Conclusiones V Congreso Nacional de Estudiantes Universitarios

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ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS

ACEU

V CONGRESO NACIONAL DE ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS.

CONCLUSIONES

POPAYAN (CAUCA) 21, 22 Y 23 DE SEPTIEMBRE DE 2012.


TABLA DE CONTENIDO

1. INTRODUCCIÓN........................................................................... 3

2. DECLARACIÓN POLÍTICA ......................................................... 3

3. DECLARACIÓN POLÍTICA INTERNACIONAL ........................ 5

4. ESBOZOS PARA LA CONSTRUCCIÓN DE UN PROGRAMA, UNA PLATAFORMA Y UN PLIEGO NACIONAL DE LOS ESTUDIANTES ..........................................7

4.1 El Programa Mínimo en cuanto a su contenido ..........9 4.2 Propuesta ...............................................................................9

5. TÁCTICA Y ESTRATEGIA DEL MOVIMIENTO

ESTUDIANTIL PARA EL NUEVO MOMENTO ........................10 6. PERSPECTIVAS UNITARIAS Y FORMAS DE

ORGANIZACIÓN DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL UNIVERSITARIO ...........................................................................13

7. MOVIMIENTO UNIVERSITARIO Y MOVIMIENTO SOCIAL Y

POPULAR .......................................................................................14


1. INTRODUCCIÓN

A continuación presentamos las conclusiones de las discusiones abordadas por los delegados y delegadas de las diferentes universidades públicas y privadas del país, representantes de organizaciones de trabajadores y profesores universitarios, organizaciones sociales e invitados internacionales, que asistieron al V Congreso Nacional de Estudiantes Universitarios, realizado en la ciudad de Popayán, en las instalaciones de la Universidad del Cauca, los días 21, 22 y 23 de septiembre de 2012. El presente documento contiene la síntesis de las importantes deliberaciones desarrolladas en las cuatro comisiones de trabajo que sesionaron durante el V Congreso, a saber: 1. Perspectivas unitarias y formas de organización del movimiento estudiantil universitario; 2. Movimiento universitario y movimiento popular; 3. Táctica y estrategia del movimiento estudiantil para afrontar el nuevo momento; 4. Esbozos para la construcción de programa, plataforma y un pliego nacional de los estudiantes. Dichas conclusiones pretenden ser un significativo insumo para los debates, la construcción y el desarrollo de la Asociación Colombiana de Estudiantes Universitarios, ACEU, y el movimiento estudiantil en cada una de las regiones y universidades del país; reafirmando con ello, el profundo espíritu deliberativo, unitario y de lucha que ha caracterizado la historia de estos escenarios de construcción colectiva del estudiantado colombiano desde hace más de catorce años. Por último, se incluye la declaración política y la declaración internacional del V Congreso, documentos estos que expresan las principales definiciones emanadas de este escenario y que se constituyen en importantes herramientas orientadoras del accionar político durante este periodo, siendo una tarea inaplazable que estas sean difundidas y conocidas por el grueso del movimiento universitario.

2. DECLARACIÓN POLÍTICA

¡POR UNA NUEVA EDUCACIÒN, UNIDAD, LUCHA Y MOVILIZAC IÒN! DECLARACIÓN POLÍTICA

V CONGRESO NACIONAL DE ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS El neoliberalismo imperante ha convertido en mercancías aquellos bienes y servicios necesarios para la vida individual y colectiva. La educación superior, que amerita cada día más el calificativo de indispensable y constituye un derecho fundamental reconocido por la constitución colombiana, no escapa a este tratamiento mercantil bajo el gobierno de Juan Manuel Santos con el beneplácito de los negociantes que buscan su lucro a partir de las necesidades humanas y sociales.


El tratamiento no sólo es fruto de la inventiva nacional. Se trata de una concepción incubada por aquellos acumuladores trasnacionales y nacionales de capital que, ante la disminución del ritmo real de creación mundial de riqueza, buscan nuevas fuentes de lucro entre aquellos bienes y servicios de consumo necesario para la población. La garantía de un mercado libre sin distorsiones exige la eliminación de los “subsidios” a la oferta, léase financiación estatal a la universidad pública; por eso se plantea desde las esferas oficiales la reducción paulatina de los aportes gubernamentales, que deberán ceder paso al cobro de la mercancía en su valor real y a la búsqueda, en las instituciones estatales, de fuentes alternas de financiación. Esta situación contrasta con las recientes inversiones en la guerra y la reestructuración de las Fuerzas Armadas, como una política de profundización del militarismo. En este contexto de altísima confrontación armada, en la cual el departamento del Cauca que nos acogió como sede de este Congreso es uno de los más fuertes escenarios de la misma, se abre nuevamente la esperanza a través de los diálogos por el fin del conflicto, como un primer paso del tránsito hacia la paz en nuestro país. Es una necesidad imperante para este proceso que todos los sectores se pronuncien sobre el tema y planteen sus iniciativas para alcanzar la anhelada paz con justicia social. Las propuestas y perspectivas planteadas en el transcurso de este Congreso son insumos para la construcción de una agenda de paz desde el movimiento social y popular; el movimiento estudiantil debe discutir este importante tema, plantear alternativas y expresar aquellas exigencias desde nuestro estamento necesarias para conquistar la paz, entre ellas la garantía de la educación como derecho fundamental y bien común y las demás que ataquen desde lo sectorial las causas estructurales del conflicto político, social y armado que vive nuestro país. Hacemos un llamado a todo el estudiantado colombiano a vincularse a la lucha por la paz, a participar en las diversas agendas que sobre este tema se construyan en el movimiento social y popular, mostrando su respaldo en las calles este 8 de octubre, día histórico en el que se reabren las puertas a la solución política. Es aquí donde la movilización adquiere una importancia central para el estudiantado colombiano. Potenciar la agenda nacional definida por la MANE es un compromiso ineludible, reafirmamos la importancia de participar de las marchas del 4 y 12 de octubre en el marco de la semana de la indignación y que este sea el primer paso hacia la profundización de la articulación con el movimiento social y popular, a partir de la construcción conjunta de las agendas de lucha. Así mismo convocamos al grueso del estudiantado a sumarse a la movilización del 17 de octubre, lanzamiento del borrador de articulado de Ley de los estudiantes, y las demás definidas por la Mesa Amplia para este segundo semestre de 2012.


Exhortamos a continuar y fortalecer los procesos de construcción de pliegos locales, de discusión de las exigencias nacionales a presentar al gobierno nacional, a generar todo tipo de iniciativas de movilización en todas las Universidades del país (pupitrazos, paros escalonados, asambleas, estrategias comunicativas y artísticas, entre otras) en aras de aumentar la presión política necesaria para ganar las reivindicaciones que se exijan en el orden nacional y local. Ponemos a disposición de la MANE y el movimiento nacional universitario, los insumos que deja este Congreso en materia de construcción de articulado de Ley Alternativa. Insistimos en crear cada vez más espacios en los que se armonicen y acerquen las diferentes propuestas que en este momento existen o se están construyendo, de forma tal que todos los estamentos y cada vez más sectores caminemos juntos en la lucha por sacar avante la Nueva Ley de Educación Superior, ya que la sólo unificando apuestas con los demás derrotaremos la estrategia privatizadora del gobierno de Juan Manuel Santos. De este Congreso salimos con la plena convicción y el firme compromiso de volcar todos nuestros acumulados en función de profundizar los niveles de unidad y organización del estudiantado hoy existentes, que nos permitan avanzar con mayor certeza hacia la materialización de la Organización Estudiantil Unitaria como máxima expresión organizativa del movimiento estudiantil colombiano. Invitamos al estudiantado en general, a sus diferentes expresiones organizativas y a la MANE a impulsar la construcción de organizaciones gremiales de base en todos los ámbitos de la vida universitaria, como garantía real y efectiva de avance hacia este reto histórico. Agradecemos a todas aquellas personas que participaron y aportaron al proceso del V Congreso Nacional de Estudiantes Universitarios, a las organizaciones hermanas de Colombia y el Continente que se sumaron al debate, a los sectores del movimiento universitario que aceptaron la invitación a discutir con nosotros los temas desarrollados. Reiteramos nuestro insoslayable compromiso de continuar construyendo una Universidad crítica, creadora y transformadora, y una nueva Educación para un país con Soberanía, Democracia y Paz. Popayán, Departamento del Cauca, 23 de septiembre de 2012 3. DECLARACIÓN POLÍTICA INTERNACIONAL

DECLARACIÓN POLITICA INTERNACIONAL

V CONGRESO NACIONAL DE ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS En la ciudad de Popayán departamento del Cauca, tierra de valientes luchadores por la paz y la defensa del territorio de la explotación


transnacional, sesionó el V Congreso de Nacional Estudiantes Universitarios, espacio que permitió visualizar las realidades que aquejan a los jóvenes del mundo y en especial a los estudiantes universitarios de América Latina y el Caribe. En los últimos años hemos presenciado la importante movilización estudiantil continental por la conquista definitiva del derecho a una educación gratuita, laica y de calidad. Las luchas de los estudiantes chilenos, colombianos, puertorriqueños y canadienses en contra de las políticas privatizadoras que implementan gobiernos antipopulares, ha recibido el respaldo de la movilización solidaria de todo los estudiantes y jóvenes de Nuestra América. El acceso al conocimiento ha sido restringido para la mayoría de la población, es por ello que este conocimiento elitista ha sido una de las formas de dominación política y cultural de nuestros pueblos. El estudiantado latinoamericano y caribeño ha luchado siempre por abrir las puertas de la universidad a las mayorías explotadas, discriminadas y oprimidas, por ello su ligazón permanente con las aspiraciones de libertad, democracia, justicia social y soberanía, de los movimientos sociales y populares. Este rol ha permitido que el movimiento estudiantil se caracterice por jugar un papel importante en los procesos políticos democráticos progresistas que hoy lideran los cambios en nuestro continente. Las realidades políticas y organizativas del movimiento estudiantil latinoamericano y caribeño son disímiles, sin embargo, la lucha estudiantil se extiende por toda la región. En Brasil los estudiantes luchan por aumentar su presupuesto al 10% del PIB; en Ecuador y Argentina se vive la refundación del movimiento estudiantil al calor de los procesos democráticos de cambios que viven esas naciones. En Centroamérica, región de cambios democráticos y populares, los estudiantes nicaragüenses están construyendo una nueva ley de educación superior que dé respuesta a los retos educativos actuales, en contra del neoliberalismo. Saludamos a los estudiantes hondureños baluartes en la lucha por la democracia y contra el golpe auspiciado por el imperialismo yanqui contra Manuel Zelaya. Reconocemos en la OCLAE, la organización que ha permitido articular la lucha en contra de la privatización y mercantilización de la educación superior, así como la movilización solidaria de los estudiantes del continente. Invitamos al estudiantado latino-americano a respaldar la realización del XVIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes en la hermana República del Ecuador, como un escenario para el fortalecimiento y articulación del movimiento estudiantil y juvenil en América y el mundo. Manifestamos nuestro respaldo al proceso de diálogo que se inicia en Colombia entre el gobierno y la insurgencia, como un mecanismo adecuado


para solucionar el conflicto social y armado que atraviesa esta nación, al mismo tiempo que llamamos a la comunidad internacional a rodear este proceso histórico y las diversas iniciativas que se construyan desde el pueblo colombiano para alcanzar la PAZ con justicia social. El neoliberalismo tiene sus días contados, la respuesta de los estudiantes y el movimiento social y popular abre la posibilidad de un nuevo rumbo en la construcción de una América Latina democrática, soberana y antiimperialista, son tiempos de unidad y nuestra región está retomando el sueño que hace 200 años, Bolívar tuvo: La Patria Grande. Viva el Movimiento Estudiantil Latino Americano! Viva la Unidad del Movimiento Estudiantil Colombiano! Viva el V Congreso Nacional de Estudiantes Universitarios! Popayán, Cauca, 23 de septiembre de 2012

4. ESBOZOS PARA LA CONSTRUCCIÓN DE UN PROGRAMA, UNA

PLATAFORMA Y UN PLIEGO NACIONAL DE LOS ESTUDIANTES.

Abordar el debate alrededor del carácter, contenido y significado de los pliegos, las plataformas y los programas, adquiere en las condiciones actuales una significativa importancia ya que es prioritario ubicar los alcances, objetivos y carácter de la lucha que se pretende desarrollar, pues de ello, se desprende toda una serie de derroteros que le dan forma y contenido a la unidad, la organización y la movilización estudiantil. Actualmente, el movimiento estudiantil colombiano carece de una diferenciación clara entre pliego, plataforma y programa; con el propósito de aportarle valiosos insumos a esta discusión se presentan a continuación las siguientes definiciones sobre estos tres instrumentos de la lucha, las cuales son fruto de la discusión desarrollada, la experiencia acumulada al calor de la pelea y las definiciones teóricas que al respecto se han hecho: El Pliego recoge las reivindicaciones concretas y específicas de un grupo o sector determinado, para ser resueltas de forma inmediata por una autoridad a la que se le exigen las mismas. Por lo general, para dicha autoridad son posibles de realizar sin la necesidad de transformar el régimen político, económico o social, ni generar grandes cambios en otros ámbitos relacionados con estas reivindicaciones, pues siempre están dentro de su resorte y capacidad de decisión. Pueden llegar a representar victorias y avances importantes para el movimiento estudiantil dentro de un objetivo más estratégico.


La Plataforma recoge las aspiraciones de un grupo o población por reformas estructurales en determinado aspecto de la sociedad, suelen ser luchas a mediano plazo e involucran cambios en el orden político y jurídico para que se hagan realidad; reformas universitarias, una nueva ley de educación o de salud, entre otras, pueden representar la materialización de una plataforma de lucha. Esta, a su vez, se constituye como un instrumento de lucha que permite unificar fuerzas para confrontar a determinada autoridad, institución o al régimen en un ámbito específico de su política, ello implica mayores niveles de conciencia, unidad y organización. Por último, el Programa recoge aspiraciones políticas e identidades ideológicas y se constituye en el instrumento de lucha que orienta el accionar del grupo, población u organización que lo asuma. Implica una disputa directa y abierta por el poder político y necesariamente involucra un cambio del régimen, de ahí que incluya luchas de más largo aliento. Por esta razón, son asumidos principalmente por partidos políticos, que al momento de su creación por el carácter y alcance de sus objetivos, requieren altos niveles de unidad política e ideológica.

Construir indistintamente un pliego, una plataforma o un programa, como si se tratara de lo mismo, refleja que no se tiene claro el tipo de unidad que se está buscando o construyendo. En algunos sectores del movimiento social y popular se le ha llamado “construcción programática” a la definición colectiva de cualquiera de estas tres; en la Mesa Amplia Nacional Estudiantil, MANE, sucede esto, pues se incluye la construcción de la ley alternativa dentro de esta “construcción programática”, sin discriminar sus diferencias y poner el acento en la claridad de los objetivos y alcances que tiene cada una por separado. En ese sentido, el actual Programa Mínimo de los estudiantes conjuga elementos de pliego y plataforma ya que contiene reivindicaciones puntuales de las y los estudiantes colombianos en términos económicos, académicos y de bienestar, junto con apuestas políticas de largo aliento, como la lucha por la gratuidad, un nuevo paradigma de enseñanza, entre otros. Aunque es urgente profundizar y corregir el Programa Mínimo, no se trata de realizar una reforma abrupta y total del mismo; por el contrario, se propone valorar las distintas experiencias que alrededor de este asunto ha tenido el movimiento estudiantil de tal manera que esto permita realizar una enriquecedora retroalimentación y poder así corregir los errores, prever nuevos escenarios y caminos de construcción y seguir consolidando este proceso, con el fin de fortalecer la unidad desde la MANE y acercar posiciones en aras de avanzar en la construcción de una clara plataforma de lucha de las y los estudiantes colombianos, así como un pliego nacional de exigencias, constituyéndose estos en los instrumentos de lucha política que permitan sumar fuerzas e impulsar procesos de movilización y organización estudiantil.


4.1 El Programa Mínimo en cuanto a su contenido El Programa Mínimo es una herramienta fundamental para la lucha de las y los estudiantes colombianos. No obstante, tiene claras deficiencias en los siguientes aspectos:

• Algunos de sus apartes contienen elementos poco claros para la lucha

• Unos puntos tienen más desarrollo que otros • Reivindicaciones importantes del estudiantado no se encuentran

contenidas en él • Resulta difícil articular su contenido con las reivindicaciones y luchas

que se libran en el ámbito local

En este orden de ideas, se plantea como necesidad central seguir construyendo las exigencias locales de las diferentes universidades del país buscando articularlas con la lucha nacional en la idea de recoger las reivindicaciones más sentidas de las y los estudiantes. Es preciso que en la idea de corregir, mejorar y profundizar los puntos del Programa Mínimo, clarificando diversos aspectos de su contenido, se lleve a cabo una reforma del mismo en un tiempo prudente.

Para esto es necesario aclarar la discusión sobre el tipo de unidad que se está buscando construir con la MANE. ¿Esta unidad es política, ideológica o coyuntural? Si lo que se busca es la unidad ideológica, se restringe profundamente el carácter amplio de la MANE y la lucha actual del estudiantado, ya que el objetivo de la misma es poder hacer confluir diversas expresiones que tengan visiones diferentes de la universidad y la sociedad. De igual forma hablar de una unidad política del estudiantado en temas distintos a la Educación Superior , restringe la amplitud en la medida que la MANE mientras fue amplia, logró recoger apuestas políticas y propuestas de país y de sociedad divergentes en torno a un único propósito de defender la Educación como un Derecho. Es por esto que, aunque hoy es importante encontrar acercamientos en apuestas políticas, no se debe forzar la unidad política en torno a todos los temas relacionados con el país que queremos, se trata entonces de hacer un especial énfasis en puntos de encuentro en torno a los problemas del sector de la educación, con criterios amplios, incluyentes y de construcción desde la diferencia.

4.2 Propuesta Teniendo en cuenta la actual crisis de la educación superior, se propone como exigencias para iniciar la nueva etapa de lucha por una nueva educación, para un país con soberanía, democracia y paz, los siguientes puntos para confrontar en el debate con el Gobierno Nacional:


1) Desmilitarización de las universidades públicas, 2) Garantías reales al derecho de asociación, movilización y protesta por parte del estudiantado. 3) Incrementar la base presupuestal de las universidades públicas del país en una suma apropiada y suficiente, para el periodo 2013 y 2014. 4) Suspensión de los cobros jurídicos generados por concepto de créditos ICETEX, condonando el 100% de las deudas. 5) Reconocimiento de la capacidad de interlocución del movimiento estudiantil y respeto por sus propuestas y posiciones, así sean antagónicas a las del gobierno central. Por último el V congreso Nacional de Estudiantes hace el llamado a convocar un Seminario Nacional sobre Pliego, Plataforma y Programa, en donde se profundice alrededor del fortalecimiento y actualización del Programa Mínimo de los estudiantes. 5. TÁCTICA Y ESTRATEGIA DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL PARA

AFRONTAR EL NUEVO MOMENTO. Portentosas movilizaciones caracterizaron la lucha estudiantil en el año 2011, las cuales tuvieron un gran respaldo a lo largo y ancho del territorio nacional así como también en el ámbito internacional, logrando asestarle una histórica derrota a las pretensiones de mercantilización y privatización del derecho a la educación al Gobierno Nacional. No obstante, la situación actual del movimiento colombiano está marcada por la disminución progresiva de la capacidad de convocatoria de la MANE, y con ello, el debilitamiento del impulso de la lucha a nivel nacional, y a su vez, por el resurgimiento de las luchas en el ámbito local acompañadas de paros, asambleas permanentes, huelgas de hambre, mítines, etc. Dicha disminución de la capacidad de convocatoria e impulso de la lucha nacional se debe a razones de diversa índole. Por un lado están los debates que aún persisten alrededor del nivel de amplitud que tiene la MANE para la toma de sus principales decisiones, de forma tal que esta logre recoger e involucrar al grueso del estudiantado en ellas; por otro lado, porque al querer construir la ley alternativa de educación, la MANE se propuso hacerlo con un abanico muy amplio de sectores de la sociedad, pero los mecanismos que adoptó para esto no permitieron lograr este propósito, llevando a que incluso un bloque muy grande del estudiantado se aislara del proceso; por último, porque esta no logró recoger y enarbolar las múltiples reivindicaciones y luchas que en el ámbito local se desarrollaron. Muchos otros elementos de igual manera influyeron de forma significativa en la desgaste de la capacidad de convocatoria a nivel nacional, las cuales hacen parte del balance que sobre el tema ha hecho hasta el momento la MANE.

Como se ha planteado en diversos escenarios de discusión en lo que ha transcurrido del año 2012, la meta central es recuperar la movilización en las


calles para lograr los propósitos del movimiento estudiantil en el mediano y largo plazo. En este sentido, la discusión se centra en proponer iniciativas que permitan reactivar la movilización, no necesariamente de la misma magnitud que tuvo durante el año 2011, pero que si le permitan al estudiantado mantenerse en la opinión pública, que sea escuchado y tenido en cuenta. Dichas propuestas se plantean a continuación. Uno de los problemas que se ha identificado es la incapacidad de usar métodos atractivos para llamar y convocar a las y los estudiantes a las actividades del movimiento estudiantil, empezando por el lenguaje utilizado en los documentos, pero también en las formas y actividades de movilización. Si el lenguaje con el que se pretende comunicar y difundir lo que produce políticamente el estudiantado no es el más apropiado, fácil de entender, común y compatible con diversas formas de pensar, el grueso del estudiantado no se va a sentir identificado con lo que publica la MANE o las organizaciones estudiantiles, mucho menos el pueblo colombiano que en este momento al parecer no está muy interesado en participar de lleno en estas discusiones. Una profunda transformación en el lenguaje es necesaria de inmediato de cara al trabajo de comunicaciones de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil. Cabe resaltar que una de las razones por la cual el estudiantado y la sociedad colombiana no ha presentado un apoyo claro y visible a las iniciativas de la MANE, es la invisibilización que se ha logrado efectuar por parte de los medios de comunicación nacionales de las propuestas e iniciativas de esta. Estos medios que en su momento volcaron toda la atención hacia nuestras actividades, hoy no presentan mayor interés en transmitir nuestras voces y reivindicaciones. Por esto, es inaplazable definir el papel que juegan los colectivos de comunicación alternativa, de fotografía, los colectivos artísticos y culturales que desarrollan trabajo contra hegemónico en el ámbito cultural, siendo este uno de los temas más complejos para el movimiento estudiantil. Es fundamental fortalecer estos procesos, ya que dinamizan la lucha de las ideas en el frente batalla contra los grandes medios, que en todo momento buscan tergiversar los propósitos del movimiento estudiantil estigmatizándolo y señalándolo ante la opinión pública por sus posiciones críticas, con un abierto criterio parcializado a favor del Gobierno Nacional. Estos colectivos, además, son la garantía de que la lucha estudiantil salga de las aulas a las calles, a los barrios, a las casas de los trabajadores y en general del pueblo que no ha sido escuchado ni tenido en cuenta hasta ahora. El momento que está viviendo el movimiento estudiantil es altamente complejo, haciendo que la discusión sobre el qué hacer de cara al próximo año en la confrontación política con el Gobierno Nacional sea un debate difícil de resolver. En las discusiones desarrolladas en el V Congreso se aprecian lecturas que ubican dos escenarios de discusión: por un lado, el referido a las exigencias a presentar al Gobierno Nacional, urgentes en este momento al ser posibles salidas momentáneas a la crisis actual de la


educación superior; por otro lado, el referido a la ley alternativa de educación superior. Frente al escenario de discusión con el gobierno nacional alrededor de una serie de exigencias concretas, no se presentaron muchas diferencias en el debate, ya que hay un acercamiento en la necesidad de plantear una agenda de discusión sobre estos temas, en la cual sea el estudiantado y el gobierno nacional los principales interlocutores, y donde a través de la movilización en las diversas universidades y la presión política que se pueda hacer a través de medios de comunicación (masivos y alternativos), entre otros mecanismos, permitan arrancarle al gobierno nacional lo consignado en dichas exigencias. Sobre esto solo surge un dilema relacionado con el carácter y despliegue que debe tener la movilización que va a presionar estas exigencias, ya que hay un consenso general de que el movimiento estudiantil va a asumir el desgaste en la confrontación política cuando se esté peleando la ley alternativa, en concreto a través de un paro nacional universitario. Una propuesta que sale de la discusión es que se proponga en las distintas universidades públicas y privadas del país movilizaciones a partir de exigencias locales que se busquen articular con las exigencias nacionales y la crisis universitaria, acompañadas de paros escalonados, que en lo posible sean muy dinámicos en las actividades de movilización y que logren generar mínimos de presión política sin desbordarse a un paro nacional. Sin embargo, queda claro que a pesar del consenso sobre la necesidad de concentrar fuerzas en la movilización alrededor de la ley alternativa, si en una universidad las particularidades locales obligan al estudiantado a realizar un paro indefinido, la MANE y las organizaciones estudiantiles deben apoyar estas luchas y asumir los compromisos a que haya lugar para desarrollarlas con éxito. Sobre el escenario de discusión de la ley alternativa sigue existiendo diversidad de visiones sobre como afrontarlo desde el movimiento universitario en general. Por un lado, se vislumbra un espacio de discusión con el gobierno nacional similar al planteado para discutir las exigencias, con casi los mismos criterios, en el cual el estudiantado tenga de antemano definido unos mínimos del articulado en los cuales este no cedería bajo ninguna circunstancia; por otro lado, se propone que antes de tener un escenario de este tipo, el movimiento estudiantil debe lanzarse a liderar un debate nacional sobre la nueva ley de educación superior, donde con una acertada metodología se logre contar con una participación amplia de las y los universitarios, el gobierno nacional y los diversos sectores interesados en el tema, de tal manera que producto de una discusión colectiva se puedan acercar posiciones frente a la ley alternativa, escenario este que a su vez puede derivar en algún momento en un espacio de discusión directa con el gobierno nacional como el planteado para las exigencias. Cabe resaltar que frente a esto se abrió una discusión en torno


a cómo se discuten cuales serían los mínimos, si se definen dos o más aspectos centrales de la ley alternativa como tales, los cuales se pelearían para que quedaran exactamente como está en nuestra propuesta, o si se debe ubicar un debate sobre los mínimos de forma transversal en todos los puntos de la ley alternativa de forma tal que esta no pierda su integralidad. Sobre este tema quedan interrogantes pendientes sobre si debe haber o no algún tipo de articulación entre los dos escenarios, cuál sería la posición del movimiento estudiantil frente a la participación del Congreso en el debate de la ley, qué sectores de la sociedad civil estaría dispuesto el estudiantado a aceptar en los diálogos, etcétera. 6. PERSPECTIVAS UNITARIAS Y FORMAS DE ORGANIZACIÓN DEL

MOVIMIENTO ESTUDIANTIL UNIVERSITARIO El actual momento político por el que atraviesa el país, hace urgente la necesidad de dar pasos significativos hacia la construcción de la Organización Estudiantil Unitaria (OEU), que posibilite la consolidación organizativa del movimiento estudiantil colombiano y que potencie su accionar en función de una educación para un país con soberanía, democracia y paz.

Es claro que la OEU, no puede ser el resultado de un acuerdo “por las alturas”, ni una sumatoria de estructuras de las organizaciones nacionales actualmente existentes, sino por el contrario, debe ser la síntesis de un gran proceso que permita recoger al grueso del estudiantado de base de las universidades a partir de la construcción, reconstrucción y fortalecimiento de organizaciones gremiales por universidad . Esto pasa por ganar mayores niveles de identidad del estudiantado con los procesos organizativos de base, lo cual sólo es posible con la legitimidad que se conquiste al calor de las luchas por las reivindicaciones más sentidas del estudiantado a través diferentes métodos como pliegos de exigencias, movilizaciones, asambleas, etc. Las formas organizativas para alcanzar estos objetivos pueden ser variadas, pasan desde asociaciones por universidad, consejos estudiantiles por carrera y generales, colectivos de trabajo, centros de estudiantes, entre muchas otras formas, siempre y cuando se garanticen procesos amplios y plurales donde todos los estudiantes se reconozcan y se organicen. Para avanzar hacia la OEU, es prioritario ampliar la participación de las expresiones organizativas locales en los escenarios de discusión y decisión de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil MANE. Es necesario que las decisiones más importantes y trascendentales del movimiento estudiantil se tomen en las asambleas estudiantiles , las cuales deberán recoger en su seno las diferentes visiones y propuestas del estudiantado, superando la dispersión del movimiento y logrando que las y los estudiantes de base y los no organizados se identifiquen con el desarrollo y construcción de una organización unitaria de estudiantes desde su realidad concreta.


Recuperar las confianzas entre las organizaciones estudiantiles que existen, es una tarea que se debe empezar a realizar, en aras de fortalecer la unidad que se ha venido construyendo durante el último periodo. Es necesario ubicar los debates y contradicciones al interior del movimiento estudiantil para desarrollarlos en un ambiente fraterno y democrático, buscar puntos de coincidencias para trabajar a partir de ellos y desarrollar las discusiones desde los escenarios locales, desde la realidad de cada universidad, vinculando al grueso del estudiantado en la solución de las diferencias y en el avance de los consensos. El elemento central que debe caracterizar a la OEU es la democracia amplia y profunda, que garantice el desarrollo pleno del carácter gremial de la misma, colocando a las asambleas estudiantiles como el espacio natural y legítimo para la toma de decisiones; entendiendo que la diversidad política e ideológica son componentes propios del escenario y por tanto, el respeto a la diferencia es la expresión de su carácter. Con la recuperación de la transparencia de las asambleas a través de acuerdos metodológicos claros, se irá allanando el camino de la necesaria organización unitaria del estudiantado, que recoja la diversidad y logre acuerdos precisos para el avance de las propuestas. En el marco de la construcción de la OEU, es imperioso descentralizar su conducción, de tal manera que las regiones puedan tener un mayor protagonismo en las dinámicas de la misma e igualmente, ser parte integral de los procesos de discusión y decisión que se den a su interior, entendiendo que es sobre la base local que se construyen las definiciones nacionales. Por último, desde esta comisión se hace un llamado al conjunto del movimiento universitario colombiano, a las y los estudiantes no organizados, a las organizaciones y al movimiento estudiantil en general, para empezar a allanar los caminos que nos permitan construir la organización unitaria de los estudiantes colombianos y el fortalecimiento de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil como impulsora de aquella, reconociendo la diferencia, desarrollando los debates y construyendo desde la realidad concreta un proceso más avanzado de unidad estudiantil. 7. MOVIMIENTO UNIVERSITARIO Y MOVIMIENTO SOCIAL Y POPULAR

En el marco de la profunda crisis que atraviesa la sociedad colombiana actualmente, resulta una necesidad imperativa avanzar en el fortalecimiento de la relación entre el movimiento estudiantil y movimiento social y popular; el V Congreso Nacional de Estudiantes Universitarios, propone a la comunidad educativa los siguientes elementos de reflexión.


La crisis de DDHH que hoy viven diferentes universidades del país ubica la necesidad de agilizar la realización de denuncias y acompañamiento por parte de los colectivos, comisiones y secretarias de DDHH que existen en el movimiento estudiantil, así como la colaboración y articulación con otras organizaciones como el MOVICE y el CPDH. Sin embargo, es preciso avanzar en la caracterización de cada región para analizar el alcance de la relación con el movimiento social y popular, teniendo en cuenta que hay zonas donde por miedo y demás dificultades no se encuentran otras organizaciones, en especial en el caso de la defensa de los DDHH. Por otra parte, el V Congreso enfatiza en el problema de la tenencia de la tierra, haciendo un llamado al estudiantado a vincularse en las luchas por la reforma agraria y urbana, reconociendo que la primera ha sido causa fundamental del desangramiento del país; por tal motivo, esta también debe ser una bandera que el estudiantado colombiano ayude a impulsar. Es momento entonces, para que la unidad con el movimiento social y popular pase de lo retórico a la unidad de acción, en donde el respeto y la reciprocidad sean criterios fundamentales para el relacionamiento. La universidad debe ser formadora de sujetos críticos para la construcción de la democracia y la justicia social, capaces de recoger la pluralidad de saberes y reconocer los factores y causas que determinan las realidades de la sociedad actual. Es necesario encaminar todos nuestros esfuerzos en vincularnos a las luchas e impulsar políticas en el movimiento estudiantil frente a la defensa y reconocimiento de la diversidad, la mujer, los DDHH y las luchas por el medio ambiente. En la importante coyuntura actual, donde se desarrollan diálogos de paz entre el gobierno nacional y las FARC-EP, el V Congreso Nacional de Estudiantes Universitarios hace el llamado a que este proceso no sea a puerta cerrada, reclama la participación de los diferentes sectores de la sociedad, que desde sus bases serán quienes aporten a la construcción de la paz con justicia social que tanto necesita el país. En este sentido, se convoca a participar ampliamente en la jornada de movilización nacional del 8 de octubre en apoyo a los diálogos de paz. En relación a lo anterior, la ACEU pone toda su disposición e insta a todo el estudiantado para construir y hacer parte del proceso de las Constituyentes de jóvenes por la Paz , que deberán ser de carácter amplio, horizontal, de definiciones colectivas y con una construcción desde la base a partir de comités de impulso locales. Es de vital importancia empezar a construir el V foro de los universitarios frente al conflicto social y armado para el próximo año, el cual debe prepararse desde las bases, creando una agenda investigativa como aporte al proceso de paz, haciendo énfasis en los derechos humanos y el delito


político. Se exhorta a la MANE y a todo el estudiantado para que participen en este proceso.

Además no podemos olvidar las reivindicaciones propias del estudiantado, por esto se propone la creación de la campaña “Por la paz, la vida y la dignidad”, en la que se pretende recoger diferentes consignas estudiantiles como: “Por el desmonte del ESMAD”, “En contra de la brutalidad policial”, etc., esto como herramienta de impulso de nuestras propuestas de paz. ¡POR UNA UNIVERSIDAD CRÍTICA, CREADORA Y TRANSFORMADORA! V CONGRESO NACIONAL DE ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS ACEU

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