La Rep Blica

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GUIA DE LECTURA PLATÓN República, Libro VII 514 a -517c -Después de eso, proseguí, compara nuestra naturaleza respecto de su educación y de su falta de educación con una experiencia como ésta. Represéntate hombres en una morada subterránea en forma de caverna, que tiene la entrada abierta, en toda su extensión, a la luz. En ella están desde niños con las piernas y el cuello encadenados, de modo que deben permanecer allí y mirar sólo delante de ellos, porque las cadenas les impiden girar en derredor la cabeza. Más arriba y más lejos se halla la luz de un fuego que brilla detrás de ellos; y entre el fuego y los prisioneros hay un camino más alto, junto al cual imagínate un tabique construido de lado a lado, como el biombo que los titiriteros levantan delante del público para mostrar, por encima del biombo, los muñecos. - Me lo imagino. - Imagínate ahora que, del otro lado del tabique, pasan hombres que llevan toda clase de utensilios y figurillas de hombres y otros animales, hechos en piedra y madera y de diversas clases; y entre los que pasan unos hablan y otros callan. - Extraña comparación haces, y extraños son esos prisioneros. - Pero son como nosotros. Pues en primer lugar, ¿crees que han visto de sí mismos, o unos de los otros, otra cosa que las sombras proyectadas por el fuego en la parte de la caverna que tienen frente a sí? - Claro que no, si toda su vida están forzados a no mover las cabezas. - ¿Y no sucede lo mismo con los objetos que llevan los que pasan del otro lado del tabique? - Indudablemente. - Pues entonces, si dialogaran entre sí, ¿no te parece que entenderían estar nombrando a los objetos que pasan y que ellos ven? - Necesariamente. En este libro Platón trata de su famoso “mito de la caverna” en el que compendia toda su filosofía. Nuestra alma está prisionera del cuerpo contemplando sólo la sombra de la auténtica realidad. Los objetos proyectados serían las ideas

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  • GUIA DE LECTURA

    PLATN

    Repblica, Libro VII 514 a -517c

    -Despus de eso, prosegu, compara nuestra

    naturaleza respecto de su educacin y de su falta de

    educacin con una experiencia como sta.

    Represntate hombres en una morada subterrnea

    en forma de caverna, que tiene la entrada abierta,

    en toda su extensin, a la luz. En ella estn desde nios con las piernas y el

    cuello encadenados, de modo que deben permanecer all y mirar slo

    delante de ellos, porque las cadenas les impiden girar en derredor la

    cabeza. Ms arriba y ms lejos se halla la luz de un fuego que brilla detrs

    de ellos; y entre el fuego y los prisioneros hay un camino ms alto, junto al

    cual imagnate un tabique construido de lado a lado, como el biombo que

    los titiriteros levantan delante del pblico para mostrar, por encima del

    biombo, los muecos.

    - Me lo imagino.

    - Imagnate ahora que, del otro lado del tabique, pasan hombres que

    llevan toda clase de utensilios y figurillas de hombres y otros animales,

    hechos en piedra y madera y de diversas clases; y

    entre los que pasan unos hablan y otros callan.

    - Extraa comparacin haces, y extraos son

    esos prisioneros.

    - Pero son como nosotros. Pues en primer

    lugar, crees que han visto de s mismos, o unos de los otros, otra cosa que

    las sombras proyectadas por el fuego en la parte de la caverna que tienen

    frente a s?

    - Claro que no, si toda su vida estn forzados a no mover las

    cabezas.

    - Y no sucede lo mismo con los objetos que llevan los que pasan del

    otro lado del tabique?

    - Indudablemente.

    - Pues entonces, si dialogaran entre s, no te parece que entenderan

    estar nombrando a los objetos que pasan y que ellos ven?

    - Necesariamente.

    En este libro Platn trata de

    su famoso mito de la

    caverna en el que compendia

    toda su filosofa.

    Nuestra alma est prisionera

    del cuerpo contemplando slo la

    sombra de la autntica realidad.

    Los objetos proyectados seran

    las ideas

  • La Repblica. Libro VII

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    - Y si la prisin contara con un eco desde la pared que tienen frente a

    s, y alguno de los que pasan del otro lado del tabique hablara, no piensas

    que creeran que lo que oyen proviene de la sombra que pasa delante de

    ellos?

    - Por Zeus que s!

    - Y que los prisioneros no tendran por real otra cosa que las

    sombras de los objetos artificiales transportados?

    - Es de toda necesidad.

    - Examina ahora el caso de una liberacin de sus cadenas y de una

    curacin de su ignorancia, qu pasara si naturalmente les ocurriese esto:

    que uno de ellos fuera liberado y forzado a

    levantarse de repente, volver el cuello y marchar

    mirando a la luz, y al hacer todo esto, sufriera y a

    causa del encandilamiento fuera incapaz de percibir

    aquellas cosas cuyas sombras haba visto antes.

    Qu piensas que respondera si se le dijese que lo

    que haba visto antes eran frusleras y que ahora,

    en cambio est ms prximo a lo real, vuelto hacia

    cosas ms reales y que mira correctamente? Y si se

    le mostrara cada uno de los objetos que pasan del

    otro lado del tabique y se le obligara a contestar preguntas sobre lo que

    son, no piensas que se sentir en dificultades y que considerar que las

    cosas que antes vea eran ms verdaderas que las que se le muestran

    ahora?

    - Mucho ms verdaderas.

    - y si se le forzara a mirar hacia la luz misma, no le doleran los ojos

    y tratara de eludirla, volvindose hacia aquellas cosas que poda percibir,

    por considerar que stas son realmente ms claras quejas que se le

    muestran?

    - As es.

    - Y si a la fuerza se lo arrastrara por una escarpada y empinada

    cuesta, sin soltarlo antes de llegar hasta la luz del sol, no sufrira acaso y

    se irritara por ser arrastrado y, tras llegar a la luz, tendra los ojos llenos de

    fulgores que le impediran ver uno solo de los objetos que ahora decimos

    que son los verdaderos?

    Si se liberara un prisionero

    y se le mostrara la luz, esto

    es, si un filsofo

    ascendiera por el camino

    del verdadero

    conocimiento, le costara

    trabajo. El proceso

    laborioso y difcil de

    acomodar la inteligencia a

    una nueva realidad es la

    educacin

  • La Repblica. Libro VII

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    - Por cierto, al menos inmediatamente.

    - Necesitara acostumbrarse, para poder

    llegar a mirar las cosas de arriba. En primer lugar

    mirara con mayor facilidad las sombras, y despus

    las figuras de los hombres y de los otros objetos

    reflejados en el agua, luego los hombres y los

    objetos mismos. A continuacin contemplara de noche lo que hay en el

    cielo y el cielo mismo, mirando la luz de los astros y la luna ms fcilmente

    que, durante el da, el sol y la luz del sol.

    - Sin duda.

    - Finalmente, pienso, podra percibir el sol, no ya en imgenes en el

    agua o en otros lugares que le son extraos, sino contemplarlo como es en

    s y por s, en su propio mbito.

    - Necesariamente.

    - Despus de lo cual concluira, con respecto

    al sol, que es lo que produce las estaciones y los

    aos y que gobierna todo en el mbito visible y

    que de algn modo es causa de las cosas que ellos

    haban visto.

    - Es evidente que, despus de todo esto,

    arribara a tales conclusiones.

    - Y si se acordara de su primera morada, del tipo de sabidura

    existente all y de sus entonces compaeros de cautiverio, no piensas que

    se sentira feliz del cambio y que los compadecera?

    - Por cierto.

    - Respecto de los honores y elogios que se tributaban unos a otros, y

    de las recompensas para aquel que con mayor agudeza divisara las

    sombras de los objetos que pasaban detrs del tabique, y para el que mejor

    se acordase de cules haban desfilado habitualmente antes y cules

    despus, y para aquel de ellos que fuese capaz de adivinar lo que iba a

    pasar, te parece que estara deseoso de todo eso y envidiara a los ms

    honrados y poderosos entre aquellos? 0 ms bien no le pasara como al

    Aquiles de Homero, y preferira ser un labrador que fuera siervo de un

    hombre pobre o soportar cualquier otra cosa, antes que volver a su

    anterior modo de opinar ya aquella vida?

    El conocimiento es un proceso

    de trascendencia, de ascenso

    desde las sombras de la opinin

    hacia la luz cada vez mayor y

    ms clara del conocimiento

    Finalmente al llegar al mayor

    grado de conocimiento, el

    filsofo reconocer que el bien

    (el sol) es la causa de la

    existencia del mundo visible,

    como ya se ha comentado

    anteriormente y comprender

    que antes se encontraba en un

    mundo falso y superficial

  • La Repblica. Libro VII

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    - As creo tambin yo, que padecera cualquier cosa antes que

    soportar aquella vida.

    - Piensa ahora esto: si descendiera nuevamente y ocupara su propio

    asiento, no tendra ofuscados los ojos por las tinieblas, al llegar

    repentinamente del sol?

    - Sin duda.

    - Y si tuviera que discriminar de nuevo

    aquellas sombras, en ardua competencia con

    aquellos que han conservado en todo momento

    las cadenas, y viera confusamente hasta que sus

    ojos se reacomodaran a ese estado y se

    acostumbraran en un tiempo nada breve, no se

    expondra al ridculo y a que se dijera de l que,

    por haber subido hasta lo alto, se haba estropeado los ojos, y que ni

    siquiera valdra la pena intentar marchar hacia arriba? Y si intentase

    desatarlos y conducirlos hacia la luz, no lo mataran, si pudieran tenerlo en

    sus manos y matarle a quien intentara desatarles y hacerles subir?

    - Seguramente.

    - Pues bien, querido Glaucn, debemos aplicar integra esta alegora a

    lo que anteriormente ha sido dicho, comparando la regin que se manifiesta

    por medio de la vista con la morada- prisin, y

    la luz del fuego que hay en ella con el poder del

    sol; compara, por otro lado, el ascenso y

    contemplacin de las cosas de arriba con el

    camino del alma hacia el mbito inteligible, y no

    te equivocars en cuanto a lo que estoy

    esperando, y que es lo que deseas or. Dios

    sabe si esto es realmente cierto; en todo caso,

    lo que a m me parece es que lo que dentro de

    lo cognoscible se ve al final, y con dificultad, es

    la Idea del Bien. Una vez percibida, ha de

    concluirse que es la causa de todas las cosas

    rectas y bellas, que en el mbito visible ha

    engendrado la luz y al seor de sta, y que en el mbito inteligible es

    seora y productora de la verdad y de la inteligencia, y que es necesario

    Tras finalizar la narracin

    del mito de la caverna, Platn

    hace un resumen,

    distinguiendo los mundos

    sensible e inteligible y

    considerando la idea del bien

    la causa de todo lo que

    existe. Adems por ser el

    origen de todo lo bueno es

    tambin el fundamento de la

    moral. Es el intelectualismo

    moral por el que se afirma

    que slo los que conocen el

    bien pueden actuar con

    sabidura tanto en la moral

    como en la poltica

    Platn avisa al que sigue la

    senda de la educacin que se

    expone a las burlas y la

    incomprensin de los ignorantes

    que prefieren vivir en la mentira

    antes que reconocer la

    equivocacin de sus miserables

    vidas

  • La Repblica. Libro VII

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    tenerla en vista para poder obrar con sabidura tanto en lo privado como en

    lo pblico.

    - Comparto tu pensamiento, en la .medida que me es posible.

    PLATN: REPBLICA. 1. CONTEXTO HISTRICO, CULTURAL Y FILOSFICO.

    1.1. La Obra.

    La Repblica o Politeia, tal como fue conocida en la Academia, fue

    escrita durante la madurez intelectual de Platn. Es una obra que, segn

    los comentaristas, se fue gestando poco a poco, en distintos aos. Platn

    fue escribiendo los distintos libros de ah que en su estructura nos

    encontremos que, a pesar de su unidad se adviertan cambios de

    argumentacin, interrupciones o regresos a puntos ya tratados. Estas

    modificaciones sugieren que Platn ha sentido la necesidad de tratar

    nuevamente algo o de recomenzar la obra sin suprimir lo anterior o de

    interrumpir el tratamiento de un punto para aclarar otro etc. Hay que tener

    en cuenta, adems que esta obra como todas las generadas en esta poca

    no fueron creadas para hacerse pblicas ms all de los miembros de la

    Academia fundada por l. En realidad se trata de un texto que tiene la

    intencin de ser un argumento educativo a la manera socrtica, una

    manera de iniciar la discusin y el dilogo entre los profesores y alumnos de

    la academia.

    La Repblica tiene como tema central la justicia. Puesto que el

    problema de la justicia implica, segn enseaba Scrates, la existencia de

    personas justas, Platn expone en los primeros libros cuales son las

    condiciones polticas que hagan florecer la justicia en la ciudad.

    Expone entonces cual ha de ser la ciudad ideal iniciando con ello la

    tradicin filosfica y poltica de la Utopas (obras donde se exponen

    situaciones ideales para que sirvan de contraste y reflexin sobre los males

    de este mundo).

    Como en otros dilogos platnicos, los adversarios de Platn son

    los sofistas, concretamente las tesis sofsticas segn las cuales la justicia

    consiste en el dominio del ms fuerte y que el injusto es ms feliz que el

    hombre justo. Frente a la primera tesis, Platn tratar de definir qu es la

  • La Repblica. Libro VII

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    justicia y tras la segunda, tratar de demostrar que la felicidad slo es

    posible si hay justicia.

    Los libros VI y VII fueron escritos aproximadamente en torno al ao

    390 en el que un Platn que cuenta ya con cincuenta aos ha madurado su

    idea de ciudad ideal y encara ya el problema de la educacin de los

    filsofos que deben encarar la tarea del gobierno de la ciudad.

    El esquema general de la obra es el siguiente:

    1. Los libros II, III, y IV de la Repblica estn dedicados a definir qu

    es la justicia. Para ello Platn examina las clases o grupos sociales

    de que se compone el Estado (productores, guardianes,

    gobernantes). La justicia, establecer, consiste en el orden armnico

    de estos tres grupos cuando cumplen debidamente su funcin cada

    uno de ellos en la Polis.

    2. Los libros V, VI y VII estn dedicados a estudiar bajo qu

    condiciones puede realizarse un estado justo. Platn propone

    tres medidas a adoptar: a) igualdad de hombres y mujeres b)

    supresin de la familia y de la propiedad privada para guardianes y

    gobernantes c) gobierno del sabio, del filsofo.

    Que han de gobernar los sabios, los filsofos, es la idea clave

    de la utopa platnica. Tras afirmar que ha de ser as, Platn

    analiza las cualidades propias de los verdaderamente filsofos en lo

    que se refiere a su carcter e inteligencia, para ocuparse a

    continuacin de su educacin.

    A este momento del dilogo el de la educacin de los

    filsofos- pertenecen los pasajes seleccionados para

    comentario.

    3. Tras ocuparse de la educacin de los filsofos, los ltimos libros de la

    Repblica VIII, IX y X se dedican a la injusticia, la educacin y

    la definicin de la felicidad de los ciudadanos.

  • La Repblica. Libro VII

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    1.2. El texto

    En el Libro VII, Platn recapitula de nuevo la clasificacin de las

    cuatro facultades establecidas en el smil de la lnea, pero esta vez

    empleando una historia llena de metforas, una alegora. La alegora de la

    caverna, tambin conocida como mito de la caverna es una narracin con la

    que quiere explicar su teora de la realidad y su teora del

    conocimiento expuesta anteriormente en el smil de la lnea as como la

    idea central de la filosofa platnica de que el conocimiento es un

    proceso de liberacin del ser humano.

    La alegora narra la historia de un grupo de personas que estn

    prisioneras sin saberlo. Como siempre han vivido encadenadas dentro de

    una caverna, nunca han experimentado el mundo exterior ni saben que han

    sido privadas de l. Para ellos el mundo se reduce a las sombras que en la

    pared proyectan los diferentes objetos que posan ante una hoguera, y

    cuando oyen voces piensan que se tratan de las sombras que hablan.

    Para los prisioneros estas sombras constituyen la realidad, estn

    satisfechas con sus vidas porque desconocen que exista algo ms all de

    este espectculo de sombras y voces. Creen que sus mximos logros

  • La Repblica. Libro VII

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    comienzan y terminan cuando los dems prisioneros les consideran los

    mejor preparados para reconocer las sombras proyectadas. Estos

    prisioneros se creen felices porque son ignorantes y han organizado su vida

    de tal manera que ser considerado ms importante y ms sabio quien ms

    se aferre a este mundo de ilusiones.

    Las sombras proyectadas constituyen el mundo de los

    conocimientos sensibles, de la imaginacin y la conjetura. Las discusiones,

    premios, privilegios y dilogos en torno a qu pueden ser exactamente cada

    una de las figuras proyectadas es el mbito de la creencia. Tanto en uno

    como en otro caso el prisionero est atrapado por el mundo sensible.

    Pero qu ocurrira, se pregunta Platn, si uno de los prisioneros

    consiguiera liberarse. Probablemente mirara hacia atrs y se dar cuenta

    que las sombras proyectadas tienen su origen en objetos iluminados por

    una hoguera. Este prisionero representara al hombre inteligente que

    trata de ver ms all de lo dado. Aunque todava su esfuerzo resulta

    insuficiente e inicia un penoso ascenso hacia el exterior de la caverna. Al

    principio se trata de una experiencia dolorosa y el recin liberado se siente

    cegado por la claridad del

    da. Luego va siendo capaz

    de mirar las sombras, las

    imgenes reflejadas en el

    agua, etc. Finalmente es

    capaz de mirar

    directamente a las cosas

    reales, incluso al mismo

    sol, fuente de toda luz.

    Despus de haber contemplado el origen de todo, la luz del sol, el

    esclavo liberado, el filsofo, no puede quedarse en la simple contemplacin

    de la autntica realidad sino que se ve obligado moralmente a tratar de

    liberar a los compaeros de cautiverio y de nuevo baja al mundo de

    sombras. Desgraciadamente es muy difcil que los prisioneros quieran salir

    de la cmoda vida en la que se han instalado y, lo ms probable es que

    empiecen por burlarse del filsofo por proponer ideas tan extraas, que

    luego lo desprecien y que finalmente decidan acabar con l para que deje

    de molestar con sus absurdas ideas.

  • La Repblica. Libro VII

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    Todos los elementos de esta narracin hay que interpretarlos como

    smbolos de su teora. La caverna es el mundo en el que vivimos y los

    prisioneros son las almas de los seres humanos que se encuentran

    atrapadas por las cadenas que representan al cuerpo. Lo que ven los

    prisioneros, las sombras reflejadas en la pared no es ms que imaginacin

    y el origen de esas sombras, los objetos que transportan delante del fuego,

    los objetos sensibles. En definitiva es el mundo de lo sensible que se

    corresponde con el nivel de conocimiento de la opinin.

    Solo realizando un enorme esfuerzo el prisionero que rompe sus

    cadenas, el filsofo ha logrado salir de la caverna y ha llegado a la

    contemplacin de la verdadera realidad, el mundo inteligible. Esta realidad,

    al principio no se puede contemplar de manera directa y solo ve imgenes

    borrosas, se halla en un primer estado de conocimiento el de las Ideas de

    las cosas; poco a poco va acostumbrndose a la luz y ya puede ver los

    reflejos de las cosas, es decir, las Ideas matemticas. Posteriormente

    puede ver los objetos tal y como son, es decir, las ideas ms importantes,

    las que se refieren a los valores morales y principios. Finalmente se da

    cuenta de que puede ver gracias a una luz que todo lo ilumina, el sol que

    sera la representacin de la Idea del Bien

    Este filsofo, posteriormente, debe volver a la caverna a ayudar a

    sus compaeros a salir de ella (aunque algunos se burlen de l y se nieguen

    a salir), debe asumir el gobierno para mejorar a los hombres, abriendo a

    sus ojos la verdadera realidad.

    1.3. Educacin y poltica

    La concepcin dualista del mundo se ha incorporado a muchas de las

    concepciones que sobre el ser humano y la realidad se han realizado en el

  • La Repblica. Libro VII

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    pensamiento Occidental. El mito de la caverna es una de las creaciones ms

    conocidas de esta teora platnica por lo que ha sido objeto de mltiples

    interpretaciones.

    Entre todas ellas cabe destacar el sentido educativo del mito: el

    proceso de ascenso a la verdad no es solo la adquisicin del conocimiento

    sino de transformacin de las personas para ser alguien mejor. La

    educacin no es solo aprender, es tambin mejorar, adquirir la aret.

    Educacin es transformacin moral.

    Con esta imagen Platn quiere destacar lo que va a ser una

    constante fundamental en su obra: la educacin no consiste en introducir

    conocimientos en la

    mente del estudiante,

    sino ensearle a volver

    la mirada hacia la

    autntica realidad,

    hacia lo que merece ser

    mirado. La educacin,

    por tanto no es

    simplemente aparentar

    que se tienen

    conocimientos (como

    pretendan los sofistas)

    sino una

    transformacin

    completa del

    individuo. Conforme

    avanzamos en el camino del verdadero conocimiento, de acuerdo con el

    intelectualismo socrtico, vamos tambin avanzando el camino de la aret,

    de la excelencia o la virtud que nos hace ser mejores ciudadanos.

    Pero, adems, el mito tiene una clara interpretacin en clave

    poltica (no se olvide que est tratando de la educacin de los filsofos, de

    los ciudadanos que estn llamados a ser los gobernantes de la ciudad). La

    tarea del filsofo no se termina en la contemplacin de la Idea Suprema, el

    filsofo tiene una obligacin moral con el resto de los ciudadanos

    prisioneros que estn sumidos en la oscuridad de la caverna. El filsofo

  • La Repblica. Libro VII

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    tiene la obligacin de educar, es decir, conducir al resto de los

    prisioneros, hacia la contemplacin de la autntica realidad. Es la primera

    formulacin de la historia de la Filosofa del compromiso de los intelectuales

    con la sociedad.

    Posteriormente al texto propuesto para comentario el libro VII

    expondr los estudios que debera realizar el aspirante a

    filsofo/gobernante: la geometra, la astronoma, la dialctica (el estudio

    supremo). Pero con la advertencia expresada en la anterior alegora de que

    se trata de un camino arduo y difcil solamente reservado a los que estn

    dispuestos a sacrificar su comodidad en busca de la autntica verdad y la

    mejora de la vida de sus conciudadanos

    Es preciso por tanto, aclarar cmo se realizan ambos procesos, el de

    transformacin individual, la tica y el de transformacin social, la poltica

    2. RELACIN DE LA FILOSOFA DE PLATN CON OTRAS DE LA

    HISTORIA DE LA FILOSOFA. VALORACIN DE SU ACTUALIDAD.

    Los dos pasajes que se proponen para su comentario son tal vez los

    ms comentados y famosos de los dilogos platnicos. En ellos se

    establece de manera explcita lo que luego sern elementos constantes en

    la tradicin cultural europea. En primer lugar, tal como se muestra en el

    libro VI, la identificacin de conocimiento y realidad, en concreto que

    es el conocimiento intelectual, la inteligencia, la razn la que puede dar

    proporcionarnos una verdad firme y rigurosa (idea que posteriormente dara

    como resultado la aparicin de la ciencia fsico/matemtica). En el libro VII

    aparece un conjunto de ideas muy interesantes y especialmente la de que

    el ser humano solo puede llegar a ser feliz si es capaz de

    transformar su existencia mediante la educacin, es decir que slo

    mediante la educacin el hombre puede aspirar a la aret, la excelencia.

    En trminos generales, la influencia de Platn se hace notar de

    inmediato como fundador de la Academia en la formacin de las mejores

    mentes de la Grecia clsica y el periodo helenstico, una institucin que se

    mantendra durante siglos como centro ejemplar de enseanza.

    Especialmente notable es su influencia en uno de los principales pensadores

    griegos, Aristteles, el cual se considera a s mismo como platnico, aunque

  • La Repblica. Libro VII

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    su filosofa, si bien parte de los presupuestos platnicos acaba tomando una

    direccin propia y original.

    Sin embargo, la principal influencia del pensamiento platnico,

    adems de la riqueza de contenidos y la originalidad de planteamientos,

    estriba en la conformacin de una escuela de pensamiento que ha ejercido

    una funcin determinante en el pensamiento occidental: el idealismo.

    El idealismo, espiritualismo o, tambin, realismo de las esencias,

    niega valor de realidad absoluta a los datos de los sentidos, es decir, niega

    que la realidad se muestre a travs de los sentidos, puesto que la

    verdad y con ella la realidad de las cosas solo puede venir dada por las

    precisas y exactas ideas de la razn. El idealismo platnico se constituye

    as en el fundamento del pensamiento metafsico, es decir, el que busca

    encontrar ms all de la realidad fsica, sensible, el autntico ser de las

    cosas, que no es accesible mediante la visin sensible, sino mediante los

    ojos del alma.

    Desde esta perspectiva puede entenderse a Platn como fundador

    del pensamiento utpico y deontolgico (es decir, la investigacin no

    slo sobre el ser sino sobre el deber ser). La tarea de la filosofa est ms

    all de la simple descripcin cientfica del ser y pretende elaborar la

    definicin de lo que debe ser. Frente a la materialidad cambiante, al

    permanente cambio y mudanza de las cosas, a la injusticia de la vida

    cotidiana que nos revela la corrupcin y la mezquindad de las almas, frente,

    en fin, la violencia de la opinin que condena a muerte al justo y eleva al

    poder a los demagogos, Platn contrapone una visin ideal de la vida

    humana en el que la verdad la justicia y la bondad venga definida por la

    razn y no por la pasin o por los intereses egostas.

    Platn asimismo fundamentar los sistemas polticos y morales

    que se basan en la naturaleza de los seres humanos. La idea de que

    hay que ofrecer a cada uno segn sus necesidades y que estas

    tendencias (deseo material, valor, razn) determinan el puesto en la escala

    social estar sobre todo presente en los sistemas feudales de la edad

    media. Aunque no deja de ejercer su influencia en el pensamiento

    poltico de carcter clasista que buscan la organizacin social en la

    capacidad y disposicin de los individuos.

  • La Repblica. Libro VII

    13

    La influencia, en fin, del platonismo afectar desde el cristianismo

    (para quien Platn es una especie de santo laico, cristiano antes e que

    naciera cristo), la ciencia renacentista (en la que se sobrepone la

    concepcin ideal, matemtica de la realidad a la visin de los datos

    sensibles) Descartes, Kant, Hegel e incluso en visiones

    tremendamente crticas como las de Marx o Nietzsche.

    Sin embargo, la riqueza del pensamiento platnico no se agota en la

    simple formulacin del idealismo. Sus obras plantean de manera

    original una variedad enorme de problemas: el uso del dilogo

    razonado como expresin del autentico pensamiento filosfico, la

    importancia de los expertos en el gobierno de las personas, el

    autoritarismo, la existencia de una naturaleza humana fija y estable, la

    importancia de las matemticas en el conocimiento cientfico... En

    definitiva, una abundancia tal que llevo al matemtico y pensador Alfred

    North Whitehead a firmar que toda la Historia de la filosofa no es ms que

    un comentario a pie de pgina a las Obras Completas de Platn.