido discretos, y eneste momento queremos saber si bajola presencia y el testimonio del propioSecretario General de las Naciones Uni-das se va a consumar en este país ungolpe de Estado a la Carta de las Nacio-nes Unidas.

Quiero recordar,señor Presidente,por-

que creo que es necesario, que los pro-pósitos de las Naciones Unidas son:fomentar entre las naciones relacionesde amistad basadas en el respeto alprincipio de la igualdad de derechos y alde la libre determinación de los pueblos,y a tomar otras medidas adecuadaspara fortalecer la paz universal.

¿Es que acaso la Carta de las Nacio-nes Unidas no forma parte de la Con-vención de Cambio Climático, o la Con-vención de Cambio Climático es un sis-tema forajido que actúa de la maneraque le da la gana bajo la propia miradadel Secretario General de las NacionesUnidas?

Señor Presidente, nuestro país sereserva, hasta tanto tengamos tiemposuficiente de hacer las consultas, y queusted nos garantice de dónde salieronestos textos, primero, que no fueronmandateados por las partes; es lo pri-mero que queremos saber. Y segundo,nosotros exigimos que esta sesión nose levante, porque el mundo ya ha espe-rado lo suficiente como para que estasesión se levante sin que los países quetenemos derecho a hablar tengamosderecho a hacerlo y tengamos que hacerun punto de orden haciendo sangrarnuestra mano para que usted tenga ladignidad de sentarse a escucharnos.

Gracias, señor Presidente (Aplausos).

Tabloide Especial No. 112

Intervención del Sr. René Orellana,Ministro de Medio Ambiente y Agua delEstado Plurinacional de Bolivia, en lasesión final de la Cumbre sobre cambioclimático de las Naciones Unidas, enCopenhague, Dinamarca, el 18 de di-ciembre de 2009.

Señor Presidente, estimados amigos,representantes de distintos Estados ynaciones:

En primer lugar, nos sentimos profun-damente sorprendidos y ofendidos por lametodología que se ha usado: en cuestiónde minutos entregarnos un documento,alcual no hemos tenido acceso, no hemostenido tiempo de leer, apenas hemos vis-to que se trata de dos páginas, y sin si-quiera poner a consideración de los pre-sentes, que representamos a pueblos ynaciones, ha decidido usted, señor Presi-dente, darnos una hora a los pueblos delmundo para decidir si este documentoexpresa o no una respuesta al grave pro-blema que ha sido creado por los paísesdesarrollados.

No nos parece respetuoso de los me-

Planteamos a los pueblos del mundo que se juzgue esta metodologíaantidemocrática, irrespetuosa

Nos enfrentamos esta noche también con el deterioro de los ya endebles

mecanismos democráticos internacionales

canismos democráticos, que existen ac-tualmente en las instituciones mundiales,como Naciones Unidas, que se pretenda,de esta manera, imponernos en una horala decisión de aceptar o no un documen-to,que no hemos estudiado y que apenashemos conocido, que habría sido concer-tado, conocimiento que hemos tomado através de declaraciones que se le hahecho a la prensa, sin siquiera haberseanalizado en esta sala con los países, losEstados y los pueblos acá representados.

Señor Presidente, se ha consultado,como usted dice,a líderes representativosde todo el mundo; los que no hemos sidoconsultados seguramente no somosrepresentativos. ¿Qué parte del mundo hasido consultada? ¿Qué intereses de esemundo representativo han acordado estedocumento al que no hemos tenido acce-so? ¿Por qué no hemos discutido entretodos este documento, y se nos imponen60 minutos para decir si estamos deacuerdo o no con la decisión que esepequeño grupo de países ya ha tomado,porque se arroga el derecho de ser repre-sentativo del mundo entero?

Yo recojo las palabras del señor repre-sentante de Tuvalu, 2º Celsius se propo-nen en este documento, es lo que alcan-zamos a ver en unos segundos, apenaslo tenemos en la mano. Están en riesgolas varias islas del planeta, ciudadescosteras, poblaciones que viven en esasciudades costeras, nevados del mundo,que proporcionan agua a millones depersonas y que garantizan la seguridadalimentaria a millones de personas; yestamos acá tomándonos el derechode, en una hora, decidir la vida de esosmillones de personas.

No nos parece respetuoso, y quere-mos decirlo con el mayor énfasis y clari-dad, estamos actuando de una maneradictatorial, y no es ese el espíritu de unmundo que democráticamente debe dis-cutir hoy el futuro del planeta y de lahumanidad.

Señor Presidente, no podemos impo-ner una hora de discusión para un do-cumento que ya ha sido preparado anti-cipadamente y sobre el cual existe unacuerdo que no compartimos. Y mani-festamos con claridad, por lo que cono-

cemos de este documento y la forma an-tidemocrática en que se está imponien-do, nuestro desacuerdo, nuestra oposi-ción, como país, como Estado plurinacio-nal, y planteamos a los pueblos del mun-do que se juzgue esta metodología anti-democrática, irrespetuosa, este acuerdoen la sombra de un documento que noexpresa los casi dos años de discusión,y no respeta el esfuerzo de quienes he-mos invertido tiempo, trabajo,esfuerzo deconcertación en nuestros países,con nues-tros pueblos. Esos derechos de nuestrospueblos no se expresan en esta metodo-logía,en esta forma de tomar decisiones.

Hoy no vamos a decidir la vida demillones de personas en una hora, en60 minutos, no vamos a validar estedocumento, y nuestra posición es clara:esto no expresa el consenso de todoslos presentes, en consecuencia, es eldocumento de un pequeño grupo, comousted lo dice, representativo de algunospaíses, que seguramente tendrán elpoder político para imponerlo.

Gracias (Aplausos).

Intervención del Sr. Paul Oquist, Se-cretario de Políticas Nacionales de laPresidencia de la República de Nicara-gua, en la sesión final de la Cumbre so-bre cambio climático de las NacionesUnidas, en Copenhague, Dinamarca, el18 de diciembre de 2009.

Señor Presidente, en adición al peli-gro del calentamiento global, nos enfren-tamos esta noche también con el dete-rioro de los ya endebles mecanismosdemocráticos internacionales.

En un mundo en que el G 7, G 8, G20, toman decisiones para el mundo

desde plataformas ad hoc sin ninguna ba-se legal, ahora tenemos el espectáculode la presidencia convocando un G 22usurpando el proceso de negociacióndel G 192, en el mismo seno de la con-ferencia de Naciones Unidas más impor-tante del nuevo siglo.

Un grupo de países soberanos hanescrito al Secretario General de la Orga-nización de Naciones Unidas y al Secre-tario Ejecutivo de la Convención Marcode Naciones Unidas sobre el Cambio Cli-mático expresando su rotundo desacuerdocon estos procedimientos. También es-tán presentando dos propuestas de de-

cisión para la conferencia con relación acómo llevar adelante el proceso de nego-ciación, una referida al grupo de trabajoespecial del Protocolo de Kyoto y la otrasobre la cooperación a largo plazo. Lospaíses signatarios son: el estado Pluri-nacional de Bolivia, la República de Cu-ba, la República del Ecuador, la Repúbli-ca de Nicaragua y la República Bolivaria-na de Venezuela.

A continuación doy lectura a dichacomunicación, para luego presentar lasdos propuestas de decisión.

“Sus excelencias:“Nosotros, representantes de los paí-

ses abajo firmantes,expresamos nuestrapreocupación y nuestra profunda decep-ción al constatar que el proceso de las ne-gociaciones que debía concluir en la Deci-maquinta Conferencia de las Partes de laConvención Marco de Naciones Unidassobre Cambio Climático,celebrado en Co-penhague, Dinamarca, del 7 al 18 de di-ciembre de 2009, no ha observado algu-nos de los principios básicos del Sistemade Naciones Unidas, como son: la legiti-midad, transparencia, inclusión, procesode abajo hacia arriba, sentido democráti-co de participación e igualdad entre losEstados... (Interrupción en la grabación)...

Cambio climático 13

“...durante estas sesiones de trabajo,y los cuales se han inclinado con preo-cupante preferencia por consultas par-ciales y excluyentes, contrariando losprincipios antes señalados. Cabe desta-car que durante las sesiones, varios paí-ses señalaron su posición en contra deestos procesos y aun así fueron conve-nidos por la presidencia sin considerar lafalta de consenso de las partes.

“Expresamos de manera enfática quelos únicos acuerdos que esperamos yreconocemos en la clausura de esta con-ferencia serán aquellos que se hayan pro-ducido en procesos abiertos, transpa-rentes y legítimos, que se adopten me-diante el consenso de las Partes en lassesiones respectivas de la COC 15 yMOP 5. En particular, acogemos los re-sultados presentados por el Grupo deTrabajo Especial por la Cooperación aLargo Plazo en el Marco de la Conven-ción 1 CP.15 y el Grupo de Trabajo Espe-cial sobre los Futuros Compromisos dela Parte del Protocolo de Kyoto 1 CMP.5.Instamos a que ambos grupos continúentrabajando con miras a la conclusión de

sus trabajos en la 16 Conferencia de lasPartes.

“Firmado por los países antes seña-lados.”

Voy a leer las dos decisiones que esta-mos poniéndolas ante la decisión 1 CMP.5.

“La Conferencia de las Partes, quesirve como reunión de las Partes para elProtocolo de Kyoto en su Quinta Sesión,guiada por los artículos dos y tres de laConvención, comprometidos con el ar-tículo tres, párrafo nueve, del Protocolode Kyoto, se comprometen a la decisión1 CMP.1: Acuerdan suspender la QuintaSesión de las Partes, que sirve comoreunión de las Partes del Protocolo deKyoto.

“Dos, acuerdan que el Grupo ad hocsobre los acuerdos bajo el Protocolo deKyoto deberá continuar su trabajo, y lassesiones de su grupo se reanudaráncuando sean factibles y necesarias paracompletar el trabajo del grupo.

“Tres, decide que el grupo ad hocsobre los otros compromisos del acuer-do del Protocolo de Kyoto deberán com-pletar su trabajo en junio de 2010, para

Las noticias que llegan de la capitaldanesa reflejan caos. Los anfitriones,después de concebir un evento en elque participarían alrededor de 40 milpersonas, no tienen forma de cumplir supalabra. Evo, que fue el primero de losdos Presidentes del ALBA en llegar,expresó profundas verdades que ema-nan de la cultura milenaria de su raza.

Aseguró, según las agencias de noti-cias, que tenía un mandato del puebloboliviano de bloquear cualquier acuerdosi el texto final no satisface las alternati-vas. Explicó que el cambio climático noes la causa sino el efecto, que estába-mos en la obligación de defender losderechos de la Madre Tierra frente a unmodelo de desarrollo capitalista, la cul-tura de la vida frente a la cultura de lamuerte. Habló de la deuda climática quelos países ricos deben pagar a los paí-ses pobres, y devolverles el espacioatmosférico arrebatado.

Calificó de ridícula la cifra de 10 milmillones de dólares anuales ofrecidoshasta el año 2012, cuando en realidadse necesitan cientos de miles de millo-nes cada año, y acusó a Estados Unidosde gastar trillones en exportar el terro-rismo a Irak y Afganistán, y crear basesmilitares en América Latina.

El Presidente de la República Boliva-riana de Venezuela habló el día 16 en laCumbre a las 8 y 40 a.m.,hora de Cuba.Pronunció un discurso brillante, que fuemuy aplaudido. Sus párrafos eran lapi-darios.

Impugnando un documento propues-

to a la Cumbre por la Ministra danesaque presidía la Conferencia, expresó:

“...es un texto que viene de la nada,no aceptaremos ningún texto que novenga de los grupos de trabajo, que sonlos textos legítimos que se han estadonegociando estos dos años”.

“Hay un grupo de países que se creensuperiores a nosotros los del Sur, los delTercer Mundo...”

“...no nos extrañemos, no hay demo-cracia, estamos ante una dictadura”.

“...venía leyendo algunas consignasque hay en las calles pintadas por losjóvenes... Una: ‘no cambien el clima,cambien el sistema’... Otra: ‘si el climafuera un banco, ya lo habrían salvado.’”

“Obama [...] recibió el Premio Nobelde la Paz el mismo día que envió 30 milsoldados a matar inocentes a Afganis-tán”.

“Apoyo el criterio de los representan-tes de las delegaciones de Brasil, Boli-via, China, solo quería apoyar […] perono me dieron la palabra...”

“Los ricos están destruyendo el pla-neta, ¿será que se van a otro cuandodestruyan este?”

“...el cambio climático es sin dudas elproblema ambiental más devastador deeste siglo.”

“...Estados Unidos llegará si acaso a300 millones de habitantes; China tienecasi cinco veces más población queEstados Unidos. Estados Unidos consu-me más de 20 millones de barriles dia-rios de petróleo; China llega apenas acinco o seis millones de barriles diarios.

No se puede pedir lo mismo a EstadosUnidos y a China.”

“...reducir la emisión de gases conta-minantes y lograr un convenio de coope-ración a largo plazo [...] parece haber fra-casado, por ahora. ¿La razón cuál es?[...] la actitud irresponsable y la falta devoluntad política de las naciones máspoderosas del planeta.”

“...la brecha que separa a los paísesricos y pobres no ha dejado de crecerpese a todas esas cumbres y promesasincumplidas y el mundo sigue su marchadestructiva.”

“...El ingreso total de los 500 indivi-duos más ricos del mundo es superior alingreso de los 416 millones de perso-nas más pobres.”

“La mortalidad infantil es de 47 muer-tes por cada 1 000 nacidos vivos peroen los países ricos es de solo 5.”

“¿...hasta cuándo vamos a permitirque sigan muriendo millones de niñospor enfermedades curables?”

“Dos mil 600 millones viven sin ser-vicios de saneamiento.”

“El brasileño Leonardo Boff escribió:‘Los más fuertes sobreviven sobre lascenizas de los más débiles.’”

“Juan Jacob Rousseau decía... ‘Entreel fuerte y el débil la libertad oprime.’Por eso es que el imperio habla de liber-tad,es la libertad para oprimir, para inva-dir, para asesinar, para aniquilar, paraexplotar, esa es su libertad. Y Rousseauagrega la frase salvadora: ‘Solo la Leylibera.’”

“¿Hasta cuándo vamos a permitir

conflictos armados que masacran amillones de seres humanos inocentescon el fin de apropiarse los poderososde los recursos de otros pueblos?”

“Hace casi dos siglos un libertadoruniversal, Simón Bolívar dijo: ‘Si la natu-raleza se opone, lucharemos contra ellay haremos que nos obedezca.’”

“Este planeta vivió miles de millonesde años sin nosotros, sin la especiehumana; no le hacemos falta nosotrospara que él exista, pero nosotros sin laTierra no vivimos...”

Evo habló en la mañana de hoy jueves.Su discurso será también inolvidable.

“Deseo expresar nuestra molestiapor la desorganización y por las dilacio-nes que existen en este evento interna-cional...”, dijo con franqueza al inicio desus palabras.

Sus ideas básicas:“Cuando preguntamos qué pasa con

los anfitriones, [...] nos dicen que esNaciones Unidas; cuando preguntamosqué pasa con las Naciones Unidas,dicen que es Dinamarca, y no sabemosquién desorganiza este evento interna-cional...”

“...estoy muy sorprendido porquesolamente tratan de los efectos y no delas causas del cambio climático.”

“Si nosotros no identificamos de dón-de viene la destrucción del medio am-biente [...] seguramente nunca vamos aresolver este problema...”

“...están en debate dos culturas: lacultura de la vida y la cultura de la muer-te; la cultura de la muerte, que es el

Reflexiones del compañero Fidel

La hora de la verdad

garantizar que no haya brecha entre el pri-mero y segundo período de compromiso.

“Cuatro, decide que el grupo ad hocsobre los otros compromisos bajo elacuerdo de Protocolo que sirven comoparte del Protocolo de Kyoto reanudensu sexta sesión en junio de 2010.

“Cinco, decide que el trabajo del gru-po ad hoc sobre los compromisos adi-cionales bajo el Protocolo de Kyoto debeser de conformidad con el artículo tres,párrafo nueve del Protocolo de Kyoto, ybasarse en las presentaciones de lasPartes que presenten enmiendas al Pro-tocolo de Kyoto, en el anexo del informede la décima sesión del grupo de traba-jo ad hoc para los anexos y el Protocolode Kyoto.”

Eso concluye la decisión uno.Ahora leeré la decisión 1 CP.15.“La Conferencia de las Partes en su

15 Sesión, en la decisión 1 CP.13 haanalizado los temas sobre el plan deacción de Bali, nota que el mandato delplan de acción de Bali adopta las deci-siones en su 15 período de sesiones, ynotando, además, que el grupo de tra-

bajo ad hoc, sobre las acciones coope-radas, debe completar su trabajo en el2009,acuerdan suspender la 15 Sesiónde la Conferencia de las Partes.

“Dos, decide ampliar el trabajo delgrupo de trabajo ad hoc, y completar sutrabajo en junio de 2010.

“Tres, decide que el grupo de trabajoad hoc deberá presentar a las partes deconsideración, para su consideración ensu conferencia de junio 2010 y some-terlos a los resultados del trabajo y loselementos del plan de acción de Bali demanera integral y equilibrada con vistasa adoptar el resultado acordado.

“Cuatro, decide que el grupo de tra-bajo ad hoc debe tener en cuenta lostextos presentados por las partes, asícomo también el documento oficial de laOctava Sesión del Grupo de Trabajo adhoc en Copenhague.”

Señor Presidente, si la secretariapudiera tener esto en cuenta, lo agrade-cería mucho.

Muchas gracias, señor Presidente(Aplausos).

Tabloide Especial No. 114

capitalismo. Nosotros, los pueblos indí-genas,decimos,es el vivir mejor,mejor acosta del otro.”

“...explotando al otro, saqueando losrecursos naturales, violando a la MadreTierra,privatizando los servicios básicos...”

“...vivir bien es vivir en solidaridad, enigualdad, en complementariedad, enreciprocidad...”

“Estas dos formas de vivencia, estasdos culturas de la vida están en debatecuando hablamos del cambio climático,y si no decidimos cuál es la mejor formade vivencia o de vida, seguramente estetema nunca vamos a resolverlo, porquetenemos problemas de vivencia: el lujo,el consumismo que hace daño a la hu-manidad, y no queremos decir la verdaden esta clase de eventos internacionales.”

“...dentro de nuestra forma de viven-cia, el no mentir es algo sagrado, y esono lo practicamos acá.”

“...en la Constitución está el amasua, ama llulla, ama quella: no robar, nomentir, ni ser flojos.”

“...la Madre Tierra o la Naturaleza exis-te y existirá sin el ser humano; pero elser humano no puede vivir sin el planetaTierra, y, por tanto, es nuestra obligacióndefender el derecho de la Madre Tierra.”

“...saludo a las Naciones Unidas, queeste año, por fin, ha declarado el DíaInternacional de la Madre Tierra.”

“...la madre es algo sagrado, la ma-dre es nuestra vida; a la madre no sealquila, no se vende ni se viola, hay querespetarla.”

“Tenemos profundas diferencias conel modelo occidental, y eso está en de-bate en este momento.”

“Estamos en Europa, ustedes sabenque muchas familias bolivianas, familiaslatinoamericanas vienen a Europa. ¿Aqué vienen acá? A mejorar sus condicio-nes de vida. En Bolivia podía estarganando 100, 200 dólares al mes; peroesa familia, esa persona viene acá a cui-dar a un abuelo europeo, a una abuelaeuropea y al mes gana 1 000 euros.”

“Estas son las asimetrías que tene-mos de continente a continente, y esta-mos obligados a debatir cómo buscarcierto equilibrio, [...] reduciendo estas pro-fundas asimetrías de familia a familia,

de país a país, y especialmente de con-tinente a continente.”

“Cuando [...] nuestras hermanas yhermanos vienen aquí a sobrevivir o amejorar sus condiciones de vida, sonexpulsados,existen esos documentos lla-mados de retorno [...] pero cuando losabuelos europeos hace tiempo llegabana Latinoamérica nunca eran expulsados.Mis familias, mis hermanos no vienenacá a acaparar ni minas, ni tienen milesde hectáreas para ser terratenientes.Antes nunca había visas ni pasaportespara que llegaran a Abya Yala, ahora lla-mada América.”

“...si no reconocemos el derecho dela Madre Tierra, en vano vamos a estarhablando de 10 000 millones,de 100 000millones, que es una ofensa para la hu-manidad.”

“...los países ricos deben acoger atodos los migrantes que sean afectadospor el cambio climático y no estarlosretornando a sus países como les estánhaciendo en este momento...”

“...nuestra obligación es salvar a todala humanidad y no a la mitad de la huma-nidad.”

“...el ALCA,Área de Libre Comercio enlas Américas. [...] no es Área de LibreComercio en las Américas, es un áreade libre colonización en las Américas...”

Entre las preguntas que sugería Evopara un referéndum mundial sobre elcambio climático estaban:

“...¿Está usted de acuerdo con resta-blecer la armonía con la naturaleza, reco-nociendo los derechos de la Madre Tie-rra?...”

“...¿Está usted de acuerdo con cam-biar este modelo de sobreconsumo y de-rroche, que es el sistema capitalista?...”

“...¿Está usted de acuerdo con quelos países desarrollados reduzcan yreabsorban sus emisiones de gases deefecto invernadero?...”

“...¿Está usted de acuerdo en trans-ferir todo lo que se gasta en las guerrasy en destinar un presupuesto superior alpresupuesto de defensa para el cambioclimático?...”

Como se conoce, en la ciudad japo-nesa de Kyoto, en el año 1997 se firmóel Convenio de las Naciones Unidas

sobre Cambio Climático, que obligaba a38 países industrializados a reducir susemisiones de gases de efecto inverna-dero en un determinado porcentaje conrelación a las emitidas en 1990. Lospaíses de la Unión Europea se compro-metieron al 8%,y entró en vigor en el año2005, cuando la mayoría de los paísesfirmantes ya lo habían ratificado. GeorgeW. Bush, entonces presidente de Esta-dos Unidos —el mayor emisor de gasesde efecto invernadero, responsable de lacuarta parte del total de estos—, habíarechazado el convenio desde mediadosde 2001.

Los demás miembros de NacionesUnidas siguieron adelante. Los centrosde investigación continuaron su tarea.Es evidente ya que una gran catástrofeamenaza nuestra especie. Quizás lopeor sea que el egoísmo ciego de unaminoría privilegiada y rica pretenda lan-zar el peso de los sacrificios necesariossobre la inmensa mayoría de los habi-tantes del planeta.

Esa contradicción se refleja en Copen-hague. Allí miles de personas están de-fendiendo con gran firmeza sus puntosde vista.

La fuerza pública danesa utiliza méto-dos brutales para aplastar la resistencia;muchos de los que protestan son arres-tados preventivamente. Me comuniquécon nuestro canciller Bruno Rodríguez,que estaba en un acto de solidaridad enla capital de Copenhague, junto a Chávez,Evo, Lazo y otros representantes delALBA. Le pregunté a quiénes estaba repri-miendo con tanto odio la policía danesa,retorciéndoles los brazos y golpeándolosrepetidamente por la espalda. Me res-pondió que eran ciudadanos daneses yde otras naciones europeas y miembrosde los movimientos sociales que deman-daban a la Cumbre una solución real aho-ra para enfrentar el cambio climático. Medijo, además, que a las 12 de la nochecontinuarían los debates de la Cumbre.Cuando hablé con él era ya de noche enDinamarca. La diferencia horaria es deseis horas.

Desde la capital danesa, nuestroscompañeros informaron que lo de maña-na viernes 18 es peor. A las 10 de la

mañana se suspenderá durante dos ho-ras la Cumbre de Naciones Unidas y elJefe del Gobierno de Dinamarca sosten-drá un encuentro con 20 Jefes de Esta-do invitados por él a discutir con Obama“problemas globales”. Así denominan lareunión cuyo objetivo es imponer unacuerdo sobre el cambio climático.

Aunque en la reunión participarán to-das las delegaciones oficiales, sólo po-drán opinar “los invitados”. Ni Chávez, niEvo, por supuesto, se encuentran entrelos que pueden emitir su opinión. Laidea es que el ilustre Premio Nobel pue-da pronunciar su discurso preelaborado,precedido por la decisión que se adop-tará en esa reunión de transferir elacuerdo para fines del año próximo en laCiudad de México. A los movimientos so-ciales no se les permitirá estar presen-tes. Después de ese show, en el salónprincipal del evento proseguirá la “Cum-bre” hasta su ingloriosa clausura.

Como la televisión transmitió las imá-genes, el mundo pudo contemplar losmétodos fascistas empleados en Co-penhague contra las personas. Jóvenesen su inmensa mayoría, los manifestan-tes reprimidos se ganaron la solidaridadde los pueblos.

Para los jefes del imperio, a pesar desus maniobras y sus cínicas mentiras,está llegando la hora de la verdad. Suspropios aliados creen cada vez menosen ellos. En México, como en Copenha-gue y en cualquier otro país del mundo,encontrarán la resistencia creciente delos pueblos que no han perdido la espe-ranza de sobrevivir.

Fidel Castro RuzDiciembre 17 de 20096 y 46 p.m.

Reflexiones del compañero Fidel

La verdad de lo ocurrido en la CumbreA los jóvenes interesa más que a

nadie el futuro.Hasta hace muy poco se discutía so-

bre el tipo de sociedad en que viviríamos.Hoy se discute si la sociedad humanasobrevivirá.

No se trata de frases dramáticas.Hay que acostumbrarse a los hechosreales. Lo último que pueden perder losseres humanos es la esperanza. Con laverdad en la mano, hombres y mujeres

de todas las edades, especialmente losjóvenes, han librado en la Cumbre ejem-plar batalla, ofreciendo al mundo unagran lección.

Lo principal ahora es que se conozcalo más posible en Cuba y en el mundo loocurrido en Copenhague. La verdad po-see una fuerza que supera la inteligenciamediatizada y muchas veces desinfor-mada de quienes tienen en sus manoslos destinos del mundo.

Si en la capital danesa se logró algoimportante, fue que a través de los me-dios masivos la opinión mundial pudoobservar el caos político creado y el tra-to humillante a Jefes de Estado y Go-bierno, Ministros y miles de represen-tantes de movimientos sociales e insti-tuciones, quienes llenos de ilusiones yesperanzas viajaron a la sede de la Cum-bre en Copenhague. La brutal represióncontra manifestantes pacíficos por parte

de la fuerza pública, recordaba la con-ducta de las tropas de asalto de los na-zis que ocuparon la vecina Dinamarca enabril de 1940. Lo que nadie podía ima-ginar es que,el 18 de diciembre del 2009,último día de la Cumbre, esta sería sus-pendida por el gobierno danés —aliadode la OTAN y asociado a la carnicería deAfganistán— para entregar la sala prin-cipal de la Conferencia al Presidente Oba-ma, donde él y un grupo selecto de invi-

Cambio climático 15

Fue sin embargo asombrosa la bata-lla que libraron esa madrugada un grupode representantes de países del TercerMundo, que impugnaban el intento deObama y los más ricos del planeta depresentar como acuerdo por consensode la Cumbre el documento impuestopor Estados Unidos.

La representante de Venezuela, Clau-dia Salerno, con energía impresionantemostró su mano derecha, de la que bro-taba sangre, por la fuerza con que golpeóla mesa para ejercer su derecho a usarde la palabra. El tono de su voz y la dig-nidad de sus argumentos no podránolvidarse.

El Ministro de Relaciones Exterioresde Cuba,pronunció un enérgico discursode aproximadamente mil palabras, delcual escojo varios párrafos que deseoincluir en esta Reflexión:

“El documento que usted varias ve-ces afirmó que no existía, señor Presi-dente, aparece ahora. […] hemos vistoversiones que circulan de manera subrep-ticia y que se discuten en pequeños con-ciliábulos secretos…”

“…Lamento profundamente la mane-ra en que usted ha conducido esta con-ferencia.”

“…Cuba considera extremadamenteinsuficiente e inadmisible el texto de es-te proyecto apócrifo. La meta de 2 gradoscentígrados es inaceptable y tendría con-secuencias catastróficas incalculables…”

“El documento que usted, lamenta-blemente, presenta no tiene compromi-so alguno de reducción de emisiones degases de efecto invernadero.”

“Conozco las versiones anterioresque también,a través de procedimientoscuestionables y clandestinos, se estu-vieron negociando en corrillos cerra-dos…”

“El documento que usted presentaahora, omite, precisamente, las ya ma-gras e insuficientes frases clave que aque-lla versión contenía…”

“…para Cuba, es incompatible con elcriterio científico universalmente recono-cido, que considera urgente e insoslaya-ble asegurar niveles de reducción de, almenos, el 45% de las emisiones para elaño 2020, y no inferiores al 80% ó 90%de reducción para el 2050.”

“Todo planteamiento acerca de lacontinuación de las negociaciones paraadoptar, en el futuro, acuerdos de reduc-ción de emisiones, debe incluir, inevita-blemente, el concepto de la vigencia delProtocolo de Kyoto […] Su papel, señorPresidente, es el acta de defunción delProtocolo de Kyoto que mi delegación noacepta.”

“La delegación cubana desea hacer

énfasis en la preeminencia del principiode ‘responsabilidades comunes, perodiferenciadas’, como concepto centraldel futuro proceso de negociaciones. Supapel no dice una palabra de eso.”

“Este proyecto de declaración omitecompromisos concretos de financia-miento y transferencia de tecnologíashacia los países en desarrollo como par-te del cumplimiento de las obligacionescontraídas por los países desarrolladosbajo la Convención Marco de las Nacio-nes Unidas sobre Cambio Climático […]Los países desarrollados, que imponensus intereses mediante su documento,señor Presidente, evaden cualquier com-promiso concreto.”

“…Lo que usted llama, señor Presi-dente, ‘un grupo de líderes representati-vos’ es, para mí, una grosera violacióndel principio de igualdad soberana queconsagra la Carta de las Naciones Uni-das…”

“Señor Presidente, le solicito formal-mente que esta declaración sea recogi-da en el informe final sobre los trabajosde esta lamentable y bochornosa 15Conferencia de las Partes.”

Se les había concedido solo una horaa los representantes de los Estadospara emitir opiniones, lo cual condujo asituaciones complicadas, vergonzosas ydesagradables.

Se produjo entonces un largo debateen el que las delegaciones de los paísesdesarrollados ejercieron fuerte presiónpara tratar de que la Conferencia adop-tara dicho documento como resultadofinal de sus deliberaciones.

Un reducido número de países insis-tió con firmeza en las serias omisionesy ambigüedades del documento impul-sado por Estados Unidos, en particularen la ausencia de compromiso de lospaíses desarrollados en cuanto a lareducción de emisiones de carbono y alfinanciamiento para adoptar medidas demitigación y adaptación de los paísesdel Sur.

Después de larga y extremadamentetensa discusión, prevaleció la posiciónde los países del ALBA y de Sudán,como Presidente del Grupo de los 77,deque el documento en cuestión erainaceptable para ser adoptado por laConferencia.

Ante la evidente falta de consenso, laConferencia se limitó a “tomar nota” dela existencia de ese documento como laposición de un grupo de alrededor de 25países.

Tras esa decisión adoptada a las 10y 30 de la mañana, hora de Dinamarca,Bruno —después de discutir junto aotros representantes de la ALBA amisto-

samente con el Secretario de la ONU yexpresarle la disposición a seguirluchando junto a Naciones Unidas paraimpedir las terribles consecuencias delcambio climático— partió en compañíadel Vicepresidente cubano Esteban Lazohacia nuestro país para asistir a la reu-nión de la Asamblea Nacional,dando porfinalizada su tarea. En Copenhague que-daban algunos miembros de la delega-ción y el embajador para participar enlos trámites finales.

En la tarde de hoy informaron lo si-guiente:

“…tanto a los que participaron en laelaboración del documento,como los que—como el Presidente de los EE.UU.—se anticiparon a anunciar su adopciónpor la Conferencia… como no podíanrechazar la decisión de limitarse a‘tomar nota’ del supuesto ‘Acuerdo deCopenhague’, intentaron proponer un pro-cedimiento para que otros países Partesque no habían estado en esta compo-nenda se sumaran a ella, declarando suadhesión, con lo cual intentaban darle uncarácter legal a dicho acuerdo, que dehecho podía prejuzgar el resultado de lasnegociaciones que deberán continuar.”

“Este intento tardío recibió nueva-mente una firme oposición de Cuba,Venezuela y Bolivia, que advirtieron queeste documento que la Convención nohabía hecho suyo no tenía ningún carác-ter legal, no existía como documento delas Partes y no podía establecerse reglaalguna para su supuesta adopción…”

“Es en este estado que terminan lassesiones de Copenhague,sin que se ha-ya adoptado el documento que fuera pre-parado subrepticiamente durante los úl-timos días,con una clara conducción ideo-lógica de la administración americana…”

Mañana la atención se centrará en laAsamblea Nacional.

Lazo, Bruno y el resto de la delega-ción llegarán hoy a media noche. ElMinistro de Relaciones Exteriores deCuba podrá explicar el lunes, con losdetalles y la precisión necesaria, la ver-dad de lo ocurrido en la Cumbre.

Fidel Castro RuzDiciembre 19 de 20098 y 17 p.m.

tados, 16 en total, tendrían el derechoexclusivo de hablar. Obama pronunció undiscurso engañoso y demagógico, llenode ambigüedades,que no implicaba com-promiso vinculante alguno e ignoraba elConvenio Marco de Kyoto. Se marchó dela sala poco después de escuchar aalgunos oradores más. Entre los invita-dos a usar de la palabra estaban lospaíses más industrializados, varios delas economías emergentes y algunos delos más pobres del planeta. Los líderesy representantes de más de 170, solotenían derecho a escuchar.

Al finalizar el discurso de los 16 esco-gidos, Evo Morales, con toda la autori-dad de su origen indio aymara, reciénelecto por el 65% de los votos y el apo-yo de las dos terceras partes de la Cá-mara y el Senado de Bolivia, solicitó lapalabra. Al Presidente dinamarqués nole quedó otra alternativa que cedérselaante la demanda de las demás delega-ciones. Cuando Evo concluyó sus sabiasy profundas frases,el danés tuvo que ce-derle la palabra a Hugo Chávez. Ambospronunciamientos pasarán a la historiacomo ejemplos de discursos breves yoportunos. Cumplida cabalmente la ta-rea, los dos partieron hacia sus respec-tivos países. Pero cuando Obama hizomutis por el foro, no había cumplido to-davía su tarea en el país sede de laCumbre.

Desde la noche del 17 y la madrugadadel 18, el Primer Ministro de Dinamarca yaltos representantes de Estados Unidosse reunían con el Presidente de la Comi-sión Europea y los líderes de 27 paísespara proponerles en nombre de Obama,un proyecto de acuerdo, en cuya elabora-ción no participaría ninguno de los res-tantes líderes del resto del mundo. Erauna iniciativa antidemocrática y virtual-mente clandestina, que ignoraba a milesde representantes de los movimientossociales, instituciones científicas, religio-sas y demás invitados a la Cumbre.

Durante toda la noche del 18 hastalas tres de la madrugada del 19, cuandoya muchos Jefes de Estado se habíanmarchado, los representantes de los paí-ses estuvieron esperando el reinicio delas sesiones y la clausura del evento.Todo el día 18, Obama sostuvo reunio-nes y conferencias de prensa. Lo mismohicieron los líderes de Europa. Despuésse marcharon.

Ocurrió entonces algo insólito: a lastres de la madrugada del 19, el PrimerMinistro de Dinamarca convocó una reu-nión para la clausura de la Cumbre. Que-daban representando a sus paísesministros, funcionarios, embajadores ypersonal técnico.

Con la verdad en la mano, hombres y mujeres de todas las edades, especialmente los jóvenes, han librado en la Cumbre ejemplar batalla, ofreciendo al mundo una gran lección

Tabloide Especial No. 116

La Cumbre de Copenhague fue un fracasoy un engaño a la opinión pública mundialConferencia de prensa ofrecida por el

canciller Bruno Rodríguez Parrilla, acer-ca de los sucesos de la Cumbre sobreCambio Climático en Copenhague, enel MINREX,el 21 de diciembre de 2009,“Año del 50 aniversario del triunfo de laRevolución”.

Carina Soto.— Buenos días. Bienve-nidos a la conferencia de prensa delMinistro de Relaciones Exteriores de laRepública de Cuba, compañero BrunoRodríguez Parrilla, quien tratará sobre lacumbre de Copenhague.

Están también con nosotros el vice-ministro primero del Ministerio de Cien-cia, Tecnología y Medio Ambiente, Fer-nando González, y otros miembros de ladelegación cubana que participaron enel evento.

Ministro, aquí están presentes losrepresentantes de los medios de laprensa nacional y 47 corresponsales de35 medios de la prensa internacionalacreditados en Cuba, de 14 países. Tie-ne usted la palabra.

Bruno Rodríguez.— Buenos días.Les agradezco mucho este tiempo

que van a compartir con nosotros. Nos parecía oportuno y necesario dar

una información detallada sobre lo ocu-rrido en la Cumbre de Cambio Climáticode Copenhague, la Conferencia de lasPartes de la Convención de Cambio Cli-mático, que acaba de concluir.

Como ustedes conocen, la delega-ción cubana fue presidida por el vicepre-sidente Esteban Lazo. Aquí me acom-pañan el compañero Fernando González,viceministro primero del Ministerio deTecnología y Medio Ambiente de Cuba(CITMA); el compañero Pedro Luis Pedro-so, subdirector de Asuntos Multilatera-les del Ministerio de Relaciones Exterio-res; el compañero Jorge Luis FernándezChamero, director del Ministerio de Cien-cia y Tecnología; el compañero Luis Paz,también especialista, experto de eseministerio; y no está con nosotros elcompañero Orlando Rey, que fue uno delos negociadores cubanos en este pro-ceso.

He visto en la mañana de hoy uncable de prensa, de AFP, que atribuye alPrimer Ministro británico, Gordon Brown,la acusación de que un puñado de paí-ses había tomado como rehén las nego-ciaciones sobre el clima en Copenhague.

Dijo: “Nunca más deberíamos enfren-tar el punto muerto que amenazó conhacer fracasar estas negociaciones,nunca más deberíamos dejar que soloun puñado de países tomen como rehénun acuerdo global hacia un futuro másverde.”

También hay declaraciones de ayer,del ministro del medio ambiente británi-co, Ed Miliband, con acusaciones men-daces sobre la actitud de la correlación,las distintas posiciones que asumieron

las delegaciones de los Estados partesde esta convención; en la lectura de laprensa del domingo y de la propia televi-sión, incluidas posiciones editoriales,uno aprecia que hay una enorme confu-sión con lo ocurrido en Copenhague. Portanto, quisiera enfatizar en que enCopenhague no hubo acuerdo alguno dela Conferencia de las Partes, no se tomóninguna decisión con relación a compro-misos vinculantes o no vinculantes, denaturaleza política o de naturaleza dederecho internacional, en modo alguno;simplemente, en Copenhague no huboacuerdo. Copenhague, muy lamentable-mente, terminó sin el menor acuerdo.

En Copenhague solo hubo una com-ponenda ambigua y engañosa, a espal-das de la conferencia, impuesta por elpresidente Obama a un grupo de países,que después se trató de imponer a losEstados partes de la convención.

En esta cumbre hubo un solo Obama,imperial, arrogante,que no escucha,queimpone posiciones y que incluso ame-naza a los países en desarrollo.

La Cumbre de Copenhague fue un fra-caso y un engaño a la opinión públicamundial. La causa de ello se hizo allí evi-dente: quedó al desnudo la falta devoluntad política de los países desarro-llados.

En esta cumbre ni siquiera hubofotos. La foto habitual de los jefes deEstado, que a veces adornan cumbres

sin mucho contenido, en este caso, muytristemente, ni siquiera la hubo, sinoimágenes de una represión violentasobre manifestantes y hechos de exclu-sión de las Organizaciones No Guberna-mentales. La tan pregonada sociedadcivil, que muchas veces se utiliza por lospaíses desarrollados con motivacionesnetamente políticas, fue excluida de lasala del evento, a partir del primer día.

Copenhague fue un paso atrás en laacción de la comunidad internacionalpara prevenir o mitigar los efectos delcambio climático, del calentamiento glo-bal.

Los patrones irracionales de produc-ción y consumo, en los países capitalis-tas desarrollados, son la causa del cam-bio climático, y el orden internacionalactual es un obstáculo estructural paraavanzar en el camino de la cooperacióninternacional, de los compromisos definanciamiento y transferencia de tecno-logía de los países desarrollados a lospaíses del Sur, precisamente en la adop-ción de estas estrategias.

Copenhague había concitado unaenorme expectativa, asistieron más de100 jefes de Estado. En total se calcu-laban los participantes, según los anfi-triones,en más de 46 000; es decir,erauna mega conferencia que,sin embargo,ha terminado en el fracaso, de ustedesconocido, y que yo voy a argumentar condetalles hoy.

Cambio climático 17

Como ustedes conocen, trato de sermuy conciso en los encuentros con laprensa, hoy tendré que utilizar más desu tiempo, porque quiero, incluso, pre-sentar evidencia documental de lo queestoy diciendo.

Ya el Comandante en Jefe Fidel Cas-tro Ruz, en Río de Janeiro, en 1992,había dicho: “Una importante especiebiológica está en riesgo de desaparecer,por la rápida y progresiva liquidación desus condiciones naturales de vida: elhombre. Las sociedades de consumo sonlas responsables fundamentales de laatroz destrucción del medio ambiente. Lasolución no puede ser impedir el desa-rrollo a los que más lo necesitan. Si sequiere salvar a la humanidad de esaautodestrucción, hay que distribuir mejorlas riquezas y tecnologías disponibles enel planeta; menos lujos y menos despil-farro en unos pocos países para quehaya menos pobreza y menos hambreen gran parte de la Tierra.”

Este discurso emblemático de Fidel,que es, además, un prodigio de síntesis,podría haber sido el presentado por ladelegación cubana, porque cada palabraconserva plena vigencia.

En su momento, aunque fue un dis-curso extraordinariamente aplaudido ybien acogido en esa conferencia, algu-nos podían pensar que se exageraba.Los datos actuales indican que enton-ces ni siquiera se podía calcular, en todasu enorme dimensión, la gravedad delproblema, y voy a fundamentar la inmi-nencia del peligro, la gravedad del pro-blema, que la Conferencia de Copenha-gue tenía que haber resuelto y que nopudo hacerlo.

La temperatura promedio ha crecido0,8º centígrados desde 1980; las tem-peraturas en Alaska, el oeste canadien-se y el este de Rusia han subido a un

ritmo que duplica el promedio mundialde elevación de la temperatura. Losefectos son visibles en las masas dehielo, de más de dos kilómetros de altu-ra, de Groenlandia, los glaciales de Sura-mérica y la gigantesca capa de hielo dela Antártida.

Las últimas dos décadas del siglo XXfueron las más calurosas de los últimos400 años, y posiblemente las más calu-rosas de varios milenios.

En el transcurso del siglo XXI o pocomás, el promedio de la temperaturamundial podría aumentar en 5º. Ponién-dolo en un contexto comprensible, esosería el equivalente al cambio de tem-peratura que ocurrió en el planeta desdela última era glacial, cuando Europa yAmérica del Norte se encontrabancubiertas por más de un kilómetro dehielo; es decir, este cambio de tempera-tura es equivalente a aquel que provocóun cataclismo, un cambio extraordinarioen el planeta en su biodiversidad.

En el 2040 podría producirse el pri-mer verano completamente libre de hie-lo en el ártico. Científicos climáticos handocumentado tendencias de más olasde calor, sequías más largas y más in-tensas, un nivel del mar más alto, situa-ciones de lluvias más frecuentes y hura-canes más fuertes; pequeños Estadosinsulares corren el riesgo de desapare-cer bajo las aguas, los bosques desapa-recen y los desiertos se extienden.

Si la temperatura global aumentaraentre 1,5º centígrados y 2,5º centígra-dos, un 30% de las especies desapare-cerá y numerosas islas se hundirán enel mar.

Los países en desarrollo experimen-tarán un declive entre un 9% y un 21%de su productividad agrícola, en algunospaíses africanos con agricultura asocia-da a las lluvias se reduciría la productivi-

dad de los cultivos hasta en un 50% —esdecir, se reduciría a la mitad la producti-vidad de los cultivos para el 2020.

Los precios medios de los alimentosaumentarían en proporción con los incre-mentos de temperatura hasta el 2050.

Doscientos sesenta y dos millonesde personas fueron afectadas anual-mente por desastres climáticos entre el2000 y el 2004, el 98% de ellas vive enpaíses subdesarrollados. Se calculaque en el 2015 ese total de personasafectadas será de 375 millones de per-sonas anuales.

El 76% de las emisiones acumuladasde gases de efecto invernadero se hanoriginado en los países industrializados,y estas emisiones, entre el año 1990 yel 2003, después del Protocolo de Kyo-to y el acuerdo de reducirlas, se incre-mentaron en 12,8%.

Denuncio que las emisiones de car-bono de los países desarrollados seincrementaron, desde el Protocolo deKyoto hasta la fecha, en 12,8%. De esenotable incremento, el 55% correspondea incrementos de los Estados Unidosde América. Las emisiones de EstadosUnidos aumentaron un 20%. Con tansolo el 4,6% de la población mundial,Estados Unidos concentra el 20% delas emisiones globales.

Un estadounidense consume, comopromedio, 25 barriles de petróleo anua-les, un europeo 11,un ciudadano chinomenos de dos y un latinoamericano ocaribeño menos de uno.

Cerca de 1 000 millones de ciuda-danos del primer mundo derrochan alre-dedor de la mitad de la energía del pla-neta; 2 000 millones de pobres care-cen siquiera de electricidad.

Treinta países, incluidos los de laUnión Europea, consumen el 80% delcombustible que se produce.

No exagero, 15 países desarrolladosincrementaron sustancialmente sus emi-siones entre 1990 y 2007. En el año2004 los per cápita de emisión de car-bono fueron en la Unión Europea de 8,1toneladas, porque aquí hay que tener encuenta no solo los niveles de emisiónactual, sino dos factores: un factor es laacumulación histórica de emisiones, elReino Unido está emitiendo carbono des-de la Revolución Industrial; y, un segundofactor es que no se pueden evaluar sololas emisiones brutas, sino las emisionesper cápita. Cada ciudadano europeo emi-te 8,1 toneladas de carbono; cada nor-teamericano emite 20,9 toneladas decarbono; un latinoamericano o caribeño,4,9, y un africano 2,3.

El propio señor Gordon Brown, queestuvo todo el tiempo activo en la con-ferencia y cuya delegación desempeñóun papel nefasto en aquella sesión fatí-dica de la madrugada del día 19 dediciembre, advirtió que si no se alcanzaen la Cumbre de Naciones Unidas enCopenhague un acuerdo, las conse-cuencias serán desastrosas.

Otros científicos habían dicho queinundaciones, sequías y olas de calorletales serán algunas de las consecuen-cias catastróficas descritas, precisa-mente, por el señor Brown.

El cambio climático quedará fuera decontrol en los próximos cinco a 10 añossi no se recortan drásticamente las emi-siones de C02. No habrá un Plan B, sifracasa Copenhague.

El mismo Gordon Brown dijo: “Si nose alcanza un acuerdo, sin dudas el da-ño de las emisiones descontroladas nopodrá ser reparado por un acuerdo futu-ro.” Enumeró, como consecuencias, con-flictos,emigración descontrolada y 1 800millones de personas con escasez deagua.

Tabloide Especial No. 118

Puede afirmarse con todo rigor, contodos los datos, con toda la evidencia,que los países desarrollados han incum-plido flagrantemente los compromisosque adoptaron como parte del Protocolode Kyoto: aumentaron drásticamentesus emisiones; tratan de ocultar el he-cho modificando la base de cálculo, quees el año 1990, universalmente acepta-da, y sustituirla por el año 2005, paraocultar, precisamente, esos 15 años deincremento sostenido de emisiones.

En segundo lugar, incumplieron suscompromisos de financiamiento a paí-ses del Sur, a países subdesarrollados,para garantizar, precisamente, accionesde reducción de emisiones de carbonoen esos países o mitigación, sin sacrifi-car el derecho al desarrollo de estos paí-ses. No se puede pedir a los países delSur que no se desarrollen para que noemitan carbono, y es imposible desarro-llarse sin emitir carbono en las condicio-nes de la tecnología actual.

Incumplieron sus compromisos definanciamiento para acciones de adap-tación en esos países. Cómo resolvercon irrigación los problemas de sequía;es decir, cómo compensar los efectosque está teniendo el cambio climático.Toda la evidencia permite demostrar unincumplimiento flagrante, grosero, de loscompromisos adoptados en el Protocolode Kyoto.

En el debate, en el Plenario de la Con-ferencia de los Estados parte, se produ-jeron los discursos importantísimos delcompañero Chávez, que fue ampliamen-te reproducido en la prensa cubana, enque dijo —refiriéndose al texto que des-pués apareció—: “es un texto que vie-ne de la nada, no aceptaremos ningúntexto que no venga de los grupos de tra-bajo,que son los textos legítimos que sehan estado negociando estos dosaños”, y que permanecían reunidos sindormir durante horas, en dos salas, fun-cionando sin pausa, con las delegacio-nes internacionales, de una maneratransparente, correcta, oficial, ante laopinión pública.

Siguió diciendo Chávez: “El cambioclimático es, sin duda, el problemaambiental más devastador de este siglo;reducir la emisión de gases contaminan-tes y lograr un convenio de cooperacióna largo plazo, que eran los propósitos deestos dos grupos” —dice el Presiden-te—, “parece haber fracasado por aho-ra. ¿La razón cuál es? La actitud irres-ponsable y la falta de voluntad políticade las naciones más poderosas del pla-neta.”

El presidente Evo Morales, desde laprofunda razón y sabiduría de las cultu-ras ancestrales indoamericanas, expre-só: “Cuando preguntamos, ¿qué pasacon los anfitriones?” —es decir, con elgobierno danés que presidía esta confe-rencia—, “nos dicen que es NacionesUnidas. Cuando preguntamos, ¿quépasa con las Naciones Unidas?, dicenque es Dinamarca, y no sabemos quiéndesorganiza este evento internacional.”Después ha quedado claro que no eraNaciones Unidas quien desorganizabaeste evento internacional, sino EstadosUnidos.

“Estoy muy sorprendido” —sigue di-ciendo Evo—,“porque solamente tratande los efectos y no de las causas delcambio climático. Si nosotros no identifi-camos de dónde viene la destruccióndel medio ambiente, seguramente nun-ca vamos a resolver este problema; esnuestra obligación defender el derechode la Madre Tierra”, y propone, a conti-nuación, un referendo mundial, con pre-guntas sencillas, al alcance de cual-quier ciudadano del mundo, de Nortea-mérica, Europa, África, América Latina yAsia, pidiendo que se escuche la opi-nión, en un acto de democracia elemen-tal, un asunto en que nos va la vida atodos los que habitamos este planeta,incluso no solo a los seres humanos,sino a todas las especies que habita-mos este planeta. Evo Morales con ra-zón dice: “Consúltese a los pueblos.” Yhe visto más recientemente que lanzala idea de convocar una cumbre mun-dial de los pueblos, en respuesta al fra-caso de Copenhague.

El compañero Esteban Lazo, en sudiscurso, el mismo día 17 de diciembre,antes del formato cerrado o el secuestrode la conferencia para crear condicionespara un show propagandístico, habíadicho: “Debo también sumarme a sudenuncia y protesta” —a la de Chávez yEvo— “por la falta de transparencia y laexistencia de formato de negociacionesexcluyentes y paralelos de documentosque hoy se dice que no existen. Al pare-cer, se convoca para mañana una reu-nión con un listado de oradores limitado,escogidos de manera nada democráti-ca. Notamos con preocupación laexclusión de las Organizaciones NoGubernamentales de esta sala y denun-

ciamos la evidente represión contra losmanifestantes.”

Continúa diciendo Lazo: “Según loexpresado en la Declaración Especialsobre Cambio Climático de la Cumbredel ALBA, recién finalizada en La Haba-na, el cambio climático se convierte enel más serio y urgente problema queenfrenta la humanidad. Pero el egoísmoy el interés de los países desarrolladosen preservar un orden económico injus-to e inequitativo, impiden emprender elcambio que reclaman las generacionespresentes y futuras.”

[...]“Los países desarrollados deben asu-

mir la plena responsabilidad por elimpacto que sus economías y estilos devida, sustentados en patrones de pro-ducción y consumo derrochadores einsostenibles, le han infligido al equilibrioclimático global.”

[...]“Los Estados Unidos, que concentran

cerca de la cuarta parte de las emisio-nes globales, no deben continuar man-teniendo a la comunidad internacionalcomo rehén de su política doméstica.”

Todo estaba claro, todo estaba adver-tido desde el mediodía y horas de la tar-de del día 17 de diciembre, cuandoentonces se produce el formato cerrado,convocado de una manera mediosubrepticia, medio clandestina por el Pri-mer Ministro de Dinamarca. Aparecía enel programa de la reunión como unapequeña nota, que decía: “Evento infor-mal convocado por invitación del gobier-no de Dinamarca.”

Ya había escándalo y expectativa conla llegada de Obama, que sería el grancomponedor de último minuto, el solu-

cionador de procesos que habían toma-do varios años y que permanecería, ade-más, pocas horas en la capital Copen-hague.

Es así que de manera arbitraria, anti-democrática e injusta,se organiza un for-mato cerrado, en el que participan unaveintena de jefes de Estado y del cual seexcluyen a alrededor de ochenta uochenta y tantos jefes de Estado restan-tes y a las demás delegaciones.

El compañero Pedroso,que me acom-paña aquí, hizo gestiones personalesingentes, de carácter oficial, con elgobierno danés y con la secretaría de laConferencia de las Partes de Cambio Cli-mático, y le fue confirmada la voluntadde hacerlo así y la evidencia de que secomprendía el alcance de tan groseraviolación de los procedimientos deNaciones Unidas.

Los presidentes Evo Morales y Chá-vez reclamaron su derecho a hacer usode la palabra y se les trató de impedirhacerlo. Se les concedió la palabra enel último momento, cuando práctica-mente una parte considerable de lasdelegaciones se habían marchado, antesu insistencia, después que se les tratóde disuadir explicándoles que era unainvitación, que era un formato cerrado,de decirles directamente que ellos noestaban invitados a ese formato. Hubie-ra sido un escándalo y una rebelión, queni siquiera en esas condiciones sehubiera permitido hablar a dos jefes deEstado que insistían en hacerlo.

Se produjeron allí entonces los bri-llantes discursos de los compañerosEvo y Chávez, en lo que denunciaronesta maniobra, denunciaron el procesoque venía encima de sustitución de la

Cambio climático 19

negociación oficial y universal de las Par-tes, por la imposición de un papel coci-nado en secreto y se opusieron a lo queestaba allí ocurriendo, responsabilizaronal gobierno danés con lo que allí estabapasando.

Se produce entonces, horas des-pués, la conferencia de prensa del pre-sidente Obama. Ya él había hablado eneste formato reducido y lo había hechocon extrema arrogancia, con una arro-gancia ofensiva, con una expresión en elrostro que indicaba plena conciencia deque mentía, de que engañaba a la opi-nión pública y de que imponía decisio-nes a ese evento.

Hay que conceder a Obama que, sinembargo, su postura es distinta total-mente de la de Bush. El presidente Oba-ma,por lo menos, reconoce la existenciadel cambio climático, la existencia delproblema, su gravedad y la evidenciacientífica; que Bush ni siquiera acepta-ba, decía que eran coincidencias, cicloslargos del clima, etcétera.

El presidente Obama dijo allí —voy atraducir directamente del inglés—:“Después de meses de conversación ydos semanas de negociaciones, yo creoque están claras ahora las piezas de unacuerdo. Las mayores economías tene-mos que hacer avanzar acciones nacio-nales decisivas”, y entonces confirma elanuncio, que ya habían hecho díasantes, de que Estados Unidos cortarásus emisiones en un 17% para el 2020.

¿Qué quiere decir cortar las emisio-nes en un 17% para el 2020? Quieredecir que está calculando contra las emi-siones de Estados Unidos del año2005 y que está ocultando que es unode los más grandes emisores, que es

uno de los más grandes acumuladoresde emisiones en la historia, que esrécord mundial y olímpico de emisionesper cápita actuales, y, sobre todo, estáengañando a la opinión pública, porquesi dijera honestamente, ateniéndose alas bases de cálculo universalmenteaceptadas, tendría que decir que, conrelación al año 1990, lo que EstadosUnidos está proponiendo es reducir un3% aproximadamente de sus emisionesglobales de carbono.

Sigue diciendo Obama: “Tenemosque tener un mecanismo para revisar silos países estamos cumpliendo nues-tros compromisos.” Injerencia, interven-ción en los asuntos internos de los Esta-dos. Fue algo que se trató de imponer alos países en desarrollo, se trató de im-poner a las llamadas economías emer-gentes, a China, a Brasil, a Sudáfrica, ala India, se trató de imponer de una ma-nera violenta,y fue de los elementos quetrabaron esto; un intento de cambiar elrégimen actual de comunicaciones na-cionales, de informes que hacen los Es-tados, a un mecanismo de intervención.

Obama, incluso, llegó a decir en algúnmomento: “Bueno, nosotros, en definiti-va, tenemos satélites que permitenmonitorear, etcétera; pero queremos unmecanismo más estricto de evaluación,de certificación” —como aquellas listas:la lista del terrorismo, las otras listas decertificación—, “de quiénes cumplen yquiénes no cumplen.”

Anuncio generoso de Obama: Partici-parán en la concesión de un fondo de10 000 millones de dólares hasta el2012, y entonces declara, además, que“Estados Unidos se involucrará en unesfuerzo global para movilizar 100 000

millones de dólares para el 2020, solo ysolo si esto es parte de un acuerdo másamplio como el que yo he descrito”, diceObama.

Qué quiere decir esto, en pocas pala-bras, ¿que el gobierno de Estados Uni-dos va a poner 100 000 millones dedólares? No. ¿Que alguien en este pla-neta va a poner 100 000 millones dedólares? No, no quiere decir eso. ¿Quélos desarrollados cumplirían su obliga-ción histórica y legal de hacerlo? No, noquiere decir eso. Quiere decir que van aparticipar de un esfuerzo global,en el queEstados Unidos, los países europeos yotros desarrollados pondrán una canti-dad de dinero; las economías llamadasemergentes otra cantidad de dinero, ylos países más pobres de África y losmás pequeños Estados insulares, ame-nazados con desaparecer, tendrán queponer también cantidades de dinero. Ymás adelante lo voy a demostrar con evi-dencia documental que presentaré.

El señor Obama entonces utiliza unafrase destinada a engañarlos a ustedes,y, por intermedio de ustedes, a toda laopinión pública internacional. Dice: “Esclara la fórmula; tenemos que atenernosal principio de respuestas comunes,pero diferenciadas y capacidades res-pectivas.”

A todo el mundo le sonará familiaresa frase, porque hay una frase muyfamiliar, que es el corazón de la Conven-ción de Cambio Climático y del Protoco-lo de Kyoto, que es el concepto de res-ponsabilidades comunes, pero diferen-ciadas: Responsabilidades. Quiere decirque los acumuladores históricos y lospaíses desarrollados, que son los res-ponsables de esta catástrofe, tienen

responsabilidades distintas a las de lospequeños Estados insulares o a la delos países del Sur, sobre todo los paísesmenos desarrollados, responsabilida-des.

Responsabilidades quiere decir finan-ciamiento; responsabilidades quiere de-cir transferencia de tecnología en condi-ciones aceptables, y entonces Obamahace un juego de palabras, y en vez dehablar de responsabilidades comunes,pero diferenciadas; habla de respuestascomunes, pero diferenciadas.

Tendría que tener yo muchísima evi-dencia, de la cual no hay ni un ápice, deque Obama se confunde o de que nousa conscientemente una frase queestá en la mente, que está en los códi-gos de la prensa y que está en los códi-gos de la opinión pública para confundira la gente. Habla también de contribuira ese propósito según las capacidadesrespectivas, quiere decir que todo elmundo tendrá que poner dinero en esefondo que proclama, y después dice quehay un acuerdo y miente, porque enCopenhague, ni había en ese momento,ni hay en este minuto, acuerdo —reco-noce que no es perfecto, dice que no esperfecto—, y lo considera un paso sus-tancial adelante, hacia el futuro.

Termina su discurso desde un podiocomo este, y sale inmediatamente poruna puerta disimulada, en una paredcomo esta, blanca, y abandona el Plena-rio sin dignarse a escuchar a nadie, nihabía escuchado a nadie antes de pro-ducirse su intervención.

Ahora, ese evento falso, esa farsa delpequeño grupo de países, en el cual haypaíses por los que Cuba siente profundorespeto y que tienen una merecida eje-cutoria en los temas del cambio climáti-co y, en general, en la política exterior,que es un formato impuesto por Esta-dos Unidos y por Dinamarca —se tratatambién de confundir a la opinión públi-ca mundial, y presentar ese eventocomo si fuera la Conferencia de las Par-tes de Cambio Climático; es decir, seroba el contenido del evento a un for-mato falseado y se hace todo lo posiblepara que la gente piense que ese for-mato falseado es la Conferencia de lasPartes— se hace en la sala principal.

Es una vergüenza suspender la Con-ferencia de las Partes, los oradores hantenido que trabajar la madrugada ante-rior. Hubo discursos que se produjerona las 4:00 de la mañana, el compañeroChamero estaba allí sentado a las 3:00,a las 4:00 de la mañana, precisamentepara posibilitar este formato.

Se hace en la sala principal. La mitadde la sala principal estuvo ocupada elprimer día, el 17, por representantes deorganizaciones no gubernamentales, lasociedad civil, movimientos populares,etcétera; ese día no había uno. La mitadde la sala permaneció vacía, se impidióacceder a los representantes de lasorganizaciones no gubernamentales.

En segundo lugar se mantuvieron allílas banderas que presidían la Conferen-cia de las Partes; se mantuvieron losescaños de los Estados. A Cuba nadiele preguntó si quería tener un escaño enesa farsa. Cuando llegamos allí estaba

Tabloide Especial No. 120

el escaño, tenía el nombre del país:Cuba. Se mantuvieron en la presidenciadel evento los títulos de los funcionariosde la Secretaría, que no tenían nada quehacer en ese invento, en ese formatoinventado. El secretario ejecutivo de laconferencia, el vicesecretario ejecutivotenían escaños allí, el secretario generalde las Naciones Unidas, y se mantuvo ellogotipo del evento. No es posible con-vencer a ninguna persona cuerda ymedianamente informada de que esediseño no perseguía el objetivo de con-fundir a la opinión pública mundial.

Entonces se produce la conferenciade prensa de Obama a las 10:30 de lanoche del día 18 de diciembre, una con-ferencia a la cual se da acceso limitadoa la prensa internacional, y que se haceen una sala pequeña, mientras se enga-ña a una cantidad importante de perio-distas que permanecen esperando en lasala oficial de las conferencias de pren-sa del evento de Cambio Climático.

¿Qué dice el Presidente de EstadosUnidos? Dice: “Hemos producido unsustancioso y sin precedente acuerdoaquí en Copenhague. Por primera vez enla historia las mayores economíashemos venido juntas a aceptar respon-sabilidades”, etcétera.

¿Qué quiere decir eso de que “lasmayores economías hemos venido jun-tas a aceptar nuestras responsabilida-des”? Quiere decir que están descar-gando importante peso de la carga quesignifica el financiamiento para la miti-gación y la adaptación de los países,sobre todo del Sur, al cambio climático,sobre China, Brasil, India y Sudáfrica;porque hay que decir que en Copenha-gue se produjo un asalto, un atraco con-

tra China, Brasil, India, Sudáfrica, y con-tra todos los países llamados eufemísti-camente en desarrollo.

Sigue diciendo el presidente Obama:“Nosotros permanecemos comprometi-dos con una legislación integral que crea-rá millones de empleos nuevos en Amé-rica, dará nuevo poder a la industria,mejorará nuestra seguridad nacional re-duciendo nuestra dependencia del pe-tróleo extranjero”, etcétera.

Ya dije los datos; pero, además, la leyesa no ha pasado. La ley esa pasó en laCámara,no ha llegado al Senado,se dis-cute en el Senado, cuesta 800 000millones de dólares. Todo el mundo sa-be que a finales del año que viene hayelecciones congresionales en EstadosUnidos y ya se empieza a especularcómo les irá a los demócratas en esasfuturas elecciones.

Sigue diciendo Obama: “Las accio-nes que hemos venido a tomar a Co-penhague significan un objetivo ambi-cioso de reducción de nuestras emisio-nes”, y vuelve a mentir. Ya di los datos,ya dije lo que significa: un 3%, aproxi-madamente, de reducción es lo queestá diciendo Obama. Simplemente ju-gando con los números, alterando lasbases de cálculo, muestra un crecimien-to que así y todo es ínfimo, porque todoel mundo sabe,y es universalmente acep-tado por la comunidad científica, que silas emisiones no se reducen en nomenos de un 45%, para el año 2020 seproducirán incrementos de temperaturay efectos gravísimos que he menciona-do antes.

Dice: “Hemos acordado unirnos enun esfuerzo internacional para proveerfinanciamiento para ayudar a los países

en desarrollo.” Es decir, miente todo eltiempo; con palabras demagógicas, conprofundo cinismo,engaña todo el tiempoa la opinión pública.

Dice: “Hay tres componentes: trans-parencia, mitigación y financiamiento.”¿Transparencia qué cosa es? El intentoque mencioné antes de obligar a lasmayores economías, de humillar a paí-ses como China, con mecanismos inje-rencistas, intervencionistas, para eva-luarlos, para certificar su conducta inter-nacional, cuando el primer delincuenteinternacional en materia de emisionesde carbono y cambio climático es,supuestamente, el fiscal, el juez en quese pretende erigir el gobierno norteame-ricano.

Dice: “Hemos trabajado todo el díapara establecer un nuevo consenso alre-dedor de estos tres puntos.” ¿Qué quie-re decir un nuevo consenso? Es nuevocon relación a la Convención de CambioClimático, es nuevo con relación al Pro-tocolo de Kyoto, significa la liquidacióndel consenso anterior de sus bases.

Dice: “Me estoy yendo antes del votofinal, pero yo siento confianza de quenos estamos moviendo en dirección aun acuerdo significativo. Yo creo quehemos alcanzado en Copenhague no elfinal, pero sí un comienzo, el comienzode una nueva era de acción internacio-nal.”

Es verdad,es una nueva era la que sepretende construir, que no se logró hacerpasar en Copenhague, que significa olvi-dar el concepto de responsabilidadescomunes, pero diferenciadas, y echarsobre los países en desarrollo, especial-mente las economías emergentes, elpeso de la carga.

Con cinismo dice: “Kyoto obligabalegalmente a los Estados; pero todo elmundo sabe que nos quedamos cortosen el cumplimiento de los compromisos,a pesar de eso.” Es decir, con profundocinismo dice que aquel era vinculante,no lo cumplimos, se acabó el acuerdovinculante, la nueva era; no se preocu-pen porque de todas maneras estába-mos obligados a cumplir aquel; perotodo el mundo sabe que nadie lo cum-plió. Es una repetición de las posicionesmás oscuras, más retrógradas en este,que marcan un retroceso en la posicióninternacional de este tema.

Estados Unidos antes, con Bush, noera parte del Protocolo de Kyoto, y Oba-ma no ha cambiado esencialmente laposición de Estados Unidos con rela-ción a un acuerdo internacional vincu-lante, es decir, legalmente obligatorio;pero por lo menos entonces había unrégimen internacional, del que EstadosUnidos no era parte, pero había un régi-men internacional. Ahora lo que se hatratado, en Copenhague, es de ir al asal-to contra ese régimen y subvertirlo.

Dice Obama: “En términos de futurasobligaciones, la cosa más importante esconstruir alguna confianza entre los paí-ses en desarrollo y los países desarro-llados,” una postura totalmente dema-gógica, ambigua.

Alguien le pregunta, le dice: “Pero,bueno, si usted se va quién va a firmarel acuerdo, quién va a adoptar el acuer-do importantísimo, su gran triunfo, elacuerdo de Copenhague.” Dice: “Bue-no, yo tengo que irme, hay otros funcio-narios que están mandatados para fir-marlo, llegado ese punto ellos termina-rán totalmente el trabajo.” Y se marcha

Cambio climático 21

evadiendo preguntas de los periodistas,hay que decir que preguntas bastantepoco informadas, a partir de la lógicaque prevalece aquí, que es la del enga-ño, la de la confusión, destinada preci-samente a engañar a la opinión públicainternacional.

Podemos pasar a presentar los docu-mentos, las versiones de documentos.

Les voy a mostrar, primero, cómo eldocumento este fue cocinado, fue ela-borado con días de antelación, de mane-ra clandestina; y, segundo, les voy ademostrar que en Copenhague no huboel menor acuerdo.

Esta es una de las versiones deldocumento, el compromiso de Copenha-gue; tiene algunos párrafos preambula-res, y aquí dice: “La Conferencia de lasPartes decide” —es decir, la palabra cla-ve que se usa en este documento esdecide— “adoptar este acuerdo político,que se convierte en operacional inme-diatamente.” “La Conferencia de lasPartes decide”, que es la palabra clavede este documento.

Continuamos mostrando los docu-mentos.

En este documento, se pueden fijaren los números de los párrafos; párrafocinco,por ejemplo,aquí verán uno de losgrandes aportes de estos nuevos docu-mentos.

¿Kyoto cómo era? Kyoto tenía un for-mulario, una tabla que decía: “Los paí-ses del Anexo 1 se comprometen ahacer las siguientes reducciones. Conrelación al año 1990, esta lista de paí-ses se compromete a hacer las siguien-tes reducciones: tal país, 82%; tal paístanto por ciento.” Bueno, en este docu-mento es este el formulario que diceque esta es la relación de objetivos cuan-tificados de reducción de emisiones porparte de los países,que no se sabe cuá-les son; pero lo que sí se sabe es quelos que van a ir aquí no son los desarro-llados. Van a estar los desarrollados,pero va a estar China, va a estar Brasil,va a estar India, va a estar Sudáfrica yvamos a estar todos nosotros con uncompromiso, supuestamente, de reduc-ción de emisiones.

Ahora, en Kyoto la Conferencia de lasPartes fijó ese compromiso. Aquí,¿quiéniba a fijar el compromiso si hubierapasado el acuerdo de Copenhague? Li-bremente, cada gobierno. El gobiernonorteamericano se iba a fijar su propiocompromiso, el del Reino Unido lo mis-mo, el gobierno de Dinamarca se hubie-ra fijado también, se fijaría su propiocompromiso.

Esta es otra tabla. En este caso espara informar sobre medidas de mitiga-ción adoptadas por otros países, esdecir, no solo los desarrollados.

En letra muy pequeña y no lo voy amostrar en letra mayor porque no esnecesario —está el listado de los paísesque participaron en la redacción de esedocumento, según esta versión que yotengo aquí en la mano. Circularon, almenos, cuatro versiones clandestinas,esta es una de ellas. Aquí aparece la lis-ta de los países que supuestamenteiban a firmar. Habría que preguntarles aesos gobiernos si es cierto que estuvie-

ron, si no es cierto; es decir, nos abste-nemos de emitir juicios en este sentido.

(Proyectan texto.)Esta es otra versión del documento

en la que no me voy a demorar; peroustedes ven que aquí ya han tenido quesustituir la palabra decide por una frasemuy confusa,dice: Los Jefes de Estado,de Gobierno, ministros y otros jefes dedelegación presentes en la Conferenciade Cambio Climático, persiguiendo losobjetivos tales y tales, y guiados, etcéte-ra, tomando nota de tal cosa —dice—,han acordado este acuerdo de Copen-hague que es operacional inmediata-mente. Es decir dice: have agreed onthis Copenhagen Accord wich is opera-tional immediately. Ya no se atreven ausar la palabra “la Conferencia de laspartes decide”; pero intentan el primerengaño: “La Conferencia de las partesha acordado...”

Ven que es el mismo texto. Si uste-des cotejan los documentos, verán quees imposible una casualidad tal quepermita, con menos de un 5% de cam-bios de palabra, pensar que fueron tex-tos hechos por distintos autores, etcéte-ra, son textos que fueron evolucionandoen la cocina esta clandestina.

Les voy a mostrar ahora en letramayor, para que sea más fácil paraustedes, algunos de los párrafos clavede los documentos.

Uno de los textos es el compromisode Copenhague, y este tiene un nombretécnico, es decir, no es un texto dedocumento, y este es el Acuerdo deCopenhague que el presidente Obamavendió en la conferencia de prensacomo un acuerdo universal y que el Pri-mer Ministro de Dinamarca trató deimponer, por malos modos, a la Confe-rencia de las Partes.

Ahora, este es uno de los párrafos,fíjense en esta parte —no ha habidotiempo de traducir—, enuncia aquí lameta de lograr una reducción globalanual de las emisiones para el 2050 del50%, comparado con el año 1990.

En este otro párrafo ya ven que esafrase desapareció, ni siquiera esa fraseque es una broma macabra; porque sesabe que si no se reducen las emisio-nes para el 2020 en un 45% se produ-cirán efectos catastróficos, y este docu-mento proponía para el 2050 reduccio-nes del 50%. Se sabe que si para el2050 no ha habido reducciones delorden del 80% al 90% los efectos seríanigualmente catastróficos; pero ni siquie-ra ese intento de engañar a la opiniónpública. Porque eso se podría decir másdirectamente, que significa la condenaaproximadamente de un tercio de lasespecies y la condena a los pequeñosestados insulares. Desaparece de estetexto.

Y aparece aquí, entonces, en esteotro, la meta de restringir el incrementode la temperatura en 2º Celsius, cuandoyo les expliqué lo que ocurriría si la tem-peratura pasaba de un incremento de1,5º Celsius, y aquí, en vez de hablar dereducciones concretas, se habla, prime-ro, de un nivel de aumento de tempera-tura gravísimo, inadmisible para la vida,para la biodiversidad, y, en segundo

lugar, se habla de 2º centígrados, en vezde 1,5º centígrados.

Aquí tienen otro párrafo, en las tresversiones de documentos —he usadosolo tres versiones, porque no hay espa-cio aquí suficiente. En esta primera, fíjen-se que dice: “Las partes toman nota delos compromisos individuales de las par-tes que son países desarrollados de pro-veer nuevos y adicionales recursos poruna cantidad de 30 000 millones dedólares para el período 2010-2012, co-mo aparece en el anexo”, en un apéndi-ce del documento. Y ese mismo párrafose repite en esta versión.

Ahora,en la versión siguiente,en estedocumento, fíjense cómo se produce uncambio en el lenguaje, empieza aquí(Señala), dice: “El compromiso colectivode los países desarrollados es proveernuevos y adicionales recursos por aproxi-madamente 30 000 millones de dóla-res para el período 2010-2012, con undestino balanceado entre adaptación ymitigación.” Y reconoce después que seva a priorizar los fondos de adaptaciónpara los países en desarrollo más vul-nerables.

Es decir, notan el cambio en el len-guaje, cómo se va “aguando” el com-promiso. Ya no son compromisos indivi-duales, ya son colectivos; ya no son por30 000, sino por una cantidad aproxi-mada. Ya se decide los destinos deesos dineros.

Ahora, aquí hay una frase muy impor-tante, ustedes ven ahí un corchete(Señala), ese corchete quiere decir quesobre esa frase ni siquiera en el peque-ño grupo de países con los que EstadosUnidos se dignó consultar, y a los quetrató de imponer y, en efecto, terminóimponiendo algunos conceptos,estabande acuerdo, aceptaban.

Dice: “En el contexto de acciones sig-nificativas de mitigación y transparenciasobre la implementación, se acuerdaentonces una meta de movilización con-junta de 100 000 millones de dólarespara el año 2020, para enfrentar lasnecesidades de los países en desarro-llo, con relación al cambio climático.”Es decir, aquí no dice que los paísesdesarrollados van a proveer 100 000millones de dólares, lo cual es poco,porque todo el mundo sabe tambiénque las cifras para tomar acciones ini-ciales que contengan el cambio climáti-co, y que se requieren con extremaurgencia, tienen que estar en el ordende los 300 000 millones de dólaresanuales.

Ahora, aquí no dice que los desarro-llados van a poner de su bolsillo, de lasarcas desbordadas, boyantes de esosgobiernos 100 000 millones. Dice que“los países desarrollados van a hacerparte de un esfuerzo conjunto de movili-zación”. ¿Qué cosa es un esfuerzo demovilización? Quiere decir pedir dinero,buscar dinero, etcétera. ¿Qué quieredecir que es conjunto? ¿Conjunto conquiénes? Conjunto con Cuba, conjuntocon las economías llamadas emergen-tes, conjunto con los países en los cua-les hay niveles de hambre, de pobreza,condiciones miserables de vida, nivelesde muerte por enfermedades preveni-

bles y curables, o por desnutrición mayo-res que las que se produjeron en cual-quiera de las guerras mundiales; esdecir, “un esfuerzo conjunto de moviliza-ción”. Aquí viene el lenguaje cínico, lademagogia y el intento de engañar a laopinión pública.

Ahora, ¿de dónde va a salir el dinero?Ni siquiera tienen el pudor de no decirde dónde va a salir el dinero y dejar quela gente se lo pregunte; tienen la fraseaquí, dicen: “Estos fondos vendrán deuna amplia variedad de fuentes.” “Am-plia variedad de fuentes”, ¿esa frasequé quiere decir? Quiere decir: no sue-ñen con que vendrán de los presupues-tos de los gobiernos de los países des-arrollados. Y después con profundo ci-nismo siguen describiendo,¿cuáles sonlas fuentes? Bueno, “públicas y priva-das” —como si el mercado fuera a re-solver esto—, “bilaterales y multilatera-les”. Aquí en “multilaterales” qué quieredecir, que no son recursos nuevos y adi-cionales. Quiere decir que podrán mo-verse por la vía de las instituciones deBretton Woods, que podrán moversepor la vía de las Naciones Unidas, queson los recursos que hoy están com-prometidos y que no se aportan por lospaíses desarrollados; porque todo elmundo sabe que los países desarrolla-dos no cumplen la meta del 0,7% delProducto Interno Bruto en ayuda oficialal desarrollo, que expolian a nuestraseconomías extrayendo, por la vía deldumping, el intercambio desigual de ladeuda, del interés de la deuda, muchísi-mo más dinero, entre seis y diez vecesel dinero que aportan por ayuda oficialal desarrollo.

Y entonces, el colmo del cinismo esesta frase: “incluso, fuentes alternati-vas de financiamiento”, que nadie halogrado explicar qué cosa es eso. Loque no es público ni privado, bilateral nimultilateral, ni viejo ni nuevo; es decir,¿qué cosa eso? ¿A la sociedad civil levan a pedir dinero, millonarios van ahacer donaciones generosas, el merca-do se va a mover para proteger la natu-raleza, etcétera?

Y ustedes ven que esto todavía sedeteriora más en el párrafo del supues-to compromiso de Copenhague, dondeya ni siquiera dice con precisión esasmismas palabras, sino, incluso modificaligeramente el lenguaje.

Aquí tienen un párrafo de una de lasversiones del documento que se refierea los grupos de trabajo que han estadonegociando con relación a este tema,que son los únicos oficiales existentesen la Conferencia de las Partes, que esel Grupo de Trabajo Especial sobreAcción Cooperativa a Largo Plazo y elgrupo sobre la continuación del Protoco-lo de Kyoto, en que hace alusión a losanexos, etcétera, que supuestamentedebían venir llenos, debían venir concompromisos cuantificables.

Aquí hay un párrafo muy curioso deldocumento que precede, ¿no?, de unode los primeros intentos antes de la lle-gada de Obama, incluso, que se estuvococinando durante semanas, evidente-mente. Al Primer Ministro danés variasdelegaciones, sobre todo Venezuela le

Tabloide Especial No. 122

preguntó directamente más de una vezsi existía algún documento, si él tenía laintención de presentar algún documen-to, igual que a la Ministra de MedioAmbiente danesa, y dijeron con profundocinismo los dos: “No, no podríamoshacerlo, la presidencia no está calificadapara eso, seríamos incapaces.” Bueno,pues sí había documento.

Ahora, fíjense este documento qué eslo que propone. Este documento propo-ne acordar reducciones de la emisión degases de efecto invernadero, por un Xpor ciento para el 2020, comparado conel año 1990, y un Y por ciento compa-rado con el año 2005, y comprometedespués una reducción del 80% para el2050 comparado con el año 1990.Bueno, hay una X, que no se sabe quéquiere decir, una persona decente en vezde la X habría puesto no menos del45%, y, sin embargo,ustedes ven que esdecente la formulación con relación alaño base de 1990 y la formulación conrelación al 80% para el 2050.

Ahora, qué pasa aquí en el mismopárrafo. No puede ser casualidad quelos dos párrafos empiecen diciendo —mi-ren el lenguaje— exactamente las mis-mas palabras: implementar el compro-miso de las partes del Anexo 1, los de-sarrollados, individuales o colectivamen-te, etcétera, etcétera. Ven que es exac-tamente el mismo lenguaje en las ver-siones, lo que ha ocurrido un milagro, seha perdido la X, la Y, el compromiso delaño 2020, y el compromiso del año2050 ha bajado de 80% a 50%. Es decir,ha habido un forcejeo que hay que reco-nocer a los países en desarrollo, a laseconomías emergentes, que estuvieronlidiando en un cuarto más pequeño queeste, cerrado, con la delegación nortea-mericana, y en determinado momento

directo con el emperador. Esto es, comoustedes ven, lo que ha ocurrido en estosdocumentos.

Llega entonces la noche fatídica, lanoche de los cuchillos largos. Obamada la conferencia de prensa a las 10:30,aproximadamente. Se había convocadoel plenario a las 10:00 de la noche, porla presidencia danesa. Estábamostodos allí, esperando a que comenzarael plenario. Se dijo después: “Vamos ademorar unos minutos. Circularemosun texto en los próximos minutos.” Pare-ce que Obama llegó tarde y decidieronaguantar el tiempo del plenario. La reu-nión estuvo esperando, las delegacio-nes oficiales: ministros, cancilleres, lasdelegaciones técnicas que llevaban alre-dedor de 48 horas, prácticamente sindormir y desde el día 7 de diciembre dur-miendo unas tres horas, cuatro horasdiarias; se mantienen allí en la sala sinexplicación ninguna,hasta las 3:00 de lamañana. A las 3:00 de la mañana llegael Primer Ministro de Dinamarca, que esel Presidente de la Conferencia, y dice,como si no hubiera pasado nada, comosi fueran las 10:00 de la mañana, dice:“Se reanuda la sesión de la Conferenciade las Partes. Se ha trabajado en la ela-boración de un documento que me hon-ro en presentar ante ustedes. Voy a con-ceder una hora a las distinguidas dele-gaciones para que hagan consultasregionales, y dentro de una hora adopta-remos el documento.” Y ahí se produceel escándalo, porque el Primer Ministrodanés cierra la sesión, y es cuando seoye el claqueteo de un grupo de delega-ciones golpeando con la pancarta quetiene el nombre del país, que es con laque se corta la mano la compañeraClaudia Salerno, de Venezuela, y mues-tra después la mano lastimada.

Y solo mediante un escándalo en elplenario el Presidente vuelve acomodar-se en su asiento y concede la palabra. Yentonces se produce el nombre delrepresentante de Tuvalu, para sorpresade todos, porque ahí se esperaba quefueran países especialmente radicales,etcétera. Pero no, es Tuvalu, con la pro-funda razón de que es una isla que vadesaparecer, como muchas otras deellas. Se llama Ian Fry este delegado,que es un experto, una persona seria,decente, y plantea, con lágrimas en losojos, profundamente emocionado, queTuvalu no va a aceptar el documento, locual es un acto de valentía suprema,por-que eso lo dice Cuba que es indepen-diente a Estados Unidos, que resiste yvence el bloqueo norteamericano, queno depende de la Unión Europea, quepuede decir lo que piensa, que lo que di-ce en privado lo repite en público, que loque dice en el discurso lo hace en loshechos, que no depende de las institu-ciones de Bretton Woods, que no de-pende de créditos del Fondo Monetario,etcétera; pero, bueno, Tuvalu, que esuna economía pequeña, en estas condi-ciones, es un acto de verdadero coraje,lo que hace este delegado. Y usa unafrase tremenda, dice: “Como en el pen-samiento bíblico, aquí nos han ofreci-do 30 monedas de plata para que acep-temos un acuerdo que no asegura la so-brevivencia de nuestros Estados insu-lares.”

Después habla Claudia Salerno, quehace una defensa apasionada, desde lagran autoridad —que fue ella la que pre-guntó varias veces al Presidente si habíadocumentos y él le dijo que no, y a laMinistra del Medio Ambiente—, la enor-me autoridad, el coraje y el disgusto dehaberse metido casi dos semanas nego-

ciando, habiendo sido engañados allí;porque lo que ha ocurrido allí, ni más nimenos, es que, mientras estos gruposhan estado negociando, ha habido unpequeño grupo en otro lugar negociandopor su cuenta, sabiendo que esa nego-ciación, la oficial, simplemente se iba aabandonar en el último minuto, iba a sersustituida, un engaño.

Bueno, yo tengo alguna experienciade Naciones Unidas, otros compañerospodrían hablar con más propiedad, peroyo puedo decir que en los últimos 30años en Naciones Unidas solo una vezen la llamada Cumbre del Milenio pasóalgo así en una negociación separada;pero jamás en un evento de esta magni-tud, jamás con negociaciones en forma-tos oficiales de las partes.

Y la delegada venezolana impugnacon mucho valor el origen espurio deldocumento que se está tratando deimponer y el método antidemocrático dedecir: Tienen una hora, consulten entreustedes, si quieren, y lo toman o lodejan.

Interviene después Bolivia, es elministro boliviano de Medio Ambiente,Pedroso, que hace un discurso enérgico,fuerte también en este tema.

Intervengo yo entonces. Ustedes hanvisto en la prensa algunos elementosdel discurso, centrado en algunos facto-res de estos procesales, los que ya sehan dicho. Digo: “El documento queusted varias veces afirmó que no existía,señor Presidente, aparece ahora.Hemos visto versiones que circulan demanera subrepticia y que se discuten enpequeños conciliábulos secretos” —selas he mostrado aquí a ustedes.

En esa misma sesión propuse entre-gárselas a la prensa internacional, a lasorganizaciones no gubernamentales,

Cambio climático 23

para que cada cual se haga su juicio. Ymás que centrarme en los aspectos pro-cesales, más que suficientes para noaceptar ese documento espurio,me cen-tro en el contenido del documento; por-que todavía si fuera espurio, pero decen-te en su contenido, bueno, podría provo-car alguna duda. Alguien en determina-do momento ofreció pedir perdón a lacomunidad internacional y a los países anombre del sistema de Naciones Uni-das, los países desarrollados, etcétera,a cambio de que se aceptara el docu-mento. Y, bueno, a lo mejor eso hubierapodido ser una salida honrosa, es decir,una autocrítica verdadera, el reconoci-miento de esta atrocidad desde el puntode vista procesal; pero el problema esque el documento no se podía aceptar,no solo porque era espurio, sino porquesu contenido es suicida.

Yo abordo el concepto de los 2º Cel-sius, del incremento de los 2º, me cen-tro en eso, en que el documento no tie-ne compromiso alguno de reducción deemisiones de gases de efecto inverna-dero. Menciono las frases que se hanomitido, porque tengo conmigo las ver-siones anteriores; menciono el tema dela reducción del 45% para el 2020 y del80% o 90% para el 2050, y mencionoque todo planteamiento acerca de lacontinuidad de las negociaciones, por-que el párrafo 13 de este supuestoAcuerdo de Copenhague dice que “con-tinuarán negociaciones para adoptaruno o varios instrumentos vinculantes”,pero no dice que esas negociaciones tie-nen que ser continuidad, tienen que serun segundo período del CompromisoVinculante del Protocolo de Kyoto.Entonces, ¿esa frase qué quiere decir?Quiere decir que Kyoto murió en elmomento en que se apruebe este docu-mento. Por eso digo que este docu-mento es el acta de defunción de Kyoto,que nosotros no podemos aceptar, y quelo que el Presidente ha mencionadocomo un grupo representativo de líde-res, no es más que una verdadera atro-cidad de violación del principio de igual-dad soberana de los Estados: cada países igual a otro, cada delegación tiene unvoto, la palabra de una delegación tieneigual peso que la de otra, es en lo quese basa el sistema de las Naciones Uni-das, en lo que se basan las relacionesinternacionales en el mundo multilateralactual.

Se producen entonces intervencionesde un grupo de países respaldando estaposición y grandes aplausos en la sala,lo cual a nosotros nos sorprende, ¡gran-des aplausos en la sala!

Después de esto se produce enton-ces una propuesta constructiva de lasdelegaciones del ALBA, que presentaNicaragua con apoyo de las delegacio-nes que mencioné antes y de Sudán,que es el Presidente del Grupo de los77. No a nombre del Grupo de los 77,porque no hay tiempo de reunir a másde 100 países, sino Sudán en capaci-dad nacional, pero sin olvidar que es elPresidente del Grupo de los 77. Y sedice: Bueno, busquemos una formahonorable, que es coger lo que ustedesle llaman el Acuerdo de Copenhague y,

en vez de pretender adoptarlo aquí enesta conferencia, circularlo como un do-cumento informativo, es decir, para infor-mación de todos, que esa es la posiciónde un grupo de países. Y cuando eseacuerdo lo presenta, obligado por las cir-cunstancias, el Presidente, intervienenalgunas delegaciones europeas, traicio-nan su palabra y se vuelve otra vez a lasconsultas, etcétera.

Hay que decir que quien hizo el papelde verdugo en esta sesión fatídica fue ladelegación del Reino Unido, uno de susministros, un ministro de su Gabinete,que llegó allí corriendo, despavorido, sincorbata, se había ido ya a dormir, todospensaban que el mundo tendría un espi-nazo más flexible, sería más dócil anteel dictado del emperador, y llegó allícorriendo, pidió la palabra, le dieron lapalabra y su micrófono no funcionaba.Lo intentó varias veces, y, obviamente,es lo que hace todo el mundo, buscaotro micrófono para hablar, con el detallede que el micrófono que escogió fue elde la delegación de Estados Unidos deAmérica, y se produjo una risa masiva enla sala cuando en las pantallas se vio,sentados juntitos,al señor Pershing,quees el representante de Estados Unidosen estos temas, un ambientalista reci-clado, arrepentido, que ha traicionadosus orígenes en el movimiento ambien-talista, juntitos Pershing y un ministro bri-tánico haciendo el papel de verdugo.

La vez siguiente el ministro británicose sentó en un escaño de un país afri-cano: la hipocresía y el cinismo de estaépoca. Se dio cuenta de que era fea laimagen de compartir el escaño de Esta-dos Unidos cuando estaba haciendo sutrabajo.

Ocurre un suceso divertido, que esque piden la palabra simultáneamenteEstados Unidos y Nicaragua, y el Presi-dente danés —el Presidente de lasesión, quiero decir, el Primer Ministro—,obviamente, le dio la palabra a EstadosUnidos. Nicaragua protesta. Estados Uni-dos dice: “Bueno, puedo hacer uso dela palabra más tarde.” Le dan la palabraa Nicaragua, le dan la palabra a EstadosUnidos, y el delegado de Estados Unidosdice: “No, no tengo nada que decir.” YEstados Unidos no habla en esta se-sión, ni cabildea.

Toda la prensa europea ha dicho quela Unión Europea fue humillada en estaconferencia por Estados Unidos y queObama negoció con algunos paísesimportantes y que le impuso un acuerdoa la Unión Europea. Bueno, algunospaíses de la Unión Europea fueron losque asumieron la vergonzosa responsa-bilidad de defender el ucase imperial.

Se enreda la situación y aparecenotras propuestas procesales. El Secre-tario General de Naciones Unidas haceun esfuerzo extremo, modesto, cons-tructivo, me pide conversar, conversa-

mos, y tenemos una reunión con un gru-po de países del ALBA y donde estántambién Sudán y Egipto. Hace una ape-lación emocionada, y yo le expreso flexi-bilidad y espíritu constructivo, le digo:“Estamos dispuestos a proseguir lasnegociaciones, estamos dispuestos ainterrumpir las sesiones y continuarlasdentro de un tiempo; estamos dispues-tos a discutir algunas formulacionesmínimas, las esenciales, solo del docu-mento, y a olvidar el procedimientoespurio, traicionero que se ha usadoaquí, y nosotros lo apoyaremos si ustedhace ese esfuerzo, y ocurra lo que ocu-rra en esta conferencia no lo responsa-bilizamos a usted ni a las Naciones Uni-das y continuaremos apoyando en elesfuerzo a la organización y a su Secre-tario General en relación con el enfren-tamiento a los efectos del cambio cli-mático.

De esa reunión sale más o menos unacuerdo, que cuando el Primer Ministrodanés lo va a adoptar, se interpone otravez la delegación británica, con otrasdelegaciones europeas, y lo frustra, y seproduce entonces una contrarreformaallí, una oleada,sobre todo delegacioneseuropeas y de aliados desarrollados, tra-tando de presentar que hay una muy exi-gua minoría y una enorme, universalmayoría a favor del documento, tesisque repite ahora el distinguido PrimerMinistro Gordon Brown.

Tabloide Especial No. 124

Entonces el Primer Ministro danés tra-ta de imponer una solución vergonzosa,que dice: “Bueno, yo entiendo que aquícasi nadie está en contra, lo que vamosa hacer es acordar el documento y quelas excepciones que no están a favor,aparezcan sus nombres a pie de pági-na”, y como si estuviera en una subastao en el Parlamento británico, dice: “Bue-no, a ver, ¿qué países están en contra?”Ahí algunos países levantan la pancarta,creo que soy yo el que pide un punto deorden y tardo menos en leer lo que dijeque en contarlo. Dije: “Vemos queusted confunde los procedimientos.Entiendo que ha quedado totalmenteclaro que en esta sala no hay consensopara adoptar este documento. He escu-chado con paciencia y serenidad algu-nas intervenciones francamente hipócri-tas. Lamento profundamente que unadelegación europea haya ofrecido aquídinero para adoptar este documento.”La delegación británica —y digo su nom-bre ya que el ministro Brown ataca a ungrupo de países— dijo allí directamente:“Si ustedes no adoptan este documen-to, no podrán usar los 30 000 millonesde dólares que estamos dispuestos aofrecer inmediatamente”, lo dijo así,directamente, algo que yo, francamente,nunca había oído en los medios multila-terales. Eso se hace y se dice, lamen-tablemente, pero generalmente se hacede una forma más elegante.

“Me pareció un acto de chantaje ver-gonzoso. Lo peor de todo es que sabe-mos que el dinero no vendrá ni con docu-mento ni sin documento. Y le solito a us-ted,señor Presidente —estaba a unos 15metros de mí el Presidente, estábamosmuy cerca—, que se atenga a los proce-dimientos, se abstenga de listar la posi-ción de países, porque aquí no existenvotaciones nominales, y, por favor, no in-sista en un camino que no tiene solución.

“Me parece entender que aquí hayuna clara mayoría que no acepta otra for-mulación de este documento que nosea en la categoría de ‘miscelánea’,‘informativo’, etcétera.”

Se produce otro intervalo para consul-tas, se producen intervenciones otra vezde la compañera Claudia, de los bolivia-nos, los nicaragüenses, los sudaneses,Tuvalu ha intervenido en otro momento,otros países en desarrollo también.

Hay que comprender que muchos paí-ses en desarrollo, sobre todo las peque-ñas islas, que respetamos profunda-mente y que resistieron, se opusieron, de-fendieron su verdad, siendo economíaspequeñas, muy vulnerables, estaban enun dilema atroz: si aprobaban el docu-mento, sabían que era cerrar el caminoal futuro; pero si no aprobaban el docu-mento, sabían que no verían un centavode los fondos que les son imprescindi-bles para sobrevivir.

Apareció entonces la fórmula detomar notas del documento (Muestrandocumento). El único documento apro-bado en la Cumbre de Copenhague eseste papel. Este papel dice: “La Con-ferencia de las Partes toma nota delAcuerdo de Copenhague 2009.” Esdecir, “toma nota”, y miren lo demás quese acuerda, en blanco, vacío.

¿Qué quiere decir “tomar nota”?Tomar nota quiere decir, en DerechoInternacional, reconocer conocimiento,darse por enterado de que algo existe,no tiene ningún efecto jurídico desde elpunto de vista de Derecho Internacional,no significa anuencia, no significa acuer-do, no significa apoyo, no significa reco-nocimiento, no significa acogida, no sig-nifica bienvenida, que son las palabrasque se utilizan usualmente en ingléspara referirse a un documento.

Vamos a la diapositiva siguiente: Verán aquí que donde se habla del

tema aparece una pequeña nota quedice: “Los países han acordado el Acuer-do de Copenhague”, y aquí aparece unpequeño paréntesis que dice: “Listadode las partes.” ¿Qué quiere decir eso?Quiere decir que en el documento estede Copenhague va a quedar para la his-toria el nombre de los 27 países queparticiparon en el proceso de adopciónde este documento.

¿Qué es lo que decidió la Cumbre deCopenhague? Simplemente enterarsede que estos 27 países dijeron tal cosa,escribieron tal papel. Y hay que decirque ese papel fue el resultado de ladefensa de los intereses de los paísesen desarrollo por las economías emer-gentes: China, Brasil, India, Sudáfrica;por los países menos adelantados,representados allí por un país africano;por las pequeñas islas, representadaspor un país caribeño; por el Grupo de los77, de alguna manera representado allípor Sudán, que hicieron un gran esfuer-zo por vencer la resistencia y no pudie-ron frente a la presión norteamericana.

Son las 10:00 de la mañana, el Pri-mer Ministro danés se ha ido horas an-tes, ha abandonado eso. Antes habíanofrecido renunciar a la presidencia de laconferencia en favor de la siguiente, quees México, y es Bahamas, un pequeñopaís insular, quien toma la conducciónde la sesión, y rápidamente presentaesta fórmula, sin tiempo para que nadiediga nada. Lee la fórmula, y la fórmulaque lee dice: “La Conferencia de las Par-tes decide tomar nota”, da un golpe demallete. Hay que volver a protestar paradecir: “No, la palabra ‘decisión’ no sepuede usar, porque se sabe que la pala-bra ‘decisión’ está dirigida a engañar ala opinión pública”, y entonces se quitala palabra ‘decisión’, otra escaramuza, yfinalmente se da a las 10:30 de lamañana el golpe de mallete que pone final espurio proceso del llamado Acuerdode Copenhague, y la conferencia seempieza a ocupar de otros temas.

Yo me marcho ya, viajo para acáacompañando al compañero vicepresi-dente Lazo, se quedan los demás com-pañeros, y a las 12:00 del día, bajo lapresidencia de una pequeña isla delPacífico, se reabre —una cosa insóli-ta— por tercera vez lo acordado, yentonces se pretende incorporar a ladecisión de la Conferencia de las Par-tes, una fórmula que permita tomaradhesión, hacer adhesión al documen-to. Porque, evidentemente, los queestaban en esta lista, sobre todo susgrandes autores, los norteamericanosbásicamente, se dan cuenta de que es

precaria la posición de ellos de decir: elAcuerdo de Copenhague nada más estáadoptado por veintipico de países, yentonces pretenden cambiar el pasado,cambiar la historia y abrir el Acuerdo deCopenhague a adhesión, para venir tresdías después y decir: “Ciento ochenta ydos países firmaron el Acuerdo de Co-penhague.” Una gran batalla procesal,que encabezan los compañeros nues-tros que quedaron allí, y finalmente seaborta esa discusión aproximadamentea las 12:00 del día; es decir, dura de10:30, aproximadamente, hasta las12:00 del día.

Así terminó una farsa antidemocráti-ca, excluyente, arbitraria, caracterizadapor la prohibición de acceso a las orga-nizaciones no gubernamentales y por unabrutal represión contra más de 100 000manifestantes, con más de 1 000 dete-nidos. La prensa europea no ha publica-do cuántos heridos se produjeron allí, nohe visto editoriales sobre la represiónbrutal,no he visto cables de las agenciasque tanto se ocupan de estos temascuando ocurre en algún país del Sur; pe-ro han quedado para la historia el testi-monio de 46 000 jóvenes europeos fun-damentalmente, siendo golpeados concachiporras, por “extraterrestres”, vesti-dos con escafandras antimotines, deuna manera brutal en una capital de laculta Europa.

Perdónenme que haya sido tan largo,más largo de lo que había previsto. Pue-do responder preguntas exclusivamentesobre este tema.

Moderadora.— Los corresponsalesinteresados en preguntar, por favor...

Miguel Hernández (Sol de México).—Usted mencionaba que México será lapróxima sede. ¿Qué opinión usted tienesobre esta perspectiva del foro de Méxi-co, después de estas experiencias aho-ra en Copenhague, y si hay algún interéspor parte del Secretario General de lasNaciones Unidas, o alguna invitaciónque Cuba le haya hecho, para que visitenuestro país, para, entre otros aspectos,seguir profundizando sobre este tema?

Bruno Rodríguez.— Ha sido acordadopreviamente por la Conferencia de lasPartes, que la 16 Conferencia se pro-duzca en México a finales del año 2010.

México,su delegación técnica,que fuecon la que nos relacionamos en este pro-ceso, hizo un compromiso constructivohasta último momento, tratando de reen-carrilar este proceso imposible de salvar.

Yo creo que el destino de este proce-so de negociación es incierto, dada lasituación de secuestro que ha impuestobásicamente Estados Unidos. Confíoen los Estados miembros de la confe-rencia de las partes,en la disposición desu Secretaría ejecutiva, en particular susecretario ejecutivo, señor Ivo de Boer.Confío en la gestión del Secretario Gene-ral de las Naciones Unidas, y estoy con-vencido de que Copenhague ha sido unpaso atrás, pero que habría sido muchí-simo más grave convalidar ese pasoatrás con un acuerdo de la Conferenciade las Partes, que el hecho de que haquedado al desnudo ante la historia,ante la opinión pública mundial, ante laopinión pública de cada uno de sus pro-

pios países, en particular con los movi-mientos ambientalistas, la posición delos gobiernos de los países desarrolla-dos que abortaron el resultado de estaconferencia.

Cuba seguirá cooperando con elSecretario General en todos sus esfuer-zos. El Secretario General cuenta conuna invitación permanente para visitar anuestro país, será bienvenido, y dehecho fue invitado el pasado mes dejulio a visitar nuestro país en cualquiermomento.

Willy Gueiser (AP).— Tengo dos pre-guntas, por favor.

Quería saber. El señor presidenteRaúl Castro dijo varios días antes de ter-minar la Cumbre de Copenhague, queiba a ser un fracaso, que no iba a haberacuerdo. Entonces a mí me gustaríasaber si realmente había, de parte delgobierno cubano, voluntad para alcanzarun acuerdo importante.

Mi segunda pregunta es sobre lo querefirió el presidente Castro ayer sobre elcaso del norteamericano que está dete-nido. Me gustaría saber dónde fue deteni-do, si pasó acá en La Habana, qué car-gos está enfrentando específicamente.

También, de parte de la SINA siguendiciendo que ya están pidiendo permisopara ir a visitarlo bajo sus derechos con-sulares y que no han tenido ninguna res-puesta por parte del gobierno cubano.Así que me gustaría, por favor, saber siva a haber permiso en ese caso.

Bruno Rodríguez.— Cuba ha demos-trado históricamente y tiene una ejecu-toria ejemplar de contribución con la cau-sa de la prevención del cambio climáticoy la mitigación de sus efectos. De hechoCuba puede exhibir resultados sobresa-lientes con un rediseño de su sistemade generación y distribución energética,con la búsqueda de fuentes y líneas detrasmisión de energía más eficaces, conla distribución de decenas de millonesde efectos electrodomésticos ahorrado-res de electricidad, con un programaambicioso de sustitución de bombillosineficientes energéticamente por bombi-llos ahorradores; dispone, además, decapacidades adicionales de generaciónno contaminantes. Con estas medidasha prevenido, ha logrado no producir laemisión de cientos de millones de tone-ladas de C02 solo en los últimos tresaños. Es un programa exitoso que Cubaha puesto, incluso, a disposición deotros países en desarrollo, que funcionacon efectividad en algunos países comoVenezuela, algunos países latinoameri-canos, caribeños, a partir de que es undiseño cubano poco costoso, al alcancede países en desarrollo, y, al mismotiempo, extremadamente efectivo, se-gún nuestros resultados.

Cuba pudo resolver graves escasecesy amenazas de apagones hace variosaños, precisamente con este programaambicioso que está en marcha, cuyosresultados finales se expresarán en todosu potencial en los años venideros, y esun importantísimo ejemplo de mitigaciónque demuestra cuánto no podría hacer-se con pocos recursos que deberíanaportar los países desarrollados.

En segundo lugar, Cuba tiene un reco-

Cambio climático 25

nocido prestigio en los procesos multila-terales relacionados con el cambio cli-mático y, en particular, en la Conferenciade las Partes, por su permanente posi-ción constructiva y flexible.

Durante su presidencia del Movimien-to de Países No Alineados, durante eldesarrollo de la Cumbre Sur del Grupode los 77, que se efectuó en Cuba en elaño 2000, y en general, Cuba se ha dis-tinguido, especialmente, por sacrificarintereses y posiciones nacionales enaras de intereses colectivos de los paí-ses del Sur; sus niveles de cooperacióninternacional son reconocidos ya en elárea del medio ambiente, y no solo losya emblemáticos como en los camposde la salud y la educación.

Pero era un secreto a voces que lospaíses desarrollados impedirían unacuerdo en la Cumbre de Copenhague,porque todos los datos —y había datossuficientes— indicaban una completafalta de voluntad política para asumir, pri-mero, un acuerdo vinculante. Es el pri-mer fracaso de Copenhague: no susti-tuye al Protocolo de Kyoto, que es vincu-lante, por un acuerdo vinculante.

Además, queda claro, en las posicio-nes demagógicas, engañosas que algu-nos líderes internacionales, sobre todode países europeos y de otros paísesdesarrollados, que “en esta conferencialos montes iban a parir un ratón”, comoha dicho alguna prensa, aun en el casode un final feliz, un happy end, en el quetodo el mundo estuviera de acuerdo conun papel que no dijera nada.

En tercer lugar, sabemos que las mis-mas causas que determinan que los paí-

ses desarrollados no hayan cumplido loscompromisos de financiamiento de Kyo-to, permiten asegurar desde ya que novan a cumplir los compromisos de finan-ciamiento que adquieran en el períodoulterior de supuestas negociaciones.Veremos cómo cumplen estos magros30 000 millones de dólares, que cuan-do uno dice 30 000 millones de dólaresestá diciendo 10 000 millones de dóla-res anuales, y estamos hablando de paí-ses que han gastado 12 millones demillones de dólares salvando bancos.Los manifestantes, con razón, decían:“Si el clima fuera un banco, lo habríansalvado ya.” Era una de sus consignasmás repetidas.

Nadie podría creer, ni los más inge-nuos, que el mercado va a resolver esteproblema, y sería muy difícil creer querealmente haya importantes avances enmitigación y adaptación y, sobre todo, enreducción de emisiones de carbono porlos grandes emisores de carbono histó-ricamente, y los que mayores per cápitade emisiones de carbono tienen hoy,queson los países desarrollados, en mediode las condiciones ciegas del mercado.

El clima es incompatible con los pa-trones de producción y consumo delcapitalismo desarrollado,es una realidad.Se intentará tapar el Sol con un dedo,pero es una realidad.

Moderadora.— Andrea, ¿mantienes túinterés en preguntar? (Le dice que no.)

Shasta Darlington, de CNN.Shasta Darlington (CNN).— Voy a re-

petir la pregunta de mi colega sobre ladetención del estadounidense, que elpresidente Raúl Castro mencionó ayer, si

hay más detalles sobre el delito quehubiera hecho, si los oficiales estadou-nidenses van a tener acceso consular ya quién estaba entregando este equiposatelital de comunicaciones.

Gracias, Ministro.Bruno Rodríguez.- Yo les he rogado

concentrarnos en el tema de esta con-ferencia de prensa, que es realmente untema grave; no solo grave,porque nos vala vida a todos los que habitamos el pla-neta, en particular, los primeros en morir—de hecho ya están muriendo— sonlos millones de habitantes de países delTercer Mundo. Es un tema realmentedramático.

En segundo lugar,es un tema urgente.Por eso, les pediría concentrarnos en

este tema, y estoy dispuesto en los próxi-mos días a responder cualquier pregun-tar sobre cualquier otro tema.

Arleen Rodríguez.— Sí,me parece querealmente lo más importante es lo queustedes estaban tratando de discutir enCopenhague.

El ALBA como agrupación de países yel Grupo de los 77, más allá de Sudán,¿han acordado acciones posteriores envísperas de lo que puede ser México ofue, digamos, un momento coyunturalfrente al desafío que representaba al delos más poderosos allí en Copenhague?

Bruno Rodríguez.— En la Cumbre delos Países del ALBA, de La Habana, seadoptó una declaración concertadasobre el Cambio Climático y la Confe-rencia de Copenhague,a la cual ustedespueden acceder, y recoge las posicionesdel ALBA con relación a este tema, queson muy avanzadas, y recoge también la

advertencia del fracaso en la Conferen-cia de las Partes de Copenhague.

Puedo decir que varios países del ALBAtuvieron una participación destacada enesta noche fatídica y larga,en la cual, porsupuesto, no hubo tiempo de concertarposiciones, etcétera, sino de participarbásicamente en capacidad nacional;pero puedo decir que junto a otros paísesrepresentativos de los países en des-arrollo afrontaron este intento de impo-ner a los países del Sur un documentototalmente lejano de las expectativas,destinado a engañar a la opinión pública,carente de cualquier compromiso, queaboliría el Protocolo de Kyoto en la prác-tica y que, al mismo tiempo, contiene for-mulaciones que comprometen la vida enel planeta, la supervivencia del planeta.

Puedo decir que, en este proceso,algunos países del ALBA, como los quehe mencionado aquí, tuvieron un verda-dero liderazgo, que fue reconocido allí ysirvieron de voceros para algunos paí-ses que se expresaron, o, incluso, paraotros países que no se expresaron; por-que es conocido la consecuencia quetiene, en términos de las relacionesinternacionales injustas, discriminato-rias, muchas veces avasalladoras de lospaíses del Norte, el asumir posicionesde rebeldía como las que, afortunada-mente, prevalecieron en esta conferen-cia cumbre, que permitieron abortar loque habría sido un verdadero engaño ala opinión pública mundial.

Moderadora.— Ministro,muchas gra-cias, y muchas gracias a todos por supresencia.

Tabloide Especial No. 126

Reflexiones del compañero Fidel

El derecho de la humanidad a existirEl cambio climático está causando ya

considerable daño y cientos de millonesde pobres están sufriendo las conse-cuencias.

Los centros de investigaciones másavanzados aseguran que queda muypoco tiempo para evitar una catástrofeirreversible. James Hansen, del InstitutoGoddard de la NASA, asegura que unnivel de 350 partes del dióxido de car-bono por millón es todavía tolerable; hoysobrepasa sin embargo la cifra de 390 yse incrementa a ritmo de 2 partes pormillón cada año, rebasando los nivelesde hace 600 mil años. Las últimas dosdécadas han sido, cada una de ellas, lasmás calurosas desde que se tienen noti-cias del registro. El mencionado gasaumentó 80 partes por millón en losúltimos 150 años.

El hielo del Mar Ártico, la enormecapa de dos kilómetros de espesor quecubre Groenlandia, los glaciares de Amé-rica del Sur que nutren sus fuentes prin-cipales de agua dulce, el volumen colo-sal que cubre la Antártida, la capa queresta del Kilimanjaro, los hielos quecubren el Himalaya y la enorme masahelada de Siberia se están derritiendovisiblemente. Científicos notables temensaltos cuantitativos en estos fenómenosnaturales que originan el cambio.

La humanidad puso grandes espe-ranzas en la Cumbre de Copenhague,después del Protocolo de Kyoto suscritoen 1997,que entró en vigor el año 2005.El estruendoso fracaso de la Cumbre diolugar a bochornosos episodios querequieren el debido esclarecimiento.

Estados Unidos, con menos del 5%de la población mundial emite el 25%del dióxido de carbono. El nuevo Presi-dente de Estados Unidos había prometi-do cooperar con el esfuerzo internacio-nal para enfrentar un problema que afec-ta a ese país tanto como al resto delmundo. Durante las reuniones previas ala Cumbre, se hizo evidente que los diri-gentes de esa nación y los de los paísesmás ricos maniobraban para hacer caerel peso de los sacrificios sobre los paí-ses emergentes y pobres.

Gran número de líderes y miles derepresentantes de los movimientossociales e instituciones científicas deci-didos a luchar por preservar la humani-dad del mayor riesgo de su historia, acu-dieron a Copenhague invitados por losorganizadores de la Cumbre. Omito refe-rirme a detalles sobre la brutalidad de lafuerza pública danesa, que arremetiócontra miles de manifestantes e invita-dos de los movimientos sociales y cien-tíficos que acudieron a la capital de Dina-marca para concentrarme en los aspec-tos políticos de la Cumbre.

En Copenhague reinó un verdaderocaos y sucedieron cosas increíbles. Alos movimientos sociales e instituciones

científicas no les permitieron asistir a losdebates. Hubo Jefes de Estado y Gobier-no que no pudieron siquiera emitir susopiniones sobre vitales problemas. Oba-ma y los líderes de los países más ricosse adueñaron de la conferencia con lacomplicidad del gobierno danés. Losorganismos de Naciones Unidas fueronrelegados.

Barack Obama,que llegó el último díade la Cumbre para permanecer allí solo12 horas, se reunió con dos grupos deinvitados escogidos “a dedo” por él ysus colaboradores. Junto a uno de ellosse reunió en la sala del plenario con elresto de las más altas delegaciones.Hizo uso de la palabra y se marchó deinmediato por la puerta trasera. En eseplenario, excepto el pequeño gruposeleccionado por él, se les prohibió a losdemás representantes de los estadoshacer uso de la palabra. En esa reunión,a los Presidentes de Bolivia y de la Repú-blica Bolivariana de Venezuela se les per-mitió hablar, porque al Presidente de laCumbre no le quedó otra alternativa queconcederles el uso de la palabra, ante elreclamo enérgico de los presentes.

En otra sala contigua, Obama reunióa los líderes de los países más ricos,varios de los Estados emergentes másimportantes y dos muy pobres. Presentóun documento, negoció con dos o tresde los países más importantes, ignoró ala Asamblea General de Naciones Uni-das,ofreció conferencias de prensa,y semarchó como Julio César en una de suscampañas victoriosas en Asia Menor,que lo llevó a exclamar: Llegué, vi y vencí.

El propio Gordon Brown, Primer Minis-tro del Reino Unido,había afirmado el 19de octubre: “Si no llegamos a un acuer-do en el curso de los próximos meses,no debemos tener duda alguna de que,una vez que el crecimiento no controladode las emisiones haya provocado daños,ningún acuerdo global retrospectivo enalgún momento del futuro podrá desha-cer tales efectos. Para ese entonces se-rá irremisiblemente demasiado tarde.”

Brown concluyó su discurso con dra-máticas palabras: “No podemos darnosel lujo de fracasar. Si fracasamos ahora,pagaremos un precio muy alto. Si actua-mos ahora, si actuamos de conjunto, siactuamos con visión y determinación, eléxito en Copenhague estará todavía anuestro alcance. Pero si fracasamos, elplaneta Tierra estará en peligro, y para elplaneta no existe un Plan B.”

Ahora declaró con arrogancia que laOrganización de Naciones Unidas nodebe ser tomada como rehén por unpequeño grupo de países como Cuba,Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Tuvalu, ala vez que acusa a China, India, Brasil,Sudáfrica y otros Estados emergentesde ceder a las seducciones de EstadosUnidos para suscribir un documento que

lanza al cesto de basura el Protocolo deKyoto y no contiene compromiso vincu-lante alguno por parte de Estados Uni-dos y sus aliados ricos.

Me veo obligado a recordar que laOrganización de Naciones Unidas nacióhace apenas seis décadas, después dela última Guerra Mundial. Los paísesindependientes no rebasaban entoncesla cifra de 50. Hoy la integran más de190 Estados independientes, luego queel odioso sistema colonial dejó de existirpor la lucha decidida de los pueblos. A lapropia República Popular China durantemuchos años se le negó su pertenenciaa la ONU, y un gobierno títere ostentabasu representación en esa institución yen su privilegiado Consejo de Seguridad.

El apoyo tenaz del creciente númerode países del Tercer Mundo fue indis-pensable en el reconocimiento interna-cional de China, y un factor de sumaimportancia para que Estados Unidos ysus aliados de la OTAN le reconocieransus derechos en la Organización deNaciones Unidas.

En la heroica lucha contra el fascis-mo, la Unión Soviética había realizado elmayor aporte. Más de 25 millones desus hijos murieron, y una enorme des-trucción asoló el país. De esa luchaemergió como superpotencia capaz decontrapesar en parte el dominio absolu-to del sistema imperial de Estados Uni-dos y las antiguas potencias colonialespara el saqueo ilimitado de los pueblosdel Tercer Mundo. Cuando la URSS sedesintegró, Estados Unidos extendió supoder político y militar hacia el Este, has-ta el corazón de Rusia, y su influenciasobre el resto de Europa se incrementó.Nada de extraño tiene lo ocurrido enCopenhague.

Deseo subrayar lo injusto y ultrajantede las declaraciones del Primer Ministrodel Reino Unido y el intento yanki de im-poner, como Acuerdo de la Cumbre, undocumento que en ningún momento fuediscutido con los países participantes.

El Canciller de Cuba,Bruno Rodríguez,en la conferencia de prensa ofrecida el21 de diciembre, afirmó una verdad quees imposible negar; emplearé algunosde sus párrafos textuales: “Quisiera en-fatizar que en Copenhague no hubo acuer-do alguno de la Conferencia de las Par-tes, no se tomó ninguna decisión conrelación a compromisos vinculantes ono vinculantes, o de naturaleza de Dere-cho Internacional, en modo alguno; sim-plemente, en Copenhague no huboacuerdo”

“La Cumbre fue un fracaso y un engañoa la opinión pública mundial. […] quedóal desnudo la falta de voluntad política…”

“…fue un paso atrás en la acción dela comunidad internacional para preve-nir o mitigar los efectos del cambio cli-mático…”

“…el promedio de la temperatura mun-dial podría aumentar en 5 grados…”

De inmediato nuestro Canciller añadeotros datos de interés sobre las posiblesconsecuencias de acuerdo a las últimasinvestigaciones de la ciencia.

“…desde el Protocolo de Kyoto hastala fecha las emisiones de los paísesdesarrollados se elevaron 12,8%… y deese volumen el 55% corresponde a Esta-dos Unidos.”

“Un estadounidense consume, comopromedio, 25 barriles de petróleo anua-les, un europeo 11, un ciudadano chinomenos de dos, y un latinoamericano ocaribeño, menos de uno.”

“Treinta países, incluidos los de laUnión Europea, consumen el 80% delcombustible que se produce.”

El hecho muy real es que los paísesdesarrollados que suscribieron el Proto-colo de Kyoto aumentaron drásticamen-te sus emisiones. Quieren sustituir aho-ra la base adoptada de las emisiones apartir de 1990 con la del 2005, con locual Estados Unidos, el máximo emisor,reduciría a solo 3% sus emisiones de 25años antes. Es una desvergonzada bur-la a la opinión mundial.

El Canciller cubano,hablando en nom-bre de un grupo de países del ALBA,defendió a China, India, Brasil, Sudáfricay otros importantes Estados de econo-mía emergente, afirmando el conceptoalcanzado en Kyoto de “‘responsabilida-des comunes,pero diferenciadas,quieredecir que los acumuladores históricos ylos países desarrollados, que son losresponsables de esta catástrofe, tienenresponsabilidades distintas a las de lospequeños Estados insulares o a las delos países del Sur, sobre todo los paísesmenos desarrollados…”

“Responsabilidades quiere decirfinanciamiento; responsabilidades quie-re decir transferencia de tecnología encondiciones aceptables, y entonces Oba-ma hace un juego de palabras, y en vezde hablar de responsabilidades comu-nes pero diferenciadas, habla de ‘res-puestas comunes, pero diferenciadas’.”

“…abandona el plenario sin dignarsea escuchar a nadie, ni había escuchadoa nadie antes de su intervención.”

En una conferencia de prensa poste-rior, antes de abandonar la capital dane-sa, Obama afirma: “Hemos producidoun sustancioso acuerdo sin precedenteaquí en Copenhague. Por primera vez enla historia, las mayores economíashemos venido juntas a aceptar respon-sabilidades.”

En su clara e irrebatible exposición,nuestro Canciller afirma: “¿Qué quiere de-cir eso de que ‘las mayores economíashemos venido juntas a aceptar nuestrasresponsabilidades’? Quiere decir queestán descargando un importante pesode la carga que significa el financia-

Cambio climático 27

miento para la mitigación y la adaptaciónde los países sobre todo del Sur al cam-bio climático, sobre China, Brasil, India ySudáfrica; porque hay que decir que enCopenhague se produjo un asalto, unatraco contra China, Brasil, India, Sudá-frica y contra todos los países llamadoseufemísticamente en desarrollo.”

Estas fueron las palabras contunden-tes e irrebatibles con las que nuestro Can-ciller relata lo sucedido en Copenhague.

Debo añadir que, cuando a las 10 dela mañana del día 19 de diciembre nues-tro vicepresidente Esteban Lazo y el Can-ciller cubano se habían marchado, seproduce el intento tardío de resucitar almuerto de Copenhague como un acuer-do de la Cumbre. En ese momento noquedaba prácticamente ningún Jefe deEstado ni apenas Ministros. De nuevo ladenuncia de los restantes miembros de

las delegaciones de Cuba, Venezuela,Bolivia, Nicaragua y otros países derro-taron la maniobra. Así finalizó la inglorio-sa Cumbre.

Otro hecho que no puede olvidarsefue que en los momentos más críticosde ese día,en horas de la madrugada,elCanciller de Cuba, en unión de las dele-gaciones que libraban su digna batalla,le ofrecieron al Secretario General de Na-ciones Unidas, Ban Ki-moon, su coope-ración en la lucha cada vez más dura quese estaba librando,y en los esfuerzos quedeben llevarse a cabo en el futuro parapreservar la vida de nuestra especie.

El grupo ecológico Fondo Mundialpara la Naturaleza (WWF) advirtió que elcambio climático quedaría fuera de con-trol en los próximos 5 a 10 años,si no serecortan drásticamente las emisiones.

Pero no hace falta demostrar lo esen-

cial de lo que aquí se afirma sobre loque hizo Obama.

El Presidente de Estados Unidosdeclaró el miércoles 23 de diciembre quelas personas tienen razón en estar de-cepcionadas por el resultado de la Cum-bre sobre el Cambio Climático. En entre-vista por la cadena de televisión CBS, elmandatario indicó que “‘en vez de ver untotal colapso, sin que hubiese hecho na-da, lo que hubiera sido un gigante retro-ceso, al menos pudimos mantenernosmás o menos donde estábamos’…”

Obama —afirma el despacho noticioso—es el más criticado por aquellos paísesque, de forma casi unánime, sienten queel resultado de la Cumbre fue desastroso.

La ONU ahora está en un aprieto.Pedirles a otros países que se adhieranal arrogante y antidemocrático acuerdosería humillante para muchos Estados.

Continuar la batalla y exigir en todaslas reuniones, particularmente las deBonn y de México, el derecho de la hu-manidad a existir, con la moral y la fuer-za que nos otorga la verdad, es a nues-tro juicio el único camino.

Fidel Castro RuzDiciembre 26 de 20098 y 15 p.m.

Acordamos que se requieren profun-das reducciones en las emisiones globa-les de conformidad con la ciencia, y co-mo lo documentó el IV Informe de Eva-luación del Panel Intergubernamentalde Cambio Climático,con vista a reducirlas emisiones globales para limitar el in-cremento de la temperatura global pordebajo de 2 grados celsius, y realizar ac-ciones para cumplir con este objetivo demanera consistente con la ciencia y so-bre la base de la equidad. Debemos coo-

Párrafos tomados del Acuerdo de Copenhague

perar para alcanzar el máximo nivel delas emisiones globales y nacionales tanpronto como sea posible, reconociendoque el período para alcanzar ese nivelmáximo será más largo en los países endesarrollo y teniendo en cuenta que eldesarrollo económico y social y la erra-dicación de la pobreza son las primerasy esenciales prioridades de los paísesen desarrollo, y que una estrategia dedesarrollo baja en emisiones es indispen-sable para el desarrollo sostenible.

Tras la ambigüedad y confusión gene-rada por el uso de algunos términos, estees un párrafo cuya negativa trascendenciano pasa inadvertida.El uso del plural “acor-damos” y la falta de distinción para refe-rirse a las reducciones de emisiones glo-bales de gases de efecto invernadero,da laidea de que se mezcla con toda intenciónlas reducciones obligatorias que tendríanque hacer los países desarrollados de acuer-do con los compromisos internacionalesvigentes y su responsabilidad histórica, con

las acciones voluntarias de mitigaciónque harían los países en desarrollo.

En ese contexto, ¿qué significa la coo-peración para alcanzar el máximo nivelde las emisiones globales y nacionalestan pronto como sea posible,sin una refe-rencia expresa al principio de las respon-sabilidades comunes pero diferenciadas?Ni más ni menos, que los países desarro-llados, que comenzaron a emitir gases deefecto invernadero a la atmósfera desde

Tabloide Especial No. 128

el comienzo de la revolución industrial in-glesa en 1750, pretenden equiparar estaresponsabilidad llamada histórica con laque podrían tener los países en desarro-llo, cuyo proceso de industrialización sólocomenzó en la segunda mitad del sigloXX, mientras que muchos ni siquiera pue-de decirse que hayan iniciado un verda-dero proceso de industrialización, que ne-cesariamente estaría siempre acompa-ñado de un mayor desarrollo energéticoy, por tanto, de un aumento en sus nive-les de emisión. En otras palabras, estepárrafo apunta al establecimiento de unnuevo marco de compromisos comunesentre países desarrollados y países en de-sarrollo, obviando de manera flagrante laabsoluta responsabilidad histórica y actualde los países desarrollados con el calen-tamiento global, condenando al Tercer Mun-do al círculo vicioso de la pobreza y el sub-desarrollo.

Es una clara demostración de transfe-rencia de responsabilidades de los prime-ros hacia las principales víctimas del cam-bio climático, que se acentúa con la refe-rencia a la determinación de un período oaño pico para los países en desarrollo, sinmencionarse que ello tendría que ser acondición de que los países desarrolladosprovean los recursos financieros adecua-dos y establezcan mecanismos efectivospara el acceso y transferencia de tecno-logía en condiciones preferenciales a lospaíses en desarrollo.De conformidad consus compromisos bajo la Convención, lospaíses desarrollados deben proporcionarrecursos financieros y tecnológicos quecubran los costos totales del esfuerzo yde la declinación posterior de las emisio-

nes de los países en desarrollo. Es decir,recursos financieros y tecnológicos reales,y no migajas que después anularían me-diante las diversas formas de expoliar losrecursos del Sur.

Aún más grave, la meta de restringir elincremento de la temperatura en 2º Cel-sius, significa admitir complacientementeque se producirán afectaciones irreversi-bles para el planeta, comprometiéndoseademás la existencia de muchos peque-ños Estados insulares en desarrollo, y denumerosas zonas costeras bajas comoen el caso del archipiélago cubano.

Más de 100 países en todo el mundo,entre ellos los pequeños Estados insula-res y los países menos adelantados, handemandado que el esfuerzo de la comu-nidad internacional debe estar dirigido alimitar el incremento de la temperaturaglobal por debajo de 1,5º C. Un aumentode 2º C a nivel global podría significar enel caso de África un incremento real de latemperatura en el orden de los 3º C, queal decir del Arzobispo sudafricano Des-mond Tutu implicaría, entre otras conse-cuencias, que entre 70 y 250 millones depersonas adicionales dejarían de teneracceso al agua potable para el año 2020,y que entre 350 y 600 millones no dis-frutarán ese servicio para el 2050, altiempo que los costos de la adaptaciónpor el aumento del nivel del mar ascen-derían a alrededor del 5 al 10 por cientodel Producto Interno Bruto de los paísesafricanos.Según señala el propio DesmondTutu,“una temperatura global de 2º C con-denaría a África a la incineración… Estaes una cuestión moral, es una cuestión

de justicia, especialmente con los másdébiles y vulnerables”…

Las Partes del Anexo I se comprome-ten a implementar individual o conjunta-mente las metas de reducción cuantifi-cadas a escala de toda la economía pa-ra el 2020, las cuales serán remitidas ala Secretaría hasta el 31 de enero de2010 por las Partes del Anexo I en elformato del Apéndice I para su compi-lación en un documento de informa-ción. Las Partes del Anexo I que sonPartes del Protocolo de Kyoto fortale-cerán las reducciones de emisiones ini-ciadas por el Protocolo de Kyoto. Lasreducciones y el financiamiento otorga-do por los países desarrollados seránmedidos, informados y verificados deacuerdo con las directrices existentesy otras directrices futuras que adopte laConferencia de las Partes, y aseguraráque la contabilidad de esos objetivos ydel financiamiento sea riguroso, robus-to y transparente.

Nota: Los países del Anexo I de la Con-vención Marco de las Naciones Unidas so-bre Cambio Climático son los países desa-rrollados que eran miembros de la Orga-nización de Cooperación y Desarrollo Eco-nómico (OCDE), en 1992,más aquellos paí-ses Partes en la Convención que se en-contraban en proceso de transición haciauna economía de mercado.

Mientras que la Conferencia de las Par-tes (máximo órgano deliberativo y de to-ma de decisiones) del Protocolo de Kyotodeterminó el monto global de las reduc-ciones de emisiones de gases de efecto

invernadero para los países desarrolladosdurante el primer período fijado en eseProtocolo, según el texto del Acuerdo deCopenhague, ¿cuáles serían los nuevoscompromisos de reducción que adopta-rían los países industrializados?, ¿cómo?,¿cuándo?, omisión total. Parecería que yano es necesario el establecimiento de uncompromiso numérico de reducción de emi-siones para los países que cargan con laresponsabilidad histórica por el calenta-miento global. ¡Vaya retroceso compara-do con el Protocolo de Kyoto! De acuerdocon este texto, lo que antes había sidouna prerrogativa de la Conferencia de lasPartes, ahora se deja a la libre determi-nación de cada país desarrollado, lo queesencialmente responde a la presión ejer-cida por los Estados Unidos y a la decisiónde ese país de no someterse a un com-promiso internacional de reducción deemisiones internacionalmente acordado.

En adición, el texto es inconsistentecon el Plan de Acción de Bali, del cual sur-gió el mandato para negociar un acuerdode cooperación a largo plazo para enfren-tar el cambio climático. La ausencia dereferencia a que los compromisos que sefijen los países desarrollados debe serparte de un segundo período de compro-misos bajo el Protocolo de Kyoto, explicitala determinación de esos países de sabo-tear la continuidad de dicho Protocolo,que es el único instrumento internacionalque regula la reducción de emisiones porparte de los países desarrollados. Otrasinconsistencias con el Plan de Acción deBali se reflejan en la mención de objeti-vos individuales y agregados, que consti-tuye un tema de discusión dentro de las

Cambio climático 29

negociaciones para el establecimiento deun segundo período de compromisos ba-jo el Protocolo de Kyoto.

De la misma manera, la omisión deuna mención expresa al año 1990 comola base para el cálculo de los nuevos obje-tivos de reducción de los países desarro-llados, también encierra el peligro de mo-dificar el año de base fijado por el Proto-colo de Kyoto, con el fin de satisfacer laexigencia de los Estados Unidos y otrospaíses desarrollados que ejercen ingentespresiones para la adopción del año 2005como base del período de cálculo, lo queequivaldría a que se les condonase todoel aumento que experimentaron sus nive-les de emisiones entre los años 1990 y2005. Según el texto del acuerdo y de losanexos que aparecen a continuación delmismo, cuando menos el nuevo marcode compromisos que se pretende imponercontemplaría dos años de base diferentes,con lo cual se dificultaría la comparaciónde los esfuerzos de reducción que haríanlos países desarrollados en su conjunto.

Deberá proveerse a los países endesarrollo recursos financieros incre-mentados, nuevos y adicionales, prede-cibles y adecuados, así como un mejoracceso, de acuerdo con las disposicio-nes relevantes de la Convención, parapermitir y apoyar acciones mejoradasde mitigación, incluyendo recursos fi-nancieros sustanciales para reducir lasemisiones derivadas de la deforesta-ción y la degradación de los bosques(REDD- plus), la adaptación, el desarro-llo y la transferencia de tecnologías y lacreación de capacidad para mejorar la

implementación de la Convención. Elcompromiso colectivo de los países de-sarrollados es proveer recursos nuevosy adicionales, incluyendo para el mane-jo de los bosques y las inversiones a tra-vés de las instituciones internaciona-les, por un monto cercano a los 30 billo-nes de dólares para el período 2010-2012 con una asignación balanceadaentre la adaptación y la mitigación. Elfinanciamiento para la adaptación serápriorizado para los países en desarrollomás vulnerables como los países me-nos adelantados, los pequeños Estadosinsulares en desarrollo y África. En elcontexto de acciones significativas demitigación y de la transparencia en laimplementación, los países desarrolla-dos se comprometen a un objetivo demovilización conjunta de recursos por100 billones de dólares anuales hastael año 2020 para responder a las nece-sidades de los países en desarrollo.Estos fondos provendrán de una ampliavariedad de fuentes, públicas y priva-das, bilaterales y multilaterales, inclu-yendo fuentes alternativas de financia-mientos…

La mitigación se refiere básicamente ala reducción de emisiones de gases deefecto invernadero y a la absorción de es-tas emisiones a través de la captura bioló-gica, como es la absorción del dióxido decarbono por sumideros como los bosques,o la captura geológica en depósitos sub-terráneos u oceánicos. Aquí el conceptode mitigación se usa en un sentido dife-rente a como lo usamos al referirnos alas políticas que promueven la reducciónde impactos adversos a desastres natu-

rales, como los huracanes, las grandesprecipitaciones y la sequía. En el caso delcambio climático se refiere a mitigar lascausas del mismo.

La adaptación es el proceso de ajuste delos sistemas humanos o naturales en res-puesta a estímulos climáticos actuales oesperados, para atenuar los efectos perju-diciales o aprovechar los que resulten be-neficiosos.La capacidad de los sistemas pa-ra ajustarse respondiendo a tales estímulosse define como capacidad de adaptación.

La muy magra meta de financiamien-to que los países desarrollados decidieronanticipar con el objetivo de forzar un acuer-do totalmente desbalanceado e inequita-tivo, resultó de una larga y tensa negocia-ción en la que estos países desplegarontodo su arsenal de presiones para concluirun texto lo más impreciso y menos com-prometido posible.

La meta de proveer un financiamientode corto plazo por 30 000 millones de dó-lares, que en un principio comenzó a con-siderarse como un posible compromisoindividual de cada país desarrollado y ter-minó siendo un objetivo colectivo,no es laexpresión de la voluntad de esos paísesde proveer esos recursos, sino sólo de sudisposición de participar en la moviliza-ción de un monto aproximado a ese total.

Asimismo, la referencia a los 100 milbillones de dólares anuales hasta el año2020, tampoco refleja un compromiso se-rio por parte de los países industrializados,ni está basado en las obligaciones con-traídas por éstos bajo la Convención ni en

sus capacidades económicas y financieras.Es decir, aquí tampoco dice que los paí-ses desarrollados van a proveer 100 000millones de dólares, lo cual es insuficien-te, a partir de que las estimaciones de lasnecesidades de los países en desarrolloestán situadas en el orden de los 300 milmillones de dólares anuales, según esti-maciones conservadoras.

Incluso, otras estimaciones dan cuen-ta que las medidas de adaptación y miti-gación que deberán emprender los paí-ses en desarrollo tendrían un costo supe-rior a los 600 000 mil millones de dólares.Entonces, ¿por qué tendrían los pobresdel mundo y no los contaminadores queabsorber parte de la carga de financia-miento?

En resumen, los 100 billones de dóla-res ofrecidos por los Estados Unidos, laUnión Europea y otros países desarrolla-dos no son en realidad 100 billones.Ellosno están prometiendo que proveerán esemonto, meramente ofrecen un esfuerzopara ayudar a recaudarlo. Habría que re-cordar, además, que la Unión Europea hadicho que el 20% de los costos deberá sercubierto directamente por los presupues-tos de los propios países en desarrollo,que del 20 al 40% se derivarán de losmercados de carbono y que el restante20-40% será destinado de fuentes públi-cas, a las cuales también los países endesarrollo eventualmente contribuirían através de un llamado “fondo verde”, loque deja totalmente claro que parte de lacarga será transferida al mundo subde-sarrollado. Una vez más la historia del ga-to por la liebre….

Tabloide Especial No. 130

Al cumplirse hace dos días el 51 ani-versario del triunfo de la Revolución, acu-dieron a mi mente los recuerdos deaquel 1ro de Enero de 1959. Ninguno denosotros imaginó nunca la peregrina ideade que transcurrido medio siglo, quepasó volando, lo estaríamos recordandocomo si fuera ayer.

Durante la reunión en el central Orien-te, el 28 de diciembre de 1958, con elComandante en Jefe de las fuerzas ene-migas, cuyas unidades élites estabancercadas y sin escape alguno, este reco-noció su derrota y apeló a nuestra gene-rosidad para buscar una salida decorosaal resto de sus fuerzas. Conocía de nues-tro trato humano a los prisioneros y heri-dos sin excepción alguna. Aceptó el acuer-do que le propuse, aunque le advertí quelas operaciones en curso proseguirían.Pero viajó a la capital e instigado por laembajada de Estados Unidos promovióun golpe de Estado.

Nos preparábamos para los combatesde ese día 1ro de Enero, cuando en lamadrugada llegó la noticia de la fuga deltirano. Se impartieron órdenes al EjércitoRebelde de no admitir el alto al fuego ycontinuar los combates en todos los fren-tes. A través de Radio Rebelde se convo-có a los trabajadores a una Huelga Gene-ral Revolucionaria, secundada de inme-diato por toda la nación. El intento golpis-ta fue derrotado, y en horas de la tardede ese mismo día nuestras tropas victo-riosas penetraron en Santiago de Cuba.

El Che y Camilo recibieron instruccio-nes de avanzar rápidamente por la carre-tera, en vehículos motorizados con susaguerridas fuerzas, hacia La Cabaña y elCampamento Militar de Columbia. El ejér-cito adversario, golpeado en todos losfrentes, no tendría capacidad de resistir.El propio pueblo sublevado, ocupó loscentros de represión y las estaciones depolicía. El día 2, en horas de la tarde,acompañado por una pequeña escolta,me reuní en un estadio de Bayamo conmás de dos mil soldados de los tanques,artillería e infantería motorizada, contralos cuales habíamos estado combatien-do hasta el día anterior. Portaban todavíasu armamento. Nos habíamos ganado elrespeto del adversario con nuestrosaudaces, pero humanitarios métodos deguerra irregular. De este modo, en solocuatro días -después de 25 meses deguerra que reiniciamos con unos pocosfusiles-, alrededor de cien mil armas deaire, mar y tierra y todo el poder del Esta-do quedaron en manos de la Revolución.En solo pocas líneas relato lo ocurridoaquellos días hace 51 años.

Comenzó entonces la principal batalla:preservar la independencia de Cuba fren-te al imperio más poderoso que ha exis-tido, y que nuestro pueblo libró con grandignidad. Me complace hoy observar aaquellos que por encima de increíbles

obstáculos,sacrificios y riesgos,supierondefender a nuestra Patria, y en estosdías, junto a sus hijos, sus padres y susseres más queridos,disfrutan la alegría ylas glorias de cada nuevo año.

En nada se parecen, sin embargo, losdías de hoy a los de ayer. Vivimos unaépoca nueva que no tiene parecido conninguna otra de la historia. Antes los pue-blos luchaban y luchan todavía con honorpor un mundo mejor y más justo, perohoy tienen que luchar,además,y sin alter-nativa posible, por la propia superviven-cia de la especie. No sabemos absoluta-mente nada si ignoramos esto. Cuba es,sin duda, uno de los países políticamen-te más instruido del planeta; había parti-do del más bochornoso analfabetismo, ylo que es peor: nuestros amos yankis y laburguesía asociada a los dueños extran-jeros eran los propietarios de las tierras,los centrales azucareros, las plantas deproductos de bienes de consumo, los al-macenes, los comercios, la electricidad,los teléfonos, los bancos, las minas, losseguros, los muelles, los bares, los hote-les, las oficinas, las casas de vivienda,los cines, las imprentas, las revistas, losperiódicos, la radio, la naciente televisióny todo cuanto tuviera un valor importante.

Los yankis,apagadas las ardientes lla-mas de nuestras batallas por la libertad,se habían arrogado la tarea de pensar porun pueblo que tanto luchó por ser dueñode su independencia, sus riquezas y sudestino. Nada en absoluto,ni siquiera la ta-rea de pensar políticamente, nos perte-necía. ¿Cuántos sabíamos leer y escribir?¿Cuántos llegábamos siquiera al sextogrado? Lo recuerdo especialmente un díacomo hoy, porque ese era el país que sesuponía pertenecía a los cubanos. No ci-to más cosas, porque tendría que incluirmuchas más, entre ellas las mejores es-cuelas, los mejores hospitales, las mejo-res casas, los mejores médicos, los me-jores abogados. ¿Cuántos éramos los queteníamos derecho a ello? ¿Quiénes poseía-mos,salvo excepciones,el derecho naturaly divino de ser administradores y jefes?

Ningún millonario o sujeto rico, sinexcepción, dejaba de ser jefe de Partido,Senador,Representante o funcionario im-portante. Esa era la democracia repre-sentativa y pura que imperaba en nues-tra Patria, excepto que los yankis impu-sieran a su antojo tiranuelos despiada-dos y crueles, cuando convenía más asus intereses para defender mejor suspropiedades frente a campesinos sin tie-rra y obreros con o sin trabajo. Como yanadie habla siquiera de eso, me aventu-ro a recordarlo. Nuestro país forma partede los más de 150 que constituyen elTercer Mundo, que serán los primerosaunque no los únicos destinados a sufrirlas increíbles consecuencias si la huma-nidad no toma conciencia clara, cierta ybastante más rápida de lo que imagina-

mos de la realidad y consecuencias delcambio climático ocasionado por el hom-bre, si no se logra impedirlo a tiempo.

Nuestros medios se comunicaciónmasiva han dedicado espacios a descri-bir los efectos de los cambios climáti-cos. Los huracanes de creciente violen-cia, las sequías y otras calamidades na-turales, han contribuido igualmente a laeducación de nuestro pueblo sobre eltema. Un hecho singular, la batalla entorno al problema climático que tuvo lu-gar en la Cumbre de Copenhague, hacontribuido al conocimiento del inminen-te peligro. No se trata de un riesgo leja-no para el siglo XXII, sino para el XXI, nilo es tampoco solo para la segundamitad de este, sino para las próximasdécadas, en las que ya comenzaríamosa sufrir sus penosas consecuencias.

Tampoco se trata de una simple ac-ción contra el imperio y sus secuaces,que en esto, como en todo, tratan de im-poner sus estúpidos y egoístas intere-ses, sino de una batalla de opinión mun-dial que no se puede dejar a la esponta-neidad ni al capricho de la mayoría desus medios de comunicación. Es unasituación que por fortuna conocen millo-nes de personas honradas y valientes enel mundo, una batalla a librar con lasmasas y en el seno de las organizacio-nes sociales e instituciones científicas,culturales, humanitarias, y otras de ca-rácter internacional, muy especialmenteen el seno de las Naciones Unidas, don-de el Gobierno de Estados Unidos, susaliados de la OTAN y los países más ricostrataron de asestar, en Dinamarca, ungolpe fraudulento y antidemocrático con-tra el resto de los países emergentes ypobres del Tercer Mundo.

En Copenhague, la delegación cuba-na,que asistió junto a otras del ALBA y elTercer Mundo, se vio obligada a una lu-cha a fondo ante los increíbles aconteci-mientos que se originaron con el discur-so del presidente yanki,Barack Obama, ydel grupo de Estados más ricos del pla-neta, decididos a desmantelar los com-promisos vinculantes de Kyoto —dondehace más de 12 años se discutió elpeliagudo problema— y a hacer caer elpeso de los sacrificios sobre los paísesemergentes y los subdesarrollados, queson los más pobres y a la vez los princi-pales suministradores de materias pri-mas y recursos no renovables del plane-ta a los más desarrollados y opulentos.

En Copenhague, Obama se presentóel último día de la Conferencia, iniciada el7 de diciembre. Lo peor de su conductafue que, cuando tenía ya decidido enviar30 mil soldados a la carnicería de Afga-nistán —un país de fuerte tradición inde-pendentista, al que ni siquiera los ingle-ses en sus mejores y más crueles tiem-pos pudieron someter— asistió a Oslopara recibir nada menos que el Premio

Nobel de la Paz. A la capital noruega lle-gó el 10 de diciembre, donde pronuncióun discurso hueco, demagógico y justifi-cativo. El 18, que era la fecha de la últi-ma sesión de la Cumbre, se apareció enCopenhague, donde pensaba permane-cer inicialmente solo 8 horas. El día ante-rior habían llegado la Secretaria de Esta-do y un grupo selecto de sus mejoresestrategas.

Lo primero que hizo Obama fue selec-cionar a un grupo de invitados que reci-bieron el honor de acompañarlo a pro-nunciar un discurso en la Cumbre. El Pri-mer Ministro danés,que presidía la Cum-bre, complaciente y adulón, le cedió lapalabra al grupo que apenas rebasaba15 personas. El jefe imperial merecíahonores especiales. Su discurso fue unamezcla de edulcoradas palabras aliña-das con gestos teatrales, que ya aburrena quienes,como yo,se asignaron la tareade escucharlo para tratar de ser objetivosen la apreciación de sus características eintenciones políticas. Obama impuso asu dócil anfitrión dinamarqués que solosus invitados podían hacer uso de lapalabra, aunque él, tan pronto pronunciólas suyas,hizo «mutis por el foro» por unapuerta trasera, como duende que esca-pa de un auditorio que le había hecho elhonor de escuchar con interés.

Concluida la lista autorizada de orado-res, un indígena aymara de pura cepa,Evo Morales, presidente de Bolivia, queacababa de ser reelecto con el 65% delos votos,exigió el derecho a usar la pala-bra,que le fue concedida ante el aplausoabrumador de los presentes. En solo nue-ve minutos expresó profundos y dignosconceptos que respondían a las palabrasdel ausente Presidente de Estados Uni-dos. Acto seguido se levantó Hugo Chá-vez para solicitar hablar en nombre de laRepública Bolivariana de Venezuela; aquien presidía la sesión no le quedó otraalternativa que concederle también eluso de la palabra, que utilizó para impro-visar uno de los más brillantes discursosque le he escuchado. Al concluir, un mar-tillazo puso fin a la insólita sesión.

El ocupadísimo Obama y su séquitono tenían, sin embargo, un minuto queperder. Su grupo había elaborado un Pro-yecto de Declaración, repleto de vague-dades, que era la negación del Protocolode Kyoto. Después que salió precipitada-mente de la plenaria, se reunió con otrosgrupos de invitados que no llegaban a30, negoció en privado y en grupo; insis-tió, mencionó cifras millonarias de bille-tes verdes sin respaldo en oro,que cons-tantemente se devalúan y hasta amena-zó con marcharse de la reunión sí no seaccedía a sus demandas. Lo peor fueque se trató de una reunión de paísessuperricos a la que invitaron a varias delas más importantes naciones emergen-tes y a dos o tres pobres, a las cuales

Reflexiones del compañero Fidel

El mundo medio siglo después

Cambio climático 31

del calentamiento global por el nivel his-tórico y actual de sus emisiones,y a quie-nes corresponde aplicar reducciones sus-tanciales de manera inmediata. Este pa-pel no contiene una sola palabra de com-promiso de parte de los países desarro-llados.»

«...Su papel, señor Presidente, es elacta de defunción del Protocolo de Kyoto,que mi delegación no acepta.»

«La delegación cubana desea hacerénfasis en la preeminencia del principiode ‘responsabilidades comunes, pero di-ferenciadas’, como concepto central delfuturo proceso de negociaciones. Su pa-pel no dice una palabra de eso.»

«La delegación de Cuba reitera su pro-testa por las graves violaciones de pro-cedimiento que se han producido en laconducción antidemocrática del procesode esta conferencia, especialmente, me-diante la utilización de formatos de deba-te y de negociación, arbitrarios, excluyen-tes y discriminatorios...»

«Señor Presidente, le solicito formal-mente que esta declaración sea recogidaen el informe final sobre los trabajos deesta lamentable y bochornosa 15 Confe-rencia de las Partes.»

Lo que nadie podría imaginar es que,después de otro largo receso y cuando yatodos pensaban que solo faltaban lostrámites formales para dar por concluidala Cumbre, el Primer Ministro del paíssede, instigado por los yankis, haría otrointento de hacer pasar el documento co-mo consenso de la Cumbre, cuando noquedaban ni siquiera Cancilleres en elplenario. Delegados de Venezuela, Boli-via, Nicaragua y Cuba, que permanecie-ron vigilantes e insomnes hasta el últimominuto, frustraron la postrera maniobraen Copenhague.

No concluiría, sin embargo, el proble-ma. Los poderosos no están habituados,ni admiten resistencia. El 30 de diciem-bre la Misión Permanente de Dinamarcaante Naciones Unidas, en Nueva York,informó cortésmente a nuestra Misiónen esa ciudad que había tomado notadel Acuerdo de Copenhague del 18 dediciembre de 2009, y adjuntaba copiaavanzada de esa decisión. Textualmenteafirmó: «...el Gobierno de Dinamarca, ensu calidad de Presidente de la COP15,invita a las Partes de la Convención ainformar por escrito a la Secretaría de laUNFCCC, lo antes posible,su voluntad deasociarse al Acuerdo de Copenhague.»

Esta sorpresiva comunicación motivóla respuesta de la Misión Permanente deCuba ante Naciones Unidas, en la que«...rechaza de plano la intención de haceraprobar,por vía indirecta,un texto que fueobjeto de repudio de varias delegacio-nes, no sólo por su insuficiencia ante losgraves efectos del cambio climático, sinotambién por responder exclusivamente alos intereses de un reducido grupo deEstados.»

A su vez, originó una carta del Vicemi-nistro Primero del Ministerio de Ciencia,Tecnología y Medio Ambiente de la Repú-blica de Cuba, Doctor Fernando GonzálezBermúdez, al Sr. Yvo de Boer, SecretarioEjecutivo de la Convención Marco de lasNaciones Unidas sobre Cambio Climático,algunos de cuyos párrafos transcribimos:

«Hemos recibido con sorpresa y preo-cupación la Nota que el Gobierno de Di-namarca circulara a las Misiones Perma-nentes de los Estados miembros de lasNaciones Unidas en Nueva York, que us-ted seguramente conoce, mediante lacual se invita a los Estados Partes de laConvención Marco de las Naciones Uni-das sobre Cambio Climático a informar ala Secretaría Ejecutiva, por escrito, y a sumás pronta conveniencia, su deseo deasociarse al denominado Acuerdo de Co-penhague.»

«Hemos observado, con preocupa-ción adicional, que el Gobierno de Dina-marca comunica que la Secretaría Eje-cutiva de la Convención incluirá, en elinforme de la Conferencia de las Partesefectuada en Copenhague, un listado delos Estados Partes que hubieran mani-festado su voluntad de asociarse con elcitado Acuerdo.»

«A juicio de la República de Cuba,estaforma de actuar constituye una burda yreprobable violación de lo decidido enCopenhague, donde los Estados Partes,ante la evidente falta de consenso, selimitaron a tomar nota de la existencia dedicho documento.»

«Nada de lo acordado en la 15 COPautoriza al Gobierno de Dinamarca aadoptar esta acción y,mucho menos,a laSecretaría Ejecutiva a incluir en el infor-me final un listado de Estados Partes,para lo cual no tiene mandato.»

«Debo indicarle que el Gobierno de laRepública de Cuba rechaza de la maneramás firme este nuevo intento de legiti-mar por vía indirecta un documento espu-rio y reiterarle que esta forma de actuarcompromete el resultado de las futurasnegociaciones, sienta un peligroso pre-cedente para los trabajos de la Conven-ción y lesiona en particular el espíritu debuena fe con que las delegaciones debe-rán continuar el proceso de negociacio-nes el próximo año.», concluyó el Vicemi-nistro Primero de Ciencia, Tecnología yMedio Ambiente de Cuba.

Muchos conocen, especialmente losmovimientos sociales y las personas me-jor informadas de las instituciones huma-nitarias,culturales y científicas,que el do-cumento promovido por Estados Unidosconstituye un retroceso de las posicionesalcanzadas por los que se esfuerzan enevitar una colosal catástrofe para nues-tra especie. Sería ocioso repetir aquí ci-fras y hechos que lo demuestran mate-máticamente. Los datos constan en laspáginas Web de Internet y están al alcan-ce del número creciente de personasque se interesan por el tema.

La teoría con que se defiende la adhe-sión al documento es endeble e implicaun retroceso. Se invoca la idea engañosade que los países ricos aportarían unamísera suma de 30 mil millones de dóla-res en tres años a los países pobrespara sufragar los gastos que impliqueenfrentar el cambio climático, cifra quepodría elevarse a 100 mil por año en el2020, lo que en este gravísimo proble-ma, equivale a esperar por las calendasgriegas. Los especialistas conocen que,esas cifras son ridículas e inaceptablespor el volumen de las inversiones que serequieren. El origen de tales sumas es

vago y confuso, de modo que no com-prometen a nadie.

¿Cuál es el valor de un dólar? ¿Quésignifican 30 mil millones? Todos sabe-mos que desde Bretton Woods, en1944, hasta la orden presidencial deNixon en 1971 —impartida para echarsobre la economía mundial el gasto de laguerra genocida contra Viet Nam—, elvalor de un dólar, medido en oro, se fuereduciendo hasta ser hoy aproximadamen-te 32 veces menor que entonces; 30 milmillones significan menos de mil millo-nes,y 100 mil divididos por 32,equivalena 3 125, que no alcanzan en la actuali-dad ni para construir una refinería depetróleo de mediana capacidad.

Si los países industrializados cumplie-ran alguna vez la promesa de aportar alos que están por desarrollarse el 0,7 porciento del PIB -algo que salvo contadasexcepciones nunca hicieron-, la cifra exce-dería los 250 mil millones de dólarescada año.

Para salvar los bancos el gobierno deEstados Unidos gastó 800 mil millones,¿Cuánto estaría dispuesto gastar parasalvar a los 9 mil millones de personasque habitarán el planeta en el 2050, siantes no se producen grandes sequías einundaciones provocadas por el mar de-bido al deshielo de glaciares y grandesmasas de aguas congeladas de Groen-landia y la Antártida?

No nos dejemos engañar. Lo que Esta-dos Unidos ha pretendido con sus ma-niobras en Copenhague es dividir al Ter-cer Mundo, separar a más de 150 paí-ses subdesarrollados de China, India,Brasil, Sudáfrica y otros con los cualesdebemos luchar unidos para defender,en Bonn, en México o en cualquier otraconferencia internacional, junto a lasorganizaciones sociales, científicas y hu-manitarias, verdaderos Acuerdos que be-neficien a todos los países y preserven ala humanidad de una catástrofe que pue-de conducir a la extinción de nuestraespecie.

El mundo posee cada vez más infor-mación,pero los políticos tienen cada vezmenos tiempo para pensar.

Las naciones ricas y sus líderes, inclui-do el Congreso de Estados Unidos, pare-cen estar discutiendo cuál será el últimoen desaparecer.

Cuando Obama haya concluido las 28fiestas con que se propuso celebrar es-tas Navidades, si entre ellas está inclui-da la de los Reyes Magos,quizás Gaspar,Melchor y Baltasar le aconsejen lo quedebe hacer.

Ruego me excusen la extensión. Noquise dividir en dos partes esta Reflexión.Pido perdón a los pacientes lectores.

Fidel Castro RuzEnero 3 de 20103 y 16 p.m.

sometió el documento, como quien pro-pone: ¡Lo tomas o lo dejas!

Tal declaración confusa, ambigua ycontradictoria —en cuya discusión noparticipó para nada la Organización deNaciones Unidas—, el Primer Ministrodanés trató de presentarla como Acuer-do de la Cumbre. Ya esta había conclui-do su período de sesiones,casi todos losJefes de Estado, de Gobierno y Ministrosde Relaciones Exteriores se habían mar-chado a sus respectivos países, y a lastres de la madrugada, el distinguido Pri-mer Ministro danés lo presentó al plena-rio, donde cientos de sufridos funciona-rios que desde hacía tres días no dormían,recibieron el engorroso documento ofre-ciéndoles solo una hora para analizarlo ydecidir su aprobación.

Allí se incendió la reunión. Los delega-dos no habían tenido siquiera tiempo deleerlo. Varios solicitaron la palabra. El pri-mero fue el de Tuvalu, cuyas islas queda-rán bajo las aguas si se aprobaba lo queallí se proponía; lo siguieron los de Boli-via, Venezuela, Cuba y Nicaragua. El en-frentamiento dialéctico a las 3 de aquellamadrugada del 19 de diciembre es dignode pasar a la historia, si la historia dura-ra mucho tiempo después del cambio cli-mático.

Como gran parte de lo ocurrido se co-noce en Cuba,o está en las páginas Webde Internet,me limitaré sólo a exponer enparte las dos réplicas del canciller cuba-no, Bruno Rodríguez, dignas de ser con-signadas para conocer los episodios fina-les de la telenovela de Copenhague,y loselementos del último capítulo que todavíano han sido publicados en nuestro país.

«Señor Presidente (Primer Ministro deDinamarca)... El documento que ustedvarias veces afirmó que no existía, apa-rece ahora. Todos hemos visto versionesque circulan de manera subrepticia y quese discuten en pequeños conciliábulossecretos, fuera de las salas en que lacomunidad internacional, a través de susrepresentantes, negocia de una maneratransparente.»

«Sumo mi voz a la de los representan-tes de Tuvalu, Venezuela y Bolivia. Cubaconsidera extremadamente insuficientee inadmisible el texto de este proyectoapócrifo...»

«El documento que usted, lamentable-mente, presenta no contiene compromi-so alguno de reducción de emisiones degases de efecto invernadero.

«Conozco las versiones anteriores quetambién,a través de procedimientos cues-tionables y clandestinos, se estuvieronnegociando en corrillos cerrados que ha-blaban, al menos, de una reducción del50% para el año 2050...»

«El documento que usted presenta aho-ra, omite, precisamente, las ya magras einsuficientes frases clave que aquellaversión contenía. Este documento no ga-rantiza, en modo alguno, la adopción demedidas mínimas que permitan evitaruna gravísima catástrofe para el planetay la especie humana.»

«Este vergonzoso documento queusted trae es también omiso y ambiguoen relación con el compromiso específicode reducción de emisiones por parte delos países desarrollados, responsables

Tabloide Especial No. 132

EEDDIICCIIÓÓNN:: Pelayo Terry Cuervo CCOORRRREECCCCIIÓÓNN:: Marvelis Artigas,Alba Larrechea, Alina Miranda,Raquel Rodríguez y Sadys Montes

IIMMPPRREENNTTAA:: Empresa Gráfica de Villa Clara

PPRREECCIIOO::1:00 peso

DDIISSEEÑÑOO:: Livier Castro Uria Editado por

Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación

de sus condiciones naturales de vida: el hombre