IADE - Gigliani y Michelena. Los Problemas Estructurales de La Industrialización en La Argentina...

20
55 Los problemas estructurales de la Los problemas estructurales de la industrialización en la Argentina industrialización en la Argentina (1962-2010) (1962-2010) MOI * Miembro de la Sociedad de Economía Crítica (SEC). Economista. Profesor de Dinero, Crédito y Bancos de la UBA. Integrante del EDI (Economistas de Izquierda). ** Miembro de la Sociedad de Economía Crítica (SEC). Lic. en Economía UBA, Magister en Econometría (Universidad Torcuato Di Tella). Docente de Economía I UBA y Métodos Cuantitativos de la Maestría en Relaciones Internacionales de la UBA. Tras el desplome de la convertibilidad, en 2002, la industria argentina ingresó a una nueva etapa signada por el crecimiento productivo y por la recomposición salarial, que dejó atrás un largo período de estancamiento. Más allá de estas significativas concreciones, un examen de esta fase pone en descubierto el desarrollo de importantes contradicciones. Mientras que el incremento de la producción, la ocupación y la producti- vidad industriales reflejan un notorio cambio de tendencia, el déficit de divisas, que surge de la diferencia entre las importaciones y las exporta- ciones MOI, alcanzó cifras sin precedentes. Este desequilibrio externo es consecuencia, en lo fundamental, de viejos problemas del capitalismo argentino, que se originan en importaciones crecientes de insumos y de equipo necesarias para el funcionamiento de su aparato productivo, sin que tal flujo parezca tener límite alguno. El proceso expansivo iniciado en 2002 no fue capaz de resolver esta restricción, que siguió profundizándo- se. De esta forma, el crecimiento manufacturero se desenvolvió en coe- xistencia con un desequilibrio en aumento de su sector externo, poniendo de manifiesto la debilidad del proceso de acumulación en curso, que depende cada vez más de las divisas provistas por el campo. Palabras clave: Industria – Productividad - Desequilibrio externo - Dependencia industrial Guillermo Gigliani * Gabriel Michelena**

description

Gigliani y Michelena. Los problemas estructurales de la industrialización en la Argentina

Transcript of IADE - Gigliani y Michelena. Los Problemas Estructurales de La Industrialización en La Argentina...

  • 55

    Los problemas estructurales de laLos problemas estructurales de laindustrializacin en la Argentina industrializacin en la Argentina (1962-2010)(1962-2010)

    MOI

    * Miembro de la Sociedad de Economa Crtica (SEC). Economista. Profesor de Dinero,Crdito y Bancos de la UBA. Integrante del EDI(Economistas de Izquierda).

    ** Miembro de la Sociedad de Economa Crtica (SEC). Lic. en Economa UBA, Magisteren Econometra (Universidad Torcuato Di Tella). Docente de Economa I UBA yMtodos Cuantitativos de la Maestra en Relaciones Internacionales de la UBA.

    Tras el desplome de la convertibilidad, en 2002, la industria argentinaingres a una nueva etapa signada por el crecimiento productivo y por larecomposicin salarial, que dej atrs un largo perodo de estancamiento.Ms all de estas significativas concreciones, un examen de esta fasepone en descubierto el desarrollo de importantes contradicciones.Mientras que el incremento de la produccin, la ocupacin y la producti-vidad industriales reflejan un notorio cambio de tendencia, el dficit dedivisas, que surge de la diferencia entre las importaciones y las exporta-ciones MOI, alcanz cifras sin precedentes. Este desequilibrio externo esconsecuencia, en lo fundamental, de viejos problemas del capitalismoargentino, que se originan en importaciones crecientes de insumos y deequipo necesarias para el funcionamiento de su aparato productivo, sinque tal flujo parezca tener lmite alguno. El proceso expansivo iniciado en2002 no fue capaz de resolver esta restriccin, que sigui profundizndo-se. De esta forma, el crecimiento manufacturero se desenvolvi en coe-xistencia con un desequilibrio en aumento de su sector externo, poniendode manifiesto la debilidad del proceso de acumulacin en curso, quedepende cada vez ms de las divisas provistas por el campo.Palabras clave: Industria Productividad - Desequilibrio externo -Dependencia industrial

    Gui l l e rmo Gigl ian i *Gabr i e l Miche l ena**

  • 56 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    The structural problems of the industrial sector inArgentina (1962-2010)After the collapse of the convertibility regime, along 2002, the

    Argentine industry entered a new period characterized by productivegrowth and wage increases, which left behind long decades of econo-mic stagnation. Besides these important achievements, the examina-tion of this phase shows the existence of notorious contradictions.While the increase of industrial production, employment and producti-vity reflect a noticeable change in trend, the manufacture trade deficit,which arises from the difference between imports and exports of indus-trial goods (MOI), reached unprecedented amounts. This external imba-lance is consequence, fundamentally, of old problems of Argentinecapitalism, which arise from increased imports of inputs and equip-ment necessary for the operation of its productive apparatus. Theseimports seem to have no limit. The expansive process launched in 2002was not able to solve this restriction, which continued to deepen. Inthis way, the manufacturing growth coexisted with an increased imba-lance in its external sector, highlighting the weakness of the currentaccumulation process, which depends on more and more externalresources which are provided by agriculture sector.Keywords: Industry - Productivity - External unbalance - Structural depen-dency.

    Fecha de recepcin: julio de 2013Fecha de aceptacin: septiembre de 2013

  • 57Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    Introduccin

    Tras el desplome de la convertibilidad, en 2002, la industria argentinaingres a una nueva etapa signada por el crecimiento productivo y porla recomposicin salarial, que dej atrs un largo perodo de estanca-miento. En estos aos, las exportaciones sectoriales (MOI) tambinexperimentaron una expansin1. Ms all de estas significativas concre-ciones, un examen de esta fase pone en descubierto el desarrollo deimportantes contradicciones. Mientras que el incremento de la produc-cin, la ocupacin y la productividad industriales reflejan un notorio cam-bio de tendencia, el dficit de divisas, que surge de la diferencia entrelas importaciones y las exportaciones MOI, alcanz cifras sin preceden-tes. Este desequilibrio externo es consecuencia, en lo fundamental, deviejos problemas del capitalismo argentino, que se originan en importa-ciones crecientes de insumos y de equipo necesarias para el funciona-miento de su aparato productivo, sin que tal flujo parezca tener lmitealguno. El proceso expansivo iniciado en 2002 no fue capaz de resolveresta restriccin, que sigui profundizndose. De esta forma, el creci-miento manufacturero se desenvolvi en coexistencia con un desequili-brio en aumento de su sector externo, poniendo de manifiesto la debili-dad del proceso de acumulacin en curso, que depende cada vez msde las divisas provistas por el campo.Tal como lo indica su ttulo, este trabajo abarca casi cinco dcadas(1962-2010). La vulnerabilidad externa arriba mencionada puede serapreciada analizando el comportamiento tanto de las importacionescomo de las exportaciones propiamente industriales (MOI). Hasta iniciosde la dcada de los sesenta, la Argentina no haba generado este tipode exportaciones (MOI)2. Tal hecho obedeca a que las polticas sustitu-tivas desplegadas con anterioridad, incluyendo la del primer peronismo,expandieron algunas producciones internas, como la metlica, la textil ola mecnica liviana, pero no crearon una capacidad para exportar dichasmanufacturas, ni siquiera a los pases vecinos. Este escenario de unaindustria que financiaba sus importaciones exclusivamente con las divi-sas del campo, es el que Milcades Pea (1986) tuvo frente de s, cuan-do formul su crtica al capitalismo dependiente. Tambin, es el pano-rama enfrentado por Oscar Braun al momento de escribir su clsico an-lisis sobre el stop-and-go argentino (Braun y Joy, 1967).Recin a partir de 1962, se inici un incipiente proceso de exportacio-

    1 Las Manufacturas de Origen Industrial (MOI) son las exportaciones manufactureras novinculadas con el procesamiento de las materias primas del campo.

    2 Las nicas ventas manufactureras eran bienes agropecuarios procesados, como car-nes, cueros y otros.

  • 58 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    nes industriales (MOI), que adquiri mayor dinamismo hacia finales deldecenio. Uno de sus efectos fue que, en las siguientes tres dcadas, ladiferencia negativa entre importaciones y exportaciones MOI se reduje-ra y tendiera a estabilizarse como relacin del PIB. Concretamente, enesas dcadas no se agudiz la vulnerabilidad externa, por lo menos, enlo referente a la balanza comercial.Esta nueva etapa relativamente prolongada, de dficit industrial sintendencia a la suba, se vio bruscamente alterada por la orientacinimportadora del plan de convertibilidad de Cavallo (1991) que, a pocoandar, exacerb el desbalance manufacturero externo y le imprimi unaproclividad al desborde3. A partir de entonces, hubo crisis y reestructu-raciones, pero la vulnerabilidad nunca dej de estar presente.Este trabajo analiza estas dos dimensiones de la acumulacin indus-trial y utiliza, bsicamente, las estadsticas de actividad manufactureradel INDEC. En primer lugar, se estudian las principales variables delsector, tales como el producto, el salario real y la productividad del tra-bajo. En segundo trmino, se encara el balance de divisas de la indus-tria, que constituye un indicador del tipo de desarrollo manufacturero,en particular de su muy dbil integracin estructural. El estudio deambos aspectos del proceso productivo -su ritmo de crecimiento y laevolucin de su balance externo-, reviste especial inters, particular-mente durante 2002-2010, dado que en esos aos los trminos delintercambio alcanzaron un valor rcord en la historia moderna.El estudio que nos ocupa abarca medio siglo y ha sido dividido en lassiguientes tres etapas: 1) 1962-75, 2) 1976-2001 y, 3) 2002-2010. Lainicial (1962-75) comprende el ltimo tramo del modelo de sustitucinde importaciones. La segunda (1976-81), arranca con la apertura exter-

    3 La experiencia Martnez de Hoz ech mano a varios de los instrumentos de la polticade Cavallo, pero como se ver, no logr plasmar su objetivo de reestructurar sustan-cialmente la industria mediante el ingreso de mercancas baratas del exterior.

    Cuadro 1. Balance, exportaciones e importaciones MOI como % del PIBindustrial

    Nota: no se computan los aos 1990 y 2002 por incorporar datos de la crisis. Fuente:elaboracin propia sobre la base de COMTRADE

    Perodo Balance MOI ExportacionesMOIImportaciones

    MOI1962-1975 -14,8 3,2 18,01976-1989 -11,3 8,2 19,51991-2001 -27,9 13,7 41,62003-2010 -32,1 33,5 65,6

  • 59Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    na de Martnez de Hoz y termina con la explosin del corralito banca-rio, de diciembre de 2001. La etapa final (2002-2010) se inicia tras esacrisis, que fue la ms grave de la Argentina contempornea, con lapuesta en marcha del actual modelo neodesarrollista.

    La produccin industrial

    El grfico 1 muestra que la produccin industrial exhibe tendenciasbien definidas. En el perodo sustitutivo (1962-75) y en la ltima dcada(2002-2010) hay una trayectoria de claro crecimiento, con tasas anua-les del producto del 5,4% y del 8,1%, respectivamente. La etapa inter-media (1976-2001), que va de la dictadura de 1976 al derrumbe de laconvertibilidad, registra un completo estancamiento, con una variacinanual promedio del -0,5%, a lo largo de dos dcadas y media4.El primero de los perodos considerados (1962-75) comienza sobre labase de las medidas implementadas por Frondizi y comprende el4 Algunos de los grficos del presente estudio exhiben la tendencia HP en referencia a

    Howard y Prescott. El mtodo de HP consiste en escoger valores suavizados de S (latendencia) para la serie X, tal que resuelva el siguiente problema de optimizacin:

    Un valor ms alto de l implica que la tendencia es ms suave. Siguiendo a Prescott(1982), dada la frecuencia anual de los datos se elige l igual a 100.

    Grfico 1. Volumen Fsico de la Produccin 1962 2010. Indice 1997=100

    Fuente: elaboracin propia sobre la base de INDEC y BCRA

  • 60 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    gobierno de Illia, la dictadura de 1966-73 inaugurada por Ongana y elbreve ciclo de Juan e Isabel Pern. Durante toda esta etapa, el produc-to industrial aument al 5,4% anual. Para tener una idea del crecimien-to verificado, basta sealar que el volumen fsico manufacturero gene-rado en 1975 era el doble que el de 1962. Estos nmeros indican que elmodelo sustitutivo, ms all de sus lmites e inconsistencias, posibilitciclos de expansin econmica prolongados. Por lo dems, en estosaos, el capitalismo argentino consigui una limitada insercin industrialen el exterior y una mayor integracin de su aparato productivo (Katz yAblin, 1976). Entre otros autores, Diamand (1972) teoriz sobre las pre-misas necesarias para profundizar este tipo de desarrollo.El siguiente extenso perodo, que va de 1976 a 2001, est signado porla poltica de apertura comercial y financiera de Martnez de Hoz y porsus secuelas posteriores. Incluye, asimismo, la prolongada crisis vividaen la dcada de los ochenta, signada por una enorme restriccin de divi-sas en toda Amrica latina, que afect la produccin industrial interna enforma muy profunda. La actividad sectorial durante los aos de la dicta-dura (1976-82) verific una cada del 2,0% anual. Este retroceso conti-nu manifestndose (-1,7% anual) durante 1983-1989, bajo el peso delos pagos externos y de la inflacin galopante que culmin con el esta-llido de 1989. La aplicacin del plan de convertibilidad en 1991 posibilitsalir de la hiperinflacin y abri el paso a una fase de recuperacin. El rgimen establecido por Cavallo atraves dos etapas. La primera deellas, entre 1991 y 1997, tuvo un carcter expansivo (4,8% por ao), auncomputando la recesin del tequila en 1995, y estuvo apoyada por lasprivatizaciones y por un fuerte ingreso de capitales de corto plazo. Sinembargo la fuerte apreciacin cambiaria, que se acentu con el correrdel tiempo, abri el paso a la recesin econmica, de modo que entre1998 y 2001 se verific una contraccin del 8% promedio anual en elsector manufacturero5.El tercer perodo que se analiza en este trabajo se inaugur en 2002,ao en que se verific una cada de la actividad sectorial del 9,7%. Larecomposicin de la rentabilidad y la proteccin del mercado interno,generadas por la megadevaluacin ocurrida entre enero y marzo de eseao, dieron impulso a una expansin del producto industrial, que man-tuvo un ritmo muy alto, del 8,1% promedio anual, durante 2002-2010. Almismo tiempo, el crecimiento de las cotizaciones externas, sobre todode la soja, posibilit que la balanza comercial total tuviera un exceden-te en promedio equivalente al 7,3% del PIB. Es la primera vez que en la

    5 El tipo de cambio real multilateral se vio particularmente apreciado por la brusca deva-luacin del real brasileo de enero de 1999.

  • 61Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    Argentina contempornea se experimenta un crecimiento manufacture-ro durante un perodo tan extenso y, al mismo tiempo, un elevadsimosupervit de la balanza comercial total 6.

    El salario real

    El salario real es otra variable clave en el anlisis de la acumulacin.El grfico 2muestra que en la primera y en la ltima etapa se manifestun ritmo ascendente de las remuneraciones, en tanto que en los aosde estancamiento se experiment una extraordinaria cada. De estaforma, los dos perodos de expansin productiva (1962-1975 y 2002-2010) coincidieron con un ascenso del salario, en tanto que la etapa deestancamiento transcurri con una contraccin.Como se indic, en el perodo 1962-75 se verific una tendencia alcis-ta. Es interesante constatar que, durante los aos sesenta, con la pros-cripcin del peronismo y el posterior gobierno militar, el salario industrialmantuvo un ritmo ascendente, culminando en valores muy elevadosbajo el gobierno de Isabel Pern (1974 y 1975). Esta evolucin estexplicada por dos elementos. Por un lado, como seala Basualdo(2006), los intentos oficiales de controlar las remuneraciones siempre

    6 En la seccin 6, se presenta un panorama de la balanza de mercancas total durante1962-2010.

    Grfico 2. Salario real por obrero en la industria y en el conjunto de la eco-noma 1962 2010. Indice 1997=100

    Fuente: elaboracin propia sobre la base de INDEC y BCRA

  • 62 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    chocaron con la resistencia de los gremios, que desplegaron un per-manente accionar en defensa de sus ingresos. Por el otro, durante elrgimen sustitutivo la acumulacin dependi en gran medida del mer-cado interno y esta circunstancia implicaba que un deterioro salarialsostenido estaba ligado con una fase de recesin. El golpe de 1976 introdujo una profunda ruptura. En ese ao, la polti-ca de contencin salarial de Martnez de Hoz hizo que las remunera-ciones industriales cayeran en un tercio, respecto del valor del ao pre-vio. Tras esta drstica reduccin, los ingresos emprendieron una recu-peracin de tipo cclico, que fue interrumpida por el colapso de la tabli-ta cambiaria (1981) y por el estallido de la crisis de la deuda externa(1982). En 1983, el salario retom un curso ascendente, en el contextode las luchas sindicales y de la debilidad del ltimo elenco de la dicta-dura militar. En un corto lapso, recobr los niveles de inicios de lossetenta, aunque se trat de un hecho efmero porque las sucesivasmedidas de ajuste aplicadas por Alfonsn, bajo la presin del FMI, abrie-ron el paso a reducciones marcadas de las remuneraciones. Estas ca-das alcanzaron un punto culminante con la hiperinflacin de 1989-91. Elplan de convertibilidad de 1991 puso freno a la estampida de los pre-cios y, a la vez, posibilit la estabilizacin del salario manufacturero.Durante toda la dcada de los noventa, el ingreso asalariado permane-ci en niveles histricamente deprimidos. La crisis de 2002 y la enorme devaluacin cambiaria inauguraron eltercer y actual perodo. Es importante sealar que, en ese ao, lasremuneraciones industriales tocaron el valor mnimo de la Argentinamoderna, lo cual muestra las condiciones bajo las cuales el capital pudorecomponer el proceso de acumulacin bajo los gobiernos de Duhaldey de Kirchner (Michelena, 2010). El salario de 2002 fue un 21,4% infe-rior al registrado durante la hiperinflacin (1989).Entre 2002 y 2006, el salario sectorial experiment una marcada suba,del 67,5%. A partir de 2007 ese nivel se mantuvo relativamente estable,aunque en 2010 se verific un nuevo ascenso. El promedio 2007-2010coloca al salario industrial en cifras relativamente altas, similares a lasvigentes en el cuatrienio 1983-86, aunque por debajo del mximo hist-rico. El grfico 2 presenta, asimismo, la evolucin del salario promediototal de la economa. Un notable rasgo del perodo 2002-2010 es la bre-cha existente entre la remuneracin industrial y la correspondiente alconjunto de los asalariados, que constituye uno de los rasgos de la dis-tribucin desigual del ingreso en la Argentina.La evolucin del salario industrial, entre 2002 y 2010, contribuy alincremento del consumo interno y de la demanda agregada. Expresadode otro modo, el ciclo manufacturero expansivo se dio a la par del

  • 63Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    aumento del consumo y de las inversiones. Sin embargo, habra quesealar que la oferta agregada puede responder a un incremento de lademanda de tres maneras distintas. Puede hacerlo mediante el aumen-to de la produccin interna o mediante la importacin, si los bienesdemandados no se fabrican localmente en la medida necesaria. La ter-cera manera es a travs del aumento de la produccin interna, perosobre la base de un elevado contenido de insumos importados. En esteltimo caso, el ciclo expansivo estara impulsando la demanda agrega-da de otro pas.

    La productividad del trabajo

    La productividad del trabajo present, como se muestra en el grfico3, una trayectoria de notable ascenso entre 1962 y 2010, sin interrup-ciones o dificultades serias, con la excepcin de la dcada de losochenta, cuando el colapso de la deuda externa golpe duramente laacumulacin del capital. En las secciones anteriores se hizo referenciaa las crisis de diversa gravedad experimentadas por la industria, queocasionaron cadas del producto y de la ocupacin. Estos hechos debenser tomados en cuenta para poder evaluar correctamente el comporta-miento de la productividad del trabajo. Como se ver ms abajo, endeterminadas fases, el aumento experimentado en la relacin produc-cin/obrero se origin en reducciones de la produccin y en contraccio-nes an mayores de la ocupacin. Tal evolucin no puede ser conside-rada como una manifestacin de progreso tcnico o de desarrollo pro-ductivo, sino que constituye el efecto de una crisis recesiva. La necesi-dad de interpretar cuidadosamente la tendencia de la productividad deltrabajo se ve acentuada, asimismo, por la inexistencia de informacinsobre el stock del capital fijo, que impide conocer el comportamiento delcoeficiente producto/capital, que es un indicador usual del cambio tc-nico, sobre todo, en una economa subdesarrollada7 (Foley y Michl,1999).En el primero de los tres perodos (1962-1975), la suba de la produc-tividad del trabajo estuvo explicada por expansiones del producto indus-trial del 5,4% anual y por un aumento del empleo del 2,9%. Este desem-peo dio lugar a un ascenso promedio del 3,8% anual de la relacin pro-duccin/obrero. No obstante, hacia finales de esta etapa, en 1974 y1975, se verific una disminucin de la productividad del trabajo debidoa la dbil suba de la produccin y a un gran aumento de los obrerosocupados.

    7 Durante perodos de inversin intensiva, es posible constatar un ritmo de crecimientoms bajo de la razn producto/capital, o bien, una disminucin. Al mismo tiempo, esprobable que se registren aumentos sustanciales de la productividad del trabajo.

  • 64 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    El siguiente perodo, 1976-2001, muestra una productividad en ascen-so. Sin embargo, esta trayectoria al alza se vincula con una constanteexpulsin de fuerza de trabajo del sector industrial. As, bajo la gestinde Martnez de Hoz y de sus continuadores (1976-1982), se obtuvo unincremento de la productividad, del 5,8% anual. Este resultado provinode una brutal disminucin del empleo, del 7,3% anual y de un descen-so de la produccin de 2%, por perodo. Por su parte, durante la con-vertibilidad, en 1991-1997, se logr un ritmo de expansin rcord del7,5% pero este desempeo se origin en un aumento de la produccindel 4,8% anual y en una concomitante cada del empleo manufacturerodel 2,6%. Es as como las dos experiencias aperturistas ms radicalesde la historia reciente -Martnez de Hoz y Cavallo- son las que genera-ron mayores aumentos en la productividad del trabajo, aunque ello seorigin en notables disminuciones del empleo. A su vez, la recesin de1998-2001 arroj reducciones del producto y de la ocupacin del 8 % ydel 7,5% por ao, respectivamente. En virtud de ello, el clculo de laproductividad del trabajo mostr una cada de slo 0,5% por ao.El ltimo perodo (2002-2010) muestra un panorama muy diferente.Tras la recesin de 2002, se ingres en una etapa signada por el incre-mento de la relacin producto/ocupacin industrial del 2,9% anual, debi-do a una expansin de la produccin del 6,8% y a una notable suba delempleo, del 3,8%. En 2010, la productividad del trabajo se situ un 31%por encima del mximo de los noventa y represent uno de los ele-mentos en que se apoya el actual proceso de restructuracin del capi-tal industrial.

    Grfico 3. Productividad media en la industria 1962 2010. Indice 1997=100

    Fuente: elaboracin propia sobre la base de INDEC y BCRA

  • 65Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    El dficit industrial de divisas

    Tras el anlisis de la produccin, el salario y la productividad laboralen 1962-2010, se examinarn las contradicciones que enfrenta la acu-mulacin manufacturera, vinculadas con el sector externo. Con esteobjetivo, se calcul el dficit industrial de divisas, que es la diferenciaentre las importaciones y las exportaciones MOI. Se consideraron sloestas ltimas, dejndose de lado las manufacturas que estn vincula-das al procesamiento de materias primas agropecuarias (MOA). A finde obtener una medicin constante a lo largo del tiempo, el saldo dedivisas MOI fue relacionado con el producto bruto (PIB) industrial, queest disponible desde 19628. Como se seal en la Introduccin, a partir de comienzos de lossesenta, la hasta entonces muy elevada relacin dficit industrial dedivisas/PIB sectorial registr una progresiva disminucin. Esta rever-sin obedeci a avances en la sustitucin y, en menor medida, al iniciode las exportaciones industriales. Pero, la sustitucin tena un carcterlimitado y las exportaciones MOI crecan a un ritmo acotado. Esto deter-min que la acumulacin industrial continuara siendo crnicamentedeficitaria, por el impulso de las importaciones de insumos y de equiporeproductivo. Cabe sealar que, con sus diferencias, el desequilibrioexterno constituye un rasgo comn de la acumulacin en Amrica lati-na9.

    En los pases dependientes el dficit industrial de divisas vara segnlas circunstancias. Es probable que si un pas encara un proceso dediversificacin y consolidacin de su estructura productiva, afronte, enel corto plazo, mayores requerimientos de importacin y que sus nece-sidades de divisas aumenten ms que proporcionalmente. Muchasnaciones del este asitico atravesaron por fases de industrializacinacelerada, con el consiguiente incremento de sus gastos de equipa-miento en el exterior. En varios pases, estas estrategias condujeron aun posterior estadio de la acumulacin en que aumentaron las propiasexportaciones industriales de manera que, en un plazo ms largo, con-siguieron una disminucin de su dficit de divisas o, incluso, un saldoneto positivo en su balanza industrial, como ocurri en el este asitico.En el otro extremo, los pases que se embarcaron en estrategias deapertura importadora sufrieron el deterioro de su aparato manufacture-ro. Esto es lo que ocurri con Martnez de Hoz y con Cavallo, cuyas

    8 El PIB industrial utilizado corresponde a toda la actividad manufacturera y no slo lade productos MOI, debido a que no existe informacin para desagregarlo.

    9 En Brasil, por ejemplo, la restriccin industrial de divisas muestra un comportamientodispar porque en determinadas etapas registr saldos positivos.

  • 66 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    experiencias son usualmente sealadas como paradigmas de desinte-gracin industrial.El grfico 4, que exhibe los valores anuales del saldo de divisasMOI/PIB en el perodo 1962-2010, permite observar dos etapas clara-mente diferenciadas. La primera se extiende desde 1962 hasta la explo-sin hiperinflacionaria de fines de los ochenta y presenta una relacindficit MOI/PIB relativamente estable, del 13,5% en promedio, aunqueno exenta de fluctuaciones. La segunda etapa, que arranca con el plande convertibilidad de Cavallo y se extiende a nuestros das, est carac-terizada por un desequilibrio externo marcadamente superior10.En los aos que van de 1962 a 1988, el dficit de divisas se mantuvoen un rango sujeto a oscilaciones pero con valores anuales que nosuperaron 20% del PIB sectorial, salvo en tres aos de crisis excepcio-nales (1962, 1975 y 1981). Resulta interesante sealar que la duracinrelativamente breve de la tablita cambiaria de Martnez de Hoz impidique los efectos de la apertura importadora ejercieran una influencia msprofunda sobre el entramado industrial. Slo en 1981, cuando tuvo lugarla explosin de esa estrategia, el dficit super el 20%11. Durante el10 En el grfico aparecen dos aos atpicos, 1990 y 2002, en los cuales la balanza comercial est

    equilibrada, debido a las recesiones provocadas por la hiperinflacin y por la explosin del corra-lito.

    11 A comienzos de 1979, Alfredo Martnez de Hoz instituy un cronograma de devaluacin antici-pada del tipo de cambio (conocido como tablita cambiaria), que a lo largo de ms de dos aosdepreci el peso por debajo de la tasa de inflacin. El resultado fue la revaluacin artificial de lamoneda nacional y el crecimiento explosivo de las importaciones. Las devaluaciones de marzode 1981 pusieron fin a esta experiencia aperturista.

    Grfico 4. Dficit industrial de divisas 1962 2010. Como % del PIBIndustrial

    Fuente: elaboracin propia sobre la base de COMTRADE

  • 67Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    gobierno de Alfonsn, la relacin dficit MOI/PIB retom los niveles msbajos de los sesenta y de inicios de los setenta, debido a la falta crni-ca de divisas de esos aos para importar insumos.El plan de convertibilidad marc el inicio de la segunda etapa, con uncambio drstico respecto de la previa. Bajo las nuevas condiciones dereduccin arancelaria y de apreciacin del tipo de cambio, la metal-mecnica interna, entre otras ramas, se vio severamente afectada y laacumulacin industrial pas a funcionar sobre la base de importacionescrecientes de insumos y de bienes de equipo. El grfico 4 muestra que,en 1992-2001, el promedio del dficit de divisas MOI en relacin con elPIB industrial fue 27,9%, ms del doble del 13,5%, registrado en losaos 1962-75. Entre 1992 y 1998, esta proporcin aument del 25,4%al 36,2%. La trayectoria ascendente se vio alterada por la irrupcin delciclo recesivo que concluy con la experiencia introducida por Cavallo.Durante el modelo neodesarrollista, entre 2002 y 2010, reapareciesa tendencia a sostener la acumulacin a travs de importaciones enascenso, a pesar de la vigencia de un tipo de cambio real elevado. Enestos aos, el dficit de divisas MOI/PIB industrial fue de 32,1%, en pro-medio, apreciablemente por encima del 27,9% registrado en la conver-tibilidad. En 2007 y 2008, ese desbalance verific los mayores valoresde la serie histrica, del 42 por ciento. En la dcada de los noventa, el dficit industrial creciente haba sidoinducido por una fuerte sobrevaluacin de la moneda nacional. En cam-bio, en el perodo kirchnerista, por lo menos en su quinquenio inicial, secont con una paridad muy elevada. Cabe aclarar que este anlisis deldesborde externo industrial no critica el hecho de que la Argentina nosea un exportador neto de MOI ni que esas exportaciones crezcan a unritmo bajo. El eje de la crtica radica en el hecho notable de que el apa-rato industrial no pueda llevar adelante el ciclo productivo si no es conimportaciones cada vez ms elevadas por unidad de producto.En otros trminos, se est frente a una debilidad de la acumulacinque no puede ser atribuida, simplemente, a que la economa estenvuelta en una mayor globalizacin. En la actualidad, la gran mayorade los pases se encuentran insertos, en mayor o menor medida, en elmercado mundial. Pero en el caso argentino, esa insercin se verifica atravs de un dficit externo que se autoalimenta (Gigliani y Michelena,2010). La circunstancia de que este rasgo de la acumulacin no haya podidoser corregido, al menos parcialmente, bajo condiciones de alta protec-cin del mercado interno y de gran disponibilidad de divisas del agro,pone en evidencia las limitaciones histricas de la clase capitalista local,para impulsar el desarrollo de la industria, bajo condiciones ms omenos normales.

  • 68 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    La composicin importadora durante la fase neodesarrollista

    El clculo del dficit de divisas que se presenta en el grfico 4 no per-mite determinar cul es el destino especfico de las importaciones MOI.Si fueran bienes de consumo, la industria local no estara frente a unproblema estructural, dado que esas importaciones podran ser reduci-das sin que el proceso productivo se viera afectado. Para aclarar esta cuestin, el grfico 5 reagrupa las importacionestotales sobre la base de la clasificacin por uso econmico del INDECpara los aos 1962-201012. Las adquisiciones de bienes de capital,insumos intermedios y piezas y accesorios de bienes de capital sondesignadas como insumos y aparecen en la lnea continua. Por suparte, las de bienes de consumo se representan por separado, median-te la lnea rayada. En la dcada de los ochenta, las importaciones deinsumos equivalieron a alrededor del 20% del PIB industrial y estarelacin se duplic en los noventa. En la era kirchnerista, tal proporcinalcanz valores todava ms elevados. En 2008, los insumos verifica-ron un mximo cercano al 70% frente al pico del 45% anotado en 1998. Por su parte, las importaciones de bienes de consumo mantuvieronuna relacin baja respecto del PIB, en los aos ochenta. Ese porcenta-

    Grfico 5. Importaciones por Uso Econmico 1962 2010. Como % del PIBindustrial

    Fuente: elaboracin propia sobre la base de INDEC

    12 Las importaciones MOI constituyen entre el 85% y el 90% de las importaciones tota-les.

  • je subi en los noventa y, tambin, en la primera dcada del siglo XXI.Sin embargo, los montos en cuestin no permiten afirmar que el dese-quilibrio est causado por este tipo de compras del exterior. Otro aspecto muy importante que merece ser destacado es que el des-balance de divisas no est focalizado en determinadas ramas industria-les. Si se desagregan las MOI a tres dgitos de la clasificacin porGrandes Rubros, se comprueba que todas ellas son deficitarias13(Gigliani, 2012).

    La balanza comercial total en 1962-2010

    Para completar esta visin del dficit industrial, resulta til tomar comoperspectiva la cuenta total de mercancas. La balanza MOI, hasta aquexaminada, forma parte de esa balanza total. El resultado positivo onegativo de esta ltima se encuentra muy influido, en la Argentina, porlas exportaciones primarias. En el perodo largo que analizamos, la balanza comercial total atra-ves por diversas fases, de supervits y de faltantes de divisas. De1962 a 1975 las subas de precios de las exportaciones agrcolas posi-bilitaron saldos positivos, con la excepcin de los aos 1962, 1971 y1975. Dentro de la etapa 1976-2001, se atraves por circunstanciascambiantes. En los primeros aos de la dictadura militar hubo exceden-tes impulsados por aumentos en las exportaciones primarias, pero elmanejo del tipo de cambio de Martnez de Hoz (tablita cambiaria)apreci el peso y abarat las importaciones, llevndolas a nivelesimpensables hasta entonces. De esta forma, reapareci el dficitcomercial global, sostenido durante un tiempo con fondos del exterior.Empero, el fracaso de aquella manipulacin cambiaria dio lugar a fugasde capitales y a devaluaciones y, con estas ltimas, al regreso de lossupervits en la cuenta comercial, como se muestra en el grfico 6. Alo largo de la dcada de los ochenta, los excedentes, que fueron logra-dos mediante la compresin de las importaciones y la recesin, se des-tinaron al pago de la deuda externa. Cuando se desencaden la crisishiperinflacionaria, la contraccin del producto determin que se obtu-viera un excedente total rcord de US$ 8.275 millones.Las dos dcadas siguientes (1991-2010) muestran situaciones muyparticulares. Bajo la convertibilidad, el peso sobrevaluado estimul unflujo creciente de importaciones, similar al registrado bajo Martnez deHoz y provoc la vuelta a los dficits en la cuenta de mercancas, que

    69Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    13 La nica excepcin son los metales preciosos, que representan exportaciones de oroy constituyen una actividad puramente extractiva.

  • fueron financiados mediante capitales externos de corto plazo. En estosaos, se puso en marcha el modelo de acumulacin manufacturera conimportaciones crecientes de insumos.La crisis econmica y la devaluacin de 2002 revirtieron ese cuadro yel pas pas a generar ese ao, un supervit global de US$ 16.660millones, equivalente al 16% del PIB. Una vez superada la contraccineconmica, el saldo comercial disminuy pero se mantuvo en nivelessumamente elevados, gracias al enorme boom del precio de la soja. Enel grfico 7 se evidencia el impresionante ascenso de los trminos delintercambio registrado a partir de 2003, tal como lo comprueba la lnearayada que define la tendencia. De acuerdo con la serie del INDEC, en2010, el nivel de nuestros precios relativos se ubicaba un 40% por enci-ma del registrado en 1993. El aporte de las divisas del agro posibilit, en la primera dcada deeste siglo, un contexto externo muy holgado. No obstante, a pesar deque la cuenta de mercancas fue superavitaria, en contraste con losdficits anotados en los noventa, el proceso de acumulacin industrialmantuvo y agudiz su carcter deformado.

    Conclusiones

    El derrumbe de la convertibilidad y la poltica econmica iniciada porEduardo Duhalde y continuada por Nstor Kirchner, abrieron una nuevaetapa en la acumulacin industrial en la Argentina, sustancialmente dis-tinta de la del largo perodo previo (1976-2001). El capitalismo industrial

    70 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

    Grfico 6. Saldo comercial argentino. 1962 2010. Como % del PIB

    Fuente: elaboracin propia sobre la base de INDEC

  • se caracteriz por un crecimiento a tasas chinas, con aumentos delempleo, la produccin y la productividad del trabajo. Asimismo, subie-ron las exportaciones sectoriales (MOI). Sin embargo, la dependencia y la desintegracin del entramado pro-ductivo que histricamente afectaron al capitalismo industrial, no se vie-ron alteradas durante esta etapa. La dependencia se manifest en unaumento del desbalance de divisas por unidad de producto, con unatendencia al desborde, a pesar del enorme aporte en dlares de lasexportaciones primarias. Varias interpretaciones se han lanzado para tratar de explicar estegrave curso. Un argumento asigna importancia decisiva a la desarticu-lacin del aparato industrial experimentada en los noventa. Sin embar-go, esta justificacin no repara en el hecho de que ya transcurri unadcada sin que tal desequilibrio se corrigiera, a pesar de la vigencia deun tipo de cambio sustancialmente ms favorable. Otros razonamientosapuntan al hecho de que el capital industrial se encuentra hoy mstransnacionalizado y ello genera tendencias a una mayor globalizacinen los procesos productivos. Pero el fenmeno analizado en estas pgi-nas no es la mayor globalizacin ni la transnacionalizacin del capita-lismo local, sino su grave propensin estructural al desequilibrio exter-no y a la crisis. Los economistas neoliberales, por su lado, critican insistentemente labaja tasa de inversin del modelo kirchnerista. Al respecto, habra quesealar que esa tasa es baja en relacin con las necesidades de la acu-

    71Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    Grfico 7. Trminos del Intercambio. 1962 2010. ndice 1997=100

    Fuente: elaboracin propia sobre la base de INDEC

  • mulacin pero no lo es en trminos histricos, porque hacia finales deeste perodo se contabilizaron niveles superiores a los mximos de laconvertibilidad. A la luz del tema que estudiamos, el problema central delas inversiones no es el monto gastado ni la calidad de las maquinariassino, concretamente, el tipo de acumulacin que est impulsando laclase capitalista y el gobierno, que reproduce la vulnerabilidad de laindustria. Aun cuando difieren entre s, estas interpretaciones se carac-terizan por referirse a aspectos parciales o coyunturales del capitalismoargentino, sin centrar el anlisis sobre su carcter dependiente y desar-ticulado.

    Bibliografa

    Basualdo, Eduardo (2006), Estudios de historia econmica argentina, BuenosAires, Siglo XXI, 492 pginas.

    Braun, Oscar y Joy, Leonard (1968), A Model of Economic Stagnation. A CaseStudy of the Argentine Economy, The Economic Journal, Vol. 78, 312, pp.868-887.

    Diamand, Marcelo (1973), Doctrinas econmicas, desarrollo e independencia,Buenos Aires, Paids.

    Foley, Duncan y Michl, Thomas (1999), Growth and Distribution, Cambridge,Harvard University Press.

    Gigliani, Guillermo (2012), La crisis de divisas en la industria neodesarrollista,Batalla de Ideas, julio, pp. 116-131.

    Gigliani, Guillermo y Michelena, Gabriel (2010), La industrializacin vista atravs del comercio exterior, III Jornadas de Economa Crtica, UniversidadNacional de Rosario, octubre, 18 pginas.

    Katz, Jorge y Ablin (1976), Tecnologa y exportaciones industriales, DesarrolloEconmico, 65, abril.

    Michelena, Gabriel (2010), La evolucin de la tasa de ganancia en la Argentina(1960-2007): cada y recuperacin, Realidad Econmica 248, pp. 83-106.

    Pea, Milcades (1986), Industrializacin y clases sociales en la Argentina,Buenos Aires, Hyspamrica, 315 pginas.

    72 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013

  • Anexo I: Fuentes

    1) Valor Fsico de la ProduccinEn esta seccin la produccin industrial est reflejada a travs del ndi-ce de Volumen Fsico de la Produccin (IVFP) del INDEC. El IVFPsurge como la suma del valor agregado y los insumos intermedios aprecios constantes. En consecuencia, IVFP brinda una aproximacin dela evolucin del valor agregado a precios constantes, aunque no esexactamente igual. Esto se debe a que en el mediano plazo, la relacinentre uno y otro ndice se ve alterada por cambios en la matriz insumoproducto.

    73Industrializacin en la Argentina (1962-2010)

    Serie Fuentes

    Valor Fsico de laProduccin

    1962 - 1970: BCRA. Sistema de cuentas del producto y del ingre-so (1975). 1970 - 1990: INDEC. Encuesta sobre Produccin, Empleo ySalario. 1990 - 2010: INDEC. Encuesta Industrial Mensual.

    Salario por Obrero en laIndustria

    1962 - 1975: BCRA. Sistema de cuentas del producto y del ingre-so (1975). 1975 - 1990: INDEC. Encuesta sobre Produccin, Empleo ySalario. 1990 - 2010: INDEC. Encuesta Industrial Mensual.

    Salario por Obrero

    1962 - 2010: PIB. INDEC (2010) y Ferreres (2004).1962 - 2010: RTA: Graa (2008) y estimaciones propias.1962 - 2010: Nmero de Trabajadores Asalariados: Graa (2008)y estimaciones propias.

    Obreros Ocupados en laIndustria

    1962 - 1970: BCRA. Sistema de cuentas del producto y del ingre-so (1975). 1970 - 1990: INDEC. Encuesta sobre Produccin, Empleo ySalario. 1990 - 2010: INDEC. Encuesta Industrial Mensual.

    ndice de Precios alConsumidor

    1962 - 2006: INDEC. IPC.2007 - 2010: CENDA. Inflacin 7 provincias.

    ndice de Precios alProductor 1962 - 2010: INDEC. IPP.

    Balanza Comercial Total 1962 - 2010: INDEC (2010) y Ferreres (2004). Trminos delIntercambio 1962 - 2010: INDEC (2010) y Ferreres (2004).

    Balanza de Divisas 1962 - 2010: Estimaciones propias en base a COMTRADE(2010). Importaciones por Usos 1962 - 2010: INDEC (2010).

  • 2) Salario por Obrero en la IndustriaEl ndice de Salario Real por Obrero (ISRO), surge de deflactar al ndi-ce de Salario por Obrero (ISO) por un ndice de precios al consumidor,para obtener as una estimacin del poder de compra real del ingresopercibido por los trabajadores asalariados en la industria. Por su parte,el ndice del Salario por Obrero (ISO) comprende los conceptos de sala-rios por horas trabajadas normales y extras, por feriados no trabajadosy pagados, premios y bonificaciones de convenio y fuera de convenio,vacaciones, licencias por enfermedad y accidentes de trabajo, montospagados correspondientes a meses anteriores, etc. No incluyeAguinaldo ni indemnizaciones por despido. Se consideran las retribu-ciones brutas, es decir sin deducir aportes jubilatorios, por obra social,etc., y no se incluyen las contribuciones patronales; tampoco se consi-deran los pagos por asignaciones familiares.

    3) Productividad del trabajoEl ndice de la Productividad del Trabajo (IPT) surge como el cocienteentre el ndice de Volumen Fsico de la Produccin (IVFP) y el ndice deObreros Ocupados en la Industria (IOO). Este ltimo, incluye al perso-nal con categora no superior a la de supervisor afectado al proceso pro-ductivo del local. Se considera solamente al personal mensualizado ojornalizado, en relacin de dependencia.

    74 realidad econmica 278 16 de agosto/30 de septiembre de 2013