Acondicionamiento y uso del hilo de Ariadne ( HILO GUIA)

por Cyril Marchal y Frank Vasseur. Traducción: Francisco José Martínez ( Club – Escuela de Buceo Yubarta )

En inmersión en cuevas, avanzamos siempre, (incluso desde el punto de partida ) desenrollando,( siguiendo ) un hilo guía, o lanzando una línea. Incluso cuando el agua esta clara, la galería es ancha, no laberíntica y el sifón no presenta riesgo evidente. En una galería subterránea, con agua muy clara, esta puede enturbiarse en cualquier momento y en pocos segundos. La vuelta se hace muy arriesgada, incluso casi-imposible Sin el hilo-guía. Este " hilo de Ariadne " constituye toda una adaptación técnica en inmersiones bajo techo, tan identificadas hoy. Pero si este hilo es un guía Ineludible (traducido por " línea de Vida " - safe-line - en inglés), es susceptible de transformarse en Trampa Mortal debido al mal uso o uso inadecuado del mismo (rotura, enmarañamiento, Mala orientación). Foto F.V.

Indicaciones históricas El medio subacuatico, y más particularmente las zonas sin salida a superficie, están llenas de trampas. Las técnicas de buceo en este entorno son difíciles, incluso imposibles de aprender sin un conocimiento previo y un mínimo de experiencia. Sin embargo, los pioneros de la Inmersión en cuevas, tanto en Francia como en Europa, cada uno en su región y sin tener una comunicación de técnicas a este respecto, no se sumergían sin conservar un lazo o nexo de unión con el exterior. La seguridad exterior Se hacían "asegurar" a superficie, a manera del primero de Encordada entre los alpinistas. Un equipo De sostén, permanecía a la entrada del sifón, Aseguraba cabo e iba soltando según la necesidad, en la otra parte el cabo iba amarrado al submarinista.

Cueva de Santo Saint-Géry (82) 2 2-09 09-19 1955 Foto archivos montigny Un código, (Tirones secos sobre la cuerda) Indicaba la señal de vuelta (hacía falta entonces recoger cabo) o qué el sifón fue atravesado(salvado). En este caso, otros Submarinistas podían entonces iniciar su descenso " de cabeza " para proseguir la exploración más allá del sifón. Un código puesto a punto por el equipo De André Bonneau (Perpiñán) en 1955: · un tirón: ¡ stop! · dos tirones: ¡ suba! · tres tirones: ¡ descienda!

Abismo de Bevy (21) tipos de Robert Rorato 01 01-1964 1964

. Este sistema " de seguridad " funcionó por lo menos una vez, en caso de emergencia, En un sifón corto y rectilíneo : 1968 - Event de Peyrejal

El submarinista es víctima de un desfallecimiento respiratorio (principio ¿ De hidrocución?) con desvanecimiento detrás de un sifón de 38m (-9). Es recuperado gracias a la cuerda de seguridad por el equipo que lo asegura a la entrada del Sifón y reanimado después de 15 minutos de boca a boca, en respuesta a una asfixia morada Pero lo mas habitual, es que debido a los atrancamientos de cuerda que impiden al submarinista proseguir una exploración prometedora, o lo que es más grave, volver la salida, se produzca a menudo el abandono progresivo de esta práctica demasiado Arriesgada. En Agosto de 1965: Bernard Sapin y Juan - Luis Vernette (G.E.P.S.-13) Locos de Santa Anned' Evenos : " Juan-Luis, asegurado por Bernard, se sumerge; el arrastre de la cuerda es penoso porque se entierra en las dunas De arcilla. Es por los pelos que Juan-Luis emerge agarrándose a las asperezas del techo. Bernard pasa a su vuelta. Juntos, sacan la cuerda 30 metros más lejos hasta una playa de guijarro.

Demasiado peligroso para progresar más lejos. Sobre el plano de la inmersión. La decisión que toman es la de llevar de ahora en adelante un hilo De Ariadne más fino sobre una bobina desenrollada por él Submarinista de cabeza. " Nace el Carrete o Hilo Guia. " En la mañana del 30/09/1967, A.Figuier efectúa un primer reconocimiento B.Léger luego J.Dubois (S.C.Seine), en dos Inmersiones ganan 31m sobre la galería sumergida. Más allá, la Cuerda de seguridad no se desliza más. El 11/10/1967, estamos de nuevo en el Grand Fontaine. Ligero se zambulle, portando y utilizando el carrete o hilo guia. Una primera evolución consistía en conservar un enlace con el exterior (vía uno Sistema de señales luminosas) con el fin de enviar la orden de remolcar al submarinista para la vuelta O conservando el principio de la cuerda atada al submarinista

Submarinista del G.E.P.S. Encordé " a Fuente de Santo Saint-Anne. (83) en 1965.

O librándose de la cuerda en provecho de un cable eléctrico llevado sobre un "trineo" y manejado por el submarinista en Progresión.

Cueva de thaies (26) 1970-1975.

EL HILO DE ARIADNE : un primer paso hacia la autonomía Desde el alba de los años 70, esta técnica desaparece en provecho del hilo de Ariadne. Un " hilo perdido ", desenrollado y equipado, en el sifón, por el submarinista que gana así autonomía. El hilo de Ariadne es un elemento ineludible en inmersión subterránea. Progresivamente conquistó la inmersión sobre restos ( Pecios ), para ser adoptado en todas las variantes de inmersión " bajo techo ". Ineludible, pero de doble filo. Sería implicado en efecto en más de 40 % de los accidentes en inmersión subterránea (enmarañamiento, extravío, mala orientación, guiado en secciones trampas o galerías anexos, rotura, etc, etc).

Resurgencia de Hace Viva (07) 10 10-1966

A la izquierda, el desenrollador con 200m de cable eléctrico y la caja de recepción de las señales en superficie .

Buceadores del G.R.P.S) conectados otra vez a la superficie por una emisora de radio (en la mano) derecha. Foto.: Enrique Bougnol

Submarinista enmarañado en el hilo que está rebobinando

Preámbulos

Si el uso consiste en equipar de manera fija una línea o hilo guía en el sifón, nada garantiza menos la fiabilidad de estas líneas, que su durabilidad y permanencia en el sitio en el que se ha montado.

• Esto no es porque un sifón es equipado con hilo guía o de Ariadne que correctamente ha sido montado respecto al espacio y a las condiciones de la cueva, pero no siempre a la sección o grosor del hilo que correspondería para esa exploración.

• O por que el equipo no siempre está en optimas condiciones ya que las crecidas,

o los submarinistas pueden haber roto amarres o desplazado los puntos de anclaje

• O por que el uso y la antigüedad de la línea así como la falta de mantenimiento de

la misma pueden haber hecho que esta se halla debilitado o roto. En Todas las exploraciones subterráneas pero sobre todo bajo el agua, es imperativo disponer de un carrete o hilo guía Pero un gadget suplementario enganchado a la panoplia que corresponda en cada caso no debería ser suficiente. Todavía hay que poder instalar su propio hilo para conseguir realizar su Inmersión de la manera mas segura posible, incluso hacer malabarismos con este para encontrar la salida salvadora en una mala situación. El equipo de un sifón, la elección de un modelo de carrete y su manejo no son innatos y merecen reflexión, aprendizaje y experiencia

1 Elección del hilo 1.1 A propósito del hilo No existe hilo ideal y compatible con todos los tipos de sifones, todas las finalidades de uso, practicas de descenso, o tipo de carretes.

BUCEADORES BRITANICOS AÑOS 70

El uso de algunos principios generales, ciertos criterios, se deben: La naturaleza: el polyamide (nailón) es el más demandado o usado.. En ciertos casos y de manera especifica (equipo de punta "definitivo"), también utilizamos el kevlar y el cablete (hilo metálico enfundado). Cada hilo tiene sus ventajas y sus inconvenientes, sus incondicionales y sus detractores;

" … Los hilos de Ariadne deben estar totalmente seguros y fáciles de seguir cuando la visibilidad no es la más optima . Utilizamos un hilo de Ariadne más fuerte que los hilos utilizados en Europa o en los Estados Unidos, y utilizamos puntos más frecuentes de anclaje. Esto reduce el riesgo de hilo roto por una corriente fuerte o el enmarañamiento del submarinista, y garantiza que si se sigue el hilo, el submarinista será conducido a través de la parte menos peligrosa del paso . " Martin Wright (Cave-Diving-Group) a propósito del equipo del sifones Más allá de la Mancha.

SIFON EQUIPADO CON CABLE

En conclusión, Un hilo de Ariadne compatible con la mayoría de usos y usuarios sería el de polyamide, o nailon dotado de una alta resistencia tanto a la rotura como a la abrasión, de color claro, trenzado a grano fino y de 3 Mm. de diámetro. Atención, estudiar bien las tarifas antes de la compra, porque varían del simple al cuádruple según el modo de distribución, las grandes superficies dedicadas al bricolaje llegan a lo mas alto en el abanico de precios. Favorecer compras agrupadas cerca de fabricantes de cordajes. Para la utilización en mar, conceder un cuidado particular a la resistencia tanto en el UV como en el agua salada. Nuestros colegas navarros (Miguel Castro - Grupo Triton) realizaron un estudio detenido sobre este aspecto.

En la elección de un hilo, aunque la calidad del equipo debe ser determinante, por lo menos evitar como mínimo, los frotamientos del hilo sobre la roca. El polyamide o nailon ofrece un rendimiento aceptable, aunque otros materiales son más resistentes en este campo ( Poliéster, kevlar); La resistencia al medio ambiente (biológico y químico) es primordial para los equipos de duración larga. Esta variable deja fuera irremediablemente las fibras naturales (algodón, cáñamo etc.); · La flotabilidad debe ser negativa (densidad> 1);

El color será claro (blanco o amarillo) para permanecer visible y destacar sobre un ambiente oscuro o de escasa visibilidad. Atención a la arcilla que, con el tiempo, tiñe el hilo y favorece la patina o zozobra de quién puede avanzar, en ciertas cavidades, sobre el mismo y hacerlo tan poco visible. La visibilidad de la línea, si puede estar considerada como accesorio en el momento de una progresión por el hilo, mediante el contacto con este que se vuelve primordial para avanzar. · La cantidad de nudos es reducida al mínimo estricto Cada nudo disminuye considerablemente la resistencia de un hilo a la tracción. Foto F.V.

La versión original, en castellano .Http: // www.grupotriton.org. Una traducción al Frances está disponible en: Http: // www.plongeesout.com / artículos publicación / técnica / hilo guía / hilo guide.htm 1.1 Del uso de un material más resistente que el hilo de nailon Abstengámonos, para un sifón dado, de utilizar un hilo regularmente roto por un informe de fuerza, una escalada en la "mano de hierro", una huida adelante. La puesta en ejecución de material más resistente no debe ser sistemática, pero si tenida en cuenta. Aunque lo utilizábamos regularmente, no podemos hacernos prosélitos del cable, esto sería sólo por razones Financieras. Para haber "sometido a un test" materiales diversos (Cuerda, cable, cablette, hilo de naturalezas y Diámetros diversos), estamos seguros de que es más la calidad del equipo que la resistencia del material utilizado lo que asegura su longevidad. Un cable, una cuerda de 11mm de diámetro, mal puestos, incluso simplemente desenrollados, durarán más tiempo que un hilo de Ariadne. En la practica, un sifón bien equipado con cable tiene más posibilidades de perdurar que un sifón mal equipado (en hilo, cable, cuerda etc.). Privilegiamos el cable sobre cavidades al régimen "tumultuoso", en las cuales nos zambullimos regularmente (y todavía esperamos zambullirnos allí mucho tiempo), y las cuales también sirven de zona habitual de quedadas de espeleobuceadores". Para otras exploraciones, no es necesario un hilo tan exigente (más barato, menos voluminoso sobre el carrete, menos difícil de limpiar). Un cable mal equipado acabará, tarde o temprano, por romperse y hacer el sifón más peligroso que si se trataba de un hilo de Ariadne. Con más razón si el instrumento cortante llevado por el submarinista no puede cortar este hilo guía (cuchillos, tijeras, pinzas pequeñas y otras coqueterías " tek "). 2 Preparación y marcaje 2.1. Preparación del hilo El hilo nailon, como las cuerdas de espeleología, se retracta desde la primera utilización. Es común contar con una pérdida del 10 % de la longitud anunciada. Así, una bobina de 100m abastecerá, más o menos, 90m de hilo efectivo. Contrastada esta información, es preferible organizarse de antemano para evitar que un hilo se alargue exageradamente en el sifón , que se debilite y que la medición por metros se falsee.

Sifón equipado en cuerda de espeleología

El truco consiste en remojar las bobinas nuevas durante las 24 horas (atención en ciertos tornos y el eje central, de cartón, podría desenrollarse y formar un magnífico montón de nudos), luego dejarlos secar antes de proceder a la medición por metros. Podemos también anticiparnos en el momento de la medición por metros sobreestimando del 10 % (las etiquetas serán situadas todas teniendo en cuenta cada metro como 1,10). En este caso, el hilo "Trabajará" en el sifón, con los inconvenientes que esto representa. Cada uno elegirá la opción que mas se adapte a sus necesidades. 2.2. La Marcación 2.2.1 Los principios

Lo ideal es preparar el hilo mediante el uso de tramos de marcación cada 10 metros con etiquetas. Podemos encontrar en algunos sifones otras técnicas de marcación:

• Los nudos sobre el hilo (prever el decodificador es decir cada cuantos metros marco con un nudo)

• Las marcas (señales) al marcador, flecha, cinta aislante o cualquier elemento que utilice para este fin (guardar su decodificador)

• Las etiquetas rígidas, más resistentes, más fáciles para la lectura, pero poco prácticas en el carrete, incluso difíciles de colocar y quitar (si el carrete posee un guía-hilo de sección reducida);

NUDO

SALIDA ETIQUETA BISELADA SENTIDO DE AVANCE Croquis: Cyril Marchal El adhesivo plástico ( Cinta Aislante ) utilizado por los electricistas es más duradero que el adhesivo a trama textil, fácilmente biodegradable y que se desagrega con el tiempo

Sobre estas etiquetas, indicamos la distancia y si es posible el sentido(dirección) de salida señalando una esquina. Esta indicación táctil será apreciada en el momento de volver si el agua se ha enturbiado formando un puré de arcilla, o un revuelto de fango que impidan la visibilidad.

Fotos.: F.V. Replegar una primera vez la cinta adhesiva,

Luego una segunda vez para obtener tres espesores. Es importante marcar bien las partes encoladas lado hilo con la uña. Lo ideal es que las fibras del hilo deben incrustarse en la cinta adhesiva.

• Nudos juiciosamente situados (lado salida con relación a la etiqueta) pueden completar la marcación, así como una indicación cada 5m (etiqueta más pequeña o nudo con o sin rizo para diferenciarlo del practicado bajo el de las etiquetas precedentes).

• La colocación de las etiquetas requiere una atención particular. • Demasiadas etiquetas, después de una estancia en inmersión tienden a descolocarse, el hilo

empieza a ceder y a sufrir las inclemencias de las corrientes y las crecidas internas. • Observamos a veces concentraciones gregarias (¡ es un hecho común en el espeleobuceo!), de

varias etiquetas, movidas por la corriente, aglomeradas en el mismo lugar. • Un "puente" simple alrededor del hilo no asegura una marcación duradera. • Sostendrá mejor la inmersión si se reforzó la etiqueta..

Etiqueta inicial situada a pocos metros del origen del hilo

. El amarre inicial necesita algunos decímetros de hilo. A veces, el amarre ideal estará situado en los alrededores inmediatos del pilón. En consecuencia, podemos reservar algunos metros de hilo para este uso, colocando la primera etiqueta (sobre la que figura el origen de la marcación) a cinco metros de la extremidad de la línea

Los adeptos de la topografía sobre el hilo añaden una marca(señal) intermedia cada 5m Los más minuciosos fijan una etiqueta (a veces de superficie inferior), otros se contentan con un rastro al fieltro, un nudo o un rizo simple. " Técnica más extremista ", La técnica llevada al extremo en la medición por metros consiste en etiquetar, cada dos metros entre las etiquetas gruesas (las colocadas cada diez metros). Un adhesivo es enrollado alrededor del hilo, un anillo trazado al fieltro indica la distancia desde la última etiqueta gruesa. · un anillo: dos metros; · dos anillos: cuatro metros; · tres anillos: seis metros. Esta técnica es detallada en el artículo siguiente: Http: // www.plongeesout.com / articles%20publi cation/generaux/topo%20brandt/topo%20br el año dt.htm Para el fieltro, no usar el "rotulador indeleble (Permanente Marker)", porque se disuelve en el agua y no dura ni una inmersión El ideal sería los gruesos marcadores estilo " Baignol y Farjon " es antiguo y difícil de encontrar, aunque actualmente ya hay en el mercado rotuladores especiales para tela, ( consultar su durabilidad bajo el agua ). La dimensión de las etiquetas debe ser reflexionada. Demasiado gruesas, se replegan y se atrancan en el guía-hilo del carrete (solo en ciertos modelos), ofrecen una resistencia en el momento del desenrollado del mismo. Demasiado pequeñas, son ilegibles. Cada uno optará por el modelo que le convenga. Sin embargo, no hay que olvidar a los colegas que pasarán luego sobre este hilo, y tratar de procurar que cada una este en su sitio. Lo ideal sería optar por etiquetas bastante legibles para interpretarlas progresando, sin tener que detenerse para descifrarlas. Generalmente, una etiqueta de 5 cm x 3,5 cm es legible en progresión con la mano. En las longitudes de los sifones recorridas con scooter, encontramos a veces etiquetas gruesas y rígidas cada cien metros.

Fotos F.V Plaquetas rígidas complementarias de las etiquetas. 2.2.2 La práctica La preparación del hilo es una operación fastidiosa. Para optimizarlo asegurando su eficacia, los submarinistas subterráneos adoptaron una técnica simple y eficaz. Basta un decámetro y una decena de estaquillas. 3 El enrollamiento sobre el carrete 3.1 Elecciones del carrete Sirve para el montaje de la línea en la galería pero también para el desequipamiénto, para la limpieza de viejos hilos vetustos, así como para las maniobras de reparación y de búsqueda de hilo perdido en caso de problema sobre un hilo ya instalado.

PREPARACION DEL HILO

El decámetro es desenrollado sobre diez metros, las estacas (piquetes) plantadas a cada extremidad, alineadas aproximadamente a 10cm unos de otros. El hilo, atado al carrete, arranca al nivel de la marca (señal) "5 metros" del decámetro, luego serpentea de una estaca(piquete) a otra. Ya solo falta asegurar el inicio del hilo guía al centro del carrete para poner las etiquetas y proceder a la marcación. Los carretes se utilizan para desenrollar, pero también para rebobinar el hilo. Para eso, es aconsejable que correspondan al "pliego de condiciones" siguiente:

• Compacto y relativamente poco voluminoso; • Apto para soltar y rebobinar rápidamente y sin dificultad; • Impide el hilo salir de manera involuntaria. • No se bloquea por relleno o atrancamiento de gravas en el interior • Las etiquetas de marcación deben pasar sin bloquearse ( Al soltar y al rebobinar) • Contiene 150 - 300 m de hilo de aproximadamente 3 mm de diámetro; • Provisto de una correa para asegurarlo a la muñeca (y poder soltarlo sin perderlo); • Y de un sistema de bloqueo de la manivela (para prevenir todo imprevisto relacionado

con la salida del hilo de manera involuntaria. Teniendo en cuenta las tareas a efectuar, son varios los modelos a usar en cada caso. Podemos distinguir tres tipos de carrete:

· El carrete auxiliar Con algunos agujeros en los laterales para posibilitar el enganche de accesorios ( Mosquetones , etc ) . En toda circunstancia, el submarinista debe llevar un mínimo de hilo (de 50 a 100 m), para permitirle una búsqueda racional y metódica en caso de pérdida o en caso de rotura del hilo principal.

· El carrete de progresión sirve para equipar el sifón y para desmontar la linea cuando es necesario. Contiene aproximadamente 150m ( más, o menos, con arreglo a las previsiones y gustos del usuario) de hilo con marcas cada 10 metros mediante indicaciones táctiles que indican la salida. Forma parte del material personal, siempre enganchado(colgado) al submarinista. Con una veintena agujeros en los laterales para posibilitar el enganche ( anillos de cámara de aire.)

Estos dos modelos sirven también para ir "a ver" o realizar pequeñas exploraciones, subir a una campana, a enlazar (ajustar) ambos extremos de un hilo roto. · El carrete de trabajo. De gran capacidad (cerca de 500 metros). Sirve para reequipar o para limpiar el sifón y debe poder soportar o facilitar el acople de varios hilos de diámetros variados, nudos, etiquetas flexibles o rígidas, elásticos(gomas) etc.

Hay dos escuelas a la hora de usar estas técnicas: · La que preconiza un pequeño carrete de socorro personal, en complemento del carrete de progresión; · La que considera que los pequeños carretes personales no son operacionales en situación de estrés y el que conservan un margen de hilo disponible para el carrete de Progresión, después de haberlo desenrollado o soltado parcialmente. Cada uno elegirá la que más le convenga con arreglo a su práctica y con arreglo a su sensibilidad. Conocemos principalmente dos modelos, declinados cada uno a gusto de los practicantes habituales en función del uso. 3.1.1 El torno

Había sin embargo que asegurarse de ser capaz de efectuar la manipulación (un mínimo de visibilidad, dedos no demasiado entumecidos). Uno de mejor acabado es sin ningún genero de duda "Bilbasub", un modelo artesanal construido por Angel Ortego (alias " El Meticuloso"). Compacto y resistente, es concebido para la exploración y el hilo de 4mm. Posee una correa, a manera del piolet de alpinismo. Según los usuarios, la diferencia con los modelos carenados reside en la capacidad de percibir las indicaciones táctiles sobre el hilo, en el momento de rebobinarlo en el agua, pasando la mano sobre el hilo. Este modelo permite enrollar también sin problema el caucho y otros amarres. Http: // www.espeleoastur.as / imagene galeria / 2galeria%20fotografica.ht m * Si se aprecia el carrete con este modelo, el rebobinado es a veces más complejo. Mal enrrollado, este modelo puede liberar espiras que, resbalando (deslizando), pueden trabar el brazo del submarinista. Necesita un aprendizaje y algo mas de manejo y experiencia que para el modelo carenado.

Es el modelo más simple y rudimentario, constituido por una bobina enrollada sobre un eje. En Francia, según las fuentes, el origen de este modelo sería metropolitano (Paris) o procedente de los poceros. (Marsella) En medio de los años 70, Daniel Andrés y Bertrand Léger habían inventado un sistema de chaveta retractable en manga( Extraíble ) sobre el lado superior del carrete que les permitía cambiar de bobina, sobre el mismo eje, en el transcurso de una exploración. Esta técnica tiene la ventaja de evitar multiplicar el número de carretes.

3.1.2 El modelo carenado

Caso n.° 1 ocurrido en 1996 atrancamiento de un carrete carenado: Me encuentro aquí por fin a pie de obra dispuesto a trabajar delante de la S 5. Al otro lado del pilón, sé que la inmersión cambiará de estilo. Acaban los hermosos sifones tubulares, aquí las fracturas se suceden y entrelazan unas con otras y hay que entregarse a una verdadera gymkana subacuatica. Continuo mas tarde hasta la base de un pozo estrecho que desciende a-8, el laminador sinuoso conocido sobre 60m. Después de algunos regocijos llega el fin a la derecha de un relleno arcilloso: Un laminador al techo liso, que parece levantarse sensiblemente poco después. El primer plomo eyectable asegurará el posicionamiento del hilo en el lugar más propicio a mi paso Pero después de los primeros metros, esto rasca duramente, quedo arrinconado y las burbujas espiradas deshollinan el conducto. Mientras el agua se enturbia por las partículas que se desprenden del techo, batallo un momento sin encontrar salida adelante. Para adornar todo, mientras que rebobino el hilo en marcha trasera, un rizo se desliza socarronamente bajo la carcasa y bloquea el carrete. Doy marcha atrás hasta el punto anterior lleno de rabia ¡Tengo bastante aire para recorrer 300m de sifón, Y YO AQUÍ PARADO, Mientras trato de reparar el carrete (a golpes de podadera) la corriente se lleva el agua fangosa. Un nuevo ensayo y los cinco metros decisivos son atravesados. " Frank”

Es, en nuestros días, el modelo más frecuentemente adoptado por los submarinistas practicantes del espeleobuceo. Es más compacto y necesita menos experiencia que el torno. No obstante, su concepción lo hace más vulnerable a los bloqueos, a priori con hilo flexible y fino, que tenderá a deslizarse entre la carcasa y la placa lateral. Aquí también, digitación, técnica y experiencia riman con comodidad y seguridad. Foto : Alain Vuagniaux 1972.

3.1.3 El carrete agrícola

El equipo navarro de los Tritones todavía mejoró el aparato:

3.2.1 Montaje inicial del hilo sobre el carrete Esta operación es de vital importancia y especial interés. Varios incidentes, y hasta accidentes, tuvieron el origen en la separación o pérdida del hilo del carrete, a espaldas del submarinista, sin que este se percatara de ello, una vez desenrollado todo el hilo del carrete dentro del sifón. 1976 - Agen Allwedd (Llangattock - el Reino Unido): un submarinista en el curso de una exploración desenrolla todo el hilo que contiene su carrete. No habiendo amarrado la extremidad del hilo al mismo, continúa progresando sin hilo-guía. Afortunadamente, la visibilidad que había era buena y le permitiría encontrar la extremidad del hilo. · Clásicamente, el hilo es directamente amarrado alrededor del eje central · Una evolución consiste en intercalar un extremo del hilo, amarrado al eje o fijado sobre el lateral de la carcasa y acabado por un rizo a la otra extremidad. El hilo es anudado en el rizo. · Una sutileza consiste en cebar el hilo de Ariadne por un rizo ancho. Acabarlo por un nudo prominente (para poder coger fácilmente la extremidad), luego realizar una cabeza de alondra en el rizo retorcido y atarlo al carrete.

Es el modelo mas barato. Tuvo su momento de gloria en los años 80, sobre todo en la región de Grenoble. En nuestros días, todavía lo usamos algunos nostálgicos. Al utilizarlo, el hilo se alojaba demasiado a menudo entre la carcasa y la empuñadura. La instalación de un guía-hilo de manera eficaz requiere un poco de experiencia y una atención particular con hilo de pequeño diámetro.

Carrete agrícola sacado de fábrica . Foto.: Josi Olave.

Carrete agrícola reformado modo

"carenado".

Foto.: Josi Olave

Carrete agrícola reformado modo "torno".

Foto.: Josi Olave.

Rizo inicial con nudo. Realización de la " cabeza de alondra".

Fotos.: F.V Estado final. Detalle del nudo. . Cogiendo o preparando siempre del mismo modo el carrete (por encima para realizar el nudo, por debajo para deshacerlo), no tendremos problemas y saldremos airosos de la operación. Cada uno ha de ver que es lo que mejor se adapta a sus posibilidades o sistemas de trabajo. Los más mañosos y habilidosos se acomodarán con la cabeza de alondra, los radicales y los cerebrales (a falta de otras habilidades) usaran un sistema de corte. 3.2.2. Enrollamiento Una vez el hilo es convenientemente medido por metros y amarrado, solo queda enrollarlo sobre el carrete. Este apartado merece también una atención especial. Nos ocuparemos de repartir regularmente el hilo a lo largo del eje, sin apretar demasiado ni dejarlo demasiado flojo. Una vez en inmersión el hilo se humedece y se hincha por lo que no será conveniente saturar demasiado el carrete ni dar demasiada tensión al hilo. Enrollar demasiado hilo en un carrete no es demasiado juicioso Las vueltas del hilo liberan y traban el mecanismo (con un carrete carenado) o el submarinista (con un torno).

Esta astucia permite liberar el hilo, una vez íntegramente desenrollado, del carrete sin tener que usar las tijeras de corte o el cuter..

A condición de no perderse en la manipulación y de no efectuar una segunda cabeza de alondra.

Foto.: Eric Julián.

Foto: F.V.

3.2.3 Ajuste final sobre el carrete. La extremidad inicial del hilo debe obligatoriamente ser fijada, a riesgo de reencontrarse enmarañado en la longitud de hilo equivalente al que se habrá enrollado en el carrete Hace falta sin embargo que el hilo permanezca rápidamente accesible, que la extremidad pueda ser liberada sin manipulaciones especiales Un nudo en agujero del lateral de la carcasa, pasado luego alrededor del cuerpo del carrete, o un nudo de cabrestante alrededor de la manivela, serán suficientes. 3.2.4 Bloqueo de la manecilla del carrete La extremidad del hilo amarrado, no deja que el hilo salga del carrete a su libre albedrío. Habitualmente, según sea el modelo de carrete utilizado, el agujero sobre el lateral de la carcasa al que se engancha el carrete estará: De un costado: sobre el carrete, del otro que aprieta(encierra) la manivela, ( funcional ).

Mas vale no apretar las vueltas, con el fin de que en caso de rebobinar el hilo ocupe el mismo volumen en el carrete con para que conserva su carácter funcional. Después del primer uso, es aconsejable desenrollar toda la longitud del carrete in situ fuera del agua, con el objetivo de enrollarlo convenientemente Evitaremos experiencias desafortunadas por problemas debidos a un carrete saturado, con el hilo hinchado por la humedad y lleno de vueltas, cuando todavía queda recoger varias decenas de metros.

Manejar siempre el hilo con la tensión adecuada, tanto en el momento de su preparación antes de la inmersión como durante su uso bajo el agua. El hilo, es mas dócil cuando se maneja de esta manera y esto facilita su uso El submarinista minimiza también los riesgos de enmarañamiento, porque el hilo resistirá al enrollarlo, en lugar de llenarse de vueltas..

Juan-Marco Lebel en Fontaine cubierto (Haute-Marne) el 11/05/1996 en punta en él S 7: " Estoy escaso de gomas de caucho, para los amarres utilizo pues a la técnica (proscrita) de las vueltas muertas sobre asperezas o salientes. Suelto el último plomo eyectable en la arcilla; la visibilidad es totalmente nula a mis espaldas y como estaba previsto debido a la mala sujeción del hilo sobre la pared el hilo esta muy flojo y sin tensión (un amarre vuelta-muerto se ha soltado), le verificaré más tarde). La salida se hace pues a ciegas, muy delicadamente cogiendo el hilo a dos manos y el carrete se escapó en la maniobra. " 4 Los amarres 4.1 Acondicionamiento A estas alturas ya habremos comprendido lo inadecuado y arriesgado (a menos que no poder hacerlo de otro modo) de realizar los amarres amarrando el hilo directamente sobre la roca:

• · El frotamiento directo gasta prematuramente el hilo • · Si el amarre salta, una longitud suplementaria de hilo flojo es liberada en el sifón • · La medición por metros se falsea.

La practica habitual aconseja utilizar un intermediario entre la roca y el hilo, que absorba, parcialmente, las solicitudes o demandas diversas a las cuales el hilo está sometido (submarinista enganchado que tira, vibraciones durante las crecidas, etc,etc ) .. El mediador más adaptado, disponible y barato es sin ningún género de duda la goma de caucho o recorte de cámara de neumático. Realizamos una " cabeza de alondra " (aplastando el anillo, lo ponemos alrededor del hilo antes de pasar el rizo de una extremidad del caucho (goma) en el de la otra extremidad, luego ceñimos, como una corbata alrededor del cuello). El rizo único entonces es pasado alrededor de salientes de las paredes, o de los bloques rocosos que cubren el suelo.

Foto: Stephane Havard. Goma que se soltó dejando el amarre anulado o suprimido. El uso de estos anillos extensibles impone un acondicionamiento previo. Aquí todavía, el panel es rico y diverso: - Ensartar los anillos sobre sus brazos y sus antebrazos (a riesgo de comprimirse los miembros con los más cortos y de perder los más anchos); - Llevarlos en un mosquetón (a abertura ancha). Se requieren ambas manos cada vez que se necesita una goma, no es raro hacer nudos o perder algunos anillos en la apertura del mosquetón, por poco que no se hubiera cogido el anillo más próximo de la abertura - David Pérez, un submarinista español confeccionó un montaje astuto. Practica varias incisiones en un pedazo de manga de riego y arrincona allí algunos anillos. Podemos así llevarnos varios anillos de talla diferente. El tubo puede ser alargado, o de diámetro superior, para engancharlo mejor.

- Lo llevamos próximo del anillo al cual lo colgamos, con el fin de que no arrastre y no moleste el acceso al resto del material.

Gomas en un Mosquetón

Foto :F.V. Gomas en Haz Fotos: F.V.

Anillo antes de preparar Anillo listo para su uso. Ultimo avance en este campo: el Ring o, un anillo perforado utilizado para disponer de las cuerdas de escalada en la parada. Con poca maestría y una fijación juiciosa y firme, podemos sacar las gomas con una sola mano sin enredarlas demasiado.

El haz es de uso corriente y compuesto de un ramo de 10 anillos, chapados y cogidos o ensartados por otra goma a la cabeza de alondra. Un nudo de parada mantiene el conjunto. El rizo libre es pasado, como una correa, alrededor de la muñeca o por un mosquetón. Basta con tirar del aro de goma según nuestra necesidad para liberarlo. Este sistema aunque eficaz no esta del todo exento de defectos. Cuando el número de gomas disminuye, la tensión de la cabeza de alondra también y se puede producir la perdida de aros de goma. El resultado es idéntico si la cabeza de alondra esta demasiado apretada.

4.2 Los amarres "artificiales" Como para el común de los mortales, la vida del submarinista subterráneo no es fácil No es raro que las paredes de la galería no ofrezcan ninguna aspereza o saliente para amarrar el hilo al lugar deseado, o que la roca sea demasiado resbaladiza para soportar la tensión de un aro de caucho. Es frecuente, que en el suelo, la roca este cubierta de sedimentos (arena, arcilla, gravas etc) que la pared y el entorno de la cueva sea totalmente liso. Secciones irregulares, bordeadas de peligrosas secciones-trampas, imponen un posicionamiento del hilo draconiano que necesita a veces amarres artificiales. En estos casos, lastres eyectables, a los cuales el hilo será enganchado, reemplazarán ventajosamente los amarres naturales. Pequeño bosquejo, no exhaustivo, de lastres utilizados:

• plomos tradicionales de inmersión;

• plomos eyectables (200 o 300g envasados en moldes o bolsas de nailon o similar)

• tornillos o anclajes ferroviarios o similares, perfectos para este uso (arrinconados en grietas, o plantados en los sedimentos);

• redes llenas de gravas o de sedimentos encontrados en el mismo lugar.

Foto:F.V.

Plomo de inmersión Tutores agrícolas asociados Anclaje Ferroviario ¿ Si el suelo es recubierto con arena, con arcilla o con gravas? Tutores agrícolas, estaquillas, hierros a hormigón, estacas u otro sistema de anclaje puede ser plantado en los sedimentos. Atención a la longitud. Demasiado corto, el anclaje puede saltar, demasiado largo, se vuelve problemático a la hora de transportarlo. Un truco consiste en colocarlos alrededor de una botella vacía, y deslizarlos mediante anillos de caucho. Una opción intermedia (desarrollada por causa del uso de scootres por encima de un suelo de arcilla volátil) consiste en lastar flotadores con un plomo, unido por un pedazo de hilo de un buen de metro de altura. Amarramos al hilo-guía bajo el flotador con el fin de despegar el hilo del suelo, además de situarlo idealmente en el conducto.

Para el transporte y la puesta en ejecución, mejor vale disociar los elementos y colgar los aros de caucho" y los amarres eyectables en otro lugar que no sea el carrete para evitar los sacos de nudos. Juan-Marco Lebel en el sifón 4 de la rama , después del tramo final de la red Dejeau-Chaland, el 18 de junio de 2000: " … Justo tengo tiempo de apreciar la continuación del meandro antes de que la visibilidad se anule. Me fui con unas existencias de aire ya escasas, el tramo es solo el paso en un laminador, donde no estoy seguro que el hilo se pueda instalar en condiciones. También prefiero repasar el tramo ahora con mayor seguridad que correr el riesgo de estar en límite del aire en caso de que haga falta buscar mi paso. Todavía creo recordar el recorrido de algunos metros con un poco más de visibilidad para amarrar un plomo eyectable. Esto no es así, allí no vemos ni gota, la visibilidad es nula y debo realizar la maniobra a ciegas. Desde luego una vez el plomo atado al hilo y el hilo cortado del carrete, otro plomo atado al carrete se niega a separarse del primero. Y todo en la oscuridad y a ciegas, hay que tener una mano en el plomo enganchado y su elástico (goma), y en la otra el hilo cortado y el carrete para dirigirme hacia la salida.. Estoy contento de haber cortado bien .hem hum. 5 Técnicas de equipamiento No equipamos en un sifón simplemente soltando hilo detrás de nosotros a manera de un cierto personaje de la mitología griega encerrado en un laberinto ( EL MINOTAURO ) , Si ya hay una línea montada en el sifón podemos alejarnos de ella si la galería es bastante ancha. En sifones más pequeños y angostos, equipamos con un hilo sobre el precedente solidarizándose las líneas, para evitar enmarañarse en el ya existente tirando la nueva línea La instalación, si es realizada para ser duradera y de manera permanente, tenderá a evitar todo frotamiento del hilo contra la roca. Debe partir de la zona más confortable de la galería, permitiendo, tanto como sea posible, una progresión regular limitando los cambios de ritmo y la elección del lugar por el que avanzaremos. El resultado es que equipar un sifón o galería subterránea precisa experiencia y practica del mismo modo que el uso del carrete no es innato y requiere de aprendizaje.

Emparejamiento del Hilo Guía o de Ariadne en el momento de reinstalar la línea en un sifón. Foto : F.V.

5.1 El amarre inicial Fijar el hilo. El amarre inicial del hilo debe estar fuera del agua, o bien, a ras de agua. Si el sifón sufre diferentes fluctuaciones constantes de nivel, anticipar y amarrar en un punto que esté siempre fuera de agua. Debe ser "hormigón", constituido por un nudo sólido (nudo de silla, de ocho etc.) alrededor de un árbol, de un peñasco, algo seguro que ni pliegue ni rompa Como confiaríamos la vida a enganche alrededor de un ¿Grueso guijarro, o un nudo "incierto" sobre un arbusto? Cuando la configuración se presta a ello, podemos fijar el hilo en techo o chaparlo contra una pared por encima del pilón con el fin de que pase fuera de la zona donde los submarinistas se equipan. Minimizaremos los cortes, el rozamiento o el pisoteo en el momento de la preparación antes de la inmersión. Desde el fondo del pilón, instalar rápidamente un nuevo amarre, con el fin de que el hilo sea situado en el eje de la galería.

Juan-Marco Lebel, el 18 de junio de 1994, es el gran día para la inmersión en Font de Baignes, después de un tiempo sin poder entrar parece que ha quedado libre antes del paso una prometedora vía de entrada en el fondo del pilón a 11 metros de profundidad. Juan-Marco amarra su hilo algunos metros por encima del túnel con el fin de que no le moleste en el momento del paso del mismo al volver . "Error, La visibilidad es muy reducida de regreso y la corriente arrastró la arcilla levantada a su paso. Para realizar la vuelta sin dificultad, pegue la nariz sobre el hilo en la gran galería, la salida por el túnel me pedirá algunos minutos de búsqueda a ciegas para encontrar el mejor paso. Pondré minuciosamente un hilo que irá a lo largo del paso justo en el momento de mi próxima inmersión esta misma tarde."

Amarre inicial fuera del agua Foto: F.V. 5.2 Carrete obligatorio Más todavía con una línea fija, el carrete, cuando está siendo utilizado, debe estar lejos del cuerpo cogido con la palma de la mano y el brazo extendido. El hilo cuando está siendo tendido debe ser mantenido en tensión sin interrupción. Un hilo se suelta a una propensión inimaginable al romperse.

¿Cuántos submarinistas se enmarañaron en el hilo que desenrollaban? Según la morfología de la galería y las características del sifón, puede ser juicioso llevar cogido o enganchado el carrete, vía una correa pasada alrededor de la muñeca. La correa libera una mano, a veces muy útil para la confección de ciertos amarres, y asegura el carrete que podría quedar atrapado al caerse, yendo a bloquearse en una sección impenetrable, aislando al mismo tiempo al submarinista de su línea de vida.

Carrete situado lejos del cuerpo Fotos F.V.

Juan-Marco Lebel en el Pozo de Brême, el 14/04/1996, " … La Exploración es más una navegación a ciegas que una progresión: vemos techo o pared sólo cuando nos apoyamos dentro, como esto se produce a 140m (no pierdo la ocasión entonces de enredarme una mano mediante magnificas acrobacias en medio de las nubes de arcilla: decir que hace 27 ° al amparo de las terrazas sombreadas donde fluyen fuentes de Pastis y de cerveza fresca) ". 5.3 El espacio de evolución La instalación de un hilo guia en un sifón, para una línea duradera o una inmersión puntual, tiende a respetar un " espacio de evolución ". Para un equipo ideal, cuando la morfología del sifón se presta a ello, es el "campo" teórico en el cual el submarinista debe poder progresar alrededor del hilo de Ariadne en una sección equivalente a la longitud de su brazo, sin chocar con obstáculo, ni atrancarse, todo sin visibilidad (nos preparamos para lo peor o la situación más desfavorable). Esquema de Cyril Marchal

Carrete sujeto mediante banda elástica

Ganamos allí en ritmo de progresión (más regular), mas cómodo (menos roces y choques) y en seguridad (riesgos de atrancamiento). El submarinista, liberado de esta presión, está más concentrado en otros parámetros que hay que tener en cuenta. En algunos sifones estrechos, atravesados" vientre en roca ", esta noción es puramente teórica. Las "secciones-trampas", estas restricciones de volumen, contiguas a la zona penetrable de la galería, deben ser objeto de una desconfianza totalmente particular. Basta un amarre mal colocado, o una fijación que salta, de un saliente o arista olvidada para que el hilo vaya a meterse, en un margen o un trozo del conducto humanamente impenetrable. 1977 - Cueva de Castelette (83): de vuelta de una inmersión de exploración en un sifón muy fangoso, el submarinista está bloqueado a 15m de la salida porque su hilo se deslizó sobre el lado de la galería (h=15cm). Encuentra el paso penetrable después de 15 minutos de búsquedas a ciegas y sale con las botellas vacías.

Atrapado en la trampa vertical Atrapado en la trampa horizontal Fotos: F.V.

Un paso ha sido bautizado " dead de man handshake " en la fuente de Keld Head (U.K) en respuesta a un desafortunado incidente ocurrido a Jochen Hasenmayer, del que sale solo con la ayuda de Geoff Yeadon. Incidente cuyo origen reside en la rotura de un amarre, ocasionando el deslizamiento del hilo en una porción larga y rigurosamente impenetrableMartyn Farr: 1991 " Darkness Beckons " p. 142-146

Un penetración segura y con atención especial a estas trampas Horizontales y Verticales nos permitirán anticiparnos a ellas e ir adaptándonos según sea el caso. En la misma orden de ideas, es importante y aconsejable volverse regularmente para asegurarse del posicionamiento correcto del hilo. De esta manera además obtendremos información y veremos lo que nos encontraremos a la vuelta además de ir comprobando la turbidez del agua a nuestro paso y prever la visibilidad de regreso. Una desviación simple podrá bastar con mantener el hilo en una porción deseada. Si un amarre está situado fuera del espacio de evolución, un pedazo de hilo, o una "cadena" de gomas de caucho desviarán el hilo para que evite una zona expuesta, que queda en la parte más confortable de la galería.

Desviación con un trozo de hilo. Foto: F.V. 5.4 Fraccionar 5.4.1 Generalidades El fraccionamiento (fijación de la línea a un amarre fijo - aspereza, lámina de erosión o móvil - bloque, lastre eyectable-) regular y juicioso (localización, distancia entre los amarres) debe evitar que el hilo se deslice o alargue, detrás del submarinista, en una porción de la galería demasiado estrecha para que pueda atravesarlo de regreso (sección coge en la trampa). Evitamos también, si el hilo es cortado (usura, submarinista enmarañado), que quede una longitud demasiado grande de hilo libre en la galería.

5.4.2 Espaciamiento de los amarres En caso de que el hilo se hubiera roto detrás del submarinista, durante el camino de ida, la zona de búsqueda que hay que cubrir en el momento de la vuelta, para reencontrar la otra extremidad del hilo (el que retorna a la salida) será tanto más reducido ya que la desviación entre los amarres lo habrá sido en el momento del equipo. Por regla general (y teóricamente), la frecuencia de fraccionamiento (distancia entre los amarres) no debe superar los 10 metros. Hilo de Ariane voluntariamente equipado a lo largo de una pared. Foto: F.V.

5.4.3 Lateralización del equipo Tanto para la comodidad de la progresión como para disminuir los riesgos de enmarañamiento, evitamos los cambios de orilla privilegiando (tanto como sea posible) un lado de la galería. Un hilo equipado sobre una pared constituye un elemento suplementario de localización, en caso de problema de orientación de regreso. Si se aprecia que el hilo se encuentra a mano derecha, en un sifón equipado siempre en orilla sur, entonces de regreso, lo tendremos en la otra mano. Si, pensando dirigirse hacia la salida, se tiene siempre el hilo en la misma mano que en el recorrido de entrada, es porque ya es hora de hacerse algunas preguntas.

Cuando el hilo de Ariadne recorta la galería Foto: F.V. 5.4.4 Un hilo al techo La transformación en “ faquir " no es nuestro objetivo, sino más bien una práctica que hay que desaconsejar, al montar el hilo en el techo: - Es particularmente penoso manejarse en estas circunstancias (hace falta una flexibilidad que ni en el kamasutra. "); - La cabeza es a menudo descentrada (perdemos la visión global del espacio de evolución y las luces del casco alumbran a otro lugar); - Aumenta el riesgo de choques (casco, griferías); - El de enmarañarse también.

Instalación con hilo guía equipado en techo Foto: F.V.

El medio subterráneo se pone de acuerdo más bien en escasas ocasiones. A estas alturas el lector ya se habrá dado cuenta que no se fracciona una galería modesta sinuosa, arcillosa y cercada de secciones trampas, de la misma manera que un corredor vasto y rectilíneo a la sección cuadrangular. De otro modo se encontrará donde no debe con suelos arcillosos, de los que será preferible alejar el espacio de evolución de nuestros alegres palmípedos. (Aletas) Dama natural es proveída de una imaginación fértil cuando se trata de esculpir las arterias telúricas (¿ a menos que las leyes que rigen el génesis del sistema karstico permanezcan a duras penas accesibles al entendimiento humano?) los submarinistas subterráneos, apasionados por el estudio y la exploración de este medio, se comprometen en todas las vías, hasta los más estrechos y los más tortuosos pasadizos, donde la teoría no es siempre aplicable de manera estricta. A la hora de la elección de configurar el equipo de un sifón, hay que tener en cuenta las peculiaridades y particularidades en cada caso (el sifón, un sector preciso en el seno de una galería ahogada), al cual el submarinista debe saber adaptarse.

Amarre trasladado y realzado en una curva, para evitar que los submarinistas pasen demasiado cerca del talud de arena Foto.:F.V.

5.5 Disposición del hilo sobre los amarres 5.5.1 Accesibilidad del hilo al nivel del amarre Soñamos con eso raramente cuando instalamos la línea, porque el espíritu está ya centrado en otros parámetros que hay que administrar. Los del equipo (posicionamiento del hilo, las secciones que hay que evitar etc.) acumulados a los de la inmersión (consumo, flotabilidad etc.). En el momento de una vuelta sin visibilidad (es a menudo en las condiciones en lo que se siente haber descuidado ciertos "detalles"), llegado a un fraccionamiento, pasa que el hilo se encuentre más o menos desviado (cambio notable de inclinación o de orientación) después del amarre.

Para evitar reencontrarse allí, en tope de retención, buscar a tientas en el vacío, o sondear el suelo en busca del hilo-guía, conviene poner especial cuidado, en el momento de la colocación de amarres, mientras que el otro extremo del hilo permanezca accesible fácilmente al otro lado de un fraccionamiento. La gama de pequeñas preocupaciones decae también en aquella configuración, pero esencialmente retendremos los casos:

Fotos.: F.V.

5.5.2 Los ángulos agudos Cuando la galería soporta curvas pronunciadas, el progreso del hilo es análogo. Un amarre al nivel del cual el ángulo del hilo es cerrado, debe "ser particularmente "cuidado" Si se pudiera saltar o soltarse, la longitud de hilo muelle en el sifón puede ser molesta. De este modo, el riesgo de extraviarse en una sección aumenta. La facilidad consiste en equipar dentro de la curva, pero podemos exponer el hilo a frotamientos sobre la roca. Su vida útil habrá sido entonces reducida. Sobre el exterior del conducto, podemos: - Doblar el amarre (dos gomas de caucho en lugar de una) - Doblar el fraccionamiento cuando es posible (dos amarres en la curva) - Utilizar un material más robusto que el caucho (hilo eléctrico, cuerdecilla, otros.…

- Bloques sobre el suelo de costado sobre el hilo y del hilo chapado contra la pared o el suelo.

Fraccionamiento detrás de una gruesa plantilla: En caso de visibilidad nula, habrá que buscar un poco antes de reencontrar el extremo bajo el amarre.

Dos amarres en el exterior de un viraje a 90 º.

5.6 Encrucijadas y bifurcaciones Las cuevas o zonas Karsticas europeas no son como las de Florida o las del Yucatán, no es por lo tanto que las galerias laterales y otras ramificaciones o grutas sumergidas se tengan que descuidar bajo el " Viejo Continente " La multiplicación de hijo al nivel de una encrucijada induce a un riesgo de error de orientación Varios accidentes tuvieron este origen, el submarinista pensaba acercarse a la salida mientras que se alejaba de ella. Es juicioso, mientras que existe una encrucijada de hilo, marcar el cruce fijando una goma de caucho a una etiqueta rígida, una flecha plástica u otros sistemas de marcación sobre el hilo guía que indica la salida. El principio corriente consiste en señalar únicamente la salida y nada más. En el caso de galería principal flanqueada por ramificaciones, podemos jugar también con la naturaleza del hilo guía. Equiparemos la galería principal con cable o hilo de mayor diámetro tipo cuerda de escalada l, y el hilo sintético para todos los conductos restantes. También podemos jugar a la diferencia de diámetro (hilo principal espeso, ramificaciones más finas), hilos de diferente textura (polyamide y nailon), o hilos de diferente color cuando estamos seguros que la visibilidad no desciende debajo de un cierto umbral. En los sifones con buena visibilidad, y que la misma permanece durante después del paso de los buceadores, podemos evitar una conexión directa, y amarrar el hilo secundario cerca del hilo principal. El objetivo es el hilo principal sea accesible desde el punto de partida del hilo secundario. O cerca de una envergadura de brazo.

Goma de caucho indicando la salida

Galería lateral equipada con un hilo de naturaleza y color diferentes al principal y no enlazado ni ajustado.

5.7 El amarre final Excepción hecha en los sifones atravesados ( donde generalmente se está a gusto y al aire libre) el último amarre es a menudo una operación delicada. Estamos muy lejos de la entrada, en el momento más cómodo de la inmersión, con reservas (gas, iluminación) y posiblemente un espíritu decaído (degradación de las condiciones, el frío). Es el momento cuando los riesgos aumentan. El de enmarañarse en su propio hilo, el de enredarse en el resto de hilo presente sobre el carrete, el de extraviar el carrete. Después de los grandes momentos de los carretes, abandonados a su suerte, las nuevas generaciones se empeñan en volver a resaltar su instrumento-fetiche, el compañero de sus exploraciones y de las gestiones de las galerías. (búsqueda de hilo perdido por ejemplo). Llegado el fin de la inmersión, desenrollar un poco más allá del amarre final la longitud de hilo necesario para la confección del nudo más 40 Cms suplementarios. Bloquear inmediatamente el carrete, engancharlo sobre sí y cortar el hilo. Ya es hora de realizar el nudo final (que previamente se habrá practicado en caliente y en seco para confeccionarlo de modo automático, sin tener que pararse a pensar. Anudar también el hilo del carrete para evitar que se desenrolle involuntariamente en el trayecto de vuelta, en caso de que el bloqueo del carrete saltara. En el caso de exploraciones corrientes, podemos dejar 40 cm de hilo libre, después del amarre, para facilitar el racor del carrete en el momento de la futura exploración. Es más simple anudar dos extremos de hilo que enlazar dos amarres.

Chimenea equipada en hilo polyamide, enlazando con hilo a hilo guía (cable) principal. Fotos.: F.V.

5.8 Algunos trucos a granel El carrete es ineludible, si , pero es una menudencia suplementaria sobre el equipo o la preparación , ya bien desarrollada, del submarinista cavernícola. A menudo encontramos a submarinistas que lo enganchan bastante alto, sobre la correa de la parte superior del bibotella al jacket. En este lugar, afecta al espacio visual reduciendo la amplitud de los movimientos de los brazos. Usualmente, preferimos engancharlo en la parte inferior del bibotella o del jacket.

Los inconvenientes de esta elección: Corremos peligro de olvidar el juguete al borde de la entrada del sifón, porque está fuera del campo de visión. Su resistencia puede también ser puesta a prueba si nos ponemos encima al apoyarnos o sentarnos con todo el equipo después de la inmersión, ya que corre el riesgo de quedar aplastado por el equipo.

6 Precauciones de uso 6.1 Los hilos en su sitio. En nuestros días, raras son los sifones que no están equipados

Verificar siempre un hilo en el lugar y en el momento de usarlo.

- Que correctamente ha sido equipado (respeto del espacio de evolución, ninguna sección-trampa); - Que la línea siempre está en su sitio y en perfectas condiciones (las crecidas, submarinistas pueden haber soltado o roto amarres) - Que es siempre fiable (las crecidas pueden haberlo deteriorado, haber roto por abrasión).

6.2 La cantidad no hace la seguridad: un solo hilo por sifón.

Foto F.V.

Desinstalación de un antiguo hilo después de tener reinstalada la línea en el sifón

En inmersión en cuevas, la multiplicación de los equipos va en contra de la seguridad, abundancia de equipo perjudica en lo que a las líneas tiradas se refiere. Un hilo, bien, dos hilos … Demasiados sifones se convierten poco a poco en museos del hilo de Ariadne. Cada vez que se instala un hilo en un sifón, se debe rebobinar al regreso (en el caso de una inmersión de paseo), ya sea para desinstalar el otro (en el caso de una instalación duradera) - de regreso si es único, en paralelo por un colega si se zambulle a varios). .

Juan-Marco Lebel, el 19 de julio de 1996, repitiendo las exploraciones en la Font de Baignes hace de estás inmersiones, " una tentativa de llegar a la punta. Una tentativa totalmente nueva pero más arriesgada, que resultó un fracaso. El hilo de Ariadne ha sido encontrado roto a 420m, sin duda en consecuencia de crecidas invernales. La corriente en esta zona estrecha debe ser bastante violenta , como lo demuestra un talud de guijarros redondeados y ausente de depósito. Ya parado se prepara para reinstalar la línea en el sifón. No encuentro en seguida el paso y, volviendo al fraccionamiento donde dejé la botella, encuentro el hilo de Ariadne que conduce hacia la salida en rizo sobre ésta, esta seccionado. Instantáneamente evalúo el estado precario de mi situación: voy a tener que usar mi carrete no para explorar esta vez si no para encontrar el camino de salida. También sé que la sala inundada a 410m es particularmente tortuosa y arcillosa. La primera tentativa debe ser la buena. Recupero mi carrete y comienzo la búsqueda con destino a la salida ocupándome de aletear milimétricamente alto y suave con el fin de preservar la visibilidad. Reencontraré el hilo amarrado a un plomo eyectable a una decena de metros. Vuelvo a reinstalar la línea hasta 420m, luego después de una pequeña valoración de la situación, decido abandonar la punta por esta vez. . Menciono este incidente porque pienso que tiene que ser meditado por nuestra comunidad: Ningún error o descuido técnico lo provocó (¿podemos razonablemente imaginar verificar minuciosamente el hilo sobre 400m?). En cambio, me bendije por haber realizado una instalación esmerada: Fraccionado muy a menudo, una rotura tal como se produjo esta tiene menores consecuencias y menos graves. Por otra parte, una reserva amplia de aire siempre calculada te proporciona una comodidad moral que toma toda su dimensión en este tipo de situaciones. "

Progresión siguiendo el hilo con la vista.

7 Progresión siguiendo una línea montada 7.1 Generalidades Tener el hilo sí, pero ¿cómo? Siempre por contacto directo. Las correas, los cabestros y otros intermediarios no previenen cuando perdemos el contacto (mosquetón que se abre, hilo roto), podemos entonces continuar mucho tiempo antes de darnos cuenta que no estamos sobre el hilo. De nada vale la mano. El hilo debe correr, entre el pulgar y otros dedos, siempre en contacto (algunos, a la sensibilidad exacerbada, evocan una caricia).

El hilo indica justo el progreso que hay que seguir, no es en ningún caso un medio de progresión (a menos que hayamos equipado voluntariamente con un diámetro mayor con ese objetivo). En este caso, evitamos remolcarnos para avanzar, no tiramos ni utilizamos el hilo como medio de arrastre para ir a ver algo fuera del espacio de evolución. El hilo esta cogido con el brazo extendido, lo mas alejado posible del cuerpo y preferentemente en un lateral (mejor que por encima) con el fin de evitar todo roce del submarinista. Atención, cuando se mira al lado opuesto de la galería, subiendo la cabeza, el cuerpo se desplaza del paralelo que forma con el hilo guía y el riesgo de roce o enganche con las aletas aumenta. Hay que obligarse a mantener el contacto constantemente. Una fracción del segundo de descuido puede bastar para perder la línea o seguir otra diferente que no conduce necesariamente a la salida que estamos buscando, hacia la cual nos dirigimos. Seguir con los ojos el hilo está reservado a los practicantes muy experimentados y que conocen la cavidad, o para ciertos tipos de sifones y ciertas condiciones excepcionales de visibilidad.

7.2 Evolución sobre el hilo Volverse: Para comunicar con un compañero de equipo por ejemplo, siempre volverse frente al hilo. Dándole la espalda nos exponemos a quedar enganchados allí (griferías, aletas). Pasar abajo: más vale separarse, pero a veces no es posible hacerlo de otro modo (hilo en altura en la galería, la proximidad del techo). Nos volvemos frente al hilo, con el brazo extendido para alejarlo, de este modo el brazo que lo tiene describe un cuarto ancho de círculo por encima de su cabeza. El hilo es cogido por la otra mano que describe a su vuelta otro cuarto de círculo para devolverlo del lado contrario. Pasar un fraccionamiento: la mano sobre el hilo se queda arriba antes del amarre. La otra mano coge el hilo al otro lado del fraccionamiento, luego volvemos a coger el hilo con la mano que estábamos utilizando para proseguir. Un submarinista es responsable (de si mismo ante todo) del hilo que sigue, y más cuando no ha sido el quien lo ha instalado.

Volverse siempre cara al hilo

8 Técnicas de autorescate Nunca es demasiado tarde para aprender algunos trucos o habilidades que nos permitan salir de un mal paso sin demasiados apuros. Los dos principales riesgos residen en el enmarañamiento y\o la pérdida del hilo.

8.1 Pérdida del hilo Este tipo de incidente ocurre más a menudo de lo que pensamos, y no solamente a los demás. Según la morfología (sección " clara " o tortuosa), la autonomía en gas y la profundidad a la que nos encontremos, puede ser crucial reaccionar correctamente con el fin de no tardar demasiado tiempo en recuperar el hilo. La técnica de búsqueda de hilo consiste en amarrar su hilo (de ahí el interés de tener siempre un carrete auxiliar que debe acompañarnos siempre) en la galería, después se efectúa una vuelta completa conservando sin interrupción el contacto con la pared. Hay que ocuparse a no enganchar su hilo, que debe quedar libre y seguir la trayectoria del submarinista. Una vez cerca del punto de partida (con un poco de suerte habrá encontrado el hilo allí), rebobine el hilo hasta ponerlo en tensión. Normalmente, la línea equipada estará enganchada en el hilo utilizado para la búsqueda. Si no hay nada, es porque posiblemente se falló en su intento, o porque el hilo ha sido cortado y porque no hay más en esta sección del sifón. Podemos entonces probar fortuna de nuevo, o intentarlo más lejos, hacia la salida si todavía sabemos encontrarla. La "lectura" del medio se vuelve crucial para orientarse en estas condiciones. De ahí el interés de la lucha contra el analfabetismo de aquellos que se inician en el espeleobuceo o buceo en cuevas. Si hay unas campanas espaciosas y confortables, o el sifón sale al exterior, lo mejor es esperar prudentemente que las condiciones mejoran (a veces hace falta una buena semana para que la visibilidad se vuelva idonea) o qué un colega venga para auxiliarnos, antes que agotar sus últimas reservas de gas.

Hilo perdido

El caso siguiente ocurre en Agosto de 1995. Bajo el pozo desobstruido de 7m, un estanque muestra el comienzo de una galería estrecha. Hay que salvar un estrechamiento rapelando al fondo del pilón, luego evolucionar en una galería que se ensancha (1,5 x 2,5m). Solamente el suelo es recubierto con limo muy volátil. El agua se vuelve turbia durante este trayecto por la galería . A 10m del pilón, una fractura lateral se desarrolla sobre una decena de metros hasta un culo de saco. En el momento de la segunda inmersión salvo el estrechamiento de entrada rapelando y llego directo " al pozo ". Para moverme con la configuración de equipo elegido en esta ocasión (2 x 4 l en un kit spéléo), escojo avanzar hasta doblar el agua fangosa. Nos equiparemos mejor cuando veamos allí con mayor claridad. Progresando con la mano derecha sobre el hilo (instalado la vez anterior) y el bibotella bajo el mismo brazo, siento como este se desliza de repente bajo el. En un acto reflejo, lo cojo con la mano más próxima dejando el hilo flojo y suelto. De repente nos encontramos en una situación que no habíamos pensado Braceo un poco, no hay nada que hacer, imposible volver a subir la mano para coger el hilo. Y en esta fractura de 1,5m de anchura es inútil realizar una búsqueda metódica. ¡Por intentarlo que no quede!, voy a continuar avanzando en esta endiablada nube de sedimentos con la esperanza de que al llegar al agua clara encontraré el hilo. Con la mano sobre la pared de la izquierda, avanzo tranquilo hasta que consigo salir del agua turbia.. En el agua translúcida, acecho en la orilla norte el paso del hilo. Pero.... ¡ Nada! De repente, pienso. ¡ Qué c…….! Me arriesgue demasiado en la galería lateral, al desinstalar inmediatamente después de la exploración en la inmersión anterior . Esto no mejora las cosas. Decido dar media vuelta y volver a la zona enturbiada al menos, tengo la certeza de saber donde me encuentro y sé que la zona de entrada no está lejos. Guardando el contacto con la pared de la izquierda, encuentro la encrucijada, y siempre con la pared como referencia, avanzo hacia el fondo. Al cabo de una quincena de metros, doblo la zona de agua turbia y encuentro por fin el hilo. ¡ Ouf! Alivio. Frank.

8.2 Enmarañamiento En caso de enganche "severo" en el hilo, puede resultar necesario seccionar el hilo para liberarse. Si otros submarinistas están al mismo tiempo en la cavidad, sería muy injusto abandonarles a su suerte, después de haber cortado el lazo único que les conduce a la salida. Una técnica de desenmarañamiento es enseñada en ciertas prácticas, aunque esta encuentra adeptos y detractores. Que cada uno encuentre su propia opinión al respecto. Lo que si es cierto es que técnica requiere de la práctica y un entrenamiento regular. Http: // www.plongeesout.com / articles%20pu blication/generaux/degagement%20fil/Deg tiene gement%20sur%20fil.htm Conclusión Ya lo hemos dicho anteriormente pero, vamos a repetirlo (a nuestra edad, tenemos la excusa del Alzeimer ), un hilo es peligroso y caprichoso. Recomendamos una desconfianza sistemática frente a la seguridad que nos aporta una línea, tanto de aquellas que se encuentran instaladas adecuadamente en el sifón, como de las que vamos tirando en nuestras exploraciones mediante el uso del carrete. Para continuar derribando algunas puertas abiertas, la práctica previa en agua libre siempre será menos punitiva que un descubrimiento (del material nuevo) o ensayos (técnicas, nudos), directamente allí en los sifones y en nuestras exploraciones en cuevas.

Este artículo únicamente presenta prácticas y técnicas aplicadas y observadas in situ desde hace varios años.

No son universales y pueden ser mejoradas.

Algunas caerán en desuso. La eliminación de cámaras de aire en la industria del automóvil augura un corto plazo a la hegemonía de la goma de caucho. Estos hilos que se rompen deberían ser mejorados y sustituidos por un material más seguro, resistente y de mayor durabilidad. Por suerte contamos siempre con la " sangre fresca " (y encéfalos asociados) nuevas hornadas de buceadores creativos e inventivos que harán evolucionar las técnicas, el material y la actividad, porque las viejas leyendas del expeleobuceo se están comenzando a cansar.

AGRADECIMIENTOS Enrique Bougnol, Didier Bruchon, Hervé Chauvez, Gérald Favre, Stéphane Havard, Eric Julián, Juan-Marco Lebel, Cyril Marchal, M.Montigny, Josi Olave, David Perez, Bernard Sapin y Alain Vuagniaux Por sus imágenes, los montajes y los esquemas. Juan Pedro Baudu, Juan-Marco Belin, Didier Borg, Mehdi Dighouth, Sebastián Rocheil, Nicolás Schalk Por haber desempeñado el papel ingrato de modelo para las fotos técnicas. Juan-Marco Belin, Sergio Césarano y Cyril Marchal Por la adaptación del texto. BIBLIOGRAFIA

• Guido De LAVAUR: 1953 " La exploración de los sifones y de las fuentes de Vaucluse "

Actos del congreso internacional de Espeleología (París 1953) Tomo V, p. 209-211.

• Miguel LETRONE: 1955 " Inmersiones subterráneas: material y técnica " Bul. Del Comité Nacional de Espeleología n°4, p. 26-29.

• Juan Pedro THIRY: 1985 " Técnicas de Inmersión subterránea " Sociedad espeleológica de Wallonie - Lieja, 66 p. Manuel belga.

• Robert PALMER (y col.): 1990 " Bodega Diving: The Cave-Diving Group Manual " Mendip publishing Castle Carey press. Manual Britanico.

• Philippe BIGEARD: 1996 - " Especial Hilo de Ariane " Info-Plongée n°71, 26 p. • Juan-Francisco MANIL: 2001 " la Inmersión en el agujero " Librería spéléo -

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Página 36. • Frank VASSEUR: 2003 " la panoplia completa del submarinista spéléo. "

Océanos n°272, p. 54-55. Nota del traductor: Esta traducción ha sido realizada con la intención de hacer llegar la información de manera amena y facilitar la lectura a los interesados. Es posible que se hayan omitido algunos conceptos y ampliado otros por la dificultad de la traducción de algunos tecnicismos propios del buceo en cuevas, sifones o expeleobuceo en general. No se ha pretendido en ningún caso corregir al verdadero autor del artículo en ningún momento. Versión original en Francés en : http://www.plongeesout.com/articles%20publication/materiel/fil%20arian

ACONDICIONAMIENTO Y USO

DEL HILO GUIA

FOTO F.V.

Cyril Marchal y Frank Vasseur. Traducción: Francisco José Martínez 20/04/06( Club – Escuela de Buceo Yubarta )

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