Guillen M Profesiones y Burocracia

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PROFESIONALES Y BUROCRACIA: DESPROFESIONALIZACION, PROLETARIZACION Y PODER PROFESIONAL EN LAS ORGANIZACIONES COMPLEJAS Mauro F. Guillen* Universidad de Yale RESUMEN. Las profesiones han experimentado un proceso generalizado de asalarización a lo largo del siglo XX, cuestión que ha despertado una controversia sociológica considerable. En el presente artículo se revisan las teorías sobre el declive de las profesiones y se evalúa su consistencia lógica y validez empírica. Primero se describen las características de las ocupa- ciones profesionales tal y como se desarrolllaron en la sociología anglosajona a partir de la obra de Spencer en 1896. Este modelo profesional se denomina de mercado o profesión libe- ral¡ que evolucionó desde el concepto medieval de profesiones estamentales. En segundo lugar se abordan las teorías de «desprofesionalización» y «proletarización», criticándose la evidencia empírica disponible. Por último, se analizan las profesiones organizativas, introdu- ciendo las teorías acerca de la base del conocimiento y el poder de las profesiones, que postulan que las organizaciones complejas, lejos de socavar el profesionalismo, son medios de trabajo que favorecen la autonomía y el poder de las profesiones. EL PARADIGMA PROFESIONAL Las profesiones fueron estudiadas por primera vez de modo sistemático por la sociología anglosajona a finales del siglo XIX y principios del XX (Spencer, 1896; Carr-Saunders y Wilson, 1933). Tras la Segunda Guerra Mundial, la sociología norteamericana se convierte en la vanguardia mun- dial del estudio de las profesiones (Goode, 1957; Wilensky, 1964), bien * Mi agradecimiento a los comentarios de Steve Brint. Reís 51/90 pp. 35/51

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  • PROFESIONALES Y BUROCRACIA:DESPROFESIONALIZACION,

    PROLETARIZACION Y PODERPROFESIONAL EN LAS ORGANIZACIONES

    COMPLEJAS

    Mauro F. Guillen*Universidad de Yale

    RESUMEN. Las profesiones han experimentado un proceso generalizado de asalarizacin alo largo del siglo XX, cuestin que ha despertado una controversia sociolgica considerable.En el presente artculo se revisan las teoras sobre el declive de las profesiones y se evala suconsistencia lgica y validez emprica. Primero se describen las caractersticas de las ocupa-ciones profesionales tal y como se desarrolllaron en la sociologa anglosajona a partir de laobra de Spencer en 1896. Este modelo profesional se denomina de mercado o profesin libe-ral que evolucion desde el concepto medieval de profesiones estamentales. En segundolugar se abordan las teoras de desprofesionalizacin y proletarizacin, criticndose laevidencia emprica disponible. Por ltimo, se analizan las profesiones organizativas, introdu-ciendo las teoras acerca de la base del conocimiento y el poder de las profesiones, quepostulan que las organizaciones complejas, lejos de socavar el profesionalismo, son mediosde trabajo que favorecen la autonoma y el poder de las profesiones.

    EL PARADIGMA PROFESIONAL

    Las profesiones fueron estudiadas por primera vez de modo sistemticopor la sociologa anglosajona a finales del siglo XIX y principios del XX(Spencer, 1896; Carr-Saunders y Wilson, 1933). Tras la Segunda GuerraMundial, la sociologa norteamericana se convierte en la vanguardia mun-dial del estudio de las profesiones (Goode, 1957; Wilensky, 1964), bien

    * Mi agradecimiento a los comentarios de Steve Brint.

    Res51/90 pp. 35/51

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    desde el punto de vista del mercado (Larson, 1977), bien desde la perspec-tiva del poder profesional (Johnson, 1972)x. Los aos sesenta y setentacontemplan el surgimiento de teoras que postulan la erosin del paradig-ma de profesional de mercado; las dos ms sobresalientes son las hiptesisde desprofesionalizacin y de proletarizacin, que han sido replicadas tanto porlos proponentes de la teora de institucionalizacin del conocimiento como porlos tericos de la sociedad postindustrial2.

    Como apunta Larson (1977, 1979), los trminos "de profesin y profesionaldesignan conceptos sociolgicos relativamente recientes. Durante la EdadMedia existan las llamadas profesiones liberales, categora que incluye lasprofesiones de la medicina, el derecho, y el sacerdocio, que han pervividohasta el presente3. Estas tres profesiones comparten un rasgo diferencia-dor: eran profesiones cultas en contraste con las profesiones artesanales ogremiales. Las primeras asistan a las lites, las segundas a los pobres.De este modo, se institucionalizan funciones sociales especializadas, repn>ducindose la estructura de desigualdad en el reparto de la riqueza y delconocimiento. El conocimiento tcnico aparece ya como el rasgo distintivode las ocupaciones profesionales en este primer perodo de profesionesestamentales.

    Dos fueron los sucesos histricos que alteraron este orden medieval:las revoluciones Francesa e Industrial. El auge de las clases medias en elmundo occidental a lo largo del siglo XIX elimin en parte el acceso pornacimiento o patronazgo a las profesiones aprendidas, establecindose unsistema meritocrtico de reclutamiento. Larson (1977) atribuye el naci-miento de las profesiones en sentido moderno a la Revolucin Industrial.El desarrollo del capitalismo fabril favoreci el crecimiento progresivo delos profesionales comunes a expensas de los profesionales cultos de la EdadMedia. Los profesionales comunes que procedan de las clases medias

    1 La diferencia principal entre las teoras sociolgicas anglosajonas y europeas sobre las

    profesiones radica en que estas ltimas atribuyen al estado corporativo un papel central enla provisin de mercados monopolistas para los profesionales (Freidson, 1986: 35; VelardeFuertes, 1986). En el presente estudio se utiliza el modelo anglosajn por su mayor capaci-dad explicativa del fenmeno de asalarizacin de los profesionales y su trabajo en organiza-ciones complejas. La sociologa de las profesiones tiende cada vez ms a polarizarse en losmarcos de referencia marxiano (proletarizacin) y weberiano (profesiones organizativas),como veremos ms adelante (Halliday, 1983). Vanse Martn-Moreno y De Miguel (1982),para un anlisis de las profesiones en Espaa, y Guillen (1989), para un estudio histrico dela profesin de economista. Rodrguez (1987) y De Miguel (1985) incluyen estudios sobrelas profesiones sanitarias desde la perspectiva global del sector sanitario.

    2 Touraine (1971); Bell (1978).

    3 Wilensky (1964) aade un cuarto grupo, a saber, los profesores universitarios, mien-

    tras que Larson (1977) incluye tambin a los arquitectos. La medicina es la profesin mejorestudiada por los socilogos: Bullough (1966); De Miguel (1976); De Miguel y Diez Nico-ls (1985); Freidson (1970, 1978, 1980); Goode (1957); Hofoss (1986); Kett (1968);Mecnanic, ed. (1983); Rodrguez (1987>, 1987c). Los economistas tambin han prestado unainusitada atencin hacia los mdicos como posibles creadores de demanda inducida (Rein-hardt, 1985; Stano, 1987).

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    urbanas carecan por lo general de una formacin universitaria completay queran extender sus mercados profesionales a la vez que mantenan elmonopolio de la prctica profesional4.

    Las dos caractersticas ms importantes de las profesiones modernas(que aqu llamaremos de mercado) aparecen ya a finales del siglo XIX: mono-polio sobre un corpus de conocimiento susceptible de ser aplicado a la prc-tica, y monopolio sobre un mercado de servicios profesionales5. Comoapunta Wilensky (1964), el proceso de profesionalizacin (hacia el modelode mercado) comienza con el ejercicio de la profesin sin un perodo pre-vio de aprendizaje formal. El siguiente paso es la organizacin de progra-mas de enseanza que permiten controlar la entrada a la profesin y estan-darizar su prctica. Cuando la profesin comienza a contar con demasiadosmiembros para el mercado existente, los profesionales establecidos seasocian para proteger sus monopolios presionando para obtener legislacinfavorable. Los dos instrumentos usados para este fin son el establecimientode licencias obligatorias para poder ejercer, y la certificacin profesional.Finalmente, Wilensky seala que la adopcin de un cdigo formal de ticaprofesional supone la consolidacin definitiva de la profesin como grupoocupativo. Estos componentes de paradigma de profesin de mercado puedenresumirse como sigue:

    Valores y metas

    Clientela o mercado

    Manifiestos: Ocupacin tcnica a tiempo completo.Ideal de servicio a la sociedad; compromiso voca-

    cional.Contribucin al conocimiento cientfico.Generacin de entusiasmo por la profesin.

    Latentes: Autoridad sobre las ocupaciones subordinadas.Proteccin de la autonoma profesional.Aumento del poder y la riqueza de la profesin.Mantenimiento del monopolio de mercado.

    Eleccin de clientes segn la estratificacin de la sociedad.Relacin fiduciaria con el cliente.Sentido de lo que es bueno para el cliente.Relacin personal con el cliente, a quien se trata como un todo.Rentas de monopolio gracias al sistema de licencias.

    4 Las profesiones cultas hablaban latn y mantenan trato con la aristocracia nicamente,

    aunque existi una tendencia a atender tambin a los burgueses adinerados. De Miguel yDiez Nicols (1985) incluyen un estudio de la evolucin de la profesin mdica en Espaa.A principios del siglo XIX existen varias clases de mdicos, que se unifican en 1868 en unasola clase mdica. Ese es el nacimiento del mdico como profesional de mercado en Es-paa.

    5 Kant explica cmo no hay nada ms prctico que una buena teora. Aunque las pro-

    fesiones no suelen inspirarse en principios idealistas, conviene recordar que la legitimacinde los profesionales proviene en muchos de los casos de la ficcin de su servicio desinteresa-do a la sociedad y al cliente.

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    Educacin y formacin Estudios de nivel universitario, de larga duracin.Naturaleza tcnica, pero tambin orientativa y vocacional.Seleccin meritocrtica, que tiende a seguir la estratificacin

    social.Sistema de educacin permanente.

    Conocimiento Organizado alrededor de un corpus terico abstracto.Naturaleza tcnica, con cierto componente experimental.Grado moderado de especializacin.

    Instituciones y poder Asociaciones (colegios) profesionales que regulan la cantidad ycalidad de los miembros de la profesin.

    Cdigo formal de tica profesional.Lazos dbiles con otras instituciones sociales.Presin ante las instancias pblicas y estatales.

    En sentido estricto, una profesin es una ocupacin tcnica, a tiempocompleto. Adems, se trata de una ocupacin para toda la vida: cuandoalguien es mdico o abogado es algo que se conserva an a pesar de dejarde ejercer la profesin. Existe un compromiso vocacional muy especial, y unideal de servicio a la sociedad y al cliente. El profesional es la nica personalegitimada para proveer ciertos servicios personales. Dado que esa posicinsocial peculiar se deriva del hecho de poseer un conocimiento aplicado y deejercerlo lucrativamente, el profesional est obligado a contribuir a la acu-mulacin del conocimiento cientfico para mantener el monopolio profe-sional basado en l, y a mostrar a la sociedad cuan importante es generandoentusiasmo y admiracin por la profesin.

    Pero no solamente existen valores o metas manifiestos. Los profesionalestambin comparten valores y metas latentes. La autoridad sobre las ocupacio-nes subordinadas (en el caso de la profesin mdica sobre la de enfermera)y la autonoma profesional son valores inherentes a todo profesional6. Lameta u objetivo latente consiste en incrementar la riqueza y el poder de laprofesin y de cada profesional individualmente. El conocimiento profesio-nal es por definicin tcnico, y se caracteriza por su grado moderado deespecializacin7. Pero el conocimiento profesional tambin tiende a serexperimental, de tal manera que la prctica proporciona habilidades ydestrezas. El monopolio de conocimiento aplicado se consigue en muchosde los casos organizando el ejercicio profesional alrededor de un cuerpo deconocimiento abstacto que suministra la legitimacin cientfica para laautonoma, la autoridad, y el poder profesionales. Una hiptesis fundamen-tal es que cuanto ms tcito y esotrico sea el conocimiento que sirve de

    6 Autoridad es la responsabilidad respecto a otros basada en un conocimiento o una

    posicin jerrquica superior. Autonoma se refiere a la prerrogativa de seleccionar casos oclientes, horas y ritmo de trabajo, y tcnicas y procedimientos.

    7 La especializacin excesiva suele impedir una relacin personal y global con el cliente.

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    base para el ejercicio profesional, ms contribuye a la legitimacin del pro-fesional, pues resulta ms difcil de entender para el profano (Wilensky,1964; Larson, 1977).

    No habra profesiones si no existieran clientes. Entre cliente y profesio-nal ocurre una relacin personal, global, y fiduciaria (Moline, 1986)8. Elprofesional reclama para s el sentido de saber lo que es bueno para elcliente. La eleccin de los clientes es una prerrogativa del profesional (y nodel cliente) debido a la existencia de monopolio, y tiende a seguir las pau-tas de estratificacin de la sociedad, es decir, los profesionales ms presti-giosos seleccionan sus clientes de entre las capas sociales ms elevadas9. Alcliente se le trata como un todo, lo que implica la necesidad de fundamen-tar la prctica profesional en un conocimiento poco especializado. Losmejores clientes para un profesional son aquellos de carcter universal, ycon escasa capacidad para organizarse. El profesional atiende a clientes,nunca a grupos u organizaciones. Los mercados monopolistas de clientesindividuales son los que mejor se adaptan al paradigma profesional.

    Una cuestin esencial es cmo consiguen los profesionales crear y man-tener sus mercados monopolistas. La respuesta es doble. En primer lugar,se controla el acceso a la profesin. En segundo lugar, se protege el mono-polio contra los intrusos, ya sean profesionales o no-profesionales. Laentrada a la profesin se regula mediante el sistema de educacin y forma-cin universitaria; los intrusos se vigilan gracias al sistema de licencias y deregulacin estatal. Las profesiones estn formadas por personas que hansuperado un perodo prolongado de educacin universitaria, en el que hanadquirido no solamente conocimientos tcnicos, sino tambin una orienta-cin vocacional. El acceso a los estudios suele ser meritocrtico, aunquetiende a seguir la estratificacin de la sociedad, puesto que los centros uni-versitarios suelen estar ubicados en las zonas ms urbanas, y lo prolongadode los estudios impide su realizacin a los ms desfavorecidos. Dado quelos profesionales en ejercicio slo adquieren conocimiento experimental, seorganiza un sistema de educacin permanente que incluye publicaciones,conferencias y reuniones.

    Dado que los mercados profesionales son rara vez monopolios natura-les resulta necesario crear las condiciones de exclusividad en la prestacinde servicios. No es ninguna coincidencia que el capitalismo corporativo ylas profesiones se desarrollasen y consolidasen en el mismo perodo histri-

    8 Un rasgo crucial de las profesiones es que son una forma de ganarse la vida. Curiosa-

    mente, el profesional no recibe un precio por sus servicios, sino una minuta u honorarios.Una prctica profesional tpica es prestar servicios gratuitos a otros miembros de la profe-sin como parte de la cortesa profesional. Una interpretacin alternativa son los incentivosque resultan de la imposicin tributaria sobre los servicios profesionales.

    9 Esta seleccin puede realizarse de varias formas; las ms comunes son fijando honora-

    rios o precios elevados, o bien estableciendo horarios restringidos y concentrados en la jor-nada laboral normal.

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    co (Larson, 1977; Velarde Fuertes, 1986). Los mercados profesionales sereservan para los miembros de la profesin mediante mecanismos de li-cencia, para los que la colaboracin del estado es esencial. En este puntocomo en el control sobre la educacin las asociaciones profesionalesjuegan un papel esencial, dado que para lograr presionar con efectividad serequiere un grado elevado de cohesin y unidad en la profesin. Los colegiosprofesionales cumplen esa funcin manteniendo lazos dbiles con otras ins-tituciones polticas o econmicas10.

    Las asociaciones o colegios profesionales no solamente controlan lacantidad de profesionales, sino tambin su calidad. Todo profesional acre-ditado tiene que ejercer de acuerdo con el cdigo de tica de la profesin.Cualquier falta a este requisito supone el retiro de la licencia para ejercer.As, el control social del profesional se realiza a travs del perodo de edu-cacin universitaria (donde se reciben unas destrezas tcnicas, y se enseael compromiso vocacional) y mediante el sistema de licencia o colegiatura.Las asociaciones o colegios garantizan la homogeneidad y uniformidadentre los miembros de una profesin y recalcan la heterogeneidad con otrasprofesiones u ocupaciones11.

    Las profesiones liberales o de mercado son ocupaciones tcnicas, a tiem-po completo que tienen un ideal de servicio a la sociedad. Idealmente, todoprofesional ha de contribuir a la acumulacin de conocimiento profesionaly al entusiasmo social por la porfesin. Pero los profesionales tambin tien-den a buscar la autoridad y autonoma en su trabajo, y a incrementar elpoder y la riqueza de la profesin. El sustrato de toda profesin es la pose-sin de un conocimiento tcnico de moderada especializacin, cuyo funda-mento terico y vocacional se adquiere durante un perodo de educacinuniversitaria. Las profesiones se caracterizan por disponer de mercadosmonopolistas gracias a la regulacin estatal. Su poder de negociacin y pre-sin se deriva de la organizacin corporativa de sus intereses en asociacio-nes o colegios profesionales, que determinan tanto la cantidad como la cali-dad de los profesionales.

    10 Las asociaciones profesionales comenzaron a aparecer en Europa y Amrica a princi-

    pios del siglo XIX, y se generalizaron en el perodo 1880-1920. Las profesiones con unaorganizacin colegial ms poderosa con los mdicos, farmacuticos, veterinarios, abogados eingenieros. Otras profesiones, como los economistas, psiclogos, socilogos o los licencia-dos de ciencias y letras, no han conseguido, sin embargo, consolidar el poder institucionalde sus respectivos colegios. Guillen (1987) es un estudio de la consolidacin de la profesinde economista en Espaa. Vase De Miguel y Diez Nicols (1985), para una historia de laactividad colegial de los mdicos.

    11 El Nobel de Economa Kenneth J. Arrow (1974: 36-37) argumenta que los cdigos

    de tica profesional sirven para controlar la prctica profesional en las situaciones de mono-polio en las que el mecanismo competitivo del precio no funciona. El primer cdigo de ti-ca profesional conocido es el juramento de Hipcrates (arca 460-drca 377 a. C),por el que los mdicos griegos se comprometan con el bienestar del paciente, el arte de lamedicina y el ideal de servicio a algo cercano a lo divino (Moline, 1986: 506-507; Jones,1923).

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    Este modelo de profesional de mercado ha coexistido, sin embargo,con los profesionales organizativos desde el comienzo de la burocratizacinde las organizaciones industriales y gubernamentales a finales del siglo XIXy principios del XX (Hall, 1968; Elliott, 1972; Chandler, 1977; Vogcl,1980; Aldrich y Mueller, 1982; Perrow, 1986). El siguiente apartado repasalos rasgos distintivos de las profesiones organizativas a partir de las teorasde desprofesionalizacin y de proletarizacin. Podemos anticipar aqu quelos dos pilares sobre los que se sustenta el modelo de profesional organi-zativo son el conocimiento y las credenciales (o licencias) profesionales.A pesar de que la relacin fiduciaria y personal con el cliente se ha conver-tido ahora en un rol ocupativo dentro de la jerarqua administrativa de unaorganizacin, los profesionales que trabajan en organizaciones complejasgozan de autonoma en su trabajo y conservan una importante base depoder.

    DESPROFESIONALIZACIN Y PROLETARIZACINLas dcadas de los sesenta y los setenta representan aos de cambio

    social y poltico en los pases occidentales. Un nuevo modelo cultural nace,incentivando un mayor grado de participacin poltica de ciertos colectivoscomo los consumidores, mujeres, jvenes y los grupos comunitarios. Esosacontecimientos son, para socilogos como Haug (1969, 1973, 1975), ilus-trativos de que el pblico ya no est dispuesto a aceptar la autoridad basadaen el conocimiento, sino que desea ejercer un mayor grado de controlsobre las profesiones. La tendencia general hacia la escolarizacin universaly la mejora de los niveles educativos se interpreta por los tericos de ladesprofesionalizacin como un fenmeno de reduccin de la diferencia deconocimiento entre el profesional y el cliente. Como apunta Freidson(1986), la hiptesis de desprofesionalizacin enunciada por Haug es denaturaleza poltico-cultural12.

    Haug (1975) postula que el conocimiento profesional pierde importan-cia relativa a medida que se eleva el nivel educativo de la poblacin; la gen-te est ahora en una posicin ms favorable para poder entender y usarciertas reas del conocimiento tcnico aplicado13. Adems, ciertas profe-

    12 Este tipo de interpretaciones ha hecho fortuna entre algunos economistas como

    Thurow (1980), quien seala la importancia de los movimientos de derechos civiles, libera-cin de la mujer y liberacin de los negros en la nueva dinmica de la distribucin de la ren-ta en Estados Unidos. Segn Thurow, esos grupos no estn dispuestos a aceptar prdidas debienestar sin luchar polticamente por evitarlo.

    13 Pinsese, por ejemplo, en la aparicin de las guas, manuales y enciclopedias de la

    salud. Esta tendencia no slo afecta a la medicina, sino tambin a otras profesiones como losabogados, los economistas y ciertas semiprofesiones manuales. La aparicin de la tcnica deventa a domicilio, por correo, por telfono o por fascculos ha favorecido extraordinaria-mente el acceso del pblico a ciertos conocimientos tcnicos aplicados antes inalcanzables.

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    siones subordinadas estn discutiendo la exclusividad de ciertos monopo-lios de conocimiento14. Una segunda fuente de erosin del conocimientoprofesional se debe a que ste tiende a convertirse en conocimiento rutina-rio y experimental, haciendo rentable su codificacin e introduccin en sis-temas de almacenamiento y tratamiento de informacin. Los computadoreshan facilitado la gestin de cierta informacin profesional como preceden-tes legales, diseos tcnicos, diagnsticos mdicos e historias clnicas,permitiendo un mayor acceso del pblico al conocimiento profesional ruti-nario15. De ese modo, aquellas profesiones con una base de conocimientoms fcilmente codificable estn sujetas a una desprofesionalizacin msrpida e inmediata. Usando los trminos de Wilensky (1964), el conoci-miento que es bien demasiado amplio y vago, o bien demasiado restringidoy definido no permite mantener monopolios profesionales prolongados;por el contrario, el conocimiento tcito y experimental protege al profe-sional. Con la proliferacin de los computadores Haug predice tambin elfin de los monopolios profesionales basados en el conocimiento experi-mental16.

    La hiptesis de desprofesionalizacin puede resumirse del modosiguiente: el monopolio profesional del conocimiento se est erosionando acausa de la mejora del nivel educativo de la poblacin, la divisin del traba-jo profesional (especializacin), la aspiracin de los consumidores de con-

    14 Etzoni (1969) utiliza el trmino semiprofesin para referirse, entre otras, a profe-

    siones predominantemente femeninas como la enfermera, archivos y bibliotecas y magiste-rio. Una semiprofesin es una ocupacin que no ha completado todos los pasos o estadiosdel proceso de profesionalizacin, tal y como lo define Wilensky (1964). Al contrario queocurre con las profesiones establecidas, la base de conocimiento de los semiprofesionales esrestringida, su autonoma es menor, estn sujetos a la supervisin de otros miembros de lasemiprofesin o de una profesin superior (caso de las enfermeras respecto de los mdicos),y sus destrezas tcnicas y rasgos de personalidad son compatibles con las estructuras admi-nistrativas de las organizaciones complejas. Como consecuencia, el status social y los privile-gios son menores que para las profesiones. La enfermera es la semiprofesin mejor estudia-da, desde el libro seminal de Nightingale (1970) publicado originalmente en 1859. Entre losestudios ms recientes se ,encuentran los de Chaska (1978) y Wagner (1980); en Espaadestacan los de Domnguez-Alcn et al. (1983), Domnguez-Alcn (1979; 1981; 1982) yMartn Barroso (1978).

    15 Haug (1977) considera los casos de la abogaca y la medicina, donde la informacin

    retrospectiva sobre el cliente o sobre clientes similares sirve para calcular la probabilidadrelativa de diversos resultados segn las diversas acciones que se pueden tomar. No debeolvidarse que los directivos de los hospitales podrn ejercer un control de rendimientosobre el personal mdico slo si existen historias clnicas detalladas. Esa es la razn por laque en algunos casos los sistemas de informacin computerizados han sido saboteados en loshospitales. Algunos estudios (Antley y Antley, 1973) postulan que las profesiones cuyosprogramas de enseanza recalcan los contenidos memorsticos y carecen de una integracinterica de los conocimientos son ms susceptibles de ser computerizados. Dos casos protot-picos de carreras universitarias con elevado contenido memorstico son Medicina y Derecho.

    16 El refranero espaol ya recoge la prescripcin de Wilensky al apuntar que quien

    mucho abarca, poco aprieta. La abogaca, la medicina y, hasta cierto punto, la ingeniera seconsideran como profesiones en las que el conocimiento experimental (o adquirido a travsde la experiencia) juega un papel central en el ejercicio liberal de la profesin.

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    trolar a los profesionales y de alcanzar la justicia ocupativa, la agregacinde clientes en entornos burocrticos y el uso de computadores. A conse-cuencia, los profesionales pierden poder, autonoma y autoridad.

    Esa conclusin terica no ha encontrado, sin embargo, ningn funda-mento emprico. La convergencia entre el nivel de conocimiento de losprofesionales y del pblico en general no est causando una falta de con-fianza importante por parte del consumidor. Los computadores no parecenser tan tiles como sostienen los tericos de la desprofesionalizacin, pues-to que clientes tan poderosos como las grandes empresas o el gobiernotodava prefieren contratar o alquilar los servicios de profesionales paraabordar reas problemticas como los asuntos legales o la salud de losempleados. Freidson (1986) apunta con acierto que la tesis de Haug partedel supuesto de que los fenmenos poltico-culturales de los aos sesentapersisten durante los setenta y ochenta; de hecho, los grupos comunitariosy las asociaciones de consumidores no son tan activos ya como hace treslustros17.

    Un segundo grupo de teoras que predice el fin de las profesiones sonlas agrupadas genricamente bajo la rbrica de hiptesis de proletarizacin.En este caso, se postula que el proceso de cambio ocupativo desde elempleo por cuenta propia hacia el empleo asalariado incide directamentesobre la naturaleza del profesional. El proceso de asalarizacin ha afectadoa todas las profesiones desde comienzos del presente siglo y en particular alas profesiones sanitarias.

    El concepto marxiano de proletarizacin (Braverman, 1974) no esdirectamente aplicable a ese proceso de cambio ocupativo de los profesio-nales. Derber (1983z) denomina el concepto marxiano, proletarizacin tc-nica, segn la cual el trabajador pierde el control sobre el proceso y elproducto de su trabajo. Los profesionales asalariados se enfrentan, por elcontrario, a un proceso de proletarizacin ideolgica, que significa la expro-piacin de valores o del propsito del trabajo. Esa expropiacin tiene suorigen en la prdida de control sobre el producto del trabajo (el clientesatisfecho) y de la relacin con la comunidad.

    La proletarizacin se considera como el ltimo paso del proceso deburocratizacin, que implica la prdida de control y la subordinacin a los

    17 Conviene recordar que los profesionales tienen en su poder ciertos instrumentos

    para contrarrestar los efectos adversos del mayor nivel educativo de la poblacin. Una tc-nica frecuente es complicar el lenguaje (la jerga profesional) dificultando la comprensin deconceptos y procesos sencillos. Arney (1982) muestra cmo los especialistas en obstetriciacambiaron ciertas prcticas profesionales a travs de una mayor especializacin a medida quelas mujeres americanas en edad de procrear gozaban de un nivel educativo superior, mante-niendo as su monopolio de conocimiento. Otra artimaa comn consiste en introducirtecnologas complejas cuyo impacto marginal sobre la calidad o efectividad de los serviciosdel profesional es dudosa, pero que permiten mantener o expandir la exclusividad sobre unrea del conocimiento aplicado. Vase Hofoss (1986) para una discusin del impacto de latecnologa biomdica sobre la especializacin de las profesiones sanitarias.

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    requerimientos superiores de la produccin en el capitalismo avanzado(McKinlay y Arches, 1985). Existen algunos factores que incentivan laburocratizacin de los profesionales, como por ejemplo el aumento de loscostes derivados de las malas prcticas (errores profesionales), el exceso deoferta de profesionales, la enseanza de la profesin recalcando la tecnolo-ga y la especializacin del conocimiento. Todos estos procesos favorecenque los profesionales trabajen en organizaciones como asalariados y no enconsultas o despachos privados18. Larson (1977) postula" que la expansindel aparato burocrtico del estado (sanidad, educacin, administracin) esel factor ms importante en la burocratizacin de los profesionales.

    Tanto la hiptesis de desprofesionalizacin como la discusin de si laburocratizacin o asalarizacin conduce a la proletarizacin de los profesio-nales raramente ha alcanzado la arena de la contrastacin emprica, perma-neciendo en los terrenos de la teora. El programa de investigacin sobre eldeclive de las profesiones es un campo en el que la especulacin terica hareemplazado al anlisis cuidadoso de la realidad. Entre las excepciones estnlos trabajos de Hall (1968) y de Derber, ed. (1983), quien realiz un estu-dio de 733 profesionales (todos varones) en Boston (Estados Unidos). Sedise un cuestionario para medir ciertos parmetros de profesionalizacintales como la autonoma, autoridad, satisfaccin en el trabajo, fuentes deestrs e identificacin con los objetivos de la organizacin para la que setrabaja y de la direccin (los managers).

    Los hallazgos de Derber en cuanto a la autonoma en el trabajo muestranque los profesionales organizativos o asalariados sienten que mantienen unalto grado de control sobre la seleccin de casos o clientes, horas y ritmode trabajo, y tcnicas y procedimientos empleados. Pero ese sentimiento deautonoma variaba en intensidad segn el grupo profesional considerado.Los mdicos y abogados trabajando en empresas privadas eran los menossatisfechos con sus niveles de autonoma, mientras que todos los profesio-nales asalariados de organizaciones acadmicas (universidades, hospitales deenseanza) decan disfrutar de un grado elevado de autonoma. En general,la administracin pblica y las grandes empresas son las organizaciones queerosionan ms la autonoma profesional. As, pues, el estudio de profesio-nales de Boston no pudo detectar prdidas importantes de autonoma en eltrabajo, ni tampoco prdida de autoridad. Los profesionales estudiadosparecan gozar de una discrecin elevada en la asignacin de tareas y laespecificacin de las estrategias tcnicas para los oficinistas, administrati-

    18 Vase Freidson (1980) para una elaboracin extensa de estas tesis. Hofoss (1986)

    argumenta que la especializacin y descualificacin profesionales es el resultado de tres pro-cesos separables: 1) incremento de la demanda de servicios profesionales; 2) avance tecnol-gico y 3) expansin del conocimiento que sirve como base al ejercicio de la profesin.McKinlay y Arches (1985) sostienen que la proletarizacin de los mdicos tiene dosorgenes, a saber, el intento de los managers de los hospitales de subdividir el trabajo mdi-co en componentes susceptibles de control y la poltica de contencin de costes aumentandoel nmero de personal sanitario no-mdico (enfermeras).

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    vos, trabajadores de apoyo y semiprofesionales a su cargo. Los profesiona-les asalariados s que pierden dos prerrogativas importantes: la evaluacindel trabajo y del rendimiento, y el nmero de tareas a realizar y el ritmo detrabajo. La direccin de las organizaciones para las que trabajan es la que hainvadido esas reas de control profesional para menoscabar el poder admi-nistrativo de los profesionales. Las conclusiones generales de estudios comoel de Derber apuntan hacia el hecho emprico de que la proletarizacin delos profesionales no es una consecuencia necesaria de la burocratizacin oasalarizacin.

    CONOCIMIENTO Y PODER

    Las teoras de desprofesionalizacin y de proletarizacin han represen-tado amenazas desiguales para el paradigma de profesional liberal o de mer-cado. Mientras la primera ha sido pronto olvidada, la segunda ha provoca-do una riada de rplicas. Como apunta Larson (1977), algunos profesiona-les han sido siempre profesionales asalariados. Los profesionales ocupadospor cuenta propia han sido la excepcin ms que la norma. Solamente laabogaca y la medicina fueron primero profesiones estamentales y luegoprofesiones liberales o de mercado, para comenzar a ser ms tarde profesio-nes asalariadas.

    Algunos autores argumentan que las profesiones encuentran su expre-sin ms completa y genuina al trabajar en organizaciones (Mintzberg,1987; Perrow, 1986; Freidson, 1986). Las empresas o el Estado contrata aprofesionales para realizar cierto tipo de trabajos caracterizados por un ele-vado nmero de casos excepcionales y por un modo relativamente noestructurado de buscar una solucin para las excepciones. La discrecin es,pues, alta en estas ocupaciones reservadas para los profesionales, y es porello que las organizaciones que poseen muchos de esos puestos desarrollanestructuras orgnicas, flexibles y policntricas para conseguir la coordina-cin de los distintos individuos (profesionales) y unidades19. Perrow(1986) sostiene que la cuestin no estriba en el hecho de si el profesionales asalariado o no, sino ms bien en su poder discrecional. Las organizacio-nes disponen de dos vas para evitar que sus empleados disfruten de dema-siada discrecin a la hora de realizar su trabajo: desarrollar lealtad o pro-

    19 Se sigue que un medio alternativo de coordinacin es la identificacin de objetivos,

    esto es, el desarrollo entre los miembros de compromiso para con la misin organizativa(Campa y Guillen, 1988). Como apunta Perrow (1967), las organizaciones que cuentan conun nmero elevado de profesionales tienden a recalcar la calidad del producto, el crecimien-to organizativo y la innovacin a expensas de los objetivos de maximizacin del beneficio yde la eficiencia. El contrapunto a esa postura es Guy (1985), quien estudi la homogeneidadde los valores profesionales en dos hospitales psiquitricos. Sus hallazgos apoyan el punto devista de que dirigir una organizacin en la que trabajan muchos profesionales es similar adirigir otra con pocos.

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    fesionalizar. Ambas hacen a las personas ms predecibles en su compor-tamiento. Los profesionales se ajustan a las burocracias porque dada suformacin vocacional tienen reglas y normas de comportamiento adquiri-das. De ese modo, el resultado de una tarea que es en principio discrecionalpuede anticiparse por la direccin sobre la base del comportamiento espe-rable segn las normas profesionales. Segn Mintzberg (1987), las burocra-cias profesionales consiguen la coordinacin a travs de la estandarizacinde las destrezas tcnicas de los profesionales, que a su -vez se alcanza tras elperodo de formacin universitaria. Segn Freidson (1986), el nico casoen el que burocracia y profesiones pueden entrar en conflicto es en elmodelo puro de burocracia racional-legal de Weber20.

    Otra dificultad en la co'ntrastacin emprica de la validez de la teora deproletarizacin radica en que las organizaciones en donde trabajan los pro-fesionales varan en cuanto a su naturaleza. Hall (1968) propone la distin-cin entre organizaciones autnomas, heternomas y departamentos profe-sionales. Una organizacin es autnoma si est compuesta nicamente porprofesionales, los cuales forman la jerarqua administrativa de acuerdo consu conocimiento. Los despachos o consultoras de abogados y economistasy las clnicas mdicas privadas son ejemplos tpicos. Las organizaciones hete-rnomas difieren del tipo anterior en que los profesionales que trabajan enellas estn sujetos a una jerarqua administrativa externa no-profesional.Una escuela pblica o las sucursales de un banco o de una firma de consul-tora son ejemplos de organizaciones heternomas. En el tercer tipo, losdepartamentos profesionales dentro de organizaciones ms grandes, no esposible determinar a priori si los profesionales ejercen control sobre su tra-bajo o no. Los hallazgos de Hall se pueden resumir en que las organizacio-nes heternomas y los departamentos profesionales estn sujetos en mayormedida que las organizaciones autnomas a los requerimientos de las buro-cracias: formalizacin, centralizacin, eficiencia y economas de escala. As,los profesionales que trabajan en organizaciones estn expuestos a gradosdiferentes de burocratizacin segn el tipo de entorno organizativo. SegnHall, el conflicto organizacin-profesional, o jerarqua administrativa-jerar-qua del conocimiento, aparece solamente cuando se introducen prcticasprofesionales contrarias a las jerarquas administrativas. Las teoras deproletarizacin son aplicables, pues, a ciertos tipos de organizaciones; en elcaso de las organizaciones autnomas es improbable que los profesionalessufran una verdadera proletarizacin.

    La crtica ms articulada de las teoras de proletarizacin es la de Freid-son (1978, 1980, 1983, 1984) y especialmente en su magnun opus sobre el

    20 Perrow utiliza la metfora forrar el nido (feathering the nest) para describir el fen-

    meno consistente en el uso personal de ciertos recursos de la organizacin por parte de losempleados. Los profesionales asalariados estn en una posicin muy favorable para podersacar ventaja de esos recursos, de modo anlogo a lo que hacen los profesionales liberalescon sus monopolios de mercado.

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    poder de las profesiones (1986). Los profesionales que trabajan en organi-zaciones no pueden ser considerados como proletarios, segn Freidson,dado que perciben salarios elevados y mantienen un grado de control altosobre las cualificaciones de acceso a la profesin, y comparten un conjuntode valores adquiridos durante un perodo de formacin universitaria decariz tcnico y vocacional, que les rinde una posicin privilegiada de nego-ciacin dentro del sistema de relaciones industriales. Esa puede ser la raznpor la que a los profesionales no les gusta el sindicalismo, sino que prefie-ren asociarse en forma de agrupaciones o colegios profesionales (Derber,ed., 1983). Freidson apoya su argumento en que cada vez los perodos deformacin son ms prolongados y las profesiones se convierten en ocupa-ciones ms prestigiosas (1973: 19-37). La cuestin de la autonoma profe-sional puede ser contemplada desde la perspectiva de la relacin fiduciariacon el cliente; pero si se estudia la autonoma como un producto de lanaturaleza del trabajo, los profesionales conservan el control de sus tareas ydel producto de sus actividades incluso trabajando para organizaciones.

    La controversia en torno al conflicto entre jerarquas administrativas yprofesionales (entre autoridad formal y autoridad del conocimiento) no esoriginal de las teoras de proletarizacin de los setenta y los ochenta, sinoque data de las primeras dcadas del presente siglo y se hizo famosa conParsons (1947; Perrow, 1986: 43). Los profesionales han sido capaces desacar partido de las burocracias en las que trabajan controlando el ncleode operaciones de las mismas (Bucher y Stelling, 1969; Mintzberg, 1987),manteniendo relaciones personales con los clientes e interviniendo entareas directivas21. En algunos casos como la medicina los profesiona-les prefieren perder parte de su autonoma como profesionales liberalespor el prestigio, la seguridad y los privilegios que reporta la pertenencia aciertas organizaciones22.

    El campo de la sociologa aplicada que estudia las profesiones parecehaberse concentrado en proponer teoras sin preocuparse por su contrasta-cin emprica. Mientras la teora de desprofesionalizacin ha sido rechazadacon facilidad tras la evolucin de los acontecimientos poltico-culturales de

    21 Los profesionales han dispuesto de autoridad administrativa sobre otros trabajadores

    y sobre las semiprofesiones (Freidson, 1986). Vase Etzioni, ed. (1969), para una discusindetallada de las caractersticas de la enfermera como semiprofesin subordinada a los mdi-cos. Las relaciones personales con los clientes proporcionan a los profesionales que trabajanen organizaciones el llamado efecto del portero (Perrow, 1986; Freidson, 1986). Otro ins-trumento efectivo para ciertos profesionales como los mdicos es su capacidad para manipu-lar la demanda de servicios profesionales de acuerdo con las circunstancias. Reinhardt(1985) y Stano (1987) son un resumen de la controversia dentro de la economa de la saludsobre la capacidad de creacin o induccin de demanda por parte de los mdicos.

    22 El caso de la medicina es prototpico: un mdico suele tener ms prestigio profesio-

    nal (aunque quiz menos renta) si trabaja en un departamento o servicio hospitalario, o biensi ensea en la universidad. De ese modo, el prestigio y el poder personal del profesional (ytambin de la profesin) depende del poder y el prestigio de la organizacin a la que se per-tenezca (hospital, facultad, clnica, etc.).

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    los aos sesenta, la teora de proletarizacin amenaza todava con desbancaral paradigma de profesional liberal o de mercado del lugar preminente queha ocupado en la sociologa anglosajona y europea desde principios desiglo. El surgimiento de profesiones organizativas ha dado lugar al naci-miento de interpretaciones que hacen compatibles las jerarquas adminis-trativas con las jerarquas del conocimiento, recalcando que los profesiona-les estn en una posicin favorable para sacar ventaja de las organizacionesen las que trabajan. La posesin de un conocimiento tcnico y de una aso-ciacin o colegio profesional fuerte son factores que explican el enormepoder de los profesionales asalariados en el seno de las organizaciones queles contratan, limitando la prdida de autoridad y autonoma. La categorasociolgica de profesional parece mantener su relevancia y significado a pesardel ya largo proceso de asalarizacin o burocratizacin de ciertas profesio-nes. Los profesionales organizativos an mantienen un monopolio delconocimiento aplicado que les reserva una parcela de la divisin social deltrabajo, permitindoles controlar el contenido y el producto de su trabajo.

    CONCLUSIONES Y PROPUESTA METODOLGICAUna interpretacin sociolgica de las profesiones en el mundo contem-

    porneo no puede, por tanto, abstraerse de la existencia de organizacionescomplejas caracterizadas por su burocratizacin, formalizacin y diferencia-cin externa e interna. Un primer reto para la sociologa de las organiza-ciones consiste, por tanto, en ampliar su concepto de profesional y de pro-fesin para incluir a personas que aplican un conocimiento formal pero queno operan por cuenta propia. En segundo lugar, las profesiones y semipro-fesiones ocupan ya una cuarta parte de la poblacin activa. Sectores comola educacin, la sanidad, los servicios a las empresas y la administracinpblica se encuentran cada vez ms dominados numrica y cualitativamentepor personas con .cualificaciones profesionales. La proliferacin de gruposprofesionales invita a la sociologa a abordar su anlisis desde un punto devista sistmico y ecolgico, es decir, teniendo en cuenta las luchas por contro-lar parcelas de actuacin, por obtener legislaciones favorables, por suscitarel apoyo de la opinin pblica y por asegurarse la acumulacin de un cono-cimiento formal abstracto que sirva de base para la consolidacin y creci-miento futuros de la profesin. En el mundo actual no se puede hablar yade profesiones siguiendo la tradicin liberal, sino de un sistema de profesiones(Abbott, 1988) en el que se encuadra todo un conjunto de profesiones y^/^-profesiones.

    La sociologa de las profesiones debe adoptar no solamente una pers-pectiva sistmica y ecolgica sino tambin concentrar esfuerzos crecientesen el anlisis histrico-comparativo de los grupos profesionales. El estudiode la institucionalizacin de la enseanza de la profesin, del surgimiento

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    de las asociaciones profesionales, de las condiciones que fomentan el flore-cimiento de una profesin determinada y no de otra, y de las lites profe-sionales en distintos pases y perodos histricos ha de entrar a formar par-te de una agenda integrada de investigacin sociolgica en el campo de lasprofesiones.

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