Critica Volver Al Futuro.
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Transcript of Critica Volver Al Futuro.
Alumno: López López
Rafael Oliver.
Tarea No.8: Ensayo
periodístico.
Fecha de Entrega: Viernes 30 de octubre del
2015.
Entre líneas de tiempo
Título: Back to the futureReparto: Michael J. Fox, Christopher Lloyd, Lea Thompson, Crispin Glover. Director: Robert Zerneckis. Año de estreno: 1985.
De entre todos los productos cinematográficos estadounidenses
destinados al éxito, Volver al futuro es uno de los más ingeniosos y
distinguidos. Es un filme que juega con imaginación ese enorme
almacén de ficciones y hallazgos narrativos que es el cine clásico de
Hollywood, ese cine al que Steven Spielberg ––no en vano productor de
esta película–– trata de dar continuidad a través de las más o menos
andanzas al estilo de Indiana Jones.
Pero, el principal atractivo del filme de Zemeckis estriba en que
trasciende de la cinta estricta, la maña copista o de cinéfilo aplicado
que desempolva fórmulas para experimentarlas de nuevo con decorados
relucientes. Volver al futuro es un trabajo irónico que aborda con
humor la crónica del pasado y la culmina con una pirueta cínica que
permite reescribir la historia, dotarla de un final feliz aunque sea a
costa de convertir al chico (Marty Mcfly) en un bombero del tiempo,
apagafuegos de catástrofes familiares pasadas, presentes o por venir.
El protagonista de Volver al futuro, Marty McFly, un estudiante
interpretado por Michael J.Fox es un muchacho que siempre llega tarde
a todas partes y que se lamenta continuamente del fracaso profesional y
sentimental de sus padres. El azar hará que un amigo suyo, considerado
por todos como un científico loco, invente una máquina que permite
viajar a través del tiempo y que ésta misma le envíe 30 años atrás
cuando él aún no había nacido y sus progenitores, de los que tanto se
lamenta ahora, estaban solteros.
Y, a partir de ahí ––y siempre en clave de comedia–– se mostrará al
héroe como un personaje con conciencia de un futuro que no provoca
entusiasmo,, en cierta manera símbolo del pensamiento contemporáneo
y su miedo a la utopía, de las poderosas razones, que asisten a quienes
se empeñan en emular a Peter Pan.
Las secuencias finales son un homenaje explícito al más famosos de los
filmes de Harold Lloyd ––gran comediante estadounidense––, y si
asistimos a la invención del mono patín y el rock and roll es en medio
de un clima que recuerda el de las primeras cintas juveniles, sólo que
vistas desde una distancia burlona. Tampoco la caracterización de
Christopher Lloyd como profesor chiflado o la elección de un coche De
Lorean como vehículo que atraviesa la barrera del tiempos son
inocentes.
El guión tarda un poco en entrelazar todos los hilos que ha ido
teniendo, pero entretiene la espera con una pequeña cosecha de buenos
gags, y los actores resultan formidables, tanto los que actúan dentro de
las convenciones más estrictas de la comedia como los que están
decantados abiertamente hacia la parodia. El resultado es un producto
bien acabado, que satisface los objetivos para los que estaba
programado y que, a pesar de narrar los conflictos de quien vive,
siempre a destiempo llega muy oportunamente reconciliando
generaciones e ideales gracias a una pintoresca utilización en clave del
Edipo freudiano.