VÍA RICARDO J. ALFARO 9°C

INTRODUCCIÓN

• La Vía Ricardo J. Alfaro o Tumba Muerto, como se le conoce popularmente.

Es una de las tres arterías principales de la Ciudad de Panamá, junto con la Vía Simón Bolívar y la Vía España. En la misma circulan alrededor de 90 mil autos diariamente.

La Tumba Muerto nace en la intersección de la Ave. Manuel Espinoza y tiene una longitud de 7.02 kilómetros.

UN DOMINGO A LAS 11AM EN LA VÍA RICARDO J ALFARO: UN DÍA EN

EL QUE EL TRAFICO ESTA NORMAL

UN MIÉRCOLES A LAS 3PM EN EL QUE LA VÍA RICARDO J ALFARO ESTA CASI COLAPSADA POR TANTOS

AUTOS

Intersección de la Ricardo J. Alfaro

Construcciones en la Vía Ricardo J. Alfaro

¿QUIÉN ES RICARDO J. ALFARO?

• Ricardo J. Alfaro nació el 20 de agosto de 1882 y murió el 22 de febrero de 1971. Estudio Abogacía en Colombia, nos represento en E.U. y ante los Organismos Internacionales.

• En 1931 fue elegido presidente de Panamá.

¿POR QUÉ SE LLAMA “TUMBA MUERTO”?

• Se le llama “TUMBA MUERTO” porque existió una leyenda urbana en la que contaba que un hombre se colgaba de un árbol con una soga disfrazado de muerto para asustar a los trabajadores del potrero que existieron hace varios años atrás.

CONCLUSIONES

• Todo conspira para entorpecer la movilidad. Conductores enfadados, taxistas desesperados y demoras sin límite son el resultado de la actual situación que afecta las calles.

• El agobio general que se sufre en horas punta de la mañana o de la tarde, en algunas vías, como la Ricardo J. Alfaro es un problema de no acabar. Cada arteria parece tener su propia explicación, una memoria propia de porqué es tan difícil transitar por allí.

• Algunas se están remodelando; otras tienen la construcción del Metro o las obras del saneamiento de la bahía, o simplemente son vías que no tienen tamaño para acoger una gran cantidad de vehículos. Al año se venden más de 50 mil automóviles nuevos, que se incorporan a este paisaje caótico.

• Y, por el contrario, los autos deteriorados no salen de las calles al mismo ritmo. No hay medidas para que sean removidos. También, los conductores y su manera de manejar conspiran para empeorar el fastidioso tranque de cada día.