Notas Sara Vasallo

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LA TACHADURA DEL GRAN OTRO A LA LUZ DE KIERKEGAARD Si la noción del gran Otro nos interesa, es porque guarda toda la resonancia que no puede ser menos que un pilar dentro de la teoría psicoanalítica, y es que su función nos atraviesa tanto en su clínica como en el discurso con otras ciencias. El Otro y el otro En psicoanálisis de manera central hablamos de sujeto, este es pues, el sujeto del inconsciente garante heredado por Freud, a saber que el sujeto se encuentra afectado en el decir por una instancia desconocida que deja sentir su actuación a la forma de un error, equivoco, síntoma, de la cual el sujeto no puede dar cuenta. Hecho cierto recorrido Mientras Narciso mira su propia imagen reflejada en el lago, inundado en la contemplación de ese rostro… ¿es Narciso el propietario de la imagen o bien esa imagen fuera de él … La introducción a la teoría psicoanalítica expresa, de la noción del gran Otro es un aporte de Lacan sin duda. Es 25 de mayo de 1955, durante su seminario “El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica”, bien, que sea aquí en absoluto toca el azar, puesto que, lo que desarrolla guarda estricta fidelidad con la teoría freudiana, respecto al sujeto del inconsciente, aquel para quien en su estructura se encuentra habitado por una hiancia que se manifiesta a menudo bajo la forma del error, y de la cual no puede dar cuenta la conciencia. Es entonces que toma todo valor cierta afirmación de Lacan “yo soy freudiano”, esta frase está marcada por la historicidad y sin embargo no impide que Lacan aportará significativamente elementos a la doctrina psicoanalítica, es el caso de La noción del gran Otro.

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LA TACHADURA DEL GRAN OTRO A LA LUZ DE KIERKEGAARD

Si la noción del gran Otro nos interesa, es porque guarda toda la resonancia que no puede ser menos que un pilar dentro de la teoría psicoanalítica, y es que su función nos atraviesa tanto en su clínica como en el discurso con otras ciencias.

El Otro y el otro

En psicoanálisis de manera central hablamos de sujeto, este es pues, el sujeto del inconsciente garante heredado por Freud, a saber que el sujeto se encuentra afectado en el decir por una instancia desconocida que deja sentir su actuación a la forma de un error, equivoco, síntoma, de la cual el sujeto no puede dar cuenta. Hecho cierto recorrido

Mientras Narciso mira su propia imagen reflejada en el lago, inundado en la contemplación de ese rostro… ¿es Narciso el propietario de la imagen o bien esa imagen fuera de él …

La introducción a la teoría psicoanalítica expresa, de la noción del gran Otro es un aporte de Lacan sin duda. Es 25 de mayo de 1955, durante su seminario “El yo en la teoría de Freud y en la técnica psicoanalítica”, bien, que sea aquí en absoluto toca el azar, puesto que, lo que desarrolla guarda estricta fidelidad con la teoría freudiana, respecto al sujeto del inconsciente, aquel para quien en su estructura se encuentra habitado por una hiancia que se manifiesta a menudo bajo la forma del error, y de la cual no puede dar cuenta la conciencia. Es entonces que toma todo valor cierta afirmación de Lacan “yo soy freudiano”, esta frase está marcada por la historicidad y sin embargo no impide que Lacan aportará significativamente elementos a la doctrina psicoanalítica, es el caso de La noción del gran Otro.

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