Reconocimiento Comunidades

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“Podemos poner nuestras memorias en historias, imágenes o lugares que nos hagan recordar, pero también que nos hagan soñar en un futuro distinto y mejor” (Familiar de desaparecido). Durante 2 años, las comunidades de Sacsamarca, Huamanquiquia, Raccaya, Hualla y Morcolla, ubi- cadas en la región Ayacucho, han participado en talleres sobre memoria, derechos humanos e inci- dencia pública organizados por el Equipo Peruano de Antropología Forense (EPAF). He aquí sus historias. A los pobladores de Sacsamarca, Colcabamba, Huamanquiquia, Raccaya, Hualla y Morcolla Reconocimiento

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Page 1: Reconocimiento Comunidades

“Podemos poner nuestras

memorias en historias,

imágenes o lugares que

nos hagan recordar, pero

también que nos hagan

soñar en un futuro distinto

y mejor”

(Familiar de

desaparecido).

Durante 2 años, las comunidades de Sacsamarca,

Huamanquiquia, Raccaya, Hualla y Morcolla, ubi-

cadas en la región Ayacucho, han participado en

talleres sobre memoria, derechos humanos e inci-

dencia pública organizados por el Equipo Peruano

de Antropología Forense (EPAF).

He aquí sus historias.

A los pobladores de Sacsamarca, Colcabamba,

Huamanquiquia, Raccaya, Hualla y Morcolla

Reconocimiento

Page 2: Reconocimiento Comunidades

El distrito de Morcolla se encuentra locali-

zado en la provincia de Sucre, a una alti-

tud de 3,456 msnm. En el distrito existen un

total de 9 comunidades: Morcolla, Ccanto-

ni, Lunco, Ccocha, Pincocalla, Huaco,

Pampaminas, Volcán de Qarhuarazu,

Amuruyucc.

A partir del establecimiento de la Base

Contrasubversiva en la comunidad de

Ccocha, la mayoría de los miembros de la

comunidad se volvieron contra Sendero

Luminoso.

Frente a esta posición, SL reaccionó que-

mando viviendas, asesinando a más de 20

personas y cometiendo otros crímenes.

Finalizada la acción, los sobrevivientes de

la masacre enterraron a sus muertos en 9

fosas del cementerio del pueblo.

Morcolla

“Recordar es importante

para reconstruir nuestra

historia, entender mejor

nuestro presente, no

volver a repetir hechos

de violencia, hacer

justicia e identificar a los

desaparecidos”.

Page 3: Reconocimiento Comunidades

La comunidad de Huamanqiquia se sitúa

en el distrito del mismo nombre, provincia

de Víctor Fajardo. El distrito tiene como

anexos a Tinca, Nazareth de Uchu y Pata-

ra. Según el Censo Nacional de 2007, los

habitantes del distrito son 1,271.

Desde 1982 se han reportado diversos

hechos de violencia. Entre ellos, el que

más se recuerda en la comunidad es el

asesinato de sus autoridades el 20 de fe-

brero de 1983.

Desde entonces se han dado desaparicio-

nes y asesinatos igual de impactantes para

la comunidad y sobre todo para sus fami-

lias. En 1984 25 personas fueron desapare-

cidas y/o ejecutadas, y entre 1986 y 1992

se asesinó aproximadamente a 20 perso-

nas.

Huamanquiquia

“Conocer nuestros derechos

y las organizaciones que los

protegen es importante

para exigir su cumplimiento.

La verdad, la justicia, la

reparación son derechos

que debemos y podemos

exigir”.

Page 4: Reconocimiento Comunidades

La comunidad de Raccaya se encuentra

en el distrito de Canaria, en el sur de la pro-

vinci de Víctor Fajardo.

Raccaya está ubicada a una altitud de

3,300 m.s.n.m. y tiene una población de 480

habitantes aproximadamente.

En octubre de 1983, SL secuestró a 40 per-

sonas de Raccaya y Apongo, entre ellos

niños, niñas y jóvenes. Las personas fueron

llevadas a Umasi, donde fueron asesinados

por el Ejército.

Raccaya

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El distrito de Hualla se ubica en la provincia

de Víctor Fajardo a 3,340 m.s.n.m. Actual-

mente tiene 1,260 habitantes y tiene como

único anexo al pueblo de Tiquihua. Las pri-

meras víctimas de la violencia fueron auto-

ridades y comerciantes asesinados por SL

en 1982.

Con la incursión de los militares, la situación

se agravó, ocasionando asesinatos y des-

apariciones masivas. Solo entre 1983 y 1984

desaparecieron más de 65 personas, princi-

palmente en la base militar de Canaria.

Por su parte, SL castigó a la población por

renunciar a su apoyo con dos masacres

sangrientas. Esta situación ocasionó el des-

plazamiento de muchas personas hacia Li-

ma e Ica, entre otras ciudades de la

Costa.

Hualla

“Para hacer que nuestros

derechos se cumplan debemos

incidir políticamente. La

incidencia política consiste en

acciones que la población

realiza de forma organizada

para proponer y exigir

soluciones a los problemas que

les afectan”.

Page 6: Reconocimiento Comunidades

El distrito de Sacsamarca se encuen-

tra en la provincia de Huancasancos,

y tiene 1,797 habitantes. Sacsamarca

cuenta con 3 anexos: Pallcca, Putac-

casa y Colcabamba.

Los hechos de violencia se iniciaron

en setiembre de 1982, con el asesi-

nato de Bernabé López y Teodoro

Fernández.

Sólo entre 1982 y 1983, la violencia

produjo más de 20 personas muertas,

entre miembros de Sendero y la po-

blación en general, que se organizó

para hacer frente a los subversivos.

Sacsamarca - Colcabamba

Page 7: Reconocimiento Comunidades

Entre los años 1980 y 2000, muchas familias peruanas perdieron a sus seres

queridos a causa del conflicto armado interno. Aproximadamente unas 16 mil

personas víctimas de desaparición forzada aún siguen sin ser encontrados. A

través de la intervención del EPAF en el tema de Memoria, las comunidades

afectadas por la violencia logran:

- Reclamar sus voces y reconstruir la historia de la violencia en sus propias

palabras, tal como la experimentaron. Este proceso permite salir de la oscuri-

dad a las familias para reclamar su historia local y su identidad, las que han

sido distorsionadas por décadas de violencia política.

- Recuperar los restos de sus seres queridos permite que las familias puedan

sufrir su muerte y se puedan reconciliar con el pasado violento. A través de

este proceso, las familias obtienen un sentimiento importante de cierre del

pasado, que les permite mirar hacia el futuro.

- Afirmar sus derechos como ciudadanos con derechos en la sociedad pe-

ruana. Esto permite que las familias pasen de ser sobrevivientes de una vio-

lencia masiva a ser ciudadanos activamente comprometidos con la capaci-

dad de organizarse, crear una agenda para sus comunidades, y solicitar al

gobierno las reparaciones correspondientes.

El trabajo de Memoria del EPAF

Page 8: Reconocimiento Comunidades

Dirección:

Mello Franco 341, Jesús María, Lima

Teléfono: (01) 424-5490

E-mail: [email protected]

Internet: www.epafperu.org

El Equipo Peruano de Antropología Foren-

se (EPAF) es una asociación civil que, par-

tiendo de una visión integral del derecho,

promueve la verdad, la justicia y la repa-

ración en contextos donde se han cometi-

do graves violaciones a los derechos

humanos, especialmente desapariciones

forzadas y ejecuciones extrajudiciales.

Para esto, el EPAF reconstruye historias de

violencia, realiza campañas de sensibili-

zación a nivel local, nacional e internacio-

nal, analiza e identifica restos de personas

desaparecidas, brinda asesoría y capaci-

tación en antropología forense y, en coor-

dinación con otras instituciones, impulsa

procesos de acompañamiento psicoso-

cial y desarrollo productivo.

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