7/25/2019 RICARDO CORAZN DE PAPEL

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RICARDOCORAZN DE

PAPEL, UN

HOMBRE QUE VIVEPOR LOS LIBROS

Con su pluma, Antonio Morales Riveira saca a la

luz este personaje de la cotidianidad bogotana.

Ricardo Corazn de Papel naci a los nueve aos.Antes ya exista el nio Ricardo Aguirre, rebelde,fugitivo y con esa movedera en todo sentido,propia de uienes est!n destinados a "urgar lavida para poder conocer y saber. Pero el decorazn de cartn reciclado apareci por primeravez cuando, muerta su madre, fue a dar al Club#ic"n de $ogot!, refugio de peladitos "u%rfanoso dscolos. &'iga este enlace para leer( )oo#orales, en clave de crnica*.

Ricardo tuvo la suerte del inuieto+ durante losseis meses ue permaneci en ese internadodescubri el mundo de papel ue luego sera elsuyo, el de los anaueles y los libros. abiblioteca del lugar se convirti en su -ugueteraparticular y la marca de la tinta, llena de "istoriasy sucesos, de- su impronta en sus manos y en sucabeza.

esenfrenado, empac en su cr!neo la obra

completa de /ulio 0erne, todo lo ue pudo de1milio 'algari y Ale-andro umas y de una vezued transportado a la me-or aventura ue le "adurado toda la vida, la de la 2ccin, los cuadernosy los libros.

1l vendedor de candados

a vida y la infancia siguieron( en medio detraba-os tan profanos como ayudante de busetasen el barrio 'anta uca, Ricardo segua con su

gusto supremo, el e-ercicio temprano de lalibertad y la lectura. ea "asta las etiuetas delos dentfricos. Palpaba el relieve de los textos,acostumbraba sus manos al tacto de lo bello.igera a"ora todo 3arca #!ruez y estudiaba denoc"e el bac"illerato. A los 45 aos se le declarsu adiccin por el centro de $ogot!. #ont un

puestico en el mercado de pulgas de la carreratercera, 1l Pio-o, donde venda candadosantiguos. De la mano de su inuie!ud "o# lali!e#a!u#a !am$i%n &onse'u(a li$#os ) *i*(asus d(as en "a#alelo &on las +is!o#ias uele(a, &ons!#u)endo su "asin "o# el "asado-

1n 6las pulgas6 encontr al encuadernador #igue7a-ardo, uien poco a poco le ense el o2cio,mientras se rebuscaba con un puesto de dulcesen la esuina de la veinte con tercera, -ustodonde "oy ueda su taller de encuadernacin

8A9n me sorprende ue vuelva a donde empec%1l eterno retorno8

Pero sus botas de siete leguas, ue se calzdesde los tiempos del Club #ic"n, le apretabanlos pies, y fue as como decidi irse "asta1cuador, a cumplir con ese ritual demencial deuerer ir para nunca llegar, para seguir... eregreso, en Pasto encontr a un primo ue tenauna tipografa y aprendi a montar ttulos, moldesde peridico. Como en el palndromo, Ricardo

puede decir 8s% verlas al rev%s8. e auellostiempos guarda a9n :;< fuentes ue todavautiliza.

A"#endida la en&uade#na&in ) la !i"o'#a.(a,se in!e#es "o# la #es!au#a&in de *ie/osli$#os- Sa$(a )a ue su '#an man(a no e#anada dis!in!o de la ma'ia ) el "la&e# dede*ol*e# el !iem"o- =a lo l9dico se "abaconvertido en "ilo conductor de su vida. Rearmarlibros, comprar ob-etos imposibles. 1l ludusvecum, el -uego eterno de armar y armar, era sudestino. = en cada cosa ue arma en su tallersigue "oy impregnada la goma de la diversin, la-ugarreta, el tiempo inaplazable del recreo

Ricardo segua con su traba-o con 7a-ardo. Pero,un poco aburrido de encuadernar tesis de grado yfolios de -uzgados, otra vez lo pic la avispa de laaventura y se fue de 8regalado8 a la 7uerzaA%rea, donde dur :< meses vestido de uniformeazul. a milicia no era su cuento. 1l pacientemaestro 7a-ardo lo recibi y, a su regreso, las

http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-5376347http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-5376347http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-5376347http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-5376347

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cosas "aban cambiado. )ena :: aos y seenfrentaba al aprendiza-e y al traba-o cotidiano,encuadernando y empastando bellsimascolecciones de reconocidos intelectuales ueueran preservar sus libros y embellecer conlomos de cuero sus extensas bibliotecas. Del$a##io San!a Ri!a, donde ueda$a el !alle#de 0a/a#do, de nue*o #e'#es al &en!#o, )

una *e1 all( a"a#e&ie#on nue*ase2"e&!a!i*as "#o.esionales, *e#$i'#a&ia,&omo un li$#o a$ie#!o-

Aprendiendo el respeto

'us das transcurran entre el taller, los6pulgueros6 de libros y la biblioteca uis >ngelArango. 'u informacin creca, y por esos tiempos"izo sus primeras libretas experimentando contelas "ind9es, con lona costea. 1n una feria enla fundacin 3ilberto Alzate Avendao conoci a

'antiago Corradine, uien lo llev comoencuadernador a l Arc"ivo 3eneral de la ?acin.All traba- un ao y conoci sutiles t%cnicas y elrespeto total por el o2cio.

A"#endi la im"o#!an&ia de la manu.a&!u#a,de esa mano ue da &on &a#i3o el sello a&ada o$/e!o, esa &ons!#u&&in a la *is!a- aartesana ue permite sentir y transformar unsimple material en un ob-eto bello. 1se diarioexplorar, experimentar, cortar, pegar, apreciar...

= sobre todo, ser totalmente generoso alaprenderle a otros la maestra, en un taller depuertas abiertas como el suyo.

@oy, su traba-o delicado y riguroso est! lleno desentido, de sentidos. En su !alle#, ue +uele a'oma, a &ue#os ) &a#!ones, la "a#!e *isual )lo ol.a!i*o son .undamen!ales- 'entidos uese van amalgamando, uniendo en la construccinde la obra, en la aluimia del papel. Ricardo tocasus libros y libretas y a2rma ue aun si .ue#a&ie'o, +a#(a "e#.e&!amen!e su la$o#. )oca y

se transporta reconociendo en sus manos "astael grama-e del papel.0uelve cada da la relacin con el librorestaurado. 8Aunue mi traba-o es con la parteexterior, me pasa algo muy fant!stico, y es ueempiezo a mirar la %poca de impresin del libro,todo su tiempo y su "istoria para noeuivocarme8. Repara ediciones antiguas ue se"an ido desgastando, mientras acude a suenorme coleccin de vietas en plomo y bronce.Adec9a el estilo( encuadernaciones de todas las

%pocas, de todas las escuelas, la espaolafrancesa, "olandesa, inglesa, alemana... &eatambi%n( o ue m!s excitaba a al, 1dison y)olstoi*.

'abiendo su pasin por la Revolucin 7rancesaue le abri el mundo de las ideas, le pregunto desopetn Bu% cambi m!s al mundo, 3utenberg

el inventor de la imprenta, o la revolucin ?ovacila( 83utenberg. 'in imprenta no "abraerec"os del "ombre, ni ac! a $agatela de?ario, ni revolucin. La im"#en!a es lam42ima e2"#esin de las "ala$#as en masa5

Ricardo mantiene su amorosa relacin con lacaligrafa, con el papiro, la paleografa( 5Es una*aina .an!4s!i&a eso de !#ans"o#!a# e&ono&imien!o5- 'abe muy bien ue es uncurador del pasado, un "ombre ue regresa loslibros a la vida, pegados a mano, cosidos a

caballete, cosido al diente de perro, con el lomocomo colmillos de canes. &ea ac!( a $iblioteca?acional est! saturada de libros y no "aypresupuesto*.

?uestra conversacin obliga a un Das"bacE. Ade-ar el taller de 7a-ardo y luego el Arc"ivo de la?acin, empez a vender sus originales libretasen el barrio a #acarena al almac%n una. 1n unade esas, uien fue agregado cultural de 1spaa,3onzalo Buintero 'aravia, le pidi ue le

empastara F;.

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ideologa es la fraternidad y tambi%n lagenerosidad. Po# eso #e&ono&e eso ue en suo8&io se llama 5el alma del "a"el5, o sea,

/us!amen!e el &o#a1n ue se o#dena, uela!e, ue "#ensa-

Ricardo no elude el debate de la "ipermodernidadentre lo fsico, lo textual y lo virtual.

esaparicin del libro y del cuaderno 8A m nome asusta HdiceH. a gente seguir! con los libros yapuntando. 1l o2cio ya tiene discpulos8. = s.Ricardo intuye, cuando menos, todo lo ue seescribe y apunta en sus libretas, donde de-apedacitos de s mismo, intuye desde el poema"asta la agenda diaria, y sabe ue todo esoueda, ue todo ser! "istoria. Bue el futurotambi%n ser! pasado.

= por u% llamarse Ricardo Corazn de PapelIn da su amigo 3uillermo Angulo le di-o a 3arca#!ruez ue le 2rmara un e-emplar empastadode Cien aos de 'oledad para Aguirre. = 3abitoescribi( 8Para Ricardo Corazn de Papel estelibro ue %l me encuadern, como es evidente,con todo el cario del ue lo escribi8

El Co#a1n de Pa"el es!4 &um"liendo 9:a3os- Lo &ele$#a &on una e2"osi&in#e!#os"e&!i*a de lo ue +a +e&+o &on sus!#a$a/ado#es-

Alg9n da todo lo suyo ser! material arueolgicoComo pu