LAS XILOGRAFÍAS DEL ARTISTA PLÁSTICO DIEGO KUNURANA. Por CHRISTIAN REYNOSO

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1 LAS XILOGRAFÍAS DE DIEGO KUNURANA UN ACERCAMIENTO A LA PROPUESTA PICTÓRICA DEL BOLETÍN TITIKAKA CHRISTIAN REYNOSO Tomado de CAMPO LETRADO Editores. Año 4 N° 5 pp.86 a 105 DIEGO KUNURANA, ARTISTA PLÁSTICQ QUE INTEGRÓ UNO DE LOS GRUPOS DE MAYOR INFLUENCIA EN LA HISTORIA DEL ARTE PERUANO, TAMBIEN EXPLORÓ LA XILOGRAFÍA. LAS PÁGINAS DEL BOLETÍN TITIKAKA MUESTRAN EL TRABAJO DE LA VANGUARDIA INDIGENISTA, LO QUE CONVIRTIÓ A ESTA PUBLICACIÓN EN UN DOCUMENTO INVALUABLE PARA NUESTRA HISTORIA PLASTICA.

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UN ACERCAMIENTO A LA PROPUESTA PICTÓRICA DEL BOLETÍN TITIKAKA. Por CHRISTIAN REYNOSO. Tomado de CAMPO LETRADO Editores. Año 4 N° 5 pp.86 a 105.DIEGO KUNURANA, ARTISTA PLÁSTICO QUE INTEGRÓ UNO DE LOS GRUPOS DE MAYOR INFLUENCIA EN LA HISTORIA DEL ARTE PERUANO, TAMBIEN EXPLORÓ LA XILOGRAFÍA. LAS PÁGINAS DEL BOLETÍN TITIKAKA MUES¬TRAN EL TRABAJO DE LA VANGUARDIA INDIGENISTA, LO QUE CONVIRTIÓ A ESTA PUBLICACIÓN EN UN DOCU¬MENTO INVALUABLE PARA NUESTRA HISTORIA PLASTICA.http://punoculturaydesarrollo.blogspot.com/

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    LAS XILOGRAFAS DE

    DIEGO KUNURANA UN ACERCAMIENTO A LA PROPUESTA PICTRICA DEL BOLETN TITIKAKA

    CHRISTIAN REYNOSO

    Tomado de CAMPO LETRADO Editores. Ao 4 N 5 pp.86 a 105

    DIEGO KUNURANA, ARTISTA PLSTICQ QUE INTEGR UNO DE LOS GRUPOS DE MAYOR INFLUENCIA EN LA HISTORIA DEL ARTE PERUANO, TAMBIEN EXPLOR LA XILOGRAFA. LAS PGINAS DEL BOLETN TITIKAKA MUESTRAN EL TRABAJO DE LA VANGUARDIA INDIGENISTA, LO QUE CONVIRTI A ESTA PUBLICACIN EN UN DOCUMENTO INVALUABLE PARA NUESTRA HISTORIA PLASTICA.

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    Firmadas con el seudnimo Diego Kunurana, Demetrio Peralta Miranda (Puno, 1910-Lima, 1971), dio a conocer un conjunto de xilografas que aparecieron entre 1927 y 1930 en las pginas del Boletn Titikaka (BT), la famosa publicacin punea de la vanguardia indigenista dirigida por su hermano mayor, Arturo (Gamaliel Churata). Son, hasta hoy, el primer registro documentado que existe de su obra pictrica.

    La obra de Kunurana se extiende, en un segundo momento, a la realizacin de una historieta titulada Pedrito, el indiecito estudiante (1) que se public por entregas en 15 nmeros de la revista Palomilla, entre abril y noviembre de 1940. Palomilla est considerada como la revista que marc la poca de oro de la historieta en el Per.

    Un tercer registro de su obra est dado por el centenar de cuadros al leo que pint entre 1 947 y 1 962, en Lima. Pare entonces dej el seudnimo Diego Kunurana y firm sus obras sencillamente como Peralta. Se trata de una pintura diversa entre bodegones, paisajes, personajes fantsticos, retratos y escenas urbanas que marcan una clara diferencia a comparacin de sus primeros trabajos de corte indigenista. Este conjunto de cuadros fueron salvados de perderse gracias al inters de su sobrino nieto, Pedro Pineda, que los recuper y dio a conocer en el ao 2006 (2).

    Un cuarto registro de su obra est determinado por el trabajo que desarroll como artista y pintor principal de los Talleres de Cermica Artstica Iturry, fundado en 1925 en Lima. Kunurana trabaj all aproximadamente entre 1944 y 1969 y estuvo a cargo del diseo de estampas religiosas, cuadros costumbristas en especial de la sierra, y murales con diseos varios, en los que mostr su pleno dominio de los colores en la modalidad del cermico. Persisten hoy en da algunos lugares en Lima donde pueden verse sus murales. Es todo cuanto se conoce hasta ahora del trabajo artstico de Kunurana.

    Si bien se tena conocimiento de su obra, poco se saba de ella o se la consideraba perdida; por eso, es justo ponerla en valor. Esto adems permite ubicar a Kunurana como uno de los precursores de la pintura en Puno, despus de Enrique Masas Portugal, quien fue el primer artista que pint el paisaje del altiplano, por lo que hoy es considerado como el padre de la pintura punea (3).

    El presente texto se ocupa especialmente del conjunto de xilografas que Demetrio Peralta public en el BT, no sin antes revisar el contenido grfico del boletn y las ideas en torno a la esttica indoamericana que se propuso en sus pginas.

    1. Propuesta pictrica del Boletn Titikaka

    Si bien hay diversos estudios (4) sobre el contenido del BT, y los alcances que tuvo como rgano impulsor y difusor de las ideas de vanguardia en Amrica Latina y sobre su propuesta ideolgica de confluir una esttica indoamericana, parece que poco se ha dicho sobre el componente grfico y pictrico de sus pginas, llmese fotografas e ilustraciones, y cmo estas expresaron tambin una postura que dialog con el componente ideolgico del boletn.

    Hay que decir que son 38 las ilustraciones 37 firmadas y 1 sin autor, y 4 las fotografas, que aparecen en los 35 nmeros del BT o 34, en razn de que existen dos ediciones del nmero 25, publicados entre 1926 y 1930. Entre los artistas que las firman encontramos a Diego Kunurana que registra 17 xilografas,

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    constituyndose as en el artista con mayor nmero de ilustraciones. Le sigue Joaqun Chvez (5), Rene Magarios Usher (4), Florentino Sosa (3), Mara Clemencia (2), Morales Cuentas (2), Camilo Blas (1), Antonia Gutirrez (1), Lazarte (1) y Pacho Mamani (1).

    A excepcin de Kunurana y Blas, poco se sabe del resto de artistas. Camilo Blas, seudnimo de Jos Snchez Urteaga, fue un pintor indigenista y costumbrista, discpulo de Jos Sabogal. Est considerado hoy en da como uno de los ms importantes pintores indigenistas peruanos. Por su parte, Joaqun Chvez, Florentino Sosa y Manuel Morales Cuentas, entonces jvenes artistas puneos, se hicieron conocidos posteriormente al formar parte del Crculo Pictrico Laykakota (1933-1940), que agrup a un conjunto de artistas que desarrollaron un trabajo pictrico indigenista enfocado en el paisaje del altiplano, fundamental, entonces, para el impulso de la plstica en Puno (5). Actualmente, algunos cuadros de Sosa y Chvez pueden verse en el Museo Carlos Dreyer de Puno.

    Rene Magarios Usher fue un artista e ilustrador uruguayo, relativamente conocido en la poca, que ilustr diversas publicaciones literarias de su pas;

    Mara Clemencia fue una poeta e ilustradora argentina. Su nombre completo fue Mara Clemencia Lpez Pombo. En un inicio escribi poesa y luego se dedic al grabado y a la ilustracin. Colabor como vietista en las revistas argentinas Proa y urea; en las brasileras Revista de Antropofagia y Verde; y en las peruanas Boletn Titikaka y Amauta. De Antonia Gutirrez, Lazarte y Pacho Mamani, no hemos obtenido informacin ni encontrado mayor registro de su obra, aparte de la que aparece en el BT. Es probable que fueran artistas circunstanciales que colaboraron con el boletn por encargo.

    Las ilustraciones del BT muestran escenas de la vida campesina, paisajes rurales andinos, retratos y caricaturas de personajes literarios, retratos de hombres y mujeres de los Andes, smbolos iconogrficos, dolos, y un par de estampas religiosas y otro de motivos urbanos. Hay tambin una serie de vietas que acompaan algunos textos y los recuadros de los poemas, mientras que las grafas de los ttulos y secciones no siempre guardaron el mismo estilo.

    A lo largo de las pginas hay tambin una serie de avisos comerciales que anuncian prximas publicaciones de libros y revistas, o que ya han sido publicados; asimismo, anuncios sobre la suscripcin del boletn y otros ms de asuntos particulares como el del profesor Julin Palacios R. que ofrece la enseanza del quechua y aymara y el servicio de traducciones, u otro de la Farmacia Avila que destaca prontitud y esmero en la preparacin de recetas.

    Si bien el BT tuvo algunas secciones definidas (que no siempre se mantuvieron de nmero a nmero o, en todo caso, cambiaron de nombre), da la impresin de que no haba un plan definido en cuanto al soporte grfico. Por ejemplo, en algunos boletines no se incluy ninguna ilustracin y en los que s, estas no siempre tuvieron relacin con los textos y poemas. En otros casos, la ilustracin expresaba una posicin esttica y poltica como los dibujos de Morales Cuentas titulados escultura preinkaica en el boletn de mayo de 1927 (nro. 10) y Huachaskan, terracota preinkaika en el boletn de julio de 1927 (nro. 12), o el dibujo tiawanaqu de Kunurana en el boletn de junio de 1928 (nro. 23), que representan el arte indoamericano que propugnaba el BT. Churata nos dice en el texto que acompaa a esta ltima ilustracin que el vanguardismo andino ha de

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    nacer de la presciencia del documento arqueolgico vitalizado en el predominio del medio natural. Desde luego, estas ilustraciones son un ejemplo de ello.

    La primera ilustracin del BT est registrada en la edicin de diciembre de 1926 (nro. 5). Se trata de la xilografa El dolo hecha por Pacho Mamani. La segunda ilustracin aparece cuatro nmeros despus en la edicin de abril de 1927 (nro. 9), a cargo de Camilo Blas y titula Paisaje andino. Esto demuestra que, inicialmente, no hubo preocupacin por desarrollar el componente grfico en el boletn. De igual forma, es recin en la edicin de mayo de 1927 (nro. 10) que por primera vez la portada del BT muestra una xilografa en toda su pgina. Se trata del dibujo de una escultura preinca que lleva el ttulo de arte indoamericano, a cargo de Morales Cuentas. Otros siete boletines tendrn en adelante esta caracterstica. Diego Kunurana firma la portada de la edicin de agosto de 1927 (nro. 13) con la xilografa Mamacuna, siendo esta la primera colaboracin que hace para el BT y el primer registro que se tiene de su obra, como veremos ms adelante.

    En el BT de noviembre de 1927 (nro. 1 6), aparece un aviso titulado Poesa y pintura andinas, donde se da a conocer la intencin de imprimir dos libros de importancia incuestionable. Se trata de un lbum de pintura andinista y una antologa de poemas; de igual carcter, que se publicaran en formato silabario, es decir, el formato del poemario Ande, de Alejandro Peralta (32 x 42 cm). El aviso concluye con la esperanza de contar con el apoyo de los artistas andinos y que, ms adelante, se dar ms detalles.

    En el BT nmero XXVIII (marzo de 1 929) se lee una convocatoria a la Primera Exposicin de Pintura Titikaka a efectuarse en el invierno del mismo ao. La redaccin se impone la tarea de coordinar la produccin artstica de la meseta [del] titikaka, para lo que organizar una exposicin pictrica que demuestre el grado de superacin a que han llegado los artistas de la hoya del lago. Se resalta la importancia de esta convocatoria porque seguramente, es la primera vez que se har [una] exposicin de este [sic] especie respondiendo a un principio de unidad. Por ltimo, se informa que oportunamente se comunicar sobre las bases de la exposicin y los premios. La convocatoria est acompaada por una ilustracin de Joaqun Chvez, titulada El balsero.

    Ignoramos en ambos casos si se lleg a concretar la edicin de los dos libros mencionados en el primer aviso y si se hizo la referida exposicin. En todo caso, por ahora no se tiene ningn registro. Tampoco en los nmeros posteriores del BT volvi a aparecer noticia alguna al respecto, tal como lo prometan. No obstante, es evidente la preocupacin de quienes dirigan el boletn, de fomentar un circuito de exposicin y difusin del arte andino, a travs de una publicacin impresa o una exposicin que, adems, respondiera por primera vez a un principio de unidad. Por supuesto, esto tena que ver con el proyecto de articular desde las pginas del BT, una esttica que expresara el sentir, la forma, el color, el paisaje de Indoamrica.

    Esttica ndoamericana

    Los fundamentos de esta esttica pueden rastrearse en el artculo Indoamericanismo esttico de Antero Peralta, en el BT de setiembre de 1927 (nro. 14). Desarrolla la idea de que, en efecto, Indoamrica ensaya una esttica de bronce, en tanto que, el color, la forma, el sonido i la palabra toman el

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    sabor duro de la conciencia autctona, expresada en un nuevo sujeto, el neoindio que ser el resultado de la fusin de las razas de Indoamrica. Aade que, frente a las corrientes europeas como el expresionismo, simbolismo, superrealismo, la sensibilidad ndoamericana y sus artistas deben lograr la novedad del motivo concepcional [...] pegando el odo a nuestra megaltica, consubstancindose con la sicologa de nuestras montaas soberbias, viviendo el mundo de las categoras de nuestras pasadas civilizaciones, comprendiendo el lenguaje del Inti, de la Killa, del Pachakamak [...] porque la submersin en el pasado colectivo e individual i la compenetracin con el alma de la naturaleza dan la materia prima de la creacin artstica. Es decir, una esttica que tendr su gnesis en el dilogo con el pasado y la naturaleza, para poder articular una forma de creacin que fomente aquel vanguardismo andino del que hablaba Churata.

    A esta visin se suma el artculo del poeta mexicano Esteban Pavletich Hacia nuestra propia esttica, publicado en tres partes entre setiembre y noviembre de 1927, (boletines 14, 15 y 16). Propone 1926 como el ao que ha de ser el punto de partida para la negacin del arte latinoamericano implantado en Amrica como consecuencia de la imposicin brutal de un sistema econmico, de instituciones, de religin, idioma -espaoles-, que liquid el arte y la cultura verncula. Esta resistencia y/o negacin, en su opinin, abre camino a dos tendencias: Primero, la que encuentra en el poemario Ande, de Alejandro Peralta, publicado en 1926, que levanta la barricada esttica [...] con qu resistir victoriosamente a la absorcin yanqui. La segunda se sustenta en la poesa de Serafn del Mar, seudnimo de Reynaldo Bolaos, que en 1926 public Los espejos envenenados,

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    donde se lleva al plano esttico la lucha que los pueblos amenazados por la esclavitud libran en trminos econmicos y polticos.

    Si estos eran los cimientos para la construccin de una esttica ndoamericana, la propuesta esttica planteada en el BT se enfrentaba tambin a la forma cmo se conceba la creacin artstica en Europa. Esto se lustra en otros artculos referidos a la plstica, por ejemplo, La nueva pintura de Mxico, testimonio de cultura ndoamericana, escrito por Mart Casanovas, en el BT XXVI (enero de 1929) donde se hace una feroz crtica a las modalidades artsticas europeas del 1900, que han enfocado solo uno o algunos aspectos de los muchos que encierra el hecho artstico, sin abarcar y comprender su totalidad emocional. En ese sentido este arte decadente, fruto de una cultura decadente, se enfrenta con la nueva pintura mexicana, la verdadera, que encuentra su germen en la pintura revolucionaria, aquella salida del pueblo, hecha por el pueblo. Es as como esta pintura indomexicana [...] producen valores artsticos eternos, por lo que tienen de profundamente humanos.

    Es de suponer que quienes integraban la redaccin del BT compartan estas ideas y aspiraban tambin a un arte indoamericano o quiz indoperuano.

    As, es posible que el deseo de organizar la Primera Exposicin de Pintura Titikaka, anunciada en febrero de 1 929, un mes despus de la publicacin del mencionado artculo, tuviera esta aspiracin y fondo esttico-poltico.

    En el BT XXVII (febrero de 1927) se reproduce un artculo de Vctor M. Huaco, titulado La exposicin de Manuel Alzamora y su arte vernculo-plebeyo.(6) As como Casanovas nos habla del arte que sale del pueblo, Huaco incide en la propuesta popular y revolucionaria de Alzamora, ya que con l termina el arte de la decadencia y comienza el arte de la revolucin, porque el artista ha descendido a los bajos fondos populares, a los estratos sociales inferiores, para extraer los motivos inspiradores de sus cuadros. Espacios de donde emerge el cholo rural, no urbano como un producto tnico americano, vital y realista.

    Las fotografas del BT

    La primera aparece en la edicin de setiembre de 1927 (nro. 14), y nos muestra al abogado J. Enrique Gallegos que asume la defensa de la Editorial Titikaka (la que haca posible la publicacin del BT) en un litigio con el seor Jos Herrera, dueo de la tipografa Comercial que pretende aduearse de los derechos del poemario Ande, de Alejandro Peralta. La fotografa acompaa una nota en la que Churata cuenta detalles del asunto judicial.

    La segunda y tercera fotografas aparecen en la edicin XXVII (febrero de 1929). Una nos muestra a Guillermo Guevara, director de la revista La Sierra, que segn destaca el recuadro que le dedican, ha visitado Puno en diciembre de 1 928, en compaa del guitarrista abanquino Las Casas, para participar en una velada de arte autctono. En esta actividad Guevara dio un fogoso discurso de admonicin llamando a las juventudes andinas a la gran lucha por la reivindicacin de los ideales culturales del Ande. Tambin se indica que la revista La Sierra lucha desde la capital de la Repblica por imponer el sello andino en el carcter de la nacionalidad. Mientras que la otra fotografa nos muestra, tal como indico la fotoleyenda, al poeta, mdico y aviador chileno, Juan Marn, autor del poema Looping, que es incluido en el boletn. Marn viste un traje de aviador) y est

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    parado al lado de la hlice de una avioneta. El poema hace referencia a un circuito de vuelo sobre los cinco mil metros de altura.

    Finalmente, la cuarta fotografa aparece en la edicin XXXII (julio de 1929), y muestra al poeta mexicano Esteban Pavletich que, adems, firma el artculo Una nueva concepcin del Estado, a partir de una interpretacin que hiciera Vctor Ral Haya de la Torre sobre el Estado. En la fotoleyenda se lee: Esteban Pavletich vistiendo el traje que lustr el apostlico Emiliano Zapata.

    2. Xilografas de Diego Kunurana

    Son 17 las ilustraciones que Kunurana hizo para el 87. Se trata de xilografas de motivos andinos (8); retratos (5); smbolos iconogrficos (2); carcter urbano (1); y una que no encaja en alguno de los grupos sealados. Se trata de una mano haciendo puo, y aparece en el ltimo boletn, dedicado a Jos Carlos Maritegui. De todas estas ilustraciones, cuatro son motivo de portada. Tambin es posible atribuir a Kunurana la ilustracin sin firma que aparece en el 87 XXVI (enero de 1929), y que acompaa una publicidad de suscripcin del boletn. Esto en razn de la similitud del trazo que hay en dicha ilustracin y del que el artista muestra en sus iconografas.

    Estas xilografas fueron hechas entre 1927 y 1930, cuando Demetrio tena entre 1 7 y 20 aos. Es de suponer que la cercana familiar con sus hermanos mayores Arturo y Alejandro quienes tomaban las decisiones en el 87, favoreci la publicacin de sus ilustraciones en mayor nmero a comparacin del resto de artistas que, en algunos casos, apenas alcanzan a una.

    Entre las ilustraciones de motivos andinos se encuentra la que vendra a ser la primera xilografa de Diego Kunurana en el 87, y que, adems, es el primer registro que se tiene de su obra, lo que le da un valor particular. Se trata de Mamacuna, xilografa que aparece en la portada de la edicin de agosto de 1927 (nro. 1 3). Es adems la tercera portada del 87 que muestra una ilustracin en toda su pgina.

    Las dos anteriores, en los nmeros 10 y 12, estn firmadas por Morales Cuentas.

    Mamacuna es una potente xilografa que muestra a una mujer sentada sosteniendo entre sus manos y piernas a su hijo recin nacido envuelto con una manta. La mujer tiene los brazos fuertes, dirase musculosos, y sus manos unos dedos grandes y grotescos, de nudillos remarcados. La ilustracin transmite la sensacin de una fiera ternura, como si en el ambiente hubiera una amenaza que acecha a la mujer y que, por eso, necesita proteger a su guagua. El sombrero y el largo velo que le cubre la espalda como si fuera un mantn nos remite a una mujer de la pennsula de Capachica o quiz de las islas de Amantan o Taquile. Ella y su hijo sobresalen delante de un inconfundible paisaje que no es sino el lago Titicaca con su caracterstica balsa de totora y vela, arbustos, totoras y cerros en el horizonte. Completa la xilografa un cielo plagado de rayas horizontales como si se quisiera crear el efecto de un viento borrascoso. Es posible que la xilografa est inspirada en el artculo Elogio a la madre soltera del chileno Humberto Daz Casanueva que aparece en el mismo nmero y que resalta el esfuerzo de la mujer cuando se convierte en madre, cuando el hombre cazador de ciega acechanza la acorrala para gastar su sed y dejarla, aunque la mujer lucha infatigable y persiste en su trance de madre.

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    Este es el punto de partida de la obra pictrica de Demetrio Peralta. Algunos de estos elementos aparecen en su trabajo posterior, especialmente los rasgos grotescos de sus personajes y las manos grandes, que pueden verse en varios de sus leos del ao 1952.

    La segunda xilografa de motivo andino titula El ayllu y ocupa la portada del BT de setiembre de 1927 (nro. 14). Esta vez es un paisaje rural que nos remite a un lugar annimo del vasto altiplano. El paisaje luce un tanto desolado y sin la fuerza de Mamacuna, por la presencia de espacios en blanco que crean el efecto de estar frente a una pampa. En ella encontramos casas desperdigadas con techos de paja, rboles y el cerco de piedras del corral. Unas mujeres de pollera y con atado a la espalda donde cargan a sus guaguas caminan en direccin hacia las casas. El cielo est poblado de una nube negra como si estuviera a punto de caer una tormenta.

    La madera titulada El ngel, el kirkincho y la estrella, en la edicin XXIX (abril de 1 929), es otra ilustracin de motivo andino. Resaltan en ella tres elementos claramente definidos sin que haya una relacin aparente. En primer plano, la imagen de un nio de rostro grave, con la mirada fija y ataviado de un poncho y un chullo grande que termina en punta. Adelante de l aparece la parte de la boca y caja de un kirkincho charango, y, finalmente, como si se tratara de coronar la ilustracin aparece una estrella suspendida en el cielo oscuro que ilumina al nio el ngel y al instrumento musical. Es posible que la ilustracin est inspirada en los poemas le Manuel de Castro, Julio Verdie y Humberto Zairilli que aparecen en la misma pgina del boletn; versos que cantan a la msica, la primera estrella de la tarde, las tinieblas, las nocturnas auroras de la luna, la tristeza, la alegra, la infancia, el nio y el poeta.

    En la edicin XXX (mayo de 1929), tenemos otra xilografa, sin ttulo, hecha por Kunurana. Nos muestra la quietud de un paisaje en una noche andina. En primer plano, al costado izquierdo, un rbol de tronco y ramas gruesas, y una gran copa que marca la distancia con la profundidad del paisaje: unos cerros y casas a sus faldas. El conjunto se complementa con el campo y el cielo de la noche. Es posible que la ilustracin est relacionada con el artculo La sierra de Luis Alberto Snchez, que aparece en la misma pgina del boletn, donde se resalta las bondades naturales y geogrficas de la sierra y la forma de vivir en este espacio, en este paisaje, substancialmente distinto de la costa.

    La pasha es otra de las xilografas de motivo andino. Aparece en el BT XXVI (enero de 1929) y es el rostro de una mujer india de facciones duras y con una trenza que le cae por el lado izquierdo. Su mirada es fuerte pero tambin denota tristeza, como si en ella se conjugara el odio y la esperanza. El dibujo encabeza un artculo de Jorge Basadre titulado El mito de La Perricholi, y quiz sirve de contraposicin a la imagen de esta mujer que es objeto de crtica por parte del historiador.

    Las otras xilografas de Kunurana con motivo andino nos muestran los rostros de hombres pueblerinos y hombres del campo. Uno de ellos, sin ttulo, aparece en la edicin XXXI (junio de 1929); y los otros dos en la edicin XXXII (julio de 1929), titulados Retrato y Tipo de sunka. No hemos encontrado relacin directa entre estas ilustraciones y los textos de ambos boletines, pero es posible que

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    Tipo de sunka represente la imagen del indio del que Luis E. Valcrcel habla en Sobre peruanidad, texto que aparece debajo de la ilustracin.

    En esta ltima xilografa y en la que no lleva ttulo, Kunurana echa mano de sombras y destellos para configurar los rostros y los sombreros que ambos hombres llevan puestos en la cabeza. Si en el primero nos revela a un hombre sosegado, calmo, ms amable; en el segundo, estamos ante un hombre de rostro ptreo, con facciones duras, que expresa ira en su semblante. Mientras que Retrato, nos muestra a un hombre ms urbano, quiz un campesino que vive en la ciudad. No lleva sombrero, est correctamente peinado e incluso viste un saco y una cafarena, aunque su semblante no deje de ser spero, con una mirada impasible. Quiz se trate de un Kkara wajjtas, aquellos hombres que vienen a la sierra a hacer algo por la vida respaldados con un nombramiento de autoridad y cometen una serie de abusos por estar envarados; como se afirma en el artculo La pedagoga de Mayku Qqapa y Mama Ojllu, firmado por Julin Palacios, que aparece en el mismo boletn.

    En cuanto a los retratos hechos por Kunurana, el primero aparece en el BT de octubre 1927 (nro. 1 5) y est dedicado a Ricardo Giraldes (1886-1927), escritor y poeta argentino que acababa de fallecer en Pars. Churata en la nota de homenaje que escribe destaca su novela Don Segundo Sombra (1926) y lo califica como uno de los primeros escritores de la vanguardia indoamericana.

    El siguiente retrato aparece en el BT de noviembre de 1927 (nro. 16) y es el perfil de Augusto Aguirre Morales (1888-1957), narrador, poeta y periodista arequipeo, integrante del movimiento Colnida y autor de la novela histrica El pueblo del Sol (1924), que, como indica la resea escrita por Churata, acaba de ser publicada en Lima. Se trata posiblemente de una segunda edicin. Churata exalta a Aguirre por haber realizado la gigante empresa de reconstruir con espritu la silueta del Tawantinsuyo.

    El tercer retrato, en el BT de enero de 1928 (nro. 18), est dedicado al historiador Luis E. Valcrcel (1891-1987) y acompaa un extenso artculo de Churata a propsito de la aparicin de Tempestad en los Andes (1927), al que considera un libro indianista llamado a injertarse en la conciencia del pueblo. Reclama, asimismo, la necesidad de que sea traducido al quechua.

    El cuarto retrato aparece como portada de la edicin de febrero de 1928 (nro. 19) dedicado al lder revolucionario nicaragense Sandino (1895-1934), que luch contra la ocupacin militar estadounidense en su pas. La xilografa lleva una leyenda en la que se le compara con Bolvar y se le considera el smbolo de una nueva conciencia frente al gigante rubio y la fuerza del espritu contra la materia hecha fuerza.

    El quinto retrato aparece en el BT XXXIV, que est fechado en 1930. Nos muestra a Jos Carlos Maritegui de perfil, con saco y corbata, rodeado de un fondo de gruesas lneas labernticas. Es una versin inspirada en la clebre fotografa que hizo el pintor argentino Jos Malanca a Maritegui en 1928. La xilografa forma parte del contenido que, ntegro, est dedicado a homenajear al Amauta tras su fallecimiento en abril del mismo ao. Aparecen tambin otros dos retratos de Maritegui hechos por Florentino Sosa y Joaqun Chvez. Se muestra, asimismo, la transcripcin del telegrama que la redaccin del boletn envi a Anna Chiappe, la viuda de Maritegui. Uno de los firmantes es Kunurana. En este boletn se

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    incluye otra xilografa de Kunurana, sin ttulo, que nos muestra una mano haciendo puo.

    Entre las ilustraciones de tipo iconogrfico hechas por Kunurana tenemos la xilografa dibujo tiawanaqu que aparece como motivo de portada en el BT de junio de 1928 (nro. 23). El dibujo nos muestra a un pequeo diosecillo o quiz un guerrero visto de perfil, en movimiento, como si estuviera corriendo. Lleva en la mano un bculo y sobre la espalda y la nuca, una especie de caparazn donde se puede ver un cndor y otros smbolos. El dibujo est inspirado en el personaje que aparece tallado innumerables veces en el friso de la Puerta del Sol, en el Templo de Kalasasaya, en Tiahuanaco, Bolivia. La ilustracin tiene una extensa fotoleyenda firmada por Churata donde hace mencin al arte ancestral expresado en la escultura y las terracotas incas y prencas como estupendos muestrarios de un pice esttico a[l] que hoy la humanidad retorna, acaso la gnesis de la cual debe beber la produccin artstica.

    En esta lgica tambin se encuentra la segunda ilustracin iconogrfica de Kunurana. Titula Simbolismo Tiawanaqu y aparece en la primera pgina del BT XXXI (junio de 1929). No lleva fotoleyenda ni parece acompaar un texto. Se trata de un cuadrado que a su vez tiene en su interior una serie de combinaciones de rectngulos, crculos y cuadrados de distinta dimensin, en colores blanco y negro. En la parte superior e inferior se muestra una sucesin de lneas que asemejan un camino oblicuo, o las aguas de un ro, o el cuerpo de una culebra. A juzgar por el ttulo es posible que Kunurana se inspirase en algn grabado de la cultura Tiawanaco para hacer esta ilustracin.

    Finalmente, tenemos la ilustracin, sin ttulo, que aparece en el BT XXX (mayo de 1929). Se trata de una pequea xilografa que nos muestra la fachada de una casa dentro de un callejn que conduce a una puerta. Se puede apreciar el detalle de las veredas, la entrada al callejn y el techo de la casa. El dibujo no guarda relacin con los textos y es la nica ilustracin de Kunurana que no est dentro de la temtica andina.

    Es este conjunto de xilografas el que establece la obra primigenia de Demetrio Peralta, influenciada por el pensamiento de vanguardia indigenista que propona el BT. Su posterior obra, sin embargo, mantendr cierto eco de este trabajo nicitico aunque primarn aspectos de carcter urbano. El BT dej de publicarse en 1929, y solo con motivo de la muerte de Maritegui, sali una edicin ms en 1930. Demetrio fue encarcelado los primeros meses de 1932 en Puerto Maldonado a causa de sus ideas socialistas, de manera que, es posible que entre 1929 y 1931 haya hecho ms xilografas, aunque no haya registro de ello. En agosto de 1 933, una vez liberado, regres a Puno y enseguida se fue a vivir a Arequipa para luego, en 1 940 o aos antes, afincarse definitivamente en Lima.

    Una lectura en conjunto de las xilografas de Kunurana en el BT nos permite advertir un Corpus pictrico diverso pero enhebrado en una columna vertebral que entraa la representacin del mundo y espacio rural andino; pero, al mismo tiempo, un corpus que dialoga con la visin esttica que planteaba el BT: la creacin y el desarrollo de un arte indoamericano a partir de la naturaleza, la emocin y el pasado. De esta manera, si consideramos que Kunurana fue el artista con mayor protagonismo y nmero de ilustraciones en el boletn, es posible afirmar, entonces, que su arte expresa la propuesta pictrica del BT y,

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    acaso, un intento de mostrarnos la gnesis del arte indoamericano o tal vez indoperuano que propugnaba en sus pginas.

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    (1) Ver un estudio detallado en Reynoso 2013 y 2014 (2) Ver Pineda Aragn 2006: 3-5 (3) Un estudio sobre los momentos y evolucin de la pintura punea, puede verse en Reynoso 2013 (4) Ver en especial Wise 1984, Vich 2000 y Zevallos Aguilar 2002 (5) Vase ms sobre el Circulo Pictrico Laykakota en Reynoso 2008 (6) Alzamora fue un artista autodidacta nacido en Cusco en 1900, pero arequipeizado por su larga residencia en la ciudad blanca. Realiz una obra de temtica social que expone las costumbres populares y criollas donde conjug el humor grfico y lo grotesco. La historiadora de arte y nieta del artista, Rosemary Zenker, ha organizado dos exposiciones en Lima, en 2012 y 2013, con el propsito de revalorar la obra de Alzamora. Cuadros del artista pueden verse en: http://atelieralzamora.blogspot.com/

    Referencias bibliogrficas

    Boletn Titikaka (2004). Edicin facsimilar dirigida por Dante Callo Cuno. Arequipa: Universidad Nacional de San Agustn.

    Gutirrez Viuales, Rodrigo (2014). Modernidad rioplatense. Libros ilustrados uruguayos en una era de transformaciones artsticas (1920-1934). En http://www.academia.edu/8802028/_Modernidad_rioplatense._Libros_ilustrados_uruguayos_en_ una_era_de_transformaciones_art%C3%ADsticas _1920-1934_._Temas_de_la_Academia_Buenos_Aires__Academia_Nacional_de_Bellas_Artes_No_ 1 l_2014_pp._72-84

    Museo Figari (2013). Poesa e ilustracin uruguaya 1920-1940. En http://www.museofigari.gub.uy/ innovaportal/file/431 85/1 /poesia_e_ilustracion_uruguaya_1920-1940.pdf

    Pineda Aragn, Pedro (2006). El orkopata desconocido: Diego Kunurana. En Revista Pez de Oro, nro. 13, pp. 3-5.

    Reynoso, Christian (2008). El ltimo Laykakota. Biografa del pintor Francisco Montoya Riquelme. Lima: Lago Sagrado Editores. Reynoso, Christian (2013, enero). Rumbos de la pintura punea (Anotaciones para la historia de la

    plstica en Puno). En http://www.casadelcorregdor.pe/colaboraciones/_biblio_Reynoso.php

    Reynoso, Christian (2013, diciembre, y 2014, marzo). La historieta encontrada de Demetrio Peralta (Diego Kunurana): "Pedrito, el indiecito estudiante" (1940). En diario Los Andes, Puno, y en revista Campo Letrado, Lima, nro. 4.

    Rodrguez Rea, Miguel ngel (1981, julio-octubre). Gua del boletn Titikaka (Puno, 1926-1930). En Hueso Hmero, nro. 1 0, pp. 1 84-204, en nro. 1 1, pp. 140-153.

    Vich, Cynthia (2000). Indigenismo de vanguardia en el Per. Un estudio sobre el Boletn Titikaka. Lima: Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Catlica del Per.

    Wise, David (1 984, segundo semestre). Vanguardismo a 3800 metros: el caso del Boletn Titikaka (Puno. 1926-1930). En Revista de Crtica Literaria Latinoamericana, ao X, nro 20, Lima, pp. 89-100.

    Zevallos Aguilar, Juan (2002). Indigenismo y nacin. Los retos a la representacin de la subalternidad aymara y quechua en el Boletn Titikaka (1926- 1930). Lima: Instituto Francs de Estudios Andinos y Banco Central de Reserva del Per.

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    ________________ 4 Ver en especial Wise 1984, Vch 2000 y Zevallos Aguilar 2002. 1 Ver un estudio detallado en Reynoso 201 3 y 2