Laufer y Spiguel - Europa Occidental en Las Relaciones Internacionales Argentinas Del Mundo Bipolar

7/23/2019 Laufer y Spiguel - Europa Occidental en Las Relaciones Internacionales Argentinas Del Mundo Bipolar

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Europa Occidental en lasrelaciones internacionales

argentinas del mundo bipolar,1970-1990Rubn Laufer y Claudio piguel

En Revista Ciclos en la historia, la economa y la sociedad,

N 14-15, 1er. semestre de 1998.

RE!"E#

Los vnculos de la Argentina con los ases de Euroa !ccidental tienen imortantes

races "ist#ricas, desde la con$ormaci#n de la Argentina moderna. El resente tra%a&o

en$oca el comle&o curso de esas relaciones en el erodo comrendido entre la crisis de

rinciios de la d'cada del ()* + el $in del mundo %iolar.

urante esos aos, los ases comunitarios se $ueron trans$ormando, en tanto %loue

regional, en un actor econ#mico + oltico con creciente rotagonismo en el escenario

internacional, al com/s de la integraci#n euroea + en interacci#n con el curso de larivalidad entre las dos suerotencias de la 'oca0 Estados nidos + la ni#n 2ovi'tica.

Ese rotagonismo aduiri# relevancia en las relaciones internacionales argentinas

como consecuencia de la erduraci#n de los tradicionales vnculos comerciales +

$inancieros, reactivados luego de la reconstrucci#n euroea de la osguerra, + de la

gravitaci#n del mercado euroeo ara las e3ortaciones argentinas + de actores econ#micos

+ olticos internos ligados a esas relaciones.

Estas, en las condiciones mundiales de la %iolaridad, se entrelaaron +

condicionaron recrocamente con la evoluci#n de los vnculos econ#micos, olticos +

estrat'gicos redominantes en la inserci#n internacional argentina, entre el aogeo de lasrelaciones argentino-norteamericanas + la aertura al Este6 + la con$ormaci#n de nuevas

relaciones triangulares6 argentinas durante la d'cada del ()*.

$#%RO&!CC$'#


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Los vnculos de la Argentina con los ases de Euroa occidental tienen

imortantes races "ist#ricas, desde la con$ormaci#n de la Argentina moderna. El resente

tra%a&o aunta algunas lneas de an/lisis so%re el comle&o curso de esas relaciones en el

erodo comrendido entre la crisis mundial de rinciios de la d'cada del ()* + el $in delmundo %iolar.

urante esos aos los ases comunitarios se $ueron trans$ormando en un actor

econ#mico + oltico con creciente rotagonismo en el escenario internacional, al tiemo

ue, al com/s de la integraci#n euroea + en interacci#n con el curso de la rivalidad entre

las dos suerotencias de la 'oca0 Estados nidos + la ni#n 2ovi'tica, a$irma%an su

con$ormaci#n como %loue regional.

Ese rotagonismo aduiri# relevancia en las relaciones internacionales

argentinas como consecuencia de la erduraci#n de antiguos vnculos comerciales +

$inancieros -reactivados luego de la reconstrucci#n euroea de la osguerra-, + de lagravitaci#n de los mercados euroeos ara las e3ortaciones argentinas + de los actores

econ#micos + olticos internos ligados a esos vnculos.

Las relaciones argentino-euroeas, or eso, conservaron siemre un rol

trascendente en la inserci#n internacional de la Argentina +, en las condiciones mundiales

de la %iolaridad, se entrelaaron + condicionaron recrocamente con la evoluci#n de las

relaciones econ#micas, olticas + estrat'gicas del as redominantes en cada erodo. En

consecuencia, untualiar los "ec"os + rasgos rinciales de las relaciones argentino-

euroeas en esos aos uede contri%uir a e3licar las articularidades de la osici#n

argentina en el escenario mundial desde el aogeo de las relaciones argentino-

norteamericanas a $ines de los 7*, asando or la llamada aertura al Este6 + la

con$ormaci#n de nuevas relaciones triangulares6 argentinas durante la d'cada del ()*,

"asta los realineamientos oerados a rinciios de los 79* en las relaciones internacionales

del as + el re$oramiento de los vnculos con los Estados nidos tras la crisis $inal del

sistema %iolar + la con$ormaci#n de un nuevo orden mundial.

1(- EL )CE#&E#%E ROL &E E!RO*) E# !# "!#&O *OL)R$+)&O

1.1.- Los 70: un nuevo escenario internacional

El derrum%e del sistema monetario originado en :retton ;oods + los acuerdos

internacionales ue reuiri# la salida de la crisis de 19)1, re$le&aron la ro$unda


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modi$icaci#n de las relaciones de oder econ#mico mundial durante el cuarto de siglo

transcurrido desde el $in de la segunda gran guerra. Los nuevos euili%rios monetarios +a

no odran derivar de imosiciones unilaterales de los Estados nidos0 s#lo odran ser

alcanados mediante negociaciones entre las grandes otencias. El creciente odero

roductivo + $inanciero de Euroa + 1?.

@ero esta situaci#n no determina%a an el aso a un mundo multiolar. El

cuestionamiento creciente ue la "egemona norteamericana reci%a de otras otencias

imerialistas en ascenso se inscri%a notoriamente dentro del marco de la rivalidad central +

determinante de la 'oca entre las dos suerotencias, los Estados nidos + la ni#n

2ovi'tica.

En %ase a la suremaca econ#mica + militar aduirida en la guerra, la osesi#nde una moderna tecnologa cient$ica + nuclear, el monta&e de una red de %loues militares

%a&o su control en varios continentes, + el esta%lecimiento de un sistema monetario mundial

con el d#lar como ncleo, los Estados nidos "a%an logrado una osici#n sin recedentes

en el mundo caitalista, conserva%an una a%soluta suerioridad militar en el camo

occidental +, ese a sus di$icultades, continua%an siendo comarativamente la economa

m/s oderosa del laneta. 2in duda eran la otencia "egem#nica en Am'rica Latina.

=iertamente, el de%ilitamiento relativo de los Estados nidos como

consecuencia del creciente ael del movimiento de los ases del Bercer Cundo or la

indeendencia + contra el atraso econ#mico, de una ronunciada crisis social interna

Dmovimiento contra la guerra en ietnamF moviliaci#n or los derec"os civilesF activismo

de negros, latinos + marginalesG, + de la ersectiva +a visi%le de su derrota militar +

oltica en el sudeste asi/tico, $acilit# la euiaraci#n del odero militar estrat'gico

norteamericano or arte de la ni#n 2ovi'tica. =omo consecuencia de un comle&o

roceso, la economa otrora socialista + altamente concentrada de la R22 se convirti# en

ese erodo en una $orma articular de caitalismo monoolista de estado igualmente

concentrado. Bales cam%ios se e3resaron tam%i'n en el lano de la oltica e3terior0 la

R22 as# a rivaliar con los Estados nidos or es$eras de in$luencia + or la "egemona

mundial, en una carrera e3ansionista ue molde# las relaciones econ#micas + militares de

Cosc con otras otencias + con los ases del Bercer Cundo. El conceto

desuperpotencia, alicado a la ni#n 2ovi'tica, alude recisamente a esta etaa de

trans$ormaci#n.

La crisis monetaria mundial de 19)1 se conect# en $orma directa con

elshocketrolero de 19)H, con consecuencias negativas ara muc"os ases e3ortadores

de alimentos + de materias rimas, agravando los e$ectos del roceso recesivo mundial +a


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en curso + re$orando las divergencias estrat'gicas entre Euroa + los Estados nidos. Los

ases euroeos usieron distancia resecto a la oltica norteamericana en varias /reas del

glo%o -sudeste asi/tico, !riente Cedio, gole de estado en ="ile- + resecto a lo ue

;as"ington llama%a la contri%uci#n euroea a la de$ensa occidental>I?.

Los ases del occidente euroeo constituan un con&unto de ases caitalistasdesarrollados ue, or un lado, mantenan vnculos econ#micos + olticos desiguales con

ases del Bercer Cundo -aunue +a no eran las otencias dominantes a nivel glo%al-F + or

el otro teman el condominio de las suerotencias + la amenaa a su seguridad ue

deriva%a tanto de la rivalidad como de los circunstanciales acuerdos entre au'llas, +

resistan caer en situaciones de su%ordinaci#n resecto de una u otra. En consecuencia, se

reocuaron or $ortalecer su de$ensa nacional + or mantener + re$orar su aliana en lo

econ#mico, en lo oltico, en el lano de la de$ensa + en sus olticas e3teriores.

El nota%le grado de avance econ#mico + tecnol#gico de esos ases con$igura%a

la %ase material de sus asiraciones a un rol relevante + aut#nomo en el escenariointernacional, lo ue lleva%a a rimer lano la necesidad de consolidar + amliar el roceso

de integraci#n. En 19)I se a$irma la marc"a "acia la uni$icaci#n econ#mica euroea0 en ese

ao, se suscri%e la incororaci#n de Jran :retaa, inamarca e Krlanda al Cercado

=omn, + se estrec"an los vnculos con los ases del Area Euroea de Li%re =omercio

DAEL=G. iversos acuerdos comerciales li%eraron el intercam%io de roductos industriales

de tra%as arancelarias + restricciones cuantitativas. @ara entonces +a esta%an en curso

acuerdos re$erenciales de la =EE con Esaa. Al resecto "a+ ue sealar, sin em%argo,

ue la @oltica Agrcola =omn D@A=G de la =omunidad Euroea conlleva%a una

orientaci#n ineuvocamente roteccionista, lo ue a$ecta%a sus relaciones econ#micas con

ases agroe3ortadores como la Argentina + otros de Am'rica Latina.

En el lano monetario, el imulso integracionista "a%a comenado a mani$estarse en la

voluntad oltica de los ases euroeooccidentales de construir un 2istema Conetario

Euroeo, con co"esi#n + $uera su$iciente como ara resionar a los Estados nidos a

euili%rar su %alana de agos. Ello desem%ocara en el esta%lecimiento de la llamada

seriente euroea D19)IG, la creaci#n de la nidad de =uenta Euroea DE=G

indeendiente del d#lar norteamericano D19)5G, + la con$ormaci#n de un 2istema Conetario

Euroeo D19)9G.

rente a la consolidaci#n del roceso integrador + la asiraci#n de los ases

comunitarios a un rol rotag#nico roio en el escenario internacional, los dirigentes

norteamericanos deloraron lo ue considera%an una actitud am%ivalente de los go%iernos

euroeos, uienes -en ala%ras de un destacado rotagonista de la oltica e3terior

norteamericana de entonces-

en tiempos de tensin a!o"a!an por la d#tente$ en perodos de rela%acin, teman el

condominio. &urante las crisis nos !usca!an para mantener el e'uili!rio (uera de )uropa


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y, !a%o el para"uas de los ries"os 'ue nosotros corramos, ellos no vacila!an en !uscar

venta%as especiales para s mismos...*>H?.

As, en la segunda mitad de los 7)*, el crecimiento individual + colectivo de los

ases de la =EE comro%a%a ue la desigualdad del desarrollo econ#mico esta%aconduciendo, m/s o menos r/idamente, a cam%ios de largo alcance en los euili%rios

olticos + econ#micos mundiales, en el oder militar relativo + en la osici#n estrat'gica

de los rotagonistas centrales del sistema de Estados>4?.

1.+.- Los 0: intensi(icacin y desenlace de la "uerra (ra

En la segunda mitad de los 7)*, en el marco del retroceso glo%al relativo de los

Estados nidos, la suerotencia sovi'tica e3eriment# un erodo de auge e3ansionistaue cuestiona%a la estrategia de distensinimulsada a comienos de la d'cada or los

dirigentes norteamericanos + sovi'ticos con el resaldo de los ases euroeos. La

economa mundial se conmocion# con la reiteraci#n de la crisis del etr#leo D19)9G ue

conllev# serios e$ectos recesivos, + con el acelerado endeudamiento de los ases del Bercer

Cundo "acia la %anca rivada + los organismos $inancieros internacionales.

La estructura %iolar ue caracteria%a al sistema internacional desde la

segunda osguerra seguira en vigencia durante la ma+or arte de la d'cada siguiente. La

llegada de Ronald Reagan a la residencia de los EE.. en 1981 anunci# el a%andono de

la oltica de distensi#n, marcando la decisi#n del nuevo go%ierno reu%licano de revertir el

retroceso estrat'gico relativo de los Estados nidos. =on Reagan, ;as"ington descart# la

oltica de de$ensa de los derec"os "umanos de =arter, resald# a go%iernos dictatoriales

en diversas artes del mundo, + multilic# las t/cticas destinadas a $orar el cam%io interno

en la R22. En cuanto a su oltica euroea, la administraci#n de Reagan se orient# a

rea$irmar la unidad de !ccidente como %ase + garanta de la seguridad en Euroa. =on

esa $inalidad, entre otras, resald# la osici#n colonialista de Jran :retaa en la guerra de

198I or las Kslas Calvinas.

La d'cada de los 78* sealara, tam%i'n, la culminaci#n de la crisis interna de la ni#n

2ovi'tica, centralmente en el lano econ#mico + en el de las nacionalidades. El erodo ue

sigui# a la desaarici#n de L. :re"nev en la conducci#n del @=2 + del estado sovi'tico,

"asta 1985, se caracteri# or la emergencia de una ro$unda crisis econ#mica, as como

de un duro cuestionamiento a la dominaci#n sovi'tica so%re sus sat'lites en Euroa oriental

+ a la dominaci#n rusa so%re el resto de las nacionalidades integrantes de la R22. Las

re$ormas econ#micas + olticas uestas en marc"a or Ci&al Jor%ac"ov no recueraron la

economa ni aortaron esta%ilidad. La situaci#n desem%ocara en el $rustrado gole


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oltico-militar de agosto de 1991 +, $inalmente, en el deslaamiento del roio

Jor%ac"ov + el retroceso de Rusia a un lano relativamente secundario en el concierto de

las otencias tras la desintegraci#n de la ni#n 2ovi'tica como entidad estatal nica.

En los aos (8* se acrecent# el inter's de la =omunidad Euroea or rea$irmar

su individualidad oltica + de$ensiva tanto $rente a ;as"ington como $rente a Cosc.2o%re el tras$ondo de la rivalidad "egem#nica entre las dos suerotencias, los ases de la

=E concedieron esecial rioridad a la consolidaci#n del roceso de integraci#n

comunitaria, de la distensi#n mundial + de las relaciones de Euroa con el Bercer Cundo.

Las asiraciones a una ma+or autonoma oltica + estrat'gica de la =E encontra%an su

rincial resaldo en el enorme otencial econ#mico acumulado en tres d'cadas de gradual

integraci#n roductiva + comercial. Bras la incororaci#n de Esaa + @ortugal en 1985, la

=E-1I reuna HI* millones de "a%itantes + constitua el ma+or %loue comercial del

mundo. Las ci$ras de su @roducto Nacional :ruto de con&unto euiara%an a las de los

Estados nidos.2in em%argo, "acia mediados de la d'cada comenaron a advertirse en los

ases comunitarios indicios de desaceleraci#n del crecimiento, cu+os orgenes ueden

remontarse a la %rusca ala de recios de los com%usti%les tras la crisis etrolera de 19)9

-con sus consiguientes e$ectos recesivos so%re la demanda mundial + so%re las %alanas de

agos euroeas-, as como a los o%st/culos derivados de la crisis mundial de la deuda

D198I-84G ara el comercio internacional. no de los indicadores de la desaceleraci#n

econ#mica en el =ontinente $ue el aumento del desemleo, situaci#n ue -en lenta ero

constante rogresi#n, ue se e3tendera "asta nuestros das- o%liga%a a los estados euroeos

a derivar $ondos crecientes "acia el gasto social, desvi/ndolos de la inversi#n roductiva>5?.

Las olticas li%erales imlementadas or go%iernos euroeos tanto conservadores como

socialcristianos + socialdem#cratas ara a$rontar la crisis recesiva mundial, as como el

intenso roceso de $usiones + a%sorciones emresariales + de relocaliaci#n de

inversiones a ue da%a lugar el roceso de glo%aliaci#n econ#mica en curso,

acrecentaron los ndices de aro en la ma+or arte de la =omunidad Euroea. Estas

di$icultades econ#micas contri%uiran durante la rimera mitad de los 78* a rea$irmar la

rigide de la osici#n comunitaria en las negociaciones so%re la deuda de Am'rica Latina,

incluso en desmedro del inter's estrat'gico de la =EE or consolidar + me&orar sus

relaciones olticas con el su%continente.

La integraci#n euroea avan# al com/s de la revitaliaci#n de las relaciones

$ranco-alemanas a artir de los acuerdos entre el residente Jiscard 7Estaing + el canciller

Melmut 2c"midt. En un roceso no e3ento de contradicciones, el e&e $ranco-alem/n se $ue

a$irmando como motor de la unidad euroea. Euroa occidental actua%a cada ve m/s

como un %loue -en la =on$erencia de 2eguridad + =ooeraci#n Euroea D=2=EG, en las

Naciones nidas-, + alenta%a el rum%o distensionista. @ero Euroa occidental, a esar del


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aumento de su otencial econ#mico relativo + de su margen de acci#n oltica $rente a los

Estados nidos, segua deendiendo de las garantas de seguridad norteamericanas +

romoviendo, or ello mismo, las negociaciones de control armamentstico + la creaci#n de

una estructura de a mundial. En relaci#n a Am'rica Latina, el inter's de la =E esta%a

centrado en conservar a los ases del /rea $uera del con$licto Este-!este + en una osici#nde no alineamiento.

A todo lo largo de la d'cada de los 78*, el movimiento

integracionistae3erimenta un avance marcado or la dis+untiva entre dos $ormas de ver a

Euroa, corresondientes resectivamente al e&e $ranco-alem/n en gestaci#n de un lado,

+ a Jran :retaa, %aluarte del euroesceticismo6, del otro. na coalici#n de go%iernos

socialistas + democristianos Drancia, Esaa, Ktalia + AlemaniaG imulsa%a decididamente

el ritmo de integraci#n.El roceso ue desem%ocara en la reuni$icaci#n alemana $ortaleci#

an m/s esta tendencia redominante, aunue "io rea$lorar vie&as contradicciones0 ara los

dirigentes alemanes, dada la notoria venta&a tecnol#gica, $inanciera + e3ortadora de eseas, la marc"a "acia la uni$icaci#n oltica aareca como iedra de toue ara una nueva

"egemona continental germanaF ara los lderes $ranceses + de otras naciones de Euroa,

reresenta%a el medio de contrarrestar las asiraciones de reonderancia de :onn

entrelaando sus intereses con los de la organiaci#n comunitaria.

e cualuier modo, m/s all/ de las divergencias de #tica intracomunitarias

so%re los destinos del roceso de integraci#n, en las relaciones de sus ases integrantes con

los latinoamericanos segua rimando notoriamente el esritu de %loue, como lo

demostraron or e&emlo las estiulaciones de los tratados de asociaci#n articular

$irmados or varios de ellos con la Argentina.

(- )RE#%$#) . E!RO*)

+.1.- )l mercado europeo y la recomposicin de la anti"ua *relacin trian"ular*

Masta entrada la d'cada de los 7*, la incontestada "egemona mundial +

continental de los Estados nidos condicion# $uertemente el modo de vinculaci#n de la

Argentina con el sistema internacional. La aertura desarrollista al caital e3tran&ero

motiv#, a artir de $inales de los 5*, el arri%o de algunos de los m/s imortantes

consorcios norteamericanos, ue $ueron rotagonistas del intenso roceso de

industrialiaci#n sustitutiva ue tuvo lugar en esos aos.


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@ero, al mismo tiemo, los ases euroeos tomados en con&unto seguan siendo

el rincial socio comercial de la Argentina, creca su gravitaci#n en el sector secundario

con la instalaci#n de $iliales o su%sidiarias de los rinciales gruos industriales de la =EE,

+ ocua%an una osici#n relevante en la estructura $inanciera del as, en estrec"a

vinculaci#n con sectores de $uerte inserci#n en la economa interna + en la estructura delEstado.

2e reconstitu+# as, en $orma original, la relaci#n triangular ue caracteri# la

osici#n internacional de la Argentina durante la d'cada de 19I*, a"ora con el con&unto de

los ases euroeos ocuando en uno de los v'rtices el lugar ue antes "a%a desemeado

el Reino nido como $undamental comrador de la roducci#n e3orta%le nacional.

2in em%argo, la ersistencia del er$il roductivo + comercial de la Argentina

como un as esencialmente agroe3ortador + centrado en los ru%ros alimentarios, c"oc#

con la orientaci#n roteccionista de la @oltica Agrcola =omn D@A=G de la =EE,

contri%u+endo a acentuar las recurrentes di$icultades estructurales del as en el sectore3terno.

La oltica e$icientista racticada en sus rimeros tramos or el go%ierno

militar de la llamada Revoluci#n Argentina D19-19)HG acrecent# el eso del caital

e3terno, $undamentalmente norteamericano, en la in$raestructura industrial argentina. @ero

durante los ltimos aos del r'gimen militar, +a %a&o la residencia del gral. Lanusse, el

relativo de%ilitamiento de la economa estadounidense a consecuencia del acentuado d'$icit

de su %alana de agos + de los e$ectos de la larga guerra del sudeste asi/tico, + la crtica

situaci#n mundial originada en la crisis monetaria mundial de 19)1 + la crisis etrolera de

19)H, $acilitaron en la Argentina la emergencia de sectores econ#micos + olticos ue

imulsa%an la modi$icaci#n de los atrones de inserci#n internacional vigentes, ostulando

la diversi$icaci#n de las relaciones econ#micas e3teriores del as, con o%&etivos diversos +

a veces encontrados, como el estrec"amiento de las relaciones comerciales + dilom/ticas

con la R22 + los ases del Este, o el $ortalecimiento de la vinculaci#n econ#mica +

oltica con los ases de la =EF o %ien la intensi$icaci#n del intercam%io + la integraci#n

econ#mica en el /m%ito latinoamericano en rocura de un ma+or margen de autonoma

econ#mica.

Estas dis+untivas rogram/ticas tuvieron $uerte incidencia dentro de la

"eterog'nea coalici#n ue llev# al general @er#n a su tercera residencia, + signaron de

aguda inesta%ilidad al go%ierno del RE


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+.+.- )l nuevo trin"ulo: cam!io de la posicin de )uropa en las relaciones econmicas

internacionales de la /r"entina

A comienos de los 7)* la Argentina e3erimenta%a ro$undas trans$ormaciones

en el marco oltico interno + en sus relaciones econ#micas + olticas e3teriores. En 19)H,el eronismo volva al go%ierno en el aogeo de la marea nacionalista en Am'rica Latina +

en todo el Bercer Cundo. En las dirigencias olticas + a nivel oular redomina%a el

rec"ao a las r/cticas de dominaci#n imuestas or las otencias imerialistas + or las

emresas transnacionales -$undamentalmente las norteamericanas-, + tenan gran eso las

ideas $avora%les al desarrollo aut#nomo, al control nacional de los resortes econ#micos

%/sicos + al consiguiente ael del Estado en la economa>?.

entro del nuevo go%ierno, un sector, a$n al ensamiento del gral. @er#n,

con$ia%a en la osi%ilidad de estrec"ar los vnculos econ#micos con Euroa + con Am'rica

Latina ara contrarrestar, desde una ersectiva de Bercera osici#n, las resionesoriginadas en la deendencia de las imortaciones + de los recursos $inancieros del as

resecto de los Estados nidos -+ de los organismos mundiales donde era decisiva la

gravitaci#n de esa suerotencia-F ero tam%i'n ara contraesar la creciente $uera de los

sectores del esta%lis"ment ue rocura%an aumentar las e3ortaciones agroecuarias

mediante su reorientaci#n "acia el mercado sovi'tico. !tro sector oltico, con eso

signi$icativo dentro del @artido )?, en la direcci#n ue al ao

siguiente lasmaran los acuerdos comerciales $irmados or el ministro Jel%ard con la

R22 + otros ases de su %loue, ue u%icaran osteriormente a la ni#n 2ovi'tica en el

rimer lugar como socio comercial individual de la Argentina.

Am%as vertientes se "icieron notorias con el resurgimiento del roteccionismo

norteamericano, +a ue a artir de la crisis de 19)1 los Estados nidos venan aumentando

su resi#n e3ortadora, lo ue a$ecta%a seriamente los mercados de e3ortaci#n

agroecuarios de la Argentina. 2u%sista la no comlementariedad entre am%as economas

en el terreno de las roducciones agroecuarias argentinas, lo ue durante d'cadas "a%a

constituido una %ase o%&etiva ara la erduraci#n de corrientes anti-norteamericanas en el

seno de las clases dirigentes del as, articularmente entre sectores terratenientes

e3ortadores>8?.

As, mientras el intercam%io comercial de los Estados nidos con Am'rica

Latina en su con&unto se "a%a incrementado notoriamente, llegando en 19)H al nivel m/s


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alto alcanado en die aos>9?,se agudia%a al m/3imo la cometencia norteamericana con

las roducciones argentinas en el mercado mundial.

Estos "ec"os suscitaron en el as un $uerte temor or los mercados e3ternos, e

"icieron resurgir en sectores terratenientes e intermediarios ligados a la e3ortaci#n

agroecuaria dos tendencias, romotoras de lineamientos distintos ero no necesariamentedivergentes0 or un lado, volver a a$irmar la tradicional vinculaci#n econ#mica con

EuroaF or el otro, imulsar un ma+or acercamiento comercial con la suerotencia

sovi'tica + el %loue del Este, ue aarecan como otenciales grandes comradores de

cereales + carnes. En &unio + noviem%re de 19)1 se $irmaron sendos convenios comerciales

+ de cooeraci#n, de alcance trienal, entre la Argentina + la R22 + entre la Argentina + la

=EE resectivamente -siendo, este ltimo, el rimero suscrito con un as

latinoamericano>1*?.

A artir de la $ormaci#n del Cercado =omn + "asta $ines de los 7* se "a%a

veri$icado un r/ido crecimiento de las e3ortaciones argentinas "acia Euroa. En eseerodo crecieron tam%i'n las imortaciones de origen euroeo, aunue su gravitaci#n era

+a notoria desde el segundo go%ierno del gral. @er#n, cuando "a%an comenado a cometir

con las rovenientes de EE..>11?. O desde $ines de la d'cada de los 75* se acelera%a

-aralelamente a las de origen norteamericano- la a$luencia de emresas rovenientes de los

ases de la =omunidad Econ#mica Euroea>1I?.

2o%re esta %ase creci# + se consolid# en la Argentina un oderoso sector de

terratenientes + de gran %urguesa industrial de +a antiguo arraigo en el as + con $uertes

vnculos comerciales + $inancieros con entidades emresariales + %ancarias euroeasF un

sector ue a"ora se $ortaleca en la misma medida en ue se de%ilita%an la osici#n

internacional de los Estados nidos + los laos econ#micos + olticos del as con esa

suerotencia, + ue romova la reorientaci#n "acia Euroa de nuestras relaciones

econ#micas internacionales como va de sueraci#n de la crisis del sector e3terno.

A comienos de los 7)* se revea mundialmente + a %reve lao una situaci#n

crtica de las reservas alimentarias glo%ales. @or entonces, como "emos sealado, los ases

euroeos tomados en con&unto seguan siendo el destino del grueso de las e3ortaciones

argentinas. 2o%re estas consideraciones se ao+# la estrategia ue el general @er#n $ormul#,

antes + durante su ltima residencia, de arovec"ar la guerra de las rotenas6 ara

aumentar la e3ortaci#n de alimentos + reactivar la antigua relaci#n esecial con Euroa.

Este sera uno de los %asamentos claves so%re los ue @er#n se roona erigir la

Argentina otencia, o%&etivo ue ocu# lugar central entre las consignas rogram/ticas

del lder a artir de su retorno al as.

A mediados de 19)H, el C=E aareca como mercado seguro + duradero ara

las carnes argentinas Dtam%i'n ara las de :rasil + rugua+G. En momentos en ue se

augura%a un erodo de rivaciones + "am%re en los ases su%desarrollados como


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consecuencia de la insu$iciencia de los recursos alimentarios, el nota%le aumento de las

e3ortaciones agroecuarias argentinas en ese ao alent# en el gral. @er#n e3ectativas

acerca de un ael relevante del as en el a%astecimiento mundial de alimentos. En los

"ec"os, + ese al relativo estmulo al desarrollo manu$acturero nacional ue signi$icaron las

le+es de romoci#n industrial + de radicaci#n de caitales e3tran&eros dictadas a $ines de19)H, auellos lineamientos re$le&a%an los lmites de la estrategia industrialista ue "a%a

animado a los rimeros go%iernos eronistas entre 1945 + 195I0 @er#n intenta%a adatar el

desarrollo econ#mico del as a la nueva situaci#n internacional imulsando un nuevo auge

de las e3ortaciones rimarias como $uente de divisas +, consiguientemente, como %ase

ara la "iot'tica reconstituci#n de los antiguos o%&etivos eronistas de desarrollo

aut#nomo + redistri%uci#n social.

2in em%argo, dada la notoria reactivaci#n de la roducci#n ganadera en los

ases de la =EE, esas e3ectativas seran de di$cil realiaci#n. E$ectivamente, durante

19)4 el comercio argentino de carnes -uno de los rinciales ru%ros tradicionales de lase3ortaciones argentinas- descendi# signi$icativamente en volumen + valor, a ra

rincialmente de la oltica imuesta or la =EE, ue rimero esta%leci# restricciones a

las imortaciones de carne vacuna + luego las susendi# or comleto. e modo similar al

con&unto de los ases latinoamericanos, entre 19)1 + 19)4 el comercio e3terior argentino

aduiere signo negativo D=uadro 1 + Jr/$ico 1G.

En consecuencia, romediando los ()* se "aca notoria una situaci#n arad#&ica

en la osici#n econ#mica internacional del as0 la auesta de una arte de los grandes

terratenientes argentinos or una nueva relaci#n rivilegiada con Euroa, + las

e3ectativas de @er#n en el mismo sentido, se roducan en el mismo momento en ue la

crisis monetaria + etrolera mundial imona a las naciones euroeas la retracci#n de


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comras e inversiones, + en ue la @oltica Agrcola =omn de la =EE rioria%a sus

roducciones nacionales, cerrando arcialmente a Euroa como mercado ara los roductos

argentinos.

La cada de las e3ortaciones agrcolas se agrav# en 19)5. Aunue se revea

llegar ara 19) a 4**.*** toneladas en %ase a la demanda euroea + norteamericana, esase3ortaciones descendieron en un 1*P resecto a las I89.*** tn de 19)4 Dde%ido, en arte,

al aumento de la demanda internaG>1H?.

En el marco con$lictivo del comercio e3terior argentino entre 19)4 + 19)5,

determinado or la a%ruta cada tanto en el volumen como en el valor de las e3ortaciones

totales del as, es reciso su%ra+ar nuevamente ue la =omunidad Euroea en su con&unto

segua siendo or le&os el rincial destino de los envos glo%ales de la Argentina al

e3terior. Bomando los ases individualmente, los rinciales recetores de roductos

argentinos eran Ktalia, los @ases :a&os, Esaa +


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=onsiderando el valor de las imortaciones argentinas segn su origen, el /rea

comunitaria reresenta%a asimismo el rincial socio comercial del as D=uadro I%is +

Jr/$ico I%isG, si %ien la Argentina no constitua, a su ve, el rincialpartenaire de la =EE

en Latinoam'rica, siendo suerada en ese car/cter or :rasil, $undamentalmente a artir del

auge del cultivo de la so&a a $ines de los 7*>14?D=uadro H + Jr/$ico HG.


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@ara algunos ases comunitarios, de todos modos, nuestro as signi$ica%a un

socio comercial nada desdea%le0 el intercam%io talo-argentino "a%a alcanado en 19)I a

Q2 H8 millones, nada menos ue un IP del total de Q2 145 millones del comercio

italiano con toda Am'rica Latina>15?.

=omarando el intercam%io argentino con la Euroa comunitaria + los Estados

nidos durante el uinuenio 19)1-19)5, surge otra caracterstica nota%le0 mientras las

imortaciones rovenientes de los EE.. suera%an notoriamente a las originadas en

Euroa en cuanto a volumen, 'stas ltimas registra%an ndices marcadamente sueriores a

au'llas envalor>1?.Kndicio, ro%a%lemente, de ue +a "acia $ines de los 7* los ases de

la =EE -+ articularmente la Re%lica ederal Alemana- se "a%an convertido ara la

Argentina en $uente rimordial de arovisionamiento de roductos tecnol#gicamente

avanados.

La resencia del caital euroeo en la in$raestructura industrial argentina

tam%i'n era signi$icativa0 so%re las cien ma+ores emresas industriales del as Dtomando

como criterio sus ventas anualesG 1* eran de roiedad estatal -entre ellas O@, con muc"o

la de ma+or $acturaci#n, + 2!CK2A, en el segundo lugar-F otras 1) eran estatales o de

caital rivado nacional asociadas en distinto grado al caital e3tran&ero Drincialmente

estadounidense, alem/n e italianoGF I1 eran norteamericanas, H canadienses + otras 18

euroeas DH italianas, 5 inglesas o anglo-"olandesas, 4 $rancesas, H alemanas, I suias + 1

"olandesaG>1)?.


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La oltica de aertura "acia el Este6, ue reci%i# imulso en esos aos, de%e

ser considerada dentro de este marco. Knternamente era roiciada or los intereses de

negocios comerciales, agrarios, industriales + $inancieros relacionados con los intereses

sovi'ticos en la Argentina, $avorecidos or la retracci#n de los mercados tradicionales

euroeos ara la carne -+ tam%i'n la de los caitales de ese origen- de%ido a la recesi#n delas economas centrales en la crtica co+untura mundial. e modo similar a los actos con

Jran :retaa en la d'cada del 7H*, los convenios $irmados con Cosc or el ministro

Jel%ard en 19)4 tendran a la carne como uno de sus ru%ros rinciales.

2in em%argo, la restricci#n temoraria del mercado euroeo a las e3ortaciones

argentinas, aunue udiera "a%er desencadenado entre los grandes terratenientes

ameanos un temor similar al originado or la $amosa =on$erencia de !ttaa de 19HI ue

desem%ocara en el Bratado Roca-Runciman, $ue s#lo una causa arcial, o adicional, entre

las ue indu&eron la mencionada aertura "acia el Este or arte del euio econ#mico de

Jel%ard.=onsiderando la gravitaci#n comercial, industrial + $inanciera de Euroa en

nuestra economa, la reorientaci#n de nuestras relaciones econ#micas internacionales "acia

los ases de la #r%ita sovi'tica emerga, en realidad, no tanto de una necesidad imuesta

or las circunstancias de la economa mundial>18?,sino como resultado de una estrategia de

largo lao, ue re$le&a%a una divergencia sustancial con el ro+ecto del gral. @er#n. @ara

'ste, el e&e euroeo segua siendo verte%ral en el marco de una estrategia de

diversi$icaci#n ue -so%re el tras$ondo de la agudiada rivalidad "egem#nica de las dos

suerotencias- intenta%a sustentarse nuevamente en el vie&o rinciio doctrinario de la

Bercera osici#n. En cam%io, ara el euio ue $ormul# la oltica e3terior durante el

%reve interregno de =/mora, + ara el gruo econ#mico enca%eado or el ministro

Jel%ard, la aro3imaci#n a Euroa occidental constitua un elemento secundario dentro de

una creciente reorientaci#n del rum%o rincial de la oltica econ#mica e3terior argentina

"acia el %loue sovi'tico, como se comro%ara osteriormente %a&o la dictadura militar del

general idela.

El redominio de esta estrategia re$le la $uera ue "a%an alcanado en el

Estado + en la economa los sectores terratenientes, $inancieros + militares ue venan

siendo imulsores de la misma desde "aca muc"os aos + con ma+or $uera desde

comienos de los 7)*>19?. La incertidum%re resecto de los mercados de e3ortaci#n, + la

necesidad de amliarlos, actuaron, en realidad, como cataliador de este desarrollo. En el

marco de esa reorientaci#n, la e3istencia en la estructura econ#mica argentina de oderosos

sectores vinculados a intereses euroeos -con $uerte in$luencia en las m/s altas es$eras del

Estado + de la oltica nacional- constitu+# la %ase de una alianade "ec"o ue osi%ilit#

el ro$undo redireccionamiento de las relaciones econ#micas internacionales argentinas de

auellos aos.


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Esa reorientaci#n aunta%a -como sealamos al comieno- a una versi#n

modi$icada de la estructura triangular ue "a%a caracteriado a las relaciones

internacionales del as, donde la ni#n 2ovi'tica ocuara a"ora el v'rtice ue

anteriormente "a%a corresondido a Jran :retaa rimero, + a Euroa en su con&unto

luego, como rincial mercado ara las e3ortaciones argentinas>I*?

.@or todo lo dic"o, "a%ida cuenta del eso decisivo ue el caital euroeo osea

en la estructura econ#mica del as, la estrategia de aertura al Este imlic# la

convergencia de esa oltica con los intereses de sectores ro-euroeos, ara uienes el

vuelco comercial "acia el mercado sovi'tico aareca como una va osi%le ara suerar las

di$icultades -ue se estima%an temorales- del intercam%io de la Argentina con la =EE>I1?.

En la r/ctica esa oltica coincida, tam%i'n, con los roios intereses e3ortadores de las

emresas cerealeras de origen euroeo radicados en nuestro as, como :unge + :orn, +

con los de gruos industriales + $inancieros del mismo origen reocuados or la

esta%ilidad6 de la antigua vinculaci#n econ#mica con Euroa.

+.2.- Las relaciones econmicas con )uropa occidental !a%o el "o!ierno militar 31475-26

A di$erencia del lugar reonderante ue las relaciones econ#micas + olticas

con los ases de Euroa occidental, + en articular con los de la =omunidad Euroea,

"a%an ocuado en el diseo glo%al de la oltica e3terior del gral. @er#n durante su tercera

residencia, %a&o el llamado @roceso de Reorganiaci#n Nacional las naciones euroeas

disminu+eron su gravitaci#n en las relaciones internacionales de la Argentina, como

consecuencia de la intensi$icaci#n de la ugna "egem#nica en casi todo el =ono 2ur entre

las dos suerotencias -am%as con imortante vinculaci#n en la estructura econ#mica + en

la sociedad oltica del as-, del car/cter reresivo + antidemocr/tico del r'gimen militar +,

osteriormente, del con$licto %'lico con el Reino nido or el intento argentino de

recueraci#n de las Kslas Calvinas Da%ril-&unio de 198IG.

El go%ierno militar uso en r/ctica un lan econ#mico caracteriado en lo

esencial como de desindustrialiaci#n + de retorno -en nuevas condiciones "ist#ricas- a las

lneas %/sicas del modelo agroe3ortador>II?.

urante el erodo inicial del go%ierno militar, la co+untura del comercio

internacional $avoreci# la imlementaci#n de este ro+ecto. @ero la aertura imortadora

signi$ic# un %rusco incremento en la introducci#n de %ienes de consumo entre 19) +

19)9>IH?, + revertira +a en 198* el signo "asta entonces ositivo de la %alana comercial

argentina>I4?. Ello, sumado a los e$ectos de la desregulaci#n del mercado $inanciero,

contri%u+# a la gestaci#n de un endeudamiento e3terno sin recedentes, ue al culminar el


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erodo dictatorial comrometa, s#lo en el ago de intereses, el 58P del valor de las

e3ortaciones argentinas, + cu+o caital m/s ue cuadrulica%a ese valor>I5?.

El ao 198I signi$ic#, en m/s de un sentido, un unto de vira&e en la osici#n

internacional del as. El con$licto del Atl/ntico 2ur vino a coincidir con una dura

co+untura e3terna ue, en una economa como la argentina, deendiente de suse3ortaciones agroecuarias + del ingreso de caital e3tran&ero, no oda m/s ue agravar

la crisis econ#mica interna. La aceleraci#n del ritmo in$lacionario, el alto nivel de

endeudamiento e3terior + la roducci#n r'cord de cereales en el as se otencia%an -en un

conte3to internacional signado or las tendencias recesivas ue "emos sealado-

contri%u+endo a rovocar una $uerte cada de los recios de e3ortaci#n. En el caso de las

carnes, la %a&a $ue rincialmente inducida or los altos e3cedentes de la =EE, o$recidos en

el mercado mundial a recios su%sidiados, lo ue convirti# a la =omunidad en e3ortadora

neta + $uerte cometidora de nuestro as>I?.A ello se sum# la ronunciada disminuci#n

de la o$erta de $ondos en el mercado internacional a artir de la crisis de la deuda6latinoamericana, situaci#n ue ara la Argentina se agrav# durante + desu's del con$licto

%'lico con Jran :retaa.

El roceso de concentraci#n industrial oerado or la oltica del go%ierno

militar conllev# el crecimiento -entre otras- de emresas trasnacionales6 originarias de

ases integrantes de la =E como la italiana Bec"int, la alemana 2iemens + la $rancesa

Renault, + de 2uia como la :ron :overi>I)?. @ero or otro lado, la re$ormulaci#n

agroe3ortadora de la economa argentina imlic# un relanteamiento de las relaciones

econ#micas del as con las grandes otencias mundiales. En este sentido, la orientaci#n

e3terna del go%ierno militar consolid# la tendencia ue terminara a$ianando al mercado

sovi'tico como rincial destino individual de las e3ortaciones agroecuarias

argentinas>I8?. La R22 ocua%a el rimer lugar D+ la Re%lica @oular ="ina el

segundoG en las e3ortaciones argentinas, + "a%an deslaado a la =omunidad Euroea,

cu+a articiaci#n, ue en 19* "a%a alcanado el *P, descendi# al HI,)P a $ines de

19)9>I9?. La =omunidad Euroea sigui# siendo el origen de una roorci#n signi$icativa

de las imortaciones argentinasF ero en cuanto a las e3ortaciones, en 198*, mientras la

R22 a%sor%i# el HH,)P del valor de los em%arues de nuestro as, los nueve ases de la

=EE aduirieron el I),1P + los ases integrantes de la ALAL= el I4,8P>H*?. A su ve,

Estados nidos segua siendo la $uente rincial de cr'ditos + r'stamos, as como del

ma+or orcenta&e de las imortaciones argentinas.

+..- 8alvinas: la /r"entina (rente a un !lo'ue


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La Juerra or las Kslas Calvinas en 198I vino a sumar el comonente militar-

estrat'gico a otros lanos en donde la osici#n e3terna de la Argentina esta%a

e3erimentando nota%les trans$ormaciones desde comienos de la d'cada anterior, e

imlic# a su ve un cam%io signi$icativo en las relaciones internacionales del as +

articularmente en sus relaciones con los ases comunitarios.En el marco de un mundo $uertemente %iolar, una arte sustancial de las

relaciones econ#micas e3ternas de la Argentina se "alla%a concentrada en las dos

suerotencias ue se disuta%an la "egemona mundial. 2o%re este tras$ondo, m/s all/ del

car/cter dictatorial del go%ierno argentino de entonces, + de sus motivaciones + c/lculos en

relaci#n a la recueraci#n de las Kslas, el "ec"o uso en rimer lano la reivindicaci#n

nacional de un as deendiente + erteneciente al tercer mundo $rente a la erduraci#n de

una situaci#n colonial. En el olo ouesto del con$licto se "alla%a Jran :retaa, un as

ue reuna en s las condiciones de gran otencia militar, miem%ro de la =omunidad

Euroea + rincial aliado de una de las dos suerotencias ue se disuta%an el lideragomundial.

=omo "emos visto en la rimera secci#n de este tra%a&o, los ases euroeos

"a%an dado reetidas muestras de sus asiraciones a un ael m/s indeendiente en los

asuntos internacionales -rincialmente resecto de los Estados nidos, de cu+o

araguas militar deenda la de$ensa de Euroa-. 2in em%argo, de cara a un con$licto en

el ue -en la erceci#n de auellos go%iernos- or so%re la con$rontaci#n Este-!este

rima%a el cliva&e Norte-2urF + ante circunstancias ue onan en &uego la $uera de los vn-

culos ue unan a la =omunidad Euroea con la aliana atl/ntica + a$ecta%an el resente +

las ersectivas $uturas de la integraci#n oltica de Euroa, los ases de la =E terminaron

convergiendo, tras sus vacilaciones iniciales, en resaldo al socio comunitario + en la

vereda ouesta a los reclamos de so%erana de la Argentina, resaldados dilom/ticamente

or los dem/s ases latinoamericanos. Ello tom# cuero en el em%argo comercial imuesto

or la =E a la Argentina entre el 1 de a%ril + el II de &unio de 198I.

En consecuencia, la naturalea de las relaciones euroeo-latinoamericanas, tal

como se revel# a ra del con$licto del Atl/ntico 2ur, no se aart# esencialmente del atr#n

tradicional de las relaciones e3ternas de los ases centrales resecto de los ases

eri$'ricos. En la actitud de los ases euroeos no revalecieron los laos "ist#ricos ni los

imortantes intereses econ#micos ue muc"os de ellos tenan -en vas de realiaci#n o en

ro+ecto- en la Argentina + en otros ases de Latinoam'rica, ni an la reocuaci#n

oltica de conservar + acrecentar la solide de esos vnculos con las naciones de Am'rica

Latina + del Bercer Cundo en general. @revaleci#, or el contrario, la solidaridad de los

intereses intraeuroeos ue, an en$rent/ndose a asiraciones caras a las naciones de

nuestra regi#n, resulta%a m/s trascendente ara el o%&etivo oltico del %loue comunitario,


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centrado en consolidar una osici#n ue le ermitiera terciar en la ugna estrat'gica glo%al

en el mundo %iolar.

A todo lo largo del nuevo erodo constitucional ue sucedi# al r'gimen militar,

tam%i'n en el lano de las relaciones econ#micas se "io sentir la erduraci#n de los

e$ectos del con$licto argentino-%rit/nico de 198I, articularmente a trav's del t/citoresaldo a la decisi#n del Reino nido de imoner en 198) D+ amliar en 199*G una ona

martima de e3clusi#n alrededor de las Kslas.

+.9.- &espu#s del 2: una reaproimacin con(lictiva

La d'cada de los 78* constitu+# ara Am'rica Latina lo ue se dio en llamar la

d'cada erdida, esto es, un erodo de serio retroceso en su desarrollo econ#mico +

social. El @:K er c/ita era, en 199*, menor ue el de die aos antes, + la Argentinamostra%a, entre los ases latinoamericanos, la cada m/s ronunciada>H1?. A comienos del

erodo, las situaciones econ#micas latinoamericanas se caracteria%an or altos niveles de

in$laci#n + d'$icit $iscal -con el consiguiente deterioro de la educaci#n, la salud + los

servicios %licos en general-, al tiemo ue la deuda e3terna ascenda a lmites nunca

conocidos + se reduca a%rutamente la articiaci#n regional en el comercio mundial>HI?.

Las relaciones glo%ales entre la Euroa comunitaria + la regi#n latinoamericana

adecan de $uertes limitaciones, derivadas del gravoso endeudamiento de los ases de la

regi#n, de la e3istencia en varios de ellos de regmenes dictatoriales, + de las rioridades

estrat'gicas e3resadas a trav's de las olticas comunes de la =E.

Oa antes de la suscrici#n del tratado de integraci#n argentino-%rasileo en

198, se evidenciaron indicios de un vuelco del inter's de la =omunidad "acia el nuevo e&e

Argentina-:rasil, tendencia ue se acentu# desu's de la $irma del acuerdo. Algunos

dirigentes comunitarios asigna%an un valor estrat'gico al $ortalecimiento de esas relaciones

en un escenario mundial en transici#n>HH?. El :rasil + la Argentina eran adem/s Den

articular el rimeroG, los rinciales recetores latinoamericanos de inversiones directas

de origen comunitario D=uadro 4G + la gravitaci#n del caital euroeo se acrecentara a

comienos de los 79* -articularmente en la Argentina- como consecuencia del roceso de

rivatiaci#n de emresas estatales.


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Bras el retorno al r'gimen constitucional en diciem%re de 198H, el go%ierno de

Ral Al$onsn evalu# ue el roceso de institucionaliaci#n argentino constitua un marco

$avora%le ara la reconstituci#n de los vnculos con los ases comunitarios, + -en el marco

de una oltica econ#mica ue rati$ica%a el e&e agroe3ortador>H4?- dirigi# arte de sus

es$ueros a recomoner + desarrollar las relaciones olticas + econ#micas %ilaterales con

los go%iernos euroeos, articularmente los de Ktalia, Esaa, rancia + Alemania. Las

miras esta%an uestas en conseguir ao+o econ#mico, una actitud $avora%le al tratamiento

oltico + no meramente comercial de la deuda e3terna argentina, + una reducci#n

signi$icativa de las restricciones ue di$iculta%an el intercam%io comercial %ilateral.

@or entonces, la =omunidad Euroea concentra%a alrededor de la cuarta arte

del comercio e3terior argentino +, dentro de ella, Ktalia ocua%a el segundo lugar como

imortadora Ddesu's de los @ases :a&osG + como roveedora Ddetr/s de la RAG>H5?.

2in em%argo, el ao+o oltico de esos go%iernos al retorno de Argentina al

r'gimen institucional no signi$ic# concesiones eseciales en el terreno econ#mico. En los

numerosos contactos de alto nivel sostenidos durante 1984, tanto en las caitales euroeas

DCadrid, Roma + @arsG como en :uenos Aires Dvisitas de los cancilleres alem/n Melmut

So"l, + $ranc's =laude ="e+ssonG, siemre los dirigentes euroeos su%ordinaron su

resaldo al go%ierno argentino al cumlimiento de dos condiciones0 1G el logro de la

esta%ilidad econ#mica, + IG la $irma de un acuerdo revio con el ondo ConetarioKnternacional + la %anca comercial acreedora. Esto es, los mismos reuisitos ue

aralelamente lantea%a el go%ierno norteamericano.

Los estados comunitarios se constituan as, en la Argentina del mismo modo

ue en los dem/s ases de Am'rica Latina, en reresentantes rivilegiados del inter's de

los inversionistas rivados de sus ases. urante el roio curso de las negociaciones

so%re la deuda, los go%iernos de la =omunidad Euroea lantearon reiteradamente ante sus


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ares latinoamericanos su insatis$acci#n or las reglamentaciones ue regan la inversi#n

e3tran&era rivada, la conversi#n monetaria, las garantas cam%iarias, el ago de atentes

or tecnologa, etc., su%ra+ando la necesidad de ue se li%eraliara el r'gimen de la

inversi#n e3terna>H?.

A mediados de los 78*, la recariedad de la osici#n internacional del as seagrav# tam%i'n a artir de la esiral de crisis en ue ingresa%a uno de sus rinciales

mercados e3teriores0 la ni#n 2ovi'tica. @or entonces, se "acan notorias las di$icultades

creadas en el comercio e3terior argentino or el incumlimiento or arte de la R22 de

los convenios cerealeros $irmados con la Argentina, cuestionando la estrategia adotada

desde comienos de los ()* or un imortante sector de terratenientes + gruos

e3ortadores ue "a%a romovido un rum%o de sistem/tico acercamiento comercial a la

R22 con la e3ectativa de contar all con un mercado asegurado, amlio + ermanente.

*)n un medio internacional re"ido por la lucha despiadada entre la Comunidad

)conmica )uropea y los )stados ;nidos por la colocacin de su produccina"ropecuaria -e3resa%a a rinciios de 198 el diario La Naci#n, "aci'ndose vocero de

esos intereses-, el acuerdo ar"entino-sovi#tico 'ue ase"ura a nuestro pas por cinco aH)?.

La vertical cada de las comras sovi'ticas de roductos argentinos roducida

en ese mismo ao desmentira duramente esas e3ectativas.

A artir de comienos de 198), la oltica e3terior del go%ierno argentino u%ic#

el comercio en un lano m/s %ien secundario + se orient# a esta%lecer con varios ases

comunitarios tratados de asociaci#n articular, con o%&eto de $acilitar las inversiones

euroeas en el /m%ito rivado del as, en articular en las emresas eueas + medianas

D@OCEsG.

Al tiemo ue se desarrolla%an negociaciones entre la Argentina + los ases

comunitarios, 'stos su%ra+aron insistentemente su inter's or alentar el roceso de

integraci#n regional -ue desem%ocara a artir de 1985 en la gestaci#n del Cercosur- +

estrec"ar los vnculos econ#micos con lo ue se er$ila%a como uno de los denominados

mercados emergentes.

El Bratado ara la =reaci#n de una Relaci#n Asociativa @articular, suscrito

con Ktalia en diciem%re de 198), or la magnitud de las inversiones comrometidas, or los

rivilegios + garantas o$recidos a los inversores, or las condiciones en ue $ueron

concedidos los cr'ditos, + or su condicionamiento a la ermanencia del r'gimen

democr/tico, con$igur# un tio de asociaci#n esecial entre un as central + uno


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eri$'rico, + en cierto modo re$igur# el modelo ue seguiran en esos aos otros

acuerdos esta%lecidos or la Argentina con Esaa, rancia + Alemania.

El estrec"amiento de las relaciones econ#micas con los ases euroeos se da%a

so%re el tras$ondo de la ro$unda crisis del imerio sovi'tico, acelerada or la oltica de

re$ormas de Jor%ac"ov, uien es%oa%a or entonces sus roias lneas de aro3imaci#n ala Euroa comunitaria a trav's de su rouesta de una integraci#n euroea e3tendida del

Atl/ntico a los rales.

Los acuerdos %ilaterales racticados con los ases euroeos sentaron las %ases

ara la negociaci#n de un amlio convenio de cooeraci#n econ#mica con la =E. Las

tratativas se iniciaran a $ines de 1989, +a instalado el go%ierno del residente Cenem, +

so%re la %ase de la continuidad de la oltica -+a en curso- de aro3imaci#n argentino-

%rit/nica. Ello volva a revelar la solidaridad de los intereses comunitarios en lo

$undamental de sus relaciones con los ases del mundo no desarrollado.

2igni$icativamente, el acuerdo argentino con la =E sera suscrito el I de a%rilde 199*, aniversario de la Juerra del Atl/ntico 2ur. Knclu+endo una cl/usula ue recoge el

undamento democr/tico de la cooeraci#n, el convenio esta%leci# un marco general

ara imulsar la cooeraci#n comercial, econ#mica, agroecuaria, industrial + tecnol#gica,

en $unci#n de lo cual am%as artes se concedieron el trato de naci#n m/s $avorecida + se

constitu+# una comisi#n esecial ara estudiar las osi%les vas de eliminaci#n de %arreras

comerciales arancelarias + no-arancelarias. Nuevamente, es reciso tener resente la $uerte

gravitaci#n del con&unto de los ases comunitarios en el comercio internacional argentino0

"acia $ines del erodo, los ases de la =E reresenta%an glo%almente oco menos del H*

or ciento del total de las e3ortaciones + de las imortaciones del as, lo ue segua

con$igurando una verdadera osici#n de $uera en las negociaciones comerciales +

$inancieras de la Argentina con la =omunidad D=uadros 5 + G>H8?.


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urante los aos (8*, m/s all/ de las osturas dilom/ticas de la =E de

resaldo a los rocesos de democratiaci#n regionales + a los acuerdos de integraci#n en

curso, las relaciones %irregionales -+ dentro de su marco las relaciones argentino-comunitarias- ermanecieron largamente o%staculiadas or una serie de $actores>H9?.

En la cuesti#n de la deuda, los ases comunitarios insistieron en reclamar la

suscrici#n de acuerdos revios con el CK, e incluso recurrieron a resiones m/s o menos

a%iertas cada ve ue los ases de la regi#n es%oaron la osi%ilidad de $ormar un clu%

de ases deudores ara encarar una negociaci#n colectiva con las otencias euroeas.

B'ngase resente ue -segn el listado comleto de los deudores rivados ue la revista)l

=eriodistau%lic# a $ines de 1985- algunos gruos econ#micos euroeos $igura%an entre

los ue "a%an acumulado ma+or roorci#n de la deuda e3terna rivada del as %a&o el

go%ierno militar, entre ellos =ogasco Dcaitales "olandesesGF A2A DesaolesGF gruoRo%erts-Alargatas, :anco de Londres + @irelli DinglesesF la ltima controlada or unlo

+ con minora de caitales italianosGF + Bec"int DitalianosG.

En lo ue resecta al intercam%io, los dirigentes euroeos su%ra+a%an su crtica

a las tendencias "acia el %ilateralismo en el comercio %irregional, + recomenda%an en

cam%io una estrategia de irrestricta integraci#n al mercado mundial >4*?. 2u%sistan, or

otra arte, las tra%as ue las disosiciones roteccionistas de la @oltica Agrcola =omn de

la =E interonan al comercio %ilateral. C/s del )*P del gasto comunitario esta%a

destinado al sostenimiento de los sectores agrcola + esuero0 en 199* esas su%venciones

suera%an los 1HH.*** millones de d#lares, $rente a )4.*** millones de los EE.. +

59.*** millones de 41?. La @A= "a%a convertido a la =E en un oderoso e3ortador

de alimentos, roduciendo una esiral ascendente en los su%sidios agrcolas mundiales +

di$icultando las relaciones con otros ases e3ortadores, entre ellos la Argentina. @or otra

arte, al ca%o de la d'cada, la Ronda rugua+ del JABB no "a%a arri%ado a acuerdos

sustanciales. En ella se evidenci# el c"oue de intereses entre Euroa + los Estados nidos,

el mantenimiento or arte de am%os de elevados su%sidios agrcolas + la roli$eraci#n de

mecanismos restrictivos no arancelarios or arte de las grandes otencias e3ortadoras.

As, las e3ectativas argentinas en el sentido de un osi%le retorno a relaciones

re$erenciales con Euroa se vieron sistem/ticamente $rustradas. =riticando la

erduraci#n de ese mito en las clases dirigentes argentinas, L. C/rmora "a sealado ue

en nuestro as

*est a>n muy arrai"ada la idea de 'ue las tra!as comerciales de la Comunidad )uropea

son un mero accidente histrico... )n lu"ar de asumir tan empecinada realidad, la

/r"entina se (ue adecuando, pero manteniendo intactas y vivas las epectativas de poder

restaurar en al">n momento ese es'uema tradicional !asado en un comercio internacional


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li!re en el 'ue las potencias industriales seran importadoras netas de materias primas

a"rcolas y en el 'ue la /r"entina podra hacer valer sus venta%as comparativas naturales.

La creencia de las clases diri"entes ar"entinas en esas venta%as tiene mucho de

anacrnico...*>4I?.

CO#CL!$O#E

urante los aos 7)*, signados or la do%le crisis mundial de las $inanas + del

etr#leo, en el marco crtico + de disminuci#n glo%al de las ventas de nuestro as al

e3terior, los ases euroeos tomados en con&unto seguan siendo los rinciales clientes delas e3ortaciones argentinas, + ocua%an tam%i'n un lugar destacado como roveedores de

caital industrial + $inanciero.

La relativa disminuci#n de las comras euroeas a la Argentina como

consecuencia de la crisis mundial + de la creciente autosu$iciencia comunitaria en

roductos rimarios "io nau$ragar las e3ectativas del gral. @er#n en una reactivaci#n de

la relaci#n comercial con Euroa, + $acilit# el redireccionamiento de las relaciones

econ#micas del as "acia el %loue sovi'tico. Numerosos indicios, sin em%argo, de&an

entrever ue la romoci#n de tal reorientaci#n de nuestras relaciones econ#micas

internacionales cont# con el acuerdo, e incluso el imulso, de oderosos intereses

industriales + $inancieros ligados a Euroa en la Argentina. @or lo dem/s, la oltica de

aro3imaci#n a Cosc coincida con la estrategia de %uena arte de las dirigencias

euroeas D@omidou, :randtG en %sueda de un ma+or grado de autonoma resecto del

aliado norteamericano, + con los roios intereses e3ortadores de origen euroeo

radicados en nuestro as, como va de sueraci#n de la crisis del intercam%io con Euroa.

esu's de 19), la oltica de aertura econ#mica del @roceso de

Reorganiaci#n Nacional gener# una deuda e3terna de dimensiones "asta entonces

desconocidas + una $uerte concentraci#n del caital. Jruos industriales, comerciales +

$inancieros originarios o ligados estrec"amente a caitales de ases integrantes de la =E +

euroeos de ases no comunitarios $iguran entre los ue m/s crecieron durante el erodo.

2in em%argo, la continuidad + rea$irmaci#n de la oltica de aro3imaci#n

comercial a la ni#n 2ovi'tica iniciada a comienos de la d'cada anterior -+ ue se

rolongara "asta 198-, devino en el relanteamiento de una nueva + articular relaci#n

triangular, comara%le a la ue se "a%a con$ormado durante la d'cada del 7I* con Jran

:retaa + los Estados nidos. Cientras la R22 sigui# siendo "asta esa $ec"a el rincial


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cliente individual de las e3ortaciones argentinas, los Estados nidos tenan una

articiaci#n decisiva en las imortaciones + en el endeudamiento e3terno del as. Los

laos con Euroa occidental de%en ser vistos en interacci#n con esta nueva relaci#n

triangular resecto de am%os centros de la disuta %iolar.

En los 78* se generalia el roceso de glo%aliaci#n roductiva + $inanciera,ue "acia mediados de la d'cada evidencia rasgos ro$undamente contradictorios. Al

tiemo ue se imulsa la li%eraliaci#n comercial + $inanciera, el roceso glo%aliador

coe3iste con -e intensi$ica- una creciente tendencia a asegurar mercados e3ternos mediante

la $ormaci#n de !lo'uescomerciales vinculados a las grandes otencias, con los

consiguientes e$ectos de roteccionismo Dsu%sidiosG + regionaliaci#n.

En el marco de la llamada d'cada erdida, las relaciones econ#micas de

Am'rica Latina con los grandes centros mundiales + con la =E en articular estuvieron

signadas or dos cuestiones $undamentales0 la deuda e3terna + las su%venciones de las

otencias a sus e3ortaciones rimarias a trav's de la @oltica Agrcola =omn D@A=G.@ese a ello, la carta euroea continu# ocuando un lugar imortante en las

ociones olticas ue de$inieron la inserci#n de la Argentina en la economa mundial %a&o

el go%ierno constitucional de Al$onsn. Este %usc# recomoner + desarrollar las relaciones

olticas + econ#micas %ilaterales con go%iernos euroeos como los de Ktalia, Esaa,

rancia + Alemania. 2in em%argo, el ao+o oltico de esos go%iernos al retorno de

Argentina al r'gimen institucional no aare concesiones eseciales en el terreno

econ#mico. Al igual ue las de otros ases de la regi#n, las relaciones econ#micas

argentino-comunitarias siguieron caracteri/ndose or su asimetra0 las acciones e$ectivas

de cooeraci#n comunitaria con la Argentina + de resaldo a la reinstauraci#n del r'gimen

constitucional no trascendieron, en lo $undamental, del /m%ito dilom/tico + -como se

desrende del an/lisis de los tratados articulares suscritos entre 198) + 1989 con Ktalia,

Esaa, Alemania, rancia + la =omunidad- rioriaron los intereses comerciales +

$inancieros de los ases euroeos. En la cuesti#n de la deuda, los ases comunitarios

reclamaron la suscrici#n de acuerdos revios con el CK e insistieron en su tratamiento

caso or caso + como un ro%lema meramente comercial + no oltico. =omo

consecuencia, el rum%o de la renegociaci#n de la deuda e3terna encarado desde 1984 or el

go%ierno constitucional, ese a la inicial intenci#n de susender los agos "asta evaluar su

monto + legitimidad, imlic# la gradual sueditaci#n a los o%&etivos de oltica econ#mica

autados or las instituciones $inancieras internacionales regidas or las grandes otencias.

e este modo, a $ines del erodo las relaciones entre nuestro as + la =E

resuman los ro%lemas m/s crticos + con$lictivos ue a$ecta%an el vnculo entre la

=omunidad + los ases latinoamericanos en su con&unto0 la oltica agrcola comunitaria +

el roteccionismo comercial, la durea $rente a la crisis de endeudamiento + la irresoluci#n

de la cuesti#n de $ondo resecto al con$licto or las islas Calvinas.


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En un escenario internacional dominado or la crisis + el derrum%e de la

suerotencia e3 sovi'tica + or la circunstancial rea$irmaci#n de la "egemona mundial

norteamericana -redominantemente militar + $inanciera-, la oltica e3terior argentina se

orient# decididamente desde comienos de los 79* "acia el esta%lecimiento de relaciones

re$erenciales con los Estados nidos. Al com/s de estos rocesos, el =ono 2ur seconvierte crecientemente en terreno de la cometencia econ#mica + estrat'gica entre

%loues mundiales, mediatiada or los diversos rum%os de oltica econ#mica + e3terior

de los go%iernos argentinos + %rasileos.

Al mismo tiemo, el avance del roceso de integraci#n regional a artir de los

acuerdos argentino-%rasileos de 198 tuvo desde sus orgenes un ilar $undamental en las

relaciones comerciales + $inancieras del /rea con Euroa occidental. Esto reanuncia%a

tendencias ue a$loraran en los (9*0 en marc"a +a el Cercosur, el redominio de Euroa en

el comercio e3terior del /rea + la $uerte resencia inversora de ese origen Dso%re todo en

:rasil, ero tam%i'n en la ArgentinaG $ue insinuando, so%re el tras$ondo de la recurrentecometencia mundial, una tendencia contrauesta a las orientaciones econ#micas +

olticas roiciadas desde ;as"ington en el "emis$erio a artir de la llamada Kniciativa

ara las Am'ricas6.

En el caso argentino, las relaciones con Euroa "unden sus races en la "istoria

+ en la con$ormaci#n estructural de su economa + de su inserci#n en el sistema econ#mico

+ oltico internacional.

En el erodo au estudiado D19)*-199*G, an oacadas or la agudea de la

cometencia %iolar + or un erodo de redominio de los vnculos econ#micos de la

Argentina con el Este6 + de endeudamiento creciente con la %anca occidental +

rincialmente norteamericana, las relaciones argentino-euroeas siguieron desemeando

un ael $undamental en la evoluci#n de las orientaciones econ#micas + olticas

internacionales del as.

/$/L$OR)) !%$L$+)&)

T Aiau ., :asualdo E. C. + S"avisse C.0)l nuevo poder econmico. :uenos Aires, 198.

T evoto, Ru%'n0La Comunidad )uropea y las eportaciones de la pampa ar"entina. :s. As.,

199H.

T Ec"agUe, =arlos0)l socialimperialismo ruso en la /r"entina. :s. As., 1984.

T Jaddis,


30/32

T Sissinger, Menr+08is memorias. Cadrid, 19)9.

T C/rmora, Leooldo0La percepcin europea de los acuerdos de cooperacin entre la /r"entina

y ?rasil. En @ntesisN 4, Cadrid, 1988.

T Coneta, =arlos


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>1?.- Jaddis, I?.- Lot", ;il$ried0)uropa en la poltica mundial.... 5*. an der ;ee, Merman0=rosperidad y crisis..., . 588.

>H?.- Sissinger, Menr+08is memorias, . H.

>4?.- Senned+, @aul0/u"e y cada de las "randes potencias, . 8I-5.

>5?.- Senned+, @aul0/u"e y cada..., . )H9.

>?.- @aradiso, 1*?.- :=RA, Cemoria 19)1, . I. Lans, 1H?.-La Eacin, 11VIV), . I.

>14?.- evoto, Ru%'n0La Comunidad )uropea y las eportaciones..., . I.

>15?.-La Fpinin, HV)V)H, . I4.

>1?.- KNE=, Comercio eterior, 19)5.

>1)?.- 2c"varer, 18?.- En su li%ro)l oro de 8osc> D:s. As.,...G, Ksidoro Jil%ert e3one la interretaci#n ue encuentra la causa determinante de la

e3ansi#n de las relaciones de la Argentina con la R22 en el cierre de los mercados euroeos en la co+untura de entonces.

>19?.- Raoort, C.0La /r"entina y la Guerra Hra. Fpciones econmicas y estrat#"icas de la apertura hacia el )ste 31499-14726. En

=iclos en la "istoria, la economa + la sociedad, N 8, :s. As., 1er. semestre de 1995.

>I*?.- Raoort, C.0La posicin internacional de la /r"entina y las relaciones ar"entino-sovi#ticas. En/r"entina en el mundo, 1472-

147. :uenos Aires, 1988.

>I1?.- *&esde 'ue la ;nin @ovi#tica se ha u!icado en el primer lu"ar de los clientes de cereales ar"entinos, no ha cesado de repetirse el

estri!illo de la presunta dependencia ar"entina de su cliente...-escri%a en 1984 Ro%erto B. Alemann, $uncionario del /rea econ#mica

%a&o el go%ierno de rondii + ministro del gral. Jaltieri durante el r'gimen militar de 19)-8H, vinculado a los caitales suios a trav's

de la comaa el'ctrica =KAE DKtaloG + reresentante en la Argentina de la ni#n de :ancos 2uios-. Conviene recordar 'ue la ;nin

@ovi#tica es el principal cliente de cereales ar"entinos e importante comprador de carnes, cueros, lanas, vinos y al"unos otros

productos, por'ue )uropa occidental ha de%ado de comprar muchos de esos productos en la medida en 'ue lo haca anta


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/r"entina ha demostrado conducirse como proveedor con(ia!le cuando el "o!ierno de Iashin"ton presion para imponer un em!ar"o

cerealero en represalia por la invasin sovi#tica de /("anistn...*.Ro%erto B. Alemann, en Jodo es istoriaN I*), &ulio 1984, . 4.

>II?.- Aiau ., :asualdo E. C. + S"avisse C.0)l nuevo poder econmicoD:uenos Aires, 198GF =ia$ardini M.0/r"entina 1475-

142: la estrate"ia de desindustrialiacin de la dictadura. En Crisis, in(lacin y desindustrialiacin en la /r"entina

dependienteDAgora, :s. As., 199*GF entre otros.

>IH?.- :=RA08emorias anuales,19)), . 1F 19)9, . 8H.

>I4?.- :=RA08emoria anual,198*, . 11.

>I5?.- =E@AL0?alance preliminar de la economa de /m#rica Latina y el Cari!e, 1991.

>I?.- :=RA08emoria anual,198I.

>I)?.- Aiau ., :asualdo E. C. + S"avisse C.0)l nuevo poder econmico. :uenos Aires, 198.

>I8?.- Raoort, C.0La posicin internacional de la /r"entina y las relaciones ar"entino-sovi#ticas. En/r"entina en el mundo, 1472-

147. :uenos Aires, 1988.

>I9?.- Russell, Ro%erto0 ;n aH*?.- acs, Aldo ='sar0Los socios discretos..., . 8I-84.

>H1?.- =E@AL0?alance preliminar de la economa de /m#rica Latina y el Cari!e, 1991.

>HI?.- =omunidades Euroeas, =omit' Econ#mico + 2ocial0Delaciones Comunidad )uropea-/m#rica Latina, 199H, . 44I.

>HH?.- As lo revelan, or e&emlo, oiniones ue R'gis e%ra+ -asesor del residente $ranc's Citterrand- dio a conocer en 198). '%ra+

recomenda%a a los euroeos ue, *en lu"ar de irritar in>tilmente a los )stados ;nidos en Centroam#rica sin !ene(icio para los intereses

propios*, acentuaran su resencia en *esa se"unda /m#rica Latina 'ue estara escapando de la in(luencia estadounidense*. En C/rmora,

Leooldo0La percepcin europea de los acuerdos de cooperacin entre la /r"entina y ?rasil. En @ntesisN 4, Cadrid, 1988.

>H4?.- Raoort C. + :uonuome R.0Las polticas econmicas: 10 as'ueda de la con(iana perdida. En AA..0=or 100

aH5?.- Comercio )terior /r"entino, 1984-1989.

>H?.- ruidi, ctor0acia una nueva relacin econmica entre )uropa y /m#rica Latina.En @ntesisN 4, Cadrid, 1988, . 15.

>H)?.-La Eacin, IVIV198.

>H8?.- Esos cuadros muestran tam%i'n el crecimiento de la ALAK + en articular de :rasil como mercado ara las e3ortaciones

argentinas.

>H9?.- erLa Comunidad )uropea y el 8ercosur. ;na evaluacin comparada.C. Raoort + A. Cusacc"io coord., ca. KKK.

>4*?.- C/rmora, Leooldo0La percepcin europea..., . H*1-H.

>41?.- Senned+, @aul0acia el si"lo KKB. :arcelona, 199H, . H41.

>4I?.- C/rmora, Leooldo0La percepcin europea..., . H*H-4.

Laufer y Spiguel - Europa Occidental en Las Relaciones Internacionales Argentinas Del Mundo Bipolar

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