Resumen Historia de la filosofía contemporánea.

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 Resumen materia. Waismann. Se niega que en filosofía puedan aportarse pruebas sobre sus tesis. El filósofo sería quien, a partir del asombro, descubre las grietas en la estructura de nuestros conceptos. De ahí sus problemas. Se pasa de encontrarle una respuesta a una pregunta a querer hallar su sentido. Los problemas filosóficos sólo cobran sentido, no en su resolución, sino en su disolución. Disolución es esclarecer para nosotros el sentido de las palabras utilizadas en la formulación del problema de manera tal que al hacerlo quedemos liberados del hechizo que ese problema ejerce sobre nosotros. Lo que se logra aquí es disipar una confusión acerca del uso del lenguaje y de sus reglas. Esto tiene su entaja en la pr!ctica, ya que siempre ante un interlocutor podemos  preguntar" #$u% e s lo que quiere s ignificar& 'odemos hacer que cualquiera adierta su propio proceder. (acemos hincapi% en que tenga conciencia sobre lo que est! haciendo. Este m%todo elimina la pol%mica ya que se e)amina la argumentación de %l paso a paso,  pregunt!ndole q u% quiso dec ir. La pol%mica sólo surge si se eitan pasos. Este es el m%todo para hacer filosofía no dogm!tica. *quí no se usan argumentos para  probar ni refutar nada + no se e)plica n ada+ sólo se de scriben usos y tabulaciones de reglas.  o se descu bre nada en su isión gramatica l. La idea es que aunque los problemas metafísicos no tengan significado claro, no por ello deben ser silenciados. En filosofía se trata de liberar al espíritu de la tiranía de las  palabras. En función de que se profundiza en un problema filosófico y se aclaran los usos de las  palabras no e s que no se log ra nada y que no haya utilidad e n ello" se llega a a lgo  positio que es la comprensión profund a de un lengu aje. -omprensió n que arroja luminosidad sobre el subsuelo del lenguaje reelando qu% posibilidades se encuentran todaía abiertas a nuestro pensamiento. 'or otra parte la disolución de problemas puede pasar a las ciencias y encaminarse a mostrar nueos problemas dentro de ella.

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Un resumen de los tópicos más importantes en la filosofía contemporánea.

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Rorty: El giro lingstico

Resumen materia.

Waismann.

Se niega que en filosofa puedan aportarse pruebas sobre sus tesis. El filsofo sera quien, a partir del asombro, descubre las grietas en la estructura de nuestros conceptos. De ah sus problemas.

Se pasa de encontrarle una respuesta a una pregunta a querer hallar su sentido.

Los problemas filosficos slo cobran sentido, no en su resolucin, sino en su disolucin. Disolucin es esclarecer para nosotros el sentido de las palabras utilizadas en la formulacin del problema de manera tal que al hacerlo quedemos liberados del hechizo que ese problema ejerce sobre nosotros.

Lo que se logra aqu es disipar una confusin acerca del uso del lenguaje y de sus reglas.

Esto tiene su ventaja en la prctica, ya que siempre ante un interlocutor podemos preguntar: Qu es lo que quiere significar?

Podemos hacer que cualquiera advierta su propio proceder.

Hacemos hincapi en que tenga conciencia sobre lo que est haciendo. Este mtodo elimina la polmica ya que se examina la argumentacin de l paso a paso, preguntndole qu quiso decir.

La polmica slo surge si se evitan pasos.

Este es el mtodo para hacer filosofa no dogmtica. Aqu no se usan argumentos para probar ni refutar nada; no se explica nada; slo se describen usos y tabulaciones de reglas.

No se descubre nada en su visin gramatical.

La idea es que aunque los problemas metafsicos no tengan significado claro, no por ello deben ser silenciados. En filosofa se trata de liberar al espritu de la tirana de las palabras.

En funcin de que se profundiza en un problema filosfico y se aclaran los usos de las palabras no es que no se logra nada y que no haya utilidad en ello: se llega a algo positivo que es la comprensin profunda de un lenguaje. Comprensin que arroja luminosidad sobre el subsuelo del lenguaje revelando qu posibilidades se encuentran todava abiertas a nuestro pensamiento.

Por otra parte la disolucin de problemas puede pasar a las ciencias y encaminarse a mostrar nuevos problemas dentro de ella.

En este mbito cientfico, los problemas s tienen resoluciones. O bien en la bsqueda de nuevos resultados, o en la bsqueda de nuevos sistema conceptuales no teoras.

Traer nuevos problemas a cuestin es tambin una tarea que se le puede asignar al filsofo.

Se trata as de lograr escapar al dominio de las formas lingsticas y de elevar las rutas establecidas de las mismas formas de expresin; el filsofo debe estar atento a todas ellas y debe ser capaz de pensar contra el lenguaje.

Lo esencial de esta visin es conducir al que interroga a algn aspecto nuevo.

6 aspectos de esta visin de filosofa: 1) la filosofa es crtica, disolucin y superacin de todo prejuicio; 2) se abre paso a una comprensin ms profunda; 3) la comprensin no se demuestra; 4) ningn argumento filosfico es constrictivo; 5) su finalidad es abrirnos los ojos; 6) la diferencia con la lgica es que esta constrie y la filosofa libera.

El argumento filosfico tiene fuerza. Permite retroceder y decir: mira.

El filsofo lo que hace es montar un caso. Hace ver las debilidades llevndolas a consecuencias extremas y luego nos ofrece un nuevo modo de mirar las cosas. Trata de hacernos llegar a una decisin; trata de alcanzar la comprensin, el juicio.

Se trata de otro tipo de racionalidad que la lgica.

La palabra para caracterizar esta concepcin de filosofa es visin.

Es saber el lugar de donde algo surge y cmo se torna visible, lo que atraviesa nuestro modo de ver las cosas para llevarlo a un modo nuevo de ver y ms amplio. La filosofa transforma el panorama.

Los metafsicos son como antenas de su poca; son visionarios y perciben es espritu de su tiempo.

Adorno. La actualidad de la filosofa.

Crticas a la filosofa o a las corrientes de su tiempo: tienen que renunciar a aferrar la totalidad de lo real por la fuerza del pensamiento.

L nico que habra es un objeto de polmicas.

Se le critica al idealismo el perseguir una pretensin de totalidad bajo la forma de una razn autnoma que se despliega a s misma (se cuestiona su origen).

Se le critica a la filosofa cientfica que se desprende de la ciencia natural que tiene por supuestos problemas histricos.

Se le critica a Husserl que an habiendo depurado el idealismo caiga en el fantasma de una razn autnoma.

Se le critica a Heidegger no haber superado el terreno de la subjetividad en la articulacin de una ontologa material. Se cae en una vida sin sentido a raz del carcter de estar arrojado del Dasein.

La filosofa de hoy, entendida como el aseguramiento de la verdad, enfrenta su liquidacin y verse reducida a una instancia de ordenacin y control de las ciencias particulares a la que todo se reduce.

Tambin esta posicin tiene su crtica: 1) no es claro el sentido de lo dado a estas ciencias, y no es Carlo a quin se le dan estos datos (el sujeto no es trascendental, es histrico).

2) la experiencia ajena es problemtica. Slo puede constituirse en funcin de la propia.

As los problemas filosficos siempre afectan a la ciencia ya que se constituye como tal sobre los trminos de la filosofa.

Se distingue el ideal de la ciencia: la investigacin del ideal de la filosofa, la investigacin.

La filosofa se ve obligada a interpretar una y otra vez sin poseer nunca la clave de la interpretacin, lo que genera una serie histrica de figuras de los entrelazamientos de lo existente.

El texto que la filosofa tiene que leer es contradictorio y fragmentario. La funcin de la filosofa es iluminar como un relmpago la figura del enigma, hacindola emerger.

Pero consumindola en el intento. No es tarea de la filosofa investigar sino interpretar una realidad carente de intensiones mediante la construccin de figuras, de imaginar a partir de los elementos aislados de la realidad, en virtud de los cuales se alzan los perfiles de lo que es tarea de la ciencia investigar.

El programa del autntico conocimiento materialista es la interpretacin de lo sin intencin mediante la composicin de los elementos aislados por anlisis e iluminacin de lo real mediante esa interpretacin.

Se trata de una deconstruccin en pequeos elementos carentes de toda intencin. No hay ningn sentido ulterior detrs de las manifestaciones histricas. Sin embargo, no se trata de encontrar un sentido histrico a esas imgenes histricas y de que ese modo guarden alguna verdad, sino que ms bien se trata de dejarlas constituidas interrelacionadas pero carentes de toda intencionalidad, viendo que la respuesta no es la resolucin a ningn enigma sino la anttesis con el enigma construida a partir de los elementos del enigma; que es algo insensato.

La contestacin al enigma no queda por conocimiento sino que pasa al mbito de la praxis. De la construccin de la figura de lo real se sigue se superacin como la transformacin de lo real. El gesto transformador slo lo dispone la prctica materialista. Esa relacin de traslado se llama dialctica.

La interpretacin autntica se logra en la aniquilacin de la pregunta. El puro pensamiento no le alcanza y trae la praxis en s mismo.

Las imgenes histricas no son algo dado por s mismo, se articulan por el hombre. Se trata de articular modelos con los cuales la razn se aproxima probando y comprobando una realidad que rehsa la ley, pero a la que el esquema del modelo es capaz de imitar en la medida en que est correctamente trazado.

Se requiere para esto de la fantasa, ella debe atenerse al material al que las ciencias se atienen, y slo va ms all de sus rasgos mnimos.

Se intenta practicar una idolatra del ser historiadamente producido, se priva a la filosofa de un patrn de medida constante y se la esfuma en un juego esttico de imgenes. La filosofa primera es un ensayismo filosfico.

Se busca no ir hacia los proyectos racionales sino hacerle frente a lo que sale de la realidad.

Derrida. Sobre un tono apocalptico

Se trata de aceptar el rastro de la escritura del otro. De traducir y no traducir. El gala hebreo se traduce como Apocalipsis.

Apokalupto, es yo descubro, yo revelo cualquier cosa oculta que no puede ser entregada directamente a la evidencia.

As, Apocalipsis es la contemplacin o descubrimiento de Dios o descubrimiento de Yaveh.

El descubrimiento no slo abre paso a la visin sino tambin a un or.

Se trata de llevar la atencin hacia el tono.

El tono se revela en un darse importancia frente a un anuncio, el anuncio de la muerte de la filosofa.

El que tiene la revelacin es el portador del tono.

Kant es el primero en hablar de tonos en filosofa; lo hace para llevar a juicio a aquellos por el tono que adoptan y que ponen a la filosofa en peligro de muerte.

Kant acusa a los que hablan ese tono de esperar algn beneficio.

La acusacin acusa una mistagogia escatolgica.

Lo escatolgico es el fin, lo ms extremo, lo que clausura la historia.

Los mistagogos son los fabricantes de escenas, iniciadores del misterio.

Se trata de mistificar a la filosofa.

El tono es la tensin del ligamento tendido; la diferencia de tensin produce la diferencia tonal, estn ligadas.

El tono de un discurso se alcanza por el contenido, modo de decir, escenografa retrica y actitud.

El mistagogo es aquel que conduce hacia el misterio, el que inicia en el misterio (el que inicia en el misterio es el hierofante, rata!); manipula un pequeo grupo de adeptos agrupados en una secta o un lenguaje crptico.

La revelacin es para ellos, el descubrimiento del secreto.

Como los mistagogos llevan el secreto y lo preservan, ellos se ven como seores, seres de elite.

Kant nota que estos iniciados, injustificadamente utilizan lo que l llama tono-gran-seor. Para la utilizacin falsa del tono debe poderse inducir una confusin que mezcla el habla del otro.

Las voces que se mezclan en nosotros son las de la razn y la del orculo.

El tono-gran-seor domina y es dominado por la voz oracular que recibe la voz de la razn. Hay aqu una reduccin hermenutica.

Se eleva el tono hacia el delirio.

El tono-gran-seor permite un salto ms all, hacia lo irrepresentable. Desafina y hace delirar un orden hablando otro lenguaje.

Pero el tono-gran-seor desentona porque es extrao a la esencia de la voz.

En nuestro tiempo los mistagogos se aprovechan del fantasma y del velo y remplazan las evidencias y pruebas con analogas; no son verdaderos filsofos sino que recurren a esquemas poticos.

Lo cual no es ms que literatura y una escenificacin que desea traer la atencin.

Se pone en cuestin la castracin del logos por la razn. En cada uno de nosotros reside el mistagogo y el ilustrado de otro.

La condicin de la revelacin es no personificar a la diosa de la ley moral.

En esta escena primordial se presenta la diosa velada ante la cual tanto los ilustrados como los mistagogos se arrodillan. Unos generan filosofa moral y otros una personificacin esttica, una representacin.

Hay que notar que toda escatologa apocalptica se afirma en nombre de una metfora de la luz. La luz existe y depende de nosotros la conservacin de esa luz.

Segn la adopcin del tono la verdad es el fin, que la verdad se descubra es el advenimiento del fin. La estructura de la verdad es apocalptica. Lo que significa el tono apocalptico es que el fin comienza. El fin se rene a partir del tono.

El Apocalipsis al ser siempre envos que remiten a otros envos sin destino determinable es la autopresentacin de la estructura apocalptica del lenguaje y de la escritura.

Lo que podra despejar los envos apocalpticos de antemano ya se muestra dentro del tono.

Ante ellos los ilustrados siguen denunciando.

Finalmente el tono apocalptico remite a un ven.

Este llama y precede al evento. Llama al lugar de la apocalptica sin contencin.

El ven abre la escena, no puede convertirse en objeto.

El ven slo se deriva de lo otro. Eso otro tiene el nombre de Apocalipsis.

El ven resuena con cierto tono porque es en s mismo el Apocalipsis del Apocalipsis.

La catstrofe es la del repliegue y su fin, clausura sin fin, fin sin fin.

Rorty. La prioridad de la democracia sobre la filosofa

Habra dos posturas respecto de la perfeccin espiritual en tanto que objeto de una poltica pblica.

1) la absolutista, que dice que todo ser humano, sin el beneficio de ninguna revelacin, tiene todas las creencias necesarias para la virtud cvica.

2) los pragmatistas, que dicen que cuando los individuos encuentran en sus conciencias creencias que son relevantes a las polticas pblicas pero son incapaces de defensa sobre la bases de las creencias comunes a los ciudadanos, se debe sacrificar su conciencia sobre el altar del beneficio pblico.

Los esfuerzos contemporneos trataron de honrar la barrera entre lo histrico y lo absoluto de cada postura.

Erradicar esta postura significa quebrar el lmite entre verdad y justificacin.

De este modo, la teora liberal de lo social se polariza en dos posturas acerca de la justificacin de los derechos.

1) los dilemas polticos y morales dependen de una teora de la naturaleza humana.

2) lo que cuente como racional es relativo a al grupo frente al cual pensamos que es necesario justificarnos.

3) Habra un tercer tipo de teora social, los comunitaristas.

Ellos rechazan tanto la idea de un individualismo racional de la ilustracin, como la idea de derechos, y no slo esto sino que piensan que la idea de rechazo trae dudas cobre como las instituciones y la cultura se desenvuelven en un estado democrtico.

Sin la justificacin de la ilustracin, las instituciones liberales son incapaces de sobrevivir.

Sobre el comunitarismo hay tres puntos a aclarar o desenredar:

1) la prediccin emprica de que ninguna sociedad que deje a un lado la idea de una moral ahistrica verdadera puede sobrevivir. (La ilustracin desemboca en el pragmatismo y el pragmatismo no es suficientemente fuerte como para hacer una comunidad moral posible).

2) Existe el juicio moral de que la clase de individuos que son producidos por las instituciones liberales y su cultura son indeseable.

3) El aserto de que las instituciones polticas presuponen una doctrina acerca de la naturaleza del hombre y que esa doctrina debe darnos claro el carcter esencial histrico de nuestra mismidad o nuestro ser.

Se trata de concentrarse en el tercer aserto. Dos preguntas:

1) En qu sentido la democracia liberal necesita de una justificacin filosfica.

2) De si una concepcin del si-mismo que hace de la comunidad constitutiva del individuo se comporta mejor con la democracia que una concepcin iluminista del s mismo.

En confrontacin con estas preguntas Rawls piensa que la filosofa como la bsqueda acerca de un orden metafsico y moral no puede proveer unas bases trabajables ni compartidas para una concepcin poltica de la justicia en una sociedad democrtica. Slo es necesario para la poltica como prefacio las disciplinas de la historia y de la sociologa.

Se trata de separar la poltica (como Jefferson respecto de la religin) de las cuestiones de relevancia ltima.

Tanto la filosofa como la religin son sujetos de una redefinicin persuasiva.

Segn Rawls lo referente a la naturaleza humana queda reservado a la vida privada.

Una explicacin y justificacin de la poltica, segn esta concepcin, nunca podr formar parte de la poltica, sino que siempre ser un prefacio de la misma., La necesidad de una sociedad de entrar en esos tipos de debates retrocede a medida en que una sociedad se acomoda y se establecen las tradiciones histricas.

Podemos decir que Rawls se queda en la superficie mientras que Sandel excava los fundamentos filosficos de la democracia. El ltimo ataca la posicin absolutista. En sintona con esto Rawls en otro escrito explica que lo que justifica una teora de la justicia es una acuerdo y congruencia con un entendimiento de lo que somos, dadas nuestra historia y tradiciones y en funcin de lo que es ms razonable para nosotros. As en teora de la justicia, slo habra descripciones socio-histricas del modo en que vivimos.

Frente al hecho de que la justicia es el punto arquimediano de la democracia (igualdad sobre la que descansa todo el sistema sin intervenir consideraciones a-apriorstica), se encuentran los locos en el ilimite de lo sano que el grupo determina en funcin de lo que porta una situacin histrica.

Rawls no se interesa por la cuestin de s debemos darle prioridad a la justicia sobre el bien (una visin deontolgica completa) sino que l parte desde la presuposicin de que se debe, es decir, no est interesado en las condiciones del s- mismo, sino en la de la ciudadana liberal.

La segunda pregunta, es decir, aquella por la cual se interroga acerca de qu tipos de individuos deben ser producidos, no deben ser respondidas, o s, siempre y cuando no sean un juicio sobre la cuestin de si la justicia es o no primaria.

El precio de la libertad poltica es el tipo de individuos que esos sistemas producen.

Para Rawls la filosofa como la explicacin de la relacin entre un orden y la naturaleza humana no es relevante. Rawls para decir lo que dice, no necesita ninguna teora que lo justifique en tanto que esta apele a condiciones de humanidad. Las puede aceptar si no modifican el rol de la justicia, pero no las necesita.

El lado provechoso de los individuos de mentalidad dbil es la superficialidad acerca del mundo, ella al alejar a los individuos acerca de las respuestas categricas sobre las cosas, hace de los habitantes ms pragmatistas, tolerantes, liberales y receptivos a la razn instrumental. En una sociedad liberal ser dbil-mental es servir a los propios propsitos morales. El compromiso que tengamos que hacer que el otro no se tome las cosas tan en serio.

Los comunitaristas deberan evocarse al asunto de si el hecho de atomizar y desenlazar las cosas no ha hecho en el balance ms bien que mal.

Heidegger. El final de la filosofa y la tarea del pensar.

La filosofa es metafsica y piensa al ente en totalidad. Lo piensa como ente representndolo como fundamento. Como fundamento el ser trae al ente a su estar presente, como presencia. La presencia es llevar a presencia lo que ya est presente.

El pensar metafsico lleva al ente desde el fundamento hacia su estar presente como fundado.

El final de la filosofa significa final de la metafsica.

Final es reunin en su posibilidad lmite. Su estadio final es la inversin (Marx). Confirma el acabamiento la emancipacin de las ciencias.

Ellas se dirigen por la ciencia fundamental llamada ciberntica. Esta es la teora para dirigir la posible planificacin de organizacin del trabajo humano. El rasgo fundamental de la cientificidad es un carcter tcnico, que opera desontologizando sus dominios y auspiciando el carcter operaciones y calculador.

El final es la instalacin manipulable de un mundo cientfico-tcnico y de un orden social acorde.

Le queda reservada otra tarea al pensar. Esta no es metafsica y no es ciencia. Tiene un carcter preparatorio; trata de despertar una disposicin humana a una posibilidad. Le indica al presente algo dicho sobre las cosas (Sache). Tras las cosas algo se esconde y la filosofa como metafsica no puede pensarlo.

Donde quiera que algo se ofrezca frente a otro entra en juego la abertura.

Esa puesta que hace que algo aparezca y se muestre se llama el lugar (Lichtung) [el espacio reservado a la luz]. La luz cae sobre el lugar, pero la luz presupone el lugar para ella.

Lichtung es lo abierto para lo presente y lo ausente.

El lugar acoge el fenmeno y este nos pone en la tarea de aprender de l.

La luz atraviesa el lugar, la abertura de la libertad en la que las cosas se mueven.

La presencia necesita del lugar, que impera sobre esta, este lugar es uno de libertad.

Parmnides habla del corazn que no tiembla del no-ocultamiento, este es el lugar.

El lugar es la posibilidad de un camino hacia la presencia y la posibilidad de presenciarse algo.

La Aletheia, no ocultamiento debe ser pensada como el lugar que permite al ser y al pensar estar presente el uno en el otro.

Este lugar es uno silencioso.

L Aletheia es lo nico que permite la posibilidad de la verdad tal como la conocemos.

Todava hay que dilucidar cmo es que la Aletheia se usa siempre para el mbito de los enunciados y cmo es posible ello a partir del lugar. Se conoce lo que hace esto posible pero no o que es. En ella habra por este rechazo a darse a conocer un elemento de ocultacin y disimulo. Todava no se ha resuelto de qu manera debe conocerse para que sea accesible al pensar lo que no necesita demostracin.

La tarea del pensar consistir en abandonar el pensar anterior para determinar la cosas del pensar.

Wittgenstein. Tractatus

La mayor parte de los interrogantes y proposiciones de los filsofos estriban en nuestra falta de comprensin de nuestra lgica lingstica. Toda filosofa es crtica lingstica.

La proposicin representa el darse o no de los estados de cosas. Totalidad de las proposiciones es igual a la ciencia natural.

La filosofa es la clasificacin lgica de los pensamientos, es una actividad que consta de aclaraciones. Las clasificaciones no son de las cosas sino de las proposiciones filosficas.

La filosofa delimita el mbito de lo disputable, de lo pensable y lo impensable. Significa lo inefable desde lo decible.

Importante: la proposicin puede representar la realidad pero no puede representar lo que ha de tener en comn con la realidad para poder representarla (E.D. el retrato lgico).

La proposicin se refleja en el retrato lgico.

La proposicin muestra el retrato lgico de la realidad.

Lo viste y lo ostenta.

Las relaciones de interioridad o estructurales de los conceptos se muestran en el retrato lgico. Estas propiedades son rasgos de los hechos.

El concepto formal es una variable que pertenece a las proposiciones en la que slo u rasgo caracterstico es constante. La variable determina el concepto y es signo de l.

As la variable (x) es signo de objeto. La palabra objeto se expresa en la escritura conceptual por la variable.

El sentido de la proposicin es en coincidencia o no con las posibilidades del darse o no de estados de cosas.

La proposicin elemental afirma un estado de cosas. Esta es una concatenacin de nombres. Llegamos a ellas por el anlisis de las proposiciones. El nombre aparece en la trama de la proposicin elemental.

Si la proposicin elemental se da, hay estados de cosas. Todas las proposiciones elementales describen completamente el mundo.

Pueden darse todas las combinaciones de estados de cosas (tablas de verdad).

La proposicin es la expresin de la coincidencia o no con las posibilidades veritativas de las proposiciones elementales.

El sentido del mundo reside fuera de l. Es un valor y por tanto no puede estar sujeto a causacin. Lo mismo con la tica, no resulta expresable, es trascendental (lo mismo con la esttica pues son lo mismo).

Dios no se manifiesta en el mundo. Cmo sea el mundo no es mstico, sino que sea. El sentimiento del mundo como todo limitado es lo mstico.

El enigma no existe, si una pregunta puede formularse, puede responderse. Todo escepticismo es absurdo, por el tema de cmo se entiende la pregunta.

La solucin al problema de la vida es la desaparicin del problema.

Lo inexpresable existe. Se muestra, es lo mstico.

El mtodo correcto en filosofa es no decir nada ms de lo que puede decirse con sentido (proposiciones de la ciencia natural).

De lo dems hay que callar.

Investigaciones Lgicas.

E ha dicho una vez de que la palabra esto, que es un nombre genuino.

La palabra nombre caracteriza muchos diferentes tipos de uso de una palabra emparentados entre s.

En la definicin ostensiva sealamos lo nombrado y a la vez pronunciamos el nombre.

Esto est conectado con el nombrar como un proceso oculto; una extraa conexin de una palabra con un objeto. Slo cuando los problemas filosficos hacen fiesta, podemos figurarnos que el nombrar es un acto neutral notable, el bautismo de un objeto.

Nuestra investigacin se dirige a las posibilidades de los fenmenos, es decir, sobre el tipo de enunciados que hacemos con los fenmenos. As nuestro examen es gramatical. Quita los malentendidos referidos al empleo de las palabras. Un anlisis.

El pensamiento en su esencia presenta un orden a priori del mundo, y es simple.

La filosofa de la lgica no habla de las oraciones distinto de cmo lo hacemos en la vida ordinaria. Hablamos entonces de l fenmeno espacio temporal del lenguaje, pero hablamos de l como de las piezas de ajedrez al dar reglas para ellas, no al describir sus propiedades fsicas.

No hay hiptesis en lo que hacemos, slo descripciones y ellos tienen si finalidad en los problemas filosficos que slo se sealan compilando lo conocido.

Lo profundo es mal interpretacin de nuestras formas lingsticas, en ello somos cautivos de una forma.

Los resultados en filosofa es el descubrimiento de sinsentidos.

La fuente de nuestras confusiones es ignorar la compresin sinptica, en ella es donde vemos las conexiones.

La filosofa no resulte, hace ver sinpticamente el estado anterior a una contradiccin y su solucin. Establece reglas y tcnicas para un juego. El enriado con las reglas es lo que se llega a ver sinpticamente en la comprensin.

Se trata de establecer un orden posible, no el orden.

El descubrimiento real es aquel que me hace dejar de filosofar cuando quiero.

Seguir una regla, hacer un informa, dar una orden, jugar una partida son costumbres. Entender una oracin significa entender un lenguaje, entender un lenguaje es entender una tcnica.

Lo que estamos tentados a decir de algo no es filosofa, es su materia prima.

El filsofo trata a una pregunta como a una enfermedad.

Las clase de los objeto las dice la gramtica.

En filosofa no se analiza un fenmeno, sino un concepto y por tanto la aplicacin de una palabra.

Rorty: El giro lingstico. Introduccin

R. piensa que los filsofos del giro lingsticos fracasaron. La rezn de su fracaso fue la incapacidad para conseguir criterios objetivos por cuya aplicacin cualquiera poda saber si realmente estos filsofos fueron o no capaces de conseguir sus objetivos propuestos.

1. el primer objetivo consista en disolver los problemas filosficos tradicionales.

2. el segundo consista en autoconstituirse en una ciencia estricta, ya fuera sobre el objeto de la forma lgica (lenguaje ideal Witt) o sobre el de la gramtica ordinaria susceptible de ser abordada mediante el anlisis conceptual (Seg. Witt).

Las causas del fracaso fueron no haber llegado a proporcionar criterios claros en cuestiones elementales como saber cundo se daba por terminado el anlisis de los significados terminales de sus conceptos claves.

R. reconstruye a los filsofos lingsticos en funcin de sus propios criterios de coherencia. Desconstruye una figura de filosofa construida como expresin de su propia diferencia hacia dentro o hacia afuera desde su propia comunidad de pertenencia. Lo que se sigue es una distincin entre las actitudes deconstructivas. Se califican de ticas. Los filsofos lingsticos reconstruyen y vuelven a construir el edificio comenzando con declaraciones meta-filosficas acerca de la forma que habra de adoptarse como norma filosofa. Hablan de una forma que habra de devenir normal, una forma que significa cmo debe devenir. As se obtiene una decisin tica disfrazada de ontologa o una ontologa que encubre el criterio moral que la genera.

As, la filosofa lingstica hace dos cosas:

1. hacen metafilosofa con pretensiones de validez universal pero en verdad dan una definicin normativa o codificacin axiolgica del valor de la actividad filosfica.

2. por otra parte, con generalidades universales disfrazan de necesidad la contingencia de su propia apuesta.R rechaza esto y se compromete con la contingencia en dos distinciones:

1. la distincin entre la filosofa como propuesta de figura de significado y figuras de valor contingente.

2. la distincin describir y cambiar la mente. Con ello se genera otras distinciones como: solidaridad frente a objetividad; democracia frente a filosofa; comunidad frente a mtodo.

As R emprende el giro pragmatista que permite:

1. Referir toda justificacin, tanto epistmica como moral, a las prcticas sociales (contingentes).2. Eliminar la autoridad y la racionalidad de la epistemologa como fundamento cede (de la necesidad) de toda justificacin posible.

Lo que se trata es de combatir la codificacin moral de la metafsica de la presencia. En esta se da una metavalorarin de la necesidad fundante de lo presente.

El giro lingstico

Se entiende por filosofa lingstica el punto de vista de que los problemas filosficos pueden ser resueltos (o disueltos) reformando el lenguaje o comprendiendo mejor el que usamos en el presente. El punto de partida para analizar y evaluar a la filosofa lingstica de desprende de dos cuestiones:

1) los enunciados de los filsofos lingsticos sobre la filosofa son independientes en su verdad de cualquier tesis filosfica sustantiva?

2) Cuenta los filsofos lingsticos con criterios claros de eficacia para permitir el acuerdo racional?

La primera respuesta a la primera pregunta la da Ayer, este sigue a Carnap. Toma la tesis de que la filosofa es una rama de la lgica. Los enredos de los metafsicos se deben a que no entienden la sintaxis lgica de un lenguaje lgicamente correcto-El anlisis sujeto a este tipo de sintaxis da por resultado que ciertas proposiciones son significativas y otras no.

El procedimiento para decidir si un lenguaje dado es lgicamente correcto es ver si sus proposiciones son susceptibles de verificacin. Los procedimientos de verificacin disponibles son:

1) En lgica y matemtica, derivacin a partir de axiomas o definiciones, 2) en la ciencia emprica, confirmacin por referencia a la experiencia sensorial.

Esta posicin se llama neutral y afirmaba una lgica incondicional. Luego hay una reformulacin. Se toma el criterio de Bergman.:

Tres condiciones para un leguaje ideal:

1) se puede transcribir en l cada proposicin descriptiva (no filosfica).

2) No se puede trascribir nada reconstruido no filosficamente.3) Toda proposicin filosfica se puede reconstruir en funcin de su sintaxis e interpretacin.Los problemas filosficos surgen segn Carnap por la distancia entre la sintaxis histrico gramatical y la sintaxis lgica.

La sintaxis histrico gramatical segn l no es profunda sino poco clara.

Por 3) se puede decir que las tesis filosficas de la historia de la filosofa son sugerencias de cmo sera un lenguaje ideal, en cuanto que tiene que decir algo sobre la realidad. R. piensa que esto no es correcto. Esta idea la traa Ayer.

As filosofa no es ms que recomendacin lingstica.

De esta manera el giro lingstico es un hablar sobre un lenguaje apropiado a manera de un mtodo. Sus argumentos para esta posicin son de naturaleza prctica. Su crtica ms acertada es la que hace ver que se est atendiendo slo a las palabras cuando de lo que se trata es de atender a los conceptos universales que se ponen en palabras.

Desde aqu, quienes opinaban que un lenguaje as poda construirse se convirtieron en los seguidores del Lenguaje Ideal. Opinaban que este era la nica opinin para tomar como trminos primitivos a los objetos de evidencia perceptiva directa, y que cada proposicin descriptiva podra ser traducida a proposiciones sobre estos objetos.

La posicin hegemnica de los filsofos lingistas (y para sus dos corrientes) es el nominalismo metodolgico. Este es la creencia en que todas las preguntas que los filsofos sobre conceptos, universales o naturalezas no pueden contestarse bajo una investigacin emprica sobre particulares (subsumidos bajo tales conceptos); siendo el modo de responderlas contestando preguntas sobre el uso de expresiones lingsticas (y de ninguna otra forma).

Ante esta generalidad surge la pregunta cul es la utilidad de observar nuestro uso de la palabra x, si lo que queremos es conocer esta x?

La mejor respuesta la da Quine como el curso de una reconstruccin general del acceso semntico (cambio del lenguaje sobre objetos sobre el lenguaje sobre palabra):

el acceso semntico es una estrategia que consiste en transportar la discusin a un dominio en que ambas partes se ponen mejor de acuerdo sobre los objetos y los trminos que les conciernen. Las palabras son objetos de uso normal, pblicas, con las que los hombres con esquemas conceptuales diferentes se comunican lo mejor que pueden. Se asciende hasta la parte comn de los esquemas y se discuten fundamentos dispares.

Los compromisos filosficos del nominalismo son: 1) la cosa y el enunciado sobre la cosa son intercambiables; 2) es un mtodo que produce un acuerdo entre filsofos.

Filsofos del lenguaje ordinario.

Rechazan ser una escuela. Creen que el ingls ordinario puede cumplir los requisitos para un lenguaje Ideal. Segn ellos los problemas surgen cuando se utilizan el ingls corriente con trminos en ciertas jergas en lugar de atenerse a las connotaciones ordinarias. Segn esta concepcin cualquier argumento destina a mostrar que el sentido comn produce problemas que no puede resolver es un argumento que utiliza trminos de forma no habitual.

El programo del lenguaje ordinario presupone la siguiente tesis: el lenguaje ordinario ms la ciencia es adecuado para describir cualquier cosa que exista.

Pero se plantea el problema acerca de la naturaleza y funcin de la filosofa. Es decir, sobre las preguntas o su valor y funcin. Los programas de ellos son medios alternativos para los mismos fines de la filosofa.

La crtica de la concepcin del lenguaje ordinario hacia los del lenguaje ideal tiene que ver con los criterios de eficacia para un acuerdo racional.

Apelan a que los lenguajes construidos surgen para depurar y clarificar los conceptos y problemas de los lenguajes ordinarios. Sin embargo, este programa de construccin no puede realizarse desde cero, sino que tiene que explicar como surge desde los lenguajes naturales o no construidos; debe poder dar cuenta de su construccin y de los elementos que se utilizaron en ella. Puesto que eso implica la tarea de describir la conducta lgica de las expresiones lingsticas de los lenguajes naturales esta descripcin en s misma realizara la clarificacin de los problemas. Las rplicas de los lenguajes ideales fueron:

1) la funcin del lenguaje ideal funciona como una nueva forma de hablar. No trata de clarificar los conceptos ordinarios, trata de reemplazarlos.

2) Describir la conducta lgica de las expresiones lingsticas puede conducir a ciertos resultados esperados, pero an no lo ha hecho.

R afirma que es falsa la pretensin de que para una disolucin de problemas sea necesaria la descripcin de los modos conceptuales no construidos. Sin embargo, tambin la dicotoma reemplazo o clarificacin es esprea. Ya que el lenguaje construido no puede pasar ms que por algo parcial ante la vida, pero al menos con carcter teraputico.

Tambin si se quiere implementar el lenguaje ideal y su reemplazo se necesita una justificacin de si ese reemplazo es ms provechoso que la inconveniencia del mismo reemplazo.

Por otra parte, el discurso teraputico y su recurso, tiene problemas para justificar por qu el dejar de preocuparse por algn problema es resolver ese problema. Con respecto al analizado de las proposiciones del discurso ordinario, la equivalencia material frente a la pretensin de equivalencia lgica, hizo que se pusiera en duda el alcance del anlisis sobre los enunciados y tambin sobre sus resultados. El lenguaje ideal no pudo responder a una prueba de adecuacin sobre los enunciados, lo que implicaba la posibilidad de transcribir algo al lenguaje formalizado. Si no se era capaz de lograr entre los filsofos un acuerdo sobre las palabras el giro fracasaba.

Los filsofos del lenguaje ordinario tampoco pueden responder esta cuestin. Ya que cuando el analista del lenguaje ordinario opera en todos los casos (aunque pretenda operar en un rea de control) consiente una reforma tcita y establece una tipulacin de cmo deben significar los trminos en cuestin.

Por otra parte si ellos renuncian a un rea no modificada surge la pregunta de cmo podran responder a la acusacin de que algn filsofo ha usado mal una expresin.

En resumidas cuentas, la sintaxis lgica de una expresin es para Ryle una expresin que si se usa en lugar del original vuelve ms difcil plantear los problemas tradicionales. Segn R, sera mejor decir no que los filsofos han usado mal el lenguaje sino que: 1) partieron de premisas equivocadas o falsas 2) intentaron reformular el lenguaje.

El giro lingstico fue una reaccin contra la visin de la filosofa como una disciplina que busca la solucin de ciertos problemas tradicionales generados por creencias del sentido comn. As se dirigi contra la filosofa como pseudociencia.

Todos los filsofos de giro lingstico tienen problema en un respecto: sobre los criterios de eficacia de la tarea principal de su filosofa: resolver problemas filosficos.

LI: la lgica si bien seala que conexiones pertenecen a cada caso no puede decirnos que son estas conexiones.

LO: es imposible determinar para la teora si el significado de una palabra ha sido ampliado o cambiado.

Elaborar un criterio de anlisis correcto es posible pero presenta las siguientes dificultades: 1) se prohben problemas filosficos interesantes. 2) hay muchos enunciados sobre los que la observacin de la conducta lingstica respecto de su verdad. 3) los criterios de equivalencia producen parfrasis engaosas. 4) el anlisis sobre la conducta de los hablantes deja abierta posibilidad de que la conducta cambie y modifique la significacin.

Se buscan entonces abandonar las prcticas lingsticas que se desprendan de verdades necesarias (de esencia). Cuando se abandona la tarea de buscar la esencia se rompe con la visin clsica de filosofa y se apoya a la filosofa positivista, que es crtica y que cuya actividad consiste en su capacidad para disolver problemas.

En ningn caso la filosofa lingstica pudo abandonar el nominalismo metodolgico y no le es posible acceder a criterios autnomos sobre los fenmenos y su naturaleza con independencia del conocimiento de cmo utilizamos las palabras.

En lo que refiere a los criterios de acuerdo sobre la resolucin de problemas, se los tiene en lo particular de los problemas mal formados y por lo tanto en demostraciones lingsticas, en lo general, es decir sobre un problema que se trate todos los casos.

Seis posibilidades para el futuro de la filosofa despus de la disolucin de los problemas tradicionales:

1. el rechazo del nominalismo metodolgico. Un mtodo para ponerse de acuerdo acerca de las tesis filosficas tradicionales es la fenomenologa.

2. eliminar el nominalismo y los criterios terminantes de acuerdo. La filosofa deja de ser argumentativa y se aproxima a la potica. Heidegger.

3. se mantiene el nominalismo. Se desechan criterios determinantes de acuerdo. Se vuelven a elaborar lenguajes. Estos ya no diluyen problemas sino que son ms bien propuestas sobre cmo hablar.

4. se da por finalizada la filosofa.

5. la lingstica emprica nos dota de formaciones acerca de las condiciones necesarias y suficientes de verdad. Se explican los instintos que llevan a filosofar.

6. la lingstica emprica descubre las condiciones necesarias de la posibilidad del lenguaje.Segn R habra dos filosofas del futuro: la filosofa como propuesta contra la filosofa como descubrimiento. El giro no es lo ms importante sino la revisin.Quine pone nfasis en el acceso semntico como mtodo de acuerdo (no hubo avances en esa rea).

Putnam critic que el lenguaje tenga correlatos mentales dentro de la persona.

Quine. Dos dogmas del empirismo

1 dogma: que hay verdades analticas (de las significaciones e independientes) y sintticas (basadas en los hechos).

2 dogma: el reductivismo que opera sobre la experiencia inmediata y que da sentidos a los enunciados. Destruccin del 1 dogma: ataque a la nocin de analiticidad.

El enunciado analtico es aquel que no atribuye a un sujeto ms de lo que ya est conceptualmente contenido en dicho sujeto.

Dos deficiencias de esta concepcin: 1) se limita a enunciados de la forma sujeto-predicado, 2) apela a la nocin de contenido y la deja a nivel de una metfora.

Se apela en ste tipo de enunciados a una significacin independiente de los hechos.

La significacin es aquello en que se convierte la esencia cuando se separa de su objeto de referencia y se adscribe a la palabra.

El objeto primario de la teora de la significacin es la sinonimia de las formas lingsticas y la analiticidad de los enunciados.

Luego los enunciados se dividen en dos clases: 1) lgicamente verdaderos (ningn hombre no casado es casado) 2) enunciado analticos (ningn soltero es casado)

El segundo se convierte en verdadero haciendo una sustitucin de equivalencia. Pero no hay criterios para ello.

Algunos dicen que los enunciados analticos se reducen a los verdaderos por definicin (soltero tiene como definicin hombre no casado, pero esto no es ms que una sinonimia que no est aclarada).

Otros apelan a la explicacin. Pero esta tambin se basa en sinonimias preexistentes.

Un ltimo tipo que no apela a sinonimias preexistentes es la introduccin, ya que la definicin se hace sinnimo de lo definido porque ha sido creado a tal fin. Sin embargo, aunque no se expresa la sinonimia ni en la definicin ni en lo definido ha sido presupuesta de forma tcita.

Otros afirman que una sinonimia puede justificar las verdades analticas en funcin de una intercambiabilidad que conserve el valor de verdad de los enunciados que se intercambian (salva veritate).

Se trata aqu de apelar a la sinonimia cognitiva y de demostrar que dos trminos extensionales con una misma extensin son intercambiables en funcin de su verdad. El punto es que tampoco esta coincidencia extensional nos asegura nada ms una circunstancia fctica accidental. Que la verdad para uno y otro sea la misma no asegura la analiticidad. El punto es que la analiticidad se entiende por adelantado.

Una ltima defensa de la analiticidad es aquella que dice que las reglas semnticas de los lenguajes ordinarios no son adecuadas para dar cuenta de las verdades analticas. Quine demuestra que se falla al traducir del lenguaje ordinario el concepto de analiticidad puesto que no se sabe bien que significa. Por otra parte, una vez que se lo intenta componer en un lenguaje formalizado se hace difcil definir la verdad de los mismos hacindola depender de que son aquellas que slo dependen reglas semnticas.

Destruccin del 2 dogma: el segundo dogma se articula sobre la teora de la verificacin. Sostiene que el sentido de un enunciado es el mtodo de confirmacin o confutacin.

La concepcin ingenua afirma que entre un enunciado y las experiencias de confirmacin hay una relacin directa. As se sostiene un reductivismo radical que afirma que todo enunciado con un sentido es traducible a un enunciado verdadero o falso acerca de la experiencia inmediata.

En ninguna de sus variantes se da la menor indicacin de cmo podran traducirse ciertos tipos de enunciado esenciales para la labor cientfica.

El dogma reductivista sobrevive en la suposicin de que todo enunciado aislado puede ser confirmado o no. Asimismo se halla en estrecha relacin con el primer dogma, ya que mientras que se considera significante hablar de confirmacin de un enunciado, parece tambin significativo hablar de un tipo lmite de enunciado que resultan vacuamente confirmados ocurra lo que ocurra: los enunciados analticos. Los enunciados traen consigo la dogmtica de que la verdad de un enunciado es analizable en algo lingstico y en algo factual.

Desde el punto de vista del empirismo, se da el segundo dogma (el componente factual debe reducirse a un campo de experiencias confirmativas).

Desde el punto de vista de caso extremo se da el primer dogma (si el componente lingstico determina todo lo dems el enunciado es analtico).

Hablar de esta distincin genera sin sentidos. La unidad de significacin emprica es el todo de la ciencia. el todo de la ciencia es como un campo de fuerzas cuyas condiciones lmites las da la experiencia. Un conflicto en los lmites da lugar a reajustes en el interior. Ninguna experiencia concreta y particular est ligada a un enunciado concreto dentro del campo, todo es indirecto y se establece a partir de consideraciones sobre el equilibro.

La periferia sensible est en una laxa asociacin reflexiva con la probabilidad de que en la prctica usemos uno u otro enunciado para someterlo a revisin.

Hay para Quine un esquema conceptual de la ciencia que sirve para predicar la experiencia futura en funcin de la pasada.

Su definicin de pragmatismo: todo hombre recibe una herencia cientfica y estmulos sensoriales, las consideraciones que le mueven a moldear su herencia cientfica para recoger nuevos estmulos son, si racionales, pragmticas. Quine. Traduccin y significacin

Hay que atenerse a las estimulaciones no verbales para atender el contenido emprico del discurso. Se trata de contemplar la parte de lenguaje que puede recibir sentido a partir de las condiciones de estimulacin y cmo se desarrolla una variacin emprica en un esquema conceptual.

Para ello es necesario confecciones manuales de traduccin.

Cuanto ms firmes sean los vnculos directos de una sentencia con una estimulacin no verbal menos divergen las traducciones en los manuales.

Se toma como caso relevante la traduccin radical es decir la traduccin al lenguaje de un pueblo al que se llega por primera vez y no se tiene ayuda de ningn intrprete.

Aqu el objetivo del lingista es buscar las estimulaciones que provocaran la aprobacin o discrepancias del indgena.

La mejor manera de identificar una estimulacin consiste en entenderla como el esquema de irradiacin cromtica del ojo. Al entender las estimulaciones de ese modo les atribuimos una finura de detalle irrebasable. Estos esquemas no son instantneos sino de irradiaciones de cualquier duracin.

La traduccin de un ruido emitido por alguien entonces se refiere a correlaciones con estimulaciones no verbales. La significacin estimulativa, afirmativa de una sentencia es la estimulacin que provoca asentimiento y la negativa discrepancia. Sus condiciones son: 1) tiempo transcurrido, 2) sentencia, 3) hablante, 4) horizonte temporal.

La significacin estimulativa es una disposicin: predisposicin a asentir o no sobre estimulaciones diversas. La estimulacin no es un acaecimiento sino un forma ocurrencial repetible (no hay dos estimulaciones iguales, sino una misma dos veces). La sentencia es la nica va de acceso a la teora.

Distintos tipos de sentencia:

1) sentencias ocasionales: aquellas que no imponen el asentimiento ms que si se preguntara luego de una estimulacin adecuada.

2) Sentencias fijas: el sujeto puede repetir el asentimiento sin que se le provoque estimulacin.

3) Sentencias inhibitorias: no dejan respuesta.

4) Sentencias irrelevante: no necesitan respuestas.

La sentencia ocasional es de lo que dispone el lingista. Este no traduce por identidad de las significativas estimulaciones, sino por aproximacin mxima a las mismas.

Si hay seales de intrusin de alguna informacin lateral (respecto de un trmino) encontramos la discrepancia en la significacin estimulativa de entre varios hablantes de un lenguaje.

Las sentencias ocasionales cuyas significaciones estimulativas no varan por influencia de informacin lateral pueden llamarse sentencias observacionales (la nocin de observacionalidad es relativa al mdulo de estimulacin). Si se alarga un mdulo hay mayor coincidencia en este sentido operan las sentencias fijas.

La nocin de observacionalidad es por ende social.

Si nos atenemos a un solo hablante la sinonimia estimulativa es criterio de sinonimia para sentencias no obeservacionales como observacionales.

El lingista tiene dos estadios: 1) mientras correlata las sentencias ocasionales (no puede eliminar la falsedad) 2) se ha hecho bilinge y trasciende lo observarcional.

La sinonimia estimulativa nos sirve en las comparaciones intersubjetivas. Se trata de ir por sentencias breves y construir expresiones compuestas con elementos de una clase adecuada. Las sentencias ocasionales y la significacin estimulativa son moneda universal. Los trminos y las referencias son locales, propio de nuestro esquema conceptual.

Existe tambin el dominio veritativas (negacin conjuncin disyuncin). Se apela para su compresin tanto a las sentencias ocasionales como a las fijas.

La sinonimia estimulativa y analiticidad son sociales y asentidas por todo el mundo.

Luego la traduccin radical procede segmento por segmento valindose de hiptesis analticas al final del proceso la verdad depende de las teoras y del lenguaje.

Hempel. El criterio empirista del significado.Empirismo moderno: todo conocimiento no analtico se basa en la experiencia. El empirismo lgico agrega: las oraciones son significativas si son analticas o contradictorias, o capaces de ser confirmadas por la experiencia.

El criterio de verificabilidad es una confirmacin experiencial.

3 conceptos para explicar el criterio:

1) Caracterstica observable: propiedad o relacin de objetos fsicos que en circunstancias adecuadas su presencia o ausencia puede determinarse por la observacin.

2) Predicado observacional: trminos que designan caractersticas observables.

3) Oracin observacional: oracin que afirma de algo nombrado que tiene o carece de ciertas caractersticas observables.

Las pruebas de las verificaciones sobre hiptesis empricas se expresan en estos trminos.

1 Concepto de verificabilidad.

Verificabilidad completa: una oracin tiene significado emprico si se deduce de una clase consistente de oraciones observacionales.

Defectos:

-excluye las oraciones universales y es imposible expresar leyes.

-Excluye los cuantificadores existenciales (cuando se unen a universales).

-No contempla la verdad para disyunciones unificadoras.

-No se puede otorgar sentido a oraciones que niegan cuantificaciones existenciales.

2do Concepto de verificabilidad.

Refutabilidad completa: una oracin tiene significado emprico si su negacin se sigue de una clase consistente de oraciones observacionales. Este criterio califica a una oracin de empricamente significativa si su negacin satisface el requisito de la verificabilidad completa.

Es inadecuado por las mismas razones que el anterior. El problema es que llega a resultados muy restrictivos o demasiado amplios.

Las dificultades de la bsqueda de un criterio adecuado no se presentan en un lenguaje artificial cuyo vocabulario y gramtica excluyan la posibilidad de formar oraciones que se pretenda eliminar.

3er Criterio. Criterio de traductibilidad: una oracin tiene significado cognitivo si es traducible a un lenguaje empirista. El lenguaje empirista contiene un vocabulario y unas reglas de construccin:1) El vocabulario contiene:

locuciones habituales de la lgica.

-Predicados observables.

-Expresiones de finibles por las anteriores.

2) las reglas son las de un sistema lgico contemporneo.

El vocabulario emprico bsico de un lenguaje empirista se construye formado por trminos fenomenalistas que se refieren a lo perceptivo o sensitivo.

As se evitan los problemas referidos a los criterios.

Problemas:

Muchos trminos de la ciencia no pueden ser definidos por predicados observables (la temperatura y otros trminos disposicionales). Disposicionales son los trminos que expresan la disposicin o propensin a reaccionar de un modo determinado en circunstancias especficas.

Soluciones:

Se trat de encontrar la lgica de estos trminos en los condicionales contrafcticos. No se la hall.

Carnap introdujo trminos nuevos: oraciones reductivas que tienen el carcter de definiciones parciales o condicionales.

Estas proporcionan definiciones operacionales que en lugar de definir en sentido estricto son especificaciones parciales del significado.

El lenguaje empirista ms oraciones reductivas a predicados observacionales forman el ltimo modelo del empirismo.

El nico problema de este criterio es que no puede darle sentido a trminos de construcciones tericas avanzadas (cosas como potencial gravitatorio).

Sien embargo, si se toman estas teoras como edificios deductivos axiomatizados y luego a lo deducido se le otorga una interpretacin emprica, se salva el criterio.El problema es ahora determinar el significado de una oracin significativa.

El contenido de un enunciado con significado emprico no puede ser exhaustivamente expresado por medio de oraciones observacionales (problemas con cuantificadores mixtos y universales).

El significado cognoscitivo de un enunciado en lenguaje empirista se refleja en la totalidad de sus relaciones lgicas con todos los dems enunciados en aquel lenguaje y no solo con lo observacional. As, los enunciados de la ciencia emprica tienen un significado excedente adems del observacional.

El criterio empirista del significado como resultado de una explicacin representa una proposicin lingstica adecuada en dos sentidos:

1) la explicacin proporciona un anlisis de un significado aceptado para lo explicado implicando una asercin emprica.

2) la explicacin realiza una reconstruccin racional de lo explicado; un conjunto de explicaciones como un marco conceptual que permite reformulacin y contextualizacin.

Neurath. Proposiciones protocolares.N. critica un lenguaje ideal construido a partir de proposiciones atmicas puras. Un lenguaje cientfico no tiende hacia all. Lo primero con lo que cuenta el filsofo es un lenguaje trivial histrico; y si lo limpiamos de metafsica se llega a un lenguaje fisicalista.

Este leguaje slo sirve a determinadas ciencias.

Las otras se expresan con una mezcla de las clases anteriores.

Sien embargo, no se pueden tomar las oraciones protocolares concluyentemente establecidas como punto de partida de las ciencias.

Primero se necesita la educacin en el dialecto purgado y luego en el lenguaje de la ciencia unificada.

La ciencia unificada consta de proposiciones fcticas que son de dos tipos: a- proposiciones protocolares y b- proposiciones no protocolares.

Las proposiciones protocolares son proposiciones fcticas de la misma forma lingstica slo que en su caso, siempre aparece un nombre personal en una asociacin especfica con otros trminos.

Es esencial que aparezca el nombre de una persona.

Una proposicin protocolar completa encerrada entre parntesis muestra un nombre personal y un trmino del dominio de los trminos de percepcin.

Se trata de alcanzar para la ciencia unificada un sistema libre de contradiccin construido de proposiciones protocolares y no protocolares (incluidas leyes).

Cuando se nos muestra una nueva proposicin controlamos si se halla o no en contradiccin con el sistema. Si la aceptamos y modificamos el sistema es entonces verdadera.Verificacin es un trmino que slo puede utilizarse en relacin a proposiciones en tanto que series de signos que se pueden utilizar en el marco de prueba de una reaccin.

Proposiciones, son asociaciones de acumulaciones de tinta sobre el papel y asociaciones de vibraciones de la atmsfera a las que bajo determinadas condiciones podemos considerar como iguales.

Los protocolos cientficos al ser elaborados deben hacerse de la forma ms sencilla posible. Todas las proposiciones son de un nivel igualmente primario.

El lenguaje de las proposiciones protocolares es intersubjetivo.

Si alguien quiere volver a leer lo que not en otro momento es completamente ajeno a lo notado.

Los protocolos de cualquier momento deben poderse incorporar a los de cualquier otro protocolo.

En el dialecto universal no es posible distinguir entre mi protocolo personal y un protocolo ajeno.

Shlick. el fundamento del conocimiento.

Ataque a los enunciados protocolares.

S. supone que el problema con ellos es que remiten al problema ltimo del conocimiento.

S. sostiene que los protocolarcitas suponen que de expresar los hechos brutos en este tipo de enunciados de una manera absoluta se consigue un conocimiento fuera de toda duda.La crtica sobre los enunciados protocolares sostiene que conducen a un relativismo particular, ya que suscitan la cuestin de la certeza con que se puede afirmar su verdad y adems a la circunstancia de que estn expuestos a toda duda posible.

El problema es que como tales son igual que el resto de los enunciados cientficos; son nada ms que hiptesis.

Esta manera de definir los enunciados protocolares lleva a desechar su concepcin por carecer de relevancia.

El criterio de verdad para la ciencia no se propone una concordancia entre proposiciones cientficas y enunciados protocolares, sino ms bien, que todos concuerden entre s y estn sujetos a correccin (como resultado de su concepcin).

El nuevo criterio de verdad es uno de concordancia mutua de los enunciados (teora de la coherencia).

Aqu concordancia significa que un enunciado es compatible con otros y no est en contradiccin con los dems. La verdad se despliega desde acciones iniciales (arbitrarias). Verdad formal.

Y con otros enunciados significa que el criterio de verdad no puede ser compatibilidad con cualquier enunciado, exige concordancia con ciertos enunciados excepcionales que no son arbitrariamente elegibles (enunciados materiales).

No habra de este modo observaciones sino slo compatibilidad de los enunciados.

El problema con esta concepcin es que no puede dar ningn criterio de compatibilidad.

La propuesta de S. es cambiar los enunciados protocolares por enunciados fundamentales. Los enunciados fundamentales se seleccionan en funcin de una retencin que signifique un mnimo de modificaciones.

Esta retencin se gua por un principio de validez que examina y ordena en funcin de su origen. Los primeros y los que estn en la cima expresan hechos de mi propia percepcin que se estn realizando en el presente. Cualquier sistema de conocimiento debe tomarlos como criterio ltimo.

Los enunciados de este tipo tienen su papel en la ciencia en cuanto a que lo inmediatamente percibido es motivacin de su formacin. En esto difieren de los protocolares que son meras hiptesis sobre lo observado. En esta ptica, un enunciado de observacin es casi imposible escribirlo.

El enunciado de observacin est al principio de un proceso de construccin del conocimiento impulsndolo y estimulndolo. Cuanto de su contenido se incorporar al conocimiento, queda indeterminado.

Otra tarea que les corresponde es la de verificacin. La ciencia formula predicciones y el acontecimiento de constatacin es el anunciado de observacin..

El placer del conocimiento es el placer de la verificacin; el sentimiento de haber conjeturado correctamente, y eso es lo que otorgan los enunciados de observacin.

La validez de los enunciados de observacin depende de la finalidad. Son un final absoluto. En ellos queda cumplida la tarea del conocimiento. Constituyen puntos fijos absolutos.

En el caso de los enunciados de observacin la determinacin de su sentido y la de su verdad coinciden como en el caso de los enunciados analticos. Hay captacin conjunta. Son inmediatos. Tienen el valor de la validez absoluta y carecen de valor por su inutilidad como fundamento permanente. La ciencia es como una llama que se hacia ellos y los consume.

Carnap. Empirismo, semntica y ontologa.

Marco lingstico: sistema de nuevas maneras de hablar, sujeto a nuevas reglas que dispone a un lenguaje para hablar de ciertos tipos de nuevas entidades.

Sinos referimos a cuestiones de existencia de las entidades del nuevo tipo dentro del marco, llamamos a estas cuestiones internas.

Si nos referimos a cuestiones de existencia del sistema total de entidades como un todo hablamos de cuestiones externas.

Las cuestiones internas se resuelven por medio de investigaciones empricas; las observaciones se evalan de acuerdo a ciertas reglas.

El problema viene cuando consideramos las cuestiones externas.; ser real en el sentido cientfico es ser un elemento del sistema. Lo que otorga sentido (el sistema) no puede ser analizado por ninguna cosa a la que sta le ha dado sentido.

Los que plantean la cuestin de la realidad del mundo mismo tienen en mente una cuestin prctica, que concierne a la estructura de nuestro lenguaje.

Si alguien decide aceptar un lenguaje de cosas, ha aceptado un mundo de cosas. Se aceptan reglas para formar enunciados, contrastarlos o no.El lenguaje de cosas funciona con un alto grado de eficiencia al servicio de objetivos de la vida diaria.

La aceptacin de una nueva clase de entidades se representa en el lenguaje mediante la introduccin de un marco de nuevas formas de expresiones que ha de usar de acuerdo con un conjunto nuevo de reglas. Son dos los pasos esenciales:

1) La introduccin de un trmino general, un predicado de nivel superior para la clase nueva de entidades que nos permita decir de cualquier entidad que pertenece a esa clase (rojo es un propiedad.)

2) La introduccin de variables del nuevo tipo. Las nuevas entidades son valores de estas variables. Con la ayuda de las variables se pueden formular oraciones generales concernientes a las nuevas entidades. Luego de introducir las nuevas formas al lenguaje es posible construir cuestiones internas y posibles respuestas.

Frente a la opinin de los filsofos que opinan que deben discutirse las cuestiones externas ms que las internas, la postura de Carnap es que la introduccin de las nuevas maneras de hablar no necesita ninguna justificacin teortica porque no implica ninguna asercin de realidad. LO que hay es ms una cuestin prctica de si aceptamos o no las nuevas formas lingsticas (la aceptacin no es ni verdadera ni falsa). La aceptacin de un marco lingstico tampoco implica la aceptacin de una doctrina metafsica respecto de las entidades en cuestin.

Semntica: en un anlisis de este tipo se dice con frecuencia que ciertas expresiones de un lenguaje designan (o nombran o se refieren) a ciertas entidades extralingsticas. Se toman como designata cosas o eventos fsicos. La crtica a esto es que se tratan como nombres expresiones que no son nombres. La cuestin de la admisin de cierto tipo de designata (significados) se resuelve en la cuestin de aceptabilidad de un marco lingstico para esas entidades.Popper. La lgica de la investigacin cientfica. De la base emprica.Popper comienza criticando dos posiciones que considera dogmticas del empirismo: el sensualismo y el psicologismo.

El sensualismo supone que los enunciados cientficos hablan de nuestras experiencias en el sentido de nuestras convicciones inmediatas. P. afirma que esta doctrina, crea el problema de la induccin y de los universales, ya que estos ltimos no pueden ser reducidos a clases de experiencias.

El psicologismo intenta con las clusulas protocolares (enunciados que no necesitan confirmacin) fundamentar a las ciencias. Pero Popper cree que al hacer esto solo traduce el psicologismo a un modo formalizado de hablar (las clusulas slo refieren a lo dado o datos de los sentidos.

Popper propone que slo la observacin nos proporciona un conocimiento acerca de los hechos, pero este percatarnos de algo no justifica la verdad de ningn enunciado.

Se trata de ver cmo son las conexiones lgicas entre enunciados cientficos.

Para P. cualquier enunciado cientfico emprico puede ser presentado de modo tal que cualquiera con la tcnica pertinente pueda contrastarlo.

Hay que otorgarle el valor apropiado a los enunciados bsicos.

Estos son necesarios para decidir si una teora ha de llamrsele falsable (o emprica), as como para corroborar las hiptesis falsadotas (y para falsar teoras). Tienen que poder satisfacer 2 condiciones:

1) no se puede deducir ningn enunciado bsico a partir de un enunciado universal no acompaado de condiciones iniciales.

2) un enunciado universal y un enunciado bsico (observacional) han de poder contradecirse.La condicin 2 puede satisfacerse nicamente si es posible deducir la negacin de un enunciado bsico de una teora a la que este contradiga; a partir de ello y de 1 se sigue que todo enunciado bsico debe tener una forma lgica tal que su negacin no pueda a su vez ser un enunciado bsico.

Los enunciados universales y existenciales cumplen con lo anterior. Unos son negaciones de los otros.

Los enunciados bsicos tienen la forma de enunciados existenciales singulares.

El enunciado bsico tiene tambin que cumplir un requisito material (referente al evento que ocurre): ese evento ha de tener que ser observable, es decir, los enunciados bsicos deben poder ser contrastables intersubjetivamente por la observacin.

La observabilidad de los enunciados no es psicolgica, es un trmino no definido, un conjunto primitivo cuyo empleo aprende el epistemlogo.

As, siempre que una teora se someta a contraste, ya resulte falsada o no, el proceso tiene que detenerse en algn enunciado bsico que decidamos aceptar. Todo enunciado bsico puede ser sometido a contraste utilizando como piedra de toque cualquiera de los enunciados bsicos que puedan deducirse de l valindose de una teora.

Los enunciados bsicos se aceptan como resultados de una decisin o un acuerdo desde el punto de vista de que son convencionales.

Por regla general se llega a un acuerdo sobre la aceptacin o rechazo de enunciados bsicos con ocasin de aplicar una teora; el acuerdo forma parte de la aplicacin que consiste en someter a contraste la teora. El ponerse de acuerdo es lo mismo que ejecutar una accin con una finalidad.Las conexiones existentes entre nuestras diversas experiencias son explicables a base de las teoras que nos ocupamos de contrastar y deducir de ellas.

Elegimos la teora que se mantiene mejor en la competicin con las dems teoras, las que por seleccin natural muestran ser ms apta para sobrevivir; y esta ser la que haya resistido las contrastaciones ms exigentes y la que haya sido contrastada de modo ms riguroso.

Desde el punto de vista lgico el contraste de una teora depende de ciertos enunciados bsicos que se aceptan o rechazan en virtud de nuestras decisiones. En ltima instancia las decisiones determinan el destino de las teoras. Y la eleccin viene determinada por cuestiones de utilidad.

La propuesta de P. apela a una exigencia en las contrastaciones. La eleccin sobre una teora se encuentra bajo la influencia decisiva de la aplicacin de dicha teora y de la aceptacin de los enunciados bsicos relacionados con tal aplicacin.

Davidson. De la idea misma de un esquema conceptual.

Los esquemas conceptuales son formas de organizar la experiencia; son sistemas de categoras que dan forma a los datos de las sensaciones; son puntos de vista desde los cuales individuos, culturas o perodos examinan los acontecimientos que se suceden. La realidad misma es relativa a un esquema; lo real de un sistema no es lo real del otro.

Habra una metfora para esta postura del relativismo conceptual: la de los distintos puntos de vistas.

El problema es que esto deja entrever que no es posible que alguien pueda ocupar un punto de observacin para comparar esquemas conceptuales desprendindose de los suyos propios.

D. trae a cuestin una metfora que le atribuyen a Kuhn. K. nos dice que los cientficos tienen inconmensurables sistemas de conceptos desde los que ven un nico punto.

Se habla as de un dualismo de esquema total (o lenguaje) y de contenido ininterpretado.

El problema con el esquema total (lenguaje) es que se vale siempre de una distincin analtico-sinttica. El problema se convierte entonces en ver si es posible conservar un lenguaje con alteraciones en su aparato conceptual bsico. Si descartamos el dualismo analtico-sinttico abandonamos un dualismo de oraciones y una concepcin del significado. Pero, por ejemplo, podemos seguir sosteniendo que todas las oraciones tienen contenido emprico.

Sin embargo, el contenido emprico se explica por su referencia a los hechos, a la experiencia o a los estmulos sensoriales.

As desechamos los significados y la analiticidad y conservamos la idea de que el lenguaje engloba un esquema conceptual. Y as conseguimos un nuevo dualismo el de esquema conceptual y contenido emprico. Este nuevo dualismo es tal que presenta un sistema organizado y algo que espera ser organizado.

Este es el tercer dogma del empirismo.

Primer formulacin (Whorf): el lenguaje produce una organizacin de la experiencia. En la metfora de intertraducibilidad lo que nos ayuda a comprender una afirmacin cuando la traduccin falla es la experiencia comn (Quine). Es esencial lo neutral y comn situado fuera de los esquemas.

El contenido neutral que espera ser organizado lo proporciona la naturaleza.

La idea es entonces que algo es un lenguaje y est asociado a un esquema conceptual (podamos traducirlo o no) si se encuentra en una cierta relacin con la experiencia (apuntes sensoriales). El problema es qu es esa relacin.

No podemos asignar un significado claro a la nocin de organizar un nico objeto a menos que se entienda una pluralidad. Ahora, cualquiera sea esta pluralidad la organizaremos y la individuaremos segn principios familiares (necesitamos de un lenguaje parecido al nuestro).

Hablar de experiencia sensorial en lugar de evidencia expresa una visin acerca de la fuente o naturaleza de la evidencia. La totalidad de la evidencia sensorial es aquello que requerimos siempre y cuando sea toda la evidencia que exista ( toda la evidencia para que nuestras oraciones y teoras sean verdaderas). Sin embargo, nada hace verdaderas a estas ltimas.

Ningn repertorio fijo de significado ni una realidad neutral frente a las teoras proporciona una base para la comparacin de esquemas conceptuales. Los esquemas son inconmensurables. Se abandona la metfora de que cada esquema tiene una posicin y provee un punto de vista.

Lo que se necesita (en funcin de la intertraducibilidad) es una teora de la traduccin o de la interpretacin que no efecte posiciones acerca de significados, conceptos o creencias compartidos.

Lo que necesitamos es una teora que simultneamente tenga en cuenta actitudes e interprete el habla.

Aceptamos entonces ciertas actitudes generales hacia las oraciones como evidencia bsica para una teora de la interpretacin radical. Dependemos aqu de la actitud de aceptar como verdadera una oracin. Nosotros slo sabemos que alguien considera una oracin verdadera. Esto funciona de vector de dos fuerzas: la evidencia para abstraer una teora del significado y de la creencia (a partir de oraciones que se consideran verdaderas).

Si todo lo que conocemos son las oraciones que el hablante considera verdaderas y no podemos suponer que su lenguaje sea el nuestro, la nica posibilidad es suponer un acuerdo general respecto de las creencias. As asignamos a las oraciones de un hablante condiciones de verdad que ellas obtienen al momento en el que el hablante considera que esas oraciones son verdaderas.

El mtodo est destinado a ser posible el desacuerdo significativo, y de esto depende enteramente una fundamentacin en el acuerdo.

Comprendemos al mximo las palabras y pensamientos de otros cuando interpretamos en una forma que optimice el acuerdo.

Davidson. El mito de lo subjetivo.

La tradicin opina que las mentes son muchas. El punto de partida para esta postura es el relativismo de la posicin que se ocupa en el espacio y en el tiempo.

En el relativismo se trata de cul es el punto de referencia comn al que cada esquema es relativo.

D. rechaza la idea de un relativismo as. La solucin de una referencia comn no le satisface.

Para l, no es posible entender un esquema extrao. Sin embargo, esto no tiene que ver con una incapacidad de nuestro entendimiento, sino ms bien con lo que entendemos por esquema de conceptos.

El punto de vista dogmtico afirma que los esquemas son distintos modos de ordenar la experiencia entendiendo por esta lo dado sin interpretacin no sometido a categoras.

Hay muchas maneras en que el contraste esquema/contenido ha hallado expresin: a) esquema como ideologa; esquema como lenguaje; contenido como datos sensoriales; contenidos como modificaciones adverbiales.

Lo importante es que tenga que haber una fuente ltima de evidencia cuyo carcter pueda ser plenamente especificado sin referencia a aquello de lo que es evidencia. As las pautas de estimulacin, al igual que los datos sensoriales pueden ser identificados y descritas sin referencia a lo que ocurre alrededor.

Una vez aceptado el punto de partida cartesiano no es posible decir acerca de la evidencia de lo que es evidencia.

Si nuestra evidencia es subjetiva, tambin nuestras creencias. Si nuestras creencias pretenden representar algo objetivo el carcter subjetivo nos impide determinar si corresponden a lo que queran representar.

El proceso causal y mecnico de la adquisicin del habla no puede tener relevancia para el significado y la referencia.

La captacin del significado viene determinada por los elementos terminales del proceso de condicionamiento y se le pone a prueba tan solo mediante el producto final, es decir, el uso de palabras engranadas con objetos y situaciones apropiadas.

Los significados, de esta forma, no son subjetivos ni mentales.

Nuestras oraciones ms simples reciben sus significados de las situaciones que generalmente causan que las consideremos verdaderas o falsas, puesto que considerar verdadera o falsa una oracin que entendemos equivale a tener una creencia.

Los sentidos y sus aportaciones no desempean un papel terico central en la explicacin de la creencia, el significado y el conocimiento. No son de importancia terica en la explicacin filosfica del conocimiento sino un mero accidente emprico.

Si la epistemologa da un paso hacia esta concepcin, no quedan ya objetos sobre los que platear el problema de la representacin. Las creencias son verdaderas o no, pero no representan nada. Es el fin de la verdad como correspondencia, las representaciones son relativas a un esquema.

La sensacin desempea solo un papel causal al conectar las creencias con el mundo, pero no un papel epistemolgico en la determinacin de los contenidos de esencia.

Al aceptar esto abandonamos el tercer dogma del empirismo.

El empirismo es la doctrina segn la cual lo subjetivo constituye el fundamento del conocimiento emprico objetivo. Pero el conocimiento emprico no necesita fundamento epistmico.

Cinco consideraciones acerca de los contenidos de la mente:

1) los estados de la mente como deseos, anhelos, creencias, se identifican por el contexto social e histrico en el que se adquieren.

2) Lo anterior no demuestra que los estados mentales no sean estados fsicos de una persona; la manera en que describimos e identificamos eventos y estados no tiene relacin directa con el lugar en que estn.

3) El hecho de que los estados de la mente se identifiquen por relaciones causales con objetos y eventos es esencial para la posibilidad de la comunicacin y hace que una mente sea accesible, en principio, a las dems.

4) La idea de que hay una divisin bsica entre la experiencia no interpretada y un esquema conceptual organizado constituye un profundo error. No hay intermediarios epistemolgicos.

5) No hay objetos del pensamiento. Hay una gran cantidad de estados mentales pero su descripcin no requiere la existencia de entidades fantasmales contempladas por la mente.

Qu queda del concepto de subjetividad?

1) Los pensamientos son privados en el sentido de que pertenecen a una persona.

2) El conocimiento de los pensamientos es asimtrico en cuanto que la persona que tiene un pensamiento, por regla general, lo tiene de un modo en el que los dems no pueden saberlo.

Davidson. Una teora de la coherencia.

D. sostiene que una teora de la coherencia genera correspondencia. La coherencia entonces se postula como una prueba de la verdad, que si es tal, es entonces una prueba del juicio de que las condiciones objetivas de verdad han sido satisfechas. Se trata de no explicar los significados sobre la base de una confrontacin.

D. dice de su teora de la coherencia que se aplica a creencias en oraciones que son verdaderas para alguien que las entiende. Las creencias son estados de las personas que tienen intenciones, deseos; son estados causados y que causan a su vez- eventos internos y externos al cuerpo de sus poseedores.

Una teora de la coherencia no garantiza que lo que se cree sea as, lo que mantiene es que en un conjunto coherente de creencias la mayora son verdaderas.

Toda creencia, en un conjunto total coherente de creencias, tiene una pretensin de verdad a su favor por el hecho de ser parte de ese conjunto.

La pregunta es cules son las creencias con las cuales la coherencia crea una presuncin de verdad?

La verdad para D. es de carcter primitivo, y cuando se aplica a oraciones tiene carcter desentrecomillador de la convencin T de Tarski (P es verdadera L, si y slo si P, donde P es una oracin cualquiera de L).

Sin embargo, para D. esto no agota la verdad: la verdad contiene tambin lo que lleva de un lenguaje a otro lenguaje o de un hablante a otro. En esta ptica, la verdad de una misin depende de dos cosas: 1) lo que significan las palabras dichas. 2) el modo en que est dispuesto el mundo.

(dos intrpretes pueden estar en desacuerdo sobre la verdad de una emisin pero slo si difieren acerca de cmo son las cosas en el mundo que comparten o acerca del significado de la emisin).

De este estado de la cuestin D. extrae: 1) la verdad no es correspondencia con el modo en que las cosas son. 2) una teora del conocimiento que admita que podemos conocer la verdad ha de ser una forma de realismo (no realismo a la Putnam [relativo a un esquema] no realismo metafsico [es no epistmico (las teoras establecidas pueden ser falsas)]).

La idea de D. en este punto es que la independencia entre verdad y creencia requiere nicamente que cada una de nuestras creencias pueda ser falsa. En esta lnea, lo que distingue una teora de la coherencia es simplemente la idea de que nada puede contar como una razn para sostener una creencia excepto otra creencia.

Se rechaza toda otra base para el conocimiento, es decir, una base epistemolgica como fuente de justificacin.

El punto central para D. es que dichas creencias no requieren justificacin, pues la existencia de la creencia implica la existencia de la sensacin, de modo que la existencia de la creencia implica su propia verdad. La relacin entre una sensacin y una creencia no puede ser de carcter lgico. La relacin es de carcter causal. Las sensaciones causan creencias y slo en ese sentido constituyen las bases de las mismas. Una explicacin causal de una creencia no muestra como est justificada la creencia (no hay ninguna asimilacin entre causa sensorial y evidencia).

Dar el significado de una oracin exigir especificar aquello que justificara su asercin. (Aqu es preciso referirse al holismo; tesis por la cual la verdad de nuestras oraciones ha de ponerse a prueba en conjunto y no una por una).

D contra Quine sostiene que la bsqueda del fundamento emprico para el significado o conocimiento conduce al escepticismo.

Contra el escptico se mantiene que alguien que posee un conjunto de creencias coherente tiene una razn para suponer que sus creencias no son en mayor parte errneas.

El argumento de D para encontrar una razn para suponer que las mayoras de nuestras creencias son verdaderas tiene dos partes:

1) insistir en el hecho de que una comprensin correcta del habla, creencias, deseos y otras actitudes proposicionales de una persona lleva a la conclusin de que la mayora de las creencias de esa persona han de ser verdaderas de modo que hay un presuncin legtima a favor de la verdad de cualquiera de ellas si es coherente con las mayora de las dems.

2) Cualquiera que tenga pensamientos, y en particular cualquiera que se pregunte si tiene alguna razn para suponer que est generalmente en lo cierto acerca de la naturaleza de su entorno, ha de saber qu es una creencia y cmo han de detectarse e interpretarse las creencias en general.

Se puede apreciar el carcter verdico de la creencia considerando qu es lo que determina la existencia y los contenidos de una creencia. La creencia (actitud proposicional) sobreviene a hechos de diverso tipo. Se trata de una cuestin de comprensin.

Obtenemos cierta clase de penetracin en la naturaleza de las actitudes proposicionales cuando las relacionamos sistemticamente entre s y con fenmenos de otros niveles.

Habra una interdependencia entre creencia y significado de modo que una oracin depende en parte de las circunstancias externas que causan que alcancen cierto poder de conviccin, y en parte, de las relaciones gramaticales y lgicas que la oracin guarda con otras oraciones verdaderas con distintos grados de conviccin.

La creencia depende del significado y el significado de la creencia.

En el primer caso porque el acceso a la malla de creencias lo constituye las oraciones de los hablantes, en el segundo, porque las relaciones entre oraciones se traducen en creencias.

D. en este punto tomar de Quine lo que l llama asentimiento inducido, es decir, la relacin causal entre asentir a una oracin y la causa de dicho asentimiento. Este sera el lugar dnde se identifican creencias y significados, ya que el asentimiento de una hablante a una oracin depende de lo que quiera decir y de lo que cree acerca del mundo.

As como cuestin de principio los significados y creencias estn abiertos a la determinacin pblica.

La posicin que toma D respecto de la creencia es la de un intrprete radical, y supone que lo que puede aprender estando plenamente informado es aquello que un hablante dice y cree.

El objetivo de la interpretacin radical consiste en producir una caracterizacin de la verdad para el lenguaje del hablante (estilo Tarski), as como una teora de sus creencias. (la segunda derivara de la primera junto con el conocimiento presupuesto de las oraciones tenidas por verdaderas).

El principio de caridad ordena al intrprete traducir o interpretar de modo tal que algunos de sus propios criterios de verdad se lean en la estructura de oraciones que el hablante considera verdaderas.

Cuando el intrprete encuentra una oracin del hablante a la que ste asiente regularmente bajo condiciones que el reconoce, considera estas como condiciones de verdad de la oracin del hablante.

La mayora de las oraciones que un hablante tiene por verdaderas son verdaderas en la opinin del intrprete. El mtodo a disposicin del intrprete pone automticamente de acuerdo las creencias del hablante con los criterios de la lgica del intrprete y con ello acredita al hablante como poseedor de las verdades llanas de la lgica. Hay que acentuar la necesidad metodolgica de encontrar la coherencia suficiente.

El grado de verdad y coherencia en el pensamiento y el habla de una agente constituye un artefacto de la interpretacin correcta del habla de una persona por parte del intrprete.

Entre Quine y Davidson la diferencia recae en lo que se hace depender la interpretacin. D. la hace depender de eventos y objetos externos acerca de los cuales versa la oracin de acuerdo con la interpretacin que recibe.

Lo que nosotros como intrpretes debemos considerar que son las cosas es lo que de hecho son. La comunicacin empieza donde convergen las causas: tu emisin significa lo mismo que la ma si la creencia en su verdad es causada sistemticamente por los mismos eventos y objetos.

El mtodo se aplica a oraciones ocasionales; las otras oraciones se interpretan por su relacin de condicionamiento con las oraciones ocasionales.

Cuando la gente sabe qu es la creencia este alcanza el concepto de verdad objetiva, ya que creencia es aquello que puede o no concordar con la realidad.

Todas las creencias estn justificadas en un mismo sentido: estn apoyadas por muchas otras creencias y gozan de una presuncin de verdad. La presuncin se incrementa en funcin del cuerpo de creencias con el que la creencia en cuestin es coherente. El cuerpo de creencias para la metodologa es un todo.

Davison. Estructura y contenido de la verdad.

La teora de la redundancia es aquella que tiene expresiones como es verdadero que o es un hecho que prefijadas a una oracin. Se dice de la redundancia porque en lo que concierne al contenido cognitivo y a las condiciones de verdad tales aadidos sin redundantes.

Tarski es un terico de la redundancia con una teora deflacionista de la verdad. Presenta una verdad desentrecomilladora. Este tipo de teoras se sacian con conseguir slo ciertos rasgos formales del predicado de verdad (carcter desentrecomillador) en funcin de su utilidad. Dejan de lado otros aspectos de la verdad y piensan que han dicho todo sobre ella. el carcter desentrecomillador opera en las oraciones por equivalencia.

Una oracin de la que se ha predicado la verdad se desentrecomilla y se cancela su predicado de verdad cuando tiene otra equivalente.

Segn D., Tarski slo muestra como definir un predicado de verdad para cada uno de entre un conjunto de lenguajes pero nunca define el concepto de verdad. Tarski presupone el sentido de un predicado as definido. As, si sabemos de antemano el sentido de introducir el predicado verdadero entonces sabemos algo acerca del concepto de verdad expresado por el predicado que no est encarnado en esta definicin.

De este modo, no se logra captar el sentido de introducir los predicados de verdad.

El problema es que si Tarski tiene razn los enunciados que deberan ser empricos se convierten en verdades de las lgicas.

El problema tiene que ver con la convencin T. sta exige que el predicado de verdad S es verdadero L sea caracterizado de modo que implique para cada oracin S de L, un teorema de una forma tal que enlace una descripcin sistemtica de S mayscula y una traduccin de S al lenguaje de la teora.

El teorema as logrado son las oraciones T.

El problema es que ellas parecen transmitir hechos sustantivos acerca del lenguaje objeto pero de hecho no aportan nada. Ellas son verdades de la lgica que se siguen de las definiciones de Tarski y son estipulaciones.

El truco de Tarski es armar su proyecto contando las oraciones T como si tuvieran contenido emprico. Esto lo hace cuando exige definiciones materialmente adecuadas y en concordancia con el uso ordinario. El uso ordinario se conserva en definiciones parciales de verdad que tienen la misma extensin que el concepto intuitivo de verdad.

D. cree que T define la clase de las oraciones verdaderas dando la extensin del predicado de verdad pero sin dar su significado. Cree tambin que se puede seguir trabajando dentro del sistema de T reconociendo otras propiedades esenciales para los predicados de verdad.

Lo que le falta a una teora de la verdad de este estilo es la conexin con los usuarios del lenguaje. Cualquier enfoque completo del concepto de verdad debe relacionarlo con el intercambio lingstico real. Si puede plantearse la cuestin de si una definicin de verdad realmente define la verdad para un lenguaje dado, el lenguaje debe tener una vida independiente de la definicin. La evidencia ltima para una teora de la verdad debe descansar en los hechos disponibles acerca de cmo los hablantes usan el lenguaje. Disponibles significa pblicamente disponibles.

Se trata de tener la evidencia adecuada para atribuir condiciones de verdad a las preferencias de algunos hablantes, as todos tienen una captacin competente del concepto de verdad tal como se aplica a la conducta del habla de otros.

El realismo con su insistencia en la correspondencia radicalmente no emprica pide ms a la verdad de lo que podemos entender; el anti-realismo con su limitacin de la verdad a lo que puede determinarse, priva a la verdad de su papel de estndar intersubjetivo.

La teora de la verdad segn D. es una teora emprica acerca de todas las condiciones de verdad de todas las oraciones de algn corpus de oraciones.

Las oraciones no tienen condiciones de verdad excepto cuando hablantes encarnan